6sexta y Septima Trompeta-El Fin de La Ira
6sexta y Septima Trompeta-El Fin de La Ira
6sexta y Septima Trompeta-El Fin de La Ira
Trompetas
1a Trompeta: Destrucción de Jerusalén
El fin de la ira
NO SE ARREPINTIERON Apocalipsis 9:21
HOMICIDIOS HECHICERÍAS
FORNICACIÓN HURTOS
APOCALIPSIS 11
El "tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente" se
iniciará pronto; y para entonces necesitaremos tener una
experiencia que hoy por hoy no poseemos y que muchos no
pueden lograr debido a su indolencia. Sucede muchas veces que
los peligros que se esperan no resultan tan grandes como uno se
los había imaginado; pero éste no es el caso respecto de la crisis
que nos espera. La imaginación más fecunda no alcanza a darse
cuenta de la magnitud de tan dolorosa prueba. En aquel tiempo
de tribulación, cada alma deberá sostenerse por sí sola ante Dios,
"Si Noé, Daniel y Job estuvieron" en el país, "¡vivo yo! dice
Jehová el Señor, que ni a hijo ni a hija podrán ellos librar por su
justicia; tan sólo a sus propias almas librarán" (Eze. 14:20, VM).
El conflicto de los siglos 680
Reina Valera 1960
LEY DOMINICAL
Orad que vuestra huída no sea en invierno ni en Sábado
HABRÁ GRAN AFLICCIÓN: TIEMPO DE ANGUSTIA
Y DE PLAGAS
porque habrá entonces gran
tribulación, cual no la ha
habido desde el principio del
mundo hasta ahora, ni la
habrá. Y si aquellos días no
fuesen acortados, nadie sería
salvo; mas por causa de los
escogidos, aquellos días
serán acortados. Mat 24:21-22
ARROJADOS EN LA PLAZA
Apo 11:8 Y sus cadáveres estarán en la plaza de la grande ciudad que en sentido
espiritual se llama Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue crucificado.
(Hch 17:17;Lucas 7:32;Mat 20:3;Job 29:7;Est 4:6,9,11;Neh 8:1,3,16 Esd 10:9;2 Cron 18:9;29:4;32:6)
NO SE ARREPINTIERON
Apo 9:21
HOMICIDIOS HECHICERÍAS
LA GRANDE CIUDAD ESPIRITUALMENTE
FORNICACIÓN HURTOS LLAMADA:
SODOMA EGIPTO GÓLGOTA
Apo 11:9 Y los de los pueblos,
tribus, lenguas y naciones verán
sus cadáveres por tres días y
medio, y no permitirán que sean
sepultados.
3 AÑOS Y MEDIO =
1260 DÍAS LITERALES
El acto capital que coronará el gran drama del engaño sera que el mismo
satanas se dara por el Cristo. Hace mucho que la iglesia profesa esperar el
advenimiento del salvador como consumacion de sus esperanzas. Pues bien, el
gran engañador simulará que Cristo habra venido, En varias partes de la
tierra, satanas se manifestara a los hombres como ser majestuoso, de un brillo
deslumbrador, parecido a la descripcion que del hijo de Dios da san Juan en el
apocalipsis (Ap 1:13-15) La gloria que le rodee superará cuanto hayan visto los
ojos de los mortales. El grito de triunfo repercutira por los aires: “!Cristo ha
venido! !Cristo ha venido!” El pueblo se postrará en adoración ante el,
mientras levanta sus manos y pronuncia una bendición sobre ellos como
Cristo bendecía a sus discípulos cuando estaba en la tierra CS 682
Sin embargo, por lo que ven los hombres, parecería que los
hijos de Dios tuviesen que sellar pronto su destino con su
sangre como lo hicieron los martires que los precedieron. Ellos
mismos empiezan a temer que el Señor los deje perecer en las
manos homicidas de sus enemigos. Es un tiempo de terrible
agonia. De dia y de noche claman a Dios para que los libre. Los
malos triunfan y se oye ese grito de burla”: Donde esta ahora
vuestra fe? Por que no os libra Dios de nuestras manos si sois
verdaderamente su pueblo?” Pero mientras esos fieles
cristianos aguardan, recuerdan que cuando Jesús estaba
muriendo en la cruz del calvario los sacerdotes y principes
gritaban en tono de mofa: “A otros salvo, a si mismo no se
puede salvar: si es el Rey de Israel, descienda ahora de la cruz, y
creeremos en el (Mt 27:42)
Apo 11:11-12 Pero después de tres días y medio entró en ellos el espíritu de vida enviado por
Dios, y se levantaron sobre sus pies, y cayó gran temor sobre los que los vieron. Y oyeron
una gran voz del cielo, que les decía: Subid acá. Y subieron al cielo en una nube; y sus
enemigos los vieron.
RESURRECCIÓN
La voz del Hijo de Dios despertó a los santos dormidos y los
levantó revestidos de gloriosa inmortalidad. Los santos
vivientes fueron transformados en un instante y arrebatados
con aquéllos en el carro de nubes. Este resplandecía en extremo
mientras rodaba hacia las alturas. El carro tenía alas a uno y
otro lado, y debajo, ruedas. Cuando el carro ascendía, las ruedas
exclamaban. "¡Santo!" y las alas, al batir, gritaban: "¡Santo!" y la
comitiva de santos ángeles que rodeaba la nube exclamaba:
"¡Santo, Santo, Santo, Señor Dios Todopoderoso!" Y los santos
en la nube cantaban: "¡Gloria! ¡Aleluya!" El carro subió a la
santa ciudad -PE 35 (1851).
Trompeta
decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él
reinará por los siglos de los siglos.
Apo 11:16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus
tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios,
Apo 11:17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que
eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado.
Apo 11:18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los
muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que
temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la
tierra.
Apo 11:19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en
el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
AL PRINCIPIAR el santo sábado el 5 de enero de 1849, nos pusimos en oración con la
familia del Hno. Belden en Rocky Hill, Connecticut, y el Espíritu Santo descendió
sobre nosotros. Fui arrebatada en visión al lugar santísimo, en donde vi a Jesús
intercediendo todavía por Israel. En la parte inferior de su ropaje llevaba una
campanilla y una granada. Entonces vi que Jesús no dejaría el lugar santísimo hasta
que cada caso estuviese decidido, ya para salvación, ya para destrucción, y que la ira
de Dios no podía manifestarse mientras Jesús no hubiese concluido su obra en el
lugar santísimo y se hubiese quitado sus vestiduras sacerdotales, para revestirse de
ropaje de venganza. Entonces 128 Jesús abandonará el lugar que ocupa entre el
Padre y los hombres, y Dios ya no callará, sino que derramará su ira sobre los que
rechazaron su verdad. Vi que la cólera de las naciones, la ira de Dios, y el tiempo de
juzgar a los muertos, eran cosas separadas y distintas que se seguían unas a otras.
También vi que Miguel no se había levantado aún, y que el tiempo de angustia cual no
lo hubo nunca no había comenzado todavía. Las naciones se están airando ahora,
pero cuando nuestro Sumo Sacerdote termine su obra en el santuario, se levantará, se
pondrá las vestiduras de venganza y entonces se derramarán las siete postreras
plagas. PE 36
5a. Ira de las naciones: Ya había comenzado en 1849