Richard Rogers-Ciudades para Un Pequeño Planeta

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Para empezar a fijar nuestra situacion sobre la nave espacial Tierra, debemos reconocer, antes de nada, que la abundancia

de recursos inmediatamente consumibles, inevitablemente deseables 0 absolutamente necesarios nos ha bastado hasta ahora para, a pesar de nuestra ignorancia, mantenernos y sobrevivir. Tratandose de recursos finitos y caducos han sido suficientes hasta el actual movimiento critico. Se podria lIegar a considerar que el margen de error para la supervivencia y el crecimiento del genero humane que se ha dado hasta ahora es comparable al de un polluelo dentro del huevo que se abastece de liquido nutricional para desarrollarse hasta la rotura de la cascara.

Buckminster Fuller

Operation Manual for Planet Earth

1 En 1957 se puso en orqita el primer setellte espacial. Nos brind6 la oportunldad de podernos ob5erv~ar desne un punta de: vista prrvilegiado y signifieD el cornlenzo de una nueva conclencia global, un gran cambiorespec.to.a nuestrarerecton eon eel plane.ta. Vista .desd~'.~1 f:1.spaclo, la belleza de la blostera de ra Tierra as irnpactante, pard 10 es, tarnbien, su fr'agilidad. l.as brurnas de pcluolon. las nendas de la deforestaCion, las ctcatriC'e-s de 103 industrializa:cIQr'i \{ el .cJ'€cimlento qe las ciudadee son pruebas de que. en nuestro busquedadel blenesta r, es ta'h'lQs desUuY($ndo. s i steH1,atic~rm:;n te todos lose I ementos que soportan nuestro sistema de vida.

La supervlvencla de 18 sooiei1fad he dsperidido sierfipre de la s01lvi3- guards del .equilibria entre las variables- de ooblaoion, recursos y medio ameferite. Obvi,areste ~r;ilbipJ:i;l'luVO,cJ;lns~c~encias fatales p:<;lra\?lvlltzaeieaes del pasado. Tambien nosotrcs estarnos suletos a las ley.es d,e Gpntrol de' ,Ia'superviv·eneia, perp,i;ll ccntrario que aquellas, ncsottos eornponernos 18 prtmera civili·za:cion global y soma's; pues los pierrerosen .afrontar .una expansion global slmultaneade la poblacion. asl como el·agdtamiento de 10S; fe,CIHSQS rfa\urales Y I'a erQsion del medio amblente.

• pagiila .~nlerfQr He"ho pO. 01 !>QlDb,e

T es U "'t,nio d eSde e i as p scm 'dol irnocc[{l"fisic" del hombtesobre Ie $llper.ncie.o,,1 pl;;Mlil-' ESlSf1)09 conflgurando lil~rplm~rlt~,la fa', ne Is Tierr.~, Con ·"us' 20 rntliones de habi[anles, "I lirea' . melrllil"llla<1~ ~e'1o~io

c Of~ ~~.luye I a- d LI oad mas: 8';te"nsa: eJel munoo. SClsn"e,Pllo[D Ltbmcy

Mi entre s- escnbo, score m I sob revu e I a n ce rca de 4100 sate I ites. -equlp8q,0S ton instrurnentos meteorotcgicos, de estudio deprocesos de eesta, cceancs Y polares que pr.oces8'h GOntinuBmente elestado de la vegetscron y la atmostera. contrastando los efectes de ra polucion y lae'rosi6:n. Sus datos juegan lJn papel Crucial para deterrninar el grado. ge rnutaclon geologica,sl oatentarnieritogtotrat y el desga-ste'de la oapa de ozono, Son, enese sentido, tesrimontes- de la oreaclon de una eatssttote meoioambfen1al de hlilgriituO.EfS' jarrfas arrontacas por la tlumanidad. Los resuttados a largo plazo de los actuales nivefes de desgaste no estan tQda~f$. ctaros, perc Q:aoa' laInceruoumcre cisntiflca relativa a sus etectos preciscs, rnl eonsideraciori es que debernos aotlcar ,el "prinoioio preventlve" y. asegurar que se tornen medidas para aseJ~urar lasuperviveneia pe las especles de nuestro planeta,

Resulta sorprenderrta, sobre todo para un arquitecto, constatar que son nuestras ciudades las que estan provocando primordlalmente esta crisis- medioambient.al. En 1900, s610 una decirna parte de la ooblacton vivia en ciudades, Hoy dia, par primera vez en la historia, 10 rrace la mitad de Ia pootaclon mundial, y en un plazo oe treirrta arios ese Indice puede lIegar a los tres cuartos de la poblacl6n. La poblaci6n urbana se incrementa 'en 250,000 personas <11 dia, 10 que equivale aproximadamente 1'1 ia aparici6n de un nuevo Londres cada meso Este crectmiento planetario de la po.blaci6n urbana y 18 precariedad de los modelos de habltabilidad estan acelerando, al rnlsrno tlernpo, el grado de erosion y contarninacion.

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Resulta parad6jico Que 81 habitat de la humanldad -nuestras ciudades- sea el mayor destructor deleceslstema y La mayor arnenaza para 113 suoervivencia del hornbre sobre el planeta. En Estados Unidos, Ia poluclon procedente de las ciudadas ya bs mermado un 10 % las cosecnas. En Japan, los residues producidos par la eludad de T0- kio se acercan a los 20 rnlllones de tonetadas al ana, y ye han llevaco a lasaturac16n a 113 bahia de la capital. Ciuda.s de MeXICO ha conseguido secar practlcarnente 'sus dos rfcs, y el trafico de Londres contarnina mas eJ aire de 10 Que 10 hacfa la combustion de carbon antes de las medidas tomadas en 1956 para controlar la polucion. Las ciudades generan la mayorfa de los gases que produeen el "efeeto invernacere", y figuras tan respetadas como Sir John Houghton, director de la comisi6n que asesora sabre carnblo cltmatioo en las Naciones Unidas, ya advierten sobre los d'esastrososefectos que. pueoen conllevar los actuales granos de emisi6n de dichos gases.

Asi, a pesar de que las necesidades urbanas y (0 Inevitable de su creclmiento continuado no disrntnutran, vivir en cludadas no debe lIevar per se a la autodestrucci6n de Ja civlllzaclon. Par ella, estoy convencido de Que la arquitectura y la planijjceci6n urbana pueden evolucionar para aportar herramientas imprescindibles enearninades a salvaguardar nuestro futuro, creandontudades que procuzcan entornos sostenlbles y civliizadores. Este libra pretende de-

Mil es de mill.o nes

i'QblaciGn rural

II PO'olacian urbana

Creclrruentc de I" pabJaCfon ·mundfal

mcstrarque lascludades futuras P!Jetien ser el trarnpolfn para restaurar Ia armenia perdfda entre la oumanidad y su media.

EI motive de 011 optlmlsrno tiene su origen en res facter.es: 1a djfij, sl.i5'h de la eenctenela ecel6gica, la -teen-plogta de lascernunicacienes y 18 proouccion .autornanzaoa. Todt)s ellos _constitUyer, condlclones para el desarrollo de unaeultura urbana postinoustrla', sensi'bililam con e! entorno y:Sdtialmente res pons_pble. Cientiflc'os, n[Qs9~os, econornlstas. po tJtic;o;s, urbanlstas arfiStas y ciuoadancs de todo eJ rnunco, esrarr eXtgieh-do que, las perspectlvasgtobatuadores se mte·gr-en en las est(@tegl;a;S de erecirntento-futcrc. EI mformede las Naclones _Unfdas Nuestro futuro encomun oropuso ya el oonceote de ~desarroll6 sosfen)"db" como columna vertebral de Iq;;. politicas econdmicqs gobales,: csbe resolver nuestras necesldades -aatua[es:srn comprometer IClS de futuras generaeloaes, al .trempo que deberfarnos encauzar nuestro desarrO'llb en favor de la mayprfa-:' tospobres.

EI nuctee de-este cencepto-oe sdstenibilidad radic.a .en 18 redefimcj6n de la riqueza paraque esta lncluvaet capital rtaturat: airs, agua Jimpta, capa de ozone en conaieiones, mar incolltamin<'ldo, tierra fertH y una.abundante diverstdad de especies, Los medias proouestos para a.se,gurar la protecci~1'I de .estecapltai natural asia en las regulaciones.y, ann mas lmpertante. en 18 tasaconadecuane del uso ql,Js el mere-ado haeade dlchoeapltal, un bien hasta haee poco constderado I1nlitado Y g(atuito. EI obje,tivo definrtlvo de un desarn!litQ econernlco sosternble es pod~r legar a las generaciOnesfuturas ese eapftal nalural ern corrdiolorres p:arec)dq-s, 0 incluso mejQ(8das, de fa que nosotros hemos heredado,

La aplicacion daesa "sostenJtHlldad-" no l1ueue corrllevar en nfngOn lugar rnayores berteflcics P9lefldele.s.-qtle en las, (JllJdades. De hacho, los henefreros qu--e se deriv<;In cj_e esa emf0Que son, a priori, tan grandes que la sastenibilletad rnedioembienta! deb'eria convertlrsa en el prfnclp·td rector de la mouerna proy:ectaci6n urbana,

Si tas dlld,adese_stt:tn rntnando el equilibrio ecologtco de! planeta se debe a que nuestras pautas deco'mportamiento social 'I econornlco

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Disp:ersi:o"lJ Ur~anil msen.sata

.. Pf>~f!njx. ArttrlM. ocups 1'10\1 unterntono tan vasif:t corne ·Iii· deSpafft:irnada Los i\ng9~es, rm e-~I@:~ qt:le su ""Wi>cii'in as Ire. veces mcnor_

D.at.'Id HLlm - MillJilOlj'l

son la causa origfnai"ia de.un desarrollo q!Je pro1:luce un c.tesequnibrjn mediQambiental. Tanto en 131 rnundo aesarloliadd Bomo 8(1 e[ qblB esta- en Vias de de;;arrtl1l0, el1mp~wiso protpgonizado por las ciudades parsce ester Ile~ando a su limite.. EI ·gratla de ereeirnierrto de las ciudade;s nrovoca que Ins parametros convencfonales de ajusre del crscirniento urbane ha'yan queaado qbsol.etos. Enel rnunrfo cesarroua- 9Q, la migraci.o.n d,e perseries. y .actividades ecenorntcas nesde 131 centro urbane al mundo id I;! \II de Ins bani9s perTferrtJOs ha conducido a un ingente desarrollo suburb·and, mayor ecupacion en sistema viafio inc_r,emerrto en 81 uSQ.uelautomov.ll, mayQF €1:rnge&ti6n y eorrtarninacien -come puede f:adJn1elite-apr_e(;Jars~ en ciu-dades del Oeste de Estg-dos Uf1ldos como Phoenix y Las Vegas-. Entre tanto, en las e.I';OnQrl-1fas tie rapido -brecimientp de 1'0.5 ppjs-e's en vias de desarrollo, 5e construyen a un extraofoinarfo' ti,tm6 nuev~rs ",iud_Cities de gran densld_ad, eon POQ_g onlng_urra-cqrmiencii? de su futuro lrnpacto ' social 0 ma,dioammfentaL En tacto" .el rnuneo, mastVOs fluJQ~ migr<;ltol'ios proeedentea oe un mundo rural pohre 58 .aslentan Em estas nuevas ciudades del c,i;)nsumo. La situaelcn de la pOQlacion ponre E?$ un ternaque se ehvla en teoo e.l rnuodo: En el mun.PIil desi3rrolladq, ios pobres quedan M~"(a del clelo eonsurrnsta y se absrroenan yaisfan en guetcs urbanos, mieritras que en los paTses en ViES. de d'esarmllo son relegados a la precariedad lnsalubre- de pobladosbattaqulstas dOllSe los reslderrtes ri.egale's c sin censarsueten superi;lF el rurmero de los oficf:ales.

t.as ciudacre:se'$ttin Ptod.ticiM.do UlW pe.IJgmsa inestabilidad social asoeiada al Ineliitable declive medioainbiental. A cesar del in9r~r!lento. gl:obal de fa rirlueza, que supera al de la poalacion, 18 pob-reza empeora y si~ue c.tecierido. Mu.cM de esta gel1te pobre vive en los entomos mas;i'6rdidos, expuesta al limite de las CO'rtcHcjones, ,de hatiitabjlldad y psrpetuando el ejdo. de erpst6n y contamlnactcn. las curdades estan destlnad-as a aloergat una pfopor:'cion egG,,! vsz mayor de esta pobla_ci.on pobre Y ne oeoerta sorprender a na'die que las sociedaces, taltas de la igualdad rnaaelemental, sutran una aeusada erosion so.dal y que aoentuen la f'lrecafieda'd medloamalerttal. tectores~l]ib'ijs que van erurerazados.

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La: pObt~za,_eJct$sempJe\;)" un d_efiCient.e. sistemesannano 'f .educatiVQ, y los conflictos -Ia inju5Iic.ia social en todas sosmaottestecione_~-difi(:Llllanla capaoidad-de tas ctll~;qd~s Raei'! ser ,sQ.slenibLes medioambTe-n'talmente. Las- que hahsufrtdb' una guerra ,civil, como Beirut; las Que sufren de una pobrezaextrema, como Bombay; las qu:eh a n en aj enado a co;ns iperab I es segrnentoedeta pohl acion 'en, S\.l camino hacia ia nqueza, eoriitl Los Aiige'les~ e las que petsigljen 8'1 'be(1efi\'=lo inme:diatoc:omounica meta, como Sao Pall lo, darian alene terno en detrimento de todos. No puede existir arrrtorua cludadana ni mejoras medioambientaies sin el respeto de los derechos humanosy lapaz.

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Las tiuJ:jade,s oel primer mundo,e! mutidb desarronado. oontienen comunidades privada5' de las necesiaades mas .. elementates, peroes en las urbas de.rapida expansienprcpias del ml)ndo en vias de desarrotlo, .oondelos pobres parecen vivir Sin 'reg¢neracI6h oosible. ,Si descuidarnos este problema, los problemas soctales y. ecotogicos de estas rnegapofis domin_\3ranprOri~O .etentornc humano. La idea dJ~ oueunos pecos ricosp\-.lEfdenCot1tJnuar votviendc' la .espalda a tales problemas y seguir actuando desde sucornodo aislarnientc respecto a estesaserttamieruos d.e d;esolaci6ri es sstrecha de rriiras,pues 18 tattace una rnfruma igualoart provoea una presfon constantacue atenta cagtral a armrm ta socia! y. 1<:1- ePhesian ciudedan a,

Acemas d,e procuraroportun.idages de empteo yenriquectmiente, I.as eiudades construyen el marco fisico de las. distirrtascomunidaaes urbanas. En 1"8;5 d~imas9~G?da5, en toce.ei mundo, este marco. pu.plieo ·de las ciwdades;el espacioenlre edifi¢io· y edificib-, se ria visto.serismente dariado 0 erosionado. Este proceso na .ecentuado la potanzacion de la sociecac y i;iumentra,dp 1:3 pobreta y Iaeltenacion, haciendo necesarios nuevos conceptos de planiflcacion urbana que, integren las responsabiliq'2,Idesso.cial~s . Lasciu:g'aSles han creeido y'han carnbiado hasta corwertirse en estnicturas tan eernplejas y tan poco manejabtes quese haoe ditT"Cii recorder que su exlstenciase justifica para satlstaeer.ante todo, las necesidaces hurnanas ysotialJ:;s delas comunidades; de. heche, suelen fallaren este punto, S1 preguhtafafrios a la gen-

te qqe son las cludades, es probable q.ue nos habtassn mas de coches y edific!·os que de caltes y plazas. Y si tes pregunl:arafHoS,aCe'l','tJa de la vfda en fac:iudad, 80S t18l;ljariarr prob:abJemente de a1fenacldh, ilislanlienl0, delincuenela, atassos Y eentammactco, ri1as que de sentido eomuntterto, participacien, antrnaclcn. belle-ta, 0 placer. Probablementetdirlsn que la,st&rmrnos' "elu.dad" y "calit::lad de vida" son Incernpatibles. En el mundo desaripllada esta re'ii1li.qad GOffduce 8 una segregacr6n de-las ctssesasomenanas a arrlbltos privadbs rectuldos. y vigi'lac!os, djfe1'Emcjado~ de iGS de los PODT;BS, d.espojoir.'ldo a la cludadania de to-do su sig'nificade.

La c,LLldM ha aaabadi3POf .serenteneiua come un templo para el consurnismo. LEf converueneia p-olitie;a y comerota: ha [nve-titdo 21 enfasis del d~sarfQ.llo urhahn para, en luger r;Jsenca,uzarto hacla Ids neeesidades scclares, asimitanb a determinadiils neeesldedes de fndividu0S o grupos concretes. La co'nseC·ucrdn deeste restringido objetivb he privado;a 18 ':i\,Jdad de su vilalitiad. La cornplejloao de la ·comunldad" hasid"Q de,srnantel'ada y la vld,a putJlica se hadlsecctonaeo en ,G"bmponentes intHvid'Ual<:!s. P~rad6ji'camente, en esta era de gl'ob'aHz8"Ci6n uempcratica, las cludades est an increriientandB 18 polarizac'i6n de 113. sociedaden '&oiedtivQs seg~e.gad0:s.

EI resultade.ce esta cornente-es .el deerive en le vftarldad de los espq~ios urbanee. EI ,politOiQgo Michael Waltzer ha clasificado el espaeio urbano en dosgrupos d'rfere'heli;td@s; "cerraee' y ·'abierto·, En el prlrnercaso, se trat.a de' un especio urbano"ql,l€ desartolla unaunici'i'func16n:;de acuerdo con 18 volufl4:ld de ursanistas y pr.omotores,de la .viaja escuela. E1 espet:io ahiertose conetbe como myJtifunoibnal, d-estinado a una variedad de usos de los que todas pueden pafticipar. EI bcirrlo r.esidencial, 18 U.mer'llzaeion de viviendas, el distrito frAanciero, la zona ind ustna I , los aparee" rnientos, 10.5 tuneles, las clrcunvalaGldtles, los centres eorneroiaies y el propiecoeheson :e'Xponentes ce-espeelos.cerraoos. En tanto que.la plaza y Iq calle cenournda, el meTcadQ, las parques y ias terrezsssuelenser .abiertos. C'uandb n()!> hallarnos en los primeros. solemosir-eon prise, en tanto que en los segundos somos rrtas prodives"a'encontrar Ie mirada d~l-o:t.ro ya p~rticipar ea' la vida comt,Jnitatfa.

'Amba~s categorfas tienen uri papal que desemperiar ,?f1 Ie ciudad, Los espacios cerrados satisfacen nuesrrcs capncnos de tonsurno privado y autonomia y son, en ese sentido, muy eflcaces. Percontra, los espacios aoier tos aportan algo comun:' agrupan distrntas partes cfe la sooiedad y alirrrentan un sentido de toterancia, ooncieneia, identida:d y raspeto rnutuo.

En cualqurer Cc3SQ, en el proceso de planificaci6n de las ciudades seguh los requisitos de Is iniciativa privada. hernos visto eclipsarse la segunda dimension. EL aperturismd 'en el espacio urbane ha cedido lnexeraolernente ante los lrtteresesrcerporativas y, p.a~alelame.ntea sse proceso, vemos oesaparecer la prcpia idea de ciucad mtegradora,

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EI egotsrno y lea segregaclenestan gananoote la partidaal ccntacto y la comunidad, En las nuevas modalidadesue desarrouo urtiano, tas aetividades que sollan solaparse.ahora .se diferencian can ta idea de rentabilizar al maximo los intereses de promotores y comercrantes. Los negccios se agrupan y aislan en parques de negocios, las liendas en centres cornerclales atravesados par callas artificiates. las casas 58 disponen en suburbics residenciales 0 urnaruzacrones privadas. lnevitablernente, lascaltas y plazas de estos falsos espacics ptiblicos estan faltas de ta diversidad, vitalidad y humanidac de la vida eotidiana en la eiudad, Y, tcdavia, peor. las 'calles tradition ales estan vacianoose de contenido social y comercial .. convirtienoose en tierra de nadie recorrida par ocaslonales peatones y rnuchos cocnes. Aunque tagente aprecie lascctnodtcades. sigue tarnbien valorando la verdadera vida ciudadana. tal como dernuestran las multitudes que ate-stan los centres urbanos durante los fines de sernana.

La desaparicion del espacio publico 'abler to no suporte una rnera causa de qljejai. sino que puedeocasionar una cegradacion sociaiextrerna, A medida que se extingue '81 vital ?jetreo de los espacios publicos, psrcemos el nabito de participar en la vida de Is calle. La n-at ura I vigilancia de las calles deoida a la -asidua presencia de personas acaba.siendo sustituida par una necesidad de seguridad privada que con-

vierte f! fa ourdad en rnenes hesp-italaria y mas aHeilarite,ai tiempo 'que em.piei'iiil I/e(sce COfllp,.un es_pa-cio.'9Iari!lnwntB: pel;!grmm, presidldo pore] rnieco.

En respuesta a -e;st?a situacion, loS activpdi3d:Ets pasan "q estar,Gf;lda VS_l: mas $'ee.torizad,8!2, EI mercado 0allejecose hace merrcs atracnvo Eiue ''e'l se~uro centro cotni;l(cil'll, 1,q,z;pI'1.O;)universitalila sa conlilerle en un campus cerradc ¥, progreslvamer'lte, e'i'l16&6 laciu.qed, el,€spapi:O pabltGoabtBrtd ~:SH~ 'en r~gre_si6n" La ,goente acernedada .se reeluyeo se traslada a vivir 'friers, de 'Ia tiWJad, en r:e~inws priv:aaqs' ce_r-rad(')~s donne Cl IQs -mas desfavorecidos no se les pefniite la entrada, anuyentados por sefvicibs de seguridad p:rivad.o~. A!iluellos que no dlspsn-:en~e dinero sen cerno los ;que: 'estan -sTn p:a.pele:S, una cla;>;\;! reJega .. ca. El COnG:e:ptoqe ciUdaq13nl~ ,Gorno corresponsabla de'l entorno propio 'desapar€C8.Y Ia vida en" 18 ~i.uda¢l iilQatra siendo una estruetura limitada por los enclaves -suearbanos p'ri§i.egitJOs ;de los rft()s y gueto'sintethos e, eorno en' ''81 m:wnd('J: en vias de desarrollo, tristes po~laclos- barraquistas. Cre:amos Las ciud'ad'es. P13ra gozaroe los ,8.Spacios c'omLJn;es- y estQS, PaUI,~UAamehtei van 'cbhfigUiEihdose -par.Ci rnanteriemcs atiart-atlbs los unos. ceies alms,

En las ciudades ;en exparisidn de,_EE UU, estes giJ~to.? inte_rnos, batrias o:e' cla$:e i\11e.d1a -fuertemente Vi_gilados, -Oeh,ti:oscbni'erclales y perques d.e negoti-Q;s, (n~.e~;l.Tqn ,de rnanera d'iafana .ese tendenela. Va el escritor californian6 MiKe De vi's desctibiB cOmo- la eluded de Los Ari:g:ele;S\e~t;;ell<ilrlO repetrdarnerite de turnultos uroamis e'ii las (Jitimas desadas, he itl0 crecte;hdb -segregandose.'cC1da·.vez mas hastac;El.,si il"Iilit§ltizars'fr.

Erru:~et('lm:lo par tas.arueras no-s encontramescon el"cintur6rrtox,iCo", un anil16 de verteeeros gig1'lnte~GO~, c_on f,leshechos fadioactivos eindustnas eontarrunantes. A medroa eWe nos adentrarnos, en- la\>iudag, paSilrno$ d'E<;:suba(biQS residenciales patnrltados pOrcompa·i1.f:as ,priva. dasaareas declase' media t,(jn su pro-pia vlgiI an:ci<:lc, basta aleanzar el centro d,e 1\3 eludad domlnada per los gueh)'s y tasnanoas callejer.a,s_ Al.qui, lei divisioh Rampart's de-I Departamento:de Policia de Los Angeles

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investiga mas-aseslnatos que cualqulerotrcdel pals. Flriatrnertte, an el corazon de-I circulo; se emplaza el distrito de negocios, dCmde las eamaras de television yips mecanisrnes de segurid.ad controran pracucemente a caoa peaton.

Con solo pulsar un baton se bl6quea el acceso y se desohegan pantallas a prueba de balas. La· epariclort de "personas inconvenientes" suselta un panico comptaerdo; mierttras tas.carnaras de video graban y los guardias de segurldad se ajustan los clnturones, Ha surgido un nuevo tipo de ciudadela que se defiende rio solo, mediante ?arre:r8s fisicas, altas vallas, atambrss de espinos y puer tas de control, sino tarnoten con unsinfln de aparatos eiectronicos.

En Los Angeles. los autornovues se han convertido .en una fortel.eta movil, donee eristales ancmados preservan la identidad de, tes-pasajeres, cristales bllndadcs protogen de ataques armados, y cierres centratizados de puertas acctonadusdesue el interioraceritaan la alienaci6n pel inotviouo en su propia eluded,

La situacionde Houston es oarecioa. Baja el distnto de negoclos se ha constru.do una trarna de calles suoterraneas de mas de nueve ki· lornetros de longitud, Este laberinta desjurnorsnte, llsmadc con irivotuntaria ironia el "sistema conectlvo", es totalmente privado. 'Sin acceso tiireeto desde la- carle, -s610 puede accederse a el desde los vestfbuiosde los bancos y eornpefiias petroliferas que dominan Houston. Es 81 resultado de la creacion de un nuevo gueto urbane que deja las calles atestadas de. autornoviles coma' reducto de los. pobres y los desempleados, rnlentras que la eiite- dingente cornpra y negocia en un arnbiente confortable, seguro y conaire aconoicionado.

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A pesar de Que las ciudades britantcas 0 europeas no han lIegado t-an lejos, rnuchas ya rnuestran tendencies similares. Tarnbien aqul hemos podido observar la retirada hacia los barrios perltericos y la pobreza credente en los centras urbanos. una mayorpresencia de segurtdao y transports privado ~ Ia proliferaclonde espacios "cerrados". Cualquier intento para corregir la situacion debe pasar par la movllizacion de la partrpscion de 10'S cludenancs en el senti-

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do depertenenbia -<3 la~ ciu-tfad. EI compitl1'Jliso individual pataCDTl l;aC;~lJd'l;l;d reqUlt-a_(!?pltai de cara a g,afilfltJzar un crecImleri:ia,sosteruble, ,(,lue_ss61-e MJT Ci,erta 'emp~fio$qc_jal, -';' cult;lJfal de-.la c,omuf'iidad urbana pu€de re_d_undar en cirmor'lfadvIGa, Es latuerza motri,zql..ie dat;blbr:a-taqps 10;$ aspeetps GI~' fQ vida- ciunadarra, i ncluido el dise-no ,G,e Sus -edifi'i:;!bs.

ere's c3fJ8sionadam'8bte en R:i' impel'Ulrtci;;loei Setitlmiento 'de eju~_~-d'qriica ocrne 8l2.-timulo de- vivaci6ad y humahldad. Egte-:se ma,tnfte:s'ta tanto en -,grand,~s ,bpet:ao/p,nes oiYd_800qnp,__S 8 gr&p ,es,cala como en etras mas es~ontaneas', ~ reaudd-a's Q'l1£,: ci'~an".c(jni!-lntaMef1_t'e, 18 rica divetsiqad de 121 vida urtlan?_ Las'_cluoades -siguen ejef,cienoo delrnartes deniQ)~fafic:6S pO'rque f-acilitan t-rl'lhBJQ-Y son la base del oesaTfqllo:cu)tural! Son centres derromunlGacldn y aprendii:aje y tfe.'cornplejas' esttu¢t'ura~ cPtTrercJale;r, qJberg:qB derwas coneentractones humanas ¥ tecalizan la eMergfa 'ffsiGa.tte'at'iv'Cl e intelecurat. $on'el;llpla:zamiento f.ie-activid'aQ?s'_y fimcionesaltamente divers:Jficadas: exp_oslcidrlBsy rtfanf~e:staQJQne's,baresy p'ate-drales', tlenpa~ yauottories. Me eneaata su oornolnecfon de eollides.-razas, cultures y aetividil,d.e's~, ta rnezcla tle cG:ruunidaq y 8'f!pnirrrgl'to, f9miliarid~d ysorpresa, e incluso el sentrdo de peHgrosa excftaci6nque Sl.Iscitan. Dlsfruto 0011 Ictsgrandes e,qpaCi0stanto oarno de-·ia"animacJ:6n que ap-ottan las te'rraza"s de los caf.?,s, 18 v~vacidad de tasplazas p,ublic.as, ta varra,da mezctClde ~fTlbttos laborates, tiancasy viv-ieiidi'ls que: ocrnPOrten ba'ri"lo:s vivos;

Pase'ando PPf los, grand'l:!s espacics puOliCGS, d_e' Europa -la Galena VittOrlO- EmmamJete de Milan, las Raliifil'as de Barcelona., Idsparque,s dt/l t.endres 0 fosb.'Cjrrios"y plazas de mAtas otras ciudades- me sfento partitipEhJ'ela corffurild_ad 6:il,jdaUanl;l.. Los itaHanos. tienen incluse una palij_bra que describe fa disPQsi-Ci6h dl3 Mmbtes; mujeres-y ninds 'a flelaQi;i1tiatsecon elesaaclo pObjico mientrasrendan canes y pl.a~Bs alatardeoer: te paSS&-ggidta.

Quando las autbrida'des p'arfsilias eCBptaron nuestra propuesta 'de Iipetar la:'rriitad del sol,ar cte_si;gnado para el Centre-PompidotJ, ('fe~cafa a

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converfirlo en una otaza.esteban prornoviendo prectsarnente este.trpo de idea de ctuqadania. La tdea de integrar una anlrnada plaza al pro' yecto orocedia de nuestra admiracion par eseacios publieGs tales como Jarnaa EI Afna en Marraquech, la Piazza San Marco en venecia y el Campo en el corazon de Siena, escenario del Pallo. Hasido pues una gran satisfacclon que la rel-aGiofl entre el .e9ificiD y el espacio pu· blico, entre el Centre Pornpidou y la plaza Beaubourg, haya creade una plaza iritegrad.a en la Vidaciudadana que ha regenersdo los atrededores.

Una ciudadania activa y unq vida urbana vibrarrts sari comporientes esenclales de una buena ciudad y de. su id.entidad cfvlca. Para recuperarlosaul donde S8 han perdido, cabe. involucrar a los eiu.dadanos en el desarrollo de su propio rnedro: deben serrtir Que el espacio publico les per tenece y as responsabilid-ad -suya. Desdeel callejon a la gran plaza, todcs- los espacros: urDC!!lP'S pertenecen al ciudadano ~ son dedominio publico, una, instituci6h publica que, como tantas otras, puede prom over 0 frustrar nuestra existencia urbana. Haspacio publico es ei escenario d~ la cuitura urbana, conde la cludadania se ejerce y donde se puede conesionar una sociedad urbana.

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las ciudades reflejan los valores, el cornororniso y ta resotucton de taseocteoaoes que las envuelven. De ant que el exito de estas dependa de sus habltantes, .su gobierno y la prioridad que ambos otorguen '8 la consecucion de un entorno urbane hurnantzado. Los atemenses de la antlgua Grecia reconoclan la irttportancia 08 su eiudad y el papel que jugaba a! alentar la democraeia moral e intelectual de suepoca. EI agora, los temples, e_1 estadio, 1;)J teatro y los espacios publlcos dispuestos entre aqueUos. eran tanto 18 mayor expresion ar· tistica de la cultura neleruca como et catallzador cesu rico desarrollo humanists. EI cornprorniso hacia la tntercependencla de la forma construida y los ideales quedaba refiejado en el Juramenta prestado 'porlos nuevas ciudadanos: "Delaremos la eiudad mayor, mejor Y mas hermosa de como la heredamcs": La :calidad Del entorno define la propia .calldad de vida para los cludadanos, 'd,el rnisrno modo que larelacion-entre la ciudad y su arrnonla civica es evidente.

vttrubio. Le:o'nard0 de Viric:;i:, ThOl1'l9S Jf?ffer.son. Ebenezer Howard, .Le CorQusT,er. F~ank Lloyd Wt(gnt y B'uc~mjstel Fuller. erttre otres, i<tearon Gt,!.l.ciEldes idE;<Jles que' G.o.nft:gur-9rfan socledaa.es'ldeales, ciudadesque_ al~8tartan uname:jof Ciudatfa:rriC:! Y g¢'r-mltlrfan a IB .sooeoad superar sus Gerer'1.Ciqs. E_n:lanto que tales visfciMs reouctilla§ de las eiudades han defado de t(')rre~sp:on9,erse' can lea divNsidad ycaFrfp'lejjdad oela secledad moderrra, ;esfas tentsnvas _ute-piops r;le'i'leri.an recorderribs qU"I:!;;8 h La erit de Lcn:J:e:mOl>fqpi a, I a arqult.e,ctl.lra eDt! ternporaaea y la planlfrc;acidn urtiana 'e:s:tan ale'stinadas: '8 expresar nuestros valores sbGlE:!):e's y fII0S'ofTqos comunes, Sin . efli'tr'frgd , las r-1!Cdnvers1ones Llfbanas mas reGieMte:s no 51,181 en- t?flejar mas que eJ emp.eilo de ta -trQJlseeud&n del provecho p~rs6h-aL La rLQ:u!'!:ta S!;; ha convertlce en un o!:ijeUvo en 'sf mls-mo mas que- en unr'nedib 'para <llc-anzarmetas scciales mas .<ltTIplias,

La cGonstrucciori de rlueStr(JhijpJtal sigue estando en manes tie las fLle.rZi!l:S d~1 rnercado y di'dada por imperatiyo~s f'nan:C~ifros- a corte jJi'ai:'Gi. No sdrprende que' este haya llevade .a resubtai'fds trememlamente cacticos. cuando at "entefr-tfa arquite_ct6nico de tantos lugares c;o-ntihu,8 como, un pN)bJema polrtleo de n:atr.iraleia alea10rj"$. Las -ciudades SOIl la;curi'ilde la' Civilization, top meteres y eondensadcres :de nqe5tr:o d?s;arrolio cultural. Reihcoq:5Of'arl'as en- .la'S ElfQgram8s pol"iticos resulta contp)ejo" ;;iunql,le_se trate de auteAtiG'as fu"edtes'de- inspl~ (qcii;ln, tl'lmbfen son ~ed.utto dela Ptt';carj~tjad m~s q€?ot'lrqz_onadM:i. Esfu· es 113 dlcorornla de 1<;1 ciudad: su ~ot.encfal tanto para civlllzar como para errttiuteC'er.

Deb-emos; pues, a-esarrdllar una nU'eV9 forma de. ciudaaarifa que respon.da a las necesldaces de 18' ciudad 'rhtfderiia. P-ara ello, cabs una mayor partit1pacion tfudadana y un tlderazgo mas decidit;jo. l'nVall!crar '8 las comunidades en una pattlcipac'i6n cen poder de- decisfOi1 reqtJi€re 'qge el entomo a.rqtJ'itect6riic6 se 'cotuiier-ta ei1a:s'lgnatura educstlva _y 'fdr-rne pade i'rnpofJi;lFl te de los planes deen sefiarrza. 'Ensefrar'Q" 19,s nlfios .acerce tie su entomb urbano CQlidiano les lleva a resoetare filte;nlat melo:((:)r su mecHo. Deeste rnedo, las (;iudape.s s,eeGIlIIJerten en una her't'a'mie,hta neceserla, un Iaberatorio vivo

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p'Qta r a edu caoion. La: sosten i b i I idad medioambien tal deberia can figurarse como asignatura lrtterdiscipllnarentre el arta, a historia. la bioiugfa y la fisica. Por ella', debernos tener a dlsposicion '105 fondos Que permit-an interesar e informar al publicQ. Se debe enseriar eO(1- oucta ctudadana a genre de tedas las edades y. sobre toco, es irnportante eSGUCTli3f 10 que ptantean, Buena parte de rruestra futura calidad de vida depende de esa tarea.

Aunque exista una tendeneia a tadesrnoralizaclon ante la aparente irnpo.sibilidad de conseguir 61 control democratico de laseiudades, existen ejemplosalentadores del tenorneno por todo el rnundo. 'En rnuehos lugares, la ciudad, eli aspectos que van desde 1-8 arquitectura a la ecologla, ss centro de debate publico y sujeto polltico irrenunciable, 10 que contrasts abiertamente eon la negllgencia que' oaosce en Gran Bretaria.

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EI presidente. Fram;;1;>is Mitterrand aflmi6 en una ccasion que ia cultu. ra, y especialrnente la arquitectura, era la cuarta pnorldad de los franceses. a la hora de votar (me estremezco al pensar como' catalogarlan esa misma categona los politicos brltaniccs). En Gran Bretana somas estnctamente conscientes ge (as iniciativas parisinas mas espectaculares, pero estas representan 5610 la punta del iceberg. En Francia se convoca un concurso para todos y cada uno de los edificios publicdS que se construyen, Yfj sean edificiQs de viviend<js, escuelas, oticinas de, correos, plazas, oarques o ciudades eriteras. Los concursos locales de cierto relieve cuentan can un jurado que t:omwellpe al alcalde, un representante de los usuaries, miembros de la comunidad, tecrucos y arqultectos. Existen pequeiios concursos destinados a animar .a los nuevas talentos, aSI corno.grandes cornpeticiones internacionales. que: a menudo involucran ai pronto presidente, concertadas para -asegurar a Francia un lugar de privilegio en la mejor arquitectura lnternacional.

En Gran Bretafia; los contribuyentes gastan 4.000 millones de libras esterlinas al ana en .sus _edificios publicO'S y -el gobierno sigue sin tee her una polftica arquftectdntca defiriida. En 1992 tuvirnos diez concursos pubticos frente a 10$ 2.'100 de Francia. Los brit"irJicosse la-

mentan lie su ar~u.'it-e:ctlJra y, Sin em barge. centamcs eon una nueva gerieh3ci6n de'grandeSarqu~te:t~QS que, con poQas exc,epc-lone's, no ha re.cibidn ningan enc:argd public'o enel pars. Res:1Jlta iriitante vet t:di1:fo s'e rrt,aJugta el talento actual para d~jar- un mediocre le~ado arql.!itectGnico a Jas gerieraeiones futu1'8S,

OuhUba; una cludaCl brasitef1a en rapid~· e~par'1.~iQn. hGl IQgrado 501- venter IQs problemas de creCimiento y nicintetl;mientb ilr<l"eia,s a la p:artidp~lCi6h {;'iudi:\dana Yj a una gj;'!stJoi1 golitiea oe arnplias rniras. Gsmo de§cribke mas tarde, e'ri esta ciwdad se han P>1;lcticoa}jopo.litlcas poliVi3limtes des,tlnqdss :a incrementar la ooneiencia m~dibarll' biental .Y -soclai en tddas .sus facetas, de.sQ.~ [a ecucaolon at cornercia, del transperte a ra planlf,ica61On. 'OOmO' resuttado, -ooS'8 h'q tonseguidi:J una ciuda"daniaQue sf~nte I.a; eiUd:ad como propla y se res~ .porrsahluza de su future.

Rotter,dam, -3 su vez.esorta un eje'ni"ptu 1iJe des$rrollo PFQllloviOO por el Gobiarn9 Y orientade bacla Is comunldad. ElJ:l[an estr.afegicd para Is eludad 'define las Uheas: maestras :qe cara a rnateriallzarel creelrnierrto qg:seaao par les ciudadiiinos, La re'c.ottvftrsi6M de los rnuelles es tem:a de eonrlnusoos estuotos. debates y una colaboracion permanente. La mayor parte de los terrenos' de Iacludad y sus alreoecoresson de'p(apieda~ pOblka y pusden ser cedldos a r~·t'omui1;dad cuando esla 10 estirne neuessrtc, antes de que algun partfcular Pl;Iedacomprarte, Asl, la c!udag espers cteeer como una estruetura celular; escindiendQse ymulttplicandose en veemaartos mixto$ de tres a elrico [TIll personas, d6raoos de lugares de trabaj'o, 'escuelas, tiendas y >;Ilv:te.ntias .. AI. rnenos un terci9de cade nueva corrumtdac consts de excedentes provenlerrtes de otto'S vec-lhdariqs, IQ que: asegura una orerta cohesion soeia: y evtta que Rotterdam se 'divida en ate-as se'g)cegauas'Y Gomuriida!'ies aisladas.

En E"-spafia, uas el flri de la'dictaduca de Franso, las pflmeras .eiet:c crenes rnunlcipalee pusfeton:al ftelRa O~i A,ytfntamlento'de Ea,arce.lana aun gabinete deeidid~ a transformer la ciudad, EI alcalde, Pasqual Maragall., .y su eonbej:al de Oultura, el arqulteete Ori.ol Bohigas. aoro-

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vecharon la ergsnizacren de las OlimpJaElas de 1992 COIj1O tri;l!npblfn de retorrnas vislonarlas que fueror: rnucno mas alia de' las rneras instalaciones onrnoioas. Ello supuso la mstauracion de U[1 plan estrategico para toea ta ciuqa.d, con la r.epctvimentaei6ri de las calles y la creacrof de·15Q- nueva's plazas. Algunos 'de los arquitectos de rnayor renornore mundial fueron llamadcs para irrtputsar algunos de los planes (has anibieiosos de desarrollo urbane. tales como la reconversion del area portuana que habia separado la ciud,aq del mar; una zona costera propia qe las ciudades industriales rnantimas, EI resultsoo ha side una renovada toma de contacto entre la ciudad Y. fi!1 mar a 10 largo de un gran frente maritimo. Mas alia de los proyeetos concretos, Maragall na instaurado un cuma donde el sector privado parece dispuesto a concertarse con el sentir popular, apreciando el proveerrogeneral suscitado par 121 mel-ora 9 largo plazo y reconociendo la irnportencla del ihteres publico. A partir de este preceso democratico. Barcelona se ha recenvemdo en una, ciudad de prestigio mundial que la gente' quiere visitar y donee desea vivir '! trabajar,

Ciudades como San Francisco, Seattle y Portland han incorporado la participad6n ciudadana en la planittcacion urbana en su sistema electoral. En las eleecmrres locales no s-610 seelige un candidate, slno que es posible tamar decislonesacerca del eritorno arquitectonice: c'.Cuanta superfieie S8 va a desttnar a oficinas? 2,Cual es el mejor alande reconversion? i'..Que polltlca de transpor te caoeasoptar? De este modo, los habltantes de estas ciudades se sienten involucrados ycon un cier to sentimiento de controlsobre el de stino de sus cludades.

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Las. politicas fnencioriadas ilustran eorno las socledades urbanas estan desarrollandoestrategias segun su culturaespeclfica'y sus necesidades. En cada una' de estes ciudades extste la asuncion fundamental de que los ciudadanos tienen algo que decir sobre su conflguracicn, y pruebanque una partlclpacion y un verdadero comprornisogubemarnenta: pueden transformar el. tejido ([sico y social de las mismas.

He aludido a algunlXi de loa-problemas a 105, qu~ Sf! enfrentanlas cii.ldades oomernporaneas, Y ,cerno fa {lctivLda-a ciudadana puede eont~jbuir-ij me]tlrar susTtLlacf6n. ParaJe I a'rne,flt 8., debernos perseguir de manera mas de¢fdiaa 61 ¢!'i:siilrrol'lo (;i'e fetnol'!)jgfas -8 lhnovaeicnes q1:lS p'r,6t£;jaR nuestra '8cOI0'gfay humaniC8lil nuestroentcrrro urB:arro;;

La fsuult,ad de la hUal'anitfad P'-afil If:ansmitir los cenociiTiiehtbs eeumulasos Q'e una gener<lICion B oua; para itJi-tic1par y resolver probtemas, constituye una de s,us'g@nc;Jes ventajas. Resulta un factor-de gran 'inspiraGip(l Y sorpresa e1 'heofYo cI€ ,q_D.e 5'010 un centenar .de vlil~s seoaran nuestra era. en (a que ya 'S6 ouede C'Ql15truir enel espaeio, de \'lquell'a que vio hater las prlme-ras, ciuaa:Qes Junto !ill Tigris yel Euftates.

La tecnol'ogf.i3"Y nuestra 'Gapa€ldaQ de,p-redi:CCioFi han transfonhatlo. el munclD, 'inchrso frente a las adversidades mas difi:eil/ils de afrontar. Hi 17~8, <1"1 ec-"Hiomls'ta Ma.lthusa;avirtfl5, qu~,ge:g(jn sus oaloutos, 11;1 rasa de creoirtuerrte t!l;e' la pobracion rnuudta: lbas exceder la caoacidad del planeta para aJimen't1W a futuras genereciones. se e~uiv()c6 porque riO. tuvo en cuenta el censiderable pote~Gial de la tecnQI6gi-a. En 10$ cjen anos que,s',iguierQn a su funesta profecia, f:a po~lad6f1 de G;an Bretana se Gl!)adrupJic6 y 10:5 'avpnCi31, t!1'cnol6gfOos pehniti:eJon rnLjltlpllcarporcaterc;e la pmducbl6n agfiC'bla. H1;I)I en~, la teGrlDlo~.a ev-oluciona aUr) mas depti:sa y ofr6ceo,portutilidaclestodavTa mayores. Entre al invento de I-? bicicleta y. lo-svi<lIes espaoiates han pas ado' s610 das·g,eneraCiones, Y rnenosce meeia entre ,el p:ri'm;er ercenaoor eledtr6nioo y ~<}~ autopistas de la hi'fon:naeiOn.

En5lJ apasiorrarrte analisis de la rfjo'derni9~ mitre-los sfglos XIX "'lxx, Marshall Berman nos re€u~rda el desaflo.que la evolueion teonoi6gic8 ptantea a la tradiCiot;lsocial. los valores religiQsQs y e.conomicos. Cltafldo a Marx, nos .;J:porta una aguda c;}B's(;fipcit1ln de la. co(1dlcion moderna:

Iqda relaci6h congf!la.d,a y r[gf[ja~ con [ada sw cauge de vfej9S Y venerali/es prejpiL~io_s y opinioaes, es i'Jarri~GiQ Pi}f:8 que otras'nuevas. pere» can anticva-gas antes de consol(daT.S8. toao to que es solido S8 di-

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suetve en et eire. ri.iJ:$a~tado 5e pr6fana y, final/heme, los ~hofnb/e$ 5e ven obflgados a encersr las condiciones reetes _de sus viaes y la ri'!Iqci6n CPr1$US cp,n1;iufladi'j no $,.

EI camb;iQ eontteva incertrdumhre y riesgo, el pod-e, de transforrrrary caliibia{ tanto anosotros rmsrncs como al rnundo define nuestra condiclon moderna. Nuestro aran de posibles togrosouedacontrerrestado por nuestra c<!paci,dad para oestruir. Ser mncernoes, pues, vivir baj8 esta paradoja -el dil.ema faustico que Berman expone de manera tan brillante-.

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EJleste: torbellino, las leye;=; del rnercado son las ,q0e ss.han impuesto, pew I'a:'" rnano invisible" de,l merca"(j-6 noes' urra Iuerz8 ni de la naturaleza ni del hombre. La sociedau, en formade gobiernos y otras instituciqnes, tiene la feSp'l'lJ1Ratlilidad eecanalrzar ladinamiG'l de'la vida moderna, orientar la aplicaclonde las nuevas tecnolcglas t confrontar los Viejos vajore,s cen los nueves. La ctudades l<rencarnaci6n dee I a seciedad Y$,uconflguracion' debe stsmpre eval uars€! a parti r de determinados objetivos sociales .. Enese senndo, los problemas de las ciudades no son frutouel acelerado desarrollo tecnQl6gi.co sino OS su i rtesoonsableaol fcacioi1.

La velocidad de los camoiostecnologfcos y, sabre todo,la Velocidad ,y_amplituddesu di'sper;3icm;doti3n a la s_oCi,edad mqdeJtl" de' un po'der potenclal.encrrne, La Agencia para el DesarrD'Ilp O'e 'Ias Nacibnes Uriidas estima que en los jJfoximos treinta aries habra tanta gente inrentanoo conseguir un titu-[o acaoemico como la ha hi;lbitlp cesce los .albores de laciviliz8c(6n' hasta ahora. La. roboilca nbs perrnite alcanzar: mayor rlqueza per c9pit<l con rnenos trabejo y, PDf primers vez desde la revoluci6n industrial, el trabaie nos ocupacada vez rnenos tiempo. Asi, robotlca, educacion, medicina ,Y telecomunicaciones -manitestaccnes de nuestro cesarrelto tecnotogico- apertan las condiciones peraeldeserrouo de nuevas formasde ciudadanla creativa que genera riquel8 para la .sociedad sin necesldad dehrpotecar la sostenibilidad de nuestro entomo.

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EI desafi(jal que, nos ,enftentamos con,$i,8tt;en 'remmciar'a un sistema que expJ.ot~ la tecrrologta POI' un 'estticto ,aran- de l!.lcro para 'olientafiq haci,a f'n~tasde" sostMibllidad. Ellc comportatampfos sustaridales en el compoftamr~ntQhu:i:narro, en I~S; practices de gobierna, "comere ci?lle:s:, arquite'ct6nlcas y uroantstrcss. EJ promotor-que solo cGr\stru,Yl; para allmentar susbenettetos, sin oornprcmiso algun,o con ,e1 media ambierite ril la cBlidad de vida Cfudadana, esta' h'8ciehcro un use aqusf· vo'de :18 tecnol6gia; tentti y,omo aquel que c:ons;,truYe'VAa auto,pfsfa,-en ni'ediu Eie la cil,loaq, sin evaluar conS;ideracidnes, socrates 0 rnedloambl~ntales de mas largo atearrce,

'Soy un gran defehsorde 1£1 tecMlogJa,per-q no de latecnologfa pbr fa -tecnotogf"a. .Esta debe entoearse par y para eJ beo#ffcjo qel ciudadane: debe bJJSIi1i1r iagarantla de los'deH~chos· nurnanos unlversales y ./Jwcurar refugio, agua, eomiea, selud, etJuc&cjQn,e~pefai1.zti y Jjb~J~ tad parator,;los. S0y del parecer de q,ve la c;ud'i:n:l sosteniele pued:e apcrter e! rnarco Ideal patael cumplimlento de esos,dei'e'chbs burnanOsb&st,GGS, y ese Ideal 'sub:y.ace a mi.'enfoqlle acerca de la sostenll5i1iaad: rnGvilizar 81 pens.amislltb creativo y lat:e:cnoloiM:a para <;Isegurar el TutUfO de Ia humanlQad -en -est~ pe'que'fjo pial'lt;!ta de recursos finltos. SL!ponqflaumi innbvacion euya impactbSPQf8 la cludad del s'l· glo xXI-sena ta'r\ radical como el que p[QEiujb la revolution inoustrial en la 'piudad del siglo,,:XIX,

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