Corrupcion
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Varios países de América Latina se han convertido en el último tiempo en un terreno fértil para las
redes criminales y los abusos a los derechos humanos. Este fenómeno es el que colocó a Nicaragua,
Honduras y Venezuela como los países más corruptos de la región en 2022, de acuerdo con el
último reporte de Transparencia Internacional, publicado este martes.
Ranking de percepción de corrupción en América
El Índice de Percepción de la Corrupción de 2022 de Transparencia
Internacional clasifica 180 países y territorios en función de cuán
"limpios" de corrupción se perciben. Los países con la clasificación más
baja son los que se perciben como los más corruptos.
"La falta de acciones audaces y firmes para combatir la corrupción y
fortalecer las instituciones públicas está alimentando a las actividades
delictivas organizadas, socavando la democracia y a los derechos
humanos y amenazando los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)",
dice el informe sobre América, donde las actividades criminales
trascienden muchas veces hasta las instituciones públicas.
Así como Uruguay y Canadá poseen los índices más
altos del continente —ambos con 74 puntos—,
seguidos por Estados Unidos con 69, los países con
los peores índices de corrupción son Venezuela (14
puntos), Haiti (17 puntos) y Nicaragua (19 puntos).
Honduras y Guatemala también están entre los más
corruptos.
Entre el amplio espectro que significa la corrupción, Transparencia Internacional parte de los siguientes elementos para ponderar los niveles de
corrupción de algún país o región:
1. Sobornos, frecuencia y facilidad.
2. Capacidad y frecuencia de desvío de fondos públicos por funcionarios.
3. Impunidad de servidores públicos ante actos ilícitos.
4. Instituciones gubernamentales firmes que hagan frente al espectro de corrupción al interior del país.
5. Barreras administrativas y burocráticas que impidan la correcta respuesta y lucha contra la corrupción.
6. Nombramientos y ascensos dentro de la administración pública en diferentes niveles que resulten del compadrazgo y nepotismo en lugar del
mérito.
7. Enjuiciamiento penal efectivo de funcionarios corruptos
8. Legislación apropiada para la prevención de conflictos de interés entre funcionarios y servidores públicos
9. Sistemas de protección legal hacia denunciantes de casos de corrupción, como lo son los periodistas o investigadores.
10. Libre acceso de población a información sobre asuntos públicos y transparencia en procesos gubernamentales.
Corrupción en América Latina
En la siguiente tabla encontrarás los países de América Latina ordenados del menor al más corrupto. El puntaje se da en una escala de 0 a 100,
mientras que la posición corresponde con un total de 180 países.
ESTRATEGIAS PARA COMBATIR LA
CORRUPCION
● En Latinoamérica, se han implementado diversas estrategias para
combatir la corrupción, desde reformas institucionales hasta campañas
de concientización. Una de las medidas más efectivas ha sido la
creación de organismos especializados en la lucha contra la corrupción,
como la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción en México o la
Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala.
● Otra estrategia importante ha sido la implementación de sanciones
penales más severas para los delitos de corrupción, lo que ha
contribuido a disuadir a los funcionarios públicos de incurrir en este tipo
de conductas. Además, se han llevado a cabo campañas de
concientización dirigidas a la sociedad civil para fomentar una cultura de
transparencia y rendición de cuentas.
CONCLUSION
●
ES
En conclusión, la corrupción es un problema complejo
que afecta a toda la sociedad latinoamericana. Desde
sus causas hasta sus consecuencias, hemos visto
cómo la corrupción se ha convertido en un obstáculo
para el desarrollo económico y social de la región.
● Sin embargo, también hemos explorado algunas
estrategias que se han implementado con éxito en
otros países para combatir la corrupción. Es importante
recordar que la lucha contra la corrupción no es tarea
exclusiva del gobierno o de las instituciones, sino que
requiere la participación activa de todos los
ciudadanos.
● Solo a través de un compromiso colectivo podemos
lograr una Latinoamérica más justa y transparente,
donde la corrupción sea cosa del pasado. ¡Juntos
podemos hacerlo!