ESCUELA NORMAL SUPERIOR PÚBLICA DEL ESTADO DE HIDALGO

OBSERVACIÓN Y PRÁCTICA DOCENTE III

ENSAYO: “EL TRABAJO DOCENTE DENTRO DE LAS AULAS DE

SECUNDARIA”

PROFR.: JORGE HERNÁNDEZ MÁRQUEZ

ALUMNO: MARCO ANTONIO BAUTISTA ÁNGELES

PACHUCA DE SOTO HIDAGO A 04 DE 09 DE 2010

 LA LABOR DOCENTE EN LA SECUNDARIA

Cuando profesor se presenta por vez primera dentro de un aula de clases

lleno de adolescentes es indispensable llevar consigo un manejo de contenidos de
la materia, proveer actividades de integración y trabajo colectivo. El hecho de
pararse frente al grupo, implica mostrar y sostener una personalidad recia,
constante y suficiente en autoridad, pero también se debe proliferar la cordialidad,
el respeto, confianza y disciplina. Con estos elementos se puede decir que el
trabajo docente arrojará buenos frutos, que son altos índices en el nivel
académico.

La práctica docente en la asignatura de matemáticas consiste en

comprender la relación existente entre el desarrollo de habilidades, actitudes y
dominio de contenidos matemáticos. Hablar de los contenidos de la materia en
especial, hago referencia a todos los temas y subtemas que integran el grado que
cursan los alumnos, que como maestros debemos indagar, conocer, manejar y
transmitir (enseñar) a todos los alumnos correspondientes. Ésta tarea no es nada
fácil ya que implica disposición y tiempo para leer los materiales impresos como
pueden ser los libros de texto, algunas revistas de consulta, información bajada de
internet o bien información extraída de otras fuentes también comunes como
pueden ser los videos, los casetos, entrevistas con personas conocedoras de la
materia, etc. y con ello integrar algunas estrategias didácticas en las que se
aborden los temas de la forma más digerible para los alumnos. Digerible en el
sentido de que se disfrute aprendiendo y de igual forma enseñando, alternando las
clases del docente por trabajos en los que los mismos alumnos aprendan de sí
mismos y de sus demás compañeros.
Estas dinámicas deben tener un enfoque y propósito para que en el momento no
se salga de control y se obtenga lo deseado, creando así también un ambiente de
armonía y agrado.

La personalidad del docente dice mucho, desde la forma de pararse, la

forma de vestir y la forma de hablar afectan de manera directa la relación que
existirá entre alumno-docente, dentro y fuera del aula de clases. Por lo anterior y
con base en lo que les ha ocurrido, incluyéndome a mi, a la mayoría de los
docentes en su primer día de clases “nos va dependiendo a cómo nos ven”.
Quiero expresar que mantener una actitud de autoridad desde el principio
sustentado en bases que el alumno no pueda negar es un buen principio.

Ya he hablado de la personalidad y de los trabajos dentro del aula de

clases, sin embargo, existe un aspecto muy fundamental que el maestro debe
(necesariamente) realizar, me refiero al ambiente de cordialidad y respeto entre
los alumnos, el maestro y el grupo en general. Éste ambiente favorece el
desempeño académico aunado con lo anterior, pero esta labor se debe predicar
con el ejemplo. El docente es quien debe dar el primer paso para que los alumnos
lo sigan de manera inconsciente. La escuela se diseña adecua para el estudiante
no el estudiante a la escuela, lo cual implica un giro total y suprimir paradigmas
que afectan la practica enseñanza – aprendizaje. Todos los rasgos que
anteriormente mencioné fortalecerá las relaciones maestro-alumno y sobre ello
poder conocer al grupo sobre un registro de actividades, valores y desempeño
académico de cada uno de ellos y ellas.
Las tareas que anteriormente he mencionado recaen en un plan de clase
con tales dimensiones, diseñando las actividades tomando en cuenta las
necesidades y fortalezas que en un momento determinado ya se conocen.

Hablar de retos dentro de la labor docente es adentrarse a un mundo lleno

de paradigmas las cuales se está en constante lucha por no seguirlos y romperlos.
Claro está que si se rompen se prosigue a construir un desempeño mejor
enfocado.
Un reto que sin duda se presenta ante la mayoría de las situaciones educativas es
la rebeldía de los adolescentes para acatar las indicaciones y/o reglamento
institucional.
Para poder afrontarlo se requiere más que disposición, se requiere entrega total al
trabajo ya que se necesita documentarse para comprender al alumno y no
cometer el error de arrojarlo a las malas conductas como el vandalismo, la
drogadicción, alcoholismo y represiones hacia el profesor.

Los alumnos de ésta etapa, son difíciles de motivar por que se encuentran
en una etapa de crisis según el autor: “los adolescente se martirizan y preocupan
por otras cosas superficiales que por la escuela y pasando a segundo término su
situación académica.
Existen más retos que como docente nos enfrentamos, crear un ambiente de
agrado ante los alumnos es difícil cuando no se cuenta con la disponibilidad de
ellos.
Es un gran reto, es difícil pero no imposible. Para ello se cuenta con un gran
respaldo que es el director de la escuela y los compañeros docentes. En
colegiados se pueden diseñar estrategias para fortalecer este aspecto y poco a
poco ir atrayendo a toda la comunidad estudiantil.

Los colegiados son para ello, para compartir estrategias y resolver los
problemas de los alumnos pertenecientes a su plantilla escolar y de tal cierta
forma llegar a conclusiones comunes. El maestro comienza así, con errores pero
que con el paso del tiempo va evitándolos y dar más de lo que ha dado a las
nuevas generaciones.

Los componentes objetivos como: las instalaciones de la escuela, material

didáctico, organización del colegio, la carga de trabajo docente, el clima de la
clase, los riesgos, los problemas de los alumnos de indisciplina, etc... Arrojan en la
mayoría de los casos una mala reputación del docente el cual se ve reflejado en
desempeño académico de los alumnos y la poco colaboración de los padres de
familia dentro de las actividades escolares, de igual manera las autoridades
educativas y la sociedad en general menosprecian el trabajo docente que sin
dudad también es responsabilidad de todo actor que interviene en el mundo
escolar.

En la mayoría de los casos las condiciones laborales dentro del centro

educativo afecta de manera directa e indirecta. En la primera surge cuando los
horarios se contraponen y roban tiempo especial a los alumnos, aunque para ellos
no es nada malo que esto suceda si afecta en el proceso enseñanza –
aprendizaje. 10 o 15 minutos diarios desperdiciados a la semana, de manera
acumulada, ya sobrepasa a una hora de tiempo desperdiciado. Otra de las
situaciones también comunes en el trabajo estudiantil son los eventos cívico-
culturales que se realizan dentro del horario de clases y que sabemos, para su
ejecución se requiere de ensayos previos y esto también implica tiempo no bien
empleado en el aprendizaje del alumno.
La distribución de las aulas y las condiciones que en ellas se manifiestan,
perjudican o benefician el desempeño académico de los alumnos. Normalmente
dentro del aula existen incomodidades desde la luz del día hasta el poco tránsito
de ventilación dentro, la organización del horario de clases, en ocasiones, no está
acorde a las condiciones. Mencionar por ejemplo el caso de las matemáticas, ya
que en las encuestas realizadas durante las prácticas y observaciones en los
semestres anteriores dieron como resultado que los alumnos no las quieren; sin
embargo, es la asignatura que se lleva a cabo después de receso, después de
educación física, cuando los alumnos se sienten exhaustos. Debería ser lo
contrario, los horarios de matemáticas podrían bien estar en la mañana cuando los
alumnos tienen la mente fresca y tranquila, cuando el cuerpo humano no hace
digestión provocando pérdidas de energías. Situaciones como estas surgen, por
mencionar otras están los talleres, la poca transversalidad para con las
asignaturas del grado. Los docentes encargados de estas asignaturas desarrollan
sus clases sin tomar en cuenta los temas que se realizan con el resto de los
docentes frente al mismo grupo.
Otra escenario en donde también se miran situaciones provocadas por la
organización dentro de la institución educativa es el uso de la sala de computo,
donde los alumnos no acuden con el afán de aprender sino con toda la intención
de despejarse un poco de las asignaturas que anteriormente han trabajado.
Si en realidad los docentes y directivos tuviesen esa coordinación de trabajo y
elaboraran previamente el vínculo entre las asignaturas existiría un buen
funcionamiento de los horarios y aprovechamiento educativo por parte de los
alumnos.
En general, las condiciones de organización, trabajo colectivo e individual
del docente afecta de forma directa e indirecta al alumno y como futuros
profesores debemos analizar cuales de esas situaciones serán convenientes para
que el desempeño académico florezca entre toda una riqueza pluricultural y sea
un sustento para subsistir dentro de la sociedad llena de retos.
 Como conclusiones, he deducido que en la práctica docente se requiere de
una amplia gama de autores que nos ayuden a comprender mejor a nuestros
alumnos y considerar las circunstancias para darle un mejor enfoque a las
actividades prediseñadas a desarrollar dentro del salón de clases. También para
crear mejores estrategias cuando se enfrenta a sucesos poco comunes o no
conocidos por el profesor que en determinado momento seremos nosotros.
Cabe mencionar que dentro de nuestro círculo profesional existe un sinfín de
herramientas en las cuales se puede recurrir, dentro de ellas se encuentra la
experiencia de nuestros compañeros docentes y maestros que hemos conocido
dentro de la carrera.
BIBLIOGRAFÍA

PLAN DE ESTUDIOS 2006. EDUCACIÓN BASICA SECUNDARIA

SEP (2000). LA ENSEÑANZA DE LAS MATEMÁTICAS EN TELESECUNDARIA I.

CONTENIDOS Y ENFOQUE. TERCER
SEMESTRE. MÉXICO: SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA.

TENTI FANFANI EMILIO (1999). “SABERES SOCIALES Y ESCOLARES” EN CERO EN

CONDUCTA (MÉXICO:
EDUCACIÓN Y CAMBIO), AÑO 14, NÚM. 19, DICIEMBRE.