Un proceso de ruptura concluye cuando se logra reencontrar la paz y agradecer lo aprendido de la relación pasada, darle reconocimiento a la importancia que tuvo y desearle lo mejor al otro para que ambos puedan seguir adelante de manera libre. Superar una ruptura requiere pasar por etapas de dolor y duelo que son necesarias para integrar la historia afectiva y aprender a amar lo imperfecto, volviéndose más compasivo.
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Un proceso de ruptura concluye cuando se logra reencontrar la paz y agradecer lo aprendido de la relación pasada, darle reconocimiento a la importancia que tuvo y desearle lo mejor al otro para que ambos puedan seguir adelante de manera libre. Superar una ruptura requiere pasar por etapas de dolor y duelo que son necesarias para integrar la historia afectiva y aprender a amar lo imperfecto, volviéndose más compasivo.
Un proceso de ruptura concluye cuando se logra reencontrar la paz y agradecer lo aprendido de la relación pasada, darle reconocimiento a la importancia que tuvo y desearle lo mejor al otro para que ambos puedan seguir adelante de manera libre. Superar una ruptura requiere pasar por etapas de dolor y duelo que son necesarias para integrar la historia afectiva y aprender a amar lo imperfecto, volviéndose más compasivo.
Un proceso de ruptura concluye cuando se logra reencontrar la paz y agradecer lo aprendido de la relación pasada, darle reconocimiento a la importancia que tuvo y desearle lo mejor al otro para que ambos puedan seguir adelante de manera libre. Superar una ruptura requiere pasar por etapas de dolor y duelo que son necesarias para integrar la historia afectiva y aprender a amar lo imperfecto, volviéndose más compasivo.
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SUPERAR EL DOLOR DE LAS RUPTURAS
En una ruptura en general y especialmente en una de pareja se ponen en marcha muchas
emociones, la mayor parte de las cuales consideramos negativas porque son difciles pero resultan imprescindibles para completar el proceso y salir fortalecidos. La ms habitual y difcil de vivir es el simple dolor de haber perdido al otro. Incluso en los casos en los que se siente una gran liberacin por salir de una situacin insatisfactoria para la persona, tarde o temprano asoma el rostro del dolor por dejar lo conocido, lo que se am y enfrentarse a algo nuevo. Afortunadamente la vivencia del dolor es un ingrediente necesario para completar con xito el proceso de una ruptura y llegar a ser capaz de crear futuro.
Cuando pasamos por una ruptura, iniciamos el proceso de duelo en el que es previsible pasar por diferentes estados o etapas que tienen unas caractersticas estudiadas. Al igual que estamos programados para vincularnos con los dems sintiendo placer y expansin tambin estn en nuestra naturaleza los mecanismos y recursos para el proceso de despegarse de una persona. Este proceso del duelo, en lugar de expansin produce retraccin y en lugar de placer, rabia, pena, culpa, estrs, etc. hasta que culmina en la alegra que regresa al final de un aciago tnel.
Se sabe que mal se construye sobre cenizas y escombros y, al contrario, se edifica bien sobre los aprendizajes anteriores, sobre la integracin nutritiva de nuestro pasado, fuera el que fuera. Eso s son buenos pilares. Por eso es tan importante integrar nuestra historia afectiva. Cmo se hace? Despus de un proceso emocional arduo, amndolo todo tal como fue, tal como ocurri, incluyendo aquello difcil y desdichado que nos toc vivir, porque de esta manera se cumple el efecto de que, amndolo, lo negativo se evapora y lo positivo se queda impregnado en nuestro corazn.
Un proceso de ruptura concluye... ... cuando reencontramos la paz y la alegra y mirando atrs logramos apreciar y agradecer lo que vivimos y aprendimos en esa relacin y podemos darle internamente las gracias a la que fue nuestra pareja por todo lo que fue posible y lo que nos aport. ... cuando podamos darle el reconocimiento que merece como una relacin importante para nuestra vida. ... cuando podamos reconocer el amor que hubo y guardarlo como un regalo. ... cuando somos capaces de dejar libre al otro y desearle lo mejor y hacernos nosotros libres y tambin desearnos lo mejor.
En definitiva el gran reto para todos es aprender a amar lo imperfecto de la vida, de nosotros y de los dems, y volvernos compasivos. Cuando esto es posible tomamos nuestros errores al servicio de la vida y de un camino feliz en pareja.