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El lenguaje del tocapu para reescribir la historia

2019, 40° Convegno Internazionale di Americanistica Salerno 9-11 maggio 2018 "Letteratura testimoniale e costruzione della Storia"

Este trabajo abre una nueva línea de investigación sobre el significado del TOCAPU. Es una línea que en futuro podría resultar errónea, nacida únicamente por el producirse de un discreto, aunquesolo casual,número de coincidencias.Sin embargo, es definitivamente una teoría fascinante que merece ser analizada.

Letteratura testimoniale e Costruzione della storia 40° Convegno Internazionale di Americanistica Salerno 9-11 maggio 2018 “Il linguaggio dei tocapukuna per riscrivere la storia” di Cinzia Florio El lenguaje del tocapu para reescribir la historia CinziaFlorio Circulo Amerindiano de Salerno Los tocapukuna (termino de lengua quechua, plural de tocapu) son unos símbolos pertenecientes a las culturas andinas y representan formas geométricas, animales o personajes. Son principalmente delimitados por un cuadrilátero y se encuentran en petroglifos, lozas y tejidos. Vestido inca con tocapukana Muchos estudiosos se han interesado en los tocapukuna para tratar de entender su significado; las hipótesis han sido muchas, entre otras las de una escritura ideográfica, de símbolos heráldicos o de representaciones estilizadas de formas de la naturaleza, pero no se ha llegado a una interpretación por todos compartida debido a la falta de testimonios ciertos. Desafortunadamente, las crónicas españolas no hablan del significado de los tocapukuna y esto puede llevar a pensar que ya en época inca estos símbolos fuesen representados sin conocer su significado, como si se hubieran heredados de un tiempo lejano. De hecho, se pueden encontrar los tocapukuna también en los hallazgos de las antiguas culturas pre-incaicas. Este trabajo ofrece una nueva línea de investigación que en futuro podría incluso resultar errónea, nacida únicamente por el producirse de un discreto, pero solo casual, numero de coincidencias. Sin embargo, creo que esta nueva línea merezca ser por lo menos analizada. Nos desplazamos por un momento al campo de la física y vamos a analizar el trabajo desarrollado por un físico alemán vivido entre 1700 y 1800. Ernst Chladni estudió el fenómeno de la vibración de una superficie sometida a tensión realizando un experimento muy sencillo, pero de gran impacto visivo. Chladni utilizó unas placas lisas de diferentes formas y espesor, fijadas mediante un eje central; esparció en la superficie un polvo fino y con un arco de violín frotó el borde de la placa. Se produjeron de esta forma sonido y vibraciones y las partículas de polvo se movieron, pero, continuando con la tensión, el polvo no se cayó del todo como se podía pensar. En cambio, pasó que el polvo se desplazó en puntos de la placa formando una figura que cambiaba según la frecuencia del sonido, de la forma y del espesor de la placa. Lo que ocurre es que en las zonas de la placa en las que el polvo está sujeto a tensión y donde se ha desplazado hay propagación de sonido y de vibraciones, en cambio, en las zonas de la placa donde el polvo no se mueve y forma unas figuras, el sonido y las vibraciones son ausentes. Podemos fácilmente entender el interés despertado por las figuras de Chladni porque ofrecía la posibilidad de “visualizar un sonido” (concepto definitivamente inusual) y, además, podemos decir que se podía “ver el sonido en negativo”, ya que los patronos se ven donde no hay sonido. El fenómeno, obviamente, no solo se verifica con la vibración producida frotando un arco de violín con una placa, sino también con cualquier otro sonido, incluida la voz humana, canalizado de forma oportuna para hacer vibrar una superficie llana espolvoreada con arena fina. Hay muchos videos en internet que muestran el experimento, por lo tanto, no se aconseja uno en especial, solo se recomienda bajar el volumen ya que los sonidos producidos son muy agudos. A continuación, se presentan algunas figuras de Chladni: figuras de Chladni Volviendo a los tocapukuna, he observado accidentalmente un gran parecido entre un tocapu y una figura de Chaldni. Al principio, he pensado en una simple casualidad, pero me despertó la curiosidad así que decidí comparar unas figuras de Chaldni con unos tocapukuna y he detectado varias coincidencias que se detallan a continuación. (Los tocapukuna representados se han tomado de la página web tocapu.org de Christiane Clados y de Nueva Crónica y Buen Gobierno de Poma de Ayala, en cambio, el petroglifo se encuentra en el templo de Sechin). En la izquierda, se representa en diferentes variantes el tocapu llamado “estructura a diamante con chakana interna”. Se compone de una chakana central, es decir una cruz andina formada por un cuadrado y una cruz sobrepuestos. La chakana está enmarcada en un rombo y en los cuatro ángulos hay cuatro elementos trapezoidales o triangulares o con forma de triángulo recto en cuya hipotenusa están “cavados” tres escalones. Las seis variantes muestran una diferente atención al detalle. Por ejemplo, en el primer tocapu se representa detalladamente la forma de los elementos angulares, en los que podemos distinguir los tres escalones, pero no tiene el rombo rodeando la chakana. En cambio, el penúltimo tocapu tiene el rombo, pero estiliza mucho los elementos angulares. Miremos ahora a la figura de Chladni al lado: si forzamos, haciendo más cuadradas las partes redondas, en virtud de una representación gráfica más sencilla y de una aún más sencilla realización del diseño en el tejido, podemos observar el parecido entre los dos objetos. Además, la figura de Chaldni presenta al mismo tiempo todos los componentes: la chakana interna, el rombo y los cuatro elementos con tres escalones. Es como si el patrón de Chaldni fuera el original, la fuente, y los tocapukuna unas versiones aproximadas o estilizadas del original. Este tocapu llamado a “X” está formado por cuatro secciones longitudinales de pirámides escalonadas que se insertan desde los cuatro lados del cuadrado hasta casi tocarse las cuatro puntas en el centro y crear pues la imagen de la X que separa las cuatro secciones. Al lado, una figura de Chladni en la que, siempre imaginando convertir en cuadradas las líneas redondas, se aprecia un dibujo que sigue la misma lógica de elaboración. Sigamos con la secuencia: En resumen: No puedo afirmar que he dado con la solución, así como no puedo estar segura de que solo se trate de coincidencias casuales, pero considero que la cantidad de correspondencias y su calidad merecen un estudio más exhaustivo. Es posible y razonable pensar que una antigua cultura pre-incaica hubiese llegado a este conocimiento tecnológico y que, en su fase de decadencia, los supervivientes hayan conservado los símbolos, quizás sin entender su naturaleza y les hayan dado un valor religioso. Luego, estos símbolos se habrían transmitido generación tras generación hasta los Incas con inevitables sincretismos sufriendo así modificaciones, coloraciones y la incorporación de ulteriores imágenes, por supuesto no derivadas de las figuras de Chladni. Soy consciente de que comparar las figuras de Chladni y tocapukuna puede resultar atrevido siendo objetos pertenecientes a mundos lejanos en el tiempo y en el espacio. No obstante, la gran semejanza de las figuras parecería llevar en esta dirección. A estas alturas vuelven inevitablemente a la mente las palabras de Heisenberg: «Probablemente es cierto, en general, que los progresos más fructuosos de la historia del pensamiento humano se producen a menudo en los puntos de interferencia entre diferentes líneas de pensamiento. Estas líneas pueden tener su origen en partes totalmente diferentes de la cultura humana, en tiempos y en ambientes culturales diferentes o bien de diferentes tradiciones religiosas. Por lo tanto, si llegan a encontrarse de verdad, o sea si se hallan en relaciones suficientemente estrechas como para dar origen a una verdadera interacción, entonces se puede esperar que nuevos e importantes progresos tengan lugar. WERNER HEISENBERG» 6