miércoles, 29 de marzo de 2023

El Cortejo Etéreo de Sulamith Wülfing

Sulamith Wülfing fue una ilustradora alemana conocida por sus ilustraciones de temas místicos que generalmente presentaban hadas, ángeles, gnomos, caballeros y dragones. Asimismo pintó niños, hombres y mujeres enigmáticos y un poco inquietantes, de grandes ojos que llevan velos, túnicas y coronas con multiplicidad de detalles. 

En algunas de sus obras parece haber estado influenciada por pintores renacentistas y también, por un poco de art nouveau.

Por lo general, los personajes habitan prados y bosques iluminados por la luna, rodeados de mariposas y hojas. Son forestas pobladas por espíritus de paz; Sulamith declaró que sus creaciones representan las profundas emociones de miedo, placer y tristeza que recuerda de su infancia. 














viernes, 24 de marzo de 2023

Francis Danby, el Naturalista Angustiado

Francis Danby fue un paisajista irlandés conocido por sus escenas románticas, naturalistas e imaginarias. Sus paisajes, una melange entre realismo y ensoñación, cautivaron en las primeras décadas del siglo XIX. Creó temas grandiosos, sombríos y fantásticos que coincidían exactamente con el gusto byroniano de la década de 1820. 

En un momento logró establecerse como la luz principal de la escuela de pintores de paisajes de Bristol con cierta aclamación lo que condujo a su elección como miembro asociado de la Royal Academy. 

Pero cuando la crítica no lo acompañó lo suficiente, el artista vivió limitado; llevó una vida precaria, empañada por la infelicidad y el escándalo.

Actualmente, Danby es considerado como uno de los grandes artistas irlandeses; a él también podríamos englobarlo en el movimiento "románticos desesperados", pero en paisajismo.













lunes, 20 de marzo de 2023

El Amor por las Leyendas Delicadas, Sentidas y Espirituales de Armand Point

Armand Point [circa 1861-1932] fue un pintor francés en un principio seducido por el norte de África, por lo que comenzó a pintar lienzos orientalistas y temas de género, de una mano de obra bastante realista. Sin embargo, su inspiración evolucionó lentamente hacia formas de idealismo pictórico. 

En 1893, realizó un viaje a Italia que tuvo una gran influencia en él. Armand bebió de las obras de artistas prerrenacentistas y desde entonces anheló expresar un arte inspirado y extraído de la tradición.

Con estas premisas estableció una comunidad de artistas en el bosque de Fontainebleau, cuyo espíritu se insertaba en la línea del movimiento Arts & Crafts. En él se mezclaron pintores, escultores, doradores, esmaltadores y orfevres que crearon, con técnicas antiquísimas, tapices, joyas y objetos preciosos. Una maravilla exquisita.

Sin embargo, fue poco considerado por la crítica, fue juzgado de tradicionalista y acusado de pastiche; Point ignoró a todos y se aferró a su gusto idealizado por la Edad Media y el Renacimiento con la misma admiración que Edward Burne-Jones y los iluminados prerrafaelitas. Para él, la forma de luchar por el ideal pasaba por la recuperación, si no la restauración, de los valores ancestrales. 














lunes, 13 de marzo de 2023

John Anster Fitzgerald, el Preferido de las Hadas

Tratar de escapar de la realidad y de sus duras verdades no es un fenómeno nuevo en absoluto, es tan antiguo como la sociedad misma; pero nadie escapó de la gris vida cotidiana de una manera más imaginativa que los victorianos.

El arte de las hadas en la era victoriana se desarrolló directamente como resultado de todo lo que estaba ocurriendo en ese momento; la industrialización, el trabajo infantil, las malas condiciones de vida, la pobreza... el clima de restricciones era demasiado como para que cualquier individuo normal lo procesara. Jeremy Mass, el autor del libro Victorian Fairy Painting reconoció que el género era más reaccionario que revolucionario. "...El nacimiento del psicoanálisis; la repulsión latente contra la exactitud de la nueva invención de la fotografía..." demasiada claridad paralizaba la imaginación. Era abrumador y así nacieron los sueños, el láudano, las leyendas y las escenas de hadas victorianas.

Mientras que escritores como Charles Dickens optaron por escribir sobre las condiciones horribles, los ladrones, los huérfanos y los pobres, otros artistas optaron por sumergir sus plumas y pinceles en el color de las hadas y de duendes un poquitín grotescos y a ver a dónde los podía llevar este nuevo género. 

John Anster Fitzgerald, -no ajeno a los fumaderos de opio-, fue uno de esos artistas que proporcionó un escape a través de sus pinturas de criaturas diminutas de aspecto extraño; pájaros, murciélagos, hadas y flores. 

Sus amigos lo llamaban "Fairy Fitzgerald" porque pintaba el mundo feérico de manera obsesiva. 

Dichos lienzos parecen muy inocentes e infantiles a primera vista, pero muchas de sus pinturas son oscuras y contienen imágenes de demonios; su trabajo ha sido comparado con los paisajes de pesadilla surrealistas de Hieronymus Bosch y Pieter Brueghel. Un reino creepy.