El Monte Pírico (Mt. Pyre en inglés; おくりびやま en japonés) es un lugar perteneciente a la región de Hoenn y que aparece en las ediciones Rubí, Zafiro y Esmeralda y en Pokémon Rubí Omega y Zafiro Alfa. Se trata de un cementerio donde los entrenadores entierran a sus Pokémon fallecidos y van a visitarlos. Se encuentra en una gran isla cerca de Ciudad Calagua, situada en la Ruta 122, y a la cual solo se puede llegar utilizando la MO surf o la MO vuelo.
El Monte Pírico es el lugar donde se encuentran las esferas de Kyogre y Groudon. Esta montaña forma parte de la historia, ya que se debe salvar a dos ancianos del ataque del Equipo Magma (Pokémon Rubí) o Equipo Aqua (Pokémon Zafiro y Esmeralda). Tras salvarlos, en Pokémon Rubí Magno se llevará la esfera azul para despertar a Groudon y el jugador recibe la esfera roja; en Pokémon Zafiro Aquiles se llevará la esfera roja para despertar a Kyogre y el jugador recibe la esfera azul.
Desafío:Dulce: Le he lanzado un desafío. Quizás no debería ponerle a prueba, pero me gusta verle en acción. Es que ni me preocupo, ¡mi chico se encarga de ti en un santiamén! Leo: Mi chica me ha lanzado un reto. Je, je, je... Tengo que demostrarle lo fuerte que soy derrotándote. ¡Esto está hecho! La voy a dejar impresionada.
Al perder:Dulce: Pues qué decepción... Leo: Ejem, ejem...
Tras perder:Dulce: Qué más da ganar o perder... Lo importante es quererse mucho. Leo: Vale, he perdido, pero da igual. Tengo muchas otras cualidades... ¡Y pronto seré más fuerte que tú!
En el interior del Monte Pírico hay 18 personas que no son entrenadores:
Joven: Aquí descanza en paz mi Zigzagoon. Yo lo quería tanto...
Mujer: ¿Has venido a presentar tus respetos a las almas de los Pokémon que ya no están con nosotros? Tú debes de sentir un gran cariño por los Pokémon.
Bruja: ... ... Mmm, no, no eres tú... ... Ah...
Anciano: Aquí es normal enterrar a las personas y a los Pokémon en tumbas, pero creo que en otras regiones del mundo no es posible.
Anciana: En el Monte Pírico te puedes encontrar con todo tipo de criaturas... Nunca se sabe qué puede pasar, así que toma esto por tu bien. Dale este Amuleto al primer Pokémon de tu equipo. Te ayudará a mantener alejados a los Pokémon salvajes.
Señor: Cuando me acuerdo de mi querido Pokémon, que en paz descanse... pienso que, de haber estado en mi mano, habría hecho lo imposible para que viviera siempre. Pero luego imagino que alguien me otorgara a mí la vida eterna, y el sufrimiento que me causaría el ver marcharse a mis seres queridos...
Anciana: Con el paso de los años, una agota su reserva de lágrimas y ya no puede llorar más. Es entonces cuando te invaden los recuerdos. Esos nunca se agotan...
Chica: Cuánto me acuerdo de mi querido Skitty... Es que se me saltan las lágrimas...
Joven: Cada día, al volver del trabajo, vengo aquí a visitar a mi pequeño para mantener vivo el recuerdo. Me da miedo olvidar.
Señor: Ya hace tiempo que este lugar está abandonado. Con la de agujeros que tiene, más de uno ha acabado cayendo al piso de abajo por no ir con cuidado.
Mujer: A menudo me pregunto por qué levantan estas lápidas.
Chico: Quería tanto a mi Pokémon que decidí tirar la casa por la ventana y comprar la lápida más cara que había. Uno no puede estar mirando la cartera cuando se trata de dar lo mejor a los suyos.
Anciano: Cuando vengo a este lugar, los recuerdos que creía perdidos para siempre regresan de pronto con toda su intensidad. Fascinante, ¿no crees?
Anciana: Descansa en paz... Ya he perdido la cuenta de los años que llevo repitiendo esa frase.
Anciano: ... ... Snif, snif.
Chico: Todo el mundo escribe un pequeño texto en las lápidas para honrar a la persona o al Pokémon fallecido. Es lo que se llama un epitafio. Yo todavía estoy pensando qué voy a poner en el mío. Tengo tantas cosas buenas que decir de mí mismo que me falta espacio en la piedra.
Anciano: No, aún le falta algo... Este epitafio no nos hace justicia ni a mí ni a mi Pokémon. Tengo que estrujarme más el coco.
Mujer: ¿A qué viene tanto quebradero de cabeza? Total, una vez en el hoyo, te va a dar lo mismo. Digo yo...
Desafío:Marga: ¿Te crees capaz de romper el vínculo fraternal que la magia de las hadas ha creado entre nosotras? Eva: Un colosal sortilegio fantasmagórico ha creado un vínculo fraternal entre nosotras. ¡Somos las más fuertes!
Al perder:Marga: ¡Nooo! ¡Se ha roto el hechizo! Eva: ¡Aaah, el sortilegio se ha esfumado!
Tras perder:Marga: Nuestra hermandad se ha disuelto, por así decirlo. ¡Vuelve a vernos alguna otra vez, Entrenador/a! Eva: Es una niña que vive en mi barrio. Tener a una niña como compañera de equipo cansa mucho...
Desafío: Hola, Entrenador/a. Seguro que has venido a disputar un combate, ¿a que sí?
Al perder: Esto de los Pokémon parece divertido...
Tras perder: Cada vez lo tengo más claro: me resulta más entretenida la compañía de los Pokémon que la de las personas. Pero tampoco me disgusta combatir, porque veo que eso también hace felices a los Pokémon.
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