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TEORÍAS DEL DESARROLLO

Además de exponer a grosso modo algunas Teorías sociales del Desarrollo, es tratar de describir cual ha sido la evolución del concepto de Desarrollo a lo largo de la historia resaltando los aportes de cada teoría.

TEORÍAS DEL DESARROLLO Además de exponer a grosso modo algunas Teorías sociales del Desarrollo, es tratar de describir cual ha sido la evolución del concepto de Desarrollo a lo largo de la historia resaltando los aportes de cada teoría. La Teoría Sociocultural de Lev Vygotsky construida sobre la premisa de que los procesos psicológicos superiores han aparecido y evolucionado en el ser humano debido a la participación de este en las actividades compartidas con otros, es decir que el origen de estos procesos es de carácter eminentemente social. Esta teoría propone además, analizar el desarrollo de los procesos psicológicos superiores (entre ellos el aprendizaje) a partir de la internalización de prácticas sociales específicas, ya que, según Vygotsky, estos procesos son asimilaciones de acciones externas, interiorizaciones desarrolladas a través del lenguaje. Algunas de las Principales características de los Procesos Psicológicos Superiores señaladas por este teórico son: que están constituidos en la vida social y son específicos de los seres humanos; regulan la acción en función de un control voluntario, superando su dependencia y control por parte del entorno; están regulados concientemente o la necesitaron en algún momento de su constitución (pueden haberse automatizado); utilizaron durante su organización, formas de mediación, particularmente, mediación semiótica. Se debe tener en cuenta que Vigotsky llama internalización a la reconstrucción interna de una operación externa. Este proceso de internalización supone que los procesos psicológicos que inicialmente representan operaciones interpersonales, es decir externas, se convierten posteriormente procesos intrapersonales, representando operaciones internas. Entonces, un proceso interpersonal queda transformado en otro intrapersonal; es por esto que esta teoría argumenta que en el desarrollo cultural del niño toda función aparece dos veces: la primera a nivel social (interpsicológica) y luego en el interior del propio niño (intrapsicológica). Otra premisa de gran importancia planteada por Vygotsky es que en el ciclo de la actividad se distinguen dos tipos de mediadores: Las herramientas que actúan directamente sobre los estímulos, modificándolos y los signos, que modifican al propio sujeto y a través de éste a los estímulos. Estos instrumentos de mediación son proporcionados por la cultura y por el medio social. Si bien para Vigostky los significados provienen del medio social externo, éstos deben ser asimilados e interiorizados por cada niño concreto. Planteamiento pilar de esta teoría es también, es la relación inseparable entre aprendizaje y desarrollo; llegando a afirmar que es el desarrollo el que sigue al aprendizaje. Para ello diferencia entre nivel de desarrollo efectivo, determinado por la capacidad de resolver independientemente un problema sin ayuda de nadie; y nivel de desarrollo potencial, determinado por la capacidad de resolver problemas bajo la guía o colaboración de otra persona. La zona delimitada por estos dos niveles es denominada por Vigotsky como Zona de Desarrollo Próximo, es precisamente en esta zona donde debe incidir el docente para que el alumno, con la colaboración de otros alumnos o del profesor pueda efectuar aprendizajes que hagan avanzar el nivel de desarrollo efectivo y potencial. Vygotsky ofreció una nueva manera de concebir el desarrollo, pues se constituye como uno de los primeros teóricos que tuvo en cuenta la dimensión social a hablar de conceptos como: procesos psicológicos superiores, aprendizaje y por supuesto desarrollo. Para él La cultura, las creencias, valores, tradiciones y habilidades del grupo social tienen un papel de gran importancia en el desarrollo de las conductas de los seres humanos y en el desarrollo de su pensamiento; viendo el crecimiento cognoscitivo como una actividad socialmente transmitida en la que los niños adquieren en forma gradual esas nuevas formas de pensamiento y comportamientos por medio de diálogos compartidos con miembros mas informados de la sociedad. Por lo tanto sus ideas conceptúales son un marco adecuado para desarrollar modelos integradores y no dicotómicos. La Teoría Psicosocial del Desarrollo planteada por Erik Erikson (1950). En sus supuestos establece que el desarrollo funciona a partir de un principio epigenético: existen ocho estadios de desarrollo que se extienden a lo largo de todo el ciclo vital. Los progresos a través de cada estadio están determinados en parte por los éxitos o por los fracasos en los estadios precedentes. Cada fase comprende ciertas tareas o funciones que son psicosociales por naturaleza, y el no poder resolverlas adecuadamente produce ciertos conflictos, Erikson les llama crisis por seguir la tradición freudiana, aunque este término es muy amplio y menos específico. Erikson establece muy claramente que se debe aprender que existe un balance, cada fase tiene un tiempo óptimo también. Es inútil empujar demasiado rápido a un niño a la adultez, cosa muy común entre personas obsesionadas con el éxito. No es posible bajar el ritmo o intentar protegerse a si mismos o a otros de las demandas de la vida. Existe un tiempo para cada función. Si se atraviesa bien por estadio, se adquieren ciertas virtudes o fuerzas psicosociales que ayudarán en el resto de los estadios que se presenten en la vida. Por el contrario, si no se resuelven satisfactoriamente, se pueden desarrollar mal adaptaciones o malignidades, así como poner en peligro el desarrollo faltante. De las dos, la malignidad es la peor, ya que comprende mucho de los aspectos negativos de la tarea o función y muy poco de los aspectos positivos de la misma, tal y como se presentan en las personas desconfiadas. La mal adaptación no es tan mala y comprende más aspectos positivos que negativos de la tarea, como las personas que confían demasiado. Estas son las etapas: Confianza frente a desconfianza, hasta el año de edad la confianza la da la madre, la crisis aparece en el destete. Si no se da desde un primer momento la confianza el niño se opone totalmente (desconfianza). Autonomía frente vergüenza y duda: del año a los tres, el niño hace muchas actividades si son independientes, hablamos de una autonomía, si se siente criticado o duda siente la vergüenza y la duda. Iniciativa frente a culpa: Entre los 3 y los 6 años, los niños hacen muchas actividades con iniciativa, si tienen que contradecir a los padres les aparece la culpa. Laboriosidad frente a inferioridad: desde los 7 a los 11, se refiere en trabajo si se siente muy aplicado (juego o trabajo) o si en cambio tiene una falta de reconocimiento, inferioridad. Identidad frente a confusión. Los adolescentes intentan averiguar su identidad, pero a veces puede haber una confusión de roles. Intimidad frente aislamiento: principio edad adulta, la posibilidad de vivir y crear una familia alcanzando la intimidad, pero si no se consigue puede llegar el aislamiento. Generatividad frente a estancamiento. Alrededor de los 40 años, todo lo relacionado con el cuidado de los demás, la productividad, y la creatividad, si no se da así existe un estancamiento. Integridad del yo frente a desesperación: Se da hacia el final de la vida, aceptar si la vida como ha pasado ha sido buena será integridad en cambio si uno sigue en lucha consigo mismo se da la desesperación. La teoría del desarrollo psicosocial divide en ocho períodos de edad la vida humana. Cada etapa representa una crisis en la personalidad que implica un conflicto diferente y cada vez mayor. Cada crisis es un momento crucial para la resolución de aspectos importantes; éstas se manifiestan en momentos determinados según el nivel de madurez de la persona. Si el individuo se adapta a las exigencias de cada crisis el ego continuará su desarrollo hasta la siguiente etapa; si la crisis no se resuelve de manera satisfactoria, su presencia continua interferirá el desarrollo sano del ego. La solución satisfactoria de cada una de las ocho crisis requiere que un rasgo positivo se equilibre con uno negativo. Un analista como Erikson, quien destaca nuestra naturaleza racional adaptativa, es mucho más fácil de aceptar. Erikson parece haber captado muchos de los problemas centrales de la vida mediante sus ocho etapas psicosociales como el desarrollo emocional de los bebés, el crecimiento del autoconcepto en la infancia y los problemas de identidad que enfrentan los adolescentes y la influencia de los amigos y compañeros del juego en el desarrollo social. Existe también una propuesta muy interesante planteada desde el campo de la economía sobre el desarrollo, el cual no es abordado desde una perspectiva ontogenetica, sino entendido como el progreso y crecimiento económico, social, cultural y político de las sociedades. Este es el Desarrollo a Escala Humana un modelo alternativo de desarrollo universal; que mas que una teoría es una propuesta sobre como debería ser entendido y abordado el desarrollo, expuesta por Manfred Max-neef. Max-neef plantea una teoría de desarrollo a Escala Humana orientada principalmente hacia la satisfacción de las necesidades fundamentales de la sociedad. Este autor critica los modelos de desarrollo que hasta hoy se han empleado en la mayoría de los países por que giran en torno de la economía y su única preocupación son los problemas económicos dejando de lado, lo que para él es realmente importante, la sociedad y la satisfacción de sus necesidades fundamentales. Realmente el trabajo de este economista está enfocado en ofrecer una nueva alternativa de contextualizar el desarrollo orientándolo hacia la satisfacción de las necesidades humanas, las cuales determinan la calidad de vida de las personas. Por tanto es un proceso de desarrollo efectivo aquel que le garantice esto a la sociedad. Max-neef expone que estas necesidades son finitas, pocas y clasificables, son un sistema en que las mismas se relacionan e interactúan entre sí y son iguales en todas las culturas y en todos los periodos históricos; según él, esto se debe a que "están imbricadas en la evolución de la especie, pues algunas de estas necesidades (subsistencia, protección, afecto, entendimiento, participación, ocio y creación) estuvieron presentes desde los orígenes del "homo habilis" y sin duda, desde la aparición del "homo sapiens. Probablemente en un estadio evolutivo posterior surgieron las otras necesidades (identidad, libertad)" esto las hace universales y estáticas; lo único que cambia es la forma y los medios utilizados para su satisfacción. Basado en estos postulados ha hecho una interesante clasificación de las necesidades: según categorías existenciales y según categorías axiológicas. Las categorías existenciales hacen referencia a las necesidades de ser, tener, hacer o estar; y la axiológicas a nueve necesidades que, tal como ya hemos indicado, son comunes a toda la especie humana, a todas las culturas, épocas y grupos: necesidad de subsistencia, de protección, de afecto, de entendimiento, de participación, de ocio, de creación, de identidad y de libertad. Ésta clasificación lleva a repensar el contexto social de las necesidades humanas, pues ya no se trata de relacionar necesidades solamente con bienes y servicios que presuntamente las satisfacen, sino de relacionarlas además con prácticas sociales, formas de organización, modelos políticos y valores que repercuten sobre las formas en que se expresan necesidades. En este paradigma de desarrollo alternativo se considera que cada necesidad no satisfecha es un indicador de pobreza, mientras que las satisfechas constituyen riquezas. ENFOQUE CONDUCTISTA Corriente de la psicología inaugurada por John B. Watson (1878-1958) que defiende el empleo de procedimientos estrictamente experimentales para estudiar el comportamiento observable (la conducta), considerando el entorno como un conjunto de estímulos-respuesta. El enfoque conductista en psicología tiene sus raíces en el asociacionismo de los filósofos ingleses, así como en la escuela de psicología estadounidense conocida como funcionalismo y en la teoría darwiniana de la evolución, ya que ambas corrientes hacían hincapié en una concepción del individuo como un organismo que se adapta al medio (o ambiente). Los trabajos de Watson El conductismo se desarrolló a comienzos del siglo XX; su figura más destacada fue el psicólogo estadounidense John B. Watson. En aquel entonces, la tendencia dominante en la psicología era el estudio de los fenómenos psíquicos internos mediante la introspección, método muy subjetivo. Watson no negaba la existencia de los fenómenos psíquicos internos, pero insistía en que tales experiencias no podían ser objeto de estudio científico porque no eran observables. Este enfoque estaba muy influido por las investigaciones pioneras de los fisiólogos rusos Iván Pávlov y Vladimir M. Bekhterev sobre el condicionamiento animal. Watson propuso hacer científico el estudio de la psicología empleando sólo procedimientos objetivos tales como experimentos de laboratorio diseñados para establecer resultados estadísticamente válidos. El enfoque conductista le llevó a formular una teoría psicológica en términos de estímulo-respuesta. Según esta teoría, todas las formas complejas de comportamiento -las emociones, los hábitos, e incluso el pensamiento y el lenguaje- se analizan como cadenas de respuestas simples musculares o glandulares que pueden ser observadas y medidas. Watson sostenía que las reacciones emocionales eran aprendidas del mismo modo que otras cualesquiera. ENFOQUE PSICOANALITICO La psicología de orientación psicoanalítica, como bien lo dice se basa en la aplicación del método psicoanalítico en la práctica psicológica, incluyendo la investigación o construcción teórica. El método psicoanalítico es el análisis de un discurso mediante la constractación dialéctica entre el discurso (teoría) y la experiencia (práctica) a partir de la escucha de las formaciones de lo consiente e inconciente. El psicoanálisis es una teoría psicológica que busca explicar los conflictos que existen en el subconsciente, a través de un análisis del origen de las conductas. Sigmund Freud, autor de esta teoría nos dice que la estructura de la personalidad está compuesta por el ello, el yo y el superyo, y que la salud mental depende de mantener el equilibrio entre éstos. El enfoque psicoanalítico utiliza métodos que se basan en la capacidad del sujeto para cooperar en el análisis de elementos derivados de lo consciente a lo inconsciente, que le son desconocidos, por medio de la interpretación, la asociación libre y la transferencia, principalmente. La orientación psicoanalítica parte de dos principios: ✓ La existencia de procesos mentales inconscientes ✓ La separación de funciones en la mente entre los componentes de la personalidad: yo, ello y superyó. Yo: (ego): Es un ejecutivo de la personalidad (conciente), se dice que es un proceso secundario, porque lleva a cabo lo deseado, por otra parte es un principio de realidad ya que se encarga de resolver la necesidad con lo que se hay. Ello (id): Es el residuo instintivo a nivel placentero (instinto), encargado de mandar las señales relativas a satisfacer una necesidad placentera, así, es llamado proceso primario, ya que es capaz de imaginar algo para satisfacer una necesidad. Por ende es un principio de placer, ya que busca gratificación inmediata. Superyo (super ego): Se convierte en la conciencia (el “debe ser”), es un factor moral, ya que es adquirido a diferencia del ello y del yo, que son principios universales, y al no ser universal es una desventaja. Conjunto de normas morales con una conducta contextual (lo que aquí es bueno en otro lugar no lo es).