¡Oh mar hermafrodita,
padre y madre del mundo!
Ombligo, centro exacto de todo lo creado,
que atesora la vida.
Mar viejo, acuchillado, lleno de labios rojos
que se desangran dulce, lentamente.
Obstinado, marea tras marea,
te lames las heridas,
te creas y recreas a ti mismo
de tu sustancia azul y tus fluidos,
esperma generoso, inagotable.
Y vuelves a nacer de tu útero de madre,
sin consumirte nunca ni acabarte.
Mar macho, pendenciero, de navaja de hielo
y tempestades,
cabalgado por monstruos submarinos
y doradas sirenas amazonas.
Suma de la belleza, mar dulce y maternal,
de redondas caderas
y vientre profundísimo de anémonas
preñado de innumerables frutos,
junto a su criatura, el mar recién nacido.
Mar abundante y libre, femenino,
que desafía al cielo con su cuerpo desnudo,
tendida al sol, sin miedo,
su hermosa piel azul,
desde un extremo al otro del planeta.
(Del libro Terrenal y marina)
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El mar, la mar, esa realidad inmensa de nuestro planeta, que tanto ha sugerido, y que tanto se le maltrata.
ResponderEliminarMe llama la atención de la coincidencia, porque yo también dedico al mar en mi última entrada un poema.
El poema rezuma esa enjundia que una gran poeta como tú imprime a todas tus composiciones. Me gusta el tratamiento que le das. Te lo celebro.
Un abrazo.
Un canto al mar y la vez, a la vida. A esa vida que en realidad jamás da por terminada su tarea de muerte y reconstrucción.
ResponderEliminarUn poema hermoso.
Saludos
Este poema, querida Elvira, es el canto a la vida más hermoso que haya leìdo nunca. A través de tus versos he vivido con todos los sentidos el/la mar.
ResponderEliminarGracias por permitirnos leerte, es un lujo sin igual.
Un abrazo fuerte y un beso para ti.
Leo
Ya te lo escribí: "te sabes mar y tierra" y he aquí un hermoso poema que lo refleja, como dice Leo, efectivamente lo siento como un canto a la vida, la reafirma con el caudal de tu vitalidad creadora. Me descubro y me rindo.
ResponderEliminarTe beso.
Ps. un lujo poder disfrutarte.
Yo que nací al lado del mar, me gusta especialmente, no me canso de leerlo y leerlo.(como cuando disfrutas del mar y te quedas hipnotizada así es tu poema)
ResponderEliminarUn abrazo gigante y gracias por tu poesía
Qué oda tan maravillosa, me he sentido mar, me he sabido terrenal y me he reconocido tan tantos versos, pero renacida. Gracias reconforta descubrir tanto talento.
ResponderEliminarBegoña Leonardo
Querida Elvira, que puedo decir que ya no hayan dicho o te haya dicho. Tienes un encanto para escribir, que resulta imposible no sentirse atrapado, hay tanta fluidez y melodía en tus versos, que parecen haber nacido de los mismos elementos marinos sobre los que versa tu poema.
ResponderEliminarTe dejo un afectuoso abrazo y mis sinceros deseos de bienestar.
Maravillosa manera de expresar las dos condiciones -masculina y femenina- del mar, la mar.
ResponderEliminarSe dice "la mar" -decía mi padre, que era marino- porque la mar es mujer. Yo, como tú creo que también es hombre.
Un abrazo fuerte, poetaza.
"Terrenal y marina". ¡Qué hermoso y sugerente título para un libro! Y cuánta verdad encierra, porque eso eres en este poema de extremos y opuestos que se funden y se autofecundan, originando vida, movimiento, diversidad, poiesis y dialéctica en el marco de las leyes físicas y naturales que rigen nuestro mundo y estimulan la imaginación y la capacidad creadora. Tú, como el mar, no tienes definición mesurable posible. En ti, como en el mar, fluyen la vida y la muerte; la luz y la sombra; el agua y la arena... Hermafroelvira. Un beso y un abrazo.
ResponderEliminarMaravilloso poema, Maga.
ResponderEliminarSi alguien no ha leído "Terrenal y Marina" que lo haga porque todo el poemario, de mar a tierra, es un vendaval.
Besitos, Elvira.
Querida amiga, qué belleza: verde, azul y fresca...
ResponderEliminarAhora podría comprender mejor eso de: "el mar", y, "la mar". Gracias por tu poesía.
Besos.
Nunca mejor dicho,
ResponderEliminarmacho y hembra
a los que a todos acoge,
puede ser
dulce amante de sirena
o los abrazos de una ola
enredada en delfín enamorado.
Tus versos son para mí
motivo de alegría.
Un gran abrazo
Belleza en fondo y forma, el poema como el mar.
ResponderEliminarUn saludo. A.