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Ritual and noise.

2010, The Journal of the Acoustical Society …

Abstract

A partir de un análisis etnográfico de rituales primitivos se analiza la evolución de la producción de ruido en diferentes tipos de ritos hasta la sociedad contemporánea. Se discute la definición de rito, ruido y la concatenación de estímulos sobre las personas que hace que los ritos produzcan hábitos y en cierto sentido sean adictivos. Se describe el uso de ruidos en rituales de tipo tribal, religioso, deportivo, políticos y festivos.

2nd Pan-American and Iberian Meeting on Acoustics 15 – 19 November 2010 160th ASA meeting 7o Congress FIA 17o Congress IMA CANCUN – MEXICO Session Code: 4aNSb RITUAL Y RUIDO Ritual & Noise Roberto Rebolloso Sociology Faculty. Philosophy and Language Arts School. Universidad Autónoma de Nuevo León. [email protected] Fernando J. Elizondo-Garza Acoustics Laboratory. Mechanical and Electrical Engineering School. Universidad Autónoma de Nuevo León. P.O. Box 28 “F” Cd. Universitaria, San Nicolás, 66450, N.L., México Tel.+ 52 81 83294020 Ext. 5854. [email protected] RITUAL Y RUIDO Ritual & Noise Roberto Rebolloso Sociology Faculty. Philosophy and Language Arts School. Universidad Autónoma de Nuevo León. [email protected] Fernando J. Elizondo-Garza Acoustics Laboratory. Mechanical and Electrical Engineering School. Universidad Autónoma de Nuevo León. P.O. Box 28 “F” Cd. Universitaria, San Nicolás, 66450, N.L., México Tel.+ 52 81 83294020 Ext. 5854 [email protected] Resumen A partir de un análisis etnográfico de rituales primitivos se analiza la evolución de la producción de ruido en diferentes tipos de ritos hasta la sociedad contemporánea. Se discute la definición de rito, ruido y la concatenación de estímulos sobre las personas que hace que los ritos produzcan hábitos y en cierto sentido sean adictivos. Se describe el uso de ruidos en rituales de tipo tribal, religioso, deportivo, políticos y festivos. Palabras clave Ritual, ruido, evolución, historia, Abstract Starting from an ethnographic analysis of primitive rituals, the evolution of the production of noise in different kind of rites is analyzed up to the contemporary society. The definition of rite and noise, and the concatenation of stimuli on people produced by rites that induce habits -that in a certain sense are addictive- are discussed. The use of noise in tribal, religious, sport, political and festive rituals is described. Keywords Ritual, noise, evolution, history PACS: 43.50.Qp I. INTRODUCCIÓN Los ritos son intrínsecos y necesarios a los hombres. Provienen de su naturaleza y han devenido en organizaciones sociales masivas y formales planeadas con diferentes fines que van desde la simple solidaridad social hasta el lucro. Es indiscutible que los ritos han sido desarrollados por los humanos desde sus estadios más primitivos hasta la actualidad, pasando por sus formas de rito tribal, religioso, político, deportivo o simplemente de negocio de entretenimiento, quedando su realización bajo el control de organizaciones, lideres o empresarios cuyos fines no siempre resultan claros o positivos y cuyos intereses pueden ser o no ser reconocidos conscientemente por parte de los participantes. Este último aspecto, se ha expandido en forma alarmante debido al desarrollo de una sociedad de consumo, la cual ha encontrado en el infoentretenimiento una de sus herramientas principales de evasión y obtención de placer. En esta conferencia se abordarán primeramente las definiciones de ruido y rito, se analizaran etnográficamente los ritos a lo largo de la historia, para reconocer sus funciones, características y fines, para discutir por último las funciones del ruido en los actos rituales de la vida cotidiana. II. DEFINICIONES II.1. Ruido Las definiciones de ruido son muchas y varían de idioma a idioma, en parte debido a que sus raíces son diferentes. Como ejemplo podemos comparar: “noise” en inglés, que proviene del inglés medieval, del francés antiguo y quizás del latín nausea, que significa mareo (seasickness) y que en latín vulgar significa molestia [1], con “ruido” en español que tiene sus raíces de la palabra en latín rugĭtus, que significa "rugido", que en latín vulgar tomó ya el sentido de "estruendo" [2,3]. Debido a las muchas variaciones entre idiomas, antes de empezar la discusión sobre el tema de este trabajo definiremos ruido de acuerdo a las principales acepciones relacionadas con los fines de esta ponencia [4]. D1.- Cualquier sonido con muy alto nivel de presión sonora. D2.- Cualquier sonido que moleste o dañe a las personas. D3.- Cualquier señal indeseada que interfiere la transmisión, percepción o interpretación de una señal útil. D4.- Cualquier sonido de espectro continuo o muy complejo. Generalmente el ruido se interpreta, o presenta, como algo negativo; pero realmente si por algo se sigue produciendo actualmente, aún con tantos reglamentos que lo prohíben, es porque realiza alguna función útil a los hombres o se le considera necesario [5]. II.2. Ritual En cuanto a ritual, el término proviene del latín rituālis, las definiciones de los diccionarios son pobres y mayormente centradas en los ritos religiosos, por lo que para la comprensión del concepto hay que ir a la literatura de humanidades, donde se abordan los aspectos que subyacen a los ritos y que permiten comprender los rituales en un sentido amplio y, sobre todo, contemporáneo, dado que un gran número de ellos ya no son de carácter religioso. En primera instancia hay que entender el rito como: Una serie de acciones, realizadas principalmente por su valor simbólico, que es prescrita por una religión o por las tradiciones de una comunidad [6]. Una actuación significativa institucionalizada acompañada de palabras ilustrativas dentro de un contexto fijo según un orden de prelación/exclusión de las acciones tendiente a producir ciertos efectos, al menos psicológicos y sociales [7]. Entre sus características más importantes [8] se encuentran que: Es tanto un acto colectivo (social) como un comportamiento personal. Es una práctica periódica de carácter público. Los rituales son formales, esto es: estilizados, estereotipados, tienen un orden preestablecido. El rito genera, en algunas personas, una forma de adicción, pues se desea volver a él. El rito facilita el adoctrinamiento al mantener bajas las defensas intelectuales, por el bajo cuestionamiento resultado de tener los sentidos saturados. El rito promueve el gasto para sostener el estado de estimulación. En cuanto a la mecánica de los ritos hay que tener claro que por ser un acto intencional, deben planearse, organizarse y ejecutarse de acuerdo a un guión que deje espacio a la improvisación y a las variaciones. Un aspecto importante de los rituales son sus funciones, y hay que separar las que se relacionan con los organizadores, de las que tiene para el seguidor. El ritual se puede valer de un amplio rango de elementos o herramientas para su realización como pueden ser: ofrendas, oración, sacrificios, autosacrificios, posesión, visión, danza, cantos, gritos, música, procesiones, combates, etc. Desde las épocas más primitivas los rituales, para potenciar las percepciones, y así aumentar la comunión y la predisposición a la aceptación, se han valido de substancias químicas: alimentos estimulantes, alcohol, drogas, etc. [9, 10, 11]. Para que se logre la inmersión total de los participantes en el ritual es importante el control sensorial de los participantes, esto es la generación de acciones o condiciones que activen todos los sentidos en las personas, estimulándolos: visual, auditiva, táctil, olfativa y gustativamente, aislándolos así de su cotidianidad. En la dimensión auditiva, los sonidos desde las épocas primitivas forman parte importante de los ritos, y dentro de ellos los ruidos tienen un lugar muy especial. III. APROXIMACIÓN ANTROPOLÓGICA Y ETNOGRÁFICA AL RITO Y AL MITO Entre los principales teóricos de la antropología se encuentran M. Mauss, C. Lévi Strauss, A. Van Gennep, Victor Turner y C. Geertz quien señala que “En un acto ritual, el mundo vivido y el mundo imaginado, fusionados por obra de una sola serie de formas simbólicas, llegan a ser el mismo mundo y producen así esa idiosincrática transformación de la realidad” [12]. En este sentido quisiéramos destacar la visión antropológica de Marcel Mauss quien había señalado como principio base el factor “reciprocidad”, un elemento que describe ampliamente en su libro clásico El don, en el que reconoce el intercambio, o más exactamente la comunicación de los bienes y la prestación de los servicios sin una contrapartida directa o inmediatamente observable, como una forma general de comunicación social: “La cosa entregada no es inerte, sigue teniendo algo de él; mediante ella el donador tiene un poder sobre el beneficiario…” [13]. En las sociedades simples intercambian bienes de manera natural, constituyéndolo en una forma primaria como es el caso del Circulo Kula donde cada miembro entrega un objeto a otro miembro que va circulando hasta regresar hasta su punto de origen o el Potlash, un sistema de intercambio que ayuda a la tribu a mantenerse organizada por niveles jerárquicos y sociedades secretas en base al intercambio de bienes. En el fondo el Potlash es una red de ritos con reglas e ideas. A partir de ese concepto Levi Strauss elabora toda su teoría del intercambio, que posteriormente explica con el método estructural (oposiciones binarias). Paralelo a este concepto, Van Gennep introduce la siguiente definición de ritos de pasaje: Customs associated with the transition from one place or stage of life to another, which are found through out the world. (Van Gennep citado por Kottak [8]), los cuales tienen las siguientes características: Son formales. Estilizados. Repetitivos. Estereotipados. Incluyen un orden litúrgico (secuencias de palabras en acción inventadas previamente al ritual en que se usan). Son actos sociales. Por otro lado Kottak dentro de la línea de la antropología simbólica establece el siguiente concepto: Rituals serve the social function of creating temporary or permanent solidarity among people, forming a social community. En este sentido podemos destacar el papel del rito como eje central de la comunidad, que posteriormente discutiremos. Baste mencionar por ahora el caso de los ritos aztecas o mesoamericanos que contribuyen a darle solidaridad a la comunidad, mediante rituales minuciosos y complejos, que absorben una parte del tiempo y de los recursos de las sociedades autóctonas y que exigían la participación de un clero numeroso y la participación de la población. Estos ritos estaban basados en un pensamiento religioso, constituidos a partir de una serie de mitos, que a continuación trataremos de aclarar. El rito primitivo reproduce la ley biológica de los ciclos naturales lo que a la larga se convierte en los grandes complejos ceremoniales (ritos de iniciación, funerales, etc.), que luego generan un simbolismo ritual cargado de cantos, movimiento y gritos. Estos ritos responden a los mitos que se van creando en la vida colectiva. A continuación se discutirá el concepto de mito. Un mito (del griego μῦθος, mythos, «relato», «cuento») es un relato tradicional de acontecimientos prodigiosos, protagonizados por seres sobrenaturales o extraordinarios, tales como dioses, semidioses, héroes o monstruos [14]. Según explica Fages, el mito se lee como una partitura musical, dejando de lado las frases musicales e intentando leer la página entera: Cada página es una totalidad. “El mito y la música encierran profundas analogías estructurales. Ambos se nutren de un continuum externo, de un venero de acontecimientos sociales (mito) o un venero de sonidos físicamente realizables”. Ambos operan a partir del “continuum interno: el tiempo psicológico, de la narración mítica, y el tiempo fisiológico “visceral” de la ejecución y la audición musicales. Y sobre este tiempo “visceral” opera la música por medio de dos patrones: el patrón natural de los ritmos orgánicos y el patrón cultural de los sonidos musicales, o sea su escala o gama [14]. Lévi-Strauss en sus “mitológicas” [15,16] desarrolla el siguiente mito clasificado como el M170. Tsimshian: Historia de Nalq. “En los tiempos antiguos los jóvenes acostumbraban reunirse por la tarde detrás de las casas. Se divertían y hacían mucho ruido hasta hora avanzada de la noche. Irritado por el alboroto, el cielo hizo descender una pluma mágica que los jóvenes intentaron atrapar al vuelo. Pero el primero que consiguió cogerla fue levantado por los aires y luego, en larga cadena, todos los demás, cada uno de los cuales quería retener a su predecesor agarrándole los pies. Cuando esta fila humana se apartó por completo del suelo, la pluma escapó y los jóvenes, carentes así de asidero, cayeron y se aplastaron. No sobrevivió ni uno. Sin embargo una mujer joven se había quedado en casa pues acababa de dar a luz. Le nace una serie de hijos milagrosos. Enterados de la suerte de su familia, deciden vengarla y provocan de nuevo al cielo para que les envíe la pluma, de la que consiguen apoderarse. Provistos de este talismán emprenden un periplo celeste y acaban por desposarse con los vientos de los cuatro puntos cardinales, de los que fijan los respectivos regímenes, que conservan hasta la fecha” [15]. Las sociedades, no importando su nivel de evolución, han desarrollado un lenguaje ligado a su estructura de organización, conocidos como ritos. Cada sociedad construye sus ritos en función del ciclo vital, nacimiento, adolescencia, matrimonio y muerte, así como otros ritos por acontecimientos extraordinarios: guerras, desastres, etc. Estos ritos significan una forma de intercambio o una manera de reciprocidad a veces hasta violenta, pero en la que todos colaboran para un mismo fin: sobrevivir y darle sentido a la comunidad. De esta manera a través de los ritos se construye la identidad según las describen distintos antropólogos, de tal manera que se puede reconstruir una sociedad en base a las distintas formas rituales. De hecho muchas de las etnografías son escritas en base a la observación de los ritos, por ejemplo los rescatados por Fray Bernardino de Sahagún en su Códice Florentino [17]. Es importante señalar que en los ritos una de las herramientas conceptuales más importantes es la “oposición”, esto es, el planteamiento de un “contraste entre opuestos”, el cual es básico para establecer la finalidad del rito pues la opción parte de la existencia de un sistema de opuestos, una dialéctica, que permite la existencia de un continuo donde uno se posiciona. Estos opuestos: bueno-malo, noche-día, sonido-silencio, frío-caliente, plantearan los límites del posicionamiento de opinión en los humanos. Existe una gran variedad de rituales, entre los que destacan por su objetivo los de: Reforzamiento del mito. Integración con la naturaleza. Curación. Paso. Enfasamiento a un ciclo. Combate. Deportivos (derivado de combate). Excitación. Identificación / cohesión. Distracción. Sacrificio. Entender los ritos en su forma actual requiere remontarnos a siglos anteriores, desde que las sociedades estaban en batalla continua, en lucha abierta, hasta llegar a los tiempos de paz. Cada avance en ese sentido se dio gracias a los sistemas alternos que significaron por ejemplo, las olimpiadas como un mecanismo directo de salida de las energías individuales y colectivas. Cada soldado convertido en un atleta, saca lo mejor de si mismo a través de las competencias contra otros de la misma carga energética. Las olimpiadas han significado a lo largo de la historia una canalización de la agresión y la violencia del quehacer guerrero, hasta cierto punto sublimada. Los ritos en las olimpiadas se asemejan a los de la guerra y se escenifican en cada deporte, cuerpo, volumen, velocidad y especialmente sagacidad para ganar. Además del uso del cuerpo, es la estrategia del vencedor lo que se premia. En este caso hemos visto los ritos como parte de una ideología construida sobre cosmogonías y religiones que se basan en visualizar el quehacer humano siempre en competencia. La transformación de los ritos ha sido en la forma más que en el contenido. Hoy día, los ritos actuales, al igual que los medievales, siguen siendo parte sustancial de cualquier acontecimiento o celebración, no importando la posición social, siempre tienen una estructura ritual sea esta militar, eclesial, deportiva o educativa. Lo que si ha cambiado es la forma masiva y los alcances que estos rituales tienen, por ejemplo un escenario de fútbol está lleno de elementos rituales: gritos, cantos, movimientos corporales masivos (como la ola, porras, cerveza, etc.) y un sinfín de elementos que componen la liturgia futbolera semana a semana. IV. RUIDO Y RITO Específicamente en cuanto al uso del ruido en los actos rituales, estos se relacionan con varios esquemas funcionales, por lo que primeramente listaremos algunas de las funciones que el ruido realiza para las personas. Entre éstas se puede mencionar su utilidad como: alarma, barrera acústica, para llamar la atención, mecanismo de agresión, excitador del sistema nervioso, compañía virtual, desfogue de tensiones, generador de emociones, transición, contraste, etc. Durante los ritos, las funciones más importantes de los ruidos son, entre otras: Excitar el sistema nervioso. Desfogar tensiones. Generar emociones. Producir contraste. Apoyar una transición. Llamar la atención o distraer. A continuación profundizaremos, sin pretender ser exhaustivos, en los usos del ruido para cumplir dichas funciones en los rituales y otros aspectos relacionados. Es importante iniciar analizando la fuente de ruido natural más importante de los humanos “el grito”, y su gran poder liberador cuando es usado para desfogar emociones. Por supuesto que el grito combinado de una comunidad durante un rito es un gran generador de ruido y puede tomar diferentes vertientes, desde apoyo hasta rechazo, desde pena hasta alegría. Por otro lado miles de personas cantando nunca estarán 100% enfosados en tiempo, frecuencia o amplitud, por lo que su espectro tiende a volverse mas complejo, lo que permite aumentar el volumen del ruido así como ocultar a los desafinados al tiempo que aumenta la sensación de cohesión social. Si al sonido de las voces le agregamos instrumentos sonoros como tambores, trompetillas, silbatos, etc. el ruido puede ser mucho mayor. En el desarrollo de los ritos los ruidos pueden ser usados para la generación de contraste emocional (clave básica de la teatralidad del rito). En cuanto a la generación de contraste esto se logra mediante la producción de opuestos, por ejemplo pasando del silencio a sonidos de alto volumen, de un sonido espectralmente simple a un ruido (espectro continuo banda ancha) o mediante el cambio tonal del ruido (o sonido) de graves a agudos. En cuanto a las transiciones, por supuesto que son de gran utilidad para mantener la atención y evitar el aburrimiento, así como, por supuesto, para: generar “sorpresa”, apoyar o “acentuar” algún acto o mensaje o “llamar la atención” para que todos escuchen algún mensaje específico. El desarrollo del audio ha permitido potenciar el ruido en los ritos, gracias a la amplificación y a la generación de instrumentos mejores y sintetizadores, que permiten un repertorio mayor de ruidos que prácticamente pueden cubrir todo el rango audible de las personas e incluso llegar a dañar la audición. Otro aspecto importante es la generación social de un repertorio de códigos acústicos desarrollados a partir del teatro, pero principalmente por el cine mediante las cuales se dispone de un herramental sonoro para transiciones, efectos y preparación a cambios de emociones, que son muy empleados en la actualidad y que incluye no sólo sonidos de gran nivel sonoro sino ruidos con diferentes características espectrales. Un aspecto de la sociedad contemporánea consumista y adicta a la estimulación sensorial ha vuelto en cierto sentido al ruido en un rito en si. Esto es que, durante las noches de fin de semana y en los tiempos libres, miles de personas salen en busca de ruido, esto en discotecas, bares, iglesias, eventos deportivos, etc. Por otro lado, también se ha dado un miedo social al vacío, por lo que el silencio, para muchos, en lugar de algo deseable se convierte en algo angustiante y de lo que hay que huir. V. COMENTARIOS FINALES El rango de los rituales se ha ido ampliando con el paso de los siglos, pasando de los actos cosmogónicos/religiosos a los sociales, políticos, deportivos y de entretenimiento, con un muy amplio rango de variantes. Los ritos son necesarios a los humanos y esto ha producido que se haya generado un lado oscuro en ellos, que es necesario desencriptar, pues producen un gran número de manipulaciones sociales de variable moralidad y múltiples negocios, algunos francamente no éticos. El ruido ha sido, es y será una de las herramientas principales de los actos rituales, esto debido a las diferentes funciones que puede prestar a los humanos. El desarrollo de la ciencia ha potenciado la capacidad humana de generar ruido, y. en el caso de los rituales, la tecnología se ha ido integrando al herramental conceptual e instrumental disponible para su realización. Por desgracia el ruido además de servir a los humanos provoca efectos indeseables en las personas, los cuales van desde daños auditivos por exceso de exposición a altos niveles de ruido, hasta molestias por interferencia al sueño de los vecinos de un evento, lo cual puede ocurrir incluso con niveles sonoros relativamente bajos. En la actualidad, en sociedades llenas de reglas, que parecen no frenar a los humanos, el reenfocar y diseñar rituales que promuevan la felicidad humana, en un perfil de ética y no riesgo, es una necesidad urgente de la sociedad. VI. REFERENCES AND BIBLIOGRAPHY 1. 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Fundada en la documentación en lengua mexicana recogida por los mismos naturales. (Tomo I, II, III y IV.) Editorial Porrúa, México. 2002. PAGE \* MERGEFORMAT 7 2nd Pan-American and Iberian Meeting on Acoustics 15 – 19 November 2010 Cancun, Mexico