Confancia
Confancia
Confancia
NDICE
NOTA DE LOS AUTORES PRLOGO PRESENTACIN EMPEZAMOS A CONTEXTUALIZAR Historia de la infancia como colectivo social Los instrumentos legales internacionales sobre los derechos de la infancia: una pequea historia del derecho durante el siglo XX Nuestro concepto de infancia El Consejo de la Juventud de Espaa y la participacin Participacin infantil: derecho y concepto NUESTRO MARCO METODOLGICO Descubrimos la metfora de la escalera de la participacin de Roger Hart Profundizamos en nuestro papel de educadores y educadoras Herramientas que nos han servido Espacios de participacin infantil Retos en estos espacios Claves educativas que te pueden ayudar Edita: Consejo de la Juventud de Espaa C/ Montera n 24 - 6 planta. 28013 Madrid. Tel. 91 701 04 20 - Fax: 91 701 04 40 E-mail: [email protected] Internet: http://www.cje.org Redaccin del documento: David de Miguel Martnez Xavier Bretones Hernndez ISBN: exento Depsito legal: NIPO: 213-01-011-8 NUESTRO PAPEL COMO ASOCIACIONES JUVENILES El futuro de la participacin de la infancia en el CJE El papel de las asociaciones juveniles BIBLIOGRAFA CONSULTADA AGRADECIMIENTOS 24 25 28 35 36 40 45 50 53 54 57 58 58 61 65 5 7 13 17 18 19
PRLOGO
Prlogo
PRLOGO
Si comenzramos esta publicacin al ms puro estilo de los guiones de la serie de televisin de "Las chicas de oro", tendramos que comenzar as: "Madrid, 1997. Un apuesto joven que perteneca a una organizacin juvenil envi una carta al responsable del rea de Infancia del Consejo de la Juventud de Espaa, en la que presentaba una propuesta concreta sobre la participacin infantil y el Consejo de la Juventud de Espaa. En esta propuesta se apuntaron algunas claves para trabajar la participacin infantil, los objetivos a seguir y el desarrollo de dos acciones concretas". Pero antes de continuar con esta historia, creemos necesario ubicar a las personas que la estis leyendo para que conozcis desde dnde est elaborada esta publicacin, cul es la institucin que la edita y cmo surgi la necesidad de hacerla. En este sentido, nos parece importante destacar que el Consejo de la Juventud de Espaa (CJE) es una plataforma de entidades juveniles, creada por ley en 1983 y formada por los consejos de Juventud de las Comunidades Autnomas y organizaciones juveniles de mbito estatal, creada para propiciar la participacin de la juventud en el desarrollo poltico, social, econmico y cultural de nuestro Estado en un entorno global, tal y como recoge el artculo 48 de la Constitucin espaola. En la actualidad, 76 entidades juveniles formamos parte de este proyecto comn. Su funcionamiento se desarrolla a travs de una estructura democrtica y representativa, compuesta por los siguientes rganos: La Asamblea General, que rene, cada dos aos, a unos 170 representantes de todas las entidades miembro del CJE para fijar las lneas de actuacin del Consejo. La Asamblea Ejecutiva, rgano responsable de desarrollar los acuerdos de la Asamblea General. La Comisin Permanente, rgano paritario (equilibrio en la representacin de chicos y chicas) encargado de ejecutar sobre el terreno los acuerdos de la Asamblea General y de la Asamblea Ejecutiva, asumiendo la representacin del Consejo. Est compuesta por 9 jvenes menores de 30 aos. Seis comisiones especializadas, encargadas de elaborar los documentos y propuestas de actuaciones concretas que sirvan de base a las decisiones del Consejo. Entre estas seis comisiones se encuentra la Comisin Especializada de Derechos e Igualdad de Oportunidades, donde estn ubicadas las reas de trabajo de inmigracin, mujer joven, juventud rural, educacin para la paz, convivencia y diversidad, y por supuesto, infancia.
Dentro de cada una de estas reas se han creado grupos de trabajo especficos que estn compuestos por representantes de las entidades juveniles del Consejo de la Juventud de Espaa que estn interesadas en desarrollar un mbito determinado. En el tema de infancia, el grupo que surgi opt por trabajar de manera casi monogrfica en la participacin infantil, ya que, al centrarse en aspectos como la participacin o el asociacionismo, se lleg a la conclusin de que era el ncleo comn de trabajo de todas las entidades juveniles que acudan. A partir de este momento se consolid el GTI o Grupo de Trabajo de Infancia del Consejo de la Juventud de Espaa. Un grupo de trabajo con nombre propio -GTI- y con identidad. Las personas que integramos este grupo, a diferencia de otros grupos del Consejo, tenemos una unin muy fuerte provocada, quiz, por nuestra adhesin a un proyecto comn, la participacin infantil. De ah la diferencia. Y aqu se explica gran parte de esta publicacin. La creacin, el 11 de octubre de 1997, del Grupo de Trabajo de Infancia en el seno del Consejo de la Juventud de Espaa signific un relanzamiento importante de esta rea y orient su inters a trabajar, casi de forma monogrfica, la participacin infantil, por varios motivos: por una parte, porque creamos que era un tema muy importante para comenzar a desarrollar dentro del plan de trabajo del Consejo, y por otra parte, porque nosotros y nosotras trabajamos siempre con la juventud en y para la participacin. Por este motivo, era fundamental que esa participacin empezara pues, como casi todo en la vida, aprendindose cuando somos an nios y nias. Fue en 1998, el 27 de febrero, cuando el grupo marc unas lneas concretas de actuacin, que posteriormente fueron aprobadas por el responsable poltico (miembro de una organizacin educativa en el tiempo libre) de la comisin especializada Derechos e Igualdad de Oportunidades, y por la Asamblea Ejecutiva del Consejo de la Juventud de Espaa, convirtindose en un ambicioso plan de trabajo que se centraba en un objetivo fundamental: facilitar el intercambio de experiencias de carcter formativo sobre participacin infantil entre las entidades y consejos que trabajan en infancia. Dos eran las iniciativas que el Grupo de Trabajo de Infancia decidi desarrollar de manera prioritaria: la celebracin de unos encuentros de intercambio sobre participacin infantil y la elaboracin de una gua didctica. La celebracin de los encuentros se abord inmediatamente, y result ser una actividad que nos dara muchas claves para situar en su justa medida el trabajo que podramos abordar ms adelante. Estos Encuentros de Intercambio sobre participacin infantil, que tuvieron lugar en el mes de mayo de 1998, nos ayudaron a conocer los modelos y espacios reales de participacin infantil, a reflexionar sobre este concepto, a diagnosticar el nivel de participacin social, as como a exponer experiencias concretas desarrolladas en varias entidades y consejos de juventud.
Prlogo
Asimismo, conseguimos enmarcar la participacin infantil dentro de un proceso importante que debe desarrollarse desde el tejido social organizado y, a partir de esta clave, se propusieron las futuras lneas generales de trabajo. El xito de participacin y la gran acogida que tuvo el documento de conclusiones entre las entidades integrantes del CJE, adems de entre otras entidades externas, fueron importantes acicates para el trabajo posterior del grupo. El 15 de mayo de 1998 marc el pistoletazo de salida de los trabajos en torno a una gua. Los componentes del Grupo de Trabajo marcaron los objetivos, los contenidos y la metodologa, y, por su parte, todas las entidades presentes se comprometieron a desarrollar diferentes aspectos de la publicacin en ciernes. Al fin, fue en las reuniones de los das 7 y 8 de noviembre de 1998, en Barcelona, cuando con los primeros borradores se dio el impulso definitivo a la publicacin de un trabajo que ya no sera una "gua" sino un documento de pautas para la reflexin sobre la participacin infantil en el proceso educativo: Participando que es gerundio. Pautas educativas para trabajar la participacin infantil. Un documento lleno de preguntas y temas abiertos. En definitiva, un punto de inicio para trabajos posteriores. Algn tiempo despus, el 19 noviembre de 1999, con motivo de la celebracin del dcimo aniversario de la Declaracin de los Derechos de la Infancia, se present en 1 Madrid esta publicacin . De la presentacin debemos destacar la importante asistencia de los medios de comunicacin. Sin duda ello se debe al inters social y sobre todo meditico que supone la participacin infantil y la figura del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, en aquel momento Javier Urra, al que tenemos que agradecer su colaboracin en la presentacin de esta obra. Pero a la presentacin no fue ningn nio ni ninguna nia, aunque quienes organizaban el acto se lo haban planteado. Como se trataba de una publicacin que hacia referencia a la infancia, qu mejor que contar con una representacin de este colectivo. Despus de debatir el tema y de hasta plantearse contactar con jvenes que han tenido cierta popularidad meditica, finalmente se decidi no hacerlo para no caer en lo que llamamos manipulacin de la participacin de la infancia de modo decorativo, as, hasta el momento, en el seno del trabajo del Grupo de Trabajo de Infancia no han participado nios ni nias. De todas maneras, tenemos que valorar la experiencia muy positivamente porque situaciones como sta se producen muy a menudo y no es fcil caer en la cuenta. Por lo que hay que tener un alto grado de concienciacin y de sensibilidad hacia los derechos de la infancia para no pasar por encima de ellos sin ms. Posteriormente, dicha publicacin se distribuy a las entidades y consejos de juventud del CJE, y tambin a las asociaciones de la Plataforma de Organizaciones de
VV.AA.: Participando que es gerundio. Pautas educativas para trabajar la participacin infantil. Madrid, Consejo de la Juventud de Espaa, 1999.
1
Infancia (POI), escuelas de tiempo libre, las personalidades que integran el Observatorio de la Infancia, organizaciones y ONG, revistas educativas, centros regionales de Informacin Juvenil, centros de recursos para el profesorado, centros universitarios, bibliotecas de facultades relacionadas con la infancia, etc. Con esta publicacin se cerr una primera etapa en el recorrido del Grupo de Trabajo de Infancia del CJE, iniciada en febrero de 1998, habiendo llevado a cabo el objetivo principal de facilitar el intercambio de experiencias de carcter formativo sobre participacin infantil entre las entidades y consejos que trabajan en infancia.
11
10
A partir de este momento, el rumbo del Grupo de Trabajo de Infancia sigui en la direccin de conseguir una mayor implicacin del conjunto de las entidades y consejos miembros para promocionar la participacin de la infancia. As, se definieron dos lneas a seguir: - La promocin de la participacin infantil mediante acciones de formacin dirigidas a las entidades y consejos de juventud con el objetivo de sensibilizar para poner en marcha proyectos en este sentido. - Avanzar en la investigacin y la reflexin sobre la participacin infantil para tener ms conocimientos sobre el tema. Todo ello sin perder de vista uno de los objetivos que habamos tenido en mente durante todo el proceso seguido desde el inicio del grupo: que fueran los nios y las nias quienes nos dijeran qu es lo que creen que debera de hacer el Consejo de la Juventud de Espaa en el rea de infancia. Para la consecucin de estos objetivos era imprescindible dotar a las entidades y consejos de juventud miembros del CJE de la formacin necesaria para que sus "formadores" y "formadoras" pudieran integrar e impartir el tema de cmo fomentar la participacin infantil en sus respectivas entidades y consejos de juventud. Por lo que consideramos importante proporcionar desde el CJE esta formacin. De modo que, para finales de 1999, en Crdoba, se organiz un curso de participacin infantil en el marco de la escuela de formacin del CJE, Politeia Joven 1999, adems de otro especfico, ms extenso, de 100 horas, dirigido a la formacin de equipos formativos de las entidades que trabajan con la infancia para poder profundizar en el tema. Es decir, se trataba de facilitar los conocimientos adquiridos con nuestra experiencia a aquellas personas que en las entidades y consejos de juventud miembros del CJE se encargan del tema de la formacin, de manera que puedan luego transmitir esta informacin a monitoras y monitores, educadores y educadoras, y estos grupos educativos, a su vez, transmitan sus conocimientos a los nios y las nias con quienes trabajan. En varias reuniones del Grupo de Trabajo de Infancia se habl de cmo disear el curso y definir sus contenidos. De estas reuniones result una propuesta de un
curso y de su contenido. El curso tendra una duracin de 100 horas lectivas, combinando la teora y la prctica. Slo quedaba una cuestin por cerrar: quin impartira el curso. Finalmente, ante las distintas opciones planteadas, los componentes del grupo trasladaron a las personas que tenan la responsabilidad poltica y tcnica el compromiso de encontrar una salida. Impartido por el experto Csar Muoz, se realiz en Aranjuez, en octubre de 2000, el curso de formacin para 25 formadores y formadoras sobre la participacin infantil. Atrs qued la propuesta de realizar este curso de formacin slo para quienes pertenecan al Grupo de Trabajo de Infancia o de invitar a realizar el curso a varios ponentes y expertas. Sin embargo, lo que s se logr fue profundizar en algunos temas que haban salido al reflexionar sobre la participacin infantil. De modo que, a partir del trabajo de intercambio, reflexin y debate realizado durante el curso, el Grupo de Trabajo de Infancia decidi reeditar Participando que es gerundio, pero con una nueva versin revisada y ampliada. As, queda por escrito el trabajo hecho hasta el momento y tenemos un documento de promocin y formacin sobre la participacin infantil. El Consejo de la Juventud de Espaa, mediante su Grupo de Trabajo de Infancia, ha acometido uno de los principales temas de la ltima dcada en cuanto a los derechos de la infancia. A pesar de que la participacin infantil ha sido un tema que ha estado de moda -como toda moda, sabemos que es pasajera-, en realidad depender de nosotros y nosotras que pase de largo o de que cale ms profundamente en nuestras entidades. No obstante, lo que es seguro, y no obedece a ninguna moda, es que la participacin infantil es un objetivo, un valor, una preocupacin y hasta una forma de entender la vida. Y no es nada extrao que sea as, pues el compromiso de las entidades juveniles con el avance y desarrollo de nuestra democracia viene de lejos. Creemos que el resultado de este trabajo, en relacin a la participacin infantil, nos permite tener explicaciones tericas y prcticas sobre lo que hemos venido haciendo, y nos da pistas y elementos para poder introducir nuevas formas y estrategias en nuestras asociaciones. Y ste ha sido el papel del CJE, un lugar de encuentro, de debate y reflexin en materia de participacin infantil. Adems, de aqu ha salido un fruto: el de consensuar ideas sobre lo que entendemos que es y ha de ser la participacin infantil.
12
PRESENTACIN
Presentacin
participacin infantil, se traslad al grupo de trabajo el problema y fue all, en ese espacio de participacin, donde se consensu "rescatar" slo a algunas personas integrantes del Grupo de Trabajo de Infancia que, por ganas, conocimientos y tiempo, estuviramos en disposicin de hacer esta publicacin. Y se es el motivo por el que ha sido realizada por David de Miguel y Xavier Bretones. Para la preparacin de esta obra, es justo decir tambin que se revisaron y analizaron algunos de los documentos del Consejo de la Juventud de Espaa: las conclusiones de los "Encuentros de intercambio de participacin infantil" (1998), las actas de las reuniones del Grupo de Trabajo de Infancia (1997/2002), el libro Participando que es gerundio (1999), las conclusiones y contenidos elaborados para el documento "La participacin infantil en las entidades y consejos de juventud" (en Politeia Joven, 1999), el libro Cultura participativa y asociacionismo juvenil (2000), documentos internos del Grupo de Trabajo de Educacin para la participacin de la Comisin Especializada de Participacin y promocin asociativa, y las transcripciones del "Curso de formacin de formadores y formadoras en participacin infantil" (2000). As mismo, se han estudiado otras publicaciones de diversa autora relacionadas con la materia, que figuran al final, en el apartado de bibliografa consultada. La lgica marcada por el desarrollo argumental de la publicacin es la siguiente: - Comenzamos con la contextualizacin de la infancia, haciendo un breve recorrido histrico de la evolucin del concepto de infancia a travs del tiempo y los instrumentos legales internacionales surgidos desde que comienza a considerarse a los nios y las nias como ciudadanos y ciudadanas de pleno derecho. Una vez revisado el contexto internacional, circunscribimos este concepto a nuestra realidad y lo hacemos nuestro. De aqu proviene nuestra definicin de infancia. - El siguiente paso en la propuesta argumental es llegar hasta la definicin de participacin infantil. Para ello, una vez delimitado el trmino "infancia", tendramos que especificar nuestro concepto de participacin desde el punto de vista del asociacionismo y, por ende, la participacin infantil dentro de escuelas de participacin, como son las entidades juveniles. - A continuacin, se aborda el marco metodolgico que hemos consensuado como propio desde el Grupo de Trabajo de Educacin. En su elaboracin hemos tenido muy en cuenta la metfora de la escalera de participacin de Roger Hart, para despus profundizar sobre nuestro papel como educadoras y educadores y plasmar las herramientas, espacios y algunas claves necesarias en el desarrollo de procesos de participacin infantil. - Por ltimo, teniendo en cuenta que nuestra apuesta es impulsar esos procesos dentro del marco del asociacionismo, se formulan algunos retos de
14
15
futuro para las asociaciones juveniles de cara a la promocin de la participacin asociativa infantil. Durante todo el proceso hemos pretendido, sobre todo, dar una respuesta a la necesidad del Grupo de Trabajo de Educacin de profundizar en la definicin de conceptos y experiencias concretas que contribuyan a que la infancia y la adolescencia tengan cada da un papel ms protagonista en nuestra sociedad.
16
EMPEZAMOS A CONTEXTUALIZAR
Empezamos a contextualizar
de los Derechos Humanos, como fue la Revolucin Francesa. A estas insurrecciones suele acompaar una filosofa de ayuda a los dems, orientada, principalmente, hacia la beneficencia y la filantropa. Asimismo, se empieza a considerar al Estado el responsable ltimo de garantizar estos derechos. En el siglo XIX, los nios y nias de las clases ms pobres tenan unas duras condiciones de vida y de trabajo. Por este motivo surgen en diferentes pases los denominados movimientos "salvadores de los nios" cuyo objetivo era la reeducacin de menores marginales que ocasionaban problemas a la sociedad de la poca.
19
18
Con la beneficencia nacen diferentes instituciones de ayuda destinadas a facilitar las condiciones de vida de quienes estn un una situacin de mayor pobreza y, por lo tanto, tambin a la infancia desfavorecida de esa poca. Se crean las primeras casas de maternidad y socorro para nios y nias pobres mayores de seis aos.
1
A partir del siglo XX, aparece un nuevo concepto social de la infancia, los nios y, especialmente, las nias se consideran una ciudadana con unas necesidades especficas, por lo que deber tener una serie de derechos tambin especficos. Se asume que durante la infancia los seres humanos somos mucho ms vulnerables que en edad adulta, por lo que es preciso una mayor proteccin por parte de las instituciones competentes. A finales del siglo XX, los nios y las nias empiezan a contemplarse como un grupo social, con una serie de derechos reconocidos a nivel internacional, siendo sujeto de derechos y no objeto de los mismos. En otro apartado desmenuzaremos toda la historia de la Convencin sobre los Derechos de la infancia, desde los derechos reconocidos a travs de la Declaracin de Ginebra hasta la Convencin de Naciones Unidas sobre los Derechos de la Infancia, en la que se reconoce que son ciudadanos y ciudadanas de pleno derecho, y que entre sus derechos est la participacin social.
Los instrumentos legales internacionales sobre los derechos de la infancia: una pequea historia del derecho durante el siglo xx
Antes de analizar y valorar la participacin infantil como un derecho, vamos a hacer un recorrido histrico sobre la concesin de los derechos del nio y la nia a lo largo de la historia y el papel que han jugado las Naciones Unidas para que la mayora de los estados miembros de este organismo hayan ratificado la Convencin Internacional de Naciones Unidas de los Derechos de la Infancia. Como ya hemos destacado en esta publicacin, la garanta de los derechos de la infancia es sumamente importante, y habr que valorar la relevancia que tienen estos hitos jurdicos para, entre otras cuestiones, el reconocimiento de la participacin social de los nios y de las nias.
Empezamos a contextualizar
8.- Derecho a tener preferencia de asistencia en caso de desastres. 9.- Derecho a proteccin para evitar toda forma de abandono, crueldad y explotacin, y a establecer una edad mnima de acceso al trabajo. 10.- Proteccin contra la discriminacin racial, religiosa o de cualquier otra ndole. Han de recibir educacin dentro de un espritu de comprensin y tolerancia. Desde estas lneas queremos valorar la importancia que tuvo la aprobacin de la declaracin de 1959, porque en ella queda reconocida, por la mayora de los estados, la importancia de la proteccin de la infancia, y la diferencia de sus necesidades en comparacin con las que tienen las personas adultas. Fue uno de los primeros pasos para posteriormente configurar el instrumento internacional ms ratificado por parte de los estados que conforman Naciones Unidas: La Convencin sobre los Derechos de la Infancia.
20
21
Categoras de la convencin
Susan Fountain, en su libro Nada ms Justo! , publicado por UNICEF, divide los artculos de la Convencin en cuatro amplias categoras: Derechos a la supervivencia: Abarcan el derecho de cualquier menor a la vida y a tener cubiertas las necesidades ms fundamentales para la existencia. Entre stas se incluye un nivel de vida adecuado, hogar, alimentacin y acceso al sistema sanitario.
Convencin Internacional sobre los Derechos del nio. 20 de noviembre de 1989. Madrid, Plataforma de Organizaciones de Infancia, 2001. Fountain, Susan: Nada ms Justo! Gua prctica para aprender acerca de la Convencin sobre los Derechos de la Infancia. Madrid, Comit espaol de UNICEF, 1998.
3 2 3
Empezamos a contextualizar
Derechos al desarrollo: Contemplan el acceso a una serie de factores que los nios y las nias necesitan para alcanzar su mayor potencial. Algunos ejemplos de este tipo de derechos son: el derecho a la educacin, al juego, a las actividades culturales, a la libertad de pensamiento, conciencia y religin, etc. Derechos a la proteccin:
22
Estos derechos exigen que se proteja a la infancia de todas las formas de abuso, abandono y explotacin, tales como la tortura, abusos del sistema de justicia criminal, participacin en conflictos armados, trabajo infantil, consumo de drogas, explotacin sexual y atencin a los refugiados y refugiadas menores de edad. Derechos a la participacin: Permiten a los nios y nias asumir un papel activo en sus comunidades. Estos derechos incluyen la libertad de expresar opiniones, de hablar sobre los asuntos que afectan a la propia vida, de asociarse y de reunirse con fines pacficos. Todos estos derechos reunidos en las cuatro categoras han sido una referencia fundamental para el Consejo de la Juventud de Espaa en su trabajo sobre la participacin infantil.
Art. 18.- Responsabilidad de madres y padres. Art. 19.- Proteccin de los malos tratos. Art. 20.- Proteccin de menores con privacin de su medio familiar. Art. 21.- Adopcin. Art. 22.- Refugiados y refugiadas menores. Art. 23.- Menores con discapacidades. Art. 24.- Salud y servicios mdicos. Art. 25.- Evaluacin peridica de la internacin. Art. 26.- Seguridad Social. Art. 27.- Nivel de vida. Art. 28.- Educacin. Art. 29.- Objetivos de la educacin. Art. 30.- Menores pertenecientes a minoras o poblacin indgena. Art. 31.- Esparcimiento, juego y actividades culturales. Art. 32.- Trabajo de menores. Art. 33.- Uso y trfico de estupefacientes. Art. 34.- Explotacin sexual. Art. 35.- Venta, trfico y trata de menores. Art. 36.- Otras formas de explotacin. Art. 37.- Tortura y privacin de libertad. Art. 38.- Conflictos armados. Art. 39.- Recuperacin y reintegracin social. Art. 40.- Administracin de la justicia. Del total de los 54 artculos, se han excluido aquellos que hacen referencia a aspectos de procedimientos.
23
1.- Definicin de Infancia. 2.- No discriminacin. 3.- Inters superior del nio o de la nia. 4.- Aplicacin de los derechos. 5.- Direccin y orientacin de la madre y el padre. 6.- Supervivencia y desarrollo. 7.- Nombre y nacionalidad. 8.- Preservacin de la identidad. 9.- Separacin del padre y de la madre. 10.- Reunificacin familiar. 11.- Retenciones y traslados ilcitos. 12.- Opinin del nio o la nia. 13.- Libertad de expresin. 14.- Libertad de pensamiento, conciencia y religin. 15.- Libertad de asociacin. 16.- Proteccin de la vida privada. 17.- Acceso a una informacin adecuada.
Flores, Roberto y Fernndez Tania M.: Programa la voz de la Infancia. Gua para educadores. Zaragoza, UNICEF. Edex, 2000. pag. 21 y ss.
Empezamos a contextualizar
24
de entendimiento. As pues, consideraremos dentro de la infancia a quienes tengan menos de 18 aos, aunque debemos distinguir las diferentes etapas evolutivas para promover procesos educativos de participacin infantil. Como resultado de este proceso, los nios y las nias consiguen un empoderamiento, basado en el reconocimiento de que son ciudadanos y ciudadanas de pleno derecho. Otro aspecto a considerar es la etimologa de la palabra "infancia", que deriva del latn, cuyo significado es "sin voz", (in-fancia) o "quienes no tienen voz". Es un dato a tener en cuenta a lo largo de esta lectura, ya que hablar de participacin infantil en los trminos que actualmente hablamos es un avance histrico para los nios y las nias. Por ello, y precisamente a partir de aqu, surgi la idea de llamar a esta publicacin "con-fancia", inventando un antnimo del anterior trmino, es decir, estaramos hablando de nios y nias "con voz". De modo que cuando hablamos de infancia nos referimos a un grupo social al que pertenece todo ser humano menor de 18 aos de edad, con unas caractersticas evolutivas determinadas y con unos derechos sociales, econmicos, polticos, de proteccin, etc. reconocidos, que, claro est, implican sus correspondientes responsabilidades.
25
VV.AA.: Participando que es gerundio. Pg. 4 del Anexo: Convencin sobre los derechos de la infancia.
VV.AA: Encuentros de intercambio sobre participacin infantil: Madrid, 16 y 17 de mayo de 1998. -- Madrid: Consejo de la Juventud de Espaa, rea de Infancia, 1998.
Empezamos a contextualizar
En el recorrido de ubicacin contextual del proceso de participacin infantil en el CJE, comenzamos definiendo el trmino de participacin social. ste ser nuestro punto de partida para, despus, definir nuestra idea de participacin infantil. El Consejo de la Juventud de Espaa ha realizado diversas jornadas, seminarios y cursos en relacin a este tema, y finalmente ha redactado algunos documentos que han puesto de manifiesto la relevancia de la participacin. Uno de los resultados de todo este trabajo fue la campaa de promocin del asociacionismo juvenil.
26
- Es una forma de legitimizar la democracia. Mediante la intervencin efectiva de la ciudadana en la vida pblica se refrenda el sistema poltico que basa su esencia en la soberana popular: la democracia. Una vez definidos estos rasgos bsicos caractersticos de la participacin social, desde el CJE nos plantebamos conocer las condiciones necesarias para que la participacin social se lleve a cabo. El resultado de nuestros anlisis nos llev a las siguientes conclusiones:
27
La definicin de participacin social que utilizaremos durante el transcurso de esta 7 lectura est basada en la publicacin Cultura participativa y asociacionismo juvenil, editada por el Consejo de la Juventud de Espaa. De ella pueden destacarse una serie de rasgos bsicos que sirven para caracterizarla.
Godoy, Antonio y Franco, Pepa: Cultura participativa y asociacionismo juvenil. Madrid, Consejo de la Juventud de Espaa, 2000.
Empezamos a contextualizar
- Realizar aprendizajes dentro de espacios de cooperacin y colaboracin: trabajo en grupo, planificacin, resolucin de conflictos, etc. - Informar sobre qu es participar, adems de cmo y dnde puede hacerse. - Facilitar los procesos de acceso y desarrollo de la ciudadana, sobre todo los de la juventud e infancia.
mos un papel relevante escuchando a los nios y a las nias, para as tener en cuenta su opinin a la hora de tomar decisiones que les conciernen. Un ejemplo de ello puede ser el caso de una asociacin juvenil que plantea la realizacin de un campamento de verano. Si el equipo educativo elabora diferentes actividades para que los nios y las nias opinen sobre dnde se va a realizar ese campamento, las actividades que se quieren hacer, etc., es muy posible que el proceso sea ms largo y difcil (sobre todo si se quiere llegar a un acuerdo), en comparacin con la elaboracin de dicho proyecto por parte del equipo educativo exclusivamente.
29
28
- Libertad de expresin. Artculo 13: "1. El nio tendr derecho a la libertad de expresin; ese derecho incluir la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de todo tipo, sin consideracin de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o impresas, en forma artstica o por cualquier otro medio elegido por el nio"."2. El ejercicio de tal derecho podr estar sujeto a ciertas restricciones" "a) el respeto a los derechos o la reputacin de los dems" y "b) la proteccin de la seguridad nacio9 nal o el orden pblico o para proteger la salud o la moral pblicas". Tal y como dice este artculo, los nios y las nias tienen la libertad de expresarse sin que ninguna persona adulta pueda limitar este derecho. No obstante, est claro que, en la mayora de las ocasiones, resulta imprescindible que los nios y nias tengan informacin para poder ejercer su derecho, y se es el papel del equipo educativo: facilitar el ejercicio de sus derechos proporcionando el acceso a la informacin. Algunos ejemplos que serviran para mostrar una aplicacin de este derecho, para facilitar la expresin de sus opiniones, ideas y sentimientos, estn relacionados con buscar nuevos cauces de comunicacin, ya sea a travs de la aplicacin de las nuevas tecnologas, de la expresin artstica, la comunicacin no verbal, etc. Es decir, utilizar una metodologa que facilite su expresin. - Libertad de pensamiento. Artculo 14: "Los Estados Partes respetarn el derecho del nio a la libertad de pen10 samiento, de conciencia y de religin". Es el equipo educativo quien debe hacer respetar este derecho y fomentar que los nios y las nias ejerzan la libertad de pensamiento, evitando, adems, cualquier intromisin en su toma
9
VV.AA.: Participando que es gerundio. Pg. 7 del Anexo: Convencin sobre los derechos de la infancia. VV.AA.: Participando que es gerundio. Pg. 7 del Anexo: Convencin sobre los derechos de la infancia.
10
VV.AA.: Participando que es gerundio. Pg. 7 del Anexo: Convencin sobre los derechos de la infancia.
Empezamos a contextualizar
de decisiones. Las entidades juveniles tenemos que apoyar que los nios y las nias decidan con su manera de pensar, y eliminar cualquier manipulacin ideolgica. - Libertad de asociacin. Artculo 15: "Los Estados Partes reconocen los derechos 11 del nio a la libertad de asociacin y a la libertad de celebrar reuniones pacficas". Los nios y nias, a travs de las asociaciones o grupos, aprenden a organizarse, a participar en algo que les interesa: una accin deportiva, cultural, social
30
saben que pueden asociarse tendrn la posibilidad de decidir si quieren asociarse o no, si saben que puede acceder a informacin la buscarn... Por todo ello, es importante que las asociaciones juveniles, en el marco de sus programas educativos, incorporen la educacin en los derechos de la infancia como eje transversal, y adems 14 desarrollen programas formativos en esta materia para los equipos educativos .
El Consejo de la Juventud de Espaa, como entidad que impulsa el asociacionismo juvenil, tambin promueve el asociacionismo infantil all donde los nios y las nias sean capaces de unirse para el desarrollo de diferentes proyectos de cualquier mbito. Sin embargo, todava este artculo es complicado de poner en marcha porque las legislaciones nacionales no han sabido resolver la ejecucin del mismo, ya que no contemplan la asociacin legal de nios y nias sin una persona adulta que se haga cargo. - Participacin de menores con discapacidad. Artculo 23: "Los Estados Partes reconocen que el nio mental o fsicamente impedido deber disfrutar de una vida plena y decente en condiciones que aseguren su dignidad, le permitan llegar a bastarse a 12 s mismo y faciliten la participacin activa del nio en la comunidad". El artculo recoge la necesidad de integracin social de los colectivos socialmente vulnerables. Desde el CJE creemos que es importante hacerlo a travs de la participacin. Tenemos que dejar a un lado la tendencia asistencial que muchas veces gua las acciones dirigidas hacia estos colectivos. De esta manera podremos promover una participacin activa en las decisiones que crean oportunas y se integren en la comunidad en la que viven. Un ejemplo, que podemos citar aqu, es la inclusin social de menores con poca o ninguna audicin en las asociaciones juveniles, y en el propio Consejo de la Juventud de Espaa, para lo cual sera conveniente la traduccin al lenguaje de signos de las actividades que se desarrollen. - Difusin de la Convencin. Artculo 42: "Los estados Partes se comprometen a dar a conocer ampliamente los principios y disposiciones de la Convencin por medios 13 eficaces y apropiados, tanto a los adultos como a los nios". Este artculo recoge la idea de que slo conociendo sus derechos pueden tomar parte en ellos: si saben que pueden opinar tendrn posibilidad de dar su opinin, si
14
11 12 13
VV.AA.: Participando que es gerundio. Pg. 8 del Anexo: Convencin sobre los derechos de la infancia. VV.AA.: Participando que es gerundio. Pg. 10 del Anexo: Convencin sobre los derechos de la infancia. VV.AA.: Participando que es gerundio. Pg. 17 del Anexo: Convencin sobre los derechos de la infancia.
En todos los artculos recogidos en este apartado se ha optado por mantener el texto literal de la Convencin sobre los Derechos del Nio, cuya entrada en vigor en nuestro pas fue el 5 de enero de 1991. Sin embargo nos hubiera gustado poder haber visibilizado a las nias a travs de la incorporacin del lenguaje no sexista, porque en varios articulados de la Convencin, tal y como se ha traducido, no se transmite la idea de que las nias tambin son protagonistas a la hora de ser sujetos activos de la Convencin. Martnez Muoz, Marta y Martnez Ten, Amparo: Participacin infantil en el tiempo libre. Reflexiones y experiencias: una mirada desde los adultos y la infancia. Madrid, Plataforma de Organizaciones de Infancia, 2000. Pgs. 109 - 110.
15
Empezamos a contextualizar
En los "Encuentros de Intercambio sobre Participacin Infantil", que organiz el Consejo de la Juventud de Espaa en Madrid los das 16 y 17 de mayo de 1998, el ponente Csar Muoz lanz un enfoque de participacin positivo, progresista y tico al indicar que se cae en un error cuando hablamos de participacin infantil con la idea de que hay que hablar de la participacin de los nios y las nias: "Tendramos que venir con la idea de que no es una participacin de ellos, no hay que sealarlos con el dedo, sino que la participacin infantil es cosa de ellos en relacin con nosotros, con los jvenes, con los adultos, con los ancianos, ah est la verdadera par16 ticipacin, una participacin en relacin".
32
Dar voz: Es necesario considerar la importancia de lo que nos dicen los nios y las nias, estemos de acuerdo o no con sus opiniones. Por este motivo, el equipo educativo tendr que escucharles y dejar que se expresen. Toma de decisiones: No podremos hablar de participacin infantil si los nios y las nias no intervienen en el proceso de la toma de decisiones. Tenemos que generar metodologas para favorecer su presencia, sin ninguna manipulacin por parte de nadie. Responsabilidad: Cuando una persona tiene derechos, stos llevan implcitos una serie de deberes y responsabilidades. No podemos educar solamente en los derechos, hay que formar en los derechos y en las responsabilidades. Con todo, en el Grupo de Trabajo de Infancia del CJE no hay una definicin cerrada de participacin infantil, ya que queremos partir de nuestra realidad y experiencia, y no tomar esta nocin como un paradigma, sino como un referente.
33
Hemos intentado llegar a un consenso sobre la definicin de participacin infantil, teniendo en cuenta los siguientes conceptos que consideramos importantes, y que hemos reelaborado durante las diferentes jornadas, encuentros y seminarios:
Proceso: En nuestra opinin, la participacin infantil en un proceso eduativo en el cual el nio o la nia toma conciencia de s para el ejercicio de sus derechos. Medio: La participacin infantil no es un fin en s mismo, sino un canal para que los nios y nias ejerzan su derecho a la ciudadana. Democracia: Creemos que la participacin infantil potencia el ejercicio democrtico de cualquier persona, sin distincin de edad. Escucha: Herramienta fundamental para poder llevar a cabo la participacin infantil. Gracias a esta habilidad adquirida, las personas adultas podemos tomar decisiones conjuntas con los nios y las nias. Poder: Cesin de poder por parte de las personas adultas, adquirido por la infancia para poder tomar decisiones conjuntas en los temas que les afectan directamente. Educacin: Desde el Consejo de la Juventud de Espaa, como plataforma interasociativa juvenil de participacin y de representacin plural, creemos en la educacin, tanto de los nios y nias como de los y las jvenes, para construir organizadamente el tejido de la sociedad civil. Derecho: Entendemos la participacin infantil como un derecho y no como un favor o cesin de poder de las personas adultas haca la infancia. La Convencin sobre los Derechos de la Infancia es de obligado cumplimiento para los estados, y por lo tanto para su ciudadana. Nivel de inclusin social: Creemos que la participacin social de la infancia favorecer el nivel de inclusin social de los nios y de las nias con discapacidades.
16
Independientemente de esta metfora de la escalera de la participacin, el Grupo de Trabajo de Infancia reconoce que cada asociacin juvenil tiene su marco metodolgico muy bien definido (ver apartado de Diferentes propuestas metodolgicas de la 17 publicacin Participando que es Gerundio ), aunque tambin plantea que hay claves que, sea cual sea la metodologa propia, pueden ayudar a incluir la participacin infantil en la forma de trabajo de las asociaciones juveniles.
37
17 18
Hart, A. Roger: La participacin de los nios: de la participacin simblica a la participacin autntica. Santa Fe de Bogot (Colombia), UNICEF TACRO, 1993.Pgs. 8- 18.
5.- CONSULTA E INFORMACIN: Un proyecto dirigido a la infancia que tiene en cuenta a los nios y las nias para recoger e incorporar las propuestas que puedan realizar, aunque lo diseen y gestionen las personas adultas. Una muestra de este nivel de participacin seran las consultas a menores en la realizacin de un plan de infancia de un Ayuntamiento, y que despus se diera a los nios y nias informacin de lo que se ha realizado. 6.- INICIADO POR LAS PERSONAS ADULTAS, COMPARTIENDO DECISIONES CON LA INFANCIA: Se da un paso ms en la escalera de la participacin, ya que se involucra a la infancia en el proceso de toma de decisiones, que son compartidas con las personas adultas. Se tratara de incorporar en la metodologa de la asociacin espacios de participacin, como puedan ser las asambleas. Un buen ejemplo sera una ludoteca en la que expresen y decidan, conjuntamente con el equipo educativo, los juegos y talleres a realizar. 7.- INICIADO Y DIRIGIDO POR LOS NIOS Y LAS NIAS: Un autntico ejemplo de participacin, situado en un nivel superior de la escalera, es el de un grupo de nios y nias organizndose para cualquier juego. En las iniciativas de proyectos de tiempo libre encontramos bastantes ejemplos dentro de las acciones que se proponen, organizan y dirigen sin la intervencin de personas adultas, como puede ser el caso de la preparacin de una obra de teatro, un campamento, etc. 8.- INICIADA POR LOS NIOS Y LAS NIAS, LAS DECISIONES SON COMPARTIDAS CON LAS PERSONAS ADULTAS: Aqu es donde realmente se cree en la potencialidad de la infancia. No es fcil encontrar ejemplos en este nivel de la escalera. Adems, es importante aadir que, dentro de un proyecto de participacin infantil, hay que tomar en consideracin la edad de los nios y nias que participan activamente, ya que a mayor edad menor debera ser la intervencin de las personas adultas, pues es preciso respetar la creciente autonoma que reclaman segn van llegando a la adolescencia. El Consejo de la Juventud de Espaa ha tomado como referencia esta metfora de la escalera para evaluar diferentes acciones, las suyas y las de las entidades juveniles que participan en el Grupo de Trabajo de Infancia, porque, aunque cada asociacin juvenil utiliza una metodologa diferente, el Consejo de la Juventud de Espaa considera interesante que las distintas entidades contemplen este instrumento de anlisis en sus metodologas propias. Para profundizar en el tema hay que acudir a dos publicaciones del Consejo de la Juventud de Espaa, en las que se exponen diferentes metodologas participativas de las propias entidades que pertenecen al Consejo, nos referimos a Encuentros de intercambio de participacin infantil y a Participando que es Gerundio. En ellas encontramos experiencias enriquecedoras porque las entidades apuestan por la educacin en libertad a travs de la participacin activa de sus asociados y asociadas.
38
39
idiosincrasias propias de esta etapa, sus necesidades, inseguridades, ideas, ilusiones, etc. Nos acercamos a la realidad infantil sin intentar confundirnos en ella. Para estar ms cerca de la infancia no tenemos que convertirnos en nios o en nias. Como tampoco hay que caer en el error de valorar este periodo hasta el extre19 mo de entronar al "nio-rey" y considerar que est en estado de pureza porque no posee la contaminacin de la maldad, a diferencia de las personas adultas, que s estaran contaminadas. Tenemos que ser personas autnticas y crebles. Personas que conocen los espacios en los que se desenvuelve la infancia, que saben dnde estn y qu son, que conocen por dnde se mueven, dnde viven, qu quieren saber, cmo ven el mundo y todo aquello que les rodea. Y, como dice Roger Hart: "si un adulto tiene verdadero inters en sus vidas, y ellos lo pueden comprender, entonces ellos sern los par20 ticipantes ms entusiastas". El equipo educativo debe ser consciente de que es observado y de que es un modelo para los nios, las nias y jvenes con quienes se relaciona. En la educacin no formal se utiliza una combinacin de actividades y experiencias para trabajar los valores, adems de la propia presencia y accin de las personas adultas. La participacin, como otros temas u objetivos a alcanzar dentro del proceso educativo, est marcada tanto por la palabra como por la actitud del equipo educativo. Algunos aspectos como la implicacin de la persona adulta, la vida de grupo, la colectividad, el da a da de la vida cotidiana, la propia participacin, etc. constituyen un marco de referencia constante para la infancia.
41
40
Sentirse parte
La participacin infantil tiene mucho que ver con el compromiso del equipo educativo y la transmisin del proyecto. Como planteaba Rousseau, el equipo educativo no debera manipular la voluntad del nio o la nia, sino fomentar su participacin en situaciones que les harn descubrir, experimentar y conocer, adems de disponer todos los elementos a su alcance, tanto fsicos como simblicos y relacionales, para que se sientan valorados y valoradas... Estos elementos les permiten sentirse parte importante de algo. La infancia puede disear y administrar proyectos complejos si 21 siente que esos proyectos le pertenecen. Hay que comprender la necesidad que tiene la infancia de dirigir sus propias actividades, aunque sin olvidar que a los nios y a las nias les gusta acudir a personas
19 20
Con la infancia
Uno de los elementos primordiales en la promocin de la participacin infantil es la relacin que se establece entre la infancia y el equipo educativo. La participacin infantil aqu propuesta no tiene nada que ver con un enfoque paternalista y protector de la educacin. En esta lnea, sentimos una mayor identificacin con el modelo que llamaremos "trabajar con la infancia", que permite estar pendiente de las
Hart, A. Roger: La participacin de los nios: de la participacin simblica a la participacin autntica. Santa Fe de Bogot, UNICEF TACRO, 1993.
21
adultas cada vez que necesitan apoyo tcnico y emocional. En primera instancia, para participar hay que sentirse parte del lugar donde nos encontramos y, despus, se tiene que sentir confianza para acercarse a los y las dems. La confianza les llega tambin del equipo educativo, cuando creemos en sus potencialidades y en sus capacidades para exponer sus ideas, sus opiniones y sus decisiones, fomentando, de este modo, su proceso de definicin personal. As, los elementos formales, nuestras estructuras de funcionamiento que se establecen para regular la vida en el marco asociativo, ganan fuerza con lo que el equipo educativo transmite. Es el momento de acompaar y apoyar al nio o a la nia, haciendo que sienta las palabras, diciendo sin decir, t puedes, yo estoy aqu para darte confianza. Es imprescindible, adems, tener una expectativa real y positiva sobre la capacidad de ser y de hacer que la infancia tiene o puede tener. No hay que perder de vista que la autoestima es uno de los elementos a tener ms en cuenta, ya que interfiere en la motivacin, es decir, una baja autoestima lleva a una baja motivacin para la participacin. Etapas internas que sigue la infancia en su proceso de participacin
Aclimatacin Control de la situacin Productividad Personalizacin Autonoma
42
El grupo es un medio
El fin es la educacin de nios y nias, el grupo es un medio, un instrumento del que nos servimos. No en vano dentro de un grupo se vive la experiencia personal de proyectarse hacia las dems personas, as como se ponen de manifiesto las propias capacidades para aportar al conjunto. En grupo se vive la experiencia de compartir lo aportado entre todos y todas para hacerlo propio, respetando y teniendo en cuenta, siempre, las bases democrticas de pluralidad, diferencia, libertad de opinin, etc. Derechos de los que el equipo educativo es el principal garante.
43
Relaciones intergeneracionales
Dentro de la educacin en el tiempo libre es importante el contacto humano entre todos los agentes que intervienen en el proceso: equipo educativo, grupo infantil y padres y madres. En el proyecto educativo de cada asociacin o centro se establecen unos valores a transmitir y se disean una serie de mecanismos para su consecucin. Cabe destacar que la interrelacin entre el equipo educativo y el grupo infantil es una de las mejores herramientas para conseguir los objetivos marcados. Se aprende a ser ciudadanos y ciudadanas competentes y sensibles a travs de la interrelacin con personas adultas competentes y sensibles, por ello estas ltimas no deben sentirse fuera de la promocin de la participacin de la infancia. Las personas adultas han de ser sensibles y prestar atencin para apoyar, escuchar y orientar, para saber cundo hay que hablar y cundo es mejor no hacerlo. El equipo educativo, al mismo tiempo que realiza actividades, debe estar pendiente de captar todo aquello que se desprenda de la comunicacin y la relacin con la infancia. Esta observacin en muchos casos puede facilitar el conocimiento, en grupo e individualizado, de los y las menores. Es decir, como afirma Csar Muoz, 22 el equipo educativo debe pasar "a la etapa de colaboracin-complicidad" , para lo cual es necesaria "una buena relacin". Esto es, debemos pensar ms bien en lo que los nios y las nias pueden lograr en colaboracin con quienes integran su grupo infantil (con el apoyo de las personas adultas), y dejar de pensar en la educacin como un hecho unidireccional de las personas adultas hacia quienes son ms jvenes, de ser conscientes que todos y todas tenemos una implicacin en el proceso educativo.
22
Dar poder
Creer en las posibilidades de la infancia es darle libertad. Y dar libertad es dar poder. Libertad para ser y libertad para hacer. El equipo educativo quiere que el nio o la nia lleguen a ser personas libres, y quiere que la infancia pueda hacer, transformar, experimentar... De alguna forma, se puede decir que el educador y la educadora lanzan la invitacin de llegar a ser personas que conozcan y sepan ejercer sus derechos y sus deberes, con capacidad de desarrollarse dentro de una ciudadana activa. Con todo, no podemos olvidar que es errneo discutir sobre la participacin de la infancia sin tener en cuenta las relaciones de poder, un aspecto que hay que conciliar con la necesidad de dar la oportunidad de aprender a participar, algo que se puede hacer a travs de proyectos que estn relacionados directamente con su vida. En la medida que se vayan incorporando al ejercicio de su derecho a participar en los proyectos, se ir modificando y enriqueciendo su singularidad, lo que va en beneficio de los propios proyectos y de las personas que los integran, puesto que se comparten complicidades intergeneracionales. Las relaciones que se establecen entre el grupo infantil y el equipo educativo, con el enriquecimiento de tener distintas edades, facilita que cada cual aporte sus capacidades y, muy importante, que reconozca las de las dems personas.
Claves finales
Recomendaciones prcticas para la promocin efectiva de la participacin, recogi26 das de Gerison Lansdown . - Escuchar las prioridades de la infancia. - Tener claro lo que se quiere conseguir. - Fijar claramente los lmites de la actividad propuesta. - Hacer las bsquedas necesarias. - Estar en disposicin de consultar a la infancia sobre los mtodos de participacin. - Recordar que la infancia no forma un grupo homogneo. - Destinar el tiempo que se requiera. - Disponer de los recursos necesarios. - Recordar que es importante trabajar con las personas adultas. - Estar en disposicin de recibir protestas y contestaciones. - No subestimar a la infancia. - Determinar los indicadores de los objetivos participativos de una eficaz colaboracin con la infancia. - Reconocer que cometemos errores y que nos equivocamos.
En el contexto asociativo juvenil en el que la infancia participa se desarrollan unas metodologas educativas que responden a las cuatro dimensiones de la educacin. 23 Segn el Informe Delors, "la educacin encierra un tesoro" , y, como destaca Jaume 24 Trilla , los siguientes elementos capacitan al ejercicio de la participacin: a prender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y juntas y aprender a ser. Aprender a conocer: Se requieren una serie de conocimientos e informacin para poder participar, empezando por saber que constituye un derecho. De manera que es imprescindible la formacin para tener acceso a la informacin, a saber buscar, seleccionar y elaborar el conocimiento pertinente. Es un elemento necesario para desarrollar la capacidad crtica, juzgar, valorar, tener ideas propias... Aprender a hacer: Hay que conocer las capacidades que nos permiten hacer frente a innumerables y diversas situaciones, y a trabajar en equipo, por lo que es imprescindible adquirir las habilidades, destrezas, actitudes y valores relacionados con la participacin, as como conocer sus procedimientos. Aprender a vivir juntos y juntas: Saber convivir y desarrollar la comprensin hacia las dems personas, sin olvidarnos de reconocer nuestra interdependencia -realizar proyectos comunes y prepararse para tratar los conflictos-, son centrales para una participacin que respeta los valores de pluralismo, entendimiento mutuo y paz. Aprender a ser: Adems de lo anterior, es importante fomentar el desarrollo de la propia personalidad para estar en condiciones de obrar con creciente capacidad de autonoma, de juicio y de responsabilidad personal. Aprender a ser no es otra cosa 25 que, como dice Meirieu , el desarrollo de la propia identidad, el permitir la construccin de s como ciudadano o ciudadana que ha recibido la herencia de una historia para saber qu est en juego, para comprender el presente e inventar el futuro.
45
23 24 25
Delors, Jacques: Informe Delors. La educacin encierra un tesoro. Madrid, Unesco-Santillana, 1996. Trilla, Jaume y Novella, Ana: Educacin y participacin social de la infancia. Pg. 4. Meirieu, Philippe: Frankestein educador. Lansdown, Gerison: Promoting children's participation in democratic decision-making. Florencia, UNICEF Innocenti Research Centre, 2001.
26
participado en ella. Por este motivo, hay que presentarles un boceto mnimo que puedan ir completando segn sus gustos y preferencias. De ah que se llame "propuesta de ante-proyecto". Etapas del proceso: Informacin: Informacin que damos a la infancia, y ella al equipo educativo. Este concepto ha de entenderse con ese doble sentido. Opinin: Nos interesa mucho la opinin de la infancia sobre la informacin que le damos, porque sin saber su opinin no es posible conseguir que la infancia haga suya la propuesta de ante-proyecto, para transformarla realmente en un ante-proyecto como tal y que ya no sea slo una propuesta. Porque, en definitiva, lo que nos interesa de esta etapa en que predominan los aspectos de la comunicacin es lo que los nios y las nias entienden y piensan de lo que les decimos. Por eso es tan vital garantizar el ejercicio del derecho a la opinin. Planificacin: En esta etapa de planificacin el grupo infantil hace suyo el proyecto y, por ese motivo, tambin se fijan las bases de lo que ser el proyecto, pues no hay que olvidar que trabajamos a partir de lo que la infancia quiere hacer. Es el momento de recoger sus opiniones y sus ideas sobre nuestra propuesta de anteproyecto. Es, claramente, una etapa de negociacin entre quienes componen el grupo, por un lado, y entre stos y el equipo educativo, por otro. Decisin: Despus de la negociacin se concreta un proyecto y se prepara la organizacin para llevarlo a cabo. En este momento se asumen ya las responsabilidades que todo proyecto de participacin conlleva. Gestin: Constituye el desarrollo de la accin planificada y la puesta en marcha de las actividades previstas en el proyecto. Evaluacin: Es la retroalimentacin para volver a empezar. Es una etapa fundamental porque es la que nos va a mostrar hasta dnde ha llegado el proyecto, y, desde all, continuar, avanzar, aprender...
46
47
La pregunta
Preguntar es una parte esencial de la comunicacin. Con ella avanzamos en el conocimiento de las cosas y de las dems personas. As, la pregunta nos sirve para acercarnos: establece un vnculo entre quien pregunta, la persona que responde y quienes puedan estar escuchando. Hay distintos tipos de preguntas. Con cada pregunta conseguimos resultados distintos, todos ellos necesarios para crear el clima y los canales caractersticos de cualquier comunicacin de calidad. Preguntar "engrasa" el cerebro, y una pregunta suscita otra pregunta, de esta manera vamos intercambiando informacin muy valiosa que nos permite establecer relaciones de confianza, de creatividad, de seguridad, etc. Podemos distinguir tres tipos de preguntas: Para conocer, para provocar y para apoyar. Haciendo preguntas podemos hacer una declaracin de intenciones, dejar las cosas claras, garantizar el espacio para expresar una opinin, para garantizar la informacin... Pero cuando nos comunicamos con la infancia qu lenguaje utilizamos?
Espacios de silencio
Las prisas no suelen ser buenas en los procesos educativos, por ello es conveniente estar alerta para no anticiparse, para escuchar, porque, en muchas ocasiones, para eludir los espacios de silencio, nos adelantamos y no estamos dando un tiempo quiz necesario para que hable alguien del grupo infantil. Superar la angustia que provoca el silencio nos ayudar a no atropellar con la palabra, y comprobaremos que a menudo, despus de un tiempo en silencio, se dicen cosas extraordinarias. El silencio nos permite reencontrarnos, nos permite la reflexin despus de la accin.
Investigacin Accin-Participativa
Si realmente se desea involucrar a la infancia en un proyecto de participacin debe hacerse desde su diseo. De esta premisa parte el enfoque llamado "Investigacin Accin-Participativa". Se llama as para dar a entender que son las mismas personas las que participan de la investigacin y de la accin resultante. Las principales caractersticas son: - Que la investigacin sea realizada por o con las personas involucradas. - Que quien realiza la investigacin se comprometa con la gente y con el control y anlisis que elaboren.
La propuesta de ante-proyecto
Si nos presentamos con una propuesta de participacin elaborada y terminada, el grupo infantil lo toma como algo ya decidido, y son conscientes de que no han
- Que la investigacin se inicie con un problema concreto identificado por quienes van a participan. - Que se investiguen las causas del problema. Segn R. Hart, "cuando la gente se involucra en una investigacin y en una accin que redunda en su propio inters, se anima a trabajar ms y por medio de este efec27 to acumulativo llega a encarar las barreras para su propio cambio" .
Los grupos reducidos facilitan: - La comunicacin. - Asumir responsabilidades (stas se pueden intercambiar a lo largo del tiempo, de forma que sean rotativas). - Disminuir el efecto de la presin de grupo. - Atender a cada persona de forma ms individualizada. - Sentirse ms protagonista.
La asamblea
48
Pequeas responsabilidades
Proponemos la asamblea como espacio de participacin, entendiendo por asamblea una frmula organizativa que ordena la vida en comn y que cumple, al menos, con tres funciones muy relevantes: Tener asignadas pequeas tareas o funciones que conlleven responsabilidades, por pequeas que stas sean, respecto al funcionamiento de nuestra asociacin o del proyecto en el que estemos, permite a los nios y las nias una mayor identificacin e implicacin en el trabajo que realizamos, al poder ser y sentirse imprescindibles. Asumir responsabilidades concretas rompe con la tan arraigada idea de decir: "entre todo el mundo lo haremos todo". No debemos confundir el participar por igual con un falso discurso democrtico que no lleva a ninguna parte. Para que nuestra vida en comn sea democrtica, debemos asumir funciones y responsabilidades concretas y unipersonales como una forma ms de participar. Difcilmente podremos asumir mayores responsabilidades con eficacia y solvencia sin habernos entrenado en ello previamente. En el proceso educativo de incorporacin a la vida social es muy til que las personas mayores nos encarguen y nos confen pequeas responsabilidades.
49
- Establece las reglas y las normas que van a organizar nuestra vida dentro de una sociedad (incluso las reglas de la propia asamblea). - Reparte responsabilidades individuales y colectivas para garantizar el buen funcionamiento del grupo. - En ella se discuten y deciden qu proyectos se van a llevar a cabo y, a su trmino, se proceder a la evaluacin. Como se puede ver, la asamblea es un rgano de gobierno de la vida en comn de un grupo, de una asociacin o de una colectividad. Por este motivo es un elemento bsico para el funcionamiento democrtico. En ella, en la asamblea, encontramos varias virtudes: - Se basa en el principio de igualdad. Quienes componen la asamblea tienen los mismos derechos y los mismos deberes. - Debe garantizar el derecho a poder expresarse libremente. - Nos permite incidir, mediante nuestra opinin y nuestro voto, en la toma de decisiones. - Nos llama a la auto-responsabilidad, pues se toman decisiones que nos afectan directamente. - Es fundamentalmente un ejercicio prctico de la democracia.
Grupos reducidos
En nuestra opinin, para desarrollar un proyecto lo mejor es organizarse en grupos reducidos, porque permite a sus integrantes, en nuestro caso los nios y las nias, vivir de una forma ms directa todo lo relacionado con la promocin de la participacin de la infancia.
27
Juventud de Espaa potencia el mundo asociativo infantil, pues se trata de un espacio esencial dentro de la educacin para la participacin social de los nios y las nias.
nes de infancia para promover la participacin infantil se encuentra: el apoyo a la creacin de grupos infantiles, el mantenimiento y creacin de servicios de atencin a la infancia, la formacin del equipo educativo sobre los derechos de la infancia, etc. Est claro que son ideas muy interesantes que no se desarrollan en todos los Ayuntamientos y tampoco en las Comunidades Autnomas. Si se les da una oportunidad para participar en el propio municipio, y se les pregunta cmo te gustara que fuera el parque? y el funcionamiento del transporte pblico?... ellos y ellas tienen opinin. Estas son decisiones que toma el Ayuntamiento pero que les afecta totalmente, por lo tanto tienen que ser escuchados y escuchadas. Sin embargo estas propuestas no estn en ltimo escaln de la escalera de la participacin infantil.
Nuevos espacios de participacin infantil desde la iniciativa pblica y la iniciativa social Iniciativa pblica
Consultas infantiles:
50
51
Se trata de experiencias innovadoras de ayuntamientos que fomentan la participacin de menores en el diseo y desarrollo de su plan de infancia, para lo cual es imprescindible una exposicin, discusin y valoracin de dicho plan. Slo despus de llevar a cabo esta labor el grupo infantil puede hacer propuestas.
La iniciativa social 2
Afortunadamente, cada vez hay ms entidades sociales que reconocen la importancia de trabajar con y desde la infancia, y que, con independencia de si sus objetivos se centran en la defensa de los derechos de proteccin o de promocin, estn incorporando metodologas de trabajo que permite a la infancia ejercer su derecho a la participacin. Este cambio est siendo lento porque supone tener otro punto de partida, otra perspectiva dentro de su cultura de organizacin. Ya no es suficiente hacer cosas para la infancia, se trata de hacerlas teniendo presente sus opiniones, ideas y propuestas en relacin a sus propias necesidades, es decir, escuchar las soluciones que ven a sus problemas, la manera de organizar las actuaciones que se realizan, o facilitar que lleven a cabo la organizacin de algunas de sus propuestas. Las iniciativas sociales que han sido ms pioneras en todo esto han sido los movimientos y asociaciones infantiles y los grupos de tiempo libre. Para promover y mejorar este derecho a la participacin, las lneas estratgicas de actuacin de las entidades sociales se estn orientando hacia esa direccin, que incluye: - Sensibilizar y formar a sus integrantes, a personas asalariadas y a voluntarias, sobre la participacin de los nios. Se suele hacer a travs de cursos, seminarios, jornadas - Desarrollar experiencias educativas que enseen a los nios y a las nias a participar tanto en las entidades como en otros espacios de su vida cotidiana. - Elaborar materiales y recursos educativos sobre los derechos de la infancia y la participacin. - Crear espacios de participacin infantil dentro de las organizaciones, como pueden ser los comits o consejos infantiles.
2
Una manera de recoger ideas, valoraciones y propuestas de los nios y las nias de un municipio, en relacin a los aspectos centrales de su vida: la familia, el colegio, su tiempo libre, su ciudad, etc., es a travs de diversas actividades adaptadas a cada grupo de edad. Estas actividades se realizan en una muestra representativa sobre el porcentaje del total de menores de cada municipio, y son desarrolladas por un equipo educativo en los espacios escolares y de tiempo libre. Una vez finalizada la consulta y haber recogido todos los datos y propuestas, se elabora un documento final para que el Ayuntamiento lo tenga en cuenta en la redaccin definitiva de su plan de infancia. Este proceso se cierra cuando, una vez elaborado el plan, se presenta en un lenguaje sencillo para difundirlo y que los nios conozcan lo que su Ayuntamiento va a realizar en los prximos aos. Consejos de infancia: Para continuar con este proceso, algunos ayuntamientos van ms all y estn creando los llamados consejos de infancia. Se trata de un consejo formado por un grupo de unos 15 nios y nias, entre los 7 y 15 aos, cuya funcin es velar por el cumplimiento de los compromisos adquiridos por un Ayuntamiento en su plan de infancia. Es, tambin, un grupo consultivo, que de manera mensual se rene con responsables de infancia de diferentes reas municipales para debatir sobre asuntos que afectan a la vida de los nios y nias de ese municipio. Estos consejos suelen renovarse cada dos aos, y se conforman mediante elecciones en los colegios, donde se vota, primero, dos candidaturas por centro. Ms tarde se confecciona una lista, integrada por las personas elegidas en los centros de enseanza, de la que salen quienes componen el consejo. Apoyo al asociacionismo y la formacin de profesionales: Por ltimo, entre las medidas que los ayuntamientos contemplan dentro de sus pla-
- Establecer canales de comunicacin entre menores, as como entre menores y personas adultas. Se puede realizar mediante encuentros y foros de debate, chat en internet, etc. - Sensibilizar a padres, madres y equipo educativo sobre la importancia de la participacin. Se puede hacer con campaas, escuelas de padres y madres, cursos de formacin
Se trata de algo de suma importancia porque es la manera de que la infancia tome parte en ese proceso de participacin y de que conozca las condiciones y los lmites de su participacin. Si no lo hiciramos as, estaramos trabajando en un espacio pre-participativo, pero no participativo.
53
Para hablar de este tema vamos a tomar como referencia a Jaume Trilla , del Departamento de Teora e Historia de la Educacin de la Universidad de Barcelona. Si queremos que haya realmente estos espacios de participacin, se deben generar canales, medios y metodologa que favorezcan la participacin de la infancia, y, sobre todo, que se produzca un cambio de actitud por parte de los adultos. Jaume Trilla seala tres premisas bsicas para que se conviertan en espacios reales de participacin:
28
Han de permitir actuar sobre el entorno prximo y la vida cotidiana porque son espacios conocidos y se pueden transformar perceptiblemente
Es necesario promover experiencias que permitan a los nios y a las nias aprender a intervenir y participar en su entorno ms cercano, que es sobre el que tienen la informacin suficiente, lo que les facilitar la prctica de opinar y actuar. Si las experiencias en las que se implican los nios y las nias estn basadas en su realidad ms cercana y en el entorno ms prximo, habr un clima de seguridad para participar. En este epgrafe tenemos que resaltar la importancia de los procesos de participacin infantil en las asociaciones juveniles. En este espacio son ellos y ellas quienes protagonizan la accin, conocen el funcionamiento de la asociacin y son sujetos activos de la misma. As, consideramos que las asociaciones juveniles son uno de los espacios ideales para favorecer estos procesos. Esta conclusin se ha repetido en todos los seminarios, jornadas y cursos de formacin, y a ella han llegado las personas que participaban.
En la familia
En muy pocas ocasiones se han promovido procesos de participacin de menores en el mbito de la familia, debindose impulsar, por medio de las escuelas de padres y madres de los centros educativos, asociaciones, centros de salud, etc. Est claro que es un gran reto, porque en este mbito es muy difcil intervenir y crear procesos de participacin con todas las personas que conviven en un hogar. Otro reto en este espacio de socializacin es el tiempo que la familia pasa junta. En la sociedad actual, las personas adultas pasan muchas horas en el trabajo, lo que limita que puedan disfrutar de su familia, por eso hay una menor comunicacin paterno y materno filial, lo que a su vez provoca cierta dificultad en la participacin de los nios y las nias en el seno familiar.
En la escuela
Aunque por medio de la legislacin actual sobre educacin del Estado Espaol se ha promovido este derecho, tanto en los rganos democrticos de los centros educativos como en la metodologa educativa, debemos plantearnos serios retos a la hora de afrontar la participacin infantil en la escuela: el funcionamiento de los consejos escolares, la promocin del asociacionismo estudiantil, las metodologas del profesorado a la hora de desarrollar su trabajo...
Agosto 2001.Organizacin de Estados Iberoamericanos. http://www.campus-oei.org/revista/rie26a07.PDF. 21/10/2004.
Trilla, Jaume y Novella, Ana: Educacin y participacin social de la infancia. Revista Iberoamericana. N 26. monogrfico: Sociedad educadora/Sociedade educadora. Mayo.
28
En la sociedad
Todava la sociedad no est sensibilizada sobre que la infancia ya no es objeto sino sujeto de derecho, con derecho a opinar, tomar decisiones, asociarse, etc. Por lo tanto, se deben promover medidas que sensibilicen a la sociedad en general para llevar a la prctica estos derechos, as como las responsabilidades que conllevan. De modo que es preciso concienciar a la opinin pblica para conseguir una respuesta afirmativa a la siguiente pregunta: Es interesante que los nios y las nias participen?
54 55
59
Sensibilizacin
La primera de ellas podra ser la de sensibilizar al mundo adulto en general, y en especial a las instituciones que se relacionan con la infancia, para que tengan ms en cuenta la participacin de la infancia en su funcionamiento, en sus polticas, etc.
Formacin
Lo que la experiencia nos dice es que, para tratar temas en los que la perspectiva del asociacionismo es bsica, es mejor disponer de una poltica de formacin propia, con contenidos propios y con un equipo formativo propio. Una formacin dirigida a dirigentes, formadores y formadoras de las entidades integrantes, y tambin a todas aquellas instituciones que quieran profundizar en la participacin social de la infancia.
Intercambio de experiencias
El CJE debera seguir haciendo un trabajo de investigacin sobre la participacin de la infancia, aprovechando y promocionando el intercambio de experiencias entre las entidades integrantes y estableciendo puentes de relacin y de colaboracin con otras instituciones que trabajan en el tema.
BIBLIOGRAFA CONSULTADA
Bibliografa consultada
BIBLIOGRAFA CONSULTADA
Bellamy, Carol: Estado mundial de la infancia: 2003. Nueva York, UNICEF, Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, 2002. Disponible en Internet: http://www.unicef.org/spanish/sowc03/index.html Cabayol, Anton (coord.): Projecte educatiu d'Esplac: mtode pedaggic i model de centre. Barcelona, Esplais Catalans, 2002.
62
Martn Lpez, M Teresa: La proteccin de los menores: derechos y recursos para su atencin. Madrid, Civitas, 2001. Martnez Muoz, Marta y Martnez Ten, Amparo: Participacin infantil en el tiempo libre. Reflexiones y experiencias: una mirada desde los adultos y la infancia. Madrid, Plataforma de Organizaciones de Infancia, 2000. Meirieu, Philippe: Frankestein educador. Barcelona, Laertes, 2001. Tonucci, Francesco: La ciudad de los nios: un modo nuevo de pensar la ciudad. Madrid, Fundacin Germn Snchez Ruiprez, 1998. Trilla, Jaume y Novella, Ana: Educacin y participacin social de la infancia. Revista Iberoamericana. N 26. monogrfico: Sociedad educadora/Sociedade educadora. Mayo - Agosto 2001.Organizacin de Estados Iberoamericanos. Disponible en Internet: http://www.campus-oei.org/revista/rie26a07.PDF. 21/10/2004. VV.AA: Encuentros de intercambio sobre participacin infantil: Madrid, 16 y 17 de mayo de 1998. - Madrid, Consejo de la Juventud de Espaa, rea de Infancia, 1998. Disponible en internet: http://www.cje.org/actividades.nsf/ef2e05c02233e9fdc125692b00480008/c8abb3b 6670820f6c1256ae8002e30ee/$FILE/infancia.pdf VV.AA.: Participando que es gerundio. Pautas educativas para trabajar la participacin infantil. Madrid, Consejo de la Juventud de Espaa, 1999. Disponible en Internet: http://www.cje.org/publicaciones.nsf/ef2e05c02233e9fdc125692b00480008/639c3 7708ff0ecd7c1256a25003c6a37/$FILE/infantil.pdf
63
Camps, Victoria: Virtudes pblicas. Madrid, Espasa Calpe, 2003. Cussinovich, Alejandro y Mrquez, Ana Mara: Hacia una participacin protagnica de los nios, las nias y adolescentes. Lima, Save the Children Suecia, 2002. Disponible en Internet: http://www.scslat.org/pdf/7s.zip Delors, Jacques: Informe Delors. La educacin encierra un tesoro. Madrid, Unesco-Santillana, 1996. Dez Navarro, Carmen: La oreja verde de la escuela: trabajo por proyectos y vida cotidiana en la escuela infantil. Madrid, Ediciones de la Torre, 1995. Flores, Roberto y Fernndez Tania M.: Programa la voz de la Infancia. Gua para educadores. Zaragoza, UNICEF. Edex, 2000. Fountain, Susan: Nada ms justo! Gua prctica para aprender acerca de la Convencin sobre los Derechos del Nio. Madrid, Comit Espaol del UNICEF, 1998. Freire, Paulo: Pedagoga del oprimido. Madrid, Siglo XXI, 1988. Godoy, Antonio y Franco, Pepa: Cultura participativa y asociacionismo. Madrid, Consejo de la Juventud de Espaa, 2000. Hart, A. Roger: La participacin de los nios: de la participacin simblica a la participacin autntica. Santa Fe de Bogot, UNICEF TACRO, 1993. Lansdown, Gerison: Promoting children's participation in democratic decision-making. Florencia, UNICEF Innocenti Research Centre, 2001. Martn, Carlota: La Pedagogia a esplac. Barcelona, Espai de llibertat y Fundaci Ferrer i Guardia, 1999. Disponible en Internet: http://www.laic.org/cat/espai/articles/16_03w.htm
AGRADECIMIENTOS
Agradecimientos
AGRADECIMIENTOS
En este apartado de la publicacin, el rea de infancia del Consejo de la Juventud de Espaa, y la gente que trabajamos en l, queramos agradeceros vuestra participacin, aportaciones y entusiasmo a todas las personas que habis estado implicadas, de una manera u otra, en este largo proyecto sobre la participacin infantil y adolescente, Gracias.
66
Consell de la Joventut de les Illes Balears Consejo de la Juventud de las Islas Baleares
Alfonso Molina David Snchez Crespillo Rosario Gonzlez Mejas Francesca Colle Borrs
67
Especialmente queramos dar las gracias a Sonsoles de Francisco por sus aportaciones en el anlisis del discurso; a Juan y a Cristina por ayudarnos con el tema de la bibliografa; a Paloma Abad por coordinar este proyecto; a Javier Termenon por su ilusin a la hora de dibujar "nuestra propia" escalera de la participacin, a Gemma por sus sugerencias y aportaciones ortogrficas y de inclusin de lenguaje no sexista; a Flix Ruiz, ngela Caballero, Aida Mestre, Chema Luengo y Beatriz Fernndez por ayudarnos en los primeros pasos de concrecin y definicin de contenidos; y por supuesto a los autores: David de Miguel y Xavier Bretones. y a toda la gente joven de las organizaciones juveniles que ha estado participando en reuniones de trabajo, seminarios y cursos de formacin organizados por el Consejo de la Juventud de Espaa:
Amigos de la Tierra
Noem Blanco Souto M Jos Gonzlez Ruido
Agradecimientos
69