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Ya es tradición. 2024 se despide y, por tanto, es hora de soñar con un 2025 feliz viajero. Con descubrir esos destinos de Europa y del resto del mundo que, por un motivo u otro, nos esperan con más motivos que nunca. Por eso, año tras año, los equipos de Condé Nast Traveler en España, Reino Unido, India, Alemania, India, Oriente Medio, China y Estados Unidos nos unimos para seleccionar aquellos lugares que merecen especial atención gracias a la apertura de nuevos y rutilantes hoteles, a momentos culturales clave, a sus proyectos de conservación y desarrollo...
Además de la lista global, durante meses hemos trabajado en listados por continentes para que no haya excusas: un sinfín de destinos quieren verte. En el caso que aquí nos ocupa, Europa, los 11 elegidos son un compendio de nuestra riqueza paisajística y cultural. De las cálidas aguas mediterráneas al frío Mar del Norte, de la España menos conocida en el extranjero a un rincón de Portugal que es el favorito de muchos de nuestros vecinos. En fin, que tienes Europa para elegir.
Feliz 2025 y felices viajes.
Sierra de Arrábida, Portugal
Por qué ir: a un paso de Lisboa, el rincón favorito de quienes no quieren ser vistos.
Es uno de los secretos mejor guardados de los portugueses, especialmente de los lisboetas. Desde hace años, muchos, observan cómo el resto del mundo clava la vista en lugares como Comporta y Melides, no lejos de aquí, o Tavira, en el mediático Algarve. Mientras, siguen disfrutando de sus apacibles veranos en la Sierra de Arrábida.
Situada entre Setúbal, que a cada visita luce más bonita, y la más turística Sesimbra, esta impresionante zona protegida abarca casi 11.000 hectáreas de costa, montañas de piedra caliza, vegetación mediterránea y calas de arena dorada que recuerdan casi más al Mediterráneo que al inmenso Atlántico al que pertenecen. Su reciente candidatura a Reserva de la Biosfera de la UNESCO, cuyo objetivo es promover la conservación, la investigación científica y el turismo sostenible, refleja el cuidado y atención que merece.
Si te gusta la naturaleza, este es sin duda tu lugar. Porque verás a los delfines saltando de un lado a otro en la Reserva Natural del estuario del Sado, porque podrás contemplar a los pájaros en Moinho de Maré da Mourisca, porque bucearás entre una riquísima fauna y flora marinas. Porque su flora es inmensa.
En lo gastronómico, este rincón ofrece más de lo que imaginas. No solo los excelentes vinos con DOC de Setúbal, especialmente su célebre moscatel y el tan querido Periquita, el primer vino tinto embotellado en Portugal gracias a las históricas bodegas de José María da Fonseca, también el famoso queso de Azeitão, un pueblo del que resulta imposible no enamorarse al instante. Y más: el choco frito, que probarás en cualquier mesa, y las riquísimas anguilas fritas, enguias en portugués. Para alojarse, al ya clásico Casa Palmela, un remanso de paz miembro de Small Luxury Hotels que ofrece además excelentes retiros de yoga, se unen otros como el eco-lodge Villa Epicurea y Senhora do Cabo, ambos entre Sesimbra y Aldeia do Meco, convertida ya en la Comporta de los que no quieren Comporta. Pero no se lo digas a nadie. –David Moralejo
Marsella, Francia
Por qué ir: por su escena artística, su gastronomía del sur de Francia, glamurosos clubes de playa y por ser la puerta de entrada a Provenza.
En 2025 llegará la primera apertura del grupo Ruby Hotels en Francia, y la ciudad escogida ha sido Marsella. Los motivos son evidentes: ofrece una animada agenda cultural y unos precios en general más económicos que en otras ciudades portuarias del sur de Francia. Esta combinación ha ido atrayendo cada vez más a un público joven que acude a la ciudad para visitar sus estupendos bares, clubs y restaurantes –como Livingston, que cuenta con un programa vanguardista de chefs residentes; Twerkistan y su colectivo de DJs, que organiza veladas en ubicaciones increíbles, y el bar de vinos naturales Planète Livre Marseille la Passerelle– y luego busca desconectar en los pueblos cercanos. Un ejemplo es Gallifet, en Aix-en-Provence, con su combinación de centro artístico, restaurante con jardín y tienda-galería, todo dentro de los muros de una mansión provenzal del siglo XVIII. Por su parte, Tuba Club, que ya visitamos en 2022, se ha ganado un público fiel y tremendamente cool gracias a su aire de tranquilo puerto pesquero y a su siempre animado restaurante. ¿El postre perfecto? Un chapuzón en el mar con apenas dar dos zancadas desde la mesa.
La gran inversión realizada para los Juegos Olímpicos y su elección como Capital Europea de la Cultura la han transformado Marsella. Este será el primer año en el que podremos disfrutar de la ciudad sin la masificación de los grandes eventos; sin embargo, si eres de los que agradecen una ocasión especial que le dé vidilla al viaje, Marsella tendrá un cartel estelar de conciertos en 2025, con estrellas como Ed Sheeran y Bruce Springsteen. –Rosie Conroy
Albania
Por qué ir: por sus playas y sus pueblos de interior. Y sus precios…
Albania, que durante años ha sido un reducto de aventureros, va camino de convertirse en un destino de primer nivel. A pesar de ser un poco más pequeño que Suiza, su atractivo radica en su increíble diversidad, que combina en poco espacio cadenas montañosas, bosques centenarios, pueblecitos de cuento de hadas, dos lugares Patrimonio de la Humanidad de la Unesco y una costa cristalina que no tiene nada que envidiar a la de países vecinos.
Este año seremos testigos de la apertura de un nuevo hotel InterContinental y del primer vuelo transatlántico del país, que sale desde la capital, Tirana, así como de la creación de un aeropuerto totalmente nuevo en Vlorë, junto a una de las playas más bonitas del mar Jónico, la “perla de Albania” (lo que elimina de un plumazo los embotellamientos de tráfico que antes sufrían los viajeros que llegaban desde Tirana a esta zona).
El gobierno planea atraer a 10 millones de viajeros en 2025, un objetivo que ya alcanzó en 2023, así que este podría ser el último año en el que disfrutar del país en (relativa) paz. Relájate en una tumbona en uno de sus muchos beach clubs o reserva una mesa en Mullixhiu: no podrás creer que tales maravillas gastronómicas cuesten solo cerca de 15€ por persona. –Rosie Conroy
Islas Feroe
Por qué ir: por la facilidad para acceder a los rincones menos conocidos del país.
Esta pequeña nación entre Islandia y Noruega, habitada por más ovejas que personas, es justo el tipo de entorno gélido y remoto que todo viajero experimentado ansía conocer, pero hazlo rápido, porque cada vez más gente está poniendo la mirada en ella. Icelandair ha empezado a ofrecer vuelos directos de Reikiavik a Vágar de cinco a seis veces a la semana. Una vez que aterrices, con el nuevo túnel subacuático te será más fácil visitar una de las 18 islas más remotas que pronunciar su nombre. Sandoyartunnilin conecta la isla principal con Sandoy por medio de un tramo de unos 10 kilómetros, está decorado con arte de inspiración vikinga de la mano del artista local Edward Fuglø y cuenta con una banda sonora propia que puedes sintonizar en la radio del coche. Entre sus nuevas incorporaciones encontramos también el BISK Hotel y un próximo hotel junto al agua en el pueblo norteño de Klaksvík. El hotel del aeropuerto de la isla, Hotel Vágar, acaba de reabrir sus puertas y es ideal si tienes que coger un vuelo temprano. Cuando necesites un masaje para relajar los músculos después de hacer senderismo entre cascadas y acantilados, la oferta de bienestar incluye desde el spa y cafetería al aire libre Ress del Hotel Føroyar a Havdypp, un spa y sauna junto a la playa en la cercana Leynar que también ofrece retiros de bienestar de varios días. –Katie Lockhart
Riviera ateniense, Grecia
Por qué ir: la capital griega eclipsa sin querer la belleza de su litoral, donde siguen abriendo ambiciosos hoteles y proyectos.
Con tanta belleza (aguas resplandecientes, playas salvajes y una costa cubierta de buganvilla que disfruta de 300 días de sol al año), resulta sorprendente lo desapercibida que ha pasado la Riviera ateniense en estos tiempos en los que nos obsesiona la estética: en Instagram, el hashtag #athensriviera tiene la modesta cantidad de 114.000 posts y #rivieraateniense solo 66. Compáralo con los 8,1 millones de Santorini y los 5,6 millones de Mykonos. El que una vez fuera destino vacacional de moda de celebridades y realeza fue cayendo en el olvido a principios de los 2000 debido a la crisis de deuda de Grecia y al cierre de la base aérea estadounidense cercana. Pero 2025 será el año de renacimiento de la Riviera gracias a los nuevos desarrollos urbanísticos que recuperarán la antigua gloria de esta extensión de 60 kilómetros a solo 30 minutos del centro urbano de Atenas.
El más titánico de todos será Ellinikon, un ambicioso proyecto de 8.000 millones de dólares ubicado en el antiguo Aeropuerto Internacional Ellinikon que se completará por fases a partir de 2025, y que se estima que creará 70.000 empleos. Un gran elenco de nombres de los sectores de la vivienda, la cultura y la hospitalidad destacan en este plan maestro con, por ejemplo, el centro comercial frente al agua, diseñado por Kengo Kuma y de inspiración surfera; un resort Mandarin Oriental, y un hotel y casino de Hard Rock con fecha de finalización prevista en 2027. Pero la joya de la corona es el exuberante parque costero, el más grande de Europa, que abrirá a finales de 2025 y duplicará el espacio verde en una capital en la que su ausencia es más que notoria.
Previendo el boom, está llegando a la Riviera ateniense un nuevo grupo de hoteles: será la primera vez desde la apertura de Four Seasons Astir Palace en 2019 que veamos a grandes marcas abrir propiedades en este lugar. En julio de 2024, One&Only lanzó su primer alojamiento griego en el barrio de Glyfada, el ultra elegante One&Only Aesthesis, donde enormes bungalows y suites abrazan la costa y se esparcen entre los olivos. Cerca de allí, en el Ace Hotel & Swim Club, de 120 habitaciones y estética costera cool, los viajeros pueden optar entre pasar la noche o solo darse un chapuzón (hay pases de día disponibles para las dos piscinas del club). Y nos espera aún más en el resort 91 Athens Riviera, en el distrito de Voula, un paraíso del bienestar donde treinta tiendas de glamping de lo más chic rodean un spa, un gimnasio, un club de tenis y un beach club. Para satisfacer la demanda, habrá más vuelos directos a Atenas que nunca, entre ellos conexiones nuevas con Shanghái, Sharjah y Brest a partir de 2024. —Audrey Phoon
Ginebra, Suiza
Por qué ir: la fiebre del fútbol ¡femenino! y el primer Grand Prix de Suiza, organizado por Rolex
A primera vista, la capital mundial de la paz y la buena voluntad parece un escenario extraño para una competición encarnizada, pero así será en julio de 2025, cuando la Eurocopa Femenina llegue a Suiza y varios partidos de la fase de grupo y eliminatorias tengan lugar en el Stade de Genève.
Y la UEFA no es la única que ha identificado las posibilidades escondidas entre las increíbles montañas y el lago de Ginebra: Rolex, siempre a la vanguardia de las tendencias, organizará el primer Grand Prix de Suiza de SailGP en las aguas turquesas del lago Lemán en septiembre. Aquí chocarán dos mundos muy distintos: el de los mejores navegantes del mundo en sus catamaranes de alta velocidad y el de los relojeros de élite, que invierten décadas en perfeccionar sus complicadas obras y cuyas victorias se miden en años, no en segundos.
En Ginebra, el nuevo Portail des Nations de Naciones Unidas basculará entre la reflexión individual y el multilateralismo. Con inauguración prevista para 2025, este atrevido proyecto se basa en un centro interactivo multimedia con el objetivo de impulsar la colaboración y fomentar las conversaciones productivas con los visitantes. Los planes de Jumeirah, la marca hotelera de lujo emiratí, de abrir en Ginebra su primera propiedad suiza, no hacen más que reafirmar el atractivo internacional de esta ciudad. Pronto volverán los días de gloria a Le Richemond, que fue una vez propiedad de Rocco Forte y Dorchester Collection. Beau-Rivage, el icónico hotel, favorito de la emperatriz Sissi, propiedad de la familia española Casacuberta y gestionado por Marugal, también planea una cuidadosa renovación. –Mike MacEacheran
Viena, Austria
Por qué ir: para bailar un vals y celebrar los 200 años de Johan Strauss
¿Lo oyes? Eso que se escucha es el sonido de los fans de la música clásica que han puesto rumbo a Viena para celebrar que durante 2025 se festejarán los 200 años de los vals y polcas de su hijo predilecto, Johann Strauss. Sobran los motivos pues para incluirla entre los destinos de Europa imprescindibles. Para muchos, el evento principal serán los estrenos semanales y las orquestas y cuartetos que aparecerán en el Musikverein, el Konzerthouse y la Ópera Estatal, pero también se presentarán espontáneamente en sitios inesperados, como el Cementerio Central o en medio de la isla del Danubio.
El optimismo de la tantas veces considerada la mejor ciudad del mundo para vivir resulta difícil de eclipsar, algo palpable en los nuevos edificios y hoteles que siguen mezclando presente y pasado, como el Mandarin Oriental, localizado en un antiguo juzgado centenario en una ubicación privilegiada en el distrito 1. Otro ejemplo es el recién inaugurado Anantara Palais Hansen Vienna, en el interior de un palacio que se construyó para la Exposición Universal de Viena de 1873 en el Schottenring. También está el recién llegado Das Kronenhaus, de estilo guillerminista y bautizado en honor a la Apotheke zur Kaiserkrone, la farmacia original de la Corona imperial.
En lo gastronómico, el restaurante Amador, en la finca vinícola de Hajszan Neumann, sigue poniendo el listón muy alto, así como el elegante Mraz & Sohn, de Markus Marx y sus hijos Lukas y Manuel. Dicho esto, el suministro interminable de kaffee und kuchen de la ciudad será más que suficiente para mantenerte en un estado de saciada felicidad. –Mike MacEacheran
Sussex, Reino Unido
Por qué ir: nuevas y acogedoras aperturas y una vibrante escena creativa
Igual que cierta banda de pop de los 90, los condados de East y West Sussex llevan peleados desde su separación hace más de cinco siglos. No enfrascados en una batalla en el sentido literal, sino más bien en un tira y afloja amistoso de los que se resuelven con unas cervezas. East Sussex es, de los dos, el más natural. En su población costera estrella, Brighton, abrió este mismo otoño el hotel No. 124 Brighton, la última incorporación al portfolio del grupo hotelero familiar GuestHouse. Cerca de allí, en Rottingdean, abrió en verano otro hotel junto al mar, White Horses. Pero no solo de idílicas playas y costas vive este condado, pues no faltan pueblos apacibles en la campiña de los South Downs, como el que da nombre a The Alfriston, que es nada menos que el cuarto hotel de Signet Collection, en la que ya figuran The Mitre House Hotel, The Retreat at Elcot Park y The Barnsdale, y que abrirá sus puertas en marzo.
West Sussex, por su parte, es el más artístico, con impresionantes exposiciones en la Newlands House Gallery de Petworth. La recién inaugurada senda nacional King Charles III England Coast Path, que discurre entre Eastbourne y Shoreham-by-Sea, permite conocer su costa cómodamente, pero lo más importante se encuentra en el interior.
Este otoño, The Swan Inn volverá a la actividad en Fittleworth tras su minuciosa restauración, esta vez bajo la dirección de Angus Davies, que formó parte del equipo de The Hollist Arms, en Petworth. Sus doce habitaciones y comedor, donde se pueden degustar tostadas de chantarelas, pollo de corral y vinos espumosos de Ambriel, conservan la elegancia y buen gusto de sus tiempos de esplendor del siglo XIX, cuando Turner y Constable frecuentaban el lugar. Lo mismo ocurre con sus jardines, diseñados por la cada vez más conocida Elizabeth Tyler. “La zona es un caldo de cultivo para artistas, y no es casualidad que aquí hayan vivido personalidades como el diseñador Martin Brudnizki, Maggie Smith, la florista Millie Proust y Ted Dwane, de Mumford & Sons”, nos cuentan. ¿Será capaz West Sussex de ganarse en 2025 el apelativo de “los nuevos Cotswolds”? “Nunca se sabe, aquí tenemos bastantes más viñedos”. –Rick Jordan
Valle del Ahr, Alemania
Por qué ir: por el buen vino, la naturaleza y su renacimiento tras la trágica inundación de 2021.
En julio de 2021, casi todo el valle del Ahr, en Renania-Palatinado, quedó destruido cuando gran parte del río Ahr se convirtió en un torrente imparable, con crecidas, inundaciones relámpago y olas que acabaron con la vida de 135 personas. El eslógan “We AHR open” anuncia que los visitantes vuelven a ser bien recibidos, aunque el valle aún no esté completamente reconstruido. El tren que lo atraviesa volverá a funcionar a finales de 2025 y conectará todos los pueblos del valle y la pintoresca ruta de senderismo de 36 kilómetros que conduce por las terrazas y laderas más hermosas de esta región vinícola y ofrece numerosos lugares en los que tomar un pinot noir, que es, junto al blanc de noir, la especialidad de la región. No te pierdas las bodegas de Jean Stodden, Meyer-Näkel y la cooperativa vinícola Mayschoss.
Muchos productores de vino, restauradores y hoteleros se han implicado no solo en la reconstrucción de esta zona, sino en llevar su desarrollo más allá de los niveles anteriores. Han identificado oportunidades, invertido y trabajado sin descanso para desarrollar ideas nuevas y modernas: el Concepto de Turismo Sostenible 2025 es el resultado conjunto de todos los que han sentido en sus carnes los efectos del cambio climático. Muchos de esos proyectos se iniciarán en 2025 y podrás ver cómo van avanzando. Los mejores ejemplos ya los tenemos delante: Markus Bell, que dirige el restaurante Bells Genusshof & Marktplatz, sirve producto local en un espacio que parece una concept store; en Altenahr, Andreas Carnott, considerado uno de los mejores chefs de la región, ha expandido su Hotel Ruland para incluir una espectacular zona de wellness con vistas a los acantilados; y en el restaurante Brogsitter, Benjamin Schöneich recuperó su estrella en la primavera de 2024 después de haber estrenado restaurante en otoño del año pasado.
En torno al 80 por ciento de establecimientos del valle del Ahr ha vuelto a abrir sus puertas en verano de 2024, y el número de hoteles no hace más que crecer. Las nuevas aperturas incluyen el hotel boutique Burg Adenbach & Alter Weinbau, primorosamente diseñado, de Ahrweiler, junto a aperturas como el Steigenberger Hotel de Bad Neuenahr a principios de junio de 2024. Y la joya de la corona del Ahr recupera al fin su antigua gloria: no solo reabrirán sus puertas la enorme piscina interior y el spa del Kurhaus a finales de 2024, sino que las salas de eventos volverán a llenarse con la música de los conciertos, y al año siguiente les seguirán los baños termales. –Lisa Riehl
Matarraña, España
Por qué ir: paisajes de ensueño y un cielo único para ver las estrellas.
La comarca aragonesa del Matarraña es un lugar custodiado por imponentes montañas y arropado por bosques de pinos, olivos, robles y almendros. Aquí, la naturaleza marca el ritmo de la vida, y la banda sonora corre a cargo de los grillos, los búhos, el arrullo del viento y el rumor del río. Al caer la noche, el brillo de las estrellas acapara todas las miradas, sin ningún obstáculo que ose interponerse entre los límites de lo humano y lo divino.
Puede que estemos ante la confirmación definitiva de que la belleza está en el interior aunque también hay que apuntar que el misterio se ha ido desvelando poco a poco, en parte gracias al boca a boca, pero también a las iniciativas de los vecinos y de los emprendedores que han apostado por establecerse en la zona –aquí viven artistas de todos los campos, productores de aceites premium, expertos astrónomos, escritores y artesanos–.
El Matarraña está compuesto por 18 localidades encabezadas por Valderrobres, la capital. Su población total no alcanza los nueve mil habitantes, pero esa cifra alude al censo oficial, puesto que hasta este rincón acuden gentes de todas partes a encontrar su pequeño remanso de paz.
El río Matarraña da nombre al territorio, salpicado de cascadas, piscinas naturales, rutas de senderismo y ciclismo, campos de cultivo que sirven de sustento a las cocinas de los alrededores y pintorescos pueblos donde caer rendido ante el bucólico hechizo de lo rural. La Fresneda y su antiguo castillo; Cretas y sus experiencias de oleoturismo; Beceite, puerta de entrada al Parrizal y sus pasarelas de madera sobre aguas turquesas… Todos tienen algo que ofrecer.
Aquí no hay hoteles –no podemos llamar así a sus alojamientos únicos, como Torre del Marqués y El Convent 1613–, sino imponentes masías históricas, acogedoras casitas donde leer al calor de la chimenea y conventos reconvertidos en refugios donde olvidarse del mundo.
En 2025, el Matarraña seguirá apostando por el turismo activo y la cultura, con talleres de escritura, pintura y artesanía, espectáculos de teatro y conciertos. Además, pondrá especial énfasis en la observación del firmamento: Torre del Visco y Mas de la Costa, alojamientos con calificación Starlight, ya preparan sus telescopios y programas llenos de novedades, con talleres y charlas para estar un poco más cerca del cielo. –María Casbas
Condado de Clare, Irlanda
Por qué ir: alojamientos eco y rotunda celebración de la artesanía tradicional
Aunque durante mucho tiempo ha sido célebre por ser la cuna de la música irlandesa tradicional, el condado de Clare se está convirtiendo poco a poco en un inspirador ejemplo de ecoturismo en la Ruta Costera del Atlántico, además de fomentar la recuperación de ciertas actividades y saberes. El ejemplo más reciente de esta tendencia es el Common Knowledge Centre, una incubadora dedicada a la vida sostenible ubicada en un terreno de 20 hectáreas de bosques nativos y campos de cultivo regenerativos. Con tres espacios disponibles como alojamiento, el Common Knowledge Centre pone a disposición de sus huéspedes toda suerte de talleres, con los que podrán aprender técnicas antiquísimas y casi olvidadas de construcción y artesanía. Desde averiguar cómo se levanta un muro de piedra en seco (es decir, sin argamasa ni mortero) o cómo se tejen los juncos hasta técnicas de bricolaje y restauración y construcción de muebles de lo más prácticas, hay actividades de sobra para mantener las manos ocupadas y hacer hambre para los deliciosos platos de ingredientes ecológicos y el pan de masa madre del obrador cercano, Hugo’s.
El biólogo marino Cormac McGinley también se ha sumado a la tendencia del turismo como fuente de educación y organiza rutas sostenibles de descubrimiento de fósiles y tours por los paisajes lunares del Burren, con sus cuevas marinas, muladares antiguos y flores silvestres.
Otra propiedad dispuesta a compartir toda la belleza que tiene que ofrecer esta abrupta costa es Homestead Cottage, en Doolin, cuyo restaurante sirve platos elaborados con ingredientes de producción local en un ambiente rústico, entre paredes de más de 200 años de antigüedad.
En un acantilado que sobre Spanish Point se encuentra Armada Hotel, un alojamiento ideal para escapadas con un ambiente cool y moderno que además fue el primer hotel del país en ganar su certificación B Corp por sus iniciativas medioambientales. Mientras, el retiro ecológico Gregans Castle Hotel, donde en su día se alojó Tolkien, donó parte del terreno cercano a su huerto al Burren Pine Project, que está ayudando a recuperar una variedad perdida de árbol nativa de Irlanda. –Gráinne McBride
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