Cuando El Diluvio Llega Hay Esperanza

HAY ESPERANZA
Eplogo:
La Conquista
Juan
Fernando
Campos
Prlogo: Dr. Samuel Berberin
CUANDO EL DILUVIO LLEGA HAY ESPERANZA

Juan Fernando Campos A.

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Cuando El Diluvio Llega Hay Esperanza
Copyright 2015 Editorial Hroes del Cambio
Todos los derechos reservados

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DEDICATORIA

A mi pap Juan Armenio, sus enseanzas me ayudaron a ver la vida de una forma
prctica y sobre todo a no evadir la responsabilidad de lo que hago.

La vida es difcil, no la hags ms difcil (Juan Armenio Campos)
Cuando el Diluvio Llega
NDICE
DEDICATORIA ............................................................................................................................................... iii
NDICE ............................................................................................................................................................... 1
OPINIONES ....................................................................................................................................................... 2
AGRADECIMIENTOS .................................................................................................................................... 4
PRLOGO .......................................................................................................................................................... 6
EL POR QU ..................................................................................................................................................... 7
INTRODUCCIN: CUANDO EL AGUA ARRECIA .............................................................................. 9
RAZONES DIVINAS .................................................................................................................................... 14
SU GRACIA ES SUFICIENTE ................................................................................................................... 26
OBEDIENCIA ................................................................................................................................................ 37
PASIN FAMILIAR ..................................................................................................................................... 50
LLOVER SOBRE MOJADO ........................................................................................................................ 59
PUERTAS CERRADAS ............................................................................................................................... 73
GRATO RECUERDO .................................................................................................................................... 83
EN CALMA ..................................................................................................................................................... 92
PRIORITARIOS .......................................................................................................................................... 102
RELACIONES DE VALOR ....................................................................................................................... 111
POR QU? .................................................................................................................................................. 122
QUDESE CON LAS FOTOS .................................................................................................................. 134
FIDELIDAD A COLORES ......................................................................................................................... 146
NUEVOS COMIENZOS ............................................................................................................................. 155
EPLOGO : LA CONQUISTA ................................................................................................................... 167
Sobre el Autor ............................................................................................................................................ 171

OPINIONES
"Tomando como base la historia de No y del diluvio que destruy a todo ser viviente,
excepto a los que entraron al arca, Juan Fernando nos presenta cmo encontrar la esperanza
an en medio de las tormentas que llegan de distintas maneras, cuando menos las esperamos
y a todos sin excepcin alguna. Es un libro altamente recomendado para permanecer anclado
en la fe, a pesar de los vientos huracanados que la vida nos presenta."
Lic. Alex Lpez Pastor asociado de Fraternidad Cristiana de Guatemala, MBA, Escritor de
Emparejarse y de Noviazgo de Altura y editor del blog www.lacatapulta.net

Creo que este libro es un recordatorio y una confirmacin que Dios siempre tiene el control
de todo, que pase lo que pase El siempre est all y que nos da la posibilidad de enfrentar
cualquier reto y dificultad, sabiendo que podemos descansar en El
Tito Muralles, Peridico La Palabra

"Sabemos perfectamente que las dificultades van a llegar, pero poco sabemos cuanto tiempo
permanecern y las consecuencias que traern, es fcil desanimarse. De forma muy sencilla
pero contundente, JuanFer nos recordar que no importando lo difcil que sea el desafo, hay
esperanza."
Csar Tnchez, Conductor de Zona Cero programa transmitido en Ilumina FM 98.1 Ciudad de
Guatemala
"Qu fcil es perder el rumbo de la vida ante las crisis! Pero puedes detenerte; escucha a un
buen amigo. Juan Fernando te invita a pensar en una perspectiva superior: esperanza de lo
alto. La lectura de estas pginas est llena de la calidez y empata necesarias para recobrar el
nimo. Avanza con pasos firmes, y no te detengas!"
Howard Andreujol, Director Instituto Especialidades Juveniles Guatemala.

Las tormentas llegan a nuestra vida cuando menos lo esperamos. Es por eso que Juan Fer
hace un enorme aporte con este libro. Leerlo seguramente te llenar de esperanza sabiendo
que al final de la tormenta Dios tiene preparado un mundo lleno de oportunidades.
Rony Madrid, Iglesia Vida Real

"Este no es un libro teolgico ms para complicarnos el entendimiento del porqu suceden
cosas malas a la gente buena. Es un libro prctico que nos muestra cmo las tormentas nos
llegan a todos por igual en esta vida pero tambin nos da el consejo y la esperanza del
propsito de esas tormentas. Me gusta como lo describe Juan Fernando "Cuando una visin
llega a su vida, se dar cuenta que hasta la ms grande adversidad cobra sentido para poderla
cumplir En este libro podrs encontrar eso Una VISION DE VIDA para poder navegar en
lugar de naufragar en las tormentas de tu vida. "
Dr. Ricky Marroqun, Libres en Cristo.

Cambio. Una palabra que pareciera estar de moda. Aunque hemos experimentado cambios
desde el inicio de la humanidad, estamos ante una era donde la tecnologa trae cambios
exponenciales en todos los rdenes. Cmo vivir los procesos de cambio en las diversas reas
de nuestras vidas? Cuando el Diluvio Llega es una obra que combina profundas reflexiones,
acompaadas de ejemplos cotidianos, un lenguaje ameno y diversas herramientas derivadas

de la Palabra de Dios, como de la experiencia de su autor. Es una obra que le dar esperanza
en momentos de angustia y agradecimiento en momentos de felicidad."
Julio Zelaya, PhD
Principal en The RBL Group, USA
Emprendedor y Escritor Best Seller

Ms que hablar del libro, porque ser lo que ustedes leern ahora, quisiera hablar del autor.
Juan Fernando, un ser humano a quien tengo el privilegio de llamarle "amigo" es alguien que
personifica la fe y la esperanza, no la ensea, la vive. Fe de que, aunque no entendamos por
qu las cosas no salen como nosotros queremos (el diluvio en todas sus manifestaciones), las
cosas salen como ms nos conviene que salgan, segn el Plan Perfecto. Gracias Juanfer por
ser de los contagia al mundo de buenas acciones, de los que siembra esperanza y vive en Fe.
Gracias por, a travs de tu libro compartir tu camino e invitarnos a andarlo.
Tuti Furln, Iniciativa T
AGRADECIMIENTOS
Aunque le cueste creerlo, esta es la ltima parte que escrib del libro. La consider la
ms complicada. Hay tantas personas que es muy difcil colocar nombres sin correr el
riesgo de olvidar uno, sobre todo cuando se es tan desmemoriado como yo. As que,
en primer lugar: Gracias a todos aquellos que saben que fueron parte vital de este
proyecto y an as comet el pecado capital de olvidarme de ellos (Lo siento tambin)

Gracias a Leslie Jimnez. Varios fueron los aos que me propuse en soledad escribir
este libro viendo como cerraba el 31 de diciembre sin haberlo conseguido. Fue su
seguimiento dedicado uno de los grandes responsables a ver terminado este
proyecto.

Gracias a Sakis Gonzlez. Sos de esa gente que en la generosidad de su talento lo
compromete a uno con el ejemplo. Sos excelente en todo lo que hacs, por eso la
diagramacin qued de maravilla.

Gracias a Ricky Marroqun. Tal vez dirs que no te involucraste directamente en este
libro, pero lo has hecho en mi vida y lo que hoy hago es en buena medida producto de
la siembra que has hecho en mi.

Gracias al Staff de iRadios (Luis, Los Mikes, Bernie, Carol, Paola, Manuel, Daniela)
son el Dream Team que todo entrenador quisiera tener para lograr resultados
extraordinarios.

Gracias a Luis Ochoa. Sos un camarada que Dios ha puesto en mi camino para
comprender el significado de lo que la amistad es.


Gracias a Csar Tanchez, sos de esa gente que le hace ver a uno lo que no nos
atrevemos a soar. Tu impulso en este tiempo ha sido muy valioso.

Gracias al grupo de editores voluntarios Jimmy Aldana, Astrid De Len, Yadira Palma
De Snchez, Lili Garca, Flor de Mayo Pacheco, Erik Gonzlez, Alberto Lpez Pardo,
Andy Galindo, Evelyn Bosch de Chacn, Mara Jos Rodrguez, Sheila vila, Ignacio
Gmez, Iris Culajay, Juan Jos Toledo, Nidia Chajn, Mara Teresa Solares quienes
colaboraron conmigo en la revisin del texto y tuvieron que soportar los horrores
ortogrficos y de redaccin que el original tena.

Rony, Vicente, Antulio, Eduardo, Anner, Rodrigo, Henry, Asdrbal, Jos Kont, Luisfer,
Chito, gente fantstica entre muchas otras personas que sin saberlo se han
confabulado para ayudarme a ser mejor persona.

Pablo Jos y Jos Daniel: ignoro si en este momento estn conscientes de lo que su
vida representa para la ma y lo mucho que generan una influencia de cambio. Los
admiro y los amo. Estoy tan agradecido con Dios por el privilegio que me da de ser su
pap.

Amparito:
Eres el constante recuerdo del amor y fidelidad de Dios para mi vida.
En cada tormenta atravesada ha sido tu presencia a mi lado lo que me ha hecho sentir

que el barco navega seguro. Gracias mi amor por tu ejemplo, tu pasin y
perseverancia. Si algo saba Dios que necesitaba para mantener la esperanza, era tu
compaa por el resto de mi vida. Te amo.
PRLOGO
ACEPTANDO LOS DESAFOS DE LA VIDA

Juan Fernando, al titular su libro Cuando el diluvio llega a tu vida, est aceptando
que cada uno de nosotros, tarde o temprano, cuando menos lo esperamos, nos
encontramos en situaciones de la vida como que nos tuviera flotando entre
problemas y conflictos, pensando que eso es el final. Al leer el libro, el lector podr
saborear la diversidad y variedad de vivencias que perdemos cuando estamos
concentrados solo en el problema y no en las lecciones valiosas que trae.

La vida no est ausente de imprevistos pero, correctamente manejados, pueden
ayudarnos bajo la misericordiosa mano de Dios a encontrar cambios favorables que
de otra manera nunca los estaramos logrando. Claro est que en una sociedad de
extremos, unos en el fatalismo y otros en un positivismo incoherente, debemos
escoger vivir con normas balanceadas para disfrutar los cambios que estamos
dispuestos a aceptar.

Si podemos leer este libro con una mentalidad propositiva, disfrutaremos como en la
sociedad, en su diversidad, nos invita a ocupar nuestro espacio y no perdernos entre
las masas, para que de ese modo podamos llegar ms all de lo que hemos soado y
tambin extender ese beneficio a los que nos rodean en la vida diaria.

Dr. Samuel Berberin
EL POR QU
Simon Sinek, consultor, autor de libros y conferencista empresarial desarrolla dentro
de sus materiales la importancia de el Por qu, justamente uno de sus libros se
llama as Empieza con el por qu (Start with Why, en ingls). Sinek seguramente no
es el primero en indicarlo, pero si alguien que ha sido muy tomado en cuenta en los
ltimos aos en el nfasis que ha hecho sobre este tema y la importancia que tiene.
Creo en esta filosofa, creo en la importancia de tener un por qu, creo en la
importancia de revelar un por qu. Por eso inicio con el por qu de este libro.

Lo resumo en una expresin: me carga la falta de esperanza que se est presentando
en el mundo hoy en da. Si el dicho popular nos dice que la esperanza es lo ltimo que
muere, nuestro alrededor est haciendo lo posible por efectivamente matarla. Veo a
mi alrededor situaciones que generan desaliento por s solas, personas que cada vez
les cuesta ms llenarse de nimo, una sociedad que se ve debilitada en su diario vivir
cuando lo que sucede en su entorno resta la fuerza para continuar.

En los ltimos 4 meses antes de escribir estas lneas, escuch por lo menos 7
personas que, en diferentes momentos, circunstancias y contextos hicieron referencia
a la falta de esperanza que depara el futuro. Eso aliment el por qu: la gente est
necesitada de esperanza y por otra parte, Dios desea darla.

Ahora bien, usted se preguntar: Qu autoridad tiene este tipo para hablar de
esperanza? Sac un doctorado relacionado al tema? Es un historiador reconocido
para adentrarse en un pasaje tan emblemtico como controversial? Es un telogo
que profundiz en los manuscritos originales para respaldar su anlisis bblico?
Vlidas preguntas. Le respondo las tres ltimas con una simple palabra de dos letras:
No. En relacin a la primera, ms que autoridad le puedo decir que tengo experiencia.
As es, tengo la experiencia desde la usabilidad.


Me considero un usuario de la esperanza. Por eso me decid a escribir sobre ella.
Dios ha sido generoso conmigo y a lo largo de mi vida ha sido recurrente su presencia
para brindarme esperanza. En ciertos momentos ha sido desde mi propia
experiencia, en otros su bondad ha sido tal que me ha permitido ser testigo de ella en
la vida de otros, pero el objetivo sigue siendo el mismo: llenarme de esperanza.

Por qu alguien que no es doctor, historiador o telogo escribe sobre esperanza
basado en un pasaje bblico? Porque es alguien que sabe que, de la misma manera
que Dios ha alimentado su propia vida de esperanza, est interesado en llenar la vida
de otros y mi experiencia puede servir de nimo a la que usted est atravesando.

Creo en la influencia como un elemento multiplicador, de tal manera que le agradezco
por prestarme su influencia para poder alcanzar a otros con este mensaje. De tal
manera que le invito a que pueda compartir el link de descarga de este libro con otras
personas. Hgame el favor de compartir el link, no necesariamente el libro, al hacerlo
estas personas podrn recibir al igual que usted material de crecimiento personal que
estoy dispuesto a compartirle.

Quiero comentarle que la gran mayora de historias de esperanza que leer en este
libro se encuentran grabadas en audio para que pueda escuchar de voz de los
protagonistas muchos detalles adicionales que en este libro no era posible incluir. En
agradecimiento por la eleccin de este material deseo comentarle que puede
descargarlas sin ningn costo en www.cuandoeldiluviollega.com , estoy convencido
que escucharlas ser un refuerzo de nimo adicional.

Espero genuinamente que en la lectura de este material usted encuentre nimo y fe
en medio de las tormentas que la vida pueda presentarle, puedo garantizarle que,
Cuando el diluvio llega hay esperanza
Telaraa de Bendiciones
Juan Fernando Campos

INTRODUCCIN: CUANDO EL
AGUA ARRECIA


En la celebracin del cumpleaos nmero cinco de Andrs, uno de los pequeos de la
familia Castro, en el ao 2012 realizan un viaje a un centro turstico en Guatemala en
el departamento de Retalhuleu. El viaje represento una convivencia familiar
extraordinaria en la cual acumularon muy gratos recuerdos. En el camino pasan a
un restaurante y, al salir de l, reciben una llamada de los paps de Ayleen, esposa de
Emerson, invitndolos a tomar un caf. Muy emocionados aceptan la invitacin pues
Sofa, la ms pequea de la familia, recin estaba dando sus primeros pasos y queran
compartir con ellos la grata noticia.

Saliendo del kilmetro 93, avanzan alrededor de 15 minutos. Al llegar al kilmetro
75.5 sucede el inicio de la tragedia. Un vehculo que se diriga en la direccin opuesta
a ellos colisiona bruscamente con ellos. Emerson, quien comparte la historia con
nosotros, no tiene idea del tiempo que permanece inconsciente. Recuerda olores
desagradables a su alrededor y el llanto de Andrs como primer sonido que
reconoci. El cuadro es aterrador. Observa a su cuada tirada, su esposa seriamente
lesionada, y el portabeb donde se encontraba Sofa tirado y de cabeza. l se
encuentra inmovilizado dentro del vehculo sin poder salir. La ayuda de personas
que pasaron por all empez a presentarse. El servicio ambulatorio lleg y los
traslada a un hospital que, si bien estaba cercano, careca de muchos implementos
necesarios para poder proceder de manera adecuada.

En el hospital, el mdico comparte noticias difciles a Emerson: era necesario
trasladar a su esposa, cuada e hija a un hospital de la capital de manera urgente
porque en caso contrario se corra el riesgo de muerte. Las siguientes horas
empezaron a convertirse en un tiempo que result eterno desde la perspectiva de
Emerson por la angustia y preocupacin que se acumulaba. Logran movilizarse a la
capital de Guatemala; sin embargo, ese era solo el principio. La nubes en el cielo
solamente estaban apareciendo. La lluvia, la tormenta, el diluvio estaba por llegar.

El diagnstico fue terrible. Sofi, mostraba un cuadro clnico que le presagiaba horas
de vida, razn por la cual se haca necesario intervenirla de emergencia. Un cogulo

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en el cerebro se convirti en el principal enemigo de la salud de la pequea beb.
Ayleen igualmente presentaba este problema y el pronstico de vida igualmente era
de horas. La hermana de Ayleen, estaba con el rostro desfigurado por el impacto
recibido. Emerson era el nico al cual los mdicos le daban altas posibilidades de
seguir con vida. El agua estaba cayendo ya fuertemente, la tormenta arreciaba. El
diluvio en la familia Castro era ms que evidente.

Los temas a abordar en este libro pudieron ser variados. Pudiera ser un libro
enfocado a los amantes del mar, aquellos que les gustan los barcos y los viajes largos.
La historia contiene una de las embarcaciones ms emblemticas de toda la historia.
Ms que el Titanic. Esta resisti lo que la embarcacin denominada inhundible no
pudo resistir. Pudimos habernos adentrado en el tema de familia, al fin de cuentas
una familia se convierte en la protagonista de este relato. Pasaron suficiente tiempo
juntos en condiciones que ameritaron todo tipo de vivencias que pueden ser tratadas
en cualquier libro orientado hacia las relaciones. El tema del liderazgo tambin
resulta interesante, saber cmo un hombre determinado a hacer la voluntad de Dios y
desafiar a su cultura lleg a tierra firme.

Varios pudieran ser los temas a abordar, pero centralmente este es un libro que habla
de Esperanza. Esperanza para los que hemos vivido una tormenta, esperanza para los
que estamos atravesando alguna, esperanza para aquellos que tarde o temprano
podran pasar una.

Pocos acontecimientos han causado el impacto que este ocasion. Fue una revolucin
total. No solamente del ser humano, sino de la creacin entera. El mundo no volvi a
ser el mismo despus de este suceso. La tierra fue distinta. La vida sera distinta. Las
promesas seran distintas. Nadie poda ser igual.

Son muchas las semejanzas del diluvio con nuestra vida. Nos sentimos cmodos por
mucho tiempo. Nuestra vida parece normal. El clima en nuestro corazn nos agrada,
nos hace sentir bien. De repente todo cambia. Los problemas estn en nuestra puerta.

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Nubes negras empiezan a amenazar el sol que veamos. Gotas de lluvia caen del cielo.
La tormenta inicia. Hay un diluvio en el corazn.

Cuentas pendientes. Hijos enfermos. Problemas sentimentales. Un negocio que no
prospera. El empleo que no recibimos. La oracin no contestada... El agua arrecia de
tal manera que la inundacin parece inevitable. Qu hacemos? Cul debe ser
nuestra actitud? Por qu Dios lo permite? Es ms Dnde est Dios cuando mi vida se
est inundando? Le sigo importando a Dios a pesar que ha permitido un diluvio en
mi vida?

Si tuviramos la oportunidad de hablarle, No nos respondera sin vacilacin a estas
preguntas. l vivi un diluvio y sobrevivi! La clave? Dependi ciegamente en Dios.
Logr ver ms all de la tormenta. Hizo a un lado prejuicios, burlas y desprecios de los
dems. Su confianza no estuvo en el hombre ni en sus circunstancias. Se aferr al
creador del hombre y al Seor de las circunstancias.

Ayleen de Castro da testimonio como, en su inconsciencia recuerda a un hombre
vestido de blanco quien llega a preguntarle si deseaba ser sanada. La respuesta obvia
es S. El hombre pide autorizacin a Ayleen para partir su cabeza y poder sacar lo
que le haca dao. Ella accede y el hombre procede. Al da siguiente, nuevos
exmenes revelan lo inexplicable: Ayleen est libre del cogulo, ya no se haca
necesario operar.

La noticia trajo ms que alegra: llen de esperanza a todos. Esperanza que ha
servido de alimento en el proceso que al da de hoy siguen llevando en el caso de Sofi,
quien dos aos despus de haber atravesado por el accidente sigue en recuperacin.
El cogulo fue extirpado, sin embargo como consecuencia posterior al procedimiento
aplicado se provoc una meningitis. Una historia de lluvia constante se empieza a
escribir y sigue escribindose. Un largo proceso de dolor ha sido parte de la vida de la
familia Castro. Durante los primeros casi seis meses, la complicaciones en la salud de
Sofi generaron mucha angustia. Durante ese perodo fue sometida a dieciocho

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operaciones. La fuerza y ganas de vivir de esta pequea de apenas un ao con tres
meses impresion de tal manera que ha llegado a ser conocida como La Doncella de
Hierro. Justamente hoy, que estoy escribiendo estas lneas, convers con Emerson.
La Doncella est en recuperacin de una nueva operacin a la que fue sometida. Es
lindo verla sonrer dice Emerson eso nos hace darle muchas gracias a Dios.

Esa es la razn de este libro: mostrar cmo en medio del diluvio de nuestras pruebas,
Dios enva rayos de luz que brindan esperanza para seguir adelante. Quisiera
asegurarle que todos los finales son felices desde lo que humanamente pudiramos
catalogar as; pero, hay finales que van ms all de lo que nosotros pudiramos
dimensionar y se hace necesario verlos desde la perspectiva divina. Cuando eso
sucede, cuando nos animamos a verlo desde el filtro de la forma de proceder de Dios,
la esperanza aparece y nos otorga fe y nimo para seguir adelante.

Durante las siguientes pginas veremos el mover de Dios en complicidad con un
hombre de fe. La historia se relata en los captulos 6 al 9 de Gnesis. Cuatro captulos
que nos mostrarn a un Dios lleno de Gracia pero que utiliza mano dura para
disciplinar y ordenar nuestra vida. En ellos encontraremos un Dios celoso pero fiel a
sus promesas.

Veamos de cerca sus movimientos. Pero no seamos pasivos. Unmonos a No y a sus
hijos. Edifiquemos juntos el arca. Entremos de la mano a ella. Resguardmonos bajo el
techo en el diluvio. Y contemplemos el arcoris de Su fidelidad.
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RAZONES DIVINAS

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Cuando los seres humanos comenzaron a multiplicarse sobre la tierra y tuvieron
hijas, los hijos de Dios vieron que las hijas de los seres humanos eran hermosas.
Entonces tomaron como mujeres a todas las que desearon. Pero el Seor dijo: Mi
espritu no permanecer en el ser humano para siempre, porque no es ms que
un simple mortal; por eso vivir solamente ciento veinte aos. Al unirse los hijos
de Dios con las hijas de los seres humanos y tener hijos con ellas, nacieron
gigantes, que fueron los famosos hroes de antao. A partir de entonces hubo
gigantes en la tierra. Al ver el Seor que la maldad del ser humano en la tierra
era muy grande, y que todos sus pensamientos tendan siempre hacia el mal.
(Gnesis 6: 1-5)

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Este ao cumpl 41 aos. Bueno, podramos decir que eso es en cuanto al modelo, el
kilometraje aparenta otra cosa. En medio de los grandes desaciertos y errores que he
cometido, la vida ha sido bondadosa conmigo. No lo digo por presumir, lo digo bajo la
referencia de otras personas: no aparento al edad que tengo. Posiblemente mi
constitucin fsica tan delgada colabore en ello (cralo o no peso menos de 100 libras
y uso talla 28 de pantaln). Como toda carretera que uno atraviesa, parte del
kilometraje que me ha tocado que recorrer no ha sido el ms grato que pudiera
desearse. Algunos tramos permitidos por Dios como parte de mi formacin, otros
producto de mis malas decisiones y estn aquellos que son consecuencia posterior a
esas mismas decisiones.

Decisiones Se ha dado cuenta la importancia y trascendencia que tiene esa palabra?
Somos el producto de nuestras decisiones. Nos convertiremos en el resultado de las
decisiones. Nuestro futuro ser, en una gran medida, lo que decidamos en el
presente. Cada decisin vendr acompaada de una consecuencia y, nos guste o no,
tendremos que aprender a vivir con ellas. Es el sistema establecido, es uno de los
grandes privilegios dados por Dios a nuestra vida: la capacidad de poder decidir. l
nos dio la oportunidad de tomar decisiones sobre el camino que recorreramos.
Mltiples opciones, pero una sola decisin que igualmente nos llevar sobre un solo
lugar. Cada quien es libre de elegirlo.

Libres de elegir
l hace la invitacin hacia el bien, pero dej por otra parte la alternativa de escoger el
mal. El libre albedro que nos abre la puerta a la responsabilidad de lo que hacemos.
La escogencia del bien, traer buenas consecuencias. Moiss lo enfatiz de esta
manera:

Hoy pongo al cielo y a la tierra por testigos contra ti, de que te he dado a elegir
entre la vida y la muerte, entre la bendicin y la maldicin. Elige, pues, la vida,
para que vivan t y tus descendientes. Ama al Seor tu Dios, obedcelo y s fiel a
l, porque de l depende tu vida, y por l vivirs mucho tiempo en el territorio que

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jur dar a tus antepasados Abraham, Isaac y Jacob. (Deuteronomio 30:19-20,
NVI)

Escoger el bien sigue siendo eso: una opcin. Una opcin que se hace claro que el ser
humano no eligi en los tiempos que nos relata Gnesis 6. La maldad sobre la tierra
se haba propagado de tal manera que las consecuencias eran inminentes: un diluvio
se avecinaba.

Obstculo para bendecir.
La maldad se convierte en un obstculo para lo que Dios desea hacer, pero un
obstculo que l es capaz de vencer. Todo aquello que sea un tropiezo en la obra
perfecta que desea hacer en nuestra vida ser capaz de provocar un diluvio en
nuestro corazn. Existen razones divinas para provocar diluvios en nuestra vida. El
deseo por perfeccionarnos que Dios tiene ser superior a la comodidad que
pudiramos desear vivir. Ms all de lo momentneo, Dios est interesado en la
eternidad que nos espera.

l hace la invitacin hacia el bien, pero dej por otra parte la
alternativa de escoger el mal.

Desde la perspectiva de Dios, la santidad no es una opcin. No es una bonita
sugerencia o un gran consejo. Es una orden, un requisito. Hebreos 12:14 nos dice
Esfurcense por vivir en paz con todos y procuren llevar una vida santa, porque los que
no son santos no vern al Seor, La santidad es un requisito indispensable para
agradar a Dios. Jerry Bridges dice al respecto El carcter de Dios exige que haya
santidad en la vida del creyente 1

Los diluvios ms que ser una tormenta fsica se convierten en un
trato a nuestro corazn.

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El objetivo de Dios no est en nuestro fsico, se centra en nuestro corazn. Por esa
razn los diluvios ms que ser una tormenta fsica se convierten en un trato a nuestro
corazn. l sabe que el desafo que conlleva un diluvio tiene la capacidad de hacernos
reflexionar y examinarnos a nosotros mismos en cuanto a la inclinacin de maldad
que estemos permitiendo que ingrese y afecte nuestra relacin con l. David lo
comprendi a la perfeccin, reconoci su tendencia natural hacia la maldad y por lo
mismo pidi a Dios que pudiera evaluar su corazn:

Examname, oh Dios, y conoce mi corazn; Prubame y conoce mis pensamientos;
Y ve si hay en m camino de perversidad, Y guame en el camino eterno. (Salmos
139:23-24, RV60)

Consecuencias
Tengo que reconocer que buena parte de las tormentas que he pasado en la vida han
sido evidencia de esa inclinacin al mal que mi corazn tiene. Consecuencias sera la
palabra adecuada. Recuerdo problemas financieros que pasamos como familia
producto de mis malas decisiones y mala mayordoma sobre los bienes que Dios me
estaba confiando en responsabilidad. Fue un perodo complicado. Crisis, desgaste,
cansancio. Deudas que no solo resonaban en mi mente sino que golpeaban mi
corazn al ver cmo los errores se pagan con creces.

Durante esta crisis financiera comprend un principio que me ha acompaado desde
entonces: El manejo de las finanzas no es cuestin de dinero, es un aspecto de
carcter. Es un asunto del corazn. Mi corazn no estaba alineado a la voluntad de
Dios, la maldad natural que mi corazn tiene sali a flote y el reflejo externo se
convirti en un balance negativo que mi familia tuvo que soportar. Ms que un
aprendizaje econmico, tuve que recibir un trato en el corazn. Fui enseado
escolarmente a administrar bienes ajenos, manejar inventarios de productos al
detalle, incluso a coordinar el recurso ms valioso de una organizacin: las personas.
Pero no fui enseado a gobernarme a m mismo.

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La falta de autodominio me llev a lugares que nunca me imagin y que menos dese
estar. Las crisis son complicadas. No vienen solas. Los problemas econmicos
generalmente vienen junto a desagradables acompaantes que establecen su
residencia junto a nosotros. Puse en riesgo muchas cosas, incluso mi matrimonio. La
desesperacin de la maravillosa mujer que Dios me regal como esposa fue algo que
tambin vino de manera natural. Ella ha sido un maravilloso apoyo en el proceso de
cambio que sigo viviendo da a da y tengo que reconocer que mucha del agua que
cay sobre su vida se debi a decisiones que no estuvieron bajo su control, sino bajo
el mo. An as, Dios ha usado todo para bien y en medio que jams quisiera volver a
estar en ese lugar, un sentimiento de gratitud me acompaa da a da. No slo por
haber salido, sino por la forma en la que pude ser testigo del inters por parte de l
en nuestras vidas. A travs de lo vivido comprend cmo lo ms relevante para l
sigue siendo el trato en nuestro corazn.

Sinceramente creo que ninguno de los dos sabamos a ciencia cierta cmo salir de eso,
lo nico que sabamos es que era necesario hacerlo. No era falta de conocimiento, he
tenido facilidad con el tema de los nmeros. Incluso di clases de matemtica, fsica
fundamental y estadstica. Fue necesario que la tormenta arreciera para que las
gotas de la gracia de Dios tocara mi corazn. Mientras no supiera controlarme, o
dejar en Su control mi vida, la nave se hundira.

Es el caso de mucho de nosotros, es mi caso, ha sido su caso, es el caso de Carlos (no
es su nombre real). Su vida por momento podra definirse ante los ojos de los dems
como ideal. Un buen trabajo, casado ya durante 8 aos, padre de dos hermosos hijos,
activo en su congregacin, gozando de una excelente reputacin social. Atravesando
los problemas que todo puesto gerencial conlleva, los logros alcanzados en su gestin
hablaban muy bien de l. Nada pareca marchar mal en su vida. Nada en lo exterior.
Sin embargo las cosas en el interior de Carlos no marchaban bien.

Fue necesario que la tormenta arreciera para que las gotas de la
gracia de Dios tocara mi corazn.

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No es importante para los fines de relato detallar cmo sucedi. Pudo haber sido la
repeticin de muchas historias que hemos escuchado de hombres que sin darse
cuenta resultaron involucrados en una relacin fuera del matrimonio con alguien
dentro del trabajo. Esa era la condicin de Carlos. Manejando con las complicaciones
interiores que conlleva una vida dual, lograba, en la medida de lo posible, mostrarse
ante los dems con el tpico rostro de todo marcha bien.

En apariencia eso era cierto. Hasta que lo inevitable sucedi. Tampoco es importante
indicar cmo, lo cierto del caso es que su esposa descubri el engao. Regresando de
una junta de negocios, entrando a su oficina, se encuentra con una reunin de
intervencin en la que su esposa, su amante y su lder espiritual le esperan para
aclarar los hechos.

El caos fue total. Las cosas sucedieron tan rpidamente que Carlos no tuvo tiempo de
asimilar lo hechos. Haca media hora atrs contaba con una familia integrada, la
estabilidad de un trabajo en el que gozaba de buena posicin, gente ante la que
mantena una buena reputacin. En ese instante todo se derrumb. Su esposa, como
era de esperar, lo rechaz de regreso a casa. Amenaz con restringir el acercamiento
a sus hijos. Su continuidad laboral estaba en peligro.

El diluvio en la vida de Carlos fue complicado. No justificaba nada de lo que estaba
viviendo. Aceptaba con dolor su responsabilidad y comprenda que eran parte del
resultado de sus malas decisiones. No cuestion a Dios. A travs del dolor
experimentado Carlos comprendi que la mano de Dios estaba arrancando cosas que
no deban permanecer en su corazn.

Dios de esperanza
Ignoro la situacin que pudiera estar atravesando. Es muy probable que si tom este
libro como material de lectura, es porque la lluvia est arreciendo en su vida. Crame
que le entiendo. S lo que es estar bajo aguaceros de desesperacin. Es probable

20

incluso que parte de lo que haya ledo le est haciendo recordar esos momentos de
malas decisiones que le han llevado a estar en el lugar en que se encuentra.

Su amor es ms grande que todas nuestras faltas.

Posiblemente la culpa est tratando de golpear su corazn. Sin embargo, quiero darle
esperanza. Esperanza en Dios que no permitir que su barco se hunda. Esperanza en
Dios que permite la tormenta para perfeccionarle, para luchar contra todo aquello
que debe ser erradicado de su vida. Esperanza en Aquel que est empeado en que
usted y yo nos parezcamos y lleguemos a ser como Jess. Su amor es ms grande que
todas nuestras faltas. De tal manera que es vlido seguir las instrucciones dadas por
el autor de la carta a los Hebreos: As que acerqumonos confiadamente al trono de la
gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que
ms la necesitemos. (Hebreos 4:16) Nuestros errores fueron corregidos con sangre y
toda la maldad existente fue derrotada en una cruz. Su amor fue ms grande que
nuestras faltas y es all, donde logramos adentrarnos de una mejor manera a las
razones que le llevaron a enviar el diluvio:

Entonces el Seor lament haber creado al ser humano y haberlo puesto sobre la
tierra. Se le parti el corazn. Entonces el Seor dijo: Borrar de la faz de la
tierra a esta raza humana que he creado. As es, y destruir a todo ser viviente: a
todos los seres humanos, a los animales grandes, a los animales pequeos que
corren por el suelo y an a las aves del cielo. Lamento haberlos creado (Gnesis
6:6-7, NTV)

Dolor divino, transformacin divina
Crec en un ambiente con mucho conocimiento terico en lo relacionado con Dios.
Desde mi infancia la Biblia fue parte del repertorio literario que usted podra
encontrar en casa. Estudi en un colegio en el que todos los das recibamos un
perodo enfocado a los temas religiosos y ms de alguna comprobacin de lectura a lo
largo de vida escolar fue de alguno de los libros de la Biblia (creo que precisamente

21

por una de las preguntas que me hicieron por aquel entonces jams olvid que fue en
Antioqua donde por primera vez a los seguidores de Jess se les llam cristianos).

En medio de todo ese conocimiento terico, que igualmente he de reconocer me
gustaba mucho, Dios se convirti precisamente en una materia ms de un pensum
escolar que deba ser aprobada en una nota tras una serie de evaluaciones en un
papel. Sin embargo, ejerca la misma influencia en mi comportamiento que saber que
el cuadrado de la hipotenusa es igual a la suma del cuadrado de los catetos, es decir,
ninguna. Me llegu a caracterizar por ser alguien que pblicamente gozaba de muy
buena reputacin, aunque aquellos que me conocan bien saban que era un
reconocimiento inmerecido: mi moral prctica real era muy distante de la que trataba
de aparentar.

Hoy entiendo de mejor manera cuando la Biblia indica que a Dios se le parti el
corazn. Era lo que provocaba mi comportamiento. An recuerdo haber ledo este
pasaje por primera vez en la versin Reina Valera 60, indicando que Dios se
arrepinti de haberlos creado. Considero que la Nueva Traduccin Viviente expresa
de una manera ms clara lo que realmente sucedi. Dios no se arrepiente de nada. El
corazn de Dios se doli cuando vio la maldad en el hombre. De la misma manera se
sigue doliendo y entristeciendo cuando observa actitudes negativas en nuestra vida.
Nos ama tanto que no soporta ver suciedad en nosotros. Su amor por nosotros es tan
grande que rechaza totalmente cualquier cosa que se interponga y sea un obstculo
en el cumplimiento de su obra en nuestra vida. Su compromiso por nuestra santidad
es tan alto que est dispuesto a intervenir para que la logremos.

Carlos entendi esto. Se humill delante de Dios. Reconoci su error, no solo en la
prctica, sino en lo que haba en su interior. Acept el proceso, dej que Dios actuar.
Avanz con paciencia, perseverancia y dedicacin. El camino de la restauracin no es
simple. No fue una ni dos las noches que Carlos tuvo que pasar alejado de su esposa e
hijos. Bajo el amor incondicional de sus padres y algunos amigos dej que el trato de
Dios a su vida se diera.

22

Su compromiso por nuestra santidad es tan alto que est dispuesto
a intervenir para que la logremos.

Dios estaba interesado en la restauracin de su matrimonio, pero ms an en la de su
corazn. Ese fue el centro de trabajo durante los prximos das. En ese corazn
necesitado, dolido y arrepentido Dios trabaj de manera intensa. El resultado, como
todo aquel que proviene de Dios, se dio. Lenta, pero progresivamente, los pasos
fueron dndose. La oportunidad de comenzar se dio.

La esposa de Carlos, estuvo dispuesta a hablar. Accedi a que regresara a casa.
Brind la oportunidad de continuar. Estuvo dispuesta a volver a confiar. Muchas s
de estas terminan delante de un abogado. Un par de firmas debajo de un acta de
divorcio hacer terminar aquello que fue sellado con un compromiso delante de Dios.
Afortunadamente este caso fue diferente. Los resultados de sus decisiones fueron
cambiados por la gracia de Dios sobre su vida. Aquel matrimonio que se crea muerto
estaba resucitado. El diluvio fue necesario. La Gracia fue suficiente.

Aunque parezca extrao, un diluvio en su vida representa una muestra del amor de
Dios por usted. Es a travs de la prueba que Dios quiere captar su atencin sobre
aquellos aspectos que debe mejorar, y ser en medio del diluvio donde Dios muestre a
su vida las cosas que deben ser quitadas para mejorar su relacin con l.

PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR

Terminando este captulo me gustara presentarle algunas preguntas que buscan
llevar a un proceso de reflexin con el objetivo de encontrar honestidad y, en todo
caso, acciones concretas que permitan que podamos acercarnos hacia el plan de Dios
en nuestras vidas en medio de la adversidad que nos encontremos atravesando.

23
Estoy tomando las decisiones correctas el da de hoy para avanzar hacia un

futuro conforme a lo que Dios desea que viva?
El diluvio que estoy atravesando es consecuencia de una decisin personal o

parte del proceso de crecimiento que Dios est llevando a cabo en mi vida?
Cul es la decisin ms importante que debo tomar hoy para alinear mi

camino a la voluntad de Dios?
ANCLA DE FORTALEZA

Vengan ya, vamos a discutir en serio,
a ver si nos ponemos de acuerdo.
Si ustedes me obedecen, yo los perdonar.
Sus pecados los han manchado
como con tinta roja;
pero yo los limpiar.
Los dejar blancos como la nieve!

Entonces comern
de lo mejor de la tierra;
Isaas 1.18-19, TLA

ACCIONES CONCRETAS

De la misma manera, cada captulo le invitar a que pueda escribir una accin
concreta que pueda realizar durante los prximos siete das (una semana) como
consecuencia a lo que Dios pudo haberle hablado. No necesariamente debe ser algo
muy grande, pero si algo concreto que le permita darse cuenta que est avanzando en
el proceso que Dios tiene en su vida a travs de la tormenta que pudiera estar
atravesando. Al mismo tiempo se deja un espacio para que pueda escribir el nombre
de una persona con la quien compartir y se comprometer a realizar esa accin que
sabe que debe realizar.

Qu accin concreta llevar a cabo luego de haber ledo este captulo?

24

Con quin me comprometer a realizar esta accin?

25
SU GRACIA ES SUFICIENTE

26

Pero No encontr gracia delante del Seor.
Este es el relato de No y su familia. No era un hombre justo, la nica persona
intachable que viva en la tierra en ese tiempo, y anduvo en ntima comunin con
Dios. (Gnesis 6:8-9)

27

No se entiende
Desde hace mucho tiempo me ha llamado la atencin este personaje. No se relata
nada de su vida en la Biblia, solo las consecuencias de ella. Probablemente eso es lo
que hace ms interesante el desenlace de su historia. La tradicin ha hecho que se le
llame Dimas, pero las Escrituras no mencionan cul era su nombre. Lo cierto del caso
es que sin haber sido un telogo o maestro de la ley, este ladrn crucificado a la par
de Jess se convirti en el ltimo momento de su vida en un experto en el tema de la
Gracia.

Por momentos pareciera un trato no justo. Porque no es justo que aquel que pas
buena parte de su vida haciendo el mal a otros reciba como recompensa, an en el
ltimo minuto, la promesa de vivir la eternidad en la Gloria. No, definitivamente no
es justo. Por eso no se llama justicia, sino que se llama Gracia. La justicia se entiende.
La Gracia no.

Gracia. Desde que conoc de ella ha sido un concepto que me ha fascinado. Busque
entenderla mejor y por ello me aventur a leer algunos libros relacionados al
respecto. Le escritos de Max Lucado, Charles Swindoll, Moody, Spurgeon entre otros.
El resultado? Me maravill todo lo que le, pero fue poco lo que entend. Toda esa
lectura me llev a una simple conclusin: La gracia no se puede entender,
simplemente se recibe y se disfruta. Dios la da, es un regalo de su parte. No podemos
hacer nada para merecerla, dejara de ser gracia. No es posible compensarla con algo,
perdera su carcter redentor. Sencillamente la Gracia es eso: Gracia.

La gracia no se puede entender, simplemente se recibe y se
disfruta.

Maravillosa Gracia
La Gracia le da sustento a todo lo que hacemos. Nada tendra sentido sin ella. An
nuestra fe cobra verdadero valor gracias a la Gracia. Charles Spurgeon apuntal de la
siguiente manera: Por fe todas las cosas son posibles para nosotros, sin embargo, el

28

poder no est en la fe, sino en el Dios sobre el cual descansa nuestra fe. La gracia es la
mquina poderosa; la fe es la cadena mediante la cual el carruaje del alma es
conectado al gran poder motriz2 Logra verlo? An nuestra fe no es suficiente si la
Gracia de Dios no es quien permite que se logre aquello que creemos por fe. Eso es lo
que hace la Gracia, nos permite seguir creyendo, afianza nuestra confianza en Aquel
en quien depositamos nuestra fe. Dios estaba tan interesado en respaldar nuestra fe,
que tuvo que introducir el factor Gracia para que eso fuera posible. Sin la Gracia nada
hubiese podido ocurrir.

Entrar, estar y salir de una tormenta es un factor de Gracia. Su Gracia es la que la
permite, Su Gracia es quien sostiene, Su Gracia es la que rescata. En medio de las
tormentas de la vida, el torrente de la Gracia de Dios es superior. Somos
transformado en medio de la adversidad por medio de la Gracia. Somos renovados
cuando el diluvio llega a nuestra vida porque la Gracia funciona como elemento
catalizador. Es lo sucedido con el ladrn que recibi la dosis de Gracia en la Cruz. Es
justo en l donde se aplica lo dicho por D.L. Moody al decir la gracia, que lo encontr
rebelde, lo deja convertido en un hijo. La gracia que lo hall vagando por las puertas
del infierno, lo conduce a travs de las puertas del cielo3 Y hablando del personaje
que le hago mencin al inicio del pasaje, Moody igualmente indic: El ladrn hubiera
continuado expresando sus blasfemias si la gracia no hubiera contenido su lengua,
afinndola para la gloria.4 Eso es Gracia! La oportunidad de hacer de nuestras
tragedias el mejor momento de transformacin en nuestras vidas.

La Voz de la Gracia
La Gracia tiene el efecto de acercarnos hacia donde normal y naturalmente no
tendramos oportunidad de llegar. Si no me lo cree, pregntele al tipo paraltico. l
sabe de lo que hablo. Durante 38 aos haba padecido de la enfermedad. La Biblia no
relata las razones, solo hace mencin de esto en la historia que puede leer en Juan
5:1-18. Treinta y ocho aos de enfermedad. Treinta y ocho aos de sufrimiento.
Treinta y ocho aos de estarlo intentando. Treinta y ocho aos de no lograrlo. Treinta

29

y ocho aos de regresar con la sensacin de derrota, pero igualmente treinta y ocho
aos de seguir confiando que algn da llegara ese da.

Jess lo vio. Sonri. Con un caminar pausado, con las manos tomndose por detrs de
la espalda, se acerc. Jess interpret su necesidad. Hizo una pausa. Suspir de
emocin. Sigui avanzando. Jess lleg hacia el hombre. Lanz una pregunta que
pudiera estar de ms: Te gustara recuperar la salud? (Jn. 5:6) Una pregunta que
trae como consecuencia en mi otra pregunta: Por qu la formul? Era obvio. A usted
no le tienen que preguntar si le gustara salir de la deuda que lo est consumiendo.
No es necesario preguntar si deseamos que nuestro pap se levante de esa cama de
hospital que lo est consumiendo desde hace meses. No deben preguntar si desea
escuchar nuevamente la voz de su cnyuge que lleva das de estar en coma. Est de
ms preguntar si deseamos encontrar un trabajo cuando llevamos ms de un ao sin
encontrar una fuente fija de ingresos. Hay preguntas que estn de ms. Hay preguntas
que usted y yo no nos atreveramos a formular. Hay preguntas que no quisiramos
escuchar. Pero lo cierto del caso es que Jess la hizo. Lanz la pregunta. No por
ignorar la respuesta. Sino deseoso de escuchar la voz de alguien necesitado y a punto
de recibir Gracia.

Macarena Casse sabe de esto. Nacida en Argentina y radicada en Guatemala, conoci
precisamente del Seor en este llamado Pas de la eterna primavera. Su vida
cambi radicalmente. Comprometida como su personalidad le ha llevado a ser,
encontrarse con Jess precisamente le llev a un compromiso de vida impresionante.
A partir de eso, ella misma se define como una persona positiva, una mujer de fe que
ha aprendido a amar la vida y que como todas las mujeres le ha correspondido
representar muchos roles dada las mltiples ocupaciones que tiene. Su pasin por
transmitir un mensaje diferente de transformacin a las mujeres le llev a fundar y
dirigir una revista: Entre nosotras
A mediados del ao 2012, vindose en la necesidad de realizarse exmenes que
consider de rutina, provocados por un cansancio inusual en ella, se topa con un
diagnstico que en definitiva no era alentador: Leucemia. La necesidad de hacer ms

30

exmenes y explorar para confirmar el diagnstico se hizo imperante. El resultado?
Leucemia en fase uno. Esperanzador, pero complicado. Esperanzador pues el mdico
indica que no ha avanzado, existe tratamiento. Complicado, pues debe ser de tema
vitalicio con un costo de aproximadamente $5,000.00 por mes. Un precio
inalcanzable para muchsimas personas, Macarena entre ellas.

Cmo explicar esto? El silencio era la mejor alternativa. Silencio con el esposo,
silencio con los hijos, silencio con los dems menos con Dios. Macarena llora
delante de Dios, expresa su dolor, pero no cuestiona la razn. Sencillamente le dice:
Seor, no voy a preguntar por qu, slo quiero saber si t vas a estar conmigo. La
respuesta de Dios fue contundente: Esfurzate, se valiente, jams te voy a
abandonar. Eso fue suficiente: ella decidi renunciar al control que estaba
acostumbrada a tener en todas las situaciones.

Junto a su esposo, comparten la situacin con sus hijos y les hacen parte de este viaje.
La unidad se presenta como uno de los primeros resultados y beneficios que Dos
provoc en medio de la tormenta. Los primeros seis meses fueron muy complicados,
mucho dolor, fiebres, complicaciones de salud paralelas. Sin embargo la voz de la
gracia recibida por parte de Dios segua fortaleciendo su vida: Jams te voy a
abandonar

No tengo nadie que me meta en el estanque, indic el paraltico. No puedo solo
sera una buena parfrasis para esta frase. Reconoci impotencia. No protest por la
pregunta de Jess, no le recrimin ante lo obvio de la respuesta. No lo vio con
molestia ni guard silencio para ignorar lo que otro hubiese considerado un
sarcasmo. Probablemente reconoci que estaba delante de Aquel que a travs de la
pregunta que le lanzaba se encontraba la respuesta que tanto estaba buscando. Se
dobleg en humildad. Eso fue suficiente. El maestro tena todo lo necesario para dar
la leccin de Gracia. El alumno estaba listo. El lienzo estaba listo para dibujar la obra
maestra de la Gracia. La atencin haba sido lo suficientemente capturada y las
instrucciones fueron dadas: Ponte de pie, toma tu camilla y anda! Justo en este

31

momento es donde la fe cobra valor: cuando la Gracia se antepone. El Dador de la
Gracia la estaba otorgando y eso posibilit que la fe entrara en accin.

La incapacidad de este hombre por caminar fue cubierta por medio de la Gracia. De
igual manera que ocurri con el andar fsico de este hombre, ocurre con nuestro
caminar espiritual. Ninguna buena obra que hagamos ser suficiente si previamente
la Gracia no ha llegado sobre nuestra vida. Esta es m situacin, es su situacin, fue la
situacin de No.

Pero No encontr gracia delante del Seor.
Este es el relato de No y su familia. No era un hombre justo, la nica persona
intachable que viva en la tierra en ese tiempo, y anduvo en ntima comunin con
Dios. (Gnesis 6:8-9)

El caminar intachable y la ntima comunin que sostena con Dios mencionada en el
verso 9, es producto de lo indicado en el verso 8: el favor de la Gracia que Dios
derram sobre No.

La Gracia antecede
No es digno de imitar en cuanto a la reputacin obtenida. Pero ninguna reputacin
cobra sentido en los niveles celestiales si previamente del cielo no existe la
inclinacin de Dios a otorgar Gracia. Jams No hubiera sido una alternativa de
solucin para la humanidad si la Gracia de Dios no le alcanza. La nave que soport el
diluvio no hubiera soportado si la Gracia no llega a la vida de esa familia escogida por
Dios. La Gracia antecede cualquier obra en nuestra vida. No existe justicia, ni
perfeccin ni mucho menos se puede conseguir un andar con Dios si primero no hay
de Su Gracia. Amigo, en este da seramos estrellas errticas, a las cuales les est
reservada la ms negra oscuridad. Estaramos sin Cristo, sin esperanza y sin
herencia, si la gracia no nos hubiera invitado y constreido 5

32

Es su gracia la que nos justifica: Por lo tanto, ya que fuimos declarados justos a los ojos
de Dios por medio de la fe, tenemos paz con Dios gracias a lo que Jesucristo nuestro
Seor hizo por nosotros. (Ro. 5.1)

Es a travs de ella que entramos en el proceso de perfeccionamiento: Y estoy seguro
de que Dios, quien comenz la buena obra en ustedes, la continuar hasta que quede
completamente terminada el da que Cristo Jess vuelva. (Fil. 1.6)

Entienda que todo lo que en su vida a alcanzado no es mrito propio, nada sera
suficiente si Dios no derrama de su Gracia en nuestra vida. Ha sido esa sublime Gracia
lo que lo ha justificado. Y ha sido esa gracia lo que lo a usted y a m nos ha hecho
libres. Copiando textualmente las palabras dichas por Charles Swindoll: Libre de
qu? Libre de m mismo. Libre de la culpa y de la vergenza. Libre de los impulsos
condenables que no poda controlar cuando estaba esclavizado por el pecado. Libre
de la tirana de las opiniones, las expectativas y las exigencias de los dems. Libe para
obedecer y amar. Libre para perdonar a otros y tambin para perdonarme a m
mismo. Libre para permitirles a los dems ser s mismos, distintos a m! Libre para
trascender las limitaciones del esfuerzo humano. Libre para servir y glorificar a
Cristo6.

El mdico recomienda a Macarena ir a uno de los hospitales pblicos de Guatemala,
donde existe la remota posibilidad de recibir ayuda en relacin al tratamiento. El
sistema pblico de los hospitales en Guatemala pudiera ser muy similar al de algunos
pases: duro de transitar y conseguir los objetivos que se persiguen. El proceso
podra ser igual de tortuoso que la enfermedad misma. Pero junto a la voz de la
Gracia, se haba acompaado la instruccin a seguir: Esfurzate y se valiente.

Ello lo fue. Lleg al hospital. El trato no fue el ms amable. Lo comn en estas
situaciones. Una enferma ms, de una enfermedad ms, de las muchas que pasan por
all cada da. No era una persona, era un agregado a la estadstica de un pas que ve
morir diariamente personas que no reciben la atencin adecuada. Pero all es donde

33

el pasado se convierte en el presente que ayuda. La persona que le atendi estaba
escuchando radio. Pero no era cualquier emisora. Se trataba justamente de la misma
en que Macarena, tiempo atrs haba colaborado en grabar unos audios dndole un
mensaje de nimo y esperanza a las mujeres. Las miradas se cruzaron. La persona
del hospital reconoci la voz de Macarena. Su semblante cambi. La situacin cambi
diametralmente.

La fra e indiferente recepcionista que minutos antes haba visto en Macarena una
simple estadstica ms, vea ahora el rostro detrs de una voz que le haba ayudado en
el pasado a travs de lo que ella pronunciaba todos los das en la radio. De esa
manera Macarena experiment la vivencia de la Gracia que Dios le estaba dando para
con la gente. El resto del proceso se desarroll de la misma forma. La persona que
deba agilizar el proceso del trmite para obtener la ayuda en la provisin del
tratamiento le identific como la editora de la revista que lea frecuentemente para
fortalecer su vida. El pasado de Macarena, se convirti en el punto de referencia en el
presente y justamente, al igual que No, le dio la Gracia para enfrentar el diluvio que
estaba atravesando.

Han pasado ms de dos aos desde aquel diagnstico. Mes a mes Macarena recibe el
tratamiento que necesita para mantener su salud estable en medio de la enfermedad.
Me hubiese gustado decirle que Dios le ha sanado completamente, sin embargo me he
dado cuenta que no todas las historias de esperanza terminan con el final que yo
deseo, pero si con aquel que Dios sabe que genera precisamente eso: esperanza. Hoy
Macarena est mucho ms activa que antes: sigue como editora de la revista, participa
en un programa radial enfocado para mujeres, recientemente acaba de salir su primer
libro, activa en su congregacin local, madre, esposa, en fin Una historia de gracia
que brinda esperanza para seguir adelante en medio de la adversidad.
Gracias a la Gracia
Es a travs de la Gracia que entramos en la dimensin divina. Por medio de ella
encontramos un refugio seguro en los brazos del Padre, la capacidad de Jess para
imitarle y el poder del Espritu Santo para cumplir con sus planes. La gracia nos hace

34

aptos para disfrutar realmente de la vida. Convierte nuestra existencia en vida. La
Gracia da sentido a nuestra vida y significado a nuestra muerte.

Sus actos siguen siendo importantes. La fe que usted profesa sigue siendo necesaria.
La oracin y sacrificios de alabanza deben seguir siendo parte de su vida. Pero nada
de lo anterior tendra sentido si antes no ha recibido y aceptado con gratitud la Gracia
de Dios. Si la Gracia de Dios es parte de su vida, disfrtela y comprtala, recuerde sus
palabras: De gracia recibieron, den de gracia. (Mt. 10.8)

La Gracia da sentido a nuestra vida y significado a nuestra muerte.

Esa es la clave para sobrellevar las tormentas que todo diluvio trae a nuestra vida:
Aferrarnos a Su Gracia. No a nuestra capacidad, sino a Su Gracia que ser todo-
suficiente para poder salir adelante. Por eso le deca que este es un libro de
esperanza. Porque no importa cun recia est la tormenta en su vida. No importa
cun difcil sea la situacin que est atravesando. No importa cun grande y fuerte
sea el diluvio que est cayendo. La gracia de Dios es suficiente. La Gracia de Dios
puede ayudarle a recuperarse. La Gracia de Dios la que le va a sostener en medio de
todas las dificultades. Es ms Grande que toda adversidad. Por eso la Gracia se
convierte en la herramienta esencial que Dios utiliz en la vida de No. Dios no
permitir un diluvio en su vida si previamente no est dispuesto a derramar de Su
Gracia para que usted pueda llegar a puerto seguro.



Qu es la Gracia para mi?

35
Cules son los beneficios que considero que la Gracia a trado a mi vida?
En qu aspecto, que posiblemente no haya considerado, necesito aferrarme a

la Gracia para seguir adelante?

ANCLA DE FORTALEZA

De su plenitud tomamos todos gracia sobre gracia
Juan 1.16 RV1960

ACCIONES CONCRETAS




36
OBEDIENCIA

37

(Dios) le dijo a No: He decidido acabar con toda la gente, pues por causa de ella
la tierra est llena de violencia. As que voy a destruir a la gente junto con la
tierra. Constryete un arca de madera resinosa, hazle compartimentos, y cbrela
con brea por dentro y por fuera. Dale las siguientes medidas: ciento cuarenta
metros de largo, veintitrs de ancho y catorce de alto. 16Hazla de tres pisos, con
una abertura a medio metro del techo y con una puerta en uno de sus costados.
Porque voy a enviar un diluvio sobre la tierra, para destruir a todos los seres
vivientes bajo el cielo. Todo lo que existe en la tierra morir. Pero contigo
establecer mi pacto, y entrarn en el arca t y tus hijos, tu esposa y tus nueras.
Haz que entre en el arca una pareja de todos los seres vivientes, es decir, un
macho y una hembra de cada especie, para que sobrevivan contigo. Contigo
entrar tambin una pareja de cada especie de aves, de ganado y de reptiles,
para que puedan sobrevivir. Recoge adems toda clase de alimento, y
almacnalo, para que a ti y a ellos les sirva de comida. Y No hizo todo segn lo
que Dios le haba mandado. (Gnesis 6:13-21)

38

Una Opcin
No fue una noche fcil para ir a dormir. No luego de lo que haba pasado.
Seguramente le cost conciliar el sueo. Las preocupaciones eso hacen. Seguro que
tambin antes de dormir muchas dudas estaban dando vueltas en su cabeza. Las
preocupaciones eso provocan. No creo que yo hubiera dormido. Pero le era
necesario dormir.

La Biblia cuenta poco de Jos, el pap terrenal de Jess, sin embargo, es suficiente
para darnos cuenta del tipo de hombre quien se trataba. An si toda la informacin
que tuvisemos de l fuese solamente la seleccin hecha por Jess para que el
vecindario lo considerara su pap, eso es ms que suficiente. Jos ha de haber sido un
tipazo. El dilema emocional que le gener a Jos la noticia el embarazo de Mara fue
plasmado por Mateo en las siguiente lneas:

Como Jos, su esposo, era un hombre justo y no quera exponerla a vergenza pblica,
resolvi divorciarse de ella en secreto.
Pero cuando l estaba considerando hacerlo, se le apareci en sueos un ngel del Seor
y le dijo: Jos, hijo de David, no temas recibir a Mara por esposa, porque ella ha
concebido por obra del Espritu Santo. Dar a luz un hijo, y le pondrs por nombre Jess,
porque l salvar a su pueblo de sus pecados.
Todo esto sucedi para que se cumpliera lo que el Seor haba dicho por medio del
profeta: La virgen concebir y dar a luz un hijo, y lo llamarn Emanuel (que significa
Dios con nosotros).
Cuando Jos se despert, hizo lo que el ngel del Seor le haba mandado y recibi a
Mara por esposa. 25Pero no tuvo relaciones conyugales con ella hasta que dio a luz un
hijo, a quien le puso por nombre Jess. (Mateo 1. 19-25)

Visualice la situacin. Trate de personalizarla. Colquese en las sandalias de Jos,
an si usted calza talla 9 porque creo que Jos era talla 8 . Faltaba poco para que
Jos tomara como esposa a Mara y recin se acababa de enterar de lo que en ese
momento representaba para l una terrible noticia: ella estaba embarazada. Y

39

porencima de todo Mara le sale con la historia de un extraterrestre al que llam
ngel que se le apareci para decirle que dicho embarazo era por obra y gracia del
Espritu Santo. Mientras en una mano sostena un vaso con leche tibia que le ayudara
a tragar todas esas emociones y dudas, con la otra mano se frotaba la quijada
mientras evaluaba sus opciones: Si la delato, la apedrearn por adltera, nadie le va a
creer la historia del ngel.... Si la acepto, la noticia se va a correr igualmente y van a
levantar un monumento al ms tonto del pueblo, eso s con un par de cuernos bien
puestos hasta arriba... Y si huyo me consideraran un canalla. Bonitas opciones
tengo! pens tome la que tome, en todas salgo perdiendo. Y, en el mar de sus
dudas y sumergido en sus preocupaciones, dio el ltimo sorbo al vaso de leche y se
fue a dormir, no tanto porque tuviera sueo sino porque deseaba consumir el tiempo
y al despertar comprobar que toda esa situacin era producto de su imaginacin.

Se logra identificar con Jos? Le ha costado conciliar el sueo pensando en las
preocupaciones que amenazan su vida? Se ha reducido su tiempo de descanso
gracias a los problemas que existen en su vida? Cules son sus opciones en una
dificultad? Renunciar a seguir adelante se convierte en una de las primeras que
atraviesa por nuestra cabeza. Romper con un ciclo de honestidad puede ser una
forma fcil de salir del problema. Mentir o no hacer lo correcto tambin puede
parecer una opcin. Y luego aparece, inevitablemente y muchas veces no gratamente,
pero aparece: la opcin de hacer lo correcto. La opcin de no desmayar, de seguir
adelante, mantener firme el compromiso y la veracidad de lo que hacemos.

Y, al igual que Jos, no se nos pide mucho. Un par de cosas nada ms: seguir
confiando y obedecer. Confiar en que Dios siempre har lo correcto y obedecer en lo
que se nos manda a hacer. Poco se nos avisa acerca de cul ser el futuro cuando
hacemos lo correcto. Escasas son las instrucciones detalladas que recibiremos. Pero
cuando Jos escuch el llanto del beb en el pesebre y pudo calmarlo al arrullarlo en
brazos, sinti igualmente cmo su alma era calmada por la presencia de ese mismo
nio que sostena.

40

Palabra Difcil
La obediencia. Palabra difcil. No de escribir. Pero si de cumplir. Por lo menos en mi
caso. Soy ms inclinado a hacer lo que me gusta, lo que deseo, no lo que debera
hacer. En esa libertad que se nos otorga, obedecer se convierte en una alternativa
que no necesariamente es la primera a elegir. Jos me entendera. Pero igualmente
creo que me dira lo importante y vital que se hace cumplir obedientemente con lo
que se debe realizar.

La obediencia trae resultados. Resultados de bendicin. Resultados que pueden
sorprendernos y llevarnos a nuevas realidades que ni siquiera hemos visualizado. La
obediencia aparecer como una alternativa en medio de la adversidad. Cuando las
gotas fras y constantes de la prueba empiezan a caer sobre nuestra vida, la
obediencia se convierte en esa capa impermeable que ayudar a protegernos.

La obediencia trae resultados. Resultados de bendicin.

Por otra parte, he llegado a la conclusin que, en muchos casos, la obediencia
antecede a nuestra fe. Voy a intentar explicarlo. Creer no siempre es fcil, sobre todo
en la forma de proceder de Dios cuando el camino por el que estamos atravesando es
nuevo y totalmente desconocido para nosotros. No podra respaldar lo que digo. No
haba llovido hasta ese entonces. Los expertos indican que la lluvia no haba
aparecido en la tierra en poca de No. Un roco proveniente de la tierra era el que se
encargaba de hidratar la tierra. La lluvia era un concepto nuevo, desconocido para
todos en aquel entonces. Posiblemente fue No el encargado de introducir el concepto
de lluvia a la Wikipedia. Nadie saba de qu se trataba. La propuesta por parte de No
de lluvia cayendo del cielo no solo era ridcula, sino imposible ante lo que la gente
estaba acostumbrada. Sin embargo, Dios haba dicho a No que llovera y que era
necesario que se preparara para tal fenmeno desconocido para todos hasta ese
entonces. Dios gira una orden hacia No de construir un arca dando una explicacin
por dems detallada como se revela en Gnesis 6 del verso 14 al 16:

41

Construye una gran barca de madera de ciprs y recbrela con brea por dentro y por
fuera para que no le entre agua. Luego construye pisos y establos por todo su interior.
Haz la barca de ciento treinta y ocho metros de longitud, veintitrs metros de anchura y
catorce metros de altura. Deja una abertura de cuarenta y seis centmetros por debajo
del techo, alrededor de toda la barca. Pon la puerta en uno de los costados y construye
tres pisos dentro de la barca: inferior, medio y superior.

La explicacin dada a No es muy clara, directa y sobre todo puntual en cuanto a lo
que tena que hacer. Pero siendo honestos No sonaba a disparate creer que tal cosa
pudiera suceder? Y en el caso que se llegara a creer que iba a llover No era
igualmente un disparate creer que un simple barco de madera sera suficiente para
resistir tal tormenta? Luego vino otra instruccin que, si lo anterior no resultaba
suficiente para generar un tropiezo de duda, sera el colmo:

As que entren en la barca t y tu mujer, y tus hijos y sus esposas. Mete en la barca junto
contigo a una pareja macho y hembra de cada especie animal a fin de mantenerlos
vivos durante el diluvio. Una pareja de cada especie de ave, de animal, y de animal
pequeo que corre por el suelo vendr a ti para mantenerse con vida. Y asegrate de
llevar a bordo suficiente alimento para tu familia y para todos los animales Gnesis
6:18-21

No s usted, pero yo hubiese formulado muchas preguntas. Al igual que Jos, yo
estara frotndome la barbilla, tomando un caf cappuchino (la leche sola no me
gusta) y esperando el momento oportuno para levantar la mano, pidiendo la palabra
para emitir muchas preguntas cul estudiante de colegio que no entiende nada de lo
que el maestro acaba de explicar. De dnde obtengo tanto animal? Cmo los
reno? Cmo consigo alimento para todos para 40 das? Y las enfermedades?
Dnde queda la higiene? Quin se va a hacer cargo de limpiar? El asunto era
complicado. Suficiente, por lo menos para mi, para no solo hacer preguntas si no
interponer algunos recursos de amparo que trataran de detener la sentencia.

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Muy bien. Dejemos a un lado las excusas. Qu tal las sugerencias? No me hubiera
quedado en silencio, si haba que hacerlo y yo estaba dentro del plan como lder
ejecutor, como mnimo hubiera dado algunas recomendaciones para hacer el viaje y
el resultado final ms placentero.

Seor, y qu tal si nos llevamos solo los animales tiles? Qu te parece si dejamos
que se ahoguen las cucarachas? Nadie las soporta ahora y no creo que siglos despus
se vayan a convertir en los animales ms populares. Y los gatos? Son muy
comodones, no aportan nada y existen personas a las que le provoca alergia en la
piel.

Preguntas. Excusas. Sugerencias. Cualquiera de ellas hubiera sido una buena opcin
para m. No solo para construir un arca, sino para cualquier tormenta que viene a mi
vida. Son regulares. Le pregunto a Dios por qu. Le presento excusas sobre mi
proceder. Trato de sugerir una mejor salida. Pero No no lo hizo. Observe lo que hizo
luego de recibir las instrucciones de Dios:

Entonces No hizo todo exactamente como Dios se lo haba ordenado. Gnesis 6:22

Simplemente Obedecer
No s si No tuvo todo claro previo a obedecer. Personalmente no lo creo. Lo cierto
del caso es que lo hizo. Ignoro tambin si haba total seguridad al momento de actuar.
Otra vez en mi forma de pensar no lo creo. Pero avanz en obediencia a lo que Dios le
peda que hiciera. En medio de las dudas, de los cuestionamientos que seguramente
llegaron a su mente y trataron de anidarse en su corazn, No prefiri ser obediente.
Sin pedir muchas explicaciones, sin entrar en muchos detalles. Saba que la fuente de
donde provenan las instrucciones era confiable y eso le bast.

Obediencia. Palabra difcil. No de escribir, porque ya lo he hecho en varias ocasiones
en esta seccin. Pero si de cumplir. Ha sido un problema a lo largo de la humanidad.
Adn y Eva lo experimentaron. Una instruccin clara, sin mucho que cuestionar, pero

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que llev al primer acto de desobediencia de la historia. Usted y yo hemos estado all.
Sabemos lo que tenemos que hacer, pero cuesta tanto hacerlo. Aclaro que este no es
un captulo para regaar, es un captulo nuevamente para dar esperanza.

Esperanza que obedecer trae su recompensa. Esperanza al reconocer que hacerle
caso a Dios sigue siendo una opcin, pero se convierte en la mejor de todas.
Apegarnos a la integridad por amor a Dios sigue siendo el camino ms confiable a
seguir, no el ms sencillo, pero si el que nos llevar al destino seguro. Obedecer en
medio de la adversidad se hace necesario para encontrar el propsito por el que esa
adversidad fue permitida. La obediencia podr exigir que tomemos acciones no
acostumbradas, salir de nuestra zona de comodidad, hacer actos que ante los ojos de
los dems se vean alocados, pero que sern los ms cuerdos ante el desafo de fe que
Dios est invitndonos a correr.
Esperanza al reconocer que hacerle caso a Dios sigue siendo una
opcin, pero se convierte en la mejor de todas.

Soltarse de la rama
La fe se ve alimentada luego que obedecemos. Pero la obediencia es precedida an
por algo ms: La comunin. Difcilmente obedeceremos a alguien que no conocemos.
Eso me hace recordar la historia de aquel hombre que manejaba un camin.

Todo marchaba normal para este transportista que a bordo de un camin muy
vistoso, contemplaba el paisaje que por delante le presentaba la carretera. Justo en el
peor momento el vehculo sufri una falla mecnica, pues cuando el conductor
intent virar hacia la derecha el volante no respondi, los frenos fallaron y la angustia
recorri todo su ser. Lo que momentos antes era un maravilloso paisaje se
transformaba en un precipicio donde podra encontrar la muerte. Trat de saltar pero
slo le dio tiempo a quitarse el cinturn de seguridad. El camin sigui su direccin y,
al no llevar ya el cinturn de seguridad, sali volando por el vidrio de enfrente. Tuvo
la fortuna de poder agarrarse en el vuelo de una rama de rbol, mientras vea como
su camin se haca pedazos y estallaba en el fondo del precipicio. Su desesperacin

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haba aumentado en forma vertiginosa. No sabiendo que otra cosa hacer recurri a
los gritos:

- Auxilio! ... Aydenme!... Alguien por favor que me ayude! ...
- Si? En qu puedo servirte? - La voz era poderosa y llena de autoridad, pero
cargada de amor y mucha ternura.
- Quin eres? Pregunt el hombre
- Soy Dios y he escuchado tus gritos pidiendo ayuda. Qu quieres que haga por ti?
- Slvame por favor! Scame de aqu!
- Con mucho gusto, hijo. Lo nico que tienes que hacer es soltarte de la rama de la
que ests agarrado para que yo pueda sostenerte en Mis manos.

El hombre no supo qu hacer. Observ abajo donde las llamas consuman los restos
del
camin.
Un
momentneo
silencio
rein
mientras
tomaba
una
decisin. Finalmente grit:

- Auxilio!...Hay alguien ms que pueda ayudarme?...

Qu le parece la actitud de este hombre? Analicmosla por un momento. Si bien
estaba atravesando por una situacin en la que a nadie le gustara estar inmiscuido,
estaba recibiendo una promesa, pero no cualquier promesa: una promesa de Dios. No
s si lo ha entendido bien pero me gustara repetirlo: una promesa de Dios. Con el
temor de ser repetitivo y a riesgo de ser un problema para su paciencia quiero
decrselo una vez ms: Una promesa de Dios. No del vecino que la semana pasada le
prometi acompaarle al doctor y tuvo que ir a la cita solo; ni el amigo que prometi
llamar hace un mes y an aguarda realizar la conversacin; no es su viejo conocido
que prometi pagarle un dinero que jams ha vuelto a tener en su bolsillo. Se trata de
Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho ms abundantemente de lo
que pedimos o entendemos (Ef. 3.20)

Ante esto, la actitud del hombre, parece... cmo decirlo?... ridcula, increble,
rara? Ignoro qu calificativo utilizara usted, pero yo tengo uno: cotidiana. Vamos,

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seamos sinceros! Cuntas veces hemos estado en situaciones similares a la de este
hombre y reaccionamos de igual manera? Haga un poco de memoria. Qu me dice
de la ocasin que se qued sin empleo?

O cundo el mdico con voz pausada le dijo que sus anlisis haban dado positivo?
Cul fue la reaccin cuando su pareja le abandon? Y aquella horrible experiencia
al ver cmo su hijo era arrebatado de sus manos? Tal vez la historia del transportista
no sea real, pero se ajusta a muchas realidades que vivimos. Situaciones que le hacen
sentir al borde de la misma muerte, y otras que en realidad la provocan, tal vez no
fsica, pero si interior. Cul ha sido su reaccin? Qu actitud toma hacia aquellas
situaciones que en realidad escapan de su control? Cmo vive con el anhelo de
alcanzar algo que humanamente no es posible en ese momento? Frustracin,
desesperacin,
desnimo,
le
parecen
conocidos
esto
sentimientos?
Lamentablemente, debemos reconocer que todos en alguna etapa de nuestra vida

hemos tenido que lidiar con estos desagradables visitantes en nuestros corazones.

La Biblia, la Palabra de Dios, contiene miles de promesas que se encuentran al alcance
de todo aquel que cumpla con un solo requisito: creerle. Le ha costado en alguna
ocasin creerle a Dios? No se reproche. Lo comprendo, he atravesado por eso, es
ms, diariamente me encuentro en este dilema. Y fue precisamente este problema el
que me llev a la interrogante: por qu nos cuesta tanto creerle a Dios? Tendramos
el descaro de tacharlo de mentiroso? Jams! Entonces Dnde radica nuestro
problema? He llegado a una conclusin. Considero que la raz de nuestra dificultad
para soltarnos de la rama y dejar que sea Dios quien gobierne y haga en nuestra vida
como mejor le parezca es nuestra falta de conocimiento sobre Dios mismo.

Considere lo que acabo de exponerle: no confiamos en Dios lo suficiente porque no le
conocemos lo suficiente. Nadie en sus cinco sentidos confiara dar su bien ms
preciado a alguien que no conoce. De la misma manera, consciente
o inconscientemente, no estamos dispuestos a depositar nuestra vida en manos de un
Dios al que no conocemos en lo que es y lo que puede hacer. Es por eso que Dios nos

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ha dado esta vida, con el objetivo que juntos decidamos tomar la aventura de
conocerle y saber ms de este maravilloso ser que dice amarnos y que le llev al
extremo de sacrificar a su propio Hijo por darnos salvacin. Una vida en la cual
pretende que descubramos qu es lo que espera de nosotros y qu poder esperar de
l para que luego aprendamos a creerle y hacerle caso a la voz que nos pide que nos
soltemos de la rama.

Dios habl. No escuch. No reconoci la voz de Dios. Cmo lo hizo? Uno slo es
capaz de reconocer una voz que ha odo antes. No saba cmo sonaba la voz de Dios.
Le conoca a l. Aunque la Biblia no lo dice, se hace obvio que No dedicaba tiempo a
la comunin con El Seor. La aplicacin a nuestra vida es sencilla: Ser sensibles a la
voz de Dios y al descubrimiento de Su voluntad requiere que apartemos tiempo para
tener comunin con Dios.

Precisamente ser en esa comunin que recibiremos la preparacin. A travs de la
relacin personal que tengamos con Jesucristo, nos ir revelando sus planes. Nos dar
las instrucciones claras para alcanzar la salvacin en nuestra vida. Indicar pasos
especficos que debemos dar, mostrar caminos que debemos seguir, sealar la ruta
perfecta, pondr a las personas correctas, har que el tiempo sea el adecuado, dar la
provisin que sea necesaria.

Dios siempre cumplir su parte. No dejar nada a medias de lo que a l le
corresponde hacer. Har mucho ms de lo que nosotros esperamos, ms de lo que
merecemos, pero justo lo que necesitamos. El paso final ser nuestro: Obediencia. En
esto radic la diferencia entre No y los dems.

La obediencia marca una diferencia en nuestra vida. Samuel le record a Sal:

Pero Samuel respondi:
Qu es lo que ms le agrada al Seor: tus ofrendas quemadas y sacrificios,
o que obedezcas a su voz? Escucha! La obediencia es mejor que el sacrificio, y la

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sumisin es mejor que ofrecer la grasa de carneros. (1 Samuel 15.22)

No es necesario entender, pero si es vital ser obedientes. La comprensin de nuestra
situacin no es lo que nos ayudar, la obediencia a Aquel que domina la situacin, s.
Qu es lo que pide Dios que haga? Pudiera ser que suene a locura lo que pide, pero
puede ser que esa accin sea lo que le mantenga seguro en medio de la tormenta.



Considero que me es fcil o complicado obedecer a Dios? Por qu?
En una escala de 1 a 10 Cmo considero que es mi comunin y conocimiento

de Dios? Qu puedo hacer para mejorar esa calificacin?
En qu aspecto, que posiblemente no haya considerado, necesito aferrarme a

la Gracia para seguir adelante?

ANCLA DE FORTALEZA

Espero que nunca cambien de opinin, y que siempre me adoren y obedezcan mis
mandamientos. As, tanto a ellos como a sus descendientes les ir bien
Deuteronomio 5:29

ACCIONES CONCRETAS


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PASIN FAMILIAR

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Entonces el Seor dijo a No: Entra en el arca t y todos los de tu casa; porque he
visto que slo t eres justo delante de m en esta generacin. (Gnesis 7.1)

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Vulnerables
An recuerdo el concepto que en el colegio me dieron sobre familia. Me dijeron que
es la base de la sociedad. Hoy podemos decir que la sociedad es un reflejo de la
familia. Todo lo que ocurre a nuestro alrededor no es otra cosa sino una visualizacin
pblica de lo que ocurre privadamente bajo el techo de cada casa. An en medio de lo
resguardado que se busca sean las viviendas, la familia sigue siendo vulnerable,
expuesta y amenazada por elementos que desean destruirla.

Dios las ama. Satans las odia. Dios trabaja a favor de ellas. Satans obra para
destruirlas. Dios tiene lo mejor para cada una de ellas. Satans roba, mata y destruye.
Objetivos opuestos que hacen que, dependiendo el enfoque y forma de percibir cada
situacin, cada familia asimile y viva de manera diferente cada diluvio que atraviesa.
Pero nuevamente, hay esperanza. La esperanza de saber que, en medio de los
diluvios familiares, Dios tiene el control de lo que sucede y una visin de un buen
futuro a pesar de lo que pueda ocurrir.

Alex Mndez es resultado de un doble diluvio. El primero antes de nacer. Un
embarazo complicado hace pensar que Alex sera slo una linda promesa que no vera
la luz del mundo. Pero el diluvio fue sobrellevado. La mam de Alex encontr en el
nacimiento de su hijo la respuesta a sus oraciones. Lo que haba iniciado como un
gran diluvio, Dios lo convirti en todo un motivo de alegra y encuentro de propsito.

Como suele pasar en muchas de las familias, el proceso de formacin no es sencillo
para ningn padre. Los hijos no vienen con un manual bajo el brazo que nos indique
cmo educarlos (ni siquiera vienen instrucciones de cmo cambiarles los paales). El
proceso de educacin se puede convertir en un camino empedrado cuando las formas
de trasladar los principios no llegan a ser compatibles. La mam de Alex confiesa
justamente eso: el dar un trato no adecuado en el proceso de formacin, lastim el
corazn de Alex. l, por su parte, no lograba traducir el amor que haba en medio de
la forma en que el mismo era transmitido. Su corazn se empez a llenar de
incomodidad, dolor y rebelda, la cual explot en ms de una ocasin con

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conversaciones subidas de tono y con faltas de respeto que quebrantaban la relacin
entre l y sus paps. La incomodidad lleg a tal nivel que Alex tom la decisin de
irse de casa, sin la bendicin de sus padres, y dispuesto a alejarse todo lo que pueda.

Diluvios compartidos
Raras veces los diluvios son individuales. An cuando pudiera ser una prueba
personal, en la forma conjunta que Dios trabaja todo lo que nos sucede suele afectar a
los dems. El desempleo de uno, se puede convertir en la escasez de todos, el duelo
de alguien se traduce en el dolor de muchos, la enfermedad individual, es la pena
compartida. Justamente en ese grupo selecto de convidados al diluvio se encuentra
la familia. El caso de Alex puntualiza precisamente lo que le digo, pero no lo asla de
cualquier otro conflicto que pudiera estar atravesando.

Raras veces los diluvios son individuales.

Posiblemente piense que al hablar de la familia me est alejando del tema principal.
Pero usted sabe que no es as. Las familias hoy en da somos violentadas por
amenazas que atentan contra todo deseo por permanecer en el centro de la voluntad
de Dios y con una vida armoniosa. Analicmoslo detenidamente. Dejemos por un
momento a No tranquilo. De igual forma le servir a l para que pueda dedicarse a
trabajar tranquilo en la construccin del arca. No creo que note nuestra ausencia,
est bastante entretenido en la bsqueda de madera y clavos, mientras el resto de la
familia igual apoya en la bsqueda de todos los animales.

Ignoro su estado familiar actual. No s si usted es soltero, casado, viudo, divorciado.
Las condiciones familiares son diversas, las situaciones que se viven igualmente muy
variadas. Sin embargo, las oportunidades de ser destruida es comn. En ms de una
ocasin mis condiciones familiares han amenazado destruir o generar divisin en ella.
Provengo de una familia conformada de manera muy particular. Mi mam estuvo
durante muchos aos en relacin conyugal con un mi to. S ley bien. De esa relacin
nacieron mis tres hermanos. Cuando mi mam enviud, mi pap entr al rescate.

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Sirvi de mucho apoyo para ella. Tanto apoyo concluy en mi concepcin, haciendo la
observacin que se hizo fuera del matrimonio. No lo comparto con el fin de poner en
evidencia a mis paps, sino por manifestar cmo los aspectos de formacin misma de
mi familia es el reflejo de lo complejo que es el sistema familiar hoy en da.

La preocupaciones que los lderes de familia, ya sea pap, mam o ambos tienen por
el futuro de sus hijos es enorme. Vivimos en un presente tan convulsionado que, por
momentos, da terror visualizar el futuro. Pero all es donde surge nuevamente el
factor de esperanza: Dios est interesado en las familias. Su inters es que ellas sean
quienes consoliden la sociedad de acuerdo a la vivencia de los principios plasmados
en Su Palabra. Observe como queda de manifiesto esto a travs de la historia del
hombre que fue usado por Dios para llevar salvacin a toda su familia.

Dios est interesado en las familias.

Salvacin para todos
Recorramos en el tiempo unos cuantos miles de aos. Nos encontramos en el primer
siglo despus de Cristo. Aproximadamente en la cuarta dcada. Pablo se ha
convertido en predicador perseguido y ahora preso por la justicia romana. Su
habitacin en esta ocasin es una celda de crcel. Se encuentra acompaado de Silas.
Pero no se preocupe por ellos. La estn pasando muy bien. No me cree? Entremos
con discrecin. Guarde silencio un momento y se dar cuenta. Los oye? Estn
cantando. Mientras los dems se lamentan de su condicin, Pablo y Silas repasan el
himnario de la escuela dominical.

Todos los presentes los escuchan. Algo extrao ocurre cuando estos hombres cantan.
Y no es que tengan la voz muy afinada, son mas bien desentonados. Pero su voz
transmite algo que todos los dems necesitan en ese lugar: paz y gozo. As que todos
escuchan atentos... todos... incluso Dios. La actitud de estos siervos ha llegado al
corazn de Pap. Se conmueve al ver a sus hijos en tales condiciones, as que acta.

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Una explosin de amor llena el lugar. El impacto es tan grande que las puertas de la
crcel se abren.

Al escucharse tal ruido el guardia de turno se acerca para comprobar lo que su
corazn le hizo temer: los presos no se encontraban mas en su celda. El reglamento
romano mandaba que al guardia que se le escapara un preso, pagara con su vida, no
sin antes ser torturado cruelmente. El guardia prefiri ahorrarse la tortura as que
decidi quitarse la vida l mismo. Pero Pablo no lo permiti. An se encontraban
cerca y con un grito de autoridad detuvo al aspirante a suicida. Pablo le cont que
haba sido el poder de Dios el que le haba liberado de la crcel, y que ese mismo
poder deseaba liberarlo en su corazn. Lo que ese hombre haba presenciado haba
sido ms que suficiente para convencer su corazn. As que esper las instrucciones
de Pablo. El apstol de los gentiles le dio una maravillosa promesa: Cree en el Seor
Jess y sers salvo t y tu casa (Hch. 16.31) Si No hubiese estado cerca habra
sonredo. Habra aplaudido las palabras de Pablo. Habra terminado ese momento
contando su experiencia.

Por cierto, No ya termin el arca. Es el seor canoso que nos hace seales delante de
ese gran barco en forma de casa. Pero prestemos atencin. Escucha una voz. Una
orden y una promesa que se hace realidad en ese momento:

Entonces el Seor dijo a No: Entra en el arca t y todos los de tu casa; porque he visto
que slo t eres justo delante de m en esta generacin. Gnesis 7.1

Voy a lanzar algunas preguntas y respuestas de simple observacin:

Pregunta: Quines dijo Dios que deban entrar al arca para ser salvos?
Respuesta: No y todos los de su casa.
Pregunta: Quin dijo Dios que era justo?
Respuesta Slo No.

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Pregunta: Entonces, si No era el nico justo Por qu entraron todos los de su casa?

Respuesta: Por la misma razn que el guarda romano poda pedir la salvacin para
toda su casa: Porque haba sido justificado por su fe.

Vimos con anterioridad que la justicia que Dios vea en No no era por sus obras, sino
por la Gracia de Dios para su vida. As que Dios practic desde ese instante la promesa
que siglos despus declarara de una forma ms especfica por medio de Pablo. Pero
el resultado sigue siendo el mismo: Salvacin para toda la casa. El orden de ingreso al
arca fue importante al momento en que Dios lo pronunci: iba por delante aquel que
haba hallado gracia. No importaba el puesto que ocupaba dentro de la familia, lo
relevante era el factor de Gracia que haba recibido.

Alex Mndez lo comprendi. La oportunidad de encontrarse con Dios fue real y
puntual. En el momento que dej a Dios en el centro de su vida, ella cobr nuevo
sentido. El proceso de restauracin familiar inici cuando l acept el proceso de
restauracin en su corazn. Dios estaba interesado en los lazos entre l y sus padres,
pero antes estaba interesado en los que le uniran a l con Jess. Jess se convirti en
la solucin que Alex y su familia necesitaban. Hoy Alex, junto a su mam, dirigen el
ministerio Edificando Generaciones, justamente llevando un mensaje de
restauracin familiar, volviendo el corazn de los padres a los hijos y de los hijos a los
padres. La tormenta que su vida familiar atraves se convierte en la brisa de
esperanza para aquellos que ahora son servidos por ellos.

El proceso de restauracin familiar inici cuando l acept el
proceso de restauracin en su corazn.

Dios se interesa por nosotros y por lo que amamos. La salvacin entra a casa por una
persona gracias al sacrificio perfecto hecho por Jess. As que no se desanime si usted
es ese uno. Dios tiene grandes planes para usted y toda su familia. A travs de su
ejemplo y la obra que l realice en su vida, sus seres queridos sern transformados.

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Del tiempo no se preocupe. Se tomar exactamente el que Dios crea que es el ms
conveniente y tenga la seguridad que ser el mejor momento para ellos. Al guardia le
tom algunos momentos la conversin de su familia, No tuvo que esperar 100 aos
de construccin del arca para la salvacin de su familia. Siga adelante, Dios mira la
intencin de su corazn, en el momento en que menos lo espere se dar cuenta que a
la par suya dentro del arca estn todos aquellos para quienes usted la ha construido.

La adversidad es capaz de producir eso: unidad familiar y compromiso a largo plazo.
Cuando la lluvia arrecia, la unidad se hace necesaria para pasar mejor la tormenta.
Este captulo pretende dejar una gran dosis de esperanza: la confianza del inters de
Dios por nuestra familia. l es un apasionado por ellas. Fue una idea original de l la
formacin de las familias. Le pareci tan genial la idea de las familias que decidi
experimentar en carne propia lo que implicaba tener una. Quiso probar junto a
nosotros la sensacin de llamar a alguien mam, de escuchar instrucciones y
correccin amorosa. Estuvo dispuesto a usar paales, ser amamantado, esperar que
el desayuno fuera servido. Quiso experimentar el beso de las buenas noches antes de
ir a dormir. Dios es un apasionado por las familias y vale la pena tener presente que,
en medio de la tormenta que pueda venir a su vida, usted y los suyos son importante
para l. Avance en la tempestad. Dios se encargar de llevarle a puerto seguro a
usted y los suyos. No hay tormenta que pueda sobrevenir sin que previamente l
tome el control para protegerles a todos.

La unidad se hace necesaria para pasar mejor la tormenta.


Qu cargas especficas tengo relacionadas con mi familia?

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Qu opinin me merece la expresin Dios es un apasionado por las familias?
Cmo ha cambiado mi perspectiva y esperanza en relacin a mi familia al leer

este captulo?

ANCLA DE FORTALEZA
Adems, Dios dijo acerca de ellos:
Ya viene el da en que ellos volvern a ser mos. Sern mi tesoro especial, y no les har
ningn dao; los tratar como trata un padre a los hijos que le sirven.
Malaquas 3:17

ACCIONES CONCRETAS
muy grande, pero s algo concreto que le permita darse cuenta que est avanzando en
de una persona con la cual compartir y se comprometer a realizar esa accin que



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LLOVER SOBRE MOJADO

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Durante cuarenta das, las aguas del diluvio crecieron hasta que cubrieron la
tierra y elevaron la barca por encima de la tierra. Mientras el nivel del agua

suba ms y ms por encima del suelo, la barca flotaba a salvo sobre la

superficie. Gnesis 7.17-18

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Llover sobre mojado
En Guatemala y, segn creo en otras regiones de Latinoamrica, tenemos una
expresin popular para los tiempos de crisis: llover sobre mojado. Esos tiempos
donde igualmente decimos que las calamidades no vienen solas. Le ejemplifico la
situacin. Este ao, 3 de octubre para ser exactos, tuvimos el infortunio con mi
familia de ser visitados por los amigos de lo ajeno. Ingresaron a casa mientras no se
encontraba nadie, excepto el Cachuchas nuestro perro y Harturito nuestro
canario, (aclaro que no escrib mal el nombre, se escribe con H, sucede que este
canario no come sino que ya me entendi). Tuvieron el tiempo suficiente para
forzar una puerta de metal, ingresar, revisar, llevarse todos los objetos pequeos
desde joyas, dinero en efectivo, una computadora, entre otras cosas. Sabr que esto
gener muchas incomodidades y al mismo tiempo una sensacin de inseguridad muy
desagradable. Dos meses despus, justo el da que estoy escribiendo estas lneas,
antes de ser las ocho de la maana, mientras me diriga a la oficina del lugar donde
trabajo otro amigo de lo ajeno toc amablemente a la ventana del vehculo y
amablemente luego de mostrarme una pistola me pidi que le entregara el telfono
celular que llevaba y como propina me pidi la argolla de matrimonio. Eso es a lo
que me refiero con llover sobre mojado.

No quiero que le quede una mala impresin de mi linda Guatemala. Este pas es
hermoso, extraordinario en cuanto a oportunidades y la gente que lo habita es
extraordinaria. Gente emprendedora, trabajadora, ingeniosa, talentosa. Sin embargo,
como en muchas de las sociedades, con situaciones, condiciones y personas que
desencajan de ese bello paisaje que Dios nos ha dado.

Dios no permitir una prueba sin previamente habernos preparado
para ella.

Viviendo esas dos experiencias, relativamente tan cercanas y similares puedo darme
cuenta que, efectivamente las dificultades no se toman la molestia de pedir permiso
para irrumpir en nuestra vida. En mi caso fueron materiales, pudiera ser que en su

61

caso sean ms profundas y trascendentales. Sin embargo, Dios no permitir una
prueba sin previamente habernos preparado para ella y estar completamente seguro
que puede confiar en nosotros para permitirla.

Ese fue el caso de Job. En una de las escenas ms extraordinarias que la Biblia nos
relata se nos abre una ventana a lo que sucede en el mbito espiritual. Es como ir al
detrs de cmaras de una produccin cinematogrfica. Observe con detenimiento la
escena:

Un da los miembros de la corte celestial llegaron para presentarse delante del
Seor, y el Acusador, Satans, vino con ellos. El Seor le pregunt a Satans:
De dnde vienes?
Satans contest al Seor:
He estado recorriendo la tierra, observando todo lo que ocurre.
Entonces el Seor pregunt a Satans:
Te has fijado en mi siervo Job? Es el mejor hombre en toda la tierra; es un
hombre intachable y de absoluta integridad. Tiene temor de Dios y se mantiene
apartado del mal.
Satans le respondi al Seor:
S, pero Job tiene una buena razn para temer a Dios: siempre has puesto un
muro de proteccin alrededor de l, de su casa y de sus propiedades. Has hecho
prosperar todo lo que hace. Mira lo rico que es! As que extiende tu mano y
qutale todo lo que tiene, ten por seguro que te maldecir en tu propia cara!
Muy bien, puedes probarlo dijo el Seor a Satans. Haz lo que quieras con
todo lo que posee, pero no le hagas ningn dao fsico.

Aun en medio de lo grfico que resulta el relato, es complicado comprender este tipo
de situaciones que se llevan a cabo en la dimensin no visible de lo espiritual. Dios
entablando un dilogo con Satans donde el centro de la conversacin era un hombre
que haba logrado que El Seor fuera el portador de la referencia de su estilo de vida.

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Por un lado queda evidente el cuidado y amor de Dios para con Job en el contraste de
la envidia y deseo de destruccin de Satans.

As es. Satans desea destruirle. Arruinar con todo lo que usted es y tiene. Jess
indic que su trabajo consiste en matar, robar y destruir (Juan 10.10). l no juega a
asustarnos en los momentos en que la luz se va. Satans trabaja en serio con el
objetivo de afectar negativamente nuestra vida y entorno cercano. Esto me hace
llegar a una conclusin: debo esperar la adversidad. No desearla, pero si esperar y
estar preparado para cuando llegue. Tarde o temprano llegar, no porque la pida, no
porque haga lo posible por evitarla, ni porque me aleje de la cobertura de Dios.

Debo esperar la adversidad.

John S. Feinberg, en su libro Nos enga Dios? indica:
Dios no enviar la afliccin como castigo por nuestra obediencia, pero si somos fieles
al mandato de Dios, Satans no estar contento. El adversario a menudo muestra su
desagrado afligiendo al pueblo de Dios. La verdad es que, cuanto ms estamos en el
centro de la voluntad de Dios, ms terreno estamos ganando contra el enemigo suyo.
Por lo tanto, cuanto ms obedecemos la voluntad de Dios, ms podemos esperar que
Satans nos ataque en un intento por desanimarnos y disuadirnos de cumplir los
propsitos de Dios7

La adversidad una posibilidad
An estando en el centro de la voluntad de Dios, la adversidad sigue siendo una
posibilidad en un mundo en el que Satans har lo necesario para derribarnos. Pero,
tal como nos describe este pasaje, Satans solo actuar en la permisividad de Dios.
Dios sigue teniendo el control de las adversidades que suceden. No las provoca, pero
las permite y las permite por una extraordinaria razn: confa en nosotros, sabe que
estamos preparados para salir adelante. Jams Dios nos expondr a una situacin en
la que no sepa que nuestra vida est lista para sobrellevarla.

63

An estando en el centro de la voluntad de Dios, la adversidad sigue
siendo una posibilidad

Tres grandes preguntas
Repito: Dios ha preparado su vida para la prueba. Ha dado la capacitacin necesaria.
Las instrucciones han sido puestas en sus manos. El trabajo previo que su corazn
necesitaba ha sido realizado. Y la provisin divina que le sustentar durante el diluvio
ha llegado. La experiencia vivida en 40 das por No es prueba de ello, igual que la
atravesada tambin en 40 das de desierto por parte de Jess. Si en el caso de No el
exceso de agua fue el problema, en el de Jess la falta de ella lo fue.

El desierto pasado por Jess evidencia lo que menciono. Dios le haba preparado,
podr notar en la siguiente lectura justamente que fue el Espritu Santo quien le llev
al desierto a fin que fuera tentado, probado, por el diablo. Algo que slo se puede
comprender, cuando lo vemos desde la perspectiva de la preparacin: Jess estaba
listo para la prueba. Observe:

Luego el Espritu llev a Jess al desierto para que all lo tentara el diablo. Durante
cuarenta das y cuarenta noches ayun y despus tuvo mucha hambre .En ese tiempo, el
diablo se le acerc y le dijo:
Si eres el Hijo de Dios, di a estas piedras que se conviertan en pan.
Jess le dijo:
No! Las Escrituras dicen: La gente no vive solo de pan, sino de cada palabra que sale
de la boca de Dios.
Despus el diablo lo llev a la santa ciudad, Jerusaln, al punto ms alto del templo, y
dijo:
Si eres el Hijo de Dios, trate! Pues las Escrituras dicen: l ordenar a sus ngeles
que te protejan. Y te sostendrn con sus manos para que ni siquiera te lastimes el pie
con una piedra.
Jess le respondi: Las Escrituras tambin dicen: No pondrs a prueba al Seor tu
Dios.

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Luego el diablo lo llev a la cima de una montaa muy alta y le mostr todos los reinos
del mundo y la gloria que hay en ellos. Te dar todo esto dijo si te arrodillas y me
adoras.
Vete de aqu, Satans le dijo Jess, porque las Escrituras dicen:Adora al Seor tu
Dios y srvele slo a l.
Entonces el diablo se fue, y llegaron ngeles a cuidar a Jess.

El primer versculo capta desde un inicio mi atencin por la semejanza que tiene con
el pasaje del diluvio. De la misma manera en que Dios se dispuso a introducir a No
dentro del arca para llevarlo hacia la prueba, el Espritu Santo gui a Jess hacia el
desierto para que atravesara por la propia. Estar alineados a la voluntad de Dios no
nos exime de pruebas. No debemos creer que las dificultades son solo consecuencia
de nuestros actos negativos o alejados de la voluntad de Dios. Las pruebas son
permitidas por Dios para mostrarnos lo que l ha hecho en nuestro corazn.

Justamente ac surge uno de los elementos ms importantes a vencer dentro del
proceso de la prueba: la tentacin. Regularmente la prueba acarrea ms de una
tentacin. Esa oportunidad de resolver la situacin por nuestros medios y alejarnos
de la metodologa de Dios. Ese deseo de querer satisfacer lo legtimo de una manera
ilegtima. La prueba dar la oportunidad a que la tentacin susurre a nuestro odo y
busque hacer que nos desviemos de la voluntad de Dios. La prueba generar
tentacin. Tentacin que se presenta en su forma ms pura: con una duda.

Durante ese perodo de prueba algo ocurre con nuestra relacin con Dios. Muchas
dudas surgen en nosotros. Algunas expresadas con admiracin, otras con amargura o
dolor, pero todas vlidas. La prueba nos hace preguntar a Dios. Tres grandes
preguntas vienen a mi mente al ver la experiencia de Jess en el desierto, tal vez usted
no las haya expresado literalmente de esta forma, pero creo que en trminos
generales encierra el sentir de todos aquellos que hemos estado en medio de un
diluvio en la vida.

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Pregunta 1: Te importo Seor?

Si eres el Hijo de Dios, di a estas piedras que se conviertan en pan. Mateo 4.3

Debo aclarar que, personalmente no creo que haya sido Jess el que motiv estas
preguntas. Considero que fue Satans quien atac con estas preguntas, topndose
con Alguien preparado para responderlas. Las preguntas llegan a nuestra vida como
dardos deseosos de hacer dao. Es all donde la prueba nos har sentir sin
proteccin. Muchas de ellas tienen un impacto material. Nuestra economa familiar se
puede ver afectada. Los bolsillos han permanecido vacos mucho tiempo y la billetera
est sumamente delgada. Adems las deudas han subido como termmetro en
caldera. No contamos con los fondos suficientes como para cancelarlas y los
acreedores nos hacen la vida imposible. Otras son an ms dolorosas. Hacen sentir
nuestro corazn sin proteccin. Preocupacin amenaza nuestra vida y Angustia viene
de la mano con ella. La duda que la prueba presenta nos puede llevar a tomar
decisiones impulsivas, inmediatas que nos metan a problemas posteriores.

Los planes y el destino que Dios tiene para usted van ms all de la
realidad que usted est viviendo en ese momento.

El panorama que se presenta delante de nosotros no se hace muy atractivo. Pudiera
ser que lo nico que logra ver delante de usted son piedras. Piedras de amargura, de
desesperacin, piedras que estorban su andar. Piedras que le hacen dudar del lugar
que usted ocupa en la vida de Dios. Pero no se desanime, los planes y el destino que
Dios tiene para usted van ms all de la realidad que usted est viviendo en ese
momento.

Qu hace Dios mientras tanto? Provee. Dnde se encuentra cuando tenemos
necesidad? Dndonos provisin. Jess as lo declar No slo de pan vivir el hombre,
sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. Es en Su Palabra donde

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encontramos la provisin a nuestra vida. Es la fidelidad de Dios manifestada a travs
de sus promesas la que nos mantiene. Seguir adelante se vuelve ms sencillo.
Atravesar el Jordn es ms fcil. Sentir los movimientos bruscos dentro del arca se
logra con paz. Dios sigue siendo nuestro proveedor pues l mismo nos ha dicho que
no habr justo desamparado, ni su descendencia que mendigue pan.

As que no lo dude. l se interesa ms en suplir su necesidad de lo que usted se
interesa por descubrirla. l sabe que es lo ms importante en su vida y directamente
de Su corazn recibir la provisin que necesita. En el momento de la prueba, cuando
la tentacin venga: afrrese a la palabra de Dios. Ella es suficiente para recobrar la
perspectiva, para retomar la ruta correcta, para seguir adelante.

Dios no ve superficialidades l observa en lo profundo de su vida. No le interesa la
cscara de la naranja, desea un jugo de calidad y una semilla que produzca fruto
abundante. En la agenda de Dios usted ocupa el horario ms importante, el tiempo
escogido est dedicado a usted, el asunto ms importante que Dios tiene anotado en
su agenda lleva como contenido su nombre.

Pregunta 2: Puedes hacerlo Seor?

Si eres el Hijo de Dios, trate! Pues las Escrituras dicen: l ordenar a sus ngeles que
te protejan. Y te sostendrn con sus manos para que ni siquiera te lastimes el pie con
una piedra. Mateo 4.6

El silencio es desagradable. Sobre todo cuando se buscan respuestas. El silencio
desespera, sobre todo cuando este proviene de Dios. No nos gusta el silencio de Dios
en nuestra vida. Estamos acostumbrados a verlo actuar. Para un hijo de Dios se ha
hecho normal verlo sacarnos del atolladero en que se encuentra y, cuando se dispone
a dejarnos un momento sin la respuesta que esperamos (pero no sin la que
necesitamos), nos sentimos mal. Nuestra fe se empieza a ver amenazada por las

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dudas y exigimos (extraa palabra para alguien que realmente tiene la posicin de
siervo) un milagro de parte de l.

En medio de la tormenta que no cesa, la duda del poder de Dios llega a nosotros. Ya
sabemos que le interesamos, pero en realidad es quien tiene la respuesta que
andamos buscando? No y su familia pudieron atravesar dudas mientras la torrencial
lluvia caa y ellos se encontraban encerrados en el arca. Encerrados, como se
encontraba Juan, el primo de Jess cuando las preguntas se juntaron en su corazn.

Juan era su presentador oficial. Haba salido al desierto con un mensaje contundente
llamando al arrepentimiento, y un objetivo por dems claro: anunciar que el Reino de
los Cielos estaba cerca. Juan saba que faltaba poco para que eso se hiciera realidad.
Lo anhelaba con todas sus fuerzas. Eso le alimentaba ms que las hierbas e insectos
que constituan su dieta diaria. Justo al momento de saber que el Reino de los Cielos
se haba acercado lo pronunci con todas las fuerzas que tuvo, llam la atencin de
todos los presentes y dijo: He aqu el Cordero de Dios, el que quita el pecado del
mundo. Juan estaba seguro que lo que tanto haba soado se estaba cumpliendo y a
quien tanto haba esperado, estaba llegando a la tan anhelada cita.

Pero las dificultades tiene esa capacidad de golpear duro a las columnas de nuestras
convicciones. He all donde la fuerza y profundidad de los cimientos sale a relucir. La
duda sobre el poder de Dios, nos lleva a la tentacin de buscar soluciones en nuestro
propio esfuerzo o sustitutos engaosos que argumentan suplir nuestra necesidad.
Ya con algunas noches durmiendo en la peor de las celdas del calabozo real, Juan
sinti estos golpes. Lo que tiempo atrs haba dicho, no es que lo hubiese olvidado,
pero lo que estaba atravesando haca que preguntara. No poda hacerlo
personalmente y pidi favor a sus amigos que hicieran la pregunta: Eres tu Aquel
que haba de venir, o esperamos a otro? (Mateo 11:3)

Esperar a otro? Y no pblicamente lo haba reconocido como el que haba de llegar?
No sea duro con Juan. No sea duro conmigo. Yo lo he hecho. He hecho este tipo de

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preguntas cuando el silencio de Dios es prolongado. Cuando lo que deseo no se da.
Cuando la expectativa que tengo no se cumple. Cuando mi solucin no es Su
solucin. Cuando mi tiempo no es Su tiempo.

Es este el momento justo para escuchar las palabras de Jess: No tentars al Seor tu
Dios. Jess fue claro en la respuesta dada a Juan:

Regresen a Juan y cuntenle lo que han odo y visto: los ciegos ven, los cojos caminan
bien, los leprosos son curados, los sordos oyen, los muertos resucitan, y a los pobres se les
predica la Buena Noticia. (Mateo 11:5)

No dude de su poder ni de su presencia en medio de las circunstancias difciles que
atraviese. Recuerde que ni la ms creativa de todas las mentes lo podra imaginar, ni
el deseo ms grande podra pedirlo, lo cierto es que Dios lo har. Cundo? Cmo?
No lo s. Usted tampoco; pero no es importante. Lo importante es que Dios si lo sabe,
y eso es suficiente para nuestra seguridad. Dios es impredecible en cuanto a tiempo y
forma de hacer las cosas, pero predecible en cuanto al cuidado que tiene de nuestras
vidas y la capacidad de hacerlo.

De algo est seguro: l ir ms all de lo que usted espere. Su poder es infinito, y el
amor que siente por su vida es demasiado grande como para limitarse a su peticin.
Sencillamente porque es poderoso para hacer todas las cosas mucho ms
abundantemente de lo que pedimos o entendemos, segn el poder que acta en
nosotros (Ef. 3.20)

Pregunta 3: Quin eres en realidad Seor?

Te dar todo esto dijo si te arrodillas y me adoras.

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Es el momento ms importante de la prueba. Llegar a formular esta pregunta es
trascendental para su vida. Obtener una respuesta es vital para sus das. Descubrir lo
escondido atrs del signo de interrogacin fortalecer su vida.

A travs de la prueba usted ha caminado mucho. Ahora se encuentra en el lugar
donde Dios quera que estuviera. Tal vez no lo reconoce, pero observe bien. Ha
llegado a Su presencia. La necesidad lo ha llevado a estar en la misma presencia del
Rey. Sea reverente. Guarde Silencio. Ha llegado al Lugar Santsimo. Est delante del
Rey. Doble sus rodillas y reconzcalo. Siga la orden: Estad quietos y conoced que yo
soy Dios. (Sal. 46.10) No son necesarias las palabras, Su presencia lo dice todo.

En medio de la prueba usted le conocer. La duda permitida por Dios se convertir en
la herramienta que usar para que, al ser resuelta, usted pueda avanzar. Dios no enva
la duda, esa proviene de Satans, pero Dios la permite. l sabe que es Seor sobre
toda duda y por lo mismo se dispone a disiparla. Ser all donde se revelar a su vida,
cuando deje su trono de luz y venga a iluminar su camino, cuando l suelte el cetro de
sus manos para sostenerlo en sus brazos, cuando l haga a un lado su manto celestial
para colocarlo entre sus piernas, cuando l llegue a su vida y usted le reconozca como
Dios, cuando al final usted le diga: De odas te haba odo, ms ahora mis ojos te ven.
(Job. 42.1-5).

Es en el diluvio donde usted debe tener presentes las palabras de Jess: Al Seor tu
Dios Adorars, y a l solo servirs. Puede que este sea el momento preciso para doblar
rodillas, reconocer no solo su seoro sino su deidad. Cuando llueve sobre mojado,
podra ser el momento perfecto para que Yo Soy sea una realidad en su vida. En lo
recio de la lluvia, preste atencin, es muy probable de Sus propios labios le escuche
pronunciar: Yo Soy... As es Yo soy paz, confianza, proveedor, amor, sustento,
sanador, sabidura, justicia, misericordia... Yo Soy... lo que t necesitas


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Cul es la pregunta ms importante que la tormenta ha trado a su vida y que

necesita una respuesta de Dios?
Quin es Dios para mi?
Puede ayudarme la respuesta anterior a sobrellevar con fe la prueba que

estoy atravesando? En caso de no ser as Qu ms necesito conocer sobre
Dios?

ANCLA DE FORTALEZA
Les digo estas cosas para que estn unidos a m y as sean felices de verdad. Pero tengan
valor: yo he vencido a los poderes que gobiernan este mundo.
Juan 16:33 TLA

ACCIONES CONCRETAS



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PUERTAS CERRADAS

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y Jehov le cerr la puerta. Gnesis 7:19

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Cambiadores del mundo
Tengo la bendicin de estar rodeado de un grupo, bastante numeroso por cierto, de
personas que llamo "cambiadores del mundo". Algo as como los Avengers: personas
dotados de dones especiales y que estn empecinados en cambiar el mundo para
bien. Cmo le comento y reitero, este grupo del cual me encuentro rodeado es
bastante amplio y sin nada que envidiar en cuanto al nmero de hroes que la
franquicia de Mrvel pudiera poseer. Los hay de todos tamaos, edades, cualidades
pero unidos en el mismo fin de querer generar una mejor sociedad. Podra iniciar con
personas como Amparo, mi esposa, tambin estn mis hijos, o compaeros de trabajo,
amigos a mi alrededor que se han convertido en modelos a mi vida de pasin, entrega
y dedicacin por transformar el mundo.

Eduardo Magermans es uno de estos cambiadores del mundo que le menciono. Lo
conoc en el ao 2008, aproximadamente por el mes de abril, cuando fui a solicitarle
empleo. l estaba como flamante gerente de una de las corporaciones de radio
cristiana ms grande en Guatemala. Yo estaba pasando el Nigara en bicicleta en
muchos aspectos de mi vida, siendo el laboral y econmico parte de esa crisis por la
que estaba atravesando por aquel entonces. No es que no estuviera trabajando. Tena
un empleo sin embargo las cosas no estaban nada bien.

Trabajaba en la industria textil. Despus de casi 8 aos de estar ocupando el puesto
de jefe de compras en diferentes empresas, en ese ao me encontraba en mi primera
experiencia del otro lado del escritorio: como vendedor. Definitivamente no era lo
mo. Las cosas no estaban saliendo bien. Para colmo de males, el cliente que
representaba el 80% de las ventas que efectuaba, y por ende de las comisiones que
reciba, se haba declarado en quiebra y con ello se imaginar que estuve a punto de
hacer lo mismo.

Ese era el panorama econmico en el que me encontraba cuando un amigo con el que
fuimos juntos al colegio me refiere con Eduardo. Desde muchos aos atrs haba
tenido el sueo de integrarme a trabajar a tiempo completo en algo que estuviera

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relacionado con la expansin del mensaje de Salvacin. Mentalmente tena el
obstculo de creer que mi falta de ttulo teolgico o pastoral sera un gran problema
para realizar mi sueo (abordo ms de este tema en otro libro). Pero all estaba, con
una oportunidad de hablar con alguien que me poda abrir la puerta para adentrarme
en un mundo que anhelaba pertenecer.

El nico pelo en la sopa que vea, era precisamente el puesto al cual estaba
aplicando: La gerencia de ventas de la corporacin de radios. No es que dudara de
hacer un buen trabajo. Personalmente he tenido un paradigma un tanto contrario al
tema de comercializar los aspectos relacionados con Dios. Sin embargo, cre que esa
sera la puerta de entrada, as que apasionadamente me present a la entrevista con
Eduardo.

Llegu muy optimista, aunque nervioso a la vez. La entrevista se centr ms en mi
persona, mis gustos personales y mis pasiones que en mis habilidades laborales. Me
pareci curioso al principio, y trataba de encontrar las respuestas correctas para
hacerle ver a Eduardo que deba contratarme. Mis respuestas eran cautelosas, hasta
que me pregunt sobre mis sueos de vida. No pens lo que iba a responder.
Sencillamente lo hice y le compart lo que haba en mi corazn.

La entrevista termin y acordamos que me llamara para compartir su decisin. Si
haba sido reclutado o no. Siguiendo el consejo de otro amigo, esa misma tarde
prepar el esbozo de un plan de mercadeo y ventas. Sin muchos detalles, pero si con
la suficiente informacin como para decirle a Eduardo: debes contratarme. Lo fui a
dejar y tuve la oportunidad de entregrselo personalmente. Al cabo de unos das me
enter que la plaza haba sido ocupada. Me sent desconcertado. Incmodo. Con
cuestionamientos para con Dios y luego de estarlo pensando llam por telfono a
Eduardo. No con el objetivo de reclamar. Simplemente necesitaba saber qu me haba
hecho falta para encajar en el perfil.

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Creo que cumples con el perfil me dijo pero hay algo que creo que no encajara:
tus sueos. Seguramente mi silencio le indic que estaba esperando que dijera ms:
Los sueos que tan apasionadamente me compartiste no encajan del todo con lo que
ac vendras a hacer. No encajan? Pero yo lo vea como una puerta de entrada para
avanzar hacia ellos y se lo hice ver. No lo creo Juanfer volvi a decir hay algunos
aspectos que pude notar que te apasionan de tal manera y en los que crees tan
fuertemente que no coinciden del todo con lo que ac haras y tarde o temprano eso
se iba a notar

Se imaginar lo complicado que fue para mi asimilar esa respuesta. Cre que, al
momento de haber tenido la oportunidad de entrevistarme con l, Dios estaba
abriendo una puerta que ahora vea que se cerraba. Fue como si la sombrilla que cre
que estaba frenando la tormenta se hubiera hecho pedazos y otra vez la fra lluvia
recorra todo mi cuerpo. Fue incmodo. No entenda lo que pasaba.

Ms all de entender
Entendimiento. Si, eso es lo que buscamos en medio de la tormenta. Nos gustara
entender. Quisiramos una explicacin. Creemos que al recibirla, la tormenta pasara
con mayor rapidez. Pretendemos que en las puertas que se cierran se nos den todas
las explicaciones. Pues al fin y al cabo Dnde queda la promesa de toquen y se les
abrir ? Qu pas con el pidan y se les dar?8

Cuando las puertas se cierran, el sentido de abandono se incrementa. La desolacin
puede cobrar una dimensin extraordinaria que nos hace sentir precisamente as:
solos, an con gente a nuestro alrededor. Ese sentido de impotencia, de querer
derrumbar la puerta para atravesarla y saber que no podemos hacer nada. Ese
sentimiento de rechazo que se hace palpable en nuestras vidas y que genera una
incomodidad por no saber qu hacer con ella.

Las puertas cerradas pueden llegar a ser sinnimo de fracaso. Nos hemos esforzado,
hemos hecho mucho por salir adelante. No es que no lo hayamos intentado. Todo lo

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contrario, podramos hablar de innumerables esfuerzos y repeticiones por querer
conseguirlo, pero el resultado ha sido ese: la puerta se cerr. Pero desde la
perspectiva de Dios el asunto no se ve as.

Saber que Dios es amor, implica que todo cuanto l permita pasar
bajo su filtro de amor.

Existen dos aspectos fundamentales dentro de los atributos de Dios que captura mi
atencin en gran manera y que me han sido tiles cuando las puertas se cierran,
cuando la tormenta arrecia. El primero de ellos es su soberana. La soberana de Dios
implica que l tiene el control de todas las situaciones y con ello la toma de
decisiones. Dicho en palabras simples: Dios no pide autorizacin para hacer algo. l
puede hacer lo que le venga en gana sin dar ninguna explicacin. Siendo el dueo y
soberano, puede actuar a su antojo. Pero no se inquiete, asuste o vea esto de manera
extrema. Le mencion dos atributos que me han ayudado. El segundo de ellos es el
amor de Dios. La Biblia nos dice que Dios es amor9. Este es el atributo de la
esperanza.

Saber que Dios es amor, implica que todo cuanto l permita pasar bajo su filtro de
amor. Dios no permitir ninguna circunstancia difcil a nuestra vida a no ser que, de
alguna manera, tenga una implicacin en la cual l pueda manifestar cunto nos ama.
Las puertas que se cierran, estn bajo su control. Las puertas que se cierran, fueron
autorizadas por l. Las puertas que se cierran muestran su amor. Observe lo que
dice el versculo 9 de Gnesis 7:

y El Seor le cerr la puerta.

Protegidos por l
No hizo el arca. Trabaj muchos aos. Dedic gran parte de su vida en la
construccin de aquello que sera su salvacin. Fue obediente y sigui todas y cada
una de las instrucciones dadas por Dios. Pero no era suficiente. Ni siquiera su obra

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de obediencia era suficiente, sin la mano de Aquel a quien estaba siendo obediente.
Dios mismo se encarg de cerrar el arca. Las puertas que Dios cierra, se cierran con
el fin de protegernos.

A pesar de ser un corto tiempo, muchas cosas pasaron entre ese abril del 2008 y el 16
de septiembre del mismo ao. A eso de las 9 de la maana recib una llamada del
Pastor de la congregacin a la cual asisto. Era la primera vez, no slo que Rony
Madrid me llamaba, sino que cualquier Pastor General de una congregacin lo haca
(debo confesarlo que me emocion, jejeje). Algunas semanas atrs nos habamos
reunido en una sesin de consejera pastoral.

Las puertas que Dios cierra, se cierran con el fin de protegernos.

La llamada no tena que ver con aspectos de consejera. Era para comentarme que
Dios estaba dndole la oportunidad a la congregacin de hacerse cargo de la
administracin de una frecuencia de radio. La 98.1 FM. Su intencin era invitarme a
involucrarme en el proyecto como director de ella.

Yo? Jams haba trabajado en una radio. No conoca de medios de comunicacin,
ms all de un sitio web que llevaba un par de aos de tener. No haba estudiado
Ciencias de la Comunicacin, Periodismo o Publicidad. Era parte de mi sueo, pero no
me consideraba el indicado (eso sin mencionar que ya haba sido rechazado en una
ocasin por una radio). Pero sus palabras me terminaron de sorprender: No importa
aclar precisamente estoy buscando alguien que no tenga experiencia o algn
conocimiento en radio, el proyecto es algo que necesito que lo tome alguien con la
mente fresca y que acepte a hacer cosas que a lo mejor no se han hecho en radio.

All empez a cobrar sentido la puerta cerrada de hace algunos meses. Si hubiese
tomado ese empleo, el requisito de ser un ignorante en medios de comunicacin
habra arruinado mi perfil para ser candidato a la plaza. Dios cerr la puerta, para

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mantenerme resguardado. Eduardo haba sido el instrumento de Dios para que no
me saliera del lugar seguro en el que deseaba me mantuviera.

Hoy Eduardo Maggermans es parte del equipo de uno de los programas innovadores
que 98.1 presenta dentro de su programacin. Su pasin por formar ciudadanos
responsables se hace latente en el programa que conduce. Es parte de estos
Avengers que Dios ha reunido para llevar un mensaje de esperanza y
transformacin a la ciudadana. Hemos conversado en varias ocasiones sobre esta
experiencia y hemos coincidido como realmente fue Dios quien coordin todo de
manera magistral.

Lo que usted ve como puertas cerradas, no es otra cosa sino la puerta abierta que
Dios mantiene para cuidar su vida y protegerle. Miguel ngel Villagrn, Mlin,
compositor guatemalteco y ganador de premios por sus composiciones, justamente
compuso una cancin llamada Abrirs las puertas la cual, en su letra, encierra la
verdad de las oportunidades que Dios tiene para nuestras vidas. Conversando con l
en el proceso de escribir este material, justamente le coment sobre lo relacionado
que estaba con el tema y me permiti compartir con usted tanto la letra como la
oportunidad que usted pueda escuchar esta cancin en el link que le dejo a
continuacin:

Si conmigo estas cualquier sitio es el mejor lugar,
si es tu voluntad, har las cosas mas ridculas,
no quiero entenderlo, slo e de creerlo
que se cumplir tu plan para m...
Y abrirs las puertas me dars las fuerzas,
caminar sobre las aguas,
apoyar en ti mi alma,
cruzar los cielos,
volar sin miedo
y alcanzar las estrellas
de las que adornan tu grandeza Seor...
Siempre confiar, que tu luz me har resplandecer
y por ti podr lograr las metas que tanto so,
no quiero entenderlo, slo he de creerlo
que se cumplir tu plan para m...
Y abrirs las puertas me dars las fuerzas,
caminar sobre las aguas,
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apoyar en ti mi alma,
cruzar los cielos,
volar sin miedo
y alcanzar las estrellas
de las que adornan tu grandeza Seor...
PUEDE ESCUCHARLA EN: www.cuandoeldiluviollega.com

Las puertas que a nosotros nos parecen cerradas para entrar, posiblemente son las
puertas que Dios mantiene cerradas pero para evitar que nos salgamos del centro de
su voluntad. En la visin panormica, tanto en espacio como en tiempo, que l posee
y sumando a eso su infinita misericordia, nos protege.

No hace de menos nuestro esfuerzo, todo lo contrario: lo valora y suma dentro de la
expectativa que tiene de nosotros para avanzar en pos de lo que anhelamos. No lo
saba. Trabaj incansablemente. Fue necesario que hiciera su parte para que el arca
quedara en perfectas condiciones de acuerdo a las instrucciones que Dios le di. Sin
embargo para que la proteccin llegara a su vida y a la de su familia fue necesario el
toque de Dios.

La proteccin final, la ms segura provendr siempre de Dios.

En su vida ser lo mismo. Haga su parte. No deje de trabajar. Jams descanse en hacer
lo que Dios le ha mandado a hacer. Pero no crea que eso es lo que lo est salvando. La
proteccin final, la ms segura provendr siempre de Dios. En medio del diluvio de su
prueba tenga la seguridad que no est solo. Confe plenamente en que a su lado estar
siempre la mano del Todopoderoso, y cuando sienta que la lluvia arrecia y observe
que la puerta est cerrada, se dar cuenta que es para mantenerlo a salvo. El amor de
Dios no se muestra slo en las puertas que se abren, sino en aquellas que se cierran
para mantenernos protegidos.


81

Qu experiencia difcil recuerdo en mi vida que hoy puedo reconocer que

Dios us para bien?
Cmo la experiencia anterior puede servir para animarme en medio de otras

experiencias difciles?
Qu opino de la frase: El amor de Dios no se muestra solo en las puertas que

se abren, sino en aquellas que se cierran para mantenernos protegidos?

ANCLA DE FORTALEZA

ACCIONES CONCRETAS




82
GRATO RECUERDO

83

Entonces Dios se acord de No. Gnesis 8.1

84

Olvidados
No soy bueno para las fechas. Mejor dicho soy bastante malo para ellas. En ms de
una ocasin he tenido que llamar a algn amigo uno o dos das despus, en primer
lugar para disculparme por lo tarde y luego para felicitarle por su cumpleaos que
acaba de pasar. An cuando las notificaciones de Facebook ahora podran resolver
ese problema, caigo en el extremo de llamar tarde. Si ya s: soy un mal amigo. Eso no
se hace. Sobre todo porque s lo que significa para alguien que otra persona no se
recuerde de uno. Yo lo he vivido.

La sensacin de sentirse olvidado es horrible. No slo por un cumpleaos, sino esa
sensacin que acarrea la prueba de desolacin. Y no es que fsicamente nos
encontremos solos, pero el vaco que empieza a formar el diluvio en la vida se hace
ms y ms grande conforme la prueba se acerca.

Soledad. Es mucho ms fcil pronunciar esa palabra que deshacerse de ella cuando
en medio de la adversidad se hace presente. Nadie la invita, nadie la llama,
sencillamente se aparece en el momento en que ms recia est la tormenta en nuestra
vida. Y no necesariamente porque no tengamos gente a nuestro alrededor, sino
porque en nuestro interior se genera esa sensacin de incomodidad. Robin Williams
dijo en un ocasin: lo ms triste no es llegar a viejo y estar solo, sino estar al lado de
alguien que te haga sentir solo. La soledad es una mala compaa.

Un hombre que saba de soledad
l conoca el sabor de la soledad. Sabe a desolacin, sabe a amargura, sabe a
desprecio, sabe a rechazo. Desconocemos el tiempo que haba pasado con esa
enfermedad. Lo cierto es que era la enfermedad de la maldicin. La lepra era
considerada as: una maldicin. Quien la reciba era rechazado, ni siquiera aislado o
puesto en cuarentena, sencillamente era sacado de la sociedad y dejado a su suerte en
donde pudiera acomodarse lo ms lejos de los dems. Su nica compaa
probablemente era otro grupo de leprosos similares a l. Condiciones similares de

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desastre solo hace que el sentimiento de soledad se incremente. Compartir la soledad
entre varios, produce el mismo efecto: sentirse solo.

La soledad consume la esperanza. La soledad hace que dudemos de un nuevo
amanecer en medio de la noche ms oscura de nuestra vida. La soledad nos hace
creer que el agua no se calmar. Pero en medio de esa soledad Jess se aparece.
Brinda tanta confianza de ser la compaa que este hombre necesita que le inspira a
buscar en l la solucin, la respuesta que tanto ha anhelado por aos. La lepra haba
carcomido su cuerpo, estaba destruyendo su esperanza, pero an quedaba un poco:
lo suficiente como para atreverse a indicar con timidez: Si quieres puedo ser sano

Si quieres? Acaso no desea lo mejor para nosotros? Acaso no desea el bienestar
para nuestra vida? Pero no seamos crticos con el hombre, a todos nos ha pasado.
Cuando la tormenta a arreciado lo suficiente en nuestra vida, llegamos a dudar de lo
que Dios pudiera desear para nosotros. Cuando la dificultad ha durado tanto tiempo
las preguntas surgen y la inseguridad que acompaa a la soledad tambin llega a
nuestra vida. Si quieres? es el representativo de las preguntas que usted y yo
tenemos cuando, en medio de la soledad, necesitamos no slo una solucin, sino de
alguien que est all para cambiar nuestra vida.

Lo hecho por Jess es impresionante. Sus palabras y sus acciones confirman su
postura cuando sabe que la soledad se ha presentado en nuestra vida. Inicia diciendo
S quiero Reafirma la importancia que tiene nuestra vida y circunstancias para l.
Ante la duda que trata de sembrar la soledad, l reafirma que est all para hacernos
compaa. Ante esos sentimientos de abandono, en esas dos palabras Jess encierra
el compromiso de Dios para con nosotros al enviar a su Hijo para resolver cualquier
vaco que la dificultad est provocando en nuestro interior. Si quiero es la
respuesta de la esperanza, de la confianza, de la oportunidad que todos tenemos de
seguir creyendo en las promesas de Dios.

86

Pero no solo consisti en una respuesta verbal. Todo deba ser sellado con acciones
que reafirmaran, no slo la postura de Dios, sino la fe de este hombre. Jess se acerc
y le toc. No era necesario, usted recuerda lo dicho por el jefe de la guarda romana:
una palabra bastar para sanar. Pero lo que para el resto de nosotros no era
necesario, s que lo era para ese, hasta entonces, hombre leproso. Haba pasado
mucho tiempo desde que la ltima persona se haba acercado a l. Eran ya muchos los
aos que no senta el toque fsico de alguien. Probablemente an recordaba la
sensacin del roce de la piel de alguien ms. Ese era un argumento de burla de la
soledad. Era un recuerdo constante que al traerlo a su mente, se haba anidado en su
corazn. Recordar el ltimo abrazo compartido, era el dolor de no tener acceso a
ninguno. Tener en la mente el estrechn de mano de alguien, era sal en la herida que
estaba en el corazn. Por eso el acercamiento de Jess era importante. Por eso fue
parte del proceso. Ese toque dado por Jess fue restaurador, trajo consuelo, devolvi
la esperanza, ms que la salud a su piel, san su alma.

Presentes en su recuerdo
En la soledad de la prueba necesitamos alguien que se acuerde de nosotros. A nadie
le gusta atravesar las pruebas en soledad. Nuestro corazn se torna ms sensible
ante las reacciones y actitudes de los dems delante de nuestro problemas. En el
problema anhelamos sentirnos acompaados. Desearamos una llamada, una visita,
una publicacin en el muro de Facebook. La sensibilidad hacia la presencia de los
dems se incrementa al punto que tenemos a flor de piel la expresin Es en los
momentos difciles donde comprob quines eran mis amigos

Si quiero es la respuesta de la esperanza, de la confianza, de la
oportunidad que todos tenemos de seguir creyendo en las promesas
de Dios.

En la mente de Dios
Podemos estar ausentes en la mente de los dems, pero seguimos presentes en el
recuerdo de Dios. Observe las maravillosas palabras que se muestran en el versculo

87

1 de Gnesis 8. Esta es verdad que sostiene el corazn y levanta al cado se ve all.
Lemoslo juntos:

Se acord Dios de No.

No es un smbolo de la humanidad, de usted y yo cuando atravesamos problemas. De
usted y yo cuando nos sentimos atormentados, tristes, solos, desamparados. De usted
y yo que sentimos que no le importamos a nadie cuando atravesamos las ms grandes
de las dificultades. As que es vlido que cambie el nombre de No por el suyo en ese
versculo. Vamos anmese a hacerlo. Intntelo, no se detenga. Ponga su nombre en el
espacio en blanco.

Se acord Dios de_______________________________________

Cmo se lee ahora? Maravilloso! No le parece? Usted vive en los pensamientos de
Dios. En la historia Bblica se encuentra el registro de Dios pensando en usted. Jess
lo hizo tambin.

Parte de la Historia
La Biblia est cargada de espacios de silencio, momentos en que no se nos aclara
que sucedi, pero que todos sabemos que algo pas. Se nos dice de un versculo a
otro que Abram recibi la indicacin de dejar toda su familia y cmo en obediencia al
da siguiente emprendi la marcha, pero no se nos dice nada de la noche que tuvo que
pasar meditando y conversando con Sara al respecto. Se mencionan 40 das que
Moiss estuvo en el monte, pero nada en detalle a lo que en ese tiempo pas.
Espacios de silencio que cobran mucha importancia cuando meditamos en ellos.

Juan 17 tiene uno de mis favoritos. Un espacio de silencio maravilloso. Observe lo
que dice a partir del verso 13:
Ahora regreso a donde t ests. Pero digo esto mientras estoy en el mundo, para que
mis seguidores sean tan felices como yo. Les he dado tu mensaje, y por eso los de este

88

mundo los odian, pues ellos ya no son como esa gente, y tampoco yo soy as. No te pido
que los quites del mundo, sino que los protejas de Satans. Yo no soy de este mundo, y
tampoco ellos lo son. Tu mensaje es la verdad; haz que al escucharlo, ellos se entreguen
totalmente a ti. Los envo a dar tu mensaje a la gente de este mundo, as como t me
enviaste a m. Toda mi vida te la he entregado, y lo mismo espero que hagan mis
seguidores. No pido slo por ellos, sino tambin por los que creern en m cuando
escuchen su mensaje. Te pido que se mantengan unidos entre ellos, y que as como t y
yo estamos unidos, tambin ellos se mantengan unidos a nosotros. As la gente de este
mundo creer que t me enviaste.

Usted seguramente tiene fresco el momento que acaba de leer. Efectivamente se trata
de la ltima oracin que la Biblia relata de Jess previo a ser apresado por los
romanos. Cuando uno sabe que queda poco tiempo presta atencin a las palabras que
va a pronunciar. Cuando se est por entrar a una etapa complicada, la ms
complicada que se haya enfrentado, la escogencia de las palabras se hace necesaria.
En medio del conflicto por venir Jess toma tiempo para interceder. No aboga por l,
pide por los dems. Y si no logr observar el espacio de silencio por la diversidad de
versculos que coloqu se lo muestro rpidamente en la siguiente frase dicha por El
Maestro:

No pido slo por ellos, sino tambin por los que creern en m cuando escuchen su
mensaje.

Logra verlo? Captura el espacio de silencio que se produce en ese instante? Djeme
que se lo ponga desde esta perspectiva Qu sucede cuando usted intercede por
alguien? Qu pasa si usted ora por alguna necesidad, digamos, de su mam? Seguro
piensa en ella, el rostro de ella se dibuja en su mente y el enfoque de su peticin se
hace ms intenso al traer esa imagen mental a su conversacin con Dios. Jess, en
esta oracin, pide por alguien. Pide por usted, pide por mi, pide por nosotros. En esta
frase existe un espacio de silencio maravilloso y, a lo mejor, una pausa en el reloj de la
eternidad en la que Jess tuvo el tiempo para poder ver su rostro y el mo mientras

89

interceda al Padre. Usted y yo, en este pasaje, formamos parte de la historia bblica.
El inters de Jess fue tan evidente que se acord de cada uno de nosotros an antes
de haber nacido. l saba que usted le seguira, saba que usted estara interesado en
serle fiel, en serle obediente; pero tambin saba que vendran pruebas, que existiran
tormentas y, por eso, antes que ellas vinieran se acord de usted.

El inters de Jess fue tan evidente que se acord de cada uno de
nosotros an antes de haber nacido.

l tiene puesta su atencin en usted y todo lo que le acontece. Al igual que ese hombre
enfermo y olvidado por los dems por aos. De la misma manera que ese hombre que
estaba en medio de la tormenta dentro de un arca. Si duda que alguien se acuerde de
usted mientras atraviesa el diluvio en el corazn, lea la primera frase de Gnesis 8.1.
Note como el Omnipotente se acuerda de usted. l sabe su afliccin, conoce su pena.,
comprende su dolor, comparte sus circunstancias. En medio de la prueba l se
acuerda de usted. Piensa constantemente en usted... pensamientos superiores,
pensamientos de paz, pensamientos de bien, pensamientos para dar el mejor fin a su
vida. (Jeremas 29.11)



Se ha sentido solo en medio de la dificultad? Qu pensamientos vienen a su

mente en ese momento?
Cmo colabora en su vida saber que usted vive en el recuerdo de Dios y que
es importante para l?
90
Puede nombrar una experiencia de su pasado donde Dios se acerc a usted a

darle esperanza y paz?

ANCLA DE FORTALEZA
Siempre doy gracias a mi Dios, al acordarme de ustedes;
Filipenses 1:3

ACCIONES CONCRETAS




91
EN CALMA

92

Envi un viento que soplara sobre la tierra, y las aguas del diluvio comenzaron a
retirarse. Gnesis 8.1b

93

Llamando nuestra atencin
A lo largo de la historia bblica Dios usa diversas formas de capturar nuestra atencin.
Su gran inters por tener comunin con nosotros le ha llevado a utilizar todo tipo de
elementos que nos permitan acercarnos a l. Algunos de esos elementos son gratos,
como una puesta de sol, un lindo amanecer, la sonrisa de un amigo, un maravilloso
tiempo compartido entre amigos. Otros, como los problemas, llamadas de atencin, e
incomodidades no son del todo de nuestro agrado, pero igualmente siguen siendo
formas que Dios usa para invitarnos a tener comunin con l.

Ubquese por un momento en la posicin de No y trate de visualizar su problema. Si
se tratara de escribir qumicamente el problema de No, la frmula sera H2O. Agua,
agua y ms agua era lo que contemplaba. Por todos lados apareca, en cualquier lugar
la encontraba, estaba rodeado por ella. Visualmente el problema de No era
representado por cantidades inimaginables de agua. Agua que fue utilizada por Dios
para atraer la atencin de No hacia l. La dificultad se convirti precisamente en el
pretexto usado por Dios para invitar a No a entrar en comunin con l.

Qu est usando Dios en su vida? Si ha tomado este libro en manos y ha llegado
hasta este punto es posible que sea un elemento no grato desde su perspectiva el que
est siendo usado para tener comunin con Dios. La tormenta no es agradable, pero
el fin que persigue si lo es. El exceso de lluvia en nuestra vida no es atractivo, pero
cuando le aprovechamos para entrar en comunin con Dios nos damos cuenta que
efectivamente todo obra para bien.

La tormenta no es agradable, pero el fin que persigue si lo es.

No y su familia no han sido los nicos para los que el exceso de agua ha sido un
problema. Siglos despus expertos marineros se encontraron con esta dificultad.
Haban crecido entre olas y gaviotas. Desde nios se les ense a lanzar las redes. Las
olas alborotadas por la lluvia no eran algo desconocido para ellos. Seguramente no

94

era la primera tormenta que pasaban, pero s era la primera que amenazaba su vida
de la forma en que sta lo estaba haciendo.

De repente, se desat sobre el lago una fuerte tormenta, con olas que entraban en
el barco; pero Jess dorma. Mateo 8.24

El asunto no era si Jess dorma o no. El problema fue el momento en que lo hizo.
Problema para aquellos con los que iba pues result un momento por dems lleno de
angustia. La tormenta haba arreciado a un punto en el que la comodidad ya no es
parte de las cosas con las que uno puede contar. La confianza de saber que Jess
estaba con ellos, no dur mucho cuando no lo vieron cerca de ellos.

Eso hace que me identifique con estos hombres. Estaban en un rea donde eran
expertos, no fue un lugar por el que no hubieran pasado, pero an as estaban
atemorizados. Lo mismo que me ha sucedido en repetidas ocasiones en diversos
lugares donde me considero un experto. Trabajo, familia, relaciones. Esos lugares
donde, luego de haber sembrado experiencia tengo la falsa creencia de dominarlo y
saberlo todo. Gran error. Surgen esas situaciones que me hacen decir lo mismo que
el filsofo griego: Solo s que no se nada.

Nuevas formas de depender
La experiencia no es garanta de nada cuando de problemas se trata. No los evitamos
solo por saber. Son precisamente las nuevas experiencias de dificultad las que
probablemente nos ayudarn a incrementar la experiencia, o definirn nuevas formas
de depender de Dios. Eso fue lo que provoc esa tormenta: una distinta forma de
clamar a Dios. All los discpulos entendieron en vivencia prctica lo dicho por el
profeta: Clama a m y yo te responder.

Tropezando entre la madera mojada por el agua que se estaba metiendo en la barca,
empapado hasta las barbas, Pedro encabezaba la comitiva de los discpulos que
fueron a despertarlo:

95

Maestro! No te importa que nos ahoguemos? (Marcos 4:38)

La tradicin nos dice que Marcos escribi el relato del Evangelio de Jess, basado en
las crnicas que Pedro le narr. No es de extraar entonces que los pasajes paralelos
como Lucas 8: 24 (Maestro, nos vamos a ahogar) o Mateo 8:25 (Seor Slvanos!
Nos vamos a ahogar!) usen palabras que si bien denotaban la angustia de los
discpulos, no muestran la desconfianza hacia Jess.

Me parece ver a Pedro contndole a Marcos la escena. Cmo intent tener todo bajo
control. Seguramente le mencion que fue el ltimo en preocuparse y el que trat de
calmar al resto de los discpulos cuando las olas sobrepasaron los 10 metros y la
tormenta ruga con todo su poder. Pedro le mencion la angustia que sinti. Le
confes cmo todos los aos de ser un experto marino no funcionaron ante la furia
que el mar y la lluvia presentaban esa noche. Todo cuanto intent hacer no
funcionaba. Las cosas haban salido de su control. Fue en ese momento donde anim
a todos para que fueran a buscar a Jess. l iba por delante. Mateo y Lucas registran
las palabras del resto, Marcos lo que Pedro sinti. La tormenta haba hecho creer a
Pedro que haba desaparecido de la escala de importancia de Su Maestro.

Le ha pasado a usted? Se ha sentido confiado en alguna situacin para darse cuenta
que la situacin escapa de su control? Haga memoria cuando se dio cuenta que
ninguno de sus conocimientos o experiencias pasadas le ayudaban a resolver la
situacin. Cul ha sido su reaccin cuando sus fuerzas han sido insuficientes? Nios
enfermos, despidos injustos, relaciones quebrantadas, una pareja que no comprende,
una deuda sin pagar, un sueo sin realizar. Frustracin, desnimo, depresin y otros
cuntos seres despreciables hacen una larga fila para entrar por la puerta de su
corazn y derrumbar su vida, para destruir sus ideales y hundirlo en la ms profunda
de todas las miserias.
Siendo sinceros

96

Es justamente en ese momento donde se vale ser sincero. Expresar nuestro sentir
delante de Dios. Pedro le dijo a Marcos que fueron todos, lo dicho por Lucas y Mateo
nos muestra que, aunque el sentir era el mismo la forma de expresarlo fue diferente:
No te importa? En esa pregunta viene la respuesta que el momento ameritaba.
Jess abre los ojos, observa a su alrededor. Entiende y sabe lo que pasa. Se pone de
pie, sabe lo que puede y tiene que hacer.

Cuando Jess se despert, reprendi al viento y dijo a las olas: Silencio!
Clmense!. De repente, el viento se detuvo y hubo una gran calma. Marcos 4:39

La calma a nuestras tormentas viene de la bsqueda de Aquel que pueda calmarlas.
Jess es especialista en eso. Cuando toda su experiencia quede burlada y la
acumulacin de todo lo aprendido y conocido no sea suficiente, es necesario recordar
que no son nuestros mritos los que nos mantendrn a flote, sino el poder salvador de
Jess obrando en nuestras vidas.

No estoy diciendo que no es necesario prepararnos. Por mucho creo que
capacitarnos es fundamental para poder hacerle frente a los desafos de la vida. Lo
que hago ver es la importancia que tiene no depositar nuestra confianza en esa
preparacin ms all de lo que podemos hacer en Dios.

La calma a nuestras tormentas viene de la bsqueda de Aquel que
pueda calmarlas.

En el momento de la dificultad, tal vez slo logra ver su problema. Al igual que Pedro
y los discpulos el panorama lluvioso sea todo lo que ve. O como el caso de No que
slo vea agua, tal vez en sus ojos slo asoma su dificultad. Probablemente su
situacin se aparece cual ola que trata de hundir su embarcacin. Pero no se
desaliente. Vea lo que hace Dios:

...hizo pasar Dios un viento sobre la tierra, y disminuyeron las aguas (Gn. 8.1b)

97

Toma la posicin que le corresponde en el barco. Enva un viento que hace descender
el agua. Un viento en el que, como en el principio cuando el Espritu de Dios se mova
en el aire y sobre la superficie de las aguas (Gnesis. 1.2), se encontraba Su
presencia. Un mover del Espritu de Dios en su vida es lo que necesita para que las
aguas de su problema desciendan.

Dos recomendaciones
He aqu la primera gran recomendacin de este captulo: No deje de ver el mover de
Dios en medio de la tormenta. Enfoque su problema. Tal vez sea lo nico que vea en
este momento. Quizs aparece a cada giro que usted da. No se preocupe. Tenga calma.
Dios tiene supremo control de la situacin. Observe como ni su ms grande
tempestad logra inquietarlo. Primero le ha dado el ejemplo: Descansaba. Dorma... no
porque no le importara lo que le estaba pasando, sino para que usted le imitara.
Repose en la tormenta. Descanse en l. Cuando sus recursos se acaben es el momento
de dejar de actuar. Encrguese de lo posible, lo imposible est asegurado. Observe
cmo se levanta en el momento oportuno y cmo al dar la orden y hacer un
movimiento con Sus manos la tempestad de su problema desaparece.

Dios sigue y seguir teniendo el control.

Dios sigue y seguir teniendo el control. l seguir enviando mensajeros portadores
de paz en medio de la dificultad. Cuando creamos que la soledad ha llegado al
extremo, mostrar en aspectos cotidianos que l siempre ha estado all.

Las aguas subterrneas dejaron de fluir y se detuvieron las lluvias torrenciales
que caan del cielo. Entonces las aguas del diluvio se retiraron de la tierra en
forma gradual. Despus de ciento cincuenta das, exactamente cinco meses
despus de que comenz el diluvio, la barca se detuvo sobre las montaas de
Ararat. Dos meses y medio ms tarde, mientras las aguas seguan bajando, otras
cumbres se hicieron visibles. Pasados otros cuarenta das, No abri la ventana

98

que haba hecho en la barca y solt un cuervo. El pjaro vol ida y vuelta hasta
que las aguas del diluvio terminaron de secarse sobre la tierra. Tambin solt
una paloma para ver si el agua se haba retirado y si la paloma poda encontrar
suelo seco; pero la paloma no pudo encontrar ningn lugar donde posarse,
porque el agua an cubra la tierra. As que volvi a la barca, y No extendi su
mano y meti la paloma adentro. Despus de esperar otros siete das, No volvi a
soltar la paloma; esta vez la paloma regres a l por la tarde con una hoja de
olivo fresca en su pico. Entonces No supo que las aguas del diluvio se haban
retirado casi por completo. Gnesis 8:2-11

Son extraas las formas en que Dios se dirige en ocasiones a nuestra vida. Usa
diversas formas para enviar Sus mensajes de paz. Se sale de lo comn para
transmitirnos su amor. Rompe con los patrones a los que estamos acostumbrados
para llevar reposo a nuestra alma. Pero no importa. Lo cierto es que, sin importar la
forma, Dios trae paz. Vea la respuesta en el silbo apacible a Elas. Asmbrese con el
nio que llev un mensaje de paz al derribar con una piedra al gigante. Frtese los
ojos al verlo sanar a un ciego con lodo hecho con saliva. Maravllese junto con No al
verlo enviar respuestas de paz a travs de simples aves.

La forma y el mtodo no es lo importante en las respuestas de Dios. l seguir siendo
lo ms importante en sus propias respuestas. Las preguntas ms grandes de su vida
l personalmente las resolver. Los acontecimientos ms difciles sern tomados en
Sus manos. La paz que usted necesita a travs del diluvio llegar de la forma en que
menos lo espera. Su promesa sigue estando vigente.

La forma y el mtodo no es lo importante en las respuestas de Dios.

Esa es la segunda gran recomendacin que deseo hacerle en este captulo:
mantngase alerta, Dios ha enviado la respuesta. Se valdr de cualquier medio y
mtodo para hacerle llegar la respuesta. Y, quin sabe, pudiera ser que al leer estas
lneas la paz que sobrepasa todo entendimiento est inundando su corazn

99


Ha sentido que ha dejado de importarle a Dios? Qu siente luego de haber

visto cun importante es usted para l?
Cmo podra, de manera prctica, mostrar que Dios est en el primer lugar de
su confianza por encima de sus propias capacidades y conocimientos
adquiridos?
Puede nombrar elementos que Dios haya usado en el pasado para traer paz a
su vida?

ANCLA DE FORTALEZA
Mi presencia ir contigo y te dar descanso. xodo. 33.14

ACCIONES CONCRETAS


100


101
PRIORITARIOS

102

Despus Dios bendijo a No y a sus hijos, y les dijo: Sean fructferos y
multiplquense; llenen la tierra. Todos los animales de la tierra, todas las aves del
cielo, todos los animales pequeos que corren por el suelo y todos los peces del
mar tendrn temor y terror de ustedes. Yo los he puesto bajo su autoridad. Se los
he dado a ustedes como alimento, como les he dado tambin los granos y las
verduras; pero nunca deben comer de ninguna carne con su vida, es decir, que
an tenga sangre.
Yo exigir la sangre de cualquiera que le quite la vida a otra persona. Si un
animal salvaje mata a una persona, ese animal debe morir; y cualquiera que
asesine a otro ser humano debe morir. Si alguien quita una vida humana, la vida
de esa persona tambin ser quitada por manos humanas. Pues Dios hizo a los
seres humanos a su propia imagen. Ahora sean fructferos y multiplquense, y
vuelvan a poblar la tierra.
Entonces Dios les dijo a No y a sus hijos Ahora mismo, yo confirmo mi pacto
con ustedes y con sus descendientes, y con todos los animales que estuvieron en la
barca con ustedes las aves, los animales domsticos y todos los animales
salvajes, con toda criatura viviente sobre la tierra. S, yo confirmo mi pacto con
ustedes. Nunca ms las aguas de un diluvio matarn a todas las criaturas
vivientes; nunca ms un diluvio destruir la tierra

103

Ser pap me cambi la vida. Si usted es pap me logra entender lo que digo, si an no
lo es, realmente ser difcil poderlo explicar. Algo sucede dentro de uno. La forma de
ver la vida es diferente, las percepciones en cuanto a lo que uno hace es otra y los
asuntos ms complicados que pens tener se convierten en aspecto secundario
cuando uno sostiene esas 7 libras entre los brazos.

Pienso que la paternidad es una experiencia tan enriquecedora y transformadora
porque es la nica relacin de amor que se tiene desde que alguien nace y en la que
conscientemente nos involucramos sin pedir nada a cambio. Todo lo contrario. Es
una relacin en la que estamos abiertos a entregar lo mejor que poseamos. Los hijos
permiten aflorar lo mejor de nosotros.

Se lo digo con honestidad y no por presumir: procuro lo mejor para mis hijos. Junto
con Amparito hemos sido intencionales en buscar darles lo mejor de nosotros. Siendo
imperfectos, sabr que no todas las cosas han sido igualmente perfectas. Hemos
cometido errores. Muchos. Pero dentro de esta cantidad de errores que hemos
cometido, predomina el deseo de ser buenos con ellos.

Uno de los muchos aspectos en que la paternidad cambi mi forma de ver mi entorno,
fue la forma de ver a Dios. En lo personal no fue sencillo relacionarme con Dios desde
su rol como padre. He visto a Jess como el gran amigo, esa persona en la que se
puede confiar, que me comprende en todo y con el que se puede ser abierto y
transparente. El Espritu Santo es consuelo, refugio y fuerza a mi vida. Es quien hoy
me indica cuando las cosas van bien y el que llama mi atencin cuando no hago las
cosas que le agradan. Pero Dios Padre?... mmm no fue tan sencillo verlo as.

Tengo que reconocer con mucha vergenza pero al mismo tiempo mucha gratitud que
Dios ha sido fabuloso para mostrarse como Padre a mi vida y ha usado precisamente
mi propia experiencia como padre para poderme hacer entender de mejor manera su
corazn para conmigo.

104

As que si ustedes, gente pecadora, saben dar buenos regalos a sus hijos, cunto
ms su Padre celestial dar buenos regalos a quienes le pidan. Mateo 7:11

Comprender la connotacin que tiene para nuestra vida reconocer a Dios como padre
equivale a encontrarle el verdadero sentido a la vida. Es a travs de esa comprensin
que igualmente podemos llegar a entender la importancia que tenemos para l.
Recuerde que el ser humano fue creado como un ser superior sobre el resto de la
creacin. No fue una criatura ms puesta sobre la tierra, fue creada como el punto
mximo de la obra de Dios, bblicamente dicho, creado a Su imagen y semejanza.

Pero tal pareciera que esto se nos olvida. No tomamos en serio las palabras de Dios y
lo mucho que representa para nuestra vida el hecho de ser imagen del Creador. No
nos apropiamos de la bendicin que desencadena en nuestra vida el convencimiento
pleno de esta verdad. Nos olvidamos del privilegio de ser la criatura sublime de Dios,
hechos poco menor que los ngeles (Sal. 8.5) y, que en su declaracin a No, fuimos
colocados en un lugar por encima al resto de la creacin.

Todos los animales de la tierra, todas las aves del cielo, todos los animales
pequeos que corren por el suelo y todos los peces del mar tendrn temor y terror
de ustedes. Yo los he puesto bajo su autoridad. Gnesis 9

Cuando el diluvio llegue a su vida recuerde que usted est por encima de toda la
creacin. Afirme en su corazn la prioridad que tiene y tenga en mente que dentro de
lo ocupado de la agenda de Dios su nombre est en primer plano. Claro que atender
las galaxias y pondr atencin a lo que sucede con los ocanos, nada escapar de su
atencin, pero tenga la seguridad que Dios estar intensamente atento a lo que a
usted le suceda. Usted le importa a l. Recuerde que usted tiene un valor especial. No
diga que no existe un precio por su vida. Si lo hay. Ya fue pagado en una cruz:

porque Dios los compr a un alto precio. Por lo tanto, honren a Dios con su
cuerpo. (1 Corintios 6:20)

105

El monto? La sangre de Jess. Su vida y la de todo ser humano han sido valoradas
con el precio ms alto de todos: la sangre del Hijo de Dios. As que no olvide el valor
especial que como ser humano tiene tanto usted, como todos aquellos que le rodean.

Por esta razn me gustara que mantenga presente estas verdades:
1. El valor de un ser humano no est determinado por lo que tiene o hace, sino
por lo que es.

As que Dios cre a los seres humanos a su propia imagen. A imagen de Dios los
cre; hombre y mujer los cre. Gnesis 1.27

Estamos inmersos en la cultura del tener y del hacer. Cada vez admiramos ms las
posiciones y los logros dejando a un lado la esencia del ser. Muchas personas llegan a
tener mucho y hacer mucho y no se explican la razn por la cual no son felices.
Justamente porque en el hacer y en el tener no radica la felicidad, sino en el ser.
Fuimos creados por Dios para ser, no solamente para hacer o tener. Lo que hacemos
es resultado de lo que somos, lo que llegamos a tener es consecuencia de lo que Dios
sabe que necesitaremos para ejecutar de mejor manera nuestra funcin del ser.

El diluvio puede aturdirnos y hacer creer que valemos por lo que tenemos, o mejor
dicho que dejamos de valer por lo que hemos perdido y ya no tenemos. El diluvio
genera confusin y puede provocar una bsqueda de valor a travs de la comparacin
de aquellos que tienen ms. Ese es parte del plan del enemigo: confundir nuestra
escala de valores y desviarnos por senderos que conduzcan a la morada de la
insatisfaccin.

Fuimos creados por Dios para ser, no solamente para hacer o
tener.

106

El plan de Dios es todo lo contrario: busca que, en el descubrimiento de nuestra
esencia mantengamos la mirada firme y puesta en l para reconocer que todas las
cosas provienen de Su mano y que, por encima de todo lo que hagamos o tengamos,
valemos por el simple hecho de ser creados a Su imagen.

Cuando en la intensidad de la lluvia, el viento que viene junto con ella intente hacer
desviar su mirada hacia aquello que dej de tener o de hacer, recuerde que su valor
proviene de adentro. Lo que Dios ha depositado dentro de nosotros es y ser siempre
mucho ms valioso que cualquier cosa que pudiramos llegar a tener o hacer.

2. Existe un llamado de parte de Dios a la unidad y amor entre los seres
humanos,

As que ahora les doy un nuevo mandamiento: mense unos a otros. Tal como yo
los he amado, ustedes deben amarse unos a otros. (Juan. 13.34)

El diluvio puede agrietar relaciones. No lo andamos buscando, no lo hacemos de
manera planificada. En el momento que menos lo esperamos, las dificultades pueden
provocar un cierto grado de sensibilidad y, por qu no decirlo, inestabilidad
relacional. No pareciera el mejor momento para amar a los dems. Es ms, se vuelve
complicado dejarse amar por los dems.

Cuando el nivel del agua suba producto de la mucho agua que est cayendo sobre
nuestra vida es importante recordar las palabras dichas por Jess: Ustedes deben
amarse unos a otros. En medio de la prueba djese amar. En medio de la prueba ame.
El amor seguir siendo la cura para muchos males. No es un remedio mgico, ms
bien es un antdoto que guardar nuestros corazones en medio de la calamidad.
Cuando el diluvio llegue, siga amando.

3. Mantenga un concepto adecuado de usted mismo.

107

Dios en su bondad, me nombr apstol, y por eso les pido que no se crean mejores
de lo que realmente son. Ms bien, vanse ustedes mismos segn la capacidad
que Dios les ha dado como seguidores de Cristo. (Romanos 12.3)

Interesantemente este versculo muestra la importancia de mantener los pies puestos
en tierra, pero no debajo de ella. Se nos dice que no tengamos un concepto ms alto
del que debiramos tener, pero igualmente no se dice que lo debemos tener por
debajo de lo que realmente debe ser. Y de manera extraordinaria, la versin en
Lenguaje Actual (TLA), que he usado en este caso, menciona que debemos vernos de
acuerdo a la forma en que Dios ha configurado, diseado y capacitado en el modelo de
Jess. El diluvio puede golpear el autoestima. Esa percepcin del valor que cada uno
posee. La prueba puede hacernos creer que valemos menos. No se deje engaar. Si
su valor es interno, su valor no depender de las circunstancias que le rodean. Acuda
a la fuente de su valor cuando la tentacin de menosprecio personal aparezca.

En medio de la prueba djese amar.

Ninguna prueba o error cometido en medio de ella har que nuestro valor sea menos
delante de los ojos de Dios. No es sencillo hacer esto en medio de la dificultad. Es
mucho ms fcil pensar que dejamos de valer que reconocer el precio que l pag por
nosotros. Es por ello la importancia que le doy al hecho de recordar constantemente
que usted es valioso para Dios.

Un adecuado y sano conocimiento del valor que como seres humanos poseemos
traer como consecuencia una autoestima correcta, lo que a su vez originar un trato
adecuado con el resto de las personas que nos rodean. Todo diluvio en nuestra vida
involucrar personas. Algunos a favor, otros en contra, pero toda dificultad
demandar de nosotros el manejo adecuado de la habilidad para relacionarnos
adecuadamente. Justamente de eso hablo en el siguiente captulo. Mientras tanto le
invito a recordar lo importante que somos para Dios. Eso permitir formar una
adecuada perspectiva de nuestra forma de comportarnos en relacin con otros. Jess

108

lo declar de esta manera: Amars a tu prjimo como a ti mismo. Vea el patrn de
comparacin para amar a los dems: el amor a uno mismo. Es imposible brindar amor
a otros si primero no nos amamos a nosotros mismos; por otra parte es muy difcil
amar si primero no reconocemos el valor que tiene. Cuando usted se logra amar, se
dar cuenta que es ms sencillo amar a otros.



En qu nivel considera que se encuentra su autoestima en este momento?

Qu puede hacer para mejorarla en caso que no se encuentre en el nivel
adecuado?
De qu forma podra ir generando ms valor hacia lo que usted es en lugar de

lo que hace o tiene?
Cmo manifiesta su amor hacia los dems?

ANCLA DE FORTALEZA
Pero Dios nos demostr su gran amor al enviar a Jesucristo a morir por nosotros, a
pesar de que nosotros todava ramos pecadores.
Romanos 5:8

ACCIONES CONCRETAS


109




110
RELACIONES DE VALOR

111

No comenz a cultivar la tierra y plant un viedo. 21Cierto da, bebi del vino
que haba hecho y se emborrach, y estaba recostado y desnudo dentro de su
carpa. 22Cam, el padre de Canan, vio que su padre estaba desnudo y sali a
contrselo a sus hermanos. Gnesis 9:20b-22

112

Decepciones
Todo se trata de expectativas. Muchas de las ms grandes decepciones radican
precisamente en grandes expectativas que no se cumplieron. Decepcionarse en la
vida no es algo fuera de lo comn. En otras no es por lo grande de la expectativa sino
por lo equivocado que se puede estar. En Guatemala tenemos un dicho que
ejemplifica esto al decir que en ocasiones se le pide peras al olmo . En primer lugar
el olmo no da fruto, solo madera que es usada para hacer muebles. Pedirle un fruto al
olmo es una expectativa que no se cumplir y que puede traer decepcin.

Una de las decepciones ms fuertes que puede venir a una persona estn en funcin
de las relaciones. Cuando alguien falla, el dolor que eso puede provocar es
desgarrador. El aspecto de frustracin que representa es grande y los diluvios que
son provocados por dificultades en las relaciones son duros de pasar. Relaciones
rotas, enemistades sin sentido, rencores que no hacen otra cosa que lacerar el alma.
No entendera a la perfeccin nuestro sentir cuando los problemas relacionales se
presentan. Usted no es el primero en sufrir un dolor ocasionado por una decepcin
relacional. l supo lo que representa cuando alguien importante en la vida le defrauda
traicionando la confianza depositada en ella.

Sera muy sencillo para nosotros arremeter en contra de Cam. Tiene todo lo
necesario para que arrojemos piedras sobre l. Pero usted no arrojar la primera, yo
tampoco. No estamos libres de culpa. Hemos fallado. Le hemos quedado mal a ms
de una persona en algn momento. No estoy hablando de un cumpleaos olvidado o
de llegar a uno sin el respectivo regalo. Me refiero a las oportunidades donde alguien
pudo haber fijado expectativas en nosotros y no fueron satisfechas.

Este no es un captulo para el regao. Tampoco es un captulo que busca traer
recuerdos de aquellos que pudieron fallar para abrir una herida cerrada. No se trata
de eso. Este es un captulo que, como en todo el libro, evoca la esperanza. La
113

esperanza de tener a nuestro alrededor personas que nos agreguen valor, no solo en
medio de la adversidad, sino en todo momento.

El diluvio pone a prueba las relaciones. Si algo hace sobrellevar de mejor manera la
tormenta es la compaa de amigos, camaradas, compaeros, cuates, como diramos
en buen chapn, que permiten que la carga sea ms ligera. Cultivar buenas relaciones
es precisamente eso: una siembra. Un trabajo intencional se requiere para que
podamos hacer de las relaciones algo que sea una constante en nuestra vida.

El apstol Pablo hizo un extraordinario compendio de principios relacionales que le
invito a que pueda desarrollar para afianzar sus relaciones. Se encuentra en Romanos
12 en los versos del 9 al 18.

No finjan amar a los dems; menlos de verdad. Aborrezcan lo malo. Afrrense a
lo bueno. mense unos a otros con un afecto genuino y delitense al honrarse
mutuamente. No sean nunca perezosos, ms bien trabajen con esmero y sirvan al
Seor con entusiasmo. Algrense por la esperanza segura que tenemos. Tengan
paciencia en las dificultades y sigan orando. Estn listos para ayudar a los hijos
de Dios cuando pasen necesidad. Estn siempre dispuestos a brindar
hospitalidad. Bendigan a quienes los persiguen. No los maldigan, sino pdanle a
Dios en oracin que los bendiga. Algrense con los que estn alegres y lloren con
los que lloran. Vivan en armona unos con otros. No sean tan orgullosos como
para no disfrutar de la compaa de la gente comn. Y no piensen que lo saben
todo! Nunca devuelvan a nadie mal por mal. Comprtense de tal manera que todo
el mundo vea que ustedes son personas honradas. Hagan todo lo posible por vivir
en paz con todos. Romanos 12:9-18

Aunque no se hace necesario hacerlo, luego de haber ledo estas extraordinarias
lneas, se dar cuenta que efectivamente se trata de un listado muy bien escogido de
principios que nos permiten comprender cmo manejar de manera adecuada
nuestras relaciones.

Cultivar buenas relaciones es precisamente eso: una siembra.

114

Al menos cinco principios logro determinar en las lneas escritas por Pablo y procedo
a compartirlos:

1. Amor.
(versos 9 al 11) El principio por excelencia sigue siendo fundamenta en el desarrollo
de las relaciones de la manera adecuada. Practicar la disciplina del amor recuerde
que se convierte en un acto intencional. Contar con aliados en medio de un diluvio
ser el resultado de los diluvios que nosotros hayamos acompaado a otros.
Desarrollar el amor hacia otros pedir de nosotros que invirtamos tiempo. Tiempo en
conocer a nuestra gente. Un conocimiento adecuado de sus amigos (trmino que
usar en adelante para referirme a las relaciones de valor) le dar una mejor
perspectiva de lo que ellos son, su forma de actuar y reaccionar, as como una mejor
panormica de la mejor forma en que usted pueda brindarles ayuda.

Conocer a las personas es una clave para descubrir sus necesidades y brindar de la
forma correcta y por la va adecuada el amor que Dios deposite en usted. Intersese
en conocer a las personas. Conforme conocemos mejor a los dems, podemos
encontrar la forma de amarlos mejor.

2. Desarrolle una cultura de honra y respeto.
Valore las diferencias que tenga con sus amigos y, es ms, aprovchelas! El respeto es
algo fundamental para conservar a sus amigos. Sus amigos no tienen que pensar
forzosamente como usted, no tienen que tener sus mismas aficiones ni gustos. Dios
nos ha llamado a la unidad, no a la igualdad. Por lo tanto es importante que usted
pueda valorar y respetar esas diferencias que tiene con sus amigos. Dese a la tarea de
darles el valor a sus diferencias y se dar cuenta que un gran porcentaje del cario
que usted siente por ellos radica en esas diferencias. Desarrollar esa capacidad de
valorar las diferencias en las personas que nos rodean es un reto que todos tenemos
planteado diariamente y que si logramos vencerlo recibiremos un fruto muy grande
como recompensa.

115

Dios nos ha llamado a la unidad, no a la igualdad.

3. Mezcle adecuadamente la disposicin con la disponibilidad. (verso 11)
No niegue la ayuda que pueda brindar pero tampoco ofrezca la que no puede dar.
Estas dos palabras, disposicin y disponibilidad, suelen confundirse y en el tema de
las relaciones uno puede meterse en grandes los si no sabe entender y manejar
ambas de manera adecuada. La disposicin es el deseo de hacer las cosas, la buena
voluntad que podemos tener de querer hacer algo o ayudar a alguien. La
disponibilidad es la oportunidad real que tenemos de llevar acabo las cosas. Una
persona con alta disposicin, pero poca disponibilidad puede caer en el error de
generar ms compromisos de los que en realidad pueda cubrir y el resultado es el de
llegar a quedar mal en esos compromisos. El lugar donde se junta la disposicin y la
disponibilidad se llama compromiso. Mantenga la postura permanente de colaborar
con aquel que lo necesite, pero a la par el equilibro de cumplir con lo que ofrece. Las
relaciones crecen en un clima de confianza y cumplir lo que ofrecemos nos vuelve
confiables. No es solo de tener personas a nuestro alrededor en el diluvio, sino tener
gente en la que podamos confiar.

El lugar donde se junta la disposicin y la disponibilidad se llama
compromiso.

4. Exprese lo que siente. (versos 12, 15 y 16)
Hace algunos aos aprend de Rony Madrid el principio que los deseos son ms
fuertes que los pensamientos y, de la mano de este principio, este otro: Es ms
sencillo expresar lo que pensamos que lo que sentimos. Las emociones no son buenas
ni malas, es lo que hagamos con ellas lo que beneficia o perjudica. Si deseamos
desarrollar relaciones de valor a nuestro alrededor, cultive el hbito de transmitir en
forma correcta sus emociones. Haga partcipe a sus amigos de lo que siente. No pierda
la oportunidad de decir a quien quiere que lo quiere. No es cuestin de decirle a todo
el mundo que siente cario por ellos, pero si es importante que a aquellos por los que
usted siente aprecio se los haga saber. Son valiosos los obsequios, las tarjetas, las

116

flores, los chocolates y cunto detalle se le puedan ocurrir dar, pero no existe uno ms
poderoso que aquel que se pronuncia sinceramente con los labios.

5. El principio de dar.
Decir que es ms bienaventurado dar que recibir no es solo un principio aplicable a
los boxeadores. La generosidad es un hbito que cultiva buenas relaciones. No me
refiero a la transaccin de comprar una amistad, hablo de la oportunidad genuina y
sincera que tenemos de otorgar parte de lo que hemos recibido a otros. La
generosidad es de esos principios universales que todos podemos practicar. Todos?
Claro! La generosidad no se trata de dinero, se trata del corazn.

Aprenda a dar, tal vez no tenga mucho, pero es todo lo que se necesita, aprenda a dar
una sonrisa al triste, una palabra de aliento al desanimado, un pedazo de pan al
hambriento, un momento de atencin al que trae una pena, un mensaje de esperanza
al que ya no cuenta con ninguna. Establezca compromiso consigo mismo de no hacer
nada que no produzca una ganancia compartida con los que le rodean.

Durante los aos que me congregu en Fraternidad Cristiana de Guatemala, recuerdo
haber aprendido del pastor Jorge Lpez el principio de las 3T de la generosidad.
Tres elementos que pueden compartirse: Tiempo, Talento y Tesoro. La generosidad
involucra todo nuestro ser, no solo los bienes que poseemos. Cuando sembramos
generosidad es muy probable que, en el momento del diluvio, veamos la cosecha de lo
que hemos dado a los dems.

La historia de Moiss de Jess Alvarado y su esposa ejemplifica esto. La noche de un
17 de enero ser recordada por ellos. No por un grato recuerdo, an a pesar de haber
sido la noche en la que justamente retornaban de un paseo familiar. Radicado en el
poblado de Nueva Santa Rosa en uno de los departamentos de Guatemala, los esposos
Alvarado durmieron esa noche con la satisfaccin de haber retornado con bien, el
cansancio natural que representa este tipo de recreacin familiar y dispuestos a

117

reponer fuerzas para las actividades que les aguardaban al da siguiente. El nico
aspecto inusual en aquella noche, fue que no haba fluido elctrico.

A media noche, la seora Alvarado, se despert sobresaltada pues escuch algunas
detonaciones similares a las provocadas por balas. Siendo un poblado, Moiss intent
calmarla indicndole que era algo que poda ser por los alrededores. Ella insisti
indicando que el ruido provena de dentro de la casa. Al levantarse a investigar, su
sorpresa fue mayscula al observar que la casa estaba ardiendo en llamas. A menos
de tres metros de donde ellos se encontraban, vean como las flamas consuman sus
pertenencias. Moiss, narra que en ese momento, dirigi palabras de calma a su
esposa para luego suplicar a Dios por el cuidado de sus vidas.

Lograron salir de la casa para observar que las llamas haban alcanzado dos vehculos
y una motocicleta que tenan ellos. Moiss, recuerda cmo en ese momento vino a su
mente el instante en el que Jess calm la tempestad, y se dirigi con autoridad al
fuego para ordenarle que se calmara. Ante los ojos naturales, pudiera parecer que no
sucedi nada. Pero no fue as. El carro, an ardiendo en llamas, no explot.
Sorprendentemente, Dios envi ngeles a calmar el fuego. Muchos de los miembros
de la congregacin donde ellos asistan se haban reunido y colaboraban para apagar
el fuego.

Eulogia , la esposa de Moiss, sufri fuertes quemaduras. En el proceso acelerado en
que todo se present, an no se explica la forma en que sucedi lo cierto del caso es
que varias partes de su cuerpo estaban quemadas. En combinacin con otros vecinos
y principalmente del pastor de la congregacin, fueron al puesto de salud cercano
para atenderla. Moiss se encontraba desconcertado, no entenda lo que estaba
pasado, pero en su corazn nunca existi el deseo de hablar mal en contra de lo que
Dios estaba permitiendo, y mostr gratitud ante la situacin. Dios haba permitido
un diluvio en forma de incendio para comprobar lo que l ya saba, y que necesitaba
que Moiss se diera cuenta: se haba formado un corazn conforme al de Dios.

118

De regreso a casa, Moiss recibe una llamada por parte de su pastor. Vena
meditando en la magnitud de lo que se haba perdido, l estaba consciente que todo
se haba perdido. La llamada era una invitacin por parte del pastor a llegar a una
reunin junto con un grupo de lderes de la congregacin. Quienes le esperaban con
una conclusin luego de haber sesionado y conversado con otros miembros de la
congregacin. Se trataba de una peticin: ellos deseaban la autorizacin de Moiss
para derrumbar las paredes de la casa que se haba quemado para poder levantar una
nueva vivienda entre todos. El proceso entre la noticia y la finalizacin igualmente
fue milagroso. La unidad, amistad, provisin sobrenatural y la posterior dicha de
disfrutar de la nueva vivienda cont en todo momento, no solo con la mano de Dios
sino con la conciencia que ella estaba sobre todo el proyecto.

Se interesa ms en buscar buenos amigos o en ser usted un buen
amigo?

Haber cultivado relaciones de valor a lo largo de toda una vida, logr que el diluvio
atravesado por los esposos Alvarado fuera mejor atravesado. El apoyo recibido, en lo
personal, considero que sencillamente fuel a consecuencia de aos de siembra que
ellos realizaron en la vida de otros. Jams sembraron con el objetivo de cosechar en
esta forma, pero as es la forma de dar la cosecha por parte de Dios: sorprende.

Ser buen amigo
Es importante determinar el enfoque que ha dado a su relacin. Se interesa ms en
buscar buenos amigos o en ser usted un buen amigo? Lo primero acapara, lo segundo
extiende. Dios ha propiciado en el tiempo y lugar oportuno a la persona adecuada
para establecer una relacin de valor que sea significativa en su vida. Dele el lugar
que le corresponde y sepa valorarlo. En medio del diluvio stas personas son quienes
nos ayudan a mantener el control del timn de nuestra arca. Si usted cuenta con
verdaderos amigos no pierda la oportunidad de alimentar la relacin. Si considera
que no tiene personas a las cuales pueda llamar verdaderos amigos Qu espera? Dios

119

no nos ha llamado a que tengamos los mejores amigos, sino que procuremos ser
nosotros los mejores amigos.

Encontrar amigos que brinden apoyo en medio del diluvio no es casualidad, es Gracia.
Contar con personas que nos extiendan una mano amiga y un hombro de apoyo no
ocurre por accidente, se trata de una deliberada actitud nuestra por conseguir y
formar relaciones e valor. Mantenga su corazn dispuesto, Dios enviar ngeles bajo
el nombre de amigos cuando atraviese el diluvio para que pueda sentir el toque de
Gracia enviado a su corazn.


Quines son las personas que usted considera que son parte de su circulo de
relaciones de valor?
De qu forma a lo largo de los prximos siete das podra expresar su aprecio

hacia estas personas?
Qu relaciones considera que son importante nutrir para afianzar de mejor

manera?

ANCLA DE FORTALEZA
Ms valen dos que uno, porque sacan ms provecho de lo que hacen. Adems, si uno de
ellos se tropieza, el otro puede levantarlo
Eclesiasts 4:9-10

ACCIONES CONCRETAS

120




121
POR QU?

122

Durante cuarenta das, las aguas del diluvio crecieron hasta que cubrieron la
tierra y elevaron la barca por encima de la tierra. Mientras el nivel del agua
suba ms y ms por encima del suelo, la barca flotaba a salvo sobre la
superficie

123

La pregunta que desespera
Mafalda, el personaje creado por Quino, es parte de mi acervo cultural. Seguramente
no soy el nico, a lo largo de los aos este personaje creado por Quino ha sido parte
de la vida de muchos. Justo en este ao (2014) fueron celebrados los 50 aos de esta
nia y fue interesante una de las declaraciones dadas por Quino al momento de
referirse a la popularidad y vigencia de su personaje: Mafalda sigue siendo vigente
porque la humanidad sigue siendo igual. En uno de los tantos pasajes de la vida de
Mafalda se produce esta conversacin entre ella y su hermano Guille:

Guille: Pap?
Mafalda: Pap est trabajando, Guille.
Guille: Po qu?
Mafalda: Porque cuando uno es grande tiene que trabajar.
Guille: Po qu?
Mafalda: Porque si no, no puede comprarse comida, ni ropa, ni nada.
Guille: Po qu?
Mafalda: Porque as est organizado este mundo Guille!
Guille: PO QU?
Mafalda (viendo al cielo): Un ao y medio y ya candidato a los gases lacrimgenos.

Por qu? Una pregunta muy frecuente de hacer, pero no posee la misma frecuencia
de encontrar una respuesta. Hay cosas que no entendemos en lo que Dios hace o en
lo que permite. Cuestionamos las circunstancias y con ello no dejamos, por
momentos, de cuestionar a Dios por esas circunstancias. Algo normal, no se sienta
extrao, a muchos nos ha pasado hacerlo. Dios lo sabe y, por lo mismo, comprende
que es un estado natural en el que llegamos a encontrarnos.

El por qu? surge de la sorpresa que puede representar para nosotros la
adversidad de un problema. Nadie planifica dificultades, por lo mismo no las
deseamos. La dificultad es algo indeseado que aparecer como sorpresa desagradable

124

a nuestra vida. Aun cuando la dificultad sea el resultado de decisiones tomadas en el
pasado, lo desagradable de su presencia no deja de sorprender. No digamos aquellas
complicaciones que llegan sin que uno comprenda la razn o el porqu de su
aparecimiento.

Esa fue la situacin de No. Cuando Dios le mencion la palabra lluvia, fue algo
nuevo. Busc en el diccionario y se dio cuenta que ni la Wikipedia haba actualizado
ese trmino. No exista:
"...porque el Seor Dios no haba enviado lluvia sobre la tierra, ni haba hombre
para labrar la tierra. Pero se levantaba de la tierra un vapor que regaba toda la
superficie del suelo" (Gnesis2: 5-6)
La lluvia fue un fenmeno meteorolgico inaugurado justamente en el diluvio. De all

que fuera ms ridcula, ante los contemporneos de No, su propuesta de grandes
cantidades de agua cayendo del cielo. Es como que yo le dijera que va a caer sal del
cielo durante 40 das y 40 noches. En mi caso tendra una doble razn para no
crermelo. La primera es porque es algo que nunca ha sucedido en la historia de la
humanidad y, la segunda, es que no me lo ha confirmado Dios. En el caso de No las
personas se apoyaron en la evidencia de la primera razn, pero No tena el aviso de
Dios y aunque era algo desconocido para l, le crey al Creador. Mientras vea llover
y subir las aguas, No se rascaba la cabeza, jugaba con los pelos de su barba, doblaba
su cabeza para ver por la ventana hacia el cielo y tratar de entender lo que estaba
pasando. No lo comprenda.

Tampoco lo entend
El 15 de junio de 1999 cumpla los primeros 15 das de estar trabajando luego de
haberme graduado como Ingeniero Industrial. Era mi primer trabajo profesional.
Justo ese da se celebr un cumpleaos de la familia. Como era costumbre, llegamos a
la celebracin. Pensando justamente en que estaba en un perodo de adaptacin al
ritmo de trabajo, prefer retirarme un poco antes para estar en casa ya que adicional a
esto deba ir a dejar a Amparito, entonces mi novia, a su casa. Llegu a casa y entr al
cuarto que ocupaba. En el proceso de conciliar el sueo me encontraba, cuando

125

escuch que mis paps y hermanas estaban ingresando a casa. Escuch y visualic en
la mente la rutina tradicional de dirigirse todos a sus habitaciones mientras mi pap
se diriga a entrar el carro a casa. Record que mi pap haba ofrecido depositarme el
cheque de la primera quincena de trabajo que justamente haba recibido ese da.

Justo en el momento en que me sent en la cama para pararme a buscar el cheque,
escuch unos disparos. Escuch gritos en la casa. Gente corriendo. Finalmente
reconoc la voz de mi mam gritando desesperada con llanto entremezclado en la
calle. Mientras escuchaba lo que le comento, sal de la habitacin y me dirig al lugar
donde escuchaba a mi mam. Al llegar la observ de rodillas sosteniendo en brazos a
mi pap que estaba tirado en el suelo. Tom a mi pap en brazos. Or con fuerza. An
me mir. Or a gritos. Intent decirme algo. Clam con todo lo que pude. No le
alcanzaron las fuerzas. Grit, clam a Dios. Con los ojos abiertos su alma se
desprendi de su cuerpo. Con una de mis manos le cerr los ojos. Dej de pedir.
Muri en mis brazos.

Muchas preguntas se agolparon en mi mente. Procesarlas no fue sencillo, pasaron
demasiado rpido y todas exigan una respuesta. Todas tenan una caracterstica
comn. Todas empezaban con Por qu?

Preguntas? Dios sabe responder
Las preguntas son frecuentes en medio del diluvio. No las traemos de manera
intencional, sencillamente vienen y se quedan dando vueltas en nuestra cabeza ms
del tiempo que deseramos que se mantengan. Perturban. Roban paz. Generan
incomodidad y su falta de respuesta resta energa. Deseamos respuestas pensando
que en ellas recuperaremos lo perdido, cuando en la gran mayora de las situaciones
eso no es as. Posiblemente es por eso que Dios no se molesta en responderlas,
porque sabe que no son esas respuestas las que necesitamos.

La falta de respuesta por parte de Dios a las preguntas que formulamos no obedece a
su falta de inters por nosotros, sino porque, en su gracia y sabidura, sabe que no

126

ayudarn en nada a llevarnos a donde l desea que estemos. Las respuestas de Dios
no estn orientadas a mostrarnos lo obvio, sus respuestas estn orientadas a
mostrarnos Su corazn.

clama a mi y yo te responder y te mostrar cosas grandes y ocultas que no
conoces Jeremas 33.3

Las respuestas de Dios estn orientadas a conocer lo grande y lo oculto. Lo que l
sabe que ser de utilidad para nuestra vida, aquello que sabe que no solo quitar un
simple signo de interrogacin sino que tendr la capacidad de sorprendernos y
sostenernos por el resto de nuestra vida.

Posiblemente es por eso que Dios no se molesta en responderlas,
porque sabe que no son esas respuestas las que necesitamos.

Cuando mi hermano, que es mdico lleg, y busc los orificios de las balas notamos
que la bala ingres por el costado derecho por debajo de las costillas, sin embargo no
fue tan inmediato encontrar por dnde sali. Al hacerlo nos dimos cuenta que sali
por el lado izquierdo, por el sector de la axila. El proyectil sigui una direccin en
diagonal que fue directamente al corazn. Pudo haber seguido cualquier trayectoria,
pero fue justamente esa. Por extrao que le parezca, al darme cuenta de eso no me
cupo la menor duda: Dios estaba en control. Eso no fue solo tema de puntera, se
trat de una direccin especfica que se sigui y sobre la cual se tuvo control: un
control que estuvo en el poder de Dios.

Preguntar es vlido en medio del diluvio. No necesariamente responder lo que
preguntemos, pero responder lo que ser til a nuestra vida. Jams ser algo que
Dios no permita que hagamos o que se incomode por hacerlo. Podemos preguntar lo
que queramos, an cuando no necesariamente encontremos la respuesta hacia esa
pregunta. Eso es lo maravilloso de Dios. El promete responder. Dios sabe responder.
Toms nos garantizara que as es.

127

Tomasitis
Toms ha sido blanco de crticas a partir de su actitud incrdula sobre la resurreccin
de su maestro. La escena es fcil de imaginar pues le hemos odo en muchas
ocasiones y varias pelculas se han encargado de mostrarnos de una forma
dramatizada el desarrollo de la misma. Todos sabemos la reaccin de Toms. No
crey cuando le informaron. Pidi pruebas. Si no viere sus agujeros en sus manos y
metiere mi mano en su costado. No quera sufrir una nueva desilusin. No saba si su
corazn lo podra resistir. Haba entregado estos ltimos tres aos a seguir a un
hombre en el cual haba fijado todas sus esperanzas. Esperanzas que seguramente
vio desvanecerse al contemplar a su mentor colgado de una cruz. El dolor haba sido
grande, la desilusin haba llenado su corazn. Ya no quera dar un espacio en su
alma a una nueva ilusin que pudiera convertirse en un fracaso.

Toms ha sido duramente tratado por su reaccin en este pasaje. Despus de todo
haba compartido los 3 aos del poderoso ministerio de Jess. Haba sido testigo de
muchos milagros. Estuvo presente cuando Jess expulsaba fuera demonios, devolva
la vista a los ciegos, haca caminar a los invlidos y seguramente estaba en primera
fila cuando Lzaro sali de su tumba. Tena evidencias suficientes del poder de su
maestro. l jams les haba fallado en lo que les haba dicho. Pero ahora los
cuestionamientos estaban haciendo un trabajo grande en su vida, hasta el punto de
haber agotado la fe en este hombre.

Alguna vez se ha identificado con Toms? Yo s. Han sido repetidas las ocasiones en
que, al leer este pasaje, me encuentro diciendo Te entiendo Toms, yo he hecho lo
mismo. Durante el tiempo que tengo de estar conociendo al Seor he sido testigo de
sus milagros. Su gracia y misericordia me han seguido todos los das. Grandes
manifestaciones de su poder se han presentado. Pero cuando se presenta a mi vida
una situacin que escapa de mi control, aparece ese desagradable compaero: la
duda.

128

Somos muy propensos ha padecer de un mal que bien pudiramos llamar tomasitis.
Dios se ha encargado de suplir todas nuestras necesidades, pero al quedarnos sin
empleo las dudas empiezan a tocar en nuestra puerta. Conocemos la mayor parte del
ao a un Dios que nos mantiene con buena salud pero, al quedarnos en cama por la
enfermedad, la duda toma un lugar a la par nuestra. Hemos disfrutado de momentos
preciosos en su presencia, pero la duda nos asalta al atravesar el diluvio de nuestra
prueba.

Las preguntas no son dainas cuando despiertan en nosotros el
deseo de conocer la verdad.

Qu hizo Dios con Toms? Cualquiera de nosotros seguramente hubiera dejado que
la duda le siguiera atormentando. Despus de todo no tena ninguna obligacin de
sacar de all a alguien que haba permanecido junto a l tanto tiempo y ahora
simplemente deca No creo. Estaba en todo su derecho de no responder a lo que
pareca un capricho por parte de Toms. Pero eso es lo que hace la diferencia entre
Dios y nosotros. l antepone el amor al castigo, Su misericordia es mayor que la
reprimenda que nos merecemos.

l saba que lo que le aconteca a Toms no era un capricho. Estaba siendo vctima de
ese terrible enemigo llamado duda. l saba que este era el punto de partida. Las
preguntas no son dainas cuando despiertan en nosotros el deseo de conocer la
verdad. Jess saba que Toms anhelaba conocer esta verdad.

As que ocho das despus de la reunin en la que los otros diez vieron a Jess
resucitado volvieron a convocar a una nueva reunin. En esta ocasin ninguno tuvo
que preguntar por Toms. Fue el primero en presentarse y dar la bienvenida al resto
de los apstoles. En su cara de incredulidad poda descubrirse un brillo de ansiedad y
esperanza en sus ojos. A medida que los otros iban llegando, su corazn iba latiendo
ms fuerte y un deseo por estar equivocado en su incredulidad le consuma por
dentro. Por fin estaban los once reunidos, dispuestos a iniciar la charla de esa noche.

129

- Paz a vosotros.

All estaba nuevamente el maestro. Toms sinti alegra y vergenza a la vez. No
saba a ciencia cierta lo que estaba pasando. Pero era real. No tena palabras.
Ignoraba como actuar en ese momento tan importante para l. Como de costumbre,
Jess toma la iniciativa:

- Toms... Pon aqu tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y mtela en mi
costado; y no seas incrdulo, sino creyente.

Toms no sala de su asombro. All estaba Jess. Dios hecho hombre se haba
acercado para resolver sus dudas. La verdad le estaba siendo revelada directamente
de la Fuente de Verdad. Las dudas estaban siendo alejadas con unas manos
perforadas. Y era la voz de Dios la que estaba haciendo que este hombre recuperara
una fe que pareca perdida.

Fue en ese instante donde todo se aclar. El velo fue quitado de los ojos. La seguridad
tom el lugar que le corresponda en el corazn de Toms. La esperanza se haba
vuelto una realidad. Y la mayor verdad que Toms jams pudo imaginar que pudiera
ser revelada le estaba siendo confiada. Sus palabras as lo demuestran.

- Seor mo, y Dios mo!

As es. Haba caminado junto a l durante tres aos, pero fue hasta el instante de
expresar su mayor duda que le fue confiada la mayor verdad. Encontr en su maestro
a su Seor, a su Dios. Un Seor que se preocupa de sus inquietudes. Un Seor que
hace caso de sus necesidades. Un Seor que atiende y responde a las preguntas que
salen del corazn. Un Seor que se deleita en alejar la duda de nuestra vida.

No existe evidencia que Toms metiera su dedo en los agujeros, ni su mano en el
costado de Jess. Personalmente creo que no fue necesario. La mirada y las palabras

130

de Jess fueron suficientes. Una mirada que revelaba el gran amor que Dios senta
por l y unas palabras que decan de otra forma Aqu estoy para resolver tus dudas.

Algrese conmigo. Hay motivacin para aquellos que padecemos frecuentemente de
tomasitis. Motivacin en esperar en un Seor que se interesa realmente por
mostrarnos su verdad. Tranquilidad al confiar en un Seor que espera el momento
oportuno para revelarnos Su verdad. Esperanza en un Seor que est dispuesto a
hacer lo que sea necesario para darnos seguridad. Y por sobre todas las cosas, hay
dicha al tener como Dios a un Seor que venci la muerte.

Aqu estoy para resolver tus dudas.

No tenga temor de expresar las dudas de su corazn. De todas formas l las conoce.
Pero le interesa que usted le haga partcipe de ellas. Le gusta que le confiemos hasta
nuestras ms profundas dudas. En esas situaciones que no vemos solucin. En los
instantes que la nube de la angustia se ha puesto delante de nuestros ojos. En
aquellos momentos que no entiende. Cuando la duda llegue a su corazn. Estos son
los momentos para seguir confiando. Para hacer aquello que parece imposible. Para
creer que lo inalcanzable est prximo a pertenecerle. Para creer en lo que de
momento no ve.

Mi pap naci un 10 de marzo. Cuando an estaba vivo, pude ver que en su
documento de identificacin ciudadana la fecha registrada era 11 de marzo. Al
preguntarle por qu, me coment que fue por una situacin de mis abuelos. Llegaron
tarde al registro, no desearon pagar la multa y tomaron la decisin de indicar que
haba nacido el 11 y no el 10 como realmente haba sucedido. Sin embargo, todo el
tiempo celebramos su cumpleaos el 10. Legalmente me robaron un da Me dijo
con una sonrisa en los labios. Mi pap muri un 15 de junio. Al tramitar su acta de
defuncin y recibirla, me top con una sorpresa. Dejaron registrado como el da de su
fallecimiento el 16 de junio. Mientras mi reaccin instantnea me hizo pensar en
hacer el trmite para rectificar la fecha, pude escuchar la voz de Dios de manera clara

131

dicindome: Yo tengo el control, todos los das de l estaban contados, el que en
papeles le quitaron ac se lo devuelvo.

El agua segua cayendo de manera torrencial, el nivel de ella sobre la tierra se
incrementaba y muchas cosas no eran entendidas. No segua con muchas preguntas
en su cabeza y corazn. No no saba por qu, pero se sorprendi a s mismo con una
sonrisa en los labios. Muchas cosas no se entenda, peo algo estaba claro: ellos
estaban a salvo, Dios estaba a cargo de todo.



Qu preguntas an estn en su corazn y deben ser formuladas a Dios?
Cmo cambiara su perspectiva ante toda situacin difcil si afianzara en su

corazn la verdad que Dios est en control de todo?
Qu respuestas de Dios en su pasado pueden darle paz en su presente?

ANCLA DE FORTALEZA
Bienaventurados los que no vieron y creyeron .
Juan 20.29

ACCIONES CONCRETAS


132

de una persona con quien compartir y se comprometer a realizar esa accin que



133
QUDESE CON LAS FOTOS

134

Y edific No un altar al Seor, y tom de todo animal limpio y de toda ave limpia,
y ofreci holocaustos en el altar. (Gnesis 8:20 LBLA)

135

Historias
Seguramente en ms de una ocasin ha escuchado la frase popular que dice que
detrs de cada persona existe una historia. Por obvia que pueda resultar la frase no
podemos negar que es una verdad que encierra ms all de lo que la obviedad nos
muestra. El pasado de cada persona es impresionante, las historias que han ido
entretejiendo su historia se convierte en una riqueza de experiencia enorme.

Aprend de uno de mis mentores y ahora amigo, Ricky Marroqun, que existen dos
formas de aprender: con dolor y sin l. Asimismo me mostr que para aprender sin
dolor puede recurrirse a dos fuentes: los libros y la experiencia de dolor de otros. El
pasado es til, lo que Dios ha permitido se convierte en una herramienta que puede
ser de beneficio para nuestra vida.

Fue parte de las enseanzas de Moiss luego de cuarenta aos de caminar en el
desierto con el pueblo de Israel. Toda una generacin fue exterminada poco a poco
durante los 40 aos que dur la travesa desde Egipto a la Tierra Prometida. Aquellos
que salieron siendo nios y jvenes hoy eran los adultos que deban tomar la tierra
que Dios deseaba darles en propiedad. Poco faltaba para que se iniciara el proceso de
toma de lo prometido y por lo mismo era importante dar los recordatorios finales que
era necesario tener presente cuando la promesa llegara a su vida:

ten cuidado de no olvidarte del Seor, quien te rescat de la esclavitud de
Egipto. (Deuteronomio 6:12)

El mensaje fue claro: no olvides tu pasado. El pasado te ser til en el futuro. Es una
accin frecuente de Dios depositar en nuestra vida hoy para que pueda ser til
maana. As es: Dios hace depsitos constantes en nuestra vida que espera puedan
ser no slo guardados, sino atesorados en nuestro corazn:

Tesoros guardados

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Piense de manera natural en cualquier tipo de tesoro. Aquello que usted guarda, por
qu lo hace? Dos son las razones que vienen a mi mente para responder esto:
guardamos objetos por afecto y por utilidad. Usted puede guardar algo porque
represente un lindo recuerdo del cual desea hacer memoria ms adelante. Mi esposa
es especialista en hacer eso. Al da de hoy, cuando nuestros hijos tienen 8 y 11 aos,
ella conserva la primera vestimenta que ambos usaron cuando salieron del hospital.
Igualmente conserv un mechn del primer corte de cabello. Y si le pregunta, le
podr ensear muchos otros detalles que representan un lindo recuerdo del pasado.

Por otra parte, los tesoros son tiles. Precisamente es la segunda razn por la que
considero que se puede atesorar algo. No siempre es porque traiga un buen recuerdo,
pero si algo es til se guarda para esperar el momento til de ser usado. Piense en
todo aquello que usted ha guardado por ser til: Herramientas, documentos,
manuales, libros, animales puros. Qu? Animales puros? Quin introdujo ese
elemento en el listado? Yo no. Ah Ya s! Fue No.

Tradicionalmente siempre cre que No haba ingresado al arca slo parejas de
animales. De dos en dos. Sin embargo no fue as. Hubo una clase especial de animales
de los cuales ingres ms de dos:

De todo animal limpio tomars contigo siete parejas, el macho y su hembra; y de
todo animal que no es limpio, dos, el macho y su hembra; (Gnesis 7.2 LBLA)

Dentro de las muchas cosas que No no entendi, estoy seguro que esta fue una que
se sum al listado. Pero haba tantas cosas que no se comprendan dentro de lo que
estaba haciendo que, como ya lo haba hecho con el resto, simplemente fue obediente.
Dej que Dios se encargara de ingresar ms cosas de lo que en ese momento l
consider que era lo normal.

El tiempo transcurri y usted sabe lo que pas: cay el diluvi, el agua ces y
finalmente lleg el momento de descender del arca. Finalmente estn viendo la luz

137

del sol parados en tierra firme. Lo primero qu decide hacer No? Adorar. Sabe que
lo tiene que hacer, no por compromiso, sino porque su corazn agradecido demanda
que lo haga.

El pasado ser til en el futuro.

Mientras suba la rampa para buscar lo necesario para hacer el sacrificio, piensa en
qu animales escoger. Recuerda la gran mayora que ingres y sabe que sacrificar
una pareja representara la exterminacin de la raza. Justo en ese momento logra
comprender la razn por la cual Dios le hizo ingresar ms all de una pareja de
aquellos animales puros:

Y edific No un altar al Seor, y tom de todo animal limpio y de toda ave limpia,
y ofreci holocaustos en el altar. (Gnesis 8:20 LBLA)

Dios pidi guardar aquello que sera til ms adelante. La provisin temprana de
Dios se convierte en la ayuda tarda. Aquello que hoy no entendemos por qu lo
recibimos, ser lo til en los momentos que estamos por vivir. Dios pedir que
usemos aquello que previamente nos ha entregado.

Busque sus tesoros
En el momento del diluvio es importante buscar lo que hemos atesorado. Aquello que
guardamos en nuestro pasado ser til en nuestro presente. Los tesoros de la
amistad, compaerismo e incluso experiencias pasadas se convierten en las
herramientas que Dios usar para ayudarnos en medio de la tormenta. Por novedosa
que sea, por indita que resulte: Dios ya ha dado algo para que podamos hacerle
frente. No habr dificultad presente en la que Dios no haya trabajado en nuestro
pasado para que podamos hacerle frente. Si la experiencia de No no fuera suficiente
tengo otro testigo que podra ayudarnos enormemente al compartirnos su historia:
David.

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El pasado de un joven
Por aquel entonces se nos dice que atravesaba la adolescencia. Edad difcil para
cualquier persona. Por un lado ya no se es un nio y nadie quiere creer que es adulto.
Lo cierto del caso es que se trata de una etapa en la que, junto con la batalla que se
libra con el acn y hormonas alborotadas, se tiene todo el deseo de conquistar el
mundo. David no era la excepcin. Adems el entorno cercano potenciaba ms la
ilusin de esos sueos. Su nacin, Israel, estaba en guerra contra los filisteos. Pueblo
guerrero, temible. Pero no solamente era eso. El liderazgo de los pueblos no estaba
equilibrado.

Los filisteos contaban con Goliat. Un gigante en sus trminos. Hroe de mil batallas
y temido por sus enemigos. Por el otro lado, en Israel, Sal. Rey que, pese a su porte
y buen parecer, mantena la autoestima por los suelos, inseguro y poco confiable. Las
cosas no estaban parejas. Goliat lo saba y sala todos los das a amedrentar a sus
rivales. Era tal la confianza que manifestaba este guerrero que estaba dispuesto a
jugarse el resultado en una sola batalla. l sera el contendiente por el lado filisteo,
esperaba el nombre del oponente por parte del ejrcito israel.

Dios invierte en nuestro pasado a fin de dar frutos en el presente.

David supo de la situacin. Al escuchar los insultos de Goliat, sinti cmo su cara se
enrojeca mientras la sangre le suba a la cabeza de la molestia que represent
escuchar a alguien ofender al pueblo de Dios. No poda dejar pasar tal ofensa.
Aunque algunos pensaron que era temeraria, atrevida y hasta ridcula su propuesta,
David lo haca basado en un tesoro que haba guardado: la experiencia del pasado.

Pero David insisti:He estado cuidando las ovejas y las cabras de mi padre.
Cuando un len o un oso viene para robar un cordero del rebao, yo lo persigo
con un palo y rescato el cordero de su boca. Si el animal me ataca, lo tomo de la
quijada y lo golpeo hasta matarlo. Lo he hecho con leones y con osos, y lo har
tambin con este filisteo pagano, porque ha desafiado a los ejrcitos del Dios

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viviente! El mismo Seor que me rescat de las garras del len y del oso me
rescatar de este filisteo! (1 Samuel 17:34-37)

El pasado atesorado se convierte en herramienta til en el presente. La confianza que
demostraba ese joven frente al gigante provena de lo que haba recibido en el
pasado: el respaldo de Dios. David se aferr al pasado sabiendo que le deparaba un
extraordinario futuro. Lo que Dios haba hecho era suficiente garanta para saber que
lo podra seguir haciendo en el momento que quisiera. Cuando la prueba venga a su
vida recuerde su pasado. Dios invierte en nuestro pasado a fin de dar frutos en el
presente. No deseche los sinsabores que pueda estar atravesando, podrn
convertirse en aquello que logre endulzar lo que viene por delante.

Cuando la tormenta de la adversidad venga a su vida, vaya al bal de los tesoros que
tenga en su vida y selos: una historia de su pasado, una Palabra dada por Dios, el
consejo necesario de recordar, el amigo que tiene tiempo de no ver. La Gracia de Dios
es multiforme y por lo mismo la forma en que ha alimentado y preparado nuestro
corazn es diversa. Cada quien busca de acuerdo con lo que necesita.

Aferrados a una promesa
Eso fue lo que hicieron Andy Galindo y su esposa Nidia. Javier Andrs y Sebastin, sus
hijos, se llevan entre si aproximadamente 13 aos. Sebastin se convirti en el
resultado de una promesa luego de tres prdidas que haban tenido antes: Dios te
dar un siervo para que le ensees Sus caminos. Su nacimiento una total algaraba
en medio de lo prematuro que fue. Era el resultado visible de una promesa dada por
Dios.

Pero el diluvio vendra dos aos despus. Finalizando una reunin entre amigos,
Sebastin sufre un accidente al estar saltando en la cama y caerse al suelo. En ese
instante, luego de minutos de llanto, la preocupacin no pas a ms. Fue un par de
horas despus, mientras Sebastin dorma que Andy y Nidia deciden revisar con
cuidado si no existan ms consecuencias. Afortunadamente en la cabeza no, pero

140

llam grandemente la atencin sentir que el pequeo estmago del nio estaba muy,
pero muy duro. En la alerta de ese sntoma, llevan al pequeo al mdico quien indica
la necesidad de hacer un ultrasonido para poder diagnosticar.

El mdico, sin indicar mucho les pide que lleven al nio al da siguiente a UNOP.
Andy y Nidia desconocen qu es ese lugar. UNOP es la Unidad de Oncologa
Peditrica, encargada de la atencin de nios y adolescentes con cncer. En ese lugar
Sebastin fue expuesto a una serie de exmenes como jams se imaginaron que un
nio de esa edad llegara a tener. La espera por los resultados durante el fin de
semana pareci eterna. Recibir el informe mdico se haba convertido en una
prioridad.

Los esposos Galindo no imaginaron que sera un grupo de personas las que daran la
noticia. Adicional al cuerpo mdico, psiclogas y otro tipo de personas llegaron a
darles una explicacin sobre qu era el cncer. Luego dijeron lo que nunca se
imaginaron ni quisieron escuchar: No podemos hacer nada por Sebastin. El tipo de
cncer del pequeo era muy complicado y avanzado. Dar medicina para aliviar lo
ms que se pudiera el dolor y esperar a que colapsara y muriera era todo lo que ellos
ofrecan hacer. Qu opciones tomar? Quimioterapia? Imposible dijeron los
mdicos en la segunda aplicacin, Sebastin morir desangrado porque no podr
resistirla.

Nidia, en ese instante, record la promesa, record el pasado, se aferr a lo dicho por
Dios. Andy toma entonces la decisin de pelear en el resguardo de esa promesa y
autoriza avanzar con el proceso de quimioterapias. Un largo proceso de dolor vena
por delante. El gigante a enfrentar era enorme, pero la determinacin por vencerlo
aferrado a la confianza dada por Dios era superior. Nadie deseara que su hijo pasara
por lo que Sebastin atraves, el dolor fsico, emocional, mental que esto represento
fue muy alto.

141

Dios empieza a dar motivos de esperanza en medio de la batalla. Otorga una gracia
especial de Sebastin para el cuerpo de mdicos. La atencin fue inusual, el cuidado
fuera de lo normal. Los resultados de la quimioterapia rompieron con los pronsticos
mdicos, pues el pequeo lleg a una posibilidad que jams fue mencionada por no
ser considerada: era posible operar el tumor. La cabeza del gigante haba sido
golpeada por la piedra, era necesario seguir corriendo para tomar la espada y cortarla
de una vez.

La ciruga fue programada. Las posibilidades existan, no prometedoras, pero
posibilidades al fin. El estado clnico de Sebastin era delicado, pues las
quimioterapias haban afectado sus pulmones. Sin embargo, Dios mostr su respaldo
y que nunca haba dejado de estar all. Desde antes que iniciara, desde la forma en
que se dieron cuenta, desde cmo les dio la fuerza para seguir, desde siempre.

La operacin fue un xito, el proceso nada sencillo, pero un xito que a los mdicos les
costaba comprender en medio de haber sido testigos, parte y ejecutores del milagro.
Todo inici cuando Sebastin tena dos aos y tres meses, al momento de haber
colectado la historia ya haba cumplido los cuatro. El recuerdo de una promesa, ms
el progreso que representaba cada da en que se avanzaba afianzaba el respaldo de
Dios para con el diluvio que la familia Galindo haba atravesado.

Disfrute los recuerdos
No hace mucho tiempo estuve revisando una serie de fotos familiares que me
llenaron de mucha alegra. Corresponden a buena parte de mi vida familiar. Algunos,
solamente involucraban a mi esposa y a m. Otros mostraban el progreso del
crecimiento de nuestro hijos. Estn aquellas que muestran diferentes experiencias
que como familia hemos pasado. En esa nostalgia que las fotografas provocan hice lo
mismo en mis redes sociales. Encontr fotografas ms all de la familia. Me encontr
con los amigos, momentos especiales que compartimos con ellos y no dej de
aparecer la nostalgia al observar algunas de aquellos que hoy, por las vueltas que la
vida da se encuentran en otro pas desarrollando su vida.

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Pero pude notar algo comn en estas imgenes: todos eran momentos de dicha. No
encontr por ningn lado una sola imagen relacionada con los problemas, momentos
de angustia, enojos y cualquier otro tipo de circunstancia desagradable que
seguramente tambin hemos pasado con la familia y amigos. Pero no me
import. Todo lo contrario, disfrut mucho recordando esos buenos momentos. Y es
ms, fue bueno durante ese instante no encontrar ningn recuerdo desagradable.

Qu pasa si por el da de hoy usted se propone traer al disco duro de su mente los
archivos en donde se encuentran estos buenos momentos? Aquellos que han ido
acompaados de suspiros y exclamaciones. Recordar esos momentos en que los
nervios se apoderaron de usted por la emocin de estar frente al ser querido y no
saber qu expresar: Las convivencias entre amigos, la celebracin de un cumpleaos,
el logro obtenido, la felicitacin recibida, la enfermedad sanada. Traiga a su mente las
buenas experiencias que seguramente en ms de una ocasin a logrado pasar en
medio de familiares, amigos e incluso en soledad. Todos los hemos tenido y nadie
puede quejarse que la cinta del video mental de los buenos momentos est en blanco.

Usted tiene mucho por recordar el da de hoy e igualmente mucho por qu
agradecer. Todos hemos sido provistos de un arsenal de momentos especiales que se
han atesorado en nuestro corazn para que podamos tomar de all el agua de la
perseverancia. Lo bueno que ha pasado en nuestra vida se convierte en alimento que
puede ayudarnos a encontrar nimo en la adversidad que pudiramos estar
atravesando. Recordar las muchas ocasiones que la hemos pasado bien es una de las
herramientas que diariamente tenemos a nuestra disposicin para seguir adelante.

Nadie puede quejarse que la cinta del video mental de los buenos
momentos est en blanco.

Estoy consciente que, al igual que en la ma, su vida no ha sido color de rosa. Han
existido momentos obscuros, complicados, que en el intento de quererlos borrar

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permanecen all. Este incluso puede ser uno de esos momentos no agradables, un
diluvio a su vida. Pero le invito a que hoy revise y tome la decisin de quedarse con
las fotos. S, con esos buenos momentos, slo por hoy o si le es muy difcil, slo por un
momento qudese con las fotos como una herramienta de nimo y esperanza para
seguir adelante. As que ya no le quito ms su tiempo, le dejo disfrutando al recordar
esos buenos momentos que han llenado su vida.

ANCLA DE FORTALEZA
Nadie podr derrotarte jams, porque yo te ayudar, as como ayud a Moiss.
Nunca te fallar ni te abandonar.
Josu 1:5


Qu historia de su pasado puede recordar que hoy le llene de esperanza?
Qu palabra de Dios ha atesorado en su corazn que le puede ser til hoy

para seguir adelante?
A qu amigo puede acudir para encontrar nimo y esperanza en la situacin

difcil que est atravesando?

ACCIONES CONCRETAS


144




145
FIDELIDAD A COLORES

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Entonces Dios dijo: Les doy una seal de mi pacto con ustedes y con todas las
criaturas vivientes, para todas las generaciones futuras. He puesto mi arco iris en
las nubes. Esa es la seal de mi pacto con ustedes y con toda la tierra. Cuando
enve nubes sobre la tierra, el arco iris aparecer en las nubes y yo me acordar
de mi pacto con ustedes y con todas las criaturas vivientes. Nunca ms las aguas
de un diluvio volvern a destruir a todos los seres vivos. Cuando yo vea el arco iris
en las nubes, me acordar del pacto eterno entre Dios y toda criatura viviente
sobre la tierra. Entonces Dios le dijo a No: Este arco iris es la seal del pacto
que yo confirmo con todas las criaturas de la tierra. (Gnesis 9:12-17)

147

Cumplimientos tardos?
Recibir una promesa a los 90 aos no es tarea sencilla de creer sobre todo cuando ha
pasado muchos de esos aos con la ilusin no slo de recibir esa promesa sino de
verla cumplida. l ya perdi la cuenta de las ocasiones en que no solo lo pidi sino
suplico por ese anhelo en su corazn. Pero tal cual regalo de cumpleaos al llegar a
los 90 recibe una promesa de Dios. Pero el mayor problema, no fue lo que demor en
llegar la promesa, sino que la respuesta no lleg inmediatamente despus de haberla
recibido. El tiempo pasaba. l y su esposa se hacan cada da ms viejos. Creer que
luego de los 90 aos en lugar de ser bisabuelo se podra convertir en padre, era poco
creble ante los ojos de los dems, pero no para l: segua confiando en la promesa de
Dios.

Sentado frente a la hoguera mientras muchos dorman y unos cuantos cuidaban, no
poda dejar de pensar en el contraste de lo que estaba viviendo en relacin a lo que se
le haba ofrecido. Ya haban pasado algunos aos desde que, con la derrota del
gigante, haba sido tenido como hroe nacional y bien recibido en el palacio del rey.
Hoy la misma persona que le haba abierto las puertas le persegua con la intencin
de matarle. Le fue prometido y fue ungido para llegar a ser rey, pero hoy se
encontraba huyendo rodeado de un grupo de inadaptados que gracias a su liderazgo
ahora eran llamados Los Valientes. El fuego de la hoguera consuma la lea pero
nada poda consumir la pasin que haba en su corazn de estar aferrado a una
promesa de Dios.

Haban pasado ya ms de treinta aos. Treinta aos caminando en un desierto que l
no pidi. Es ms, fue uno de los dos que augur victoria contra diez que se
atemorizaron ante lo que vieron. Slo l y su buen amigo Josu llevaron palabras de
nimo. Pero de nada sirvi, la democracia no haba trado buenos resultados. Que la
mayora est de acuerdo, no quiere decir que Dios lo est. Mientras pasaban los aos
y vea como su ropa se mantena intacta, constantemente lograba recordar en su
mente ese lugar: Horeb. Lo vio con sus ojos, estuvo cerca de l, lo anhel, lo pidi, le

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fue prometido. Haban pasado ya ms de treinta aos y junto a la ropa con la que sali
de Egipto, se mantena intacta la fe de este hombre: haba recibido una promesa de
Dios.

Que la mayora est de acuerdo, no quiere decir que Dios lo est.

Tres hombres que recibieron una promesa de Dios. Las condiciones vividas no fueron
las ms favorables para creer en ella, pero lo cierto del caso es que lo hicieron.
Confiaron en Dios y en la palabra que haban recibido de su parte. En medio del
silencio, en medio de la persecucin, en medio del desierto. Silencio, persecucin,
desierto. Todos sinnimos de diluvio. Es sencillo creer cuando las cosas se dan. La fe
es verdaderamente fe cuando es todo lo que nos queda. Para creer por encima de las
circunstancias se hace necesario creer en un Dios ms grande que esas circunstancias.

Una vista espectacular
No puedo evitar dejar de recordar la poca en que trabaj en La Antigua Guatemala.
Es una ciudad emblemtica de nuestra nacin. Declarada patrimonio cultural de la
humanidad desde 1979, representa uno de los lugares tursticos ms visitados en
nuestro pas. Su estilo colonial tiene ese poder de cautivar a sus visitantes y hacer
que se convierta en un espacio que las personas no se aburren de visitar. Mientras
trabaj en ese lugar tuve la fortuna de contar con una oficina ubicada en una posicin
extraordinaria.

Cada vez que me paraba en la puerta de esa oficina tena la oportunidad de observar
la creacin de Dios. Un cielo espectacular, rboles frondosos, montaas y, al dar un
giro de noventa grados, un majestuoso volcn. Una visin adecuada en medio de
cualquier diluvio. Por qu digo que adecuada? Es un recuerdo del poder, la
grandeza y fidelidad de Dios.

Creo que ese era el sentir que quiso transmitir Dios en No y su familia al salir del
arca. El arco iris fue una muestra a todo color, en High Definition, de Su fidelidad.

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Casi me parece ver a No luego del diluvio, aos despus, cuando se encuentra en
grandes dificultades, sin importar la que sea, observa el cielo, contempla el
firmamento y expresa para s lo que el salmista dejara plasmado tiempo despus:

Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento anuncia la obra de sus
manos. Sal. 19.1

No deje perder la importancia de esa declaracin a su vida. El mismo Dios que cre
los cielos y la tierra, ese Dios que sus manos fueron suficientes para realizar todo
cunto el firmamento contiene y cuyas Palabras bastaron para que todo fuese hecho,
es el mismo que le respalda en su diluvio. La grandeza de Dios manifestada en su
creacin es una motivacin a depender de l. Sin importar el tamao de su problema
siempre se quedar pequeo cuando lo ponga en manos de Quin hizo los cielos.

Promesas cumplidas
Diez aos han pasado desde que recibi la promesa. Un tiempo duro para creer en lo
que cientfica y naturalmente tiene probabilidades nulas. Pero precisamente la fe
exige eso: sumar cuando hay cero posibilidades. As que no dej de intentarlo. Puso
lo que estuvo de su parte. Muchos recuerdos se juntaron en este instante, mientras
caminaba de ida y vuelta en un espacio de 2 metros mientras esperaba con ansiedad.
Las oraciones realizadas, las burlas recibidas, la promesa dada, el tiempo de espera,
todo se reuni en recuerdos de pocos minutos. Recuerdos que fueron interrumpidos
por un llanto de beb que son a cntico angelical. Isaac estaba naciendo. Cuando
una lgrima que sale del ojo se topa con una sonrisa en los labios, indica precisamente
que un gran acontecimiento se est presenciando. Abraham estaba experimentando
la fidelidad del cumplimiento de la promesa de Dios.

La noticia no fue agradable. Literalmente l amaba a esos dos hombres. Al
comunicrsele que haban muerto, senta que algo estaba muriendo en su propio
interior. Sal y Jonathan representaron mucho para l. Atrs qued el tiempo de la
persecucin. El perdn otorgado guard su corazn y en nada afect para que

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pudiera seguir siendo conforme a lo que Dios estaba buscando para hacerle el sucesor
en el reinado. La transicin era natural, no por herencia, sino por la influencia de su
liderazgo. Al sentarse por primera vez en el trono de Israel, David record al viejo
Samuel derramando aceite sobre su cabeza y comprob la fidelidad del cumplimiento
de la promesa de Dios.

Desea minimizar la preocupacin en su vida? Acuda a las
promesas de Dios.

Haban pasado ya algunas batallas, muchas de ellas ganadas, solo la nefasta
experiencia vivida en Hai manchaba el record de invicto de Israel en su paso por
conquistar la tierra prometida. All estaba frente a l nuevamente. Horeb, el monte
ahelado. Han pasado ms de 40 aos desde que le fue prometido, pero no haba
ningn problema. Todo lo contrario. A la fuerza que segua intacta haba que sumarle
una pasin que se haba incrementado con el paso de los aos. Josu no tuvo
problema en decirle que si. Caleb reuni a sus hombres, y al conquistar ese monte
comprob la fidelidad del cumplimiento de la promesa de Dios.

Antdoto a la preocupacin
Las promesas de Dios. Un antdoto para la preocupacin. Justo en estos das estuve
pensando en ella. Cmo hace la preocupacin para ganar tanto espacio en nuestra
vida? Es por la importancia que le damos. Es por lo que igualmente hacemos y
dejamos de hacer. La preocupacin se ve alimentada por nosotros mismos en la
oportunidad que le damos a travs de nuestros actos. S. Es necesario reconocer que
existen momentos que nosotros mismos alimentamos la preocupacin. David
Hormachea lo expresa de la siguiente manera:

La preocupacin se alimenta en la falta de preparacin que lleva a la
decepcin. La preocupacin se alimenta de la inseguridad y la
incapacidad, y se motiva por la falta de planificacin, por la falta de
organizacin, por la terrible postergacin. La preocupacin excesiva no

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solo destruye a quien la experimenta regularmente, sino an a quienes le
rodean usualmente. La turbacin asalta nuestra fe y nos deja a expensas
de nuestros temores. El afn nos hace negar las promesas de Dios y nos
motiva a elegir ser desobedientes.

La idea de la preocupacin es sobredimensionar la etapa de las dificultades. No resto
importancia a lo que est atravesando pero, al observarla bajo el filtro de la
preocupacin, el problema cobra un tamao por encima de lo que realmente pudiera
ser. Ese es el objetivo de la preocupacin en nuestra vida: contrarrestar el efecto
esperanzador que otorgan las promesas de Dios.

Dicho en otras palabras Desea minimizar la preocupacin en su vida? Acuda a las
promesas de Dios. Mantngase firme en ellas. Crea y confe en lo que Dios ha dicho.

Pues todas las promesas de Dios se cumplieron en Cristo con un resonante s!,
y por medio de Cristo, nuestro amn (que significa s) se eleva a Dios para su
gloria. (2 Corintios 1:20)

Dios no es un hombre, por lo tanto, no miente.
l no es humano, por lo tanto, no cambia de parecer.
Acaso alguna vez habl sin actuar?
Alguna vez prometi sin cumplir? (Nmeros 23:19)

Ese es el proceder de Dios. Fiel en cumplir sus promesas. No condicionado a nuestro
proceder. Dios es fiel porque esa es su naturaleza. Unos pincelazos de creatividad
colocados en el cielo en forma de arco fueron la muestra divina de Su fidelidad. Lo
cual, de paso, viene a dar sentido de seguridad en cuanto a la fidelidad de Dios, pues
no involucra para nada la actitud del ser humano. La formacin del arco iris no
depende de nosotros. No existe nada que usted y yo hagamos para que el arco iris
aparezca en el cielo. Lo mismo ocurre con la fidelidad de Dios. Nada hacemos para
que l sea fiel con nosotros. Sencillamente Dios es fiel.

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Si furemos infieles, l permanece fiel; El no puede negarse a s mismo.
2 Tim. 2.13

As que la prxima vez que est atravesando un diluvio en su corazn, contemple la
creacin, vea la grandeza de Dios reflejada en la obra de sus manos, permanezca
firme. El arco iris de Su fidelidad est sobre su vida.



Qu promesa de Dios ha recibido que puede sostenerle para seguir adelante?
Qu representa para usted la fidelidad de Dios?
Cmo puede vencer la preocupacin?

ANCLA DE FORTALEZA
S que cada maana se renuevan

su gran amor y su fidelidad.
Por eso digo que en l confo;
Dios es todo para m!
Lamentaciones 3:23-24
ACCIONES CONCRETAS


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NUEVOS COMIENZOS

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Sean fructferos y multiplquense; llenen la tierra. 2Todos los animales de la
tierra, todas las aves del cielo, todos los animales pequeos que corren por el
suelo y todos los peces del mar tendrn temor y terror de ustedes. Yo los he
puesto bajo su autoridad. Gnesis 9:1-2

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La pasin de una visin

Vicente es parte del equipo de amigos que, como recordar, denomin Cambiadores
de Mundo. Mdico de profesin, pastor por eleccin, un comunicador por llamado,
optimista por naturaleza. En el repertorio de mis Avengers cercanos, como l mismo
dira, es algo as como El guapo Ben de Los Cuatro Fantsticos: una mole de
bondad, generosidad y optimismo. As es. Creo que uno de los grandes poderes
otorgado a Vicente es el optimismo. Como todos los seres humanos, puede tener sus
das obscuros, pero posee esa habilidad de poderlos pintar con colores de esperanza y
logra sacarle partido y provecho a todo tiempo de adversidad que le ha tocado vivir.

Como todo hroe, Vicente no revela su arma secreta. Sin embargo, creo que la he
descubierto. Djeme revelar el secreto de sus poderes. Luego del tiempo que tengo
de conocerlo y, a travs de observarlo y conversar con l, he llegado a deducir donde
radica esa pasin natural que desborda: Una visin. l es un visionario, hace de la
visin una fuente de inspiracin propia que le hace poner buena cara a las
dificultades que est atravesando.

En sus primeros aos de ejercer como mdico, surge la oportunidad de ir a Mxico
estudiar una especializacin en nefrologa. El hospital para el cual laboraba, le
considera a l como la persona en la que deban invertir. Le aseguran el
financiamiento de la misma y el sueo de crecer como profesional para servir a otros
se ve alimentado a travs de este ofrecimiento. Sin embargo, las cosas no se dieron
tan fcil como se presentaron al principio. Una decisin administrativa, hace que le
sea informado que el hospital ha cambiado de planes y, que si desea hacer el viaje,
debera ser bajo su propia cuenta.

Esto no estaba ni dentro de los planes, mucho menos dentro del presupuesto. Poco
tiempo de estar casado y un beb en brazos hace que la estabilidad econmica no sea
el mejor escenario para tomar una decisin como esta. Sin embargo, el respaldo de
Dios y el apoyo de su esposa Marina, hace que Vicente tome la decisin de irse,

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primero solo y luego esperar la llegada de su esposa e hijo a una ciudad desconocida,
a una experiencia que ofreca ms complicaciones que oportunidades. Pero algo
haba all que haca que siguiera adelante: Una visin.

El diluvio que la familia Snchez vivi en Mxico, fue posible sobrellevar gracias a una
visin dada por Dios. Los problemas de escasez econmica sumada a las
complicaciones profesionales que conllev el viaje a Mxico, eran sostenidos por la
esperanza de una visin dada por Dios para generar transformacin en el mundo por
medio de la preparacin que l estaba viviendo. Vicente comprendi, luego de esa
experiencia, que ms all de ser preparado como profesional, Dios estaba invirtiendo
en l a travs de un proceso que le llevara a ser una persona de mucha influencia
dentro de su sociedad. Hoy Vicente adicional a ser un referente en el campo de la
nefrologa en nuestro pas (ha impartido conferencias tanto en Guatemala, Estados
Unidos, Europa y China), es uno de los locutores ancla de un programa radial llamado
Vaya con Dios que este 2014 cumpli 10 aos de estar al aire, es el Director nacional
de la Organizacin i58 cuyo fin primordial es trabajar en acelerar el fin de la pobreza
en Guatemala. Vicente es una inyeccin de nimo, entusiasmo y positivismo en su
entorno y sigo convencido que esto es producto de ver ms all de las circunstancias
y estar enfocado en una visin dada por Dios.

El poder de una visin.

Una visin es un sueo. Un sueo es cuando Dios dice por anticipado lo que desea
hacer en nuestra vida. Una visin tiene poder. Un poder que es complicado de
explicar, pero cierto de experimentar. Una visin genera pasin, resistencia, fuerza.
Una visin es capaz de hacer sobrellevar el diluvio ms recio que se pueda
experimentar, con la esperanza, no solo que el agua va a cesar, sino que el arcoris va
a relucir por encima de cualquier cosa. Una visin no es una ilusin. Una visin es una
promesa recibida por Dios que brinda una perspectiva de una realidad mucho ms
excelente de la que estemos atravesando en la etapa de la tormenta.

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Por extrao que parezca, el diluvio es indicador de una visin de Dios. Las
adversidades pueden reforzar un sueo dado por l. Al respecto, Bruce Wilkinson
(2003) dice: Si en la actualidad est enfrentando intimidades, anmese. El mismo
hecho que ellos estn parados delante de usted significa que se mueve hacia su sueo.
Su oposicin puede en realidad ayudarle a aclarar su sueo y a fortalecer su decisin.

Un sueo es cuando Dios dice por anticipado lo que desea hacer en
nuestra vida.

Al igual que Vicente, Jos sabe de eso. l seguramente reforzara mis palabras y
compartira con nosotros su experiencia para mostrarnos como un sueo se ver
amenazado con fuertes tormentas que afianzarn la visin dada por Dios. Vendido
por sus hermanos, subastado al mejor postor en una exhibicin de esclavos en Egipto,
acosado sexualmente por su patrona y luego difamado por ella por no acceder a sus
caprichos carnales, encerrado en una celda capaz de sepultar la esperanza del ms
optimista. Pero no lo consigui. El sueo de Jos permaneci intacto, no saba a
ciencia cierta lo que Dios hara, solo saba que l intervendra. Toda apuntaba a que,
el nivel de la tormenta vivido por Jos, traera como consecuencia el hundimiento de
su futuro. Pero la visin del futuro era ms grande que el desastre del presente.

Una visin es capaz de sostenerle en el tiempo de la adversidad. Es ms, todo sueo
grande dado por Dios incluir momentos difciles. Jess lo asegur al decir En el
mundo tendrn aflicciones (Juan 16:33) No es una promesa muy alentadora, no es
algo que nos entusiasme, pero es algo real. Las dificultades son parte del paquete de
la visin que Dios da. Lo maravilloso del caso es que la promesa no termina all, tiene
un final extraordinario: Pero confen, yo he vencido al mundo. Ese mundo que trae
tormentas, ese mundo que conlleva dificultades, ese mundo que hace llover un diluvio
de incomodidades sobre nuestra vida, ese mundo ha sido vencido por Jess.

Cuando la tormenta venga a su vida evale si esa lluvia no es otra cosa sino un desafo
a la comodidad. Acomodarnos a nuestro estado actual puede verse desafiado por una

159

tormenta que nos lleve a la vida que Dios tiene planeada para nosotros. Sir Francis
Drake en una ocasin hizo una oracin que refleja precisamente eso, esta oracin dice
lo siguiente:

Molstanos, Seor, cuando estemos demasiado satisfechos con nosotros mismos.
Cuando nuestros sueos se hayan hecho realidad porque soamos demasiado poco.
Cuando lleguemos sanos y salvos porque navegamos demasiado cerca de la orilla.
Molstanos Seor.

El sueo de Dios dado a Jos provoc incomodidad. Algunos por las propias
decisiones de Jos, otras como parte del proceso natural de descubrir el carcter de
Dios. Lo cierto del caso es que en ninguna de las adversidades Jos guard rencor o
culpabiliz a alguien ms. La visin le dio la capacidad de encontrar el propsito ms
all de la adversidad:

Ustedes se propusieron hacerme mal, pero Dios dispuso todo para bien. l me
puso en este cargo para que yo pudiera salvar la vida de muchas personas.
Gnesis 50.20

Cuando una visin llega a su vida, se dar cuenta que hasta la ms grande adversidad
cobra sentido para poderla cumplir. Nada queda desperdiciado dentro de las
inversiones que Dios hace por medio de las experiencias que permite a nuestra vida.

Ese es el mensaje que conllevan las palabras dadas a No:

Sean fructferos y multiplquense; llenen la tierra. 2Todos los animales de la
tierra, todas las aves del cielo, todos los animales pequeos que corren por el
suelo y todos los peces del mar tendrn temor y terror de ustedes. Yo los he
puesto bajo su autoridad. Gnesis 9:1-2

160

Dios estaba dando la oportunidad de seguir soando. Mostr como a travs de la
prueba estaba interesado en reinventar el llamado dado a Adn. Las cosas no haban
salido como lo esperaba y estaba dando en No la oportunidad de seguir soando de
soar en grande y retomar el mismo sueo que l tena para con la humanidad. De
eso se trata el mandato dado por Dios. Dios sigue confiando en la humanidad. No
basado en el pasado, sino viendo hacia el futuro.

Cuando una visin llega a su vida, se dar cuenta que hasta la ms
grande adversidad cobra sentido para poderla cumplir.

El gran visionario
El primer gran visionario es Dios. Djeme repetrselo: Dios no confa en nosotros
basado en nuestro pasado, no es muy halagador de lo que hemos logrado, Dios confa
fundamentado en la visin que tiene sobre nuestra vida. Esto puede generar un
compromiso muy grande en su vida. Si as es, me alegro mucho que lo sea. Dios busca
personas comprometidas para realizar sus planes. Es a travs de gente
comprometida que l busca realizar grandes cosas, porque es en la manifestacin de
esos grandes sueos que puede reflejarse de mejor manera Su gloria en el mundo.
Cumplir con la visin de Dios en nuestra vida es una herramienta til en Sus manos
para poderle mostrar a otras personas de lo que l es capaz de hacer. Bien lo dice
Courtney McBath:
Tal vez no lo entendamos, quiz solo podemos echar algn vistazo
de lo que quiere lograr a travs de nuestras vidas en nuestro viaje
con l. Pero cuando entendemos el poder de tener un propsito en
Dios cuando consideramos que Dios nos cre porque quiere hablar
con nosotros y mostrar ms de l al mundo a travs de nuestra vida
entonces esperar nos da un poquito menos de nervios, un poquito
menos de presin

Expectativa y Sorpresa

161

La relacin con Dios involucra una mezcla muy emocionante de expectativa y
sorpresa. El muy conocido pasaje de Hebreos 11:1 nos indica que la fe es la certeza
de lo que se espera. La fe requiere expectativas. La fe que mueve a Dios es la que
manifiesta delante de Dios lo que espera. Dios pide de nuestra fe, anhela conocer
nuestras expectativas. Una parte de poderle agradar es precisamente mostrar
delante de l esa fe que exponga nuestras expectativas. Usted y yo ponemos las
expectativas, Dios se encarga de dar la sorpresa.

La Biblia igualmente nos recuerda que l es poderoso para hacer todas la cosas
mucho ms abundantemente de lo que pedimos o entendemos (Efesios 3:20) Eso es
sorpresa! Ir ms all de lo que pide, ir ms all de lo que entiende. La capacidad de
Dios por sorprendernos sobrepasa toda expectativa que podamos tener. Pero eso no
termina all, el cierre del pasaje de Efesio es impresionante: segn el poder que
acta en nosotros. A l sea la gloria en la iglesia en Cristo Jess por todas las edades,
por los siglos de los siglos. Amn.

Impresiona saber que la forma en que Dios sobrepasa nuestras expectativas, es
precisamente por medio de nosotros mismos. l est interesado en usar sus sueos,
sus batallas, sus expectativas, sus adversidades para sorprenderle. Ese es el proceder
de un Dios extraordinariamente bueno. No nos necesita, no somos indispensables
para que las cosas sucedan, sin embargo a l le ha placido que as sea.

La capacidad de Dios por sorprendernos sobrepasa toda
expectativa que podamos tener.

La tormenta pudo haber ahogado toda esperanza de un futuro mejor. Pero no fue as.
La tormenta fue la que reg la semilla de la confianza para que No fuera elegido para
comenzar de nuevo. Todo lo que la tormenta pueda querer destruir en su vida,
igualmente podr ser restaurado cuando nos disponemos a seguir confiando en Dios.
Todo lo que la adversidad pueda destruir, es parte del proceso de restauracin que
Dios ofrece dar a nuestra vida cuando nos atrevemos a volver a soar. Mientras el

162

enemigo de nuestras almas est interesado en destruir nuestros sueos. La dificultad
puede convertirse en la mejor oportunidad que nuestra vida tenga para soar cosas
extraordinarias.

Por encima del desnimo

Desnimo Lo Conoce? Espero que no. Deseara que as fuera. En mi caso particular
no puedo garantizarle esto. Lo he experimentado. El deseo de dejar todo a un lado. La
sensacin que lo que se est haciendo no vale la pena es horrible. El conflicto interno
que causan las dudas cuando no se obtienen los resultados deseados. He pasado por
ese lugar ms veces de las que en este momento me recuerdo, y ms an de las que
quisiera recordar. El desnimo est diseado para desbaratar los sueos ms
profundos, los anhelos ms grandes y los suspiros ms sentidos.

Si bien el desnimo es uno de nuestros enemigos muy grandes en el alcance de
nuestros sueos, no tiene el poder suficiente para poder contrarrestar una visin bien
cimentada en nuestros corazones. Es all donde el factor "Perseverancia" se vuelve un
elemento indispensable en el proceso de alcanzar nuestra visin. Perseverar es seguir
por encima de nuestras fallas. Es sobreponerse a las cadas y tomarlas como una
forma de aprendizaje que afirma nuestro carcter en el presente y nos servir en el
futuro. Sin la firmeza en nuestro interior por perseverar el desanimo encontrar el
espacio propicio para desbaratar los sueos en nuestra vida; pero cuando se topa con
un corazn determinado a seguir en la obtencin de su visin no encuentra cabida
para destruir nuestros sueos.

Siga soando con perseverancia. Esfurcese con perseverancia. Mantenga los ojos
bien puestos en su visin. No deje que los tropiezos le hagan retroceder. El camino es
empedrado, pero el destino que usted se ha fijado vale la pena. Dios est dispuesto a
respaldar los corazones comprometidos y perseverantes en la bsqueda de su visin.
l mismo tiene una, que incluso tom la vida de su propio Hijo como parte del riesgo a
correr: "Que todo aquel que en l crea no se pierda y tenga vida eterna" Y vaya si no

163

ha encontrado obstculos para realizarla! Pero confa en que usted se convierta en
parte de los agentes que le ayuden en la obtencin de este supremo plan. No
desmaye: Persevere hasta el fin.

Un corazn de abundancia
La tormenta que Dios ha permitido en su vida, tiene un llamado a la abundancia. Un
concepto que nos gusta mucho siempre y cuando se aplique a nosotros. El esfuerzo
que hacemos diariamente tiene, dentro de muchos otros objetivos, el conseguir y
llegar a la abundancia. Abundancia en sus diversas clases pero al fin y al cabo todos
anhelamos llegar a la abundancia. Abundancia material, abundancia espiritual,
abundancia intelectual, abundancia emocional. Sabe una cosa? Le tengo buenas
noticias: Dios est interesado en brindarnos esa abundancia en nuestra visin!

Pero existe un pequeo detalle que pasamos por alto al pensar en la abundancia. La
abundancia que Dios brinda la otorga con el objetivo de poderla compartir. El
llamado a fructificar y crecer se hace desde la perspectiva de hacer crecer tambin a
otros. Su experiencia de vida puede ser reciclada en el beneficio de otros. Una visin
dada por Dios es til para el crecimiento de los dems. Trabajar en el alcance de una
meta conlleva la responsabilidad de tener una mentalidad y disposicin de corazn en
la que podamos crear ganancias compartidas con otros.

La bendicin que recibimos al trabajar en nuestra visin, es una bendicin que Dios
derrama en nuestras vidas y deposita en nuestras manos para que la podamos
compartir con otros. No cabe el egosmo en un visionario. Aquel que busca el
beneficio de su propia persona, tarde o temprano se topar con el desastre del
fracaso. Pero aquel que ha logrado asimilar y poner en prctica el principio de
compartir est destinado a conseguir sus metas.

Una visin dada por Dios es til para el crecimiento de los dems.

164

Lograr amalgamar los principios bsicos de fe, perseverancia, uso de nuestros
talentos y una mentalidad de compartir nos encausa en buena manera al alcance de
nuestra visin. Es en ese momento donde se reafirma el compromiso de Dios por
llevarnos a situaciones gratamente inesperadas y donde la tormenta de nuestro
diluvio cobra sentido.

Estoy seguro que si examina su corazn existe un sueo por realizar. El suspiro que
sale de su interior tiene una intencin que usted claramente puede identificar. Es la
Visin que Dios le ha dado. Qu espera? Llvela a la prctica. Arrisguese a confiar
en Dios. Aquellos que lo han hecho han sido capaces de abrir mares, pasar de pastor a
rey, reconstruir ciudades y templos, y hubo Uno cuya Visin le llev a dejar una
tumba vaca venciendo la muerte.

Ese el mensaje final de este libro: Suee en grande amigo. No importa la adversidad.
Posiblemente al terminar de leer este libro usted est terminado de salir de su propio
diluvio, o pueda ser el caso que sea todo lo contrario y que la tormenta est
arreciando. Sin importar su condicin: no deje de soar. No deje de tener esperanza.
Si un sueo vale la pena alcanzar, vale la pena seguir creyendo y luchando por l.
Dios est a su favor. l mismo puso ese sueo en su corazn y no habr tormenta que
se pueda oponer a que usted pueda realizarlo. La visin hacia el futuro es
indispensable cuando el diluvio llega, ningn problema es nuestro fin. Sera muy
aventurado de mi parte atreverme a presagiar su futuro, pero algo si puedo decirle:
Vale la pena ver hacia delante. Cuando el diluvio llega, hay esperanza.



165
Qu sueo arde en su corazn y sabe que Dios desea que usted realice?
De qu forma la prueba atravesada colabora en formarle para vivir el sueo

que Dios ha puesto en su corazn?
Quines saldrn beneficiados cuando realice su sueo?

ANCLA DE FORTALEZA
Que Dios te bendiga
y siempre te cuide;
que Dios te mire con agrado
y te muestre su bondad;
que Dios te mire con agrado
y te llene de paz.
Nmeros 6:24-26

ACCIONES CONCRETAS




166
EPLOGO : LA CONQUISTA

167

En noviembre del 2014 mientras disfrutbamos con mi familia de un perodo de
vacaciones en Puerto Barrios en la zona norte de Guatemala, recib un regalo de parte
de Dios. Fue de esos momentos donde, sin poderlo explicar, usted tiene la seguridad
que es l quien habla. Sent claramente como habl a mi corazn y dijo: Te tengo un
regalo: Salmo 2:8 es para ti
Pdeme lo que quieras!
Te dar como herencia las naciones;

todo el mundo ser tuyo! (TLA)
Me pareci un regalo sorprendente. No muy entendible de momento, pero

sorprendente al fin y al cabo. A los tres das, vuelvo a escuchar la voz de Dios en
relacin a este tema y dice: Salmos 2:8 se resume en una palabra: Conquista. Viene
un perodo de conquista a tu vida. Ciertas cosas estaban pasando en la corporacin
iRadios que, inicialmente asum que se trataba de esto, sin embargo Dios clarific que
se trataba de algo personal. Me senta entusiasmado, expectante.

En el cierre de ao, como muchas organizaciones, realizamos una cena para agradecer
el ao de servicio a los colaboradores de iRadios. Una noche muy linda, en donde
nuevamente recibo una muy grata sorpresa de Dios por parte del equipo: un
reconocimiento por mi desempeo al frente de la misma. No lo esperaba y la
dimensin de mi sorpresa, gratitud y emocin es difcil de describir.

Das despus de la cena y del reconocimiento, sostuvimos una conversacin con Rony
Madrid. Hablamos del futuro. Del de la corporacin y del propio. Tuve la
oportunidad de hablar de mis propios sueos, de un esbozo de mi visin a futuro. Fue
una muy buen tiempo compartido con Rony que permiti cerrar, laboralmente
hablando, nuestras reuniones durante ese ao.

Lleg el 5 de enero del 2015. El primer da de labores de ese ao luego del descanso
que provoca la Navidad y el fin del 2014. No es necesario entrar en muchos detalles.

168

Fue una muy buena conversacin, la esencia de ella fue trasladarme por parte de
Rony la confirmacin que recibi de Dios que haba llegado el momento de dejarme ir
de iRadios y que deba entregar el puesto a otra persona.

All cobraron sentido muchas cosas sentido, la palabra Conquista, Salmos 2:8, pero
sobre todo una cosa: este libro. La perspectiva de la noticia cobr un giro diferente.
Tal cual fui abordando en este material los temas propuestos, entend que si bien
poda ver la aparicin de nubes en el cielo, todo estaba en control. En el control de
Dios. Repito, fue una muy buena reunin la que sostuvimos con Rony. Cuando las
cosas suceden en el orden y forma de Dios todo avanza bien. La decisin que l tom
de llevarme a iRadios trajo bendicin a mi vida, la de mi familia y me permiti
bendecir la vida de otros: esta decisin har lo mismo.

Al salir de all recuerdo que le dije a Dios: Seor, me qued sin trabajo. Casi puedo
asegurarle que visualic una sonrisa en los labios de Dios al responderme: Ya lo
saba, yo le dije a Rony que lo hiciera Eso me tranquiliz, pero entonces pregunt
qu tendra que hacer. Confiar, avanzar con lo que corresponda hacer cada da, ver
hacia delante con determinacin, seguir soando, servir con pasin, ser t mismo

Al momento de escribir estas lneas han pasado justo dos meses desde que se llev a
cabo esa conversacin. La barca sigue a flote, segura, con momentos de
incertidumbre, pero segura. Nada ha faltado, nada faltar. He visto un arsenal de
herramientas que Dios prepar de antemano para avanzar en este momento. Le
puedo garantizar que lejos de ver las nubes o la tormenta, tengo la vista puesta en el
arcoris de la fidelidad de Dios.

Ignoro cul sea su situacin en este momento en relacin a las tormentas que la vida
pueda presentarle. No s si est en medio de una, o si acaba de salir de una. Quisiera
asegurarle que ya no habrn ms, que esta fue la ltima. Que no vendrn ms
tormentas a su vida. Pero no puedo hacerlo. No puedo garantizarle que en esta vida
ya no habr problemas y que las situaciones adversas acabarn. No puedo hacerlo.

169

Pero si puedo recalcar algo que a lo largo de este libro he buscado hacer: Dios no ha
perdido el control de lo que sucede, l le ama y usted est bajo su proteccin.

Cuando el diluvio llega hay esperanza, sabe por qu? Porque l lo ha prometido, no
importa lo que pase. Sin importar lo que suceda, sus palabras siguen siendo vlidas,
sus promesas estn an vigentes. Incline su odo y seguramente volver a escuchar
su voz diciendo Mi presencia ir contigo y te dar descanso

170
Sobre el Autor
Se define como un asesor de sueos pues, en sus propias
palabras indica que su propsito de vida es incomodar para
realizar cambios y acompaar para lograr sueos.
Casado desde el ao 2000 con Amparo, pap de Pablo Jos y Jos
Daniel, sus tres ms grandes tesoros en la vida.
Graduado como Ingeniero Industrial con una Maestra en
Direccin de Medios de Comunicacin. Certificado como Coach
de Vida y Ejecutivo. Licenciatario nivel 1 certificado
por Benzinger y autorizado por TIMS International para la herramienta PCA.
Desarroll su experiencia inicial como Ingeniero en la industria textil, laborando en
ella durante alrededor de nueve aos. Desde el ao 2008 se desempe como Gerente
en Ilumina FM, proyecto que al unirse en el 2014 con El Camino FM y Celebra FM da
origen a Corporacin iRadios.
A partir del 2015 se dedica a tiempo completo a ser un facilitador de aprendizaje en
temas de liderazgo, gestin de talento, estrategia y desarrollo humano haciendo del
autoconocimiento un fundamento para maximizar el potencial de las personas dentro
de los ambientes y circunstancias que se encuentren.
Ha sido invitado por diversas empresas, organizaciones y alianzas con colegas
consultores a impartir seminarios, conferencias y talleres orientados al desarrollo
humano. Actualmente es columnista semanal en Siglo 21 y comunicador activo para
iRadios
As mismo ha participado como escritor de artculos en revistas, peridicos, sitios
web e invitado a programas de radio y televisin.
Su aficin por los comics y especialmente por Spiderman es una caracterstica que no
hay que dejar pasar por alto en l.
Puede encontrarlo en redes sociales en Twitter/jfcampos777 y
Facebook/soyjfcampos as como conocer ms de otros proyectos y materiales en
www.agentedecambio.com

171

1 Bridges, Jerry. En Pos de la Santidad. 1995. Pp 38
2 Spurgeon, Charles. Hablaron de la Gracia. 1994. Pp. 33
3 Moody, D.L. Hablaron de la Gracia. 1994. Pp. 11
4 Ibid.
5 Ibid.
6 Swindoll, Charles. El despertar de la gracia. 1990. Pp. 45
7 Feinberg, John. nos enga Dios? 1998. Pp. 117
8 Buscar referencia
9
172

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HAY ESPERANZA

CUANDO EL DILUVIO LLEGA HAY ESPERANZA

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Eres el constante recuerdo del amor y fidelidad de Dios para mi vida.

En cada tormenta atravesada ha sido tu presencia a mi lado lo que me ha hecho sentir

Cuando el Diluvio Llega

Dr. Samuel Berberin

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

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Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Estoy tomando las decisiones correctas el da de hoy para avanzar hacia un

El diluvio que estoy atravesando es consecuencia de una decisin personal o

Cul es la decisin ms importante que debo tomar hoy para alinear mi

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Qu es la Gracia para mi?

Cuando el Diluvio Llega

En qu aspecto, que posiblemente no haya considerado, necesito aferrarme a

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega

decisin. Finalmente grit:

Cuando el Diluvio Llega

Lamentablemente, debemos reconocer que todos en alguna etapa de nuestra vida

Cuando el Diluvio Llega

Cuando el Diluvio Llega