Almeida et al Anales Ven Nutr 2014

Artículos La fibra y sus beneficios a la salud Sonia Lorena Almeida-Alvarado1, Tania Aguilar-López2, Deisy Hervert-Hernández1*. resumen: La fibra ha mostrado ser un componente de la dieta esencial para un estado óptimo de salud. El consumo de ésta se encuentra muy por debajo de las recomendaciones por lo que es de suma importancia promover su consumo. En este trabajo se abordan los aspectos más importantes y generales de la fibra dietética, los diferentes tipos y sus funciones, así como su importancia en la prevención de enfermedades no transmisibles como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, así como los desórdenes gastrointestinales y su efecto beneficioso en el control de peso corporal. An Venez Nutr 2014; 27(1): 73-76. Palabras clave: Fibra, salud gastrointestinal, diabetes, enfermedades cardiovasculares, peso corporal. Fiber and health benefits abstract: Fiber is an essential dietary factor to maintain an optimal health status. Given that current fiber consumption does not achieve the recommended daily intake of fiber, the promotion of fiber intake becomes priority. In this work, the most relevant aspects regarding dietary fiber will be summarized, comprising a general overview, definition and functionality, its relevant role in prevention of noncommunicable diseases such as diabetes, cardiovascular diseases, as well as gastrointestinal disorders and weight management benefits. An Venez Nutr 2014; 27(1): 73-76. Key words: Fiber, gastrointestinal health, diabetes, cardiovascular diseases, body weight. Introducción La ibra es fundamental para el adecuado funcionamiento del intestino, pero también ha mostrado ser esencial en la prevención de enfermedades no transmisibles como la diabetes, la enfermedad cardiaca y algunos tipos de cáncer (1). Las recomendaciones de ingestión de ibra dietética se basan en datos de ingesta que han mostrado disminuir el riesgo de enfermedad coronaria (2). De acuerdo con el Instituto de Medicina de los Estados Unidos de América, la ingesta recomendada de ibra dietética es de 14 g/1000 kcal (2). Dado que se consideran los requerimientos de energía por género y grupo de edad, la recomendación de ibra para niños es de 19 a 38 g/d, en función de la edad, y de 25 a 38 g en adultos saludables (3). En México el consumo diario de ibra es inferior a la cantidad recomendada para un estado óptimo de salud. La mediana de consumo de la población adulta en 2006 fue de 20.7 g al día, que representa el 69% de la recomendación diaria de ibra para adultos (30 g/d) (4). Parte del problema de la baja ingestión de ibra, se debe al consumo deicitario de alimentos de origen vegetal 1 2 Kellogg Company, Instituto de Nutrición y Salud Kellogg. Solicitar correspondencia a: Deisy Hervert-Hernández [email protected] ricos en ibra como son verduras, frutas y cereales con alto contenido de hidratos de carbono complejos. Por otra parte, desde el punto de vista sensorial, una característica de los alimentos con alto contenido de ibra es un peril de sabor de baja palatabilidad, principalmente por ser bajos en grasas. Esta necesidad ha instado a que la industria de alimentos formule alimentos de buen sabor y con un alto contenido de ibra que ayude a la población a mejorar su ingesta de ibra (3). Deinición de ibra El término de ibra dietética surgió en 1953, sin embargo, los beneicios a la salud de los alimentos ricos en ibra han sido ampliamente reconocidos a lo largo del tiempo (5). En el año 430 D.C., Hipócrates describió por primera vez el efecto laxante del salvado de trigo (5). En la década de los años 20’s, J.H. Kellogg documentó ampliamente las propiedades del salvado de trigo, destacando las propiedades para promover la laxación, incrementar el peso de las heces fecales y prevenir enfermedades5. En la década de los años 30’s se iniciaron investigaciones sobre la ibra dietética, y no fue hasta los años 70’s que se reiniciaron las investigaciones en el tema (5). La Comisión de Codex Alimentarius, adoptó una deinición para la ibra dietética en junio del 2009, basada en la recomendación del Comité Codex en An Venez Nutr 2014; 27(1): 73-76. 73 La fibra y sus beneficios a la salud Nutrición y Alimentos para Regímenes Especiales (CCNFSDU por sus siglas en inglés) para su aprobación en Noviembre del 2008. Se entenderá por ibra dietética a los polímeros de hidratos de carbono con diez o más unidades monoméricas, que no son hidrolizados por las enzimas endógenas del intestino delgado humano y que pertenecen a las categorías siguientes: t
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Polímeros de carbohidratos comestibles que se encuentran naturalmente en los alimentos en la forma en que se consumen Polímeros de carbohidratos obtenidos de materia prima alimentaria por medios físicos, enzimáticos o químicos, y que se haya demostrado que tienen un efecto isiológico beneicioso para la salud mediante pruebas cientíicas generalmente aceptadas aportadas a las autoridades competentes. Cuadro 1. Clasiicación de ibra con base en sus características (8). Fibra dietética Fibra funcional Fibra soluble Polímeros de carbohidratos sintéticos que se haya demostrado que tienen un efecto isiológico beneicioso para la salud mediante pruebas cientíicas generalmente aceptadas aportadas a las autoridades competentes (6). Sin embargo, esta deinición dejó la inclusión de hidratos de carbono con grados de polimerización en el rango de 3 a 9 a discreción de las autoridades nacionales y dejó pendiente por deinir los efectos isiológicos beneiciosos para la salud. En este sentido, la comunidad cientíica concuerda en mantener un consenso mundial respecto a la inclusión de hidratos de carbono no digeribles con grados de polimerización ≥3 como ibra dietética y en una lista central y no exhaustiva, de los efectos isiológicos beneiciosos que tienen las ibras dietéticas (7). Fibra insoluble Fibra fermentable Tipos de ibra En el Cuadro 1 se describe la clasiicación de ibra dietética de acuerdo a sus características. La ibra funcional consiste en carbohidratos aislados no digeribles que tienen un efecto isiológico beneicioso en los humanos (1), por ejemplo: dextrinas resistentes, psyllium, quitina, quitosano, fructo-oligosacáridos, polidextrosa y polioles (8). La ibra se clasiica también en soluble e insoluble, en un intento de asignar efectos isiológicos de acuerdo con su composición química. La ibra soluble se caracteriza por su capacidad para formar geles, propiedad que hace más lento el vaciamiento gástrico y la absorción de nutrientes, como los azúcares, en el intestino (1). La ibra insoluble pasa a través del colon sin modiicarse, aumentando el peso de las heces por medio de su 74 An Venez Nutr 2014; 27(1): 73-76. Fibra no fermentable Fibra viscosa Fibra no viscosa Lignina Celulosa β-Glucanos Pectinas Gomas Inulina y oligofructosa Alimidón resistente Dextrinas resistentes (e.g. dextrinas del trigo) Psyllium Quitina y quitosano Fructo-oligosacáridos Polidextrosa y polioles Dextrina de trigo β-Glucanos Gomas (e.g. goma guar, goma guar parcialmente hidrolizada) Mucílagos (e.g. psyllium) Pectinas Fructooligosacáridos Algunos tipos de hemicelulosas Fuentes: avenas y productos derivados y leguminosas Celulosa Lignina Algunos tipos de pectinas Algunos tipos de hemicelulosas Fuentes: salvado de trigo y algunas verduras Dextrina de trigo Pectinas β-Glucanos Goma guar Goma guar parcialmente hidrolizada Inulina y oligofructosa Fuentes: avena, frutas y verduras Celulosa Lignina Fuente: ibra de cereales rica en celulosa (e.g. salvado de trigo) Pectinas β-Glucanos Algunos tipos de gomas (e.g. goma guar) Mucílagos (e.g. psyllium) Celulosa Lignina Algunos tipos de hemicelulosas Almeida-Alvarado et al. propia masa y mediante su habilidad de absorber agua. Consecuentemente, las heces voluminosas y suaves aumentan la regularidad intestinal (1). Beneicios de la ibra t
La ibra ayuda a tener heces suaves y voluminosas, lo que es beneicioso en condiciones como la enfermedad diverticular, las hemorroides y la constipación (1). t
Los ácidos grasos producidos por la fermentación de la ibra en el colon pueden proteger contra el cáncer de colon (1). t
Los alimentos con ibra soluble aumentan la saciedad, reducen la ingestión de alimentos y ayudan al control de peso corporal (1). t
Un aumento en el consumo de ibra en general, junto con una reducción en la densidad energética y en la ingesta de grasa, ayudan a prevenir el desarrollo de diabetes y contribuyen a la reducción de peso corporal (1). t
La ibra soluble puede disminuir la absorción de carbohidratos simples favoreciendo los niveles de glucosa en sangre (1). t
La ibra soluble puede disminuir las concentraciones del colesterol LDL. La ibra proveniente de cereales y granos enteros tiene un mayor efecto protector que la ibra proveniente de vegetales y frutas (1). La ibra de los cereales en la prevención de enfermedades Salud gastrointestinal El incremento del consumo de ibra se ha relacionado con una mejor función gastrointestinal. El salvado de trigo se distingue por su capacidad para promover la regularidad intestinal en comparación con otras ibras. Las propiedades de la ibra vinculadas con la función gastrointestinal incluyen su capacidad de fermentabilidad (que conduce a una producción de ácidos grasos de cadena corta como el butirato, principal sustrato energético de las células de la mucosa intestinal y que contribuye a reducir el tránsito intestinal, así como a suprimir la inlamación del colon), viscosidad, capacidad de retención de agua y la estimulación de la proliferación de bacterias beneiciosas (9,10). La ibra también se ha vinculado con la reducción de ciertos tipos de cáncer, principalmente el cáncer de colon. Investigaciones cientíicas han relacionado el efecto del consumo de alimentos de origen vegetal y ibra con la presencia de cáncer. Hallazgos indican una mayor relación con el consumo de ibra insoluble por su capacidad para reducir en el tiempo de contacto de las heces que pueden contener toxinas con las paredes del colon, lo que facilita la salida de los desechos y también se han relacionado sustancias de la ibra que neutralizan las sustancias cancerígenas o su formación (11). Enfermedad cardiovascular La ibra dietética actúa de maneras distintas para prevenir la enfermedad cardiovascular, por un lado ayuda a disminuir la absorción de grasa en el intestino o puede inhibir la formación de grasa por parte del hígado, lo que ayuda a mantener el colesterol en niveles saludables. De acuerdo a un meta-análisis publicado por Pereira et al. (2004), el aumento del consumo de ibra en 10 g al día, puede reducir signiicativamente el riesgo de enfermedades del corazón (12). Por otro lado también se ha visto que algunos componentes de la ibra, probablemente con acción antioxidante, disminuyen el estado de inlamación lo que reduce el riesgo de las enfermedades cardiovasculares y sus complicaciones (12). En términos de muertes debidas a problemas de obstrucción de las arterias coronarias, se encontró: una reducción del 27% de muertes asociado con un consumo adecuado de ibra total, una reducción del 25% asociada con el consumo de ibra de cereales, y una reducción del 30% relacionada con el consumo de ibra proveniente de las frutas (12). Diabetes 2 Se ha demostrado que la ibra dietética proveniente de cereales es un factor protector contra la diabetes tipo 2. En un estudio se encontró que el consumo de ibra dietética estaba inversamente relacionado con el desarrollo de la diabetes tipo 2, mientras que el consumo de frutas y verduras no tuvo ninguna relación13. En una revisión de 8 estudios prospectivos de cohorte se encontró que el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 se redujo con una ingesta elevada de ibra de cereales (reducción de 1840%) (14). Fibras como la de avena y la de granos enteros, particularmente por contener magnesio, han demostrado mejorar la sensibilidad a la insulina (15). Control de peso corporal La ibra dietética, como el salvado de trigo, es útil en la disminución de la densidad energética de los alimentos diseñados para el control de peso. El consumo de alimentos ricos en ibra está relacionado con una ingesta menor de alimentos así como un peso y composición corporal más sanos16. Diversos estudios han reportado un incremento en la saciedad y una disminución del apetito con dietas altas en ibra (12). Un aumento de 14 g de ibra/día se asoció con una disminución del An Venez Nutr 2014; 27(1): 73-76. 75 La fibra y sus beneficios a la salud 10% de la ingesta energética y una pérdida de peso en promedio de 1.9 kg en 3.8 meses de intervención (16). Se han propuesto varios mecanismos para explicar la relación entre la ibra y el manejo del peso incluyendo: la baja densidad calórica de la ibra, que los alimentos con mayor contenido de ibra requieren un mayor esfuerzo y tiempo en el proceso de masticación, además de que un aumento en la masticación promueve la distensión gástrica, un retraso del vaciamiento gástrico, estimulación de hormonas gastrointestinales y una reducción de la energía que se obtiene por la digestión (17). Conclusiones Los diferentes componentes de la ibra dietética proveen beneicios para la prevención y el tratamiento de enfermedades crónicas como las afecciones cardiovasculares, la diabetes mellitus, el cáncer y la hipertensión arterial, entre las más estudiadas. El aumento de ibra en la dieta debe realizarse en forma paulatina para evitar efectos adversos como la distensión abdominal. A pesar de la evidencia cientíica que sustenta el efecto beneicioso del consumo de ibra dietética, su ingesta es deicitaria en la población de México y la situación podría ser similar en otros países de América Latina. Un aporte adecuado de ibra dietética, a través de una dieta abundante en cereales, leguminosas, verduras y frutas, en conjunto con un nivel adecuado de actividad física, es favorable en la prevención y el tratamiento de las enfermedades crónicas descritas. Agradecimientos S.L. Almeida-Alvarado y D. Hervert-Hernández son empleados de Kellogg Company. T. Aguilar-López colabora para el Instituto de Nutrición y Salud Kellogg’s. Referencias 1. 2. 3. 4. 76 Stanton C, Carapetis M, Phillips P. Fibre facts: dietary ibre. Medicine Today 2007; 9(2): 63-68. Slavin JL. Position of the American Dietetic Association: health implications of dietary iber. 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