Cuentos 10
Cuentos 10
Cuentos 10
NO QUIERO DORMIR
Erase una vez una niita muy traviesa llamada Helena.
Ella era muy bonita, pero no la gustaba irse a dormir
por las noches. Sus padres la obligaban a irse a dormir,
pero ella era incapaz, tanto que estuvo tres das sin
dormir, no la gustaba.
Charlotte se enoj y se fue, pero al poco tiempo recapacit y les fue a pedir disculpa a sus
vecinos y a arreglar los hechizos. Entonces sus vecinos se pusieron felices y la disculparon.
Despus de arreglarlo todo, la nia invit a Charlotte a la fiesta.
Al final Charlotte dej de hacer fichurias y consigui muchos amigos. Fue muy pero que
muuuy feliz.
Caramba, todo me sale mal! se lamenta constantemente Uga, la tortuga. Y es que no es
para menos: siempre llega tarde, es la ltima en acabar sus tareas, casi nunca consigue
premios a la rapidez y, para colmo es una dormilona.
Esto tiene que cambiar! se propuso un buen da, harta de que sus compaeros del bosque le
recriminaran por su poco esfuerzo al realizar sus tareas.
Una tortuga
Las moscas.
En un frondoso bosque, de un panal se derram una
rica y deliciosa miel, y las moscas acudieron
rpidamente y ansiosas a devorarla. Y la miel era tan
dulce y exquisita que las moscas no podan dejar de
comerlas.
Lo que no se dieron cuenta las moscas es que sus patas
se fueron prendiendo en la miel y que ya no podan
alzar el vuelo de nuevo.
A punto de ahogarse en su exquisito tesoro, las moscas
exclamaron:
- Nos morimos, desgraciadas nosotras, por quererlo
tomar todo en un instante de placer!
EL NIO Y LOS CLAVOS
Haba un nio que tena muy, pero que muy mal carcter. Un da, su padre le dio una bolsa
con clavos y le dijo que cada vez que perdiera la calma,
que l clavase un clavo en la cerca de detrs de la casa.
El primer da, el nio clav 37 clavos en la cerca. Al da
siguiente, menos, y as con los das posteriores. l nio se
iba dando cuenta que era ms fcil controlar su genio y su
mal carcter, que clavar los clavos en la cerca.
Los amigos, as como los padres y toda la familia, son verdaderas joyas a quienes hay que
valorar. Ellos te sonren y te animan a mejorar. Te escuchan, comparten una palabra de
aliento y siempre tienen su corazn abierto para recibirte.
Las palabras de su padre, as como la experiencia vivida con los clavos, hicieron con que el
nio reflexionase sobre las consecuencias de su carcter. Y colorn colorado, este cuento se
ha acabado.
FIN
la liebre y la tortuga, sobre el esfuerzo
UN CONEJO EN LA VIA
Daniel se rea dentro del auto por las gracias que haca su hermano menor, Carlos.
Iban de paseocon sus padres al Lago Rosado. All iran a nadar en sus tibias aguas y
elevaran sus nuevas cometas. Sera un da de paseo inolvidable. De pronto el coche se
detuvo con un brusco frenazo. Daniel oy a su padre exclamar con voz ronca:- Oh, mi
Dios, lo he atropellado!
El caballo y el asno
Un hombre tena un caballo y un asno. Un da que
ambos iban camino a la ciudad, el asno, sintindose
cansado, le dijo al caballo: - Toma una parte de mi
carga si te interesa mi vida. El caballo hacindose
el sordo no dijo nada y el asno cay vctima de la fatiga,
y muri all mismo. Entonces el dueo ech toda la carga
encima del caballo, incluso la piel del asno. Y el caballo,
suspirando dijo: - Qu mala suerte tengo! Por no haber
querido cargar con un ligero fardo ahora tengo que cargar
con todo, y hasta con la piel del asno encima! Cada vez
que no tiendes tu mano para ayudar a tu prjimo que
honestamente te lo pide, sin que lo notes en ese
momento, en realidad te ests perjudicando a ti mismo. Si conoces alguna otra fbula para
nios y quieres compartirla con nosotros y los dems padres, estaremos encantados de
recibirla.eral, para