Patat - Introducción A Asor Rosa

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 7

Alejandro Patat

Introduccin a Alberto Asor Rosa, Historia de la literatura


italiana, Dante Alighieri, Buenos Aires, 2006, pp. 7-17


La Historia de la literatura italiana de Alberto Asor Rosa, en su
ltima edicin del ao 2000, debe ser leda en funcin de todas
las reflexiones tericas que el crtico romano realiz al respecto
a lo largo de los ltimos veinticinco aos. En un vasto nmero
de ensayos, ponencias acadmicas e introducciones a los
distintos proyectos editoriales que dirigi y promovi, Asor
Rosa fue definiendo progresivamente varios puntos que giran
en torno a una idea precisa de la literatura italiana: la visin de
la misma como plurisecular sistema policntrico, el concepto de
historia literaria, la distincin entre obra y texto y la definicin
de un perodo fundacional de la literatura italiana con
caractersticas especficas, al cual estara estrechamente ligado
el desarrollo de toda esa literatura.


1.

Entre 1982 y 1996, se publica en Italia la monumental Letteratura
italiana, ideada y dirigida por Asor Rosa y publicada por
Einaudi, que en sus casi veinte volmenes aport una visin
renovadora de la crtica litreraria de proveniencia acadmica.
Por primera vez en el campo de la historiografa literaria, la
literatura italiana es ojeto de anlisis a partir de una visin
compleja que ha intentado trascender la mera sucesin
cronolgica de los fenmenos literarios para captar ante todo,
sincrnica y diacrnicamente, el carcter plurilingstico y
pluricultural de la misma. En volmenes de carcter
monogrfico, la Letteratura Italiana afronta algunas cuestiones
transversales de la cultura italiana: la relacin entre
intelectuales y poder, la relacin entre mecanismos de
produccin y de consumo, la evolucin de los gneros y las
formas principales de los textos, la cuestin de la interpretacin
y de la metodologa de abordaje crtico, los entrecruzamientos
entre la msica, las artes figurativas, el teatro y la literatura y,
sobre todo, el concepto de geografa e historia de la literatura
italiana. Dicho concepto, tomado directamente de un ensayo de
Carlo Dionisotti
1
, consiste en el reconocimiento del desarrollo
paralelo de varias lenguas y culturas en cada uno de los estados
que slo en el siglo XIX se unificaron bajo un nica bandera. Es
decir, la nueva Letteratura italiana sacrifica sobre todo la idea
romntica de los intelectuales del Risorgimento, segn la cual
toda la literatura de Italia desde sus orgenes hasta la creacin
del Estado italiano cobra sentido en funcin del proceso de
unificacin poltica. La eliminacin de esta componente
retrico-nacionalista a favor de una visin crtica del desarrollo
de varias literaturas, que con la unificacin, sacrificaron
seguramente parte de su identidad local, sign el inicio de una
historiografa literaria nueva y polmica. El nuevo propsito ha
sido el de ofrecer un anlisis pormenorizado del desarrollo de
la cultura italiana a luz, no de un diseo nacional ante literam,
sino de la realidad sociohistrica y cultural que cada regin de
Italia conoci a lo largo de los siglos.
Para englobar las diferentes tradiciones que de algn modo
convergieron en la literatura del pas unificado, Asor Rosa se
vale del concepto de sistema. El sistema de la literatura italiana

1
C. Dionisotti, Geografia e storia della letteratra italiana, Einaudi, Torino,
1967.
se define por su carcter policntrico
2
, en que numerosas
ciudades capitales (Turn, Miln, Venecia, Florencia, Ferrara,
Roma, Npoles, Palermo, entre las ms importantes)
produjeron a lo largo de los siglos una cultura propia en lengua
florentina la lengua de prestigio de las clases cultas
dominantes y muchas veces en las lenguas y en los dialectos
propios. Entre 1870 y 1920 se consolida la idea de una literatura
nacional, que terminar por afirmarse entre 1920 y 1940.
El prestigio del que gozaron la lengua florentina y algunos
modelos literarios en toda la pennsula italiana antes de la
unificacin permite vislumbrar, segn el crtico romano, tres
grandes perodos del sistema de la literatura italiana. El primero
va desde los orgenes hasta la mitad del siglo XVII; el segundo
comienza en la segunda mitad del siglo XVII y llega hasta la
unificacin del Estado italiano; el tercero va desde esa fecha,
1860-1870, hasta nuestros das.
Lo esencial no consiste en describir las caractersticas
particulares de cada perodo, sino comprender en qu consiti
la fundacin de lo laico, como Asor Rosa al proceso cultural
constitutivo del siglo XIV, en que se gestaron los valores con los
cuales la literatura italiana sucesiva habra de hacer las cuentas
hasta hoy. Por empezar, la gnesis de la literatura italiana es
un proceso complejo, que comprende una aparicin, una
maduracin, un desarrollo y un punto de llegada, y, al mismo
tiempo, posibilidades rechazadas o perdidas, ocasiones
desperciadas o que jams emergieron en el marco de una lucha
por afirmar una nica lnea de tendencia y la perspectiva de su

2
A. Asor Rosa, Centralismo e policentrismo nella letteratura italiana
unitaria, en Letteratura italiana. Geografia e storia, dirigida por A. Asor
Rosa, vol. I: Let medievale, Einaudi, Torino, 1987.
continuacin en el tiempo
3
. Con ello, lo que se quiere
demostrar, lejos del esquema romntico-idealista de Francesco
De Sanctis, es que la literatura italiana nace apoyada en algunas
caractersticas especficas que necesariamente dejaron atrs
posibilidades expresivas y proyectos literarios alternativos. La
idea central de dicha fundacin radica en el paradjico carcter
laico de las obras esenciales del siglo XIV, la Divina Comedia, el
Cancionero y el Decamern, que consiste en la admisibilidad y
justificabilidad de la experiencia literaria y potica dentro de la
perdurante hegemona de la religin cristiana, cuya legitimidad
no est puesta en discusin
4
. Estas obras, en pocas palabras,
abordan temticas y problemas con que el individuo enfrenta
su experiencia de vida, naturalmente en el seno de la cultura
cristiana, pero independientemente del dogma que la misma
religin comporta: el objeto de estas obras es el individuo y no
Dios.
Y cules seran estas caractersticas especficas? Primero, los
escritores ms relevantes del siglo XIV Dante, Petrarca y
Boccaccio fueron conscientes de ser los iniciadores de una
tradicin que estaba naciendo: el adjetivo nuevo utilizado por
Dante en todos sus tratados y en los cantos de la Comedia en que
abord la cuestin potica basta para justificar este primer
punto. Segundo, la relacin productiva entre lengua y eros
compone, a travs de una estructura dilogica con permanentes
reenvos internos, un sistema compacto acerca de la teora y de
la experiencia de amor, que halla en el proceso de estilizacin
de la lengua florentina una formulacin cerrada, acabada,

3
A. Asor Rosa, La fondazione del laico, en Letteratura italiana, dirigida
por A. Asor Rosa, vol. V: Le questioni, Einaudi, Torino, 1986, p. 17. [La
traduccin de los fragmentos de todos los ensayos citados en esta
introduccin es ma].
4
Ivi, p. 19.
perfecta, autorreferencial. Tercero, una serie de valores
convergen en la constitucin de la literatura italiana: la
inteligencia nueva o desarrollo de las facultades imaginativas y
creadoras como productoras de sentido, que Dante reclama en
la Vida Nueva como sensibilidad totalizadora del individuo; el
valor de la amistad como mecanismo de oposicin a las
estructuras institucionales cerradas de la poca (monasterios,
rdenes religiosas, cortes); el trabajo intelectual como forma de
vida fuera del circuito religioso; la fortuna vastatrix o fortuna
devastadora, fuerza terrenal que amenaza la ya precaria
condicin existencial del hombre, pero que lo obliga al mismo
tiempo a reflexionar permantemente sobre la misma; el tempus
inextimabile, es decir, la conciencia de que el nico tesoro que el
hombre posee como recuerda Homero es la vida, hecha de
tiempo; la verdad, la voluntad y la razn como valores
conductores de la vida humana; la afirmacin de lo clsico y de
lo cristiano como elementos culturales indisociables de la nueva
literatura; el prestigio de la historia como memoria colectiva y
la historia como cada o involucin del hombre. Todos estos
valores constituyen una parte de la trama que se est hilando y
que, en cuanto tradicin, quedar afianzada a lo largo de lo
siglos.
Cuarto: la literatura italiana nace como laceracin entre poeta
y ambiente
5
. Exiliados, confinados, aplidas, emigrantes, los
italianos conocieron desde la fundacin de su propia cultura el
desarreglo emotivo y social que comporta el abandono de la
patria. De all, segn Asor Rosa, el germen de la dialctica entre
provincianismo y cosmopolitismo, entre el amor de la piccola
patria el burgo, el pueblo, la comuna y la grande patria la
humanidad, el mundo. Patria y lengua tienden a coincidir, al

5
Ivi, p. 91.
punto tal que se puede sostener que no existe patria fuera de la
lengua
6
. Para los intelectuales italianos del siglo XIV Italia no
es un lugar fsico, sino una tradicin mental. Pertenecer a un
burgo, a un pueblo, a una comuna y sentir la tradicin literaria
florentina como propia no es contradictorio.
Quinto: el desarrollo de la literatura italiana es posible gracias a
la relacin que se establece entre intelectuales y poder poltico,
dado que los primeros conciben su labor como exigencia de la
vida civil. La lucha por la independencia del poder poltico ser
una constante de la cultura italiana. Sexto y ltimo: es la poesa
y no la filosofa, por ejemplo, el discurso fundacional de la
cultura italiana para definir toda esta serie de ideas, conceptos
y valores. La poesa es el lenguaje que comunica al hombre con
lo divino, porque es por definicin el deseo y la bsqueda de la
Verdad. Una tradicin literaria concluye Asor Rosa que se
distingue desde su gnesis por la persuasin de que no existe
experiencia humana que no pueda ser descripta y comunicada,
sienta las bases para edificar una tpica civilizacin del
discurso, en que la comunicabilidad y la comunicacin
constityen valores supremos
7
. En otras palabras, una potente
capacidad discursiva sustituye a la capacidad dialctica de los
sistemas escolsticos y aristotlicos hasta entonces vigentes.
A partir de la Contrarreforma, Italia, influida poltica y
culturalmente por la Iglesia Catlica, sufrir el vaciamiento
creciente de dichos postulados laicos para dar lugar a nuevas
formas de expresin y a nuevos valores que formarn parte de
una nueva cultura catlica de impronta no siempre
reaccionaria. Los novios de Manzoni constituye el monumento
conclusivo de tres siglos de dominacin ideolgica por parte de

6
Ivi, p. 93.
7
Ivi, p. 120.
Roma. Claro est que no todo aquello que la cultura italiana
haba logrado establecer como paradigma social, moral y
esttico desaparecer, sino que, en la mayora de los casos,
reaparecer metamorfoseado bajo el velo de la cultura catlica
dominante.


2.

En un ensayo de 1993, Asor Rosa se ocup de delimitar los
problemas que todava hoy suscita el abordaje de la literatura
y en particular de la literatura italiana desde una perspectiva
histrico-literaria
8
. El crtico parte de dos premisas: por un lado,
tal perspectiva no implica necesariamente una filosofa de la
historia, pues la historia de la literatura posee formas y
procedimientos propios; por otro lado, cualquier aproximacin
al estudio de la literatura debe tener en cuenta la crisis de los
modelos de anlisis estructurales e inmanentistas, que
desprestigiaron el mtodo historicista.
Al mismo tiempo, dicha crisis no puede perder de vista la
dificultad de los tiempos modernos de hallar una funcin
especfica al fenmeno literario en un contexto de disolucin de

8
A. Asor Rosa, La storiografia letteraria come operazione di conoscenza,
en La scrittura e la storia. Problemi di storiografia letteraria, al cuidado de
A. Asor Rosa, La Nuova Italia, Firenze, 1995, pp. 1-14. El ensayo forma
parte de un seminario anual dedicado a los problemas de la historigrafa
literaria que tuvo lugar en el Departamento de Italianstica de la Universidad
La Sapienza de Roma durante el ao 1993. Las clases dictadas por los
estudiosos provenientes de distintos campos de los estudios filosficos,
histricos y literarios, Cesare Segre, Emilio Garroni, George Duby y Maria
Corti entre otros, fueron reunidas en el dicho volumen.
las ideologas y de la fe desmedida en la ciencia entendida
como progreso.
Liberada entonces la historia literaria de los procedimientos y
de los debates especficos de la historia, los problemas tericos
que emergen son: el concepto de historia literaria y la definicin
de las cuestiones conexas.
La operacin de la historiografa literaria es
fundamentalmente cognoscitiva e interpretativa
9
. Con estas
palabras el crtico elimina el carcter persuasivo y retrico de la
historia literaria, sosteniendo que su funcin no es demostrar
sino dar un sentido al conjunto de fenmenos. En Italia
existiran dos tipologas: el modelo romntico de Francesco De
Sanctis, quien en su Historia de la litertaura italiana (1870-1871)
desarroll un discurso histrico que hace de los textos
testimonios o pre-textos para la demostracin de su punto de
vista; y las historias literarias modernas
10
que reconstruyen el
cuadro final a posteriori, conectando algunos elementos del
sistema literario y poniendo en evidencia aquellas relaciones
que facilitan la comprensin de los textos.
La historiografa literaria se ocupa de un sistema en perenne
evolucin la literatura y, por lo tanto, tiene un nica certeza:
que puede captar de vez en vez un fragmento del sistema,
detenindolo convencionalmente en un momento fijo que
permita identificar las estructuras y las caractersticas generales.
Cada uno de esos momentos debe ser focalizado en funcin de

9
Ivi, p. 5.
10
En Italia las historias de las literatura son muchsimas. En este caso, Asor
Rosa se refiere seguramente al Compendio di storia della letteratura italiana
(1936-1947) de Natalino Sapegno, que conoci una larga difusin en las
escuelas y en las univeridades del pas. Sapegno parti al inicio de su carrera
crtica de los presupuestos de la esttica croceana para acercarse ms tarde al
hisoricismo marxista, en el que se form el mismo Asor Rosa.
las obras y no de los fenmenos concomitantes. Las obras y no
los autores o los eventos histricos que se relacionan con ellas
deben ser las grandes protagonistas de la historia literaria. Este
principio, como resulta obvio, se opone al carcter pedaggico
de la crtica romntica de De Sanctis, en el cual la litertura
italiana est asociada a la historia moral y civil de la nacin,
constituida por la vida ejemplar de los autores y por las luchas
sociales y polticas en las que participaron.
Para Asor Rosa, entonces, la historia de la literatura no es ni
una historia de las ideas ni de las biografas ni de los
fenmenos poltico-sociales en que dicha literatura se
manifiesta, sino una historia de las obras literarias. Claro est
que dichas obras no pueden sino ser colocadas en un marco
histrico-literario que el crtico identifica en la macro-categora
de la tradicin.

La historiografa literaria, como yo la concibo, tiene uno de sus
principales puntos de referencia en la constitucin y en el
desarrollo de la tradicin
11
.

Ahora bien, el desarrollo de dicha tradicin no debe estar
proyectado hacia adelante, sino que debe ser reconstruido
teniendo en cuenta su evolucin interna, las problemticas que
le son inherentes en ese determinado perodo. El crtico subraya
en este sentido el carcter no demostrativo de la historia
literaria, y aclara que no necesariamente una gran literatura
nace de una gran vida moral
12
.

11
A. Asor Rosa, La storiografia letteraria come operazione di conoscenza,
cit., p. 9.
12
Idem, Letteratura, testo e societ, in Letteratura italiana, vol I: Il
letterato e le istituzioni, dirigida por A. Asor Rosa, Einaudi, Torino, 1982,
pp. 3-29.
3.

Antes de llegar a las conclusiones respecto del modo en que
acta una historia literaria, es necesario afrontar la distincin
que Asor Rosa hace entre obra y texto
13
. El texto literario es, en
el uso corriente de la crtica, un concepto que acerca a la
literatura a su pura dimenisn lingstica y, eventualmente,
semiolgica. Cuando un crtico utiliza la palabra texto estara
aludiendo a la trama, al tejido de relaciones sobre todo
lingsticas que todo escrito de carcter no slo esttico
presupone. La obra, en cambio, implica, adems de la esfera
lingstica, una larga serie de elementos que amplan el
espectro de la visin asfixiante y delimitada del texto.
La obra es un trmino que obedece a una larga tradicin
autorizada y consolidada en el tiempo. El texto, por el
contrario, es un trmino que la crtica literaria ha puesto de
moda partir de los aos sesenta. La obra reenva a la idea de un
elemento creativo, fruto de la operatividad o capacidad de operar
de un sujeto que trabaja, que obra. Por lo tanto, comprende un
proyecto que admite el alcance o no alcance de un resultado
final. La proyectualidad de la obra implica un mtodo y un
modo de actuar sobre la materia lingstica, que se llama estilo,
es decir, la identidad de una obra como sujeto nico e
irrepetible
14
. La obra, en virtud de sus mltiples relaciones con
lo exterior en el fondo, es un producto de una vasta serie de
fenmenos internos, inherentes al autor, y de fenmenos

13
Idem, Il canone della opere, in Letteratura italiana. Le opere, vol I:
Dalle origini al Cinquecento, dirigida por A. Asor Rosa, Einaudi, Torino,
1992, pp. XXIII-LV.
14
En este caso es evidente la filiacin de la crtica de Asor Rosa con los
postulados estticos de Benedetto Croce.
externos se caracteriza por el amplio dilogo al que cada
lector, decodificndola y recrendola, est invitado.
Si el texto reclama una identidad prevalentemente lingstica,
la obra conlleva una identidad histrico-artstica e histrico-
literaria. La obra es, en fin, un sistema de relaciones entre
aspectos no slo lingsticos y semiolgicos, sino tambin
antropolgicos, histrico-sociales, ideolgicos, y filosficos.
Desde este punto de vista, la investigacin historiogrfica
aplicada al mbito de la literatura no puede sino prever la
cuidada descripcin de los fenmenos que convergen entre
todos los puntos del sistema.


4.

Cmo se conecta el concepto de obra con la cuestin de la
historia de la literatura? Para Asor Rosa es histrico todo
aquello que se relaciona con las condiciones interiores y
exteriores que determinaron su gnesis, su estructura, sus
temticas, su estilo, su condicin de individualidad e
irrepetibilidad. Porque en la reconstruccin de la interrelacin
entre las obras del sistema, la historia de la literatura da un
sentido a los objetos singulares que la componen y al sistema
mismo.
La historiografa literaria se mueve en un universo
fenomenolgico que le es propio y que se funda sobre la
relacin permanente entre tres categoras: tiempo, espacio y
tradicin/innovacin
15
. En lo que respecta al anlisis de las

15
Precisamente en el volumen sobre las cuestiones historiogrficas al
cuidado de Asor Rosa, hay un ensayo de Roberto Antonelli que define estas
tres categoras. R. Antonelli, Tempo e spazio nella storiografia letteraria,
obras, ser importante situar esta Historia de la literatura italiana
en el marco de la escuela crtica romana, que condensa la
herencia del historicismo literario de Natalino Sapegno (1901-
1990), titular de la Ctedra de Literatura Italiana de la
Universidad La Sapienza de Roma desde 1937 hasta los aos
setenta (ctedra que Asor Rosa ocup desde entonces hasta el
ao 2004) y las investigaciones histrico-estilsticas de los
fillogos de literatura romance de la misma Universidad,
liderados por la figura de Aurelio Roncaglia.
En lo que respecta al anlisis del sistema, Asor Rosa agrega a
dicho cruce de corrientes la interpretacin fuertemente
ideolgica de la literatura italiana, en que cada obra halla su
clave de comprensin en su precisa colocacin histrica en el
mbito de la sociedad y de la cultura que la vio nacer, sociedad
y cultura que se autodefinen segn un rgido esquema de lucha
de clases. De esta manera hace entrar en el mbito de lo
ideolgico hasta las mismas experiencias estilsticas,
transformando as un exquisito problema formal en una
cuestin sometida a las leyes de la organizacin social italiana.
El carcter determinante impreso por las fuerzas sociales a a la
bsqueda artstica es el legado marxista de esta Historia de la
literatura italiana. Por ello, a lo largo de toda la obra lo que
prevalece es la definicin del rol de los intelectuales en su
espacio, en su tiempo y en su tradicin, al punto de que
podramos considerar toda la obra un recorrido histrico-
literario acerca de este problema hegemnico. La civilizacin de
la poesa y la civilizacin del discurso son los conceptos claves del
primer volumen y expresan, justamente, la capacidad de la
literatura italiana medieval de haber hecho posible a travs de

en La scrittura e la storia. Problemi di storiografia letteraria, cit., pp. 161-
195.
los instrumentos de la literatura una forma de interpretacin de
la realidad.
Por ltimo, el lector notar que escasean los datos biogrficos y
bibliogrficos, recuperados en el tercer volumen en un apndice
final. Esta Historia asigna al dato las fechas de nacimiento y
muerte de los autores o las fechas de publicacin de las obras
un valor puramente instrumental. Todo confluye en la
interpretacin histrico-sociolgica del fenmeno esttico-
literario.

También podría gustarte