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ENRIQUE HUBBARD URREA

B E L I Z E: V E C I N O I G N O R A D O

LA PERSPECTIVA DE UN EMBAJ ADOR DE MXICO




















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NDICE


INTRODUCCIN


I.- ORGENES: ARRECIFES, PIRATAS Y LEADORES.

II.- SOBERANA: CONCESIONES ESPAOLAS, ASENTAMIENTOS
BRITNICOS Y EXPEDICIONES PUNITIVAS.

III.- GUERRA DE CASTAS; MIGRACIN MEXICANA; TRATADO DE LMITES.

IV.- AUTONOMA LIMITADA; GEORGE PRICE, PADRE DE LA PATRIA; EL
HURACN HATTIE Y LA NUEVA CAPITAL.

V.- BELIZE, ESTADO INDEPENDIENTE; EL SISTEMA WESTMINSTER,
GEORGE PRICE (2), LOS PARTIDOS POLTICOS, LA ALTERNANCIA, MR.
PRICE: SIEMPRE MR. PRICE.

VI.- El DIFERENDO CON GUATEMALA: ANTECEDENTES; EL TRATADO DE
1859 (ART. 7o); SALIDA AL MAR E ISLAS SAPODILLAS (ZAPOTILLAS);
SITUACIN ACTUAL.

VII.- MXICO Y BELIZE: APOYO ANTE EL DIFERENDO, VECINDAD,
AFINIDAD, SEGURIDAD; LA FRONTERA, MIGRACIN Y LMITES.

VIII.- EL BELIZE DE HOY: MULTIETNICIDAD, LOS LAZOS CON EL CARIBE,
LA ECONOMA, LA NUEVA CLASE POLTICA, EL MINISTRO DE TODO,
CAMBIO DE GUARDIA.

IX.- UN EMBAJ ADOR ITINERANTE; LAS ELECCIONES DEL 98; LOS
RABES; EL NUEVO GABINETE.

X.- REFORMA POLTICA; EL MINISTRO DE TODO LO DEMAS; EL PM Y EL
PRESIDENTE; PERSPECTIVA Y PROSPECTIVA.





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INTRODUCCIN

El destino y la Secretara de Relaciones Exteriores, no necesariamente en ese orden,
me han colocado en la honrosa tesitura de representar a Mxico en un pas vecino, amigo,
de suma importancia para nuestra poltica exterior y casi totalmente desconocido ms all de
Quintana Roo: Belize.

La experiencia ha sido muy satisfactoria, amn de ilustrativa, sobre todo si se toma en cuenta
la naturaleza embrionaria del estado-nacin, su sistema parlamentario tan distinto al nuestro,
sus orgenes britnicos, la casi mtica reclamacin guatemalteca, su vocacin caribea, el
idioma, la cultura, etc.

Podra decirse sin intenciones hiperblicas que hay pocos casos de naciones tan afines, tan
cercanas, tan fraternales y tan distintas; pero el punto de mayor impacto en nuestras
relaciones tiene que ser el desconocimiento mutuo: para ellos Mxico es Chetumal; para
nosotros, sobre todo en el norte del pas, se trata de una isla de poblacin negra, anexa a
Centroamrica pero sin formar parte de ella.

Hace algunos aos, por all por 1984, como Cnsul de Mxico en Brownsville, Texas, me
enfrentaba a numerosas peticiones de visa de trnsito de beliceos, los cuales compran
automviles en los Estados Unidos y los trasladan por tierra para venta en su pas. Una de
las empleadas del Consulado, mexicana y de considerable experiencia en la materia, me
present cierto da una docena de pasaportes beliceos y mientras firmaba yo las
correspondientes visas me pregunt muy intrigada:

Oiga Cnsul, y cmo pasan los negritos sus carros a la isla?.

Confuso respond cul isla?.

Pos su isla, Belize, qu no queda por ah por J amaica?.

Despus de eso, impart una larga clase de ilustracin geogrfica a todo el personal.

Puede ser motivo de hilaridad constatar tan supina ignorancia, pero se sorprendera usted si
hiciera un experimento entre sus conocidos, el de la tienda, el peluquero, algn taxista, etc.
Probablemente exista tanto o ms desconocimiento que el de la empleada de marras, la cual
al menos supo ubicar regionalmente a Belize en el Caribe.

Es realmente penoso reconocer dicha situacin, pero sera an peor caer en el conformismo;
y aunque mi responsabilidad central como Embajador de Mxico es promover la imagen y
defender los intereses de mi pas, ello no es contrario a la labor de acercamiento entre
ambos pueblos, recurso siempre eficiente para facilitar las relaciones bilaterales.

A nadie extraar entonces que mi respuesta haya sido un entusiasta s!, cuando se me
invit a escribir sobre Belize. Creo firmemente en la bondad del proyecto y por si eso fuera
poco me complace enormemente platicar sobre el pas donde me he iniciado como
Embajador.

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No soy un experto ni pretendo crear un paradigma; se trata slo de la visin de un mexicano
preocupado por profundizar en el conocimiento y la comprensin de un pueblo hermano.

Si se quiere, esto es ms bien una especie de manual para principiantes.

A manera de advertencia debo dejar constancia de que la estructura del trabajo es poco
cientfica, pero el contenido histrico, estadstico y geogrfico ha sido verificado
cuidadosamente. Adems, por razones obvias citar a intelectuales beliceos cuando trate
algn punto controvertido, particularmente al hablar de poltica interna.

No podr evitar, sin embargo, teir con mis propias opiniones los retratos hablados de
personajes claves para la vecina nacin y, para m, inolvidables. Imagnese usted el privilegio
que significa conocer al padre de la patria; o hablar de msica con el J efe de Estado: si no
incluyera mi personal apreciacin restara variedad cromtica a la narrativa.

Adems, el estilo personal de escribir es inescapable.


Por todo ello, los invito cordialmente a escuchar con la vista mi narracin de una historia
fascinante, con personajes de novela, selva lujuriosa y deslumbrante belleza natural; slo
pido como requisitos un poco de curiosidad, cierto grado de imaginacin y ausencia de
prejuicios.

Pero antes de sumergirnos en la multifactica imagen del vecino pas debo hacer la primera
de muchas explicaciones.

Durante todo este trabajo usar el nombre de la hermana nacin escrito con Z, tal como
desean ellos perpetuarlo. Me inclino a conceder sus deseos porque no me gusta ver el
nombre de mi pas escrito con J , a pesar de sesudas explicaciones gramaticales.

Sin embargo, en buen castellano cambiar a C en la figura del plural. As, Belize y los
beliceos conjugan el respeto por la autodeterminacin y por la gramtica. Estamos?

Otra observacin casi obligada tratndose de una segunda edicin, se relaciona con dos
variables igualmente importantes: la necesidad de actualizar temas, sucesos e incidencias; y
el efecto del paso del tiempo en mi percepcin.

As, cuando tratamos el caso de la reclamacin guatemalteca, es indispensable comentar los
ms recientes acontecimientos, sobre todo los acaecidos despus del cambio de gobierno
chapn; al explicar el sistema de gobierno y el rgimen actual, la primera edicin se detena
en el momento de la eleccin de agosto de 1998.

Mucha agua ha pasado bajo el puente de Subteniente Lpez desde entonces,
particularmente una visita Oficial del Primer Ministro a Mxico. No obstante, esa eleccin fue
a mi juicio un verdadero hito y por tanto no ha perdido actualidad su tratamiento detenido y
detallado.

Y no podemos dejar de analizar la conspicua existencia de una Zona Libre de Corozal,

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ruidoso fenmeno en la vida fronteriza.

Finalmente, a riesgo de ser reiterativo insistir en la naturaleza amable de este enfoque,
tanto porque pretendo dejar en la mente del lector una imagen positiva de Belize, como
porque mi inclinacin personal me lleva a tratar las cosas con un dejo de humor, convencido
como soy de que la risa destruye los espejismos.

No me ro de nadie antes de rer de m mismo y cuando enfoco con tintes festivos a alguien
no hago ms que demostrar mi aprecio y afecto por ellos.

Y ahora s, acompeme a estudiar las peculiaridades de nuestro admirable, entraable y
desconocido vecino.

I.- ORGENES: ARRECIFES, PIRATAS Y LEADORES.

Esta era una joya esmeralda de virginal pureza, enmarcada por un collar coralino
multicolor y habitada por opulenta fauna. Su soledad slo perturbada por cclicas tormentas
tropicales; su superficie plana slo accidentada por rugosidades calcreas en su regin sur-
oeste.

Con cerca de 23,000 Kms.2, se asemejaba por su tamao a Tabasco y superaba ligeramente
a El Salvador. Caudalosos ros surcaban su territorio, entre la ms impenetrable selva,
cinagas y pantanos infestados de insectos. Aquel ocano de vegetacin se interrumpa de
pronto para dar paso a pirmides, palacios y templos de una civilizacin perdida, cuya huella
perdura hasta nuestros das y todava presume de la ms alta edificacin construida por el
hombre en todo el pas, superando incluso a los modernos hoteles.

Sus costas sufran el flagelo de las corrientes fluviales y se vean impedidas para asimilar los
sedimentos por estar atrapadas entre el pantano y el arrecife. Pero ms all de la
infranqueable barrera de coral yaca el Caribe en todo su transparente esplendor, adornado
con aretes insulares de sorprendente verdor y sonoro nombre: Cayos (Cayes, pronunciado
quis, en ingls).

La baha de Chetumal al extremo norte y la de Amatique al sur, anuncian el arribo a Mxico y
Honduras; mientras que su frontera oeste es toda con Guatemala, excepto por 20 Km de
lmite terrestre con Mxico. El Ro Hondo y su tributario alimentador el Arroyo Azul forman la
frontera propiamente dicha con nuestro pas y el Ro Sarstn (Sarstoon en ingls) lo delimita
con Guatemala al sudoeste.

El territorio conocido hoy como Belize fue habitado originalmente por grupos Maya, cuya
civilizacin alcanz su esplendor entre los aos 250 y 1000 D.C. Algunos de los centros de
poblacin ms poderosos llegaron a dominar amplias extensiones de terreno, como fue el
caso de la ciudad-estado hoy conocida como Caracol
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, cuyos guerreros conquistaron incluso
a la magna Tikal.

Otros asentamientos de importancia fueron: Altn-Ha, Lamanai, Xunantunich y Cahal Pech,
apenas explorados y estudiados recientemente.

1
El Nombre es moderno y derivado del sinuoso camino de acceso al sitio; el nombre original se desconoce.

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A la llegada de los espaoles haba tres distintas reas Mayas: Chetumal, probablemente
situada al sur del Ro Hondo, en lo que hoy se conoce como Corozal, Belize; su importancia
radicaba en el control del comercio costero. La provincia de Dzuluinicob ocupaba el territorio
entre los Ros Nuevo (New River) y Sibn (J abn), eran del grupo Yucateco, su capital era
Tip y mantenan estrechos contactos con los Mayas Itza del Petn. Por ltimo, haba otra
provincia mucho ms al sur, cerca del Ro Sarstn, habitada por Mayas Manche Chol, grupo
totalmente desaparecido.
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Uno de los ms grandes expertos en cultura Maya, Eric Thompson, cuenta que un soldado
espaol renegado (Gonzalo Guerrero), yerno del Cacique de Chetumal Nachankn, aconsej
a ste evitar un enfrentamiento directo con las fuerzas espaolas de Francisco de Montejo y
como resultado el grupo entero se traslad al territorio hoy conocido como Belize.

De ah infiere Thompson que Guerrero fue el primer europeo en radicarse en Belize.

Es ms, Montejo intent vincular por la fuerza su base militar de Bacalar (cerca de la actual
Chetumal) con las misiones dominicas de Ro Dulce, Guatemala (al sur del territorio
beliceo), pero Fray Bartolom de las Casas se opuso firmemente al establecimiento de un
Fuerte y Montejo recibi instrucciones de abandonar el proyecto.

El declive de su civilizacin (Siglos IX y X de esta era) no se tradujo en desvanecimiento,
pues mantuvieron presencia en numerosas villas y comunidades hasta mucho despus de la
llegada de los espaoles. En la regin sur todava existen aldeas Mayas, ahora gobernadas
por alcaldes
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y ms o menos integradas a las costumbres del pas.

Pero sigue siendo cierta la aseveracin de cierto gua indgena en Palenque, a quien
pregunt asombrado un turista qu pudo haber pasado con los sabios hombres que
construyeron tantas maravillas?; la respuesta fue: nada, an estamos aqu.

A pesar de que los conquistadores no ocuparon el territorio ubicado al sur del ro Hondo,
salvo por algunas misiones religiosas, s lo reclamaron como parte de las Amricas conferida
a Espaa en la Bula Papal.

Pero se trataba de una regin pantanosa, selvtica, de muy difcil acceso por tierra y casi
imposible alcance por mar: un formidable arrecife de barrera forma una especie de natural
rompe olas frente a la costa de Belize y complica la navegacin. Son ms de trescientos
kilmetros de duro coral, apenas interrumpido por estrechos canales ocultos, o por lo menos
poco aparentes.

Los fuertes enfrentamientos con los Mayas y el hecho de que jams fueran sometidos,
redujeron an ms el inters por colonizar la nada atractiva regin, que jams dio indicios de
poseer riqueza minera.

Hacia mediados del siglo XVII, piratas britnicos empezaron a aprovechar la escabrosa lnea
costera como base de operaciones.

2
Trece Captulos de la Historia de Belize. The Angelus Press. 1994.
3
Los ingleses toleraron la forma tradicional de organizacin de las aldeas Mayas y todava hoy existen los Alcaldes.

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Con cierta lgica prctica se arriesgaron al naufragio como alternativa preferente a la captura
y en su afn por escapar al asedio espaol se toparon con uno o dos pasos en la barrera de
coral. Aquello era mucho ms que la simple escapatoria; la laguna interior y los caudalosos
ros abran de par en par un santuario que poco a poco se torn puerto.

Correr la voz entre los correligionarios fue proceso rpido y muy pronto se daban cita en la
desembocadura del ro numerosos bucaneros, hasta entonces interesados solamente en la
seguridad del paraje.

No se sabe con certeza cundo empezaron a asentarse en la regin, pero en 1670 ya
contaban con fortificaciones ms o menos permanentes, pues segn reporta Fray J os
Delgado en su diario, l fue capturado cuando viajaba de Guatemala a Bacalar y pudo
constatar la existencia de Fuertes.

Por cierto una de las versiones sobre el origen del nombre del pas se basa en el apellido de
uno de esos corsarios (Wallace), supuestamente deformado por la defectuosa pronunciacin
espaola, el que dio su nombre primero al ro y luego al territorio: Belize (Waliz, Valiz, Veliz y
finalmente Belize).

Otros accidentes geogrficos del rea fueron bautizados a travs de un proceso parecido,
pero en algunos casos el camino fue al revs, es decir, fueron llamados originalmente por su
nombre en espaol y despus distorsionados por la mala pronunciacin de los ingleses.

Tal es el caso del Ro Sibn, tambin conocido como Jabn y antes llamado Xibun en Chol
Maya.

La necesidad de reabastecerse de agua y alimentos fue haciendo ms y ms prolongadas
las visitas. Pronto se construyeron chozas, algunos almacenes rudimentarios (aquellos rudos
hombres eran navegantes, no constructores) e inevitablemente alguien descubri la
disponibilidad (abundancia) de ciertas valiosas maderas, como el llamado palo de tinte o de
Campeche (logwood), utilizado y muy bien pagado como tintura para textiles en Europa y
que ya haba sido uno de los tesoros obtenido de los ataques piratas a navos mercantiles.

Cortar, procesar y almacenar la madera era trabajo arduo, para el cual no estaban
preparados ni dispuestos los marinos; el paso siguiente era obvio: se importaron esclavos de
J amaica. Ms tarde, la explotacin de la caoba provoc el crecimiento de la poblacin de
esclavos y propici la exploracin de nuevas reas tierra adentro, donde fatalmente se
toparon los ingleses con los pobladores originales de la regin: Los Mayas.

Las escaramuzas, encuentros, disputas y hasta batallas fueron constantes. Ya entrado el
siglo XIX seguan los colonos pidiendo proteccin contra las incursiones Mayas, en realidad
defensas de un territorio en proceso de invasin por el hombre blanco.

El progreso de los exploradores y explotadores de la madera usualmente segua el curso del
ro, pues era mucho ms fcil navegar que tratar de viajar por tierra y, por aadidura, se
poda aprovechar la corriente en la transportacin de troncos hasta la costa.



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As, cada nuevo aserradero se ubicaba en las mrgenes del ro, es decir, en un banco; de
ah que los centros de produccin maderera se llamaran banks" (bancos) y por ello existe
hoy una poblacin cercana a la frontera con Guatemala cuyo nombre es Benque Viejo
(banco viejo, old bank).

Los bancos llevaban el nombre del propietario o de algn punto de referencia muchas veces
incidental. Varias poblaciones del Belize independiente an reflejan esos orgenes, de tal
suerte que los nombres pueden ser sorprendentes para el visitante: Willows Bank, Flowers
Bank, Water Bank, pareceran ms bien razn social de instituciones bancarias, pero se
trata de villas o poblados resultantes de las explotaciones madereras.

La formalizacin de su presencia y el incremento en el nmero de colonos aconteci durante
el siglo XVIII, particularmente a raz de su expulsin de la costa Mosquito en Nicaragua.

En 1787 llegaron a Belize 2214 emigrados de dicha costa, en su mayora esclavos. Dado que
la poblacin total alcanz con esa adicin apenas unos 3000, es posible deducir que la
antigedad del asentamiento era realmente corta (once aos de residencia en promedio).

II.- SOBERANA.- CONCESIONES ESPAOLAS, ASENTAMIENTOS
BRITNICOS Y EXPEDICIONES PUNITIVAS.

El antecedente ms antiguo de la inusual situacin que propici la presencia inglesa
en la Baha de Honduras es el Tratado de Londres de 1604, en el cual Espaa aceptaba
que cualquier rea no ocupada efectivamente por ellos poda ser colonizada por el Reino
Unido.

De hecho, Inglaterra intent hacer precisamente eso, pero fracas en varias otras regiones
de Centroamrica (la citada Costa Mosquito de Nicaragua y Honduras es un buen ejemplo).
Por su parte, Espaa intent controlar la inhspita regin al sur de Bacalar (hoy frontera entre
Quintana Roo y Belize), pero a pesar de aparentes xitos nunca lograron dominar a los
Mayas.

Espaa sostuvo y mantuvo soberana sobre el territorio sin nombre (slo se le conoci como
Honduras Britnicas mucho ms tarde). Durante el siglo XVIII, por medio de ataques a los
asentamientos britnicos y la correspondiente expulsin de los colonos, dej constancia de la
ilegalidad de su presencia.

Inglaterra acept de hecho y de derecho ese dominio, al firmar tratados con Espaa que les
reconocan simples concesiones para explotar las maderas en un terreno determinado (entre
los ros Hondo y Belize particularmente) y cuyas estrictas reglas les prohiban erigir
fortificaciones o establecer formas locales de gobierno.

Nunca hubo pretensin ni insinuacin britnica respecto del territorio concesionado. Slo
hubo modificaciones a los trminos de la concesin, usualmente como resultado de alguna
de las frecuentes guerras en Europa. Por ejemplo el terreno autorizado se extendi al sur
hasta el Ro Sibn, pero en ningn momento rebas el Hondo al norte ni el propio Sibn al
sur.

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Lo que s era constantemente ignorado era la prohibicin de construir fortificaciones y por ello
cada cierto tiempo sala de Yucatn una expedicin punitiva (no hubo ni una sola que
proviniera de Guatemala), la cual destrua los fuertes y defensas no autorizadas, amn de
expulsar a los colonos.

Una de esas excursiones salida de Yucatn dio paso a uno de los episodios ms
controvertidos de la corta historia belicea.

Se dice que en 1798, la capitana general de Yucatn envi una flota a destruir las
fortificaciones establecidas en la desembocadura del Ro Belize. La leyenda afirma que los
colonos, luchando hombro con hombro con sus esclavos, derrotaron a la muy superior flota
espaola y las grandes prdidas sufridas marcaron el fin de las incursiones e inspecciones
hispanas.

Algunos historiadores disputan la grandiosidad de la mtica batalla (The Battle of St.
Georges Caye o Batalla del Cayo San J orge) e incluso consideran poco verosmil que los
amos hubieran armado a sus esclavos y que stos no hubieran aprovechado la coyuntura.
Assad Shoman en sus 13 Captulos de la Historia de Belize seala que la Flota iba
sumamente disminuida por enfermedades (fiebre amarilla o disentera), dos de las Carabelas
haban desertado y con ellas el Comandante en J efe de la operacin; la motivacin era
escasa entre los tripulantes, pues consideraban esa guerra como ajena, ante la evidencia de
una familia real francesa en el trono de Espaa (los Borbones).

Asimismo, Shoman reproduce el reporte del Capitn Moss, que se lee ms como
escaramuzas de importancia menor que como heroica defensa de los colonos.

La falta de ulteriores incursiones espaolas es, a juicio de los apologistas de la batalla,
consecuencia directa de la derrota sufrida en 1798; pero no puede ignorarse la existencia de
otra explicacin lgica: a principios de siglo decimonnico estallaron las guerras de
independencia en toda la Nueva Espaa y la madre patria se concentr en su resolucin.

Poco sentido hubiera tenido dedicar recursos a castigar a los colonos de una regin carente
de oro o plata, aislada e incivilizada; cuando se desmoronaba en sus manos el imperio.

Sin embargo, negar el acontecimiento es lastimar fibras muy sensibles de la idiosincrasia
belicea y por ello daremos al menos el beneficio de la duda. De cualquier manera hasta la
fecha se conmemora el 10 de septiembre como uno de los hitos de la joven nacin, aunque
persisten las voces disidentes.

El escritor y periodista Evan X. Hyde afirma que se trata de un truco propagandstico ingls,
brillantemente utilizado para dividir (ergo: vencer) a los dos ms numerosos grupos tnicos
no europeos.

Segn l, el 10 de septiembre simboliza el entronizamiento de la burguesa Creole,
manifiesta en su absoluto dominio de la burocracia. Se trata de descendientes de esclavos
negros, pero anglizados hasta el extremo de aliarse con los blancos en contra de los otros

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negros
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, as como de la minora ignorada: los Paa (mestizos).

Para 1840 no haba ms ley que la inglesa en Honduras Britnicas. El Reino Unido reciba
constantes reclamos de los colonos, para entonces ya establecidos y conscientes de la
oportunidad de consolidarse como colonia, ante la confusin existente en las nuevas
naciones independientes de la regin.

Las Provincias Unidas de Centroamrica y posteriormente Guatemala (1839) reclamaron
soberana sobre Belize como herederos de Espaa, pero los ingleses nunca reconocieron
tales derechos y en realidad haba pocos fundamentos histricos a favor de las pretensiones
centroamericanas, a la luz del alcance de las concesiones, que slo incluan una rea
situada entre los ros Hondo y Sibn, o sea aproximadamente la mitad del territorio de la
Colonia.

Si a ello se agrega el origen de las expediciones punitivas espaolas, siempre enviadas
desde Yucatn, as como la total ausencia de ocupacin fsica de Belize por parte de
Guatemala, sin olvidar el podero militar de Inglaterra; ser ms fcil para el lector imaginar el
resultado de las reclamaciones.

Pero no se pueden negar las pruebas directas e indirectas del reconocimiento de la
soberana espaola. Ms all de la aceptacin implcita al recibir las concesiones, el Reino
Unido dio muestras palpables de su reconocimiento al vedar todo proyecto agrcola en la
colonia durante casi dos siglos.

Ms adelante comentaremos algunas de las consecuencias de esa determinacin, pero por
ahora baste con sealar la tcita sumisin de tal actitud.

Por ello, a diferencia de otras colonias inglesas de la regin (J amaica, Bahamas, Barbados)
en Belize no hubo plantaciones de azcar y esto condicion el crecimiento poblacional;
mientras aqullas desarrollaron grandes plantaciones con numerosa poblacin de esclavos
que vivan y trabajaban juntos, Belize se concentr en la explotacin de madera, cuya
necesidad de mano de obra era mucho menor.
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Sera muy aventurado adentrarse aqu en la resolucin de una controversia de ms de un
siglo, la cual perdura hasta nuestros das. Solamente pretendo dejar constancia de los
hechos bsicos, especialmente a la vista de una terca realidad muchas veces contradictoria
de normas y principios de derecho. A cualquier mente ordenada, entrenada y acostumbrada
a pensar en trminos jurdicos le resultar muy difcil aceptar algunas de las afirmaciones
aqu incluidas, pero la historia est llena de casos as.

Reconocer situaciones irremediables y aprender a vivir con ellas es parte esencial de la vida
de las naciones. El Reino Unido pudo haber aceptado mil veces e incluso respetado otras
tantas la soberana espaola sobre los territorios al sur de Ro Hondo, pero cuando las
colonias se independizaron slo un hecho cont: ni en lo individual ni colectivamente podan
recuperar esos terrenos contra la voluntad de una potencia abrumadoramente superior.

4
Se refiere a los Garfuna, grupo resultante de la unin de la tribu Caribe y esclavos rebeldes que escaparon de la Isla de
San Vicente
5
Assad Shoman.- Party Politics in Belize. Introduccin. Cubola Productions. 1987

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He ah la dura pldora que haba que tragar.

Primero Mxico y luego Guatemala intentaron llegar a un acuerdo con Inglaterra, pero
mientras el tiempo de las negociaciones transcurra el proceso de consolidacin y
fortificacin alejaba cualquier posibilidad de arreglo. Pronto hubo una Constitucin en la
Colonia
6
, llegaron autoridades europeas de otras colonias o del propio Reino Unido; los
asentamientos adquirieron permanencia y estructura; mientras la presencia de la poderosa
armada britnica desalentaba el recurso de las vas de hecho.

Tan cierta es la anterior explicacin que primero fueron los tratados y luego fue la declaracin
formal del status colonial. En 1859, Guatemala e Inglaterra firmaron un tratado que fijaba los
lmites entre Honduras Britnicas y Guatemala; pero no fue sino hasta 1862 que las
Honduras Britnicas fueron declaradas Colonia de la Corona.

III.- GUERRA DE CASTAS, MIGRACIN MEXICANA Y TRATADO DE
LMITES.

Al referirme a Belize con frecuencia uso la expresin: la frontera olvidada. Pues bien,
cuando se habla de La Guerra de Castas se antoja usar la misma frase, pero referida
obviamente a ese olvidado o ignorado conflicto. Tal vez su desconocimiento ha perpetuado
algunos estereotipos muy populares en Europa en relacin con las naciones Mayas.

En efecto, ante la abrumadora evidencia de su grandeza cientfica y sus deslumbrantes
logros arquitectnicos, muchos observadores parecen convencidos de que los Mayas tenan
una vocacin pacfica o pacifista muy lejana de la realidad. La Guerra de Castas dur 50
aos!. Durante medio siglo se desangr la pennsula de Yucatn, se presentaron largos
periodos de total dominio Maya prcticamente con autonoma soberana sobre cierto territorio;
hubo miles de desplazados, refugiados, caos, destruccin, tierra de nadie.

La rebelin Maya empez en 1847, en un momento de notable debilidad y desgaste del
gobierno federal, producto de la guerra con los Estados Unidos. Las divisiones intestinas en
el seno del poder pblico condicionaron su ineficiente forma de conducir la guerra, pero para
su fortuna tambin los Mayas mostraron total incapacidad para constituir un frente unido y
eso evit la derrota final.

Independientemente de su combatividad casi atvica, los Mayas fueron impulsados por una
ciega fe en la Santa Cruz (ubicada en lo que hoy se conoce como Carrillo Puerto, Q.R.);
fervor religioso de claros tonos sincrticos que bautiz el movimiento como Cruzob o Mayas
Santa Cruz.

Segn narra el ya citado historiador Shoman
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, sera imposible seguir lgicamente el retorcido
curso de las hostilidades. No slo haba diversos grupos indgenas, no siempre coordinados
entre s, sino que adems persistan viejas rencillas entre los Yucatecos y el centro (la
capital). En 1851 los Cruzob atacaron a otro grupo Maya, los Icaich, por sospecha de
traicin, de tal suerte que stos se convirtieron en sus ms encarnizados enemigos, incluso

6
El llamado Cdigo de Barnabyse dict en 1850.
7
En la medida de lo posible doy preferencia a los autores beliceos en toda esta narracin.

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aliados de los Yucatecos (los llamaban indios pacficos); para formalizar un tratado de paz
entre ellos exigieron la mediacin de los ingleses
8
.

Aunque los britnicos supuestamente tenan instrucciones de mantener absoluta neutralidad,
la porosa frontera permita a los Cruzob escapar a persecuciones; multitud de refugiados
vadeaban el Ro Hondo huyendo del conflicto; nadie controlaba a los comerciantes beliceos
en su lucrativo trfico de armas y municiones; y todo ello comprometa seriamente la
supuesta neutralidad de los vecinos.

Los enfrentamientos eran inevitables, pero nunca llegaron ms all de las protestas y
reclamaciones.

Haba algunos acuerdos tcitos. Las autoridades mexicanas vean con buenos ojos la
proteccin otorgada a refugiados, mientras que el Superintendente de Honduras Britnicas
saba aquilatar el beneficio de una poblacin diestra en la agricultura, lado flaco de la
economa colonial.

El flujo de inmigrantes refugiados hacia el norte del territorio Beliceo matiz (hasta la fecha)
la composicin tnica de la regin, pues el espaol es la lengua materna de la abrumadora
mayora, particularmente en los distritos de Corozal y Orange Walk; y adems la actividad
agrcola ha florecido sobre todo por la produccin azucarera.

Por su parte, los Mayas otorgaron licencias a los leadores ingleses para explotar maderas
en las reas por ellos controladas, usualmente a cambio de armas y municiones, con lo cual
contribuyeron a complicar la ya de por s catica situacin de la frontera: haba pues,
mexicanos del lado beliceo, ingleses del lado mexicano (ms bien dicho Maya), territorios
que cambiaban de manos constantemente entre blancos e indgenas, serias diferencias entre
Yucatecos y Gobierno Federal, rencillas muchas veces cruentas entre los propios Mayas,
descarado trfico de armas y todo tipo de contrabando, sin olvidar el uso del territorio colonial
como santuario de los alzados.

Obviamente para los Mayas no haba lmites o fronteras vlidas, pues su revuelta reclamaba
precisamente la recuperacin de sus tierras, las cuales no podan ser divididas artificialmente
por el hombre blanco, fuera ste espaol, ingls o yucateco. Tanto era as que los propios
ingleses fueron vctimas de ataques liderados por el legendario Marcos Canul de los Icaich.


Este grupo lleg a derrotar a los britnicos en San Pedro y en diversas acciones atac y
ocup numerosas poblaciones de la colonia. Con refuerzos llegados de J amaica, finalmente
los ingleses lograron herir de muerte a Canul durante la batalla de Orange Walk.

Y as continu la reyerta hasta finales del siglo XIX.

Con admirable sentido prctico, Mxico decidi formalizar la delimitacin entre la ya
indiscutible colonia inglesa y nuestro propio territorio, al mismo tiempo poniendo coto a esa
confusa y perjudicial situacin fronteriza. A pesar de despiadados ataques internos, sobre
todo pero no exclusivamente en el Congreso, se firm un Tratado de Lmites en 1893.

8
De hecho el tratado se firm en Belize.

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Se acus al Secretario Mariscal de haber entregado a los ingleses nuestro patrimonio, de
desconocer la historia, de exceso en su afn por terminar de una vez por todas con el
conflicto, etc., pero el Tratado fue aprobado y ratificado.

Tal vez la Guerra de Castas hubiera terminado hacia esas fechas dado el enorme desgaste
sufrido por los Mayas, pero nadie puede asegurarlo de manera cierta. En cambio el Tratado
acab con los apoyos de suministros provenientes de la colonia inglesa y la normalizacin de
los contactos transfronterizos coadyuv de manera decisiva a crear una atmsfera de paz.

Indudablemente fue un instrumento muy controvertido, al grado de haber ocultado la parte
positiva del acuerdo, es decir, la autorizacin ad perpetan para navegar a travs de la Baha
de Chetumal. En efecto, se trataba del nico acceso martimo a Chetumal, slo que era en su
gran mayora territorio de Honduras Britnicas y, obviamente, muy bien resguardado por la
Royal Navy.

Todava est vigente el acuerdo (es anexo al Tratado mismo) y nunca ha habido incidentes o
fricciones por su aplicacin.

IV.- AUTONOMA LIMITADA; GEORGE PRICE, PADRE DE LA PATRIA; EL
HURACN HATTIE Y LA NUEVA CAPITAL.

Antes de hablar del proceso de creativo de Belize como Estado independiente, es
menester describir la conformacin de su elemento pueblo.

Al iniciarse el ya agnico siglo XX, Belize contaba con la poblacin tradicional, compuesta
por los habitantes originales, los Mayas, amn de los colonizadores ingleses, sus esclavos
(para entonces ya liberados), la poblacin mestiza resultante de la ola de refugiados de la
Guerra de Castas; y resaltaba ya otra presencia hasta ahora apenas mencionada: Los
Garfuna.

Resultado de la unin entre Caribes y esclavos rebeldes que se haban fugado de sus amos
y que se asentaron en la isla de San Vicente, los combativos y rebeldes Garfunas
9
se
convirtieron en un serio dolor de cabeza para los ingleses, no solamente por su actitud
insumisa, sino adems por ser un mal ejemplo viviente.

A pesar de que los britnicos haban ganado la guerra contra ellos en 1795-96, nunca se
rindieron y el conflicto no pareca tener fin. Por ello, cansados de lidiar con aquellos altivos
ex-esclavos, simplemente los expulsaron de sus dominios, slo para encontrrselos otra vez
en Belize ms tarde.

La primera huella en Belize de este peculiar grupo tambin conocido como Caribes Negros
se encuentra hacia 1802. La deportacin inglesa los haba llevado a la isla hondurea de
Roatn en 1797 y de ah se dispersaron por toda la costa centroamericana. Su larga estancia
en las costas de Honduras agreg otro elemento a su peculiar cultura y hoy son portadores
de apellidos hispanos, a pesar de desconocer la lengua casi totalmente.


9
En realidad el plural es Garinagu.

14

La tradicin seala que los Garfuna respaldaron un fallido golpe de estado en Honduras y,
como consecuencia, las condiciones de su estancia empeoraron, de tal suerte que una vez
ms emigraron, esta vez hacia Honduras Britnicas, donde arribaron en masa el 19 de
noviembre de 1832.

Ese da es fiesta nacional en Belize, conocido como Da de los Asentamientos Garfuna.

Geogrficamente su hogar fue principalmente el distrito de Stann Creek, al sur de la ciudad
de Belize. Todava hoy se encuentran mayoritariamente en los alrededores del poblado de
Dangriga. Pescadores y agricultores de subsistencia, contaban con armas muy superiores a
las del otro grupo de origen africano (los llamados Creoles trados como esclavos
exclusivamente para el corte de madera).

Pero incluso en esa actividad incursionaron, orillados por la negativa oficial a permitirles el
derecho de propiedad sobre la tierra.

La llegada de los Garfuna agreg miles de nuevos habitantes a la colonia y, sumados a los
refugiados de la Guerra de Castas, prcticamente duplicaron la poblacin (los Garinagu eran
hacia 1845 menos de 10,000 pero para 1861 ya pasaban de 25,000). El advenimiento de las
plantaciones bananeras atrajo un fuerte flujo de centroamericanos, combinados con
importaciones de trabajadores temporales chinos, a tal grado que entre 1871 y 1891 la
poblacin creci a un ritmo de casi 6%.
10

Finalmente, miles de Mayas emigraron al sur de Belize desde el Petn, empujados por la
creciente presencia de empresas cafetaleras alemanas.
11

Al amanecer el nuevo siglo (XX) parece tambin empezar la influencia norteamericana en
Belize, con tan asombrosa rapidez que en dos dcadas sustituy al Reino Unido como primer
socio comercial de la colonia.

Nuevos cultivos orientados al mercado norteamericano adquirieron inusitada importancia,
como fue el caso del chicle, por lo menos hasta la dcada de los treinta.

Con el incremento del comercio y la inversin lleg tambin la oleada cultural, la cual llevaba
influencia en las decisiones polticas prcticamente de la mano.

Los representantes en los Concejos eran cada vez ms comerciantes y menos
terratenientes; a pesar de que la exportacin de azcar era una de las mayores fuentes de
divisas, era cada vez ms claro que la tierra cultivada por los ex-refugiados de la Guerra de
Castas era propiedad de los industriales del azcar, de tal suerte que muy pronto los
agricultores derivaron en obreros, en condiciones sumamente desfavorables, como sus
colegas leadores de origen Garfuna o peones bananeros venidos de Centroamrica.

Pero tanta diversidad tnica, con tan uniformes penurias, no era favorable para el desarrollo
colonial.


10
Idem. Supra.
11
Algunos autores han bautizado a esa invasin alemana como la segunda conquista.

15
Los britnicos saban que todo eso era caldo de cultivo de malestar y posiblemente rebelda,
a menos que existiera un grupo heredero de sus valores, el cual no slo aceptara usos,
costumbres, tradiciones y mtodos, sino que adems los hicieran suyos. Con el crecimiento
de los Mayas, Garfuna, Mestizos, etc., ms y ms recay la labor de uniformizacin en los
Creoles.

Nada despreciable es el hecho de que todava hoy, la burocracia es en su inmensa mayora
de origen Creole, como que fueron los preparados, entrenados y adoctrinados para ello.
Parte de las medidas tomadas incluyen el mito de la sealada Batalla del Cayo San J orge,
pues tiende a proyectar la imagen de unin entre esclavos y amos para una meta comn, en
ese caso la derrota de los invasores.

Pero lo realmente importante para los efectos de este captulo es el nacimiento y
consolidacin del movimiento obrero, presente a travs del siglo en varias revueltas para
protestar contra las infames condiciones prevalentes. Los lderes de dicho movimiento
trataban de obtener concesiones en materia de derechos estrictamente laborales, pero
tambin se sumaban ms y ms a los reclamos por una adecuada representacin poltica.

En 1935, en medio de una sorda lucha por reformas constitucionales que permitieran la
existencia de representantes electos, las mujeres se unieron al movimiento reclamando
igualdad de oportunidades; con lo cual se consolidaron las bases embrionarias del poder
organizado, obviamente bajo la sombrilla del movimiento obrero.

Pero pasaran muchos aos para que el sueo del sufragio universal se hiciera realidad.

En 1950 se escuch fuerte y retadora la voz de George Price, a la sazn Secretario del
Comit del Pueblo y antecedente inmediato del partido de la independencia, el Partido Unido
del Pueblo (P.U.P.). Cuando supuestamente slo se reclamaba airadamente al entonces
Gobernador haber devaluado el dlar beliceo, Price habl de unin nacional y marc el
camino hacia la autonoma.

Ya en 1951 propona el P.U.P. cambiar el nombre de Honduras Britnicas por Belize y nunca
ms usaron aqul, aunque oficialmente persisti hasta 1973. Muy gradualmente fue
creciendo la influencia y representatividad del partido y con ello la popularidad de Price.

La ruta fue difcil, varios de sus correligionarios (y l mismo) visitaron las crceles, pero el
camino era irreversible. En 1954, todos los sufrimientos y vicisitudes fructificaron: el PUP
gan abrumadoramente las primeras elecciones de sufragio universal y con ello accedi a un
grado de autodeterminacin nunca antes imaginado.

No obstante, los siguientes siete aos probaron ser de una muy tenue tregua entre el poder
colonial y el triunfante partido.

Price se rehusaba obstinadamente a cooperar con ellos, a pesar de la opinin de algunos de
sus ms cercanos correligionarios y, eventualmente, las discrepancias crearon divisiones
internas que rompieron la unin entre el movimiento laboral y el partido; pero tambin
consolidaron de manera definitiva la plataforma de ste, con menos nfasis en cuestiones
gremiales y mucho ms en temas constitucionales y nacionalistas.


16
La Constitucin de 1961 estableci por primera vez la figura del Primer Ministro y un
Gabinete.

Para entonces, Inglaterra haba ya aceptado conceder la independencia a Belize, pero el
entorno internacional empezaba a tener gran impacto, sobre todo ante la amenaza
guatemalteca. En efecto, se saba que la nueva nacin sera fcil presa de las ambiciones de
su ms grande vecino sin la intervencin inglesa.

En ese mismo cataclsmico ao, un pavoroso huracn, Hattie, prcticamente destruy a la
ciudad de Belize paralizando la nacin entera. Price qued muy impresionado por los
destrozos y percibi la vulnerabilidad de un pas afectado de macrocefalia, con un altsimo
porcentaje de su vida ligado a la ciudad de Belize.

Adems, notaba con preocupacin el escaso crecimiento del interior, a pesar de condiciones
climatolgicas favorables.

Tal vez influido por el ejemplo de Brasil y su Brasilia, Price concibi la idea de fundar una
nueva capital, lejos de los destructivos efectos de los huracanes, en una rea verde, de
mejores condiciones sanitarias (Belize est prcticamente en un pantano), cntrica, propicia
adems para la atraccin de movimientos demogrficos hacia el corazn del pas.

De ah surgi la nueva capital, Belmopn.

A finales de 1998, el inmenso huracn Mitch estuvo a punto de causar otra tragedia en la
joven nacin vecina. Belmopn prob ser el centro neurlgico del gobierno y adems se
convirti en el refugio predilecto de casi toda la poblacin de Belize City.

Insuficientes resultaron las instalaciones, calles, comercios y servicios, para absorber a la
enorme poblacin incidental llegada de Belize. Todo mundo tena en sus residencias a
parientes, amigos y conocidos; las escuelas se atiborraron de refugiados y los hoteles fueron
insuficientes.

El susto no pas a mayores, cierto, pero dej huella. Hoy, varias empresas, instituciones y
embajadas planean ya cambiar sus oficinas a Belmopn, con lo que se ha generado una
verdadera fiebre de construccin. El sueo de Price empieza a tomar visos de realidad.

17

V.- BELIZE, ESTADO INDEPENDIENTE. EL SISTEMA WESTMINSTER,
GEORGE PRICE (2), LOS PARTIDOS POLTICOS, LA ALTERNANCIA, MR.
PRICE: SIEMPRE MR. PRICE.

Antes de considerar de manera realista la perspectiva de acceder a la independencia,
Belize tena que asegurar su flanco occidental. La aeja reclamacin guatemalteca se
tornaba amenaza de invasin en cuanto se retiraran las fuerzas britnicas, pero por otro lado
tampoco era deseable perpetuar la presencia de stas en un Estado independiente.

En otras palabras, no poda hablarse de verdadera independencia mientras hubiera tropas
extranjeras en territorio nacional; pero si las tropas se retiraban seran invadidos y perderan
inevitablemente su independencia.

Peor an, los britnicos se mostraban reacios a garantizar la seguridad de la nueva nacin
una vez independiente.

Price trat de romper el crculo vicioso por medio de negociaciones con Guatemala, de tal
suerte que en marzo de 1981 se firmaron unas Bases para el Entendimiento (Heads of
Agreement). Estas contenan un total de 16 clusulas, cuidadosamente redactadas para
evitar malentendidos.

Sin embargo, stos se dieron de todos modos.

Las diversas interpretaciones estaban tan apartadas unas de otras que pensar en
entendimientos era ftil labor. Incluso hubo protestas violentas en Belize, avivadas por una
oposicin poltica ansiosa de aprovechar cualquier debilidad de Price: fue acusado de querer
entregar Belize a los guatemaltecos.

Cuando finalmente las plticas se suspendieron en julio de 1981, los britnicos aceptaron a
regaadientes dar la garanta de seguridad indispensable para el siguiente paso: la
independencia.

A las cero horas del da 21 de septiembre de 1981 se arri la bandera britnica y se iz la
Belicea. Tambin se escuch por primera vez la expresin Tierra de Hombres Libres (Land
of the Free), en la letra del Himno Nacional.

Se adopt el sistema de Monarqua Constitucional, donde la Reina de Inglaterra es J efe de
Estado, representada por un Gobernador General in situ. Se trata de un parlamentarismo a la
manera inglesa, conocido como Westminster por el lugar donde se ubica el Parlamento en
Londres.

En realidad el Gobernador General tiene facultades muy reducidas, prcticamente slo
ceremoniales, tal como sucede en el Reino Unido con la figura de la Reina.

El J efe de Gobierno es el Primer Ministro, auxiliado por un Gabinete, pero de hecho es el
J efe de Estado. El Parlamento se llama Asamblea Nacional y se compone de dos cmaras:
la de Representantes (electos) y la de Senadores (designados). El Partido con mayor nmero

18
de asientos en la Asamblea automticamente asume el poder, con su lder como Primer
Ministro (PM). Ms adelante explicar las modalidades de este proceso.

Los ministros del Gabinete son seleccionados por el PM de entre los ocupantes de la
Asamblea (sean Representantes o Senadores), es decir, para ser Ministro es indispensable
formar parte del Parlamento.

El otro poder es por supuesto el J udicial, compuesto por la Corte Suprema y diversos niveles
de imparticin de justicia. Lo novedoso aqu es la posibilidad de designar J ueces y
Magistrados de cualquiera de los pases de la Comunidad Britnica de Naciones (British
Commonwealth), dada la identidad de sistemas judiciales e incluso su concatenacin, donde
algunos recursos pasan de las cortes locales a las del Reino Unido.

La debilidad aparente del sistema radica en el nmero de asientos necesarios para formar
mayora en la Asamblea, en relacin con el nmero de ministerios del Gabinete.

En efecto, en las actuales circunstancias casi todos los parlamentarios de la mayora son a la
vez Ministros, lo cual trae como consecuencia una total confusin entre Legislativo y
Ejecutivo. Resulta imposible imaginar un rechazo o siquiera disentimiento del legislativo a las
polticas del rgimen: son los mismos.

Hay otras razones menos aparentes para cuestionar la adopcin estricta del sistema
Westminster, pero las reservaremos para un comentario ulterior.


Pero volvamos a los inicios de la vida independiente de Belize.

La euforia cundi por todo el territorio en la alborada de esa nueva vida. George Price estaba
al fin al mando de un pas independiente y se dispona a realizar los sueos libertarios de su
pueblo. Pero de pronto el precio internacional del azcar se desplom y la economa belicea
entr en profunda crisis.

La fiesta haba durado muy poco.

De pronto, la popularidad de Price segua el camino de los precios del endulzante, como
cruel broma relacionada con su apellido (Price significa precio). El Fondo Monetario
Internacional intervino cuando Belize se vio incapacitado para enfrentar sus compromisos
internacionales, pero las usuales frmulas de dicho organismo acabaron con la poca
popularidad restante al gobierno de Price.

Se elevaron los impuestos y se redujeron gastos; ya no fue posible garantizar el precio de los
productos agrcolas; y los servicios y obras pblicas sufrieron severos retrocesos.

Segn algunos analistas, haba tambin un elemento de cansancio en el PUP, resultado de
tantos aos en el poder (siete comicios ganados al hilo). Lo cierto es que las elecciones de
1984 se realizaron en medio de la crisis y el nuevo partido poltico, el Partido Democrtico
Unido (United Democratic Party o UDP) arras.

Pero quin o quines eran esos opositores hoy victoriosos?. De dnde sali ese nuevo

19
partido y cul era su plataforma ideolgica?.

Desde los tiempos de la alianza entre el movimiento obrero y los primeros grupos polticos se
dieron al mismo tiempo dos fenmenos tal vez inevitables: el surgimiento de nuevos lderes y
la escisin entre stos. Price empez el movimiento de resistencia y protesta rodeado de
colegas, pero muy pronto se hicieron evidentes las diferencias de criterio.

Primero hubo voces favorables a la cooperacin con el poder colonial en tanto se avanzaba
hacia la autonoma y posteriormente a la independencia, a lo cual se opuso de manera
irreductible Mr. Price. Su negativa cre la primera escisin.

Ms tarde surgieron opositores a los intentos de Price por insertar a Belize en su entorno
geopoltico natural, Centroamrica, los cuales preferan el acercamiento con el Caribe. De
nuevo se dio una separacin (la cual hasta cierto punto perdura).

Finalmente se unieron los disidentes en una sola corriente opositora a la independencia, la
cual consideraban prematura.

Las siglas del nuevo Partido fueron UDP y la cabeza visible del movimiento opositor fue
Manuel Esquivel. Al principio la plataforma de stos era un enigmtico llamado al cambio (es
tiempo de cambiar, decan), pero en el fondo sus diferencias con el PUP se diluyeron en
cuanto la independencia fue un hecho consumado.

Todava hubo un intento por calificar a Price de socialista, con lo cual el nuevo partido se
auto-defina como lo contrario, pero en la prctica los partidos diferan solamente en
enfoques especficos, es decir, no en el qu, sino en el cmo.

Ciertamente el UDP supo capitalizar el descontento resultante de la crisis econmica y con
su triunfo dio principio a una ininterrumpida y no necesariamente intencional alternancia en el
poder.

Pero Price estaba muy lejos de rendirse: En el siguiente perodo, 1989, el PUP recuper el
poder derrotando al UDP.

Esta nueva oportunidad trajo al PUP excelentes resultados en sus polticas de gobierno.
Atrs quedaban los cansancios y el ejercicio del poder pareca revitalizar a Price. Todas las
encuestas colocaban su ndice de popularidad por las nubes y nada pareca frenar su exitosa
marcha, salvo el inexorable plazo de cinco aos.

Ante esas circunstancias tan favorables se decidi en el seno del partido (PUP) convocar a
elecciones adelantadas (lo cual es posible en el sistema parlamentario) y con ello prolongar
de facto su ejercicio, pues un triunfo electoral traera como consecuencia el inicio de un
nuevo periodo en el poder.

Para su inmensa sorpresa fueron derrotados por mnimo margen. Pesaron mucho factores
fuera de control del rgimen, como la salida del destacamento britnico y la reactivacin del
reclamo guatemalteco, especialmente cuando pareca desaparecer la sombrilla protectora
del Reino Unido.


20
Poco consuelo sera el haber ganado el voto popular (el triunfo se mide por el nmero de
asientos en la Asamblea Nacional, no por el total de sufragios recibidos); de nada servira
lamentar la desafortunada coalicin entre el UDP y el minoritario partido NABR (National
Alliance for Belizean Rights), la cual les dio un asiento adicional y decisivo; la realidad
incontrovertible era slo una: Sin haber concluido su perodo entregaran el gobierno.

La crisis interna del PUP era inevitable. Poco despus vendra lo impensable: George Price
anunciaba su retiro del liderazgo ejercido desde los cincuenta.

No se trata del abandono total de su carrera poltica pues conserva su asiento en la
Asamblea Nacional y es, por supuesto, lder moral del PUP, pero dej elegantemente el paso
a nuevas generaciones representadas por Said Musa, joven pero experimentado elemento
salido de las filas del partido.

Lo que se diga de Mr. Price nunca ser suficiente.

Su carrera es verdaderamente fascinante y su aportacin a la gnesis de Belize como
Estado independiente trascendental. Inaugur un estilo de hacer poltica cabalmente
inusitado, frecuentemente imitado pero difcilmente igualado. Dueo de una personalidad
atractiva, convincente, casi siempre en sintona con el sentir popular, al cual recurri
confiadamente una y otra vez, an en contra de la opinin de otros lderes.

Cuando entr en conflicto la inclinacin de sus correligionarios con su percepcin de la
voluntad del pueblo, no vacil en romper con aqullos.

Obviamente esas cualidades lo llevaron al triunfo hasta en las ms complejas empresas,
pero no debe perderse de vista otro incuestionable valor personal: su intachable vida privada.
Ni sus ms acervos crticos lo acusaron jams de corrupcin; no hubo escndalos amorosos,
ni inclinacin a beber, la ostentacin estuvo, y est, evidentemente reida con su conducta; y
el nepotismo le es desconocido.

Mi admiracin y respeto son bastante objetivos, pues si bien he tenido el privilegio de
conocerlo y tratarlo, de ninguna manera puedo calificar a esa relacin como de amistad. De
hecho, slo nos hemos reunido en tres ocasiones desde mi arribo a esta adscripcin hace ya
ms de tres aos. Mi opinin, entonces, no es producto del afecto ni est teida por el cario.

A la hora de poner en la balanza lo que sus detractores y sus admiradores dicen, puedo
asegurarle una decisin favorable, mxime ahora, cuando el paso del tiempo ha ido borrando
el malestar y aquellos enfrentamientos de antao quedan slo como ancdotas dignas de
mencin en las plticas de caf.

Y para muestra basta un botn.

Recientemente, Price fue entrevistado por un popular comentarista de radio, en el marco de
la campaa poltica que culmin con las elecciones del 27 de agosto de 1998. Pues bien, fue
tal el entusiasmo levantado por este inolvidable personaje, que hubo numerosas llamadas
inquiriendo sobre el costo de la cinta donde se reprodujera la entrevista. La gente estaba
dispuesta a pagar por conservar sus palabras.


21
Y mire usted, al empezar la campaa la presencia de George en la propaganda era escasa,
no slo en el mbito nacional sino incluso en su propio distrito, bastante disputado. Pero
poco a poco los lderes se percataron del valor de su imagen (un periodista de Quintana Roo
deca: estos beliceos tiene vivo a Benito Jurez y no lo aprovechan), sobre todo para
dejar constancia de que el relevo en el partido haba sido concertado.

Hacia los ltimos das previos a los comicios ya se vea por doquier su rostro castigado por el
tiempo.

Pero si su renacimiento fue a tiempo o si alcanz para ganar de nuevo un lugar en el
Parlamento slo poda decirlo el electorado; aqu se trata nicamente de manifestar la
admiracin del autor, obviamente compartida popularmente en Belize, pero no
necesariamente traducida en votos.

Al final de este trabajo analizaremos el resultado de las elecciones y su impacto en la carrera
poltica de Price.

VI.- LA AMENAZA GUATEMALTECA: ANTECEDENTES, EL TRATADO DE
1859 (ART. 7); SALIDA AL MAR E ISLAS SAPODILLAS (ZAPOTILLAS);
SITUACIN ACTUAL.

Indiscutiblemente el territorio hoy ocupado por Belize era parte de la Nueva Espaa.
Como ya qued establecido, los britnicos reconocieron la soberana espaola y la madre
patria dej constancia de su ejercicio, particularmente cuando lanz ataques contra los
asentamientos ilegalmente fortificados.

Ciertamente los colonos mostraron siempre intencin de permanencia, pero sta fue motu
proprio, sin sancin o respaldo ingls. Para efectos de la reclamacin guatemalteca no es
eso lo trascendental, ms bien debe tratar de establecerse si todo el territorio estaba bajo
jurisdiccin de la Capitana General de Yucatn, o si la parte sur estaba reservada a
Guatemala; sin olvidar la posibilidad, titularidad y singularidad de derechos hereditarios al
retirarse Espaa de la regin.

La controversia respecto del primer punto es interminable. Hay realmente pocos indicios
claros de presencia fsica proveniente de Guatemala, fuera de los misioneros dominicos,
pero s hay indicios favorables a Yucatn pues de all partieron todas las incursiones
punitivas.

En el mejor de los casos es posible hablar de dos territorios, basados en el alcance de las
concesiones para la explotacin maderera, las cuales nunca otorgaron derechos a Inglaterra
sobre la porcin sur de Belize (allende el Ro Sibn).

Pero tampoco fue ocupada efectivamente dicha porcin por nadie.

El verdadero arranque de las pretensiones guatemaltecas proviene de un tratado firmado con
el Reino Unido en 1859. Para stos era un Tratado de Lmites que no haca reconocimiento
expreso a Guatemala de derechos territoriales anteriores, ms bien al contrario, era tcita
aceptacin guatemalteca de la ocupacin efectiva por parte de Inglaterra.

22
Pero segn Guatemala era un Tratado de cesin de derechos con condicin suspensiva, es
decir, dependiente de la realizacin de cierta hiptesis normativa para producir efectos.

El art. 7o. de dicho Tratado fue la base fundamental de la reclamacin guatemalteca, pues
sealaba que ambas partes pondran su mejor esfuerzo para comunicar por va terrestre a la
ciudad de Guatemala con la costa atlntica de Guatemala, cerca del asentamiento de Belize.

A pesar de los esfuerzos realizados fue imposible llegar a un acuerdo respecto de la
construccin de esa va terrestre, en parte por falta de recursos de Guatemala y en parte por
dificultades tcnicas.

En 1940, Guatemala declar nulo el Tratado por incumplimiento, por parte de Inglaterra, de
los trminos del citado art. 7o; e incluso en su Constitucin de 1945 declar a Belize territorio
guatemalteco. De ah en adelante, cada avance hacia la autonoma e independencia de
Belize fue duramente cuestionado por Guatemala, al grado incluso de romper relaciones
diplomticas con el Reino Unido en 1963.

Los britnicos reforzaron su presencia militar ante la inminencia de una invasin
guatemalteca y permanecieron en Belize incluso despus de la independencia el 21 de
septiembre de 1981.

Fue hasta el 11 de septiembre de 1991, diez aos ms tarde, cuando se establecieron
relaciones diplomticas entre los dos pases; pero a pesar de contar con Embajadores
residentes en ambas partes Guatemala pospuso la aceptacin formal de Credenciales al
enviado beliceo hasta 1997.

La disposicin para llegar a un acuerdo condujo a la Asamblea Nacional de Belize a aprobar
la Ley de reas Martimas del 30 de enero de 1992, la cual conceda a Guatemala libre
acceso al Atlntico en un corredor de 24 por 8 millas, a travs de la zona econmica
exclusiva de Belize.

Con ello pareca iniciarse el camino hacia la resolucin del diferendo, pero no ha sido as.

El corredor abierto por la renuncia belicea a una parte de su zona econmica exclusiva no
resolvi el problema de los territorios insulares ubicados en el Golfo de Honduras, a la salida
de la Baha de Amatique (Islas Sapodillas o Zapotillas), incluso reclamados por Honduras

Y contina el impasse.

Las delegaciones de plenipotenciarios se han reunido en diversas ocasiones, han surgido
alentadoras declaraciones y los contactos bilaterales han proliferado; pero el costo poltico de
una renuncia al territorio de Belize sigue siendo inaceptable para los guatemaltecos, mientras
que para los beliceos hay una trampa oculta si las negociaciones giran alrededor de una
disputa territorial.

Imagnese cul podra ser el argumento en Guatemala para cambiar de rumbo radicalmente
y descubrir, despus de tantos aos de repeticiones en contrario, que Belize no es parte de
su territorio despus de todo.


23
Trate de visualizar en qu condiciones podra Belize poner en la mesa de negociacin su
propio territorio o parte de l; ni siquiera cuenta el Primer Ministro con facultades para poner
a discusin el tema. Ms an, cualquier arreglo que se tradujera en prdida de territorio
tendra que ser ratificado en referndum, obviamente imposible de ganar.

Pero han habido avances.

La posibilidad de una invasin se ha desvanecido. Hasta hace poco, las fuerzas armadas se
consultaban de manera rutinaria, cooperaban en labores de proteccin a los recursos
forestales, prevencin de accidentes, etc. Sus mecanismos de cooperacin y concertacin
superaban incluso a los de los gobiernos.

El comercio fronterizo tambin se ha incrementado sustancialmente; hay comunicacin area
a esplndido nivel, pues la consolidacin de un consorcio centroamericano de servicios
areos permite comunicar a travs de San Salvador a toda la regin. A Belize llegan
diariamente tres vuelos (de Guatemala, El Salvador y San Pedro Sula, Honduras), los cuales
siguen a Miami.

Por la tarde regresan rumbo al istmo centroamericano.

Adems hay vuelos de aeronaves pequeas a Guatemala y Las Flores/Tikal.

Si a todo ello agregamos la creciente cooperacin en el mbito del programa de desarrollo
turstico Mundo Maya, as como los esfuerzo de Mxico por incluir a Belize en los
mecanismos de cooperacin de la regin centroamericana conocidos como Tuxtla, se ver
ms claramente como poco a poco se normalizan las relaciones entre Guatemala y su
reclamado vecino.

Y sin embargo se dan fricciones incidentales y se calienta el ambiente a menudo.

En lo que algunos identifican como tendencia usual, al cambio de gobierno en Guatemala se
agudizaron las diferencias recientemente. Primero hubo varios incidentes fronterizos, algunos
de los cuales resultaron en la muerte de nacionales guatemaltecos.

La frontera entre ambos pases es una verdadera anomala, pues para Guatemala es slo
una lnea de referencia y su ubicacin es imprecisa. Por ello, se dan fenmenos como el de
la aldea El Arenal, donde la citada lnea pasa en medio de un campo de ftbol y cada
portera est en distinta nacin.

Nada de extrao tiene pues, que la muerte de un guatemalteco sea objeto de controversia
respecto del lugar de los hechos, ambos lados reclamando que el suceso fue en su territorio.

Belize alega que hay constantes invasiones de campesinos guatemaltecos, no siempre con
cultivos lcitos. Cuando proceden a desalojarlos Guatemala reclama a su vez la invasin,
pues a su juicio los campesinos estaban en su propio pas.

Y para acabar de confundir las cosas muchas de esas reas son protegidas, de tal suerte
que incluso si fueran beliceos seran desalojados, pues est prohibido desmontar y sembrar
en ellas.

24


Luego sobrevino la detencin de una patrulla belicea.

La versin guatemalteca, de muy estridente tratamiento en la presa, era que los soldados (la
soldadesca segn algunos diarios) estaban en territorio de Guatemala y como iban armados
se les acus formalmente.


Los beliceos alegaron que al encontrarse los dos grupos el nico provisto de Posicionador
Electrnico eran ellos y por medio de dicho instrumento demostraron estar de su lado de la
lnea de referencia. Pero de nada sirvi el argumento y se los llevaron detenidos.

Luego, un J uez los liber a la custodia del Embajador en funciones (el Embajador de Belize
estaba muy enfermo y eventualmente falleci), quien de inmediato los traslad a su pas.
Resultado: gran escndalo en Guatemala y expulsin del diplomtico.

Predecir cmo va a resolverse la eterna reclamacin sera muy aventurado, pero a mi juicio
tarde o temprano suceder.

Todo es cuestin de tiempo, estoy convencido.

Hace muy poco, fuimos testigos de una ceremonia luctuosa para Mike Mena, el fallecido
primer Embajador de Belize en Guatemala. En aquella concurrida ocasin, se le rindi un
muy merecido homenaje por parte del pueblo y gobierno beliceo, pero lo ms relevante fue
sin duda la presencia del Vice Canciller guatemalteco, portador de una condecoracin
pstuma para Mena que ni su propio pas le otorg.

Gestos como esos contribuyen ms a distender el ambiente que diez reuniones de
coordinacin.

VII.- MXICO Y BELIZE: APOYO ANTE EL DIFERENDO, VECINDAD,
AFINIDAD, SEGURIDAD; LA FRONTERA, MIGRACIN Y LMITES.

Mxico fue el primer pas en establecer relaciones diplomticas con Belize el mismo
da de la declaratoria, es decir, el 21 de septiembre de 1981. Adems fue el segundo en
acreditar Embajador
12
y la representacin consular data de la dcada de los cincuenta.

Desde entonces, el acercamiento entre los dos pases ha ido en aumento, hecho muy
especialmente ilustrado por el importante respaldo dado a los esfuerzos de Belize por ser
admitido en el Sistema Interamericano, con pleno reconocimiento de su status de Estado
soberano.

Asimismo, es prueba adicional de ello la labor en pro de una solucin al diferendo con
Guatemala, ampliamente apreciada por el Gobierno de Belize.

En la relacin bilateral ha destacado de manera notable la cooperacin en materia

12
Fue primero si se considera que Inglaterra no acredita Embajador sino Alto Comisionado, pues la Reina es J efe de ambos
Estados

25
econmica, cientfico-tcnica y educativo-cultural, como da fe la constante interlocucin de
los J efes de Estado, traducida en diez entrevistas en Mxico y tres ms en Belize.

Adems, La Comisin Binacional ha producido numerosos acuerdos y tratados, de los que
cabe destacar la creacin de la Comisin Internacional de Lmites y Aguas, as como la
instalacin del Comit Mixto sobre Cooperacin contra el Narcotrfico y la
Farmacodependencia.

A pesar de que Mxico es el segundo socio comercial de Belize, el alcance geogrfico del
intercambio se limita en gran medida a Chetumal. Si bien el universo potencial no es muy
elevado, tampoco ha sido aprovechado en toda su extensin y se carece de un instrumento
que regule la relacin comercial bilateral.

Sin embargo, hay foros o mecanismos operativos en materia de cooperacin econmica,
entre otros: La Subcomisin de Asuntos Econmicos, Comerciales y Financieros; el Acuerdo
de Facilitacin Aduanera; el Acuerdo Marco de Cooperacin Hacendario-Financiera; un
Convenio para el Suministro de Energa Elctrica por medio del cual la parte mexicana se
comprometi a suministrar de 5 a 25 MW.

Tambin se sign un Memorndum de Entendimiento en Materia de Transporte Areo, a
pesar del cual actualmente slo existen vuelos regulares entre Belize y Cancn dos veces a
la semana.

En agosto de 1994 Belize present a Mxico un proyecto de Acuerdo de Alcance Parcial en
materia de comercio que Mxico consider poco adecuado a las circunstancias actuales, por
lo que se contrapropuso un Acuerdo Comercial con 20 captulos, es decir, un verdadero
Tratado de Libre Comercio.

Ms adelante se ver por qu no se le ha dado esa connotacin y se prefiri llamarle
simplemente Acuerdo Comercial.

El Instituto de Cooperacin y Cultura Mxico-Belize desde su apertura en 1993 ha sido
instrumento clave para el acercamiento entre ambos pueblos y se ha constituido en el
principal foro para el intercambio permanente en los campos de la educacin y la cultura.

Adems imparte clases regulares de espaol como segunda lengua y la matrcula incluye a
empresarios, profesionistas, intelectuales, artistas, diplomticos y amas de casa, sin olvidar
el elemento catalizador: los estudiantes.

Como prueba adicional del buen xito del programa ya se imparte el espaol como materia
obligatoria en las primarias del pas.

Por razones de inmediata vecindad geogrfica, as como histricas y de seguridad nacional,
Centroamrica constituye una rea de inters prioritario para Mxico.


Por ello y por su carcter de pas fronterizo, Belize tiene importancia estratgica y existe
necesidad de impulsar una poltica activa, a la par que cuidadosa, hacia nuestro vecino,
incluso al grado de otorgarle un espacio prioritario en nuestra agenda internacional.

26

Si los canales de comunicacin se mantienen abiertos, si la imagen de Mxico es positiva, si
la actitud hacia Belize se percibe como fraternal y si eliminamos los focos de friccin, se
habrn creado las bases para el florecimiento de la cooperacin en todos los mbitos.

Desde el punto de vista sustantivo se debe impulsar la negociacin del nuevo tratado de
lmites y ello conlleva revisar la Convencin Complementaria que asegura la libre navegacin
por aguas territoriales beliceas a la armada de Mxico, pues data de 1897 y se firm con
Inglaterra.

Asimismo, continuar los trabajos de la Comisin Internacional de Lmites y Aguas y promover
las negociaciones que lleven a firmar el acuerdo comercial. Esto debe combinarse con una
activa promocin de las relaciones regionales, es decir, del incremento en los contactos entre
Belize y los estados de Campeche, Tabasco y Yucatn, tal como lo ha hecho, muy
exitosamente, Quintana Roo.

Por lo pronto ya se promovi la visita, acompaado de un numeroso contingente empresarial,
del Gobernador de Tabasco, la cual result muy positiva.

Dada la dependencia que Belize muestra de las importaciones, las visitas fronterizas
representan el ms intenso y frecuente contacto entre los dos pueblos y son adems fuente
de ingreso para el comercio de Quintana Roo (Chetumal). Un slo dato estadstico ilustrar
claramente la intensidad de los contactos: en 1999, se registraron cerca de 600,000 cruces
de beliceos a Chetumal, de una poblacin total de alrededor de 240,000.

Obviamente la inmensa mayora de esos viajes fue en visita fronteriza.

Resolver los problemas migratorios reviste particular importancia. Muchos de esos turistas
son originarios de la regin norte de Belize (Orange Walk y Corozal), y por lo tato les resulta
sumamente inconveniente viajar dos horas al sur, hasta la ciudad de Belize, para obtener su
tarjeta de turista y despus viajar al norte otras dos horas rumbo a territorio mexicano.

Durante algn tiempo se resolvi parcialmente el problema con un Consulado Mvil, es decir,
trasladando personal y equipo una vez a la semana (todos los mircoles) hasta Orange Walk
y Corozal, con el fin de expedir los permisos in situ.

Pero eso era slo un paliativo y ya repercuta en desgaste de vehculos y exposicin a
accidentes.

En lugar de ello propusimos la creacin de un Consulado Honorario en Corozal, a 15
kilmetros de la frontera el cual desde su apertura ha expedido miles de tarjetas de turista a
viajeros beliceos, amn de coadyuvar en labores de proteccin a mexicanos y como enlace
con las autoridades fronterizas.

Recientemente, el Instituto Nacional de Migracin puso en vigor una tarjeta de cruce
fronterizo que viene a agilizar considerablemente el trnsito de beliceos a Chetumal. Todos
los nacionales del vecino pas, no slo los vecinos del rea fronteriza, podrn adquirir el
documento. El progreso en la expedicin va a gran velocidad y pronto ser la mayora de la
poblacin de Belize portadora de la tarjeta.

27

A pesar de las numerosas protestas de amistad, cooperacin y buena vecindad, persisten
molestos rezagos y carencias en nuestra frontera sur, como ejemplo de lo cual baste sealar
un hecho: En los 186 kilmetros de frontera con Belize sigue habiendo nicamente un punto
de cruce formal.

Se tiene identificado un lugar ro arriba, casi exactamente donde el Arroyo Azul se vierte en
el Ro Hondo, habilitado por los lugareos de uno y otro lado para el cruce de personas y
mercancas. Se trata de un sitio en las inmediaciones del poblado La Unin, Q.R., con su
contraparte belicea Blue Creek (Arroyo Azul), a ms de 150 kilmetros al oeste de
Chetumal.

Se ha acordado construir all un puente con sus correspondientes instalaciones aduanales y
migratorias, pero las negociaciones han avanzado poco.

Adems, falta concertar un nuevo Tratado de Lmites.

En efecto, como ya se haba sealado, el instrumento vigente data del siglo pasado y se
firm para delimitar a nuestro pas de las Honduras Britnicas. Ni los recursos tcnicos
disponibles a la sazn eran muy precisos ni el sujeto es el correcto (lo firm el Reino Unido).

Es necesario realizar una nueva negociacin, basada en estudios modernos y con el
interlocutor correcto (Belize), todo lo cual est ya bastante avanzado; la construccin del
nuevo puente seguramente habr de concretarse despus de la firma del Tratado de Lmites,
pero se ha avanzado en la identificacin del ms apropiado sitio para su ubicacin.

No se vislumbran problemas de seguridad nacional ni de carcter tcnico que pudieran
obstaculizar el buen xito de las negociaciones.

Tal como habamos comentado anteriormente, la perspectiva de un Tratado de Libre
Comercio (TLC) con Mxico provoc grandes temores en la iniciativa privada (IP) belicea,
temerosa de perder los considerables beneficios de un mercado cautivo.

Como Belize produce muy pocos de sus satisfactores e importa todo lo dems, parecera
lgico suponer que su comercio tuviera un alto grado de apertura al exterior, pero en la
prctica se cierra el mercado y de hecho se brinda proteccin a los importadores, es decir, a
los intermediarios, y no a los productores, salvo honrosas y limitadas excepciones.

Es pues comprensible el temor de stos.

Adems, el Ministro de Comercio me hizo ver desde el principio el peligro de partidizacin si
l haca suyo el proyecto y lo defenda pblicamente, pues si haba cambio de rgimen (las
elecciones fueron el 27 de agosto, pero de eso luego les platico) tal vez las nuevas
autoridades rechazaran todo lo negociado, como ha sucedido en otros pases.

Por todo lo anterior se acord dejar al Embajador de Mxico la tarea de explicar y aclarar el
contenido, alcance y posibles repercusiones de un TLC; as como rebatir y desmentir los ya
numerosos rumores desatados no muy inconscientemente. Esto se tradujo en viajes
constantes a todo tipo de foros, especialmente aquellos organizados por una agrupacin

28
denominada "Business Bureau", opositora a ultranza de un TLC.

Lo paradjico de todo este asunto era que Belize ya estaba comprometido en un mecanismo
similar con el Caribe (CARICOM), el cual incluso ha rebasado los confines de un TLC y se
encuentra en un estadio superior: una Unin Aduanera. Evidentemente la oposicin no era
contra el libre comercio como concepto, sino en particular por tratarse de Mxico.

Y nos volvimos casi ubicuos.

Uno de los temores expresados por el Business Bureau, era el de ser sorprendidos por una
realidad librecambista antes de estar debidamente preparados. Tratamos de explicar que un
TLC es un proceso dividido en dos etapas, la primera de las cuales, la negociacin, se ha
llevado en algunos casos varios aos (caso de Nicaragua); y la segunda, la instrumentacin,
incluye etapas de liberacin de hasta 20 aos.

En otras palabras, el libre comercio no acontece el da de la firma, y sta no se da a la
semana de iniciada la negociacin.

Pero como persistieran los temores decidimos cambiar la nomenclatura y hablar solamente
de un Acuerdo Comercial.

La medida prob ser un acierto.

Luego, nos repetan una y otra vez un argumento simplista: Qu le vamos a vender a
Mxico?

Efectivamente, Belize produce poco, pero eso se debe en buena medida al tamao del
mercado. Nada incentiva tanto el incremento en la productividad como la posibilidad de
colocacin de los excedentes.

Obviamente la solucin no se encuentra en el Caribe, pues se trata de un mercado muy
pequeo, con productos similares. Adems las vas de comunicacin hacen ms accesible
el mercado mexicano.

Por otra parte, mientras persistan las condiciones actuales Belize tendr necesidad de
importar muchos de sus satisfactores, eso es un hecho. Ampliar las opciones de suministro
equivale a poner a competir a los proveedores, hoy por hoy abrumadoramente cargados del
lado de Estados Unidos (EUA).

Mxico puede alimentar el mercado a mejores precios y con facilidades de transporte sin
paralelo. Incluso hay evidencia de esto en el constante flujo de compradores beliceos a
Chetumal. No sera mejor traer los productos mexicanos a Belize?

Resulta en verdad inexplicable ese temor a ser invadidos por el gigante de al lado, cuando en
realidad ya estn inundados de productos americanos. El comercio total de Mxico con
Belize apenas llega a 40 millones dlares anuales y no est compuesto de una enorme
variedad de productos.

En fin, despus de recorrer el pas de norte a sur todava hubo que instrumentar un

29
seminario, por medio del cual SECOFI les explic el contenido usual de un Acuerdo
Comercial y prcticamente los capacit para negociar con nosotros mismos. Puede sonar un
poco extrao, pero sirvi para acabar con la escasa desconfianza remanente.

A partir de ah ya fue posible instalar formalmente los equipos negociadores; y si bien est
pendiente la primera reunin negociadora propiamente dicha, ellos se debe exclusivamente a
la proximidad del proceso electoral, recientemente terminado y largamente anunciado.

Pero se ha presentado, inesperadamente, un factor de perturbacin que incide en las
negociaciones de un Acuerdo Comercial y es motivo de roces nunca antes experimentados:
La Zona Libre de Corozal (ZLC).

Producto de dos factores no necesariamente interligados: el proyecto de la Zona Libre es
muy distinto hoy de sus orgenes. En realidad se trataba de crear una zona de procesamiento
industrial tipo maquila, a fin de generar empleos para la regin norte del pas, golpeada por el
cierre de un Ingenio azucarero y sin perspectivas de recuperacin dadas las circunstancias
del mercado mundial.

El otro factor, por entonces menos importante pero polticamente sensible, era la fuga de
divisas implcita en las multitudinarias visitas de beliceos a Chetumal.

Las perspectivas en el primer caso eran y son muy pesimistas, pues no hay infraestructura
de transporte barato: ni hay puerto a la mano ni se cuenta con ferrocarril. Por aadidura, la
carretera a Belize City es de dos carriles, saturada por el trnsito local y los camiones
caeros, mientras que el puerto de Belize es totalmente inadecuado para carga de altura,
pues su nica salida es a travs de un canal constantemente azolvado.

Por ello los frutos del esfuerzo en esta materia son sumamente modestos.

Para sorpresa de ellos mismos, la ZLC ha resultado exitosa como una gran duty free,
impulsada por el diferencial en el precio de combustibles.

Por primera vez en muchos aos, el flujo de viajeros se ha equilibrado entre beliceos con
rumbo a Chetumal y mexicanos encaminados a la ZLC, lo cual causa gran satisfaccin a las
autoridades de Belize, pues siempre vieron con desagrado que la balanza comercial fuera (y
es) abrumadoramente favorable a Mxico y adems que sus nacionales acudieran en masa
a adquirir productos y servicios en Chetumal.

A nadie gusta tener una balanza desequilibrada en su contra, pero mucho menos cuando se
trata del socio menor, del menos desarrollado.


Ahora bien, los comerciantes de Chetumal, quienes por aos han recibido el beneficio de esa
corriente de compradores todava en crecimiento, protestaron por la disminucin en sus
ventas al desviarse su propia clientela hacia la ZLC, al principio slo en busca de gasolina o
diesel a mejor precio, y ms tarde para adquirir mltiples productos libres de impuestos.

El dao a las gasolineras es evidentemente legtimo y probablemente sin solucin.
Indudablemente hay una merma en sus ventas como resultado del desplazamiento de

30
numerosos vehculos a la ZLC a cargar combustible, pero existen otros ngulos no bien
explicados. La ZLC est vedada a los beliceos (excepto camiones caeros), quienes
tradicionalmente acudan a las gasolineras de Chetumal pues el precio all es mucho menor
que en Belize.

Si hoy se han alejado, lo cual no niego, las causas no pueden estar en la apertura de la ZLC;
ms bien habra que buscar los motivos por el lado de los expendios clandestinos, los cuales
nos correspondera a nosotros, a Mxico, combatir.

Pero si siguen acudiendo a los establecimientos de Chetumal entonces son paliativo para el
problema, no parte de l.

Se ha intentado atacar la venta de combustibles desde muy diversos ngulos hasta ahora sin
xito. Se dijo, por ejemplo, que se violaban los trminos del Acuerdo de San J os, porque la
gasolina y el diesel provenan de Venezuela.

Ni fue posible probar esto (entre otras cosas porque Venezuela no produce gasolina si
plomo), ni es cierto tcnicamente que el combustible sea importado por Belize, pues si bien
llega por el Puerto de Belize, entra in bond con destino a la ZLC y slo fsicamente recorre el
pas, nunca ingresa fiscalmente al mismo ni se queda en l.

Despus se habl de aplicar sanciones a Belize porque la venta libre de impuestos era un
acto inamistoso, especialmente cuando la ZLC parece orientada exclusivamente a los
compradores mexicanos. Pero la alternativa sera peor, es decir, si Belize permitiera a sus
nacionales el acceso a la ZLC, se reduciran las ventas del lado nuestro en proporcin
directa.

Dicho de otra manera, si a los mexicanos les resulta barato comprar en la ZLC, a los
beliceos les sera an ms atractivo. Muchos de esos 600,000 cruces se reduciran
dramticamente. Y no es algo imposible para Belize, pues al fin y al cabo en las actuales
circunstancias la fuga de divisas se da de todos modos; por lo menos con ese recurso las
compras seran parcialmente en negocios de ellos mismos.

Hay que tener cuidado con lo que se desea porque podra realizarse.

Adems, no contamos con verdaderas armas como para poder amenazar con sanciones
comerciales, pues difcilmente pueden darse cuando la balanza comercial nos es favorable
en casi 98%. En otras palabras, el nico elemento de presin hubiera sido la interrupcin del
suministro de energa elctrica, el cual se rige por un contrato y romperlo nos hubiera
costado ms a la larga.

A mayor abundamiento, la solucin de una buena parte del problema est de nuestro lado.
Cualquiera que visite la ZLC puede constatar cuntos artculos all ofrecidos son de
importacin prohibida o regulada. Si se venden e importan a Mxico, debe ser de manera
ilcita y la interdiccin corresponde a nuestra aduana.

Parece evidente, en el fondo, la verdadera peticin del sector mercantil: la restitucin del
status de Zona Libre para Chetumal. De hecho, el mejor argumento a favor de esa medida es
precisamente la existencia de la ZLC y mientras ms se agigante el impacto negativo de

31
sta, ms razonable sonar la solicitud.

Pero las autoridades estn conscientes de que la atraccin de clientes del exterior se da
incluso sin dicho status, como demuestran tantos y tantos beliceos cotidianamente
presentes para compras, consultas mdicas, recreacin etc.

Ms an, hay un cierto grado de contradiccin en el hecho de que la ZLC sea producto de
una inversin mexicana y muchos establecimientos sean propiedad de empresarios de
Chetumal; amn de verse all numerosos vehculos de concesin federal quienes deben
comprobar el gasto en combustible para efectos fiscales y ello no es posible con un recibo de
la ZLC. Seguramente reciben ayuda en territorio nacional.

Para quienes hemos vivido el fenmeno fronterizo en otras latitudes resulta inexplicable la
controversia. En la frontera norte es un factor aceptado, incluso aprovechado, las inevitables
diferencias en la competitividad de uno y otro lado. Adems, todo mundo sabe y acepta un
hecho incotrovertible: el flujo y reflujo est directamente ligado a las fluctuaciones del tipo de
cambio.

Dicho de otra manera, cuando el dlar est barato los mexicanos inundan los comercios
norteamericanos; y cuando el peso baja se trasladan los primos del norte a los almacenes
mexicanos.

Y lo mismo puede decirse de la venta de combustibles.

La ZLC es un fenmeno peculiar pues ni los mismos beliceos defienden su existencia, por
lo menos oficialmente. Segn uno de sus Ministros, como no se venden all productos
beliceos el nico beneficio real es para los propietarios de los comercios, quienes no son
siempre sus nacionales ni dejan todos las ganancias en su territorio.

Pero Belize se rige por leyes y no es posible simplemente ordenar el cierre de comercios
legalmente establecidos. Ni se estn violando preceptos de derecho interno, ni de derecho
internacional, ni es un asunto, estrictamente hablando, de la agenda bilateral. No est en sus
manos desaparecer el fenmeno y nada ganamos con tratar de presionarlos.

Si de verdad hay voluntad para hacer algo al respecto, se debe combatir el contrabando,
clausurar los establecimientos clandestinos de venta de combustible, ponerle un arancel a la
importacin de gasolina y diesel, ms all de cierto nivel para consumo; dar todava ms
facilidades a los compradores beliceos y dejar de alienar a la opinin pblica de all, para
no forzar a su gobierno a defender a los inversionistas de la ZLC.

Todo ello tiene un costo, pues los miles de beneficiados por el positivo impacto de la ZLC en
su economa familiar seguramente haran pblica su molestia; pero si pesa ms la opinin
del sector comercial, entonces las medidas se justificaran.

Si me preguntaran mi opinin sobre el problema, les dira: la comunidad de Chetumal debe
aprender a vivir con las ventajas y desventajas de ser frontera, no esperar solamente los
beneficios.



32


VIII.- EL BELIZE DE HOY: MULTIETNICIDAD, LOS LAZOS CON EL CARIBE,
LA ECONOMA, LA NUEVA CLASE POLTICA, EL MINISTRO DE TODO .

El decurso de un siglo y medio ha creado una poblacin heterognea en su
composicin tnica. Como ya qued establecido, a la poblacin Maya se han unido oleadas
de inmigrantes africanos, garfuna, mestizos, chinos, etc., todos ellos partcipes de una nueva
identidad cultural que no es britnica, pero tampoco centroamericana.

Si bien prevalece el habla inglesa, lo que los identifica con la zona del Caribe, tambin es
cierto que ms de la mitad de los habitantes hablan espaol como lengua materna, lo que los
acerca a sus hermanos de Centroamrica y Mxico.

Los procesos simbiticos y sincrticos han dado vida a una nacin con perfiles propios, que
no por ser pequea deja de detener derecho a la autodeterminacin.

Pero los problemas de identidad son serios.

Hace poco me encontraba en un restorn acompaado de un Representante (Diputado) del
Distrito de Corozal, cuando salud a un Ministro sentado a pocas mesas de distancia. Para
mi sorpresa, mi invitado apunt pensativo: No le parece extrao que usted y yo estemos
hablando en espaol, comiendo con tortilla y comentando incidencias de la poltica estatal de
Quintana Roo, mientras ese Ministro conversa en ingls con un nigeriano y est mucho ms
cerca culturalmente de l que de m, a pesar de ser mi paisano?.

Por mi parte le refer un incidente acaecido un mes de septiembre, cuando me acerqu a un
funcionario beliceo encargado de los festejos del 10 de Septiembre (conmemoracin de la
ya citada Batalla del Cayo San J orge), para ofrecerle la aportacin de la Embajada de Mxico
para dicha celebracin: un Mariachi. Pues bien, el funcionario de marras me agradeci
cortsmente el gesto, pero declin la oferta con un argumento al parecer inapelable: la fiesta
ser muy belicea.

Me guard diplomticamente mis comentarios en aquella ocasin, pero al narrar el suceso a
mi amigo de Corozal no pude evitar una reflexin: la nacionalidad belicea se nutre de muy
diversos componentes y uno de ellos es indiscutiblemente mexicano, as que no estara fuera
de lugar un mariachi. Pero para aquel funcionario la identidad era nica, de carcter
caribeo, es decir, referida a ese peculiar tinte cultural dejado por largos aos de
colonizacin inglesa.

En realidad la definicin misma de lo caribeo es compleja. Durante mucho tiempo se habl
de caribe angloparlante, para diferenciarlo de los hispanoparlantes de Cuba, Repblica
Dominicana o Puerto Rico; pero no todas las naciones de la regin son uno u otro: hay
pases de habla francesa u holandesa por ejemplo.

Para escapar a la trampa de la diversidad de idiomas, en Mxico nos sacamos de la manga
la connotacin pases del Caribe cuyo idioma es distinto del espaol.
13


13
Escuch esta expresin al Emb. J uan Antonio Mateos en una reunin de embajadores del rea del Caribe.

33

Sin embargo, en el entorno comnmente identificado como regin del caribe ni son todos los
que estn ni estn todos los que son. Bahamas, Barbados, Trinidad y Tobago, Guyana y
Surinam no estn en el Caribe; mientras que Cuba y Puerto Rico s estn, pero no los
consideran parte de la regin.

Algunos autores han llegado a la conclusin de que se trata de una comunidad cultural, en la
cual los orgenes uniforman ciertos rasgos culturales, como la msica, religin, comida, etc.

Ello explicara la pertenencia a CARICOM (Comunidad del Caribe) de Bahamas o Surinam,
ambos situados fuera del Mar Caribe.

Belize mantuvo y mantiene estrechos lazos con la regin caribea. Durante aos, de
J amaica llegaban nuevos colonos, suministros, fuerzas de defensa e instrucciones de la
Corona. Generaciones enteras fueron a la Universidad de las Indias Occidentales en busca
de instruccin superior. Los habitantes de muchos de esos pases eran intercambiables,
dada la formacin colonial uniforme.

Por otro lado, la definicin de Centroamrica presenta tambin problemas.

Mi primer contacto con las complejidades de esto fue durante una reunin del mecanismo de
Tuxtla, cuya convocatoria hablaba de impulsar la cooperacin entre Mxico, Centroamrica,
Belize y Panam. Panam no se considera parte de Centroamrica y Belize no era aceptado
de pleno derecho, tal vez por temor a ofender a Guatemala.

Si tomramos en cuenta slo elementos geogrficos no cabra duda: Belize est en
Centroamrica; si adems se considera el factor demogrfico, por lo menos va para all, a la
luz de las tendencias de crecimiento por grupos tnicos. Incluso si analizramos el asunto
desde el punto de vista de conveniencias, saltaran a la vista las ventajas de pertenecer a
una regin con ms de 100 millones de habitantes (contando a Mxico).
14

De no haber existido el problema con Guatemala tal vez hoy Belize se sentira ms como
parte de Centroamrica. En la actualidad slo muestran esbozos de reconocimiento, como
cuando escriben sus domicilios y anotan: Belize, C.A. (Centro Amrica); o como se ve en las
placas de circulacin.

Verdaderamente sorprendente es constatar que un pas de menos de un cuarto de milln de
habitantes tenga tal variedad tnica. Aunados a los mayas, los mestizos, los creoles, los
garfuna, los menonitas, los chinos (de Taiwn, de Hong Kong y de China continental), los
indios
15
, libaneses y hasta los ingleses, hay adems una poblacin de norteamericanos
trasplantados (ellos se llaman expatriados).

Obviamente la idiosincrasia belicea refleja esas influencias y cada vez es ms difcil dibujar
o identificar al beliceo tpico.


14
El Caribe apenas llega a 6 millones de habitantes, todos con similares cultivos, productos para exportacin y oferta
turstica.
15
Usualmente se les llama hinds para distinguirlos de los nativos de Amrica, pero en realidad Hindu es una religin, no
una nacionalidad.

34
Es ms, cuando se presentan en el extranjero manifestaciones culturales stas son siempre
garfuna, a pesar de que la inmensa mayora de los beliceos emigrados sean de origen
Creole; aunque stos dominan el gobierno, radican en Estados Unidos a ritmo de casi cien
mil; y apuntalan la economa con sus envos de dlares; en realidad no tienen cultura
autctona; son producto de un proceso de colonizacin que desvaneci sus rasgos culturales
originales.

Se dice que el platillo nacional es el llamado rice and beans (arroz con frijol), pero eso es
cierto en Belize City, no necesariamente en los distritos del norte, donde la comida es de
origen Yucateco.

Adems los pobladores de cada rea son muy distintos. Si circula usted por Orange Walk se
encontrar con que la gente acude a la Plaza los domingos, compra elotes y tacos de
vendedores ambulantes y gusta de la msica mexicana.

Si anda usted en automvil en Belize City va a sorprenderse cuando vea que los peatones y
ciclistas parecen no temer a los vehculos. En efecto, la gente camina, a su paso, por en
medio de la calle aunque escuche un auto aproximarse. Vale la pena ver cmo los carros
desfilan al paso de los peatones hasta que stos decidan hacerse a un lado o lleguen a su
destino.

Y la percepcin del tiempo es igualmente distinta. En su mayora, las quejas respecto de
trfico peligroso se refieren a la lentitud de ste, no a excesos de velocidad; nadie lleva prisa.

Cuentan que una vez un visitante contemplaba en cierto parque citadino un espectculo
inusitado: un hombre abra hoyos con una pala y otro lo segua tapndolos. Curioso se
acerc a preguntar qu estaban haciendo, a lo que respondieron: estamos plantando
rboles, pero hoy no vino el de los rboles.

Belize se ha caracterizado por ser un pas cuya economa se concentra en de la exportacin
de materias primas, principalmente madera, azcar, melaza, pltano, ctricos y productos
marinos (langosta y camarn).

Su alta dependencia de importaciones como energticos, alimentos, maquinaria, aparatos
elctricos, etc., arroja un dficit en la balanza comercial que drena de divisas a su economa.

El precario sector industrial se limita a la produccin de ropa, papel, cigarros, cerveza,
refrescos embotellados y calzado.

Es el sector turismo el que muestra mayor dinamismo.

En efecto, cuenta con verdaderos tesoros en su litoral, as como naturaleza exuberante y
centros arqueolgicos de origen Maya; es parte del muy exitoso programa Mundo Maya y,
sorprendentemente para un pas de su tamao, tiene numerosos vuelos internacionales de y
hacia Estados Unidos, as como Centroamrica.

Se han preocupado por preservar su entorno ecolgico a travs de un estricto programa de
reservas, parques nacionales y santuarios para especies en peligro de extincin, sin olvidar
que su oferta como destino se tie de tonalidades ecotursticas.

35


Cabe citar, cayendo un poco en lo anecdtico, que hay un Eco-Hotel, hotel campestre o algo
por el estilo, en los altos del distrito de Cayo, propiedad del famoso productor
cinematogrfico Francis Ford Coppola, el cual atrae visitantes de todo el mundo.

La poblacin original de Belize se dedic, como ya qued establecido, al corte de maderas.
En consecuencia no existe tradicin agrcola y hay poca inclinacin a trabajar la tierra. Por
ello, los suministros de productos agropecuarios tendran que ser importados, a no ser por
una sabia decisin tomada hace ya muchos aos: se acept la inmigracin de Menonitas
procedentes de Mxico.

Hoy, la inmensa mayora consume pollo, leche, quesos, frutas, etc., slo porque esos
industriosos y peculiares mexicanos han creado un emporio en dos distritos: Orange Walk y
Cayo. Resulta en verdad admirable constatar la transformacin sufrida por ambos territorios,
donde el paisaje se asemeja al de ciertas regiones europeas o norteamericanas, pero no
todos son del tipo de Menonitas ortodoxos, no, estos paisanos usan tractores, camiones y
todo tipo de aparatos modernos, bueno, excepto televisin en algunos casos.

Por cierto que se intent por algn tiempo instrumentar un programa de incentivos para la
inmigracin, por medio del cual se premiaba con el otorgamiento de la nacionalidad belicea
a todo extranjero dispuesto a invertir una suma predeterminada.

La idea no es nueva e incluso en nuestro pas hay algo parecido, es decir, nosotros
recompensamos tambin a los inversionistas, pero con la calidad de inmigrante, no con la
nacionalidad.

Sin embargo, en Belize el asunto se complic en parte por el abuso del privilegio por parte de
ciertos interesados (sobre todo chinos), quienes en realidad pretendan naturalizarse slo
como paso previo a su traslado al norte (EUA).

El otro ingrediente negativo fue la corrupcin.

Mxico elev su protesta por las facilidades otorgadas, pues para ingresar a nuestro territorio
esos extranjeros deban cumplir muy estrictos requisitos y con slo adquirir la nacionalidad
de Belize (lo cual era muy fcil) eludan los filtros y nos creaban severos problemas en la
frontera norte.
16


Ante esa preocupante e irritante situacin, el rgimen (era el UDP, o sea Manuel Esquivel)
decidi cambiar el ministerio encargado de migracin al rea del Ministro de Relaciones
Exteriores, Dean Barrow, con lo cual lo convirti en el ms poderoso de todos sus ministros.

Dean Barrow es todo un personaje y merece mencin especial.

Abogado de profesin, Creole de nacimiento, vecino de Belize City y extraordinario orador,
Barrow se distingue por su cultura, elegancia y seguridad; indudablemente desenvuelto
porque se sabe culto. Durante la administracin de Esquivel era el responsable de una

16
Migracin de EUA los detectaba y devolva dejndonos la responsabilidad de su deportacin, la cual se volva muy difcil
pues haban violado los trminos de su naturalizacin privilegiada en Belize.

36
cartera increble: Vice Primer Ministro, Ministro de Relaciones Exteriores, Ministro de
Seguridad Nacional, Procurador General de J usticia, encargado de Migracin y de Difusin.

Ms joven que Esquivel representa una generacin nueva, junto con Alfredo (Fred) Martnez,
ex Embajador en Mxico (desde mi punto de vista su encargo fue brillante) y ms tarde
Ministro de Comercio e Industria.

Pero esa es solamente la perspectiva del lado del UDP y nada nos dice respecto de los
nuevos liderazgos en el extremo opuesto, es decir, en el PUP.

Desde que George Price se retir (del puesto pero no de la poltica), el partido ha ido
renovando su cpula directiva, a travs de una cuidadosa combinacin de probados
veteranos y prometedores novatos.

En efecto, Said Musa es nuevo lder en ms de un sentido, dado que se trata de un hombre
relativamente joven pero adems se ha rodeado de un equipo de entusiastas (aunque
inexpertos) profesionistas de nuevo cuo, de los cuales sobresalen el Vice Lder J ohnny
Briceo (su To Polo es toda una leyenda en la poltica local de Orange Walk), los
hermanos Espat (J orge y Mark), Godfrey Smith, Eamon Courtney, Dolores Balderamos y
otros.

Unos fueron candidatos a la Asamblea por segunda vez, algunos se sometieron al juicio del
electorado por vez primera, mientras que otros desempean labores partidistas y
seguramente sern el futuro del Partido.

Un observador imparcial tiene que reconocer la ventaja adquirida por el PUP en la inevitable
(y ya impostergable) labor de renovacin, mxime cuando las nuevas generaciones del lado
del UDP se ven escasas. Pero no es posible derivar de ello conclusiones firmes, slidas; por
el contrario, la veterana y probada experiencia del liderazgo UDP podra ser ventajosa o la
novatez del PUP perjudicial a corto plazo.

Y en esas circunstancias llegamos a las elecciones de 1998, verdadero hito en la breve
historia independiente de Belize. Creo necesario plasmar aqu sus prolegmenos, realmente
indispensables si se pretende entender el sistema y los usos polticos. Adems, como
resultado de esos comicios el panorama poltico cambi radicalmente y ese slo hecho
obliga a tratar el tema con detenimiento

Despus de que el PUP arras en las elecciones municipales de 97 todo pareca indicar que
su triunfo en los comicios nacionales estaba asegurado. Es ms, si me hubieran pedido un
pronstico en enero de 1998, no hubiera dudado: ganara el PUP dos a uno.

Pero faltaba la ofensiva del rgimen y vaya que lo fue!.

Pero antes de narrar los pormenores y estrategia del UDP permtame trazar un esbozo del
sistema y sus mtodos.


En una campaa poltica todo se vale (bueno, casi todo). Los ataques personales son la
regla general y se lanzan alegremente patadas por debajo y por encima de la mesa.

37

Los candidatos lo son a asientos en el Parlamento y no a puestos de gobierno, los cuales
vienen despus.
Se sabe quin compite por el cargo de Primer Ministro (PM) porque el lder del partido
ganador de la mayora de las curules ser automticamente PM, pero no se vota para ese
puesto especficamente.
Los medios de comunicacin son peculiares: No hay diarios, todos los peridicos son
semanarios y varios de ellos slo pueden definirse como rganos partidistas, pues su
orientacin editorial es a todas luces la de alguno de los partidos.
Incluso los ms profesionales, Amndala y The Reporter tienen clara preferencia poltica,
pero no es ni abierta ni inflexible.
El gobierno tiene un mandato de cinco aos, tras los cuales debe convocar a
elecciones
17
, pero como hay un plazo de gracia de tres meses, todos los regmenes se
pasan un poco de los cinco aos.
Hay 29 distritos electorales correspondientes a otros tantos asientos en la Asamblea
Nacional (Parlamento); el partido que obtenga ms de 15 gana y su lder ser PM.
El gabinete de ste slo puede estar formado por miembros de la Asamblea o el Senado,
aqullos electos y stos designados.
As, los aliados que se distinguen en la campaa pueden recibir un premio: el ministerio
de su preferencia; pero algunos reciben por partida doble, pues pueden ser designados
Senadores y con esa base recibir un Ministerio, sin pasar por el filtro del electorado.

El sistema es no slo complejo, sino tambin falible. Como en las boletas no aparece el
puesto de PM, se vota por un candidato a cierto distrito, es decir, lo eligen sus vecinos, no el
voto mayoritario de la nacin. Y puede darse el caso de que un partido obtuviera mayora en
la Asamblea pero su lder sea incapaz de ganar su distrito; en ese caso no puede ser PM.

En las elecciones del 98 se vea claramente esa posibilidad, pues ambos lderes enfrentaron
fuertes contrincantes.


La campaa del UDP se concert en cuestionar la personalidad de Said Musa, primero por
medio de una acusacin de falsedad en declaraciones ante la Asamblea Nacional, la cual
result en una reprimenda del Presidente de Debates votada sobre estrictas lneas
partidistas, es decir, el UDP impuso su mayora.

Ms tarde hubo una acusacin por supuesto desvo de fondos, la cual se anunci como
prdida de ingresos para el fisco pero nunca se concret en denuncia judicial. Eso s, una
Comisin ad hoc sentenci a Musa a devolver la suma desviada (sin precisar hacia dnde se
desvi), pero como la Comisin careca de vas de apremio todo qued en ros de tinta.

Se acuaron frases verdaderamente lapidarias contra Musa: Si los atrapas pagan; si los
eliges todos pagamos y as por el estilo.

Por su parte, el PUP se concentr en las propuestas y en una muy efectiva crtica de las
promesas incumplidas por el rgimen de Esquivel.


17
Tambin se puede convocar antes, pero esto es potestativo, no obligatorio.

38

Al final no se comprob el enfoque Lasorda, aquel manejador del equipo de bisbol Dodgers
de Los ngeles. Deca l: no importa cun bueno sea un equipo va a perder un tercio de sus
juegos; tampoco importa cun malo sea un equipo, de todos modos va a ganar un tercio de
sus juegos; la gran diferencia estriba, sentenciaba, en ganar o perder el otro tercio.

En la siguiente seccin le contar los pormenores de la eleccin misma, pero antes me
referir a algo totalmente inusitado: por circunstancias especiales soy el nico Embajador de
Mxico con dos sedes.

IX.- UN EMBAJADOR ITINERANTE; LAS ELECCIONES DEL 98; LOS
RABES; EL NUEVO GABINETE.

A estas alturas ya sabe usted algo muy poco conocido: la capital de Belize es
Belmopn
18
; pero qu sabe usted de esa capital? Fuera de lo aqu platicado seguramente
se encuentra usted en las mismas circunstancias a las cuales me enfrent cuando me hice
cargo de esta Embajada, o sea muy interesado, curioso incluso, pero hasta ah.

No se preocupe, ahora le cuento.

Belmopn, como todos los proyectos de construccin de capitales ad hoc, se ha quedado en
una poblacin burocrtica. Cuenta con menos de 6 mil habitantes, buena parte de ellos
poblacin flotante, sin ms fuentes de trabajo que las generadas por la presencia de los
ministerios y otras dependencias inter relacionadas.

El lugar es bello, verde siempre, con una avenida tipo circunvalacin y terrenos asignados de
manera ordenada para cada fin; las oficinas en un lado, los servicios comerciales en otro,
cerca de stas la terminal de autobuses, del otro lado de la avenida los hoteles (dos), en un
rincn separado las residencias, etc.

Ante la necesidad de contar con personal para los servicios elementales (guardias,
jardineros, cocineras, mucamas, etc.), una cercana aldea de refugiados salvadoreos se fue
integrando al permetro urbano y es hoy una especie de ciudad satlite (pueblo satlite?).

Con el infalible ingenio popular ese asentamiento es conocido ahora como Salvapn.

Pues bien, a pesar de los esfuerzos del gobierno beliceo, el crecimiento de su nueva capital
ha sido deficiente. La carretera es buena, el lugar es agradable, su ubicacin impecable (en
el corazn territorial del pas, donde se cruzan importantes vas de comunicacin terrestre),
pero algo falta.

Ciertamente la capital financiera, turstica, cultural y comercial sigue siendo Belize y poco
ayudan decisiones como la de construir un nuevo y casi ostentoso edificio para el Banco
Central en Belize!.

Bueno, tal vez eso se llame pragmatismo, pero de todos modos la seal crea confusin.

Al menos durante algn tiempo se actu con congruencia y casi todos los pases con

18
El nombre proviene del Ro Mopn y la abreviatura de Belize.

39

embajadas residentes fueron invitados (fue algo ms que una simple invitacin) a cambiar
sus sedes a la nueva capital. Hasta ahora muy pocos lo hayan hecho: Venezuela y el Reino
Unido.
19

Mxico es vecino, amigo y aliado en las ms caras causas de la pequea nacin belicea, de
tal suerte que era inevitable que el Primer Ministro pidiera al Presidente su apoyo. Si Mxico
cambiaba su sede otros seguiran seguramente, se deca, para lo cual se nos asign un
terreno en ptima ubicacin.

El compromiso poltico era claro y se tom la decisin de apoyarlos. Se encarg el proyecto
arquitectnico a uno de nuestros ms conspicuos profesionales, Teodoro Gonzlez de Len,
se construy cancillera (oficina en el argot diplomtico) y residencia en un mismo complejo y
qued todo listo para cumplir con el compromiso contrado.

Pues s, pero no.

Cuando llegamos a hacernos cargo de la Embajada encontramos una serie muy larga de
necesidades an no satisfechas e indispensables para el cumplimiento del compromiso.
Muebles, enseres, aparatos, equipo y el cabal funcionamiento de las instalaciones, cerradas
demasiado tiempo y por ende con serios deterioros.

Y los recursos disponibles eran totalmente insuficientes.

El primer paso era pues, obtener apoyo financiero para reparaciones, adecuaciones y
equipamiento, pero eso no era todo: Inexplicablemente no se habilitaron espacios suficientes
en el rea de oficinas, de tal suerte que incluso ya amuebladas y equipadas slo aceptaran
una parte relativamente menor de la actual cancillera.

En cambio se construy una residencia amplsima.

Tal vez se tom en cuenta el limitado desarrollo de la nueva capital y se resolvi edificar por
etapas, pero si ese fuese el caso, parecera incongruente tener una representacin reducida
con una residencia para 10 personas. Haca falta, obviamente, la memoria institucional, es
decir, dilucidar las intenciones reales.

Por ah investigamos que ya se hablaba del error cometido y algunos funcionarios
observaban con preocupacin el tamao de la obra, sobresaliente en aquella geografa
urbana y a su juicio demasiado ostentosa. Incluso hubo quien propusiera regalarle el edificio
a Belize para que en l se ubicara un museo o casa de cultura y proceder a construir algo
ms adecuado al fin.

Otros hablaban del costo poltico y el problema de imagen si reconocer el error implicaba
aceptar que hubo derroche de recursos, ms an si para corregirlo se tena que gastar en
otra sede.

Adems, el paso del tiempo iba causando ms y ms irritacin en los beliceos, entre

19
Es un Alto Comisionado, eufemismo usado porque no puede haber embajadores entre pases con el mismo J efe de Estado:
la Reina Isabel.

40
quienes se escuchaba con gran sarcasmo la insistente pregunta cundo se cambian a
Belmopn?

Peor an, la conseja popular ya haba bautizado a la Embajada como El Bnker Mexicano,
en obvia referencia el tipo de arquitectura usado, el cual mira totalmente hacia adentro y ni
siquiera ventanas permiten ver de y hacia adentro.

Mire usted, sin ser experto en estas cuestiones parecera lgico suponer que la seleccin de
estilos debi haber seguido uno de dos caminos: o se haca algo que a simple vista
recordara a Mxico; o se respetaba el entorno y se segua la tendencia arquitectnica
imperante en el lugar, de tal suerte que la obra encajara armnicamente.

No se hizo ni uno ni otro.

Debo confesar mi propia aportacin a la cadena de improductivas crticas, hasta que logr
hacer valer un enfoque prctico, de aceptacin de lo inevitable y de bsqueda de salidas
asequibles. Primero haba que acabar con las quejas y dejar de hablar del error cometido.
Nada nos bamos a ganar con lamentos. Al hacer un balance objetivo pudimos precisar los
hechos fuera de nuestro control y analizar las opciones.

El compromiso segua ah y no podamos cambiar toda la Embajada, tanto por la limitada
disponibilidad de espacio para oficinas, como porque ciertas materias y labores slo podan
desahogarse en Belize; y haba un edificio que sin uso se iba deteriorando, al tiempo que se
constitua en motivo de mordacidad y reclamaciones.

Tomamos la decisin de dejar de hablar de mudanza y empezar a planear la apertura de la
nueva Embajada de Mxico en Belmopn. Dado que no podemos trasladar las secciones
consular, comercial o de cooperacin, pues en Belize estn el aeropuerto, el puerto, los
bancos, las cmaras, los hoteles etc.; amn de que el Instituto Cultural tiene su propio
edificio en Belize, no hay razn para preocuparse por el espacio en la nueva sede.

En cambio las relaciones polticas s se pueden y deben reubicar en la capital, aunque esa
aseveracin acepta ciertos matices.

En efecto, los ministros slo despachan en Belmopn lunes y martes (ninguno vive all); los
mircoles se trasladan a sus oficinas en Belize; los jueves recorren sus respectivos distritos
legislativos (que puede ser el propio Belize); y los viernes pueden o no ir a la capital
dependiendo de los asuntos pendientes o firma.

Optamos por abrir la Embajada y asegurar la presencia del titular cuando los ministros se
encuentren en la capital.

Ah se acabaron las discusiones.

El plan original era trasladarnos a Belmopn los domingos por la tarde y quedarnos all hasta
el mircoles por la maana, pero no siempre ha sido posible cumplir con ese itinerario, pues
como las embajadas estn casi todas en Belize siempre hay alguna actividad programada
por la noche en esos das.


41
Pero s echamos a andar servicios consulares en la capital, de tal suerte que aunque no est
presente el Embajadores es posible tramitar permisos de turista a diario. Adems, la
Agregadura Militar s se traslad a Belmopn y ya se estn impartiendo clases de espaol
all, con lo cual el edificio est funcionando normalmente.

La solucin es prctica pero no muy ortodoxa. En otro pas probablemente hubieran
presentado objecin al extrao fenmeno de las dos sedes. Pero en Belize el trato es mucho
ms relajado, flexible; entendieron perfectamente los problemas y dieron prioridad a la
apertura de la cancillera en su Capital poltica.

Cuando el propio gobierno modifique su esquema y los ministros se muden a la capital,
puede replantearse el dispositivo; por ahora se cumpli el compromiso de abrir la Embajada
y se acabaron los reclamos y las puyas.

Antes de cerrar el tema permtanme platicarles una ancdota.

El anterior PM, Manuel Esquivel, es un hombre parco, sumamente serio y circunspecto.
Durante mucho tiempo trat de penetrar su casi petrea expresin y puedo presumir de
haberlo logrado algunas veces, al menos eso me comentaron otros diplomticos quienes le
oyeron hacer referencia a lo que me dijo el Embajador de Mxico.

Pues bien, cuando terminamos de amueblar y equipar la nueva Embajada me pidi organizar
una modesta recepcin a fin de entregarme un obsequio de su gobierno, como muestra de
su complacencia por el cumplimiento de la promesa. Ese da, con la satisfaccin natural de la
labor terminada, recibimos de sus manos una escultura en caoba y coral, plagada de obvio
simbolismo en relacin con los orgenes de Belize.

Mientras conversbamos animadamente, alguien de su equipo pregunt y cundo ser la
mudanza definitiva?. A pesar de mi prolija explicacin sobre las dificultades y obstculos de
tal empresa, el hombre no cejaba y trataba de extraer algn compromiso respecto del plazo
para esa mudanza. Al final, ya impaciente, le respond: cuando se cambie el Banco Central
ac.

Se hizo un silencio embarazoso por unos instantes, interrumpido de pronto por una sonora
carcajada del Primer Ministro Esquivel.

El inevitable resultado de todo este proceso ha sido la figura de un Embajador itinerante. Ya
no slo se trata de recorrer nuestra circunscripcin o de visitar nuestro consulado honorario
en Corozal, sino adems de dividir el tiempo entre las dos sedes.

Nada de eso ha cambiado a pesar del tiempo transcurrido y de que hoy gobierna otro partido.

Y a propsito, volvamos a conversar sobre esas elecciones de 1998 que marcaron un parte
aguas en la poltica interna y ameritan un tratamiento ms de cerca.

Desde principios de 1998 se empez a calentar el ambiente pre-electoral, en cuanto los
partidos contendientes designaron a sus candidatos por cada distrito. En realidad se saba de
antemano quienes seran los contrincantes, pues por un lado los representantes en funciones
son todos candidatos a reeleccin, mientras que el sistema permite la designacin de un

42

portaestandarte, quien se encamina a ser el candidato, en aquellos distritos donde no se
tiene la titularidad.

De esa manera la pre campaa puede desarrollarse desde mucho antes, tal como sucedi
en aquel momento.

No obstante, hubo algunos cambios de ltima hora que recordaron a los interesados la
naturaleza preliminar de sus candidaturas. Cuando el partido en el poder present y aprob
una reforma al estatuto electoral, la dedicatoria fue evidente: se pretenda favorecer a Derek
Aikman a fin de presentarlo como candidato en el distrito donde contenda Said Musa.

Al parecer el UDP buscaba derrotar al lder de la oposicin y as asegurarse de que no fuera
PM incluso si el PUP ganaba la mayora de las curules.

Por su parte, la oposicin anunci la candidatura de un popular conductor de televisin
(Dickey Bradley) en el distrito detentado por Dean Barrrow (el Ministro de Todo), con
pretensiones similares y reconocimiento implcito de la fuerza adquirida por ste en el
gobierno.

Poda haber coincidencia en las tcticas, pero las estrategias no podan ser ms
contrastantes.

El gobierno se dedic a atacar directamente Musa, con acusaciones de deshonestidad,
corrupcin, falta de tica y as por el estilo. Incluso se hizo vaga referencia a su origen
palestino como si ello fuera defecto. El lema de campaa es cuestin de confianza, pareca
tener destinatario especial y pretenda despertar la desconfianza del electorado hacia Musa.

La oposicin por su parte expuso las fallas del rgimen durante los cinco aos previos y
prometi reactivar la economa, crear empleos (quince mil) y construir vivienda popular (diez
mil). Adicionalmente ofrecieron iniciar una Reforma de Estado, la cual permitiera corregir la
obvia confusin entre los poderes ejecutivo y legislativo y lograr un mayor control popular
sobre los actos de los ministros.

La propaganda del gobierno mostraba un alto grado de profesionalismo, lo cual motiv
especulaciones respecto de su autora, incluso rumores sobre la supuesta contratacin de un
consultor norteamericano. Por supuesto desmintieron firmemente la especie, pero al fin y al
cabo estaban en su derecho pues ninguna disposicin prohibe tal recurso.

En cambio la publicidad del PUP se antojaba artesanal, sin la profusin y visibilidad de la del
rgimen. En una ya avanzada etapa, hacia el mes de agosto de ese ao de 1998, cierto
grado de desaliento pareca permear las filas del PUP.

Corra el insistente rumor de que el mismsimo George Price enfrentaba un formidable reto
en su distrito y que su derrota era muy probable. En aquella coyuntura, el gobierno se
mostraba cada vez ms confiado ms seguro de su victoria. En varias regiones el paisaje se
tea de rojo
20
; donde todos y cada uno de los postes portaban un cartel y fotografas de sus
candidatos.

20
Los partidos se identifican tradicionalmente por un color: rojo para el UDP y azul para el PUP.

43

La televisin bombardeaba al pblico con tronantes condenas a la poca confiabilidad de
Musa y enormes mantas aconsejaban al electorado Si teme a Musa vote por nosotros; es
cuestin de confianza.

No se molestaban en afirmar por qu se deba temer a Musa.

Algunos observadores se preguntaban por qu no haba respuesta en el mismo tono, es
decir, por qu no cuestionar la honestidad de algunos notorios personajes del gobierno a
quienes la opinin pblica tena catalogados como corruptos, o por lo menos sembrar dudas
respecto del origen de sus ya ostentosas fortunas.

Pero no se hizo.

Ya prximas las elecciones vino una reaccin del PUP, cuando reapareci Price en su
propaganda y Musa concedi una entrevista en la radio para explicar su programa de
gobierno. La imagen de sinceridad proyectada, as como el aval del intachable Price, sin
duda ganaron terreno a la oposicin, pero pareca ser muy poco, muy tarde.

Para rematar el oscuro panorama, a una semana de la eleccin Dean Barrow convoc a una
conferencia de prensa y dej entrever que anunciara una bomba contra las pretensiones del
PUP. Aquella maana se aglomeraron no slo los reporteros sino tambin los curiosos; el
Procurador y Ministro de tantas cosas mostr un fax supuestamente procedente de Panam,
donde se pedan informes sobre un tal Ralph Fonseca, coordinador de la campaa del PUP y
ex Ministro de Finanzas.

La explicacin del Procurador fue que ese nombre haba aparecido durante una investigacin
por lavado de dinero.

Para sorpresa de todos los presentes el acusado estaba all y se enfrent al Procurador.
Pidi oportunidad de defensa y cuestion la honestidad y oportunidad de la pblica denuncia,
en circunstancias sospechosamente favorables a la campaa del rgimen.

El Procurador y Ministro de tantas cosas trat de evitar su intervencin, pero el sentido de fair
play (juego limpio) heredado de los britnicos prevaleci entre los asistentes.

Al siguiente da, Fonseca circul un oficio de la propia Interpol aclarando la situacin y
negando la existencia de una investigacin en su contra.

La marea empezaba a cambiar.

Poco despus y con los comicios ya en puerta, otro Ministro, Hubert Elrington, durante una
entrevista pidi al electorado cautela ante la amenaza de los rabes (evidente referencia a
los orgenes familiares de Musa (palestino), los hermanos Espat (libans) y otros candidatos
por diversos distritos).

La reaccin de la opinin pblica fue de molestia.

A tres das de los comicios alguien pregunt al PM Esquivel su opinin sobre las aventuradas

44
declaraciones de Elrington y cuando todo mundo esperaba una respuesta cauta, ecunime y
congruente con su personalidad, Esquivel sorprendi a propios y extraos al decir: son
rabes no?.

Esta vez la reaccin de condena fue casi unnime. El mismsimo Obispo catlico aclar poco
despus que los rabes en cuestin eran cristianos y, por supuesto, beliceos.

Las tendencias electorales tomaron un rumbo casi definitivo

El jueves 27 de agosto se abrieron las urnas a las 7:00 A.M. en medio de un impresionante
despliegue de unidad partidista por parte del PUP. Esa maana fue a verme a la Embajada
un diplomtico sudamericano que estaba de visita en Belize y me dio el primer diagnstico de
la jornada: la ciudad estaba teida de azul.

El grado de participacin fue verdaderamente extraordinario y probara ser sin precedente.
Un promedio de 90% del padrn vot aquel da. Ms que una jornada electoral fue una fiesta
democrtica, como pude constatar al recorrer las diversas reas de la ciudad. El entusiasmo
era contagioso y generalizado.

A pesar de ser un pas pequeo, Belize integr un sistema de informacin a travs de
Internet que fue dando los resultados conforme se reportaban las casillas. Ya entrada la
noche se empez a develar la sorpresa: uno a uno fueron sumndose los distritos favorables
al PUP, hasta convertir la victoria en abrumadora.

Mi ms optimista pronstico favoreca a la oposicin con unos 18 asientos, pero la realidad
super aquellas expectativas: el PUP gan 26 de 29 distritos!. Adems, el margen de cada
triunfo era apabullante, en ocasiones de tres a uno. La debacle para el UDP fue total. Todos
los ministros, incluyendo al propio Primer Ministro, perdieron sus curules, excepto Barrow,
pero incluso ste retuvo su curul con un margen de 47 votos.

El viernes 28 de agosto, Said Musa fue ungido como Primer Ministro, mientras Esquivel
renunciaba al liderazgo del UDP y el Vice Lder, Dean Barrow, tomaba las riendas de un
partido diezmado, abatido y en urgente necesidad de reestructuracin, casi refundacin.

En este caso el xito creaba un problema para Musa, pues sus compaeros esperaban ser
recompensados con alguna cartera ministerial y simplemente no haba suficientes puestos
para todos. Por aadidura, una buena parte de su campaa se haba basado en la acotacin
del nmero de ministerios, a fin de evitar que se confundieran los poderes.

La composicin result eclctica, con una cuidadosa mezcla de nuevos valores con probados
lderes regionales.

Ciertamente dominaron los jvenes, representados por el Vice Primer Ministro J ohn Briceo,
los ministros de Turismo y Seguridad Nacional Mark y J orge Espat, el Ministro de Educacin
Cordel Hyde, la titular de la cartera de Desarrollo Humano Dolores Balderamos (sic); pero
tambin estaban all Florencio Marn, invicto representante por el Distrito de Corozal y Ralph
Fonseca, a quien nos referiremos ms adelante.

Y forzosamente se quedaron en la orilla otros, para quienes hubo comisiones legislativas.

45

Por el lado del UDP prcticamente desaparecieron del mapa poltico la mayora de sus ms
destacados dirigentes, lo cual, combinado con el claro mensaje del electorado, orill al nuevo
lder a procurar recomponer sus cuadros.

Se completaba as el cambio generacional.

Si bien la alternancia volvi a operar, no habra ya recuperacin del poder para los familiares
nombres de los lderes George Price y Manuel Esquivel.

Una nueva era haba comenzado.

X.- REFORMA POLITICA; EL MINISTRO DE TODO LO DEMS;
PERSPECTIVAS Y PROSPECTIVA.

Una de las ms interesantes propuestas del nuevo rgimen es un ambicioso proyecto
designado como Reforma Poltica. En la superficie pareciera ser labor de ingeniera
constitucional, en busca de equilibrios y salvaguardas en el ejercicio del poder; pero en
realidad es algo ms profundo y complejo.

En su toma de posesin, Said Musa se refiri a la dualidad de identidades de Belize, nacin
centroamericana del rea del caribe; y dijo parte de su discurso en espaol, otro segmento
en maya e incluy un mensaje en garfuna.

El simbolismo es poderoso, pero la tarea es sumamente compleja.

Contar hoy con una poblacin diversa es oportunidad y reto. A diferencia del proceso de
asimilacin norteamericano identificado como olla de cocimiento, donde se van integrando
los elementos hasta desaparecer como grupo; Musa propone costurar un mosaico de
identidades, todas beliceos pero todas con su acervo cultural a salvo.

Mire usted hasta dnde puede llegar esto.

Se ha ponderado cuidadosamente un cambio en el sistema a fin de sustituir a la Reina como
J efe de Estado, sin abandonar el rgimen parlamentario, por medio de la eleccin de un
Presidente como J efe de Estado y tal vez incluso la eleccin directa del J efe de Gobierno
(Primer Ministro), como se hace en Francia.

La poblacin de origen mexicano y centroamericano se siente identificada con la figura del
Presidente y por medio de ese recurso les sera ms accesible y aceptable el sistema
parlamentario.

No slo eso, hay actitudes casi atvicas que apuntan a dicha solucin.

Durante el gobierno de Esquivel haba un hombre fuerte, el llamado Ministro de Todo, quien
en realidad actuaba como J efe de Gobierno mientras el PM se reservaba las funciones y
responsabilidades de J efe de Estado, slo nominalmente atribuidas a la Reina.


46

Hoy, Said Musa ha empezado a favorecer un dispositivo similar, en el que su hombre fuerte
es Ralph Fonseca, Ministro de Planeacin, Programacin de Presupuesto, Inversiones,
Comercio Exterior, Banca y Zonas de Libre Comercio. En buena medida se repite la historia,
pues el PM atiende las responsabilidades de J efe de Estado y delega en Fonseca las labores
de gobierno al interior, lo de da a da.

Por eso he acuado para l, en broma, el ttulo de Ministro de Todo lo Dems, pues se
encarga prcticamente de aquello que Barrow no atenda en el gobierno anterior y como
ste era Ministro de Todo.Fonseca es un hbil negociador y experto en negocios que est
a cargo de los aspectos econmicos del rgimen. Controvertido como todo el que saca la
cabeza y da el frente, hasta ahora ha recibido notas aprobatorias hasta del Fondo Monetario
Internacional.

A juzgar por los indicadores ms usuales, la economa va viento en popa; sobre todo si se
observa el dinamismo de la industria de la construccin. Adems, con la ayuda del susto
dado por Mitch, Belmopn pasa por una etapa de intensa transformacin, aunque algo
desordenada.

Que quede claro pues: Ni critico el mtodo ni repruebo su manejo; no es todo miel sobre
hojuelas para los hombres fuertes. Pero s parece obvia la tendencia a dividir la carga de
gobierno entre dos, como supuestamente hace el sistema Westminster, lo cual justifica
plenamente la propuesta de una reforma.

Pero la iniciativa lleva en su definicin el germen de su fracaso.

Para poder darle congruencia se puso en manos de una Comisin Plural, la cual nunca capt
la naturaleza de la oportunidad y se limit a recomendar cambios cosmticos. De hecho
concluy que todo iba bien, pero no tan bien como debiera.

Musa deber echar mano de sus considerables recursos polticos para revivir la iniciativa, lo
cual es perfectamente posible, pues el PM goza de un mandato indiscutible, sabe abrirse
espacios y tiene una clara visin de la clase de pas deseado por los beliceos a futuro.


Por eso construy una excelente relacin personal con el Presidente Zedillo, quien capt de
inmediato dichas virtudes.

Ya desde su toma de posesin, Musa dej en mente de la representante presidencial,
Rosario Green, una impresin muy favorable. Durante un cena privada de la que fui testigo
revisaron la agenda bilateral, replantearon algunos aspectos torales de sta, coincidieron en
su diagnstico respecto de la relacin misma y en general prevaleci la claridad de
conceptos, as como una evidente empata.

Ms tarde, cuando Musa realiz una visita oficial
21
a Mxico, se confirm la personal simpata
existente entre ambos jefes, evidente en el clido trato recproco y en varios detalles muy
significativos.


21
Es lo mismo que una Visita de Estado, pero como Musa es J efe de Gobierno y no de Estado, se le da esa connotacin.

47

A manera de muestra baste recordar que durante la Cena Oficial hubo camaradera, buen
humor y relajado protocolo, sobre todo cuando el PM mand llamar a la mesa de honor a Paz
Cervantes, hasta poco antes Directora de Instituto de Cooperacin y Cultura Mxico-Belize y
ya jubilada.

Musa le pidi a su amigo el Presidente de Mxico asignar a Paz a la coordinacin del
proyecto del Museo Nacional de Belize
22
y el Sr. Presidente instruy de muy buena gana a la
Canciller para que instrumentara aquello.

Al final de la amable cena, ambos recorrieron mesa por mesa saludando a cada comensal e
incluso se tomaron una foto con todos los embajadores que Mxico ha tenido acreditados en
Belize desde su independencia., felizmente all presentes.
23

En fin, puede decirse que el futuro de Belize se basa en instituciones fuertes, de corte
marcadamente democrtico, pero persiste un cierto grado de indefinicin respecto de su
pluralidad tnica y cultural.

El crecimiento de la poblacin hispana es una variable de la mayor importancia y de
tendencia irreversible, pero subsiste una corriente obstinada en preservar la imagen
tradicional del beliceo, manifestada cuando un Ministro y el propio J efe de Gobierno,
cuestionaron durante los ltimos comicios la legitimidad de origen de un candidato slo por
ser de etnicidad distinta.

El voto de protesta contra dichas manifestaciones elev al poder al PUP y deja en claro la
voluntad mayoritaria, tenazmente opuesta a la exclusividad de cierto grupo. Tan beliceos
son los de origen maya como los libaneses, mestizos, garfunas o creoles. En la simbiosis
est la clave, no en la pureza cultural o el idioma.

Por ello suena moderno y aceptable el discurso del PUP, pues no slo reconoce y acepta la
multietnicidad de los beliceos, sino que la practica en su seno. Una vez superada la
amenaza guatemalteca, es posible visualizar una mayor integracin con Centroamrica, tal
vez hasta convertir a Belize en el eslabn entre las dos regiones.

Tambin es posible predecir un acercamiento real con el vecino amigable, fraternal, aquel
que nunca ha condicionado su apoyo y siempre los ha acompaado en sus causas: Mxico.
Hasta ahora hemos sido buenos vecinos y grandes amigos; nos falta aprender a ser socios.

La alborada del siglo anuncia una nueva era de progreso para Belize, as como lazos cada
vez ms estrechos con Mxico. Tal vez una cosa sea condicionante de la otra.






22
Durante esa visita se firm el Memorndum de Entendimiento a fin de que Mxico de financiamiento al proyecto a travs
de fondos del Acuerdo de San Jos.
23
Pedro Gonzlez Rubio (hoy Embajador en La India), Marco Antonio Alczar (encabeza la Comisin para la Cooperacin
con Centroamrica), Manuel Martnez del Sobral (Emb. En Ecuador), Federico Urrucha (Dir. Gral. En la Cancillera),
Victor Manuel Solano (Embajador en El Lbano) y el autor.

48




A P N D I C E

INDICADORES ECONMICOS


Concepto

1997 1998

Producto Interno Bruto (PIB)

Millones de Dlares US (MDD)
Millones de Dlares Beliceos (MDB)




618.3
1 236.6



630.3
1 260.6

PIB Real


2.5%

1.4%

Tasa de Desempleo


12.7%

14.3%

Inflacin


1%

n.d.

Finanzas Pblicas (MDB)

Ingresos
Gasto Pblico
Saldo



282.6
286.3
-3.6


305.0
302.2
2.8


Reservas Internacionales (MDD)


118.6

87.8

Balanza Comercial con Mxico

Comercio Total (MDD)
Importaciones
Exportaciones
Saldo




34 997
32 984
2 013
-30 971



39 384
37 703
1 681
-36 022

Balanza Comercial

Comercio Total (MDD)



436.2



434.7

49
Exportaciones
Importaciones
Saldo

179
257.2
-78.2
170.4
264.3
93.9


Principales Socios Comerciales

Exportaciones


Importaciones



Gran Bretaa 45%), Estados Unidos (41%), Unin
Europea (6%), Canad (3%), CARICOM (3%).

Estados Unidos (55%), Mxico (12%),
Centroamrica (5%), Gran Bretaa (4.7%),
CARICOM (4.5%).



Deuda Pblica

Total (MDB)
% del PIB
% de las Exportaciones
Servicio de la Deuda (MDB)




481.4
39.1%
134.5%
61.4



509.8
40.4%
149.6%
66.8


Tipo de Cambio


2 Dolares Beliceos por
1 Dolar US.


2 Dolares Beliceos por 1
Dolar US.

RELACIONES ECONOMICAS CON MEXICO

En 1998, segn cifras oficiales, Mxico export a Belice productos con valor de 30
millones de dlares estadounidenses (MDD), en tanto que este pas slo le vendi al nuestro
cerca de 2 MDD. Esta notable desproporcin del comercio bilateral tendera a modificarse si
se incluyeran las compras que realizan los beliceos en la vecina ciudad de Chetumal, las
cuales alcanzan los 150 MDD anualmente de acuerdo a cifras del gobierno actual.

Si se considera como cifra base para el comercio bilateral 32 MDD, Mxico es el segundo
proveedor ms importante de bienes y servicios para Belize; del total de sus importaciones,
el 12% son mexicanas. Lamentablemente, slo el 1.5% de sus exportaciones tienen como
destino nuestro pas.

En sentido inverso, del total de productos comercializados por Mxico el ao pasado, slo el
4% lo realiz con Amrica Latina, es decir 7 mil millones. De este subtotal, Belize represent
escasamente el 0.005% o el 0.02% si se agregan las transacciones realizadas por los
beliceos en Quintana Roo.


Balanza Comercial de Mxico

50


1997 1998

Comercio Total (MDD)
Exportaciones
Importaciones
Saldo


34 997
32 984
2 013
30 971

39 364
37 703
1 681
36 022


Principales Productos Comercializados

Exportados por Mxico % Exportados por Belize %

Cementos Hidralicos
Gasoleo
Planchas de Acero
Preparaciones para lavar
Gas propano-Butano
Coles
Combustibles Gaseosos
Abonos Minerales (Urea)
Papel Higinico


18
9.6
8
4.3
3.8
1.7
1.5
1.5
1.4


Madera Aserrada en Tablas
Recipientes para Gas
Hojas para Chapado
Bovinos
Desperdicio de fundicin
Embarcaciones
Bales
Langostas
Hormonas

25.8
14.2
8.7
6.2
5.8
2.9
2.9
2
1.9