Esta semana hemos dejado las sendas y montañas de nuestra Comunidad para desplazarnos a un terreno no sólo llano (ni siquiera sinuoso), sino por debajo del nivel del mar: Amsterdam y Rotterdam, en los Países Bajos. El Erasmus tiene estas cosas y a pesar de Wert, nuestros hijos perfeccionan su formación en el extranjero. Os invito a ver unos retazos de estas bonitas y originales ciudades holandesas.