CUADRO COMPARATIVO RACIONALISMO EMPIRISMO

¿Qué es el empirismo y que el racionalismo? Entendamos por estas como corrientes filosóficas que proponen la visión, la percepción y el sentir, del mundo; El empirismo nos muestra este desde una perspectiva " humana " , donde el mundo se ve y es tal como lo perciben los sentidos. Por el contrario, en el racionalismo, el mundo se ve y es como lo percibe nuestra razón, desde una perspectiva " espiritual ". Muchos de los racionalistas decían que la razón es el origen del espíritu, diciendo que esta, la razón, es la que puede describir al mundo tal y como es. Estas corrientes filosóficas siempre se han contrapuesto entre ellas, refutándose entre sí mostrando que solo hay una verdad absoluta, diciendo que una no puede ser por que la corriente verdadera es la que dicta como se interpreta el mundo. Estas contraposiciones surgieron en Grecia con Platón, como líder y creador del racionalismo, y Aristóteles, como líder y creador del empirismo. Sin embargo estas corrientes empezaron a ser " reales " después del humanismo, época sucesora al oscurantismo, donde el más influyente racionalista fue Rene Descartes, mostrándonos a la razón como el sistema de pensamiento adecuado para la adquisición de conocimiento. En la misma época, el más influyente empirista fue David Hume, mostrando que la experiencia cumple el papel más importante para obtener una buena percepción sensorial. Para cada corriente sus ideas base, son las más importantes para lograr un entendimiento certero del mundo, para el racionalismo la razón y para el empirismo el sentir, o la experiencia, estas corrientes filosóficas obedecen a los principios filosóficos fundamentales.

Que sea crítico se refiere a que intenta producir conocimiento, aunque esto pueda jugar en contra.

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LE CORBUSIER Y EL RACIONALISMO COMO VANGUARDIA MODERNISTA

El artículo busca introducir a las lectoras y lectores en el emergente paradigma de la complejidad desde un marco referencial semántico-etimológico y epistemológico que invita a "(im)pensar" la racionalidad cartesiano-positivista y sus principios paradigmáticos supralógicos a la luz de una concepción epistémica transclásica.

El objetivo de este artículo académico es documentar y transmitir el maravilloso funcionamiento de nuestro cerebro humano y su racionalidad. El cerebro está formado por zonas diferentes que evolucionaron en distintas épocas. El cerebro humano es el órgano que genera, interpreta e integra las emociones. En consecuencia, los algoritmos fisiológicos ayudan a repetir abandono, ira y ansiedad en la etapa adulta, por lo que se replicarán muchos de los procesos sea cual sea el caso aprendido en la infancia y la adolescencia. Esas partes primitivas del cerebro humano siguen operando en concordancia con un estereotipado e instintivo conjunto de programas que proceden tanto de los mamíferos que habitan en el suelo del bosque como, más atrás aún en el tiempo, de los toscos reptiles que dieron origen a los mamíferos. Cuando en el cerebro de nuestros antepasados crecía una nueva zona, generalmente la naturaleza no desechaba Los recuerdos o conocimientos antiguos; en vez de ello, los retenía, formando la sección más reciente encima de ellos. Una buena comida puede aumentar la sensación de placer ante una compañía. En contraste, la tristeza puede generar la sensación de que el tiempo pasa muy rápido y, en forma crónica, la melancolía nos puede hacer sentir que el tiempo se detiene. La interpretación de las emociones tanto propias como ajenas se da por la activación de neuronas que se encuentran en el giro del cíngulo; ahí la emoción se etiqueta y se proyecta a las regiones superiores. Las emociones tienen un papel fundamental en la vida: con ellas identificamos detonantes para actuar rápidamente ante un estímulo, amplifican la memoria, modifican el estado de alerta y generan conductas para motivar la atención y la comprensión social de nuestro estado de ánimo.