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Sbado 8. La Natividad de la Santsima Virgen Mara. FIESTA: Color blanco, Misa y lecturas de la fiesta (leccionario V). Gloria, Prefacio I de Santa Mara Virgen en la Natividad. Plegaria Eucarstica III. La gracia y la paz de Jesucristo, el Seor, el Hijo de Dios y de Santa Mara, siempre Virgen, estn con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Celebramos hoy la fiesta del nacimiento de la Virgen Mara, hija del pueblo judo: hija de David e hija de Abrahn; de la cual naci el sol de justicia, Cristo, nuestro Dios. Ella es el ltimo peldao que nos conduce hacia la vida nueva que Dios quiere darnos. Esta fiesta de Mara es la propia de muchas advocaciones y santuarios que la piedad y la devocin del pueblo cristiano ha ido dedicando a travs de los siglos a la Madre de Jess, que tambin es Madre y protectora nuestra. Pongmonos, pues, en presencia de Dios al comenzar la Eucarista. l nos ha reunido aqu como hijos suyos y nos dar, una vez ms, la Palabra de vida y el Pan de Salvacin. Reconozcamos ante l que somos culpables y, por la intercesin de Santa Mara, la Virgen, refugio de pecadores, pidmosle perdn por nuestras faltas y que nos llene del don de su Espritu Santo, el mismo Espritu que fecund las entraas virginales de Santa Mara. Yo confieso.... Gloria. Colecta: Concede, Seor, a tus hijos el don de tu gracia, para que, cuantos hemos recibido las primicias de la salvacin por la maternidad de la Virgen Mara, consigamos aumento de paz en la fiesta de su nacimiento. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Al celebrar, hermanos, el nacimiento de aquella de la cual naci Cristo, el Sol de justicia, presentamos nuestras oraciones al Dios y Padre de nuestro Seor Jesucristo. Para que la Iglesia entera sea, como Mara, madre cercana y acogedora para todo el mundo. Roguemos al Seor. Para que el Espritu Santo ilumine a todos los que siente la voz de Dios que los llama a seguirlo, les d valenta y entusiasmo y, como Mara, se fen de su planes. Roguemos al Seor. Para que los gobernantes de todos los pueblos de la tierra trabajen incansablemente por la paz y la justicia, y por el crecimiento del espritu generoso y solidario. Roguemos al Seor. Para que el Padre del cielo, que supuso que el nacimiento de Mara anunciase la alegra al mundo entero, se compadezca de los que lloran y ven este mundo como un valle de lgrimas. Roguemos al Seor. Para que todos nosotros, ayudados por la intercesin poderosa de Mara, Virgen fiel, perseveremos en el bien hasta la muerte. Roguemos al Seor. Escucha, Dios de bondad, las oraciones de tu pueblo y accede a nuestras peticiones, ya que las ponemos bajo la proteccin de la Madre de tu Hijo, Jesucristo el Seor, que vive y reina por los siglos de los siglos.

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Poscomunin: Que se alegre tu Iglesia, Seor, fortalecida con estos sacramentos, y se goce en el Nacimiento de la Virgen Mara, que fue para el mundo esperanza y aurora de salvacin. Por Jesucristo nuestro Seor. Oracin sobre el pueblo: Vuelve, Seor, hacia ti el corazn de tu pueblo; y t que le concedes tan gran intercesora en la Virgen Mara, no dejes de orientarle con tu continua proteccin. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Domingo 9: DOMINGO XXIII DEL TIEMPO ORDINARIO Color verde, Misa y lecturas propias del domingo. Gloria. Credo, Plegaria Eucarstica V/c. Que Jesucristo, Hijo nico de Dios y Seor nuestro, est con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Como cada domingo, nos hemos reunido para escuchar la palabra de Jess resucitado y aprender a seguirle, y para unirnos a l por el alimento de su Cuerpo y de su Sangre y, como cada domingo, recordamos lo que Dios nuestro Padre realiza por medio de su Hijo amado y del Espritu Santo. Pero nosotros, muchas veces, ponemos obstculos a la accin salvadora de Dios. Por eso, ahora, antes de celebrar el memorial del Seor muerto y resucitado, y de recordar sus gestos, pongmonos en su presencia, y pidmosle perdn por nuestros pecados. T que has venido a abrir los ojos de los ciegos T que has venido para que los sordos oigan y los mudos hablen T que has venido para anunciar la salvacin a los pobres Gloria Colecta: Seor, T que te has dignado redimirnos y has querido hacernos hijos tuyos, mranos siempre con amor de padre y has que cuantos creemos en Cristo, tu Hijo, alcancemos la libertad verdadera y la herencia eterna. Por nuestro Seor Jesucristo. Credo: Confesemos ahora nuestra fe, recordando las intervenciones maravillosas de Dios en la historia de la salvacin, como son la creacin, la Pascua, la venida del Espritu Santo sobre y la Iglesia y la promesa de la vida eterna. Oracin de los fieles: Oremos ahora confiadamente a Dios nuestro Padre, que no hace acepcin de personas, y que siempre nos escucha con afecto y ternura cuando lo invocamos. Para que la Iglesia, abierta al dilogo con el mundo de hoy, pueda llevar a los odos de todos la Buena Noticia de la salvacin. Roguemos al Seor. Para que nunca falten en nuestra dicesis sacerdotes que sepan ser hospitalarios, comprensivos y sensibles con todos. Roguemos al Seor. Para que los que tienen en sus manos las decisiones polticas, econmicas y sociales, obren con justicia y rectitud, pensando sobre todo en los ms desfavorecidos. Roguemos al Seor. Para que los enfermos, especialmente los que no tienen fe, sepan descubrir en el sufrimiento un motivo para acercarse a Dios, y no para rebelarse contra l. Roguemos al Seor. Para que todos nosotros escuchemos con gusto e inters la palabra de Dios, meditndola en nuestro corazn. Roguemos al Seor. T, Seor, que has elegido a los pobres del mundo para hacerlos ricos en la fe y herederos de tu reino, escucha nuestras oraciones y aydanos a proclamar con valenta tu Evangelio, para que los odos de los sordos se abran, los cobardes de corazn salten de gozo y las lenguas de los mudos canten como nosotros la salvacin. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Con tu palabra, Seor, y con tu Pan del cielo, alimentas y vivificas a tus fieles; concdenos que estos dones de tu Hijo nos aprovechen de tal modo que merezcamos participar siempre de su vida divina. Por Jesucristo, nuestro Seor.

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Bendicin solemne: El Dios todopoderoso os bendiga con su misericordia y os llene de la sabidura eterna. l aumente en vosotros la fe y os d la perseverancia en el bien obrar. Atraiga hacia s vuestros pasos y os muestre el camino del amor y de la paz. Y la bendicin de Dios todopoderoso..

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Lunes 10. Misa de feria: Color verde, Misa de la semana XXXIV. Lecturas de feria. , Prefacio comn VII. Plegaria Eucarstica II. Monicin de entrada y acto penitencial: De nuevo nos reunimos para celebrar la Eucarista, para celebrar que Dios es Amor, un amor que se hace realidad, que se hace historia y entrega en Jess, sin reservas de ningn tipo, hasta dar la vida. Una Vida que ni siquiera la muerte puede arrebatar. Pidamos, pues, al comenzar la Eucarista a Dios nuestro Seor que nos llene de su gracia renovadora y perdone nuestros pecados. T que amas a los sencillos. SEOR, TEN PIEDAD. T que conoces al Padre y nos lo revelas. CRISTO, TEN PIEDAD. T que alivias a los cansados y agobiados. SEOR, TEN PIEDAD. Colecta: Mueve, Seor, los corazones de tus hijos, para que, correspondiendo generosamente a tu gracia, reciban con mayor abundancia la ayuda de tu bondad. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Elevemos nuestras oraciones confiadas al Seor que quiere salvar a su pueblo y renovar nuestros corazones.

Por la Iglesia; para que con constancia y valenta anuncie el Reino de Dios y aguarde con paciencia los frutos que el Seor, a su tiempo y a su modo quiere darle. Roguemos al Seor. Por las familias y grupos cristianos; para que en las exigencias de su vida de fe sientan el desafo de Jess a seguirlo ms de cerca y para que los jvenes comprendan que la firmeza en la causa del Evangelio es un camino de felicidad. Roguemos al Seor. Por los responsables de las naciones, los empresarios, los que estn al frente de las fuerzas armadas y por los que tienen responsabilidades de gobierno en el mundo; para que renuncien a cualquier inters egosta y trabajen por la justicia y la paz. Roguemos al Seor. Por los que sufren la guerra, el exilio, la divisin de sus familias o cualquier sufrimiento fsico o moral; para que se sientan confortados por Cristo que intercede por ellos ante el Padre. Roguemos al Seor. Por los que celebramos la Eucarista; para que la semilla del Evangelio d frutos de santidad en nuestras vidas y seamos capaces de construir una nueva sociedad. Roguemos al Seor. Dios todopoderoso y eternamente fiel, escucha nuestras plegarias, bendice nuestras vidas y proyectos y haz que, contemplando tu Palabra cada da, crezcamos en el conocimiento y amor de tu Nombre. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Dios todopoderoso, ya que nos has alegrado con la participacin en tu sacramento, no permitas que nos separemos de Ti. Por Jesucristo, nuestro Seor.

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Martes 10 de septiembre:MISA POR LA FAMILIA Color verde. Misas por diversas necesidades 43 . Lecturas de feria. Plegaria Eucarstica V/b Monicin de entrada y acto penitencial: Hoy vamos a pedir en la celebracin de la Eucarista, con verdadero inters, por la familia; pues a travs de ella, el hombre es introducido en la sociedad civil y en el pueblo de Dios, y en ella hemos aprendido la inmensa mayora de personas el respeto, el amor, y la convivencia. As pues, en silencio, comencemos la celebracin pidiendo perdn a Dios por nuestros pecados. T que viviste con Mara y Jos en el seno de una familia. T que nos mandas honrar a nuestros familiares. T que haces de la familia una Iglesia domstica. Colecta: Seor, Dios nuestro, en cuyos mandatos encuentra la familia su autntico y seguro fundamento, atiende nuestras splicas y concdenos que, siguiendo los ejemplos de la Sagrada Familia, practicando las virtudes domsticas, y manteniendo vivo el amor, lleguemos a gozar de los premios de tu reino. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: heredar su Reino. Acudamos ahora confiadamente a Dios Padre, que nos llama a ser sus discpulos y nos invita a vivir su misma vida y a

Por la Iglesia, extendida por todo el mundo; para que a pesar de las dificultades manifieste con espritu positivo y cercano la presencia de Dios en medio de su pueblo. Roguemos al Seor. Por las familias; para que eduquen a sus hijos en los valores del Evangelio y para que de ellas surjan nuevas vocaciones al sacerdocio y a la vida consagrada. Roguemos al Seor. Por los que gobiernan las naciones de todo el mundo; para que dejen de lado cualquier inters egosta y se empeen en la bsqueda del bien comn no ahorrando esfuerzos para garantizar la paz y la justicia. Roguemos al Seor. Por las familias destruidas, por los jvenes atrapados por la droga, por los que viven esclavos del vicio y del pecado; para que descubran el amor de Dios que en Jess los salv y les ofrece un nuevo estilo de vida. Roguemos al Seor. Por los que estamos celebrando nuestra fe; para que, alimentados del Cuerpo y Sangre de Cristo, estemos preparados cuando venga a buscarnos. Roguemos al Seor. Seor y Dios nuestro, derrama la gracia de tu Espritu en nuestros corazones para que podamos seguirte con generosidad, buscarte sin descanso y anunciar tus maravillas a todos los que te buscan con sincero corazn. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin:Padre nuestro, que nos amas y nos perdonas, concede a cuantos has renovado con estos divinos sacramentos imitar fielmente los ejemplos de la Sagrada familia de tu Hijo, para que, despus de las pruebas de esta vida, podamos gozar en el cielo de su eterna compaa. Por Jesucristo nuestro Seor.

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12.: Misa votiva del Dulce nombre de la Virgen Mara: Color verde, Misas de la Virgen Mara n 21. Lecturas de feria, Prefacio propio. Plegaria Eucarstica II. La gracia y la paz de Jesucristo el Seor, el Hijo de Dios y de la Santsima Virgen Mara, estn con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Honramos hoy el Santo nombre de la Virgen Mara, Madre del Seor; a quien Dios ha bendecido, Virgen Mara, ms que a todas las mujeres de la tierra; y ha glorificado su nombre de tal modo, que su alabanza est siempre en la boca de todos; y nos ponemos en presencia de Dios al comenzar la Eucarista. l nos ha reunido aqu como hijos suyos y nos dar, una vez ms, la Palabra de vida y el Pan de Salvacin. Reconozcamos ante l que somos culpables y, por la intercesin de Santa Mara, la Virgen, refugio de pecadores, pidmosle perdn por nuestras faltas y que nos llene del don de su Espritu Santo, el mismo Espritu que fecund las entraas virginales de Santa Mara. Yo confieso... Colecta: Oh Dios, cuyo Hijo, al expirar en la cruz, quiso que la Virgen Mara, elegida por l como Madre suya, fuese en adelante nuestra Madre, concdenos a quienes recurrimos a su proteccin ser confortados por la invocacin de su santo nombre. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: la verdadera felicidad. Puestos en oracin como familia de Dios, imploremos su clemencia y auxilio para cada hombre que peregrina buscando

Por la Iglesia; para que el Seor le conceda anunciar desde la vida sencilla, abierta y fraternal lo que Dios tiene preparado para sus hijos. Roguemos al Seor. Por las vocaciones sacerdotales; para que Jess, que llam a los que quiso, haga resonar su invitacin en el corazn de los jvenes y stos le sigan con generosidad y sin condiciones. Roguemos al Seor. Por nuestros gobernantes; para que el Seor infunda en ellos sentimientos de honestidad, anhelos de paz y voluntad para promover la justicia. Roguemos al Seor. Por los que sufren la marginacin, la enfermedad, el hambre, la guerra, el atropello a su dignidad; para que sean protegidos por leyes justas y acogidos con respeto por todos. Roguemos al Seor. Por los que hemos recibido el don de la fe y celebramos a Jesucristo, luz de nuestras vidas; para que con su claridad penetremos en el conocimiento y amor de Dios y lo transmitamos a nuestros hermanos. Roguemos al Seor. Oh Dios, que nos llamas a vivir tu vida bienaventurada y no dejas de atraernos a Ti; escucha bondadoso las plegarias que te hemos dirigido y concdenos tener hambre y sed de Ti. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Concede, Seor, a los que has alimentado en la mesa de la palabra y de la Eucarista, rechazar lo que no es digno del nombre cristiano y cumplir cuanto en l se significa, bajo la gua y proteccin de la Virgen. Por Jesucristo, nuestro Seor.

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Jueves 13: San Juan Crisstomo, obispo y doctor de la Iglesia. MEMORIA OBLIGATORIA: Color blanco, Misa propia. Lecturas de feria. Prefacio de los santos pastores. Plegaria Eucarstica II. La gracia de nuestro Seor Jesucristo, el amor del Padre y la comunin del Espritu Santo, estn con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Celebramos hoy la memoria de san Juan Crisstomo, natural de Antioquia, donde a finales del siglo cuarto recibi una excelente formacin helenista y quien, a los veinte aos, se bautiz en la fe cristiana. A los treinta aos fue ordenado sacerdote y desde entonces se dedic a la predicacin, con unas cualidades magnficas de oratoria que le merecieron el sobrenombre de Crisstomo, que significa boca de oro. Las catequesis, las plegarias litrgicas, en uso hoy da en las Iglesias orientales, su tratado sobre el sacerdocio y sus homilas le han merecido el ttulo de doctor de la Iglesia. Pero ante todo, fue un pastor que, desde su ciudad natal primero y desde la sede de Constantinopla despus, invit al seguimiento de Cristo por medio de la santidad de su vida y la fogosidad de su palabra. Su valenta y entereza en predicar la moral del evangelio, en defensa de los pobres y contra la insolencia y la injusticia de los ricos, le valieron la enemistad de muchos, especialmente de la emperatriz Eudoxia, que le hizo desterrase a la regin del Cucaso, donde muri el ao cuatrocientos cuatro, siendo sus ltimas palabras: Gloria a Dios por todo. Nosotros tambin estamos llamados, como san Juan Crisstomo, a la santidad de vida; sin embargo, fallamos a menudo en nuestro camino hacia ella. Por eso, iniciamos la celebracin de los sagrados misterios de la Eucarista pidiendo perdn a Dios por nuestros pecados. Yo confieso... Colecta: Oh Dios, fortaleza de los que esperan en ti, que has hecho brillar en la Iglesia a san Juan Crisstomo por su admirable elocuencia y su capacidad de sacrificio, te pedimos que, instruidos por sus enseanzas, nos llene de fuerza el ejemplo de su valerosa paciencia. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles:Con filial confianza, dejemos que el Espritu ore en nuestros corazones. Para que la Iglesia y los cristianos, fijos los ojos en Jess, anunciemos sin miedo su mensaje salvador y las exigencias de caridad a las que l nos compromete. Roguemos al Seor. Para que Cristo, el Ungido del Padre, configure con l a todos los consagrados y d generosidad a cuantos llama a su seguimiento. Roguemos al Seor. Para que los que dirigen el mundo del trabajo, de la poltica y de la economa no se cansen de promover la justicia y defender la dignidad de todo ser humano. Roguemos al Seor. Para que todos los hombres, mujeres y nios que padecen la guerra, el hambre, la falta de libertad, el destierro o la opresin, y los que viven en pecado, acojan en sus vidas la luz del Evangelio y descubran en ella la esperanza de una vida nueva. Roguemos al Seor. Para que todos nosotros, reunidos en el nombre del Seor Jess testimoniemos las obras de Dios y vivamos con conviccin nuestra fe. Roguemos al Seor. Dios todomisericordioso y paciente, fortaleza de los que en Ti esperan y perdn de los que te ofenden; humildemente te suplicamos por el pueblo que escogiste por heredad, para que viviendo la experiencia de tu amor incondicional se entregue sin reservas a la causa de tu Reino. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Poscomunin: Concdenos, Seor misericordioso, que los sacramentos recibidos en la fiesta de san Juan Crisstomo nos confirmen en tu amor y nos conviertan en fieles testigos de tu verdad. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Viernes 14: La exaltacin de la Santa Cruz. FIESTA Color rojo, Misa y lecturas de la fiesta (leccionario V). Gloria. Prefacio propio. Plegaria Eucarstica III. La gracia y la paz de Jess, nuestro Seor crucificado, estn con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: La celebracin de la fiesta de hoy tiene un motivo especial, pues la dedicamos a contemplar la Cruz de Jesucristo. Nosotros hemos de gloriarnos en la Cruz de nuestro Seor Jesucristo; pues en l est nuestra salvacin, vida y resurreccin; l nos ha salvado y libertado. Por eso, hoy damos gracias a Cristo de un modo especial por su entrega y, confiados en la salvacin que brota de su Cruz Santa, nos reconocemos pecadores y pedimos humildemente perdn a Dios por nuestros pecados. T que no has sido enviado a condenar al mundo, sino a salvarlo. T que no quieres que nadie perezca, sino que todos se conviertan. T que te sometiste por nosotros hasta la muerte de cruz. Gloria. Colecta: Seor, Dios nuestro, que has querido realizar la salvacin de todos los hombres por medio de tu Hijo, muerto en la cruz, concdenos, te rogamos, a quienes hemos conocido en la tierra este misterio alcanzar en el cielo los premios de la redencin. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Fijos nuestros ojos en el Crucificado, que ha sido levantado para darnos vida, y sabiendo que l vive para interceder por nosotros, oremos a Dios nuestro Padre. Por la Iglesia; para que no se escandalice de la cruz de Cristo y la presenta al mundo como signo de la redencin obrada por el Maestro. Roguemos al Seor. Por las vocaciones al ministerio sacerdotal; para que nunca falten quienes estn dispuestos a seguir en su vida el ejemplo de Cristo crucificado, entregndola al servicio de los dems. Roguemos al Seor. Por nuestros gobernantes; parra que no impongan cargas pesadas a nadie y menos a los ms pobres, dbiles o marginados, antes bien promuevan el bien y la paz. Roguemos al Seor. Por todos los difuntos, especialmente por aquellos que nadie pide y cuya fe slo Dios conoci; para que gocen de la gloria de Cristo, nuestro Salvador y con l tengan vida eterna. Roguemos al Seor. Por todos nosotros; para que Cristo, que para salvar a su pueblo quiso ser elevado en la cruz, como la serpiente en el desierto, nos salve y nos eleve a las alegras eternas. Roguemos al Seor. Oh Dios, que en el madero de la cruz obraste la salvacin de todo el gnero humano; mira nuestras oraciones y aydanos a permanecer unidos a tu Hijo y a cooperar con nuestra entrega a la extensin de tu Reino. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Fortalecidos con esta Eucarista, te pedimos, Seor Jesucristo, que lleves a la gloria de la resurreccin a los que has redimido en el madero salvador de la cruz. T que vives y reinas por los siglos de los siglos.

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Bendicin: El Dios, Padre de misericordia, que en su Hijo Jesucristo, muerto en la cruz, os ha dado ejemplo de amor, os conceda, por vuestra entrega a Dios y a los hombres, la mejor de sus bendiciones. Y que gracias a la muerte temporal de Cristo, que os redimi y os salv, obtengis el don de una vida sin fin. Y as, imitando su ejemplo de humildad, participis un da en su resurreccin gloriosa. Amn. Y la bendicin de Dios todopoderoso...

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Sbado 15: Nuestra Seora, la Virgen de los Dolores. MEMORIA OBLIGATORIA: Color blanco, Misa propia. Lecturas de feria. Prefacio III de Santa Mara Virgen. Plegaria Eucarstica II. La gracia y la paz de Nuestro Seor Jesucristo, que desde la cruz nos ha dado como Madre a la Virgen Mara, est con todos vosotros Monicin de entrada y acto penitencial: Despus de haber celebrado ayer la fiesta de la exaltacin de la Santa Cruz, hoy nuestra mirada se dirige hacia la Santsima Virgen Mara, la Virgen de los Dolores, a la que contemplamos a los pies de la cruz de su Hijo. La contemplamos en su dolor, pero al mismo tiempo, la contemplamos en su fe; porque Ella cree que aquella muerte de su Hijo ser fuente de vida, y Ella nos anima a ver tambin que la muerte es camino de vida. Mara, que durante toda su vida cumpli su misin con fidelidad, a pesar de las dificultades y las experiencias de dolor, nos da a todos, al pie de la cruz, un ejemplo de entrega ante el sufrimiento, y nos anima a vivir la vida cristiana con igual fortaleza de nimo. Confiando por tanto en la salvacin que brota de la Cruz de Jesucristo, reconozcamos nuestros fallos y errores y pidamos perdn a Dios por nuestros pecados. T que clavado en la cruz eres signo de fe y esperanza. T que clavado en la cruz nos mostraste un amor infinito T que clavado en la cruz nos llenas de vida para siempre Colecta: Seor, T que has querido que la Madre compartiera los dolores de tu Hijo al pie de la cruz; has que la Iglesia, asocindose con Mara a la pasin de Cristo, merezca participar de su resurreccin. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Oremos, hermanos, a Dios nuestro Padre, que quiso que la Madre compartiera junto a la cruz los dolores de la pasin de su Hijo, y supliqumosle por todos los hombres, nuestros hermanos. Por la Iglesia; para que el Seor le conceda anunciar desde la vida sencilla, abierta y fraternal lo que Dios tiene preparado para sus hijos. Roguemos al Seor. Por las vocaciones sacerdotales; para que Jess, que llam a los que quiso, haga resonar su invitacin en el corazn de los jvenes y stos le sigan con generosidad y sin condiciones. Roguemos al Seor. Por nuestros gobernantes; para que el Seor infunda en ellos sentimientos de honestidad, anhelos de paz y voluntad para promover la justicia. Roguemos al Seor. Por los que sufren; para que Mara, que permaneci firme en la hora de la prueba de su Hijo amado, haga sentir su presencia maternal a los que sufren la cruz de la enfermedad, la incomprensin, la guerra, la miseria, el desamor. Roguemos al Seor. Por los que hemos recibido el don de la fe y celebramos a Jesucristo, luz de nuestras vidas; para que con su claridad penetremos en el conocimiento y amor de Dios y lo transmitamos a nuestros hermanos. Roguemos al Seor. Seor Dios nuestro, que quisiste que la Madre de tu Hijo cooperara generosamente en la obra de la redencin humana, escucha las oraciones de tu pueblo y haz que los frutos de la redencin alcancen abundantemente a todos los hombres. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Despus de recibir el sacramento de la eterna redencin, te pedimos, Seor, que, al recordar los dolores de la Virgen mara, completemos en nosotros, en favor de la Iglesia, lo que falta a la pasin de Jesucristo. l, que vive y reina por los siglos de los siglos.

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Domingo 16: DOMINGO XXIV DEL TIEMPO ORDINARIO Color verde, Misa y lecturas propias del domingo. Gloria. Credo. Prefacio dominical VII. Plegaria Eucarstica III. El Seor Jess, que padeci por nosotros su pasin y su muerte, est con todos vosotros. Monicin de entrada: Como cada domingo nos hemos reunido en asamblea de bautizados para escuchar la Palabra de Dios y participar de la mesa de la Eucarista. El Seor resucitado nos convoca y nos preside para alimentarnos con la palabra que sale de su boca y con el Pan de su vida, su Cuerpo y su Sangre entregados para la vida de la humanidad. Bienvenidos todos, pues, a esta celebracin de la fe. Pero como nos dir el apstol en la segunda lectura, la fe sin obras, es una fe muerta. Y a menudo, en nuestras vida, no damos ejemplo de ser cristianos. Por eso, al comenzar la celebracin, repasamos nuestra vida, y pedimos el perdn de Dios, que es compasivo y misericordioso. T que no has rechazado sufrir como nosotros T que eres el Mesas T que nos salvas con tu muerte y tu resurreccin Gloria Colecta: Oh Dios, creador y dueo de todas las cosas, mranos y, para que sintamos el efecto de tu amor, concdenos servirte de todo corazn. Por nuestro Seor Jesucristo. Credo: Confesemos ahora todos juntos nuestra fe en Dios Padre, Hijo y Espritu Santo, en la unidad de la Iglesia.

Oracin de los fieles: Dirijamos ahora nuestras splicas confiadas a Dios nuestro Padre, que nos ha dado a Cristo su Hijo como Redentor, y que siempre inclina su odo hacia nosotros. Por el Papa; para que en comunin con los obispos, acompae al Pueblo de Dios con solicitud pastoral. Roguemos al Seor. Por nuestro seminario diocesano; para que nunca le falten vocaciones que el da de maana anuncien en nuestra dicesis la palabra de Dios. Roguemos al Seor. Por los que tienen poder para promover la paz; para que dejen de lado los intereses de las minoras privilegiadas y promuevan la justicia y el bien comn. Roguemos al Seor. Por los que sufren soledad, enfermedad o falta de amor; para que sean consolados y encuentren ayuda en su prjimo. Roguemos al Seor. Por todos nosotros, aqu reunidos; para que la fe sea el fundamento real de nuestro ser, y manifestemos en nuestra vida lo que celebramos en la iglesia. Roguemos al Seor. Dios nuestro, fortaleza de los pobres y auxilio de los que sufren, escucha las oraciones de tu Iglesia y danos el Espritu Santo, para que, iluminados con su luz, creamos con el corazn y confesemos con las obras que Jess es el Mesas y vivamos convencidos de que salvaremos nuestra vida, si tenemos el valor de perderla para anunciar el Evangelio. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Poscomunin: La accin de este sacramento, Seor, penetre en nuestro cuerpo y nuestro espritu, para que sea su fuerza, no nuestro sentimiento, quien mueva nuestra vida. Por Jesucristo, nuestro Seor. Bendicin solemne: El Dios de todo consuelo disponga vuestros das en su paz y os otorgue el don de su bendicin. Que l os libre de toda perturbacin y afiance vuestros corazones en su amor. Para que, enriquecidos por los dones de la fe, la esperanza y la caridad, abundis en esta vida en buenas obras y alcancis sus frutos en la eterna. Y la bendicin de Dios todopoderoso... Lu 17: Misa de difuntos: Color morado, Misas de difuntos III-B/A. Lecturas de feria. Prefacio IV de difuntos. Plegaria Eucarstica II. Monicin de entrada y acto penitencial: Siguiendo la piadosa y venerable costumbre de la Iglesia, de dedicar los lunes a orar por las almas de aquellos que han dejado este mundo y se encuentran expiando sus faltas pasadas en el purgatoria, ofreceremos a Dios nuestro Seor el Sacrificio de la Eucarista por el eterno descanso de los fieles difuntos, para que gocen todos ellos de la luz y de la felicidad que no tienen fin. Y para celebrar dignamente estos sagrados misterios, pidamos perdn a Dios por nuestros pecados. T, el primero y el ltimo. T, que vives para siempre. T, que tienes las llaves de la vida y de la muerte. Colecta: Oh Dios, que resucitaste a tu Hijo para que, venciendo la muerte, entrara en tu reino, concede a tus hijos difuntos que, superada su condicin mortal, puedan contemplarte para siempre como su Creador y Salvador. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: El Seor nos llama a vivir en unidad y amor sincero. Por eso, antes de alimentarnos de su Cuerpo y de su Sangre, fuente de comunin verdadera, pidmosle por nuestro mundo, tan necesitado de su amor y del don de la fe. Para que la Iglesia y los cristianos, fijos los ojos en Jess, anunciemos sin miedo su mensaje salvador y las exigencias de caridad a las que l nos compromete. Roguemos al Seor. Para que Cristo, el Ungido del Padre, configure con l a todos los consagrados y d generosidad a cuantos llama a su seguimiento. Roguemos al Seor. Para que los que dirigen el mundo del trabajo, de la poltica y de la economa no se cansen de promover la justicia y defender la dignidad de todo ser humano. Roguemos al Seor. Para que todos los hombres, mujeres y nios que padecen la guerra, el hambre, la falta de libertad, el destierro o la opresin, y los que viven en pecado, acojan en sus vidas la luz del Evangelio y descubran en ella la esperanza de una vida nueva. Roguemos al Seor. Para que todos nosotros, reunidos en el nombre del Seor Jess testimoniemos las obras de Dios y vivamos con conviccin nuestra fe. Roguemos al Seor.

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Seor Jesucristo, que no te contentaste con salvarnos, sino que quisiste quedarte como alimento y como compaero de nuestro camino; atiende las oraciones de tu pueblo, aumenta nuestra fe y haz que nos convirtamos en sacramento de tu presencia salvadora en medio del mundo. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin:Por este sacrificio que hemos celebrado derrama, Seor, con largueza tu misericordia sobre nuestros hermanos difuntos; t que les concediste la gracia del Bautismo, concdeles tambin la plenitud de los gozos eternos. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Martes 18: Misa por la paz y la justicia: Color verde, Misas por diversas necesidades n 22. Lecturas de feria. Plegaria Eucarstica II sobre la reconciliacin. El Dios de la paz est siempre con vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Hoy vamos a pedir de un modo especial en la celebracin de la Eucarista por la paz y la justicia, una realidad nunca del todo hecha y siempre por hacer. De este quehacer, los cristianos no podemos desentendernos, sino que debemos aportar a l nuestro esfuerzo constante y nuestra oracin perseverante al prncipe de la paz. Ahora, al comenzar esta celebracin eucarstica, pidamos a Dios que nos conceda la conversin de nuestros corazones; as obtendremos la reconciliacin y se acrecentar nuestra comunin con Dios y con los hermanos. T que eres nuestra paz. T que eres la justicia. T que eres el gua del mundo. Colecta: Seor, t dijiste que cuantos trabajan por la paz seran llamados hijos de Dios; concdenos entregarnos sin descanso a instaurar en el mundo la nica justicia que puede garantizar a los hombres una paz firme y verdadera. T que vives y reinas con el Padre en la unidad del Espritu Santo y eres Dios por los siglos de los siglos. Oracin de los fieles: Como hermanos, y miembros de la Iglesia, Cuerpo de Cristo, elevemos nuestras splicas confiadas a Dios nuestro Padre.

Para que los pastores de la Iglesia, siendo celosos mensajeros del Evangelio, atraigan a la fe a todos, especialmente a los que se han apartado de ella y a los que nunca han odo hablar de Jesucristo. Roguemos al Seor. Para que Jess llame a muchos jvenes al ministerio sacerdotal, y stos no teman seguirlo con generosidad. Roguemos al Seor. Para que todos en nuestro pas, gobernantes y ciudadanos, nos comprometamos en la promocin del bien comn, la justicia, la honestidad y el respeto. Roguemos al Seor. Para que los que son perseguidos a causa de su fe; animados por el Espritu de Jesucristo, perseveren con valenta en la tribulacin y aguarden con paciencia la hora de la siega. Roguemos al Seor. Para que todos los que hemos sido convocados por el Espritu a esta Eucarista vivamos la fe en el Hijo de Dios que nos am y se entreg por nosotros. Roguemos al Seor. Oh Dios, tu misericordia es infinita e inagotable, y tu prontitud para acogernos y perdonarnos no tiene medida; sal al encuentro de tu Iglesia que te suplica y concdenos tu gracia para vivir en ella la vocacin a la santidad a la que nos llamas. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Concdenos, Seor, tu espritu de caridad para que, alimentados con el Cuerpo y Sangre de tu Hijo, trabajemos con eficacia por mantener entre los hombres la paz que l nos dej.

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Mircoles 19: Misa de feria. Color verde. Misa de la semana XXIX. Lecturas de feria. Prefacio comn V. Plegaria Eucarstica II. Monicin de entrada y acto penitencial: El Seor Jess, que nos invita a la mesa de la Palabra y de la Eucarista, nos llama ahora a la conversin. Reconozcamos, pues, que somos pecadores e invoquemos con esperanza la misericordia de Dios. T que eres la Palabra creadora del mundo T a quien el viento y las aguas obedecen T que por el bautismo nos hiciste nuevas criaturas Colecta: Jesucristo. Dios todopoderoso y eterno, te pedimos entregarnos a Ti con fidelidad y servirte con sincero corazn. Por nuestro Seor

Oracin de los fieles: Acudamos a Dios, fuente y origen del amor verdadero, y pidmosle para que lo que hoy proclamamos en la liturgia de la palabra sea una realidad en nuestro mundo. Por la Iglesia, nacida del amor del Padre y fundada por Jesucristo; para que por la accin del Espritu Santo conduzca con sabidura a todos los hombres a la gloria eterna. Roguemos al Seor. Por los jvenes que en seminarios, noviciados o centros de estudio se preparan para consagrarse al Seor; para que vivan con decisin su respuesta de amor al Seor, y nunca falten quienes elijan seguir este camino. Roguemos al Seor. Por los que tienen en sus manos el destino de los pueblos; para que promuevan una cultura ms humana y hagan respetar los derechos de todos los hombres. Roguemos al Seor. Por los que no tienen fe; para que, movidos por el testimonio de los cristianos, descubran a Dios como el nico Seor capaz de salvarlos. Roguemos al Seor. Por nosotros, convocados por Jesucristo para celebrar su banquete pascual; para que con fe lo acojamos y con alegra lo proclamemos como nuestro Dios y Seor. Roguemos al Seor. Escucha, Padre, nuestras splicas; cuida de tu pueblo con amor y haz que un da, en compaa de los santos, cantemos eternamente tus maravillas y vivamos el insondable misterio de tu comunin hecho abrazo infinito de misericordia y amor. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: La participacin frecuente en esta Eucarista nos sea provechosa, Seor, para que disfrutemos de tus beneficios en la tierra y crezca nuestro conocimiento de los bienes del cielo. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Jueves 20: Santos Andrs Kim, Pablo Chong y compaeros, mrtires. MEMORIA OBLIGATORIA.: Color rojo, Misa propia. Lecturas de feria. Prefacio de los santos mrtires. Plegaria Eucarstica II. La gracia de nuestro Seor Jesucristo, el amor del Padre y la comunin del Espritu Santo estn con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: A principios del siglo diecisiete, la fe cristiana penetr, por vez primera en Corea por medio de los laicos; un siglo despus, entraron los primeros misioneros clrigos. Aquellas primeras comunidades cristianas sufrieron diversas persecuciones a lo largo del siglo diecinueve, habiendo ciento tres santos mrtires, entre los cuales destacaron de un modo especial el primer sacerdote coreano, san Andrs Kim Taegon y el seglar Pablo Chong Hasang. En esta Eucarista recordamos a todos estos mrtires, los cuales, con sus sufrimientos, consagraron las primicias de la Iglesia coreana, regndola generosamente con su sangre. A nosotros, se nos pide que seamos tambin testigos de Cristo en nuestra vida por medio de la fe y de las buenas obras. Sin embargo, constantemente fallamos en este cometido. Por ello, al comenzar la celebracin de los sagrados misterios, reconozcamos nuestros pecados y pidamos humildemente perdn a Dios por ellos. Yo confieso... Colecta: Oh Dios, creador y salvador de todos los hombres, que en Corea, de modo admirable, llamaste a la fe catlica a un pueblo de adopcin y lo acrecentaste por la gloriosa profesin de fe de los santos mrtires Andrs, Pablo y sus compaeros, concdenos, por su ejemplo e intercesin, perseverar tambin nosotros hasta la muerte en el cumplimiento de tus mandatos. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: eterno plan redentor del Padre. Elevemos ahora nuestras splicas al Seor Jesucristo que dio su vida por nuestra salvacin y no ha frustrado el

Para que el Seor conceda al Papa N., a nuestro Obispo N., y a todos los sacerdotes y religiosos de nuestra dicesis corresponder con fidelidad, santidad de vida y gratitud al ministerio que l mismo les ha confiado. Roguemos al Seor. Para que los jvenes se abran al mensaje del Evangelio, descubran la inconfundible voz del Maestro que los llama a su seguimiento para extender el Reino de los cielos y lo sigan. Roguemos al Seor. Para que toda la humanidad goce de paz, justicia y amor, para que cesen los odios y rencores, las divisiones y sectarismos, y para que el Reino de Dios sea una realidad entre todos los hombres. Roguemos al Seor. Para que los que sufren la muerte o el alejamiento de sus seres queridos experimenten el consuelo del Seor, y para que l fortalezca a los que se ven tentados, d esperanza a los agonizantes y la vida eterna a todos los difuntos. Roguemos al Seor. Para que Jess nos conceda vivir en el amor y el servicio a los hermanos. Roguemos al Seor. Seor Jesucristo, que sales al encuentro de cada pecador que arrepentido se cobija en tu misericordia, y derrochas tu perdn en nuestros corazones; ten piedad de tu pueblo que te suplica y haz que adelantemos la llegada de tu Reino viviendo en el amor y predicando tu Evangelio. T que vives y reinas por los siglos de los siglos.

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Poscomunin: Alimentados con el pan de los fuertes, en la celebracin de los santos mrtires, te pedimos humildemente, Seor, que, unidos firmemente a Cristo, trabajemos en la Iglesia por la salvacin de todos. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Viernes 21: San Mateo, apstol y evangelista. FIESTA: Color rojo, Misa y lecturas propias de la fiesta (leccionario V). Gloria. Prefacio II apstoles. Canon romano.. El Seor Jess, que es el Camino, la Verdad y la Vida, est con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Celebramos hoy la fiesta de san Mateo, uno de los Doce apstoles, aquellos a los que el Seor Jess escogi para que estuvieran con l y para enviarlos a predicar la gran noticia del Evangelio. Recaudador de impuestos y explotador a sueldo de los romanos, fue sorprendentemente llamado por el Maestro, abandonando su trabajo y marchndose con l. De este modo pudo, despus de haber convivido con el Seor y ser testigo de su obra salvadora, de su muerte y resurreccin, anunciar por escrito a todo el mundo la Buena Noticia de Jess por medio de su evangelio, haciendo ver, sobre todo a los mismos Judos, cmo en Cristo Jess se cumplen todas las promesas del Antiguo Testamento. Con gozo, reafirmemos hoy nuestra fe en Jess, la fe que nos ha llegado por el testimonio de los apstoles, la fe que tambin nosotros estamos llamados a vivir y anunciar. Y para mejor hacerlo, comencemos la celebracin de la Eucarista reconociendo que nuestra fe y nuestras obras no siempre van unidas, que a menudo cometemos fallos en la vida y que nuestro apostolado cristiano deja mucho que desear. Por eso, con humildad y sencillez, pedimos perdn a Dios por nuestros pecados. Yo confieso Gloria Colecta: Oh Dios, que en tu infinita misericordia te dignaste elegir a san Mateo para convertirlo de publicano en apstol, concdenos que, fortalecidos con su ejemplo y su intercesin, podamos seguirte siempre y permanecer unidos a ti con fidelidad. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Unidos en la fe de los Apstoles, y fieles a la enseanza que de ellos hemos recibido, oremos a Dios nuestro Padre, que tiene poder para transformar la vida y el corazn de los hombres. Para que la Iglesia y el mundo entero acojan con docilidad la palabra de Jess, a quien san Mateo, en su Evangelio, nos presenta como nuevo Moiss y el nico Maestro. Roguemos al Seor. Para que haya jvenes capaces de or la invitacin del Seor a seguirlo ms de cerca e ir en pos de s. Roguemos al Seor. Para que el mensaje del Evangelio arraigue en el corazn de todos los gobernantes, y los transforme segn la medida del amor de Dios. Roguemos al Seor. Para que san Mateo interceda por los pecadores, por los que no tienen fe o viven como si no la tuvieran, por los que reciben el anuncio del Evangelio, por los que buscan la verdad. Roguemos al Seor. Para que todos nosotros nos veamos protegidos por la oracin de los Apstoles, e iluminados por sus enseanzas sepamos expresar nuestra fe con signos y palabras. Roguemos al Seor. Seor, Dios de nuestros padres, que has querido que el testimonio de los Apstoles fuera columna y fundamento del nuevo Israel, la Iglesia de tu Hijo, escucha nuestras oraciones y, por la intercesin del Apstol san Mateo, da cumplimiento a nuestros deseos. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Poscomunin: Hemos participado, Seor, de la alegra saludable que experiment tu apstol san Mateo al tener de invitado en su casa a mismo Salvador; concdenos seguir alimentndonos siempre con el Cuerpo y la Sangre de Cristo, que no ha venido a llamar a los justos, sino a los pecadores. Por Jesucristo nuestro Seor. Oracin sobre el pueblo: Seor, que se alegren tus fieles porque T glorificas a los miembros del Cuerpo de tu Hijo; y, pues devotamente celebran la memoria de los santos, concdeles gozar un da con ellos de tu gloria eterna. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Sbado 22: Misa de la Virgen Mara, imagen y Madre de la Iglesia (2): Color verde. Misas de la Virgen Mara n 26. Lecturas de feria. Prefacio propio. Plegaria Eucarstica II. Monicin de entrada y acto penitencial: Hacemos hoy memoria, como sbado que es, de la Virgen Mara, que es para todos nosotros un ejemplo de virtudes, en quien nos fijamos en nuestro camino hacia la santidad. Pongmonos, pues, en presencia de Dios al comenzar la Eucarista. l nos ha reunido aqu como hijos suyos y nos dar, una vez ms, la Palabra de vida y el Pan de Salvacin. Reconozcamos ante l que somos culpables y, por la intercesin de Santa Mara, la Virgen, refugio de pecadores, pidmosle perdn por nuestras faltas y que nos llene del don de su Espritu Santo, el mismo Espritu que fecund las entraas virginales de Santa Mara. Yo confieso... Colecta: Seor Dios, que nos has dado a la Virgen Mara como modelo de amor sublime y de gran humildad, concede a tu Iglesia que, siguiendo como ella el precepto del amor, se entregue plenamente a tu gloria y al servicio de los hombres, y se manifieste ante todos los pueblos como sacramento de tu amor. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Oremos ahora a Jesucristo, cabeza de la humanidad redimida, de quien recibimos toda gracia.

Por la Iglesia; para que firme en la verdad y el bien, muestre a los hombres el rostro compasivo y misericordiosos de Dios. Roguemos al Seor. Por las familias cristianas; para que los padres acojan con alegra y gratitud la llamada del Seor a sus hijos para consagrarse al Reino de Dios por el ministerio sacerdotal o la vida religiosa. Roguemos al Seor. Por los que rigen el destino de los pueblos; para que el Seor les ilumine con su luz a fin de que obren con justicia y a nadie falte nada para vivir con dignidad. Por los que son maltratados y oprimidos, por los que sufren en las crceles o en campos de concentracin; para que pongan su confianza en el Seor, que no defrauda a su pueblo. Roguemos al Seor. Por todos los que en cualquier lugar del mundo estamos participando de la Eucarista; para que guiados por el Espritu Santo esperemos los bienes eternos, nos convirtamos a Dios y no nos apeguemos a los bienes de este mundo. Roguemos al Seor. Seor Jesucristo, dueo de la vida y Seor de la historia, que con tu resurreccin nos diste nueva vida y nos hiciste renacer a una esperanza cierta; atiende nuestras oraciones y concdenos caminar en tu presencia guiados por tu mismo Espritu. T que vives y reinas por los siglos de los siglos. Poscomunin:Participando, Seor, de los santos misterios de tu mesa, hemos recibido con espritu de piedad el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo; concede, te rogamos, que tu Iglesia, contemplando a la Virgen Mara, se vea siempre llena del fervor de la fe, confirmada en el amor y robustecida por la esperanza de la gloria futura. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Ven, Seor, y protege con amor solcito al pueblo que has santificado en esta celebracin, para que conserve siempre los dones que ha recibido de tu misericordia. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Domingo 23: DOMINGO XXV DEL TIEMPO ORDINARIO: Color verde. Misa y lecturas propias del domingo. Gloria. Credo. Prefacio del Sagrado Corazn. Plegaria Eucarstica III. El Seor Jess, muerto por nosotros, y resucitado para darnos vida, est con vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Nuevamente nos hemos reunido convocados por Jess resucitado para celebrar la Eucarista, en la que l est entre nosotros, dispuesto a decirnos algo a travs de su palabra, dispuesto a orar con nosotros, y dispuesto a renovar su comunicacin de amor, hasta hacerse comida, alimento de vida eterna para todos. As pues, con el anhelo de abrirnos sinceramente a este encuentro con el Seor resucitado, comencemos la celebracin reconociendo en silencio nuestras infidelidades y pidiendo su perdn. T que te has entregado en manos de los hombres T que has vencido al pecado en tu propia carne T que has dado tu vida en rescate por todos Gloria. Colecta: Oh Dios, que has puesto la plenitud de la ley en el amor a Ti y al prjimo, concdenos cumplir tus mandamientos para llegar as a la vida eterna. Por nuestro Seor Jesucristo. Credo: Confesemos ahora la nica fe de la Iglesia de todos los tiempos, extendida por toda la tierra.

Oracin de los fieles: Invoquemos ahora con confianza filial a nuestro Padre del cielo y, sabiendo que l siempre nos escucha, presentmosle nuestras oraciones y splicas. Para que la Iglesia procure ser en medio de nuestro mundo signo de Cristo, que vino a servir y a dar la vida por todos. Roguemos al Seor. Para que nunca falten vocaciones sacerdotales a nuestra dicesis que hagan presente a Jess, buen Pastor entre nosotros. Roguemos al Seor. Para que los que ejercen poder y autoridad en el mundo no despojen de sus derechos a los ms dbiles de la sociedad. Roguemos al Seor. Para que los pueblos que sufren hambre, guerra o marginacin, experimenten la compasin de Dios en la solidaridad de toda la familia humana. Roguemos al Seor. Para que entre nosotros reine el amor y la fraternidad, y se destierren la rivalidad, envidias y toda clase de males. Roguemos al Seor. Dios nuestro, Padre de todos, que quieres que el ltimo sea el primero y propusiste a un nio como ejemplo para los discpulos. Danos la sabidura que viene de arriba, para que acojamos la palabra de tu Hijo y entendamos que, ante tus ojos, el primero ha de ser el servidor de todos. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Que tu auxilio, Seor, nos acompae siempre a los que alimentas con tus sacramentos, para que por ellos y en nuestra propia vida recibamos los frutos de la redencin. Por Jesucristo nuestro Seor. Bendicin solemne:

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El Dios todopoderoso aleje de vosotros toda adversidad y os conceda la abundancia de sus bendiciones. Que l os d un corazn tan dcil a su palabra, que encuentre su gozo en los dones eternos. As, siguiendo el camino del bien, avancis por la senda de los mandatos divinos y lleguis a ser coherederos del reino de los santos. Y la bendicin de Dios todopoderoso...

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Lunes 24: Misa de la Virgen Mara de la Merced Color blanco. Misas de Santa Mara n 43. Lecturas de feria. Prefacio propio. Plegaria Eucarstica II. Monicin de entrada y acto penitencial: Honramos hoy a la Virgen Mara, Madre del Seor, que ha visitado y redimido a su pueblo de las cadenas de la esclavitud y del pecado; y nos ponemos en presencia de Dios al comenzar la Eucarista. l nos ha reunido aqu como hijos suyos y nos dar, una vez ms, la Palabra de vida y el Pan de Salvacin. Reconozcamos ante l que somos culpables y, por la intercesin de Santa Mara, la Virgen, refugio de pecadores, pidmosle perdn por nuestras faltas y que nos llene del don de su Espritu Santo, el mismo Espritu que fecund las entraas virginales de Santa Mara. Yo confieso... Colecta: Padre misericordioso, que enviaste al mundo a tu Hijo Jesucristo, Redentor de los hombres, con la maternal cooperacin de la Virgen Mara, concede a cuantos la invocamos con el ttulo de la Merced mantenernos en la verdadera libertad de tus hijos que Cristo nos mereci con su sacrificio, y ofrecerla incansablemente a todos los hombres. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles:Con sencillez de corazn, pongamos ahora nuestras inquietudes y preocupaciones y las de todos los hombres en el altar del Seor, para que l nos bendiga y auxilie. Para que la gran familia de Dios que es su Iglesia engendre nuevos hijos que le den gloria y extiendan su Reino hasta el confn de la tierra. Roguemos al Seor. Para que Jess suscite entre los jvenes vocaciones sacerdotales y religiosas que con generosidad se entreguen al servicio de los hermanos. Roguemos al Seor. Para que nuestros gobernantes reconozcan que los bienes de la tierra son de todos los hombres y procuren una justa distribucin de los mismos para que a nadie falte lo necesario para vivir con dignidad. Roguemos al Seor. Para que en las familias cristianas se ore con confianza, se viva con austeridad, se ensee a compartir y se formen hombres y mujeres capaces de transformar el mundo haciendo el bien. Roguemos al Seor. Para que todos y cada uno de nosotros, nuestros familiares y amigos escuchemos la voz del Seor con humildad de corazn y vivamos en su presencia. Roguemos al Seor. Escucha, Seor, nuestras oraciones y haz que, iluminados con la claridad de Cristo, llevemos luz a nuestros hermanos, para que, conociendo la verdad, el camino y la vida, se adhieran a l sin reservas. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Recibido el sacramento de la redencin y de la vida, te pedimos, Seor, por intercesin de la Virgen Mara de la Merced, que nos concedas cooperar ms intensamente al misterio de la salvacin de los hombres y ser admitidos en la gloria de tu Reino. Por Jesucristo, nuestro Seor.

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Martes 25: Misa por los cautivos: Color verde, Misas por diversas necesidades n 30. Lecturas de feria. Plegaria Eucarstica V/d. Monicin de entrada y acto penitencial: Hoy vamos a celebrar la Misa por los cautivos, pidiendo en ella a Dios nuestro Padre por todos los que, de un modo u otros, justa o injustamente, no pueden disfrutar del don de la libertad por estar encarcelados, vigilados, controlados o limitados en su libertad de movimientos. Y para que la palabra de Dios y el Pan de la Eucarista puedan penetrar en nosotros, para que nuestra comunin con Dios y con los hermanos sea ms real y consistente, comencemos la celebracin pidiendo con sinceridad perdn a Dios por todo lo que de pecado hay en nosotros. T que eres compasivo y misericordioso T que has pasado por la vida haciendo el bien T que quieres la salvacin de todos Colecta: Oh Dios, tu Hijo tom la condicin de siervo para redimir al gnero humano de la esclavitud del pecado; concede a cuantos se hallan cautivos la libertad que otorgaste a todos los hombres por ser hijos tuyos. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Pongamos ahora nuestras vidas en manos de Dios y supliqumosle que atienda misericordiosamente nuestros anhelos y esperanzas, nuestros problemas y preocupaciones. Para que Jesucristo, sabidura del Padre, conceda al Papa y a los Obispos y pastores de la Iglesia, acierto en sus decisiones, firmeza en sus opciones y comprensin acogedora con los fieles. Roguemos al Seor. Para que en el s generoso de Mara, los jvenes encuentren el estmulo y la decisin que necesitan para no retrasar su respuesta a Dios. Roguemos al Seor. Para que los responsables de nuestros gobiernos promuevan el desarrollo y la paz y garanticen el respeto a todo hombre y mujer. Roguemos al Seor. Para que los que comparten la cruz de Cristo en el dolor, la incomprensin, la persecucin o el abandono, experimenten la ternura de Dios y no decaigan en la esperanza. Roguemos al Seor. Para que nosotros, que compartimos la mesa de Jesucristo, renovados por su Espritu, seamos transmisores de su amor hecho cercana, solidaridad y misericordia. Roguemos al Seor. Seor y Dios nuestro, que guas a tus fieles por la senda de tus mandatos y das tu Reino a lo que aman y cumplen tu voluntad; apidate de nuestro mundo y danos tu Espritu para poder instaurar con su fuerza la justicia y el amor. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Al recordar el precio de nuestra libertad. imploramos, Seor, tu clemencia en favor de nuestros hermanos; lbralos de sus cadenas y convirtelos en feles servidores de tu justicia. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Mircoles 26: Misa de feria Color verde. Misa de la semana I. Lecturas de feria. Prefacio comn I. Monicin de entrada y acto penitencial: Todos hemos sido invitados para sentarnos a una misma mesa y comer juntos el Pan bajado del cielo que es el Cuerpo de Cristo. Todos los que comemos de este Pan nos unimos a Cristo, el Cordero de Dios que se entrega a la muerte para que el mundo tenga verdadera vida. Que el Seor nos ayude a comprender lo que vamos a celebrar y nos d fuerzas para cumplir el compromiso que contraemos al aceptar la invitacin de sentarnos a su propia mesa. Y para celebrar dignamente estos sagrados misterios, reconozcamos nuestros pecados. T que quieres salvar a todos los hombres T que nos amas a todos sin distincin de personas T que ests siempre dispuesto a perdonar nuestras faltas Colecta: Mustrate propicio, Seor, a los deseos y plegarias de tu pueblo; danos luz para conocer tu voluntad y la fuerza necesaria para cumplirla. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Movidos por el Espritu de Cristo, que nos es dado para no desfallecer en la proclamacin del Reino de Dios, supliquemos al Padre por nuestro mundo. Para que la comunin del Santo Padre con los obispos y los cristianos de todo el mundo sea un signo creble del amor de Dios que une, fortalece y afianza en la verdad y en el amor. Roguemos al Seor. Para que el Seor, que conduce la barca de su Iglesia, la enriquezca con abundantes y santas vocaciones que, confiando en su Palabra, no teman dejarlo todo para seguirlo. Roguemos al Seor. Para que los gobernantes de las naciones no permanezcan indiferentes ante los sufrimientos del mundo y se dejen interpelar por las justas demandas de los ms pobres y desvalidos. Roguemos al Seor. Para que los que viven en la miseria, sin alimento, vivienda digna ni educacin se vean libres de estos males y no decaigan en la esperanza de un maana mejor. Roguemos al Seor. Para que, hermanados en torno a la mesa del altar, Jess nos d su Espritu, nos haga reconocer su presencia en nuestra historia y nos acerque ms a l. Roguemos al seor. Escucha, Seor, las oraciones de tus fieles, haz que sepamos reconocerte en nuestros hermanos, especialmente en los que sufren, y no permitas que nunca nos apartemos de Ti. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Te suplicamos, Dios todopoderoso, que concedas a quienes alimentas con tus sacramentos la gracia de poder servirte llevando una vida segn tu voluntad. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Jueves 27: San Vicente de Pal, presbtero. MEMORIA OBLIGATORIA Color blanco, Misa propia. Lecturas de feria. Prefacio de los santos pastores. Plegaria Eucarstica II. El Seor Jess, que se nos revela en los pobres y los sencillos, est con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: San Vicente de Pal, cuya memoria celebramos hoy, es uno de los santos que a lo largo de la historia mejor ha encarnado el amor de Cristo Jess a los pobres. Su vida destac por su decisin de luchar contra las miserias fsica y morales del siglo diecisiete en Francia; siendo un autntico hroe de la caridad cristiana, atendiendo a los presos, a los nios abandonados, a las victimas de la guerra y de la miseria. Entre otras instituciones, fund la Congregacin de la Misin, conocida popularmente como los padres pales y, en colaboracin con Luisa de Marillac, la Sociedad de la Hijas de la Caridad, para la atencin de los ms necesitados. Tambin trabaj mucho en la reorganizacin de los seminarios de su tiempo. Fue, durante toda su vida, un sacerdote amable y amado, con sentido realista y de humor, que se lleg a ganar incluso el aprecio de los no creyentes. Nosotros tambin estamos llamados, como san Vicente de Pal, a la santidad de vida; sin embargo, fallamos a menudo en nuestro camino hacia ella. Por eso, iniciamos la celebracin de los sagrados misterios de la Eucarista pidiendo perdn a Dios por nuestros pecados. T, defensor de los pobres. T, refugio de los dbiles. T, esperanza de los pecadores. Colecta: Seor, Dios nuestro, que dotaste de virtudes apostlicas a tu presbtero san Vicente de Pal para que entregara su vida al servicio de los pobres y a la formacin del clero, concdenos, te rogamos, que, impulsados por su mismo espritu, amemos cuanto l am y practiquemos sus enseanzas. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles:Conscientes de la precariedad de nuestra existencia y de la limitacin de nuestro saber, invoquemos a Dios nuestro Padre, fuente de la sabidura y origen de todo bien. Para que el Papa, los obispos, los sacerdotes y los diconos muestren con sus actitudes el rostro de Dios que sale al encuentro del hombre, se revela tal cual es y quiere vivir en intimidad con cada uno. Roguemos al Seor. Para que el Seor suscite en el seno de la Iglesia vocaciones sacerdotales, religiosas y misioneras que den fe de la salvacin universal. Roguemos al Seor. Para que los que tienen en su mano el gobierno de nuestra patria no se dejen seducir por los falsos atractivos del poder y la ambicin, y sirvan con honradez al bien comn. Roguemos al Seor. Para que los enfermos y quienes los cuidan, los agonizantes y los que lloran la muerte de sus familiares o amigos encuentren en Cristo paciente consuelo y fortaleza y experimenten el gozo de la salvacin. Roguemos al Seor. Para que nosotros, que nos alimentamos de Jess Eucarista, oyendo su Palabra, adquiramos un corazn sensato y vivamos en constante accin de gracias. Roguemos al Seor.

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Escucha, Padre, nuestras splicas, y danos tu gracia y tu amor para descubrirte en nuestra existencia y vivir en el amor sin lmites. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: T, que nos has alimentado con los sacramentos del cielo, concdenos, Seor, que, a ejemplo de san Vicente de Pal, y ayudados por su proteccin, imitemos a Jesucristo, tu Hijo, anunciando el Evangelio a los pobres. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Viernes 28 de septiembre: Misa por el perdn de los pecados Color verde. Misas por diversas necesidades n 40. Lecturas de feria. Prefacio comn II. Plegaria Eucarstica II. El Seor Jess, que se compadece de todos, y a todos nos llama a la conversin, est con vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Hoy, en la Eucarista, pediremos de un modo especial perdn al Seor por nuestros pecados. Todos nosotros somos miembros de una Iglesia que es a la vez santa y necesitada de purificacin. Conscientes de esta realidad, al comenzar la celebracin de la Eucarista, nos ponemos ante la presencia de Dios, y nos sinceramos con l en unos momentos de silencio, reconociendo nuestra pobreza y debilidad, e implorando su gracia. T, que acoges a todos. Tu, que eres el camino seguro. T, que eres la vida en plenitud. Colecta: Escucha, Seor, nuestras splicas y perdona nuestros pecados, para que recibamos juntamente tu perdn y tu paz. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles:Elevemos nuestras voces suplicantes a Dios nuestro Padre para pedirle con filial confianza por nosotros y por todos los hombres. Por la Iglesia, nacida del amor del Padre y fundada por Jesucristo; para que por la accin del Espritu Santo conduzca con sabidura a todos los hombres a la gloria eterna. Roguemos al Seor. Por los jvenes que en seminarios, noviciados o centros de estudio se preparan para consagrarse al Seor; para que vivan con decisin su respuesta de amor al Seor, y nunca falten quienes elijan seguir este camino. Roguemos al Seor. Por los que tienen en sus manos el destino de los pueblos; para que promuevan una cultura ms humana y hagan respetar los derechos de todos los hombres. Roguemos al Seor. Por los que no tienen fe; para que, movidos por el testimonio de los cristianos, descubran a Dios como el nico Seor capaz de salvarlos. Roguemos al Seor. Por nosotros, convocados por Jesucristo para celebrar su banquete pascual; para que con fe lo acojamos y con alegra lo proclamemos como nuestro Dios y Seor. Roguemos al Seor. Escucha Seor nuestras oraciones, gua a tu pueblo por tus caminos y haz que, reconocindote presente en cada momento de nuestra vida, te sirvamos con rectitud de corazn. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Despus de recibir con este sacramento el perdn de los pecados, te pedimos, Dios de misericordia, que por tu gracia no volvamos a pecar y que podamos servirte con sincero corazn. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Sbado 29: Santos arcngeles Miguel, Gabriel y Rafael. FIESTA: Color blanco, Misa y lecturas de la fiesta (leccionario V). Gloria. Prefacio de los ngeles. Plegaria Eucarstica III. El Dios de los cielos, a quien alaban el coro de los ngeles y los Arcngeles, est hoy y siempre con todos vosotros. Monicin de entrada y acto penitencial: Celebramos hoy la fiesta de los santos Arcngeles Miguel, Gabriel y Rafael. San Miguel, cuyo nombre significa quin como Dios, fuerte protector de la Iglesia contra las asechanzas e insidias del demonio; san Gabriel, mensajero de Dios, que anunci a Mara y al mundo la inauguracin de los tiempos mesinicos; y san Rafael, medicina de Dios, compaero de Ruta de la Iglesia, que todava peregrina por este mundo. Celebrndolos a ellos celebramos a Dios que acompaa nuestro camino, que vela por nosotros, que nos defiende de todo mal y que nos llama a seguir su luz. Celebrndolos a ellos, celebramos al mismo tiempo la grandeza de Dios, el santo de los santos, a quien alaban eternamente los coros de los ngeles. Bendigamos, pues, al Seor con todos sus ngeles, poderosos ejecutores de sus rdenes, prontos a la voz de su palabra y, en silencio, pongmonos en la presencia del Altsimo para celebrar esta Eucarista, y con humildad y sencillez, reconozcmonos pecadores, e imploremos el perdn de Dios. Yo confieso Gloria. Colecta: Oh Dios, que con admirable sabidura distribuyes los ministerios de los ngeles y los hombres, te pedimos que nuestra vida est siempre protegida en la tierra por aquellos que te asisten continuamente en el cielo. Por nuestro Seor Jesucristo. Oracin de los fieles: Presentemos a Dios nuestras oraciones y dejemos que suban hasta su presencia por manos de sus Santos Arcngeles, para que conduzca nuestra vida y la de toda su Iglesia con todo su amor. Para que San Miguel proteja a la Iglesia peregrina en la lucha contra el mal; san Rafael la acompae en su avanzar por los caminos de la humanidad y san Gabriel la gue para llevar a todos el camino del evangelio. Roguemos al Seor. Para que los que son llamados por Jess para seguirlo ms de cerca; con generosidad renuncien a s mismos y no antepongan nada a la invitacin del Seor, sino que permanezcan siempre atentos y prontos, como los santos Arcngeles, a la voz de su llamada. Roguemos al Seor. Para que los gobernantes y los que tienen poder y capacidad de decisin en nuestro mundo sean dciles a la ley inscrita en sus corazones y promuevan la justicia, el bien y la paz. Roguemos al Seor. Para que los santos Arcngeles protejan a los que se sienten tentados o atribulados, y acompaen en la hora de la muerte a los agonizantes. Roguemos al Seor. Para que al final de nuestra vida, los santos Arcngeles nos reciban en el paraso y nos introduzcan en la ciudad santa de Jerusaln. Roguemos al Seor. Padre bueno y Dios eterno, escucha las oraciones de tu pueblo que espera con confianza tu ayuda; danos tu gracia y tu verdad para que nunca nos apartemos de Ti; y haz que tus santos Arcngeles, ministros gloriosos de tu poder de salvacin, nos ayuden en el peregrinar de esta vida y nos conduzcan despus a la patria verdadera. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Poscomunin: Que nos fortalezca, Seor, el pan celestial con que nos has alimentado, para que caminemos seguros por la senda de la salvacin bajo la fiel custodia de tus ngeles. Por Jesucristo nuestro Seor. Oracin sobre el pueblo: Vuelve, Seor, hacia ti el corazn de tu pueblo; y T que le concedes tan grandes intercesores no dejes de orientarle con tu continua proteccin. Por Jesucristo nuestro Seor.

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Domingo 30: DOMINGO XXVI DEL TIEMPO ORDINARIO Misa y lecturas del domingo. Gloria. Credo. Prefacio dominical VI. Plegaria Eucarstica III. Monicin de entrada y acto penitencial: Si, como cada domingo, nos reunimos para celebrar la Eucarista, significa que somos seguidores de Jess, hombres y mujeres dispuestos a ser fieles al evangelio; pues cuando celebramos la Eucarista, estamos manifestando pblicamente que queremos vivir esa fidelidad, ese amor entregado que Jess nos ense. Comencemos, pues, la celebracin, abrindonos a la gracia de Dios, reconociendo todo lo que hay de pecado en nosotros y sabiendo que Dios siempre nos perdona y nos renueva, pidmosle que tenga piedad y misericordia de nosotros. T que nos llamas a la integridad de vida T que quieres que estemos a favor tuyo T que nos das mandamientos verdaderos Gloria Colecta: Oh Dios, que manifiestas especialmente tu poder con el perdn y la misericordia, derrama incesantemente sobre nosotros tu gracia, para que, deseando lo que nos prometes, consigamos los bienes del cielo. Por nuestro Seor Jesucristo. Credo: Con el rezo del Credo, confesemos ahora nuestra fe, nuestra confianza y nuestra adhesin a Dios. Sabiendo que el Espritu de Dios est en nosotros, oremos confiadamente a Dios nuestro Padre presentndole nuestras

Oracin de los fieles: splicas y plegarias. Para que Para que Para que al Seor. Para que Para que

la Iglesia tenga una presencia proftica en la nueva sociedad. Roguemos al Seor. el Espritu de Dios suscite vocaciones sacerdotales para anunciar en nuestra dicesis la Palabra salvadora. Roguemos al Seor. la conversin del corazn de los que tienen el poder en el mundo adelante la instauracin de la justicia y de la paz. Roguemos el Seor visite con su gracia a los enfermos y les d fortaleza para sobrellevar la enfermedad. Roguemos al Seor. cuantos nos preciamos de ser discpulos de Cristo procuremos dar ejemplo de comprensin y acogida. Roguemos al Seor.

Dios nuestro, que no privas nunca a tu pueblo de profetas que anuncien el Evangelio, derrama el Espritu sobre la Iglesia, tu nuevo Israel, para que todos los fieles, enriquecidos con tus dones, proclamen con valenta ante el mundo tus maravillas. Por Jesucristo nuestro Seor. Poscomunin: Que esta Eucarista, Seor, renueve nuestro cuerpo y nuestro espritu, para que participemos de la herencia gloriosa de tu Hijo, cuya muerte hemos anunciado y compartido. Por Jesucristo nuestro Seor. Bendicin solemne: La paz de Dios, que sobrepasa todo juicio, custodie vuestros corazones y vuestros pensamientos en el conocimiento y el amor de Dios y de su Hijo Jesucristo, nuestro Seor.

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Y la bendicin de Dios todopoderoso