Derecho de Pernada o
Derecho de Pernada o
Derecho de Pernada o
Los nobles imponen el rito del acto sexual con las mujeres vasallas desde su doble
poder de hombres y seores, lo cual obliga a distinguir el estudio de la violacin en el
feudalismo del estudio de la violacin en otros tipos de sociedad. Sobre todo si
consideramos que, en principio, era tradicin admitida ms o menos ampliamente este
derecho feudal de que seor se acostase con la novia en su primera noche de casada
como gesto de vasallaje. Conforme esta costumbre pierde consenso social, y los seores
siguen exigiendo y prcticando la prestacin corporal de la mujeres, deviene, ya en el
siglo XV, causa inmediata de revueltas antiseoriales. El derecho medieval de pernada
va con el tiempo perdiendo el terreno que gana el derecho popular de revuelta.
No vamos a encontrar huellas de ius primae noctis en el derecho escrito: como uso
concierne al derecho consuetudinario 4 y como abuso al derecho de revuelta, ambos de
expresin fundamentalmente oral 5. A travs del derecho de revuelta los vasallos han
contestado la constumbre feudal de la primera noche, trasportndola as al derecho
escrito de aplicacin: la Sentencia de Guadalupe aboliendo los malos usos y otros
abusos personales, promulgada por Fernando el Catlico para Catalua en 1486, es el
ejemplo ms notorio, segn estudiaremos al final de este trabajo.
Claro que el silencio, pleno de significaciones, de la cultura letrada tout court acerca del
derecho seorial de pernada, no es nunca total. Alfonso X y su corte de juristas,
empeados en sustituir, en la segunda mitad del siglo XIII -cosa que no se consigue
hasta al menos pasado un siglo-, el derecho viejo castellano, de matriz goda y localista,
por la novedad europea, el derecho comn romano-cannico, enfocan la violacin como
delito muy grave, cuya punicin pretende reservar para s el rey como caso de Corte. E
indirectamente se refieren al derecho de pernada cuando fijan en quinientos sueldos la
multa a pagar en caso de que "alguu ome desonrrar nouho casando ou nouha en dia de
voda" 6, qu hombre si no uno poderoso y con ascendiente sobre los novios puede
imponer tal deshonra del da de la boda? No prueba este delito la vigencia en el siglo
XIII del ceremonial seorial de reservarse a sus vasallas la primera noche de bodas ? La
indecisin legislativa denota cierta complicidad a la hora de identificar a los posibles
delincuentes; indeterminacin que resta credibilidad a la decisin paralela de hacer de la
"mujer forzada" un caso de Corte (1274). En cambio queda patente que el nuevo
derecho no va a favorecer dicha deshonestidad.
Otro indicio de la existencia de la costumbre feudal que nos ocupa: el clrigo que
cometa pecado de "fornicio" con una casada y virgen, "o que yog con ella despus de
que ouo marido", sale retirado el oficio y el beneficio (Partidas I, 5, 35)7. No se hace
aqu mencin alguna al uso de la fuerza pero si a la condicin del virtual poseedor de la
recin casada como clrigo con cargo y beneficio (cualquier pequeo, mediano o gran
seor eclesistico).
Prcticamente todas las noticias explcitas que manejamos sobre el derecho de pernada
corresponden, o tienen en ellas su origen ltimo, a fuentes orales de tipo judiciales,
relacionadas casi siempre con conflictos y cultura popular. Son los vasallos en la Baja
Edad Media quienes desde la tradicin popular, oral y de revuelta, plantean el problema
del derecho de pernada como una violacin encubierta. Si bien, letrados de Corte
primero e historiadores eclesisticos despus, van a converger con la presin desde
abajo, dando cabida en la cultura savante a una tradicin oral antiseorial que se ha ido
formando lentamente desde finales del siglo XIV.
En 1385, Garca Gomes, alcalde mayor de Galicia por el Rey, dicta la sentencia arbitral
de un pleito entre los campesinos de Aranga y el monasterio de Sobrado sobre seoro,
rentas, justicia y derechos de vasallaje: en favor de la abada en cuanto a propiedad y
jurisdicin 8, y en beneficio de los campesinos reconocindoles usos como pastar
ganado y cortar lea en el coto, y eliminando otros denunciados como abusivos por los
vecinos como cobrar manidego -el seor se quedaba con los bienes del difunto sin
herederos- habiendo descendencia, o el derecho de pernada. Oigamos al representante
campesino Juan Nieto, pues "me dijo e me querello", afirma el juez real que "levaban
los grangeros de Carballotorto sus mujeres contra su voluntad para facer fueros en la
dicha granja, non sabian quales, e que los tenian all dos o tres dias" 9. No habla claro
Juan Nieto pero se entiende. La prueba la tenemos en el tono del fallo que redacta el
oficial real: "E otros en razon de las mujeres que eran tenudas de ir servir duas vezes en
el ao al granjero de carballo tuerto en la manera que dicha es fallo que tal servicio tal
fuero que non es onesto e por mal e desonestidad que se podria ende seguir mando que
tal fuero que non se faga" 10. En esta muestra de derecho aplicado, todava con algunos
sobrentendidos, se reemplaza el "non sabian quales" de Juan Nieto, de los misteriosos
servicios que las mujeres prestaban en Carballotorto por un abierto "tal fuero non es
onesto", aseveracin que colateralmente inculpa al granjero de Carballotorto 11, cuyo
nombramiento en adelante, segn la sentencia, el monasterio ha de pactar con los
campesinos: "quando y oviere de poner algun granjero que llamen y dos omes buenos
de la dicha ribera que le tomen juramento que ben verdadeiramente guardara e
defender a los dichos omes de la dicha ribera (...) e se contra esto les pasare que le tiren
la granja e pongan y otro" 12.
[...]
Derecho de pernada en la Baja Edad Media Cristiana: Rito y Violacin( Lecturas)
Carlos Barros ( Universidad de Santiago)
--------The Marriage of the Virgin (detalle)
Davide Ghirlandaio (David Bigordi) (Italian, Florence 14521525 Florence)
Date: ca. 1479
Medium: Tempera and gold on wood
Dimensions: 6 1/4 x 16 1/4 in. (15.9 x 41.3 cm)
Metropolitan