Estudio Orgullo Vs Humildad

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ESTUDIO SOBRE EL ORGULLO Y LA HUMILDAD

Hazte estas preguntas peridicamente para que veas si tu humildad es genuina; tanto delante de Dios, como delante de los hombres. 1) Me quejo con frecuencia de las circunstancias, las personas, los contratiempos y las pruebas? 2) Temo la intervencin de Dios (contratiempos, obstculos, cambios) en mi vida y planes? 3) Contino, sin preocuparme, en una actitud, conducta o caracterstica pecaminosa que reconozco como tal? 4) Me siento capaz y preparado para cumplir las responsabilidades que tengo ahora? 5) Me molesto cuando parece que otros me privan de un derecho o no reconocen mi puesto o importancia? 6) Me molesto o me defiendo cuando otro me seala un error o debilidad? 7) Pienso mucho en lo que otros opinan de m o la imagen que ven? 8) Trato con respeto, cario, y atencin a los que estn cerca de m? Soy sincero o lo hago con inters personal? 9) Sienten otras personas que yo las amo y estoy disponible para ayudarles? 10) Puedo recordar en esta semana actos de ayuda o servicio que prest espontneamente, sin inters personal y sin el deseo de impresionar a otros? 11) Reconozco que alguna conducta que he llamado supuestamente "humildad" cubre, tapa o esta asociada a mi inseguridad, el miedo o el orgullo?

12) Dependo mucho de la posicin, el respeto de otros y el xito para sentirme seguro, feliz y realizado? 13) Aprendo de los errores y fracasos? o Slo me siento derrotado y sin valor? 14) Acepto y admito inmediatamente la culpa por una ofensa, un error o un pecado? 15) Busco con frecuencia las ideas o el consejo de otros y estoy agradecido y reconozco su valor?

El orgullo.
Sinonimos: suficiencia, soberbia, altivez, endiosamiento, engreimiento, nfulas, vanidad, pedantera, postn, presuncin, arrogancia, petulancia, soberbia El orgullo es exceso de estimacin propia. El diccionario de la Biblia traduce las races hebreas, orgullo como: arrogancia, jactancia, soberbia, altivez, cuyo significado original es alta, elevado. La actitud dominante en la Biblia hacia el orgullo del hombre es severa, irnica y crtica. Quien se atribuye grandeza as mismo es culpable de orgullo. El orgullo es la esencia del pecado, pues asume para el hombre, para la familia, el pueblo o la nacin la gloria que slo corresponde a Dios. Es por eso, que los soberbios sern abatidos.

Si hay orgullo en tu corazn habr manifestaciones tales como:

+Pensar ms en nuestros derechos que en los derechos de los dems. +Falta de perdn y amargura.

+Endurecimiento del corazn e incapacidad de olvidar las ofensas. +Temor de lo que el hombre o la mujer puedan hacernos.

+Espritu independiente, que no acepta la correccin ni la enseanza. +Siente que siempre tiene la razn. + Inseguridad, baja autoestima, excesiva preocupacin en la apariencia personal, o en las apariencias generales. + Falta de gratitud, incapacidad de ver lo que los dems estn haciendo por nosotros. + Depresin: La soberbia del hombre le abate. Proverbios 29:23. La Depresin es otra mscara con las que se disfraza el orgullo. Al deprimirnos, estamos pensando porqu me pasan estas cosas a m, si yo soy muy bueno(a) y no le hago dao a nadie. Es decir, la depresin la mayora de las veces es auto compasin, y esto es una forma sutil de orgullo, porque es una preocupacin por uno mismo. Antes del quebrantamiento es la soberbia, y antes de la cada la altivez de espritu Proverbios 16:8 +La soberbia y la rebelda van de la mano, y la depresin, la autodestruccin y el fracaso son consecuencias del orgullo que mora en nuestro corazn y que se esconde para que no lo veamos. +Impaciencia. Darse demasiada importancia a uno mismo. +Celos, envidias, deseos ocultos de la carne, desconfianza.

QUE DICE LA BIBLIA DEL ORGULLO


La Biblia habla fuertemente contra el orgullo. No tiene nada bueno decir sobre l. El orgullo no es un virtuo como el humanismo nos ha enseado. Es un pecado como la Biblia ensea. Nota una docena descripciones despreciables del pecado de orgullo: 1. El orgullo es un pecado despreciado.

Proverbios 8:13, El temor de Jehov es aborrecer el mal; La soberbia y la arrogancia, el mal camino, Y la boca perversa, aborrezco.

2. El orgullo es un pecado contaminando.

Marcos 7:21-23, Porque de dentro, del corazn de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, los hurtos, las avaricias, las maldades, el engao, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez. Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.
3. El orgullo es un pecado quebrando.

Proverbios 16:18, Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la cada la altivez de espritu.
4. El orgullo es un pecado contencioso. Proverbios 13:10, Ciertamente la

soberbia concebir contienda; Mas con los avisados est la sabidura.


5. El orgullo es un pecado debilitando.

Daniel 5:20, Mas cuando su corazn se ensoberbeci, y su espritu se endureci en su orgullo, fue depuesto del trono de su reino, y despojado de su gloria.
6. El orgullo es un pecado engaoso.

Glatas 6:3, Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a s mismo se engaa.

7. El orgullo es un pecado faltado al respeto.

Salmos 40:4, Bienaventurado el hombre que puso en Jehov su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvan tras la mentira.
8. El orgullo es un pecado que nos pone ms lejos de Dios.

Salmos 138:6, Porque Jehov es excelso, y atiende al humilde, Mas al altivo mira de lejos.

9. El orgullo es un pecado abominable.

Proverbios 6:16-19, Seis cosas aborrece Jehov, Y aun siete abomina su alma: Los ojos altivos, la lengua mentirosa, Las manos derramadoras de sangre inocente, El corazn que maquina pensamientos inicuos, Los pies presurosos para correr al mal, El testigo falso que habla mentiras, Y el que siembra discordia entre hermanos. Proverbios 16:5, Abominacin es a Jehov todo altivo de corazn; Ciertamente no quedar impune.
10. El orgullo es un pecado divisivo (resistir quiere decir oponer"). Santiago 4:6,

Pero l da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.
11. El orgullo es un pecado perjudicial. Salmos 36:11, No venga pie de soberbia contra m, Y mano de impos no me

mueva.
12. El orgullo es un pecado que te desvaloriza.

Proverbios 29:23, La soberbia del hombre le abate; Pero al humilde de espritu sustenta la honra.

Palabras como soberbia, orgullo, altiva, y variaciones de ellos son mencionadas muchas veces en la Biblia Reina-Valera. Un estudio meticuloso de cada vez que estas palabras aparecen terminar con una sola conclusin: nunca son hablados de positivamente, sino como pecado y mal. Nunca es sugerido o implicado que el orgullo en ninguna forma es una virtud ya que: El orgullo es el pecado original de Satans (Isaas 14:12-15; Ezequiel 28:12,17) El orgullo en los padres e hijos impide a los padres de ver las fallas de sus hijos y de disciplinarlos y corregirlos para mejorarlos. El orgullo en si mismo nos mantiene egosta y egocntrico, incapacitndonos de gozar en o ayudar a otras personas. El orgullo en el pas nos impide de orar fervientemente a nuestro Dios por nuestra nacin. El orgullo en la raza o cultura hace muchas personas predispuestas.

Solamente Dios sabe cuantas naciones, matrimonios, familias, iglesias, negocios, vidas, etc. Han sido destruido por el orgullo. Es algo que Satans nos enseo y no el Seor.

Consecuencias del orgullo en el hombre:


El orgullo ha enloquecido a pueblos, naciones, familias e individuos. El orgullo cual verdugo despiadado, atropella, desprecia, humilla y arruina la vida, envilece a los pueblos y enceguece a las naciones. Los portan hombres y mujeres, ancianos y jvenes y hasta nios que sienten orgullo de las familias de la cual proceden. Otros sienten orgullo desenfrenado por el pas donde nacieron, Otros por los ttulos profesionales que desempean, Muchos por la clase social a la que pertenecen. Tambin orgullosos por los atributos fsicos o por los talentos que poseen

Muchos por el xito que han alcanzado.

De donde procede el Orgullo?


Primero es un producto del carcter malvolo de Satans, en l se origin el orgullo, la altivez y la soberbia, por esa razn Dios lo juzg. Segundo procede de nuestra naturaleza que es orgullosa, soberbia, autnoma y rebelde. pecadora que nos lleva a una necesidad de que el hombre exalte desmedidamente su ego por medio de lo que tiene a su alrededor. Todos tenemos ego, que es la parte de nuestra existencia que se interesa por nosotros, por m. Necesitamos sentir satisfaccin de nuestra propia existencia, logros y alcances. Esta es la fuerza motivadora que nos impulsa a alcanzar el xito. Este sentimiento progresista se torna en pecado de orgullo, cuando el hombre le roba la gloria que le pertenece a Dios, cuando se toma el crdito que le pertenece a l, y no acepta ni reconoce el trabajo de otros.

El orgullo desea hacer a la persona en si misma, la ms importante de su pequeo o grande universo. El orgulloso se obedece a si mismo, busca acumulacin de riquezas, posicin, fama y gloria. Procura controlarlo todo, no importando el costo y llevar a cabo sus propios fines, sin importar precio.

El Orgullo mental
En esta historia veremos cmo Jess trata a un hombre paraltico que era orgulloso en su mente. Durante muchos aos estuvo tirado con otros enfermos junto a una fuente, esperando. Segn la creencia de aquel tiempo, cada tanto se produca una corriente en el interior del agua que la agitaba y por una

supersticin se crea que un ngel mova las aguas y el enfermo que entrara justo en ese momento quedara sano. Por eso todos los enfermos esperaban el mover del agua para entrar al estanque porque uno slo era el que se sanaba. Jess se enter que el paraltico haca treinta y ocho aos que estaba as, se acerc y le pregunt: Quieres ser sano? Por qu Jess se le acerc a un hombre de tantos aos sin caminar y le pregunt si quera ser sano? No es obvia la pregunta? Porque el paraltico tena que or, no slo lo que Jess le pregunt sino su respuesta, deba entender que el problema no eran sus piernas inmviles sino su orgullo El hombre respondi: No tengo quin me ponga en el estanque. Tena una creencia orgullosa en su mente rgida, un exceso de confianza en su idea, y cuando Jess le hizo la pregunta, se la manifest: No tengo a nadie que me lleve al estanque para verme libre. El problema no era la parlisis fsica sino una parlisis mental, una creencia que le paraliz la mente, por eso Jess deba sanar primero la mente y despus el cuerpo. mental.

Orgullo en la Biblia es exceso de confianza. Tener confianza es bueno pero un exceso de confianza en una idea, que te limita, te paraliza. El exceso de confianza no da margen para mejorar, dice: Lo que hice est perfecto. No analiza, Cmo podra hacer para mejorarlo? No hablo de la autoexigencia del perfeccionismo sino que una persona sana siempre debe dejar un margen de duda para analizar lo que ha hecho.

Si lo que hace tiene un exceso de confianza, esa persona explica todo, justifica todo, nunca deja margen para analizar: Podra pensar de una manera mejor? Una persona con exceso de confianza no puede mejorar y sin darse cuenta, se estanca. Hay tres tipos de excesos de confianza : 1- Hay gente que se cree nica en el desierto. Si yo no estoy, la iglesia no funciona, Si no estoy en video se cae, Sin m el trabajo se hunde. Se creen los nicos porque tienen exceso de confianza en s mismo o sea orgullo.

Dios resiste al orgulloso, dice la Biblia.


Dios se aleja porque viene para cambiarlo pero, como tiene exceso de confianza y no puede sentarse para ver en qu mejorar, entonces Dios lo humilla levantando a otra persona que se lleve el premio que el orgulloso cree que le corresponde.

El orgulloso siempre es humillado. Elas estaba en la cueva y el ngel le pregunt: Qu haces? y l respondi: Slo yo he quedado. Cuando alguien se siente imprescindible en un rea, Dios lo quebranta levantando a ms gente que hace mejor las cosas y se lleva el premio.

2- Exceso de confianza en su capacidad. En lo que hace. Podemos decirle: Esto lo podras haber hecho de otra manera y responden: No, no, porque as estuvo bien. Todo lo que hacen siempre tiene una explicacin y dicen: Yo soy as.

Cuando Jess le dijo: Quieres ser sano ? El tena una creencia rgida y en vez de decirle: S Seor, quiero ser sano, le declaro la creencia: Estoy esperando que alguien se compadezca de m y me meta en el estanque, hace treinta y ocho aos que estoy esperando eso. La persona que no hace un anlisis para mejorar siempre ser un mediocre y no se dar cuenta, se va a estancar, creern que son los mejores hasta que aparezca alguien que tiene ms fruto y dirn: Qu pasa? 3-Exceso de confianza en la manera de pensar. -Yo pienso as, Yo lo veo as. -S, pero tu matrimonio se est reventando, -No importa, para m es as y punto. Orgullo mental. El Seor los quebrantar alejndose de ellos para que vean que las creencias no funcionan creyndose la nica Coca Cola del desierto y que hay otros que han hecho las cosas mejor porque se han preguntado cmo mejorar. Los que siempre estn de vuelta en todo son los que nunca fueron a ninguna parte y el orgullo es como el mal aliento se dan cuenta todos menos el que lo tiene. 1- Dios quebrar mi exceso de confianza en m para ponerlo en l. No es lo que creo sino lo que le crea a l. Jess le pregunt si quera ser sano y el hombre tena que haberle dicho: S Seor, creo en Ti, la confianza debe estar en lo que el Seor te prometi no en ti mismo. Debemos dejar un margen para ver que podemos mejorar, para cuestionar lo que pudimos hacer mejor, para reconocer los errores, porque hay gente que nunca se equivocan, nunca tienen la culpa de nada, son perfectos siempre. Cuando ponemos la confianza en el Seor, creemos a lo que nos dijo, sabremos que lo que creemos, pensamos y como interpretamos las cosas se pueden mejorar.

2-Excesiva

confianza

en

lo

que

el

Seor

me

prometi.

Jess le quebr la visin y grit: Levntate, toma tu camilla y anda y cuando escuch esas palabras fue sano y se levant. - Cuando Jess le rompe el exceso de confianza a este hombre, el deja de pensar que tiene que ir al estanque, tendr claridad para ir a los montes y conquistar todo lo que Dios le prometi. Cuando Dios rompa mi excesiva confianza cambiar mi recorrido, tendr frutos grandes y har lo que nunca hice. El hombre era rgido en su mentalidad y visin y cuando Jess lo san empez a andar, porque la palabra cargada del poder de Dios lo haba sanado. El estanque era un recuerdo, ya no estaba ms en su meta, porque cuando el Seor te sana las metas rgidas que estaban en tu corazn van a desaparecer y te movers con libertad hacia los lugares que Dios ponga.

Levntate! Toma tu lecho y anda


Despus Jess desapareci. El hombre empez a caminar y se acerc un fariseo (legalista) que le pregunt: Quin te san? Uno que me dijo: Toma tu lecho y anda (No! Primero dijo: Levntate) Desagradecido! En vez de decir Dios me ha sanado , ni con la camilla en la mano le pudo dar gracias a Dios porque su espritu segua paraltico. Y fue al templo y Jess estaba all. Jess le dio un poco de tiempo para ver si el orgullo mental que mantuvo durante treinta y ocho aos desapareca. Se encontraron en el templo y Jess le dijo: No peques para que no venga algo

peor.
Su pecado era su mente orgullosa . Y Jess le dijo: No sigas con esa actitud de orgullo porque si no te va a venir algo peor. Y cuando lo oy el hombre no dijo nada, ni se postr a sus pies, por orgullo. No sigas pecando, como pecaste durante treinta y ocho aos de orgullo Y el hombre fue a contarles a los fariseos que fue Jess quien lo haba sanado. Ni le dio las gracias.

Cmo podemos ser humildes?


La nica manera de tener la humildad es morir para nosotros mismos para que Cristo pueda vivir su vida a travs de nosotros. (Glatas. 2:20). Tenemos que humildemente quitarnos del camino para que Cristo pueda cumplir su voluntad a travs de nosotros. Maravillarse de la gracia. Slo por la obra del Espritu Santo que mora en el creyente podemos ser verdaderamente humildes. El creyente ha de estar maravillado del infinito favor no merecido que Dios le ha manifestado. La salud espiritual no es lo que el mundo entiende como autoestima, sino existir en la atmsfera de la estima amorosa que Dios tiene para el creyente. Ser humilde es entender que Jesucristo me escogi, se sacrific y me busc, no porque fui bueno, sino porque l es bueno y me ama. l trabaja todos los das para cambiarme, precisamente porque no soy todava la persona que l desea que sea. l disfruta hacer su obra pastoral a mi favor. La estima de Dios es infinitamente ms alta que la autoestima! Ser el recipiente agradecido. La humildad da gratitud a Dios por la manera que me hizo, por su gracia al redimirme y por la manera que me seorea, por el milagro de estar transformndome, por las circunstancias y personas que l ha puesto en mi alrededor. Murray lo expresa en esta manera: La raz de toda virtud y gracia, de toda fe y adoracin aceptable, es que sabemos que no tenemos nada aparte de lo que recibimos, y nos sometemos en la humildad ms profunda para esperar totalmente en Dios.

ES LA HUMILDAD UNA VIRTUD CRUCIAL?

La humildad es crucial porque es la raz de muchos valores de gran significado en la vida del cristiano, su relacin con Dios y su relacin con otras personas, sean cristianos o no cristianos. Juan Calvino la llam "la raz de toda virtud".

Fnelon: "Todos los santos estn convencidos que la humildad sincera es el fundamento de las virtudes. Es porque la humildad es la hija del amor puro, y la humildad es nada ms que la verdad".

Thoms de Kempis: "Los santos ms grandes ante Dios son los que son menos segn su propia opinin".

Teresa de vila: "Y, si las almas no han determinado ser esclavos de l, que sean convencidos que no estn progresando mucho, porque todo este edificio [de espiritualidad] tiene la humildad como su fundamento. As...para que edifiques sobre buenos cimientos, esfurzate para ser el menor y el esclavo de todos, mirando cmo puedes agradarles y servirles".

Andrew Murray: "La humildad, el lugar de la dependencia total de Dios, es, por su naturaleza, el primer deber y la virtud superior de la criatura. En realidad es la raz de toda virtud" (pg. 12).

PARA QUE NECESITAMOS HUMILDAD

Para la salvacin. La humildad es necesaria para que una persona llegue a conocer a Cristo porque necesita darse cuenta de su pecaminosidad y su necesidad del perdn. Hay que acercarse a Dios como un nio, reconociendo su impotencia en s mismo,

dependiente de otro y necesitado. Lo reconoce para s mismo, delante de Dios y delante de otras personas. Jess reconoci la fe del centurin que deca, "No soy digno" y de la mujer de Sidn que acept el nombre de perro y pidi las migajas que caan de la mesa. Andrew Murray seala que la salvacin requera la humillacin de Cristo en la encarnacin y la muerte. Tambin requiere la humillacin del pecador que no confe en los mritos humanos sino solamente en el favor no merecido de Jesucristo.

Para la sumisin a Dios. Acabamos de ver que la humildad es necesaria para que el cristiano se someta a Dios y a su voluntad (1 Pedro 5:5-6). La sumisin es necesaria para que el creyente siga la direccin de Dios cuando tome decisiones y escoja el camino de la santidad cuando entra en tentacin. Tambin, es necesario para que acepte con paciencia y gozo las circunstancias, experiencias y desafos difciles en la vida. Para confiar en Dios. Sin la humildad somos autosuficientes y no dependemos de Dios. El orgullo hace imposible la fe.

La humildad es sencillamente la disposicin que prepara el alma para vivir por la fe. Y todo respiro del orgulloaun el ms secretoen buscar lo suyo, insistir en su propio camino, la autosuficiencia, la exaltacin de uno mismo.... La fe es el rgano o sentido para percibir y aprender del mundo celestial y sus bendiciones. La fe busca la gloria que viene de Dios, que slo viene dnde Dios es todo.

Mientras tomamos la gloria unos de otros, mientras buscamos, amamos y protegemos celosamente la gloria de esta vidael honor y la reputacin que viene de los hombresno buscamos y no podemos recibir, la gloria que viene de Dios.... Es sorpresa que nuestra fe es tan dbil cuando el orgullo reina tanto, y apenas hemos aprendido an a aorar u orar por la humildad como la parte ms necesaria y bendecida de la salvacin? (Murray, pgina 73) Para amar a Dios y a otros. Sin la humildad ni amamos a Dios ni al prjimo, las responsabilidades principales del humano (Marcos 12:30-31). No amamos a Dios porque nos amamos a nosotros mismos y nuestra voluntad y nuestra capacidad antes que a l.

No amaremos al prjimo porque nos amamos a nosotros mismos antes que a los dems. Para las relaciones con otros. Las buenas relaciones sociales con todas las otras personas dependen de la humildad. Cuando el orgullo y el egocentrismo reinan en nuestras relaciones, no manifestamos el amor a otros. Pensemos en las relaciones en el matrimonio, entre la esposa o el esposo: "Someteos los unos a los otros en temor de Dios" (Efesios 5:21). Pensemos en las relaciones entre padres e hijos: "Hijos, obedeced a vuestros padres....Padres, no exasperis a vuestros hijos" (Colosenses 3:20-21). Pensemos en las relaciones en el trabajo o la profesin: "Siervos, obedeced a vuestros amos....Amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas, sabiendo que el Seor de ellos y vuestro est en los cielos y que para l no hay acepcin de personas" (Efesios 6:5, 7). Para la unidad de la iglesia.

Reconozcamos que la unidad de la iglesia depende de la humildad y el amor en las relaciones personales. Pablo comienza sus exhortaciones para la unidad de la iglesia con estas cualidades: "Con toda humildad y mansedumbre, soportndoos con paciencia los unos a los otros en amor, solcitos en guardar la unidad del Espritu en el vnculo de la paz.... (Efesios 4:1-4; cp. 1 Pedro 5:1-5). [En la iglesia] no se puede hacer impacto sin que haya comunidad. No se puede tener comunidad sin la unidad. No se puede tener la unidad sin la humildad. No se puede tener la humildad sin experimentar la santidad de Dios. (Joe Aldrich, Kindred Spirit, 1994) Para manifestar a Dios al mundo no creyente. En vez del "orgullo" o la "arrogancia" que algunos no creyentes comentan de los creyentes, ellos han de sentir el amor, la misericordia y la paciencia que Dios mismo manifiesta hacia el mundo. El creyente no es superior a los dems. Es una persona perdonada por la gracia de Dios. Jess dijo que la persona quien ha sido perdonada mucho es la que ama mucho.

Este creyente ha de, humildemente, guiar al no creyente a la misma fuente de agua que le ha saciado su sed. Ha de reflejar en su carcter y conducta al Cristo que se humill, que vino para servir y que se sacrific a s mismo para perdonar los pecados de todos. Para su propio crecimiento y transformacin. Debe ser evidente que, si estamos contentos con lo que somos, no procuraremos progresar en la vida cristiana, agradar a Dios, ni hacer los cambios que Dios quiere hacer en nosotros para que crezcamos hacia la imagen de Cristo.

Experimentar los cambios requiere que seamos enseables, que seamos motivados por Dios, que tengamos el deseo, la intencin y, sobre todo, la dependencia de Dios quien es el nico que es poderoso para lograr la transformacin del hombre. "La humildad es la verdadera esencia de la santidad....es el suprimir el ego por medio de entronar a Dios. Donde Dios es todo, el ego no es nada" (Murray, pgina 63) De nuevo hacemos la pregunta, por qu es tan necesaria la humildad para progresar en todo aspecto de la vida cristiana? Escuchemos algunas palabras ms de Andrew Murray sobre la relacin de la humildad con el pecado: Y, entonces, el orgullo o la prdida de la humildad, es la raz de todo pecado y maldad! Fue cuando los ngeles, ahora cados, comenzaron a mirarse a s mismos con complacencia que fueron llevados a la desobediencia, y fueron echados de la luz celestial a las tinieblas. As fue que, cuando la Serpiente respir el veneno de su orgulloel deseo de ser como Diosen los corazones de nuestros primeros padres, ellos tambin cayeron de su estado alto a la vileza al cual el humano se ha hundido. En el cielo y en la tierra, el orgullola exaltacin del egoes la puerta y el nacimiento, y la maldicin del infierno. Entonces, lgicamente, nada puede lograr nuestra redencin aparte de la restauracin de la humildad perdida, la original y la nica relacin verdadera de la criatura con su Dios! As que, Jess vino para traer de nuevo la humildad a la tierra, para hacernos partcipes de ella, y a travs de ella a salvarnos. En el cielo se humill para hacerse hombre.

La humildad que vemos en l la posey en el cielo; le trajo, l la trajo, desde all. Aqu en la tierra "se humill a s mismo, hacindose obediente hasta la muerte"; Su humildad dio a su muerte su valor, y as lleg a ser nuestra redencin. Y ahora la salvacin que l imparte es nada ms y nada menos que una comunicacin de su propia vida y muerte, su propia disposicin y espritusu

propia humildadcomo el fundamento y la raz de su relacin con Dios y su obra redentora. Jesucristo tom el lugar y cumpli el destino del hombre, como una criatura, por medio de su vida de perfecta humildad. Su humildad es nuestra salvacin. Su salvacin es nuestra humildad. Y as la vida de los salvos, de los santos, necesita llevar la estampa de la liberacin del pecado y la restauracin completa a su estado originalsu relacin entera a Dios y hombre, marcada con una humildad que lo ha llenado todo. Sin esto, el creyente no puede permanecer en comunin con Dios, o experimentar su favor y el poder de su Espritu; sin esto, no experimentar una fe que persevera, ni el amor, ni el gozo, ni la fuerza. La humildad es el nico suelo en el cual las virtudes echan raz; la falta de humildad es la explicacin suficiente de todo defecto y fracaso. La humildad no es tanto una gracia o virtud junta con las dems como es la raz de todas, porque slo ella toma la actitud correcta delante de Dios y permite que l como Dios haga todo. (Murray, pginas 12-14).

CMO APRENDEMOS LA HUMILDAD?


Por medio de las dificultades, necesidades y carencias. "El peligro del orgullo es ms grande y est ms cerca de lo que pensamos, y especialmente en nuestras experiencias ms altas y sublimes"en el xito de algn proyecto o empresa, al ver el fruto en el ministerio, al sentir el amor de los que le admiran. Pablo fue tentado al orgullo cuando recibi revelaciones de Dios. Pero tambin, "la gracia de la humildad es ms grande y est ms cerca, tambin, de lo que pensamos."

Cuando Pablo fue humillado como prisionero pero agradecido por la abundancia de una ofrenda de Filipos, exult, "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece", incluyendo el vivir contento con lo que tena y tambin aceptar las ofrendas. Qu

podemos hacer para colaborar con Dios en el desarrollo de la humildad en la vida? Enfocarnos en la grandeza y la gracia de Dios. La humildad nace en el alma que est sinceramente maravillada del conocimiento y las experiencias de Dios, su grandeza, su amor, su salvacin, su provisin y su poder. Hemos de meditar en el ejemplo de Jesucristo en su venida como hombre, su vida como siervo y su sacrificio por nosotros. Hemos de meditar en la gracia de Dios que envi a Cristo y provey la salvacin cuando ramos impos, rebeldes y enemigos de Dios. La humildad comienza cuando dejamos de pensar que el mundo gira por nosotros y estamos profundamente conscientes de nuestra relacin como criaturas y como pecadores a nuestro Dios infinitamente majestuoso, santo y poderoso. "El camino ms seguro a la humildad es recordar constantemente a Dios. En la Biblia el orgullo est relacionado con olvidar a Dios [Oseas 13:6]..." Pablo habla en Romanos 12:2 de renovar nuestra mente. Comprender cmo es nuestro Creador Salvador requiere empapar la mente, alimentar el corazn y orientar la voluntad por medio de la meditacin constante en la palabra de Dios. Aprender de memoria y meditar en los textos que nos hacen pensar en su belleza, su gracia y su grandeza o cantar canciones son hbitos que hacen enfocarnos intencionalmente en Dios. Dejar que Dios nos entrene a travs de las debilidades. Thomas escribe que las dos columnas de la humildad son el conocimiento de la grandeza de Dios y de nuestra bajeza. Muchas veces no aprendemos la humildad a menos que Dios nos ensee la debilidad y la incapacidad a travs de los errores, los defectos, la enfermedad, el fracaso y aun el pecado.

Confesemos nuestra falta de humildad y de dependencia y reconozcamos que no somos capaces por nosotros mismos. Las debilidades y las limitaciones deben ensearnos la humildad y la dependencia. Dios permiti el "aguijn" en su carne y, a travs de esta experiencia, ense a Pablo que su "poder se perfecciona en la debilidad". Entonces, l pudo exclamar que "por amor a Cristo me gozo en las debilidades...porque cuando soy dbil, entonces soy fuerte" (2 Corintios 12:10). Las experiencias deben producir el crecimiento en la humildad, si reflexionamos en ellas bblicamente. "Al crecer ms en aos y al ver ms, tendr menos razn de sentir el orgullo. La ignorancia y la falta de experiencia son el pedestal del orgullo; dejemos que el pedestal se quite y el orgullo pronto caer"(James Ryle en Thomas, pgina 61).

Adoptar una postura de recibir. En otras palabras, tomemos la postura de la dependencia, la de una persona que reconoce que no tiene en s mismo, ni por su preparacin acadmica, ni por su experiencia, la sabidura, el conocimiento, la competencia y la fuerza necesarias para cumplir la voluntad de Dios. No somos capaces de llevar fruto. No somos capaces de hacer que suceda algn resultado deseado. No somos sabios. Tenemos una naturaleza que resiste la comunin con Dios y con los dems. Tenemos una naturaleza que se opone a la voluntad de Dios. La humildad en s es una virtud que slo el Espritu Santo puede obrar en nosotros. Hay que recibir todo bien de Dios y de otros. "Porque quin te distingue? O qu tiene que no hayas recibido? Y si lo recibiste, por qu te gloras como si no lo hubieras recibido?"

Dependamos de Dios en todo. Humillarnos a nosotros mismos. Esta exhortacin de Dios es un verbo de accin que nos manda a cumplir actos de humildad y a someternos a la voluntad de Dios y de otros. Los actos producen una disposicin; estas actitudes forman la voluntad y la voluntad formada por Dios produce el carcter cristiano. El Espritu que mora en el creyente usa este proceso para moldearnos. Tomemos la decisin de ceder el lugar a otro, de cumplir un acto especfico de servicio o ayuda. Tengamos el cuidado de no aceptar el crdito por los ministerios que Dios est cumpliendo a travs de nosotros. Reconozcamos los valores y virtudes de otros.

Agradezcamos o elogiemos sinceramente los buenos actos y actitudes de otros. Escuchemos con atencin sus opiniones. "Para saber...cmo se comporta el hombre humilde, hay que seguirlo en el transcurso normal de la vida diaria" (Andrew Murray citado por Thomas, pgina 62). La humildad se aprende a travs de multitudes de decisiones pequeas cuando dejamos el primer lugar a Dios y a otros, cuando honramos y servimos a otros.

Meditemos regularmente en la palabra de Dios. Escuchemos a Dios diariamente en su Palabra, reflexionemos sobre lo que leemos, examinemos la vida, seamos confrontados por l y oremos por los cambios que son necesarios en la vida. Esto contribuye maravillosa y, a veces sorprendentemente a nuestra

transformacin.

Por varias semanas meditemos p 9:23-24; Da asajes sobre el orgullo y la humildad: Salmo 51:17; Proverbios 11:2; Isaas 66:1-2; Jeremas niel 4:29-37; Marcos 10:45; Lucas 22:24-26; Juan 13:1-15; Romanos 12:10 y 16; Efesios 4:2-3; 5:21; Filipenses 2:3-5 y 8; Colosenses 3:12-13; 1 Pedro 5:1-6. Permitamos que la palabra de Dios nos confronte. Pidamos a Dios que l nos ensee cmo nuestro orgullo est influenciando nuestras actitudes, ambiciones, reacciones, resentimientos, crticas, relaciones y decisiones. Podra ser que un problema fundamental es el orgullo, la soberbia, la preocupacin por conservar la dignidad, la autoridad, los derechos o alguna actitud semejante?

TEXTOS BIBLICOS QUE HABLAN DE LA HUMILDAD


MATEO 18:3-4 Y dijo: De cierto os digo, que si no os volvis y os hacis como nios, no entraris en el reino de los cielos. As que, cualquiera que se humille como este nio, se es el mayor en el reino de los cielos. Cristo ensea esta virtud porque acept la voluntad de su Padre y acept el maltrato de los hombres. "Encomendaba la causa al que juzga justamente " (1 Pedro 2:23). l se someti a su Padre y confiaba totalmente en l: No puedo yo hacer nada por m mismo; segn oigo, as juzgo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envi, la del Padre (Juan 5:30). Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envi (Juan 6:38). Mi doctrina no es ma, sino de aquel que me envi (Juan 7:16).

...y que nada hago por m mismo, sino que segn me ense el Padre, as hablo" (Juan 8:28).

Pero yo no busco mi gloria; hay quien la busca y juzga (Juan 8:50). No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en m? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en m, l hace las obras (Juan 14:10). (Vase tambin, Juan 5:19 y 7:18) No vino para ser servido, sino para servir. Fue siervo del Padre y de los humanos al entregar su vida para glorificar a Dios y para levantar a los hombres de la condenacin del pecado. FILIPENSES 2:3-8 Nada hagis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los dems como superiores a l mismo. No mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual tambin por lo de los otros. Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo tambin en Cristo JESUS, el cual, siendo en forma de Dios, no estim el ser igual a Dios como cosa a qu aferrarse, Sino que se despoj a s mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; Y estando en la condicin de hombre, se humill a s mismo, hacindose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. ISAIAS 53:7 Angustiado El, y afligido, no abri su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeci y no abri su boca. ROMANOS 12:3

Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que est entre vosotros, que no tenga ms alto concepto de s que el que debe tener, sino que piense de s con cordura, conforme a la medida de fe que Dios reparti a cada uno. EFESIOS 9:1-3 Yo, pues, preso en el Seor, os ruego que andis como es digno de la vocacin con que fuisteis llamados, Con toda humildad y mansedumbre, soportndoos con paciencia los unos a los otros en amor, Solcitos en guardar la unidad del Espritu en el vnculo de la paz.

1 PEDRO 5:5 Igualmente, jvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestos de humildad, porque: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. PROVERBIOS 15:33 El temor de Jehov es enseanza de sabidura; y a la honra precede la humildad. PROVERBIOS 22:4 Riquezas, honra y vida son la remuneracin de la humildad y del temor de Jehov. ISAIAS 57:15 Porque as dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espritu, para hacer espritu de los humildes, y para vivificar el corazn de los quebrantados. SALMO 51:17

Los sacrificios de Dios son el espritu quebrantado; al corazn contrito y humillado no despreciars T, oh Dios. ISAIAS 66:2 Mi mano hizo todas estas cosas, y as todas estas cosas fueron, dice Jehov; pero mirar a aquel que es pobre y humilde de espritu, y que tiembla a mi palabra. 2 CORINTIOS 12:9-10 Y me ha dicho: Bstate mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriar mas bien en mis debilidades, para que repose sobre m el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy dbil, entonces soy fuerte. MATEO 5:3 Bienaventurados los pobres en espritu, porque de ellos es el reino de los cielos.

Que es la humildad?
La humildad es una virtud que emana de la personalidad espiritual del hombre. Es la capacidad de aceptar y reconocer la grandeza de otros. Es la fuerza que hace entender las pequeeces propias. La humildad nos ubica en el lugar que nos corresponde, nos ayuda a someternos al bien, recibir rdenes, obedecerlas, ejecutarlas con buen nimo y alegre disposicin. La humildad es la fuerza que produce disposicin del nimo para las buenas acciones en la existencia humana, es la actitud noble que se oponen al orgullo, la altivez, la jactancia y la vanagloria. Jess y todo el Nuevo Testamento ensean abundantemente sobre el valor de la humildad. El que se humilla ser ensalzado, y el que ensalza ser humillado Humillaos ante la poderosa mando de Dios y El os exaltar cuando fuere tiempo Dios da gracia a los humildes, mas resiste a los soberbios Aprended

de mi que soy manso y humilde de corazn, y hallaris descanso para vuestras almas.

Que no es la humildad:
No es cobarda No es servilismo No nos hace menos No nos hace tontos No es ser dbil No es Ser complaciente No es querer llamar la atencin de otros. No es ser pobre No es tener un bajo concepto de si mismo No es tener una baja ni alta auto-estimacin No es sentirse desdichado

No es la obsesin de ser el "mrtir" No es ser discriminado

No es ser menos No es ser lo peor No es sentir autocompasin No andar proclamando su humildad, cuando alguien reclame que es humilde, ese solo hecho prueba que no lo es.

No es el silencio que pretende comunicar que lo que pensamos no tiene valor. A veces el silencio es una manera de escondernos y mantenernos lejos de los dems. A veces el silencio cubre el orgullo que desde lejos critica a otros, los menosprecia y no se digna a entrar en comunicacin con ellos como iguales.

No reclama sus mritos, lo harn otros. Albate el extrao y no tu propia boca, pues buscar la propia gloria, no es gloria

QUE ES SER HUMILDE?

Mateo 11:29-30 Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de m, que soy manso y humilde de corazn; y hallaris descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fcil y ligera mi carga. 1 Pedro 5:5-6 Igualmente, jvenes, estad sujetos a los ancianos, y todos, sumisos unos a otros, revestos de humildad, porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que l os exalte cuando fuere tiempo;

La palabra griega que se traduce como "humildad" habla del pensamiento o la opinin que uno tenga de s mismo.

Literalmente seala una opinin baja de s mismo. El peligro del orgullo se nota en Romanos 12:3 cuando Pablo exhorta no tener "ms alto concepto de s que el que debe tener". Los griegos antiguos entendieron la humildad como un atributo negativo que llevaba la idea de ser dbil, sin dignidad, servil o menospreciado. Sin embargo, los judos como los autores bblicos llenaron el trmino con significado positivo, hasta que el Hijo de Dios pudo decir, "Soy manso y humilde de corazn" (Mateo 11:29). Ser sumiso a Dios y a otros. Pedro enfoca la humildad en su relacin con Dios y tambin con los hombres como el antnimo de la soberbia. Es la virtud que produce la sumisin. Ser humilde no es carecer de bienes, pues hay mendigos que pecan de orgullosos.

COMO SE LO QUE ES SER HUMILDE?


Ser humilde no es acatarlo todo como un autmata, sin razonamiento, ni criterio. Ser humilde no es criticarse a s mismo y hablar de los errores y fracasos hasta que alguien nos contradiga y nos halague y as alimente el orgullo que habita en los rincones del corazn. Ser humilde no es carecer de carcter y decisin

Ser humilde no es sentirse cansado, perseguido y pattico victima de las circunstancias.

Ser humilde no es ser victima de otros ni dejarte usar por ellos Ser humilde no es ser complaciente ni cmplice de otros. Ser humilde es no atraer la atencin hacia nosotros en ninguno de sus extremos, sino atraer la atencin solo a Dios.

Ser humilde no es hacer alarde de lo que somos o tenemos. Ser humildes es olvidarse de si, para pensar en otros.

Ser humilde es enfocarse en servir, en dar, en proveer. Ser humilde es buscar el bien de otros. Ser humilde es considerar a los dems como mejores que tu. Ser humilde es dejar de buscar lo propio para proporcionarlo a otros. Ser humilde no es alabarnos ni buscar nuestra gloria sino, la del Seor. Es pensar y actuar como Juan el Bautista, el cual dijo: A l (Cristo) le conviene crecer pero a mi, menguar.

Es olvidarnos de la honra que merecemos.

Es saber reconocer valores y virtudes en otros. La humildad reconoce que la autoridad es siempre otorgada, que todo individuo est bajo autoridad. Pues la autoridad siempre trae grandes responsabilidades de ejercerse con sabidura, comprensin, amor para el bien de las personas y de la empresa, no para ensalzarse uno mismo.

La humildad es el opuesto a la autosuficiencia La humildad no mira por encima del hombro. La humildad es darse cuenta que en nuestro poder somos incapaces de hacer que cualquier cosa buena suceda. Todo lo que somos y hacemos viene de Dios.

La humildad no permite egocentrismo, da prioridad a otros. La humildad no calumnia, no desacredita. La humildad es estar disponible para otros

La humildad es ser abierto con tu vida, con tus luchas y tus necesidades. La humildad piensa en las necesidades de otros por encima de las suyas.

La humildad rehusa ponerse en un lugar superior, ser superior, abusar de la autoridad o posicin en la que se encuentre.

La humildad no muestra prepotencia, ni soberbia, dirije y ejerce autoridad con justicia y amor.

La humildad no crea problemas, no humilla, no abofetea. La humildad no hiere ni con los hechos ni con las palabras. La humildad mora con la sabidura, sabe callar en lugar de hablar. La humildad sabe honrar en lugar de difamar. La humildad sirve y da con gozo y alegria, no con quejas ni a medias. La humildad no es obediencia a medias, sino sumisin y entrega completa a la voluntad de Dios.

La humildad es paciente y actua con mansedumbre. La humildad se muestra con palabras amables y sabias. La humildad es saber perdonar y no guardar resentimiento ni rencor. La humildad genuinamente siente misericordia y amor por una persona aunque le ha herido profundamente.

La humildad busca escucha opiniones de otros sobre su vida y no se pone a la defensiva cuando lo critican.

La humildad no se molesta cuando otros no le extienden las cortesas, la bondad o los derechos que han de esperarse.

La humildad se sorprende cuando es objeto de cortesas y bondades, no las espera.

La humildad esta dispuesto a rendir cuentas a otros y a someterse a la autoridad.

La humildad es estar contento con lo que se tiene. La humildad entiende que todo lo bueno que tiene o que puede ser viene de Dios.

La humildad sabe ayudar ms que obstaculizar. La humildad es ser totalmente dependientes de Dios. Es la actitud del corazn que reconoce su profunda necesidad de Dios y de otros hombres, tanto para la direccin de su vida como tambin para la provisin de todo lo que le hace falta.

La humildad sabe unir mas que separar. La Humildad no es ser menos es ser mas con otros y por medio de otros.

La humildad sabe orar ms que reclamar.

Cual es el Estndar de Dios para el nivel de humildad?


Dios ha demostrado que en l se origina la grandeza de la humildad. Jess es el estndar de la humildad que debemos seguir, el nos dio el ejemplo: Con su pobreza nos enriqueci Con su vida tan desprovista, nos hizo provisin Con su dolor, nos san Con su tristeza, nos consuela. Con su amor, nos protege.

Filipenses 2:5-11 Haya pues en vosotros el mismo sentir que hubo tambin en Cristo Jess, el cual siendo en forma de Dios no estim el ser igual a Dios como cosa a qu aferrarse, sino que se despoj as mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres, y estando en la condicin de hombre, se humill as mismo, hacindose obediente hasta la muerte y muerte de cruz, por lo cual Dios tambin lo exalt hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el Nombre de Jess se doble toda rodilla, de los que estn en los cielos y en la tierra y toda lengua confiese que Jesucristo es el Seor, para Gloria de Dios Padre.

El nico remedio al pecado del orgullo y a cualquier otra trasgresin, es Jesucristo. l llena de amor el corazn dolido, lo sana, quita la amargura, el odio y la venganza. Jesucristo hace nuevas todas las cosas, crea nuevos sentimientos, deposita humildad y perdn.

Con El amamos en lugar de odiar, edificamos en lugar de destruir, sanamos en lugar de herir, consolamos en lugar de afligir. Sus divinos preceptos ensean osteis que fue dicho: amars a tu prjimo, y aborrecers a tu enemigo, pero yo os digo: amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen, para que seis hijos de vuestro padre que est en los cielos, que hace salir el sol sobre malos y buenos. Que hace llover sobre justos e injustos, porque si amis a los que os aman que recompensa tendris, y si saludis a vuestros hermanos solamente qu hacis de mas? La Verdadera humildad es una cualidad de la nueva naturaleza que reemplaza el orgullo en el corazn, y acepta el derecho que tiene Dios de gobernar la vida. La humildad coloca a Dios en el lugar que le corresponde, Dios es el nmero uno, el prjimo le sigue y en el ltimo lugar se encuentra el Yo.

Que es la falsa humildad?


Las "falsas" humildades absorben a la persona consigo mismo: "No me aman; no me valoran; no me tratan bien; no me dan mi lugar". Alguien dice, "No puedo hacer nada bien", significando que no se acepta a s mismo con las capacidades y limitaciones que tiene. Dice, "Soy un fracaso" significando que Dios no sabe lo que hace en estas circunstancias, no me hizo sabiamente o no puede usar mis fracasos para mi bien y el bien de otros.

La falsa de humildad es justificarse a s mismo para que no sienta culpa por un error. Es convencerse, y, a veces aclarar para otros que cualquier problema es la responsabilidad de otros. Cuando uno reconoce en su corazn que tiene culpa, el orgullo no permite que uno lo admita delante de otros.

Cuando otros posiblemente no han reconocido lo especial que somos o de lo que sabemos o de lo que hemos hecho, es ayudarles a saberlo.

Es pensar que uno merece cierto trato o privilegio o que no merece el trato o prueba que est sufriendo. De hecho, la humildad es no atraer la atencin hacia nosotros en ninguno de sus extremos, sino atraer la atencin solo a Dios.

La falsa humildad es saber criticarse a s mismo y hablar de los errores y fracasos hasta que alguien nos contradiga y nos halague y as alimente el orgullo que habita en los rincones del corazn.

La humildad no es el silencio que pretende comunicar que lo que pensamos no tiene valor. A veces el silencio es una manera de escondernos y mantenernos lejos de los dems. A veces el silencio

cubre el orgullo que desde lejos critica a otros, los menosprecia y no se digna a entrar en comunicacin con ellos como iguales. La falsa de humildad es no sentir necesidad de consejo. Es no ser enseable, especialmente si el que podra ensearnos por sus palabras o su ejemplo es una persona menos preparada o menos exitosa. Es no sentir que tenemos necesidad de otros, as negando el valor del cuerpo de Cristo y la variedad y diversidad de los dones espirituales. Es no querer trabajar en equipo porque pensamos que nuestras ideas son las mejores o porque tendramos que reconocer que algunas ideas de otros son mejores. La falsa de humildad es un sentir de superioridad y autoridad personal por estar en cierta posicin. Es sentir resentimientos y enojo cuando otros no muestran el respeto que se cree que se merece.

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