Acta del paso de la vida,
testigo fiel del transcurrir del tiempo,
prueba, irrefutable y cruel, del hoy y del ayer.
(De "Belleza cruel", cap. III, "De ahora y de siempre")
domingo, 28 de marzo de 2010
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Sí, esos retratos son como enemgos.
ResponderEliminarBien dices, Ana.
ResponderEliminarBesos.
Y ¿lo vivido?
ResponderEliminarLo vivido, vivido está; lo preocupante es el porvenir: cuánto y cómo se vivirá. Te remito al poema "El porvenir", pág. 111.
ResponderEliminarUn abrazo.