Taller de Danza, Tesis Psicologia

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UNIVERSIDAD ACADEMIA HUMANISMO CRISTIANO

Carrera de Psicologa

CONTACTO EN MUJERES DROGODEPENDIENTES,


INTEGRANTES DE UN TALLER DE DANZA

Profesor gua: Jos Mauricio Contreras


Profesor metodlogo: lvaro Gainza
Profesora informante: Pamela Reyes
Alumna: Adela Gajardo

Tesis para optar al grado de Licenciado en Psicologa


Santiago, diciembre 2008

RESUMEN

La investigacin presentada indaga el Contacto de las mujeres


drogodependientes partcipes en

un taller de danza

de

la comunidad

teraputica Carpe Diem.

Parte de la problemtica de la mujer drogodependiente indica sensacin


o vivencia de relaciones interpersonales insatisfactorias.

La observacin fue realizada segn la Terapia gestltica, para entender


cmo la mujer drogodependiente manifiesta el Contacto (propiedad psicolgica
especfica observable), describiendo sus lmites y funciones, que determinan
la calidad de la relacin con uno mismo y con el entorno. Para estos fines, se
observ dentro del taller de danza.

Se recurri a la metodologa Cualitativa para conocer puntos de vista


de los actores y sus descripciones de la realidad sin estandarizarlos. Rescatando
as la dimensin subjetiva de la vinculacin humana en el contexto del taller.
Finalmente se obtuvo que la mayora de las mujeres drogodependientes se
contactaron de manera diferenciada con su entorno. Sus lmites presentaron una
regulacin alternada entre conectar y separar, entre estar en contacto y alejar la
atencin del ambiente. Registrando la experiencia a modo de sensaciones y

pensamientos, situacin que posibilit el contacto en pos de una relacin


satisfactoria con el entorno.

Fueron consideradas

distintas funciones de Contacto, primando el

moverse, escuchar y el tocar.

En la tesis se plantea como efecto de las observaciones e instrumentos


aplicados- la necesidad de integrar actividades o terapias que utilicen la danza
como dispositivo teraputico funcional en cuanto laboratorio de Contacto de
mujeres drogodependientes que residan en la comunidad teraputica.

AGRADECIMIENTOS

A mi Universidad por la formacin recibida, a Carpe Diem por la oportunidad


de probar lo aprendido.
A mis padres, mis hermanos y mi novio, gracias infinitas, ellos saben por qu.

Adela.

INDICE

I. ANTECEDENTES Y PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

1.1 Formulacin del Problema y Pregunta de Investigacin

1.2 Aportes y Relevancia a la Investigacin

12

II. OBJETIVOS GENERALES Y ESPECIFICOS

15

2.1 Objetivo General

15

2.2 Objetivos Especficos

15

III. MARCO TEORICO

16

3.1 Terapia Gestltica

16

3.1.1 Contacto

23

3.1.2 Funciones de contacto

27

3.1.3 Darse Cuenta

36

3.2 Drogodependencia

38

3.2.1 Diferencias entre hombres y mujeres

43

3.2.2 Mujer y drogas

45

3.2.3 Perfil de las mujeres chilenas, con problemas de drogas

48

3.2.4 Enfoque Relacional

51

3.2.5 Tratamientos teraputicos para personas drogodependientes

52

3.2.6 Programa de tratamiento para mujeres de la Comunidad


Teraputica Carpe Diem
3.2.7 Definicin Gestltica de Comunidad Teraputica
3.3 La Danza
3.3.1 La expresin autentica y el cuerpo

IV. MARCO METODOLOGICO

64
68
69
76

79

4.1 Justificacin Enfoque Metodolgico

79

4.2 Tipo de Investigacin

80

4.3 Diseo

81

4.4 Delimitacin del Campo de estudio

83

4.4.1 Universo

83

4.4.2 Muestra

83

4.5 Tcnicas e instrumentos de recoleccin de la informacin

87

4.5.1 Cuestionario

88

4.5.2 Grupo Focal

91

4.6 Plan de Anlisis de la Informacin

93

V.

ANALISIS Y RESUTADOS

VI.

CONCLUSIONES Y DISCUSION

128

VII.

BIBLIOGRAFIA

159

VIII. ANEXOS

99

163

I.

ANTECEDENTES Y PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Histricamente, la condicin socioeconmica y cultural en perspectiva


de gnero, ha evidenciado prcticas estereotipadas de inequidad. El progreso
tecnolgico y modificaciones sociales incorporaron a la mujer al trabajo
remunerado sin eximirla de consuetudinarias responsabilidades domsticas.
Por tal pluralidad, eventualmente ha descuidado su salud integral. Stewart
(2005)
Una de las vulnerabilidades de tipo psicosocial que presenta la mujer
es la drogadiccin. Incluye varios factores de incidencia: genticos, personales,
familiares o sociales que predisponen al consumo.
Correa (2005) agrega que se debe considerar el impacto publicitario con
mensajes que estimulan el consumo de alcohol y tabaco.

Otras causas de la drogodependencia se vinculan con la disfuncionalidad de


sus relaciones interpersonales.
Segn el Consejo Nacional para el control de Estupefacientes
[CONACE], (2002) [] patologas familiares, abandonos, ruptura de
lazos, alcoholismo y/o drogadiccin, violencia y abuso sexual son
situaciones frecuentes vividas por las mujeres consumidoras de
drogas.. (p. 10)
Segn Garca (1996), La necesidad de conexin y el miedo a la
desconexin (en especial respecto a la pareja) es factor de riesgo para el

uso de sustancias. La tendencia a sostener y cuidar los vnculos (extensin


del rol materno) persiste en las mujeres adictas.

Paliativamente

han

surgido

comunidades

teraputicas

rehabilitadoras del consumo de drogas para influir actitudes,


percepciones y comportamientos resignificando stas reas.

Valle s.f. sostiene que

una Comunidad Teraputica debe:

fomentar la transformacin de un estilo de vida individual a otro


comunitario . (p.86)
All se repasan pautas de relacin y se implementan terapias,
espacios o instancias que traten o trabajen este tema.

Para las mujeres drogodependientes, internarse en una Comunidad


Teraputica orientada hacia la mujer, puede ser complicado, pues implica
pausa en su estilo de vida cotidiano. La comunidad considera los roles que la
mujer representa dentro de la sociedad y asume que posee distintas
caracteristicas psicolgicas que el hombre. Trabajan una sensibilidad femenina
afectada por su familia que la requiere.

La Comunidad Teraputica con enfoque de gnero femenino es una


importante herramienta a la hora de la recuperacin de aspectos personales
como el respeto, la autoestima y el posicionamiento de ser mujer. (Carpe Diem,
2003)
El internarse voluntariamente supone valenta y preocupacin por ellas
mismas y un reto pues la mirada social castigadora ante su adiccin genera
inseguridad.
Este elemento afecta su auto concepto, predisponindola a trastornos
mentales asociadas al consumo.

En el manual de 2003, Carpe Diem sostiene que hombres y mujeres


drogodependientes presentan situaciones de conflictividad familiar, abusos
sexuales, falta de habilidades sociales y de capacidad para afrontar situaciones
negativas y, en el caso de las mujeres, se magnifica debido a una mayor
marginalidad.
Al respecto, Carpe Diem (2003) refiere que las mujeres tienen mayor
precariedad econmica, menos oportunidades de trabajo y la sociedad les ofrece
menos comprensin.
La baja autoestima, inseguridad y escasa confianza bsica funcionan
como represores existenciales y sociales. La mujer drogodependiente se
inhabilita progresivamente en

toma de decisiones, sensibles a situaciones

riesgosas en que duda de su capacidad de hacerse cargo o responsable de si

misma, contribuyendo a la permanencia de la drogadiccin como un evasor de


la realidad. CONACE (2004).

Paulatinamente disipa su Darse cuenta del self y el ambiente, alterando


el contacto con su entorno. Ocurre una alteracin de su contacto con el entorno
y alejamiento de las relaciones sociales. Ya que, como menciona Perls (2005)
mientras menor sea nuestra confianza en nosotros mismos, pobre ser el
contacto con nosotros y con el mundo.

De esta menera se hace ms lejana la posibilidad de poder conectarse


con las propias necesidades y conseguir aquello que requiere. Conservar la
salud exige que la persona sepa lo que necesita y contacto con lo realmente
importante. La persona autorregulada organsmicamente elige por s misma que
parte de cada cosa interna o externa a ella asume o rechaza. (Yontef, 2005)

El Contacto es el

centro de inters en esta investigacin.

Conceptualizado segn la Terapia gestltica, se reconoce como una de las


influencias en los enfoques psicoteraputicos. Su abordaje teraputico y
filosofa de vida, privilegia la conciencia (darse cuenta), la propia
responsabilidad de los procesos en curso y la fe en la sabidura intrnseca del
organismo (la persona total que somos) para auto-regularse de forma adecuada
con un medio cambiante.

El contacto sano es un proceso permanente en el que la persona se


relaciona comprometida y totalmente consigo misma y con su ambiente,
pudiendo tocar y ser tocado, separarse e incluso rechazar, pero siempre
reconocer sus lmites. La toma de contacto sano promueve una sana relacin
con los otros. La calidad del contacto influye la relacin con uno mismo y el
entorno. El contacto (con el s mismo y el ambiente) es el proceso bsico de la
relacin. (Perls et al, 1951).

Existen estudios previos acerca del contacto de la persona adicta. La


Asociacin Gestltica de Buenos Aires (AGBA) concluye que la persona
drogodependiente presenta alteraciones en la percepcin figura-fondo, en el
ciclo de contacto, y en el darse cuenta. Existe un fallo en el darse cuenta de s
mismo que impide reconocer sus propias limitaciones dificultando el registro
de sus verdaderas necesidades y satisfaccin. Sin tiempo para el darse cuenta,
se altera el registro de la imagen (figura) que orienta la accin en el precontacto (por hallarse fijado a la figura del objeto de la adiccin). Tampoco
hay permanencia en el post contacto para

asimilar la experiencia y

experimentar satisfaccin. Por tanto rpidamente buscar llenar su vaco con


una nueva vivencia, extendiendo el ciclo del consumo del objeto de su adiccin.
Hay incapacidad para pasar de vivencia a experiencia, pues demanda
un contacto pleno y un darse cuenta en el post contacto que no pueden hacer.
AGBA (2003).

En cuanto a mtodos que repercuten positivamente en los tratamientos


de drogodependencia, se encuentra la danza como recurso coadyuvante en el
proceso de rehabilitacin de personas drogodependientes, situacin que ha sido
estudiado entre algunos expertos de la danza.
La danza influye positivamente los tratamientos de drogodependencia.
Maria E. Glasnovic (1995) su capacidad

para eliminar frustraciones y

tensiones de la vida diaria.


Alivia la sensacin de malestar provocada por la represin del rebullir
general del cuerpo que se produce cuando se ponen en accin articulaciones
aisladas. Elimina frustraciones y tensiones de la vida diaria pues desarrolla al
individuo en su totalidad.
La danza es vista como procedimiento que puede aliviar, en parte, el
abatimiento de las personas drogodependientes, en especial de

mujeres

consumidoras de BDZ (benzodiazepinas). Glasinovic (1995).

Carmen Beuchat (1990), coregrafa y maestra en danza,


refiere: La danza es una ciencia, acumula una conciencia de tiempo
y espacio, libera y conduce, est intrnsecamente ligada a la
psicologa y al desarrollo del ser humano. El xtasis de la Danza
puede reemplazar al de la droga debido a la seguridad fsica que
brinda. (p.22).

La psicloga Ximena Mora, con estudios en Cuba, comenz a trabajar


en psicologa social y aplic el ballet como terapia en nios de 5 a 14 aos con
problemas psicolgicos (Grupo de Terapia Psicoballet).

El trabajo corporal

en personas adictas es muy importante porque esta persona no tiene conciencia


corporal (o muy poca), opta por la evasin y el escape. (s.n.)

Por problemas de autovaloracin reprimida, la mayora de las personas


drogodependientes se ven disminuidas, no se quieren, les cuesta reconocer su
cuerpo y apropiarse de l. La danza ayuda al conocimiento de s mismo, la
mente no puede separarse del cuerpo, si uno no trabaja y no controla su cuerpo,
es difcil controlar su mente. Al trabajar corporalmente botan sus cargas, sobre
todo en un grupo con los mismos problemas, porque existe comunicacin.

En las personas drogodependientes, la danza

ayuda a retomar

posibilidades olvidadas, en el contacto con otra persona, en el hecho ldico de


jugar con cosas, con objetos ajenos al cuerpo, hacen sentir, o por lo menos
prestar atencin al cuerpo, dejando as de lado la droga. (Glasinovic, 1995)

1.1

Formulacin del Problema y Pregunta de Investigacin.

En las comunidades teraputicas, enfocan la rehabilitacin segn el


concepto de recuperacin de cada institucin.
Alguna comunidades trabajan un modelo racional, otros, de tipo
cognitivo-conductual con estrategias orientadas a la modificacin de la
conducta.
La comunidad teraputica representa una oportunidad para la
observacin conductual y aplicacin de tcnicas basadas en el reforzamiento
diferencial de respuestas. La estrategia cognitivo-conductual pretende ayudar al
paciente a identificar y modificar cadenas de comportamientos y pensamientos
que conducen directa o indirectamente al uso de drogas.

Este enfoque ha mostrado resultados positivos dentro y fuera de la


comunidad teraputica. Un ejemplo es la abstinencia prolongada. No obstante,
no se detecta presencia relevante de un trabajo sistemtico que considere lo
emotivo y afectivo.

En la comunidad teraputica para mujeres drogodependientes, existen


servicios coordinados para satisfacer necesidades especficas: Consejo
vocacional, terapia ocupacional, actividades recreativas, terapia individual, de
grupo y servicios educativos destinados a las familias. Son llevadas a cabo por

tcnicos en rehabilitacin de adicciones, psiclogos, teraputas, asistentes


sociales y/o psiquiatras.

La interaccin entre actividades educativas, teraputicas y sociales


caracteriza a la comunidad como agente teraputico. Terapeutas y profesionales
en la Comunidad Carpe Diem, refieren necesidad de mayor utilizacin de
herramientas y tcnicas artsticas- corporales para optimizar el tratamiento.

Por tanto se desprende que la Comunidad Teraputica no emplea


suficiententemente el aporte de la danza.
La danza es una actividad artstica- ldica (homo ludens) atiende una
funcin humana tan necesaria

como el hacer (homofaber) y el saber

(homo sapiens), fundamentales en nuestra sociedad.

Por otro lado la literatura revela un rasgo en la mujer drogodependiente


que alude al estado y manejo de sus relaciones vinculares.
Debido a una biografa marcada por familias disfuncionales, donde es
recurrente la ruptura de lazos, prdidas, conflictos matrimoniales entre los
padres, altos niveles de violencia y abuso sexual, es que la mujer
drogodependiente presenta un mayor grado de miedo a la desconexin
interpersonal. Comnmente existe una mayor necesidad de cercana y
proteccin emocional en sus relaciones interpersonales significativas. Se

angustian por el miedo a la desconexin (en especial respecto a la pareja), y


sobreprotegen sus vnculos.
Adems, se suma la falta de autoestima y respeto por s misma, lo que da cuenta
de una relacin poco sana consigo misma. (CONACE, 2005).

Por lo tanto, se entiende que existe una problemtica comn en mujeres


drogodependientes, que alude generalmente a sensaciones de insatisfaccin en
relaciones interpersonales o vinculares que pueda sostener.

En este contexto parece relevante conocer la forma de Contacto


(propiedad psicolgica de Terapia Gestltica) de cada mujer drogodependiente
en

la Comunidad Teraputica para abordar sus insatisfactorias relaciones

interpersonales, que segn los antecedentes, se presenta en la mayora de las


mujeres drogodependientes.

Sin embargo, se constata falta de investigaciones formales que vinculen


mujer drogodependiente y contacto. S se detectan, investigaciones acerca de la
influencia de la Terapia Gestltica en la drogodependencia.

Tampoco se encuentran investigaciones sobre Contacto

de mujeres

drogodependientes de un taller de danza en una comunidad teraputica.

10

En la Terapia Gestaltica es importante enfocarse en el contacto de un


organismo, en este caso de una persona drogodependiente. De esta manera
conocer la forma de contacto y luego entender la gramatica de sus relaciones
interpersonales que establece. Porque el contacto, es el proceso bsico que
antecede a la relacion del self con s mismo y con su entorno.

Para conocer el Contacto de la mujer drogodependiente, es elemental


enfocarse en las funciones y lmites del contacto que ellas presentan en el taller
de danza.
La mujer drogodependiente como organismo, se contacta de manera
especfica con sus emociones y entorno. En base a su individualidad, sus lmites
permiten conectar y alejar su atencin del ambiente. Segn el contexto y
presencia de reconocimiento de necesidades puede emplear diversas funciones
de contacto, registrando la experiencia.

Por lo tanto considerando la relevancia de la funcin del Contacto en el


entendimiento de la relacin con s mismo y el entorno, se constata falta de
investigaciones formales que vinculen mujer drogodependiente y contacto.

Se describir en esta investigacin, el contacto de la mujer


drogodependiente en un taller de danza, til teraputicamente como se ha
descrito. En esta investigacin la danza funciona como medio de observacin o
laboratorio de contacto.

11

Al respecto se plantea la siguiente pregunta de investigacin:

Cmo se presenta el contacto de la mujer drogodependiente, que asiste


a un taller de danza en la Comunidad Teraputica?

1.2

Aportes y Relevancia de la Investigacin

El eventual aporte de la presente investigacin tiene relacin,


principalmente con la apertura de nuevos conocimientos hacia el campo de la
Psicologa que expresen la relacin con el Contacto que manifiesta la mujer
drogodependiente dentro de un taller de danza. Puesto que no se encuentran
conocimientos o antecedentes tericos que vinculen mujer drogodependiente,
contacto y danza.

Planteado el concepto de Contacto como proceso bsico de la relacin,


concierne aportar, a la Comunidad Teraputica Carpe Diem, evidencias
cientficas referidas a cmo ste se manifiesta en la mujer drogodependiente
para que sus profesionales dispongan de nuevos elementos para determinar
tcnicas y enfoques en el tratamiento de la relacin de la mujer consigo misma
y con su entorno.

12

El conocimiento del contacto de las mujeres drogodependientes consigo


mismas y su entorno puede beneficiar el trabajo psicoteraputico en el modo de
relacionar y vincularse en el mundo.

Puesto que es conocido que una de las preocupaciones centrales de la


Terapia gestltica, es comprender de manera profunda las formas que tiene la
persona para relacionarse con su medio ambiente, sin juzgarla. As como
reconocer la diferencia entre lo que es propio y lo que es ajeno, es decir, lo que
sucede hacia el interior del organismo, y lo que sucede hacia el exterior. Estas
relaciones suceden en la frontera entre el organismo y su ambiente, y
determinan lo que en gestalt se conoce como contacto.

Por otro lado, considerar los hallazgos en el taller de danza y registrar su


forma especfica de tomar contacto con la realidad, como viables herramientas
para el desarrollo de aspectos psicomotrices que en ocasiones no son lo
suficientemente desplegados

restando potencialidad humana. Contribuir a

partir de la experiencia de danza, aportes a la integridad humana, como


aceptacin de la globalidad, destrezas motoras y sociales, auto imagen y auto
concepto. Es decir, a traves del contacto en el taller, facilitar la constitucin de
identidad, en la mujer drogodependiente basado en el ejercicio de sus
potencialidades.

13

En sntesis, adems este trabajo pretende singularizar

-a partir de

observaciones sistemticamente realizadas- el grado pertinencia de un taller de


danza al programa de tratamiento y rehabilitacin de la Comunidad Teraputica
Carpe Diem.

14

II.

OBJETIVOS GENERALES Y ESPECIFICOS

2.1

Objetivo general:

Conocer contacto de las mujeres drogodependientes que asisten a un


taller de danza en la Comunidad Teraputica

2.2

Objetivos Especficos:

Describir

funciones

de

Contacto

que

establecen

mujeres

drogodependientes que asisten a un taller de danza en la Comunidad


Teraputica.

Describir Lmites del contacto en mujeres drogodependientes que


asisten a un taller de danza en la Comunidad Teraputica.

Identificar observaciones del equipo tcnico de la comunidad, sobre el


taller de danza en relacin de las reas de intervencin, que plantea el
programa de tratamiento de la comunidad teraputica Carpe Diem.

15

III.

MARCO TEORICO

3.1

Terapia Gestltica

La terapia gestalt se enmarca bajo la psicologa humanista, ya que


comparte la visin esperanzada del ser humano que tiende a su autorrealizacin,
no como individuo patologizado sino con recursos saludables para su desarrollo
ptimo en el aqu y ahora: un tiempo presente y puntual, despojado de absolutos
e inmerso en una situacin de relacin con los otros y con el mundo. Como
seala Cobarrubias (2002, 11), Definicin de Gestalt.

La psicologa de la gestalt fue un enfoque experimental fenomenolgico,


basado en un marco conceptual holstico llamado teora de campo (con un
cercano paralelo a la teora fsica de campo). Mientras la terapia gestltica (TG)
es consecuencia del psicoanlisis (Fred, Reich, Horney, Rank, etc.) y est
fuertemente influenciada por el existencialismo (Buber, Tillich, Sartre), la
estructura holstica y fenomenolgica en que se sustenta es un derivado clnico
de la psicologa de la gestalt. (Yontef, 2005)

Yontef (2005) sostiene que:


La terapia Gestltica es una terapia fenomenolgico-existencial
fundada por Frederick (Fritz) y Laura Perls en la dcada de los 40. Las
explicaciones e interpretaciones se consideran menos confiables que

16

aquello que se percibe y siente directamente. La terapia gestltica se


centra mas en el proceso (lo que esta ocurriendo) que en el contenido (lo
que se esta discutiendo). (p. 120)

El existencialismo se basa en el mtodo fenomenolgico. Los


fenomenlogos existenciales se centran en la existencia de las personas,
las relaciones entre ellas, sus alegras, sufrimientos, etc., vivenciados
directamente. La terapia gestltica proporciona un camino para llegar a
ser autentico y significativamente responsable por uno mismo. (Yontef,
2005, p. 121)

Cuando se habla de Gestalt, se alude a una forma, una totalidad o unidad


significativa, distinta a la suma de cada una de sus partes. Una configuracin
especifica que se distingue de otros organismos. Una sana gestalt es clara y la
relacin figura/fondo responde a y es energizada por el cambiante patrn de las
necesidades inmediatas de la persona. (Yontef, 2005)

El organismo focaliza su atencin en un evento a resolver o necesidad


predominante de la persona. La necesidad se convierte en figura que emerge
espontneamente sobre el fondo que energitiza el cierre de la gestalt. Cuando se
satisface una necesidad, se completa la gestalt que organiz y ya no exige
energa organismica. (Perls, 2005)

17

Autorregulacin organismica

Un organismo es cualquier cosa viviente que posee rganos y una organizacin,


y que ademas tiene mecanismos de autorregulacin dentro de s misma. Un
organismo no es independiente de su ambiente. Todo organismo requiere de un
ambiente para intercambiar sustancias escenciales, como el aire, alimentos, etc,
y por el lado social; amistad, amor o rabia. Cada organismo presenta un control
interno propia de su particular naturaleza. (Perls, 2005)

Como seala Yontef (2005); La autorregulacin organismica


requiere que lo habitual se perciba plenamente como algo necesario.
Cuando el darse cuenta no emerge como necesario y/o no organiza la
actividad motora necesaria la psicoterapia es un mtodo para aumentar
el darse cuenta. (p.134)

Para sobrevivir, la persona debe intercambiar energa con el


ambiente (por ejemplo, respirar, comer, tocar) y mantenerse sin
embargo como una entidad algo separada de l. La persona
autorregulada organsmicamente elige por s misma que parte de cada
cosa asume o rechaza. Toma lo que es nutritivo para ella y rechaza lo
que es toxico, usando su darse cuenta para discriminar y su agresin:
para destruir el estimulo extrao, ajeno, para integrar las partes
nutritivas al si mismo (asimilacin) y rechazar lo inservible. Admitir

18

cualquier partcula del todo, sin este proceso de asimilacin, es


introyeccion. (Yontef, 2005, p. 171)

Segun Polster (1973), una autorregulacin eficaz incluye un


contacto por medio del cual nos demos cuenta de innovaciones
ambientales potencialmente nutritivas o toxicas. Lo nutritivo se asimila
y todo lo dems se rechaza. Este tipo de contacto diferenciado conduce
inevitablemente al crecimiento. (p. 101).

En la autorregulacin organsmica es un fenmeno holstico. Ocurre tras una


integracin natural de mente, cuerpo, pensamiento y sentimiento, espontaneidad
y deliberacin. (Yontef, 2005)

Teora de la Personalidad

En TG la personalidad total se llama Yo. El yo siempre est en


contacto con diversas situaciones, aunque no est en el presente, sin
embargo, para que el yo tenga vida completa, tiene que estar en contacto
con la realidad. El yo es nosotros en proceso, un todo unificado que
abarca lo fsico, emocional y cognoscitivo. Donde comienza a haber
partes definidas dentro del campo, surgen las fronteras o lmites de
contacto, que es una forma del yo, en donde el yo y los otros se
encuentran, por el contacto con el ambiente, y a la vez hace contacto

19

con l. El lmite de contacto se forma cuando entra en accin el yo en el


proceso de formacin de una gestalt. (Latner, 2004, p. 60).

La nocin de Lmite se introduce acerca de la relacin del organismo con su


ambiente. Un organismo se define por sus lmites en relacin a su ambiente. El
lmite del yo no es algo fijo.
Si el lmite se hace fijo y rigido, se convierte en [] una
armadura como la de una tortuga. La tortuga tiene lmites precisos y
ntidos. Nuestra piel es algo menos fija, respira, toca, etc. El fenmeno
del lmite del ego es algo muy particular. Llamamos lmite del ego al
lugar en que se diferencian [] el s mismo de lo otro. (Perls, 2005,
p. 17)

Interdependencia Ecolgica: El campo ambiente/organismo

Segn Yontef (2005); Una persona existe al diferenciarse de otro y al


contactarse con otro. Estas son las dos funciones de un lmite. Para estar bien
contactado con el mundo propio, es necesario arriesgarse a descubrir y llegar a
los propios lmites. (p.131).
Por lo tanto las funciones del lmite deben permitir la fluidez de una
relacin sana del individuo con el mundo, donde ste es capaz de diferenciarse
de los otros individuos, sin aislarse o impedir conexiones. Ms bien establece
una relacin debido a un contacto con su ambiente.

20

Precisamente el establecer contacto, desde la diferenciacin es lo que


conserva la identidad de cada persona, alejando, entre otras cosas las
posibilidades de dependencia afectiva (la llamada co-dependencia) o a
sustancias que es lo que sucede con los adictos.

Metabolismo Mental

Este concepto, utilizado en T.G., es una analoga del funcionamiento


psicolgico. Metafricamente el organismo metaboliza lo que le es nutritivo y
rechaza lo que no le aporta. Las personas viven masticando y testeando
alimentos, relaciones, situaciones, ideas, etc. Para descubrir si es nutritivo o
txico. Cuando descubre aspectos nutritivos lo absorve, por otro lado si es
txico, lo rechaza. Esta accin supone que las personas esten dispuestas a
confiar en su juicio y gusto. (Yontef, 2005). La discriminacin exige sentir
activamente los estmulos externos y procesar estos estmulos exteroceptivos
junto con la informacin interoceptiva. (Yontef, 2005, p. 131)

Por lo tanto en el proceso de asimilacin es bsica la presencia de juicio


de realidad como punto fundamental, requiriendo reconocimiento personal de
la informacin interna y externa.
En este caso, las personas drogodependientes, requieren presencia de
lucidez (no consumo de sustancias) y un contacto interno bsico con las propias
necesidades, para ser asertivos en cuanto lo que su organismo prefiere asimilar.

21

Regulacin del lmite

El lmite entre el s mismo y el ambiente debe permanecer


permeable para permitir intercambios, pero suficientemente firme para
mantener su autonoma. El ambiente contiene toxinas que se deben
filtrar. Incluso lo nutritivo debe ser discriminado segn las necesidades
dominantes. Los procesos metablicos estn regidos por las leyes de la
homeostasis. Idealmente, la necesidad ms urgente energiza al
organismo hasta que es satisfecha, o reemplaza por una necesidad ms
vital. Vivir es una progresin de necesidades, satisfechas o insatisfechas,
logrando equilibrio homeosttico y continuando al siguiente momento y
necesidad. (Yontef, 2005, p. 132)

Alteraciones del lmite de contacto

Segn Yontef (2005) Con un buen funcionamiento del lmite, las


personas alternan entre conectar y separar, entre estar en contacto con el
ambiente del momento y alejar la atencin del ambiente. El lmite del
contacto se pierde de manera opuesta polar en la confluencia y el
aislamiento. En la confluencia (fusin), la separacin y distincin entre
si mismo y otro se torna tan difusa que se pierde el limite. En el
aislamiento, el limite se hace tan impermeable que se pierde la

22

conexin, es decir, se pierde el darse cuenta de la importancia de los


dems para el si mismo. (p. 132)

La relevancia de establecer un contacto sano implica que la persona por


medio de un buen funcionamiento del lmite, pueda moverse entre conectar y
separar. La persona drogodependiente presenta una alteracin el el Darse cuenta
y sus lmites estn generalmente fijos, relacionandose de manera dependiente
por medio de sus afectos y confluyendo con los dems (apego constante hacia
los otros). Por el contrario, debido a su alteracin en el lmite, pueden tender al
aislamiento y contacto imaginario en sus relaciones. (AGBA, 2003). Cuando
el limite entre el si mismo y lo otro se hace difuso, impermeable o se pierde, se
produce una alteracin tanto del contacto como del darse cuenta. (Perls, 1973,
Polster, 1973).

3.1.1

Contacto
El contacto se establece con el self y con los otros. Con el self
sintiendo; con los otros tocando, mirando, hablando. El contacto
significa estar completamente implicado o ensimismado en la
experiencia presente que transcurre en el aqu y ahora; el contacto no se
limita solamente a una interrelacin de persona. Adems, el contacto se
extiende a los alimentos, al contacto con la msica, la naturaleza, en fin,

23

a todo lo que implica el rea sensorial y emocional. Si este contacto es


activo proporciona satisfaccin en la persona que lo establece.
(Castanedo, 1997, p. 103)
La experiencia sensorio-motriz que cada mujer drogodependiente
experimente, constituye uno de los objetivos especficos a describir en sta
investigacin. Ya que conocer el modo en que utilizan sus cinco sentidos, ms
el movimiento y la conversacin, dan cuenta de la intensidad de la conexin
que establecen con el mundo.

Segn Latner (1994), El contacto se refiere [....] a la naturaleza y


la calidad de la forma en que nos ponemos en relacin directa con
nosotros mismos, con nuestro ambiente y con los procesos que los
relacionan [....] Hacer un buen contacto es comprometerse plenamente
en ese estar en contacto de tal modo que nuestra compenetracin con
aquello con lo que estamos en contacto, sea completa y satisfactoria (p.
65)

El contacto (con el s mismo y el ambiente) es el proceso bsico


de la relacin. [....]. Contactar incluye por lo tanto cuatro aspectos: (1)
conexin, (2) separacin, (3) movimiento y (4) darse cuenta. El Darse
Cuenta se necesita para el reconocimiento/apreciacin de diferencias.
Para reconocer al otro se requiere Darse Cuenta tanto de si mismo como

24

del otro. En el caso de terapia Gestltica, es preciso describir el trmino


contacto como un proceso contacto/alejamiento. (Yontef, 2005, p.193)

La persona existe en un campo ambiente/individuo. El campo se


diferencia por los lmites. Estos lmites no son entidades, sino procesos.
Un lmite es un proceso de separar y conectar. [....].Al diferenciar el Yo
del no-Yo, el individuo absorbe lo nutritivo y elimina el exceso. El
proceso de contacto es el rgano de encuentro. (Perls et al., 1951)

Los lmites eficaces son permeables y permiten transacciones


entre el organismo y el ambiente. Un lmite cerrado es como un muro
por medio del cual el organismo se cierra al exterior (aislamiento) y
trata de ser autosuficiente, auto nutritivo. Un lmite demasiado abierto
amenaza la existencia autnoma del organismo va la perdida de la
identidad separada (confluencia/fusin). (Yontef, 2005, p. 193)

La persona que descubre como se encuentra holsticamente en una


situacin, moviliza sus lmites de manera alternada. Los lmites
eficaces son suficientemente flexibles para ir de un grado de
apertura/cierre a otro. La regulacin del limite entre los extremos
polares de fusin y aislamiento requiere del Darse Cuenta. (Yontef,
2005, p.193)

25

Por medio del movimiento, la persona muestra parte de si misma segn


convenga a sus necesidades y a las exigencias de la situacin. Los otros
aspectos permanecen en el trasfondo. Sin movimiento, algunos aspectos
del si mismo se convierten en un fondo fijo y no estn disponibles, es
decir quedan aislados. La conexin, por lo tanto, tambin queda fija.
Esto llega a ser ms un hbito que un proceso vivo. Sin movimiento no
hay darse cuenta, solo habito. (Yontef, 2005, p.194)

La persona crnica y habitualmente aislada se aleja de limite y no se


conecta con el ambiente, levantando un muro protector entre si misma y el
exterior. (Yontef, 2005, p.195).

La confluencia es la perdida de la propia identidad separada. Como


proceso temporal es la culminacin del proceso de conectar y la perdida del
proceso de alejamiento o aislamiento. (Yontef, 2005, p.195).

Se describi anteriormente el lmite, proceso intermedio entre el


organismo y su ambiente el cual permite el contacto. Ahora se proceder a
explicar las funciones por cuyo intermedio sensorio-motriz se entabla.

26

3.1.2

Funciones de contacto

Las relaciones del individuo con su entorno, deberan responder a sus


necesidades. Normalmente vivimos en la inercia de creer que nuestros
contactos son independientes a nosotros mismos, a lo que necesitamos. Y que
representan un mecanismo externo a nuestras necesidades, desplegndose de
manera casi mecnica.

La salud est en descubrir que el s mismo no es otra cosa que el


sistema de funciones de contacto (Kepner, 1992). Cuando las funciones de
contacto no estn disponibles a la conciencia, el organismo ya no puede
adaptarse con fluidez a su mundo. Aquellos aspectos del funcionamiento de uno
que estn siendo negados, no experimentados como partes del s mismo, al no
estar disponibles para el contacto con el entorno, vern corresponderse con los
rganos equivalentes enfermados. Separarnos en nuestra actividad de las
funciones naturales del ser corporal conlleva mala salud.
La importancia de las funciones de contacto, es que nos permite
manifestarnos con nuestro entorno, donde las necesidades pueden completarse.
Como seala Martin (2007, 8), Dialogo Teraputico con los rganos
afectados
Es por medio de todo nuestro cuerpo sensible que recibimos la
informacin que nuestra mente procesa e interpreta. Si le falta esta
fuente de conocimiento que son los sentidos, puede equivocarse. Es muy

27

comn usar solo la mente, pensando y pensando, sin ver ni escuchar lo


obvio que esta delante de nosotros. Como seala Fumagalli (2007,
6), El cuerpo del terapeuta en terapia

En relacin al tacto (funcin de contacto) Polster (1997) seala


que el idioma lo atestigua como prototipo del contacto: palpamos la
verdad de lo que nos dicen; algo conmovedor nos toca el alma;
convencemos a una persona de que nos preste dinero si le tocamos el
punto sensible. Para nosotros tacto y contacto casi han llegado a ser
sinnimos. (p. 127)

Intuitivamente estamos cerca de la verdad. Aunque las


experiencias de contacto se centralicen en cualquiera de los otros cuatro
sentidos, siempre implican de algn modo ser tocado. (Polster, 1997. p.
128)
La mayor contigidad del contacto tctil nos inclina a asignarle
prioridad, desvalorizando con ello el contacto que puede entablarse a
travs del espacio. Sin embargo, las ocasiones de tomar contacto con la
gente a travs del espacio por medio de la vista, el odo o la
conversacin son mas frecuentes que las oportunidades de tocar, aun en
las mejores relaciones interpersonales. (Polster, 1997. p. 128)

28

A los cinco modos bsicos antedichos se aaden otros dos: la


conversacin y el movimiento. Estos siete procesos constituyen las
funciones del contacto. A travs de su desempeo normal puede
entablarse el contacto; a travs de su corrupcin, se bloquea o se evita.
Importa recordar, no obstante, que si bien es posible describir siete
funciones de contacto diferentes, todas y cada una conducen a un
contacto idntico: la carga de exitamiento que existe dentro del sujeto
culmina en un sentido de compromiso total con cualquier inters que
prevalezca en ese momento (Polster, 1997.p. 129)

Segn Polster (1997) La selectividad para el contacto


determinada por la frontera del yo, gobernar el estilo de vida de un
individuo, incluso la eleccin de sus amigos, y trabajo, lugar de
residencia, fantasas, amores, y todas las experiencias psquicamente
relevantes para su existencia. La forma en que una persona bloquea o
permite la conciencia y la actividad en la frontera de contacto, es su
forma de mantener el sentido de sus propios lmites. (p. 129)

Polster (1997), expresa que la capacidad de contacto no nos


hace por fuerza mas felices hay desde luego, muchos contactos
desgraciados-, pero es un elemento integrante de nuestra humanidad. El
solo temor a la desdicha basta a menudo para que un individuo reduzca

29

su capacidad de contacto, en el intento de salvar su pretendida


felicidad. (p. 129)

Mirar
Un ejemplo; cuando se lee, el contacto visual tiene carcter prioritario.
La visin en este caso se convierte en una forma de contacto intermedia, que
facilita el contacto final con las ideas o conceptos que le interesa comprender.
(Polster, 1997 p. 132)
Discernimos aqu una dicotoma que alcanza a todas las
funciones de contacto. Existe, en efecto, un contacto referencial en este
caso la mirada- que provee orientacin para acontecimientos o acciones
ulteriores, y un contacto por el contacto mismo.

Cuando predomina el contacto referencial, la vida se hace


sumamente prctica. Veo la maquina de escribir para poder escribir en
la mquina. La funcin referencial es sin duda de enorme valor para la
existencia. (Polster, 1997, p. 132)

Muchas personas bastante bien dotadas para la visin referencial


padecen de ceguera al contacto, puesto que les importa poco ver por el
solo hecho de ver. Con esto le restan emocin a la vida, y posiblemente
reducen tambin el contacto referencial, ya que todas las funciones
deben existir por su valor intrnseco, adems de servir para fines

30

prcticos. Los que se deleitan en la mera visin probablemente


adquieren una visin mas alerta y afinada para la visin referencial.
(Polster, 1997. p. 132)

Escuchar
Escuchar puede constituir un proceso abierto y muy activo. El
que en realidad escucha recibe vidamente los sonidos que penetran en
l, como ocurre en un concierto, por ejemplo. Se trata de un proceso
delicioso, que harto a menudo se relega a una categora secundaria, en
comparacin con la conducta mas notoriamente activa de conversar o
emitir sonidos. (Polster, 1997. p. 136)

La selectividad se ejerce, no solo sobre lo que se quiere o no decir, sino


tambin sobre lo que se quiere o no escuchar. (Polster, 1997)

La funcin de escuchar admite diversas especialidades, que cada


persona establece para s, adiestrndose, por ejemplo en captar apoyo, o
la crtica, o la informacin, o la condescendencia, o los meros hechos, o
las complejidades que no entiende, o el tono de voz con prescindencia
del mensaje real, o lo que sea. (Polster, 1997 p. 137)

El que al escuchar toma contacto est siempre alerta a lo que se


dice, pero tambin al sonido en s, de modo que oye bastante ms que

31

las palabras. Escucha todo lo que tiene algn sentido para l, y es


afectado por lo que oye. Cuando el que escucha oye, sabe que ha
establecido un buen contacto; y cuando el que habla sabe que es odo,
tambin su contacto se reanima. (Polster, 1997 p. 136)

Tocar
El medio mas obvio de establecer contacto es tocar, pero si los
tabes impuestos a la vista y al odo son inconfundibles No mires
fijo, No escuches detrs de la puerta-, aun mas contundentes y
explcitos son los tabes que reprimen el tacto. (Polster, 1997, p.139)

Hoy los tabes se estn aflojando, pero ya la gente se haba


alejado a tal punto del contacto fsico, que la voluntad actual de
reanudarlo despliega el exhibicionismo auto consiente que acompaa de
ordinario el desempeo de una funcin desacostumbrada. (Polster,
1997.p. 139)

La inmediatez del tacto atraviesa los estratos intelectuales y


cuaja en experiencias palpables de reconocimiento personal.
Tocar no es una consecuencia inevitable de la relacin afectiva; pero si
uno est abrumadoramente asustado por esa posibilidad, la expectativa
de la catstrofe ejercer de todas maneras su efecto esterilizador.
(Polster, 1997, p. 142)

32

Oler
El olfato es una de las funciones de contacto mas primitivas y
probablemente la mas subestimada. Los animales son ms eficientes para tomar
contacto, a pesar de que es una primordial herramienta de supervivencia. La
mayora de los seres humanos no andan ni quieren andar olfatendose unos a
otros y tampoco quieren ser olidos. En el sentido teraputico es tan importante
como las anteriores funciones. (Polster, 2003).

Gustar
Segn Polster (2003) Oler y gustar es ser tocado por sustancias
qumicas, gaseosas o en solucin.

Conversar
Como funcin de contacto la conversacin tiene dos dimensiones: la voz
y la palabra.
La voz
Musicalmente, la voz humana suele considerarse el prototipo del
tono expresivo. Uno de los ejemplos ms notables en este sentido es el
teatro Kabuki japons, donde la voz pasa de un chirrido a un bramido,
un lamento o un rezongo sordo, a travs de una gama fantstica de
posibilidades sonoras. (Polster, 1997 p. 144)

33

Polster (1997) sostiene que:


Adems de cumplir una funcin expresiva, la voz lleva una
direccin y un impulso. Podemos concebirla como un proyectil lanzado
por el sujeto hacia un blanco que quiere alcanzar por medio del sonido.
Penetrar a otra persona con la voz es un acto agresivo. Si la voz entra
armoniosamente, y su incisividad resulta asimilable, ser bien recibida y
se entablar una buena relacin. Si el hablante carece de fuerza incisiva,
posiblemente no dar en el blanco; si, en cambio, se excede y se
traspone violentamente las fronteras de su oyente, provocar la
resistencia normal de este a ser atropellado, y ello influir sobre el
contacto. (p. 146)
La risa es otro aspecto significativo del contacto vocal. Surge del
individuo con fluidez, o a borbotones? Tiene resonancia o es opaca como un
sonido metlico? Es suelta o contenida? (Polster, 1997 p. 146)
En un sentido simplista, hablar puede considerarse una variante de
respirar. Importa, pues, restaurar a la respiracin como centro vital de apoyo
para esta funcin de contacto. (Polster, 1997, p. 148)

La Palabra
Es potencialmente uno de los ms poderosos agente de contacto.
De la concisin, el colorido, la intensidad, la claridad, la llaneza y otras
condiciones del lenguaje puede depender que lleguemos a otra persona.

34

Los buenos escritores saben hacerse presentes por medio de la palabra,


ya que no cuentan con otra funcin de contacto. (Polster, 1997 p. 148)

Los hbitos lingsticos de una persona revelan mucho acerca de


ella y de lo que intenta expresar.
Hay hablantes verbales y hablantes sustantivos, y algunos que
prescinden de pronombres personales; hay quienes hablan con libertad
potica y otros que lo hacen con la precisin de agrimensores. (Polster,
1997 p.149)

Moverse
Los poderes del contacto del movimiento se revelan con suprema
evidencia en la actuacin del mimo. Por la pura virtud del movimiento,
este artista nos muestra que abre un paquete y encuentra en su interior
un objeto repugnante o precioso. (Polster, 1997. p.155)

Al penetrar en una habitacin y encaminarse hacia una persona


que desea hablar, hay quien acta por propio impulso, desplazndose
libre y armoniosamente, y tambin hay quien lo hace a los tropezones,
como una marioneta mal manejada, para cumplir una obligacin social
que en el fondo no le interesa. (Polster, 1997 p. 155)

35

La flexibilidad es imprescindible para la toma de contacto,


porque cualquier cosa enfocada intensa o invariablemente demasiado
tiempo deja de percibirse, como cuando se nos duerme el pie despus
de estar sentados largo rato. El que no sabe girar queda fijo y
desconectado. La recuperacin de la movilidad del cuello y los ojos
contribuye en gran parte a resolver esta fijacin. (Polster, 1997, p. 163)

3.1.3

Darse Cuenta

El Darse Cuenta pleno es el proceso de estar atentamente en


contacto

con

los

eventos

mas

importantes

del

campo

ambiente/individuo, con un total apoyo sensorio-motor, emocional,


cognitivo y energtico. El contacto por medio del darse cuenta crea
totalidades nuevas, significativas, y por lo tanto es en s mismo una
integracin del problema. El darse cuenta eficaz esta fundado en y
energizado por la necesidad actualmente dominante del organismo.
(Yontef, 2005, p.134)

Es preciso no solo un conocimiento de s mismo, sino un conocimiento


directo de la situacin en curso y de la forma en que el s mismo se encuentra
en esa situacin. Cuando el organismo niega la situacin y sus exigencias o de

36

los propios deseos y respuestas elegidas, ocurre una alteracin del darse cuenta.
(Yontef, 2005)

El darse cuenta va acompaado de pertenencia, es decir, el proceso de


conocer nuestro control sobre, eleccin de y responsabilidad por los propios
sentimientos y conducta. El proceso de darse cuenta, tiene dos vertientes: el
sistema sensorial y el sistema motor, y se vuelve sano, funcional al
crecimiento, cuando se cumple la experiencia sinptica entre estos dos
sistemas (Polster, 1986)
El sistema sensorial, a partir de las necesidades, sensaciones,
emociones, descodificados simblicamente por nuestro pensamiento, nos da la
orientacin, o sea la direccin hacia la cual ir; a continuacin el sistema motor
nos permite la manipulacin del entorno, para satisfacer la primera necesidad,
la gratificacin consiguiente a la accin, y por ultimo la asimilacin de la
experiencia y el crecimiento.
Cuando el proceso del darse cuenta no funciona, el organismo no logra
individualizar con exactitud sus necesidades ni usar los instrumentos adecuados
para corresponder; de esta forma el organismo pierde el contacto consigo
mismo, y con la realidad. (Spagnuolo, 2002)
Como refiere Spagnuolo (2002), puesto que el darse cuenta
siempre est en funcin de la relacin, en la comunidad teraputica es
precisamente a travs de la experiencia relacional como los trabajadores
pueden ayudar al paciente a estar en contacto consigo mismo, con sus

37

necesidades, para despus poder manipular el entorno hacia la


satisfaccin de esa necesidad, restableciendo as el proceso espontneo
del darse cuenta, el nexo, la armona entre sistema sensorial y motor.
(p.120)

El darse cuenta es siempre aqu y ahora, aunque su contenido puede estar


distante. El acto de recordar es ahora; lo que se recuerda no es ahora. (Yontef,
2005, p. 135)

3.2

Drogodependencia

En ocasiones, la problemtica de mujeres que presentan insatisfactorias


relaciones interpersonales, se potencia por compulsin o hbito de consumir
drogas configurando un crculo difcil de interrumpir.

Drogadiccin sintetiza

droga y adiccin, tambin llamada

drogodependencia o toxicomana, es un estado de alteracin, a veces


de intoxicacin, provocado por ingestin (consumo) de una o varias
drogas. La drogadiccin es una enfermedad , no un vicio. (Guerrero,
2006)

La adiccin es un hbito arraigado que produce dependencia de


algo o compulsin a hacer algo.

38

En tanto, dependencia es un conjunto de manifestaciones


fisiolgicas, comportamentales y cognoscitivas que demuestran que el
consumo de una o ms sustancias adquiere para la persona afectada,
una prioridad desproporcionada en relacin con otras conductas que
tenan alto valor.
La manifestacin caracterstica de la dependencia es el deseo
imperioso (compulsin, craving) de ingerir la sustancia. (CONACE,
2006)

El trmino droga se utiliza para referir a sustancias psicoactivas


con efecto potencialmente nocivo para el sujeto que la consume. Toda
sustancia que introducida en el organismo vivo puede modificar una o
ms funciones de ste o sustancia psicoactiva capaz de generar
alteraciones del comportamiento y procesos de abuso y dependencia, o
segn Miller (1991), una sustancia farmacolgicamente activa que
tiene distintos efectos qumicos sobre el cerebro. Este trmino puede
incluir, no slo sustancias popularmente consideradas como drogas por
su condicin de ilegales, sino tambin, psicofrmacos y sustancias de
consumo legal como tabaco, alcohol o bebidas que contienen xantinas
tales como caf, y sustancias de uso domstico o laboral como bebidas
colas, pegamentos y disolventes voltiles. (Becoa, 1994, p. 34)

39

El trmino Adiccin identificado como patrn distintivo de


perdida de control del uso de droga en cualquier marco, debido a
connotaciones morales y legales se ha sustituido paulatinamente por el
de Dependencia. Sin embargo, debido a la constatacin creciente de
conductas patolgicas que producen dependencia sin intervencin de
sustancias qumicas exgenas, como el juego, ha revitalizado la
expresin Adiccin, dndole una aceptacin ms amplia al utilizarlo en
el contexto de conductas adictivas. (Becoa, 1994, p. 34)

La drogodependencia o toxicomana es definida en el ao 1964 por la


Organizacin Mundial de la Salud (OMS) como el:
Estado psquico, y a veces fsico, resultante de la interaccin de
un organismo vivo y una droga, caracterizado por un conjunto de
respuestas comportamentales que incluyen la compulsin a consumir la
sustancia de forma continuada con el fin de experimentar sus efectos
psquicos o, en ocasiones, de evitar la sensacin desagradable que su
falta ocasiona. Los fenmenos de tolerancia pueden estar o no presentes.
Un individuo puede ser dependiente de mas de una droga (Becoa,
1994; p. 35)

La OMS completa su definicin en 1981 indicando que debe


contemplarse la dependencia utilizando los siguientes criterios de
referencia para su delimitacin y diagnostico: Una evidencia subjetiva

40

de compulsin para la utilizacin de las drogas durante los intentos de


abandono del consumo; el deseo de abandonar el consumo; un hbito
del consumo de drogas relativamente estereotipado; evidencia de
neuroadaptacin con fenmenos de tolerancia y dependencia; consumo
de drogas para aliviar o evitar sntomas de abstinencia; predominio de
conductas de bsqueda de drogas por encima de otras prioridades
importantes y rpida reinstauracin de la dependencia despus de un
periodo de abstinencia. (Becoa, 1994, p. 36)

OMS (1992) define el sndrome de dependencia en la Dcima Revisin


de la Clasificacin de las Enfermedades (CIE-10), Trastornos Mentales y del
Comportamiento, como:
Un conjunto de manifestaciones fisiolgicas, corportamentales y
cognoscitivas en el cual el consumo de una droga, o de un tipo de ellas,
adquiere la mxima prioridad para el individuo, mayor incluso que
cualquier otro tipo de comportamiento de los que en el pasado tuvieron
el valor ms alto. La manifestacin caracterstica del sndrome de
dependencia es el deseo, a menudo fuerte y a veces insuperable, de
ingerir sustancias psicoactivas ilegales o legales, aun cuando hayan sido
prescritas por un mdico. La recada en el consumo de una sustancia,
despus de un periodo de abstinencia, lleva a la instauracin ms rpida
del resto de las caractersticas de la dependencia, de lo que sucede en
individuos no dependientes.

41

La CIE-10 seala que el diagnstico debe hacerse si durante, en algn


momento, o de un modo continuo en los ltimos doce meses han estado
presentes tres o ms de los rasgos siguientes:
a) Deseo intenso o vivencia de una compulsin a consumir una sustancia.
b) Disminucin de la capacidad para controlar el aumento de una
sustancia, unas veces para controlar el comienzo del consumo, para
poder terminarlo y otras para controlar la cantidad consumida.
c) Sntomas somticos de un sndrome de abstinencia cuando el consumo
de la sustancia se reduzca o cese, cuando se confirme por el sndrome de
abstinencia caracterstico de la sustancia; o consumo de la misma sustancia
u otra similar con intencin de aliviar o evitar sntomas de abstinencia.
d) Tolerancia, de tal manera que se requiere un aumento progresivo de la
dosis de la sustancia para conseguir los mismos efectos que originalmente
producan dosis menores.
e) Abandono progresivo de otras fuentes de placer o diversin, a causa del
consumo de la sustancia, aumento del tiempo necesario para obtenerla,
ingerirla o para recuperarse de sus efectos.
f) Persistencia en el consumo de la sustancia a pesar de

evidentes

consecuencias perjudiciales. Debe investigarse a fondo si la persona que


consume la sustancia es consciente, o puede llegar a serlo, de la naturaleza y
gravedad de los perjuicios. (Becoa, 1994, p. 40)

42

3.2.1

Diferencias ente hombres y mujeres

CONACE (2004) sostiene que:


Es evidente que ser mujer y presentar un consumo problemtico
de drogas, constituye un desafo a estereotipos sociales y culturales de
una sociedad sexista. Algunos autores plantean que, en relacin con los
hombres, las mujeres con problemas de drogas tienen la tendencia a
experimentar un estigma

ms estresante y destructivo que el que

sufren ellos. (p. 30)

Muchas veces, para una mujer con consumo problemtico de


drogas, algunos temas, tales como las tensiones al interior del hogar,
violencia en la familia, no valoracin de su aporte social, tendencia a
ubicarse en un lugar secundario y/o postergado conflictos, en su
mayora, derivados de su rol sexual adquieren una importancia central
en el proceso de su dependencia y, generalmente, no son considerados
en su proceso de tratamiento. (CONACE. 2004, p. 31)

Las

mujeres

normalmente

no

cuentan

con

la

misma

comprensin, oferta de ayuda y acompaamiento familiar que los


hombres, incluso en algunos casos hay oposicin explicita de sus
familiares y/o pareja para que reciba algn tipo de atencin. Ello se ve
reforzado por el hecho de que las mujeres con dependencia estn ms

43

expuestas a ser sancionadas y criticadas porque, de acuerdo con la


socializacin sexista, consumir drogas, alcohol y otras conductas
transgresoras y/o disruptivas, est ms asociado con lo masculino. Lo
anterior agrava el aislamiento de las mujeres, quienes, para evitar ser
estigmatizadas, tienden a ocultar su problema, no pedir ayuda o a
postergar el pedirla. (CONACE, 2004, p.33)

Segn Ana Garca, la importancia de las relaciones para la


identidad femenina, la necesidad de conexin y el miedo a la
desconexin (en especial respecto a la pareja) es factor de riesgo para el
uso de sustancias. La tendencia a sostener y cuidar los vnculos
(extensin del rol materno) persiste en las mujeres adictas, mientras que
los varones en esa situacin en general se van o delegan el cuidado y
acompaamiento en otros familiares (en general, otras mujeres).
(CONACE, 2004, p.10)

Algunos autores han destacado acontecimientos ocurridos en la


niez y los relacionados con la vida familiar como parte de la gnesis
del abuso de drogas. La presencia de patologas en la familia, ruptura de
lazos, perdidas, separaciones, conflictos matrimoniales entre los padres,
historias de alcoholismo y/o drogadiccin y altos ndices de violencia y
abuso sexual son situaciones frecuentes vividas por las mujeres
consumidoras de drogas. (CONACE, 2004, p.11)

44

Similarmente, parece existir una predisposicin mayor a las


dependencias en las mujeres con trastornos afectivos de ndole depresiva
con componentes de trastorno de pnico, que la observada para otros
problemas emocionales o estrs. (CONACE.2004 p. 11)

3.2.2 Mujer y drogas

Las mujeres, en tanto grupo social, presentan gran heterogeneidad. Ello


plantea el desafo de considerar la diversidad de edades, condiciones
socioeconmicas, estado civil y estatus, entre otras situaciones, al momento de
disear e implementar estrategia de intervencin.

Si bien aun existe una sociedad que sostiene una socializacin


sexista, con roles, responsabilidades y relaciones rigidizadas y marcadas
por los estereotipos masculino y femenino, recientemente tambin ha
comenzado a operar una nueva ptica de la mujer en nuestra sociedad.
Ello puede implicar -en algn sentido-, mayores demandas y tensiones,
relacionadas con las expectativas sociales y los mecanismos de ajuste
necesarios para contrarrestar estas presiones por parte de la mujer. Los
mensajes de autonoma, las opciones y limitaciones para nuevas carreras
profesionales o laborales, sumados a una socializacin sexista, pueden

45

someter a la mujer a sentimientos de perdida de control, impotencia para


cambiar las condiciones adversas y aislamiento social. (CONACE,
2004, P. 18)

Efectos y consecuencias del consumo de drogas en mujeres:

Segn estudio de CONACE, (2004), cualquier comportamiento

humano, incluida la dependencia de drogas, tiene su origen en la


interaccin de una serie de elementos que influyen de manera
constante entre s.

Las dependencias resultan de la accin conjunta de tres grupos


de

factores:

una

sustancia

con

determinadas

propiedades

farmacodinmicas, las caractersticas personales del sujeto que las


utiliza y la naturaleza del contexto sociocultural en el que se produce ese
consumo.

No existe un nico motivo para iniciar y mantener el consumo de


drogas, ni una manera exclusiva de volverse dependiente de ellas.
Siempre se da la interaccin de diversos factores y slo a partir de la
consideracin de los tres vrtices del mismo triangulo: sujeto, sustancia
y contexto, se puede alcanzar una visin real del problema. (CONACE,
2004)
46

Elementos de la triada

La sustancia: Existen de distintos tipos, cantidad y frecuencia


con que se consume, vas de administracin que utilizan para
suministrrselas, eventuales consumos asociados (poli consumo), nivel
de accesibilidad y disponibilidad, etc.
El sujeto: Hace referencia a dos dimensiones bsicas de la
persona: una psicolgica y otra fsica, y como estos elementos
interactan con distintas sustancias. Desde el punto de vista psicolgico,
importan motivacin, caractersticas de personalidad, factores de
vulnerabilidad o de riesgo que puedan hacerlo ms propenso o proclive
a generar dependencia, trastorno de conducta, etc. En el mbito fsico,
importan el sexo, edad de las personas, contextura fsica e influencia de
la sustancia especifica en el organismo.
El contexto: Son caractersticas socioculturales del ambiente en
que se desarrolla el consumo, tanto del medio cercano del sujeto, como
familia (calidad de las relaciones, expresin de afectividad, modelos
familiares, estilo de comunicacin, normas y limites, etc.), grupo de
pares (valores y actitudes hacia el consumo), aceptacin o sancin
social, leyes y disponibilidad (esta ltima se refiere al trfico,
microgrfico; oferta y facilidad de acceso a la droga en determinadas
poblaciones). Todas las caractersticas anteriores influyen en la forma en

47

que se desarrolla el fenmeno del consumo y/o la dependencia a las


drogas. (CONACE, 2004, p.21)

3.2.3

Perfil de las mujeres chilenas, con problemas de drogas

La publicacin de CONACE (2004), da cuenta del perfil de las mujeres


chilenas drogodependientes, citando caractersticas de autoestima, relaciones
vinculares, ambiente familiar, relacin con familia y con su maternidad.

Autoestima: Se observa carencia afectiva notable

que las lleva a

buscarla donde sea y de la forma que sea, habitualmente a travs de


comportamientos manipuladores.
Pobre auto concepto, con sentimientos de desvalorizacin y poco
desarrollo de la confianza bsica, lo que las hace inseguras, poco
autnomas y con dificultad para enfrentar conflictos personales con sus
propios recursos. (CONACE, 2004, p. 31)

Relaciones vinculares: La mayora de las mujeres plantea

haber

iniciado el consumo durante la adolescencia, con grupo de pares


pareja, pololo, etc. (CONACE, 2004, p. 32)

48

Se observan dificultades de integracin a grupos desde la


infancia, sin amigas significativas; la amistad se conoce a travs del
consumo. La adolescencia se vive con angustia y desorientacin, con
responsabilidades de crianza de hermanos menores en sectores ms
vulnerables. El proceso de identificacin se realiza con los pares y la
droga. (CONACE, 2004, p. 32)

La construccin de identidad sexual se realiza a partir de


modelos deficitarios (historia de abandono parental, separaciones,
peleas, golpes, ausencia de dilogo afectivo entre la pareja parental).
Existe actividad sexual precoz, habitualmente con embarazo no deseado.
Este inicio sexual precoz generalmente esta asociado a la bsqueda de
afecto para llenar vacos afectivos, a la existencia de modelos sexuales
poco claros, contradictorios y a experiencias dolorosas relacionadas con
el sexo. (CONACE, 2004, p. 32)

Ambiente familiar: Desde el punto de vista de la estructuracin familiar


presentan problemas, ya que durante la

adolescencia han debido

hacerse cargo de la crianza de sus hermanos, por la que se deprimen y


angustian al tener que postergarse por otros.
El sistema familiar presenta caractersticas de desapego afectivo,
poca expresin de los sentimientos, familias desintegradas, que no han
fomentado los lazos afectivos. Las relaciones familiares han sido tensas,
fras, violentas, impidindola los miembros del grupo a buscar afecto
49

fuera del sistema. Las mujeres se han sentido poco aceptadas por esta
familia, ignoradas por los padres, no reconocidas, emitiendo conductas
para lograr cario o aprobacin, llegando inclusive a daarse a si
mismas con tal de llamar la atencin para ser consideradas. (CONACE;
op. cit: 34).

Relacin con su maternidad: La mujer que abusa de drogas es parte de


una red de significados y mitos que se presentan como opuestas a los
constructos y significados de la maternidad socialmente construidos.

La frustracin de estas mujeres al no poder asumir su maternidad debido


al consumo de drogas, genera sentirse malas madres. Segn CONACE (Ibid)
esto es replica del como sus madres han asumido el rol materno con ellas
mismas.

Las mujeres que de alguna forma asumen su rol materno y


paralelamente practican el consumo de drogas, se ven envuelta en una relacin
estresante con el hijo, debido a que no se proponen renunciar al consumo ni a la
maternidad. Dicha relacin, tambin asume carcter de estresante para el hijo,
el cual asumira un rol de autoridad, confrontando permanentemente a la madre
por sus conductas.
En cuanto a los afectos que la madre entrega en la relacin con su hijo,
en el caso de las mujeres drogodependientes, stos tendran carcter

50

intermitente producto de inestabilidad psicolgica y emocional propio de una


persona con trastornos adictivos. (CONACE, 2004)

3.2.4 Enfoque Relacional

Diversas fuentes sealan que la motivacin principal de la mujer es su


necesidad de crear un sentido de enlace con los dems. En las mujeres
drogodependientes, la nocin de si misma y de su propia vala se basa en la
vinculacin determinante con el consumo de sustancias.

CONACE (2005) sostiene que:


Esto es concordante con lo observado en los proyectos
implementados durante el ao 2006: el 58% de las usuarias refieren
como motivacin a iniciar tratamiento , sus hijos, padres o pareja.Una
hiptesis es que las mujeres pueden consumir drogas para conservar
estas relaciones (por ejemplo, con una pareja que tambin lo hace), para
llenar el vaco creado por una relacin insatisfactoria o malograda, o
para soportar el dolor de una relacin abusiva. (p. 12)

51

3.2.5 Tratamientos teraputicos para personas drogodependientes.

Reconocer

la

drogodependencia

como

fenmeno

complejo

(multideterminado), dinmico y cambiante, permite el surgimiento de


intervenciones, como el tratamiento de drogodependencias, proceso consistente
en mejorar la situacin actual que aqueja al consumidor de droga (s), y un
cambio en su estilo de vida.

Por

distintas vas los pacientes drogodependientes inician un

tratamiento. Algunos, dentro del proceso adictivo, han realizado intentos por
abandonar la adiccin con su esfuerzo personal sin recabar ningn tipo de
ayuda profesional. Cuando estas experiencias resultan fallidas y las situaciones
no son ptimas para el consumo,

buscan ayuda para poder conseguir un

tratamiento eficaz, es lo que se denomina inicio del proceso teraputico que


comprender las fases de desintoxicacin, deshabituacin y reinsercin social.
(Becoa, 1994, p.44)

En el proceso de tratamiento, en primer lugar la persona adicta debe


reconocer el problema, segundo debe estar convencido de la necesidad de
realizar un tratamiento que apunte a cambiar su estilo de vida y aceptar la ayuda
de externos con el fin de mejorar su situacin.

52

Para cada tratamiento, existen diferentes metodologas, modalidades


asistenciales y objetivos, desarrollados a travs de determinada estrategia
teraputica.
Cada persona que sufre con el consumo de la droga, presenta mltiples
necesidades de tratamientos, con caractersticas propias de tipo personal, social
y econmica. Para establecer un programa teraputico mnimamente eficaz es
necesario valorar la problemtica personal, familiar y social que presentan los
pacientes drogodependientes. (Becoa, 1994; p. 44)
Segn CONACE (2004), los servicios de tratamiento deben tener en
cuenta necesidades concretas relativas al sexo, la edad, la salud y los
comportamientos de riesgo.

Los servicios de tratamiento y rehabilitacin deben mitigar el estigma


social y la discriminacin contra las personas dependientes de sustancias y
apoyar su readaptacin social como miembros sanos y productivos de la
comunidad. (CONACE, 2004)

Objetivo estratgico: Rehabilitar y reinsertar socialmente a personas


afectadas por el consumo de drogas, mediante oportunidades de tratamiento y
programas de reinsercin. Este es el compromiso del Estado de Chile para
tratar a las personas con consumo problemtico de droogas, plasmado en la
Estrategia Nacional de Drogas 2003-2008. (CONACE, 2004)

53

Es necesario recibir un tratamiento de drogodependencia cuando las


drogas forman parte importante de la vida de la persona, ocupando un lugar que
no le corresponde y supliendo a la vez el terreno que ocupan las relaciones
afectivas, la mantencin del trabajo y la preocupacin por los estudios, entre
otros mbitos de la persona.

Los tratamientos consiguen, a travs de la intervencin asistencial que la


persona permanezca en total abstinencia del consumo de droga. Por lo tanto el
objetivo de este programa consiste en que la persona deje de depender del
consumo, a nivel fsico y psicolgico.

Tambin existen tratamientos donde no se exige que la persona


abandone completamente su consumo de drogas. Sino que pueda eventualmente
disminuir su nivel de consumo para mejorar su estilo de vida. Se persigue una
mejora en la calidad de vida, reduccin del dao producido por los consumos,
sin pretender la abstinencia a la sustancia consumida. (Navarro, 2004)

Segn los objetivos que presente cada institucin rehabilitadora de la persona


drogodependiente, existen los siguientes programas de tratamiento:

- Programas de Mantenimiento con Agonistas Opiceos: Se


utilizan con pacientes heroinmanos que no consiguen mantener una
vida satisfactoria y autnoma sin opiceos y presentan recadas

54

frecuentes. El trmino Mantenimiento se aplica a sujetos sometidos a


tratamiento sin fijar plazo. Se basan en sustitucin del opiceo, objeto
de dependencia, generalmente herona, por un opioide de curso legal,
prescrito durante un periodo prolongado bajo control mdico. La
tolerancia

cruzada

existente

entre

diversos

opiceos

permite,

tericamente, utilizar cualquiera de ellos para realizar un programa de


mantenimiento. Estos programas en la actualidad se realizan con
metadona, considerado en nuestro medio como frmaco de eleccin en
este tipo de tratamientos. (Becoa, 1994, p.48)

- Programas Libres de Drogas: Su objetivo es la abstinencia y el cambio


de estilo de vida del drogodependiente, Tienen tres fases; desintoxicacin (se
trata la dependencia fsica), rehabilitacin (se estructura la vida del individuo
recuperando relaciones familiares, sociales) y la reinsercin (se facilita
adaptacin al medio social) (CONACE, 2005)

Se denominan programas libres de drogas aquellas modalidades


de intervencin que persiguen propiciar un cambio en el estilo de vida
de los drogodependientes facilitando una formacin personal, intelectual
y de ocio, encaminadas a la reinsercin de estos sujetos. Los
dispositivos en los que se realizan incluyen desde la Comunidad

55

Teraputica (pedaggica o de vida) hasta las Unidades de Da y los


Pisos Protegidos (a medio camino). (Becoa, 1994, p. 49)

-Programa de reduccin de daos: Su objetivo es la mejora de la calidad


de vida del consumidor sin pretender su abstinencia (programas de metadona,
centros de emergencia social, dispositivos mviles) (CONACE, 2005)

Ante la problemtica de la drogodependencia, tras la experiencia de la


aplicacin de estos tres paradigmas de intervencin, ha surgido la necesidad de
integrarlos, y llevar cabo un proyecto teraputico global que conjugue estas tres
miradas. No se recomienda una postura radical, pues

no se ajusta a la

complejidad del fenmeno.

Las ltimas tendencias y discusiones entre expertos en este tema,


apuntan hacia la necesidad de un modelo integrador. Un proyecto teraputico
global, abierto y flexible. CONACE (2004)

Etapas del tratamiento

Entendiendo el tratamiento de la drogodependencia como un proceso


cuyo objetivo final es la recuperacin personal y social del drogodependiente
(CONACE, 2002). Se han descrito tres etapas, por las cuales debe pasar la

56

persona con consumo problemtico de drogas desde que entra en contacto con
el dispositivo de apoyo o asistencial hasta su recuperacin. Estas son:
Desintoxicacin, tratamiento/rehabilitacin e integracin social.

Si la finalidad del tratamiento es la abstinencia, la primera fase es


Desintoxicacin. Dependiendo de las condiciones fsicas, sociales, psicolgicas
y motivacionales, esta tendr intensidad y duracin variables y podr realizarse
en hospitales, establecimientos con planes ambulatorios o con planes
residenciales. (CONACE, 2005)

Se entiende por abstinencia tanto la reparacin de los desrdenes


biolgicos consecutivos a la interrupcin de la intoxicacin, como el trabajo de
duelo ante la perdida del placer adictivo. (Becoa, 1994, p. 44).

La desintoxicacin tiene como objetivo conseguir que el paciente


adicto deje de consumir la sustancia de la que es dependiente y se
mantenga abstinente sin que presente sintomatologa aguda de
abstinencia. El abordaje de la desintoxicacin depende del enfoque
teraputico del centro que la realice y de la sustancia consumida.

Segn Becoa (1994), La duracin de esta fase depender de la


sustancia consumida y del tratamiento que se decida para la misma. Es
imprescindible efectuar desintoxicacin para iniciar el proceso de

57

abstinencia del paciente drogodependiente, pero es conveniente aclarar


que si la misma no va seguida de un completo tratamiento de
deshabituacin ser difcil impedir la recada del mismo.

La

desintoxicacin permite al organismo funcionar sin necesidad de


consumir droga, pero no soluciona ni el sndrome de abstinencia tardo, ni
el condicionado, ni lo que se conoce como dependencia psquica. (p. 45)

La segunda etapa del proceso, es la rehabilitacin bio-psicosocial o tratamiento propiamente tal. El equipo conformado por
profesionales y tcnicos realiza un diagnstico del consumo y una
evaluacin de reas o ejes afectados consecuencia del consumo
problemtico de la persona. Cuando se ha finalizado esta evaluacin, se
procede a disear objetivos teraputicos necesarios para apoyar a la
persona en el proceso de construccin de un estilo de vida, apartado del
consumo de drogas y/o en la disminucin de su consumo. CONACE
(2003)
La tercera parte del proceso, se refiere a la reinsercin o
integracin social, trasversal a todas las etapas del tratamiento. La
integracin social implica cumplimiento de objetivos a largo plazo, con
una mayor repercusin en el desarrollo futuro de la vida personal y
social del drogodependiente que inicia un proceso de tratamiento, en la
medida en que reajusta aspectos relacionados con la dependencia fsica
y psicolgica, y

dificultades que esta dependencia produce en la

58

capacidad del individuo para desenvolverse

en condiciones de

normalidad en su medio social. CONACE (2003)

Las drogodependencias se consideran enfermedades crnicas


recidivantes, pues ningn especialista podr asegurar que el paciente ha
abandonado total y definitivamente la toxicomana. En este contexto, se
tiende a utilizar

cada vez con ms frecuencia trminos como

compensando y abstinente para indicar que un sujeto que ha sido


dependiente ya no consume txicos, abandonando as paulatinamente el
uso del termino rehabilitacin al que se le daba una acepcin que
intentaba designar todo el proceso que implicaba conseguir que un
paciente abandonase el consumo de una droga y se reintegrase a una
vida personal y social plena. (Becoa, 1994, p. 47)

Situacin en Chile

En Chile, existen diversos centros y lugares de tratamientos, entre ellos,


Comunidades Teraputicas que ofrecen programas de tratamiento en sistema
residencial para personas con consumo y/o abuso de drogas. La Comunidad
Teraputica aborda la adiccin como enfermedad. La persona afectada ha
llegado a este tipo de dependencia qumica y psicolgica, malogrando reas
importantes de su vida: Emocional, familiar, social y laboral. Por lo tanto,
este lugar tiene entre sus objetivos, habilitar a la persona adicta con conductas,

59

estilos de vida saludables, espiritualidad en algunos casos y desarrollo de


habilidades laborales, para poder convertirse en un ser competente, hbil y til
en la sociedad, sin sentirse excluido de ella. Siendo ste el sentimiento ms
importante a reforzar y trabajar.

Por habilitar a la persona, se entiende que la persona adicta, sin


consumo de drogas, logre aprender estilos de vida saludables para
desenvolverse en las reas social y laboral sin mayores problemas.

Caractersticas de las comunidades teraputicas


Segn el Instituto Nacional de Drogas de Estados Unidos,
NIDA (1999); Son ambientes residenciales libres de droga que usan
un modelo jerrquico con etapas de tratamiento que reflejan niveles
cada vez ms elevados de responsabilidad personal y social. Se
intenciona la influencia entre compaeros, mediada por procesos de
grupo, para ayudar a cada persona a aprender y asimilar las normas
sociales y desarrollar habilidades sociales eficaces.

El Objetivo fundamental de una Comunidad Teraputica es fomentar el


crecimiento personal. ste se alcanza mediante la transformacin de un estilo
de vida individual a otro comunitario de personas interesadas, que trabajan
unidas para ayudarse a s mismas y a las dems. (Valle; s.f.)

60

La Comunidad Teraputica se diferencia de otros modelos de


tratamiento en el compromiso del personal de la comunidad, compuesta por los
profesionales de tratamiento y aquellos en rehabilitacin, como agentes claves
del cambio. Este enfoque se conoce como "la comunidad como mtodo". Los
miembros de la CT interactan de maneras estructuradas y no estructuradas
para influenciar actitudes, percepciones y comportamientos asociados con el
uso de drogas. Como seala NIDA (2008, 2), Qu es una comunidad
terapeutica.
Comunidad teraputica representa un ambiente estructurado con lmites
precisos, morales como ticos. Hace uso de sanciones y castigos
comunitariamente impuestos, lo mismo que de mejoras merecidas de estatus y
privilegios, como parte del proceso de recuperacin y maduracin. (Guerrero,
2006, p.56)

Los residentes de las Comunidades Teraputicas traen consigo


historias

de

funcionamiento

social,

habilidades

educativas,

vocacionales, lazos comunitarios y familiares positivos que han sido


debilitados por su consumo de drogas. En el proceso comunitario, las
personas comienzan a vivenciar la recuperacin que involucra la
rehabilitacin, es decir, el volver a aprender o reestablecer un
funcionamiento, habilidades y valores saludables as como rescatar la
salud fsica y emocional. (Guerrero 2006, p. 57).

61

No obstante, algunos residentes nunca tuvieron estilos de vida


funcionales. Para ellos, la Comunidad Teraputica constituye un primer
acercamiento a una vida ordenada. En este caso, la recuperacin
involucra la habilitacin, es decir, aprender por primera vez las
habilidades conductuales, las actitudes y valores asociados a convivir en
una sociedad. (Guerrero 2006, p.57).
La comunidad teraputica es un organismo en movimiento
entre las interacciones dentro del entorno y las que se dan con l, como
si fuera un self muy grande, constituido por el conjunto de los
contactos actuales, que se desarrollan en su interior y que se dirigen
afuera como frontera del contacto en accin. Considerar toda la
comunidad teraputica como un organismo en un campo revoluciona la
perspectiva teraputica: el objeto de la intervencin ya no es el paciente,
sino la comunidad en su conjunto. Y siendo la comunidad misma un
sistema dinmico, metido en un campo de fuerzas e influido por los
cambios que se verifican dentro y fuera de ella, es posible leer la
funcionalidad en relacin con el despliegue de las funciones del
self: (Spagnuolo, 2002, p.142)

Actualmente resulta teraputica la definicin clara de los roles (funcin


de personalidad) dentro de las comunidades psiquiatricas, entre el equipo de
trabajadores y el grupo de los residentes, entre quien se hace cargo y quien
es atendido. Se trata de una diferenciacin que permite el crecimiento.

62

Definir las fronteras, en efecto, permite contener la omnipotencia por ambos


lados y satisface la necesidad de dependencia de los residentes, apoyando la
confianza en el entorno, como momento cumbre del contacto pleno. (Spagnuolo
2002)

En este contexto es fundamental el papel del lder de la


comunidad, como punto de referencia, tanto afectivo como normativo.
Su posicin es esencialmente la de quien se hace cargo de todo el grupo,
residentes y trabajadores, favoreciendo el dialogo constructivo y
aceptando las diversidades para el respeto de todos y cada uno.

As, por ejemplo, un

lder formado en psicoterapia gestltica no

conduce de manera directiva, sino con modalidades de comunicacin


interpersonal de tipo emptico, claro y descriptivo, no interpretativo.
(Spagnuolo, 2002, p. 144)

Experiencia de Comunidad Teraputica Carpe Diem

El programa de tratamiento y rehabilitacin de Comunidad Teraputica


Carpe Diem, utiliza el trmino Habilitar en vez de Rehabilitar, ya que la
persona que ingresa (con problemas de adiccin) no posee

habilidades y

valores suficientes para solventarse en la vida. Esta comunidad asume que el

63

usuario debe re-aprender conductas, valores y modos de ser saludables, libre de


drogas. R. Pavez Muoz (comunicacin personal, 20 de julio 2008)

3.2.6

Programa de Tratamiento para mujeres con uso y abuso de drogas


de Comunidad Teraputica Carpe Diem

En centros o comunidades teraputicas, se han detectado programas con


enfoques diversos:

Cognitivo-Conductual

Conductual

Mtodos repulsivos.

Orientaciones Cristianas.

Orientacin Clnica-Psiquitrica.

Las caractersticas del tratamiento de la Comunidad Teraputica Carpe


Diem, adhieren al enfoque de Programa Libre de Drogas, con un enfoque
orientado

lo

Cristiano.

No

obstante

no

excluye

usuarias

drogodependientes que se identifiquen con otra religion.


Su filosofia es respetar a la persona e intervenir profesionalmente, sin
sesgar politica o religiosamente.

64

Carpe Diem considera a la droga y las adicciones como fenmeno


complejo de carcter multicausal, multifactorial con variados efectos. La
dependencia de las drogas, por sus caractersticas y complejidad, implica de
parte del consumidor toxicmano y en sus cercanos un abordaje integral para
que su praxis teraputica los incluya a todos.

Utiliza una

metodologa

biopsicoespiritual. (Carpe Diem, 2002)

El centro de tratamiento y sus programas de abordaje contempla cuatro


reas principales de intervencin:

rea psicosocial la cual integra aspectos psicolgicos individuales y del


entorno social y familiar (terapias grupales, terapias individuales y terapias
familiares).

rea ocupacional expresada en el desarrollo de las diferentes actividades u


ocupaciones, organizadas en rutinas cotidianas, las cuales normalizan el
funcionamiento ocupacional hacia estilos de vida saludables y libres de
consumo de drogas y/o alcohol (actividades de vida diaria como alimentacin,
higiene y vestuario, talleres laborales de artesana, preparacin de alimentos).

rea deportivo recreativo que pretende dentro del esquema integral,


contribuir a la vivencia de una vida que incluya recreacin sistemtica y

65

permanente. Contempla actividades de planificacin y ejecucin del tiempo


libre (recreacin, deporte, cultura y educacin).

rea espiritual la cual incorpora los principios y valores de un modelo de vida


integral que propicie el encuentro con su ser interior y las propuestas que
sugiere el cristianismo en pro de una mejora en la calidad de vida. (Carpe Diem,
2003)

El propsito fundamental de los profesionales y tecnicos es ayudar a


nacer un nuevo hombre e insertarlo nuevamente en la sociedad como un ser til
y valioso dotado de bienestar espiritual, fsico, mental y relacional que lo haga
sentirse un verdadero hombre dignificado. (Carpe Diem, 2002)

Entre sus objetivos especficos, se encuentran:

Posibilitar la sanacin de la persona que pide ayuda,

porque por s mismo no es capaz de dejar su adiccin. Capacitndolo


para romper con su vida pasada reactivando su proceso de maduracin
que permitir desarrollar un nuevo estilo de vida.

66

Proveer a la persona de recursos afectivos, cognitivos,

conductuales y espirituales para

fortalecer su personalidad y

autoestima.

Dotar al beneficiario de elementos necesarios para el

conocimiento y uso del auto cuidado en salud.

Proponer nuevos estilos de recreacin y uso del tiempo

Propender a su integracin en la familia, comunidad y

libre.

sociedad como un ser con sentido existencial y proyecto personal de


vida.

Orientar a la familia a comprender que las adicciones son

enfermedades y como tales hay que tratarlas, poniendo una gran dosis
de paciencia y amor.

Fortalecer y/o ayudar a la persona a desarrollar su

espiritualidad.

Orientar al usuario en su reinsercin familiar, laboral y/o

educacional.(Carpe Diem, 2002)

67

3.2.7 Definicin gestltica de comunidad teraputica

En el modelo gestltico comunitario a partir de datos fenomenolgicos


comunidad teraputica asistida se define, en una dinmica de proceso, como
aquel espacio-tiempo observable de la experiencia de contacto en el vivir con
los otros y junto a ellos. (Spagnuolo, 2002)

La comunidad teraputica as entendida reviste el papel de


espacio-tiempo teraputico que se extiende en el plano individual, desde
la fragmentacin hasta la integracin del self en contacto (funciones
Ello, Yo y Personalidad) y, en el plano social, desde la marginacin
hasta la insercin territorial.
El reto que la comunidad teraputica recoge es justamente el de ser
capaz de organizarse de manera tal que constituya un entorno de
apoyo para el cambio y el crecimiento. (Spagnuolo, 2002, p. 145)

68

3.3

La Danza

En esta investigacin se presenta la danza como espacio estratgico y


alternativo til en el quehacer psicoteraputico, considerndolo medio para
realizar contacto.

La Danza se define como el conjunto de movimientos de todo el


cuerpo o partes de l, ordenados rtmicamente y acorde con alguna
motivacin individual o grupal, que expresa emociones, sensaciones,
sentimientos, ideas y situaciones. Consiste en la ejecucin de distintos
movimientos con el fluido continuo de energa interna, para as darle un
sentimiento especial y un uso determinado (Glasinovic, 1995, p.14)

Se considera la Danza como ejercicio de ndole personal o grupal. Si es


grupal, reconoce una necesidad de conexin por parte de sus integrantes, se
debe confluir para crear en conjunto con energa interna, una obra artstica.
Adems es una manera de comunicarse con los dems, de expresarse, siendo
uno mismo el gran instrumento. (Glasinovic, 1995)

Es un lenguaje paralingustico, por medio del cual las personas se expresan a


travs de s mismo, reuniendo en su propio cuerpo el mensaje y canal, el
contenido y

forma. Desarrolla adems, la senso-percepcin, motricidad,

imaginacin, creatividad y la comunicacin. (Glasinovic, 1995; p.14 )

69

La danza no tiene parmetro para medir si es bueno o malo, si es


bello o feo, no siempre sigue modelos de esttica; se funda
primordialmente en el movimiento, gesto, el ademn o la inquietud del
cuerpo. Se puede transmitir como mensaje en silencio o apoyado con
acompaamiento sonoro. (Glasinovic, 1995; p.14)

Esto rompe con la creencia de que la danza debe ser bella, que si no lo
es, resulta desagradable. Al contrario, si es desagradable, tambin activa una
emocin en el receptor. Y ese es uno de los objetivos de la danza, como toda
actividad artstica, movilizar alguna emocin, a travs de la comunicacin.

Definicin de danza desde el punto de vista de algunos bailarines.

Segn Maurice Bejart, (1991); La importancia de la danza en


nuestro mundo

radica en su forma de comunicacin. Recrea todo

aquello que este siglo tiende a destruir [] La danza tiene sus races
tanto en lo sagrado como en lo social, y toda la danza que no incluya
ambos, an inconcientemente, carece de efectividad porque est privada
de sus orgenes.

70

Segn Maria Fux, creadora de la danza terapia, una tcnica reconocida


internacionalmente hace ms de 50 aos, refiere; La danza est en el hombre,
en cualquier hombre de la calle y es necesario desenterrarla y compartirla. La
danza no puede estar alejada de la sociedad en que se vive, ni de los problemas
del hombre cotidiano. (Glasinovic, 1995, p.20)

Segn la Enciclopedia Britnica; La danza puede definirse como


actividad espontnea de los msculos bajo la influencia de alguna emocin
intensa, como la alegra social o la exaltacin religiosa.
Tambin puede definirse, como combinaciones de movimientos armoniosos
realizados slo por el placer que ese ejercicio proporciona al danzante o a quien
le contempla.

A continuacin se citan algunas fuentes consultadas que describen


objetivos y alcances que la danza brinda en etapas del proceso vital humano.
Adems aluden a su uso como medio para rehabilitacin e integracin de
personas con discapacidad. Resaltan la importancia de favorecer la vivencia del
cuerpo y el movimiento a travs de la danza para favorecer el desarrollo
integral, resaltando as el desarrollo humano.

La danza, logra potencializacin de las dimensiones orgnicas, motrices,


intelectualices y afectivas, planteando como objetivo final la persona en si
misma, es decir, la consolidacin el desarrollo humano.

71

Berge (1985) manifiesta que la danza permite llegar progresivamente a


una autonoma de comportamiento en el espacio y a un libre dominio de los
movimientos.

Segn Arteaga (1997) La organizacin espacial permite al nio


distribuir el espacio partiendo de la orientacin y estructuracin
espacial; se basa en la vivencia motriz y perspectiva inmediata que el
nio posee del espacio en su edad inicial (0 a 7 aos) y en su capacidad
de analizar estos datos perceptivos inmediatos con profundidad,
elaborando relaciones espaciales de mayor complejidad (7 aos en
adelante). (p. 212)

La danza en la infancia:

En la infancia el uso de la danza permite conocer, explorar y descubrir el


cuerpo, obteniendo mayor capacidad de auto motivacin y concentracin
gracias al entrenamiento de la conciencia corporal y la relajacin.

Caicedo, Silva y Villada (2000) utilizaron la danza como


elemento de promocin del desarrollo motor en nios desde 5 hasta 9
aos y analizaron las adaptaciones que se manifiestan en ellos despus
de participar en un programa de danza, determinando las modificaciones

72

relacionadas con la motricidad fina, gruesa y mixta, llegando a la


conclusin de que la practica continua y sistemtica de la danza
incrementa y/o potencializa las cualidades del movimiento, la
conciencia del peso y del cuerpo que conllevan a un mejor control del
equilibrio, la alineacin postural, la fluidez del movimiento, el
vocabulario

cintico

la

independencia

segmentaria,

pilares

fundamentales para el desarrollo de conductas motoras gruesas mas


eficaces. (Prieto, 2005 p. 213)

En este estudio se estableci tambin que la danza no influye


directamente en la conducta motriz fina del individuo, sin embargo como
potencializa el control tnico del cuerpo la relacin espacio-tiempo puede ser
facilitadota de la estabilidad proximal, permitiendo la ejecucin de tareas que
implican destreza manual de forma ptima.

La danza en la infancia es un agente socializador, pues se


relaciona con el gesto y el movimiento como forma de expresin no
verbal; adems se da a conocer y a respetar el propio cuerpo como
alternativa de contacto con los otros, aumentando la autoestima por
medio de la auto imagen y la auto eficacia, fomentando el trabajo en
equipo, la capacidad de liderazgo y la bsqueda de alternativas frente a
la solucin de conflictos. (Prieto, 2005, p.213)

73

La danza en la adolescencia:

De acuerdo con Aberasturi y Knobel (1995) solo cuando el


adolescente es capaz de aceptar simultneamente sus aspectos de nio y
de adulto, puede empezar a aceptar de forma fluctuante los cambios de
su cuerpo y comienza a surgir una nueva identidad. (Prieto, 2005, p.214)

El trabajo con la danza tendra gran importancia no solo en trminos de


mejora de la condicin fsica, sino tambin de refinamiento motor, pues en la
medida que se adquiere la madurez en las habilidades fundamentales, se va
alcanzando en el proceso un movimiento preciso, controlado y lo mas eficaz
posible desde la variacin personal. Prieto (2005)

La danza en la edad adulta

En el trabajo con adultos jvenes la danza busca redescubrir y


retomar el cuerpo como unidad vital integrando lo fsico y lo psquico,
desbloquear capacidades creativas, reconectarse con el propio cuerpo,
ejercer un dominio expresivo del movimiento y reafirmar conceptos
espaciales

temporales.

Cuerpo-espacio-tiempo

son

elementos

fundamentales en esta etapa en la que la vida esta constituida por


aspiraciones mas o menos organizadas, aunque cambiantes, y en donde
es posible hablar de una historia de vida corporal en la que el individuo

74

considera al cuerpo con sus potencialidades y desgastes, bienestares y


malestares en sus espacios cotidianos, reafirmando as su identidad
como ser-cuerpo desde el movimiento. (Prieto, 2005, p.215)

Al perseguir la exploracin del cuerpo, para concienciar al adulto sobre


la posibilidad del movimiento que es posible desarrollar, se puede obtener la
economa del mismo, posibilitando una mejor relacin del individuo con su
contexto, dotndolo de mayor capacidad fsica para enfrentarlo y ayudndole en
la liberacin de tensiones.

En los adultos mayores el trabajo desde la danza se encamina a


rememorar su experiencia de vida desde lo corporal y reinventar las
posibilidades de movimiento, partiendo de la toma de conciencia de los
recursos motores, cognitivos y de relacin que poseen. La danza
entonces permitir el mantenimiento del flujo sensorio motriz para
evitar el aislamiento y la desconexin con el mundo, conocer y
experimentar las posibilidades y limitaciones actuales, tomar conciencia
del esquema corporal, espacial y temporal si es que se han visto
afectados,-facilitar las actividades de la vida diaria gracias al
mantenimiento de las aptitudes fsicas y motoras, favoreciendo la
comunicacin y dando importancia a la capacidad representativa y
simblica del movimiento. (Prieto, 2005, p.215)

75

La danza puede ser adaptada como herramienta de integracin


con finalidad: mejorar la calidad de vida de las personas en situacin de
desventaja fsica, psquica o sensorial, tanto para formar hbitos de
higiene fsica, aumentar relaciones sociales o mejorar su autoestima.
(Prieto. 2005, p.216)

3.3.1 La expresin autntica y el cuerpo

Actualmente se detecta aumento de propuestas teraputicas que apuntan


a tratamientos relacionados con el trabajo corporal, la expresin corporal, el
yoga y la danza, principalmente. Son propuestas que tienen relacin con la alta
demanda por presencia de trastornos psicosomticos en personas, que como lo
dice el trmino, comprometen en conjunto la psiquis y el cuerpo.

La consideracin del cuerpo en tratamientos de adiccin, impulsa a


reflexionar sobre la utilidad del espacio de taller de danza basado en un trabajo
de expresin corporal, para mejorar las relaciones que se den dentro de ste.

Los trabajos que tratan acerca de la expresin y la comunicacin


consideran casi siempre de modo implcito que solo existe el lenguaje
verbal y que toda comunicacin se realiza por intermedio de la palabra.
Por el contrario, pensamos que la relacin con los dems se realiza, en

76

un comienzo, por intermedio del cuerpo: Por medio del cuerpo es que
estamos presentes ante los dems y, con l, ante el mundo. (Le Boulch.
1992, p. 79)

Por lo tanto el cuerpo es el principal medio para conectarse y vincularse


con los dems, pues con l demostramos muchas veces ms que con las
palabras.

Esto significa que consciente o inconscientemente siempre estamos


comunicando, demostrando a los dems parte de nuestro mundo afectivo.

La necesidad de expresarse, de contarse a los dems, es una


de las mas importantes del ser humano. Su frustracin es fuente de
malestar, de angustia, de neurosis y aun puede conducir a las ms graves
perturbaciones de la conducta. (Le Boulch. 1992, p. 84)

Esto muestra la necesidad del ser humano de expresarse y tener a un


otro con quien hacerlo adems de apoyarse permitiendo vas de expresin
saludable, por lo tanto autenticas.

La expresin es comunicacin, y muchas veces las conductas no


verbales nos delatan antes que lo emitido verbalmente. Un gesto o una mirada

77

pueden expresar o comunicar lo que realmente nos pasa, en ocasiones


contradiciendo nuestras palabras.

78

IV. MARCO METODOLOGICO

4.1

Justificacin del Enfoque Metodolgico

La presente Investigacin corresponde a un estudio Cualitativo con


datos descriptivos sobre la conducta observable y las palabras de las personas
observadas. Incluir informacin que la experiencia y relatos de las mujeres
drogodependientes y los profesionales del equipo teraputico de Carpe Diem,
entreguen.

La metodologa cualitativa describe cualidades de un fenmeno,


descubriendo tantas como sea posible.

La investigacin cualitativas trata de obtener un entendimiento lo ms


profundo posible. Taylor (1994). Posee una perspectiva integrativa,

que

considera el fenmeno como un todo. Estudia a las personas en el contexto de


su pasado y en las situaciones actuales. No se restringe a la observacin y
consideracin de un objeto en particular, sino que considera a las personas y el
campo del que forman parte, son considerados de forma holistica.
Conocer

la

situacin

de

contacto

que

manifiesten

las

mujeres

drogodependientes de la comunidad teraputica en el taller de danza, permitir


considerar

los fenmenos, sensaciones o cambios que experimenten en el

79

transcurso de la experiencia del taller, e informacin que aporten terapeutas y


profesionales del equipo que acompaen diariamente a las mujeres.

Los mtodos cualitativos permiten permanecer prximos al mundo


emprico (Blumer, 1969). Estn destinados a asegurar un estrecho ajuste entre
los datos y lo que la gente realmente dice y hace. (Taylor y Bogdan, p.21-22)
Fundamental ser acceder a las experiencias, emociones, vivencias y visiones,
de las mujeres drogodependientes de la Comunidad, tras haber experimentado
en el taller.

4.2 Tipo de Investigacin


Se realiz una investigacin Exploratoria descriptiva. Ya que el
problema a investigar que tiene relacin con la mujer drogodependiente,
contacto y danza, a sido poco abordado anteriormente.
Los estudios exploratorios se efectan, normalmente, cuando el objetivo es
examinar un tema o problema poco estudiado o que no ha sido abordado antes.
Es decir, cuando la revisin de la literatura revel que nicamente hay guas no
investigadas e ideas vagamente relacionadas con el problema de estudio.
(Hernndez 2000.p, 58).

Los estudios Descriptivos buscan evidenciar cmo es y cmo se


manifiesta determinado fenmeno. Pretenden

especificar

propiedades

importantes de personas, grupos, comunidades o cualquier otro fenmeno que

80

sea sometido a anlisis (Dankhe, 1986). Miden o evalan diversos aspectos,


dimensiones o componentes del fenmeno a investigar.

Miden de manera independiente los conceptos o variables a los que se


refieren. Aunque desde luego, pueden integrar las mediciones de cada una de
dichas variables para decir cmo es y cmo se manifiesta el fenmeno de
inters, su objetivo no es indicar como se relacionan las variables medidas.
(Hernndez, 2000.p, 60,61)

Los estudios descriptivos se caracterizan por un mnimo de


interpretacin y conceptualizacin. Estn redactados de modo tal que permiten
a los lectores sus propias conclusiones y generalizaciones a partir de los datos.
(Taylor y Bogdan, 1999, p. 153)

4.3 Diseo

De acuerdo a la metodologa la clasificacin que se utiliz para el


diseo de la investigacin, es una investigacin no experimental transeccional y
descriptiva, dadas las caractersticas que la investigacin muestra.

El tipo de diseo de esta investigacin es no experimental, ya que no


existe manipulacin alguna por parte del investigador, sobre el fenmeno a
describir. sta investigacin es la que se realiza sin manipular

81

deliberadamente variables. Es decir se trata de investigacin donde no hacemos


variar intencionalmente las variables independientes. Lo que hacemos en la
investigacin no experimental es observar fenmenos tal y como se dan en su
contexto natural, para despus analizarlos. Como seala Kerlinger (1979, p.
116): La investigacin no experimental o ex post-facto es cualquier
investigacin en la que resulta imposible manipular variables o asignar
aleatoriamente a los sujetos o las condiciones.

Las mujeres drogodependientes que asisten al taller de danza, no se


encuentraron manipuladas bajo ninguna circunstancia. Ya que ellas presentan la
condicin de drogodependencia, y el taller de danza es una actividad mas entre
las planificadas en el programa de rehabilitacin de la Comunidad Teraputica.

Los diseos de investigacin

transeccional o trasversal recolectan

datos en un solo momento, en un tiempo nico. Su propsito es describir


variables, y analizar su incidencia e interrelacin en un momento dado.
(Hernandez, 2000 p.186)
Esto tiene sentido con el momento programado para la recoleccin de datos
post taller de danza, cuando ya no sea posible manipulacin alguna sobre los
sujetos, en este caso, las mujeres drogodependientes.

Los diseos transeccionales descriptivos tienen como objetivo


indagar la incidencia y los valores en que se manifiesta una o ms

82

variables. El procedimiento consiste en medir un grupo de personas u


objetos una o, generalmente, ms variables y proporcionar su
descripcin. Son, por lo tanto, estudios puramente descriptivos y cuando
establecen hiptesis, stas son tambin descriptivas. (Hernndez, 2000,
p. 187)

4.4 Delimitacin del Campo de estudio

4.4.1 Universo

Es la Comunidad Teraputica Carpe Diem ubicada en la Comuna de


Providencia, en la Ciudad de Santiago de Chile.
El universo lo componen tanto las mujeres drogodependientes observadas,
como los relatos de los profesionales y tcnicos especialistas en rehabilitacin
que trabajen para sta institucin. Pues todos estos actores dieron cuenta de la
informacin a analizada.

4.4.2

Muestra

La poblacin objetivo compuesta por las mujeres drogodependientes,


parte importante de la muestra de esta investigacin, est compuesta por las
siguientes caractersticas:

83

N de personas: 7. Totalidad de mujeres drogodependientes que residen


en la Comunidad Teraputica Carpe Diem.

Sexo: Mujer

Rango Etario: 20 60 aos aprox.

Nivel Socioeconmico: Estrato social Medio

Trastornos Psicolgicos o psiquitricos: Asociados al consumo, tales


como trastorno estado de nimo, por ejemplo; trastornos de ansiedad,
trastorno bipolar y trastornos depresivos. Trastornos del estado del
nimo inducido por sustancias.

Lugar de tratamiento: Comunidad Teraputica Carpe Diem Mujeres.

Consumo de Sustancia psicoactiva: Cocana, pasta base de cocana,


cannabis, tranquilizantes (anfetaminas y benzodiazepinas) y alcohol.

La otra parte importante de la muestra de esta investigacin la compone


el Equipo tcnico de la Comunidad Terapeutica Carpe Diem, el cual presenta
las siguientes caractersticas:

Aos de servicio en la Comunidad mencionada: Un mnimo de tres


aos.

Especializacin tcnica o profesin: Psiclogo (a)

Prestacin de servicios o cargos en la comunidad: Director de la


institucin y jefa tcnica de la misma.

84

Enfoque

psicoterapeutico

que

emplean:

Cognitivo-Conductual,

Humanista y Terapia Gestaltica.

Informacin acerca del taller de danza, donde se observa el contacto


de las mujeres drogodependientes:
El grupo de mujeres drogodependientes que interes observar en esta
investigacin reside en la Comunidad Teraputica.
La Comunidad Teraputica acoge y patrocina el taller de danza
observado.
El taller de danza efectuado, ste present caractersticas de latin-jazz,
pop, salsa y merengue, para nivel principiante, donde el punto en comn, fue
fomentar el nivel coreogrfico-interpretativo de las mujeres drogodependientes.
Se prefiri aplicar este estilo de danza, puesto que rene la metodologa bsica
para formar a sus integrantes. Su metodologa consiste en comenzar con una
breve instancia de danza estilo libre como introduccin, donde las mujeres
podan moverse a ritmo propio. Comnmente en esta fase, las integrantes
tomaban mayor contacto fsico con sus compaeras, pues solan ser ms ldicas
al bailar merengue, por ejemplo. Posteriormente se precalentaba para movilizar
y elongar el cuerpo. Finalmente se ensayaba una coreografa grupal de
cualquiera de los estilos antes mencionados.

85

Por otro lado el taller fue ejecutado en la comunidad teraputica Carpe


Diem, durante los meses; mayo, junio y julio del ao 2008. El primer mes de
puesta en marcha, se opt realizar una induccin a la danza, para que las
integrantes del taller pudiesen adaptarse adecuadamente a la exigencia
solicitada.

Adems en ste periodo se gener una vinculacin ms cercana entre la


profesora del taller y las mujeres drogodependientes. Aspecto fundamental
dentro de cualquier espacio teraputico que se realice en la comunidad.

Por lo tanto, el periodo de taller de danza con objeto de esta


investigacin, ocurri entre los meses junio y julio respectivamente.

Breve resea de la Comunidad Terapeutica Carpe Diem:

Carpe Diem Comunidad Teraputica, surge como una iniciativa y


conjuncin de importantes experiencias profesionales en el rea de las
adicciones; especialmente alcohol y drogas.
Su finalidad es prevenir y rehabilitar integralmente a las personas
dependientes de las drogas, favoreciendo su reinsercin Espiritual, Familiar,
Laboral y Social.

86

A ella se incorporan personas de distintos mbitos de las Ciencias


Sociales:

Psiclogos,

Asistentes

Sociales,

Terapeutas

Ocupacionales,

Antroplogos, Profesores, Telogos, Tcnicos en Rehabilitacin y otros.


Ofrece un programa de Tratamiento y Rehabilitacin en sistema
residencial, para jvenes que presenten abuso o dependencia de drogas y/o
alcohol y desean iniciar un proceso de cambio que los lleve a mantenerse en
abstinencia

adquirir

un

nuevo

sistema

de

valores,

actitudes

comportamientos mejorados.
El Centro posee una seccin femenina y otra masculina que funcionan
en locales diferentes. El femenino en calle Pedro Len Gallo 1981 y el
masculino en Avda. Salvador 523.

4.5 Tcnicas e instrumentos de recoleccin de la informacin

La presente investigacin pretendi describir cmo se expresa el


Contacto de las mujeres drogodependientes en el taller de danza, que reciben el
programa de tratamiento de la comunidad. Las tcnicas e instrumentos de
recoleccin de datos escogidos para esta investigacin, ofrecen la posibilidad
responder los objetivos planteados de acuerdo al marco terico y metodolgico
seleccionado.

Para la recoleccin de los datos en esta investigacin se utilizaron las


siguientes tcnicas cualitativas: Cuestionario y Grupo focal.

87

4.5.1

Cuestionario

Finalizado el taller de danza, se procedi a obtener la informacin que


las mujeres drogodependientes y los integrantes del Equipo tcnico (Psicloga y
Director de la institucin) presentaron de la experiencia en el taller de danza.
La tcnica que se utiliz para estos fines, fue el cuestionario,
confeccionado con preguntas abiertas. Es decir, al momento de aplicarla sobre
los sujetos, stos tuvieron la posibilidad de consultar cuando lo necesitaban, de
que trataba la pregunta exactamente, que era lo que se quera conseguir, con el
fin de evitar confusiones y poca exactitud del instrumento.

Las preguntas que formaron parte del cuestionario se elaboraron en base


de los objetivos especficos.

Fue fundamental el uso de sta tcnica dentro de la presente


investigacin,

pues permiti

indagar y obtener pensamientos, actitudes,

opiniones y/o sentires por parte de los sujetos de estudio, en este caso las
mujeres drogodependientes, y el Equipo tcnico, en relacin a la vivencia que
presentaron dentro del taller de danza.

El cuestionario es un procedimiento de exploracin de ideas y creencias


generales sobre algn aspecto de la realidad. (Rodrguez, 1999; p.185)

88

Para las mujeres drogodependientes (sujetos del estudio) y al Equipo


tcnico, se aplic distinto cuestionario de preguntas abiertas, que apuntaba a
diferentes objetivos. Para las mujeres, ste instrumento se bas en obtener
datos, con respecto a los dos primeros objetivos especficos, relacionados al
Contacto.

En cuanto al Equipo tcnico, el cuestionario aplicado se confeccion en


base del tercer objetivo especfico de la investigacin.

Se prefiri el uso de sta tcnica de recoleccin de datos pues se


acomod al contexto donde se encontraban los sujetos de estudio.
Sucede que en la comunidad teraputica en cuestin, las mujeres
drogodependientes no presentan un tiempo libre prolongado para que la
investigadora se pueda reunir con ellas individualmente, como hubiese sido
ante una entrevista.

Se debe recordar que ellas se encuentran en tratamiento, por lo que cada


da se encuentra calendarizado con dinmicas y horarios definidos.

La Psicloga y el Director, tampoco presentaban tiempo disponible para


la aplicacin de una entrevista.

89

No obstante la tcnica cualitativa del cuestionario, permiti responder


exitosamente ante los objetivos especficos.

En la aplicacin del cuestionario, la investigadora estuvo presente slo


para explicar de que trataba, con que fin se hacia. Hubo un momento de
encuadre, en el cual las mujeres drogodependientes pudieron comprender que
ste instrumento permitira obtener informacin slo con respecto a la tesis.
Siendo de nica utilidad para la investigadora, y que sus opiniones no tendran
repercusin en su tratamiento.

Adems, como consigna, se les sugiri que en sus respuestas fuesen lo


ms honestas y objetivas posibles.

El cuestionario se define como una forma de encuesta


caracterizada por la ausencia del encuestador, por considerar que para
recoger informacin sobre el problema objeto de estudio es suficiente
una interaccin impersonal con el encuestado. As escribir una
preguntas, las acercara a aquellas personas que considera puedan
proporcionarle informacin sobre el problema que est analizando y les
pedir que escriban sus respuestas. (Rodrguez, 1999; p.186)

90

4.5.2 Grupo Focal

Esta fue otra tcnica a utilizar, para la recoleccin de informacin, en


este caso slo para obtener informacin de parte de las mujeres
drogodependientes.

Dentro de la comunidad teraputica, rodeadas ante una mesa, se reuni a


los sujetos de este estudio en grupo donde tuvieran la posibilidad de expresar
distintas opiniones acerca del taller de danza.
Este grupo fue usado para conocer ms acerca de opiniones sobre un
tema designado. Y la tarea del grupo fue permanecer centrado en ello y no
dispersarse en otros asuntos. El grupo present un lder o facilitador, en este
caso la propia investigadora, que tuvo la labor de mantener al grupo en su
curso.

El tema en referencia era; Opiniones, sentires y experiencias frente a los


que les ocurri personalmente en el taller de danza.

Las mujeres drogodependientes (individuos de la investigacin) que


compusieron este grupo, tuvieron aspectos comunes (la drogadiccin, el
tratamiento, experiencia en el taller de danza), y el investigador permiti que se
hablase espontneamente, permitiendo conocer el abanico de opiniones.

91

La razn por la cual se opt por aplicar sta tcnica de recoleccin de


datos, se encuentra en que el inters se centr en captar una profunda opinin o
matices de opiniones, ms que simplemente el acuerdo o desacuerdo de las
personas. Adems se deseaba hacer preguntas que no podan ser fcilmente
contestadas o bien preguntadas en una encuesta.

Por ltimo el grupo focal se aplic inmediatamente despus del


cuestionario de preguntas abiertas a las mujeres drogodependientes. Con el fin
de complementar el conocimiento que se puede encontrar en encuestas de papel
y lpiz, en este caso el cuestionario.

Los grupos focales son un modo de escuchar a la gente y aprender de


ellas. Las preguntas logradas mediante la estrategia de grupo focal tiene como
propsito registrar cmo los participantes elaboran grupalmente su realidad y
experiencia (Morgan, 1998), por lo que esta tcnica de grupo focal ser
utilizada en sta investigacin para la deteccin de pensamientos, opiniones y
experiencias de lo que a las mujeres drogodependientes les ocurri dentro del
taller de danza.

Adems el uso del grupo focal en las mujeres drogodependientes de este


estudio, permite en cierta medida generar apoyo como grupo, puesto que ellas
pueden verse interpretada por otras integrantes del grupo, forjando un
sentimiento de integracin, apoyo y nimo de superacin.

92

Las tcnicas grupales son un buen medio para proporcionar apoyo social,
ya que los psiclogos sociales y los antroplogos reconocen al grupo como
agente teraputico en s mismo. Portillo (2005)

4.6 Plan de Anlisis de la Informacin

Tradicionalmente se han empleado en el tratamiento de los datos


cualitativos textuales

una serie de manipulaciones y operaciones sobre los

datos cualitativos preservando su expresin textual. Este modo de analizar


datos cualitativos no recurre a tcnicas estadsticas, resulta especialmente
caracterstico de las investigaciones de corte cualitativo []
El

anlisis de datos cualitativos

Procedimientos

interpretativos.

(Gil,

programas de investigacin cualitativos y

utilizar
1999),

Erickson

la dominacin
(1989)

para

estrategias de anlisis de datos

cualitativos enmarcados en una determinada forma de entender la realidad y la


construccin del conocimiento. (Gil, 1999)

El anlisis cualitativo busca conocer el significado inmerso en la trama


tejida del discurso de los entrevistados. Situarse desde el punto de mirada del
otro, para trabajar de manera inductiva a partir de los datos recogidos. Partir de
lo particular, sumando varios particulares, para ir a un nivel mayor de
inteligibilidad. Echeverra (2005)

93

Se utilizaron procedimientos de verificacin de presencia o ausencia de


indicadores propuestos en los objetivos especficos. En cuestionarios y grupo
focal , el anlisis cualitativo por categoras propuesto por Genoveva Echeverra
para rescatar temticas, ideas y sentires presentes en las narrativas recogidas.
Se construyeron categoras y tpicos caractersticos de este tipo de anlisis.

El

anlisis se utiliza para analizar informacin

de dispositivos de

produccin de informacin en diferentes niveles de estructuracin,

sin

constituir instrumentos estructurados (Echeverra, 2005).

El anlisis cualitativo por categoras

fue a priori

con categoras

predefinidas.

[] suele tomarse como gua los objetivos especficos, submetas que


marcan ya una focalizacin del objetivo general. (Echeverra, 2005)

Las categoras fueron definidas segn referentes tericos que sostienen


los conceptos de contacto y danza . La lnea de investigacin es Contacto y
Taller de danza en relacin a las reas de intervencin propuestas por la
comunidad teraputica (3 objetivo especfico).

94

Las categoras predefinidas respecto al concepto terico de contacto,


son: Funcin de contacto y Lmite de contacto.

Las categoras predefinidas con respecto al tercer objetivo son: rea


psicosocial, rea ocupacional y rea deporte-recreativo.

Son consideradas categoras,


cuenta del problema a investigar, tal

agrupaciones conceptuales que


como

dan

se lo define y acota en la

investigacin. Categoras compuestas por tpicos , a su vez compuestos por


unidades del texto (frases o citas) (Echeverra, 2005)

Estas categoras fueron operacionalizadas para el anlisis.

El primer paso: Plantear sistema de categoras o elementos de anlisis .


Para Martnez (1998, p.75),

una

categora descriptiva es clasificar,

conceptuar o codificar mediante un trmino o expresin que sea claro e


inequvoco el contenido o idea central de cada unidad temtica.

Los

objetivos especficos configuran

el primer mapa de unidades

significativas para analizar resultados.

95

Complementariamente, se definieron

tpicos que son agrupaciones de citas

con temtica comn.En la categora Lmites de contacto son: Regulacin del


lmite y Darse cuenta.

Tpicos de la categora Funcin de contacto : mirar, escuchar, tocar, oler,


gustar, moverse y conversar. De la categora rea Psicosocial: Aspectos
psicolgicos individuales y Entorno social-familiar. Tpicos de las categoras
rea ocupacional y rea deportivo recreativo, se mantienen.
Los Tpicos tienen un sentido o idea en comn, de

globalidad y

abstraccin menor que las categoras (Echeverra, 2005).

96

Cuadro de Anlisis por Categora

TEMA

CATEGORIA
Lmites de Contacto

TOPICO
Regulacin del Lmite
Darse Cuenta
Mirar
Escuchar
Sensorial

Contacto

Tocar

Funciones

Oler
Gustar
Conversar
Motoras
Moverse

Taller de Danza en
relacin a las reas

Aspectos psicolgicos
rea Psicosocial

de intervencin que

Individuales
Entorno social familiar

plantea el programa

rea Ocupacional

Actividades ocupacionales

de tratamiento de la

rea Deportivo-

Actividades de planificacin

comunidad teraputica

recreativo

y ejecucin acerca del uso

Carpe Diem

del tiempo libre

Lmites de contacto: Comportamientos en drogodependientes distintos


de otros organismos:
-Seleccin de elementos nutritivos del ambiente.
-Adaptacin a nuevas situaciones.
-Registro de la experiencia por Regulacin del lmite y el Darse cuenta.

97

Funciones de contacto: Se investigaron

formas de acercarse y vincularse

con el ambiente a travs del aparato sensorial y motor y cules son las ms
utilizadas en dicha relacin.

rea psicosocial: Se indagaron hallazgos que reporta la experiencia del taller


de danza en relacin con aspectos psicolgicos individuales y entorno social
familiar .

rea ocupacional: Se averiguaron conocimientos del equipo tcnico


las drogodependientes sobre
ocupacionales

y de

el taller de danza en relacin a las actividades

como parte del tratamiento.

rea Deporte-recreativo: Se indag sobre conocimientos del Equipo tcnico


y las mujeres drogodependientes en cuanto a observaciones, percepciones,
sentires en relacin del taller de danza, sobre planificacin y empleo del tiempo
libre que drogodependientes deben poner en prctica.

98

V- ANALISIS Y RESULTADOS

El anlisis cualitativo se ha realizado por categoras a priori que rene


y nomina la informacin obtenida, clasificndola segn objetivos especficos
de la investigacin.

En la primera parte del anlisis la descripcin detallada e integrada fue


extrada principalmente por medio de cuestionario de preguntas abiertas y
grupo focal, apoyados por citas textuales de las participantes.

El anlisis cualitativo fue aplicado al material proporcionado por


tcnicas mencionadas de recoleccin de datos.

1. LMITES DEL CONTACTO

En

relacin al darse cuenta de las mujeres drogodependientes,

comentaron el descubrimiento de poder danzar, moverse armnicamente al


ritmo de la msica y disfrutar con la magia de ste arte.

Se dieron cuenta que comenzaron a adquirir mayor nivel de control


corporal y del espacio, disfrutando la complicidad con las compaeras y la
msica del ambiente que les gener alegra.

99

Rescatan, en el ejercicio de la danza, sensacin de libertad sana, haciendo


una comparacin con los efectos de la droga, que en tiempos de consumo las
haca volar, pues este

estimulante qumico

generaba la simulacin de la

sensacin de libertad.

Descubr que a travs del baile me siento libre, puedo volar sin
necesidad de drogas,

tengo el control de mi cuerpo y el espacio.

Descubr alegra y complicidad con la msica. (Violeta)

Muchas de ellas descubrieron sensaciones que les produjo la danza


respecto a las otras personas del taller. Refieren el valor de la compaa en
la danza.

Descubr que puedo danzar, con mis compaeras. Lo disfrut mucho


y quiero que vuelva el taller. (Eliana)

Revelaron que la msica la pueden expresar e interpretar con el cuerpo


de manera personal, que fue gratificante para ellas, propagando satisfaccin,
energa y alegra entre ellas.
Ante la experiencia de danza, algunas comentan que ya exista cierta
preferencia por la msica y el baile, vindose esto como un recuerdo, parte de
los auto descubrimientos que gener este espacio.

100

Me pone con energa y alegra, me encanta la msica y bailar,


sentirla y expresarla con el cuerpo es genial.

(Pamela)

Descubrieron que se concentraban en vivencias personales pasadas,


conectndose con recuerdos gratos relacionados con seres queridos.
Describen que con la danza pudieron conectarse con ellas mismas, de manera
ntima, vivencias de emociones personales utilizando imaginacin, recuerdos y
fantasas, estado que les produca satisfaccin.

Hay un reconocimiento de la danza como un arte, como lo que produce


el canto, otra disciplina artstica. La consideran arte, instancia de disfrute
personal y social con significado particular, que las hace contactar.

cuando yo lo hago cierro los ojos y me conecto, igual que lo hace


una persona que canta, que cierra los ojos y se concentra en lo que est
cantando, eso me pasa a mi con el baile. (Patricia)

Otras consideraron que el ejercicio de la danza constitua distraccin


sana en la cotidianidad de la comunidad.
Refieren que se descontextualizaban o alejaban mentalmente, de manera
agradable, de las problemticas.

101

A mi me gust harto. Si me gustaba, una porque me sacabai del


contexto de estar aqu encerrada, no no encerrada, si ni aqu en el
tratamiento, nos sacabai a otro lado y se nos olvidaba que estbamos
aqu, estbamos bailando, escuchando msica. (Pamela)

Algunas que muchas veces ingresaban con un estado de nimo bajo o/y
con dolencias fsicas. Finalizando generalmente con energa y nimo para
abordar de mejor manera el da que les esperaba.

A mi me ayud bastante, porque yo cuando entraba de repente con


esos dolores, estaba as como achacosa, el baile me suba, me daba
energa. (Patricia)

A pesar de que dola la espalda y todo, pero igual le pona empeo


(Pamela)

Ah y llegaban con otra disposicin aqu, llegaban corriendo tocando


el timbre. No como haban salido. (Silvia)

La mayora sintetiza que la danza fue un agente liberador, instancia


donde pudieron liberar energas y algunas emociones. Esto aport a la
distensin y relajo de su cuerpo y del estado de nimo que pudieran tener en ese
momento.

102

Alegre, liberar energas a travs del baile es genial, buena


experiencia (Violeta)

Bonita, interesante aportaba a la alegra y a relajarse mucho,


estupenda (Patricia)

Energa por el baile y la msica (Pamela)

En la regulacin del lmite de contacto presentado por las mujeres


drogodependientes integrantes del taller, se describe tras revisin del
cuestionario y grupo focal, que la mayora expresa la importancia que tuvo
sentirse acompaadas por sus compaeras de taller. Refieren que al trabajar en
conjunto en danza, pudieron experimentar apoyo y nimo de sus compaeras,
apoyadas en cada cosa que hacan dentro del taller. Dado que la danza
compromete cierta complejidad, manifiestan la importancia del apoyo de cada
compaera que gener confianza en s mismas. Una subraya la palabra
confianza, expresando que signific conectarse, sentirse apoyada y parte de
un grupo.

Bien, con mis compaeras y yo lograba incentivarme, cosa que me


cuesta mucho (Eliana)

103

[...] con los dems tambin me sent bien porque haba disposicin
(Violeta)

Estar bailando con las dems me daba confianza (Violeta)

Si, y con los dems integrada (Eliana)

La exigencia del taller fue entendida y ejecutada en el momento


solicitado por la mayora, opinaron que repetir paso por paso, continuamente,
fue fundamental para el aprendizaje sobre la tcnica de la danza.

Si bien no

fue lo ms grato de la clase, comprenden que era un ejercicio con beneficios de


mediano-largo plazo, y que en definitiva este esfuerzo contribua a su auto
superacin.

[] trabajar la sensualidad me costaba pero cuando me salan los


pasos me senta contenta (Violeta)

[...] a mi me encantan los pasos tcnicos, que se me hacia difcil


hacerlo, pona el mximo de empeo posible (Violeta)

Que no lo estaba haciendo bien y que lo tena que hacer mejor


(Pamela)

104

Alcanzar a que saliera perfecto. (Eliana)

Que estaba bien. Repet para hacerlo bien. (Anglica)

Segn sus comentarios, se dio muy buen humor en esos instantes.

Igual si lo tenamos que repetir, lo hacamos de una por una, y no


faltaba la talla, no faltaba la risa, entonces (Pamela)

Algunas no realizaron los pasos difciles o que pudiesen representar, a


juicio propio, un costo a su salud. Decisin propia, que generaba en algunas la
expresin verbal del disgusto que acompaaba la accin.

No me gust, porque senta dolor de espalda y piernas. (Patricia)

[] no bailaba solo miraba pero vi que no les molestaba. (Silvia)

Ante la posibilidad de aceptar alguna sugerencia o rechazarla porque


podra o no tener sentido para alguna de ellas, la repeticin de algn paso
difcil, la mayora seal

que aceptaron ser corregidas porque era parte

fundamental para el aprendizaje. La minora relata haber repetido por inercia,


por deber o negarse completamente. Aun expresando que no fue lo ms grato

105

de la clase, comprenden que tena beneficios de mediano-largo plazo

contribua a su auto superacin.

En la mayora de las mujeres drogodependientes se present adecuada


permeabilidad en el lmite del contacto,

expresaron lo que sintieron,

respetndose, dndose cuenta de ste sentir. Entendieron que lo que se les


indicaba o sugera fue necesario, permitiendo intercambio con el ambiente,
aceptando sugerencias, lo que indica adecuada accesibilidad en su conducta.

Las mujeres drogodependientes de este estudio sealan con asombro el


descubrimiento (Darse cuenta) que tuvieron al danzar, manifestando especial
preferencia por la sensualidad explorada.

Se dieron cuenta del mayor control corporal, sintiendo satisfaccin pues


les generaba sensacin de libertad y reactivaba las herramientas para moverse
como sea. Algunas descubrieron su capacidad de volarse, describiendo esto
como dejarse llevar por el momento. Dan cuenta de la diferencia entre volar
con droga, y volar por medio de la danza.
Compaeras, msica y ambiente activaron estados placenteros.

Advirtieron que en este espacio no estaban solas, descubriendo agrado


por sentir la presencia de sus compaeras. Sentan complicidad, compaa y
apoyo, caractersticas que en algunas se traducan en confianza personal.

106

Descubrieron que pueden sentir la msica y expresarla con el cuerpo,


dando cuenta lo gratificante que esto significaba, propagando la alegra entre
ellas.

Alguna sintieron que la msica, los movimientos y todo lo que implica


la danza, las trasladaba hacia estados de alegra causados por recuerdos
hermosos, sus propias emociones, descubriendo parte del mundo interior que
posean en ese minuto.

Otras,

acusan vivencia de desconexin de la problemtica diaria.

Simbolizan al taller como espacio de distraccin sana de los problemas que


sufren por su condicin de adictas. Ellas se conectaban finalmente con la
msica, la danza, sus pensamientos o emociones, produciendo alejamiento de
lo cotidiano, denominado por ellas mismas desconexin agradable

Refieren que ingresaban con un estado de animo bajo, inclusive


dolencias fsicas y regresaban a las otras actividades de la comunidad con
distinta disposicin, ms alegres y energticas.

La mayora se sinti libre pues en la danza liberaban energas, algo


constructivo pues contribua a su distensin y relajo corporal.

107

2. FUNCIONES DEL CONTACTO

Funciones Sensoriales

Mirar

Algunas entrevistadas sealan que cuando danzaban, establecieron


contacto visual, mirando a su alrededor, pues necesitaban focalizar y reconocer
el lugar donde se movan. Acentuando el valor que tiene saber donde se est, en
que lugar las personas se encuentran.

Si, es importante visualizar el lugar donde te mueves (Violeta)

Pareca verlas relajadas (Silvia)

Pero la mayora refiri que no miraban con detencin algn objeto en


el taller de danza. No dan cuenta del uso prolongado la vista como tal, el uso
de la concentracin de la atencin en su estado interior las sorprenda de grata
manera, conectndose con sensaciones personales.

Se observa que la mayora cre una metfora de lo que simboliza


mirar, conceptualizando y usando ste verbo ms bien como enfocar.

108

No, a veces, mas bien no, porque me gusta sentir dentro de m el baile
hago desde muy pequea. (Patricia)

No, solo me enfocaba en la msica y yo (Eliana)

Miraba mi cuerpo en paz (Eliana)

Tocar

Las mujeres sealan que pudieron establecer contacto fsico

mientras

danzaban. Unas refieren que tocaban a su compaera para sentir su energa y


transmitirla al danzar. Tocar signific contactar, considerar y/o evocar a un
otro, ya sea tocando a una compaera o recordando un ser querido
(conectandose con sus recuerdos) .

Si, sentir energa de otra persona y transmitirla recprocamente


(Violeta)
!S! Pensaba en mi esposo o en mi hija y me alegraba (Patricia)

Otras tocaban con el fin de bailar con su compaera.

S, contacto bailar con mi compaera (Eliana)

109

Si, mientras bailbamos y con el fin de bailar (Pamela)

En estos casos,

el tocar signific contactarse de manera fsica,

estimulando la proxmica y sensibilidad, obteniendo sensaciones agradables.

El fin y las sensaciones generadas fueron distintos respecto a otras


funciones.

Escuchar

La mayora manifiesta que al escuchar experimentaron sensaciones


placenteras, como la alegra, sensacin estimulante para el alma que venca
cualquier otro obstculo.
la msica de porsi te alegra, te alegra el alma y por mucho que uno de
repente no cachara ni una con los pasos que tu mostrabas()
(Anglica)

Otras comentan que les cautiv escuchar msica y rescatan sensaciones


que les produca. Explican el gusto de escuchar msica, sentirla y expresarla
con el cuerpo, recalcando que interpretarla con el cuerpo fue placentero para
ellas.

110

A mi me encanta escuchar la msica, y sentirla o sea expresarla con


el cuerpo, escucharla y expresarla con el cuerpo es genial!, entonces a
mi me gusta, aparte que a mi me encanta esa cuestin. (Pamela).

En cuanto al resto de las funciones sensoriales de contacto, Oler y


Gustar, no se hallaron registros escritos.

Cada utilizacin de funciones sensoriales se origin en motivaciones


que presentaron las mujeres drogodependientes, apoyadas por la msica, las
coreografas, ejercicios, danza, etc.

Ejemplo: Mirar para ver donde estoy, escuchar para sentir la msica, etc.

2.2. Funciones Motoras

Conversar

Refieren que usaron la voz, mediante la palabra en el taller, pero no se


registran comentarios acerca del uso de conversaciones. Verbalizaban

de

manera escueta, sencilla , manifestando lo que sentan.

Usaron su voz como medio de contacto con sus compaeras o


profesora, utilizando la funcin emotiva del lenguaje (Buhler, 2001).

111

Ocuparon

tonos y cadencias adecuadas al sentimiento predominante,

enfatizando la ilocucin en sus actos de habla.

Si, me quejaba mucho cuando no me salan los pasos, deca No


puedo!, en un tono brusco (Violeta)

Con comentarios, risas, el tono era agradable. Las palabras no las


recuerdo (Pamela)

Si, para alertar a alguien que estaba equivocada, en un buen tono


(Silvia)

Moverse

La mayora

expresa haberse movido con buen ritmo y sensualmente,

explorando su feminidad de manera sorprendente. Los movimientos en danza,


generaron sensaciones agradables, descubrir que pueden movilizar varias partes
de su cuerpo coordinadamente, creando un todo coreogrfico.

Denotan regocijo ante el descubrimiento del propio movimiento


corporal y el control que adquieren de ste. Describen la sensacin que
el moverse genera libertad y xtasis, interpretado como alejamiento
sano de la realidad sombra.

112

Mover el cuerpo y controlarlo, les significo libertad.

Alcanc a ser sensual y moverme con ritmo. Alcanc a agarrar ritmo


(Eliana)

Sensuales, me ocurri risa (Pamela)


De cadera, sensual. Sent felicidad ya que el baile siempre lo he
llevado muy dentro de mi (Patricia)

xtasis, capacidad de controlar tu cuerpo y moverlo como sea


(Violeta)

Libertad y que poda mover mi cuerpo todava (Eliana)

Otras comentan el avance que adquirieron en el taller. Refieren a que


en el pasado, y debido a la edad, era poco el movimiento que realizaban.

Yo una mujer de 45, 44 aos tena entonces fjate que no mova ni un


dedo nadaParaba una pata y olvdateah me enterraban. Y ac
aprenda a moverme y ahora igual po, jugamos en el gimnasio y no po,
si puedo moverme. (Eliana)

113

Las funciones de contacto sensoriales es decir a los procesos sensoriomotrices que cada persona u organismo presenta, para contactarse con su
entorno, vivenciarlo y experienciarlo, se obtiene que las mujeres emplearon en
mayor cantidad el tocar, escuchar, hablar y sobretodo moverse.

Es importante subrayar que las experiencias de las mujeres estn


basadas en haber tocado a un otro, no a s mismas.

Expresan tambin haber escuchado con mayor inters la msica, que las
trasladaba a sensaciones placenteras, llenndolas de energa estimulante.
Refieren que esta funcin de contacto las predispona a expresar la msica con
el cuerpo, danzando

ya que la sentan en sus cuerpos, con

gusto por

interpretarla.

3.

Taller de danza en relacin a las reas de intervencin que plantea

el programa de tratamiento de la comunidad teraputica carpe diem.

La comunidad Teraputica Carpe Diem considera que el fenmeno de la


droga y las adicciones constituye un fenmeno multicausal, multifactorial y de
variados efectos en el consumidor toxicmano y en sus . Proponen un abordaje
integral , que su praxis teraputica incluya a la persona en tratamiento, familia
y entorno socio afectivo inmediato, incluyendo desde lo metodolgico una
mirada biopsicoespiritual.

114

Se ha contemplado cuatro reas de intervencin: Psicosocial,


Ocupacional, Deportiva- recreativa y Espiritual. Esta ltima no se considera
en

este estudio.

3.1

rea Psicosocial

Integran aspectos psicolgicos individuales, entorno social y familiar


(terapias grupales, terapias individuales y terapias familiares), temticas que se
espera que la mujer drogodependiente, junto con el apoyo profesional del
equipo teraputico, pueda abordar exitosamente.
El

anlisis del cuestionario hecho a miembros del equipo tcnico

(Psicloga que a su vez es Jefa Tcnica, y el Director), y del grupo focal


realizado a las mujeres drogodependientes, se obtienen los siguientes resultados
en cuanto al taller de danza con respecto a las reas de intervencin que plantea
la comunidad.

3.1.1

Aspectos psicolgicos individuales

El Director y la Psicloga - Jefa Tcnica de la institucin, sostuvieron


que la mayora de las mujeres drogodependientes, coment que el taller ayud
a conectarse con su feminidad y delicadeza en los movimientos

115

En algunos casos (la mayora) comentaban que a travs del taller


comenzaron a conectarse con su feminidad y delicadeza en los
movimientos.(Psicloga).

Refieren que observaron cambios en la postura y en gestos en la


conducta que las mujeres diariamente presentaban.

Se observaron cambios en la postura y en los gestos que acompaan la


conducta. (Psicloga)

Para la mayora de las mujeres drogodependientes asumen que el


precalentamiento, mover caderas y hombros, les gustaba mucho. Sirvi para
mejorar la postura y caminar coordinadamente.

La sensualidad explorada por parte de las mujeres, que muchas veces se


olvida, se recuper y revivi ponindola en prctica en el taller. Esta accin
motiv la entretencin entre ellas.

el precalentamiento con el meneo de soltar las caderas y los hombros


me gustaba (Pamela)

Para aprender a caminar mejor (Patricia)

116

Y eso como sensual y femenino que una de repente se le olvida, si en


cambio una camina medio desparram. Entonces eso medio femenino
que le hacamos a los pasos para all para ac, eso era entrete
(Pamela)

El Equipo refiere que se observ que las mujeres se expresaban


relajadamente despus del taller, efecto muy grato para ellas. Algunas les
daban sueo despus del taller.

[] que les contribua en palabras como nos relajamos, me dio sueo,


que rico etc. (Director)

La psicloga comenta que la mayora present un estado anmico


calmado y dispuesto para comenzar mejor el da.

Siempre la actividad fsica y la relacin con el cuerpo predispone a las


usuarias a comenzar mejor el da. (Psicloga)

Algunas llegaban al taller, de manera introvertida, desanimada y lenta,


y regresaban dinmicas y risueas.

117

A mi me ayud bastante, porque yo cuando entraba de repente con


esos dolores, estaba as como achacosa, el baile me suba, me daba
energa. (Patricia)

Ah y llegaban con otra disposicin aqu, llegaban corriendo tocando


el timbre. No como haban salido. (Silvia)

La psicloga observ que las mujeres se relajaron, entretuvieron y


distendieron post taller. ste, segn sus palabras, contribuy a que cada mujer
armonizara consigo misma, a partir de su cuerpo, sintindose mejor respecto de
ste, facilitando la experimentacin de sensaciones placenteras.

Se relajan, entretienen, distienden y tienen una mejor disposicin para


el resto de los espacios teraputicos. (Psicloga)

Adems comienzan a armonizarse consigo mismas y con su cuerpo,


sintindose mejor respecto de ste y por ende se incrementan las
sensaciones placenteras. (Psicloga)

Por su parte las mujeres drogodependientes, en su mayora comentaron


que el taller fue en parte grato, gracias a la relajacin que produca, y a la
sensacin de distensin que experimentaban.

118

Ojala pudisemos tener ms taller, porque es el nico taller que nos


relajaba mucho. (Anglica)

Aunque haya disciplina. Igual uno se relajaba (Pamela)

La psicloga rescata el valor de la expresin corporal, por su aporte en


el desarrollo de la autoestima y las habilidades sociales. Siendo una herramienta
necesaria para el auto conocimiento, la autovaloracin y por ende la
optimizacin de destrezas en el desarrollo como ser social.

Tambin est muy ligado al desarrollo de autoestima y habilidades


sociales (Psicloga)

El director, expresa que el taller fue importante pues posibilit el


acercamiento de cada mujer drogodependiente con su propio cuerpo,
reconocindolo y tomando mayor conciencia de ste y de lo que les pasa como
personas. Segn su opinin el taller es muy necesario.

Importante, necesario, especialmente en cuanto hay mayor contacto


con el cuerpo y as mejor conciencia de los que les pasa, muy
necesario (Director)

119

Algunas refieren haberse desconectado de la realidad, producto de la


danza y la msica, en el sentido de distraccin sana de lo que viven diariamente
dentro de la comunidad, adems de las problemticas atingentes a su adiccin.
Relatan que esta desconexin produjo mucho agrado.

Lo que pasa es que uno se desconecta. Uno se desconecta con la


msica y con el baile te desconectai de todo lo dems. Entonces eso es,
para mi agradable. (Pamela)

A mi me agrado mucho, porque, bueno una porque te saca de lo que es


estar aqu encerrada (Anglica)

3.1.2 Entorno social familiar

El director comenta que las relaciones interpersonales entre las mujeres


drogodependientes, despus del taller, se desenvolvieron de manera ms
calmada, relajada y con mayor disposicin para el resto del da.

Mas calmadas., mas relajadas y obviamente mejor dispuestas


(Director)
La psicloga fundamenta que se debe a que compartir un espacio desde
el cuerpo y la expresin de ste facilita que las personas se relacionen de

120

manera tranquila, siendo secundaria la participacin de la palabra, que en


algunas ocasiones resulta insuficiente o imprecisa al momento de relacionarse.

El compartir un espacio desde el cuerpo y su expresin estrecha lazos,


permite compartir de manera ms cercana y amena, sin tener que
mediarlo por la palabra que en algunos casos es escasa o imprecisa.
(Psicloga)

La mayora de las mujeres drogodependientes expresaron que durante el


taller disfrutaron de danzar y se tomaron con buen humor la repeticin de pasos
y las partes ms estructuradas del taller, como la tcnica.

Prevalecan las ganas de enfocarse para que todo saliera perfecto, y en


definitiva disfrutar de un buen momento.

Igual si lo tenamos que repetir, lo hacamos de una por una, y no


faltaba la talla, no faltaba la risa, entonces (Pamela)

me enfocaba en lo que tena que hacer, en bailar en pasarlo bien.


(Violeta)
Adems el grupo de mujeres, segn propias palabras de una de ellas,
pareca transformarse y transportarse a un estado de alegra.

121

Como yo no bailaba, las miraba de afuera y las vea de repente tal


como dicen ellas, as como transportadas, como transformadas, todas
alegres. (Silvia)

3.2

rea Ocupacional

Propicia el desarrollo de actividades u ocupaciones, organizadas en


rutinas cotidianas que normalizan el funcionamiento ocupacional hacia estilos
de vida ms saludables y libres de consumo de drogas y/o alcohol (actividades
de vida diaria como alimentacin, higiene y vestuario, y Talleres laborales,
como artesana, preparacin de alimentos).

La psicloga expresa que las mujeres drogodependientes del taller,


comenzaron a presentar mayor actividad fsica, reconociendo su propio cuerpo
de manera saludable, favoreciendo una mejor disposicin para el resto del da.

Siempre la actividad fsica y la relacin con el cuerpo predispone a las


usuarias a comenzar mejor el da. (Psicloga)

Tambin expresa que las mujeres drogodependientes se sentan mejor


con su cuerpo y consigo mismas gracias al trabajo fsico, al acercamiento y
vinculacin a este, lo cual genera en las personas un estado de comodidad y
satisfaccin con respecto a si mismas.

122

Adems comienzan a armonizarse consigo mismas y con su cuerpo,


sintindose mejor respecto de ste y por ende se incrementan las
sensaciones placenteras. (Psicloga)

Las mujeres comentan que cada vez que finalizaban el taller de danza,
se sentan con energa y alegra, gracias al movimiento y la danza. Produciendo
en algunas un efecto teraputico pues atenuaba dolores corporales.

la msica de por si te alegra, [] con el movimiento igual quedabai


con energa (Anglica)

A mi me ayud bastante, porque yo cuando entraba de repente con


esos dolores, estaba as como achacosa, el baile me suba, me daba
energa. (Patricia)

3.3

rea Deportivo Recreativo

El equipo teraputico afirman que el taller de danza contribuye a un


mejor tratamiento para las mujeres drogodependientes pues es fundamental que
existan

actividades o espacios de desarrollo fsico, potenciando la expresin

corporal como forma de comunicacin y tambin manera de relacionarse


mejor con las personas y de conocerse a uno mismo.

123

Me parece que es fundamental que dentro de un proceso teraputico,


se incluyan espacios de desarrollo fsico y expresin corporal como
otro mtodo de comunicacin, como as mismo como una forma de
contactarse consigo mismas, con el ser corporal y con los dems.
(Psicloga).

La psicloga rescata el valor de la expresin corporal, por su aporte en


el desarrollo de la autoestima y las habilidades sociales. Herramienta necesaria
para el auto conocimiento, autovaloracin y optimizacin de destrezas en el
desarrollo como ser social.

Tambin est muy ligado al desarrollo de autoestima y habilidades


sociales (Psicloga)

El director, expresa que el taller fue importante pues posibilit el


acercamiento de cada mujer drogodependiente con su propio cuerpo,
reconocindolo y tomando mayor conciencia de ste, de lo que les pasa como
personas. Segn su opinin el taller es muy necesario.

Importante, necesario, especialmente en cuanto hay mayor contacto


con el cuerpo y as mejor conciencia de los que les pasa, muy
necesario (Director)

124

Gran parte de las mujeres comentan que el taller de danza fue una buena
terapia, ya que era completo e integro, reuniendo trabajo, baile, movimientos,
retroalimentacin grupal, entre otras cosas.

Se coment que se extraa, entre otras cosas, por la relajacin que


produca en sus participantes.

Tu taller era completo, trabajbamos, bailbamos, trabajamos la


respiracin, el movimiento del cuerpo, despus al final haba una como
esta de preguntas, como te gusto o no te gusto? Era como bien
completo as. Trabajbamos como todas las reas.(Violeta)

Ojala pudisemos tener ms taller, porque es el nico taller que nos


relajaba mucho. (Anglica)

Es una muy buena terapia, que hace falta. (Eliana)

En sntesis, en cuanto a los aspectos psicolgicos individuales, el


equipo tcnico observ que la mayora de las mujeres drogodependientes de la
comunidad, estim que el taller facilit

la conexin con su feminidad y

delicadeza de los movimientos, presentando cambios en la postura y en gestos


que acompaan la conducta de las mujeres.

125

Por su parte, las mujeres drogodependientes comentan que el trabajo de


mover las caderas y los hombros, agradaba mucho. Resultado de esto es la
mejora de la postura y la forma de caminar.
Se recuper el movimiento corporal que muchas mujeres del taller
haban abandonado, algunas por el paso de los aos. Esto estimul el
reaprendizaje de los movimientos corporales y el aumento de la sensualidad y la
femineidad.
El equipo cuenta que las mujeres despus de terminar cada taller, se relajaban y
se les notaba distendida. Incluso algunas comentaban que el taller les generaba
sueo.

En

cuanto al entorno social familiar, el director de la comunidad

observa que despus de que terminaba cada sesin de taller, las relaciones
interpersonales entre las mujeres se desenvolvan de manera ms calmadas y
relajadas.

En relacin al rea ocupacional, se resume, entre otras cosas, que la


psicloga observa que las mujeres drogodependientes del taller, presentaron
mayor actividad fsica, reencontrndose con su cuerpo de manera favorable,
vindose beneficiada la disposicin para el resto del da.

126

Ella observ que las mujeres drogodependientes se sentan mejor con su


cuerpo y con sigo mismas, gracias al trabajo fsico y al acercamiento y
vinculacin a este, lo cual genera en las personas un estado de comodidad y
satisfaccin con respecto a si mismas.
Las mujeres drogodependientes comentan que el taller de danza les provocaba
alegra y energa. Y en ocasiones se disminuan las dolencias corporales. Siendo
para ellas, un efecto teraputico.

127

VI

CONCLUSIONES Y DISCUSIN

A partir de la informacin suministrada por los cuestionarios realizados


al Equipo Tcnico y a las mujeres drogodependientes de la comunidad
teraputica y el Grupo Focal realizado a ellas, se pretende responder a la
pregunta de investigacin; Cmo se presenta el Contacto de la mujer
drogodependiente que asiste a un taller de danza en la Comunidad Teraputica?
Los procedimientos utilizados en la investigacin posibilitaron la descripcin y
reflexin respecto a la interrogante de conocer el contacto de las mujeres
drogodependientes dentro de un taller de danza en la comunidad teraputica e
identificar observaciones del equipo tcnico de la comunidad, sobre el taller de
danza en relacin a las reas de intervencin que plantea el programa de
tratamiento de la comunidad teraputica Carpe Diem.

Apoyado en el material y/o respuestas de los cuestionarios, el grupo


focal y el anlisis descriptivo, se presenta

la interpretacin y conclusin

detallada dando respuesta a los objetivos planteados en la investigacin.

Funciones de Contacto

El

objetivo de describir las funciones de contacto que establecen

mujeres drogodependientes que asisten a un taller de danza en la comunidad


teraputica, se determin distintas maneras de emplearlas y manifestarlas.
128

Cada mujer drogodependiente emple de manera individual algunas


funciones de contacto, correspondiente a su motivacin y necesidad personal
dentro del contexto de taller de danza.

No obstante, el grupo de mujeres drogodependientes emple


generalmente las mismas funciones de contacto, dando cuenta de una conducta
contextualizada al taller de danza, cuestin que ms adelante se explicar.

Se observ, que el uso de las funciones motoras fue mayor que el de


las funciones sensoriales de contacto.

Dentro de las funciones sensoriales de contacto ms habituales se


encontr que emplearon el escuchar y tocar, siendo menor el uso de las
funciones mirar, oler y gustar.

Se evidenci un mnimo uso de la funcin

mirar.

En cuanto a las funciones motoras de contacto ms habituales, las


mujeres drogodependientes emplearon con mucha frecuencia el movimiento, la
voz y el tono hablando, no obstante no se registran conversaciones dentro del
taller.

129

Las mujeres drogodependientes en su mayora hicieron uso de la


funcin escuchar, para hacer contacto con la msica y con la alegra resultante
que compartan.

Debido a esta funcin,

establecieron un vnculo mayor consigo

mismas, especficamente con el mundo sensorial, estimulado en ese momento


por sonidos producidos dentro del taller.

Al escuchar, pudieron percibir integralmente la msica, es decir,


contactarse con ella, sentirla de manera subjetiva y expresarla con el cuerpo,
generando estados placenteros para ellas.

Escuchar, en este caso, constituy un proceso abierto y activo, como


dice Polster, puesto comprueba que realmente escucharon recibiendo
vidamente los sonidos que penetraron en ellas. En este caso, el escuchar estuvo
centrado en sonidos producidos por la msica, siendo ellas afectadas
gratamente por este sonido.

Las mujeres tomaron contacto con los estmulos sonoros que


presentaban sentido para ellas, evidenciando agrado por lo que oyeron.

Ellas tomaron contacto con el sonido en s, ms all de lo que se deca


dentro del taller. Como refiere Polster (1997), el que al escuchar toma contacto

130

est siempre alerta a lo que se dice, pero tambin al sonido en s, de modo que
oye bastante ms que las palabras.(p.136)

La mayoras de las mujeres presentaron cierta inclinacin o preferencia


por or captando todo aquello que fuera estimulante para ellas. Se preparaban
para rescatar lo grato de cada estmulo sonoro dentro del taller.

Segun Polster (1997); La selectividad se ejerce, no solo sobre lo que se


quiere o no decir, sino tambin sobre lo que se quiere o no escuchar. (p.136)

En relacin a la funcin Tocar, cada mujer estableci contacto fsico


junto

con

alguna

compaera

mientras

danzaba.

Se

observ

que

mayoritariamente hubo dos incitaciones para tocar. Unas lo hacan para


contactarse con su compaera, sintiendo la energa de sta y transmitindola al
resto del grupo. Otras tocaban y recordaban la presencia de sus seres queridos
ausentes.

Como refiere Polster (1997) La inmediatez del tacto atraviesa los


estratos intelectuales y cuaja en experiencias palpables de reconocimiento
personal. (p.142)

De hecho, la mayor parte de las mujeres al tocar se contactaron con el


reconocimiento del otro, de su energa, de su estado personal. No reaccionaron

131

nicamente de manera intelectual, sino que tambin se entregaron al sentir, a


vivir en integridad la experiencia que les proporcionaba el tocar a otro.

Para algunas tocar no fue una consecuencia inevitable de la relacin


afectiva (Polster, 2003). Otras mujeres, simplemente tocaban pues necesitaban
danzar y para aquello se requera de sta funcin. Esto habla de que construir
una relacin interpersonal, por medio del tacto, requiere esperar y ejercitar. En
este caso, tocar constituy un contacto referencial para contactarse por razones
prcticas, lo que demuestra que, en algunos casos, el contacto profundo con el
otro no depende mayoritariamente del tacto.

Segn Polster (2003), Crear el nuevo clima del trato interpersonal


requiere paciencia y prctica.

Las mujeres drogodependientes no presentaron tabes, como dice


Polster, al momento de tocar, siendo rescatable el hecho de que algunas
pudieran reanudar el contacto fsico con las personas, puesto que actualmente
las personas no suelen tocar con soltura y confianza.

En cuanto a la funcin mirar, las mujeres podan ver, pues no


presentaron mayores conflictos con su visin. Miraron pocas veces, puesto que
preferan focalizarse en la autopercepcin de s mismas en ese momento. La
mayora, en vez de mirar, enfoc su atencin en s mismas, en lo que estaban

132

experienciando. Se desprende que se contactaron con su mundo interior de


manera grata, ms que con el mundo exterior en el cual no precisan objetos
que capturaran atencin visual.

Otras ocuparon la funcin mirar, para experimentar control sobre el


lugar donde estaban, pues necesitaban ubicarse en el espacio y saber cmo las
otras compaeras lo estaban pasando. Se produjo un contacto referencial, la
mirada que -como refiere Polster (1997)-

provee orientacin para

acontecimientos o acciones ulteriores y un contacto por el contacto mismo.


Cuando predomina el contacto referencial, la vida se hace sumamente
prctica.(p.132)
Ellas usaron

la mirada de manera hbil,

puesto que el valor del

contacto referencial es el de conservar la existencia. Sin embargo, pocas


miraron su entorno para orientarse en el espacio de danza.

En cuanto a las funcin Gustar, las partcipes del taller, no


experimentaron o hicieron contacto con su entorno de sta manera. Ellas no
necesitaron recurrir al gusto porque no existieron estmulos presentes en el
taller que lo requirieran. Como refiere Oaklander (2001) la funcin del Gustar
tambin se relaciona con la lengua, la que ayuda a expresar emociones a travs
de los labios, los dientes y mejilla.

133

Se concluye que en las mujeres no se constat expresin de emociones


a travs de labios, dientes o mejillas. La expresin de tipo corporal fue a
travs de la totalidad de su cuerpo, sin exacerbar el rostro.

La funcin de contacto Oler tampoco fue concientemente utilizada por


las mujeres drogodependientes. Expresa Polster (1997) Oler y Gustar es ser
tocado por sustancias qumicas, gaseosas o en solucin, cuestin que no sucedi
en el taller de danza, no se presentaron estmulos de este tipo.

En relacin al uso de las funciones motoras de contacto en las mujeres


drogodependientes, al conversar muchas emplearon voz y tono y palabras
adecuadas cuando requeran expresarse verbalmente.

Se entiende por un tono adecuado ocupar acento, pronunciacin y


entonacin concordante con el sentimiento vivido en un momento. Las mujeres
drogodependientes fueron coherentes en el uso de estos recursos expresivos.
La voz utilizada, mayormente estuvo direccionala en base a un objetivo claro en
cada mujer. No chirridos sin sentido o palabras que slo cumpliera con el fin
de llenar un espacio muerto. Al contrario, el uso de la palabra, estuvo
encuadrado en un contexto emocional personal, que tena sentido en tanto
querer comunicar, ser escuchada y atendida.

134

Adems de cumplir una funcin expresiva, la voz lleva una direccin y


un impulso. Podemos concebirla como un proyectil lanzado por el sujeto hacia
un blanco que quiere alcanzar por medio del sonido. (Polster, 1997; p. 146)

Si bien las palabras usadas en algunas ocasiones fueron de tipo queja,


frustracin o para llamar la atencin, no obstruyeron

la relacin con las

personas del taller. Permitieron el entendimiento y el acercamiento entre ellas.


Segn Polster (1997) Si la voz entra armoniosamente y su incisividad resulta
asimilable, ser bien recibida y se entablar una buena relacin.(146)

Dentro del taller, por diversas razones, las mujeres rean de manera
relajada y fluida lo que da cuenta de otro aspecto significativo del contacto
vocal. Polster (1997) sostiene; La risa es otro aspecto significativo del contacto
vocal. (146)

En algunas mujeres result ms complejo que recordaran o tomaran


mayor conciencia del uso de las palabras exactas en tal situacin, que el del
tono y la voz. La mayora recuerda perfectamente que tono, voz y palabras
usaron en los momentos que necesitaban expresarse. Pero algunas no recuerdan
que palabras utilizaron exactamente.

Cabe
hallazgos

destacar el

son

de

uso de la funcin motora; el movimiento, sus

envergadura.

Casi

en

su

totalidad,

las

mujeres

135

drogodependientes se movieron dentro del taller, obteniendo ritmo y


sensualidad, situacin que las sorprendi de muy buena manera. Este aspecto
facilit el reaprendizaje en algunas para moverse integralmente (explorando
coordinacin), y poder caminar con delicadeza y feminidad.

Otro resultado

se refleja en la siguiente cita: Sentir libertad y que

poda mover mi cuerpo todava! (Eliana). La mayora experiment, debido al


movimiento en el taller, libertad y control corporal, que tenan abandonado,
algunas por los aos y otras, por los estragos de la droga.

Segn Polster (1997) Al penetrar en una habitacin y encaminarse hacia


una persona que desea hablar, hay quien acta por propio impulso,
desplazndose libre y armoniosamente y tambin hay quien lo hace a los
tropezones, como una marioneta mal manejada, para cumplir una obligacin
social que en el fondo no le interesa. (p. 155)

En cuanto a esto, se concluye que las mujeres drogodependientes se


movieron en el taller desplazndose libremente, de manera espontnea, en base
a los lmites de la danza, sintindose armoniosas e histrinicas cuando se
expresaban corporalmente.

De esta manera se desprende, dicho por ellas, el gran aporte del


movimiento en sus vidas, produciendo autocrecimiento y en alguna medida,

136

maduracin, pues

descubrieron que podan moverse, de manera sensual,

devolvindoles parte de su identidad como personas femeninas, como mujeres


especficamente. Rasgo que la mujer por ser drogodependiente va perdiendo,
sea por el auto abandono ocasionado, o por la marginalizacin de la sociedad
ante ella.

Respecto

al uso de las funciones de contacto, las mujeres

drogodependientes fueron sensibles y activas en el contexto del taller.


En un taller de danza se encuentra msica, danza, ejercicios, interpretacin y
relajacin. Cada integrante del taller se contact con su entorno de manera
personal, fijando sus lmites y utilizando funciones determinadas de contacto
sobre otras, admisibles para finalmente relacionarse con su entorno como ellas
necesitaban hacerlo.

Limites de contacto

En relacin a los lmites de contacto, se concluye que las mujeres


drogodependientes en ciertos aspectos del taller fueron mas permeables que en
otros. Emplearon diversas formas de acercamiento y alejamiento con respecto
al entorno y a s mismas, situacin que defini el tipo de contacto establecido.

La mayora se permiti la posibilidad de experienciar, a travs de la


danza, el movimiento y la msica. Ocuparon gran parte de las funciones de
137

contacto. En la mayora, la experiencia del taller comprometi parte de su ser,


se comprometieron de manera ntegra (cognoscitiva, fsica y emocional) para
contactarse con su entorno.

Ejemplo de esto es

que olvidaron a ratos que eran personas con

problemas de adiccin, que se encontraban internadas, se desconectaron de sus


problemticas cotidianas. Emplearon sus habilidades cognoscitivas y motoras
para el reaprendizaje del movimiento y la activacin de la sensualidad
adormecida.

Segn Latner (2004), El yo es nosotros en proceso, un todo unificado


que abarca lo fsico, emocional y cognoscitivo. (p. 60)
A travs del movimiento rtmico, sensual y coordinado, ellas se conectaron con
su cuerpo, reconociendo sensaciones que ste les entregaba, como el relajo y
la distensin. Por tanto activaron procesos mentales como la atencion de lo que
ocurria consigo mismas, reconociendo las sensaciones y experienciando una
animosidad especifica.

Al acercarse a otras personas, decidieron abrirse a la experiencia de


sentir a su compaera, y de entregar energa, tal como ellas lo perciban de la
otra persona.

138

Descubrieron parte de su mundo interior en actividades del taller, como


cuando tocaban a sus compaeras. A partir de sta funcin, (tocar) junto con la
escucha activa de la msica, experimentaron alegra y energa, que las motivaba
a seguir. Algunas, mientras danzaban, se contactaron con recuerdos familiares
y producto de ello se emocionaban.

Descubrieron que an presentan disponibilidad motora y flexibilidad


para el movimiento. Valoran la sensualidad que exploraron dentro del taller,
catalogndola, segn sus palabras, como

aprendizaje

beneficioso, que les

aport adems en su movilidad cotidiana, por ejemplo, una

manera mas

delicada al caminar.

Las mujeres drogodependientes dan cuenta de un conocimiento directo


de s mismas y de la situacion en la cual estaban. Como menciona Polster
(1997) Es fundamental el conocimiento de si mismo, de la situacin y como
ste se encuentra en aquella situacion.

En cuanto a

diferenciarse y contactarse con otros, es posible concluir

que cada una conserv su identidad , present un estilo gestual y de expresin


reconocible, haciendo uso de funciones de contacto, logrando como resultado
la experimentacin y descubrimiento de cosas diferentes. Cada una mantuvo su
propia gestualidad (destacndose en todas lo sensual), expresiones (algunas

139

hablaban, otras expresaban mediante el movimiento) y uso de funciones de


contacto (prevaleci uso de movimiento, escuchar y tocar).

Entre ellas ocasionalmente se producan risas, comentarios de ayuda,


exaltaciones,

bromas, danza en parejas,

entre compaeras,

demostrando

contacto genuino

la mayora, se contact con espontaneidad y adecuacin a

la realidad, en este caso, el contexto de danza.

La mujeres drogodependientes presentaron buena permeabilidad, pues


se aventuraron a correr el riesgo de vivir la experiencia, danzar sin preocuparse
de lo que ocurra de la puerta del taller hacia afuera, prefiriendo sentir
emociones, e intercambiar energas junto a las compaeras.

Como refiere Yontef (2005); Para estar bien contactado con el mundo propio,
es necesario arriesgarse a descubrir y llegar a los propios lmites. (p.135)

Cada mujer mantuvo su autonoma, no teman

criticar cuando lo requeran.

Aceptaban sugerencias pues comprendan que eran necesarias para ellas,


motivadas por la auto superacin y el esfuerzo. Cada paso de danza difcil y la
disciplina fue consideradas por ellas, como nutritivas para si mismas y para el
autocrecimiento.

140

El lmite entre el s mismo y el ambiente debe permanecer


permeable para permitir intercambios, pero suficientemente firme para
mantener su autonoma. El ambiente contiene toxinas que se deben
filtrar. Incluso lo nutritivo debe ser discriminado segn las necesidades
dominantes. (Yontef, 2005, p. 132)

En general las mujeres tuvieron un buen contacto con su ambiente,


recepcionando activamente la msica, el ritmo y la compaa de las otras
personas presentes. A la vez, se conectaron y tomaron conciencia de su
emocionalidad, visualizando lo que ocurra en su mundo interior en ese
momento y entablando contacto con los otros, descubriendo lo que les produca.
Algunas sintieron mucha confianza e integracin al sentir la alegra de las otras
personas y

saber que se encontraban con otros que realizaban lo mismo que

ellas. No obstante, habra que determinar si esta manera de vivir la experiencia


junto a otros, en algunas, pueda revelar
necesita rodearse de gente

dependencia afectiva, en tanto

para el auto apoyo. Por tanto,

existira la

posibilidad de que se presente confluencia, es decir prdida de los lmites.


Donde el individuo se pierde. Esta es una afirmacin que excede a este estudio,
en tanto no se tienen otras herramientas para confirmar la existencia de
confluencia como tal.

Ninguna mujer se aisl en el contacto con los otros, ms bien expresan


sentimientos de integracin, comodidad y seguridad.

141

Ellas se abrieron ante la posibilidad de comunicar no verbalmente, y a


vincularse activamente con otros, aventurndose al descubrimiento de las
sensaciones que este hecho generaba en ellas. Se sintieron acompaadas,
apoyadas y animadas.

En el aislamiento, el limite se hace tan impermeable que se pierde la


conexin, es decir, se pierde el darse cuenta de la importancia de los dems para
el si mismo. (Yontef, 2005, p. 132)
Las funciones del lmite de las mujeres permitieron la fluidez de un
contacto sano y espontneo con s mismas y con el mundo, capaces de
diferenciarse de las otras personas sin aislarse o impedir conexiones.

En general las mujeres drogodependientes presentaron una regulacin de


sus lmites de manera permeable, puesto que stos abran y cerraban,

se

acercaban y se alejaban voluntariamente ante contactos con s mismas y con su


entorno. No se confluan (contacto fijo) con sus emociones, tampoco con las
compaeras. Permitieron el compartir y sentir lo propio, sin aislarse. Fluy un
contacto espontneo que respetaba y concordaba con la personalidad de cada
una.

Se observa que, en cuanto a la posibilidad de integrar alguna sugerencia,


las mujeres fueron bastante receptivas, sin

anular u omitir lo que sentan u

opinaban al respecto. Muchas explican que sintieron que era difcil para ellas

142

algunos aspectos del taller, pero que en pos del avance personal, integraban
aquella parte difcil o sugerencia.

Por tanto la mayora de las mujeres drogodependientes del estudio


fueron permeables en el lmite del contacto, ya que conservando

la

individualidad, expresaron lo que sintieron, se vincularon espontneamente


cuando se les peda, demostrando respeto. Integraron lo que se encontraba en el
ambiente, lo nutritivo para cada una de ellas cuando lo estimaban conveniente.
Una autorregulacin eficaz incluye un contacto por medio del cual nos
demos cuenta de innovaciones ambientales potencialmente nutritivas o toxicas.
Lo nutritivo se asimila y todo lo dems se rechaza. Este tipo de contacto
diferenciado conduce inevitablemente al crecimiento. (Polster y Polster, 1973,
p. 101).

Taller de danza en relacin de las reas de intervencin, que


plantea el programa de tratamiento de la comunidad teraputica
Carpe Diem.

En relacin a ste objetivo especfico de la investigacin, a partir de los


resultados y el anlisis de datos arrojados por los instrumentos utilizados con
el equipo tcnico y las mujeres drogodependientes, se concluye que el taller de
danza realizado en la comunidad teraputica Carpe Diem, tiene mayor relacin
con algunas reas de intervencin del programa que con otras.
143

Se comprueba que el taller de danza presenta relacin con algunas reas


de intervencin planteadas por la comunidad, como vas de tratamiento. Por
tanto el espacio de la danza cumple con algunas caractersticas o postulados
para poder tratar a la mujer drogodependiente. Reconocindose con esto, que la
danza representa una va de tratamiento, tal como otros espacios
psicoteraputicos.

Por un lado, el taller facilit en la conexin de las mujeres


drogodependientes con su feminidad y delicadeza de los movimientos,
presentndose notables cambios en la postura y en los gestos que acompaan la
conducta. Hubo una mejora de la postura corporal y de la forma de caminar,
resultando sta mucho ms femenina y sutil.

Las mujeres recuperaron en parte, la movilidad extraviada en el tiempo


de adiccin. Exploraron aspectos personales, como la sensualidad, admitindola
como caracterstica graciosa y agradable, parte de su identidad.

Debido al taller, las mujeres drogodependientes experimentaron


sensaciones de relajo y distensin, lo que aport en el modo de disposicin que
presentaron posteriormente. Siendo una disposicin favorable para recepcionar
las otras actividades teraputicas que se presentaban en el resto del da. Segn

144

la Psicloga de la comunidad; la danza es una actividad fsica que tiene


relacin con el cuerpo y las predispone favorablemente.

El taller contribuy a que cada integrante del taller se armonizara


consigo misma, a partir de su cuerpo, sintindose mejor respecto de ste,
facilitando la experimentacin de sensaciones placenteras.

Pudo comprobarse que generalmente cuando finalizaba cada sesin de


taller, las mujeres presentaron un cambio conductual. Puesto que la mayora
ingresaba de manera lnguida, desmotivada

y en algunos momentos no

dispuestas a ser partcipes del taller, finalizando de manera expresiva,


comunicativa, risuea y con mayor energa para abordar el da. En cuanto a
esto, la psicloga destac la expresin corporal trabajada en el taller, que
facilit el desarrollo de la autoestima y las habilidades sociales.

Adems el Director de la comunidad observa que el taller posibilit el


acercamiento de cada mujer drogodependiente con su propio cuerpo, tomando
contacto con este. Por tanto, clasific este espacio como parte importante dentro
del proceso psicoteraputico.

Las mujeres drogodependientes, al tomar contacto con su cuerpo por


medio del movimiento, la msica, etc., vivieron el momento, se entregaron a lo
que en ese instante suceda (el aqu y el ahora),

fueron espontneas, siendo

145

producto de esto la vivencia de distraccin de las problemticas cotidianas que


la mayora de las mujeres drogodependientes de la comunidad presentan.

Se concluye que todos los hallazgos en relacin al taller de danza


constituyen parte de los puntos que integran los aspectos psicolgicos
individuales expuestos en el rea psicosocial del programa de tratamiento de
la comunidad en cuestin.

Son

aportes breves y concisos en el aspecto psicolgico de la mujer

drogodependiente, hay un encuentro con la feminidad en los movimientos, se


observan cambios en la postura y la gestualidad que complementa la conducta,
se recupera parte de la movilidad corporal, mejora la disposicin, armonizan
consigo mismas a partir del encuentro con sus propios cuerpos, se presenta un
cambio anmico en variadas ocasiones evidenciando mayor energa, y la
mayora mientras danzaba vivi el momento experienciando.

Estas son temticas que pueden ser tratadas o trabajadas de mejor


manera en una psicoterapia individual o grupal, pues podran ser ndices de
fenmenos especficos psquicos, que serviran para el avance en el proceso
teraputico.

El

taller

influenci

el

desenvolvimiento

de

las

relaciones

interpersonales, las mujeres drogodependientes se mostraron de manera ms

146

calmada y relajada

cuando finalizaba cada taller. Ellas preferan, en su

mayora, compartir un grato momento, presentando casi siempre buen humor.


Estos datos, obtenidos tras el anlisis de la informacin obtenida por parte de
las mujeres drogodependientes y el Equipo tcnico, permiten concluir que
taller

el

posibilit un encuentro cercano y ameno, contribuyendo en cierta

medida (escuetamente con respecto al relajo, la cercana y la amenidad) al


trabajo respecto al entorno social dentro del rea psicosocial.

El taller facilit que las mujeres drogodependientes reforzaran su


actividad fsica, conectndose con su cuerpo de manera saludable. Tras el
trabajo fsico, las mujeres se acercaron de mejor manera a su cuerpo, vindose
incrementadas las sensaciones placenteras y la autosatisfaccin.
Como la mujer, producto del taller, mejor en alguna medida el encuentro del
ser con su cuerpo, resaltando la integridad, presentaba mejor disposicin para
el resto del da.

En las mujeres drogodependientes el taller de danza generalmente


provoc alegra y energa. Y en ocasiones, producto del trabajo fsico, se
disminuan achaques y dolencias corporales. Catalogndose, desde este punto
de vista, como un efecto teraputico.

Desde ste punto de vista, se concluye algn grado de aporte

con el

rea ocupacional, puesto que la actividad fsica efectuada dentro del taller,

147

producto de los movimientos de danza y los ejercicios, gener en las mujeres


mejor estado de salud, respecto del que presentaban previamente.

La comunidad plantea el trabajo de sta rea, en tanto refuerza el


desarrollo de

diferentes actividades u ocupaciones, organizadas en rutinas

cotidianas, las cuales normalizan el funcionamiento ocupacional hacia estilos de


vida saludables y libres de consumo de drogas y/o alcohol. Es posible sostener
que el taller funcion como espacio saludable, y mientras estuvo en marcha, se
organiz de manera rutinaria, una vez por semana. El taller normaliz el
funcionamiento ocupacional de las mujeres drogodependientes, en relacin a su
corporalidad.

El taller de danza, segn la informacin obtenida, fue clasificado como


espacio

que

contribuye

un

mejor

tratamiento

para

las

mujeres

drogodependientes.

Fue considerado

coadyuvante del proceso teraputico que cada mujer

drogodependiente debe completar. Se rescata su aporte en tanto beneficios que


entrega un espacio de desarrollo fsico que potencia la expresin corporal,
facilita

el

mejoramiento

de

procesos

comunicativos,

autoestima,

autoconocimiento y relacin con las personas.

148

El desarrollo del taller permiti que las mujeres drogodependientes


tuvieran una visin de este espacio, donde se trabaja integradamente, rescatando
adems de las caractersticas propias de la danza (movimiento, ejercicios,
disciplina, relajacin), el cierre con las opiniones y sentires de cada mujer, para
muchas significo ser una terapia.

El taller resulta una

herramienta dentro del tratamiento de mujeres

drogodependientes de la comunidad teraputica Carpe Diem, como espacio


integral que funcion sistemticamente.
La comunidad, al respecto, plantea el trabajo del rea deportivo
recreativo que pretende dentro del esquema de lo integral, contribuir a la
vivencia de una vida que contemple la recreacin sistemtica y permanente.
Contempla actividades de planificacin y ejecucin respecto del uso del tiempo
libre (recreacin, deporte, cultura y educacin)

Si bien la danza no es una actividad deportiva, sino disciplina artstica,


pues trabaja adems de lo fsico, la corporalidad en si, su conexin con lo
emocional, dando nfasis a la expresin corporal, entra en la categora de
recreacin y cultura, pues de alguna manera permite el autocrecimiento.

149

Discusin

Expuestas las conclusiones de esta investigacin, referidas al contacto


de las mujeres drogodependientes que asisten a un taller de danza, es posible
afirmar que en su mayora, como organismos establecieron contacto sano,
abriendo

y cerrando sus lmites sin dificultades, descubriendo sentires,

recuerdos, sensaciones, emociones, gustos y disgustos en relacin a su medio


ambiental. Casi ninguna mujer se retrajo en extremo, apartndose o impidiendo
contacto. Todas se incorporaban al taller de alguna manera, respetando sus
tiempos y necesidades.

En

pocas ocasiones se observ confluencia por parte de las mujeres.

Algunas ocasionalmente por cansancio o problemticas especficas, asuman


como propias, emociones ajenas que encontraban en el ambiente. Por ejemplo,
si una se encontraba en su periodo menstrual o enojada, otra lo asuma como
fenmeno propio reflejando ceguedad de su propio estado interno, bloqueando
su darse cuenta.

En general mantuvieron su autonoma y se contactaron de manera sana,


sin caer en

confluencia (limites de contacto demasiado permeables) o

aislamiento (limites de contacto impermeable).

150

Cuando el limite entre el si mismo y lo otro se hace difuso,


impermeable o se pierde, se produce una alteracin tanto del contacto como del
darse cuenta. (Perls, 1973, Polster y Polster, 1973).

Las

mujeres

drogodependientes

utilizaron

individualmente

los

elementos ambientales propios de un taller de danza comn. Fueron receptivas


al precalentamiento,

para evitar lesiones fsicas, realizaron

guiados para mayor control

movimientos

y disociacin corporal, efectuaron

coreogrfica que refuerza la memoria a corto plazo y la

danza

potencia como

actividad junto a otros, basados en pasos y tiempos especficos coordinan y se


compenetran en el sentir grupal. La parte coreogrfica del taller se realiz
planificada por la profesora, sus integrantes deban reproducir cada paso

para

conformar una danza de tipo show-escenario. Modalidad que no excluy la


posibilidad de expresin corporal propia por parte de las mujeres
drogodependientes.

El taller de danza

ana

caractersticas de estructuracin, esfuerzo

corporal, reaprendizaje psicomotor, reacondicionamiento fsico, trabajo


aerbico, trabajo coreogrfico. Por tanto, suele no ser
entretenido,

demanda

siempre un baile

exigencias mayores a sus integrantes, por lo que es

relevante el entusiasmo demostrado por las participantes.

151

Las mujeres

drogodependientes en tratamiento lograron exitosamente

contacto consigo mismas y con sus compaeras. Se entretuvieron, disgustaron,


reclamaron en ciertas ocasiones, excitadas por la danza, se emocionaron con
sus logros, pidieron ms, se cansaron y proyectaron problemticas.

Fue una instancia activa. Las participantes involucraron pasin para


vivir la experiencia.

El esfuerzo y tenacidad de las mujeres, ocasionaron disfrute y conexin


con lo que ocurra. Aunque no todas preferan este espacio, a ninguna le fue
indiferente. Todas experimentaron emociones, agradables o desagradables, pues
la danza como disciplina artstica, provoca cosas en el otro.

Cabe destacar que se registr animosidad cclica en las mujeres


drogodependientes, durante el periodo de taller. Al principio la mayora

no

recibi con mucha agrado la idea de danzar y no bailar. Diseo que implica
ajustarse a una pauta de danza, realizar ejercicios exigentes, regular la
respiracin, etc.

Las primeras veces, cost que comprendieran que se trataba de un taller


disciplinado con metodologa especifica. En muchas se perciba un rostro
aburrido, una expresin de entrega forzada ante la situacin.

152

Al transcurrir unas semanas, las mujeres descubrieron lo que sentan


al ejecutar una coreografa, despus de tanto esfuerzo y repeticin.

Lo que sentan con respecto a su cuerpo cuando lo ejercitaban y movan


sensualmente.

La energa obtenida mientras trabajaban, as como la cercana


interpersonal al tocar a su compaera, fluyendo risa, juego, y proyecciones
artsticas que poseen y no exponen comnmente, como los sueos de vibrar en
un escenario danzando, por ejemplo. No obstante, en ocasiones el taller de
danza pudo haber sido ms eficaz. Algunas por querer probar los lmites de su
profesora, en tanto qu conductas toleraba y cules no eran permitidas, caan en
faltas de respecto, no manejando estados emocionales que podan repercutir
desfavorablemente en las dems compaeras.

Esta situacin pudo haber sido mejor tratada, si la profesora hubiese


reaccionado de manera ms distante, pues ocasionalmente confundi su lmite
con respecto a lo que estaban sintiendo las mujeres. E incorpor elementos
propios de la intervencin psicolgica para resolver el conflicto.

Esto es debilidad de la profesora pues no se ajust

a su funcin

especfica de profesora de danza, ya que inadecuadamente recurri a


herramientas psicolgicas para calmar la tensin de las mujeres.

153

Caracterizado el hecho, vale reflexionar sobre si esta recurrencia al


acervo de la profesin fue por otra parte- adecuada pues activ elementos de
la formacin acadmica recibida.

Los instrumentos de recoleccin de datos utilizados (cuestionarios y un


grupo focal), pudieron haber sido complementados por la observacin de
campo apoyada por material audiovisual. Eventualmente, habra constituido un
aporte al desarrollo de la tesis. Sin embargo, el recurso no fue aprovechado
pues no estaba incluido en el diseo de los objetivos especficos, slo pretenda
obtener informacin sin filtracin.

Del trabajo realizado surgen

algunas perspectivas futuras

de

investigacin.

Segn

aportes

tericos

sobre

Contacto

de

las

personas

drogodependientes, desde el punto de vista gestltico, el adicto presenta


alteraciones en la percepcin figura-fondo, en el ciclo de contacto y el darse
cuenta. Existe un fallo en el darse cuenta de s mismo que impide reconocer
propias limitaciones, lo que dificulta el registro de sus verdaderas necesidades
y consecuente satisfaccin. Por lo tanto la vivencia es de insatisfaccin y se
buscar llenar el vaco con

nuevas vivencias perpetuando el ciclo del

consumo, fijo a la figura del objeto de su adiccin.

154

Se alude a la incapacidad del adicto para pasar de vivencia a


experiencia, ya que demanda un contacto pleno y un darse cuenta en el
post contacto que no puede hacer.

Al respecto, las mujeres de este estudio, por estar internas en una


comunidad

teraputica

para

tratar

la

adiccin,

no

dejan

de

ser

drogodependientes. Trabajan en superar la adiccin, entender sus problemticas


y realizar un cambio conductual no obstante, de igual forma, presentan alto
riesgo (para toda la vida) de tener recaidas por lo que siempre tendrn como
parte de sus caractersticas, la condicin de drogodependientes.
Son pues, mujeres drogodependientes. Y ya sea por su proceso
avanzado de tratamiento o por las condiciones que gener el taller, se comprob
que se contactaron consigo mismas, no fueron indiferentes a lo que ocurra en el
ambiente, regularon sus lmites adecuadamente para requerir aquello que
necesitaban y elaboraron interesantes conclusiones post taller.

La mayora registr lo que les pasaba,

sentan, cmo sus cuerpos

reaccionaban y todo su ser (mente, cuerpo y espritu) se complementaban


holsticamente para vivir la experiencia de la danza. Se dieron cuenta de sus
propios procesos, se relacionaron amenamente sin discordias o tensiones.

155

Del estudio surgen las siguientes preguntas:

El contacto de estas mujeres drogodependientes habr sido


mayoritariamente de carcter intrnseco, extrnseco o trascendental? A
partir de qu motivacin ellas se conectaron? Fueron impulsadas por
vivencias interiores de su persona, o por lo que les demandaba

el

exterior (primando el deber) o por satisfacer a los dems?


O quizs

su contacto no haya sido extremo en ninguna de estos

caracteres.

Dentro del taller, Las mujeres habrn funcionado en uso extremo de


alguna de sus polaridades como personas, sin aceptarlas e integrarlas? o
Fueron conscientes de la polaridad predominante en un momento?

Otra cuestin interesante para investigar a partir de esta tesis, en


relacin con los postulados de Terapia gestltica, especficamente acerca del
Ciclo de Contacto (teora no empleada en esta tesis), es:

Aquellas mujeres que les cost tomar contacto dentro del taller de
danza Qu mecanismos de defensa habrn irrumpido en ellas?

156

Para

un

mejor

manejo

de

taller

de

danza

para

mujeres

drogodependientes, es vlido indagar:

Cmo abordar correctamente los nimos cambiantes o inestables de la


mujer drogodependiente, sin que se altere el clima emocional dentro del
taller?

En relacin a ejercer elementos de la psicologa como profesin


dentro de un espacio recreativo como la danza:

Como incorporar su mirada para fortalecer el tratamiento en mujeres


drogodependientes?

Se sugiere que el Equipo tcnico de la comunidad, considere los


resultados de sta investigacin para

eventualmente complementar sus

intervenciones.

Se desprende del estudio realizado, la conveniencia de integrar la danza


u otro espacio de desarrollo personal con la corporalidad e incluirlo como
laboratorio para observar Contacto.

157

Las anteriores sugerencias apuntan en definitiva a utilizar la experiencia


de trabajo de esta tesis, sus potenciales aportes como herramienta para
optimizar las relaciones interpersonales de la mujer drogodependiente con sus
entornos intra y extra comunidad teraputica.

158

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http://www.snteseccion36.org.mx/archivos/saludproblema.pdf

162

VIII. ANEXOS

Encuadre Cuestionarios

Pauta Cuestionario Equipo tcnico

Pauta Cuestionario Mujeres drogodependientes.

Cuadro de Anlisis

Anlisis de Cuestionarios y Grupo focal

Trascripcin de Cuestionarios

Trascripcin de Grupo focal

163

Encuadre Cuestionarios

Cuestionario Equipo tcnico

Para apoyar la elaboracin de la tesis Contacto de mujeres


drogodependientes, que asisten a un taller de danza, es que se necesita su
valiosa cooperacin en este cuestionario. Por lo tanto, me interesa conocer su
opinin sobre algunos aspectos de la experiencia.

Agradezco su disposicin para responder estas preguntas.

Adela Mara Gajardo Segura


Estudiante de Psicologa UAHC

Cuestionario Mujeres Drogodependientes

Tu participacin en este taller ha sido muy valiosa pues, junto a tus


compaeras, construyeron una experiencia

que

permiti acercarnos al

maravilloso mundo de la danza.


Para apoyar la elaboracin de la tesis Contacto de mujeres
drogodependientes, que asisten a un taller de danza, es que se necesita tu
valiosa cooperacin en este cuestionario.

164

Adems tu palabra puede ser un importante elemento para realizar


nuevos talleres en la comunidad o en otra parte.

Por lo tanto, me interesa conocer tu opinin sobre algunos aspectos de la


experiencia.

Agradezco tu disposicin para responder estas preguntas.

Adela Mara Gajardo Segura


Estudiante de Psicologa UAHC

165

Pauta cuestionario Equipo tcnico

Cuestionario para profesionales y/o terapeutas de la comunidad

En relacin al taller de danza:

1- Observ algn tipo de disposicin (preparacin, comentario, etc.) de las


usuarias hacia el taller?

2-Percibi algn cambio en el estado anmico de las usuarias?

3-Percibi algn cambio conductual por parte de las usuarias?

4-Cmo se desarrollaban las relaciones interpersonales, por parte de las


usuarias, despus de cada taller?

5- Cul es su opinin con respecto al taller, tras su realizacin?

166

Pauta cuestionario Mujeres drogodependientes

TEMA

TEORIA

PREGUNTAS

Funciones de Contacto

Funcin de Contacto;

1.- Que percibiste a tu alrededor

Mirar

mientras danzabas?
2.- Cundo danzabas mirabas a tu
alrededor?

Funcin de Contacto;

3.- Te ocurri algo mientras

Escuchar

escuchabas la msica?

Funcin de Contacto;

4.- Hubo oportunidad de establecer

Tocar

contacto fsico con otros, o tocarte


a ti misma (roce, tocar tu cuerpo,
tomar la mano, etc.), en el taller?
Con qu fin lo hacas?

Funcin de Contacto;

5.- Usaste tu voz dentro del taller?

Conversar

Si fue as. Cul fue el tono, y que


palabras usaste?

Funcin de Contacto;

6.- Cules eran tus movimientos

Moverse

dentro del taller? Te ocurri algo, tras


moverte as?
7.- Te sentiste flexible corporalmente
dentro del taller? En cuanto a esto.
8.- Te fue fcil o hubo dificultades?

167

Lmites de Contacto

Darse Cuenta

9.- Tuviste preferencia por algn


aspecto del taller?

Regulacin del Lmite

10.- Te sentiste cmoda contigo misma?


Y con los dems?
11.- Cmo fue la sensacin de tener
personas a tu alrededor mientras
danzabas?
12.- Cmo te sentiste cuando te daban
alguna sugerencia o te pedan que
repitieras un paso?
13.- Sentiste alguna vez gozo, agrado o
satisfaccin dentro del taller?
De que manera?
14.- Qu te desagrad ms?
Con respecto a esto, Qu sensaciones
tuviste ante ese desagrado?

Darse Cuenta

15.- Descubriste o notaste algo nuevo


en ti o a tu alrededor mientras danzabas?
16.- Cmo definiras la experiencia
de danzar?

168

Cuadro de categora anlisis

Contacto

Limites de Contacto

Regulacin del Lmite


Darse Cuenta

Funciones

Sensorial

Mirar
Escuchar
Tocar
Oler
Gustar

Motoras

Coversar
Moverse

Taller de danza en

rea Psicosocial

relacin a las reas

Aspectos psicolgicos individuales


Entorno social familiar

De intervencin que
plantea el programa de

rea Ocupacional

Actividades ocupacionales

rea deportivorecreativo

Actividades de planificacin y ejecucin

tratamiento de la
comunidad teraputica
Carpe Diem

acerca del uso del tiempo libre

169

Anlisis cualitativo de cuestionario mujeres drogodependientes (por


Genoveva Echeverra (2005)

a) Categoras predefinidas

1. Funciones de contacto.
2. Limites de contacto

b) Definicin de cada categora, para realizar la clasificacin de citas de manera


coherente y rigurosa.

Funciones de contacto:

Para Polster (2003) la psicoterapia Gestltica tiene el propsito de guiar


al paciente hacia el restablecimiento de sus funciones de contacto, para que as
abunden las experiencias de interaccin intensa.

Es mediante la vista, odos, tacto, gusto y olfato que nos vivenciamos a


nosotros mismos y nos contactamos con el mundo.

Contacto implica ser tocado. Uno puede ser tocado desde no solo el
tacto, sino tambin de todos nuestros sentidos. Una palabra bien puesta puede

170

tocar al otro como un golpe fsico, pero para esto se requiere de una
sintonizacin ms atenta de las propias sensaciones. Adems de los cinco
sentidos se agregan dos ms: la conversacin y el movimiento. Los siete
constituyen la funcin del contacto. Todas y cada una de ellas conducen a un
contacto idntico. (Polster, 2003).

Limites de contacto:

En TG la personalidad total se llama Yo. El yo siempre est en


contacto con diversas situaciones, aunque no est en el presente, sin
embargo, para que el yo tenga vida completa, tiene que estar en contacto
con la realidad. El yo es nosotros en proceso, un todo unificado que
abarca lo fsico, emocional y cognoscitivo. Donde comienza a haber
partes definidas dentro del campo, surgen las fronteras o lmites de
contacto, que es una forma del yo, en donde el yo y los otros se
encuentran, por el contacto con el ambiente, y a la vez hace contacto con
l. El lmite de contacto se forma cuando entra en accin el yo en el
proceso de formacin de una gestalt. (Latner, 2004; p. 60).

Con un buen funcionamiento del lmite, las personas alternan


entre conectar y separar, entre estar en contacto con el ambiente del
momento y alejar la atencin del ambiente. El lmite del contacto se

171

pierde de manera opuesta polar en la confluencia y el aislamiento.


(Yontef, 2005, p. 132)

a) Tpicos (predefinidos), y descripcin que sintetice los diversos


contenidos aunados en el tpico.

Categora: Funcin de contacto

Funcin contacto mirar

Cuando danzaba a veces miraba alrededor y otras, a mi misma.

Algunas de las entrevistadas sealan que cuando danzaban, miraban a su


alrededor, pues necesitaban visualizar el lugar donde se movan. Pero la
mayora refiri que estrictamente no miraban con detencin algn objeto en su
exterior, si no que concentraban la atencin en su estado interior, que les
llamaba la atencin agradablemente.

Si, es importante visualizar el lugar donde te mueves (Violeta)

No, solo me enfocaba en la msica y yo (Eliana)

Miraba mi cuerpo en paz (Eliana)


172

No, a veces, mas bien no, porque me gusta sentir dentro de m el baile
hago desde muy pequea. (Patricia)

Funcin de contacto tocar

Tocar me acercaba a otros.

Las entrevistadas sealan que pudieron establecer contacto fsico


mientras danzaban. Unas refieren a que tocaban a su compaera para sentir su
energa y transmitirla viceversa al danzar. El tocar les signific contactar,
considerar y/o evocar a un otro, este sea una compaera de danza o un ser
cercano que no estuviese ah.

S, contacto bailar con mi compaera (Eliana)

Si, mientras bailbamos y con el fin de bailar (Pamela)

Si, sentir energa de otra persona y transmitirla recprocamente


(Violeta)

! S! Pensaba en mi esposo o en mi hija y me alegraba (Patricia)

173

Funcin de contacto conversar

Habl cuando lo necesit, en su momento

Las entrevistadas sealan que hablaron ocupando su voz como medio de


contacto con sus compaeras o profesora, cuando sentan que deban hacerlo.
Sobretodo cuando queran expresar algn pensamiento o sensacin, ocupando
el tono adecuado.

Si, me quejaba mucho cuando no me salan los pasos, deca No


puedo!, en un tono brusco (Violeta)

Con comentarios, risas, el tono era agradable. Las palabras no las


recuerdo (Pamela)

Si, para alertar a alguien que estaba equivocada, en un buen tono


(Silvia)

174

Funcin de contacto movimiento

Fue agradable haberme movido sensualmente

La mayora de las entrevistadas expresa haberse movido con ritmo y de


manera sensual, explorando su feminidad de manera sorprendente. Los
movimientos realizados en danza, les genero sensaciones agradables, pues
descubrieron

que

pudieron

movilizar

varias

partes

de

su

cuerpo

coordinadamente y creando un todo coreogrfico.

Al danzar integraban los movimientos de su cuerpo, logrando armona y


satisfaccin.

Alcanc a ser sensual y moverme con ritmo. Alcanc a agarrar ritmo


(Eliana)

Corporales completos, piernas, hombros, cintura, brazos, brot s


ensualidad de mi cuerpo (Violeta)

Sensuales, me ocurri risa (Pamela)

De cadera, sensual. Sent felicidad ya que el baile siempre lo he


llevado muy dentro de mi (Patricia)
175

xtasis, capacidad de controlar tu cuerpo y moverlo como sea


(Violeta)

Libertad y que poda mover mi cuerpo todava (Eliana)

Categora: Lmites de contacto:

Darse cuenta

Fue una experiencia donde pude disfrutar y relajarme tambin.

La mayora de las entrevistadas sintetizan que la danza fue una


experiencia liberadora, es decir, una instancia donde pudieron liberar energas y
algunas emociones. Esto fue positivo en tanto aport en la distensin y relajo de
su cuerpo, y por consiguiente el estado de nimo que pudieran tener en ese
momento. Relatan tambin haber vivido una experiencia que activ ciertas
reas de su carcter, potencindolo positivamente.

Excelente nos cre personalidad y quiero que vuelva (Eliana)

Alegre, liberar energas a travs del baile es genial, buena


experiencia (Violeta)

176

Bonita, interesante aportaba a la alegra y a relajarse mucho,


estupenda (Patricia)

Lo que me di cuenta de mi misma, con respecto a la danza.

La mayora de las entrevistadas sealan que descubrieron que pueden


danzar y disfrutar con la magia de ste arte, como lo es, expresado desde sus
propias palabras; Con el control del cuerpo, del espacio, complicidad con las
compaeras y con la msica, la expresin corporal de la msica y la activacin
mental (recuerdos, imaginacin, sensaciones) que esta actividad les produjo.

Tambin rescatan la sensacin de libertad sana que experimentaron,


haciendo una comparacin con los efectos de la droga, que obviamente son mas
negativos que positivos.

Descubr que puedo danzar, complicidad con mis compaeras. Lo


disfrut mucho y quiero que vuelva el taller. (Eliana)

Descubr que a travs del baile me siento libre que puedo volar sin
necesidad de drogas, que tengo el control de mi cuerpo y el espacio.
Descubr alegra y complicidad con la msica. (Violeta)

177

Si en mi ya que me pone con energa y alegra, me encanta la msica y


bailar, sentirla (msica) y expresarla con el cuerpo es genial.
(Pamela)

Alrededor se senta ambiente grato, solo pareca importar solo el


baile. Todas sonrientes. (Silvia)

En mi volva a sentir mi niez en ocasiones de mucha alegra, volv


cuando tambin tenia 18 aos y estuve un corto tiempo con mi abuela y
ah en esa casa era feliz bailando, sola pero me senta sper bien, y lo
practicaba con mi ta, siempre lo hacia, era feliz.- En fin, recuerdos
bonitos. (Patricia)

cuando yo lo hago yo cierro los ojos y me conecto, igual que lo hace


una persona que canta, que cierra los ojos y se concentra en lo que esta
cantando, eso me pasa a mi con el baile. (Patricia)

Regulacin del lmite

Con las dems me sent confiada e integrada, lo cual fue bueno.

La mayora de las entrevistadas expresan la importancia que tuvo para


cada una de ellas sentirse acompaadas por sus compaeras. Refieren que al
178

trabajar en conjunto en la clase de danza, pudieron experimentar el apoyo y el


nimo de sus compaeras. Gracias a estar junto a otras personas que estaban
haciendo lo mismo (se contagia la emocin), relatan haberse sentido
acompaadas y apoyadas en cada cosa que hacan. Y dado que la danza
compromete cierta complejidad, es que fue importante el apoyo de cada
compaera, pues esto les gener confianza en s mismas.

Si, y con los dems integrada (Eliana)

Bien, con mis compaeras y yo lograba incentivarme, cosa que me


cuesta mucho (Eliana)

No siempre, trabajar la sensualidad me costaba pero cuando me


salan los pasos me senta contenta, con los dems tambin me sent
bien porque haba disposicin (Violeta)

Estar bailando con las dems me daba confianza (Violeta)

Bien, grato el ambiente ya que todas intentbamos hacer bien los


pasos. (Pamela)

Bien perecan estar todos en la misma onda. (Silvia)

179

Acept repetir los pasos de danza, pues me ayudaba.

La mayora de las entrevistadas opina que el repetir paso por paso,


continuamente, fue fundamental para el aprendizaje. Expresan que si bien no
fue lo ms grato de la clase, comprenden que era un ejercicio con beneficios de
mediano-largo plazo, y que en definitiva este esfuerzo contribua a su auto
superacin.

Alcanzar a que saliera perfecto. (Eliana)

Senta que me esforzaba por hacerlo bien. (Violeta)

Que no lo estaba haciendo bien y que lo tena que hacer mejor


(Pamela)

No me gusto, porque senta dolor de espalda y piernas. (Patricia)

180

b) Descripciones integradas en categora correspondiente (Insumo


para el desarrollo del anlisis)

1- Funciones de contacto:

En cuanto a las funciones de contacto, es decir, los siete procesos sensomotor utilizados para vivenciamos a nosotros mismos y contactamos con el
mundo, se encuentran diversas experiencias por parte de las mujeres
entrevistadas. Por un lado la mayora de las entrevistadas mientras danzaba
comnmente se contactaron con sus sensaciones de energa, xtasis, fuerza y
control corporal. Otras declaran que sta actividad les proporcion un estado de
libertad representado, en ocasiones, por la plasticidad de sus movimientos.

Algunas sealaron la importancia que tuvo mirar a su alrededor, por la


necesidad de ubicarse bien en el espacio mientras danzaban, demostrando que
fue fundamental poseer cierto control, en este caso, espacial. No obstante la
mayora refiri que no miraron con detencin algn objeto en su exterior, si no
que concentraban la atencin en su estado interior, que les llamaba la atencin
agradablemente.

Todas establecieron contacto fsico mientras danzaban. Unas refieren a


que tocaban a su compaera para sentir su energa y transmitirla viceversa al

181

danzar. El tocar les signific contactar, considerar y/o evocar a un otro, este sea
una compaera de danza o un ser cercano que no estuviese ah.

Tambin comentan que hablaron notando que ocuparon su voz como


medio de contacto con sus compaeras o profesora, cuando sentan que deban
hacerlo. Sobretodo cuando queran expresar algn pensamiento o sensacin,
ocupando el tono adecuado.

En cuanto a los movimientos, las mujeres expresan la alegra que les


genero saber que pudieron moverse con ritmo, sensualidad y feminidad,
trasladando estos nuevos saberes a su vida cotidiana, como caminar con mas
delicadeza. Ellas pudieron moverse, de manera integral y coordinada,
reconociendo y empleando el movimiento particular de cada miembro de su
cuerpo.

En suma, se puede sealar que en el contexto de la danza, las mujeres


lograron reacondicionar en un nivel medio, su cuerpo con movimientos suaves,
delicados y estructurados que proporciona este arte y disciplina, reconociendo
en s mismas alegra, energa, estimulacin anmica, entre otras cosas, que
fueron probablemente generados por la sensacin de libertad que ellas sentan
en ese momento.

182

Libertad por sentir que su cuerpo era manejado o controlado por ellas
mismas, y nadie ms, como en otro tiempo lo hizo la droga.

Ocuparon la mayora de sus sentidos, en desmedro de oler y gustar.


Emplearon tambin el movimiento y la conversacin, para captar y conectar
con esa realidad decorada y estimulada con msica y movimientos. Realidad
que les facilit conectar con sus propias sensaciones.

2- Lmites de Contacto:

En cuanto al contacto con el ambiente, y consigo mismas, desde el


punto de vista fsico, emocional y cognoscitivo, se puede decir, que las mujeres
entrevistadas se contactaron de diversas formas.

La mayora sintetiza que la danza fue una experiencia liberadora, es


decir, una instancia donde pudieron liberar energas y algunas emociones. Esto
fue positivo en tanto aport en la distensin y relajo de su cuerpo, y por
consiguiente los nimos que pudieran experimentar a lo largo del da. Algunas
relatan

haber sentido la activacin de ciertas reas de su carcter,

potencindolo positivamente y describindolo como una mejora en la


personalidad.

183

Otras expresan la importancia que tuvo para cada una estar


acompaadas por sus compaeras. Refieren que al trabajar junto a otros en la
clase de danza, sintieron el apoyo y nimo de sus compaeras. Gracias a estar
junto a otras personas que estaban haciendo lo mismo (se contagia la emocin),
relatan haberse sentido acompaadas y apoyadas en cada cosa que hacan. Ellas
relatan que les fue significativo el apoyo de cada compaera, pues adems les
gener confianza en s mismas.

Ante la repeticin de algn paso difcil, la mayora de las mujeres


entrevistadas sealan que aceptaron ser corregidas en variadas ocasiones
porque, segn ellas, era parte fundamental para el aprendizaje requerido. Casi
ninguna relata haber repetido por inercia o slo por deber, si no que, aun
expresando que esa parte no fue lo mas grato de la clase, comprenden que era
un ejercicio con beneficios de mediano-largo plazo, y que en definitiva este
esfuerzo contribua a su auto superacin.

Muchas dicen que descubrieron que pueden danzar y disfrutar con la


magia de ste arte, expresado desde sus propias palabras; Manejo del control
del cuerpo, del espacio, complicidad con las compaeras y con la msica,
expresin corporal de la msica y la activacin mental (recuerdos, imaginacin,
sensaciones) que esta actividad dicen que les produjo.

184

Tambin rescatan la sensacin de libertad sana experimentada, haciendo


una comparacin con los efectos de la droga.

185

Anlisis cuestionario Equipo tcnico

a) Anlisis categora predefinida

Taller de danza en relacin de las reas de intervencin, del programa de


tratamiento de la Comunidad Teraputica Carpe Diem.

b) Definicin de la categora, para realizar la clasificacin de citas de


manera coherente y rigurosa.

Taller de danza en relacin de las reas de intervencin del programa:

La Danza se define como el conjunto de movimientos de todo el


cuerpo o partes de l, ordenados rtmicamente y acorde con alguna
motivacin individual o grupal, que expresa emociones, sensaciones,
sentimientos, ideas y situaciones. Consiste en la ejecucin de distintos
movimientos con el fluido continuo de energa interna, para as darle un
sentimiento especial y un uso determinado (Glasinovic.1995, p. 14)

Por lo tanto, en la presente investigacin se utiliza a la danza como un


medio para observar el contacto de las mujeres drogodependientes, pero adems
se le perfila como un coadyuvante del proceso de tratamiento de
drogodependencias, especficamente en la comunidad teraputica Carpe Diem.

186

c) Tpicos preestablecidos. Respectiva descripcin.

Aspectos psicolgicos

Las mujeres solan comentar que el taller les ayud en su postura corporal y
en la relajacin de ste

Tanto el Director como la Psicloga - Jefa Tcnica de la institucin,


sostuvieron que la mayora de las mujeres drogodependientes de la comunidad,
comentaban que el taller les ayud a conectarse con su feminidad y delicadeza
en los movimientos.

En algunos casos (la mayora) comentaban que a travs del taller


comenzaron

conectarse

con

su

feminidad

delicadeza

en

los

movimientos.(Psicloga).

Refieren a que tambin se observaron cambios en la postura y en los


gestos que acompaan la conducta que las mujeres diariamente presentaban.
Cuentan a que se observ que las mujeres expresaban una sensacin de
relajacin despus de cada taller, siendo un efecto muy grato para ellas.
Algunas les daban sueo despus del taller.

187

En algunos casos (la mayora) comentaban que a travs del


taller comenzaron a conectarse con su feminidad y delicadeza en los
movimientos. (Psicloga)

Se observaron cambios en la postura y en los gestos que acompaan la


conducta. (Psicloga)

[] que les contribua en palabras como nos relajamos, me dio sueo,


que rico etc. (Director)

Aspectos psicolgicos y rea ocupacional

El estado anmico de las usuarias lograba estabilizarse despus de cada taller.

La psicloga comenta que la mayora de las mujeres presentaron un


estado anmico mas calmado y dispuesto para comenzar mejor el da, pues el
hecho de que la danza fuese una actividad fsica que tiene relacin con el
cuerpo las predispone favorablemente.

Ella observ que las mujeres drogodependientes de la comunidad se


relajaron, se entretuvieron y se distendieron post taller. El taller, segn sus
palabras contribuy en que cada mujer se armonizara consigo misma, a partir

188

de su cuerpo, sintindose mejor respecto de ste, facilitando la experimentacin


de sensaciones placenteras.

Siempre la actividad fsica y la relacin con el cuerpo predispone a las


usuarias a comenzar mejor el da. (Psicloga)

Se relajan, entretienen, distienden y tienen una mejor disposicin para


el resto de los espacios teraputicos. (Psicloga)

Adems comienzan a armonizarse consigo mismas y con su cuerpo,


sintindose mejor respecto de ste y por ende se incrementan las
sensaciones placenteras. (Psicloga)

Entorno social familiar

Despus de cada taller las relaciones interpersonales entre las usuarias se


desarrollaban con ms cercana y calma.

La psicloga y el director de la comunidad comentan que las relaciones


interpersonales entre las mujeres drogodependientes se desenvolvieron de
manera ms calmada, relajada y por lo tanto con mayor disposicin para el resto
del da. La psicloga fundamenta que esto se debe a que compartir un espacio
desde el cuerpo y la expresin de ste facilita que las personas se relacionen de
189

manera mas tranquilizada, siendo secundaria la participacin de la palabra, que


en algunas ocasiones resulta insuficiente o imprecisa al momento de
relacionarse.

El compartir un espacio desde el cuerpo y su expresin estrecha lazos,


permite compartir de manera ms cercana y amena, sin tener que
mediarlo por la palabra que en algunos casos es escasa o imprecisa.
(Psicloga)

Mas calmadas., mas relajadas y obviamente mejor dispuestas


(Director)

Actividades de planificacin

La danza es necesaria y fundamental en un proceso teraputico, ya que


posibilita el contacto con el cuerpo, entre otras cosas.

La Psicloga y el Director de la comunidad afirman que el taller de


danza contribuye a un mejor tratamiento para las mujeres drogodependientes.
La razn de esta afirmacin, radica en que, segn sus palabras, es fundamental
que en un proceso teraputico existan talleres, actividades o espacios de
desarrollo fsico, potenciando la expresin corporal, ya que sta se la considera

190

como otra forma de comunicacin, y tambin como una manera de relacionarse


mejor con las personas y de conocerse a uno mismo.

Me parece que es fundamental que dentro de un proceso teraputico,


se incluyan espacios de desarrollo fsico y expresin corporal como
otro mtodo de comunicacin, como as mismo como una forma de
contactarse consigo mismas, con el ser corporal y con los dems.
(Psicloga).

Tambin, la psicloga rescata el valor de la expresin corporal, por su


aporte en el desarrollo de la autoestima y las habilidades sociales. Siendo una
herramienta necesaria para el auto conocimiento, la autovaloracin y por ende
la optimizacin de destrezas en el desarrollo como ser social.

El director, expresa que el taller fue importante pues posibilit el


acercamiento de cada mujer drogodependiente con su propio cuerpo,
reconocindolo y tomando mayor conciencia de ste, y de lo que les pasa como
personas. Segn su opinin el taller es muy necesario.

Me parece que es fundamental que dentro de un proceso teraputico,


se incluyan espacios de desarrollo fsico y expresin corporal como otro
mtodo de comunicacin, como as mismo como una forma de

191

contactarse consigo mismas, con el ser corporal y con los dems.


(Psicloga)

Tambin est muy ligado al desarrollo de autoestima y habilidades


sociales (Psicloga)

Importante, necesario, especialmente en cuanto hay mayor contacto


con el cuerpo y as mejor conciencia de los que les pasa muy
necesario (Director)

d) Integracin de descripciones en la categora Taller de danza en relacin


de las reas de intervencin del programa. (Insumo para el anlisis
cualitativo)

En cuanto a la relacin o aporte que pueda tener el taller de danza dentro


de alguna rea del programa de tratamiento de la comunidad, se obtiene de los
miembros del Equipo Teraputico de la comunidad cuestionados, en este caso
el Director y la Psicloga que es a su vez jefa del rea tcnica de la comunidad,
que durante la prctica del taller se observ en las usuarias del programa, es
decir las mujeres drogodependientes y sujetos de ste estudio, comentarios y
expresiones de que ste espacio les facilit un mayor nivel de encuentro,
cercana y conexin con su propia persona, valorando el reencuentro con su

192

corporalidad, redescubriendo y tomando contacto especficamente con reas tan


sutiles como la feminidad y delicadeza en los movimientos.

Se observ que las mujeres drogodependientes presentaron cambios en


la forma de ocupar su cuerpo, de moverse y en algunos casos de comportarse.
Por ejemplo hubo cambios en la postura y en los gestos que acompaan la
conducta, produciendo un nivel de suavizacin y armonizacin de la expresin
de sta.

La manera en cmo se movan despus de cada taller, optimizaba el


relajo y la calma en el comportamiento de las mujeres. Con esto no se quiere
decir que el taller normaliz la conducta en los niveles esperados totalmente y
para todos los das, sino que aport en cierta medida a la modulacin de
algunos rasgos de la conducta que ellas presentaron.

Los integrantes del Equipo Teraputico cuestionados, refieren a que las


mujeres frecuentemente relataban que el taller las relajaba, en ocasiones les
produca sueo, y que stas sensaciones gustaban. Siendo efectos valiosos para
la estabilizacin del nimo y as la predisposicin para abordar de mejor manera
situaciones y conflictos.

En relacin a esto, se observ que la danza fue una actividad fsica que
tiene relacin con el cuerpo y que predispuso a las mujeres favorablemente. La

193

Psicloga observ que despus de cada taller las mujeres presentaban un estado
de nimo ms calmado y dispuesto para comenzar el da. Adems observ que
las mujeres se entretenan y se distendan con sta actividad. La mayora de las
mujeres present una armonizacin con ellas mismas y con respecto a su
cuerpo, lo que fomentaba la vivencia de sensaciones placenteras.

Puesto que a partir de este ejercicio las hormonas activan sensaciones


satisfactorias fsicamente, adems la armonizacin del cuerpo y la toma de
conciencia de este, alejando la agresin, tambin apunta a aumentar la vivencia
de emociones positivas que incrementan sensaciones agradables.

En cuanto a las relaciones interpersonales que las mujeres presentaron,


se observ que se vincularon de manera ms calmada, demostrando relajo en
sus modismos y expresiones. Esto signific la presencia de mayor disposicin
anmica para el resto del da.

Segn palabras de la Psicloga, el hecho de compartir un espacio desde


el cuerpo facilita los canales de comunicacin, y la forma de relacionarse con el
resto. Ya que la expresin corporal estimula la expresin en todo su sentido,
muchas veces volviendo secundario el uso de la palabra.

194

Tambin se habla de la estrechez de lazos, producto de una actividad


como sta, permitiendo aun ms cercana, confianza y autenticidad en la
conducta.

Significativo fue el efecto del taller en la disposicin y estmulo de las


mujeres ante el resto del da, y los diversos talleres teraputicos que se
presentan en la comunidad.

Si bien, no es un cambio rotundo en la disposicin, si posibilita la


mejora de ste.

Por ltimo, los miembros del equipo cuestionados, refieren a que el


taller de danza es un espacio importante y fundamental en un proceso
teraputico

195

Anlisis grupo focal

La aplicacin del instrumento grupo focal, sobre las mujeres


drogodependientes de este estudio, sirvi para complementar conocimientos de
Funcin y Lmites de Contacto de las mujeres drogodependientes, y la relacin
del taller de danza ante las reas de intervencin que plantea el programa de
tratamiento de la comunidad teraputica Carpe Diem.

b) Tpicos con citas y respectiva descripcin

Aporte del taller y Contacto de mujeres drogodependientes.

Darse cuenta y rea psicosocial

La mayora de las mujeres drogodependientes expresaron que durante el


taller disfrutaron de danzar y se tomaron con buen humor la repeticin de pasos
y las partes ms estructuradas del taller, como la tcnica.

Prevalecan las ganas de enfocarse para que todo saliera perfecto, y en


definitiva disfrutar de un buen momento.

Comentan que despus de danzar, experimentaron sensaciones de relajo,


an cuando se les pidiera que realizaran ejercicios de alta exigencia energtica.
196

Adems el grupo de mujeres, segn propias palabras de una de ellas,


pareca transformarse y transportarse a un estado de alegra.

A mi, ee a mi me encantaba tu taller, a mi me encanta bailar, as


siempre he soado con ir a una escuela de danza, por que a mi me
encantan los pasos tcnicos, que se me hacia difcil hacerlo, pona el
mximo de empeo posible (Violeta)

Igual si lo tenamos que repetir, lo hacamos de una por una, y no


faltaba la talla, no faltaba la risa, entonces (Pamela)

me enfocaba en lo que tena que hacer, en bailar en pasarlo bien.


(Violeta)

Ojala pudisemos tener ms taller, porque es el nico taller que nos


relajaba mucho. (Anglica)

Aunque haya disciplina. Igual uno se relajaba (Pamela)

Como yo no bailaba, las miraba de afuera y las vea de repente tal


como dicen ellas, as como transportadas, como transformadas, todas
alegres. (Silvia)

197

Darse cuenta y rea psicosocial

Las mujeres drogodependientes relatan que debido al taller lograron


desconectarse del contexto donde estaban insertas, en este caso, la comunidad
teraputica. Hablan de una desconexin agradable, puesto que las hace olvidar
por un momento del hecho de estar internas, siendo para algunas como una
sensacin de encierro.

Acusan adems un olvido momentneo de los problemas personales que


cada una de ellas presenta.

La desconexin que describen es debida paradjicamente, dicho por


ellas, a una conexin con s mismas, lograda a travs de la concentracin,
motivada por la msica y el baile.

cuando yo lo hago yo cierro los ojos y me conecto, igual que lo hace


una persona que canta, que cierra los ojos y se concentra en lo que esta
cantando, eso me pasa a mi con el baile. (Patricia)

A mi me gust arto. Si me gustaba, una porque me sacabai del


contexto de estar aqu encerrada, no no encerrada, si ni aqu en el
tratamiento, nos sacabai a otro lado y se nos olvidaba que estbamos
aqu, estbamos bailando, escuchando msica. (Pamela)

198

Lo que pasa es que uno se desconecta. Uno se desconecta con la


msica y con el baile te desconectai de todo lo dems. Entonces eso es,
para mi agradable. (Pamela)

A mi me agrado mucho, porque, bueno una porque te saca de lo que es


estar aqu encerrada (Anglica)

rea psicosocial y rea ocupacional

Algunas mujeres expresan con respecto al taller, que muchas veces


ingresaban con un estado de nimo bajo o/y con dolencias fsicas. Finalizando
ste, con energa y con nimo de abordar de mejor manera el da que les
esperaba. Es decir las mujeres, debido al baile, cambiaban el tono de su
disposicin. Por ejemplo solan dejar la comunidad para ir al taller, de manera
introvertida, desanimada y lenta, y llegaban de manera opuesta, es decir,
dinmicas y risueas. No como haban salido.

A mi me ayud bastante, porque yo cuando entraba de repente con


esos dolores, estaba as como achacosa, el baile me suba, me daba
energa. (Patricia)

199

Claro, me quitaba los dolores y todo. Quizs muchas formas de


recibirlo o de percibirlo o que est dentro de mi, que me gusta tanto,
que mis dolores desaparecan. (Patricia)

A pesar de que dola la espalda y todo, pero igual le pona empeo


(Pamela)

Ah y llegaban con otra disposicin aqu, llegaban corriendo tocando


el timbre. No como haban salido. (Silvia)

la msica de porsi te alegra, te alegra el alma y por mucho que uno de


repente no cachara ni una con los pasos que tu mostrabas, pero con el
movimiento igual quedabai con energa (Anglica)

rea ocupacional y rea deportiva-recreativa

Gran parte de las mujeres comentan que el taller de danza fue una buena
terapia, ya que era completo e integro, reuniendo trabajo, baile, movimientos,
retroalimentacin grupal, entre otras cosas. Se realiz un trabajo en todas las
reas de la persona.

Se coment que es un taller que se extraa, entre otras cosas, por la


relajacin que produca en sus participantes.

200

Tu taller era completo, trabajbamos, bailbamos, trabajamos la


respiracin, el movimiento del cuerpo, despus al final haba una como
esta de preguntas, como te gusto o no te gusto? Era como bien
completo as. Trabajbamos como todas las reas.(Violeta)

Es terapia! (Pamela)

Es una muy buena terapia, que hace falta. (Eliana)

Ojala pudisemos tener ms taller, porque es el nico taller que nos


relajaba mucho. (Anglica)

Funcin de contacto movimiento, y rea psicosocial

Las

mujeres

drogodependientes

comentan

que

el

trabajo

de

precalentamiento, especialmente mover las caderas y los hombros, gustaba


mucho. Este trabajo, junto con otros, sirvi para mejorar la postura y caminar
coordinadamente.

La sensualidad explorada por parte de las mujeres, que muchas veces se


olvida, se recuper y revivi ponindola en prctica en el taller. Esta accin
motiv la entretencin entre ellas, puesto que paralelamente se trabajaban los
movimientos corporales y la manera de caminar sensual y femenina.

201

Otras refieren que les agradaba escuchar la msica, sentir y expresarla


con el cuerpo, destacando la expresin corporal, describindola como una
sensacin genial.

Fue un aprendizaje inesperado y grato para ellas poder recuperar la


movilidad del cuerpo y el ejercicio de ste, que segn sus propias, tenan
abandonado por la edad que presentaban.

el precalentamiento con el meneo de soltar las caderas y los hombros


me gustaba (Pamela)

Para aprender a caminar mejor (Patricia)

Y eso como sensual y femenino que una de repente se le olvida, si en


cambio una camina medio desparram. Entonces eso medio femenino
que le hacamos a los pasos para all para ac, eso era entrete
(Pamela)

A mi me encanta escuchar la msica, y sentirla o sea expresarla con


el cuerpo, escucharla y expresarla con el cuerpo es genial!, entonces a
mi me gusta, aparte que a mi me encanta esa cuestin. (Pamela)

202

Yo una mujer de 45, 44 aos tena entonces fjate que no mova ni un


dedo nadaParaba una pata y olvdateah me enterraban. Y ac
aprenda a moverme y ahora igual po, jugamos en el gimnasio y no po,
si puedo moverme. (Eliana)

d) Categora donde se integran las descripciones

Se obtuvo que la mayora de las integrantes de ste grupo,


mayoritariamente, experimentaron momentos gratos mientras danzaban,
realizando y tomando amenamente la repeticin de pasos y la parte tcnica del
taller, que segn sus palabras, requera de especial esfuerzo.

El objetivo del grupo para esforzarse, entre otras cosas, era disfrutar de
un buen momento de manera grupal, realizar un buen trabajo, sintindose
satisfechas consigo mismas y relajndose como fruto del empeo personal.

Gran nfasis e importancia las mujeres otorgan a la sensacin de relajo y


distensin que obtenan taller tras taller. La razn radica en que el relajo, la
calma mental y corporal genera un estado de paz y equilibrio personal que aleja
la tensin, la ansiedad y la irritabilidad que muchas de ellas presentan
diariamente, debido a su problemtica de adiccin y en varios casos
comorbilidad con trastornos psicolgicos.

203

Otra motivacin de las mujeres, para realizar un buen trabajo en el taller,


fue el aumento de la autoestima y auto valoracin que cada una alcanzaba, tras
reconocer sus logros.

La autoestima es uno de los apoyos fundamentales para realizar un buen


proceso psicoteraputico, pues significa que la persona presenta un sentido de
realidad adecuado, auto conocimiento, tolerancia a la frustracin y
probabilidad de resolver los conflictos de la mejor manera.

Generalmente como grupo, segn una de ellas, se las perciba


constantemente en un estado de alegra, al danzar, realizar los ejercicios y
compartiendo con sus compaeras de manera ldica pero contextualizada con la
ocasin.

Tambin comentan que este espacio favoreci en la sensacin de


desconexin personal con respecto a sus problemticas cotidianas, como las que
presentaban con sus familias,

comunidad, y la dificultad para abordar su

adiccin. A ratos comentan que olvidaban que eran adictas en tratamiento, y


que el hecho de danzar y liberar energas, las trasladaba a un lugar comn de
diversin y esparcimiento.

Desconectarse,

como

dicen

ellas,

les

produjo

satisfaccin.

Paradjicamente algunas lograron sta llamada desconexin externa debido a su

204

conexin interna, dndose cuenta de sus sensaciones, pensamientos y vivencias


personales con respecto a como danzaban. La msica y el movimiento, fueron
un gran aporte en ste aspecto.

Otras se desconectaron gracias a la estimulacin de aspectos externos


del taller, como la msica y el movimiento, demostrando un buen uso de sus
sentidos y destrezas psicomotrices.

Frecuentemente refieren a que su estado de nimo cambiaba mientras


estaban en el taller, obteniendo un aumento de energa interna que las motivaba
a realizar las tareas de mejor manera. La energa fue el motor que activ la
disposicin que adquiran tras finalizar el taller y reingresar a la casa de la
comunidad.

Dicho por ellas mismas, empezaban en el taller con el nimo bajo,


aptico y achacoso, producto probablemente del momento del da (maana) en
que se encontraban y los conflictos que las aquejaban. Sin embargo durante el
taller experimentaban cambios sutiles de nimo, sin caer en la euforia, pero
aumentando su alegra y actividad corporal.

Por el contrario, la ausencia de actividad corporal y energa revela


sntoma de depresin. Por lo tanto cobra sentido y valor que la alegra,

205

prevenga en ciertos casos el aumento de la depresin o algn otro trastorno del


nimo, que puedan presentar las mujeres drogodependientes de la comunidad.

Lograr la estabilizacin del nimo es importante para la convivencia en


una comunidad teraputica, mas an

fundamental para finalizar bien un

tratamiento de drogodependencia, abordando adecuadamente los problemas que


acompaan y/o originan la adiccin.

La mayora de las mujeres drogodependientes expresan que el taller de


danza es una buena terapia, comprendiendo trabajo de

respiracin,

movimientos, danza y comentarios finales de todas, que daba por cierre cada
sesin. Un espacio de trabajo completo.

Algunas mujeres extraan el taller, pues les signific un avance positivo


en su estado fsico y superacin personal con respecto a movimientos se trata. Y
por la importancia que adquiri el taller sobre el tema de la relajacin.

Las mujeres drogodependientes expresan mucha gratitud sobre este


aspecto. La relajacin implica un estado de paz personal, y a la vez, un estado
de neutralidad donde se tiene una disposicin positiva para llevar a cabo las
responsabilidades.

206

Finalmente, es importante destacar el valor real que tiene experimentar


el movimiento, y sentir el cuerpo en dominio propio. Las mujeres relatan que se
encuentran felices por darse cuenta que an pueden moverse y danzar. Por un
lado, adquirieron un movimiento, segn ellas, mas sutil, delicado y femenino el
cual pueden utilizar en otras reas de su vida, como en la cotidianidad. Como
una de ellas refiere: me di cuenta que antes caminbamos como un saco de
papas, y vestidas elegantes y todo, pero igualparece que no sabamos
caminar (Patricia).

La danza y su disciplina gener un aprendizaje motor en ellas, logrando


que descubrieran esa habilidad, o en otros casos, redescubrieran su
potencialidad corporal, que muchas veces se encuentra dormida y apaciguada
por los aos, pero que en definitiva nunca es tarde para recuperar.

Se obtuvo que este saber, el de moverse armnicamente y conciente de


cada parte del cuerpo, es altamente reparador dentro de un proceso de
rehabilitacin. Significa retomar el control, reuniendo pautas iniciales de
control corporal que generara el estimulo por controlar y retomar la vida
misma.

Puesto que para lograr el control corporal debe haber un trabajo fsico,
tampoco se debe olvidar el aporte del trabajo psquico que este compromete.
Nadie podra mover un brazo y una pierna para coordinadamente y con ritmo,

207

sin estar atento o conciente del momento, lo que la realidad demanda, las
capacidades propias y los lmites, lo que se siente, lo que se prefiere, etc.

208

Trascripcin cuestionario mujeres drogodependientes

Presentes: Violeta, Eliana, Anglica, Patricia, Pamela, Silvia


Ausentes: Paulina y Jennifer.

Eliana Salazar (46 aos)

1-

Qu percibas a tu alrededor mientras bailabas?


Libertad y que poda mover mi cuerpo todava.

2-

Cuando bailabas, mirabas a tu alrededor?


No, slo me enfocaba en la msica y yo.

3-

Te ocurri algo mientras escuchabas la msica?


Miraba mi cuerpo en paz

4-

Hubo oportunidad de establecer contacto fsico con otras o tocarte a ti


misma (roce, tocar tu cuerpo, tomar la mano, etc.), en el taller?, y Con
qu fin lo hacas?
Si, contacto bailar con mi compaera.

209

5-

Usaste tu voz dentro del taller? Si fue as, Cul fue el tono y que
palabras usaste?
No.

6-

Cules eran tus movimientos dentro del taller? Y Qu te ocurri tras


moverte as?
Alcance a ser sensual y moverme con ritmo. Alcance a agarrar ritmo.

7-

Te sentiste flexible corporalmente dentro del taller? Y Te fue fcil o


hubo dificultades?
Si no fue fcil, pero lo logr.

8-

Cmo definiras la experiencia de danzar en el taller de danza?


Excelente nos creo personalidad y quiero que vuelva.

9-

Tuviste preferencia por algn aspecto del taller?


Baile con Adela.

10-

Te sentiste cmoda contigo misma? Y con los dems?


S, y con los dems, integrada.

210

11-

Cmo fue la sensacin de tener personas a tu alrededor mientras


danzabas?
Bien, son mis compaeras y yo lograba incentivarme, cosa que me
cuesta mucho.

12-

Qu sentiste cuando se te solicit repetir algn paso?


Alcanzar a que saliera perfecto.

13-

Sentiste alguna vez gozo, agrado o satisfaccin dentro del taller? De


qu manera?
Goce. Hacindolo me solt ms.

14-

Qu te desagrad ms? Y Qu sensaciones tuviste ante ese desagrado?


Nada.

15-

Descubriste o notaste algo nuevo en ti o a tu alrededor mientras


danzabas?
Descubr que puedo danzar, complicidad con mis compaeras. Lo
disfrut mucho y quiero que vuelva el taller.

211

Violeta Carrasco M. (20 aos)

1-

Qu percibas a tu alrededor mientras bailabas?


Energa, fuerza, buenas vibras, libertad.

2-

Cuando bailabas, mirabas a tu alrededor?


Si, es importante visualizar el lugar en donde te mueves.

3-

Te ocurri algo mientras escuchabas la msica?


xtasis, capacidad de controlar tu cuerpo y moverlo como sea.

4-

Hubo oportunidad de establecer contacto fsico con otras o tocarte a ti


misma (roce, tocar tu cuerpo, tomar la mano, etc.), en el taller?, y Con
qu fin lo hacas?
Si, sentir energa de otra persona y transmitirla recprocamente.

5-

Usaste tu voz dentro del taller? Si fue as, Cul fue el tono y que
palabras usaste?
Si, me quejaba mucho cuando no me salan los pasos, deca No puedo!
en un tono brusco.

212

6-

Cules eran tus movimientos dentro del taller? Y Qu te ocurri tras


moverte as?
Corporales completos, piernas, hombros, cintura, brazos, brot
sensualidad de mi cuerpo.

7-

Te sentiste flexible corporalmente dentro del taller? Y Te fue fcil o


hubo dificultades?
Si, me fue fcil practico la elongacin regularmente.

8-

Cmo definiras la experiencia de danzar en el taller de danza?


Alegre, liberar energas a travs del baile es genial buena experiencia.

9-

Tuviste preferencia por algn aspecto del taller?


Me gustaban las coreografas.

10-

Te sentiste cmoda contigo misma? Y con los dems?


No siempre, trabajar la sensualidad me costaba pero cuando me salan
los pasos me senta contenta, con los dems tambin me sent bien
porque haba disposicin.

11-

Cmo fue la sensacin de tener personas a tu alrededor mientras


danzabas?
Estar bailando con los dems me daba confianza.

213

12-

Qu sentiste cuando se te solicit repetir algn paso?


Senta que me esforzaba por hacerlo bien.

13-

Sentiste alguna vez gozo, agrado o satisfaccin dentro del taller? De


qu manera?
Si, todo el rato Adela es muy emptica, sabe ensear, me agrada su
estilo.

14-

Qu te desagrad ms? Y Qu sensaciones tuviste ante ese desagrado?


La mala disposicin de algunas compaeras al trabajar, disgusto, enojo
porque yo quera disfrutar el espacio.

15-

Descubriste o notaste algo nuevo en ti o a tu alrededor mientras


danzabas?
Descubr que a travs del baile me siento libre que puedo volar sin
necesidad de drogas, que tengo el control de mi cuerpo y el espacio.
Descubr alegra y complicidad con la msica.

Pamela Lpez Vera (43 aos)

1-

Qu percibas a tu alrededor mientras bailabas?


Energa por el baile y la msica.

214

2-

Cuando bailabas, mirabas a tu alrededor?


Si.

3-

Te ocurri algo mientras escuchabas la msica?


Energa, ganas de bailar.

4-

Hubo oportunidad de establecer contacto fsico con otras o tocarte a ti


misma (roce, tocar tu cuerpo, tomar la mano, etc.), en el taller?, y Con
qu fin lo hacas?
S, mientras bailbamos y con los masajes, con el fin de bailar.

5-

Usaste tu voz dentro del taller? Si fue as, Cul fue el tono y que
palabras usaste?
Si. Con comentarios, risas, el tono era agradable. Las palabras no las
recuerdo.

6-

Cules eran tus movimientos dentro del taller? Y Qu te ocurri tras


moverte as?
Sensuales, me ocurri risa.

7-

Te sentiste flexible corporalmente dentro del taller? Y Te fue fcil o


hubo dificultades?
No, porque tengo problemas en la espalda.

215

8-

Cmo definiras la experiencia de danzar en el taller de danza?


Agradable, nos sacaba de la rutina.

9-

Tuviste preferencia por algn aspecto del taller?


No.

10-

Te sentiste cmoda contigo misma? Y con los dems?


Si, tambin.

11-

Cmo fue la sensacin de tener personas a tu alrededor mientras


danzabas?
Bien, grato el ambiente ya que todas intentbamos hacer bien los pasos.

12-

Qu sentiste cuando se te solicit repetir algn paso?


Que no lo estaba haciendo bien y que lo tenia que hacer mejor

13-

Sentiste alguna vez gozo, agrado o satisfaccin dentro del taller? De


qu manera?
Si, agrado porque me gusta bailar.

14-

Qu te desagrad ms? Y Qu sensaciones tuviste ante ese


desagrado?
Nada.

216

15-

Descubriste o notaste algo nuevo en ti o a tu alrededor mientras


danzabas?
Si en mi ya que me pone con energa y alegra, me encanta la msica y
bailar, sentirla (msica) y expresarla con el cuerpo es genial.

Silvia Barahona Gonzlez (60 aos) (Slo observadora del taller de danza, por
impedimento fsico)

1-

Qu percibas a tu alrededor mientras bailabas?


Que todo se trasformaba, las personas se vean diferentes.

2-

Cuando bailabas, mirabas a tu alrededor?


Yo las miraba a todas porque no bailaba.

3-

Te ocurri algo mientras escuchabas la msica?


Pareca verlas relajadas

4-

Hubo oportunidad de establecer contacto fsico con otras o tocarte a ti


misma (roce, tocar tu cuerpo, tomar la mano, etc.), en el taller?, y Con
qu fin lo hacas?
No, yo no bailaba.

217

5-

Usaste tu voz dentro del taller? Si fue as, Cul fue el tono y que
palabras usaste?
Si para alertar alguien que estaba equivocada, en un buen tono.

6-

Cules eran tus movimientos dentro del taller? y Qu te ocurri tras


moverte as?
Yo vea a mujeres cambiando movimientos que resultaban agradables.

7-

Te sentiste flexible corporalmente dentro del taller? Y Te fue fcil o


hubo dificultades?
Yo no, porque no hacia los ejercicios
.

8-

Cmo definiras la experiencia de danzar en el taller de danza?


Buena, bonita se guardan vibras diferentes alegres.

9-

Tuviste preferencia por algn aspecto del taller?


No.

10-

Te sentiste cmoda contigo misma? Y con los dems?


S.

218

11-

Cmo fue la sensacin de tener personas a tu alrededor mientras


danzabas?
Bien perecan estar todos en la misma onda.

12-

Qu sentiste cuando se te solicit repetir algn paso?


Nada, no bailaba solo miraba pero vi que no les molestaba.

13-

Sentiste alguna vez gozo, agrado o satisfaccin dentro del taller? De


qu manera?
Agrado si, todo era tranquilidad.

14-

Qu te desagrad ms? Y Qu sensaciones tuviste ante ese desagrado?


Nada.

15-

Descubriste o notaste algo nuevo en ti o a tu alrededor mientras


danzabas?
Alrededor se senta ambiente grato, solo pareca importar el baile.
Todas sonrientes.

219

Anglica Gonzlez (43 aos)

1-

Qu percibas a tu alrededor mientras bailabas?


Alegra, relajacin.

2-

Cuando bailabas, mirabas a tu alrededor?


Si.

3-

Te ocurri algo mientras escuchabas la msica?


Me daban ganas de bailar, y me daba energa.

4-

Hubo oportunidad de establecer contacto fsico con otras o tocarte a ti


misma (roce, tocar tu cuerpo, tomar la mano, etc.), en el taller?, y Con
qu fin lo hacas?
Si, de relajacin.

5-

Usaste tu voz dentro del taller? Si fue as, Cul fue el tono y que
palabras usaste?
No.

6-

Cules eran tus movimientos dentro del taller? Y Qu te ocurri tras


moverte as?
Piernas, brazos, caderas. Nada.

220

7-

Te sentiste flexible corporalmente dentro del taller? Y Te fue fcil o


hubo dificultades?
A veces, a veces fue fcil.

8-

Cmo definiras la experiencia de danzar en el taller de danza?


Agradable.

9-

Tuviste preferencia por algn aspecto del taller?


No.

10-

Te sentiste cmoda contigo misma? Y con los dems?


Si, bien.

11-

Cmo fue la sensacin de tener personas a tu alrededor mientras


danzabas?
Bien, grata compaa, alegra.

12-

Qu sentiste cuando se te solicit repetir algn paso?


Que estaba bien. Repet para hacerlo bien.

13-

Sentiste alguna vez gozo, agrado o satisfaccin dentro del taller? De


qu manera?
Si, generalmente. Alegra, energa.

221

14-

Qu te desagrad ms? Y Qu sensaciones tuviste ante ese desagrado?


Nada.

15-

Descubriste o notaste algo nuevo en ti o a tu alrededor mientras


danzabas?
Sensacin de agrado, y tambin en mis compaeras.

Patricia Bastas Gmez. (42 aos)

1-

Qu percibas a tu alrededor mientras bailabas?


Alegra que no senta hace tiempo al verme bailar de nuevo, pero sin
consumo.

2-

Cuando bailabas, mirabas a tu alrededor?


No, a veces, mas bien no, Por qu me gusta sentir dentro de mi el baile
que lo hago desde muy pequea.

3-

Te ocurri algo mientras escuchabas la msica?


Si, cuando era adolescente me record cuando bailaba y escuchaba en
mi cuarto, sola.

222

4-

Hubo oportunidad de establecer contacto fsico con otras o tocarte a ti


misma (roce, tocar tu cuerpo, tomar la mano, etc.), en el taller?, y Con
qu fin lo hacas?
S! Pensaba en mi esposo o en mi hija y me alegraba.

5-

Cules eran tus movimientos dentro del taller? Y Qu te ocurri tras


moverte as?
De cadera, sensual. Sent felicidad ya que el baile siempre lo he llevado
muy dentro de mi.

6-

Te sentiste flexible corporalmente dentro del taller? y Te fue fcil o


hubo dificultades?
S! Pero algunas dificultades como: Dolor fuerte en la espalda.

7-

Cmo definiras la experiencia de danzar en el taller de danza?


Bonita, interesante, aportaba a la alegra y a relajarse mucho,
estupenda.

8-

Tuviste preferencia por algn aspecto del taller?


Si slo el baile movido, (Como la msica rabe).

223

9-

Te sentiste cmoda contigo misma? Y con los dems?


En este si y en otras como pasos y pasos. Dolor de espalda. Bien porque
la alegra es mayor.

10-

Cmo fue la sensacin de tener personas a tu alrededor mientras


danzabas?
Sper bien, ms alegra.

11-

Qu sentiste cuando se te solicit repetir algn paso?


No me gusto, porque senta dolor de espalda y piernas.

12-

Sentiste alguna vez gozo, agrado o satisfaccin dentro del taller? De


qu manera?
Si! Satisfaccin toda porque el baile es mi hobby favorito.

13-

Qu te desagrad ms? y Qu sensaciones tuviste ante ese desagrado?


Muchos pasos repetitivos; dolor y mucha calma en la actividad para el
cuerpo.

14-

Descubriste o notaste algo nuevo en ti o a tu alrededor mientras


danzabas?
En mi volva a sentir mi niez en ocasiones de mucha alegra, volv
cuando tambin tenia 18 aos y estuve un corto tiempo con mi abuela y
ah en esa casa era feliz bailando, sola pero me senta sper bien, y lo

224

practicaba con mi ta, siempre lo hacia, era feliz.- En fin, recuerdos


bonitos.

Trascripcin cuestionario Equipo tcnico de la comunidad teraputica


Carpe Diem

Director de Carpe Diem: Rubn Pavez (Ps)

1-

Observ algn tipo de disposicin (preparacin, comentario, etc) de las


usuarias hacia el taller?
Si, poco pues mi tiempo ah es limitado, sin embargo que les contribuya
en palabras

2-

como nos relajamos, me dio sueo, que rico etc.

Percibi algn cambio en el estado anmico de las usuarias?


No por el poco tiempo que paso con ellas, incluso pocas veces estuve

3-

Percibi algn cambio conductual por parte de las usuarias?


No podra precisar si se debe a ello

4-

Cmo se desarrollaban las relaciones interpersonales, por parte de las


usuarias, despus de cada taller?
Mas calmadas., mas relajadas y obviamente mejor dispuestas

225

5-

Cul es su opinin con respecto al taller, tras su realizacin?


Importante, necesario, especialmente en cuanto hay mayor contacto con
el cuerpo y as mejor conciencia de los que les pasa muy necesario

Psicloga y Jefa Tcnica de Carpe Diem: Carolina Valenzuela

1-

Observ algn tipo de disposicin (preparacin, comentario, etc.) de


las usuarias hacia el taller?
En algunos casos (la mayora) comentaban que a travs del taller
comenzaron a conectarse con su femeneidad y delicadeza en los
movimientos. Se observaron cambios en la postura y en los gestos que
acompaan la conducta. Otras no les gustaba el taller ya que les
costaba expresarse corporalmente.

2-

Percibi algn cambio en el estado anmico de las usuarias?


Siempre la actividad fsica y la relacin con el cuerpo predispone a las
usuarias a comenzar mejor el da. Se relajan, entretienen, distienden y
tienen una mejor disposicin para el resto de los espacios teraputicos.
Adems comienzan a armonizarse consigo mismas y con su cuerpo,
sintindose mejor respecto de ste y por ende se incrementan las
sensaciones placenteras.

226

3-

Percibi algn cambio conductual por parte de las usuarias?


Como mencion con anticipacin, la disposicin durante el resto del
da. Al estar ms relajadas y distendidas enfrentan las dificultades con
mayor claridad y manejo.

4-

Cmo se desarrollaban las relaciones interpersonales, por parte de las u


suarias, despus de cada taller?
El compartir un espacio desde el cuerpo y su expresin estrecha lazos,
permite compartir de manera ms cercana y amena, sin tener que
mediarlo por la palabra que en algunos casos es escasa o imprecisa.

5-

Cul es su opinin con respecto al taller, tras su realizacin?


Me parece que es fundamental que dentro de un proceso teraputico, se
incluyan espacios de desarrollo fsico y expresin corporal como otro
mtodo de comunicacin, como as mismo como una forma de
contactarse consigo mismas, con el ser corporal y con los dems.
Tambin est muy ligado al desarrollo de autoestima y habilidades
sociales.

227

Trascripcin Grupo focal mujeres drogodependientes

Objetivo al que apunt este grupo focal:

Indagar opiniones, visiones, pensamientos y/o sensaciones de parte de


las mujeres drogodependientes sobre el taller de danza en relacin de las reas
de intervencin del programa, y el contacto que establecieron en este taller.

Preguntas:

Cul es la opinin o sensacin personal que tienen del taller?


Qu les paso mientras estaban participando del taller?

Patricia: A mi, me record mucho cuando yo recin aprend a bailar a los 5


aos, y con el tiempo me fui dando cuenta de lo que ms amaba era el baile. Y
cuando ya tenade los quince ..ee.. a los diecisis aos, quince diecisis aos,
antes de empezar el consumo, era mi alegra, de bailar, de porsi nunca lo he
dejado a un lado. No no sal a carretear, nunca puedo salir a carretear,
peroel baile lo llevo en la sangre. El movimiento as, el movimiento no
calmado..me gusta el baile a todo ritmo y sobretodo ese baile sensual as. Y me
record mi niez..fueron muy pocos y cortos lo que tu me pero el baile me
hizo recordar eso. Y lo otro que memuchas veces entr ah muy agotada, con
dolores, muy tensa y sala ehhh. Entraba triste y sala alegre, relajada, sobre
todo con tus masajes que no lo puse ah, debera haberlo puesto, eso. Y lo otro,

228

lo que me no me gust, sinceramente eeee, los pasos que eran muy as, no me
gusta como la danza muy as como
Anglica: Coordinada! Muy como cuadrado.
Pamela: Muy coreogrfica!
Adela: No te gusta?
Patricia: No, me gusta bailar con otras personas, o yo sola, pero el baile as
como
Anglica: Espontneo!
Patricia: Espontneo, y cuando yo lo hago yo cierro los ojos y me conecto,
igual que lo hace una persona que canta, que cierra los ojos y se concentra en
lo que esta cantando, eso me pasa a mi con el baile. Ese es mi hooby, y siempre
lo he hecho, de hecho eee, lo voy a volver a retomar.
Violeta: A mi, ee a mi me encantaba tu taller, a mi me encanta bailar, as
siempre he soado con ir a una escuela de danza, por que a mi me encantan los
pasos tcnicos, que se me hacia difcil hacerlo, pona el mximo de empeo
posible, pero siempre he soado con estar en un escenario y montar una
coreografa as, as bien hecha, as con instructores ensendote, as, oda la
onda, todos pa all todos pa ac, con produccin cachay vestidos. Me encanta.
Me gustaba, eso es lo que puse en la hoja, que era lo que mas me gustaba de tu
taller as que tenia esa parte as como coreogrfica, que a pesar de que eran
pasos sencillos, a mi me gusta bailar, me encanta, yo soy de discoteca y esa
onda pero ah tu te movis como queris po as lo que queris. Pero a mi me gusta
el baile estructurado, as coreografa y aparte que me gustaba trabajar contigo

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porque tu eri una persona sper empatica, eeee o sea trabajai con personas
que son, que tienen un carcter complicado como son las personas que son
adictas y muchas veces tambin te jug en contra la disposicin de algunas
compaeras, cachay y tu dale, ya, no importa, no quieres bailar filo sintate
ah, cuando quieras bailar te levantas y lo haces, pero igual trabajai, de
repente ramos tres las que queramos bailar y con esas tres le dabai, ya y de
nuevo y toda la onda y bien as, me encanta tu taller.
Patricia: Lo otro tambin que lo que deca Violeta, a mi muchas veces me dola
la espalda, pero igual como que le haca empeo porque a mi me gusta..
Pamela: Pero te sala todos los pasos mal! Jajja. Nooo si era una broma!!!!
Patricia: A mi me ayud bastante, porque yo cuando entraba de repente con
esos dolores, estaba asi como achacosa, el baile me suba, me daba energa.
Adela: Aunque fuese de ese modo?
Patricia: Claro, me quitaba los dolores y todo. Quizs muchas formas de
recibirlo o de percibirlo o que est dentro de mi, que me gusta tanto, que mis
dolores desaparecan. Con la ayuda si, de la relajacin que tu me hacas.
Violeta: Tu taller era completo, trabajbamos, bailbamos, trabajamos la
respiracin, el movimiento del cuerpo, despus al final haba una como esta de
preguntas, como te gusto o no te gusto? Era como bien completo as.
Trabajbamos como todas las reas.
Pamela: A mi, lo que me gustaba, porque una, por el ritmo, la msica que
llevabai tu me gusta, el precalentamiento con el meneo de soltar las caderas y
los hombros me gustaba

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Patricia: Para aprender a caminar mejor


Pamela: Y eso como sensual y femenino que una de repente se le olvida, si en
cambio una camina medio desparram. Entonces eso medio femenino que le
hacamos a los pasos para all para ac, eso era entrete. Igual si lo tenamos
que repetir, lo hacamos de una por una, y no faltaba la talla, no faltaba la
risa, entonces
Claudia: Yo tambin quiero compartir! (se reincorpora)
Pamela: A mi me gust arto. Si me gustaba, una porque me sacabai del
contexto de estar aqu encerrada, no no encerrada, si ni aqu en el tratamiento,
nos sacabai a otro lado y se nos olvidaba que estbamos aqu, estbamos
bailando, escuchando msica. A mi me encanta escuchar la msica, y sentirla o
sea expresarla con el cuerpo, escucharla y expresarla con el cuerpo es genial!,
entonces a mi me gusta, aparte que a mi me encanta esa cuestin.
Violeta: Pero yo me proyectaba,
Pamela: es que es inevitable
Violeta: Pero despus lo supe controlar.
Adela: Pero eso es sper importante!!, o sea despus no te proyectabai, no te
imaginabai en eso?
Violeta: No, me enfocaba en lo que tena que hacer, en bailar en pasarlo bien.
Patricia: A mi me paso, que en cuantos aos, en cuantos aos yo no haba
bailado as!
Sino que sin consumo y con. Mejor!
Pamela. A no, en realidad

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Anglica: Pero cuesta ms


Patricia: A mi no me pas, pa na.
Pamela: Lo que pasa que uno cuando est en consumo y va a bailar ee
Violeta: Te tomai un copete, algo..
Pamela: Te tomai un copete, a bailar y te desinhib. Pero ahora as
Violeta: Caminai hasta en pelota jajaj.
Pamela: Pero ahora as, lucida lcida es diferente, pero igual jajajja, pero no,
igual bien. Porque empezamos de a poquitito, igual yo llegu como ms tarde a
tu taller. A pesar de que dola la espalda y todo, pero igual le pona empeo
Adela: Esfuerzo!
Pamela: El esfuerzo.
Eliana: Yo me acuerdo que cuando te conoc..
Adela: Si po, el primer da odiabai la clase.
Eliana: Pero saque mucho provecho de tu, de tu clase. Y aparte de quererte
mucho, porque te quiero mucho mucho, porque eres una persona que se da de
querer. Yo una mujer de 45, 44 aos tena entonces fjate que no mova ni un
dedo nadaParaba una pata y olvdateah me enterraban. Y ac aprenda a
moverme y ahora igual po, jugamos en el gimnasio y no po, si puedo moverme.
Adela: Si pues, hay un avance.
Eliana: Hay un avance! A sido un avance para mi, que yo no levantaba una
pata. Yo levantaba un dedo y estaba cansada. Bueno lo que me pas al
principio, Y despus intent hacerlo, involucrarme y estaba ah de las primeras

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ponindole empeo y quiero que tu taller vuelva. Lo que ms quiero. Es lo


que mas quiero que tu taller vuelva.
Pamela: Lo que pasa es que uno se desconecta. Uno se desconecta con la
msica y con el baile te desconectai de todo lo dems. Entonces eso es, para mi
agradable.
Adela: Cmo se siente eso de desconectarse?
Pamela: Que no estay pensando en nada mas, que en la msica y en el baile.
No te poni a pensar en queee, que chuta la familia, la casa, los hijos, no se poh,
la comida.
Adela: Es como una evasin sana, puede ser?
Todas: Siiii!!!
Adela: Cmo un mtodo como para.?
Patricia: Es terapia!
Eliana: Es una muy buena terapia, que hace falta.
Adela: Gracias!, Quin ms puede decir alguna opinin?.
Anglica: A mi me agrado mucho, porque, bueno una porque te saca de lo que
es estar aqu encerrada, la msica de porsi te alegra, te alegra el alma y por
mucho que uno de repente no cachara ni una con los pasos que tupero con el
movimiento igual quedabai con energa
Eliana: A mi me gust.
Anglica: Ojala pudisemos tener ms taller, porque es el nico taller que nos
relajaba mucho.
Adela: Aunque haya disciplina?

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Pamela: Aunque haya disciplina. Igual uno se relajaba


Adela: Y tu Claudita?
Claudia: Si yo lo encontr sper entretenido, y mas encima nos entregaron una
sala en el gimnasio por eso.
Adela: Y usted, Silvia?
Silvia: Yo les miraba de afuera a las chiquillas. Como yo no bailaba, las
miraba de afuera y las vea de repente tal como dicen ellas, as como
transportadas, como transformadas, todas alegres. Ahh y llegaban con otra
disposicin aqu, llegaban corriendo tocando el timbre. No como haban
salido.

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