Reciclaje Guada
Reciclaje Guada
Reciclaje Guada
Aumento de la contaminación
La primera consecuencia de no reciclar es el aumento de la contaminación. Hay muchos tipos
diferentes de contaminación que van desde la espuma de poliestireno que transporta el océano y las
botellas de agua que conviven con la fauna marina, hasta químicos corrosivos que se derraman en el
suelo y lo dejan inerte. El aire también se contamina cada vez que los coches emiten dióxido de
carbono, cada vez que se queman sustancias tóxicas, o que una empresa libera gases químicos.
Acumulación de basura
Cada año durante los últimos 30 años, la Agencia de Protección Ambiental ha recopilado y reportado
información valiosa sobre la cantidad de residuos sólidos que las personas generan a diario. El
informe de 2018 establece que las personas producen más de 260 millones de toneladas de
desechos sólidos. De esta cantidad, 88 millones de toneladas representaban materiales reciclables
que fueron reutilizados; alrededor de 40 millones de toneladas se sometieron a combustión, para
convertirlos en energía utilizable para combustible, calor y electricidad. Y un poco más de la mitad, o
132 millones de toneladas, fueron a vertederos. Sin el reciclaje y la combustión, los 260 millones de
toneladas habrían llenado los vertederos y comenzado a acumularse
Incremento de los gases de efecto invernadero
La tierra ha sufrido múltiples cambios climáticos desde su creación, todos ellos parte de sus procesos
naturales y su larga evolución. Pero desde la revolución industrial esto se ha desbordado. Hoy en
día, nosotros somos los principales contribuyentes al calentamiento del planeta, principalmente por
los conocidos gases de efecto invernadero (metano y dióxido de carbono) que se desprenden de
industrias, escapes de automóviles, consumo de electricidad, entre otros
Nuevas producciones
El hecho de tener que crear nuevos productos desde cero, no solo agota al medio ambiente de sus
recursos, sino que también puede ser económicamente costoso. Por ejemplo, hacer botellas de agua
nuevas requiere una cantidad masiva de aceite cada año y, por lo tanto, genera más desperdicios y
contaminación química.
Contaminación de los océanos
Para alguna de nuestras ciudades costeras, muchos de nuestros desechos
terminan en el océano y mares, y esto incluye una gran cantidad de materiales
que pudieron haber sido reciclados. De hecho, una de las principales
preocupaciones sobre los desechos es la cantidad de plástico que termina en
el mar. Este material puede durar cientos de años en el agua y se convierte en
un peligro importante para la vida de los animales oceánicos, como tortugas
marinas o peces. Pueden morir por inhalar pequeños trozos de plástico o por
quedarse atrapados en trozos largos de plástico sueltos.
Mayores producciones
Hoy en día, las producciones crecen más rápido de lo que el material puede
descomponerse. Hay que tener en cuenta que la mayoría de los materiales
reciclables no se descomponen fácilmente. Los plásticos y metales pueden
durar de cientos a miles de años, ¡en realidad una botella de plástico necesita
por lo menos 450 años para descomponerse totalmente!. Por lo tanto,
debemos empezar a comprender por qué el reciclaje es tan importante para
salvar al planeta y a todos los que vivimos en él.
¿EN QUE NOS BENEFICIA RECICLAR?
• 1. Reciclar fomenta el consumo responsable
• Nuestra sociedad fomenta un estilo de vida caracterizado por la compra de muchos
productos que tienen una vida cada vez más corta.
• Este consumo poco responsable va asociado al derroche y al desperdicio de residuos, lo
que conlleva un agotamiento de los recursos y un perjuicio para el medio ambiente.
• Un ejemplo muy gráfico se puede apreciar en que, como consecuencia de no reciclar, cada
año entre cinco y trece millones de toneladas de residuos de plástico terminan en los océanos de
todo el mundo. El reciclado contribuye eficazmente a evitar este tipo de accidentes
medioambientales.
• 2. Reciclar ahorra recursos naturales
• Cada vez que reutilizas un producto, ahorras la misma cantidad de material que se
necesitaría para fabricar uno nuevo.
• En este sentido, se estima que las emisiones de producir un nuevo producto a partir de
materiales reciclados es un 20% menor que si provienen de nuevos materiales
• 3. Ahorra energía
• Fabricar un producto nuevo significa empezar de cero el proceso de producción, lo que
conlleva un importante consumo de energía. Si ese producto utilizara materiales reciclados, ciertos
pasos del proceso de elaboración se omitirían y se ahorraría dicha energía
• 4.Reciclar disminuye la dependencia del petróleo
• La conservación de la energía mediante el uso de productos
reciclados reduce la dependencia económica del petróleo. En este sentido, el
petróleo es el ingrediente principal de la industria de la fabricación de plástico,
por lo que el uso del plástico reciclado conserva este recurso no renovable y
cada vez más escaso en el planeta.
• 5.Reciclar ahorra dinero y crea empleos
• Además de todos estos beneficios señalados con anterioridad, la
industria del reciclado es un sector beneficioso para la economía, ya que
genera multitud de empleos.
¿Qué materiales podemos reciclar?
Antes de desechar algún material, debemos considerar si son cosas que se pueden
reutilizar. Gran parte de lo que consumimos se puede reciclar. En el hogar, algunos de los
materiales que se pueden reciclar y reutilizar incluyen:
Existen también residuos especiales que sólo deben ser desechados / reciclados en
lugares específicos, tales como:
Electrónicos
Textiles
Aceite vegetal
Cadena de reciclaje
Para comprender el proceso del reciclado, necesitamos conocer cada una
de las diferentes etapas de la cadena del reciclado:
Recuperación de desechos: Esta etapa puede estar realizada tanto por
individuos aislados como empresas de carácter público o privado, la cual
consiste tan solo en la recolección de los residuos para su posterior transporte
hacia un lugar donde pueda ser procesado correctamente.
Plantas de transferencia: El siguiente eslabón de la cadena de reciclaje es un
eslabón opcional, ya que es aquí donde los diferentes residuos son mezclados
para distribuirlos según su tipo, o su tamaño, ahorrando de esta manera un
importante gasto de energía y de dinero.
Plantas de separación: Es a lo largo de esta etapa de la cadena de reciclaje
cuando cada uno de los tipos de residuos son separados y organizados según
su calidad para ser reciclado, o el material en el que esté confeccionado.
Planta de procesado: Esta es la última de las etapas de la cadena de
reciclaje, donde finalmente cada uno de los residuos a reciclar son procesados,
tanto papel, cartón, plásticos o metal, y son distribuidos según la demanda de
los proveedores para crear un producto completamente nuevo.
CONTENEDORES
Para la separación en origen doméstico se usan contenedores de distintos
colores ubicados en entornos urbanos o rurales:
• Contenedor amarillo (envases): En este se deben depositar todo tipo de
envases ligeros como los envases de plásticos (botellas, bolsas, bandejas, etc.), de
latas (bebidas, conservas, etc.) En general, deben depositarse todos aquellos envases
comercializados en el mercado nacional e identificados por el símbolo del punto verde.
• Contenedor azul (papel y cartón): En este contenedor se deben depositar los
envases de cartón (cajas, bandejas, etc.), así como los diarios, revistas, papeles de
envolver, propaganda, etc. Es aconsejable doblar las cajas de manera que ocupen el
mínimo espacio dentro del contenedor y también retirar las grapas, los canutillos y los
plásticos que vengan incorporados en el papel y cartón. Si están manchados de
residuos orgánicos, como por ejemplo las servilletas de papel, no deben ir en este
contenedor.
• Contenedor verde (vidrio): En este contenedor se depositan envases de
vidrio. Pero se debe tener en cuenta que no se puede depositar bombillas, frascos de
medicamentos, anteojos, jarrones, tazas, loza, lunas de automóviles, porcelana o
cerámica, tapones, chapas o tapas de los propios tarros o botellas de vidrio, tubos y
fluorescentes.
• Contenedor marrón (orgánico): En él se depositan el resto de
residuos que no tienen cabida en los grupos anteriores, fundamentalmente
desechos orgánicos catalogados como materia biodegradable.
• Contenedor rojo o puntos limpios (desechos peligrosos): Se
depositan residuos considerados peligrosos, como teléfonos móviles,
insecticidas, pilas o baterías, aceite comestible o aceite de vehículos, jeringas,
latas de aerosol, etc.
• Contenedor naranja: aceite de cocina usado.
• Contenedor específico en farmacias: para la recuperación de los
medicamentos caducados o que ya no se utilizarán, incluyendo los envases.
LAS 3 “R”
El propósito de las tres R es intentar buscar una manera de crear hábitos
de consumo más responsables y sustentables para el medio ambiente.
¿Pero cuáles son las tres R? Las tres R del reciclaje son reducir, reutilizar y
reciclar.
La primera de las tres R apela a reducir nuestro consumo, tanto de bienes como de energía. Al reducir el
problema, reducimos el impacto de este en el medio ambiente. Un menor consumo de bienes, genera
menos desechos que luego acaban en océanos, basurales o incinerados a cielo abierto. Además, al
consumir menos materias primas, se gasta menos agua, menos energía y en consecuencia, se contamina
menos
Algunas ideas para ayudarte a reducir:
Evita usar bolsas de plástico. Podes reducir el plástico llevando tu propia bolsa al súper, a la verdulería o
a cualquier tienda de barrio donde hagas tus compras.
Cerrá las canillas y apaga las luces. ¿Es de día? Apaga las luces del patio, ¿no estás en la habitación?
Deja la luz apagada. Apaga electrodomésticos que no estés usando; cerra bien las canillas para que no
goteen. Si te estás lavando los dientes, no dejes la canilla abierta durante dos o tres minutos: abrila cuando
realmente la necesites. Opta en lo posible por usar lamparitas de bajo consumo. Estas son solo algunas de
las pequeñas cosas que podes hacer en casa para consumir menos agua y energía.
Compra solo lo que realmente necesites y evita comprar cosas de moda que en tres meses
terminarán en la basura.
Elegí objetos y alimentos sin plástico. Si vas al súper y podes optar por comprar las bananas en
paquetes o las bananas sueltas, elegí siempre la opción que no contenga plástico. Además, en vez de
comprar muchas pequeñas cosas, por ejemplo, 6 botellitas de agua, opta por una o dos botellas grandes
para reducir la cantidad innecesaria de ese material.
La segunda de las 3 R, apela a usar inteligentemente lo que ya tenemos. En vez de
caer en la tentación de ir a comprar algo nuevo (para luego además tirarlo), nos invita a
usar los recursos que ya tenemos. Podes darle una nueva oportunidad a tus objetos si
los reutilizas con un nuevo fin. Algunos ejemplos de reutilizar son los siguientes:
• Imprimir en la cara limpia de las hojas. ¿Tenes que imprimir apuntes para la
facultad,colegio,trabajo? En vez de usar hojas nuevas, podes usar la cara limpia de
hojas que ya usaste.
• Reutiliza frascos y envases de alimentos. Todos conocemos o tuvimos esa abuela,
mama que guardaba los tuppers de los helados y luego los usaba para guardar comida
en la heladera, ¡ellas ya aplicaban una de las tres R y ayudaban al medioambiente!
Vos podes hacer lo mismo con los envases de plástico de algunos alimentos. Además,
podés usar frascos de vidrio para decorar macetas, faroles con luces, etc.
• Animate a despertar tu creatividad: si te dejas llevar, te vas a sorprender de todo lo
que podés hacer con cosas que ya no usas. Podés rellenar botellas con plástico que
no puedas reciclar y hacer ladrillos ecológicos; podés reutilizar ropa vieja para
hacer ropa para tus mascotas. Otra idea es reutilizar los frascos cuando hagas
mermeladas para guardar comida, hacer macetas, floreros o como centros de mesa.
La última de las R, y no menos importante, nos invita a reciclar. Reciclar conlleva
ahorrar materias primas, energía, agua y reducir las emisiones de gases de efecto
invernadero. Y además, genera nuevos puestos de trabajo y tejido industrial. Sin duda,
los beneficios de reciclar nuestros residuos son enormes en comparación con la acción
tan sencilla y cotidiana que supone.
Ideas para reciclar en casa:
• Cómo reciclar. Cada lugar puede reciclar de una manera diferente. Hay que informarse
primero sobre cómo separar y reducir los residuos domésticos en tu ciudad para que
puedas proceder a separar tus desechos eficazmente.
• Separa los residuos orgánicos. Restos de bananas, café, mate, cáscaras de huevo,
lechuga, etc. van a ocasionar que tu basura huela rápidamente. También podés
transformarlos en abonos para la tierra.
• Rellena botellas de plástico. Limpia una botella de plástico (de agua, gaseosa, etc.)
que ya esté vacía y empezá a llenarla con envases plásticos de un solo uso como
bolsas de plástico, paquetes de fideos, paquetes de galletitas o golosinas, sorbetes, etc.
Asegúrate de compactarla bien y una vez que esté llena podés llevar a los puntos de
acopio de distintas fundaciones que las reutilizan para hacer ladrillos, juegos para
escuelas etc.
• Más de un basurero. En vez de tener un basurero enorme o uno chiquitito al cual le
vivís cambiando la bolsa, opta por tener varios basureros del tamaño que mejor se
adapten a tu hogar.
¿CONOCIAS LAS 7 R?
Reflexionar: el consumidor ecológico se interesa por la información sobre el ambiente en el que vive
y analiza si existen alternativas mejores para así reducir el consumo.
Rechazar: aquellos productos que tienen un gran impacto ambiental, sobre todo productos tóxicos,
no biodegradables o no reciclables.
:Reducir se trata de consumir con conciencia, de abandonar el círculo de comprar para luego tirar,
de preguntarnos: ¿realmente necesito adquirir esto?
Reutilizar: darle una segunda vida a nuestros objetos. Prolongar su vida útil para así reducir su
impacto ambiental.
Reciclar: separar los residuos para que puedan utilizarse como materia prima nuevamente.
Redistribuir: se basa en principios de comercio justos y equitativos para poder disminuir las
diferencias entre países ricos y pobres, no solo por el medio ambiente sino también por sus
habitantes.
Reclamar: invita a los consumidores a reclamar y participar en las decisiones que conciernen al
medioambiente.
ENSEÑAR A RECICLAR
Si bien todo el mundo debería implementar el reciclaje, lo esencial en nuestra opinión es educar
bien a los niños con la información que adquirimos en nuestras vidas ya que ellos son el futuro de
la humanidad.
Pasos a seguir:
1
Predicar con el ejemplo. Siempre que se trate de educar a niños, este es el mejor consejo que se
puede seguir. Los niños replican casi todo lo que hacen sus padres, y si imitan nuestro ejemplo no
va a hacer falta que nos paremos apenas a decirles cómo o por qué tienen que llevar a cabo una
tarea.
2
Tener varios cubos de basura. Empieza la separación de los residuos en tu propia casa,
teniendo varios recipientes diferenciados en los que depositarlos: un cubo para basura orgánica,
otro para papel, otro para plástico, etc.
3
Dejar que ellos dibujen el símbolo de los contenedores de casa. Por ejemplo, que cada
contenedor tenga un dibujo del tipo de residuo que va dentro, y que sean tus hijos quienes dibujen,
recorten y peguen esos símbolos. Seguro que así no se olvidan de dónde tienen que echar el
papel o los envases de los yogures.
4
Juegos para aprender los contenedores. Puedes inventarte un juego en el que haya que
asignar los diferentes residuos a los contenedores, ya sea con dibujos recortados o unidos
por líneas sobre el papel, o con juguetes, que pueden estar diferenciados con etiquetas.
Explica los usos de los diferentes contenedores según su color: marrón para materia
orgánica, gris para el desecho, amarillo para plásticos y envases, verde para vidrio y azul
para papel y cartón, así como otros contenedores especiales, como los de pilas usadas,
aceite y medicamentos.
5
Explícales el porqué. Los niños, sobre todo a cierta edad, casi siempre quieren saber el por
qué de las cosas. Aprovecha para explicarles que reciclar no es un capricho, sino que es
necesario para cuidar nuestro planeta, no ensuciar nuestro entorno y dejar a nuestros hijos y
nietos un medio ambiente cuidado.
6
Explicar las consecuencias de la contaminación. Una sola pila contamina miles de litros
de agua, el plástico tarda décadas y hasta siglos en biodegradarse, hay islas de basura
flotantes en el océano que perjudican a animales y plantas, los gases de efecto invernadero
dañan la capa de ozono, la basura acumulada puede provocar incendios en los bosques, etc.
7
Implícate con las actividades del colegio que tengan que ver con
reciclaje. La educación ambiental se enseña de forma transversal en
diferentes etapas educativas. Si el menor ve que es una materia en la que
ponemos interés y que nosotros mismos reforzamos para que la aprendan, la
considerarán aún más importante.
8
Aprovecha los materiales en casa. Otra forma de predicar con el ejemplo es
reutilizar materiales viejos o aparentemente inservibles para crear cosas
nuevas, como por ejemplo juguetes. Puedes fabricar muñecos de trapo con
viejos calcetines rellenos y retales de ropa, o montar una partida de bolos con
botellas de plástico vacías. La imaginación es lo que cuenta, puedes ver aquí
cómo hacer manualidades con material reciclado.