Diseño Inteligente
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John C. Walton
El debate actual en torno al diseo inteligente (DI) es de naturaleza ideolgica, ya que los evolucionistas procuran mantener la hegemona de la cosmovisin atesta.
contradictorias.1 Sin embargo, era de esperar que la paradoja resultante de la divergencia filosfica entre la tecnologa basada en el diseo y la biologa evolucionista produjera un despertar del razonamiento de mentes analticas.
Los logros en materia de diseo son quiz la caracterstica ms sobresaliente de nuestra poca. Molculas y materia son combinadas para formar diseos sumamente originales y tiles. Se proyectan lneas de produccin robotizadas para fabricar vehculos en serie, eficiente y rpidamente. Medicamentos y refinados mtodos de diagnstico han transformado la medicina. El logro ms sorprendente en materia de diseo es el de los microchips de silicio, que han facilitado la comunicacin global. Es una irona que mientras la tecnologa obra maravillas como fruto de este auge del diseo inteligente, muchas personas influenciadas por los bilogos evolucionistas estn convencidas de que no hubo un diseo inteligente en el origen de las complejas estructuras del mundo biolgico y natural. Aun cuando las clulas han sido reiteradamente descriptas como fbricas en miniatura, estas personas sostienen que su existencia no se debe a un proyecto inteligente. Es bien sabido que el cido desoxirribonucleico (ADN) consiste en un cdigo con una maquinaria molecular de rplica, pero ellos pretenden que no hizo falta ningn criptgrafo. El cerebro, habitualmente descrito como una computadora, supuestamente habra surgido sin que estuvieran involucrados ni programadores ni ingenieros. Esta sucesin de rpidos cambios en el plano material nos han acostumbrado a convivir con eventos inexplicables o aparentemente ilgicos. Lewis Carroll resumi correctamente la vida moderna de esta forma: A veces ya antes de desayunar he credo seis cosas
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Los desafos a la evolucin han surgido repetidas veces y finalmente fueron puestos sobre el tapete a comienzos de 1990 por Phillip Johnson, profesor de derecho en la Universidad de California en Berkeley. En su anlisis incisivo sobre los orgenes de la vida present argumentos bastante convincentes de que la teora evolucionista darwiniana no tiene respaldo en evidencias paleontolgicas ni en datos empricos de la biologa.2 El argumento central de Johnson es que el edificio darwiniano est fundamentado en los supuestos materialistas del naturalismo filosfico.3 Los cientficos que estudian los orgenes insisten en que se puede aceptar nicamente el azar y las leyes de la naturaleza para explicar el surgimiento de la vida. Cualquier interpretacin que se aparte de este estrecho margen es automticamente rechazada como no cientfica, o bien se la seala como supersticiosa. El desafo se intensific con la publicacin del libro La caja negra de Darwin4 del bioqumico de la Universidad de Lehigh (Pensilvania, EE.UU.), Michael Behe. Sistemas biolgicos como la cadena de reacciones de la visin, los cilios celulares y los flagelos bacterianos requieren gran complejidad y coordinacin molecular. Behe demostr que tales mquinas moleculares poseen una complejidad irreducible. Rastre la literatura en busca de escenarios evolutivos que explicasen su origen, pero slo encontr muy pocos ejemplos y, adems, totalmente inadecuados. Entonces declar que estos mecanismos biolgicos son evidencias poderosas de un diseo inteligente en la biologa. Es posible determinar si algo real-
mente fue diseado o si meramente parece diseado? El matemtico y filsofo William Dembski seala que detectar si algo ha sido diseado es una actividad cientfica bien establecida en reas tales como la ciencia forense, la arqueologa y la criptologa. Los mtodos empleados para discernir entre una actividad criminal y una accidental, o para diferenciar artefactos de objetos naturales y para decodificar mensajes deberan poderse aplicar tambin a las estructuras biolgicas y a los acontecimientos naturales. El criterio objetivo de Dembski para identificar el diseo genuino y diferenciarlo de los efectos de causas naturales se denomina complejidad especfica.5 Cuando se aplica a ciertos fenmenos biolgicos complejos, el criterio coincide muy bien con la conclusin de Behe de que sus orgenes implican un diseo inteligente.6 El movimiento de DI que tuvo origen a partir de estas consideraciones est despertando inters alrededor del mundo. Las ideas acerca del DI estn siendo diseminadas por el Centro de Ciencia y Cultura del Discovery Institute.7 La gran repercusin en los medios acerca de un juicio relacionado al DI en la corte de Pensilvania y el documental televisivo de la BBC acerca del DI en el Reino Unido han logrado que este tema llegue al pblico general.8
Como era de prever, los cientficos de disciplinas evolucionistas se han opuesto rotundamente al DI y la vieja escuela materialista rechaza estas ideas usando todos los medios a su alcance. Dos ejemplos: desde la Universidad de Oxford el profesor de qumica Peter Atkins critic duramente el libro de Behe en una publicacin9 y lo mismo sucedi en un artculo aparecido en Guardian, escrito por los evolucionistas Richard Dawkins y Jerry Coyne.10 La crtica corrosiva no es usual entre los cientficos serios, por lo tanto el hecho de que en este caso s est ocurriendo
revela que hay una motivacin ideolgica muy poderosa. Muchos evolucionistas son miembros militantes de organizaciones ateas y/o humanistas. Tal es el caso de Dawkins, quien expuso claramente su compromiso emocional con el atesmo en una serie televisiva acerca de la religin, a la que calific la raz de toda la maldad.
Es cierto que ha habido ciertas crticas coherentes del DI. Algunas fueron presentadas por Dawkins y Coyne en su artculo del Guardian en el que dicen: No hay nada de nuevo acerca del DI. Es simple creacionismo camuflado bajo un nuevo nombre. Otros sugieren que el DI es una forma de conspiracin religiosa. Los propulsores del DI, por su parte, sostienen que es una bsqueda cientfica que investiga el efecto de causas inteligentes. Para Dembski, el propsito del DI es rehabilitar el diseo como una forma de explicacin cientfica. Meyer escribi: La pregunta que hay que plantearse respecto al origen de la vida no es qu escenario materialista parece ms adecuado sino qu fue lo que produjo el surgimiento de la vida en la tierra.11 El criterio de complejidad especfica, utilizado para decidir si algo ha sido diseado, no hace referencia a libros sagrados y es independiente de cualquier autoridad religiosa. Las connotaciones religiosas son inevitables para cualquier intento de indagar acerca de los orgenes. A cada acusacin de agenda religiosa que se lanza contra la ciencia del DI es posible responder con una cantidad similar de hiptesis que podran atribuirse a una agenda atesta. Las explicaciones evolucionistas acerca de los orgenes, perdidas en las brumas del precmbrico e imposibles de explicar, tambin reflejan los anhelos humanistas, sin proveer las evidencias necesarias. Quienes buscan la verdad deberan ignorar tales argumentos y evaluar cuidadosamente las evidencias que presentan ambos bandos.
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Al comienzo de su artculo, Dawkins y Coyne dicen: Por qu estamos seguros que el DI no es una teora cientfica slida, digna de una evaluacin equilibrada? No es meramente nuestra opinin personal? Por el contrario, es una opinin compartida por la vasta mayora de los bilogos profesionales. Si el DI fuese realmente una teora cientfica, las evidencias a su favor, acumuladas mediante investigaciones, estaran siendo divulgadas por revistas cientficas que provienen de revisiones crticas por los pares. Sin embargo, eso no est sucediendo y no es porque los editores se nieguen a publicar investigaciones de DI. Sin embargo, para los naturalistas materialistas la verdadera ciencia slo admite como causas vlidas el azar y la necesidad. Dawkins y sus colegas evolucionistas automticamente descartan el DI por razones ideolgicas y consideran al anlisis de la evidencia como una prdida de tiempo. Muchos bilogos profesionales trabajan en institutos de Biologa evolucionista o alguna variante de este nombre. Los fondos que financian las investigaciones, los salarios, las carreras, la reputacin profesional de todos estos cientficos dependen de su adhesin a la teora de la evolucin. En estas circunstancias, la objetividad en cuestiones relacionadas a los orgenes no es una opcin. La opinin de la mayora cientfica es un parmetro muy inseguro para determinar la validez del DI. No sorprende que el DI no reciba eco en las principales publicaciones cientficas ya que, contrariamente a la afirmacin de Dawkins y Coyne, los editores siempre se rehsan a publicar artculos sobre el tema. Cuando el Dr. Richard Sternberg, editor de los Proceedings of the Biological Society of Washington, public un nico artculo del cientfico Stephen Meyer, formado en la Universidad de Cambridge y que sostena las ideas del DI, inmediatamente se convirti en blanco de una campaa para ridiculizarlo e intimidarlo. Decan que me dej sobornar con
dinero, que era un sacerdote camuflado, que era un infiltrado enviado por los creacionistas, dice Sternberg. Incluso le aconsejaron no asistir a un encuentro de una sociedad biolgica, porque los nimos estaban tan acalorados que no se podra asegurar que habra orden si l estaba presente. La Oficina de Consejo Especial de los Estados Unidos examin el intercambio de email que sala del Smithsonian Institute, donde Sternberg trabajaba, e inform que la revancha se efectu de diversas maneras.... Se difundieron calumnias [contra Sternberg] a travs del Smithsonian y hacia otros individuos. Posteriormente se descubri que las acusaciones en su contra eran falsas.12 Los editores y revisores son muy conscientes de la intimidacin que van a tener que enfrentar, y por eso es comprensible que se abstengan de publicar artculos que apoyen el DI. Es irnico que Dawkins denigre al DI porque sus seguidores evaden el proceso cientfico normal apelando directamente al pblico no cientfico cuando ste es el mtodo que l adopta. Su principal contribucin a la ciencia es una serie de libros dirigida al pblico general acerca del evolucionismo. Dawkins es sucesor de varios evolucionistas, incluyendo a Charles Darwin, Thomas Huxley y Stephen Gould, que han apelado directamente al pblico no cientfico por medio de libros y artculos populares.
De acuerdo a Dawkins y Coyne, los proponentes del DI tienen exigencias irrazonables: A un bando (los evolucionistas) se le exige presentar evidencias para cada etapa del proceso. Al otro bando nunca se le exige presentar evidencia, sino que se lo declara vencedor del debate tan pronto como el primer bando encuentra una dificultad, es decir, el tipo de dificultades que en el mbito de las ciencias se encuentran diariamente y a las cuales se buscan soluciones. Por ms de un siglo los
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cientficos han estado prometiendo que la evidencia de laboratorio pronto producira respuestas convincentes para las encrucijadas bsicas de la evolucin tales como el mecanismo cuantitativo requerido para el cambio evolutivo; cmo se origin la vida; cmo surgieron el cdigo gentico y la nueva informacin gentica; el origen de un solo estereoismero en los pptidos; el origen de rganos biolgicos complejos como los ojos, las cilias, los flagelos, etc.; cmo se desarrollaron nuevas especies biolgicas a partir de formas ancestrales y por qu los restos fsiles no muestran las innumerables formas de transicin que Darwin esperaba. Los cientficos que apoyan el DI reconocen el gran avance que han hecho los bilogos en entender cmo han ocurrido cambios pequeos o cmo se producen nuevas variedades de animales o plantas, es decir, la microevolucin. Los evolucionistas aseguran que los grandes pasos hacia nuevas estructuras (macroevolucin) consisten en la suma de pequeos pasos. Sin embargo, despus de ms de un siglo, la evidencia experimental an no ha sido presentada; los registros fsiles sacan a luz grandes problemas y se ofrecen nicamente explicaciones o escenarios fantasiosos. Los cientficos partidarios del DI sostienen que lleg el momento de examinar otras explicaciones en las cuales el diseo sea evaluado a la par de las causas naturales. El ahnco con el cual los cientficos trabajan para resolver problemas relacionados con los orgenes de la vida podra beneficiarse si se sumase el criterio de DI a su arsenal de herramientas cientficas. Los crticos arguyen que la ciencia del DI se apoya en milagros y temen que esto pueda daar el espritu indagador de la ciencia. Las experiencias del pasado demuestran que no hay necesidad de preocuparse por esto. La mayor parte de la labor cientfica continuara exactamente como en el presente. En la investigacin del origen de organelas biolgicas complejas (y sistemas complicados en otras partes del universo),
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el filtro de complejidad especfica sera usado conjuntamente con otras herramientas cientficas para entender los organismos vivos, incluyendo los seres humanos. En vez de reprimir la bsqueda cientfica, la existencia de diseo en el universo abre nuevos horizontes para que los fenmenos sean comprensibles. Si se llega a la conclusin de que un diseador inteligente (o Dios mismo) planific un organismo, esto permitir comprender y utilizar ventajosamente ese concepto. La existencia de diseo en la naturaleza no implica que constantemente ocurran milagros que intervendran de manera arbitraria, transgrediendo leyes naturales. Al disear una mquina compleja usando la inteligencia humana, no se contravienen las leyes naturales sino que se las utiliza. La creacin de una computadora, por ejemplo, demanda que se ordene la materia de una forma determinada y se la dote de informacin para as crear un objeto muy complejo que tendra poca probabilidad de surgir por casualidad.13 La evidencia de diseo en la naturaleza puede comprenderse de la misma forma en que se entienden los instrumentos diseados por el hombre. Las convicciones religiosas no impidieron que cientficos de primera lnea como Isaac Newton, Louis Pasteur o James Clerk Maxwell hiciesen importantes descubrimientos; tampoco se interponen a los descubrimientos de muchos cientficos creyentes modernos. Ms bien, estas creencias refuerzan la idea de que los fenmenos naturales son comprensibles e impulsan proyectos permitiendo su utilizacin.
grande es esta exageracin, particularmente en las reas biolgicas donde se discuten fenmenos cuantitativos. Recientemente Peter Atkins public un libro de texto titulado Physical Chemistry for the Life Sciences.14 En esta rea de la ciencia encontramos leyes y principios que sirven de fundamento para la biologa. El hecho de que en el libro no se encuentre ni siquiera una referencia a la evolucin evidencia que sta es una postura ideolgica y no una realidad cientfica. Por su parte, Dawkins y Coyne nos aseguran: El flagelo de las bacterias no es demasiado complejo como para haber evolucionado, as como cualquier otra estructura que haya sido cuidadosamente estudiada. Los bilogos han localizado una serie de pasos intermedios plausibles, que utilizan ingredientes que se pueden encontrar en otros sistemas vivos.10 Estas afirmaciones son simplemente ilusiones. Tal vez podra localizarse una serie de pasos intermediarios plausibles en un escenario imaginario. La imaginacin cientfica no conoce lmites! Pero el cuadro que pinta la evolucin en esta rea de la ciencia carece de ideas concretas y evidencias sustanciales. El anuncio de Kenneth Miller del colapso del concepto de la complejidad irreducible15 termin siendo meras palabras. Su argumento es que, por ejemplo, aunque no se pueda llegar al flagelo por una va darwiniana directa, las protenas que lo componen pueden haber sido preservadas por seleccin natural en sistemas menores que tienen otras funciones. Esta hiptesis implica que estas protenas especficas (o algunas muy similares) se encontraran esparcidas en otros sistemas bioqumicos que estaran accesibles a la bacteria. Si este escenario fuese vlido, las mismas protenas se reconoceran fcilmente en sus localizaciones alternativas y la literatura cientfica estara llena de vas evolucionistas plausibles para el flagelo y otras maquinarias bioContina en la pgina 8
El diseo
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John Walton (D.Sc., Sheffield University; Ph.D., Saint Andrews University) es profesor de qumica reactiva en la Saint Andrews University, Reino Unido. Email: [email protected].
Segn Dawkins y Coyne, La evolucin es un hecho, tan real como las placas tectnicas o el sistema solar heliocntrico. Esta afirmacin se ha convertido en el estribillo de los darwinistas ortodoxos. En diversos contextos, evolucin significa simplemente cambio y quin negara la existencia de cambios en el mundo natural? Hay mucha evidencia de que la microevolucin ocurre. Todos estn de acuerdo en que la evolucin del pico de los pjaros pinzones o la aparicin de resistencia entre las bacterias son hechos reales. Por ms de 100 aos la ciencia se ha esforzado por demostrar que el azar unido a las leyes naturales explican el origen de todo lo que existe. A pesar del enorme y sostenido esfuerzo, las propuestas evolucionistas para explicar el origen de la vida, de las estructuras irreductiblemente complejas y del cdigo gentico siguen siendo especulativas y carentes de evidencias concretas. El debate en torno al DI no se libra entre hechos cientficos y creencias religiosas. El verdadero enfrentamiento es de tipo ideolgico, en el cual los cientficos tratan de mantener la hegemona intelectual y cultural de la cosmovisin atesta. El objetivo primario del movimiento del DI es establecer el diseo como un factor bsico en el mundo natural que, junto con el azar y las leyes naturales, permite comprender el origen de las estructuras biolgicas complejas. Hay indicios animadores de que una nueva generacin, escptica ante los estribillos darwinistas, est reconociendo al DI como una propuesta razonable y bien fundamentada.
REFERENCIAS
1. Esta es una referencia ligeramente modificada. En realidad Carroll dijo, A veces he credo seis cosas imposibles antes de desayunar. 2. Phillip E. Johnson, Darwin on Trial, 2da edicin (Downers Grove, Illinois: InterVarsity Press, 1993). 3. El naturalismo filosfico es la idea de que nada existe ms all de el mundo espacio-temporal de entidades fsicas que podemos investigar en las ciencias naturales. Ver M. J. Wilkins y J. P. Moreland en Jesus Under Fire (Grand Rapids, Michigan: Zondervan, 1995). 4. Michael Behe, Darwins Black Box (New York: Free Press, 1996). 5. William A. Dembski, The Design Revolution (Downers Grove, Illinois: InterVarsity Press, 2004); The Design Inference: Eliminating Chance Through Small Probabilities (Cambridge University Press, 1998). 6. William A. Dembski, editor, Uncommon Dissent: Intellectuals Who Find Darwinism Unconvincing (Wilmington, Delaware: ISI Books, 2004). 7. The Discovery Institute, Center for Science and Culture, Seattle, http://www.discovery.org/csc/ Ver tambin la pgina de internet de Dembski relacionada al Diseo Inferido: http://www.designinference. com/. 8. Para un resumen, ver http://www.bbc.co.uk/sn/tvradio/programmes/horizon/index.shtml. 9. Peter W. Atkins, http://www.infidels.org/library/ modern/peter_atkins/behe.html. 10. Richard Dawkins y Jerry Coyne, One Side Can Be Wrong, www.guardian.co.uk/life/feature/ story/0,13026,1559743,00.html. 11. Stephen C. Meyer en Science and Evidence for Design in Nature, M. J. Behe, W. A. Dembski y S. C. Meyer, editores (San Francisco, California: Ignatius Press, 2000), p. 53. 12. Ver http://www.rsternberg.net/ para leer la crnica del propio Sternberg. 13. Ver Dembski, The Design Revolution, c. 24, p. 183 para ms detalles. 14. Peter W. Atkins y J. de Paula, Physical Chemistry for the Life Sciences (Oxford University Press, 2006). 15. Kenneth R. Miller, The Flagellum Unspun en Debating Design: from Darwin to DNA, editors W. A. Dembski y M. Ruse, (New York: Cambridge University Press, 2004). Ver tambin: K. R. Miller, http://www.millerandlevine.com/km/evol/design2 article.html.
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