127 Horas - Aron Ralston
127 Horas - Aron Ralston
127 Horas - Aron Ralston
127 horas
Traduccin de Griselda Cuervo, Laura Ibez y
Gemma Deza
REALIZADO POR
MAKANO
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Pasin:
lo que sufro, permito, soporto, me
hacen.
MAPAS
Prlogo
De correras con la
banda de Robbers Roost
Era mejor barquero que vaquero y mejor
cocinero que ladrn de trenes, pero John
Griffith, con esa marca suya tan
distintiva de tener un ojo azul y otro
marrn, se convirti en uno de los
aclitos favoritos de la banda de Butch
1
El tiempo geolgico
incluye el presente
Este es el lugar ms hermoso del
mundo.
Hay muchos sitios as. Todo
hombre, toda mujer, lleva en la
mente y en el corazn la imagen
de un lugar ideal, conocido o
noche.
Ya son casi las 10:30 de la maana.
Pedaleo hacia la sombra de un enebro
solitario y paseo la mirada por el
terreno achicharrado por el sol que me
rodea. Poco a poco, la suave orografa
del desierto de matorrales va dejando
paso a una regin de cpulas de roca
coloreada, precipicios escondidos,
riscos ajados y castigados por la
erosin, tortuosos y profundos barrancos
y monolitos truncados: sta es una tierra
de increbles espirales rocosas de
aspecto esotrico, los hoodoo; una tierra
mgica; sta es la tierra de Abbey, de
los pramos rojos que se encuentran ms
all de donde terminan los caminos.
conversacin:
He!, qu tal? las saludo.
No estoy seguro de qu les parecer
esto de encontrarse con un completo
desconocido en mitad del desierto, y de
hecho se limitan a responderme con un
lacnico hola, as que vuelvo a la
carga con la esperanza de que se
muestren algo ms comunicativas:
No me esperaba encontrarme ni un
alma por el can
A pesar de ser sbado, este lugar
est muy apartado y es poco conocido,
hasta el punto de que ni siquiera lo he
visto desde la pista de tierra del
Robbers Roost que s aparece en el
mapa que llevo.
Ya Nosotras tambin nos hemos
chimeneas
ms
complicadas,
indicaciones para dar con los lugares
donde hay petroglifos y artefactos y un
montn de detalles sobre el equipo de
rpel necesario y la localizacin exacta
de puntos de anclaje y pozos En
definitiva, el libro te da suficiente
informacin como para tomar una
decisin paso a paso o averiguar dnde
ests exactamente, pero sin una sola
palabra superflua. Guardamos los mapas
y nos ponemos de pie para partir.
Entoces Kristi dice:
En la foto de la gua las pinturas
parecen espectros, son un poco
fantasmagricas, qu tipo de energa
crees que te encontrars cuando las
tengas delante?
Mmm musito mientras me lo
pienso. Pues la verdad es que no lo
s. En otras ocasiones, cuando he visto
petroglifos he sentido una conexin
bastante
fuerte
mientras
los
contemplaba, una sensacin buena,
estoy deseando ver stos!
Megan insiste:
Seguro que no quieres venir con
nosotras?
Pero estoy tan decidido a seguir
como ellas a salir ya.
Unos minutos antes de que se
marchen concretamos nuestro plan de
reunirnos
al
anochecer
en el
campamento de Granary Spring. Esta
noche unos amigos de unos amigos mos
las hundidas
menos as
palabras que
viento y las
mar.
grutas, / por lo
ella sentira las
la buscan / en el
profundidades del
hablando con l.
Desde las profundidades de esta
garganta hundida una decena de metros
en la tierra todava puedo ver un plido
retazo de cielo. Me encuentro en mi
camino un par de pedruscos inmensos,
del tamao de furgonetas, empotrados en
el barranco a unos 30 metros el uno del
otro: uno est suspendido a medio metro
del fondo arenoso del can, mientras
que el otro descansa sobre el mismo.
Trepo por encima de ambos. El
barranco se estrecha hasta que no queda
mucho ms de 1 metro de separacin
entre las paredes onduladas e incluso
retorcidas de roca que me conducen,
primero hacia la izquierda y despus
recta.
Llego a otro precipicio, de entre 3 y
3,5 metros, un corte apenas medio metro
menos profundo que el que acabo de
bajar hace 10 minutos pero con una
geometra completamente distinta. Hay
otro pedrusco encajado entre las
paredes a 3 metros del borde del talud y
a la altura del saliente donde comienza
la cada poco ms o menos, lo que
confiere al espacio que sigue un aspecto
un tanto claustrofbico de tnel corto.
Justo despus del borde, en vez de
ensancharse o separase para formar una
especie de cuenco en la parte ms baja,
el hueco entre las paredes queda
reducido a 1 metro escaso y as sigue
atrapado.
La ansiedad hace que la cabeza me
vaya a mil y un dolor insoportable me
sube por el brazo desde la mueca.
Estoy
frentico
y
chillo
con
desesperacin:
Mierda,
mierda,
joder! Mi desesperada mente invoca
una historia probablemente apcrifa
sobre una madre con la adrenalina
corrindole a raudales por las venas que
levant a pulso un automvil para sacar
de debajo a su beb. Apostara a que no
es verdica, pero en cualquier caso
tengo claro que en este preciso
momento, ahora que las sustancias
qumicas fluyen por mis venas en
cantidades ingentes, es cuando se me
noticias.
Una voz interior explota en un
torrente de expletivos ante semejante
pronstico:
Mierda, joder! Cmo coo ha
podido pasarme algo as?! Qu
coo!? Cmo coo te las has
ingeniado para que se te quede la mano
atrapada con una puta piedra?! Mira el
lo en el que te has metido! Tienes la
mano aplastada; se te est muriendo, to,
y lo peor es que no puedes hacer nada.
Si no consigues que vuelva a circular la
sangre por ella, en cuestin de un par de
horas ya te puedes despedir de esa
mano.
De eso nada! Voy a salir de aqu
2
El principio
Las montaas son el medio y el
fin es el hombre. El objetivo no
es llegar a la cima de las
montaas, sino mejorar al
hombre.
WALTER BONATI, escalador
italiano
nuevo en el bosque.
Cuando se terminaron los 15 minutos
de tiempo personal, todo el mundo se
haba quedado muy callado y
ensimismado en sus pensamientos hasta
que aparec yo dando grandes saltos con
mi historia de la cierva. Caus una gran
impresin en los otros muchachos y les
ense el dibujo, que no era
precisamente una obra de arte pero, en
cualquier caso, s me servira para
recordar la fascinacin que haba
sentido. Dos das ms tarde, en un
peascal a unos 3 300 metros de altitud,
supe por primera vez lo que era trepar
por rocas del tamao de una casa. Luego
nos baamos en una poza de agua helada
donde todava haba algunos retazos de
otras.
entre la bruma.
A escasos 200 metros de la pasarela
encontr, cerca de la orilla y
prcticamente enterrada en la nieve, una
seal que indicaba que haba llegado al
campamento. Sintiendo un gran alivio
por haber conseguido llegar antes de que
se hiciera de noche, despus de la
sorpresa de haber tenido que pasarme
cuatro horas arrastrndome ms que
caminando por la nieve, mont mi tienda
de dos de color verde justo al lado de la
seal, sobre una pequea calva en la
nieve por donde asomaba la tierra,
cubierta de agujas de pino heladas. Me
dolan los pies del fro, as que me sent
a la puerta de la tienda para desatarme
los cordones de las botas de montaa,
encontraba.
Durante 10 minutos avanc a toda
mquina hacia el este, adoptando una
cadenciosa rutina constante de mirar la
brjula, comprobar dnde estaba en el
mapa y echar un vistazo por encima del
hombro izquierdo para ver en qu
andaba el oso: en un par de ocasiones
redujo la distancia hasta situarse a unos
seis metros, haciendo que la tensin de
encontrar el camino, ms evitar las
partes ms profundas de nieve, ms
intentar adivinar qu se propondra el
animal para apoderarse de la mochila
llena de comida que llevaba colgada
sobre el pecho alcanzara cotas
insospechadas. Me costaba un triunfo
orientarme en circunstancias tan
extremidades humanas.
Igual que haba hecho el da anterior,
cubr a rastras los ltimos pasos hasta la
cresta de la morena y lanc una mirada
anhelante en direccin al sendero, que
desde all ya se divisaba a unos 800
metros. El oso no se daba por vencido ni
mucho menos y me segua pisando los
talones, a ratos a escasos 4 metros y
medio. Por suerte, bajar de la morena
me result algo ms fcil y a medida que
disminua el grosor de la capa de nieve
fui ganando velocidad. Al cabo de
veinte minutos, ya al borde de donde
empezaba la nieve, me detuve a esperar
a que el oso se acercara: se haba
quedado algo rezagado, a aproximados 9
metros ms arriba, pero en 10 segundos
3
Turno de noche
Se sabe que un condenado a
muerte, al final, no opone
resistencia sino que se abandona
con pasividad, casi agradecido, a
los instrumentos de tortura de su
verdugo.
EDWARD ABBEY, Desert
Solitaire
adecuado.
Hago una pausa para que me
descansen un poco la mano y el brazo
izquierdo y sacudir el polvillo de roca
que se ha ido acumulando sobre mi
antebrazo derecho. No detecto el menor
cambio de posicin en la condenada
piedra, pero me vuelvo a emplear con
ella haciendo otro intento sobre el punto
de la concavidad que me he marcado
antes como objetivo. Tic, tic, tic tic,
tic, tic. El ruido de la navaja
golpeteando la piedra resulta pattico
por lo prcticamente imperceptible
pero, aun as, retumba por todo el can.
La fuerza con la que puedo golpear tiene
un lmite porque, si me paso, la navaja
Viernes.
Y eso, siendo optimista. Lo ms
probable, teniendo en cuenta los
movimientos habituales de los guardas
forestales, es que no me encuentren hasta
el domingo.
Domingo: dentro de una semana.
Sin agua, la gente se muere mucho
antes de que pase una semana; me
sorprendera mucho si aguanto ms all
del martes por la maana. Es imposible
que
llegue
hasta
el
viernes.
Completamente imposible.
Y, para cuando sea domingo, ya
estar hecho una momia.
4
Cmo convertirse en
ingeniero retirado en tan
slo cinco aos
Juego profundo: caso en el que lo
que uno puede llegar a ganar con
la apuesta jams podr igualar la
enorme magnitud de lo que se
arriesga a perder.
JOE SIMPSON, La vertiente
oscura
una
de
cada
tres
caravanas
proporcionadas por el gobierno en las
que viven. La mayora de los jvenes
que all viven no se molestan con la
agricultura de subsistencia, a la que, a
juzgar por las parcelas llenas de maleza
justo delante de sus casas, s se
dedicaron sus padres y sus abuelos.
Ms all del pueblecito y la cascada
Navajo, la de menos altura pero la ms
ancha de las cuatro, est la cascada
Havasupai, a la que llegamos a primera
hora de la tarde, y un poco ms all se
encuentra la zona de acampada. La
Havasupai, la cascada ms emblemtica,
vierte sus luminosas aguas por un teln
de roca travertino color granate de unos
45 metros hasta una clida poza baada
como sonados.
No me puedo creer la suerte que
hemos tenido con ese ltimo lanzamiento
musit, aturdido todava de pensar
cmo haba sido cuestin de segundos y
centmetros que hubiese salvado la vida.
Y yo no me creo que te pusieras
en plan No, no necesito ayuda Me
estoy ahogando, pero, por lo dems,
todo bien brome Chad.
Alc la vista y sonre, y al final
todos soltamos una carcajada.
Ya estis? pregunt. El
metabolismo me est pidiendo a gritos
que me mueva un poco.
S, ya estamos contest JeanMarc. Ponte los zapatos.
la montaa.
divertido
para
ser
divertido.
Exactamente.
Durante
mis
dos
siguientes
temporadas de cuatromiles en invierno
fui haciendo ascensiones cada vez ms
difciles; eso s, haba dejado los picos
ms tcnicos y remotos para la segunda
fase del proyecto. Con el tiempo mejor
la eficacia de mi tcnica de escalada y
acampada y los equipos, tambin
progres en lo que a forma fsica y
aclimatacin se refiere, y todo eso me
permiti intentar las rutas ms largas y
agotadoras. Siempre estableca un
itinerario, informaba a mis padres o a
mis compaeros de casa de cundo
pensaba estar de vuelta y elega rutas o
adaptaba la programacin del ascenso
en el Sneffels.
A medida que mi pasin y
dedicacin a los parajes naturales
aumentaba, el tiempo que pasaba en la
montaa fue despertando en m un
extrao deseo de mudarme de vuelta a
Colorado y seguir con mi proyecto
instalado en las tierras altas. La verdad
es que estaba harto de trabajar para una
gran multinacional. Y entonces, en la
primavera de 2002, me surgi la
oportunidad de escalar el monte Denali
con un grupo de superatletas, pero, en
vista de que no dispona de los das de
vacaciones necesarios para el viaje, no
me quedaba otro remedio que elegir
entre seguir mi pasin o conservar mi
trabajo en Intel. Al final ni siquiera tuve
5
Segundo da:
Alternativas que
fracasan
Amanecer en el desierto.
Madruga, eleva tu canto
con el soplo de vida que brota
de la reluciente piedra.
pecho. Perfecto.
A pesar de mi optimismo, una
corriente subterrnea ms tenebrosa
discurre paralela a mis elucubraciones.
Por ms que mi mente est analizando la
posibilidad de la amputacin, la
operacin es todava nicamente una
posibilidad terica y estoy pensando:
Si me corto el brazo, cmo voy a
parar la hemorragia? y Si me corto el
brazo, cmo me lo voy a vendar y
ponerlo en un cabestrillo? Adems,
como la navaja no es lo suficientemente
afilada, el resto del plan no es ms que
un puro ejercicio mental. Hasta que no
encuentre la manera de cortar el hueso,
la amputacin no es una opcin a efectos
prcticos, sino ms bien una alternativa
aspecto amenazante.
Odio todo esto!, exploto
enfatizando
cada
palabra
al
acompaarla de un golpe de la mano
izquierda contra la piedra, al tiempo que
se me llenan los ojos de lgrimas.
El eco de mi angustia reverbera por
el can y luego se desvanece en medio
de la calma somnolienta de la tarde. Y
entonces se oye otra voz, esta vez una
que habla en el interior de mi cabeza y
que con toda tranquilidad dice:
Esta piedra simplemente ha hecho
lo que tena que hacer. Para eso estaba
aqu. Las piedras caen, sa es su
naturaleza, y sta ha hecho lo ms
natural que caba esperar de ella. Estaba
empotrada ah arriba, pero te estaba
ms por lo menos.
Teniendo en cuenta lo que se ha
deteriorado mi estado en las ltimas
veinticuatro horas, me sorprendera que
pudiera resistir ms all del martes.
Tengo el profundo convencimiento
de estar diciendo adis a mi familia y,
por mucho que pueda estar sufriendo
aqu abajo, s que no es nada
comparado con la agona que sentirn
ellos. Despus de una larga pausa
contino hablando a trompicones,
intentando explicarles, disculparme
por el infierno que me consta van a tener
que pasar por culpa de mi desaparicin
y muerte:
Lo siento.
6
Rapsodia de invierno
Me acab cansando de la gente
que no se crea capaz de ser nada
en la vida, de quienes se
limitaban a hacer lo que tenan
que hacer y nunca se atrevan a
nada. De ellos aprend que,
cuando un da se echa a perder,
salga de sta.
Tena que clavar el piolet para poder
pararme: tom todo el impulso que pude
y traslad todo el peso del tronco al
piolet, machacndolo con un horripilante
chirrido contra la roca. Cerr los ojos
con la misma fuerza con la que me
agarraba al piolet. No quera ni
imaginarme cmo iba a despearme por
aquella roca y a ser pasto de la
gravedad como si fuera un mueco de
trapo.
El piolet rechin de nuevo: se qued
atascado en algo y yo me detuve. Me di
cuenta de que la cada se haba detenido,
cosa que me dej momentneamente
paralizado. Abr los ojos conteniendo la
respiracin, seguro de que el
en esqu.
Cuando llegu a Aspen, en vez de ir
al hospital me trat yo mismo la
congelacin: me tom cuatro pastillas
analgsicas especiales para dolores
severos y me prepar para el siguiente
paso del procedimiento, es decir, esper
media hora a que las pastillas surtieran
efecto, llen la pila de la cocina de agua
caliente y vi lo rpido que tena que
salir el chorro de agua del grifo para
que la temperatura del agua no variara
en la pila. Sumerg las dos manos en la
pila durante una hora y, a solas, vea
cmo las puntas de los dedos cambiaban
de color: primero se pusieron blancas,
luego negras, rojas, naranjas y verdes.
hecho
de
haber
salido
providencialmente indemne de todos los
accidentes me haban vuelto bastante
arrogante frente a los riesgos reales de
avalancha. Nos separamos de acuerdo
con el procedimiento habitual de
exponer a un esquiador a la vez a un
deslizamiento potencial del terreno.
Llegu al punto ms alto de la lnea de
descenso que tena una menor gradacin:
empezaba con 38 grados, para
suavizarse en 32 por encima de una
arboleda de veinte enormes pinos.
Voy a esquiar por aqu, te
vienes? le dije a Chadwick, que
estaba cerca y me oa bien sin necesidad
de gritar. Mark estaba a casi 1 kilmetro
de nosotros.
Mientras me alineaba junto a
Chadwick en el visor y preparaba el
cable disparador, me di cuenta de que
una nubecilla de denso aire se
arremolinaba sobre su cabeza. Despus,
mis odos registraron de nuevo aquel
sonido de motor y, en la misma fraccin
de segundo en la que me di cuenta de
que tanto el rugido como el remolino
estaban relacionados, algo me golpe
con fuerza por detrs del hombro
derecho a la vez que me levantaba del
suelo y me arrastraba a la pendiente por
el costado izquierdo. Todo se fundi a
negro.
Como si me hubiera embestido un
camin, la velocidad pas de cero a 50
voces.
Todava no; acrcate ms!
Vale, ya voy!
Ah, ah! treinta y ocho! Mi
sonda haba recibido la frecuencia de
Chadwick: estaba a treinta y ocho
metros. Ahora cmbialo a bsqueda!
Tenamos un margen disponible de
treinta y ocho metros y una extensin de
unos 600 metros de ancho. Si
confibamos en nuestros transmisores y
en no solaparnos, podramos cubrir toda
la extensin devastada por la avalancha
en cinco viajes pendiente arriba y
pendiente abajo. Pero el tiempo
apremiaba demasiado para seguir esa
tctica. Piensa, Aron, piensa.
Chadwick! T y yo estbamos
juntos all arriba. Fjate dnde hemos
acabado. Mark debe de estar en la
misma lnea. Est por encima o por
debajo de nosotros?
Chadwick no respondi. Corr de
nuevo hacia el lmite de amontonamiento
de los escombros y volv a escudriar la
parte baja de la montaa. La mayora de
gente que sobrevive a una avalancha es
rescatada en los primeros 15 minutos; en
media hora, la posibilidad de
reanimacin es prcticamente nula. No
tenamos tiempo de ir arriba y abajo.
Tenamos que elegir.
Aqu no hay nada, tiene que estar
arriba! Vamos! grit sin estar seguro;
No respira!
Chadwick le hizo el boca a boca y
logr reanimarlo. Logr quitarle la bota
izquierda de la fijacin del esqu
telemark y de la tira. Cinco minutos ms
tarde logramos desenterrarle la pierna
derecha.
Socorro! Socorro! gritbamos
a la vez en direccin a nuestros amigos,
que estaban ya donde empezaban los
escombros. Habamos hecho todo lo que
habamos podido, y necesitbamos
provisiones para lograr que Mark
recuperara su temperatura. Agotado por
el esfuerzo realizado durante aquella
media hora de rescate desesperado, y
desconocedor de las precauciones que
tomaron
nuestros
amigos
para
asegurarse de que una segunda
avalancha no se los llevara por delante,
exclam exasperado:
Por qu demonios tardan tanto?
Movimos a Mark sobre su costado
izquierdo y lo sentamos. Se tambale
hacia atrs y eruct el aire que
Chadwick le haba insuflado: el boca a
boca haba tardado en surtir efecto
porque la cabeza de Mark estaba en una
posicin adelantada. Lo tapamos con el
cuerpo mientras le quitbamos la
mochila y la vacibamos en busca de
guantes y ropa. Estremecidos tras el
subidn de adrenalina, Chadwick y yo
abrazamos a Mark antes de abrazarnos
nosotros. El hedor del miedo,
7
Tercer da: Aguanta
todo lo que puedas
La adversidad tiene el don de
despertar talentos que en la
prosperidad
hubiesen
permanecido dormidos.
HORACIO
puntos.
Me paro y suspiro. La verdad es que
mi broma no tena nada de gracia, pero
me alegraba saber que no haba perdido
el sentido del humor. Creo que esto debe
de ser una prueba, una especie de
leccin. Y que, cuando sepa de qu
leccin se trata, entonces ser libre. Eso
debe de ser, no? A ver, qu se supone
que puedo aprender de esto? Qu
puedo sacar? En ese momento pienso en
lo que mi amigo de Aspen Rob Cooper y
yo hemos comentado muchas veces. Rob
no es demasiado explcito cuando se
pone filosfico, pero puede dejarte a
cuadros con un breve comentario.
Nuestra rutina sola ser que yo le
contaba a Rob alguna aventura reciente y
mismo.
Como era de esperar, no pasa nada.
Tampoco pasa nada de nada en los
siguientes treinta segundos, y me canso
de esperar. Quiz la epifana que
acababa de vivir no era ms que un
pasatiempo para relajar mi cansada
conciencia. Ya s que no estoy aqu
porque tengo que experimentar alguna
revelacin divina: estoy atrapado aqu
porque tengo una piedra gigante sobre
mi mano derecha. Cunto debe de
pesar? Seguro que pesa ms que yo; ayer
pude moverla un poco cuando estaba
intentando levantarla. Seguro que no
llega a los 100 kilos, ya que de lo
contrario no habra podido moverla ni
un milmetro. Con un sistema mecnico
8
Me voy a Utah
La gente dice que buscamos el
sentido de la vida. No estoy de
acuerdo. Yo creo que lo que
buscamos es la experiencia de
estar vivos, para que as nuestras
experiencias vitales en el plano
puramente
fsico
tengan
Brad.
Regresamos al lugar en el que
habamos dejado los esques y la tabla
para bajar, primero uno y despus el
otro, por el escarpado flanco de la
cresta que llevaba a la cuenca
resiguiendo las huellas que habamos
dejado en el ascenso. La nieve reciente
se haba mezclado bien con las capas
anteriores y pensamos que sera buena
idea ir a ver qu tal estaba la cuenca.
Excavamos un hoyo y decidimos que no
esquiaramos por un barranco formado
por dos peas situadas en el centro de la
cuenca. Lo ms seguro era ir por la parte
superior de la cuenca. Aquella maana,
mientras las nubes se disipaban,
silln.
Cuando llevaba 12 kilmetros ya era
capaz de hacer todo tipo de piruetas sin
tener que soltarme de los calapis. Y,
como suele suceder, cuando ms seguro
me senta con la bici, me la pegu y
recib un bao de humildad: baj hacia
una trampa de arena con el peso
demasiado adelantado y en un cerrar y
abrir de ojos me vi en el suelo, boca
abajo, con la nariz enterrada en la arena.
Tena la bici encima de las piernas y el
manillar a la altura de la cabeza. Me
retorc para liberarme, pero tena las
piernas cruzadas detrs del trasero y el
pie derecho todava enganchado en el
calapi de la bici. Me dio la risa y
9
Cuarto da: Sin comida
ni agua
Yo crea en creer. Cuando no
queda esperanza, cuando todo
est en tu contra, no hay que
pensar en la catstrofe que se
avecina. Y qu otra alternativa
queda? Somos muchsimo ms
para descansar.
Seguimos con la ruta y yo con el
bucle infinito de los peascos. Dos
horas ms tarde salimos de aquel campo
lleno de cantos rodados y le expliqu a
Theresa mis desvaros. Me dijo que era
normal tener alucinaciones por falta de
sueo cuando se segua un recorrido tan
extremo. Veinticuatro horas ms tarde
llegaba a mi pick-up, que estaba a unos
50 kilmetros, y le puse fin a aquel
delirio yndome a dormir.
Besos.
Qu pasada. Me siento genial. Me
pregunto si esto ser lo mismo que ver tu
vida entera pasar en cinco minutos, pero
con ms tiempo. Por qu ser que el
cerebro humano reacciona ante la muerte
mediante la reflexin? Siempre haba
pensado que la gente vea imgenes de
su familia a modo de despedida, pero si
pienso en lo que stas me han aportado
energa positiva, sonrisas, felicidad
me doy cuenta de que quiz haya un
motivo ms profundo. Quiz lo de ver la
vida pasar por delante de tus ojos forme
parte del instinto de supervivencia, sea
un mecanismo que forme parte de
nuestro subconsciente y sea el ltimo
mostrrnoslos
y
lograr
que
reaccionemos en esos momentos
crticos. Quin sabe. Lo que a m me
importa es la felicidad que me han
trado. Estoy animado y eso es lo que
importa.
como acabe.
10
Primeros indicios del
rescate
Dum spiro, spero. (Si respiro,
espero.)
Fragmento del lema oficial de
Carolina del Sur.
Se puede interpretar como:
Mientras hay vida, hay
esperanza.
Oye, t te acuerdas de qu
camioneta tena Aron?
Pues no; no recuerdo que nos lo
dijera contest Megan, todava
cansada por el esfuerzo realizado el da
anterior en el Blue John.
Esta pick-up Toyota podra ser la
suya, tiene esques y una bici. Y la
matrcula es de Colorado. Seguro que es
la suya dijo Kristi.
Ya estar en el can sugiri
Megan.
S; ya son las once y media.
Seguro que ha salido hace rato aadi
Kristi.
Tendramos que dejarle una nota
en el parabrisas con nuestros correos,
llegar.
Vaya. Oye, antes de quedarnos sin
cobertura tendramos que ver si nos ha
dejado algn mensaje. Vuelve al bache,
all tenamos cuatro barritas de
cobertura.
Brad dio la vuelta para recuperar la
seal. La estructura de madera que
cubra la parte de carga de la camioneta
se inclin ligeramente hacia el lado en
el que estaba Leah al girar hacia la
derecha.
Vale, aparca aqu, en esta
pendiente. Leah escuch los tres
mensajes que le haban dejado en el
telfono. Ninguno era mo. Qu raro
que no llame. A ti te asegur que
vendra?
Bueno, probablemente no me
asegur nada. Le dije lo de la fiesta, que
nosotros iramos y tal y que ira gente de
Aspen. Pareca interesado y dijo que
llamara para que le dijera cmo llegar
contest Brad.
Quizs al final se lo pens.
Esperamos un rato a ver si nos llama?
Me parece que no tena demasiado
claro qu hara: quera escalar, caminar
e irse de la ciudad una buena
temporadita. No le dije que me jurara
por su madre que iba a venir, la verdad.
Creo que tendramos que ir tirando para
encontrar ese cartel. Uno de los amigos
de Brad les haba asegurado que dejara
un papel enganchado en el cartel de
instante.
Qu hora es? Si se le hace tarde
estar tan cansado que lo nico que
querr ser meterse en la cama. A
Eliott le preocupaba tener que calmar un
poco los nimos si yo llegaba y quera
dormir. Le va a costar muchsimo
dormir con todo este fiestn. Quizs
haya cado en eso y se haya quedado a
dormir por ah.
Eso sera mejor que tener que
echar a toda la pea. Yo creo que la
celebracin va para largo
Brian estaba en lo cierto: la cosa fue
para largo. Aunque l se fuera a dormir
sobre las doce, cuando Joe y Leona
regresaron a casa despus de acompaar
a los ltimos invitados a la parada del
antes de colgar.
Lo que el operador no le dijo fue que
no llevaba desaparecido el tiempo
suficiente para que empezaran a
buscarme.
11
Quinto da: El santuario
de los trances
Para saber si una decisin es la
correcta hay que preguntarse:
Volvera a tomar la misma
decisin? No podemos ver ms
all de las elecciones que no
entendemos.
EL ORCULO, Matrix:
Revolutions
cuadridimensional en mi cabeza. Mi
existencia ha dejado de desarrollarse en
un continuo espaciotemporal. Minuto a
minuto, la privacin de sueo
desmantela una funcin cerebral tras
otra. Teniendo en cuenta mi deteriorado
estado, si logro ver amanecer el
mircoles ser todo un triunfo. He
rebasado mis primeras predicciones de
que probablemente no vivira para ver
la tarde del martes. Quiz vuelva a
sobrevivirme otra vez.
Slo te queda esperar.
Decido ponerme de nuevo las mallas
de lycra por debajo de los finos
pantalones cortos de nailon de color
beis. Hacerlo me ocupa cerca de diez
ojos.
Es
curioso
que,
independientemente de cul sea la
bebida, siempre se me revele con una
forma surgida de mi pasado y flotando
en el mismo sitio, a un tiempo al alcance
y fuera del alcance de mi mano. No
estoy seguro de si dejar volar mi
imaginacin me ayuda a sobrellevar la
sed o la intensifica. Es el mismo debate
que he sostenido conmigo mismo con
relacin a mis ltimos avituallamientos,
las ltimas provisiones de agua, el tema
de beberme mi propia orina y, en
general,
todas
las
decisiones
importantes que he adoptado desde que
qued confinado aqu: Me sentar
bien o empeorar las cosas? He
de mi cabeza.
Otra parte de mi ritual matutino es la
actualizacin diaria que grabo con la
videocmara. Justo antes de las 9:00 h
saco la pequea cmara de mi mochila.
No estoy seguro de por qu no la dejo
fuera. Quiz sea otra estrategia para
mantenerme ocupado soltando y
ensartando la hombrera derecha a travs
de la hebilla.
Me pregunto si mis padres estarn
participando en mi hipottica bsqueda.
Para poder seguir mis pasos, la nica
opcin viable es que las autoridades
obtengan un extracto de las operaciones
que he realizado con mis tarjetas de
crdito y dbito, cosa que las conducira
periodo
sabtico
La
semana
transcurrida desde que me afeit por
ltima vez ha hecho que luzca un
bigotillo de unos cinco milmetros de
longitud. Me froto con la mano la
barbilla y el cuello y me pregunto cmo
de larga tendr la barba cuando me
encuentren (seguir creciendo un par de
das despus de morir); medir como
mnimo diez milmetros.
12
Tormenta de fuego
No basta saber, se debe tambin
aplicar.
No es suficiente querer, se debe
tambin hacer.
JOHANN WOLFGANG VON
GOETHE
Brion respondi:
Creemos que le ha sucedido algo.
S. Mi hijo hace cosas muy
peligrosas y muchas veces las hace en
solitario. Pero no faltara al trabajo sin
avisar, si pudiera evitarlo. Debe de
haber ocurrido algo terrible. Tenemos
que averiguar dnde est. Qu has
hecho hasta ahora? Has hablado con
sus compaeros de piso?
Brion qued impresionado por la
reaccin de mi madre; al instante se
sinti aliviado de la carga psicolgica
que recaa sobre l. Haba encontrado el
aliado que necesitaba para continuar
avanzando
en su bsqueda
y
rpidamente puso a mi madre en
correo
electrnico
a
alguien
explicndole qu pensaba hacer.
A Michelle se le ilumin la cara.
Comprobmoslo. Usa una cuenta
de correo web, como Yahoo!, Hotmail o
algo por el estilo?
Tiene una direccin de Hotmail.
Por qu?
Sabes la contrasea?
No, no tengo ni idea.
Conectmonos a Internet y veamos
qu podemos hacer.
Michelle saba que, como mnimo,
podan
intentar
reconfigurar
mi
contrasea, acceder a mi correo y ver de
qu haba hablado con mis amigos
recientemente. En la pgina de inicio de
sesin de la cuenta, Michelle seal el
desaparicin
y
que
necesitaba
informacin ms precisa acerca de
adnde tena previsto ir el pasado fin de
semana. Brion se interes especialmente
por
averiguar
cualquier
cosa
relacionada con mi expedicin a Alaska.
Necesito tu ayuda. Segn me han
informado, supuestamente Aron deba
reunirse con su equipo de Denali para
hacer una escalada. Puedes comprobar
en su habitacin si hay algo que indique
adnde pueden haber ido? solicit a
Elliott.
Claro, por supuesto.
A Elliott no le corra ninguna prisa
limpiar su cuarto, hacer la mudanza ni
desempaquetar sus trastos. Careca de
u organismos no gubernamentales.)
Elliott entenda su postura, pero
prefiri dejar el asunto abierto para
poder telefonear ms tarde con alguien
de ms autoridad. Les agradeci a los
guardas que hubieran atendido su
solicitud y colg, debatindose entre si
deba solicitar a la polica de Aspen que
telefoneara a la comisara de Talkeetma.
Sin embargo, decidi consultarlo antes
con Brion. El tiempo pasaba, si bien en
la hora que haba transcurrido desde que
haban hablado Brion haba hallado un
filn.
No te molestes en seguir
buscando. He encontrado la carpeta de
Aron en su taquilla. No s cmo no se
Utah el 24 o el 25 de abril,
posiblemente para reunirse con
alguno de vosotros con vistas a
preparar el Denali. Si alguien
dispone de informacin sobre
Aron, os agradecera que me
respondierais a esta direccin. O
bien llamadme a Ute. Hemos
avisado a la polica y a su
familia, ya que Aron suele ser
muy cumplidor, siempre llega
puntual y mantiene el contacto
con nosotros y sus amigos.
Saludos,
Brion After
A aquellas alturas del da, pese a haber
se llama Adam.
Qu les has explicado?
Elliott es una persona meticulosa y
quera saber todo lo que los dems
implicados saban.
Brion le indic toda la informacin
que haba facilitado a Adam hasta ese
momento. Elliott se sent ante el
escritorio de Brion, revuelto de papeles,
y medit cmo proceder a continuacin,
mientras Brion recorra la tienda para
comprobar cmo iba el negocio, dada la
escasez de personal.
Brion:
Hola de nuevo. He comprobado
mi cuenta de correo electrnico
en casa y la ltima vez que Aron
me escribi fue el 23 de abril
para informarme de su excursin
a Quandary. No mencionaba
ningn plan para los fines de
semana siguientes, pero a
principio de este ao me haba
indicado los siguientes caones
que le gustara escalar en Utah:
Caones:
Black Box de San Rafael
Ro Virgin en Zion
Caones de Cable/Seger (zona de
San Rafael)
y cualquier otra chimenea tcnica
listada como favorita en los
libros de Kelsey (tienes el libro
sobre el anticlinal de San Rafael?
Es fantstico).
Tienes razn, Brion. Quiz se le
haya pasado por alto su horario
laboral para esta semana y ojal
se presente maana por la noche
en Georgetown, pero no me
parece propio de l olvidarse de
ir a trabajar ni cortar por lo sano
la comunicacin con todo el
mundo.
Gracias de nuevo por contactar
con nosotros,
Jason
Brion regres a la oficina y discuti con
Elliott a quin deban telefonear a
continuacin.
Hasta donde yo s coment
Brion, Brad Yule fue la ltima
persona que vio a Aron, pero no s
cmo contactar con l.
Ests de broma?! exclam
Elliott. Yo tengo su nmero de mvil
aqu mismo.
Se extrajo el telfono del bolsillo,
consult el nmero de Brad y lo llam a
una de las lneas de su oficina. Lo
encontr en el aeropuerto de Denver, a
hacia Utah.
De: Daniel Hadlich
Enviado el: mircoles 30 de
abril de 2003 a las 12:27 h
Para: Brion After, Jason
Halladay
Asunto: RE: Aron Ralston
desaparecido
Brion y Jason:
No creo que Aron se encaminara
a Utah el pasado fin de semana.
Os incluyo a continuacin la
informacin que recib de Aron
el 20 de abril por correo
electrnico:
>Maana me marcho a las aguas
termales de Conundrum y a
ascender el
>Castleabra. Quiz incluso me
d un chapuzn en los lagos!
>El viernes escalaremos el paso
de Cristo con Janet, el domingo
vamos a
>bajar a esquiar cerca de Ajax
para la temporada y el mircoles
que viene
>vuelta a empezar con una
escapadita a esquiar al monte
Sopris, ascender el
>paso de Holy Cross el
viernes/sbado y quin sabe qu
a partir de ah!
>Aunque haya llegado la
primavera, me niego a ir de
excursionismo cuando
>an queda tiempo para esquiar
o escalar con nieve!
>
>Saludos,
>Aron
Eso significa que Aron debi de
estar en el monte Sopris entre el
mircoles y el jueves (23/4
24/4) y en el paso de Holy Cross
el viernes y sbado (25/426/4).
Alguien ha buscado su vehculo
por esas zonas?
Por favor, poneos en contacto
conmigo lo antes posible en
cuanto tengis noticias suyas. Y,
si necesitis refuerzos para
cmo
progresaba
la
situacin.
Sencillamente, no era su estilo.
En dos ocasiones intent telefonear a
mi padre a Nueva York para informarle
de lo que estaba ocurriendo y pedirle su
opinin, pero mi padre tena el mvil
apagado y no estaba en su habitacin de
hotel, de manera que mi madre dej el
recado de que la telefoneara
puntualmente en cuanto regresara esa
misma noche. Sola, con la informacin
que le haba facilitado Jason, mi madre
anot una breve lista de grupos con los
que contactar: la polica de Aspen, Brad
Yule, la patrulla de trfico de Utah y el
Parque Nacional Zion.
Antes de tener tiempo de telefonear
al primer nombre de la lista, le son el
barriga.
Las circunstancias no eran mucho
ms halageas para mi madre. Aquella
llamada a la iglesia le represent el
mayor desafo emocional del da. Mi
madre, tenaz por naturaleza, no estaba
acostumbrada a pedir ayuda para s
misma. Pero cuando una buena amiga,
Ann Fort, la telefone minutos ms tarde
para informarle de que llegara a casa
alrededor de las siete de la tarde, se
alegr de haber efectuado aquella
llamada.
A las 17:23 h, empezando por la
polica de Aspen, mi madre comenz a
telefonear a los nombres que haba
anotado en su bloc de notas amarillo.
Relat la misma historia media docena
13
Sexto da: Iluminacin y
euforia
nicamente cuando lo perdemos
todo somos libres para actuar.
BRAD PITT en el papel de Tyler
Durden en El club de la lucha
Parca.
Estaba pensando Es jueves,
alrededor de las nueve de la maana.
Me estoy adentrando en el momento en
que existe ms probabilidad de que
de que alguien me encuentre mientras
an estoy vivo.
Casi son buenas noticias, me
aliento. Ahora bien, si tenemos en cuenta
que he establecido la ventana de rescate
entre cualquier momento a partir de
ahora y el domingo, considero que no
existe causa para esperar ayuda
inminente. Mis posibilidades han
aumentado
de
ridculamente
improbable a quiz totalmente
improbable. Prefiero no regodearme en
Es basura.
Deshazte de l, Aron. Es basura.
Me balanceo adelante y atrs,
golpendome, de lado a lado, de arriba
abajo y de abajo arriba. Grito de pura
impotencia, chillo de dolor a medida
que aporreo mi cuerpo contra las
paredes del can, perdiendo hasta el
ltimo atisbo de esa compostura que
tanto haba batallado por retener.
Entonces noto que el brazo se me dobla
de un modo no natural bajo la garra del
pedrusco encajado, que se niega a
moverse. Una epifana se abate sobre m
con la esplndida gloria de una
intervencin sagrada y al instante
detengo mi ataque: si me retuerzo el
de mi multiusos, saltndome el
procedimiento del torniquete que he
ensayado, y coloco la punta entre dos
venas azules. Me clavo el cuchillo en la
mueca y observo cmo mi piel cede
hacia dentro, hasta que por fin se perfora
y se hunde bajo la empuadura. Rabio
de dolor, pero soy consciente de que mi
labor apenas ha dado comienzo. Echo un
vistazo a mi reloj: son las 10:32 h. Yo
mismo me motivo:
Venga, Aron, all vamos. Ya casi
lo has conseguido.
Olvido mis declaraciones previas de
que amputarme el brazo no es ms que
un acto lento de suicidio y me dejo
llevar por una nueva oleada de emocin.
Consciente de que mi nica alternativa
Es la sensacin ms sobrecogedora
que he experimentado nunca en la vida.
aqu.
14
Rumbo a casa: Hemos
localizado su vehculo
Hay que creer para imaginar.
MARK TWIGHT, dedicatoria en
mi ejemplar de su libro Besa o
mata: confesiones de un
escalador en serie
brazo izquierdo.
Esperaba a que el personal de
gestin del territorio se reincorporara a
sus puestos de trabajo por la maana.
Tal como me ocurre a m, a mi madre no
se le da bien esperar. Rez, pero incluso
despus de haber pronunciado docenas
de oraciones se senta inquieta, alterada.
Necesitaba ocuparse en algo, de manera
que en torno a las seis menos cuarto de
la madrugada se despert de su vigilia y
empez a revisar el listado de
organismos federales y estatales que
administran los territorios pblicos en
las regiones centrales y meridionales de
Utah. Telefone a media docena de
grupos en aquellas primeras horas de la
maana del jueves. Primero llam a la
un hombre desaparecido de
Aspen, Colorado, con rumbo a
Utah para realizar una excursin
por la naturaleza. Fue visto por
ltima vez el 24 de abril, el
pasado jueves, en Aspen. Alert
de sus planes de hacer una
excursin por algn punto de
Utah donde hiciera suficiente
calor como para caminar.
Conduce un Toyota Tacoma
granate de 1998 con matrcula de
Nuevo Mxico, ocho, cuatro,
seis, Madrid, Madrid, Yakarta,
repito: Nuevo Mxico, ocho,
cuatro, seis, Madrid, Madrid,
Yakarta.
Lleva
baca
para el da.
Tras escuchar sus explicaciones, la
cajera solicit al director del banco
aprobacin para poder acceder al
extracto de mi tarjeta de dbito. El
reducido grupo se asom a la pantalla
del ordenador mientras la cajera
introduca los dgitos correspondientes a
mi cuenta.
Esto indica que la ltima
transaccin se efectu el da 25 en
Moab, en un supermercado City Market.
Por qu cantidad?
Veintids dlares y treinta
centavos Y no solicit dinero en
efectivo.
(Me haba aprovisionado de agua,
zumo, fruta, barritas energticas y
burritos.)
Y antes de eso?
Veintinueve dlares con veintids
centavos en Clarks, aqu, en la ciudad,
el da 24.
(Haba comprado comestibles la
noche del 23 antes de regresar a casa y
preparar la mochila para mi jornada de
esqu con Brad y las posteriores
vacaciones
en
Utah,
pero
el
supermercado no haba procesado la
transaccin
hasta
despus
de
medianoche.)
Eso es todo? No hay registrado
ningn movimiento despus del da 25?
Con qu frecuencia se actualizan estos
historiales?
apasionado, posiblemente se
dirigiera a Utah para acampar y
hacer una excursin a pie o a
esquiar.
Tras aadir la descripcin de mi
camioneta y la matrcula correcta, mi
madre ultim el pster indicando el
nmero de telfono de la polica de
Aspen. Ella y Ann se hallaban frente a la
fotocopiadora cuando son el timbre.
Quin puede ser? pregunt mi
madre en voz alta.
Sin atravesar la estancia para
asomarse a la ventana, baj al piso de
abajo y abri la puerta. Era Sue Doss,
otra amiga de la congregacin. Sue y su
de mi madre.
La voz al otro lado del hilo
corresponda al guarda forestal al
mando de la situacin, Steve Swanke,
del parque nacional de Canyonlands.
Era la primera vez que mi madre
hablaba con el guarda forestal Steve,
tal como l se present (haca menos de
una hora que se haba visto involucrado
en la investigacin), pero recibi sus
excelentes noticias con un sobresalto de
alegra.
Seora Ralston, hemos localizado
el vehculo de su hijo anunci Steve
arrastrando las palabras en un tono
amistoso aprendido tras largos aos de
interactuar con el pblico.
Mi madre ahog un grito y
aire.
Pese a haber tenido que efectuar un
vuelo de dos horas de duracin desde
Salt Lake, el
helicptero del
Departamento de Seguridad Pblica de
Terry fue el primero en llegar al can
de la Herradura, donde aterriz en el
polvoriento estacionamiento. El sargento
Mitch Vetere mostr a Terry mi
camioneta granate y ambos revisaron
parte del equipo de excursionismo y
acampada que haba en la cama
habilitada en mi pick-up. Tras una breve
conversacin, los guardas forestales de
la Oficina de Gestin de Tierras y del
Servicio de Parques Nacionales se
reunieron en el inicio de la senda y
Terry y ambos agentes decidieron que el
15
Cita con el destino
Fue como estar en la cama con la
muerte.
BARRY BLANCHARD acerca del
intento de su equipo de escalar
los 4.600 metros de la cara Rupal
del Nanga Parbat, en Pakistn
abandonarla. No la necesitar ms
despus de esto, y en estos momentos me
importa un bledo dejar basura en la
naturaleza.
Mi proceder habitual sera reforzar
el mosquetn de anclaje con un segundo
mosquetn contrapeado, oponiendo las
aberturas, pero ahora no me inquieta que
ste pueda abrirse o fallar de manera
accidental. No hay nada a lo que el
mosquetn pueda engancharse y es de
buena calidad, tanto que podra colgar
dos pick-ups de l. La cinta plana no
tiene ni un mes de antigedad y su
resistencia
tambin
me
parece
satisfactoria: an no est machacada ni
rozada y el sol no la ha desgastado
mis esperanzas.
A los nueve kilmetros y medio giro
a la izquierda y me encamino hacia una
hornacina colosal que debe de medir
varios centenares de metros de anchura
y ms o menos lo mismo de altura y que
sobresale unos buenos treinta metros en
su punto ms hondo. Cerca de ese techo
titnico, la vaguada dobla a la derecha y
una visin inesperada desactiva mi
sistema motor como si se hubiera
producido un cortocircuito en la caja de
fusibles de mi cabeza. All, a unos 70
metros por delante de m, caminan tres
montaistas, uno de ellos ms bajito que
los otros dos. Personas! No doy
crdito. Hasta este momento no estaba
grito ms fuerte:
SOCORRO!
QUE ALGUIEN
ME
fotografas, emprendimos el
camino de regreso cuando, de
sbito, omos un ruido detrs de
nosotros, al que sigui una voz
que gritaba: Socorro! Que
alguien me ayude!.
Monique y yo pensamos
inmediatamente
que
podra
tratarse
de
la
persona
desaparecida. No lo encontramos
nosotros, fue l quien nos
encontr! Algo inestable, pero
con bastante rapidez, se acerc a
nosotros y vimos que tena la
parte derecha del cuerpo cubierta
de sangre.
Su brazo o, mejor dicho, lo
que quedaba de l, colgaba de un
cabestrillo
improvisado.
Corrimos hacia l y nos anunci
con voz clara: Hola, mi nombre
es Aron. El sbado una roca se
desprendi sobre m. Llevo
atrapado cinco das, sin comida
ni agua. Me he amputado el brazo
hace cuatro horas y necesito
atencin mdica. Necesito un
helicptero.
Decidimos que mi mujer y
nuestro hijo se nos adelantaran
para solicitar ayuda, mientras yo
permaneca con Aron para
avanzar con l en la misma
direccin,
proporcionarle
alimentos y agua e infundirle
bloquea de mi vista.
Superada la cresta del can, mi
mente se confunde intentando asimilar el
sbito cambio de horizonte. La lnea que
ha demarcado los confines de mi
universo en los ltimos seis das haba
estado cercada de manera claustrofbica
y
en
cambio
ahora
abarca
160 kilmetros de golpe, retrocediendo
sobre el espectacular paisaje de los
Canyonlands en la neblina que envuelve
las montaas La Sal al este. Me tiembla
la vista.
Las vibraciones de los motores del
helicptero ascienden a un rugido
estentreo, levemente amortiguado por
los auriculares.
Yo respondo:
Estoy bebiendo agua.
Me cuesta creer que mi estmago
pueda asimilar ms lquido o que siga
teniendo sed. Contando la botella que
tengo en las manos, me habr bebido
unos once litros de agua en las ltimas
tres horas.
No dejis que pierda el
conocimiento advierte el piloto a los
agentes.
No me preocupa desmayarme,
porque el dolor no me lo permitira,
pero s deseo con todas mis fuerzas
llegar a un hospital lo antes posible.
Cunto
falta?
pregunto,
sonndome a m mismo como un nio
Gracias.
Estoy en alerta, pero exhausto, y lo
que ms deseo en el mundo es cerrar los
ojos, pero s que no puedo dormirme.
En ese momento entra en el quirfano
una mujer con bata y mscara blancas y
se presenta como la anestesista. Me
pregunta qu ha sucedido. Le explico
una versin abreviada y sale disparada
por una puerta lateral con la promesa de
regresar con medicamentos.
Aron, me gustara que me
facilitaras toda la informacin posible
contina Steve. Qu tamao tena
el pedrusco que te atrap?
Deba de pesar unos 90 kilos. Se
movi un poco justo despus de caer
pregunta directa:
Tengo la morfina preparada.
Quieres que te la inyecte o no?
Adelante!
exclamo.
Inyctemela. Pero sujtenme a la mesa si
ven que voy a caerme, de acuerdo?
Miro al guarda forestal Steve
mientras la doctora me inyecta la aguja.
Un suave ardor asciende por mi brazo a
medida que el narctico penetra en mi
vena, pero en ningn momento pierdo la
conciencia. Steve y yo retomamos
nuestro informe; le describo la ruta que
tena previsto cubrir desde el sendero
que conduce al can de la Herradura:
bajar por la pista forestal del distrito de
Maze, atravesar el can de Blue John,
Tras
horas
incalculables
de
inconsciencia, vuelvo en m. Estoy
tumbado en una oscura habitacin de
hospital; la luz del fluorescente de la
enfermera se filtra a travs de las
cortinas translcidas de la ventanilla
que queda a mi izquierda. Tengo la
visin borrosa, pero acierto a ver que no
estoy solo. Antes de volver a
desvanecerme, mi nico pensamiento es:
Estoy vivo.
De dnde vena?
De Denver.
Bueno, est a cuatro horas y media
o cinco por carretera.
Qu? Cinco horas?
Cinco horas para llegar a Moab?
Oh, no ests en Moab, cario,
ests en Grand Junction. Te trasladaron
en avin anoche.
Ah farfullo, al tiempo que
intento orientarme.
No tengo ningn recuerdo de otro
vuelo tras aquella fascinante excursin
en helicptero. Pero entiendo lo de
Grand Junction. Estoy en Colorado.
El cansancio me inmoviliza, cosa
que est bien, teniendo en cuenta que
Eplogo
Adis a mi brazo
Disfruta de la vida que vives y
vive la vida que te gusta.
JERRY GARCIA BAND, (Im a)
Roadrunner
salado.
El jueves 15 de mayo volva a estar
ingresado en el hospital, en esta ocasin
en el St. Lukes Presbyterian Hospital de
Denver. Dos das antes, los mdicos
haban descubierto una infeccin sea
potencialmente letal en mi brazo
derecho. El mismo cuchillo sucio que
me haba salvado la vida ahora me
estaba matando. Tras otra operacin
ms, me inyectaron los antibiticos
intravenosos ms potentes que existen
(agujas) y me sometieron a batera tras
batera de anlisis de sangre (ms
agujas) para verificar que los
medicamentos estaban combatiendo la
infeccin. El da siguiente, el viernes,
considerada:
Necesitas que te eche? No
concluy la pregunta.
Si necesito que me eches una
mano? la remat yo por ella. Lo
que necesito ms bien es una mano,
tonta; slo me queda una.
Le sonre y ella se sonroj. Saqu mi
cuchillo balancn y cort la naranja en
octavos sin pelar, tal como sola
comrmela cuando jugaba al ftbol en la
liguilla. Sin que se diera cuenta, me met
un gajo en la boca, cubrindome los
dientes con la piel, y empec a hacer el
gorila por la habitacin. Justo cuando mi
hermana empezaba a creer que haba
perdido la chaveta, le dediqu una
de correr an ms rpido.
Me siento bendecido por todo lo que
ha sucedido y las oportunidades que me
ha brindado la vida. Fui parte de un
milagro que ha conmovido a muchas
personas y no lo cambiara por nada en
el mundo, ni siquiera por recuperar mi
mano. Mi accidente y rescate en el
can de Blue John fueron las
experiencias espirituales ms bellas de
toda mi vida e, incluso sabiendo lo que
ocurri, si pudiera retrotraerme en el
tiempo volvera a decirles Nos
vemos! a Megan y Kristi y me
desviara a esa chimenea yo solito. La
vida me ha enseado mucho, pero no me
arrepiento en absoluto de la decisin
Cronologa biogrfica
1987 Me traslado a Englewood
(Colorado); empiezo la escuela
secundaria y realizo mi primera salida
de esqu.
1988 Primera excursin mochilera con
pernoctacin al raso, en el Parque
Nacional de las Montaas Rocosas.
1990 Primer viaje a Utah; visitas a
Arches, el arrecife de Capitol, Bryce y
1999
Me
traslado
a
Tacoma
(Washington); escalo los montes Rainier
y Shuksan en Washington; me mudo a
Albuquerque (Nuevo Mxico), y entro a
formar parte del Grupo de Rescate en
Montaa de Albuquerque.
2001 Escalo la Cordillera Blanca de
Per y culmino todos los cuatromiles de
Colorado en noviembre.
2002 Dejo mi empleo en Intel; en junio
escalo el Denali en Alaska y en
noviembre me mudo a Aspen
(Colorado).
2003 Escalo en solitario y en invierno
Glosario
anclarse: fijar una cuerda a la montaa
por diversos medios, incluidos entre
ellos insertar material de escalada
permanente o extrable en grietas
astilladas, atar cinta plana alrededor
de un tronco de rbol grueso o
alrededor de una roca o pedrusco
grande, o enroscar tornillos en la
roca.
ATC (controlador de trfico areo):
Air Traffic Controller , marca de un
crampones.
travertino: tipo de roca formada por
agua con altas concentraciones de
cal que se depositan all donde el
arroyo fluye o salpica. A medida que
el riachuelo cambia de curso o que
los niveles de agua descienden, los
residuos de cal se solidifican, dando
lugar al travertino, y viran del blanco
al granate cuando otros minerales del
aditamento, sobre todo el hierro, se
oxidan y adquieren un color rojizo.
cinta plana: tiras planas o tubulares de
tejido de alta resistencia utilizadas
para fabricar anclajes para escalada.
Normalmente se emplean en grosores
de 19 mm, 25 mm y 38 mm.
agarrarse: en escalada, aferrarse con
FOTOS
FOTO: cortesa de
Elias Fallon.
la familia Ralston.
la familia Ralston.
la familia Ralston.
la familia Ralston.
la familia Ralston.
la familia Ralston.
Howard Huang.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
El Monte Sopris.
FOTO: cortesa de
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Aron Ralston.
Kristi Moore.
Aron Ralston.
FOTO: cortesa de
Grerg Funk.
El saliente rocoso
en la chimenea inferior del can de Blue
John, a unos 14 metros del lugar del
accidente.
FOTO: cortesa de
Grerg Funk.
Aron Ralston.
Tercer da.
FOTO: cortesa de
Aron Ralston.
FOTO: cortesa de
Aron Ralston..
FOTO: cortesa de
Aron Ralston.
En el estanque
que queda por debajo de Big Drop.
FOTO: cortesa de
Aron Ralston.
El helicptero de rescate.
FOTO: cortesa de
Eric Meijer.
Ron Elberger.
Tony Angelis.
Agradecimientos
Dedicatoria
Este libro es un testimonio del amor de
mis padres, Donna y Larry Ralston, y de
mi fabulosa hermana, Sonja Marie
Ralston Elder: los recuerdos que
compartimos y que an nos quedan por
descubrir me espolearon a reunir las
fuerzas necesarias para salir de aquel
can.
Con especial amor hacia Marjorie
Bibliografa
recomendada
La documentacin sobre las leyendas y
la historia de Blue John Griffith estn
extradas del libro de Pearl Baker, que
recomiendo
para
entretenerse
asomndose a las vidas de los
antihroes que poblaron la zona rural
del sureste de Utah entre finales del
siglo XIX y principios del XX.
mantenimiento en la motocicleta.
Barcelona: Mondadori, 1999.
ROACH, Gerry; Roach, Jennifer.
Colorados Thirteeners, 13,800 to
13,999 Feet: From Hikes to Climbs.
Golden,
Colorado:
Fulcrum
Publishing, 2001.
SIMPSON, Joe. Tocando el vaco.
Madrid: Ediciones Desnivel, 2005.
TWIGHT, Mark F. Besa o mata:
confesiones de un escalador en
serie. Madrid: Ediciones Desnivel,
2002.
TWIGHT, Mark F.; Martin, James.
Alpinismo extremo, escalar alto,
rpido y ligero. Madrid: Ediciones
Desnivel, 2000.