Academia.eduAcademia.edu

Como reconocer el arte romanico

AUTOGUÍA Ermita de San Bartolomé Ucero L a ermita de San Bartolomé se ubica en un bello paraje del Parque Natural del Cañón del Río Lobos, considerado uno de los puntales turísticos de la provincia de Soria y uno de los espacios naturales más visitados de Castilla y León. Mucho y variado se ha escrito sobre esta ermita tardorrománica de la primera mitad del siglo XIII, y cuya visión, para algunos mistérica y esotérica, la han popularizado y convertido en un lugar admirado y controvertido, por encima de cualquier otro templo en nuestra provincia. Sobre ella dice textualmente la Enciclopedia del Románico en Castilla y León. Soria, vol. III: “Si hay un monumento soriano que ha provocado admiraciones y controversias ése es la ermita de San Bartolomé de Ucero. Su magnífica arquitectura, algunos de los recursos decorativos que emplea, su ubicación en un paraje natural sobrecogedor, unidos a una forzada e interesada interpretación de las fuentes históricas, han dado lugar a que este sitio se haya convertido en un centro de peregrinación de “templaristas”, “esotéricos” y de una legión de curiosos que tratan de encontrar aquí la quintaesencia de la religiosidad medieval, el ombligo de la Cristiandad y mil alquimias para tratar de explicar lo inexplicable. Pero nada de eso hay en San Bartolomé, tan sólo un edificio más, levantado en un momento que sembró de templos similares el mundo cristiano, a veces magníficos, casi siempre mucho más pobres y en ocasiones buscando lugares de recónditas orografías.” Sus orígenes la relacionan con la encomienda templaria de San Juan del Otero, pero no hay documentación fidedigna que sitúe aquí tal encomienda, y sí en la población soriana de Matute de la Sierra y su cerro de San Juan o de la Trinidad donde aparece documentada en la “Chrónica de las tres Ordenes y Cavallerías de Santiago, Calatrava y Alcántara” de Francisco de Rades y Andrada publicada en Toledo en 1572. Su nombre actual de San Bartolomé se identifica con la Comunidad de San Bartolomé que componen los términos de Herrera de Soria, Ucero y Nafría de Ucero. Textos José María Capilla Fotografías Proyecto Cultural Soria Románica y Fundación Santa María La Real Ermita de San Bartolomé Proyecto de Cooperación Ucero Ermita de San Bartolomé Interior Ucero Vista norte de la ermita Exterior Asentada sobre un peñasco de roca natural, se alza este templo del siglo XIII construido en sillería caliza, orientada al este, hacia el río Lobos, y en ligero descenso. De planta de cruz latina, con ábside semicircular, nave única y crucero. Adosada a la iglesia, en su parte norte, vemos la sacristía del siglo XIX. La portada (1) destaca en el muro meridional con un arco apuntado formado por seis arquivoltas decoradas austeramente con motivos vegetales y molduras geométricas, arcos que se sustentan en pequeñas columnas y en pilastras, que dan al conjunto un bello y equilibrado aspecto. La arquivolta superior queda enmarcada por una fila horizontal de canecillos. Este tejaroz consta de una cornisa aristada, de amplia moldura cónica y sostenida por una decena de canecillos. Entre otras figuras hallamos un hombre con tonel, cuatro cabezas con yelmos enfrentadas, dos danzantes y una cabeza tonsurada. En los hastiales de las capillas encontramos sendos óculos, estupendos ejemplos de celosías románicas, esculpidas en una sola pieza de piedra, alarde técnico de extraordinaria belleza. 5. Capilla de la Virgen de la Salud En la capilla correspondiente al lado norte se encuentra el retablo de la Virgen de la Salud, obra barroca del siglo XVIII, y ante él, en el pavimento, una piedra decorada con una roseta que destaca sobre el resto. Al entrar en la ermita destaca la perfecta sincronización con sus formas exteriores, una correspondencia y homogeneidad que ensalzan aún más su arquitectura prístina y bella. La nave y el presbiterio tienen la misma altura y anchura, una singularidad que aporta mayor unidad espacial al interior del edificio. La nave central consta de tres tramos cubiertos con bóveda de cañón apuntado. En el tercer tramo se abren las capillas laterales, que forman el crucero, a través de arcos apuntados apoyados sobre enormes ménsulas. En el interior, ambas capillas constan de bóveda de cañón apuntado, perpendicular al eje de la nave y en el muro correspondiente al hastial presentan sendos arcosolios (2) utilizados como enterramientos. 6. Coro En el muro de los pies, los Vista general de la nave 4. Capilla Mayor El ábside de la ca- pilla mayor tiene bóveda de ojivas con dos nervios que descansan sobre ménsulas con decoración vegetal. En el centro, preside la iglesia un retablo barroco del siglo XVIII con la imagen de San Bartolomé en la hornacina central. 3. Capilla del Santo Cristo En el lado sur se encuentra la capilla que está presidida por el retablo del Santo Cristo, talla barroca del siglo XVII. sillares se apoyan directamente sobre la roca natural. Aquí está situado un moderno coro de madera, y algunos rastros en el muro delatan otra estructura de madera anterior, contemporánea a la fábrica del templo, que podría estar relacionada con la estrecha puerta que se abre en el hastial. Puede verse en uno de los apoyos una cabeza humana muy tosca y otros dos capiteles vegetales, muy deteriorados, utilizados ahora como soporte de un banco, sin relación aparente con el resto de la escultura del templo. En general, la decoración escultórica no se corresponde con la excelente calidad arquitectónica del edificio. En la decoración de los canecillos se aprecian dos manos que trabajan a la vez, ya que todo el edificio fue construido en un mismo momento. La ermita apenas presenta alteraciones con respecto a sus formas originales y prácticamente ninguna restauración destacable, lo que permite la contemplación del templo en su pureza primitiva. PLANTA 2 5 6 4 1 Entrada Ermita de San Bartolomé con el río Lobos a sus pies Portada (1) 3 2 Capiteles del arco de triunfo Arcosolio de la capilla meridional (2) Estilísticamente, esta ermita es una construcción románica de transición al gótico. Este estilo de transición que se inicia en Castilla entre los años 1170 y 1225, coincidiendo con la expansión cisterciense, se consolida en Soria hacia 1232 con la construcción de la Catedral de El Burgo de Osma y esta ermita de San Bartolomé en el Cañón del Río Lobos que está considerada como uno de los edificios medievales sorianos más representativos.