Maravillas del crepúsculo
Por Sjón
3/5
()
Información de este libro electrónico
Corre el año 1635, la tierra sigue estando en el centro del universo, los cuernos de unicornio son un cotizado artículo de lujo y las piedras se usan para curar enfermedades. El escritor y escultor Jónas Pálmason el Erudito, es condenado por propagar la magia y desterrado a la isla de Björn el del Oro.
La novela se construye sobre la vida y las ideas de aquel islandés autodidacta al que se puede considerar la encarnación del siglo XVII. Sjón narra, entre otras muchas cosas, las consecuencias más lamentables de la Reforma Protestante, el heroico exorcismo de un fantasma en la comarca de Snjáfallaströnd, el culto secreto a la Virgen María, y el asesinato de unos balleneros vascos que naufragaron en los fiordos occidentales y, después de vivir un tiempo en la zona, fueron asesinados sin que se sepa bien la causa exacta. Fue la matanza más grande que tuvo lugar en Islandia desde la Edad Media hasta hoy mismo.
En su islote, Jónas rememora su vida y el lector lo acompaña en las tormentas del corazón y la mente durante los tiempos de las maravillas del crepúsculo.
"Maravillas del crepúsculo es una lectura deliciosa, accesible a todos los lectores. El relato es emocionante y universal, solamente el dolor del trasero por pasar tanto rato sentado logrará hacerte levantar. ¡Feliz diversión!"
Sigurður Hróarsson, Fréttablaðið
Sjón
Born in Reykjavik in 1962, Sjón is a celebrated Icelandic novelist. He won the Nordic Council's Literary Prize for The Blue Fox (the Nordic countries' equivalent of the Man Booker Prize) and From the Mouth of the Whale was shortlisted for the International IMPAC Dublin Literary Award and the Independent Foreign Fiction Prize. His latest novel Moonstone -The Boy Who Never Was was awarded the 2013 Icelandic Literary Prize. Also a poet, librettist and lyricist, Sjón has written nine poetry collections, four opera librettos and lyrics for various artists. In 2001 he was nominated for an Oscar for his lyrics in the film Dancer in the Dark. Sjón’s novels have been published in thirty-five languages.
Relacionado con Maravillas del crepúsculo
Libros electrónicos relacionados
Más allá del mar de las tinieblas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRatas en el alféizar Calificación: 4 de 5 estrellas4/5MEJORES CUENTOS ALEMANES Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesArrepentimientos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa visita del médico de cámara Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl zorro ártico Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Viaje sentimental Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAhora y en la hora de nuestra muerte: Ultimos rescoldos de unas vidas que se apagan Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Espejismo 38: (El club de los miércoles) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesQuédate donde estás Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTelefónica Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La biblioteca del Capitán Nemo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTravelling Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAutobiografía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAbdías Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPaseando con hombres Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVerano en los lagos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl cuarto de las estrellas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La habitación muda Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Odio la playa Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTú también vencerás Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa casa del mirador ciego Calificación: 4 de 5 estrellas4/5No os recuerdo: Biografía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEn La Orilla Salvaje: Clásicas Novelas Rusas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTuyo es el mañana Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos poderosos lo quieren todo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Ficción literaria para usted
El Idiota Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Don Quijote de la Mancha Calificación: 5 de 5 estrellas5/5To Kill a Mockingbird \ Matar a un ruiseñor (Spanish edition) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Orgullo y prejuicio: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Viejo y El Mar (Spanish Edition) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Libro del desasosiego Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Trilogía Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Noches Blancas Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El otro nombre . Septología I: Septología I Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Las olas Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Nagori: La nostalgia por la estación que termina Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cometierra Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La casa encantada y otros cuentos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La caída de la Casa Usher Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Juego De Los Abalorios Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La mujer helada Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La chica salvaje Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La paciencia del agua sobre cada piedra Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Todo el mundo sabe que tu madre es una bruja Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Erótico y sexo - "Me encantan las historias eróticas": Historias eróticas Novela erótica Romance erótico sin censura español Calificación: 3 de 5 estrellas3/5La vida tranquila Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Carta de una desconocida Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El retrato de Dorian Gray: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Punto de cruz Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Oso Calificación: 4 de 5 estrellas4/5
Categorías relacionadas
Comentarios para Maravillas del crepúsculo
86 clasificaciones15 comentarios
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5It took a few attempts to really get into this story and in the end I am glad that I finished. There is a lot going on and so it is not a book that one can easily skim through. Jonas is a man exiled to a remote, barren island and the story is his thoughts on what occurred to bring him there. It is not an easy novel but if you are wiling to dig deep into the story, there is a thread of hope running through it.
- Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Abandoned at page 51: I just don't care how it turns out.
- Calificación: 2 de 5 estrellas2/5I wanted to like this book, the writing is beautiful, but I just disliked the main character too much. He's really douchy, and that ruined it for me. The first scene about lucifer was the best part. Couldn't get past the halfway point though.
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5It took a few attempts to really get into this story and in the end I am glad that I finished. There is a lot going on and so it is not a book that one can easily skim through. Jonas is a man exiled to a remote, barren island and the story is his thoughts on what occurred to bring him there. It is not an easy novel but if you are wiling to dig deep into the story, there is a thread of hope running through it.
- Calificación: 3 de 5 estrellas3/5The rhythm of Sjon's stream of consciousness style was a bit enchanting. The story of a man being persecuted for attempting to understand the workings of the world always needs to be told.
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5I get very annoyed with all those TV shows set in the Middle Ages that are full of clean bodies, white teeth, dust-free floors and brightly-lit rooms. This is not a problem that From the Mouth of the Whale suffers from. Its appeal lies primarily in the dirt under its fingernails; it revels in the mess and violence and, also, the transcendence of its pre-modern milieu. It's a novel that smells of unwashed bodies and sea-salt.We're shown this world through the travels, visions and tribulations of Jónas Pálmason, a scholar-cum-magician-cum-natural-philosopher in seventeenth-century Iceland – ‘this unlovely splat of lava in the far north of the globe,’ as he calls it. Exiled by his political enemies to a remote uninhabited island off the coast (all islands are off the coast, Warwick), he reminisces about his life, research and the metaphysics of this worldly existence.Importunate with his own kind, garrulous with others…So might one describe the purple sandpiper and so men describe me…This is Jónas's voice – gruff and wordy and distinctive, marked by blurry, shifting thought processes and studded with practical knowledge, with flora and fauna, and with a worldview of almost Cabbalistic mysticism.Jónas is a fictional creation, but the quote above, where he compares himself to a purple sandpiper, is a clue to his real-life model, Jón Guðmundsson ‘The Learned’ (1574–1651). The old name in Icelandic for a purple sandpiper is fjölmóður, which was also the name of an epic poem that Jón wrote about his life. I can't find an English translation but it seems to have included major stories from this book including the exorcism of a ghost and the coming of Basque ships to Iceland; in a sense, this may be seen as a kind of expansive novelisation of Jón's poem.The real star of the English version of this book is its translator Victoria Cribb, who has produced something that feels natural and yet genuinely odd in all the right ways. An Old Norse scholar, she has said in interviews that she's not very comfortable translating most modern fiction and isn't sure of what the English terms are for a lot of social media or technology vocab. But here, in a world of old manuscripts, fishing traditions and magico-scientific theorising, she is clearly in her element.Though short, it's a thick, silty book that I felt I could wade right into; at the start I loved the experience, but I did find it a little exhausting towards the end just because there is not a lot in the way of plot to give the narrative focus. Rather, it expands in different directions according to occult criteria, its chief objective, perhaps, not to give shape to a story but to find formal connections between disparate parts of the world:The antlers of a hart, coral, spread fingers, birch twigs, a loosely knotted fishing net, crystals, river deltas, ivy, mackerel clouds, women's hair…diverse as these phenomena are, they all revolve around the invisible joints, their opposite forms touch even though they are far apart…It's a strange, windswept, mind-expanding little book, and I'd recommend it to anyone looking for a short but bracing read.
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5FROM MOUTH OF THE WHALEBY SJONAn Icelandic tale that takes place in the mid 1600’s. This is the story of one Jonas Palmason who lives an extraordinary life of tragedy, magic, torture and travail. His innate knowledge of the natural world gives him unique insight into the very essence of the natural order of life.Herbs, animals, how all living things are both connected and separate and how god’s hand created all, Jonas’ deep faith helps him to survive the superstitions of his fellow man who exile him to a barren island accompanied only by a shipwrecked tiny mouse.He retells much of his life’s journey, his marriage, his children some of whom died and the wonder of it all: life, land and sea, plant and creature, Jonas has a special wisdom that understands how it all works.This is a unique tale, a fable and more, that leaves the reader hauntingly mesmerized, not quite knowing what he has just read but thankful that he did.
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5I've generally not had very good luck when I try to get into Icelandic fiction, but Sjón's "From the Mouth of the Whale" (English translation by Victoria Cribb published by Telegram in 2011) was really quite an enjoyable read. Perhaps it was the historical nature of the narrative that appealed to me, or maybe the natural history elements that the author incorporated into the text. But I liked it. The stream-of-consciousness style worked for me in a way it usually doesn't, and Sjón's lyrical depiction of 17th-century Iceland is lovely. It helps, I'm sure, that the great historical character Ole Worm makes an extended cameo appearance.Definitely worth a try if you tend to like historical fiction with lots of natural history worked in.
- Calificación: 3 de 5 estrellas3/5In 17th Century Iceland, Jónas Pálmason's strange way of life casts him into a suspicion. His old pagan beliefs, superstitions, extensive learning, and naturalism are believed by many to be sorcery, and so he is sent into exile.When I saw the description of this book, I knew that I had to read it. I have read few books about Iceland, and certainly never one about Iceland in the 1600's. Also, the publisher is known for printing strange, atypical books that I more often than not find myself loving.Well, "From the Mouth of the Whale" was indeed strange, though not for the same reasons as the other books I had read. It was a stream of consciousness type of book, which I normally either love or hate. Here, I hated it. It prevented me from becoming absorbed in the book. Whenever I would put it down and then pick it back up again, I would find the style jarring, and it would take about 50 pages to get used to it. By then, it would be time to stop - and so it went until I finished, feeling sore as if I had just commenced a bumpy ride.It's a shame, because if not for the distracting writing style, I think that I could have really enjoyed this book. I think that naturalism can be quite interesting, especially in a historical setting. And Sjon often included intricate plot descriptions of animals that directly related to the story or characters. Also, I loved the opening scene, in which Lucifer first meets man. Sjon's version of a young Satan is a son of God, which I found intriguing. Satan is Jesus' brother? It sounds like a story. Satan's foreboding feeling regarding man, predicting their selfishness and insistence on destroying the rest of God's creation, was apt and insightful.I was annoyed that Lucifer never again appeared in the story, and his cameo seemed irrelevant except for proving a point.There were other enticingly interesting little things scattered throughout the book. Learned scholars study "unicorn's horns" and "mermaid sculptures," actually narwhale tusks and coral. Jónas' superstitions and pagan beliefs were intriguing. Occasional paragraphs about natural things pepper the story, almost always intertwined with magic. Jónas compares himself extensively to a sandpiper - does this mean something?Everything I felt mildly interesting in this book never led to anything, and it was never enough to overpower the distaste I felt toward the writing style.I wouldn't recommend this book unless you personally love stream of consciousness novels. If so, there is plenty to be enjoyed. However, if you, like me, find the writing style more likely to range from distracting to infuriating, it would perhaps be best to skip this one.
- Calificación: 2 de 5 estrellas2/5I wanted to like this book - I like historical fiction and Iceland is a really interesting country, so I thought Icelandic historical fiction would be really interesting. But I just could not get into it, the writing style was really annoying. The book is full of long rambling paragraphs sprinkled with ellipses, which are just hard to read and made it unclear what was happening. It's possible that people who really like fiction written in a stream of consciousness style would like From the Mouth of the Whale, but it is definitely not for everyone.
- Calificación: 2 de 5 estrellas2/5I feel completely unqualified to review this because I've never read anything like it before and I didn't understand half of it. It was difficult for me to piece a time line together or separate fact from fantasy or figure out even the basics of what was going on -- all the more so since the book had very few paragraphs and also, for the most part, lacked proper sentences. Most sentences ended with an ellipsis instead of a period. Apparently a sizable number of people who read this book thought it was wonderful, and it won an important literary prize, but it just left me bewildered.
- Calificación: 3 de 5 estrellas3/5"A medium-sized fellow ... Beady brown eyes set close to his beak within pale surrounds ... The beak itself quite long, thick and powerful, with a slight downward curve at the end, dark in colour but lighter at the top ... No neck to speak of; a spry stocky figure with short, tapering legs, a barrel chest and a big belly ... Head a dark grizzled brown, with a ruff extending from nape to mid-crown ... Clad in a grey-brown coat of narrow cut, with a faint purple sheen in the twilight; bright stockings, a speckled undershirt ... Importunate with his own kind, garrulous with others ... So might one describe the purple sandpiper and so men describe me ... I can think of many things worse than being likened to you, my feathered Jeremiah, for we have both crawled from the hand of the same craftsman, been carved with the same knife: you quickened to life on the fourth day, I on the sixth..."Thus does Jónas Palmason's introduce himself when the story begins, in the autumn on 1635. Divided into four parts, ending with the Spring Equinox of 1639, the novel moves between Jónas' stream of consciousness, wherein bits and pieces of his past and present mingle in a confused and confusing soliloquy about what led him to be abandoned on an island off the coast of Iceland, and a central section where the crux of the story is told in a more straightforward narrative. Known as Jónas the Learned by some, he is a self-taught healer and a poet who has been exiled on charges of heretical conduct. A successful exorcism has earned him a good reputation in a time when superstition abounds and many still believe in unicorns and other mythical creatures, but his fate is sealed when he shows opposition to the local magistrate who is intent on carrying out his plan to massacre innocent Basque whalers. The novel is beautifully written and full of evocative and poetic imagery. The massacre is harrowing, but again interspersed with imaginative sequences. My main problem with this novel is that I felt utterly lost in the first section, as I imagine is the intention of the author, perhaps to render Jónas' own state of mind? but too much of what is said here was completely lost on me, and I quickly started feeling like I was just reading this book because I needed to write a review about it. Then the two middle sections were exactly what I imagined this novel could be like based on the short blurb I'd read about it and which had made me think I might enjoy this book. Here Jónas clearly describes the harrowing night of the massacre of the whalers which led to his banishment, as well as a trip to Denmark where he meets the fascinating Dr. Worm, who hires him as one of his research assistants to catalogue his unlikely collection of curios, and tries and fails to get our man acquitted. But then again, the final section with more vague recollections, from which other parts of narrative painfully emerge, felt frustrating more than anything. Here, the following words made me think perhaps I wasn't being quite patient enough: "I lean back in bed, stretching my arms and cracking my joints ... The mouse is still huddled cosily by the fire; it is quite extraordinary how she puts up with my ramblings ... The vetch porridge has hardened in the bowl; I scrape out the leftovers and scatter them on the floor ... In a place of entertainment like this it is the storyteller who must pay his audience rather than the other way round ..." Now that I’ve gotten the lay of the land, I see this is the kind of book that I might enjoy more on second reading, though I’m not sure it would be quite worth the effort given there are so many other books on my shelves calling out to me...
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5It took me a little while to understand the story because it is so lyrical and uses imagery and metaphors. I tried to take it too literal in the beginning, but when I let that go and embraced the poetry, I enjoyed it. Although it was bleak and with little hope, it was the small things that gave life beauty and a reason to carry on.
- Calificación: 3 de 5 estrellas3/5A bleak tale of early 17th century Iceland, told by an old man banished to solitary exile after his conviction for witchcraft. The story is told primarily in a stream-of-consciousness, and there is little that is positive or beautiful in Jónas Pálmason’s mind or memory. I think there are some readers who will find this story fascinating for its imagery and imagination, but I could not appreciate the unremitting grimness.
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5I usually avoid "stream of consciousness" novels, but this one intrigued me since it was from Iceland. And, I was not disappointed. The author makes this style work with his blend of gritty detail and abstract philosophy. There are also sections of dialogue (some imagined) that break up Jonas's monologue.Jonas Palmerson has been convicted of sorcery in 17th century Iceland and banished to an uninhabited island. While he is there, the author takes us inside Jonas's mind -- his thoughts and memories. This paints for the reader a vivid image of life in the 17th century. And, we see the tension between religion and science that continues in some quarters today. The author blends real memories with hallucinations in a way that allow us to learn more about Jonas and his beliefs. Very well done.
Vista previa del libro
Maravillas del crepúsculo - Sjón
MARAVILLAS DEL CREPÚSCULO
Sjón
Traducción de Enrique Bernárdez
Título original: Rökkurbýsnir
© Sjón
© de la traducción: Enrique Bernárdez
Edición en ebook: noviembre de 2013
© Nórdica Libros, S.L.
C/ Fuerte de Navidad, 11, 1.º B 28044 Madrid (España)
www.nordicalibros.com
ISBN DIGITAL: 978-84-15564-68-3
Diseño de colección: Filo Estudio
Corrección ortotipográfica: Ana Patrón y Susana Rodríguez
Maquetación ebook: Caurina Diseño Gráfico
Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.
Ora las estrellas parecíanle hombres,
ora los hombres parecíanle estrellas;
las piedras, animales;
y las nubes, plantas.
Novalis
(de Los discípulos en Sais)
Contenido
Portadilla
Créditos
Dedicatoria
Autor
Obertura
I. Equinoccio de otoño de 1635
II. Solsticio de verano de 1636
Piedra del riñón
IV. Solsticio de invierno de 1637
V. Equinoccio de primavera de 1639
Coda o repetición
NOTA DEL AUTOR
NOTA DEL TRADUCTOR
Contraportada
Sjón
(Reykiavik, 1962)
Sjón, Seudónimo de Sigurjón Birgir Sigurdsson, y que significa «visión», es uno de los escritores más interesantes e innovadores de Islandia. Sus libros de poemas, novelas y cuentos para niños han tenido mucho éxito de crítica y público. En 2005 obtuvo el Premio de Literatura del Consejo Nórdico por El zorro ártico (Skugga-Baldur), publicado en esta misma colección. Sjón es también una figura importante de la música islandesa. Es mundialmente conocido como autor de algunas canciones de Björk, como Isobel
, Jóga
y Oceania
, entre otras.
Además, es autor de las canciones de la película Bailar en la oscuridad, de Lars von Trier, interpretadas por la cantante islandesa; una de ellas fue nominada para el Oscar a la mejor canción original. Sjón también apareció como vocalista invitado en el álbum Luftgitar del grupo islandés Sugarcubes bajo el seudónimo de Johnny Triumph.
Obertura
Volvía de la caza. En la mano derecha llevaba la pequeña red, en la izquierda la linterna, en el zurrón guardaba mi captura, un jabalí de acerados colmillos; una criatura enorme que andaba suelta por las tierras del Norte y había causado gran daño antes de que se descubriese su presencia y me enviaran a mí a cazarla. No era el primer retoño del viento del Norte que lograba abatir: el lobo que lloraba leche, la liebre acuática de una sola pata, el alce de falo dorado y la reina trucha peluda, todos ellos habían conocido mi red; pero este jabalí de grandes dientes era en verdad el monstruo más endemoniado que el Norte había escupido por su fría nariz.
Por eso lo llevé conmigo en vez de abandonarlo en el campo de batalla, como mandaban las reglas. Albergaba la idea de arrojar la carroña a los pies de mis hermanos, para que mi padre viese cuál de sus hijos mostraba mayor empeño en conservar nuestro mundo dentro de sus límites; si quienes nunca abandonan el palacio paterno que los envuelve por doquier y se dedican a labores de alta administración (con tal nombre era exculpado el cortesano) o yo, que alzaba el vuelo hacia el Sur para matar a toda suerte de abominaciones.
Crujió el vacío bajo mis talones mientras hacía con denodado esfuerzo el camino de regreso. Me aguardaba la cena en el palacio, iluminado y majestuoso con sus torres y espiras que se extendían por todo el universo, como el infantil parloteo de un sol recién creado. Y entre el segundo plato y el postre tenía la intención de ponerme en pie, acercarme a mis hermanos y extraer del zurrón el varraco de acero. Pero no había avanzado mucho cuando me di cuenta de que en el reino de los cielos no todo estaba como es debido. No había nadie de guardia en la puerta, nadie gritó «¡Eh, quién vive!» desde la muralla, no llegaba desde la sala de banquetes el habitual rumor, nadie celebraba una secreta reunión amorosa en el portal. En cambio, hasta mis experimentados oídos de cazador llegaba el murmullo de débiles alas y suspiros de dolor que se quedan atascados en la tráquea. Aparté de mí la linterna, la red y el morral. Un instante después me encontraba en el atrio, un momento más tarde subía corriendo las escaleras en dirección al salón del trono… abrí la puerta de un empellón.
La situación de la sala era caótica, muchos de los ángeles reían de terror, otros lloraban con una risa hueca, otros reían y lloraban al tiempo. Muchos incluso habíanse quitado las largas túnicas. Se arrastraban con la frente pegada a los fríos escalones del trono, dejando que los látigos azotaran sus ardientes hombros. Los hermanos más jóvenes corrían por las salas todas, sin rumbo, cual niños pequeños, sin dejar por un momento de berrear el nombre del padre. Los más trastornados se apoyaban en columnas y bancos y vomitaban en espasmos hasta que el ectoplasma brotaba de ellos a borbotones y se derramaba sin freno por los suelos azulados del cielo. Pero por debajo de la espantosa escena se escuchaba el susurro que se crea cuando la desesperación busca su salvación en las alas de la huida, y las barbas de las plumas tiemblan y el aire juega con ellas produciendo agudos silbidos, como un niño que silba con la hojita de alguna planta; el ruido había resquebrajado ya las murallas que rodean el palacio y llegaba hasta mí en el camino de la entrada. El grito de alarma de los ángeles:
—¡Él es todo!
La idea se introdujo en mi mente y en un instante me paralizó: ¡lo impensable había sucedido! Y estaba ya a punto de perder el control sobre mí mismo cuando sentí el hedor. En las ventanas de mi nariz jugueteaba un olor que jamás había jugueteado en las estancias de mi padre y que, hasta aquel mismo instante, había estado excluido del cielo. Porque los mundos que él había creado, con sus animales y plantas, y el mundo de él mismo, no se podían mezclar. Como la luz y las tinieblas, decía él.
Miré al padre, que estaba apoltronado en su trono. A juzgar por la expresión de su rostro, todo iba perfectamente; la cabeza resplandeciente como la nieve estaba un poco inclinada, como si estuviera contemplando algo pequeño que tuviera en la palma de la mano. A su izquierda estaba mi hermano Miguel, que parecía el único capaz de dominar sus sentimientos. Pero yo que conocía a Miguel mejor que nadie, vi que la sonrisa de su rostro era la sonrisa amarga que se dibujaba en su semblante cuando, en nuestros juegos, se declaraba vencido. Me saludó con un lento movimiento de la cabeza, pero sin apartar los ojos de lo que nuestro padre tenía en la mano.
Sí, allí se te podía ver en su mano, las rodillas bajo el mentón, respirabas tan rápido y tan débilmente que temblabas como la aleta pectoral de un espinoso. El padre apretó la yema del dedo sobre tu espinazo e inclinó la mano con cuidado para que te estirases, te dieras la vuelta y te volvieses de espaldas. Me acerqué para observarte mejor. Tú te rascaste la nariz con el puño cerrado, ronroneaste de una forma dulcísima y te quedaste mirándome con fijeza con ojos egoístas… con la boca muy abierta. Y vi que esa boca jamás se saciaría, que sus mandíbulas jamás dejarían de morder, que la lengua nunca se cansaría de bañarse en la sangre de otros seres vivos. Entonces se movieron tus labios. Intentaste decir tu primera palabra. Y la palabra era: «YO». Pero el padre te interrumpió y se dirigió a mí con voz amistosa e imperativa a la vez:
—Lucifer, mira al hombre, ahora te inclinarás ante él igual que tus hermanos…
Te miré una vez más y en ese momento surgieron de ti negras heces cenagosas. Con la velocidad del rayo te llevaste la mano al ano, cogiste un puñado de lo que allí había y te lo metiste en la boca.
Como es bien sabido, yo no incliné la rodilla ante aquel nuevo animalito del padre, por eso fui expulsado del cielo junto a los que quisieron seguirme. Pero a ti, ser humano, te regalé al despedirme mi visión de ti.
I
(Equinoccio de otoño de 1635)
Es de tamaño mediano… Los ojos cercanos a la nariz, siempre brillantes y castaños, el encaje de los ojos, pálido… La nariz bastante larga, gruesa y poderosa, con la punta un poco inclinada hacia abajo, oscura aunque algo más clara en la raíz… Cuello corto y ágil de movimientos, rechoncho, de piernas cortas y flacas, el torso abombado y el vientre prominente… Por arriba, un oscuro castaño grisáceo, encrespado desde el cuello hasta mitad de la coronilla… Luce manto pardo, ceñido de corte, aunque el crepúsculo le presta tonos de azul pálido; las calzas claras, la camisa moteada… Es impertinente con los de su propia familia, parlanchín con los demás… Así suele describirse al correlimos oscuro, y así me describen a mí. Y muchas cosas puedo imaginar peores que tú, pequeño Playero, pues ambos anadeamos de la misma forma, estamos forjados del mismo hierro: tú fuiste creado el cuarto día, yo, el sexto… ¿Y si hubiera sido al contrario? ¿Y si yo hubiera sido creado el día en que fuisteis creados los que voláis bajo el firmamento y tú hubieras sido creado como señor de la tierra? Estaría entonces el pájaro aquí, sobre una piedra, mirando pensativo al estúpido hombre que echaría a correr junto a la orilla, gimiendo de miedo con el reflujo, nunca vuelve… Hombre y ave, un hombre con corazón de ave, un ave con raciocinio de hombre, el ave con corazón de hombre y el hombre con raciocinio de ave… Somos semejantes casi en todo… ¿Y por qué no iba a ser así? Hace poco, sostuve en la palma de mi mano a un hermano tuyo mordido por un págalo, acariciando su cadáver con los dedos de la misma mano… Por debajo de las plumas pectorales noté primero la quilla, rota, y luego la parte blanda donde se alojan los riñones y los intestinos… Y mientras observaba el pájaro, con la mano libre acariciaba mi vientre vivo… Esto sucedía en plena canícula, cuando los días cálidos visitan Bjarnarey, la isla de Björn, y no me resultaba difícil observarme a mí mismo porque no iba vestido de otra cosa que de mí mismo… Pero así se me permitía vivir, pues estaba solo y nadie venía a verme, a no ser el Hacedor, que conoce su oficio mejor de lo que el oficio se conoce a sí mismo… Y la marca de autor del Creador no está oculta, mi cuerpo todo lleva la misma marca que el de los plumíferos… Pero aunque nuestras constituciones sean tan semejantes, el decurso de nuestras vidas es como los manuscritos de dos escribas que han aprendido de la misma cartilla y ahora escriben el mismo relato, uno está en Ögur y el otro en Hólar, ambos leen con esmero el pergamino… Mas el lector erudito se da cuenta de la brusquedad del óvalo en la «d» trazada por el escriba que está bajo la protección de los tiranos, y la bellamente curvada e inclinada hacia delante del otro, el que ha sido acogido por los siervos de Dios para alivio de su infortunio… Tú, ave, eres la letra que fue trazada con destreza en un momento de calma en casa del señor, pero puedo aceptar que mi imagen está tachada o es fruto de un error del manuscrito de mis envidiosos y mis enemigos: «Jónas es un bribón, Jónas es un hombre artero y perverso, Jónas es un fanfarrón, Jónas es un mentiroso, Jónas es un bufón…». Sí, así me pintan en sus escritos calumniosos y en los dardos verbales que envían por delante de mí adonde quiera que vaya… Digo esto porque, según los ancianos de Jerusalén, el material de construcción de la existencia y de nosotros sus habitantes no es sino la saliva de la lengua del Señor cuando pronunció el universo, como si este fuera un relato tan inmenso que nadie, excepto Él mismo, alcanzara a vivir para escucharlo entero; el desdichado ser humano da gracias por cada hora que se le permite oír los fragmentos de la historia que a él mismo se refieren… Y así, pequeñas criaturas como nosotros, Jónas y el correlimos, no somos sino palabras de la estirpe de las más pequeñas, de las formadas por una única letra; «o», «a», «i», «u»… Estas son palabras comprensibles para todos y así los hijos de Adán son capaces de gritar su propio nombre: «La criatura atormentada», cuando a alguno de ellos le toca en suerte un dolor o alguno se rompe un dedo del pie… ¿Pero por qué me acudió a la mente la letra «d» y no otra cualquiera? ¿Qué significa «d» en el árbol alfabético de Abraham Salómonsson? ¿En qué rama floreció esa letra? ¿Es Daleth? ¿Había un ave posada sobre ella, trinando al sol matutino? ¿Había un hombre colgando boca abajo de una cuerda atada a la rama? Aquí estoy sin libros y ciego… Junto al último glaciar entre las montañas, junto a las más lejanas playas, tú trinas e introduces en la arena gris el pico rojo como las algas, agradecido por la vida que la omnipotencia te concede… Fuera de la estancia en el reino de los cielos, no existe nada tan apetecible, y hasta el último de los islandeses espera con ansia poder vivir en paz su vida; aquí naciste, allá persigues la salvación de la vida, y aquí morirás… Es una delicia para los ojos que estés vivo, correlimos, y sea donde fuere que te reclamen tras la muerte, el placer que produces habrá desaparecido de ti… Nos conocimos hace medio siglo, mucho mejor en los últimos cinco años, y mejor aún cuando las plumas de tus alas se soltaron de tu corrompido manto, se cernieron sobre la cresta de la playa, se adentraron en las ciénagas y abandonaron la comarca, subieron las laderas, muy alto, y se dejaron caer a los pies de mi abuelo, Hákon, hijo Þormóður el hijo de Salómon, carpintero de ribera… Iba a recoger bayas con Jónas, el muchacho, y cuando ya había renunciado a convencer al chiquillo de que recogiera él también, me cantó una salutífera composición, aunque la mayor parte fue cuando íbamos caminando los dos solos… Aquel día, la bendita Lilja del viejo Eysteinn¹ y llegó al pasaje del poema en el que yo siempre me echaba a reír, cuando se describe la visita de Lucifer al martirizado Rey en el leño sagrado… Yo tenía seis años de edad y sabía bien que mi risa era estúpida y pecaminosa… Pero desde el momento mismo en que recitaba las primeras palabras del precioso poema, empezaba a temer la llegada del momento en que dijera «que la cruz mirado haya el maligno» y el temor de no poderme reprimir se iba adueñando del torpe que habitaba en mi mente… Naturalmente, no era por culpa de la historia admirable de la redención del hombre ni por la magnífica composición del poeta, era por la mueca que se dibujaba en el semblante de mi abuelo cuando entonaba la palabra «mirado»… Entonces volvía a inclinarse sobre el pie izquierdo de modo que el hombro derecho se levantaba y el otro descendía, al tiempo que enarcaba las cejas y en la boca aparecía una hinchazón cuando la palabra «cruz» brotaba entre los labios; lo hacía de modo involuntario, ni siquiera se daba cuenta él mismo… Entonces me echaba yo a reír… Nada me parecía más absurdo que imaginar que el hijo del hombre hubiera imaginado el rostro de la repulsiva serpiente maldita de Satán, tan extraña como la expresión de mi abuelo Hákon en ese instante… Bajaba la cabeza y me cubría la boca con las manos, pero la risa ahogada escapaba veloz entre mis dedos como el veneno escupido de sus dientes… El abuelo se detuvo de repente y observó al muchacho de arriba abajo… Una pluma de correlimos cayó junto a la puntera de su zapato… Dijo:
—Me parece que vas a tener buena memoria, Jónas…
El abuelo se puso en cuclillas para situarse a mi altura, alargó la mano hacia la pluma, la sostuvo un instante entre los dedos y luego me la metió en el pelo, junto a mi oreja derecha:
—Ahora tendremos que enseñarte a leer libros…
Y esa pluma purpúrea y gris de tus alas fue mi primer puntero de lectura, cuando él empezó a enseñarme lectura con un pergamino… Pero este dulce encuentro de una mano infantil y el cañón de una pluma marcó también la separación de muchacho y ave… Aunque la punta de la caña de la pluma rozaba el pergamino cuando yo iba avanzando penosamente de palabra en palabra, nada de esa sabiduría hallaba su lugar en ti pero se grababa todo en mi memoria de niño… Sí, hasta el momento en que me hube de inclinar por causa del saber, todo nuestro conocimiento había tenido su origen y su frontera última en la existencia carnal; en cómo tú y yo predecíamos vientos y lluvias… ¡Oh, ojalá nunca hubiera aprendido a leer! Allí comenzó el hombre Jónas su largo camino de