El Imaginario Social en La Modernidad
El Imaginario Social en La Modernidad
El Imaginario Social en La Modernidad
Introduccin
EL OBJETIVO DE ESTE TRABAJO consiste en esclarecer cmo se conforma el
imaginario social en la modernidad. Intentaremos responder a la siguiente
cuestin: cmo podramos explicarnos a nosotros mismos en un mundo
globalizado, con la hegemona de Estados Unidos y la influencia de los
medios de comunicacin?
Hay que considerar que Marx y Engels plantean, en la Ideologa
Alemana, cmo la conciencia est determinada por las relaciones de
produccin. Para ellos las relaciones de produccin constituyen la
estructura econmica de la sociedad, en tanto que las condiciones
jurdicas, polticas e ideolgicas constituyen la superestructura. La
conciencia est determinada por la relacin en el proceso de produccin.
Cuando afirman que las ideas de la clase dominante son las ideas
dominantes de una poca, explican cmo son las concepciones de cada
sujeto y cmo estn determinadas; cabe preguntarse por qu el sujeto es
capaz de cuestionar el orden establecido y no siempre est de acuerdo
Imaginario social
Cornelius Castoriadis acu el trmino de imaginario social y defini el
concepto: representa la concepcin de figuras, formas e imgenes de aquello
que los sujetos llamamos realidad. Esta realidad es construida, interpretada y leda por cada sujeto en un momento histrico determinado. Esta
concepcin, esta forma de interpretar el mundo, es una obra de creacin
constante. El sujeto va transformando la llamada realidad que lo rodea
(1994:29).
Para que la sociedad se mantenga son necesarias las instituciones,
que son las depositarias del imaginario instituido y pretenden mantener
un orden restablecido mediante normas, valores, lenguajes, herramientas,
procedimientos y modos de hacer las cosas. Vivimos rodeados de una
inmensa red de relaciones que Castoriadis llama magma. Instituciones
tales como la familia, los medios de comunicacin, la Iglesia y la escuela
lo que pretenden es que la sociedad contine tal como es. Por su parte el
sujeto, al interpretar el mundo, su mundo, ejerce lo que Castoriadis llama
creacin histrica.
La imaginacin revoluciona lo histrico y lo social. Los sujetos
encuentran una sociedad dada y tienen que vivir en ella pero al mismo
tiempo la transforman interpretando el mundo, transgrediendo el orden
social y as transformndolo.
Podemos afirmar entonces que no es posible entender los conceptos
de sujeto y cultura como entes separados, es necesario mirarlos como
un proceso en relacin. La sociedad no es la suma de los sujetos que
la componen y tampoco la subjetividad es la suma de los factores
sociales, econmicos, polticos, ideolgicos o de cualquier orden. As,
afirmamos que:
a) Lo que llamamos realidad de racionalidad son obras de la creacin.
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Modernidad
La modernidad es un proyecto inacabado. As inicia Habermas (1989:9)
El discurso filosfico de la modernidad, donde intenta dar respuesta al trabajo de Lyotard (1995). Para Habermas, el discurso de la modernidad queda elevado a tema filosfico desde finales del siglo XVIII. Por su parte, Joseph
Pico (1990) nos da una visin general de cul es el debate y por qu es
importante para comprender a la sociedad moderna.
En tanto, Berman define a la modernidad como una experiencia vital,
la experiencia del tiempo y el espacio, de uno mismo y de los dems, de
las posibilidades y los peligros de la vida que comparten los hombres y
mujeres de todo el mundo de hoy. Llama a este conjunto de experiencias
la modernidad. Concluye que ser modernos es encontrarnos en un
entorno que nos promete aventuras, poder, alegra, crecimiento, transformacin de nosotros mismos y del mundo y que, al mismo tiempo,
amenaza con destruir todo lo que tenemos, todo los que sabemos, todo
lo que somos. Los entornos y las experiencias modernos atraviesan las
fronteras de la geografa y la etnia, de la clase y la nacionalidad, de la
religin y la ideologa; se puede decir que en este sentido la modernidad
une a toda la humanidad. Pero es una unidad paradjica, la unidad de la
desunin: nos arroja a todos en una vorgine de perpetua desintegracin y renovacin, de lucha y contradiccin, de ambigedad y angustia.
Ser modernos es formar parte de un universo en el que, como dijo Marx,
todo lo slido se desvanece en el aire (1995:16).
Para Pico, la modernidad es un proceso histrico. Para la burguesa,
es una filosofa que reclama la libertad individual y el derecho a la igual-
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As pues, tras los aos setenta, los modelos de desarrollo econmico, capitalistas o estatistas, entraron en crisis; esta crisis tanto en lo
econmico, social y cultural, hizo necesario incorporar en el imaginario social la nuevas relaciones entre las naciones, entre los Estados y,
por supuesto, entre los sujetos.
Beriain, en su artculo El imaginario social moderno: politesmo y modernidades mltiples, plantea la nocin de modernidades mltiples frente
a la nocin de modernidad europeo-occidental, que con carcter econmico predomina en el anlisis sociolgico; para el autor la idea de modernidades mltiples presupone una nueva forma de entender el mundo
contemporneo de explicar la historia de la modernidad, vindolo
como una historia de continuas construcciones y reconstrucciones de una
multiplicidad de programas culturales. As, advierte el autor, estas reconstrucciones en curso de los mltiples modelos institucionales e ideolgicos
son realizadas por actores sociales especficos en estrecha conexin con
activistas sociales, polticos e intelectuales, y tambin por movimientos
sociales que buscan la realizacin de diferentes programas de modernidad, manteniendo perspectivas muy distintas sobre aquello que hace a las
sociedades modernas. Distintos modelos de modernidad mltiple se han
desarrollado dentro de diferentes Estados nacionales y dentro de diferentes agrupamientos tnicos y culturales, entre movimientos comunistas,
fascistas y fundamentalistas, diferentes entre ellos, pero todos ellos van
ms all del Estado nacional (2003:16).
El ncleo de la modernidad viene dado por la cristalizacin y desarrollo de modos de interpretacin del mundo o, siguiendo a Castoriadis,
de distintos imaginarios sociales, de distintos programas culturales
combinados con el desarrollo de un conjunto de nuevas formaciones
institucionales, cuyo ncleo central comn representa una apertura
sin precedentes e incertidumbre.
Para Lipovetsky (1986, 2000a, 2000b, 2001) la posmodernidad es un
estallido de lo social, disolucin de lo poltico: el individuo es el rey y
maneja su existencia a la carta. Nuevas actitudes: apata, indiferencia,
desercin, el principio de seduccin sustituyendo al principio de conviccin, generalizacin de la actitud humanista. Para el autor, el individualismo se transforma en el nuevo estado histrico propio de las sociedades democrticas avanzadas.
El primer trabajo de Habermas sobre la transformacin estructural
de la esfera pblica retoma, de una manera novedosa y reveladora,
algunos temas de la crtica cultural. Habermas explora el origen y la
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La comunicacin
Thompson analiza la teora de Habermas desde el punto de vista de la
hermenetica de la comunicacin y los medios (1993:21-25). Habermas,
en The Structure Transformation of the Public Sphere, plantea que aunque
la distincin pblico-privado data de la Grecia clsica, asumi una forma nueva y distintiva en la Europa de los siglos XVII y XVIII, que viva un
rpido desarrollo del capitalismo y el establecimiento del Estado burgus. La autoridad pblica pas a referirse, cada vez ms, a una actividad relacionada con el Estado, es decir, a las actividades de un sistema
de Estado que tena esferas de jurisdiccin legalmente definidas y un
monopolio de uso legtimo de la violencia. La sociedad civil emergi
como un campo de relaciones econmicas privatizadas que se establecieron bajo la proteccin de la autoridad pblica. El mbito privado comprenda tanto una economa expansionista como las relaciones personales que se desprendan de esta expansin y que se anclaban en la institucin de la familia conyugal. Entre el mbito de la autoridad pblica, por
un lado, y el mbito de la sociedad civil y de la esfera ntima, por el otro,
emergi una nueva esfera de lo pblico, formada por individuos de la
burguesa que se reunan para debatir entre ellos y con las autoridades
la regulacin de la sociedad civil y la conducta del Estado. En tanto que
los primeros desplegados de noticias y peridicos se interesaban por
diversa informacin, la prensa del siglo XVIII se orient hacia la expresin de puntos de vista polticos. Habermas incorporaba la idea de que
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Horkheimer y Adorno se refieren a la tecnologa, a su papel en la economa y a sus efectos en la sociedad y en la cultura (Tremblay, 1994:39).
Las caractersticas que atribuyen a la naturaleza misma de la tecnologa
son la capacidad de reproduccin y sus consecuencias, con las ventajas
y desventajas que esto conlleva. Explican la lgica del sistema econmico y social que ordena y vive su desarrollo tecnolgico para cubrir sus
necesidades de produccin en serie, de homogeneizacin de contenidos
que imperan en este proceso, y la democratizacin del consumo para
autosatisfacer el consumo.
El razonamiento de la Escuela de Francfort se basa en que la racionalidad
tcnica se confunde, en las sociedades contemporneas, con la dominacin.
Se plantean cuatro criterios:
El primer criterio ve a la industria cultural desde la perspectiva de la
produccin industrial. El segundo analiza las industrias culturales a partir
de las tcnicas que utilizan. El tercero analiza el mercado; estudia la oferta y
la demanda de los bienes culturales. El cuarto ordena los criterios que hacen
referencia a los procesos de produccin capitalista dentro del dominio de
las actividades culturales [Tremblay, 1994:40].
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A manera de conclusin
Fue Cornelius Castoriadis quien acu el trmino de imaginario social y
quien defini el concepto: representa la concepcin de figuras, formas e
imgenes de aquello que los sujetos llamamos realidad. Esta realidad es
construida, interpretada, leda por cada sujeto en un momento histrico
determinado. Esta concepcin, esta forma de interpretar el mundo es
una obra de creacin constante. El sujeto transforma y va transformando
la llamada realidad que lo rodea.
La modernidad es un proceso histrico; para la burguesa, la
modernidad es una filosofa que reclama la libertad individual y el
derecho a la igualdad ante la ley contra la opresin estamental. La tarea
de la modernidad es construir un mundo comprensible, donde la razn
institucionalice el juego de fuerzas polticas y sociales sobre la base del
libre contrato entre seres iguales. La nocin de modernidades mltiples
presupone una nueva forma de entender el mundo contemporneo
vindolo como una historia de continuas construcciones y reconstrucciones de una multiplicidad de programas culturales.
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