Parafrasis de Don Quijote de La Mancha

PARFRASIS DE DON QUIJOTE DE LA MANCHA.
Alonso Quijano es un hidalgo (Persona que durante la Edad Media perteneca a la pequea nobleza, era
tratada de don, posea escudo de armas y estaba exenta de pagar tributos)
de unos 50 aos, que lea tantos
libros de caballera que se volvi loco. Su sobrina y el ama de llaves de don Alonso, junto con sus amigos que son un barbero y el cura queman sus libros que son por los que ha perdido el juicio y le dicen a l que un mago los ha desaparecido. Un da, Alonso Quijano decidi que se hara caballero andante y que se llamara Don Quijote de la Mancha y su amada se llamara Dulcinea del Toboso. Un vecino suyo llamando Sancho Panza sera su fiel escudero, Don Quijote le promete hacerlo gobernador de una isla y ambos pasan por muchos problemas, para Don Quijote fueron grandes aventuras. Don Quijote demuestra que est loco en muchas ocasiones como por ejemplo cuando ataca unos molinos de viento (son mquinas, artefactos mecnicos cuyo fin es aprovechar la energa del viento) pensando que son unos grandes gigantes, cuando ataca unos frailes que llevan una dama pensando que son unos secuestradores, cuando ataca un rebao de ovejas pensando que es un inmenso ejrcito, cuando deja libres unos galeotes(esclavos, presos), cuando se pone un yelmo en la cabeza (elemento de la armadura que protege la cabeza) pensando que es un sombrero, etc.
Un da Don Quijote pide a su acompaante Sancho Panza que le lleve una carta a Dulcinea, y Sancho se encuentra con los amigos de Don Quijote, el barbero y el cura que quieren que Don Quijote regrese a su casa, entonces una mujer se hace pasar por una princesa que quiere que mate a un gigante, Don Quijote cae en la trampa y es enjaulado y es llevado hasta su casa. Paralelamente otro escritor llamado Avalleneda escribe otra segunda parte falsa del Quijote.
Don Quijote y Sancho salen de nuevo esta vez se dirigen el Toboso a buscar el palacio de Dulcinea pero no lo encuentran ya que no existe, Sancho empieza a engaar a su amo en alguna ocasin como en el fragmento de las labradoras, que hace pasar una de ellas por Dulcinea.
Un amigo de Don Quijote llamado el Bachiller Carrasco sale a buscarle para devolverlo a su casa y se hace pasar por el caballero del Bosque que reta a Don Quijote en sierra Morena provocndolo dicindole que l ya le ha vencido, pero Don Quijote le gana.
Ms adelante unos duques se quieren rer de Don Quijote y de Sancho y les dicen que una princesa est encantada y para desencantarla tienen que subir a un caballo de madera volador. Despus de esto para burlarse de Sancho le dan una isla para gobernar que se llama Barataria y Don Quijote, para ayudarle, le recomienda que no diga refranes ya que muchos son disparates, que sea limpio entra otras cosas y que no coma ajos ni cebollas.
Lo primero que le hacen a Sancho es que presida un juicio entre dos personas y despus lo llevan al palacio para comer, pero un mdico que cuida por su salud no le deja comer los platos ya que le pueden hacer dao, y para terminar de humillar a Sancho le dicen que su nsula(isla) ser atacada, pero como que est harto de ser gobernador decide marcharse e ir a buscar a su amo, Don Quijote.
Cuando ha encontrado a su amo, se dirigen hasta Zaragoza y descansan en una venta donde escuchan que estn leyendo la segunda parte falsa del Quijote escrita por Avalleneda. Don Quijote se enfada mucho ya que el libro dice que l ya no est enamorado de Dulcinea y tambin que el libro est escrito en dialecto aragons y decide que no ir a Zaragoza sino a Barcelona.
Cuando est en Barcelona se encuentra el caballero de la blanca Luna y le reta a una lucha, Don Quijote pierde y es condenado a retirarse durante un ao, el caballero de la blanca Luna resulta ser el Bachiller Carrasco un amigo de Don Quijote que lo quiere devolver a su casa, es la segunda vez que lo intenta.
La primera vez se hizo pasar por el caballero del bosque, pero perdi. Ya en su casa Don Quijote est muy enfermo y dice que l estuvo loco hacindose caballero andante y tambin critica los libros de caballera, sus ltimas palabras fueron, ahora ya no soy Don Quijote ahora soy Alonso Quijano y se muri.
LA EXTRAA MISA DEL CARMEN
Hace mucho tiempo, en la Iglesia de la Virgen del Carmen, ubicada en San Cristbal de Las Casas, sucedi un caso real que a continuacin voy a contarles. Como a cuatro cuadras de esta casa de Dios, viva una seora que tena 50 aos de edad, se llamaba Mara Josefina, era muy catlica, ella ayudaba mucho a los pobres. Esta seora no tena problemas econmicos pues su difunto esposo le haba dejado suficiente dinero. Viva en una antigua casona, el piso de esta casa era de ladrillo, el techo de madera y encima tejas, el patio era muy amplio y lleno de flores, en el centro del patio haba una hermosa fuente colonial. Pues bien, esta seora tena la costumbre de asistir diariamente a la misa de las cinco de la maana a la Iglesia del Carmen, jams Doa Mara Josefina dejaba de cumplir con la obligacin de ir diariamente a misa. Siempre al regresar se tomaba un vaso de caf muy sabroso, acompaado de unos ricos panecillos. Despus de esto se pona a hacer sus quehaceres domsticos. En cierta ocasin, escuch el toque de las campanas llamando a misa a los catlicos, rpidamente comenz a vestirse, tom su pequeo libro de rezo y la llave de su puerta de la calle. Minutos ms tarde iba ya en la calle que actualmente ocupa la biblioteca municipal y el parque del templo del Carmen, sigui caminando hasta llegar a la gran puerta lateral del templo, despus de entrar, Doa Mara Josefina se hinc y se persign. El alumbrado, como de costumbre, era muy claro y todas las bancas estaban ocupadas por los fieles, haba un gran silencio. Despus de hincarse, doa Mara Josefina se sent en una banca y abriendo su libro de rezo comenz a rezar, pero de pronto sinti un escalofri. Entrecerr su libro y levantando con miedo la vista se dio cuenta de algo que la lleno de miedo y asombro, todos los que estaban en la misa y sentados en las bancas estaban descabezados! Y la mayora de ellos llevaban tnicas. Sinti que su corazn iba a dejar de latir ante lo que estaba viendo con terror, en esos momentos apareci el sacerdote que iba a dar misa, pero Tampoco tena cabeza!. De pronto sinti una mano que se posaba suavemente sobre su hombro y al voltear la cabeza para ver de quien se trataba, fue an ms el terror que sinti, era un fraile, sinti la mano cada vez mas pesada y en esos momentos el fraile con voz ronca dijo: ESTA MISA NO ES PARA VIVOS, es para difuntos, despus de esto, desapareci. En ese momento Doa Josefina dej de sentir la mano sobre su hombro y esto le dio fuerzas para que con gran esfuerzo se pusiera de pie y sin voltear a ver las otras bancas, lentamente
empez a caminar pues el miedo no le permita caminar rpido, fue dando sus pasos hacia la salida llegando hasta la puerta de salida. Lentamente y con mucho trabajo atraves el pequeo parque, cruzando la calle empezaron a sonar las campanadas del reloj cercano del palacio municipal, sin saber porqu comenz a contar las campanadas y dieron exactamente las doce de la noche. Doa Mara Josefina haba pensado que era la misa de las cinco de la maana, pero se haba equivocado, eran las doce de la noche!.

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