Outbreak Company - Volumen 05 [World Project]

OUTBREAK COMPANY WORLD PROJECT
VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 1



Tabla de contenido
Capítulo I: Bueno, Saben Que: ¡Es Otro País! ............................................... 5
Capítulo II: El País Llamado Bahairam ......................................................... 65
Capítulo III: Elvia y Amatena ....................................................................... 108
Capítulo IV: El Gran Rescate De Shinichi ................................................... 162
Epilogo: Invasión Cultural Redux ............................................................... 200
Palabras Del Autor ....................................................................................... 209
Modelo Dragón ............................................................................................. 210
Modo De Pie .................................................................................................. 211
Acerca De J - Novel Club ............................................................................. 212
Derechos De Autor ....................................................................................... 213

Capítulo I: Bueno, Saben Que: ¡Es Otro País!
Mi vida normal terminó cuando abrí los ojos.

Miré hacia arriba durante unos segundos, sin decir nada al principio. No
reconocí el techo por encima de mí, lo que me llevó a murmurar
reflexivamente, "Un desconocido... techo...”
Cité de un anime que permanecerá sin nombre (pero que es tan antiguo
que esta cita en particular es bastante cliché por ahora), mostrando que
todavía era un otaku total y de causa perdida. Lo cual era otra forma de
decir que estaba funcionando normalmente.
Espera... ¿Qué pasa con este sentimiento de déjà vu?
Recordaba vagamente haber estado en esta situación exacta antes, e
incluso decir exactamente lo mismo al respecto.
"Sin embargo, realmente no reconozco este techo", le dije, volviendo a
enfocar mis ojos hacia arriba.
En un día normal, lo primero que vi cuando desperté fue una especie de
techo semiesférico trabajado con patrones elaborados.
Eso fue porque dormí en una cama con dosel, como correspondía a mi
posición, por lo que el "techo" al que me refiero no era el techo real de mi
habitación... De todos modos, olvídalo. Solo estoy tratando de explicar lo
que solía ver cuando me despertaba.
Sin embargo, encima de mí ahora había un techo plano y blanco sin
decoración alguna. En todo caso, me recordó la mayor parte de mi
habitación en Japón, en un lugar en el que no había estado en más de seis
meses.
Y eso significaba...
"De ninguna manera..." Me senté de golpe en la cama. "¿Resulta que toda
mi historia realmente fue solo un sueño?"
Estaba aturdido
¿No había sido todo más que la imaginación inconsciente de un patético
guardia de seguridad del hogar? ¿Cada una de mis aventuras y
experiencias, solo las fantasías pasajeras de la adolescencia? ¿Estaba mi
mente inconsciente realmente ansiosa por huir de la realidad?

¿Entonces todo era realmente solo sueños, ilusiones, burbujas y sombras?

¿Era el mundo real un sueño y mis sueños realidad? ¿En realidad era solo
una mariposa? ¡¿Volvería a mí mismo para descubrir que yo era solo el
producto de la imaginación de los jóvenes, que se quedaron en estado
vegetativo después de un accidente de tráfico?! ¿Qué es la realidad?
.................................etcétera etcétera.
Pero justo cuando estaba a punto de ser absorbido por el vórtice
chuunibyou, me di cuenta de algo.
Esta no era mi habitación en Japón. Esta no era mi habitación en absoluto.
Si lo hubiera sido, lo primero que habría visto al abrir los ojos habría sido
mi póster de tamaño natural de Madoka, heroína del anime Rental ☆
Madoka. Es una chica mágica que aguanta valientemente a pesar de
trabajar para una compañía realmente mala. Pero no vi indicios de su débil
sonrisa.
"Entonces, ¿dónde estoy...?"
La cama en la que dormía definitivamente no tenía dosel, pero era lo
suficientemente grande como para acomodar al menos a tres adultos.
Sabía que mi casa en Japón no había tenido una cama tan grande.
Así que esta no era mi casa en Japón.
Pero tampoco era mi Eldant.
¿Entonces, dónde?
Alerta, miré lentamente alrededor de la habitación. No reconocí la
decoración interior en absoluto. Sin embargo, era aproximadamente del
mismo tamaño que mi habitación en mi mansión, en otras palabras, unas
veinte alfombras.
Las ventanas estaban cubiertas de cortinas gruesas, con líneas de luz
brillante que se filtraban entre ellas. Fue suficiente para sacar el borde de
la oscuridad en la habitación y permitirme ver lo que había allí.
Los muebles consistían en la cama en la que estaba, un escritorio y una
silla. No hay mucho en cuanto a muebles, sin duda, pero el papel pintado
tenía un patrón intrincado, las cortinas estaban bordadas y había pinturas
colgadas en las paredes, tampoco exactamente espartanas.
Pero aún...

"Es como..."
Algo fue diferente. La impresión general no era la característica europea
de la Edad Media de las casas Eldant. En cambio, el diseño era un poco
más asiático, tal vez incluso del Medio Oriente. Tribal, casi. Quiero decir,
no era antropólogo ni nada; simplemente sentía que provenía de una
cultura diferente.
"Está bien, en serio. ¿Dónde estoy? Murmuré. Pero luego contuve el
aliento, golpeado por otra ola de déjà vu.
La cama era diferente, y la habitación era diferente. ¿Pero la sensación de
despertar y encontrarme en un lugar totalmente desconocido? Eso lo
recordaba.
"De ninguna manera."
Se suponía que este tipo de cosas no le pasarían a una persona varias
veces en su vida.
Había sido engañado por el gobierno japonés, secuestrado por la Fuerza
de Autodefensa de Japón, y antes de darme cuenta estaba en un mundo
diferente. Ni siquiera los rayos cayeron dos veces. Algo tan ridículo como
lo que me pasó no pudo pasar por segunda vez...
"De ninguna manera..."
...¿Podría?
Fue entonces cuando vi algo en mi visión periférica. Me volví hacia él con
un sobresalto.
Había una joven soltera, silenciosamente parada en atención.
Estaba de pie contra la pared, casi como si fuera parte de los muebles.
Eso también sonó una campana.
Entonces, espera, ¿podría ser esto?
"¡¿Un bucle?!" Exclamé. "¡¿Estoy atrapado en un ciclo interminable?!"
¿Había alguna fuerza invisible manipulando mi mundo, rebobinándolo para
que yo experimentara las mismas cosas una y otra vez, incluso cuando mis
recuerdos permanecieron sin cambios? ¿Cómo podría esperar escapar del
laberinto temporal?

... Wooh. Me estaba poniendo tan mal que estaba pensando en viejas
formas de letras.
Fue cuando estaba teniendo este momento de pánico que registré algo: la
chica junto a la pared no se movía. Aunque acababa de gritar en un idioma
que presumiblemente no entendía, se quedó en silencio y me miró.
¿Qué estaba pasando aquí? Tenía que significar...
"Eso es... ¿no es Myusel?"
Si lo hubiera sido, estaba seguro de que habría dado un pequeño grito de
sorpresa.
¿O ya estaba acostumbrada a mi extraño comportamiento?
Pero entonces...
Entrecerré los ojos, mirando más de cerca a la chica. La oscuridad me
había impedido darme cuenta al principio, pero...
"¡¿Wuh-huh?!"
Su cabello era negro o... ¿verde? En la tenue luz, sus ojos brillaban de un
color esmeralda claro.
Pero no fue su color de cabello lo que me mantuvo paralizada. Fue
interrumpido en una especie de aspecto juvenil, pero eso solo hizo que sus
rasgos más destacados se destacaran aún más. Asomando por debajo de
su cabello...
"¡¿ESO ES REALMENTE UNA CHICA BESTIA?!" Me encontré gritando,
mi mano apretándose en un puño triunfante.
¡Si! ¡Esas eran orejas de animales!
Se destacaron exactamente porque el cabello no los escondió. ¡Esas
orejas! ¡Tan sorprendente, tan parte de la belleza particular de esta chica!
Cubiertas de pelaje corto como un gato o un perro podrían tener, estallaron
en su cabello, ¡haciéndola parecer tan real y viva!
"¡Ohhh...!" Temblé de admiración.
Quiero decir, no es que fuera la primera vez que veía a una bestia. Un
hombre lobo llamado Elvia vivía en mi mansión. Ella tenía una personalidad
muy alegre y alegre; ella realmente marcaba todas las casillas de las

bestias. Ella tenía la naturaleza amigable y extrovertida que buscas en una

persona bestia, especialmente una perruna. Fue fenomenal.
Pero. Pero.
Había más tipos de chicas bestias que solo perros.
Así es: me refiero al manga, realmente un clásico, prácticamente en el nivel
de las Escrituras, Nishiki no Kuni ☆. Como Chi ** - neko demuestra, ¡la
bestia original era un gato!
Entonces sí. La bestia delante de mí era una gata. Probablemente era un
hombre tigre o algo por el estilo. Lo adiviné porque sus mejillas y su cuerpo,
como su vientre y sus brazos, claramente tenían un pelaje de diferentes
colores mezclados. Parecía único, casi como un tatuaje.
¿Qué es eso? ¿Por qué podría ver tanto de su estómago, preguntas?
Eso, por supuesto, es porque estaba desnudo.
¡Qué maravillosa es una niña con poca ropa! (Estaba muy emocionado.)
Su atuendo me recordó algo de algún país desértico, o al menos de las mil
y una noches. Su pecho y caderas, en otras palabras, las zonas de
prohibición definitiva, estaban cubiertas con ropa trabajada con un diseño
geométrico. Pero su ombligo estaba ahí afuera, aunque por alguna razón
sus brazos y piernas estaban cubiertos con tela transparente. No ocultaba
sus extremidades; su color y forma eran claramente visibles.
Por cierto, la forma del cuerpo de la niña hizo que pareciera que aún no
era madura, quiero decir que era bastante joven, con un pecho
subdesarrollado y caderas estrechas. Prácticamente un niño.
Pero aun así, de hecho, casi por eso, esa ropa era mortal.
De alguna manera, era más atractivo que si hubiera estado completamente
expuesta: revelar un poco de carne te hace preguntarte qué más está
ocultando. ¡Hermosa es la flor que florece en secreto! ¡La vibra que emitió
recorrió la línea entre la virtud y la desviación como solo un cuerpo joven
puede hacerlo!
Lo que exuda un cuerpo solo un paso, ¡no, medio paso! De la desnudez...
¡Esto, esto mismo, es verdaderamente eros!
.................................etcétera etcétera.

Antes de darme cuenta, me había dejado llevar por un panegírico que

probablemente habría provocado que la gente retrocediera si lo hubiera
dicho en voz alta. Ahora eché un nuevo vistazo a la chica.
¿Eh...?
"¿Quién eres tú?"
Solo ahora se registró conmigo: si esto fue realmente un bucle, una
repetición de lo que había sucedido antes, entonces debería haber sido
Myusel parado allí. Pero Myusel era medio elfo; ella no era una bestia. Por
otra parte, supuse que siempre existía la posibilidad de que, sospechando
mi afinidad por las chicas bestias, se hubiera atascado en las orejas y la
cola antes de venir a despertarme.
Pero no, esta fue definitivamente la primera vez que vi a esta chica.
Su rostro era parte de lo que la hacía parecer joven; sus ojos eran grandes
y su nariz pequeña. Tenía los labios pequeños y fruncidos. Su aspecto
juvenil me recordó a cierta emperatriz que conocía, pero la impresión que
me dio fue completamente diferente. Casi lo contrario, de hecho.
Esta criada me miró con una expresión suave y sin emociones, no tanto
como mover un músculo. Su silencio fue abrumador. Ella era casi como
una muñeca.
¿Quién o qué en el mundo era ella?
"Ummm...”
Puse una mano en mi mejilla y busqué en mi memoria. ¿Qué fue lo último
que pude recordar antes de despertar aquí?
Recordé levantarme temprano en la mañana en mi mansión en Eldant. No
tenía ganas de volver a dormir, así que decidí matar el tiempo con un
pequeño paseo por la casa.
Y entonces...
"..................... ¿Eh...?"
No es bueno. Mi recuerdo se volvió borroso en ese punto.
Mi cabeza se sentía un poco pesada. Estaba seguro de que había dormido
bien y, sin embargo, sentí que no había dormido lo suficiente. Tenía la
sensación de que lo que quería estaba justo frente a mí, pero no podía
alcanzarlo...

Esto no me llevaba a ninguna parte. Decidí interrogar a la niña.

"Hey."
Ella no dijo nada, pero no parecía ignorarme. Ella ladeó la cabeza con
curiosidad hacia mí.
¡Whoa! ¡Ese gesto inocente, ese gesto!
Dejé a un lado mis crecientes sentimientos de moe y pregunté: “¿Quién
eres? ¿Y dónde estoy?”
Parecía que estaba a punto de responderme, porque abrió la boca...
“Esta es la ciudad oriental de Borfoi. Estás en el Reino de Bahairam”.
La voz, sin embargo, vino de otra persona. Miré en estado de shock.
Vi una puerta, que parecía bastante severa en comparación con todo lo
demás por aquí. Estaba entreabierto y una mujer joven entraba en la
habitación.
¿Un soldado...?
Esta mujer definitivamente no estaba semidesnuda, y la ropa que vestía se
veía bastante sombría, muy parecida a un uniforme militar, de hecho. En
su mayor parte, su atuendo era sencillo y sin adornos, pero en sus
hombros, cuello y puños había colores lo suficientemente brillantes como
para llamar la atención. Incluso tenía una espada en la cadera.
Sin embargo, lo que más me sorprendió no fue su ropa.
"¿Eh...?"
Pensé que recordaba a esta chica.
O más bien, pensé que se parecía exactamente a alguien que conocía.
¿Elvia?
Ella era un timbre muerto para la bestia de mi casa. Su rostro, su cabello,
su estatura e incluso las orejas de los animales en su cabeza eran todas
como las de Elvia.
La única diferencia fue el color. Mientras que Elvia tenía cabello oscuro y
orejas, el doppelgänger frente a mí tenía blanco. Si solo la miraras a la
cara, juraría que era Elvia; era como la versión de un personaje

intercambiado por la paleta que obtienes cuando llegas como jugador dos
en un videojuego.
"¿Q-Qué pasa con el atuendo? ¿Buscando un nuevo look?
Tal vez ella también se había metido un poco en el cosplay que habíamos
hecho hace un tiempo. Je, probablemente no...
Sin embargo, Elvia solía vestirse con ropa tan escasa que bien podría estar
usando ropa interior. Este tipo de vestido formal, casi sin piel,
definitivamente no era el hombre lobo al que estaba acostumbrado.
Tenía que admitir que tenía cierta frescura. Se había visto adorable con el
uniforme de marinero que le habíamos dado para nuestra sesión de cine,
claro, pero esto tenía un cierto...
"¿Nueva apariencia?" 2P Elvia (nombre temporal) preguntó, levantándome
una ceja. "¿De qué estás hablando?"
"Um...............”
Parpadeé Entonces ella... no era... ¿Elvia?
Quiero decir, sí, tenía la sensación de que no era en realidad Elvia, pero
se veían tan misteriosamente idénticos que pensé que tal vez sus
personalidades también serían similares. Pero 2P Elvia (nombre temporal)
era prácticamente el otro polo opuesto de Elvia en tono y voz.
Por un lado, nunca había visto a Elvia con una expresión como esta.
En mi experiencia, ella era la imagen de la inocencia, siempre sonriendo
alegremente. Nunca había sabido que mirara a alguien de la misma
manera que esta persona me estaba haciendo. Era un poco inexpresiva,
muy parecida a la criada de la bestia que había visto primero, pero esta
chica tenía una fuerza de voluntad que surgió de la misma manera.
Nuevamente recordé la importancia de las expresiones faciales para la
comunicación. Una cara con dos expresiones diferentes podría darte una
impresión muy diferente.
"Um... ¿Quién... eres tú?"
2P Elvia entro, cerrando la puerta detrás de ella; se cerró con un clic que
sonó como un bloqueo automático. Se acercó al pie de la cama donde
todavía estaba sentada y dijo: "Soy Amatena Harneiman".
Harneiman Ese también era el apellido de Elvia.

¿Eso significaba que estaban relacionados por sangre? Eso explicaría por
qué se parecían tanto. Un poco demasiado parecido, de verdad. ¿Podrían
ser gemelas o algo así?
Solo miraba estúpidamente a 2P Elvia, er, Amatena.
Entonces finalmente registré algo.
"¿Dijiste Bahairam?"
Estaba seguro de que ella tenía. La ciudad oriental de Borfoi. El reino de
Bahairam.
Parecía que ya no estaba en el Sagrado Imperio Eldant.


El Reino de Bahairam, si recordaba mi geografía, era un país vecino del

Imperio Eldant. También estaba bastante seguro de que estaban en
guerra, y que las escaramuzas fronterizas habían estado sucediendo
durante bastante tiempo. Además de todo eso, Elvia era un espía para ellos
y...
"¡Bahairam!"
Cualquier somnolencia que había quedado desapareció en un instante.
Ahora era el momento en que mi cerebro comenzó a trabajar en un frenesí.
¿Dónde estabas antes?
"¿Por qué estoy en Bahairam?"
Ella no respondió.
"¿Dónde están todos, de todos modos?"
Ella todavía no respondió. Amatena simplemente continuó fijándome con
esa mirada helada y sin decir nada.
Intenté nuevamente, desesperadamente, recordar lo que había sucedido
antes de despertar aquí.
Estaba caminando, y luego... Y luego... Cuando abrí los ojos, estaba aquí.
¿Qué fue lo último que pude recordar?
Estaba bastante segura de haber escuchado un ruido en los arbustos, y
cuando fui a mirar... Creo que algo cubrió mis ojos... Y luego mis recuerdos
se cortaron como un clip de película malo.
"Espera..."
Así fue esto...
Ya sabes. ¿Eso qué hacen en las películas estadounidenses todo el
tiempo, donde alguien queda inconsciente con cloroformo o algo así?
Lo que quiero decir es que me trajeron aquí contra mi voluntad.
¡Secuestrado! ¡Abducido! ¡Estaba hecho!
Y eso probablemente implicaba que esta habitación era una celda. ¡Una
jaula!
Un pensamiento feo después de otro bailaba en mi cabeza, por mucho que
deseé que no lo hicieran.

"P-P-P-P-Pero, ¿por qué harías eso?"

Lo extraño fue que la idea hizo que la semejanza de Amatena con Elvia
pareciera realmente espeluznante. Fui atrapado por un terror irreflexivo,
del tipo que sentirías si tus amigos de repente decidieran matarte un día
sin motivo.
Me deslicé hacia atrás, tratando de alejarme incluso un milímetro de
Amatena. Era una cama enorme, así que pude ganar un poco de espacio,
pero no pasó mucho tiempo antes de que me encontrara literalmente de
espaldas contra la pared.
Mientras tanto, Amatena continuó mirándome sin cambiar su expresión. No
había forma de adivinar lo que ella podría estar pensando. Como dije, su
parecido con Elvia me daba miedo ahora.
"¿Por qué me secuestraste?"
"No se me permite explicar eso en este momento", dijo Amatena.
¿Permitido? ¿Permitido cómo?
En realidad, esperaba que negara que secuestro era la palabra correcta,
pero ella ignoró por completo eso. Bien podría haber salido y decir que
tenía razón.
Pero en serio... ¿Por qué?
Amatena giró sobre sus talones para que me diera la espalda. El
movimiento parecía extrañamente mecánico, rígido. Casi como si se
estuviera poniendo para uno de esos tipos militares según los libros.
De espaldas a mí, pude ver su cola, del mismo color blanco que sus orejas.
Eso también era diferente de Elvia. Su cola esponjosa se movía sin parar,
pero la de Amatena no se movía tanto, como si hubiera quedado pegada
con pegamento.
Entonces Amatena llamó a la puerta y, con otro clic, se abrió.
Aparentemente era imposible abrirlo desde adentro.
"Kuraaara, él es todo tuyo", dijo mientras cerraba la puerta.
"Sí, señora."
La respuesta vino de la bestia semidesnuda, que había estado callada todo
este tiempo. Supongo que se llamaba Clara.

"¿Pero qué está pasando aquí...?" Ante esta situación desconcertante, la

única respuesta fue la confusión total.
Mi nombre es Kanou Shinichi

No pretendo presumir, pero soy un estudiante de secundaria
completamente normal y totalmente normal.
O tal vez debería decir que era un estudiante de secundaria. Existe una
seria pregunta sobre si mi antigua escuela aún conserva algún registro de
mí en este momento.
De todas formas.
Yo... soy un otaku.
En una palabra, adoro el anime, el manga, los juegos y las novelas ligeras.
Tu típico maniaco de Akiba. De nuevo, nada realmente inusual. Puedes ver
a docenas de personas como yo en Akihabara en cualquier fin de semana,
o en Comiket o WonF * s.
La diferencia entre ellos y yo es que, para todos los otaku, no hay muchos
que hayan sido engañados por el gobierno japonés y arrastrados a un
mundo alternativo para difundir el evangelio de la cultura geek como
Gerente General del paralelo. la primera compañía de entretenimiento del
mundo, Amutech.
Me escuchas. Un mundo alternativo.
Esto es algo de alto secreto, pero Japón se dedica a la diplomacia con otro
mundo.
Todo comenzó con un agujero que alguien descubrió cerca del monte Fuji
en el "Mar de los árboles", un área mejor conocida como uno de los lugares
más famosos del país para suicidarse.
Este agujero, y aún nadie sabe exactamente cómo, contenía un enlace a
otro mundo, una tierra de fantasía al estilo de la Edad Media con dragones
y magia, el tipo de lugar que aparece en todo tipo de juegos y manga.

Pensarías que sería el descubrimiento del siglo, ¿no? El gobierno japonés,

sin embargo, lo encubrió; comenzaron a investigar el agujero por sí
mismos, manteniéndolo en secreto de cualquier otro país.
Y fue un hallazgo tan grande como parece. Tierra virgen, recursos sin
explotar, culturas desconocidas. Si Japón pudiera guardar todo esto para
sí mismo, podría conducir a una explosión de riqueza, lo suficiente como
para sacar a Japón de la crisis económica en la que había estado durante
tanto tiempo y convertir al país en la segunda economía más grande del
mundo una vez más.
Así, el gobierno japonés abrió la diplomacia con el país que encontró al
otro lado de este agujero secreto: el Sagrado Imperio Eldant.
La magia, una característica única de este otro mundo, simplificó la
comunicación. La telepatía mágica permitió que las relaciones progresaran
con sorprendente suavidad.
Los problemas llegaron después de eso.
La diplomacia estaba muy bien, pero Japón no podía hacer nada
demasiado obvio. Si trasladaran demasiadas personas o recursos al
Imperio Eldant, serían descubiertos por alguna potencia extranjera, y de
todos modos, el túnel hiperespacial que conducía al otro mundo era
bastante estrecho. Era lo suficientemente grande como para que pasara
un camión de gran tamaño.
Naturalmente, entonces, enviaron a un pequeño número de personas para
intercambiar recursos que eran limitados tanto en escala como en tamaño.
El intercambio cultural parecía el camino a seguir.
Pero resultó que el Imperio Eldant, que tenía una historia y cultura muy no
japonesa, no mostró interés en ninguno de los productos japoneses
tradicionales que se les ofrecían "como muestra de amistad".
Entonces, ¿qué debe hacer un gobierno bloqueado? La delegación
japonesa, temerosa de que todas las cosas que esperaban obtener del
Imperio Eldant estuvieran a punto de resbalarse entre sus dedos, probó
todos los objetos y objetos que se les ocurrieron. Y por extraño que
parezca, la única cosa a la que los habitantes de este mundo tuvieron la
mejor reacción fue al manga y al anime, cosas calientes en las calles de
Akihabara.
Parecía que la cultura otaku iba a ser el camino de Japón aquí.

Entonces fue que el gobierno japonés decidió hacer de la cultura otaku el

polo de su estrategia diplomática. Sin embargo, rápidamente descubrieron
que nadie en el gobierno realmente sabía mucho sobre otaku. O, mejor
dicho, como supe más tarde, había algunas personas que cumplían con
los criterios, pero por una razón u otra, ninguna de ellas era adecuada para
presentarse como el "embajador de buena voluntad".
Bueno, entonces tendrían que encontrar a alguien que fuera.
Y la persona con la que se establecieron era un guardia de seguridad del
hogar que estaba en peligro de ser desalojado de su hogar por sus padres
y, por lo tanto, estaba buscando trabajo en Akihabara. A saber, yo. Kanou
Shinichi.
Entonces esa es mi historia.
El gobierno me engañó bastante, diablos, me engañaron, y me arrastró al
Sagrado Imperio Eldant en este otro mundo. Me hicieron Gerente General
de Amutech y me acusaron de difundir la cultura otaku.
Sí, también me sorprendió al principio. Y definitivamente confundido.
¿Pero sabes qué más es sorprendente? Cuánto resultó ser el trabajo
perfecto para mí.
En general, hemos tenido bastante éxito en la difusión de la cultura otaku
a este nuevo mundo. De hecho, un poco demasiado exitoso, en la medida
en que me preocupaba que algunas personas se volvieran adictas.
Fue entonces cuando cayó el otro zapato.
Aprendí que todo el intercambio cultural era solo un pretexto. Esto fue una
invasión.
La "constitución de paz" de Japón significaba que el país no tenía muchas
armas militares, por lo que simplemente llevarían a cabo su invasión sin
ellas. Si pudiéramos hacer que las personas sean adictas a la cultura
otaku, tanto mejor a los ojos del gobierno japonés. Proporcionaría el punto
de apoyo que necesitaban para convertir esencialmente al Imperio Eldant
en un estado vasallo.
Cuando me enteré de eso, me rebelé. ¿Por qué? Porque pensé en todos
los amigos que había hecho en el Imperio Eldant: Myusel la criada, Brooke
el jardinero, la emperatriz Petralka, la artista Elvia, el caballero Garius y el

primer ministro Zahar, entre otros, y no podía soportar el idea de

convertirse en su enemigo.
Sin embargo, había otra razón, que era que también odiaba la idea de que
mi amado manga, anime, juegos y novelas ligeras se usaran como
herramientas de invasión.
¿Ingenuo? Tal vez. De todos modos, como resultado, algunas personas en
el Imperio Eldant que se habían percatado del hecho de que su cultura
estaba siendo socavada cometieron un acto de terrorismo y, mientras
tanto, el gobierno japonés, molesto porque me había "vuelto deshonesto",
envió un especial de JSDF obliga a la unidad a liquidarme. Digamos que
estuvo bastante tenso por un tiempo.
Sin embargo, con mucha ayuda de los que me rodeaban, de alguna
manera logré superarlo.
Incluso el gobierno japonés decidió que, mientras produjera resultados,
harían un guiño a lo que había hecho (una política extrañamente tsundere-
ish), y había sido bastante flexible desde entonces. El resultado fue un
período de tiempo relativamente idílico.
Hasta ahora...
Después de que 2P Elvia, quiero decir, Amatena, salió de la habitación, me

quedé sentada allí, incapaz de moverme, mirando la puerta por la que
había entrado. Una buena mirada sugirió que la puerta era, con mucho, la
cosa más dura de la habitación, y a juzgar por el movimiento y el sonido
cuando la cerró, probablemente era de acero. Tenía un picaporte pero no
tenía cerradura. Supuse que solo se podía abrir desde el exterior.
En otras palabras, esto podría haber parecido una habitación normal, pero
en realidad era una prisión.
Pero espera...
"Bahairam...”

Ese era el nombre del lugar del que provenía nuestra bestia-chica-artista-
en-residencia, Elvia. En realidad, había comenzado como espía para este
país. Por orden de su nación, que había confundido la mansión Amutech
con algún tipo de instalación militar, había sido enviada a observarnos. Que
es donde la habíamos atrapado, pero a cambio de no ejecutarla, tenía que
trabajar en mi casa.
En cualquier caso, Elvia era en el fondo una persona seria y tranquila, tanto
que pronto olvidé que realmente era una espía enviada por una nación
enemiga.
Y eso es lo que ella era. Bahairam era realmente un enemigo del Sacro
Imperio Eldant. Como lo que equivalía a un invitado del Imperio Eldant, eso
también los convirtió en mis enemigos, o al menos, el Reino de Bahairam
probablemente me consideraba como uno de sus enemigos.
Y eso fue peligroso. Muy, muy peligroso.
Significaba que efectivamente había sido secuestrado por una nación
hostil.
No tenía idea de por qué harían tal cosa, pero no esperaba una cálida
bienvenida.
Tortura, tal vez. Ejecución. Lavado del cerebro. Mi mente se inundó con las
imaginaciones más horribles posibles.
Un movimiento en falso y podría terminar en problemas de los que nunca
saldría.
"¿Pero cómo podría yo posiblemente...?"
Y así sucesivamente y así sucesivamente.
"Padre."
Mis pensamientos, medio congelados por el pánico y el terror, fueron
interrumpidos por una voz cercana. El tono era muy serio, casi sin
emociones.
Miré y vi que la bestia llamada Clara estaba de repente junto a mi cama. Y
ella me miraba fijamente.
Lo que sugirió...
"‘Señor "... ¿Te refieres a mí?"

"Sí", dijo Clara con un gesto brusco. “Pido disculpas por no presentarme.
Me llamo Clara Belbaris.”
"Uh-Uh, claro. Encantado de conocerte. Soy Kanou Shinichi”.
"Lo sé", dijo Clara con otro movimiento de cabeza.
¡Oh! Hombre, algo sobre ese gesto fue muy lindo. Ella no tenía mucha
expresión, pero la forma en que evocaba un pájaro pequeño o algo así era
simplemente... ¡ahhh! Sabes a lo que me refiero, ¿no? ¿Usted no?
"Me han dado instrucciones de atender sus necesidades, señor".
"¿Mis necesidades?"
"Sí, señor", dijo Clara con fuerza.
¡¿Aaaaah..?! ¡¿Aaah?! ¡Aaaaaaaaaaaaaa! "".! ¡Hh! ¡Aaaa! ¡Ayúdame!
¡Aaaa! ¡Ah!.! ¡Aaaa! ¡Ahá sí mismo. ” ¡Ayhh!”! ”! ¡Ay, a ti, ya está!” “¡Ah!,
sí.“ ¡Ay!!! ¡Ah! ”. ¡Aaa! ¡Ay!!! ¡Ay!!.!!! ¡Ayúdame ya.” “¡Ah!! ¨! ¨ h.» H † h h h!
H ↑! ️ h h ¡Ah!! † __ _____
Mi corazón bailaba en mi pecho.
"¡Señor!" ¡Go-shujin-sama!
La dirección de Clara hizo eco en mi cabeza, acompañada de subtítulos en
japonés.
¡Qué cosa más brillante y hermosa que decir!
Quiero decir, estábamos hablando de go-shujin-sama. ¡Cuántos amantes
de las sirvientas deben haber en todo el país que soñaron con ser llamados
así, solo para tener que soportar la dura realidad...!
Y aunque la persona que se dirigía a mí no llevaba puesto un uniforme de
sirvienta, era una dulce joven. Físicamente pequeña, casi como si todavía
estuviera creciendo; de hecho, ¿cuántos años tenía ella?
De acuerdo, tuve un ejemplo muy específico de alguien que no se habría
visto fuera de lugar con la mochila de un estudiante de primaria, pero que
resultó ser casi de mi edad, así que sabía lo peligroso que podría ser juzgar
a alguien por su se ve.
Además de todo eso, Clara aquí tenía orejas de animales y una cola. Otro
elemento deliciosamente adorable: se veían geniales en ella.

"¡Imaginar que llegaría el día en que una chica como esta me llamara"
Señor "...!"
Apreté el puño, rebosante de emoción.
Pero luego a través de mi mente—
Maestro…
—Deslució la imagen de una criada medio elfa.

"¡¿Huh...?!"
¡No! ¡No, Myusel, no es así!
Por grandioso que sea ser llamado "Maestro" por usted, "Señor" es, ya
sabe, es la clásica palabra de la criada, y entonces, ¡ya vez, no era
realmente...!
Créeme, siempre serás mi criada, ¡número uno en mi ranking de criadas!
Esto es solo, quiero decir, ¡en realidad no estamos hablando de la lista en
este momento, y, eh...!
Y así sucesivamente, excusas sin sentido inundan mi cabeza a gran
velocidad.
"Me pregunto cómo estarán todos...”
Myusel. Petralka. Minori-san. Elvia. Brooke. Cerise.
¿Alguno de ellos sabía que estaba aquí, en Bahairam? ¿O nadie había
descubierto todavía que me habían llevado?
Deben haber estado preocupados de que yo no estuviera allí, o al menos,
así que me gustaba pensar.
Pero...
"Señor", dijo Clara de nuevo. Me había quedado en silencio. "Deseo
servirte".
"¿Huh-? Oh. ¿S-Servirme... a mí? Oh, sírveme, ¿no?”
Eso es lo que hacen las criadas, ¿verdad? Sirven. Básico.

Hacen la comida, o lavan la ropa, o limpian la casa, ocasionalmente son

muy torpes en el proceso.
Asentí, imaginándome a Myusel luchando diligentemente por la mansión.
La idea de la comida me hizo hacer una pausa para preguntarme: ¿qué
hora era?
Puse mi mano en la cortina que cubría la ventana de mi cama. Toda la luz
del sol implicaba que definitivamente no era de noche, pero...
"¡Ay!"
Abrí un poco la cortina y me asomé para descubrir que el cristal de la
ventana estaba reforzado y enrejado.
Sí. Definitivamente una prisión.
Esta dosis de realidad fría y dura envió un escalofrío por mi columna
vertebral.
“¿Vas a comer? ¿O preferirías un baño? ”, Preguntó Clara, mirándome con
curiosidad.
Gosh. Parecía una nueva esposa solícita. En mi cabeza, prácticamente
podía imaginarla con un delantal puesto, un cucharón en una mano,
saludando a su esposo mientras entraba por la puerta después del trabajo.
Y luego continuó...
"¿O me vas a tomar a mí?"
"......... ¿Uh?"
Eso me hizo parpadear un par de veces.
¿La había escuchado mal? ¿Mi otakuismo había tomado el control tan
completamente que finalmente había perdido mi control tenue sobre la
distinción entre fantasía y realidad? Espera, ¿acabo de decir algo de eso
en voz alta? ¡Mierda!
Estaba en pánico pero en silencio. Clara parecía tener su propia
interpretación de lo que esto significaba, porque se llevó una mano a la
ropa y...
"¡Espera un...!"

Clara ya estaba vestida con un atuendo que haría que un bikini se viera
modesto. Claramente, le tomaría unos dos segundos quitarse la ropa si
decidiera...
"¡¿Cl-Clara... san...?!"
¿Qué estaba pasando ahora? ¿Qué estaba viendo?
"¿Sí, señor?" Clara respondió con recato.
Sin embargo, no dejó de moverse incluso mientras hablaba, quitando sin
dudar cada trozo de tela de su pequeño cuerpo y dejándolo caer al suelo.
¡Whoa-oa-oa-oa-oa!
"Discúlpame", dijo Clara (no sabía si eso era porque vio lo nerviosa que
estaba o no), y luego se subió a mi cama. A gatas. Como si ella se fuera a
arrastrar justo encima de mí.
"¡Espera un momento, espera un segundo!", Grité, finalmente volviendo a
mis sentidos.
Dios, eso estuvo cerca.
No es que esta fuera mi primera experiencia cuando casi una niña con
orejas de animal casi me saltó. Tal vez por eso pude mantener la cabeza,
o al menos recuperarla eventualmente. Si esta fue la primera vez que
sucedió, podría haber sido arrastrado por las circunstancias y dejar que
eso suceda, o tal vez esto, como un animal.
Sin embargo, un momento de reflexión sobria reveló lo extraño que era
todo esto.
Aquí estaba, secuestrado por una nación enemiga. Y, sin embargo, esta
bestia, a quien nunca había conocido antes, estaba perfectamente feliz y
no se avergonzaba en absoluto de acostarse conmigo.
Tenía que haber algo detrás de eso.
Cálmate, Shinichi. ¡Estás en la trampa de Kong Ming! No es el Kong Ming
real, por supuesto.
"¿Sucede algo...?" Clara inclinó la cabeza en un gesto que parecía
totalmente inocente a pesar de que todavía estaba prácticamente encima
de mí.
¿Cuál es la historia con esta chica?

"Es... ¿Es esto lo que quisiste decir con 'servirme'?"

"¿Esto? ¿Cual?"
"Quiero decir, ya sabes, cómo pongo esto... sirviendo a mí... mi mitad
inferior...”
Tan reconocido como era por mi capacidad de decir algo totalmente
equivocado en el momento equivocado, incluso no podía obligarme a mirar
a una chica a los ojos en una situación como esta y usar palabras como
sexo o ecchi o ponerme en práctica. O ¡unh! ¡Unh! ¡Ahh! ¡Ahh! o [se omite
el resto de la lista].
"Sí", dijo Clara con un gesto de confianza. “Hay tres formas de hacer feliz
a un hombre. Comida, un baño o sex...
"¡La la la, no puedo escucharte!", Grité, interrumpiéndola antes de que
pudiera terminar.
¡Se supone que las niñas no deben usar palabras como sexo o ecchi o
hacer el amor o ponerse o no! ¡Unh! ¡Ahh! ¡Ahh! o ¡[resto de la lista omitida]!
¡Simplemente no está bien! ¡Rompería mis sueños demasiado frágiles!
Quiero decir... espera un minuto. ¿Qué es esto, algún tipo de juego ero?
"D-De todos modos, ¿tal vez podrías, como, eh, moverte a un lado por un
momento?", Le supliqué, incapaz de mirarla directamente. Sabía que mi
voz era media octava demasiado alta, y créeme, era vergonzoso. ¡Pero soy
un adolescente saludable! ¿Cómo se suponía que debía mantener la calma
en estas circunstancias?
Clara estaba gateando encima de mí, desnuda como el día en que nació.
La diferencia de altura significaba que su rostro estaba justo frente a mí,
pero eso significaba que si movía mis ojos incluso un poco hacia abajo, su
hinchazón modesta pero en desarrollo sería completamente visible, es
decir, su piel pálida y esas pequeñas, rosa... [Redactado por el autor]
"¿Por qué?” Preguntó Clara.
No pude evitar notar cómo miraba hacia abajo mientras hablaba. Seguí su
mirada y me di cuenta de que estaba mirando directamente entre mis
piernas. Digamos que no estaba recibiendo ninguna excusa de esa parte
de mi cuerpo. Desde esa perspectiva, su pregunta tenía cierto sentido.
Ahhhh... apenas entendí lo que me decía.

"¿Podría ser?", Preguntó Clara con una pizca de sorpresa, "¿que no soy
de su agrado, señor?"
"¡No! Eres mucho mejor de lo... er... "
Puedo elegir casi cualquier tipo de personaje moe; Puedo ser moe por casi
cualquier cosa, excepto por la mayoría de las cosas más por una
casualidad favorable. Pero eso no viene al caso.
"Entonces no hay problema, entonces". Se movió para que su rostro
estuviera justo al lado del mío.
“¡C-Ciertamente lo hay! ¡Detente ya!” Reuniendo cada onza de autocontrol
que pude, la aparté.
Este no era el momento de dejarme llevar por mis deseos. Por un lado,
podría ser una trampa, pero lo más importante, si Clara era tan joven como
parecía, involucrarse con ella fácilmente podría estar en contra de la ley, o
al menos convertirme en un monstruo total. Es decir, las leyes humanas no
se aplicaban necesariamente en mundos alternativos.
Pero como sea, ¡todavía estaba mal! ¡Tenía que parar!
De todos modos, ¡aquí era donde la resistencia daría fruto! ¡Cállate, oh mi
reino! (Significado desconocido)
Mientras luchaba en mi lucha desesperado por ser un caballero, Clara
parecía estar mirándome perpleja. Por cierto, digo "parecía estarlo" porque
estaba luchando por no mirarla. Aun así, prácticamente podía sentir su
mirada sobre mí.
Finalmente...
"¿Hay alguien más a quien le hayas dado tu corazón?", Preguntó Clara.
"...... ¿Eh?" La repentina pregunta me dejó perdido. "¿Alguien con quien
tengo...?"
Piensa de quién estábamos hablando aquí. El tipo que fue brutalmente
abatido por su amigo de la infancia y más tarde fue el guardia de seguridad
completo.
¿Cómo podría haberle dado mi corazón a alguien?
De todos modos, en el último año y medio, las únicas chicas con las que
realmente había hablado eran Myusel, Petralka, Elvia, Minori-san, y Cerise,
Romilda y algunas de las alumnas de la escuela.

Y sí, Myusel especialmente me dio estas sonrisas tímidas que eran

adorables, y solo hablar con ella fue muy divertido. Y la forma en que
Petralka se enojaría si la molestaba aunque fuera un poco era bastante
linda. Minori-san tenía esa cara de bebé y esas enormes tetas, pero
cuando hablé con ella, resultó que había algo de dulzura real allí.
En cuanto a Elvia, era tan tonta e ingenua que nunca la tomarías por espía,
muy sana...
.........
.........
¿De qué estábamos hablando otra vez?
"¡De todos modos!" Traté de evitar que las manos de Clara se acercaran,
inclinando la cabeza lo suficiente como para no ver. "Juro que no estoy
mirando, ¡así que solo ponte la ropa!"
"Pero..."
“Y, entonces, quiero que me hagas algo de comer. ¡Me muero de hambre!”,
Exclamé, desesperada por salir de esta situación.
Y era cierto que mi estómago se sentía bastante vacío. Afortunadamente,
en el momento en que lo pensé, mis entrañas dieron un gorgoteo
convincente.
"... Muy bien", dijo Clara asintiendo.
Con un tremendo esfuerzo, seguí concentrándome en todo menos en ella
mientras se bajaba de la cama. Cuando finalmente pude sentir que estaba
vestida de nuevo, dejé escapar un suspiro muy complicado.
Su Majestad Exaltada la Emperatriz, sentada en su trono, tenía una

expresión que era la oscuridad misma.
Emperatriz Petralka, an Eldant Tercero.
A pesar de su largo nombre y su imponente título, era hermosa para la
vista; si puedo arriesgarme a parecer irreverente, parecía bastante dulce.
Su cabello plateado era como una corona en sí, bien peinado y brillante,
sus ojos eran como dos grandes joyas, y sus rasgos eran como los de una
muñeca de porcelana tallada por el maestro más sublime. Parecía no tener
defectos.

Ver a Su Majestad reír alegremente es de verdadera elegancia. Pero de la

misma manera, cuando su rostro se nubla, emite una tristeza que hace que
sea doloroso incluso mirarla.
Pensé que la forma en que tamborileaba con los dedos sobre el
reposabrazos de su trono indicaba molestia.
Ella no habló.
La palidez desagradable de su rostro fue compartida por el ministro que
estaba a su lado. Tenía el mismo cabello plateado que Su Majestad, pero
era un caballero guapo: Garius en Cordobal.
Él tampoco habló.
Apenas capaz de soportar la tensión, miré a la mujer a mi lado en busca
de ayuda.
Koganuma Minori-sama.
Era una guerrera de otro país, uno llamado Japan. Ella era la mujer
acusada de ser la guardaespaldas de mi amo.
Sin embargo, su fuerza poco común desmintió su tremenda amabilidad;
ella nunca fue dura, pero actuó con simpatía, incluso hacia una doncella
como yo. No tengo hermanas, pero estoy seguro de que tener una
hermana mayor debe ser así. Estos pensamientos me poseyeron por unos
momentos.
Sucede que Koganuma-sama y los demás de Ja-pan dan sus nombres en
el orden inverso al de nosotros, primero con sus apellidos. Así que
realmente, es más apropiado que la llame Koganuma-sama. Pero mi
maestro se refiere a ella como "Minori-san" tanto que me temo que ha
comenzado a contagiarme.
Minori-sama fue la tercera persona que no habló; ella no se veía más feliz
que los nobles en la habitación.
Normalmente, ella habría sonreído alentadoramente y dicho algo como
"¡Estará bien!" Pero en este momento, su rostro solo mostraba ansiedad.
Esto por sí solo fue suficiente para sugerir que esta no era una situación
que justificara el optimismo.
No podía decidir dónde poner mis ojos y, por lo tanto, miré tristemente al
suelo. Pero entonces-

"Minori. Myusel.”
Cuando Su Majestad dijo mi nombre, me enderecé rápidamente.
Normalmente estaría demasiado por encima de mí para pronunciar mi
nombre, y mucho menos admitirme en su cámara de audiencia, aunque Su
Majestad misma me había alentado a no preocuparme demasiado por
nada de eso ...
"Suponemos que ya sabes por qué te hemos convocado aquí", dijo Su
Majestad con el ceño fruncido. "Se trata de Shinichi".
Cuando la emperatriz pronunció ese nombre, mi corazón se enfrió y saltó
al mismo tiempo.
Kanou Shinichi-sama.
Mi maestro...
Había venido al Imperio Eldant desde su lejano país de Japan para hacer
el trabajo de difundir la cultura otaku. Como Japón carecía de una clase
noble, no tenía título para hablar. Pero era un invitado del estado del
Sagrado Imperio Eldant y embajador, por lo que efectivamente debía ser
tratado como un noble.
Y sin embargo, fue tremendamente amable conmigo, a pesar de que no
solo era un plebeyo, sino un medio elfo muy vilipendiado. El hecho de que
Su Majestad supiera mi nombre, de hecho, lo diría en voz alta, realmente
tenía que ver con los buenos oficios de Shinichi-sama.
En cualquier día normal, sería Shinichi-sama, y no yo, de pie junto a Minori-
sama.
Pero Shinichi-sama no se veía por ninguna parte. De hecho, en ese
momento, no teníamos idea de dónde estaba. No yo, no Minori-sama. Y,
al parecer, no Su Majestad o Ministro Cordobal.
Nadie había visto a Shinichi-sama en ninguna parte desde la mañana
anterior.
Nuestro jardinero, Brooke-san, dijo que había visto a Shinichi-sama salir a
caminar fuera de la mansión temprano por la mañana. Mi maestro dando
un paseo por los jardines no era especialmente inusual, así que me puse
a preparar el desayuno con normalidad y esperé a que Shinichi-sama
llegara a casa.

Excepto por el tiempo que esperé, él nunca lo hizo.

El tiempo para que él fuera a la escuela vino y se fue, y cuando todavía no
lo habíamos visto al mediodía, comenzamos a pensar que algo extraño
estaba sucediendo. Yo, junto con Minori-sama, Brooke-san, Cerise-san y
Elvia-san, monté una búsqueda de Shinichi-sama, pero aunque buscamos
hasta que estaba oscuro, nunca lo encontramos.
Luego, al día siguiente, es decir, hoy, un carruaje tirado por pájaros
apareció repentinamente en nuestra mansión, y nos informaron que Su
Majestad nos estaba llamando a mí y a Minori-sama.
No se debe ignorar una citación de la emperatriz, sin importar lo que esté
sucediendo. Minori-sama y yo le pedimos a Brooke-san y a los demás que
siguieran buscando, mientras íbamos al Castillo de Eldant para esta
audiencia.
Y entonces...
"Shinichi ha sido secuestrado".
"¿Qué...?" No pude contener un jadeo.
Pasó un momento antes de que pudiera entender lo que Su Majestad había
dicho. Inmediatamente me tapé la boca con las manos, lejos de ser tan
grosero como para dudar de las palabras de la emperatriz, pero ni Su
Majestad ni el Ministro Cordobal parecían estar enojados conmigo.
Parecían, de hecho, como si tuvieran cosas mucho más grandes en sus
mentes.
El ministro Cordobal aclaró lo que Su Majestad había dicho. "Aún no
estamos seguros, pero la posibilidad de que haya sido secuestrado parece
muy alta".
Shinichi-sama... ¿secuestrado?
¿Pero por qué? ¿Y por quién?
Estaba tan conmocionado y confundido que apenas podía poner dos
pensamientos juntos.
"Matoba nos informó que Shinichi no ha sido visto desde ayer por la
mañana", dijo Su Majestad. “Si eso fuera todo, podríamos simplemente
suponer que ese viejo tonto estaba haciendo otro de sus trucos. Pero
también hemos recibido otro informe que es mucho más difícil de ignorar”.

"¿Qué es eso?", Preguntó Minori-sama.

Fue el ministro Cordobal quien respondió. “Bahairam. Tuvimos noticias de
que una unidad secreta del Reino de Bahairam ha estado activa en el área
alrededor de la capital durante los últimos días. Desde el incidente con el
dragón títere, informes como este han ido en aumento... Asumimos que
todos estaban relacionados con esta nueva arma, el dragón títere.
Ejercicios para una guerra.”
Incluso antes de nuestro encuentro con Elvia-san, parecía que el Reino de
Bahairam había estado haciendo incursiones a pequeña escala en territorio
Eldant, enviando un pequeño número de espías o soldados al Imperio. Sin
embargo, en su mayor parte, parecían querer averiguar cuál era la
situación interna. Nunca habían mostrado ninguna señal de que
pretendieran huir con uno de los súbditos de Su Majestad.
El ministro Cordobal, sin embargo, dijo: "Hemos recibido informes de
personas que parecen ser soldados de Bahairamanian de varios lugares
en todo nuestro territorio. Además, recuperamos lo que parece ser la
posesión de uno de esos soldados no muy lejos de la mansión de Shinichi”.
Luego nos mostró algo: un pequeño colgante.
Había pasado suficiente tiempo en el ejército para reconocer lo que era.
Era algo que los soldados de Bahairam llevaban alrededor del cuello. Sirvió
como identificación personal y prueba de su lealtad a su país. El frente
tenía letras simples, pero en el reverso estaba tallado la imagen de su rey.
Su Majestad dijo: "Es posible que hubo una lucha cuando Shinichi fue
tomado, causando que alguien dejara esto. O tal vez fue deliberado, dejado
atrás para hacernos saber que lo tenían como rehén, para que pudieran
usarlo como palanca en las negociaciones. Aún no está claro cuál es el
caso”.
Pero eso significaría...
"Hay una tercera posibilidad. La conmoción con el dragón títere puede no
haber sido casual. Puede haber sido una diversión organizar este
secuestro”.
El dragón títere: un dragón con lo que parecía ser una espiga mágica
golpeó en su cabeza.
Era un tipo de arma mágica hecha en Bahairam, o eso dicen los rumores,
pero aún no lo sabíamos con certeza. Nos habíamos encontrado con el

dragón por puro accidente. Vi con mis propios ojos cómo la fuerza militar
del mundo de Minori-sama, el Jay Ess Dee Eff, lo derribó.
Habíamos asumido que el dragón títere era un experimento que había
escapado de Bahairam y acababa de llegar al Imperio Eldant y nos atacó.
Pero reflexionando, era una distancia considerable desde nuestra frontera
con Bahairam hasta la capital. ¿Podría una fuerza de Bahairamanian
realmente no pudo recuperar el dragón títere antes de que nos alcanzara?
¿Era posible que todo esto fuera realmente parte de un plan?
O incluso...
"Incluso si asumimos que el Reino de Bahairam hizo esto, ¿por qué
secuestrarían a Shinichi-kun?", Preguntó Minori-sama.
"No puedo decir que entiendo lo que Bahairam podría estar pensando",
respondió el ministro Cordobal. "Pero no hemos salido exactamente de
nuestro camino para mantener a Shinichi en secreto. Cualquiera que esté
husmeando en nuestro territorio, tratando de descubrir cosas recientes,
pronto escuchará su nombre. No se sabe si entienden completamente
quién es y de dónde viene, pero saben que han capturado a alguien
importante para nuestro país, y eso es suficiente”.
Tenía razón: Shinichi-sama había hecho todo tipo de cosas aquí que nunca
antes se habían hecho en ningún otro lugar. La guerra había durado tanto
que incluso aquí, en la capital, lejos de los combates, la gente comenzaba
a sentir la fatiga. La cultura otaku que Shinichi-sama nos trajo, y todos los
diversos eventos que la acompañaron, le dieron una nueva vitalidad no
solo a la capital, sino a toda la nación.
Tal vez eso fue lo que atrajo la atención del Reino de Bahairam.
En realidad, Elvia-san era una espía que había sido enviada para averiguar
qué estaba pasando con Shinichi-sama. No es que ella pareciera recordar
eso.
"Minori", dijo Su Majestad para romper el silencio opresivo que había caído
sobre nosotros. "¿No podría enviar a Jay Ess Dee Eff?"
Ligeramente conmocionado, eché un vistazo a Minori-sama a mi lado.
Por supuesto. El Jay Ess Dee Eff.
Habían derrotado a ese dragón sin perder un solo soldado. ¿Seguramente
rescatar a Shinichi-sama sería un trabajo fácil para ellos?

Sin embargo, a pesar de nuestras miradas expectantes, Minori-sama bajó

los ojos. "Me temo que... personalmente no lo puedo decir".
Por supuesto no. El Jay Ess Dee Eff era una organización militar, después
de todo. No podrían actuar sin las órdenes de sus superiores. Alguien,
¿Matoba-sama? ¿Minori-sama? Probablemente tendría que llevar el
asunto de vuelta a Japón y consultar con su gobernante o primer ministro
o con quien tuviera el poder allí. Pero eso llevaría tiempo.
"Por supuesto..." Su Majestad dijo débilmente. Parecía que casi había
esperado esta respuesta.
Su Majestad luego miró al Ministro Cordobal. Si Jay Ess Dee Eff no podía
hacer nada, entonces quizás podrían enviar algunos soldados Eldant...
Pero...
"Majestad. Como te dije antes, nuestro país no puede enviar tropas”.
"Garius...”
"Recientemente hemos logrado una especie de estancamiento con
Bahairam. Puede haber escaramuzas fronterizas, pero no ha habido
batallas a gran escala. De hecho, las cosas son casi estables. Muchos de
sus ministros más importantes sugieren que aprovechemos esta
oportunidad para promover la causa de la paz con nuestro vecino”.
Su Majestad no dijo nada, solo se mordió el labio y miró al suelo. Era
demasiado sabia para no entender lo que decía el ministro Cordobal.
El Sagrado Imperio Eldant y el Reino de Bahairam habían estado en guerra
durante bastante tiempo, y ambas naciones estaban cansadas de ello. Lo
último que ambos querían era que la guerra se hiciera más grande o más
intensa. Podrían ser un país enemigo, pero una provocación descuidada,
o algo que fácilmente podría tomarse como provocación, no serviría a
nadie. Podría fácilmente convertirse en un conflicto masivo.
"Además", dijo el ministro Cordobal, "Shinichi puede ser un invitado
importante en nuestro país, pero no es uno de los súbditos de Su
Majestad".
En otras palabras, independientemente de si el ejército japonés se
involucró, no tendría sentido que el Imperio Eldant actuara en su nombre.
El Imperio Eldant fue una gran potencia. Eso significaba que incluso la
emperatriz no podía simplemente hacer lo que quisiera. Si todos sus

consejeros se opusieran a ella, incluso la voluntad imperial podría verse

frustrada.
"Sí, pero... Pero..." Su Majestad tartamudeó por un momento, luego se
quedó en silencio.
El ministro Cordobal no se veía mucho más feliz que ella. Comprendí que
él también sentía cariño por Shinichi-sama. Entonces, aunque sus palabras
pueden sonar despiadadas, deben haberle causado un gran dolor.
Sin embargo...
No pude evitar preguntar: "¿Qué será de Shinichi-sama, entonces?"
Cada par de ojos en la sala de audiencias, incluidos los de Su Majestad,
se centraron en mí. Instintivamente retrocedí, avergonzado por haberme
sobrepasado. Y sin embargo, tuve que hablar. De lo contrario, parecía que
nadie iba a ayudar a Shinichi-sama. Y eso...
"¿Esto significa que Shinichi-sama nunca podrá volver a casa de nuevo...?"
"Myusel...”
Su Majestad pronunció mi nombre con tanta tristeza.
Entendí. A ella también le dolía. Quizás incluso más de lo que lo hice yo.
Porque a diferencia de mí, Su Majestad tenía el poder...
"No hace falta decir que no tenemos la intención de girar nuestros pulgares
y no hacer nada", dijo el ministro Cordobal. “Simplemente quiero decir que
la acción militar abierta está fuera de discusión. Enviar un embajador de
buena voluntad o alguien por el estilo para negociar, es una posibilidad.
Sin embargo..." Las hermosas cejas del ministro se fruncieron de dolor.
"Eso es solo en el caso de que el Reino de Bahairam admitirá que
secuestraron a Shinichi".
No dije nada.
Él estaba en lo correcto. Si Bahairam decidiera no reconocer que estaban
reteniendo a Shinichi-sama como rehén, entonces no habría forma de que
el Sagrado Imperio Eldant lo recuperara...
"Mientras tanto, trataremos de proponer algunas ideas también", dijo
Minori-sama.
"Sí por favor. Los mantendremos informados si sabemos algo”.

"Muchas gracias. Te deseo la mejor de las suertes."

Minori-sama se inclinó ante el ministro Cordobal, lo que me llevó a agachar
la cabeza apresuradamente también.
Pero aún...
Maestro... Shinichi-sama...
¿Le ayudaría realmente Jay Ess Dee Eff? Japón alguna vez había
considerado a Shinichi-sama tan problemático que intentaron matarlo.
¿Enviaría un país así a sus fuerzas armadas a una nación extranjera para
rescatarlo?
Sin embargo, este apenas parecía el momento de expresar mis
preocupaciones. Minori-sama y yo nos inclinamos una vez más ante Su
Majestad y el Ministro Cordobal y luego salimos de la sala de audiencias,
dejando solo un pesado silencio detrás de nosotras.
El baño limpia tanto la mente como el alma, dicen. Y tienen toda la razón.
"Ahhh...”
Me deslicé hacia el banco de piedra y dejé escapar un suspiro relajado.
Este lugar no se parecía tanto a un baño como a una sauna. Es decir, no
había bañeras reales. En cambio, había baldosas de ladrillo, a través de
las cuales salía vapor caliente de quién sabía dónde.
A medida que van las habitaciones, era bastante grande. No tenía
exactamente una cinta métrica conmigo, pero supongo que toda el área
tenía unos diez tapetes.
No era como el baño en mi mansión en el Imperio Eldant. Ese había sido
más el tipo de cosas a las que estaba acostumbrado, ya sabes, una bañera
con mucha agua caliente. Tal vez solo estaba encontrando una diferencia
cultural entre los dos países.
Había escuchado que incluso había países en la Tierra donde, a diferencia
de Japón, que tenía mucha agua, ni siquiera había una costumbre de usar

una bañera. Algunas personas, al ver una gran área de baño, en realidad
podrían sentirse un poco asqueadas, tal vez no podrían soportar la idea de
usar agua que otros ya se habían bañado.
Pero de todos modos, nada de eso realmente importa.
"Hmm...”
Con esto y aquello, ya habían pasado tres días desde que fui secuestrado
y llevado a Bahairam. Pasé los primeros dos días revisando mi habitación,
tratando de ver si había alguna forma de escapar, pero todo lo que aprendí
fue que estaba cerrada tan fuerte que una hormiga no podría haber entrado
o salido. Las ventanas tenían rejas sobre ellos, y la puerta de la habitación
estaba cerrada y no se podía abrir desde el interior. Lo había golpeado un
par de veces, preguntándome si podría romperlo, pero decidí que mi silla
se rompería primero.
En esa nota, Clara estuvo conmigo todo el tiempo que estuve mirando
alrededor de mi habitación, observando cada uno de mis movimientos.
Pero ella no dijo nada. Supuse que estaba allí principalmente para
vigilarme, pero la veía las veinticuatro horas del día; ella nunca se fue a
informar a nadie.
¿Podría ser que en realidad no era ciudadana de Bahairam, sino que, como
yo, secuestrada de otro lugar? O tal vez ella era de este país, pero
especialmente baja en la escala social. Siempre existía la clara posibilidad
de que en este mundo, que, recordemos, tenía efectivamente un nivel
cultural de la Edad Media, la esclavitud todavía estaba viva y sana. Si fuera
posible comprar vidas humanas, ¿qué tan fácil sería considerarlas
desechables?
Incluso había considerado un escenario de último recurso en el que tomé
a Clara como rehén para escapar... pero no parecía muy esperanzador.
Mientras revisaba todo esto en mi mente, escuché que se abría la puerta
de la zona de baño.
"Perdón", dijo alguien.
Estoy a punto de ahogarme.
Espera. Aguanta.
Mira, lo entiendo. Esta es la clásica escena del baño. El más venerable de
los tropos. ¿Pero realmente estaba sucediendo?

Mientras estaba sentado en la zona de baño casi aterrado, alguien se

acercó en silencio, con los ojos bajos. Era, no hace falta decirlo, Clara.
Una vez más, ella estaba desnuda como un pájaro arrendajo.
Me refiero a no un trozo de ropa.
Su modesto pecho, sus caderas aún ensanchadas y su... eh... el lugar
donde sus piernas se encontraban con su torso estaban más o menos a la
vista. No parecía haber pensado en cubrirse con una toalla, pero me golpeó
con las manos solo para esconder su pecho.
"¡Okay espera...!"
Me di la vuelta en el banco lo más rápido que pude, dándole la espalda.
No para presumir, pero puse la L en perdedor. Cero experiencias con las
damas, por supuesto. No estaba a punto de soltar un "¡Woo-hoo! ♪ "y beber
a la vista del cuerpo desnudo de Clara.
"Perdón", repitió Clara, y luego se sentó en el banco junto a mí. Me di
cuenta por el sonido, y pude sentirla allí. Todavía le daba la espalda,
mirando fijamente la pared de la habitación. Pero entonces...
"¡Demonios!"
Encontré sus brazos envolviéndome hacia mi pecho.
Sentí algo presionando contra mi espalda. ¡¿Lo es?! ¡¿Era qué?! ¡¿Podría
ser?!
No, no eran grandes; de hecho, eran bastante leves, pero eran
perfectamente suaves, y podía sentir que estimulaban los nervios de mi
espalda... ¡¿Peee... Peeee... Peeeeeee?! ¡Pechos... pe-chos... peeeeahh!
Cuando mis funciones lingüísticas se volvieron locas, Clara se apretó
contra mí y me abrazó por detrás.


"E-E-Esp— ¡Espera! ¡Espera!"

"... Está bien", dijo Clara, y obedientemente esperó.
Esperó, pero eso no significaba que me diera más espacio personal. Por
lo tanto, mi galaxia fue éxtasis más rápido que la velocidad de la luz.
(Significado desconocido)
"Mira... Uh... ¿Podrías darme un poco de espacio?"
"Está bien", dijo Clara, y tan obedientemente retrocedió.
Por lo menos, parecía que iba a respetar lo que yo quería, no iba a forzar,
ya sabes, cosas sobre mí.
¿Qué estaba pasando exactamente aquí?
"¿P-Podrías decirme qué está pasando exactamente aquí?"
"Pensé que podría lavarte tu honorable espalda".
"No, er... quiero decir, estoy muy feliz por eso, pero-"
"Y para que podamos tener relaciones después de eso".
"¡Te lo dije, nada de relaciones!"
No tenía la intención de gritar.
Clara guardó silencio.
"Escucha, es, er, soy muy y muy humildemente consciente de lo que estás
diciendo exaltada, pero-"
Esto no fue bueno. Tuve otro error en mi sistema.
¡No, las neuronas! ¡Tenemos que seguir adelante!
¡Necesitamos un plan fantástico para sacarnos de este atasco!
No estoy tratando de presumir, ¡pero esta no es la primera vez que yo,
Kanou Shinichi, he estado en una situación como esta!
¡Entonces debería poder aprovechar mi experiencia pasada y saber
exactamente qué hacer!
La última vez, la última vez, yo... err... ¿Qué hice?
¡Arrgh, no es bueno! La última vez que salí con mi pureza intacta porque
Myusel y Minori-san se presentaron en el peor momento, ¡pero esta vez
solo fuimos Clara y yo...!

Ahora que lo pienso, ¡ni siquiera lo supe la última vez! ¡Mal yo! ¡Estoy
decepcionado de mí!
¡Peligro! ¡Peligro, Kanou Shinichi!
¡Vamos, neuronas, piensa!
Tiene que haber alguna razón, alguna razón para no hacer nada sucio...
"Ejem, er, um, hay, hay alguien a quien ya he puesto, ¡ya sabes, mi
corazón!"
"¿Es eso así?"
"¡Mucho!" Dije, mi voz se quebró un poco.
¡Si! Eso lo haría. ¡Eso evitaría que Clara me empujara a nada! Debería
haberme dado cuenta cuando me preguntó si la estaba rechazando porque
había alguien más en mi corazón que, incluso en su visión del mundo,
entendían que preservar la castidad de uno por la persona que amabas.
Perfecto. Muy lógico.
Sonreí aliviado, hasta que Clara comenzó a hablar en voz baja.
"En ese caso, deberías poner tu corazón en mí".
"¡¿Perdón?!"
Si pudieras cambiar el objeto de tus afectos al caer un sombrero como ese,
no estarías muy "fijo" en esa persona, ¿verdad?
Más concretamente, ¡realmente era hora de aclarar qué demonios estaba
pasando aquí!
¿Las cosas iban todas adultas aquí? ¡¿No para menores de 18 años?!
"¡No importa, simplemente no podemos!" Casi grité.
Mira, no es que no estuviera totalmente ansioso de que la trama tomara un
giro de clasificación X.
El problema era que este era el Reino de Bahairam. Y yo era su prisionero.
No tenía una comprensión muy sólida de lo que estaba sucediendo, y mi
gh ** t (er, tal vez debería decir mi sentido instintivo de precaución) estaba
susurrando que un movimiento descuidado podría significar cosas muy
malas para mí.

Pero entonces...
"¿No soy de tu agrado, Señor?"
¿ES ESO REALMENTE OTRA LÍNEA FIGURATIVA?
Francamente, todo el asunto "¿No te gusto?" Se ha hecho morir en cada
manga, anime y novela ligera, sin mencionar que esta era la segunda vez
que Clara me lo decía.
Pero esta vez lo decía desde tan cerca que podía sentir su aliento
cosquillear mi oído mientras susurraba las palabras, y esa línea trillada se
convirtió en una fuerza a tener en cuenta.
"¡E-E-E-E-E-Eso no es realmente lo que quise decir...!", Dije, retrocediendo
antes de saber lo que estaba haciendo.
Tenía la sensación de que solo escupir, "Maldita sea, ¿cómo podría
conseguirme algo para alguien como tú?" En realidad me ahorraría una
gran cantidad de problemas a largo plazo, pero también podía imaginarla
simplemente respondiendo, "Deja entonces te ofrezco a alguien más ", y
traigo a alguien aún más agresivo. Y eso sería un problema completamente
nuevo.
Pero esto también fue un problema. Maldita sea si lo hice, maldita sea si
no lo hice. ¡Rodeado por todos lados!
"¿Preferirías un hombre, tal vez?"
"¡No! ¡No! ¡Definitivamente no!"
A través de mi mente apareció la imagen de la cabeza de cierto WAC
explotando, pero en cuanto a mi propia cabeza, la sacudí vigorosamente.
Quería asegurarme de que este mensaje en particular llegara alto y claro:
no chicos. Lo último que quería era que Clara se escapara suavemente y
enviara a un hombre en su lugar, sin importar cuán feliz eso pudiera hacer
que Minori-san.
En ese punto de mi pensamiento, finalmente me detuve y suspiré.
¿Cómo estaban todos en Eldant? ¿Cómo se sintieron acerca de mi
desaparición? ¿Hubo un alboroto? Me sentiría mal si les hubiera causado
alguna angustia.

¿O habían dicho básicamente: "Bueno, él es un ex guardia de seguridad

del hogar", y no se preocuparon en lo más mínimo? Eso fue igualmente
doloroso de imaginar.
No tengo forma de comunicarme, y no me dejan salir de esta casa, así que
no hay nada que pueda hacer.
Sin embargo, la pregunta seguía siendo: ¿qué quería exactamente
Bahairam con el secuestro de mí? Intenté preguntarle a Clara al respecto,
pero ella sacudió la cabeza sin decir nada y no me dijo nada. Y en cuanto
a Amatena, que parecía ser al menos algo responsable de lo que estaba
sucediendo, solo la había visto una vez.
Cuando pensé en el secuestro, la palabra que me vino a la mente fue
definitivamente un rescate.
¿Pero soy tan valioso? ... fue, er, una pregunta que esperaba que nadie
hiciera.
El gobierno japonés tenía muchas ganas de desaparecer de todos modos,
por lo que no parecía probable que desembolsarían dinero para
recuperarme. En cuanto al Sagrado Imperio Eldant, podría haber sido
tratado como un invitado de estado, pero no era uno de sus súbditos, por
lo que tampoco esperaba que pagaran por mí. Si Bahairam iba a tomarse
la molestia de secuestrar a alguien, ¿por qué elegir a alguien en una
posición tan precaria como yo? El hijo o la hija de una familia noble parecía
más seguro de obtener resultados.
Eso sugirió que el secuestro tuvo algo que ver con el trabajo en el que
estaba involucrado.
Cultura Otaku. El arma de la invasión cultural que yo y los japoneses
habíamos traído a este mundo.
"Pero... ¿Bahairam...?"
Era cierto, Eldant había comenzado a tomar medidas para exportar la
cultura otaku misma. Ya había habido envíos a varios otros países en el
área, experimentos para ver cuál sería la reacción. Pero estaba bastante
seguro de que ninguno de ellos había ido a Bahairam, que era un país
enemigo, después de todo. ¡Ah! Pero si tenían espías como Elvia en
Eldant, probablemente hubieran obtenido al menos alguna información
sobre el tema.
"¿Señor?", Preguntó Clara de nuevo.

¡Uy! Lo olvidé. Tenía que tratar con mi pequeña amiga de alguna manera.
“Um, cierto. Um. Verás, en realidad, ya sabes, soy todo sobre chicas, pero
estoy... ¡estoy enfermo! Es una enfermedad muy grave y muy rara que,
eh... ¡me hace morir! Si yo, ya sabes, hago ese tipo de... cosa”.
Decidí dejar que mi boca hiciera lo que quisiera. Una parte de mí
definitivamente se preguntaba qué demonios estaba diciendo en ese
momento, pero tenía que inventar algún tipo de mentira como esta o
simplemente me engañarían una chica tras otra, y las cosas solo se
volverían más whoa-whoa- Whoa con cada nueva cara.
Pero entonces...
"¿Estás... enfermo, señor?"
Aparentemente, Clara había comprado mi artimaña.
"¡Sí, enfermo! Entonces, si sabes... Si hago algo contigo, Clara, moriré. Y
eso sería malo para todos. Creo.” Continué dejando que mi boca corriera
el espectáculo mientras intentaba escapar de esta trampa de miel.
"Ustedes no quieren que muera, ¿verdad? No quieres que muera, ¿verdad,
Clara? "
"Estás en lo correcto. Eso sería muy problemático”, dijo Clara.
“Bueno, er, entonces tal vez podrías dejarme solo en el baño por ahora.
Oh, hey, en realidad, ¡ya terminé! Estoy fuera de aquí, ¡así que tómate tu
tiempo! "
Salí de la zona de baño, volví la cabeza dolorosamente para no mirarla y
me dirigí al vestuario.
"Mi señor..."
La voz de Clara me siguió, pero cerré la puerta entre el baño y el vestuario.
Luego me desplomé contra él y dejé escapar un suspiro.
El interior de la mansión parecía oscuro y sombrío. Sin el maestro, Shinichi-

sama, en casa, parecía que faltaba algo. Y, por supuesto, eso era cierto,

en cierto nivel, pero era más que eso. Era como si el color se hubiera ido
de todo; Era como la mezcla de tristeza e indolencia que sientes en el
crepúsculo.
Brooke-san, Cerise-san, Elvia-san y Minori-sama: nadie hablaba mucho y
nadie parecía muy feliz. Debo admitir que no soy muy bueno leyendo las
expresiones de hombres lagarto como Brooke-san y Cerise-san, pero su
lenguaje corporal, la forma en que se movían sus lenguas, hacía que
pareciera que se sentían deprimidos.
Sabía que era un poco tarde para esto, pero todo esto me trajo a casa la
importante presencia que Shinichi-sama había tenido en todas nuestras
vidas.
Sin embargo, apenas podía descuidar mis deberes como sirvienta solo
porque Shinichi-sama se había ido. De hecho, era mi trabajo asegurarme
de que la casa estuviera en forma de barco, para que Shinichi-sama
pudiera regresar en cualquier momento y encontrar el lugar en buen
estado. Además de eso... Bueno, yo solo era una sirvienta, y esto era todo
lo que podía hacer. Y tenía que hacer algo, o pensé que me volvería loco
de preocupación.
Después de que terminó el desayuno, llegó la hora de limpiar y lavar la
ropa.
Me ocupé primero de la ropa. La mayoría de las cosas estaban secas, y yo
caminaba por el pasillo con una canasta y algunos trapos.
"Shinichi-sama...”
No pude evitar que su nombre llegara a mis labios. Sin embargo, no importa
cuántas veces lo llamé, él no respondió.
Pensé que la ansiedad me iba a aplastar.
Ya habían pasado cinco días desde que Shinichi-sama había
desaparecido. No había escuchado nada de Su Majestad o Minori-sama
en los últimos tres días. Eso probablemente significaba que no habían
aprendido nada. Incluso nuestra hipótesis de que Shinichi-sama había sido
llevado al Reino de Bahairam no era del todo cierto. Y tratar de encontrar
a una sola persona sin ningún tipo de pistas fue como agarrarse a las
nubes...
Dejo salir otro suspiro. Había perdido la cuenta de cuántas veces había
hecho eso.

La escuela era de la misma manera: sin Shinichi-sama, nada podría

avanzar. Minori-sama y yo, los dos instructores restantes, les habíamos
dicho a los estudiantes que estarían haciendo "estudios gratuitos" hasta
nuevo aviso, y no habíamos estado en la escuela desde entonces.
Estaba seguro de que los estudiantes también estaban preocupados.
Todos admiraron a Shinichi-sama.
"Shinichi-sama...”
¿Estás herido? ¿Qué te está pasando ahora?
Su rostro flotaba en mi mente una y otra vez, y cada vez sentía que mi
pecho se apretaba. Duele.
Estaba caminando con los ojos en el suelo cuando...
"¿Hm...?"
De repente me di cuenta: podía escuchar a la gente hablando.
Provenía de la sala de estar. Parecía que probablemente era Minori-sama
y su superior, Matoba-sama. Había pasado bastante tiempo desde que
Matoba-sama había estado aquí, creo que había regresado a Japón para
hacer un informe.
¿Podría ser...?
¿Enviaría Japón a alguien para rescatar a Shinichi-sama?
Jay Ess Dee Eff no podría actuar sin las órdenes del gobierno de Japón.
Pero eso también significaba que si el gobierno así lo ordenaba, el Jay Ess
Dee Eff podía volver su fuerza, el poder suficiente para derrotar a un
dragón, para ayudar a mi maestro.
¡Por eso había vuelto Matoba-sama!
Con esa esperanza en mi corazón, me dirigí hacia la sala de estar.
"¡Eso es exactamente por qué...!"
"Pero..."
Solo podía escuchar fragmentos de la conversación.
Estaban hablando japonés. Por supuesto, el resto de nosotros en la casa
escuchamos rutinariamente a Shinichi-sama y Minori-sama hablando este
idioma. Pero nuestros anillos mágicos también lo transformaron

simultáneamente en el idioma Eldant, lo que nos permitió hablar más

fácilmente con ellos.
En ese momento, sin embargo, todo lo que podía escuchar era japonés.
Eso debe haber significado que los dos se habían quitado los anillos.
Deliberadamente, sospeché.
Esa ansiedad comenzó a surgir nuevamente.
Puse la canasta y los trapos en el suelo donde estarían fuera del camino,
luego presioné mi espalda contra la pared y escuché con atención las
palabras que venían de la habitación contigua.
"Entonces, ¿estás diciendo...?"
"Eso sería... sí. Entonces..."
Hablaban rápido y usaban muchas palabras que no sabía, por lo que no
podía seguir todo lo que decían. Pero luego escuché a Minori-sama gritar:
"¿Quieres decir que el gobierno japonés instigó el secuestro de Shinichi-
kun?"
Contuve el aliento, sintiendo que mi corazón saltaba lo que parecían ser
varios latidos.
¿Qué acababa de decir Minori-sama?
"Vamos, vamos, no estoy seguro de eso yo mismo. Simplemente digo que
los que están por encima de mí parecían... esperar esto. Siempre hubo
quienes sintieron que restringir nuestro compromiso solo con el Imperio
Eldant era arriesgado. Especialmente cuando la emperatriz del país
parecía tan entusiasmada con Shinichi-kun. Algunos han sugerido que
podría ser un Rasputín o un Dokyo del siglo XXI.”
"Eso es-"
“Además de eso, el JSDF ha estado realizando misiones de escolta para
envíos de exportación de mercancías otaku, ¿no es así? Y saben que
derrotamos a ese dragón. Desde ese punto de vista, parece que
simplemente se le dio el deber de acercarse a otras naciones además de
Eldant”.
"¡No me lo dijeron!"
"No eres más que el guardaespaldas de Shinichi-kun. No te concierne”.
"Pero señor-"

"Estoy bastante seguro de que es el Reino de Bahairam el que está detrás

de este último incidente. Simplemente digo que podrían haberse inspirado
en la información que les pasó el gobierno japonés”.
"¿Pero por qué el gobierno...?"
"Bueno, sin Shinichi-kun, tienen la excusa perfecta para enviar a alguien
nuevo".
"¡¿De eso se trata?! ¿Un pretexto?”
“Eventos anteriores dejaron en claro cuán fuertemente el Imperio Eldant se
opondría a cualquier intento directo de Japón de liquidar a Shinichi-kun. Un
movimiento descortés de nuestra parte podría incluso conducir a la guerra.
¿Cuánto más fácil sería si Shinichi-kun desapareciera por "accidente", algo
no relacionado con el gobierno japonés? Entonces se lograría una
transición sin problemas de la administración de Amutech”.
"¿Por eso le dieron información a Bahairam?"
"Solo digo que es una posibilidad. No tengo pruebas reales, ni
personalmente me dijeron nada de esto. Sin embargo, sí sé que el gobierno
ya ha preparado un sucesor. Eso es demasiado rápido si solo supieran
sobre el secuestro de Shinichi-kun”.
"......... Grr...”
“Cualquiera que sea el caso, el gobierno no va a avanzar en esta situación.
Tampoco lo es el JSDF. Y dudo que el Sagrado Imperio Eldant también lo
haga. Así de simplemente”.
El significado de su conversación lentamente se hundió en mí, extendiendo
la oscuridad a través de mí como un veneno mientras lo hacía. Sí, estaban
usando palabras y expresiones difíciles que me dejaron incapaz de
entender todo lo que habían dicho. Pero entendí lo suficiente.
¿Fue culpa de Japón que Shinichi-sama hubiera sido secuestrado?
Con Shinichi-sama desaparecido, ¿vendría alguien nuevo?
Era más conveniente para Japón que Shinichi-sama desapareciera, por lo
que deliberadamente iban a detener a su ejército...
¿Qué le pasaría a Shinichi-sama, entonces?
¿Quién lo ayudaría?

¿Ninguno? En serio, ¿nadie?

¿Lo abandonarían todos, incluso su propio país?
El pensamiento fue tan terrible que me mareó. Tropecé un poco y
accidentalmente pateé la canasta de ropa que había puesto en el piso.
"¡¿Quién está allí?!" Minori-sama exigió al instante.
Y yo, horrorizada y abrumada por todo lo que estaba sucediendo,
simplemente corrí por mi vida.
"Ohh...”
¿Qué tengo que hacer?
¡Qué debo hacer, qué debo hacer, qué debo hacer, qué debo hacer, qué
debo hacer, qué debo hacer...!
Ansiedad: no, el terror se apoderó de mis entrañas.
Nadie iba a rescatar a Shinichi-sama.
Incluso Minori-sama no pudo ayudarlo.
Honestamente... ¿qué le pasaría a él?
¿Nunca volvería a nosotros? ¿Alguien nuevo vendría a reemplazarlo, como
dijo Matoba-sama? ¿Y tendría que servir a esa nueva persona?
Quienquiera que fueran, no serían Shinichi-sama.
"¡No podría soportar eso...!"
Mi visión se volvió borrosa... y luego me caí.
Me tumbé allí, en el suelo, en el pasillo.
“¡Shinichi-sama! Shinichi-samaaaa... "
Las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos. No pude detenerlos.
Pasó una semana en un abrir y cerrar de ojos.

La ventana todavía tenía rejas sobre ella. La puerta aún estaba cerrada
desde el exterior.

Mi habitación era lo suficientemente grande y estaba muy bien equipada.

Tenía un baño y un baño adjuntos, e incluso lo que parecía ser una
pequeña cocina. Me entregaron tres comidas al día.
Tenía casi todo lo que podía desear, pero prácticamente hablando, todavía
estaba bajo arresto domiciliario.
Claro, yo era un ex guardia de seguridad en el hogar y encerrado, por lo
que estar encerrado en mi habitación durante una semana no me molestó
en absoluto en principio. Pero en aquel entonces, había entretenido manga
y juegos, novelas ligeras y DVD de anime para entretenerme, además, a
veces podía figurativamente "salir" a través de Internet. Pasar una semana
en una habitación sin siquiera una de esas distracciones me dejó mucho
tiempo para matar.
Sin embargo, había una cosa en mi habitación: Clara.
Clara, la sirvienta con orejas de animales, una cola de animal y un ambiente
loli serio. Puede que no haya tenido el tocado, el delantal o el vestido negro,
pero efectivamente fue mi doncella.
¡Una criada de bestia!
El poder aplastante de esa combinación está casi más allá de la capacidad
de las palabras para describir.
Es cierto, ella no era muy expresiva, o de todos modos, no sentía que veía
mucha emoción de ella, pero si la consideraba una kuudere, o una de esas
"chicas raras", eso podría realmente ser visto como algo positivo
Sin mencionar que esta chica no solo estaba cocinando y limpiando por mí,
sino que incluso quería ofrecerse a mí por la noche. Si le preguntara, ella
literalmente haría lo que quisiera sin fruncir el ceño. Estar encerrado con
una criada así... Bueno, solo te deja una cosa que hacer, si sabes a lo que
me refiero.
"Señor— ¿cómo— esta?", Preguntó Clara, hablando en ritmos rítmicos.
"¿Cómo— se— siente?"
"Mm, bien", le respondí al mismo ritmo. La cama crujió a tiempo debajo de
mí.
"Realmente, realmente, bien... Ah, mmm, ¡bien, ahí!"
"¡¿Así?!"

"¡Si-! ¡Ahhh...!
Se sintió tan bien que no pude evitar que un suspiro se escapara.
"Oh... Oh, hombre... Clara... ¡Tú... dijiste que eras nueva en esto!"
"¡Pero lo soy-!"
"Tan... ¡Tan bueno! ¡Eres increíble!"
"¿Quieres decirlo en serio?", Preguntó Clara desde donde se arrodilló
sobre mí.
"¡Señor, es tan difícil!"
"¡Ahí! ¡Mmm...!
Su técnica: realmente no podía creer que ella no tuviera mucha
experiencia. Jadeé de nuevo.
Por encima de mí, Clara comenzó a moverse más rápido.
"¡Oh! ¡Ahí...!"
"¿Quieres decir, aquí?"
"¡Si! ¡Ahhh...!
..........................
Er, bueno, ya tienes la idea.
Clara me daba masajes casi a diario.
"Simplemente no puedo hacer nada sobre mis hombros y caderas por mí
mismo".
Me tumbé boca abajo en la cama, mi cara se volvió hacia un lado. Clara
estaba a horcajadas sobre mí, sus manos pequeñas y pálidas eliminaban
la tensión de mis músculos.
Para que conste, yo fui quien le enseñó a dar un masaje. Primero le di uno,
y luego ella me dio uno.
De hecho, soy bastante bueno dando masajes, sí puedo decirlo yo mismo.
Mis padres son dos jinetes de escritorio, por lo que a menudo me daban
un cambio de bolsillo a cambio de golpear sus hombros o algo así. Aprendí
sobre muchas técnicas de masaje diferentes con la esperanza de aumentar
mi toma aún más, y en el proceso adquirí algunas habilidades genuinas.

Así que fue bastante fácil enseñarle a Clara lo básico.

"Ohh. Eres un salvavidas. Eso realmente se siente genial”.
Cuando pasas todo el tiempo leyendo libros o jugueteando con la
computadora, tus hombros se tensan naturalmente. Pero todavía era solo
un adolescente y nunca le presté mucha atención, por lo que seguía
empeorando cada vez más. Claro, podría pedirle a alguien que me frotara
los hombros de vez en cuando, pero eran todas las mujeres de mi casa,
era un poco incómodo pedir un masaje. Supongo que siempre estuvo
Brooke, pero si juzgaba mal su propia fuerza, mis hombros podrían
terminar mucho peor que simplemente rígidos.
Sí, Clara también era una niña. Entonces, ¿por qué podría pedirle un
masaje cuando no podría pedirle a Myusel ni a los demás? Es cierto que
fue un poco extraño. Pensé que, en realidad, no lo estábamos haciendo,
pero esto estaba muy cerca.
Mientras estos pensamientos corrían por mi cabeza...
"Soy yo."
Hubo un golpe repentino en la puerta.
"Estoy entrando."
Sin esperar a que respondiéramos, Elvia, de cabello blanco, quiero decir,
Amatena, entró en la habitación.
Sé que es de mala educación seguir confundiéndolos. Pero en serio, ¡se
parecen mucho! Solo cambia el color del cabello y no sabrías cuál era cuál.
Me di cuenta de que Clara de repente se puso rígida, y luego saltó
precipitadamente de mí. Me sorprendió un poco su reacción. Siempre
estaba tan apagada, casi sin emociones, pero ahora...
¿Guhuh?
Cuando se levantó de la cama, vi que su cola estaba erguida.
Pensé recordar que los perros meneaban la cola de un lado a otro cuando
estaban felices, pero una cola erecta significa disgusto. No estoy seguro
acerca de los gatos. ¿No se levantan sus colas cuando la están pasando
bien?
La cara de Clara seguía siendo la imagen de la reserva, pero ¿podría estar
realmente feliz de ver a Amatena?

Espera un segundo... ¿Era esta una bandera yuri?

Aun cuando la idea me pasó por la cabeza, me di la vuelta y me senté en
la cama.
"Er...”
Hubo más de unas pocas preguntas que quería hacerle a Amatena, pero
ella comenzó a hablar primero.
"Kanou Shinichi. Hay algo que quiero mostrarte, vil cerdo”.
"¿Huh? ¿Mostrarme?"
"Correcto. Prepárate para salir afuera, de inmediato.”
"¿Preparar? ¿Salir afuera?"
Desde que había estado encerrado aquí durante una semana, la ropa que
había llegado se había ido a la lavandería; Por el momento, estaba vestida
con algo que parecía un atuendo local. No tenía una idea real de si era
adecuado para salir de mi habitación, pero supuse que no. ¿Debo
cambiarme a otra cosa para salir?
Espera, ¿salir?
Amatena me miró, su cara idéntica a la de Elvia pero sin nada de calma.
No parecía que estuvieran planeando liberarme ni nada. Ella me iba a llevar
a otro lugar.
"Er... ¿Ustedes distinguen entre ropa interior y exterior?"
"... Clara", dijo Amatena. Tal vez ella pensó que no tenía sentido hablar
conmigo. “Ayuda a Kanou Shinichi a prepararse. Tienes tu tarea.”
"Sí, señora". Clara asintió bruscamente, aún inexpresiva. Sin embargo, no
pude evitar notar que su cola todavía estaba de pie. ¿Y qué? te estarás
preguntando Estaba bastante segura de que Clara tenía algo por Amatena.
De todos modos, seguro que no había visto su cola levantarse así cuando
estaba conmigo ... Pero dejando a un lado la pregunta de si Clara prefería
el reino florido de yuri, parecía que había tomado la decisión correcta al no
echar una mano sobre su.
"Estaré esperando afuera", dijo Amatena, y salió de la habitación.
¿Dónde planeaban llevarme?

Finalmente tuve la oportunidad de salir de esta jaula, pero todo lo que podía
sentir en mi pecho era un miedo sin nombre.
Cuando todo estuvo listo, salí de la casa y me metieron en un carruaje que

esperaba afuera.
Parecía que la gente aquí se movía de la misma manera que lo hizo en el
Imperio Eldant. La diferencia era que los carruajes aquí fueron tirados por
lagartos gigantes. O, bueno, la impresión que dieron fue más como
dinosaurios. Me refiero a los tiranosaurios o velociraptores: reptiles de dos
patas del tamaño de vacas. Dos de ellos estaban unidos al carruaje.
Así que se trataba de carruajes tirados por dinosaurios, no de pájaros, en
Bahairam.
El silencio reinaba en la cabina. Clara se había quedado en la casa donde
había estado cautiva; los únicos que viajaban en el carruaje éramos
Amatena y yo. El conductor era un hombre que vestía un uniforme militar
como el suyo. No había nadie más alrededor. No parecía ser un gran
contingente de guardia para transportar a un secuestrado.
Por otra parte, si las capacidades físicas de Amatena se parecían a las de
Elvia, detenerme si intentara pelear o correr sería pan comido para ella.
Casi todo un pastel, en realidad. No era exactamente imposible para un
humano luchar contra una persona bestia, pero las probabilidades eran
muchas.
Minori-san podría tener una oportunidad real, ahora que lo pienso,
reflexioné, la imagen de un cierto valiente WAC pasando por mi mente.
Después de todo, estábamos hablando de alguien que había pateado un
dragón de forma rotunda. Ella me había dicho que era hija de un maestro
de dojo y que había estado aprendiendo artes marciales desde que era
muy joven. Se dice que un exceso de práctica puede compensar la falta de
talento. De todos modos, odiaría ser el tipo que pensó que podría saltar
sobre Minori-san solo porque ella estaba tan relajada. Apuesto a que eso
habría terminado en un solo golpe.

Pero de todos modos, dejando eso de lado...

"Entonces, ¿esto es Bahairam?"
Hasta este punto, había conocido el Reino de Bahairam solo por su
nombre, sin una idea real de qué tipo de lugar era realmente. Mientras vivía
en el Sagrado Imperio Eldant, era solo "un país vecino" o "un país enemigo"
o "la patria de Elvia", y nada más. Pero ahora, aquí estaba.
"Es muy..."
El paisaje que se apresuraba fuera de la ventana del carruaje tirado por
dinosaurios era diferente a todo lo que había visto en Eldant.
Quiero decir, ¿era esto realmente una ciudad? Edificios largos, blancos, de
un solo piso se alzaban a intervalos regulares. Se alinearon a ambos lados
de la calle, todos exactamente iguales. Era como si hubieran sido
producidos en masa a partir de un solo molde y todos colocados de
acuerdo con las mismas reglas. Era prácticamente lo contrario de la
atmósfera caótica de Eldant.
Además de eso, aunque era casi mediodía, el lugar estaba
inquietantemente tranquilo; No vi a nadie alrededor.
"¿Muy qué?"
"¿Huh? Oh, eh... Muy... bien. Organizado.” Elegí mis palabras con cuidado.
"Ya veo", dijo Amatena con un pequeño asentimiento. Pero le llevó un
segundo.
¿Eh? ¿Había dudado algo?
Tal vez fue solo mi imaginación.
"Es cierto que esto, Borfoi, la ciudad oriental, es uno de los desarrollos
urbanos más nuevos de nuestra nación. Naturalmente, algunos de los
asentamientos rurales permanecen en el viejo estilo, no tan bien cuidados.
Pero confío en que con el tiempo todos ellos se convertirán para ser como
la capital y esta ciudad”.
Amatena ofreció su explicación en un tono desapasionado.
No pude entender qué decir. ("¡Me encanta lo triste que es! ¡Casi no
creerías que alguien vive aquí!" Tal vez no.) En cambio, pregunté: "¿A
dónde vamos?"

Amatena solo me miró y dijo: "Lo sabrás pronto".

¿Cuál es la palabra para esto? ¿Frío? ¿Standoffish?
Suspiré un poco. Su cara realmente se parecía exactamente a la de Elvia,
y aparte de pequeñas diferencias físicas y, por supuesto, el color de su
pelaje, también lo hacía el resto de ella. A pesar del cabello blanco, las
orejas y la cola, ella era la viva imagen de mi artista residente. En realidad,
su piel estaba quizás un poco más pálida, pero prácticamente tendrías que
verlos a los dos uno al lado del otro para notarlo realmente.
De todos modos, mi punto es que realmente se parecían mucho.
Y, sin embargo, la personalidad de Amatena era casi exactamente la
opuesta a la de Elvia. La cara de Elvia estaba prácticamente atrapada en
una sonrisa gigantesca y amistosa por defecto, mientras que Amatena
apenas tenía expresión alguna.
Toda mi experiencia con la gente de Bahairamanian ahora consistía en
Amatena, Clara y Elvia, pero aun así, los números me hicieron
preguntarme si las personas de este país en realidad tendían a ser geniales
e inexpresivas como Amatena y Clara, siendo la naturaleza extrovertida de
Elvia la excepción.
Nos sentamos en silencio. Era extrañamente incómodo estar en el carruaje
con la persona bestia agria. Empecé a desear que nos apuráramos y
llegáramos a dónde íbamos.
Pasé algún tiempo mirando por la ventana mientras reflexionaba.
"¿Huh?"
Fue entonces cuando escuché que algo se acercaba.
Algún tipo de ruido vivo.
En realidad, supongo que no se estaba acercando a nosotros. Nuestro
carruaje probablemente se estaba acercando a él.
Al principio, el sonido de nuestro vehículo ahogaba el ruido exterior, y no
pude distinguir lo que era, pero a medida que se hizo más y más fuerte, me
di cuenta de que era el bullicio de las voces alentadoras.
¿Aplausos?
Asomé la cabeza por la ventana del carruaje tirado por dinosaurios,
tratando de determinar la fuente del sonido.

Más adelante, pude ver un edificio masivo. Era mucho más grande que mi
mansión. No tan grande como el Castillo Eldant, tal vez, pero eso no decía
mucho. Ciertamente empequeñeció los edificios planos que había visto a
lo largo del camino en el camino hacia aquí.
Además, este edificio solo tenía una arquitectura muy singular. Tenía un
exterior muy tradicional, elaborado, con muchas curvas fluidas. De hecho,
me hizo pensar en...
"¿Un templo?"
Si. Definitivamente daba la impresión de ser algún tipo de edificio religioso.
Y en la plaza frente a ella había cientos, tal vez incluso más de mil
personas, todos vitoreando y gritando. La multitud parecía estar compuesta
por varias razas diferentes, con humanos representando a la mayoría, y
luego bestias.
Pero susurré mi siguiente observación:
"Todos están vestidos igual".
La gente allí vestía atuendos simples, menos que simples, en realidad.
Desde el material hasta el estilo, la asombrosa diferencia de lo que
Amatena llevaba puesto era inevitable.
No dije nada, pero estaba empezando a tener, como dicen, un mal
presentimiento sobre esto.
Revisemos: por un lado, teníamos una ciudad llena de edificios
extremadamente simples y una multitud de personas con ropas
extremadamente simples. Por otro lado, teníamos un templo muy
ostentoso y un cuidador con uniforme militar que parecía provenir de otro
mundo de lo que todos los demás llevaban puesto.
Esto fue más que una diferencia en la clase social. Esto era...
Pero incluso mientras estaba sentado allí, inquieto y discutiendo conmigo
mismo, el carruaje tirado por dinosaurios se acercó al templo.
Entonces, de repente, a poca distancia de la multitud, se detuvo. Todos
parecían concentrados en el templo, por lo que nadie pareció notar nuestra
llegada.
"Muy bien, sal."
"Er, cierto".

Salí del carruaje para descubrir que la superficie de la carretera no estaba

pavimentada. Eso explicaría por qué la calidad del viaje había sido tan
pobre. Solo puedo hablar por el área alrededor de la capital, pero de vuelta
en Eldant, la mayoría de las carreteras principales tenían pavimento
básico, bordeadas de losas en la mayoría de las áreas principales. Sugirió
que Eldant estaba adelante en lo que respecta a la infraestructura urbana.
Por otra parte, dado que esta no era la capital de Bahairam, podría ser
mejor no comparar las dos.
Entonces noté algo.
"¿Eh...?"
Justo en el frente del templo, y un poco más arriba.
Había un balcón que daba a la multitud.
Y había un hombre parado en el balcón. Er, bueno, tal vez la palabra
"hombre" no da la impresión más precisa. Estrictamente hablando, era un
viejo de pelo blanco.
Debajo del bigote que cubría su labio superior flotaba una sonrisa; saludó
magnánimamente a las personas reunidas debajo. Echó hacia atrás su
capa: la ropa debajo era lo suficientemente elegante como para que
pareciera una especie de noble.
Al igual que el templo mismo, definitivamente se destacaba de su entorno.
"¡Padre!"
“... ¿Padre?"
Arrugué mi frente cuando escuché el grito. ¿Padre? ¿Quien? ¿Ese tipo en
el balcón?
¿Qué, tenía un hijo o una hija en algún lugar de la multitud?
Eché un vistazo a las personas reunidas, pero todos tenían la misma
sonrisa en la cara, todos saludaban al hombre de arriba. Escuché el grito
de "Padre" repetido varias veces.
¿Tal vez estaba escuchando algo mal? No es probable. Tenía mi anillo
mágico para traducirme telepáticamente, así que no corrí el riesgo de
malinterpretar una carta o algo así. No estaban diciendo "molestar" o
"platija" o lo que sea.

Pero también estaba bastante seguro de que toda esta multitud no estaba
compuesta completamente por los niños biológicos de ese hombre en el
balcón.
Realmente...
Ahora que lo pensaba, noté que no podía entender la gran mayoría de lo
que la multitud gritaba. Eso significaba que la mayoría de las personas allí
no llevaban anillos de intérprete mágicos, o lo que sea que sirviera para
esa función aquí en Bahairam. Recordé que incluso en el Imperio Eldant,
solo las personas por encima de una determinada estación social podían
tener los anillos. Era solo que pasaba tanto tiempo con personas que los
usaban que casi me había olvidado.
Por lo que valía, en realidad había aprendido un poco del idioma Eldant,
pero no entendía la mayor parte de lo que estaba escuchando ahora. Eso
sugirió que la gente de Bahairam hablaba un idioma diferente. Algunas
facetas de la pronunciación sonaban similares, casi como un acento muy
espeso en lugar de un idioma separado, pero las sutilezas se perdieron en
mí.
"Él es nuestro honrado padre-gobernante", dijo Amatena, como si pudiera
ver lo que estaba pensando. "Aunque creo en otras tierras, lo conoces
simplemente como el Rey de Bahairam".
Contuve el aliento y rápidamente volví a mirar al viejo en el balcón.
¡¿Ese era el rey de Bahairam?!
¿Pero por qué estaba él...?
“Nuestro padre-gobernante hace recorridos ocasionales por su reino.
Cuando lo hace, nos hace a nosotros, a sus hijos, el honor de dejarnos
verlo. Esta mañana ha sido tan amable de venir a esta ciudad oriental”.
"Huh...”
"Padre-gobernante" e "hijos", ¿eh?
Entonces, en este país, el rey fue visto literalmente como "padre del
pueblo". Y supuse que todos los ciudadanos eran iguales a sus hijos.
"Amatena... ¿Es esto lo que querías mostrarme?"
Miré a los "niños" y al templo y al "padre-gobernante".

Comprendí que el hombre era el Rey de Bahairam, pero ¿qué sentido tenía
mostrármelo? Seguramente, ella no pensó que me conmovería hasta las
lágrimas, que me arrodillaría en el momento en que lo viera. Ella no podía
ser tan engañada.
Solo por un instante, pensé que tal vez me iban a llevar a conocerlo. Pero
si es así, ¿por qué detenerse fuera del templo para mirarlo? Supuse que
tendría que entrar para encontrarme con él. ¿O Amatena estaba tratando
de darme una idea de cuánto adoraba la gente de este país a su líder?
Pero entonces de nuevo...
Para un rey, esto parece...
... sorprendentemente escasamente atendido.
Sé que puede sonar extraño referirse a una multitud que dije que podría
superar a mil personas como pequeñas, pero aquí estábamos hablando
del rey. Es cierto que no sabía cuál era la densidad de población de
Bahairam, y mucho menos esta parte específica del país, pero ¿no
esperarías que decenas de miles de personas pudieran vislumbrar el rostro
real? Diablos, obtenemos decenas de miles solo por Comiket. Comparado
con eso, esto fue un poco decepcionante. Aunque para ser justos, la gente
viene de todo el país para Comiket.
"¿Qué...?"
Mis pensamientos fueron interrumpidos por un pedazo de papel que
Amatena repentinamente arrojó frente a mí.
Su rostro no mostraba expresión; ella solo se quedó allí con el papel
extendido, sin decir nada. La sábana estaba doblada. ¿Me estaba diciendo
que la abriera y echara un vistazo?
Tomé el papel vacilante y lo desdoblé.
"¿Huh?"
En él, vi algo muy inesperado: Petralka.
Era la Emperatriz del Sagrado Imperio Eldant, que lucía más en su
adorable atuendo de niña mágica, posaba y sonreía directamente al
espectador.
Era ella, o más bien, una foto de ella. ¿Qué era esto, algún tipo de foto
publicitaria?

No, cuando miré más de cerca, me di cuenta de que, aunque era de calidad
fotográfica, era una ilustración.
Sospeché que era un grabado en madera de color. Es cierto que la escuela
tenía una copiadora y una impresora a color, pero los estudiantes no
podían usarlas sin permiso. Fue similar con las fotos. No podía imaginar
que alguien hubiera estado haciendo y vendiendo algo así sin que yo lo
supiera. Lo más probable es que alguien en la capital se haya encargado
de producir esta imagen.


No mucho antes, habíamos hecho una película con Petralka como una niña
mágica. En realidad, había comenzado como un encubrimiento de un
problema por parte del gobierno japonés, pero nos metimos tanto en eso
que terminamos completando la película (por cruda que fuera) y luego
mostrándola tanto en el Castillo Eldant como en varios sitios alrededor de
la ciudad.
Y vaya, se fue con la población.
Nunca esperábamos que la popularidad de Su Majestad se disparara como
lo hizo. Petralka misma estaba profundamente avergonzada por la película,
pero resultó en que sus sujetos la adoraban como persona y como
emperatriz.
"Exigimos que haga algo como esto", dijo Amatena.
"¿Esto?", Pregunté, frunciendo el ceño.
¿Bahairam me estaba ordenando que produjera una película? ¿O solo
retratos como este? Realmente no importaba, porque no tenía el equipo
para hacer una película, y la tecnología para producir impresiones como
esta había existido desde mucho antes.
De cualquier manera, secuestrarme no parecía muy útil.
"Aquí", dijo Amatena, empujándome otro papel. Este representaba a un
hombre barbudo con ropa elegante.
Me tomó un segundo, pero la barba me dio pistas: era el Rey de Bahairam.
Lo habían embellecido tanto en esta imagen que casi no lo reconocí, pero
pensé que se trataba de un retrato del gobernante de la nación. Esto
también se parecía a un grabado en madera de color; como el de Petralka,
era extremadamente realista, pero si mirabas de cerca, podías ver que no
era una fotografía.
Miré en silencio una foto, luego la otra.
Entonces Amatena decía...
"¿Quieres que convierta a este chico en una chica mágica?"
Una imagen pasó por mi mente del "padre-gobernante" con una minifalda
con volantes y calcetines hasta la rodilla, sosteniendo un palo y guiñando
un ojo mientras exclamaba: "¡Fue un gran maullido! ☆" Sin olvidar la pose
coqueta, por supuesto.

..................
..................
Urgh
"No." Amatena sacudió la cabeza mientras luchaba contra una ola de
náuseas.
"Gracias a dios. Obviamente, supongo. ¿Por qué necesitarías algo así?”
De acuerdo, probablemente había una pregunta más profunda que una de
necesidad.
Pero espera... ¿Podría funcionar como una mordaza?
Vueltas y vueltas fueron mis pensamientos irreverentes.
"Kanou Shinichi", dijo Amatena, mirándome fijamente a la cara, "hiciste
algo que hizo que la popularidad de Petralka an Eldant III en el Imperio
Eldant aumentara dramáticamente".
"¿Huh? Er, sí, supongo.
Supongo que fui yo, ¿no? Sí, está bien. Creo que es bueno que un
administrador sea popular entre la gente.
"Harás lo mismo por nuestro país".
"¿Perdón...?"
“Usarás tus habilidades para hacer que los niños sean muchas veces más
leales al padre-gobernante. Trabajarán más por él, lucharán más por él y
estarán más felices de hacerlo”.
"............ ¿Eh?"
Esta solicitud fue una especie de rincón del gatito de lo que había estado
imaginando, y todo lo que pude responder fue un gruñido vacante. Sin
embargo, fue ahogado por los gritos y vítores, y no estaba segura de que
Amatena me escuchara.

Capítulo II: El País Llamado Bahairam
Era muy consciente de que me temblaban las manos.

"Por favor, no te muevas...”
El objeto que sostenía era, sin duda, un arma.
Por supuesto, esta no era la primera vez que sostenía un arma. Para
obtener la ciudadanía, pasé algún tiempo en el ejército imperial del
Sagrado Imperio Eldant, donde aprendí a usar la espada y la lanza,
además de la magia ofensiva.
Pero el trozo de metal en mis manos en ese momento era algo
completamente distinto.
Este era un arma del país de Japan. Creí haber escuchado a Minori-sama
referirse a ella como una "pistola de mano de nueve milímetros".
"¿Myu... Myusel?" Elvia-san me miró vagamente. Su habitual sonrisa
alegre se había ido. En cambio, vi su rostro endurecerse cuando la
situación cayó en la cuenta. Su cola estaba erguida contra su espalda,
inmóvil, tal vez por alarma.
Ella entendió que un movimiento descuidado podría hacerla matar.
Vivir bajo el mismo techo nos había dado una gran oportunidad para ver
las diversas herramientas de Minori-sama en acción. Estaba seguro de que
la naturaleza de esta arma no se perdió en Elvia-san.
Había tomado deliberadamente la pistola de mano de nueve milímetros de
Minori-sama porque sin ella, no tenía influencia contra un hombre lobo.
Elvia-san era más fuerte y más rápida que yo; Nunca hubiera podido
vencerla con un arma afilada. Podría haber intentado magia, pero cantar y
apuntar habría revelado lo que estaba haciendo, y mi hechizo habría sido
lo suficientemente simple como para evadirlo. Además, Elvia-san habría
sido tan consciente de esto como yo, y mis amenazas no la habrían
intimidado.
Así que, tan mal como me sentía al respecto, me metí en la habitación de
Minori-sama y pedí prestada su pistola de nueve milímetros. Además del
que normalmente llevaba en su persona, tenía un repuesto que sabía que
guardaba en su habitación.

"D-Déjalo ya", dijo Elvia-san, frunciendo el ceño. "E-Eso es de Minori-sama,

¿no? ¿No te meterás en problemas por tomarlo? "
Problema. Sí, eso parecía probable. Había muchas posibilidades de que
esto no terminara con un simple regaño.
En ese momento, sin embargo, era mi única opción... Mi única esperanza.
"Te lo ruego, Elvia-san". Mi voz tembló tan violentamente como mis manos.
Sí, había estado en el ejército, pero no tenía experiencia en combate real.
Nunca había confrontado personalmente a nadie con un arma en la mano.
Además de eso, una pistola de mano de nueve milímetros era diferente de
una espada. Según lo que había escuchado, no había necesidad de usar
esta arma. De hecho, todo lo que tenía que hacer era mover un poco su
dedo, y empujaría a su oponente con una fuerza mucho más rápida y
poderosa que una cuchilla. Si impactaba en algún punto vital, la cabeza o
la garganta, o incluso el corazón, su poder asesino era mucho mayor que
una espada. Con esta arma, no era posible contener o moderar el ataque.
"Esta es... esta es la única forma...”


"¡Myusel!"
Escuché a alguien llamarme desde la puerta de la habitación. No tuve que
mirar atrás para saber que era Minori-sama. No, escuché dos pares de
pasos, por lo que era probable que Matoba-sama estuviera con ella.
Brooke-san o Cerise-san habrían sonado diferentes.
Podía escuchar tanto a Minori-sama como a Matoba-sama sin aliento.
Tengo buena audición: mis largas orejas élficas no son solo para mostrar.
“¡Detén esto ahora mismo! ¡¿Qué crees que estás haciendo?!"
“¡Minori-sama! Matoba-sama! ¡Aléjate!” En un intento de obligarlos a
mantener la distancia, estiré el brazo para que la pistola de nueve
milímetros estuviera a solo centímetros de la nariz de Elvia-san.
"¡Eeeep!"
"Si te acercas, yo... yo...”
"¡Pa-Para!" Gritó Elvia-san.
Los pasos cesaron. Minori-sama y Matoba-sama deben haberse
congelado en su lugar.
"Elvia-san, te lo ruego", le dije de nuevo. "¡Llévame a Bahairam!"
Prácticamente podía sentir el shock de Minori-sama.
“¿A-A Bahairam?” Preguntó Elvia-san, con los ojos muy abiertos.
¿Fue mi solicitud realmente tan sorprendente? ¿No se dieron cuenta todos
de que esta era la única forma de rescatar a Shinichi-sama? Ni Japón ni el
Imperio Eldant iban a hacer nada por él. Minori-sama y Su Majestad
encontraron las manos atadas con respecto a sus posiciones. Si alguien
fuera voluntario para rescatar a Shinichi-sama, tendría que ser yo.
Tenía que ser Shinichi-sama.
No podría ser un reemplazo para él.
La cultura Otaku se había extendido tan exitosamente como lo había hecho
debido a Shinichi-sama. Él fue quien construyó la escuela, nos enseñó
fútbol y nos ayudó a hacer peli-cula.
Shinichi-sama fue la razón por la que todos pudimos vivir y trabajar juntos:
Su Majestad; Elvia-san, la ex espía de Bahairam; Minori-sama; Brooke-san

y Cerise-san; toda la gente del Jay Ess Dee Eff; todos en la escuela; e
incluso yo
"Debes saber cómo entrar al país, Elvia-san".
Después de todo, de allí era de donde había venido, ¿no? ¿Cómo una
espía? Eso significaba que tenía que haber cruzado la frontera entre el
Reino de Bahairam y el Imperio Eldant sin ser atrapada por las patrullas
fronterizas. Ella debe saber sobre un camino secreto, una ruta oculta, algo.
Y, por supuesto, tendría que conocer la geografía de Bahairam.
Los últimos días, Elvia-san se había visto notablemente diferente de antes.
Ella seguía suspirando durante las comidas y estaba visiblemente molesta.
Cuando no tenía nada más que hacer, se encerraba en su habitación y no
salía.
Supuse que esto se debía a que era Bahairam quien había secuestrado a
Shinichi-sama. Elvia-san era una espía de esa nación, pero también era la
artista en residencia de Shinichi-sama. Shinichi-sama le había salvado la
vida. Ahora el país de su nacimiento había secuestrado a la persona a la
que le debía la vida. Tenía que ser una posición incómoda.
Pero no era garantía de que ella trabajara conmigo.
¿Qué pasa si le pregunto y ella se niega?
Ayudarme cuando ella supiera que iba a rescatar a Shinichi-sama
equivaldría a traicionar a su propio país. Y aunque estaba seguro de que
sentía una deuda con Shinichi-sama, ¿fue lo suficientemente profundo
como para hacerla dejar de lado sus lealtades nacionales? No lo sabía No
podría estar segura.
Y por eso...
"Er... yo...”
“Debes saber ahora que dicen que fue Bahairam quien capturó a Shinichi-
sama”. Miré a Elvia-san directamente a los ojos. "¡Y no queda nadie para
ayudarlo, excepto yo!" La ansiedad hizo que mi voz se quebrara.
Sonaba horrible, y estaba seguro de que no me veía mejor. Era más que
cómo se veía mi cara con una máscara de ansiedad. Estaba parado allí
amenazando a un amigo que vivía en mi propia casa con un arma.
Pero no podía soportarlo más.

"¡Ja-pon no ayudará a Shinichi-sama, y tampoco lo hará el Sagrado Imperio

Eldant! ¡Si nadie lo va a rescatar, entonces esta es la única forma...!
"Myusel...”
No era solo miedo en la cara de Elvia-san. Había preocupación allí
también. Parte de mí se sintió culpable. ¿Qué estaba haciendo?
Y todavía...
"Myusel". La voz de Minori-sama era más segura. "Déjame preguntarte
algo. ¿Sacaste el slyde y pusiste la primera bala en el chaymber?
"¿Qué...?" Apenas entendí la mitad de las palabras que había dicho.
Ella presionó aún más: "Un nueve milímetros no tiene una capacidad de
operación manual, por lo que mientras haya una ronda en el chaymber, se
disparará con solo apretar el gatillo. Pero no me parece como si hubieras
armado el hanmer. Tienes que apretar el slyde y colocar la bala en la
cámara, o puedes apretar el gatillo todo el día y nunca disparar nada.
Realmente dudo que hayas usado el decocker, ¿verdad? Por lo tanto, si
no tiene la percha hacia abajo, existe una buena posibilidad de que
tampoco tenga el slyde en su lugar”.
"¿Yo que...?"
¿De qué demonios estaba hablando?
“Para el caso, Myusel, ¿incluso le pusiste balas? Estoy bastante segura de
que dejé el magazeen vacío en el repuesto”.
"Er... ¿Sí?"
Estaba completamente desconcertada.
Casi antes de que supiera lo que estaba sucediendo, Minori-sama había
cerrado una distancia conmigo y me quitó el arma de la mano.
"¡Oh...!"
"¡Eep!" Elvia-san se dejó caer al suelo.
Minori-sama giró la pistola de mano de nueve milímetros en su mano y dijo
con exasperación: “Lo sabía. Mira. ¡Ni siquiera tiene un magazyne! "
"Er... Um...”

"Myusel". Matoba-sama, que había estado en silencio hasta ese momento,

habló. "Supongo que nos escuchaste hablar el otro día".
No reaccioné
“Qué descuidado de mi parte. Olvidé que podías entender algo de japonés.
Él suspiró. "¿Cuánto escuchaste?"
"Dijiste que era culpa de Ja-pan que Shinichi-sama fuera secuestrado. Que
alguien nuevo iba a venir a reemplazarlo...”
“¿Qué?” Dijo Elvia-san con sorpresa.
Por supuesto que estaba sorprendida. Sabía que Bahairam había
secuestrado a Shinichi-sama, pero incluso Su Majestad no sabía que Ja-
pan estaba detrás de eso.
"Entonces dijiste que Shinichi-sama iba a ser abandonado... Y eso significa
que la única opción que me queda es que yo vaya". Esta fue la conclusión
a la que había llegado después de tres días de agonizante pensamiento.
"¡Soy... soy la única que puede, ¿no?!"
Me sorprendió encontrarme gritando, pero Minori-sama permaneció
tranquila hasta el final cuando preguntó: "¿Y planeabas hacer que Elvia
fuera tu guía?"
"...Si."
En este punto, no vi nada que hacer sino ser honesto.
"Realmente lo siento", dije, mirando a Elvia-san, Minori-sama y Matoba-
sama a su vez. "No... no te molestaré más".
"¿Qué...?" Minori-sama parecía sorprendido por esto.
"Iré sola".
"¿Huh? ¡Espera... Myusel!
"Ha sido un honor servir a todos ustedes...”
Bajé la cabeza y luego salí de la habitación.
Eldant y Bahairam compartieron una frontera terrestre entre ellos. Es cierto
que esa frontera estaba rodeada de montañas traicioneras, pero si me
aseguraba de tener una gran cantidad de alimentos y equipos listos, tenía
fe en que podría cruzarlos. También necesitaría un arma, en caso de que

me encontraran soldados de una nación u otra. En mi cabeza, ya tenía una

lista de todo lo que necesitaría...
“Myusel, exijo que esperes,” dijo Minori-sama, agarrando mi hombro.
"Por favor, no me detengas".
"¡Todo lo que digo es que esperes!" Minori-sama suspiró y luego dijo:
"Porque yo también voy".
"¿Qué...?" Me volví hacia ella, sorprendida.
Minori-sama llevaba una delgada sonrisa. "Soy... parte de la razón por la
que Shinichi-kun fue capturado".
“¿Minori-sama? Pero tú-"
"Se suponía que era su guardaespaldas".
"Pero... Pero eso es...”
Era el trabajo que la nación de Japón le había encargado. Y ahora esa
nación quería que Shinichi-sama fuera olvidado. Minori-sama ya no tenía
nada que hacer para protegerlo.
"Escucha. Todavía no me han dado ninguna orden de relevarme de mis
deberes como su guardaespaldas”. Minori-sama se encogió de hombros.
"¿Verdad, Matoba-san?"
"Supongo que sí. Es un buen pretexto, de todos modos.” El viejo estaba
sonriendo.
Y eso significaba...
"Minori-sama...”
"Sí". Ella me dio un firme asentimiento. "Vamos a buscarlo. Juntas."
¡Ahh...! Me sentí temblar de felicidad. Minori-sama estaba del lado de
Shinichi-sama. Ella iría a Bahairam conmigo. Eso me hizo sentir diez
veces, cien veces más valiente.
"Pero..." Todavía sonriendo, Minori-sama sacó la pistola. No el que me
había quitado, sino el que siempre tenía en la cadera. Como si fuera la
cosa más natural del mundo, lo apuntó a Elvia-san, que todavía estaba
sentada en el suelo.
"¡¿Guh?!" dijo Elvia-san, temblando.

"Tienes razón. Vamos a necesitar una guía”.

Elvia-san hizo un sonido ahogado, con la cola erguida.
“Creo que tenías la idea correcta, viniendo a Elvia. Dado el rumor de que
Shinichi-kun fue secuestrado por Bahairam, ella fue la primera persona en
la que también pensé”.
"¡J-juro que no tuve nada que ver con esto!"
"Claro, lo sé".
Elvia-san intentó retroceder, pero encontró la pared inmediatamente detrás
de ella, cortándola. Minori-sama se agachó frente a ella. Hubo un clic, y
ella clavó la pistola en la cara de Elvia-san.
“Ayúdanos, Elvia. Te lo ruego."
"¡R-Rogando, nada!"
Ella no parecía convencida. Tal vez estaba obsesionada con el hecho de
que ayudarnos significaría traicionar a su país.
"Myusel y yo no sabemos nada sobre la geografía de Bahairam. Viniste
aquí como espía, eso significa que hay una manera de entrar y salir a
escondidas, ¿verdad? ¿Una forma de cruzar la frontera sin demasiado
alboroto?”
"B-Bueno, eso es...”
"¿Estás diciendo que no quieres ayudarnos?"
"Te digo que es-"
"¿No quieres ayudar a Shinichi-kun?"
"Es... es..." Sus ojos estaban nadando en este punto.
"Hmm". Minori-sama inclinó la cabeza. "Ya veo. Bahairam te importa más
que Shinichi-kun, ¿no? No hay otra opción, entonces. Eres un espía de
Bahairaman, ¿verdad, Elvia? "
"S-Sí... Pero...”
"Ah. Así que lo admites”. Las gafas de Minori-sama brillaron
inquietantemente.
Elvia-san se sacudió violentamente.

Es cierto, era un secreto a voces entre todos que ella era una espía de
Bahairam, pero por el momento se le había otorgado una suspensión de la
ejecución, la excusa era que no había suficientes pruebas sólidas para
condenarla.
Pero ahora...
"Acabas de admitir que eres un espía de Bahairam. Sabes lo que eso
significa, ¿no?
"Er... Agh...”
"Tristemente, Elvia, tendrás que ser ejecutada".
La cara de Elvia-san se puso pálida. En el espacio de unas pocas palabras,
Minori-sama la había arrinconado por completo. Desde mi punto de vista,
meterle una pistola en la cara parecía hacer que el intento de persuasión
racional fuera redundante, pero ¿qué sabía yo?
"Oh, pero... eres una niña, Elvia. Entonces, ¿quién sabe lo que podrían
hacerte antes de matarte? "¡Ella va a morir de todos modos!", Dirán, y luego
se divertirán”.
"Qué... ¿Qué tipo de diversión van a tener...?"
"Eyteenandup dohjinshi cosas, ¿sabes? ¡Apenas puedo obligarme a
describirlo! Imagínense, un grupo de soldados endurecidos... muy
endurecidos... "
Elvia-san tembló de nuevo. No estaba seguro de lo que era eyteenandup
dohjinshi, y tampoco creía que Elvia-san lo supiera, pero el impulso de lo
que Minori-sama decía todavía estaba perfectamente claro.
"Lo siento mucho, Elvia. Quiero cubrirte, créeme, pero tienes que darme
algo con lo que trabajar. ¡Algo que puedo presentarle a Su Majestad y al
Ministro Cordobal, algo tan convincente que no tendrán más remedio que
perdonarte incluso cuando descubran que eres un espía enemigo! "
Elvia-san bajó la cabeza, exhausta por el miedo. Pasó un momento
gimiendo tristemente antes de decir finalmente: "Sí, está bien...”
"¿Hm? ¿Qué fue eso? ”Dijo Minori-sama, ladeando la cabeza.
Elvia-san le dirigió a Minori-sama una mirada mordaz y gritó: “¡Dije que
bien! Tú ganas."

Me senté en una silla en mi escritorio con la barbilla apoyada en mi mano

y dejé escapar un largo suspiro. Las palabras de Amatena del día anterior
seguían dando vueltas en mi cabeza.
“Usarás tus habilidades para hacer que los niños sean muchas veces más
leales al padre-gobernante. Trabajarán más por él, lucharán más por él y
estarán más felices de hacerlo”.
Al parecer, por eso el Reino de Bahairam me había secuestrado. Los
espías en el Sagrado Imperio Eldant deben haber pasado la palabra de
Amatena y sus amigos de la película que habíamos hecho. Escucharon
cuánto había aumentado la estimación de la gente de Petralka, su "lealtad",
para usar el término de Amatena, después del estreno de la película, y
estaban decididos a hacer lo mismo para su propio monarca.
En resumen, Amatena y para quien sea que estuviera trabajando creían
que la película había sido una estratagema para manipular a la población.
Ese fue un malentendido grave, pensé. Nunca había sido nuestro plan que
Petralka se convirtiera en una estrella del pop; eso fue sobre todo pura
suerte tonta. Nunca fue el objetivo declarado. Pero luego, estrictamente en
términos del resultado, la película efectivamente había servido para ese
propósito.
Para una monarquía absoluta como Bahairam (no es que el Imperio Eldant
fuera diferente en este sentido), eso probablemente parecía una
herramienta política bastante efectiva.
"¡Oh, por...!"
Pero vamos. ¿Haz lo mismo aquí? No fue tan fácil.
Para empezar, este lugar ni siquiera tenía el equipo para hacer una
película. Para ser justos, Amatena y sus superiores no parecían
obsesionadas con la idea de una película como tal. Mientras el Rey de
Bahairam, su amado "padre", fuera más popular entre la gente, en realidad
no importaba lo que yo hiciera.
Por ejemplo, podría tomar una página de ciertos países y religiones en
nuestro propio mundo, donde las personas a veces inventaron historias de
tela para llevar el poder a un jefe de estado o líder religioso. Cualquier cosa,
desde "desvió el rayo con sus propias manos" o "predijo un terremoto",
hasta "habló con augustas figuras del pasado a través del tiempo y el

espacio, y lo reconocieron" o "es la reencarnación corporal del alma". De

tal y tal”.
La propaganda ridícula como esa no era exactamente infrecuente incluso
en la Tierra. Muchos mitos y leyendas fundacionales nacionales fueron
básicamente intentos en su propio tiempo para controlar a las personas o
consolidar el poder. Eso podría explicar por qué, a diferencia de la mayoría
de los cuentos populares, muchas de estas historias están relacionadas
con los linajes y la legitimidad de esos linajes.
Mi punto es que lo que me pidieron que hiciera no era nada nuevo. Pero
eso todavía me dejó preguntándome:
"¿Qué diablos voy a hacer?"
Problema uno: era más un mensajero que un creador. Inventar historias
nunca ha sido mi fuerte.
Problema dos:
"Perdón, señor."
Escuché las palabras a través de la puerta, no la puerta al exterior por la
que Amatena siempre entraba, sino la que conducía a la cocina y a las
áreas de baño. Esa puerta no estaba cerrada.
"He traído tu té".
Era Clara.
"Claro, entra". Me puse de pie y le abrí la puerta. Clara estaba parada allí
con una bandeja en sus manos y una expresión de sorpresa en su rostro.
"¿Qué pasa?"
"Nada", dijo después de un momento. Ella sacudió la cabeza y entró en la
habitación.
Entonces recordé: había recibido la misma reacción de Myusel una vez.
Parecía sorprenderse de que me hubiera tomado la molestia de levantarme
y abrirle la puerta. Las diferencias sociales eran bastante pronunciadas en
este mundo, y los superiores sociales rara vez mostraban ese tipo de
consideración por sus inferiores sociales. Bahairam promocionó cómo
todos sus ciudadanos eran iguales, pero incluso solo mirando la diferencia
en la vestimenta entre el ciudadano promedio y los miembros de las fuerzas
armadas sugirió que la igualdad solo llegó tan lejos.

"Aquí tiene."
"Gracias."
En mi escritorio, colocó una tetera y una taza de latón, junto con un dulce
horneado como una galleta. El té debe haber sido recién remojado, porque
todavía estaba humeante, y la galleta debe haber sido recién horneada,
porque su aroma aún era rico y tentador.
Y sin embargo, no tenía ganas de tocarlos. Simplemente no podía
despertar el apetito. Estaba demasiado preocupado por lo que Amatena
había dicho.
"¿Es algo que pasa, señor?"
"Er, ah, no... yo solo... supongo que no tengo tanta hambre". Luego
agregué rápidamente: "Oh, pero estoy feliz de que te hayas tomado la
molestia de traerlos".
Clara guardó silencio. Ella parecía confundida de nuevo. Todo el asunto de
las chicas bestias probablemente amplificaba cuán escandalosamente
linda y una expresión moe, como un pájaro delicado o una pequeña ardilla.
Pero olvídate de eso.
"Si está satisfecho, señor, entonces eso es bueno", dijo Clara. "Dado que
no puedo servirle al tener relaciones con usted, debo encontrar otras
formas de hacerla feliz, o considerar que he fallado en mis deberes".
"UH Huh..."
No pude evitar sentirme un poco exasperado. ¿Por qué esta chica estaba
tan obsesionada con las "relaciones"? Clara tenía la impresión de que
sufría el Síndrome de si-hago-cosas-sucias-con-chicas-voy a morir (nota:
ese nombre no ha sido examinado por las revistas médicas), así que por
el momento Siendo que había evitado que me subieran o me desnudaran
más.
Pero Clara creía que si no podía "servirme" de esa manera, tenía que
descubrir otra forma de ganar mi buena voluntad, y había sido muy asidua
al hacerlo.
Sin embargo, se sentía diferente de la alegre devoción de Myusel. Myusel
trabajó duro en mi nombre porque ella personalmente me reconoció como
su maestro, sus acciones lo demostraron e incluso ella misma me lo había
dicho. Pero con Clara, había algo obediente al respecto, como si lo

estuviera haciendo porque no tenía otra opción. En términos extremos, se

podría decir que no sentía nada, que la forma en que ella hacía las cosas
era algo mecánica. No lo suficiente como para hacerla parecer infeliz,
exactamente, pero tampoco parecía tener ningún afecto particular por mí.
Por otra razón, pensé, por qué realmente quería evitar hacerlo con ella.
"Mira, Clara", le dije, mirándola a la cara. "No te gusto especialmente,
¿verdad?"
Solo logré provocar otra expresión perpleja.
"Quiero decir... ya sabes". Dudé por un momento. “Estas... relaciones, o lo
que sea. ¿Tiene alguna experiencia con ello?"
"Yo no. ¿Te parece insatisfactorio acerca de mí, Shinichi-sama?” Ella ladeó
la cabeza como para preguntar si preferiría una mujer con mucha
experiencia.
"No, mira, ese no es mi punto. Si no tienes experiencia, entonces...
entonces creo que es aún más importante que lo hagas, ya sabes,
besándote y esas cosas... con alguien que realmente te importa”.
"¿Así es como están las cosas en Eldant?"
"Espera, ¿qué quieres decir con...?"
"¡¿Estás diciendo que no es así como están las cosas aquí?!" Quería
exclamar, pero de alguna manera me resistí. Las diferencias culturales
realmente podrían ser... bueno, diferentes. Tal vez en Bahairam, este tipo
de cosas no tenía nada que ver con el amor. He oído que en la Japón de
antes de la guerra, las personas que te rodeaban solían elegir a los
cónyuges, y a veces ni siquiera veías la cara de tu pareja hasta el día de
la boda.
"¿Me odias, Shinichi-sama?"
"No, escucha, eso no es realmente lo que estoy diciendo. Te pregunto
cómo te sientes. No estás exactamente enamorado de mí, ¿verdad? "
Cuando Amatena entró en la habitación, la cola de Clara se enderezó. Pero
cuando estaba conmigo, colgaba aprisa detrás de ella. Por supuesto,
siempre fue posible que, a diferencia de algunos animales, su cola
realmente no dijera nada sobre su estado emocional. Pero aún...

“Entonces solo tengo que preguntarme. ¿Qué te hace tan interesada en

las "relaciones" conmigo? "
Como si fuera cegadoramente obvio, Clara respondió: “Porque ese es mi
deber. Me han dicho que te complace, señor, y que me ganes tus afectos
exaltados.”
Me quedé sin habla. En doujinshi y otras cosas, las criadas
bidimensionales ofrecen "servir" a sus "Señores" por la noche todo el
tiempo, pero esas son solo historias. Ficción. No es la realidad Por eso
funciona. Y sin embargo, aquí había una chica real justo frente a mí que
decía estas cosas, y resultó ser un completo desvío. En cualquier caso,
definitivamente no me hizo ansioso por ser todo "¡Bueno, entonces!" Y
simplemente seguir adelante.
Supongo que eso significaría...
"Significaría ignorar por completo los sentimientos de la niña, ¿no?"
Ahora Clara parecía más confundida que nunca.
Lo sé: algunas personas en el mundo eligen hacer este tipo de cosas por
trabajo, por su propia voluntad, y si es su elección, entonces se lo dejo a
ellos. Pero Clara no me pareció estar en esa categoría. Lo más probable
es que acabara de ser educada de esta manera. Por eso creía que cuando
se trataba de sexo, los sentimientos de las personas involucradas no
importaban. O al menos, sus sentimientos no. Era su trabajo, nada más y
nada menos. Por eso se había arrojado sobre mí por mis objeciones,
mientras decía que era para complacerme.
Esta fue una razón más por la que no podía aceptar la demanda de
Amatena.
La forma en que se veía esa ciudad. Esa gente. Incluso ese rey. Y ahora,
la forma en que Clara pensaba así. ¿Qué podría producir algo de eso sino
una sociedad directa y estrechamente controlada?
Las personas fueron criadas para reprimir sus emociones naturales;
incluso el florecimiento del amor no estaba permitido. Simplemente se
suponía que eran buenos engranajes del estado. Tuvieron que reprimir
todo lo que sentían, canalizándolo a "lealtad" y "patriotismo". Y como
resultado, la gente ni siquiera se dio cuenta de cuán restringida era
realmente su visión del mundo...
Quizás el individualismo no era algo que supieran en Bahairam.

En este país de todos los lugares, Amatena quería que los ayudara a
manipular a la población aún más a fondo.
Y simplemente no pude hacerlo.
Para mí era aún peor, incluso más inhumano, que ser cómplice de una
invasión cultural.
Me senté allí, mi ceño fruncido con todos estos pensamientos, cuando—
"Soy yo."
Llamaron a la puerta y escuché a Amatena al otro lado.
Sin esperar que Clara o yo respondiéramos, entró imperiosamente en la
habitación.
"¿Estás progresando?"
La pregunta estaba dirigida a... ¿Clara?
¿Eh?
¿No a mí?
Estaba seguro de que ella estaba preguntando cómo me llevaba con la
Operación Hacer que todos se enamoren del Rey (nombre provisional).
¿Esto implicaba que era Clara, y no yo, en quien iba a confiar para obtener
información sobre cómo iban las cosas?
La cola de Clara estaba erguida de nuevo. Ahora estaba bastante
convencido de que esta chica estaba feliz de ver a Amatena.
"¿Bien? ¿Hay progreso o no? ”, Preguntó Amatena nuevamente.
Clara respondió: "Sí", pero solo después de un latido vacilante.
Espera un segundo...
Quizás el progreso en el que ella, o quizás sus superiores, estaban
interesados era el progreso en "complacerme". Me preguntaba si me
habían servido, si estaba contento con eso y si Clara había logrado
insinuarse en mis "afectos exaltados".
¿Había dudado en responder porque no habíamos hecho, ya sabes... ya
hicimos algo?

Definitivamente me sentiría mal si ese hecho terminara metiéndola en

problemas... pero no lo suficientemente malo como para decir "Bien, ahí lo
tienes, no hay otra opción" y saltar a la cama con ella.”
"Hm. Ya veo.” Amatena asintió, aparentemente satisfecha con la respuesta
de Clara.
En cuanto a mí, me puse de pie y hablé. "Amatena".
"¿Qué pasa?"
"¿Podría molestarte para que me muestres el exterior?"
"Según recuerdo, lo viste ayer...”
"Quiero decir que quiero ver cómo vive realmente la gente de este país",
interrumpí.
Me preguntaba si la impresión que había tenido de la escena del "rey-
padre" saludando a la multitud, junto con las vibraciones de Amatena y
Clara, era correcta o no. ¿Quién sabe? Tal vez el paisaje urbano soso que
había visto era en realidad todos almacenes o algo así, y los lugares donde
vivía la gente se veían diferentes.
De acuerdo, sabía que probablemente no sería posible aprender
absolutamente todo y luego hacer un juicio completamente objetivo, pero
al menos, quería evitar sacar una conclusión instantánea desde un solo
ángulo. Eso fue peligroso y feo. Sin mencionar que un otaku sabía algo
acerca de ser víctimas de tales veredictos de mente estrecha.
"No estoy completamente segura de que sea necesario".
"¿Cómo puedes esperar que invente mitos y leyendas sobre tu padre-rey
que la gente aceptará si no sé nada sobre la gente?"
Amatena pareció pensarlo por un momento antes de asentir y decir: “Muy
bien. Dicen que el éxito en la batalla depende de conocer al enemigo.
Quizás el conocimiento del otro es igualmente importante en todas las
áreas de la vida”.
Me encontré parpadeando de sorpresa. Aférrate. ¿Podría ser que Amatena
es... realmente inteligente?
Apenas le tomó más de unos segundos tomar lo que había dicho y emitirlo
en una forma que tuviera sentido dentro de su cosmovisión. Tendría que
pensar mucho para llegar a la batalla como una analogía para las personas

que se lavan el cerebro. O al menos, tendría que ser alguien que no se

detuviera ante el significado superficial de las palabras.
“Ponte tu ropa de exterior. Estaré esperando afuera”, dijo Amatena, y luego
salió de la habitación.
Cuando le dijimos a Su Majestad que teníamos algo que informar sobre

Shinichi-sama, ella nos admitió ante su presencia de inmediato.
Nos llevaron a la sala de audiencias, pero no en la que habíamos estado
varios días antes. Esta sala era varias veces más grande que la otra, y no
éramos los únicos allí: había al menos otras veinte personas, ministros y
nobles influyentes de todo tipo. Su Majestad debe haber estado en medio
de una reunión con sus asesores, y lo había interrumpido solo por nosotros.
Eso hizo obvio lo preocupada que estaba por Shinichi-sama.
“Disculpe,” Minori-sama y yo dijimos cuando nos acercamos al trono donde
estaba sentada Su Majestad.
El ministro Cordobal y el primer ministro Zahar estuvieron presentes al lado
del trono, mientras que el resto de la cámara de audiencia estaba repleta
de personas de alto rango. Normalmente sería impensable que estuviera
cerca de estas personas, y mucho menos interrumpir su conversación.
Comprensiblemente, la mayoría de los que estaban en la habitación nos
habían mirado con miradas que decían: ¿Qué están haciendo estos
imbéciles de bajos recursos aquí? Prácticamente podía sentir sus ojos
quemándome la piel.
Su Majestad habló desde el trono. "Minori. Myusel ¿Dices que tienes algo
que contarnos sobre Shinichi?”
“Sí, majestad,” dijo Minori-sama con una reverencia reverente.
“Efectivamente tenemos pruebas de que Kanou Shinichi fue secuestrado
por el Reino de Bahairam. Sin embargo, me han dado a entender que el
Sagrado Imperio Eldant no puede actuar para rescatarlo”.
"Le duele mucho a esta nación, pero eso es correcto".

Esta respuesta vino, no de Su Majestad, sino del Ministro Cordobal. Tal

vez quería asegurarse de hablar antes de que Su Majestad tuviera la
oportunidad de hacerlo.
"¿Sería posible confiar el asunto a mí y a Myusel?"
"¿Qué dices?"
"Lo que quiero decir es..." Minori-sama se giró y habló, no a la sorprendida
emperatriz y su ministro, sino al primer ministro Zahar. “Myusel y yo
deseamos ir al Reino de Bahairam y traer de vuelta a Kanou Shinichi. Como
individuos que actúan por nuestra cuenta, por supuesto. Soy miembro del
ejército, pero no soy ciudadano del Sagrado Imperio Eldant, y Myusel
actualmente no es más que un sirviente doméstico. En la posibilidad de
que hubiera algún tipo de problema, el Imperio Eldant podría fácilmente
reclamar ignorancia, y no creo que eso pueda causar problemas al
imperio”.
Eso provocó un zumbido en la sala de audiencias.
"Hmm". El ministro Cordobal, con el ceño fruncido, cortó la charla. “Lo
suficientemente lógico. Pero, Koganuma Minori, ¿qué bien crees que
ustedes dos pueden hacer solas? Tienes el presentimiento de que fue
capturado por Bahairam, pero no hay pruebas reales. Por supuesto, no
sabes en qué parte de Bahairam podría estar. Estamos hablando de un
país con el poder militar suficiente para oponerse al Sagrado Imperio
Eldant; no es un lugar pequeño. ¿Cómo piensas encontrarlo?”
"Haremos que Elvia nos guíe", dijo Minori-sama.
“¿Elvia? Ah, el espía mujer lobo que Shinichi dijo que mantendría cerca
para vigilarla. Creo que ella estuvo en la exhibición imperial de fútbol, ¿no?”
"Sí señor. Teniendo en cuenta que, como dices, ella originalmente era una
espía que se infiltró en el Imperio Eldant, tengo que imaginar que puede
ofrecernos al menos alguna información útil.”
"Eso es verdad; sin embargo...” El ministro hizo un ruido pensativo y luego
se calló. Tal vez no había esperado lo que dijo Minori-sama, tal vez nadie
lo había hecho, porque Su Majestad y el Primer Ministro Zahar nos miraban
con expresiones preocupadas, y los otros ministros y nobles se volvían y
susurraban.
En cuanto a mí, simplemente mantuve la cabeza baja y esperé el juicio de
Su Majestad.

Pero no iba a salir tan fácil.

"Myusel", dijo Su Majestad.
"¡S-Sí, señora!"
"¿Qué piensas sobre este asunto?"
"¿M-Mis pensamientos, Su Majestad...?"
La pregunta me puso en pánico. Nuestro plan había sido que Minori-sama
hablara todo. Nunca se me había ocurrido que me pidieran hablar delante
de una compañía tan augusta.
No pude contener un grito de pánico cuando levanté la vista y me encontré
mirando directamente a los ojos de Su Majestad.
"Um... Er...”
Le di una mirada impotente a Minori-sama, pero ella no dijo nada, solo
asintió ampliamente. Pensé que estaba diciendo, estarás bien. Solo habla
desde el corazón.
“Yo solo... simplemente... quiero ayudar a Shinichi-sama. Eso es todo. Eso
es... lo siento. Soy demasiado tonta para considerar algo más complicado
que eso... yo sola... "
"Hmm". Y Su Majestad asintió.
“Pero, Myusel Fourant”, dijo el ministro Cordobal, “usted ha estado en
nuestro ejército, ¿no es así? Si se infiltra en Bahairam y resulta ser
capturado, ¿comprende que es probable que lo vean como un espía
Eldant?”
Eso me puso de pie. Inconscientemente, toqué el anillo mágico en mi dedo.
Sí, había pasado algún tiempo en las fuerzas armadas. Como medio elfo,
efectivamente un huérfano sin nadie que me apoyara, el servicio militar era
la única forma posible de obtener la ciudadanía Eldant... para obtener algo
que se asemeje a una vida decente.
Pero...
“Ese anillo mágico tiene su información personal y registro de servicio
grabado en él. Dado ese hecho, su anillo actual se perderá. ¿Puedes
aceptar eso?”
¿Eso significaba que iba a perder mi condición de ciudadana?

Dudé... pero solo por un momento.

"Entiendo."
Estaba avergonzada de mí mismo por mi renuencia. Estaba sopesando mi
ciudadanía contra la vida de Shinichi-sama, pero ¿cómo podrían
compararse los dos?
Entonces Minori-sama habló a mi lado. “Pero el Ministro Cordobal, al no
poder comunicarse telepáticamente con Myusel, afectará mi capacidad de
trabajar con ella. Humildemente solicito la provisión temporal de un nuevo
anillo mágico”.
“Naturalmente, esa era mi intención. La falta de un anillo mágico también
dificultaría las cosas después de ingresar a Bahairam. El acento allí es
increíblemente torpe.”
.............¿Qué?
¿Qué decía el ministro Cordobal?
"Vemos que estás demasiado decidida para que te detengamos", dijo Su
Majestad, "a menos que te encadenen. Myusel, tu devoción es más que
evidente para nosotros. También debemos otorgarle un regalo de
despedida”.
"¿Qué...? Um...”
La razón por la que habíamos venido a la sala de audiencias en primer
lugar era para hacerles saber que no teníamos ningún problema para el
Sagrado Imperio Eldant por nuestras acciones, y si era posible para
solicitar provisiones, herramientas y tal vez a través de la frontera con
Bahairam
Pero, ¿qué podría ser este "regalo de despedida"?
"¿Su Majestad?", Preguntó dudosamente el Primer Ministro. Los otros
dignos también estaban charlando entre ellos. El Ministro Cordobal, sin
embargo, dejó escapar un pequeño suspiro, como si tuviera el
presentimiento de lo que Su Majestad tenía la intención de darnos. Se frotó
los hermosos ojos con una mano.
"Bien, muy bien". El ministro se volvió hacia nosotros una vez más.
"¿Cuándo quieres partir?"
“Tan pronto como podamos estar listos. Quizás mañana."

"De hecho," Su Majestad asintió.

De los asesores y nobles reunidos no hubo objeción. La clara aprobación
de Su Majestad, acompañada de la falta de refutación del Ministro
Cordobal o del Primer Ministro Zahar, dejó a los demás en la sala
presionados para expresar una opinión disidente.
"Minori. Myusel.” Su Majestad volvió a pronunciar nuestros nombres.
Más que eso, de hecho: se levantó de su trono.
“Tráelo de vuelta a nosotros. Por favor."
Su voz era poderosa y clara, y sin embargo, había una corriente
subterránea de desesperación, incluso dolor. Quizás Su Majestad quería
tanto como yo, quizás más, ayudar a Shinichi-sama. Pero tenía que pensar
en su posición de Emperatriz. A diferencia de mí, ella tenía
responsabilidades reales. Era inimaginable que pudiera abandonar esos
deberes para seguir su propio corazón.
Por eso ella envió su corazón conmigo.
Minori-sama y yo dimos un asentimiento enfático.
"¡Lo haremos!"
Una y otra vez iban las casas idénticas a intervalos idénticos.

La misma forma. El mismo color. En Japón era posible ver desarrollos de
viviendas públicas donde todo se había construido con el mismo modelo,
pero esto era... estaba en una escala diferente. De un extremo a otro de la
calle, todo seguía igual. Y tuve la impresión de que también era así en
todas las otras calles.
Además, el paisaje que pasaba por la ventana del carruaje tirado por
dinosaurios parecía imposiblemente seco. En parte eso se debió a la falta
de vegetación en cualquier lugar de la ciudad, pero tuve la sensación de
que la humedad real era muy baja.

También había experimentado las severas diferencias de temperatura

entre el día y la noche. Así que no se trataba solo de la ropa, el clima
también era muy parecido al Medio Oriente de la Tierra.
Me quedé mirando por la ventana. No vi gente en la ciudad.
En realidad, eso no era del todo cierto. De vez en cuando veía a alguien,
pero la cantidad de personas que veía parecía muy pequeña en
comparación con lo grande que era la ciudad.
Estaba tranquilo. Demasiado tranquilo, como dicen. Se sentía sin vida, sin
el caos espontáneo que generalmente caracteriza un área habitada. Sentí
que estaba mirando un pueblo fantasma.
"¿Estas casas... están todas vacías?"
"¿Hm?" Amatena me dio una mirada inquisitiva. "¿Qué quieres decir con
eso?"
"Es solo que... no veo a nadie en la calle".
"Eso es porque es hora de trabajar", dijo, como si fuera la cosa más obvia
del mundo. "La mayoría de la gente está en el campo".
"Campos, ¿eh?"
"Algunos trabajan en fábricas o tienen tareas especiales, pero la mayoría
de la gente de nuestra nación se dedica a la agricultura".
"¿Entonces la mayoría de ustedes son granjeros?"
"Granjeros, soldados, familia".
Dejé colgar un silencio inquisitivo. No lo seguí.
Soldados que pude entender. Algunos países tienen sistemas de milicias,
donde en tiempos de emergencia se esperaba que todos tomaran un arma
y formaran parte del ejército. La mayoría de las veces eran granjeros, pero
también eran soldados en reserva.
"Familia", aunque...
"Usted dijo que deseaba ver cómo vivía nuestra gente, ¿verdad?", Dijo
Amatena. “Entonces espera un poco más. Creo que lo que ves te satisfará.
Con eso, ella se calló de nuevo.
Finalmente, ella anunció: “Muy bien. Estaban aquí."

El carruaje tirado por dinosaurios se detuvo. A dónde íbamos,

aparentemente habíamos llegado.
Miré a mí alrededor y asomé la cabeza por la ventana del carruaje. Vi un
gran edificio delante de nosotros. No tan grande como el "templo" desde
cuyo balcón había estado saludando el padre-gobernante, pero varias
veces el tamaño de cualquiera de las casas a lo largo de la calle. El techo
alto daba la impresión de una especie de almacén; En cualquier caso, una
rápida mirada al exterior dejó en claro que esta no era una casa ordinaria.
A pesar de su tamaño, parecía ser solo una historia.
"Vamos", dijo Amatena, desembarcando.
Entramos en el vestíbulo, luego nos dirigimos al edificio propiamente dicho.
"Huh...”
Como esperaba, el interior era un vasto espacio abierto. Fue apoyado por
una serie de pilares, pero no había paredes que dividieran el área interior.
Asumí que este era el espacio vital principal en este edificio, posiblemente
complementado por algunas habitaciones adjuntas más pequeñas. Casi
parecía el salón de adoración de una iglesia.
El exterior suave del edificio desmentía el colorido interior, que estaba
adornado con lo que parecían decoraciones hechas tradicionalmente. Era
diferente de cualquier otra cosa que había visto hasta ese momento.
¿Podría ser que las otras casas aparentemente simples también fueran así
por dentro?
"¿Qué está pasando?"
Reunidos en el gran espacio había varias docenas de hombres y mujeres.
Los humanos constituían más de la mitad del grupo, pero también había
mucha gente bestia. Sin embargo, no vi a nadie parecido a un elfo, un
enano o un hombre lagarto.
Todos vestían atuendos tradicionales, la gente bestia, en particular,
parecía mostrar mucha piel.
Ahora lo entiendo.
Siempre pensé que Elvia parecía bastante expuesta, pero ahora podía ver
que era solo parte de la cultura de Bahairam.
Las personas del desierto en nuestro mundo a menudo cubrían todo su
cuerpo para evitar quemaduras solares y ayudar a regular la temperatura,

pero a medida que la "fase" de Elvia se aclaraba abundantemente, su

pelaje podría volverse muy grueso y, cuando volviera a arrojarlo, la piel
podría ser muy sensible. Así que en realidad era mejor para ella atrapar
menos calor usando menos ropa.
Esta era una cultura que naturalmente había sido forjada por la vida diaria
y el trabajo de su gente.
"Y eso es algo hermoso, ¿no?", Comenté.
Tal vez el paisaje urbano abrumadoramente soso que había estado viendo
todo este tiempo hizo que la sensación fuera más intensa de lo que debería
haber sido, pero la gente frente a mí parecía, en mi mente, encarnar de
inmediato tanto la cultura de Bahairam como la naturaleza de sus
personas.
"Ya veo", dijo Amatena lentamente. Solo por un segundo, algo oscuro pasó
por su expresión.
¿Eh? ¿Era eso algo incorrecto decir?
Amatena debe haber notado que la miraba, porque ella sacudió la cabeza.
"¿Hrm? Ejem. No es nada."
Esa era otra forma de decir que no iba a responder ninguna pregunta al
respecto. En cambio, decidí preguntar sobre nuestra ubicación.
Amatena y yo nos paramos contra una pared, mirando. "¿Qué tipo de
reunión es esta?" Estaba bastante seguro de que no era una convención
de cosplay...
"Es una boda".
"Oh, por supuesto, un-"
¿Una boda?
Supuse que eso explicaba a todas las personas vestidas con trajes
tradicionales. Sin embargo, tal vez la ceremonia acababa de comenzar,
pero había un elemento crucial de una boda que no parecía ver.
"¿Dónde están los novios?"
"Están justo ahí".
"Correcto... ¿dónde?"

Amatena señaló a los hombres y mujeres en el centro de la habitación.

Pero el gesto parecía abarcar al menos una docena de cada uno.
"Lo siento... ¿Quién se va a casar allí?"
"Todos ellos. Puedes contar al menos treinta parejas.”
"¿Treinta?"
¿Treinta novias y novios?
"Entonces espera. ¿Es este uno de esos, ya sabes... bodas masivas?”
"Correcto". Amatena asintió con calma.
En cuanto a mí, no sabía qué decir. Intelectualmente, sabía que cada país
tenía su propia cultura y costumbres, moldeadas por su propia historia y
condiciones, por lo que difícilmente era el lugar de un extranjero, y mucho
menos alguien de otro mundo, para ser crítico o crítico. Pero el matrimonio
fue uno de los eventos más importantes en la vida de una persona. ¿A
todos realmente no les importaba casarse de una vez?
"Er, ¿está realmente bien que asistamos a una ceremonia de boda como
esta?" Especialmente con un extraño como yo.
"Está bien", dijo Amatena secamente. "Es natural que la familia esté
presente en una boda. Y aunque tu repugnante yo no es familiar, estás
conmigo, así que puedes unirte a nosotros”.
"Espera... ¿Familia?"
¿Amatena tenía alguna relación de sangre en ese grupo? Vi a algunos
hombres y mujeres lobo allí...
Pero, de nuevo, habíamos venido aquí porque le había pedido a Amatena
que me mostrara algo de la ciudad y su gente. ¿No significa eso que ella
no habría ido a esta boda si no le hubiera pedido salir?
Y eso sugirió...
"De ninguna manera..."
Padre-gobernante, el título que le dieron a su rey, bailaba en mi cabeza.
Como para dar crédito a lo que estaba pensando, tres figuras aparecieron
en un balcón que corría a lo largo de una pared del área abierta. Uno de
ellos lo reconocí.

"Es eso..."
"Mm. El padre gobernante”, dijo Amatena.
Era él: el mismo rey de Bahairam que había visto el día anterior. Dos
hombres musculosos, cada uno con el mismo tipo de uniforme que
Amatena, lo flanquearon; tal vez eran guardaespaldas o algo así.
"¿Pero qué hace el rey del país en una ceremonia de boda?"
“Nuestro padre-gobernante mismo dice las palabras de bendición en las
bodas familiares en nuestra nación. Uno hace un voto eterno al padre-
gobernante, junto con un voto de lealtad hacia él. Esa es la ceremonia.”
"¿No prometes... a Dios, o algo así?"
"¿No dije que le prometimos al padre-gobernante?"
No hablé por un momento. ¿Era esto... ya sabes? ¿Una de esas cosas
donde Su Majestad el Emperador también era un dios vivo?
"Entonces, la razón por la que todos se casan al mismo tiempo...”
"Estaban esperando que el padre-gobernante viniera a nosotros", dijo
Amatena.
Entonces el rey hizo estos recorridos periódicos por su reino, y cada vez
que se presentaba, tendrían bodas en masa o lo que sea. Siempre había
imaginado a un rey como alguien que permanecía encerrado en su castillo,
pero parecía que el Rey de Bahairam realmente se movía.
Piénsalo. Según su vestimenta y cultura, creo que Bahairam estaba
formado por personas que originalmente eran nómadas. Eso significaba
que era probable que este tipo de estilo de vida establecido fuera algo
relativamente nuevo para ellos.
Mientras pensaba en todo esto, una de las personas que estaban junto al
rey abrió un trozo de papel de piel de oveja y gritó una palabra que no pude
descifrar. Supuse que era el nombre de alguien. Dado que esta era una
ceremonia de boda, eso implicaba que era una de las nuevas novias y / o
novios. Pero... espera un segundo. Entonces, ¿eso significaba que el tipo
no era un guardaespaldas, sino más bien un sacerdote?
En cualquier caso, de la multitud de parejas surgieron un hombre y una
mujer; se adelantaron y se arrodillaron.

"En nombre de nuestro padre más honrado, les administro el voto eterno",
dijo el hombre al lado del rey. "Sé siempre leal como miembros de nuestra
familia".
"Es nuestro profundo honor", respondieron el hombre y la mujer. Ambos
parecían muy serios, y, si puedo decirlo, no muy felices.
Y entonces...
“¡Siguiente!” Gritó el hombre al lado del rey. Los primeros novios se
movieron rápidamente a un lado y otra pareja se adelantó. Se les dio el
mismo discurso breve y extrañamente condescendiente, y ellos también
respondieron: "Es nuestro profundo honor", antes de apartarse.
Para la tercera pareja, estaba empezando a cansarme un poco. ¿Qué era
esto, una línea de montaje?
Quiero decir, concedido, si Su Majestad el Rey realmente asistió a cada
ceremonia de boda en el país, entonces no tuvo el lujo del tiempo. Era más
como... sí, estaba tratando con extraños, pero ¿era esto realmente
suficiente?
Entonces Amatena agregó otro giro del cuchillo. "En nuestro país, cuando
un hombre o una mujer alcanzan la edad adecuada, él o ella se casa con
una pareja elegida para él".
"¿Huh? ¿Elegido? ¿Cómo un matrimonio arreglado? ¿Quién elige?”
"El padre-gobernante", respondió en voz baja.
Okay espera. Espera.
¿El rey elige a los cónyuges de todos? Incluso para los estándares de este
país, eso sonaba loco.
Parecía que tendría que ser lo suficientemente difícil asistir a cada
ceremonia de boda en el país. Para él, también elegir personalmente a los
socios de todos tenía que ser imposible. Presumiblemente, en la práctica,
fue alguien cercano a él, o tal vez un funcionario en cada región, quien hizo
las selecciones.
Pero incluso eso significaría...
"¿Entonces no te casas con la persona que amas, solo con la persona que
el rey elige para ti?"
"Eso es correcto."

"Eso es una locura, eso es lo que es".

"Es natural que uno obedezca al honrado padre", dijo Amatena sin rodeos.
"...Correcto..."
No sabía qué más decir. Todo lo que sabía era que me hacía sentir
enfermo. No estaba bien. El libre albedrío de la gente estaba siendo
totalmente ignorado.
Pero entonces... no podría negar que esto también podría considerarse
una diferencia cultural. El manga, el anime, los juegos y las novelas ligeras
rebosaban de historias basadas en matrimonios estratégicos,
coincidencias hechas por los padres de los socios. Como recordé, durante
la era de las guerras civiles de Japón, algo así como el noventa por ciento
de los matrimonios que los guerreros hicieron fueron políticos, con el socio
actuando casi como un rehén. El matrimonio amoroso de Toyotomi
Hideyoshi con Nene fue la excepción, o eso había escuchado.
Por supuesto, en la mayoría de estas obras, los personajes principales se
oponen al matrimonio arreglado, y se convierte en todo un drama. Pero el
hecho de que pueda usarse para ese tipo de conflicto es otra forma de
sugerir qué tan común fue en el pasado. Así que tal vez fuimos yo y mis
objeciones los que estuvimos realmente locos.
Pensé que lo mejor que podía hacer en este momento era cambiar de
tema.
"Um... Mencionaste a la familia. ¿Con quién estás relacionada?”
"Todos."
"¿De nuevo?", Dije tontamente. "¿Todos?"
Miré alrededor de la habitación una vez más. Había docenas de hombres
y mujeres allí, y muchos de ellos no eran hombres lobo. Estaba seguro de
que no todas las personas presentes estaban allí para casarse, pero
todavía era demasiada gente para que cada uno de ellos formara parte de
la familia de Amatena.
Entonces supongo que eso debe significar...
Dada la forma en que se referían a su rey como el "padre-gobernante",
implicaba que todos los súbditos del reino eran hijos de su dios y padre, Su
Majestad.

Amatena probablemente no se dio cuenta de que estaba confirmando mis

sospechas cuando dijo: "Todos somos igualmente hijos del padre-
gobernante, por lo que todos somos familia para todos los demás. Ese es
el vínculo que nos une y que hace posible la augusta nación de Bahairam”.
No respondí de inmediato. Parecía que mientras estábamos hablando, los
votos al padre-gobernante habían terminado.
¡Espera, eso fue rápido!
Es cierto, a los treinta segundos por pareja, treinta parejas solo tomarían
unos quince minutos. Finalmente, el Rey de Bahairam dijo: "Que todos mis
hijos se hayan unido hoy aquí, tengan una larga vida y mucha progenie", y
luego se retiró al edificio. Espera un segundo... ¡¿Esa fue toda la bendición
del rey?!
Mientras estaba allí prácticamente echando humo, las novias, los novios y
todos los demás involucrados en la ceremonia tomaron la señal del rey y
comenzaron a filtrarse fuera de la habitación.
"¿Hay una recepción después de esto?"
"¿Ree-sep-shun?", Preguntó Amatena. "¿Qué es eso?"
"¿Huh? Quiero decir..."
Había sucedido de nuevo. Cuando usaste una palabra para la que la otra
persona no tenía un concepto, el anillo de intérprete mágico no podría
traducirla. En sí mismo, esto no era tan inusual. Pero esta vez...
"Es, ya sabes... la fiesta que tienen después de una ceremonia de boda.
Comida elegante, tal vez algunas bebidas...”
"Nuestro país ya no tiene funciones tan disolutas", dijo Amatena
bruscamente.
"Espere. ¿Disoluto?"
Uno pensaría que si alguna vez hubiera un momento para una fiesta,
después de una ceremonia de boda sería ese. El objetivo principal de una
boda era que los amigos y la familia de una pareja celebraran mientras
partían en una nueva etapa de sus vidas juntos. La recepción fue la forma
en que la pareja mostró su aprecio por los buenos deseos de todos.
¿Y ella pensó que eso era disoluto?

¿Podría ser que en Bahairam, fiestas como esa se consideraran un lujo

inaceptable?
Mientras estaba allí en estado de shock, todos los demás en la habitación
se fueron. Solo éramos Amatena y yo ahora.
“La palabra bahairam”, dijo Amatena como si se le acabara de ocurrir,
“significa familia en la vieja lengua. Todos somos hijos del exaltado padre-
gobernante, y en él todos somos iguales. No tenemos un sistema
discriminatorio de divisiones como lo hace Eldant con su nobleza. Tampoco
tenemos costumbres decadentes. Todos somos una gran familia, viviendo
juntos aquí en este paraíso”.
"Paraíso", repetí.
La palabra sonaba increíblemente fría allí en esa habitación vacía.
Dragon Knights nos llevaron a nosotras y nuestra carga a la frontera.

Para llegar a Bahairam, tendríamos que cruzar la región montañosa en el
oeste. Era un área difícil y peligrosa; Mientras que una persona bestia
puede no haberse preocupado por eso, los humanos, los elfos y los enanos
probablemente encontrarán las cosas bastante difíciles.
Así, Su Majestad la Emperatriz, tratando de aliviar nuestra carga como
pudo, instruyó a los caballeros que nos llevaran a nosotros y a nuestras
pertenencias lo más lejos posible.
Lo más rápido y fácil de todo hubiera sido cabalgar esos wyverns
directamente sobre la frontera, pero si los Eldant Dragon Knights fueran
vistos en Bahairam, solo intensificaría las disputas fronterizas nuevamente,
por lo que se detuvieron antes de cruzar a la otra nación.
"Justo ahí."
Estábamos en un espacio relativamente abierto en el bosque que se
encontraba al pie de las montañas en la frontera, haciendo una inspección
final de nuestro equipo. Los carruajes tirados por pájaros estaban
obviamente fuera de discusión aquí, así que planeamos traer solo lo que

pudiéramos llevar. Digo planeado, porque por alguna razón había cinco
grandes cofres de madera con nosotros.
Eran de Su Majestad, que había deseado ayudarnos con el equipo de
cualquier manera que pudiera. Aun así, apenas podríamos tomar todo esto.
Y entonces abrí los cofres y comencé la tarea de averiguar qué traeríamos
y qué quedaría atrás.
"¡Mira esto!", Exclamé cuando abrí una de las cajas.
Un trozo de papel, etiquetado "A Myusel" en japonés, se encontraba
dentro.
A decir verdad, no puedo leer ni escribir el idioma Eldant. La escritura
japonesa que aprendí de Shinichi-sama es lo único en lo que puedo leer.
Así que alguien que desee escribirme una carta tendría que usar ese
idioma...
La única persona capaz de escribirme en japonés y poner la carta en este
recuadro, nada menos, fue Su Majestad.
Cogí el papel y lo di vuelta. En la parte posterior estaba asegurado un
pequeño objeto mágico, una delgada pieza de acero con un hechizo
mágico inscrito en él. Lo reconocí Era una etiqueta mágica usada para
sellar un espíritu de palabra; en el ejército, tales cosas eran transportadas
rutinariamente por mensajeros.
Toqué el objeto y entoné: "Soy Myusel", y justo como esperaba, el espíritu
de la palabra dentro, la voz de Su Majestad, fue liberado.
"Myusel. En consideración a nuestra oficina, no podemos acompañarlo en
su viaje. Enviamos esto con usted en su lugar. Es un vestido de batalla que
usamos nosotros mismos una vez, pero ha sido diseñado para adaptarse
a su cuerpo. Los hechizos mágicos bordados en el forro seguramente te
ayudarán. En todo caso, esperamos que funcionen mejor para alguien
cuyas venas fluyan con la sangre de los elfos”.
Con mucho temblor reverente, me asomé al cofre de madera. Para mi
asombro, en el interior había un atuendo doblado, claramente apto para la
nobleza o la realeza: un vestido de batalla de seda con lujosas costuras
doradas y plateadas. Supuestamente, según el mensaje, una vez utilizada
por Su Majestad.
Qué tremendo honor...

"¿Qué pasa, Myusel?", Preguntó Minori-sama, mirando por encima de mi

hombro hacia la caja.
"Es... Su Majestad, ella...”
"Oh. Ohhh Lo entiendo,” dijo Minori-sama, sin parecer especialmente
sorprendido. "Así que por eso quería saber tu syze".
"¿Lo siento...?"
"¿Recuerdas cómo medí los cuerpos de todos cuando hicimos esa
película?"
"Si..."
Recordé a Minori-sama midiéndome, a Elvia-san e incluso a Su Alteza
durante la producción de la película. Ella había dicho que era necesario
crear los disfraces.
"Bueno, un tiempo después, Su Alteza me ordenó que le diera sus
medidas".
"UH Huh."
“Ya habíamos hablado de hacerte algo así. Puedo ser el guardaespaldas
de Shinichi-kun, pero estaba segura de que un atuendo como este sería
útil para ti. Hay muchas cosas que no puedo hacer sola, ya sabes”.
Era cierto, estaba con Shinichi-sama casi tan seguido como Minori-sama.
“Sé que puedes usar magia. Y también puedes manejar una espada, ¿no?”
Minori-sama sacó una capa y una espada del pecho.
"Solo recibí la formación más básica...”
Había aprendido un poco sobre la esgrima en el ejército. Lo máximo que
pude decir fue que sabía más sobre cómo sostener y golpear con una
espada que alguien que nunca había cogido una en su vida.
“Bueno, ¿qué tal si te presto este? Tienes esta capa. Úselo sobre su ropa
y cierre el frente, y nadie podrá ver su equipo”.
"Correcto. Eso suena como una buena idea.” Asentí.
El honor de lo que había hecho la emperatriz fue casi abrumador, pero si
dejo que evite que haga un buen uso del regalo de Su Majestad, eso sería
lo más vergonzoso de todos. Decidí, agradecidamente, usar el vestido de
batalla.

Elvia-san vestía su atuendo habitual, mientras que Minori-sama llevaba

una camisa y pantalones básicamente normales. Luego estábamos yo y mi
capa. Nadie nos confundiría con la gente de Bahairam, pero podríamos
parecer lo suficientemente como comerciantes ambulantes para no
destacar demasiado.
Minori-sama levantó la vista hacia las imponentes montañas y suspiró.
"Hubo una fase de montaña en mi entrenamiento, pero no cambia el hecho
de que es frustrante tener que ir de esta manera cuando cada minuto
cuenta".
"Tienes razón", le dije.
Había varios valles que atravesaban las montañas, pero todos estaban
vigilados de cerca tanto por el Sagrado Imperio Eldant como por el ejército
de Bahairam por igual, y no había manera de que pudiéramos pasar por
ellos.
“Seguro que sería bueno volar directamente en un helicóptero. Si solo..."
"¿Helico-per?" No reconocí la palabra.
"Es un vehículo que tenemos en Japón. Vuela por el cielo”.
"¿Quieres decir como un wyvern?"
"No en realidad no. Está hecho de metal, ¿ves? Y tiene una gran ala
giratoria... "
"¿Un objeto de metal que puede volar por el cielo?" Apenas podía
imaginarlo. Parecía que la tecnología de Japón había dado a luz cosas que
rogaban la imaginación. Al igual que el "auto-mo-bile" en el que Minori-
sama y los demás a veces viajaban: logró avanzar a pesar de que no había
animales tirando de él. Afirmaron que no funcionaba con magia, pero aun
así...
"Por otra parte, supongo que un helicóptero sería aún más visible que
algunos wyverns". Minori-sama esbozó una media sonrisa.
Es cierto que poder volar nos ahorraría muchísimo tiempo. Deseé mucho
poder volar, ya que nos llevaría a Shinichi-sama mucho antes.
"Incluso necesitaba un par de días para cruzar estas montañas", dijo Elvia-
san." También hay muchos monstruos peligrosos, así que debemos tener
cuidado".

Esa era una de las cosas que me preocupaban. Se rumoreaba que los
wyverns se encontraban entre la vida silvestre en esta área, y a diferencia
de las monturas montadas por los Dragon Knights, los wyverns salvajes
eran violentos y peligrosos. También había historias de perros salvajes y
fantasmas por aquí. Cruzar estas montañas nos costaría más que solo
tiempo. Nos puede costar la vida.
"Bueno, estar de pie por aquí preocupados no nos hará ningún bien", dijo
Minori-sama, y volvió a clasificar el equipaje.
Por mi parte, saqué el vestido de batalla que Su Majestad me había
regalado y me lo probé.
En ese momento, Elvia-san dijo: "¿Huh? Es eso..."
"¿Qué está pasando?", Dijo Minori-sama, siguiendo la mirada de Elvia-san.
Hice lo mismo, y luego me congelé.
"Eso es..."
Una sombra oscura daba vueltas perezosamente en el cielo despejado.
Debido a que estaba iluminado por el sol, no pudimos distinguir muchos
detalles, pero la silueta sola fue suficiente para decirnos lo que estábamos
mirando.
"¡Un dragón...!"
Era, sin duda, un verdadero Dragon, la criatura que la gente generalmente
se refería cuando se referían a un dragón. Los verdaderos Dragones eran
un orden de magnitud más grande que los wyverns, y probablemente más
peligrosos que cualquier criatura viva. Además de eso, la magia apenas
los afectó. Brutalmente violento por naturaleza, encontrarse con uno era
tan bueno como una sentencia de muerte.
Y aquí estaba uno, justo aquí.
¿Podría ser esto una coincidencia?
"¿O es uno de los Bahairam...?"
Uno de sus dragones de marionetas, tal vez. ¿Se habían enterado de
nosotros y habían venido a detenernos?
Miré a Elvia-san, pero ella sacudió la cabeza enfáticamente.

"Yo... ¡No sé nada de esto! ¡Estaba totalmente a oscuras sobre los

dragones de marionetas!”
“¡Olvídalo, solo escóndete!” Ordenó Minori-sama, y rápidamente me
refugié detrás del cofre de madera.
Idealmente, habríamos corrido a algún lugar donde pudiéramos
escondernos mejor, pero desafortunadamente, el dragón estaba
inmediatamente sobre nosotros. Cualquier movimiento irreflexivo podría
haber llamado su atención.
El monstruo pasó directamente por encima, luego hizo un gran círculo y
regresó. Casi como si estuviera buscando algo en esta área. ¿Nos había
visto? Mantuvimos ojos temerosos sobre el dragón, tratando de mantener
nuestros cuerpos lo suficientemente flojos como para poder correr en
cualquier momento.
De repente, Minori-sama gritó: "¡¿Nos encontró?!" y saltó hacia una de las
cajas. Parecía que había algún tipo de armamento de Jay Ess Dee Eff
dentro, aunque probablemente no nos haría mucho bien ahora. Comencé
a cantar en voz baja Tifu Murottsu, solo para estar lista. Puede que no
tenga ningún efecto contra un dragón, pero puede que solo nos haga ganar
algo de tiempo. Eso era todo lo que podíamos esperar de la magia en esta
situación: un poco de tiempo.
Habíamos venido aquí para salvar a Shinichi-sama. ¿Seríamos asesinados
por un dragón antes de llegar a Bahairam?
Eso era definitivamente lo que Elvia-san y yo estábamos pensando, los dos
rígidos de miedo.
Pero entonces lo escuchamos: "¡Miiinoooriii-senseeeiii!"
El dragón parecía estar llamando el nombre de Minori-sama.
¿Espera que?
Elvia-san y yo nos miramos atónitas. Ambos sabíamos que los dragones
no podían hablar ningún idioma humano. Y eso significaba...
"Espera... ¡Esa voz!" Minori-sama dijo emocionada, mirando al dragón.
Me uní a ella para mirar al cielo. "¡Oh...!"

El dragón hizo un brusco descenso. Una cara apareció detrás de él. No,
dos caras. Dos caras que reconocí, de hecho. Tal como Minori-sama sin
duda lo hizo.
"¿Loek? ¡¿Romilda?! ”La voz de Minori-sama estaba a punto de
resquebrajarse. De sorpresa, seguramente.
Sí: cabalgando sobre el dragón estaban el elfo Loek-sama y la enana
Romilda-sama, ambos estudiantes de nuestra escuela. Aunque ambos
eran semihumanos, provenían de familias que habían sido reconocidas por
sus contribuciones al imperio, y como tales fueron tratadas más o menos
como nobles.
“¡Nos invitamos a acompañarnos!” Dijo Loek-sama, saludando y sonriendo
ampliamente. Agitando tan fuerte, de hecho, que parecía que podría caerse
del dragón. Romilda-sama lo agarró del cuello para detenerlo.
“¿Y qué quieres decir con eso?” Preguntó Minori-sama, sorprendida.
Ciertamente no estaba más sorprendida que yo y Elvia-san. Solo podíamos
mirar asombrados mientras los dos niños y su dragón se acercaban cada
vez más.
En una inspección más cercana, descubrimos que fuera lo que fuera, no

era un dragón. Sí, parecía uno, especialmente a cierta distancia. Pero la
mayoría de los dragones no emitieron el sonido de un raspado de metal
cuando aterrizaron en el suelo.
¿Era posible que esto fuera...?
"¡Minori-sensei!"
Mientras me quedaba mirando, Loek-sama saltó de la espalda del dragón
(como una cosa) y corrió hacia Minori-sama.
“¡Ahh, Minori-sensei! ¡Cuánto anhelaba verte!” Tenía los dos brazos
abiertos como si esperara un abrazo.

Minori-sama, sin embargo, estaba mirando al dragón, todavía asombrado.

Loek-sama continuó corriendo hacia adelante, abrazando a Minori-sama—
-casi.
"¡Estúpido, estúpido idiota!"
¡Ker-smash!
Un hacha de mango largo se estrelló contra la cabeza de Loek-sama con
un sonido prácticamente visible, arrojando al elfo al suelo.
Sosteniendo el hacha estaba Romilda-sama, quien había estado un
segundo detrás de él desmontando al dragón. Los enanos como Romilda-
sama pueden no haber parecido mucho, pero ella estaba balanceando
fácilmente un hacha que probablemente ni siquiera podía levantar.
"¡Pervertido! ¡Acosador! ¡Acosador sexual! ¡No hemos estado hablando
con ella ni cinco minutos, y mira lo que estás haciendo!"
"¡P-Por qué apestas, que habitas en el agujero...!" Loek-sama, frotando la
parte posterior de su cabeza, reaccionó a los gritos de Romilda-sama con
algunos gritos propios. "¡No tengo que recibir órdenes tuyas! ¡Y me
golpeaste de la nada! Sabía que los enanos eran violentos, ¡pero eres una
amenaza! La pureza de mi amor no se verá obstaculizada por nadie,
¡¿hgghr?!
Mientras Loek-sama declamaba, Romilda-sama giró sobre sus fuertes
piernas y plantó un pie firmemente sobre su espalda, cortándolo.
"¡Silencio, abrazador de árboles perpetuamente cachondo!" Hubo un
chirrido amortiguado mientras ella clavaba su bota en la espalda de Loek-
sama.
Uno podría no esperar que Romilda-sama sea muy pesada dada su baja
estatura, pero entonces, todavía sostenía esa hacha de batalla gigante. El
peso combinado tenía que ser bastante desagradable. Podíamos escuchar
ocasionalmente "hrgh" y "hagh" y "grrk" y otros ruidos extraños que
emanaban de Loek-sama.
"¿C-Cómo llegaron ustedes dos para estar aquí?", Finalmente pregunté.
"¿Y qué es este dragón...?"
El monstruo se quedó quieto y en silencio detrás de ellos. Era casi del
tamaño de una casa, pero no mostraba signos de volverse loco, ni siquiera

de estar vivo. Pero entonces, si esto era lo que comenzaba a sospechar,

era natural.
"¿Podría ser esto... de nuestro filme?"
“Así es”, dijo Romilda-sama, incluso mientras continuaba trabajando en la
desafortunada Loek-sama. Estaba agitando sus extremidades, pero no
parecía haber progresado en escapar de ella. "Es falso."
Una falsificación muy convincente, definitivamente, pero si mirabas muy de
cerca, podías ver que la "piel" estaba hecha de tela en su lugar con cierres
de metal, todo cubriendo algo parecido a una armadura de metal.
"P-Pero lo vimos volar", protestó Elvia-san, acercándose al dragón con
cautela.
Ella tenía razón. Shinichi-sama le había pedido a los padres de Romilda-
sama que nos construyeran un títere de dragón cuando hicimos nuestra
película, pero no fue nada más que eso: cuando queríamos que "vuele",
teníamos que atarle los hilos y hacer que wyverns tirara en el aire
Sin embargo, esta cosa parecía estar volando sola. Ciertamente no vimos
ningún wyverns alrededor.
"Utilizamos magia de viento para que se mueva", dijo Loek-sama con
indiferencia desde su lugar debajo del talón de Romilda-sama.
"Sí", agregó Romilda-sama. “Además, movemos las alas y la cola para
ayudarlo a manejar mejor el viento. Magia también.”
Según los dos estudiantes, usaron magia de viento para moverse por el
aire, mientras que la magia que resonó con el metal se usó para hacer que
el cuerpo se moviera.
"Tomamos prestadas algunas ideas de algunos de los animes que hemos
visto", dijo Loek-sama. "Zo * ds y Dan ** uga y esas cosas".
"UH Huh."
Ninguno de los dos me pareció recursos muy útiles. El hecho de que estos
dos los hubieran hecho rendir cuentas fue quizás solo una prueba más de
que realmente eran herederos de las grandes familias de los elfos y los
enanos, respectivamente. Cualquiera que sea la raza, si una línea de
semihumanos había sido reconocida por el Sagrado Imperio como
especialmente distinguida, probablemente en parte por el poderoso uso de
la magia para mejorar el Imperio, entonces sus rasgos probablemente

incluían formidables habilidades mágicas. Deben ser capaces de hacer

cosas que parecen imposibles para una persona común.
“Pero,” dijo Minori-sama, finalmente hablando, “¿por qué están aquí?
¿Cómo sabían que estaríamos aquí?”
"¡Eso es porque quería desesperadamente ser de ayuda para ti, Minori-
sensei!"
"¡Yipes!"
Loek-sama convocó una explosión de fuerza suficiente para finalmente
escapar de Romilda-sama; voló hacia Minori-sama y tomó su mano entre
las suyas.
"Eso está muy bien, pero quiero decir, ¿cómo sabías que...?"
"Ah, tú y Myusel-sensei fueron a hablar con Su Majestad antes de que te
fueras, ¿verdad? Mi padre estuvo presente en esa audiencia”.
"Oh..."
Pensé en la sala de audiencia llena de gente importante. Entonces el padre
de Loek-sama había estado entre ellos. Debió de irse a casa y hablar con
Loek-sama, quien corrió tras nosotros en su desesperación por ayudar a
Minori-sama.
Eso, sin embargo, habría sido después de que ya nos habíamos ido con
los Caballeros Dragón. Entonces parecía que después de algunas
deliberaciones, Loek-sama fue a hablar con Romilda-sama. ¿Por qué
había ido a ella en lugar de a sus amigos entre los elfos? Por un lado,
afirmó que habían tenido planes durante algún tiempo para convertir el
dragón de utilería ahora no utilizado en algo que realmente pudiera volar.
Pero lo más importante, su padre era extremadamente influyente entre los
elfos. Una palabra descuidada a uno de sus amigos podría llegar
fácilmente a los oídos de las familias de sus amigos, y luego su padre
pronto descubriría su plan.
Y entonces nos encontramos aquí...
“¡Minori-sensei!” Loek-sama prácticamente gritó. "¡Llévame contigo!"
"Creo que te refieres a ‘Llévanos contigo", dijo Romilda-sama con el ceño
fruncido. "Porque sé que no puedes manejar la cosa más simple por ti
mismo".

Minori-sama los miró a los dos y luego sacudió la cabeza. "No. Esto no es
un juego”.
Ella tenía razón. Estábamos arriesgando nuestras vidas en esta misión.
Considerando la posición de Minori-sama, sería imperdonable que ella deje
que Loek-sama o Romilda-sama se involucren.
Aun así, Loek-sama continuó. "¡Yo sé eso! ¡Lo digo en serio!"
“¡En serio o no, esto es peligroso!” Dijo Minori-sama.
"Juro que no te detendremos", dijo Loek-sama, sin mostrar signos de
disuasión.
"Ese no es el verdadero problema aquí", dijo Minori-sama con un profundo
suspiro.
Estaba seguro de que Loek-sama decía la verdad cuando dijo que hablaba
en serio. Incluso con Minori-sama sonando más severa, Loek-sama no
parecía ser la menos intimidada, pero seguía insistiendo en que él vendría.
De alguna manera, lo hacía parecer casi... heroico.
"Él es realmente tan dedicado a Minori-sama..." susurré, sin querer.
Para mi sorpresa, fue Romilda-sama quien respondió. "Eso no es todo lo
que es", dijo. "No se trata de Minori-sensei".
"Entonces..."
"No son los únicos... que están preocupados por Shinichi-sensei".
Contuve el aliento.
¡Aaaaah!..? Aaah?! Aaaaaaaaaaaaaa! "".! .Hh! ¡Aaaa! ¡Ayúdame! ¡Aaaa!
¡Ah!.! ¡Aaaa! ¡Ahá sí mismo. ”¡Ayhh!”! ”! ¡Ay, a ti, ya está!” “¡Ah!, sí. “ ¡Ay!!!
¡Ah! ”. ¡Aaa! ¡Ay!!! ¡Ay!!.!!! ¡Ayúdame ya.” “¡Ah!! ¨! ¨ h.» H † h h h! H ↑! ️ h
h ¡Ah!! † __ _____ Pensar, había otras personas que estaban realmente
preocupadas por Shinichi-sama. El pensamiento hizo la felicidad en mi
corazón.
"¡De todas formas! ¡Estoy absolutamente no voy a volver! Déjame atrás si
quieres. ¡Solo te seguiré! "
"Oh, por el amor de Dios..." Minori-sama estaba empezando a sonar
completamente irritada, y cansada, por la terquedad de Loek-sama. Se
llevó las manos a la cabeza como si fuera a arrancarse el pelo. Parecía
que simplemente no sabía qué hacer.

Nuevamente, dada su posición, ¿cómo podría no dudar en traer a Loek-

sama y Romilda-sama? Pero era muy probable que si ella los rechazaba,
Loek-sama simplemente nos seguiría de todos modos. En realidad, tenía
un dragón (o lo que fuera). Eso significaba que incluso podría llegar a
Bahairam antes que nosotros, y luego ¿quién sabía qué podría pasar?
"Um, ¿Minori-sama?"
"¿Qué pasa, Myusel?" La voz de Minori-sama era inusualmente aguda, y
por una vez no se molestó en mirarme mientras hablaba.
"Creo que puede ser mejor dejar que ambos vengan".
Minori-sama y Elvia-san se volvieron hacia mí con expresiones de
sorpresa. Loek-sama y Romilda-sama, por otro lado, parecían
emocionados.
“Tú también, Myusel. Recuerdas que estamos marchando directamente
hacia territorio enemigo aquí, ¿no?”
No respondí de inmediato. Noté que Elvia-san, de pie junto a la cosa de
dragón, se contraía ante las palabras de Minori-sama. No estaba segura
de sí Minori-sama se dio cuenta, pero continuó con voz dura: "Si nos
atrapan, ya sabes lo que harán".
"Sí, lo sé, pero..." Pensé por todo lo que valía. "Pero tengo que confesar
que Loek-sama y Romilda-sama me parecen muy firmes, y que nada de lo
que podamos decir los convencerá de que se vayan a casa".
"Eso es-"
"De hecho, creo que incluso si los dejas aquí, es probable que intenten
infiltrarse en Bahairam por su cuenta. Siendo ese el caso, tengo que pensar
que sería más seguro tenerlos con nosotros... "
Minori-sama no dijo nada.
“Y nos ahorrará mucho tiempo volar a través de la frontera en esta
marioneta dragón en lugar de cruzar las montañas a pie. Yo sé un poco de
magia del viento. Entre nosotros, Loek-sama y yo deberíamos poder
hacerlo un poco más rápido... "
Mis habilidades mágicas no eran tan fuertes como las de un elfo de sangre
pura como Loek-sama, pero podría contribuir.

"Y para que la criatura vuele correctamente, también necesitamos la magia

de Romilda-sama...”
"Eso es absolutamente correcto", dijo Romilda-sama, retomando el
pensamiento. "Intentamos que Loek-sama lo controlara solo con su magia
de viento varias veces, pero nunca funcionó".
Minori-sama frunció el ceño profundamente, con los brazos cruzados. Ella
dejó escapar un profundo y largo gemido y luego, finalmente, un suspiro
derrotado.
"Myusel".
"¿Si?"
"Creo que Shinichi-kun te ha contagiado".
"¿Er? ¿A-A mí?
"Para bien o para mal", dijo con una media sonrisa. Luego se volvió hacia
Loek-sama y Romilda-sama. "Parece que no me queda otra opción. Juran
no frenarnos, ¿verdad?”
"¡Sí, señora!" Por una vez en sus vidas, la pareja que discutía eternamente
respondió al unísono.
“Una vez que lleguemos a Bahairam, seguirás mis órdenes absolutamente,
sin ninguna duda. Esa es mi condición”.
"Sí, señora", respondieron, al unísono una vez más.

Capítulo III: Elvia y Amatena
"¡Whoooooaaaaaaa!"
Elvia-san estaba a cuatro patas, aferrada al cuello de Faldra, el nombre
que Loek-sama le había dado a esta creación, abreviatura de "falso
dragón". No había nada que la mantuviera en su lugar. La cola de Elvia-
san se movía salvajemente; por la emoción, supuse. Por mi parte, estaba
muy ansiosa: parecía que podría caerse en cualquier momento.
El resto de nosotros estábamos sentados en la espalda de Faldra, pero
estábamos usando correas de cuero con cierres de metal para
asegurarnos. Aun así, estábamos lo suficientemente alto como para mirar
hacia el suelo me hizo sentir claramente incómodo.
Ese terreno, sin embargo, fue increíble de ver. Las montañas que parecían
tan intimidantes a pie ahora se extendían debajo de nosotros como si un
niño las hubiera construido de arena, como si pudiéramos barrerlas con un
movimiento de brazo. Parecían tan imposiblemente pequeños.
Durante nuestro viaje con los Dragon Knights, habíamos estado más o
menos encerrados en carga, por lo que no había habido muchas
oportunidades de disfrutar del paisaje. Pero ahora, expuesto al fuerte
viento y al rico sol, realmente se sentía como si estuviéramos volando.
Tal vez no podría culpar a Elvia-san por jugar un poco.
Pronto ingresaríamos al territorio de Bahairam. Cruzar la frontera había
resultado ser casi cómicamente simple.
La "piel" de tela del Faldra lo haría parecer, desde abajo, casi como un
dragón real desde cierta distancia. En esa nota, los wyverns que montaban
los Caballeros Dragón llevaban monturas y armaduras que les daban una
silueta muy distintiva; nadie en Bahairam habría confundido lo que estaban
mirando. Como sucedió, había muchos tipos de dragones y lagartos
nativos de Bahairam, de modo que algunos de los más dóciles incluso
fueron criados para tirar de sus carruajes, o eso había oído.

"¡Vamos a bajar pronto!" Minori-sama gritó contra el viento. "Aterrízalo en

ese bosque". Señaló un pequeño bosquecillo de árboles que se encontraba
justo en medio del paisaje de arena y rocas debajo de nosotros.
"¡Entendido!", Dijo Loek-sama, y luego él y yo comenzamos a usar nuestra
magia de viento para disminuir nuestra velocidad y altitud poco a poco.
Romilda-sama cambió el ángulo de las alas, ayudando a Faldra a un
aterrizaje agradable y suave. Las ramas de los árboles crujieron cuando
bajamos, algunos de ellos se rompieron cuando la enorme criatura pasó
junto a ellos, pero logramos caer en un área relativamente abierta.
Seguíamos yendo demasiado rápido y levantamos mucha hierba y tierra
mientras nos deslizábamos, pero pronto el Faldra llegó a descansar con
seguridad.
"Uf..." Minori-sama dejó escapar un suspiro de alivio. Ella debe haber
estado más nerviosa de lo que había dejado ver. “Buen trabajo, todos.
Lamento decir esto, pero no hay tiempo para descansar”.
"¡Correcto!" Loek-sama y Romilda-sama asintieron.
"Obviamente no podemos ir a esta ciudad a la ciudad. Loek, Romilda,
cubres la Faldra con hojas y ramas para que permanezca oculta, luego
espera aquí con ella. También dejaremos aproximadamente la mitad del
equipaje, por lo que deberá estar de guardia”.
"¿Huh? Me temo que no", dijo Loek-sama, sacudiendo la cabeza. "Voy
contigo, Minori-sensei".
"No tú no. Estamos tratando con actividades encubiertas genuinas de aquí
en adelante. Un movimiento en falso y podrías ser apuñalado por la
espalda. No podré cuidar a todos a la vez. Cuantas menos personas
tengamos con nosotros, mejor, y de todos modos, necesitamos a alguien
que cuide el Faldra y la carga”.
"P-Pero, ¿no podrías hacer que Romilda haga eso?"
"Deja de tratar de delegar, ramifica el cerebro", dijo Romilda-sama,
frunciendo el ceño con enojo.
“No,” dijo Minori-sama. “Ambos prometieron seguir mis órdenes, ¿verdad?
Quédense aquí y vigilen juntos. Siempre hay un límite para lo que una
persona puede hacer sola”.
Loek-sama parecía cada vez más angustiado. Minori-sama le dedicó una
sonrisa seca y dijo: "Y si necesitamos que nos rescates, te llamaré con

esto". Ella le dio un objeto largo y rectangular que parecía una cruz entre
una caja y un palo. Si recordaba correctamente, se llamaba una
comunicación de comunicación, una forma para que las personas que
estaban muy separadas se hablaran entre sí. El equivalente de Ja-pan de
un objeto mágico.
"¿Qué es esto?"
"Te mostraré cómo usarlo más tarde. Si tenemos que hacer una escapada
de emergencia, necesitaremos que vengas a buscarnos a Faldra. ¿Puedo
confiar en que hagas eso?
"S-Seguro que puedes. ¡Déjamelo a mí!” Dijo Loek-sama, poniendo una
mano sobre su pecho.
Minori-sama asintió con la cabeza a Loek-sama y Romilda-sama, luego se
volvió hacia Elvia-san. “Muy bien, Elvia, toma el equipaje. La bolsa de
cuero. La bolsa de cáñamo podemos dejarla. Lo siento, pero ¿puedo
pedirte que manejes la mitad de la carga?
"... Sí, claro", dijo Elvia-san, con una clara falta de entusiasmo. Asumí que
esto era más que tener que llevar bolsas. Tenía que estar molesta porque
cuando finalmente regresó a su país de origen, era esencialmente como
una traidora.
"Myusel y yo nos encargaremos del resto del equipaje".
"Seguro."
“Loek, Romilda, sigues escondiendo el Faldra. Elvia, Myusel, pon las
mochilas en sus espaldas. ¡Y luego expliquemos esta escena! "
"¡Correcto!" Todos (excepto Elvia-san) respondimos con entusiasmo.
Estaba en mi habitación, sentado en mi silla. Clara había estado conmigo

hasta hace poco tiempo, como siempre lo estaba... pero luego, por alguna
razón, se fue. Tal vez ella tenía algo que hacer. Así que ahora estaba solo,
y rápidamente me perdí en mis pensamientos.
Habían pasado dos días desde que asistí a la boda, y en ese tiempo no
había sido capaz de averiguar qué haría desde aquí.
En este país llamaron al rey su "padre" y proclamaron que todos los
ciudadanos de la nación eran iguales como familia. Eso no fue

necesariamente un mal sistema en lo que respecta. La sensación de

inquietud que estaba experimentando podría haber sido simplemente
porque era un extraño. Amatena y los demás no vieron nada especialmente
inusual en el acuerdo.
Y todavía...
"No puedo evitar pensar que huelo algo a pescado...”
Afirmaron que todas las personas en la nación eran iguales, pero por
definición, la existencia de un sistema estatal implica alguna medida de
diferencia. Cuanto más cerca esté del asiento del poder, mejor será la vida
para usted. En nuestro mundo, incluso el comunismo, que es
probablemente la filosofía política más agresiva en cuanto a promover la
igualdad de todas las personas, tiende a terminar así.
Toda la noción de igualdad completa es un ideal, no una realidad. Cerebro.
Musculo. Sensibilidad. Belleza.
Estos representan diferencias entre las personas, que naturalmente tienen
más de unos y menos de otros. Las personas ni siquiera nacen iguales. De
hecho, difícilmente pueden ser más diferentes. Tienes personas que
resultan ser genios en un campo específico, y por otro lado, tienes
personas como yo, cuyo único talento es para cosas extrañas otaku.
Entonces, si tuvieras un estado que tratara de eliminar tales diferencias de
habilidad por la fuerza... Bueno, esencialmente sería represión hacia
personas de talentos excepcionales, una especie de discriminación propia.
"Creo que si el sistema funcionara como se anuncia, no vendrían a mí para
reforzar el carisma del padre-gobernante".
Amatena me había dicho que creara un trabajo que fortaleciera el control
del padre-gobernante sobre la gente e hiciera que los bahairayanos fueran
aún más leales a él.
En otras palabras, propaganda.
Obviamente, sin embargo, Bahairam no tenía el equipo para hacer una
película, por lo que no podríamos hacer lo mismo que hice en el Sagrado
Imperio Eldant. Efectivamente me pidieron que inventara una historia que
hiciera que la gente respetara al padre-gobernante sin dudarlo.
Teniendo en cuenta el estado de la magia por aquí, incluso si una película
no fuera factible, podría haber sido posible crear una obra de teatro o algo

así. En un mundo que parecía tener pocos entretenimientos, incluso eso

podría ser suficiente para obtener una reacción bastante grande de la
población. Piense en las mil y una noches en nuestro mundo: mucho antes
de las películas o incluso la imprenta, las historias tenían el poder de mover
a gobernantes y sujetos por igual. Y hay muchos ejemplos similares.
Pero si el padre-gobernante ya tenía un buen control sobre este país,
probablemente no habría necesidad de ese tipo de historias. Para
"reeducar", o al menos educar más, a la gente, necesitaríamos un mito que
imputara aún más autoridad al padre-gobernante. O mirándolo al revés, si
no pudiéramos contar tal historia, el resentimiento contra el padre-
gobernante podría hervir entre la gente.
"Hmmm...”
No importaba cómo lo mirara, todo lo que podía ver era un intento calvo de
poder despótico.
Dijeron que la mayoría de la población del país eran agricultores. Eso me
hizo pensar en ese cartel hijo del mal, Pol Pot. No es que esté dando a
entender que hay una comparación directa entre Camboya bajo Pol Pot,
con todas las circunstancias internacionales concomitantes, y la nación de
Bahairam. Tampoco pensé que Bahairam estaba en el proceso de matar
toda una operación de inteligencia que se había vuelto contra el gobierno.
Pero de todos modos, eso está fuera de mi punto.
Al final, me resistí a la idea de que yo, o mejor dicho, mis conocimientos y
experiencias como otaku, deberían ser utilizados como una herramienta
para controlar a las personas. Tal vez eso suene cuestionable, viniendo de
alguien que ya se había permitido ser cómplice de una invasión cultural,
pero no pensé que la cultura debería ser una herramienta política.
Obviamente no había forma de separar completamente la cultura y la
política, y lo sabía. Pero aún...
"Kanou Shinichi".
Mientras me sentaba a pensar, llamaron a la puerta, la puerta que daba al
exterior. Antes de que pudiera responder, la puerta se abrió y entró
Amatena.
"¿Has llegado a alguna conclusión?"
"¿Conclusión?"

“Clara informa que pareces haber estado pensando en algo. Decidimos

darte un tiempo a solas.”
"Oh..."
Por eso Clara había desaparecido.
Eso también significaba que ella me estaba vigilando, después de todo. Lo
cual no fue tan sorprendente, de verdad.
"¿Has podido formular alguna idea para la creación de mitos sobre el
padre-gobernante?"
".................. ¿Mitos?"
No sería bueno reírse en ese momento, a pesar de la idea de que un
paquete de mentiras inventadas por algún otaku al azar podría convertirse
en una verdadera leyenda. Por otra parte, fue sorprendente la frecuencia
con la que los mitos comenzaron así. Dicho y repetido en el transcurso de
cientos o miles de años, podría secarse, acumular polvo y, de hecho,
volverse bastante mítico.
Piensa en cuántos mitos eran sexys y / o involucraban harenes o incluso
poderes sobrenaturales. Demonios, solo pon uno en la escuela y tuviste un
ligero nov.
¿Sabes qué? Olvídalo.
"Hey, Amatena", le dije.
"¿Qué es?"
"Hay una cosa de la que quiero estar seguro", dije, midiendo mis palabras.
"¿Exactamente qué tipo de" mitos "tienes en mente?"
Había una pregunta en sus ojos; no parecía que ella hubiera esperado que
preguntara eso. Ella frunció el ceño por un momento antes de responder:
“Por ejemplo, tenemos una historia sobre el primer rey de nuestra nación.
Nuestro pueblo no tenía forma de resistir cuando un país enemigo invadió,
pero el primer rey invocó las palabras "Victoria para nuestro pueblo", con
lo que surgió un torbellino y barrió a los crueles soldados enemigos”.
"Ahh... lo entiendo".
Así que tenía razón: se trataba de hacer valer la autoridad. La coherencia
no era una gran preocupación. La historia no ofrecía una explicación
científica de por qué el rey podía hacer tal cosa, y no importaba. “Señor,

quienquiera que pudiera hacer eso porque era genial y justo. ¡Viva Lord
Whoever! ”Esa fue toda la explicación que necesitaba una historia como
esa.
Pero...
"Uh, solo tuve un pensamiento".
"¿Qué?"
“Este país parece tener muchas... diferencias. Extrañas inconsistencias, si
sabes a lo que me refiero. Como la ropa que llevas puesta frente a todos
los demás. Y la ceremonia en ese edificio. Siento que todo carece de cierta
unidad”.
Amatena solo frunció el ceño.
"Podría ser... y esto es solo una suposición de mi parte, pero... sin importar
cuántas generaciones represente el rey actual... ¿las cosas en Bahairam
cambiaron drásticamente debajo de él?"
La mirada desolada de la ciudad.
La ropa simple y sencilla de la gente.
Los edificios extrañamente tradicionales de cultura-esque.
La ceremonia de la boda, con sus raíces aparentemente profundas en la
costumbre popular.
Todo lo que había visto hasta ahora de alguna manera parecía representar
extremos diferentes. Demasiado diferente.
¿Sugirió que el rey actual, tras muchos de sus antepasados, había elegido
tomar su país en una dirección muy diferente? ¿Quizás incluso hacer un
cambio de 180 grados en la política?
Para tomar ejemplos de nuestro propio mundo, después de la Revolución
Cultural, las cosas en China fueron... bueno, no diré completamente
diferente, pero muy, muy diferente. Y se dijo que los cambios en el gobierno
japonés después de la derrota del país en la Segunda Guerra Mundial,
provocada principalmente por la insistencia estadounidense, tuvieron un
efecto significativo en la cultura.
Amatena guardó silencio por un momento, pensando en algo. Entonces
ella dijo sin rodeos, "¿Entonces lo sabes?"

"Puedo adivinar... Más o menos".

Entonces Amatena procedió a ponerme en contacto. Esto es lo que dijo:
Bahairam no era un país especialmente generoso, al principio. De hecho,
la tierra no producía mucho, por lo que la mayoría de las personas migraron
de un área a otra como pájaros, persiguiendo la escasez de agua y comida.
Cuando un lugar se secaba, se trasladaban a otro hasta que el primer lugar
recuperaba naturalmente su abundancia. Así era como la gente siempre
había vivido. Los viajes del rey de ciudad en ciudad también fueron,
supuse, una reliquia de esta época.
Sin embargo, a partir de varios reyes, hubo un cambio importante en la
política nacional. La solidaridad de larga data de la gente fue lo que los
llevó a adoptar esta nueva política, que apuntaba a una nación generosa y
un ejército fuerte. Bahairam atacó a los países vecinos, absorbiendo su
territorio junto con ricos recursos hídricos, tierras versátiles y fuentes
seguras de alimentos. La población aumentó.
Todo esto significaba que la gente de Bahairam ya no tenía que deambular
de un lugar a otro; podían establecerse en un solo lugar, y muchos lo
hicieron. El abandono de su estilo de vida nómada aumentó aún más la
población, y se encontraron con los recursos de sobra para mejorar la tierra
y hacer otras tareas similares. Casi antes de que nadie supiera lo que
estaba sucediendo (incluido Bahairam), el país era casi tan grande y tan
fuerte como el Imperio Eldant.
Ese rey de varias generaciones atrás, por lo tanto, era venerado como un
héroe en Bahairam.
Sin embargo, cuando cambia el estilo de vida, también lo hace la cultura.
Las uniones para hacer que la nación fuera más poderosa se convirtieron
en el principio más preciado en la tierra, mientras que las desigualdades y
quejas individuales fueron suprimidas como “armonía amenazante”. Las
viejas costumbres y rituales fueron rápidamente abandonados, o mejor
dicho, desechados porque se metieron en el camino
El resultado de todo esto fue el Bahairam que vi ahora.
"Realmente eres algo, Amatena", le dije cuando terminó de hablar.
“¿Hm?” Dijo ella.

"Es como, ¿sabes cómo a veces es más difícil conocerte a ti mismo?

Muchas veces las personas que viven en algún lugar no pueden tener una
visión objetiva de ese lugar. Pero parece que puedes hacerlo.”
Por un lado, podría ser difícil controlar personalmente los cambios que
ocurrieron durante un período de tiempo tan largo. Puede ser difícil
comprender el panorama general cuando está en la imagen.
Probablemente hubo muchos bahairayanos que no tenían el conocimiento
o la comprensión para explicar por qué el país era como era.
Pero para mí, la voz de Amatena mientras describía la historia de su nación
sonaba casi objetiva. Como un tercero hablando.
"Debido a mi trabajo", dijo Amatena después de un momento, "a menudo
tengo la oportunidad de viajar fuera de mi país". Lo que pensé que podría
ser una sonrisa irónica cruzó por su rostro por un segundo. “En todo caso,
frecuentemente veo a esta nación desde un lugar bastante diferente a uno
de sus súbditos. No es un buen hábito. Todo lo que puedo decir es que
quizás he sido envenenado por el pensamiento retorcido de otros países”.
No dije nada. Pero me preguntaba, ¿era eso realmente cierto? Al final,
¿quién era el que realmente era retorcido?
Había pasado aproximadamente medio día desde que salimos del bosque.
Nos abrimos paso a través de un páramo de arena y rocas hasta que
llegamos a un camino, luego lo seguimos hacia la ciudad más cercana. De
vez en cuando, podríamos ver habitantes de Bahairam, o, a veces, lo que
parecían ser comerciantes ambulantes que iban o venían de otro país, pero
en su mayor parte el camino parecía desierto. Era casi difícil creer que
conducía a un pueblo o ciudad.
"Estoy casi seguro de que... la" ciudad oriental "o algo así se supone que
debe ser así". Minori-sama sacó un objeto de su bolso, algo llamado
"sumart fone" o algo así. Shinichi-sama también había tenido uno, aunque
el suyo era de un color diferente.

"Según la información del Imperio Eldant, no es la capital, pero es una

ciudad bastante grande. Tal vez del tamaño de Nagoya u Osaka, en
términos japoneses. No estoy exactamente seguro de cuán probable es
que hayan llevado a Shinichi allí, pero... "
Si había una palabra para describir Bahairam, era grande. Asumimos que
no habrían llevado a Shinichi-sama a una pequeña aldea agrícola, por lo
que tenía sentido intentar una ciudad más grande donde podría haber una
instalación militar o gubernamental. Pero había varios de ellos en
Bahairam, y extraños como nosotros no sabrían mucho sobre ellos.
"¿Qué piensas?"
"Yo... yo tampoco sé realmente...”
A pesar de mi deseo de ir a rescatar a Shinichi-sama solo, en realidad no
tenía ninguna buena forma de encontrarlo.
"Lo supuse. Supongo que no tenemos más remedio que preguntarle a un
local”. Minori-sama se volvió hacia Elvia-san. “Elvia. ¿Dónde crees que
está Shinichi-kun?
Sin embargo, Elvia-san guardó silencio. Ella solo miraba fijamente a lo
lejos, al otro lado de la calle.
Por cierto, llevaba casi el doble de equipaje que yo o Minori-sama, así que
era todo un espectáculo para ver. No parecía tanto que ella estuviera
caminando como si la carga estuviera tropezando, y resultó que estaba
atrapada en ella. Pero el acuerdo no pareció cansarla. Parecía más... poco
entusiasta.
Minori-sama y yo compartimos una mirada.
Parecía menos que Elvia-san nos estaba ignorando y más bien que tenía
algo en mente y no estaba prestando atención. Ella no se parecía a su ser
brillante habitual; Desde que llegamos al Reino de Bahairam, ella parecía
estar bajo una nube.
“¿Elvia?” Minori-sama se acercó a ella.
Eso pareció traerla de vuelta. Ella parpadeó y miró a Minori-sama. ".........
Uh, oh, ¿sí? ¿Qué es?"
"Estábamos discutiendo dónde podría estar Shinichi-kun".
"¿P-Por qué me preguntas?"

"Bueno, eres un espía de este país, ¿verdad, Elvia?", Dijo Minori-sama con
una sonrisa. “Tengo que pensar que para quien sea que estuvieras
trabajando, probablemente fueron operaciones especiales de ese grupo
las que secuestraron a Shinichi-kun. De alguna manera dudo que un lugar
en este nivel cultural tenga un montón de organizaciones de espías
competidoras. Apuesto a que tienes una idea de dónde tomarían un rehén.
Me preguntaba si podría haber un lugar así en esta "ciudad oriental" a la
que estamos llegando”.
Después de una pausa muy larga, Elvia-san respondió: "Yo... realmente no
lo sé". Luego apartó la mirada de Minori-sama y volvió a quedarse callada.
Ella no se veía muy feliz. ¿Tenía razón? ¿Fue porque no quería traicionar
a su país de origen ayudándonos? Tenía que decir que podía simpatizar
con ese sentimiento.
"Yo", susurró, "no soy... no soy como mis hermanas mayores Jiji y Ama.
No soy tan... buena como ellas”.
¿Jiji? ¿Ama? Ella los llamó sus hermanas. Deben haber sido parte de su
familia.
"Siempre soy quien se encarga de los mandados".
Tal vez estaba tratando de explicar eso porque no era "buena", había
tenido que aceptar la tarea más baja: espiar.
"Así que realmente no creo que encuentres que soy de mucha ayuda..."
Miró con tristeza a Minori-sama, quien dejó escapar un suspiro que sugirió
cuánto la perturbaba todo esto.
"Um, Elvia-san", le dije. Había algo que quería saber, y saber ahora.
"¿Amas a Shinichi-sama?"
"¿Huh? ¡¿A qué viene eso?!” Ella parecía sorprendida. Tal vez no había
esperado que la pregunta viniera de mí.
La ignoré y continué: "¿O lo odias?"
"E-Eso no es..." Agitó las manos frenéticamente y sacudió la cabeza.
"Quiero decir, ¡seguro que no! ¡¿Cómo podría?! ¡Le debo mi vida a
Shinichi-sama! Y él me deja hacer mis dibujos, y me hace dibujar todas
estas cosas interesantes, y...”
Allí se detuvo y miró al suelo por un momento.

"Y-Y... él dijo que era 'moe' a mí, ya ves..." Ella prácticamente estaba
susurrando. "Mis orejas y mi cola... Dijo que no lo molestaban".
Esta palabra que Shinichi-sama usó, moe. En general, significaba "lindo" o
"adorable", y esas no eran cosas que los hombres humanos solían decir
sobre los semihumanos. Todos, no solo en el Sagrado Imperio Eldant, sino
todos en todas partes, sabían que los humanos eran los más hermosos y
los más deseables, y que los semihumanos nunca estarían a su nivel.
Por eso las palabras de Shinichi-sama fueron tan sorprendentes. No solo
a Elvia-san, sino a mí.
"Siento lo mismo", dije, poniendo una mano en mi pecho. “Soy medio elfo
y una criada, pero Shinichi-sama nunca dejó que hubiera una distancia
entre nosotros. Actuó hacia mí igual que actuó hacia todos. Incluso me
enseñó a leer y escribir en japonés. Se puso de mi lado cuando Su
Majestad estaba enojada conmigo. Y también es muy amable con Brooke-
san y Cerise-san... "
Estaba muy feliz y muy orgullosa de estar con un hombre así. Desde que
conocí a Shinichi-sama, mi forma de vida, de hecho, mi vida misma, había
cambiado. Si nunca lo hubiera conocido, habría seguido odiándome por lo
que era, maldiciendo a mi madre y a mi padre por traerme al mundo.
Hubiera sido una forma triste de vivir.
“Tiene que ser Shinichi-sama. Nadie más”, dije, apretando mi mano frente
a mi pecho. "Si no puedo estar al lado de Shinichi-sama, eso será todo
para mí".
"Myusel..." Elvia-san me estaba mirando, desconcertada.
"Voy a ayudar a Shinichi-sama, no importa lo que haga falta. No importa lo
que tenga que hacer. Sé que lo que te pedimos no es justo. Sé que es
como traicionar a tu país, y no te culpo por no querer hacer eso. Pero para
mí, pedirte que hagas esta cosa injusta e imposible... En este momento, es
mi única opción”.
Elvia-san parecía terriblemente angustiada, pero no dijo una palabra.
Fue Minori-sama quien habló en su lugar. “También quiero ayudar a
Shinichi-kun. En parte, es cierto que yo soy responsable de su
desaparición. Pero incluso si no lo hiciera, me gustaría pensar que todavía
habría venido aquí para salvarlo”.
"Minori-sama...”

"La primera vez que nos conocimos, no estaba segura de que

sobreviviríamos", dijo con una sonrisa. “Él fue inmediatamente todo sobre
mi pecho. Fue... un poco de acoso. Pero me he encariñado con él, y no me
refiero solo a que es mi trabajo cuidarlo. Sé cómo puede encontrarse, pero
en realidad tiene un corazón fuerte. Es un otaku, pero sorprendentemente
fuerte”.
Minori-sama levantó la vista hacia el cielo lejano por un segundo y dijo: "La
bondad por sí sola no hace eso por una persona. Tienen que hacerlo por
sí mismos”.
Estaba estupefacta.
Shinichi-sama dijo que Minori-sama también era un "otaku". A diferencia
de mí, ella había nacido y crecido en el mismo mundo que él, hablaba el
mismo idioma y también era otaku. Entonces tal vez ella podría ver cosas
sobre él que yo no podía ver.
Para ser sincero, la idea me hizo sentir un poco de envidia. Celosa.
“Me siento mal por amenazarte con venir. Déjame preguntarte de nuevo.
Elvia, si no odias a Shinichi-kun, como dices, ayúdanos a ayudarlo. Si
terminamos teniendo que luchar contra otros bahairamanos, entonces
Myusel y yo los enfrentaremos y podrás huir. Pero al menos quédate con
nosotros hasta que encontremos a Shinichi-kun.”
Elvia-san miró en silencio al suelo por un momento. Su cola se dejó caer
débilmente.
"Eres una tramposa", dijo suavemente. "Esa no es una forma justa de
preguntar...”
Su cabeza colgó por unos minutos. Entonces de repente
"¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhh! ¡Diablos!"
Se giró hacia el cielo y casi aulló.
"¡Bien! He llegado demasiado lejos para regresar, de todos modos.
¡También podría hacer todo lo que pueda donde estoy!” Su cola se alzó de
nuevo. Fue esa cola, más que sus palabras o incluso su rostro, lo que habló
de sus verdaderos sentimientos. Tal vez ella finalmente se había resuelto.
"Cuando dije que no sé a dónde llevaron a Shinichi-sama, esa fue la
verdad. Los espías de variedades de jardín como yo no están al tanto de

lo que está haciendo. Pero creo que conozco a alguien que podría saber
lo que le sucedió”.
“¿Oh?” Dijo Minori-sama, inclinándose hacia adelante.
Elvia-san asintió con la cabeza. "Es un poco de caminata, ¡pero sígueme!"
"¿Huh? E-Espera, ¿dónde estamos...?”
"¡Oye! ¡Espera, Elvia!”
Elvia-san partió tan rápido que fue como si ni siquiera notara las mochilas
que llevaba. Minori-sama y yo nos apresuramos a alcanzarla.
Puedes elegir tus palabras con el mayor cuidado que desees, controlar tu
expresión con el mayor cuidado posible. Pero a veces, a veces, aún no
puedes evitar que tus verdaderos sentimientos se manifiesten.
Era solo una especie de intuición, pero de alguna manera tuve la sensación
de que Amatena en realidad no creía que las cosas en Bahairam estuvieran
bien como estaban. Cuando ella me habló sobre el pasado y el presente
del país, a veces podía detectar una pizca de vacilación.
Pero Amatena pertenecía al ejército de Bahairamanian. Y no como un
"granjero-miliciano", sino como un soldado profesional adecuado. Tenía
una posición oficial que considerar, y eso significaba mantener la boca
cerrada incluso si las cosas no le parecían del todo bien, o si tenía algún
tipo de problema. Más aún si el país estaba en transición como este,
cualquier tipo de murmullos podría considerarse rebelión o traición.
Y entonces...
“De todos modos”, dijo Amatena, “creo que eso debería darle una
comprensión general de nuestro país. Quiero que termines tu trabajo lo
más rápido posible, pedazo de inmundicia.
No tenía mucho que decir a eso.
Mi trabajo.

En otras palabras, producir algún tipo de trabajo que aumentaría la

solidaridad entre las personas y las haría cada vez más leales al rey.
Piensa en un mito que alabe al Rey de Bahairam a los cielos altos. No tenía
que ser plausible. Ni siquiera tenía que ser coherente. Solo tenía que hacer
el trabajo.
Me senté en silencio. No me gustaba más ahora que antes.
Incluso dejando de lado mi insistencia en el individualismo, ayudar a crear
una historia obviamente defectuosa fue en contra de mi dignidad como
otaku. Sólo había una cosa que hacer.
"Lo siento", dije. Ni siquiera podía encontrar los ojos de Amatena; Miré al
suelo en su lugar. "No quiero hacerlo".
¡Si! ¡Lo dije!
Estaba un poco avergonzado por el temblor en mi voz, pero había logrado
un rechazo claro y directo. Sí, esto era una señal real de cuánto Kanou
Shinichi había crecido. ¡Me había convertido en "El Kanou Shinichi que
puede decir NO"!
¿Y Amatena? Ella simplemente asintió.
"Ya veo."
¿Eh?
"En ese caso, no hay nada que hacer".
"¿Qué...?"
Me sorprendió lo... lista que parecía estar para esto.
Me habían preparado para una pelea, y ahora me sentía tonto. Quizás
Bahairam era un lugar más generoso de lo que parecía. Tal vez si
simplemente explicaste las cosas lógicamente, estaban dispuestos a
aceptarlas. Pero entonces... ¿por qué un país así se dedicaría al
secuestro?
Estaba reflexionando sobre todo esto cuando Amatena dijo: "Tienes que
tomar una decisión".
Ella no tenía expresión. Bueno, por lo general no tenía expresión, pero de
alguna manera daba más miedo de lo habitual.
"Ayuda con el mito", dijo. "O rechazar y matar a Clara".

"............... ¿Eh?"
Por un segundo, estuve totalmente perdido en cuanto a lo que estaba
diciendo. ¿Clara? ¿Cómo encajaba ella en esto?
"Que estas-"
"Si tu repugnante yo no hará lo que te dicen, no tendremos más remedio
que encontrar medios alternativos de persuasión".
“No, espera, espera. Quiero decir, ¿qué tiene que ver Clara con esto? ¿Y
mucho menos matarla?”
La expresión de Amatena (o la falta de una) no cambió. Pensé que Clara
estaba ausente para darme tiempo para pensar. Pero tal vez la retenían en
algún lugar como rehén.
Pero de nuevo: ¿por qué ella? Supongo que obviamente me sentiría
culpable si alguien fuera asesinado en mi cuenta. Pero el objetivo de un
rehén es amenazar a alguien con quien tu objetivo se siente cercano.
Claro, vivir juntos durante diez días me había hecho sentir cierto afecto por
ella. Pero Clara era bahairamaniana. Estaba más cerca del Imperio Eldant,
así que, en todo caso, ella era efectivamente mi enemiga.
Así que aquí estaba Amatena, amenazando con matar a Clara. Pero desde
mi punto de vista, era básicamente un soldado enemigo con un cuchillo en
el cuello de su propia camarada. Simplemente parecía algo... inútil. ¿Por
qué me estaba diciendo esto?
"Mira, simplemente no entiendo...”
"¿Me estás diciendo que simplemente puedes ignorar la muerte de una
mujer a la que has hecho el amor?"
"... ¿Eh?"
"... ¿Hm?"
Los dos compartimos un momento profundamente extraño.
"Todavía no lo entiendo".
"Estoy preguntando, ¿abandonarás a alguien con quien has tenido
relaciones?"
"¡¿Todas las personas bestias usan esa palabra tan casualmente?!",
exclamé.

¡Espera! ¡No es el momento para una lección de vocabulario!

“¿R-Relaciones? Escucha, nosotros... no hemos tenido relaciones... "
"¿Qué?" Preguntó Amatena, sorprendida. Bueno, su expresión (o la falta
de una) todavía no cambió, pero eso hizo que la ceja perturbada se volviera
aún más expresiva. "¿No lo has hecho? Después de diez días viviendo con
ella, ¿no has tenido relaciones? ¿Ni una sola vez?"
"Por el amor de Dios, ¿qué pasa con ustedes y sus parientes?"
¡Escuchar esa palabra tantas veces de tantas chicas iba a destrozar todos
mis sueños! Al menos podría encontrar un bonito eufemismo. Para hacerlo
o para hacer eso o algo. O tal vez podría sonrojarse un poco mientras lo
decía, ¡ese era un punto importante! ¡Muy importante, en mi opinión! ¡Ese
es el argumento de Kanou Shinichi!
...... Está bien, lo siento, olvídalo.
"Cualquiera que sea la palabra que uses, no, ¡no lo hemos hecho!"
"¿Sin relaciones en absoluto...?", Dijo Amatena. Ahí volvieron las cejas.
"No."
"¿No estás... interesado en las mujeres?"
"¡Equivocada!"
"No me digas que alguna enfermedad te impide lograr una erección...”
"¡Trabaja bien, gracias!"
¡Te lo ruego! ¡Detente! ¡No quiero escuchar palabras como esa de alguien
con la cara de Elvia!
A pesar de que su absoluta frialdad la hace totalmente diferente de Elvia
y................................. ... ¿eh?
¿Tal vez esto está realmente bien?
Cuando mi mente comenzó a vagar en las direcciones más perversas,
Amatena levantó la ceja una vez más, esta vez con molestia.
"¿Entonces por qué?"
¿Por qué? ¿Ella quería saber por qué?
Bueno, entonces se lo diría.

Yo diría mi verdad.
"¡Si! ¡Lolita!” ¡Lloré, sosteniendo mi brazo derecho en ángulo como si dijera
Na ** la ciencia es la mejor del mundo! "¡NOOOOO TOCAR!"
Uf. Lo hice.
Eso fue perfecto. Perfecto.
Miré a Amatena con una sonrisa de alivio, pero ella me miró con profunda
sospecha y sin signos de estar convencida.
Um...
"¿Clara no te invitó?" Su tono era helado.
Así fue como se sintió poner tu corazón y tu alma en algo y hacer que se
derrumbara. No me estaba gustando.
"U-Uh, bueno, sí...”
Definitivamente me había "invitado", pero... bueno, no pareces un tejón de
miel... quiero decir, una trampa de miel en el ojo y decir que sí.
Sabes a qué me refiero con trampa de miel, ¿verdad? Una vez leí en
alguna parte que básicamente hay dos trucos que se han utilizado en todas
partes a lo largo de la historia humana para causar la traición de grupos y
países: el dinero y las mujeres.
Entonces, una organización de espías envía una bella agente femenina a
un hombre para convencerlo de la información crucial que tiene. O tal vez
envían a un chico guapo a la esposa de alguien en una posición alta, luego
la secuestran y obtienen la información de esa manera. Esto realmente
sucede. Aunque no sé si es una buena idea, dada la frecuencia con la que
termina en tiroteos... al menos en las películas de Hollywood.
Y eso fue lo que sucedió aquí: Amatena pensó que me había tendido una
trampa en forma de Clara. Ella asumió que en el transcurso de diez días
juntos, naturalmente terminaríamos en un cierto tipo de relación, y estaba
tratando de amenazarme sobre esa base. Probablemente debería haber
consultado con Clara sobre eso. Pero entonces, tal vez Clara realmente
creía que tenía alguna enfermedad que me mataría si intimaba con una
chica, y tenía la impresión de que se había "acercado" a mí con todas las
otras formas que había encontrado para ayudarme.

“Clara era una trampa. La querías cerca de mí para que yo hiciera lo que
me dijiste.”
"Ella es mi subordinada. Sabía que podía confiar en ella.”
"Debería haberlo imaginado". Solté un suspiro.
No le había puesto el dedo encima a Clara, pero admito que me había
hecho feliz por la forma en que se esforzó tanto por hacer las cosas por mí.
Descubrir definitivamente que eso era solo otra parte de la trampa fue un
poco decepcionante. Por supuesto, la cola de Clara ya había revelado que
estaba mucho más cerca de Amatena que de mí.
"¿Pero por qué Clara?"
"¿A qué te refieres con por qué?"
"Es solo... Ya sabes. Ella es tan... joven”.
¿No elegirías normalmente a una mujer mayor deliciosa para tratar de
seducir a alguien? Por supuesto, tenía un punto débil importante para ese
tipo de tipo lolita "tenían-tienen-un-pecho" o "no tenían".
"¿No es ese el tipo que prefieres?"
"¿Yo? Uh, bueno, ya sabes... "
"Había oído que eras uno de los concubinos de la Emperatriz Eldant".
"¿Perdóneme?"
“La Emperatriz Eldant, Petralka. ¿No eres su amante?”
"Uno de sus… ¡¿qué?!"
Éramos muy buenos amigos, ¡claro! Pero definitivamente, definitivamente
no nada que sonara tan, ya sabes... ¡Tan sórdido! ¡Aunque sí, lo pensé!
"Te digo que no es así entre nosotros".
"¿Oh no? Supongo que algunos espías dan mejor información que otros.”
Supongo que sí, cuando consideras a alguien como Elvia una espía. De
todos modos, los rumores y rumores se mezclarán en lo que sea que
informe un agente de inteligencia.
"Entonces estás con alguna agencia de inteligencia, ¿verdad, Amatena?
¿Tratando de averiguar qué está pasando en los países enemigos y todo
eso? ¿Puedo suponer que Clara es parte del mismo grupo?”

"Puede", dijo Amatena, aunque parecía preguntarse por qué estaba

preguntando sobre esto ahora.
"Bueno, mira, sé que es su trabajo, pero ¿enviar a niños como Clara a tener
relaciones...? ¿Con personas que ni siquiera les importan? No creo que
sea algo bueno”.
"En el enjuiciamiento del deber de uno no hay ni bueno ni malo", dijo
Amatena.
Estábamos hablando de un país en el que tener a tu pareja de por vida
elegida por el "padre-gobernante" se consideraba perfectamente normal,
por lo que tal vez no debería sorprenderme si también tuvieran ideas
diferentes sobre la castidad. Sin embargo, una cosa era segura: no pensé
que alguna vez me sentiría como en casa en Bahairam.
"De todos modos". Decidí aprovechar mi ventaja. "Clara es inútil como
presión. No hemos hecho nada juntos, así que no tengo ningún sentimiento
especial por ella. Amenazar con matarla, no me importa. Ustedes pueden
hacer lo que quieran. Si no crees que estoy diciendo la verdad, pregúntale
a ella”.
En un nivel, estas palabras sonaban imposiblemente crueles; mi mejor
naturaleza hizo que me doliera el corazón al hablarles. Pero al mismo
tiempo, si dudaba ahora, no había duda: me harían jefe de la Oficina de
Promoción Padre-Gobernante, por mis objeciones.
Solo mantente fresco. Tengo que fingir que mi conciencia no es mi guía,
aquí.
Cuando se dieran cuenta de que Clara no servía de rehén, verían que no
había necesidad de matarla, ¿verdad?
Eso, al menos, era lo que me decía mientras Amatena permanecía
extrañamente silenciosa.
Obviamente estaba pensando mucho, frunciendo el ceño profundamente.
Finalmente ella dijo: "Ya veo" y asintió.
¡Oh! ¡Entonces ella lo entiende!
Tal vez incluso podría aprovechar este impulso para negociar mi liberación,
o...
“No me dejas otra opción, entonces. Esto es lo único que no quería hacer,
pero... "

"¿Uh...?"
Ella estaba prácticamente inexpresiva. Reflexivamente di un paso atrás,
pero encontré una pared inmediatamente detrás de mí.
Elvia ya había demostrado que era impotente contra una chica hombre lobo
en una misión, aunque asumí que Amatena tenía algo más que la
seducción en este momento.
"Esto es lo único que no quería hacer...”
¿Qué podría ella describir así?
"Um... Uh... Amatena... ¿san?"
Pero por supuesto, ella no respondió.
Solo podía mirar impotente mientras ella se acercaba más y más. Sentí
que las cosas se descontrolaban de la peor manera posible.
Amatena me llevó a un edificio gris en las afueras de la ciudad.
El edificio se encontraba justo en medio de un bosque, como si se estuviera
escondiendo de miradas indiscretas. Era inmenso, probablemente más
grande que algunos castillos. Ciertamente, varias veces el tamaño del
salón donde había visto la boda masiva.
También noté algo más: las paredes tenían ondulaciones suaves. Desde
arriba, tal vez el lugar parecía un estadio de béisbol con cúpula o una pista
de carreras de caballos.
Lo único que no entendí fue para qué era la tierra.
Había lo que parecían ser guardias en la entrada, por lo que probablemente
se trataba de algún tipo de instalación militar. Pero aparte de las personas
publicadas en la puerta, no vi a nadie que pareciera un soldado en ningún
lado. ¿La mayoría de las instalaciones militares no tienen campos de
entrenamiento adjuntos, y no suelen estar repletos de soldados?
"¿Dónde estamos?", Pregunté. "¿Qué es este lugar?" Pero Amatena, que
caminaba un poco delante de mí, no respondió. Ella ni siquiera miró hacia
atrás. ¿Tal vez ella estaba enojada?
Si ella ni siquiera iba a mirar en mi dirección, brevemente consideré
aprovechar el hecho para escapar, pero pronto renuncié a la idea.
Sospeché que Amatena era una corredora mucho más rápida que yo, e

incluso si lograba adelantarme sin ser notado, había soldados justo en la

puerta.
Y así, mi única opción era seguir a Amatena obedientemente.
El pasillo interior era oscuro y totalmente espartano. Las paredes y el piso
estaban hechos de piedra o ladrillo, sin adornos en ninguna parte. La
apariencia robusta pero sombría del lugar sugería una prisión. ¿Me iban a
meter en la cárcel por no escucharlos? ¿Iba a pasar de un lindo y pequeño
piso de un piso con una linda compañera de cuarto a una celda de prisión?
Supongo que eso es lo que sucede cuando desafías al estado en una
dictadura...
"¿Estás planeando encarcelarme?", Le pregunté, pero Amatena, por
supuesto, no respondió.
Sin embargo, me miró por encima del hombro, sin aflojar nunca el paso.
"¿Huh? ¿Qué... qué?”
¿Estaba viendo cosas? ¿O fue lástima la mirada que me dirigió?
Entonces... ¿no en la cárcel? ¿Tenían algo aún peor en mente?
Seguramente no... ¿Ejecución?
Guillotina. Colgado. Pelotón de fusilamiento. Bueno, este mundo no tenía
armas, así que probablemente no sea un pelotón de fusilamiento. Hervir
vivo, tal vez. Enterrado hasta el cuello en el suelo, después de lo cual me
cortarían la cabeza. Atado a un equipo de caballos que me destrozaría.
Había leído sobre eso en alguna parte, ¿no? No, no, no, para.
Maldecí mi propia imaginación, que seguía evocando los peores destinos
posibles para mí.
Mientras todas estas visiones se arremolinaban en mi cerebro, bajamos un
tramo de escaleras y luego bajamos por otro pasillo, hasta que...
"Ahora, mira", dijo Amatena, deteniéndose.
Estábamos en un balcón, o más bien, una especie de pasarela, que
sobresalía de la pared dos pisos más arriba. Debajo había una caída de
cinco metros... hasta un pozo redondo masivo que tenía que tener al
menos cincuenta metros de diámetro.
Esto también estaba hecho de piedra, o tal vez, como el Castillo Eldant,
había sido vaciado de una pieza gigante de roca, porque al igual que ese

edificio, no vi costuras en ninguna parte. Aquí y allá vi tabletas de acero

grabadas con letras que se parecían mucho a los personajes de mi anillo
mágico. Eran algún tipo de dispositivo mágico, pero ¿qué?
No, los detalles no importaban aquí. Lo que era realmente importante era
la cosa sentada en el medio del pozo.
No otra vez, no es cosa. Eso fue...
"¡Un dragón títere...!"
Era un dragón con una punta mágica clavada en su frente, justo como la
que habíamos visto en el set de nuestra película no hace mucho tiempo.
Parecía estar inconsciente o algo así, porque yacía plácidamente en el
suelo, no tanto como crisparse. Sin embargo, el suave ascenso y descenso
de su espalda hizo evidente que el dragón no estaba muerto. Estaba
respirando. Estaba vivo.
"Entonces lo reconoces", dijo Amatena.
"Er... Sí. Hubo uno que se metió en Eldant hace un tiempo...”
Garius había especulado que tal vez era una nueva arma mágica que
Bahairam había desarrollado, y parecía que tenía razón.
"Aquí es donde nuestros militares investigan", dijo Amatena. "Y lo que
hemos estado investigando principalmente últimamente es la tecnología de
títeres".
"¿Entonces puedes controlar dragones con púas como esa?"
"No solo dragones", respondió ella. “Los dragones son seres cuasi-sprites,
por lo que la magia tiene un efecto mínimo sobre ellos. Eso es lo que
necesita un dispositivo de control tan grande. La tecnología aún no es
perfecta, pero su practicidad ha sido ampliamente demostrada. Una forma
de vida menos masiva podría requerir solo una espiga lo suficientemente
pequeña como para sostenerla en la palma de la mano”.
"Una forma de vida menos masiva...”
No me gustaba a dónde iba esto.
Casi cualquier forma de vida sería "menos masiva" en comparación con
ese dragón. Digamos, por ejemplo...
"Un humano", dijo Amatena.

"Espera... N-No puedes decir..." Mis ojos se abrieron de par en par.

"¿Pondrías una punta como esa en la cabeza de un humano?"
"En efecto. Como lo haremos en el tuyo...”
Eso me tomó completamente desprevenido; Solo pude tragar
pesadamente.
De acuerdo, tal vez no completamente desprevenido. Podría haber tenido
una idea. Después de todo, solo tenía sentido que una tecnología como
esta se hiciera cada vez más pequeña, hasta el punto en que podría usarse
en una persona, y luego sería prácticamente un cliché usarla en los amigos
o familiares del protagonista y convertirlos en sus enemigos y oh no, ¿qué
va a hacer?
Correcta. Tal vez no sea el momento de preocuparse.
"¡¿Q-Qué demonios?! ¡De ninguna manera, déjalo!”
"Esta decisión viene de mis superiores".
“¡¿Superiores?! ¡Pensé que todos los que eran más bajos que el padre
gobernante debían ser iguales!”
¡Cálmate, yo! Este no era el momento para comentarios inteligentes.
Pero calmarse fue mucho más fácil decirlo que hacerlo.
"Usted trajo esto sobre su propio asco al negarse a acceder a nuestras
demandas", dijo Amatena. "Pero no pude obligarme a hacerte una
marioneta mientras eras ignorante. Te traje aquí para que lo entiendas.”
"¡Creo que tu amabilidad está un poco fuera de lugar!", Respondí, pero la
expresión de Amatena todavía no cambió.
Argh... no sabía cuán grande era un pico para uso humano, pero si iban a
golpearlo en mi cabeza, supuse que cualquier tamaño era demasiado
grande. Presumiblemente, ser un títere significaba que ya no podría mover
mi propio cuerpo, pero ¿qué pasaría con mi conciencia? ¿Desaparecería
mientras me controlaran como una máquina o un zombi?
¡Diablos, eso significaba que iba a morir!
............
............Oye.
Espera un segundo.

“Si-Si me haces algo, ¿cómo puedo hacer tu historia o mito o lo que sea?
Mi conciencia va a desaparecer, ¿verdad? ¡A una muñeca no se le ocurre
una historia! "
"Me temo que ya no es el problema", dijo Amatena. "Hemos renunciado a
eso".
"¡¿Qué, ya?!"
“Sin embargo, invertimos una cierta cantidad de tiempo y recursos para
traerte aquí. No podemos simplemente descartar eso. Necesitamos algún
tipo de retorno de nuestra inversión”.
"P-Pero yo-"
“Por lo que escuché”, dijo Amatena, entrecerrando los ojos hacia mí,
“vienes de otro mundo. Llegaste a Eldant a través de una especie de
"agujero".
"......... Uh, bueno...”
¡¿Y qué?!
Espera. ¿Bahairam siquiera sabía eso?
Supongo que no era exactamente información de alto secreto, pero aun
así...
“Considera esto como una prueba de si nuestra magia de títeres es efectiva
en los extranjeros. Será bueno saberlo a largo plazo. Porque después de
conquistar el Imperio Eldant, Kanou Shinichi, tengo que asumir que nuestro
próximo objetivo será a través de ese portal”.
"¡¿Qué?!"
¡Tenían ambiciones territoriales que habrían hecho sonrojar a Toyotomi
Hideyoshi!
Mientras estaba allí en estado de shock, dos soldados se acercaron a mí y
me tomaron de los brazos.
"Llévenlo."
"¡Señora!"
Los soldados comenzaron a arrastrarme.
¡Whoa, espera! ¿Lo vas a hacer ahora?

“Llévalo a los Solitary Seven en la segunda torre. Kanou Shinichi, cuando

se establezca una fecha para tu conversión, te lo haré saber. Hasta
entonces, prepárate.”
“Oh, entonces no ahora. Uf. Eso es un alivio. ... ¡Espera, no, no lo es!" Me
agité lo mejor que pude, dado que mis brazos estaban atrapados. "¡Lo
haré! ¡Escribiré tu historia o tu mito o tu poema épico o lo que quieras! "
No estaba orgulloso de mí mismo, pero a veces la vida no te deja con
ninguna opción. Estaba desesperado por no morir. Y también para no tener
un pico mágico golpeado en mi cráneo que me convertiría en una muñeca
inconsciente, que era tan bueno como morir.
Amatena me miró mientras luchaba. ¿Había funcionado mi patética
mendicidad?
"Lo que se ha decidido no puede ser revocado".
"¡Oh, demoni….!"
Traté de resistir con todas mis fuerzas, pero todo el poder de un ex guardia
de seguridad del hogar no se compara mucho con dos soldados
profesionales. Pateé mis piernas como un niño haciendo berrinche
mientras los soldados me llevaban por el pasillo.
Mientras me veía ir, escuché a Amatena murmurar: "Quería evitar este
resultado".
“¡Bueno, todavía puedes! ¡Hacer algo!"
Pero ella solo miró al suelo.
Maldición, ¿por qué tenía que ser tan rápida para renunciar a todo?
"¡Nooo! ¡No quiero ninguna cirugía! ¡Solo cinco minutos con un bisturí
láser! ¡En realidad, eso también sería bastante horrible!”
Había dejado de tener sentido incluso para mí. Por alguna razón, "Dona
Dona" comenzó a correr sin pensar en mi mente mientras los soldados me
arrastraban impotente por el largo corredor.

Elvia-san nos llevó a un lugar llamado Borfoi, la "ciudad oriental". Llegamos

cuando la puesta de sol estaba volviendo todo rojo.
En el Sagrado Imperio Eldant, las calles estarían ocupadas a esta hora del
día con personas que regresan de sus trabajos y comerciantes que
intentan hacer una última venta para el día. El humo y los aromas
amistosos saldrían de las estufas de todas las casas donde la gente hacía
la cena.
Pero en Borfoi, nada de eso estaba sucediendo.
Sí, vimos gente y olimos la cena cocinando. Pero todo fue... casi
terriblemente homogéneo. Todas las personas vestían ropas idénticas y
caminaban en líneas rectas y silenciosas, volviendo a casas que parecían
todas iguales. El humo se elevaba de todas las casas, pero en lugar de
todos los diferentes olores de diferentes platos mezclados, un aroma
simple y picante nos pinchaba la nariz, como si cada casa estuviera
haciendo exactamente la misma comida.
No había duda de que la ciudad era atractiva y ordenada. Pero fue... un
poco demasiado ordenado.
Y...
“Entonces,” dijo Minori-sama.
Elvia-san nos estaba guiando a través de una serie de calles secundarias
donde no tendríamos que preocuparnos por quién podría vernos. Ella dijo
que había vivido en Borfoi por un tiempo y que conocía el lugar bastante
bien.
"¿Crees que esta es la ciudad, Elvia?"
"Sí", ella asintió. “La más joven de mis hermanas mayores vive aquí. Está
con el ejército y le está yendo bastante bien para su edad. Apuesto a que
ella podría saber algo sobre Shinichi-sama.”
"La hermana mayor es un soldado y la menor es una espía", dijo Minori-
sama. "¿Toda tu familia es militar?"
"Bueno, sí, más o menos". Elvia-san se rascó la mejilla como avergonzada.
“Mi padre y mi madre también son soldados. Y mis hermanas son muy
importantes. Soy... como la única que no ha hecho nada de sí misma”.
"¿Qué quieres decir?"

"Simplemente no estoy tan interesada en la fama o las artes marciales ni

nada. Si puedo dibujar mis imágenes, entonces estoy feliz”.
Pero, al parecer, se consideraba que las actividades artísticas no tenían
ningún valor práctico en Bahairam y, por lo tanto, carecían de valor.
"No importa cuán bueno sea con mi arte", dijo Elvia-san, "no me alimentará
ni a mí ni a mi familia".
Era comprensible, entonces, que se sintiera incómoda en un hogar militar.
“¿Es por eso que te convertiste en espía, Elvia?” Preguntó Minori-sama.
"Sí, más o menos".
El espionaje le permitiría dibujar como parte de su trabajo. Y evitaría que
la compararan con sus hermanos o sus padres. Y entonces...
"¡Oh! Ahí está,” dijo Elvia-san, deteniéndose y señalando una casa en
particular. Incluso con su señalamiento, no podía distinguirlo de todas las
otras casas.
"Parece que acaba de regresar", dijo Elvia-san.
Es cierto, si entrecerraba los ojos, podría distinguir algunas luces a través
de la ventana, y lo que parecía ser una persona moviéndose dentro.
"Iré a conversar con ella".
“Espera, Elvia,” dijo Minori-sama. Sacó algún tipo de palito de su bolso.
"Toma esto. Adjúntatelo a ti misma así.” Mientras hablaba, pegó el palo al
pecho de Elvia-san.
"¿Qué es?"
“Solo un pequeño objeto mágico para ti. Ahí está todo listo. Le dio a Elvia-
san una palmadita en el pecho. "¡Buena suerte!"
"Seguro. Ustedes dos solo esperen aquí donde nadie pueda verlos.”
Luego, dejando su equipaje con nosotros, se dirigió hacia la casa de su
hermana mayor. Me preguntaba si sería capaz de averiguar de ella dónde
estaba Shinichi-sama. De hecho, me preguntaba si su hermana mayor lo
sabía.
Solté un suspiro ansioso.

“Myusel,” dijo Minori-sama. Tenía algo en la mano: su sumart fone. Ella

estaba pasando el dedo por su superficie. "Perfecto. Lo tengo.” Ella asintió
para sí misma.
"¿Qué es esto...?"
"Esa cosa con forma de pluma de diez centavos que pegué en el pecho de
Elvia nos está enviando un video sobre los años, así que... Er, supongo
que esto no tiene ningún sentido para ti. El punto es que es magia lo que
nos permite ver lo que está sucediendo dentro”. Luego me mostró el fone.
Estaba mostrando "video", una especie de imagen en movimiento muy
similar a lo que podíamos ver en la televisión y en la computadora. Elvia-
san acababa de conocer a su hermana. Vimos a una chica con el pelo
blanco.
“Wow,” silbó Minori-sama. Ella debe haber estado sorprendida. Sé que lo
estaba.
En el sumart fone había alguien que se parecía exactamente a Elvia-san.
La única diferencia era que su cabello era tan blanco como el de una
persona mayor. Ese simple contraste la hacía parecer una persona
completamente diferente, pero su rostro era idéntico al de Elvia-san.
Se sintió muy extraño.
“Lo siento, Myusel,” dijo Minori-sama. "Mi anillo mágico no funcionará así.
¿Crees que podrías interpretar?”
"Oh sí."
Los anillos solo podían comunicar significado cuando dos personas
hablaban cara a cara. Debido a que todo se estaba enviando por el fone,
Minori-sama ya no podía entender lo que decía Elvia-san.
“Te pregunto, Elvia. ¿Cuál es el significado y la razón por la que vienes
aquí?”
"Umm...”
En mi mente, luché para dar sentido a lo que estaba escuchando. El idioma
de Bahairam era básicamente el mismo que el de Eldant, o al menos,
surgió de la misma fuente. Pero su acento era extremadamente pesado, y
las reglas de conjugación eran diferentes. Combinado con algunas formas
inusuales de hablar, descubrí que no podía traducirlo a Eldant ordenado.

Todo lo que pude hacer fue hacer un seguimiento de lo que significaba

todo, y todo salió sonando extrañamente rígido.
“Aun no has terminado tu misión, todavía. ¿Porque porque?"
“De acuerdo, de acuerdo. Pero, pero, yo...”
Elvia-san sonaba un poco abrumada. Su "misión" debe haber sido su
espionaje. Se tambaleó un poco más antes de decir:
"No me atrevo. Hermana mayor Ama... "Ella pareció recoger su resolución,
luego dijo:" Te pregunto. Kanou Shinichi. ¿Conoces este nombre, sí, no?”
Incluso yo lo entendí bien. Ella preguntaba muy directamente.
Pero su hermana no respondió. Su rostro, que parecía en gran parte
inexpresivo, se torció en una expresión de ira. Con lo cual quiero decir que
ella frunció una ceja.


"¿Por qué? Preguntaré, ¿por qué sabes el nombre de Kanou Shinichi?”

La imagen se sacudió. Debe haber sido Elvia-san haciendo una mueca de
sorpresa.
"Hermana mayor Ama, preguntaré, ¿tienes alguna conexión con Shinichi-
sama?"
La hermana de Elvia-san parecía crecer hasta que todo lo que pudimos ver
fue su pecho. Elvia-san debe haberse acercado a ella. No podíamos ver la
cara de "Ama", pero aún podíamos escucharla.
“Preguntaré,” dijo Elvia-san. "Hermana mayor Ama, ¿sabes dónde está
Shinichi-sama, sí, no?"
"‘¿Shinichi-sama "?" El tono de su hermana cambió a uno de sospecha.
"Preguntaré, ¿de qué tipo es la conexión entre tú y Kanou Shinichi?"
"Le debo mi... mi vida a él, probablemente".
"¿Tu vida?"
“Mi estado, que soy un espía, fue expuesto. ¡Pero Shinichi-sama, él, él me
protegió! ”
"Tú..." Los ojos de su hermana se entrecerraron. "No puede ser".
"Voy a preguntar. Hermana mayor Ama, ¿estás conectado con el secuestro
de Shinichi-sama? "
“Si lo estoy, ¿Qué harás? Pregunto."
"¡Buscaré el regreso de Shinichi-sama! ¡De vuelta a nosotros!"
"‘Regresar "." Shinichi-sama "." Nosotros”. Su hermana habló suavemente,
una ceja levantada.
“Hermana mayor Ama, lo busco. Shinichi-sama, él...”
“¡Que estupidez!”, Gritó su hermana. “¡No logras nada buena para nada!
¡Usted avergüenza a la familia Harneiman, también a toda la familia de
Bahairam! ¡Fracasas en completar tu misión y te conviertes en el perro
guardián de una nación enemiga! ¡Tal fracaso es difícil de perdonar!”
Ella sonaba inmensamente enojada. Me encontré retrocediendo, a pesar
de que había un sumart fone entre ella y yo.

“Me niego a que esto sea traición. Yo, yo, solo busco el rescate de Shinichi-
sama... "
“¡Yo llamaría a eso traición! ¡¿Te vuelves contra el padre-gobernante?! ”
"YO..."
La voz de Elvia-san se pellizcó.
“¡Una tonta y una tonta es lo que eres! ¡Examina tus propias palabras! Lo
que absorbiste en Eldant no lo sé, pero...”
De repente, La Hermana Mayor sacó una espada.
Lo había sacado tan rápido que ni siquiera la había visto moverse. Dudaba
que Minori-sama lo viera tampoco. Fue como si lo hubiéramos escuchado
después de que sucedió.
“¡No puedo soportar tener esta mancha de vida sobre nosotros por más
tiempo! ¡Juicio sobre ti, te ejecutaré yo misma!”
Asumí que la punta de la espada estaba en el cuello de Elvia-san. Un
movimiento descuidado podría cortarle la garganta.
Pero Elvia-san tembló como si estuviera tratando de contener algo, luego
gritó: "¡Shinichi-sama! ¡A él le debo la vida! ¡Me ha aceptado! ¿Está mal
pagar esta deuda?”
Al otro extremo de la espada extendida, su hermana parecía sorprendida.
Las dos hermanas se miraron la una a la otra, un silencio doloroso
descendió entre ellas.
Finalmente, para mi sorpresa, fue la hermana de Elvia-san quien miró hacia
otro lado, suspirando con cansancio. Ella volvió su espada a su vaina.
Luego dijo: "Ya es demasiado tarde".
"¿Qué...?"
"Ya se decidió por Kanou Shinichi, será sometido a la espiga de títeres".
"¿Espiga de marionetas...?"
Inmediatamente pensé en el dragón que había atacado nuestro set de
película. Shinichi-sama y Minori-sama lo llamaron un "dragón títere".
Dijeron que podría ser una nueva arma mágica que Bahairam había
desarrollado.

¿Iban a poner un pincho en la cabeza de Shinichi-sama como lo habían

hecho con ese dragón? La sola idea me mareó de miedo.
"Es un clavo mágico que cuando se inserta en la cabeza de un ser vivo los
convierte en una marioneta".
“¡Hermana mayor Ama! ¿Harías algo así con Shinichi-sama? ¿Porque
porque?"
"Porque él no escucha ni acepta nuestras demandas", dijo rotundamente
la hermana de Elvia-san. “Las habilidades como la suya no se encuentran
en nuestra nación. Nuestros espías en Eldant informan que sus talentos
son bastante valiosos. Serán útiles para aumentar la lealtad de los hijos al
padre-gobernante.”
Elvia-san no habló.
“Pero esa criatura vil nos ha rechazado. Exigió tiempo y dinero para traerlo
aquí, y no nos dejarán con las manos vacías. Solo buscamos un beneficio
práctico. Por lo tanto, servirá como sujeto de prueba para una espiga de
tamaño humano... "
"¡Para! ¡Detente! ¡Absolutamente, absolutamente! ¡Shinichi-sama me salvó
la vida! Hermana mayor Ama, ¿te vengarás de quien salvó a tu hermana
menor?”
"Silencio, traidora". Los ojos de su hermana se estrecharon de nuevo. "¿O
has tenido relaciones con Kanou Shinichi?"
"YO-"
Incluso me di cuenta de que Elvia-san estaba desanimada por esto.
“Escuché que en Eldant, el socio para las relaciones es muy valorado. Tu
tiempo como espía ha sido demasiado tiempo, ¿has sido envenenada por
las costumbres de Eldant? ¡Tonta! ¡Idiota! ¡Estar tan apegado al
compañero de tus relaciones que te volverías contra el padre-gobernante,
contra la familia de Bahairam! ¡Tonta de tontos!”
"¿Familia? ¿Qué familia?”
La voz de Elvia-san había adquirido un tono oscuro. Amargo, casi odioso.
Agresivo. Era la primera vez que escuchaba a la chica normalmente alegre
sonar de esa manera, y me sacudió.

“¿Somos tú y yo familia, hermana mayor Ama, sí, no?! ¡Somos hermanas

de sangre, nacidas de los mismos padres! ¿Pero un bueno para nada no
es parte de la familia?”
“Fuiste tú quien primero traicionó, quien primero buscó sacarme de esta
familia de Bahairam...”
"¡Fuiste tú quien primero me abandonó!"
Por primera vez, su hermana parecía perdida por las palabras.
“¡Shinichi-sama me aceptó, esto nunca lo olvidaré! Sin conexión de sangre,
sin comunidad o familia, ¡aunque yo era de otra raza! ¡Él me aceptó y
reconoció por lo que era, y no lo olvidaré! Mi corazón, mi cuerpo, mi propio
yo, él...”
La hermana de Elvia-san todavía no respondió.
“Pregúntame ahora quién es mi familia, y responderé: no es Bahairam, ni
tú, la hermana mayor Ama. ¡Es Shinichi-sama y su familia, Myusel, Minori-
sama, Brooke, Cerise! ¡Todos los que me han aceptado!”
La cara de su hermana se torció en lo que parecía dolor, tal vez incluso
arrepentimiento.
"YO-"
"Vete", escupió su hermana.
"YO-"
“¡Vete, te lo ordeno!” ¡Hubo un portazo! mientras golpeaba la pared. "¡Vete!
¡Eres una buena para nada! ¡Traidora! Muy bien ahora niego tus palabras.
¡No eres mi hermana ni mi familia! ¡Eres mi enemiga!"
Hubo una pausa muy larga y tensa por parte de Elvia-san. "Bien entendido,
pero, la ubicación de Shinichi-sama-"
"¡Fuera! ¡Incluso en este momento! Mi torcida que una vez fue mi hermana,
una vez familia, te mostraré un último acto de misericordia. ¡Qué no te corte
aquí con mi espada, considera que es mi último acto de misericordia!”
"¡Hermana mayor Ama...!"
¡Tú mancha inútil en el nombre de Harneiman! ¡Ni siquiera me agacho para
matarte para que dejes aquí un cadáver! ¡Corre hacia tu Imperio Eldant,
corre hasta el borde del mundo! ¡Corre como la vergüenza que eres!”

La hermana de Elvia-san parecía volverse más pequeña. Elvia-san debe

haberse echado atrás. Fue solo un paso y, sin embargo, para mí parecía
un abismo infranqueable entre ellas.
"¡Ahora vete!"
La forma de la hermana desapareció de la parte superior del fémur de
Minori-sama. Elvia-san debe haberse dado la vuelta. Pudimos ver la
imagen en el fone temblando violentamente...
"Bueno, eso podría haber ido mejor", murmuró Minori-sama.
Lo siguiente que vimos fue a Elvia-san saliendo de la casa de su hermana
a toda velocidad.
Día dos de mi encarcelamiento.

Me mantenían en una prisión estereotipada: piso de piedra, paredes y
techo, y una puerta de rejas de hierro. La celda era de diez alfombras
sorprendentemente espaciosas, pero tal vez eso solo tenía sentido. Esta
fue una instalación para desarrollar su magia títere. En realidad no tenía
células "solitarias". Lo que tenía eran jaulas para observar a los animales
en los que estaban probando, no fue diseñado pensando en los humanos.
El espacio tenía que ser lo suficientemente grande como para albergar a
un sujeto de prueba grande.
Una inspección minuciosa reveló varias aberturas redondas cerca del piso,
cada una aproximadamente del tamaño de un puño, a través de la cual
podría salir la suciedad. Cuando el piso de la jaula comenzó a cubrirse de
excremento, simplemente pudieron enjuagar todo con agua.
La única iluminación provenía de una sola lámpara al otro lado de la puerta;
El lugar estaba oscuro. El único mueble en mi habitación era un cofre de
madera aparentemente destinado a servir como una cama improvisada.
Bueno, había otra cosa: un cilindro del tamaño de un cubo contra la pared
del fondo.
"¿Ahora qué hago?" Suspiré, sentándome en la cama.

Inicialmente me preocupaba que el encarcelamiento pudiera significar ser

puesto en esposas o restricciones, pero parecía que era libre de moverme
por mi celda.
"Una fuga... es más fácil decirlo que hacerlo, supongo".
Aprendí dos hechizos de Myusel, así que no estaba completamente
indefenso a pesar de que estaba desarmado. Pero el hechizo de viento Tifu
Murottsu, la única magia ofensiva que conocía, no podía usarse varias
veces en rápida sucesión, o al menos, un principiante como yo no era
capaz de hacerlo. Además, no se sabía qué podría pasar si lo usaba en un
espacio confinado como este. Ciertamente no tendría ningún efecto en los
barrotes de la puerta, y si rebotara en los duros muros de piedra podría
terminar golpeado por mi propia magia. ¿Y qué estúpido sería eso?
Sin embargo, había algo más. Si entrecerraba los ojos y pasaba los dedos
por la pared al lado de mi cama, podía distinguir pequeñas depresiones y
golpes en la superficie. Obviamente no era solo decoración, y se sentía
vagamente como los personajes inscritos en mi anillo mágico. Lo más
probable era que el muro en sí estuviera encantado.
Recordé a Petralka diciendo que tenía hechizos resistentes a la magia en
su propio cuerpo, por lo que quizás Bahairam podría hacer lo mismo. Algo
para neutralizar la magia parecía especialmente importante cuando
trabajabas con criaturas como los dragones, que podían absorber el poder
mágico y controlar los sprites de fuego.
En pocas palabras, cualquier plan para salir de esta cárcel usando Tifu
Murottsu había terminado antes de que comenzara.
En las películas, las personas tienen todo tipo de formas de salir de la
cárcel: fingir enfermedades, esconderse detrás de las paredes, emboscar
al guardia que trae su comida. En cuanto a mí, no conocía el diseño del
edificio, por lo que incluso si lograra salir de mi celda, no tendría idea de
cómo escapar.
No te detengas. El pensamiento negativo hace que incluso lo posible
parezca imposible. Y cuando la alternativa es simplemente sentarse hasta
que te quedes con un pico clavado en la cabeza, convirtiéndote en un
cadáver vivo, vale la pena intentarlo incluso con un plan condenado.
"¿Qué diablos es esto, de todos modos?"

Tendría que usar cada cosa a mi disposición. Con eso en mente, me

acerqué al único otro objeto en la habitación además de mi cama: el cubo
cilíndrico. Parecía ser de cerámica. Y sí, era del tamaño de un cubo, con
dos asas. Tenía una tapa en la parte superior.
Preguntándome qué era, abrí la tapa... y mi nariz fue asaltada
inmediatamente por un hedor desagradable.
Cerré un ojo mientras miraba dentro, pero estaba vacío. Eso debe significar
que el olor había empapado el material del contenedor...
"Espera... ¡¿Esto es un orinal?!"
¿Se suponía que este era mi baño?
Rápidamente volví a cerrar la tapa, suspirando por lo patético que era todo.
En ese momento...
"Shinichi".
Escuché a alguien llamarme por los barrotes. No tuve que mirar para saber
quién era. Solo había dos personas en este país que sabían mi nombre:
Clara y Amatena. Si no usaban -sama, entonces tenía que ser
Amatena............ Pero espera. ¿No solía llamarme por mi nombre
completo?
"Quiero hablar con... No. Déjame empezar de nuevo".
Amatena estaba al otro lado de los barrotes. Ella apartó la vista, incapaz
de mirarme a los ojos.
"¿Eh?" ¿Cuál fue la historia con eso?”
En mi incapacidad de comprender, bajé brevemente mi mirada al suelo,
donde vi el orinal.
"¡Wh-Whoa, espera! ¡No es así! ¡No estaba tratando de... hacer mi negocio
ni nada! "
Salté lo más lejos que pude del orinal. Amatena todavía no me estaba
mirando. ¿Por qué podía hablar de "relaciones" con una cara
completamente seria, pero le daba vergüenza entrar a alguien que
respondía al llamado de la naturaleza? No es que estuviera ansioso por
ser visto así ni nada.
"Pensé, nunca había visto uno de estos antes, me pregunto qué es.
Asique..."

"Ya veo". Se volvió hacia mí otra vez, el malentendido resuelto. De pie al

otro lado de las barras, Amatena parecía... cansada, de alguna manera.
Sin embargo, su expresión era tan plana como siempre, así que tal vez
solo estaba imaginando cosas.
"Hay algo que quiero preguntarte, inmundicia". Se recostó contra la pared
y se cruzó de brazos.
"¿Preguntar? ¿Yo?"
En la medida en que me concedía una suspensión de la ejecución (con lo
que quiero decir que no había venido a decirme que habían fijado una fecha
para mi cirugía), me sentí un poco aliviado. Por supuesto, ella siempre me
podía llevar a que me hicieran el procedimiento en el momento en que
terminamos de hablar...
"¿Conoces a Elvia?"
"...... ¿Eh?" De todos los posibles temas que pensé que posiblemente
podría plantear, este no era el que esperaba. "¿Por qué la nombras ahora?"
"¿No quieres hablar de ella?"
"No me importa, es solo que...”
¿Qué era lo que realmente estaba tratando de preguntar? Tal vez
realmente eran hermanas, y ella estaba tratando de descubrir cómo le iba
a Elvia en su trabajo de espionaje. (Lamentablemente, la respuesta fue,
bastante mal).
"Ella es la más joven de nuestras hermanas", dijo Amatena. "¿Es cierto que
le salvaste la vida?"
"¿Eh?" (De nuevo.) "Er, ah, sí... Sí, supongo que se podría decir eso".
Asentí sin comprometerme.
A decir verdad, acababa de ser tan triste para mi primera bestia en ese
momento, sin mencionar que detestaba perder las habilidades artísticas de
Elvia, que realmente no pensaba en mí como en salvarle la vida. Más bien,
resultó que hice lo mejor para mí, que también resultó ser lo mejor para
que no la ejecutaran.
Le expliqué todo esto a Amatena.

"¿Qué es este moe?"

"Oh, eh... en el idioma de mi país, significa... como" lindo "o" muy atractivo”.
Elvia es muy alegre y extrovertida, y súper adorable. De acuerdo, a veces
se adelanta a sí misma, pero incluso eso es encantador”.
Amatena no dijo nada.
"Además, ella es muy buena dibujando. Funcionó muy bien para mí, porque
era realmente conveniente para mi trabajo, tener un artista capaz cerca.
Solo pensé que sería una mierda dejarla ir y ejecutarla...”
"¿Y ese fue tu razonamiento?" Amatena sacudió la cabeza como si dijera
que no tenía ningún sentido. "Deberías saber, Elvia es-"
"Ahora que lo pienso, cuando te vi por primera vez, Amatena, pensé que
tal vez Elvia había cambiado el color de su cabello de alguna manera".
Las dos realmente, realmente se parecían.
Fue entonces cuando me di cuenta de lo que acababa de decir.
Elvia es linda. Elvia y Amatena se parecen. Por lo tanto, Amatena es linda.
¿Qué estaba diciendo? ¿Qué le estaba diciendo a alguien que pertenecía
a un grupo de personas que querían golpear un pico mágico en mi cabeza?
¿Qué, esperaba que Amatena se sonrojara y se riera como si estuviéramos
en un juego de chicas, y luego me ayudara a escapar? Quiero decir, eso
sería extremadamente conveniente en este momento, pero incluso yo no
era lo suficientemente estúpido como para pensar que podría suceder. Ni
siquiera recuerdo haber tropezado con ninguna bandera para Amatena.
"Ya veo", dijo Amatena después de un momento. ¿Era solo yo, o su voz y
expresión se suavizaban ligeramente? ¿Estaba feliz de escucharme hablar
amablemente sobre su hermana?
“Ustedes dos... Tú y Elvia. Realmente son las imágenes escupidas del
otro”.
"Por supuesto que sí", dijo Amatena. "Somos trillizas".
"¡¿Trillizas?!"
"¿Por qué es tan sorprendente?" Amatena me miró inquisitivamente por un
momento antes de darse cuenta de lo que estaba pasando y dijo: "Ah, ya
veo. Entre los humanos, es normal tener un solo hijo a la vez, ¿no es así?”

"¿Huh? ¿Los gemelos y trillizos son más comunes para los hombres lobo?”
"Sería bastante inusual tener solo un cachorro en una camada".
"UH Huh."
Ahora que lo pensaba, los perros eran un símbolo de nacimiento seguro
exactamente porque tendían a tener partos fáciles a pesar de tener muchas
crías. Era perfectamente típico que los perros y los gatos tuvieran varias
crías a la vez, y los hombres lobo parecían ser más perros o lobos que
humanos.
“Entonces te hiciste soldado, Amatena. ¿Qué hay de la tercera hija?”
“Mi hermana mayor, Jijilea, también es soldado. Como son mi madre y mi
padre. Hay muchos en mi familia. Se podría decir que la única que no se
convirtió en un soldado de verdad fue esa pequeña tonta”. Susurró,
dolorida.
Oopsie. Tenía que decir que no podía imaginarme a Elvia como un
soldado.
“Ella fue un fracaso. Se convirtió en espía con la esperanza de escapar de
ese hecho”.
Así que eso fue todo: dos hermanas distinguidas y exitosas, y la fracasada.
Eso no podría haber sido divertido para Elvia. Gracias a mi vida con
Shizuki, sabía lo que era tener una hermana infinitamente dotada. No me
había emocionado.
Tenías a los que se convirtieron en soldados y se quedaron alrededor de
Bahairam. Luego tenías al que se convirtió en un espía infiltrándose en
territorio enemigo. Sí, ambos eran técnicamente militares, pero tenían
posiciones muy diferentes.
¿Amatena había estado evitando deliberadamente el tema de Elvia hasta
ahora? ¿Tal vez ella no había querido siquiera reconocer que existía el
"fracaso"? Amatena hablaba muy en serio, y tener una hermana menor que
no pudiera piratearlo no le habría hecho ningún favor mientras intentaba
salir adelante en el mundo...
Amatena estaba murmurando para sí misma ahora. "No puedo creer esto.
Ella siempre fue tan suave e indecisa, solo seguía a todos los demás. Y
luego elegiría los momentos más extraños para mostrar resolución, para

rebelarse... Cuando se convirtió en espía, lo hizo sin siquiera hablar con el

resto de nosotros... "
No sentí como si hubiera escuchado enojo u odio hacia Elvia en su voz.
Era casi como... "cuanto más desesperados se vuelven, más lindos son".
Una especie de resignación cariñosa. Por otra parte, tal vez solo estaba
leyendo demasiado sobre eso.
No estaba completamente seguro, pero pensé que tal vez, por primera vez,
estaba escuchando cómo se sentía realmente Amatena.
"Ella es familia. Ella es tu hermana Por supuesto que te preocuparías por
ella”.
"En efecto. Pero esa idiota...”
Luego se detuvo fría. Ella frunció; Era obvio que había dicho más de lo que
pretendía.
Finalmente dejó escapar un solo suspiro y se levantó de la pared.
"He estado aquí más tiempo de lo que quería decir". Dio un paso más cerca
de la puerta con barrotes de hierro, un paso más cerca de mí, y dijo: "Por
cierto, tu pinchazo se ha establecido para mañana".
"¡¿Guh?!"
¿Qué pasaba con la emboscada informativa?
¡Pensé que estábamos llegando a un buen lugar! ¡Devuélveme mis
expectativas! Espera un segundo... ¿Mañana? ¿Cómo el día después de
este? ¡¿Cómo, Ashita?! Ella estaba bromeando, ¿verdad?
"Eso fue lo que vine a decirte en primer lugar", dijo Amatena. Luego se
apartó de mí y se marchó, sus pasos golpearon apresuradamente el suelo
de piedra.
"Pero mañana es-"
Miré mi reloj. Eran las seis de la tarde. No sabía exactamente cuándo
tenían en mente mañana, pero una cosa era segura: en aproximadamente
las próximas treinta horas, tendría un pico mágico en mi cerebro.
Lo único que definitivamente no tenía era salir de esta situación.
"Oh hombre..."

Ahora, por fin, la desesperación se apoderó de mí. Incapaz de soportarlo,

me tiré sobre la cama. No sabía exactamente cómo era la magia de
Bahairam, pero sospechaba que un pinchazo en tu cabeza y que te
convirtieran en zombi probablemente se ubicaría justo debajo de morir en
el Fun-O-Meter. Sin mencionar que supuse que esto significaba no volver
a Eldant o Japón por mí.
Creo que normalmente, una persona pensaría en sus padres o amantes
en un momento como este. Pero lo que vi fueron los rostros de todos mis
amigos en Eldant.
Myusel Minori-san Petralka Elvia Brooke Cereza. Garius Primer ministro
Zahar. Todos en la escuela. Incluso Matoba-san...
Me preguntaba qué estaban haciendo en ese momento. Me gustaba
pensar que estaban preocupados cuando de repente desaparecí. (Bueno...
tal vez no tanto Matoba-san).
Miré el techo desnudo de mi celda y dejé escapar un suspiro desconsolado.
La ciudad ya estaba cubierta en la oscuridad de la noche. Podíamos ver el
resplandor azulado de las lámparas accionadas por sprites aquí y allá, pero
no eran muy brillantes, dejando franjas de la ciudad en la oscuridad. De
alguna manera, la panoplia de sombras que se extendía sobre la fría
ciudad gris hizo que pareciera que había una serie de pozos sin fondo
esperando que cayéramos. Era terriblemente inquietante.
Quizás solo me sentía así porque estábamos en Bahairam. O quizás...
"Ella está aquí", susurró Minori-sama. Estábamos justo al lado de la casa

de la hermana mayor de Elvia-san, Amatena-san. Estábamos en un
callejón desierto, escondiéndonos en las sombras. Elvia-san estuvo con
nosotros, por supuesto. "Justo como lo planeamos".
“Entendido,” dijo Elvia-san, señalando a Minori-sama.
Amatena-san ya se había negado a decirle a Elvia-san sobre la ubicación
de Shinichi-sama una vez, pero no teníamos nada más que seguir. Sin
tener idea de dónde estaba o cuándo podrían estar planeando poner la
punta mágica en él, nuestra única opción era obtener la información de
Amatena-san.
Por la fuerza, si es necesario.

Minori-sama y Elvia-san salieron juntas de las sombras.

Se detuvieron justo en frente de Amatena-san, que estaba bajando la calle
hacia su casa.
"¡Hermana mayor Ama!"
Amatena-san no pareció en absoluto sorprendida, solo levantó una ceja
ante Elvia-san. "¿Quién es esta mujer? ¿Un soldado Eldant?”
"Técnicamente no soy del Imperio Eldant", dijo Minori-sama encogiéndose
de hombros, "pero supongo que se podría decir que estoy en la misma
posición que Elvia".
"Hmph. Otro que no es de este mundo.”
"Exacto. Así que ustedes sí saben sobre eso. Minori-sama sonaba un poco
decepcionado. "Parece que hay fugas a la izquierda, a la derecha y al
centro... ¡Arrgh!"
“¡Hermana mayor Ama! Quiero que nos digas dónde está Shinichi-sama.”
"Estás perdiendo el aliento", escupió Amatena-san. “No tengo intención de
decirle nada a una traidora. Deberías estar agradecida de que aún no le
haya informado a mis superiores”.
"¿Entonces realmente no me lo dirás?", Preguntó Elvia-san, sin poder mirar
a su hermana. "¿No ayudarás, pase lo que pase?"
“Te dije que dejaras de perder el aliento. ¿Qué crees que puedes hacer si
me niego?”
Sospeché que Amatena-san tenía alguna idea. Tenía que asumir que
había una razón para que Elvia-san volviera a mostrarse. Incluso desde la
distancia, podía sentir que el aire entre Amatena-san, Minori-sama y Elvia-
san se tensaba.
"¡Fuerza, entonces!"
Minori-sama y Elvia-san se movieron casi simultáneamente. Minori-sama
soltó una rotonda giratoria dirigida al abdomen de Amatena-san. Se movió
tan rápido que pensé que podía oírlo zumbar en el aire, pero Amatena-san
lo bloqueó con su brazo izquierdo levantado.
"¡Tú-!"
Con su otra mano, Amatena-san fue por la espada en su cadera.

Pero Elvia-san venía hacia ella desde la dirección opuesta. Su puño

parecía estar dirigido directamente a la cara de su hermana.
"¡Yaaaahh!"
Pero ella cambió de dirección a mitad del golpe, empujando su puño hacia
el estómago. Sin embargo, Amatena-san debe haber visto venir el truco,
porque levantó una pierna y envió a Elvia-san a volar con una patada.
"¡Uf!" Elvia-san jadeó.
Para mi sorpresa, sin embargo, Amatena-san hizo una mueca y gruñó,
"¿Hrm?"
Fue porque ya no tenía una espada. Elvia-san lo había agarrado con las
cuatro extremidades cuando salió volando, alejándolo. Ese había sido su
objetivo todo el tiempo.
"¡Ja!"
"¡Hrr-!"
Minori-sama ya se estaba moviendo en su próximo ataque. Su puño voló a
una velocidad tremenda, pero Amatena-san la bloqueó con la palma de
una mano.
Minori-sama soltó otro golpe, y otro y otro. Puños, pies, codos. Pero
Amatena-san desvió o bloqueó a la mayoría de ellos, y Minori-sama nunca
logró golpearla en ningún lugar importante. Sí, ella recibió algunos golpes
de mirada, pero nada decisivo.
¡Ella es tan fuerte!
Estaba segura de que Minori-sama no se estaba conteniendo, sin
embargo, no podía vencer a Amatena-san. ¡Y esta era la mujer que había
ido mano a mano con un dragón!
Quizás viendo que no iba a llegar a ninguna parte, Minori-sama retrocedió
e hizo un poco de distancia.
Un humano no podría ser mejor un hombre lobo cuando se trata de
resistencia y pura fuerza bruta. Si la pelea duraba demasiado, sin duda era
Minori-sama quien se quedaría sin fuerzas primero.
"Elvia es previsiblemente decepcionante, pero tú..." Amatena-san dijo,
entrecerrando los ojos. “Eres un luchador talentoso. ¿Quién eres tú?"

"No tengo que responder eso", dijo Minori-sama. “Para el caso, ¿quién
eres? Asumí que serías una imbécil como Elvia...”
“Te animo a que no me subestimes. Me da vergüenza incluso oírme a mí
misma en compararme con ese fracaso buena para nada”.
"¡Eeyaaahhh!"
Elvia-san arrojó la espada a un lado y se lanzó hacia Amatena-san una vez
más. Ella cerró la distancia inmediatamente, sus extremidades se agitaban
salvajemente con la esperanza de asestar un golpe a su hermana. La
violencia fue increíble; ella usó toda la fuerza y agilidad de un hombre lobo.
Si ella me hubiera estado atacando, probablemente habría caído de un solo
golpe. Cada golpe tenía el poder de matar, y se precipitaron casi
demasiado rápido para que el ojo lo siguiera.
Pero, por supuesto, nada de eso importaba si los golpes no aterrizaban.
Amatena-san bloqueó y aprobó cada uno de los ataques de Elvia-san sin
parecer nerviosa. Era abundantemente obvio que Elvia-san sola nunca
golpearía a Amatena-san. La diferencia en sus habilidades era
simplemente demasiado grande.
"Patético, como siempre", dijo. "¡Haah!"
Ella envió a Elvia-san a volar de nuevo con otra patada.
Elvia-san estaba en el aire, y luego, un instante después, también lo estaba
Amatena-san, saltando hacia arriba.
"¡¿Hrk-?!" Minori-sama, que de alguna manera se había puesto detrás de
Amatena-san, recorrió el lugar donde la otra mujer había estado parada
hasta un instante antes.
Su defensa era impenetrable; Era como si tuviera ojos en la parte posterior
de la cabeza. Lo que era más, Amatena-san se retorció en el aire para que
cayera detrás de Minori-sama. Un acróbata entrenado no podría haberlo
hecho mejor. Minori-sama se volvió y golpeó, pero esto también lo bloqueó
Amatena-san. De hecho, increíblemente, agarró el puño en el aire, dejando
los movimientos de Minori-sama restringidos.
"¡Hiyah!" Con una exhalación aguda, Amatena-san lanzó un puñetazo
directamente al plexo solar de Minori-sama.

"¡Hrgh!" Minori-sama intentó esquivar el golpe, pero con su mano derecha

inmovilizada, no tuvo oportunidad. Ella no pudo prepararse; Con un
pequeño jadeo doloroso, cayó sobre una rodilla.
Amatena-san era realmente poderosa. Muy poderosa.
Casi incapaz de creer lo que estaba viendo, sentí un temblor recorrer mi
cuerpo. Sabíamos que una mujer lobo como Amatena-san iba a ser
físicamente poderoso y muy rápido. Por eso habíamos decidido que Minori-
sama y Elvia-san la atacaran juntas. Pero nunca habíamos contado con
que Amatena-san fuera tan tremendamente hábil en el combate
desarmado.
Ahora Elvia-san yacía en el suelo, y Minori-sama estaba sobre una rodilla.
Sin embargo, Amatena-san no parecía que estuviera planeando acabar
con ninguna de las dos. Lo más probable es que sintiera que había hecho
su punto: incluso cuando la atacaron simultáneamente, ella los había
superado casi sin esfuerzo. Esto no fue una muestra de orgullo; Fue un
hecho simple.
Pero también era, no una apertura, exactamente; pero justo lo que estaba
buscando.
Ya había cantado mi hechizo. Por eso me había quedado en las sombras.
Ahora, cuando Minori-sama y Elvia-san no estaban involucradas en el
combate con Amatena-san, era mi mejor oportunidad.
"¡Tifu Murottsu!"
En el momento en que se activó mi magia, vi a Amatena-san hacer un
movimiento como si estuviera lanzando algo.
Me di cuenta casi de inmediato de que era un objeto con hoja que brillaba
a la luz de la luna. Casi antes de que pudiera pensar, mi mano estaba
apuntando hacia él. Los sprites de viento reunidos en mi palma fueron
hacia donde apuntaban mis dedos, en este caso, volando y derribando el
pequeño objeto.
Fue un shuriken. Se alejó de mí y se enterró en el suelo cercano.
Sorprendida, comencé a entonar un segundo hechizo. Si usaste el mismo
hechizo dos veces seguidas, podrías ejecutarlo la segunda vez con menos
de la mitad del encantamiento necesario para el—
Pero en el siguiente instante, Amatena-san llenó mi visión.

"¡Eeek!"
Sentí que me agarraban del cuello y giraban en un amplio arco antes de
golpearme contra el suelo. Me había caído de espaldas y la fuerza del
impacto me quitó el aire de los pulmones. Por una fracción de segundo, me
sentí desmayar por el dolor.
Solté una tos jadeante.
"¡Myusel!" Escuché que Minori-sama me llamaba, pero no tenía los medios
para devolver la llamada. Más específicamente, estaba tosiendo tanto que
no podía formar palabras.
"¡Ugah!"
Mi situación empeoró cuando Amatena-san siguió envolviendo mi cuello
en un estrangulador.
Era lo natural y realmente necesario hacer contra un enemigo que podía
usar magia. Primero, les impediste respirar para que no pudieran conjurar
ningún hechizo. El uso de lanzamientos y estrangulamientos en lugar de
golpes te permitió atacar y al mismo tiempo evitar el uso de magia.
"¡Aggghh!" Agarré el brazo de Amatena-san, tratando de sacarlo de mi
cuello, pero mi fuerza física no era rival para la de un hombre lobo. Mi visión
comenzaba a ponerse roja cuando, de repente, Elvia-san saltó hacia
Amatena-san por detrás.
“¡Deja ir a Myusel!”
Amatena-san, sin embargo, mantuvo su mano derecha envuelta alrededor
de mi cuello mientras ejecutaba media vuelta y usaba la izquierda para
agarrar la cara de Elvia-san. El puño de Elvia-san nunca llegó a Amatena-
san; en cambio, la hermana mayor usó su agarre en la cabeza de la menor
para obligarla a caer al suelo a mi lado.
"¡Ee-eyowowowow!"
Parecía que le dolía menos ir al suelo que los dedos que le clavaban las
mejillas y le agarraban el pelo. Elvia-san luchó y agitó sus extremidades,
pero Amatena-san nunca la soltó.
“Ríndete, Elvia,” dijo Amatena-san, su rostro impasible.
"No lo haré", Elvia-san logró jadear. "¡No lo haré! ¡No lo haré! ¡Nunca lo
haré!"

"Elvia"
"¡Nunca, nunca, nunca lo haré!", Gritó, sacudiéndose salvajemente.
"¡Idiota! ¿Es este hombre tan importante para ti?” Pensé que había un
toque de molestia en su voz. "Es él tan-"
"¡Sí!" Elvia-san finalmente detuvo su retorcimiento ineficaz, en lugar de
colocar ambas manos en la mano que Amatena-san estaba usando para
sostener su rostro, como si pensara que simplemente podría aplastarla.
"Hrrgh...”
Puede que no hayan tenido las mismas habilidades, pero todavía eran
ambos hombres lobo. En una simple competencia de fuerza, podrían ser
casi iguales. El dolor comenzó a torcer la expresión de Amatena-san.
“¡Myusel! ¡Elvia!”
Tan pronto como escuchamos el grito, un destello cegador nos cubrió.
Amatena-san había vuelto a mirar el sonido de la voz; la luz probablemente
la había cegado.
Aun así, no aflojó su agarre en mi garganta o en la cara de Elvia-san.
"¡Hiyah!"
Fue entonces cuando vi a Minori-sama, una sombra contra la luz, enviar
una patada voladora a Amatena-san.
Inmediatamente levantó las manos en un intento de defensa, pero no pudo
adoptar su postura lo suficientemente rápido, por lo que el golpe de Minori-
sama la envió volando.
"¡Urgh!"
Hubo un golpe seco mientras rodaba por el suelo. Tal vez la patada no
había sido lo suficientemente cuadrada, porque se levantó de inmediato; a
pesar de que todavía estaba sobre una rodilla, veo que estaba lista para
pelear.
"Myusel, Elvia, ¿están bien?", Preguntó Minori-sama, acercándose a
nosotras. Todavía estaba concentrada en Amatena-san, y había una
especie de palo negro corto en su mano derecha. Parecía que este palo
había producido la luz.

“Dios,” dijo Minori-sama, “Estaba preocupada allí. No pude usar mi pistola.

Qué bueno que traje mi SureFire de casa, ¿eh?”
"¿Huh? Huh...”
Obviamente pensó que debería estar de acuerdo con ella, pero realmente
no sabía a qué estaba de acuerdo. En cualquier caso, Elvia-san ya se había
puesto de pie y me echó una mano cuando me levanté del suelo.
Amatena-san, mientras tanto, parecía desconfiar de la luz; ella adoptó una
postura de lucha pero no hizo grandes movimientos. Sin embargo, ahora
que sabíamos exactamente lo fuerte que era, tampoco podíamos
permitirnos atacarla indiscriminadamente. Podría intentar cantar magia,
pero sin el elemento sorpresa, Amatena-san simplemente me esquivaría.
Fue entonces cuando, para mi sorpresa, Minori-sama se volvió de repente,
agitando la mano con su "SureFire". Hubo un chirrido de metal y luego un
destello.
Dos shuriken se enterraron en la pared del edificio más cercano. Eran el
mismo tipo de arma que Amatena-san había usado antes, pero esta vez
estaba segura de que no se había movido. Parecían haber venido de la
dirección opuesta.
"Hermana mayor, ¿estás bien?", Preguntó alguien mientras salían de la
oscuridad. Esta nueva persona era una chica tigre con un uniforme militar
muy parecido al de Amatena-san. Sin embargo, parecía ser unos diez años
más joven, y su cabello y pelaje eran de color marrón claro.
"Clara", dijo Amatena-san en voz baja. Ese debe haber sido el nombre de
la niña.
Clara sacó dos estrellas arrojadizas más de su manga y se preparó para
usarlas.
“Esto se ve mal,” susurró Minori-sama.
Esto todavía nos hizo tres contra dos. Pero si Clara era tan poderosa como
Amatena-san, entonces nuestra ventaja numérica no sería una gran
ventaja en absoluto.
De hecho, pude escuchar pasos corriendo desde todas las direcciones.
Parecía que el sonido de nuestra lucha había atraído a otras personas en
el área. No había forma de que ganáramos ahora. Parecía que nos habían
atrapado.

"Creo que es hora de un retiro táctico", dijo Minori-sama suavemente.

"Myusel, Elvia, tomen mis manos".
Luego sacó una especie de cilindro de su bolso, sacó una cosa con forma
de aguja y arrojó el cilindro al suelo.
¿Qué demonios estaba haciendo ella?
Tan pronto como la pregunta cruzó por mi mente, un humo espeso
comenzó a salir del cilindro.
"¡¿Qué?!" exclamó Amatena-san.
El humo blanco llenó de inmediato el estrecho callejón, hasta que ni
siquiera pude ver mi mano frente a mi cara. Sospeché que nuestros
oponentes tampoco podían ver nada. Minori-sama tiró de mí y Elvia-san de
la mano por la calle.
"¡Hermana!" Escuché a Clara gritar a través del humo.
"¡No los persigas, Clara!", Dijo Amatena-san. “Necesito que contactes con
el centro de detención de instalaciones de investigación. Infórmeles que
los bandidos pueden estar apuntando a Kanou Shinichi. ¡Diles que no le
quiten los ojos de encima hasta que esté en el centro de tratamiento para
su conversión mañana al mediodía! "
"¡Señora!"
Podía escuchar el golpeteo de los pies de Clara mientras corría en otra
dirección.
"Minori-sama," susurré.
"Sí, lo tengo", dijo. Ni siquiera podía ver su cara por el humo, pero podía
escuchar la sonrisa en su voz. "A pesar de que nos golpeó, tienes una
hermana muy buena, Elvia".
"¿Huh?" Elvia-san sonaba genuinamente sorprendida. "¿Agradable? ¿Qué
tiene de bueno ella? "
“La escuchaste, ¿verdad? Shinichi-kun está en un centro de detención de
instalaciones de investigación. Lo trasladarán de allí a algún tipo de centro
de tratamiento al mediodía de mañana”.
"Oh..."

La caída en la voz de Elvia-san hizo que pareciera que probablemente no

se había dado cuenta de lo que estaba haciendo su hermana.
"Eh, supongo que podría ser información falsa para atraernos a una
trampa", dijo Minori-sama.
"Si lo fuera, ella era terriblemente obvia al respecto".
Nos alejamos del humo y soltamos las manos de Minori-sama. Luego
partimos corriendo por la ciudad.
Había luces encendidas en varios edificios, tal vez personas alertadas por
la conmoción. Vimos varias caras mirándonos, pero nadie parecía moverse
para detenernos. Supongo que un poco de gritos y golpes no sería
suficiente para que todos sepan que somos enemigos.
“Elvia, ¿qué piensas sobre esto?” Preguntó Minori-sama mientras
corríamos. Lo que ella quiso decir fue: ¿podríamos confiar en lo que
Amatena-san nos había dicho?
"¿P-Por qué me preguntas?"
"De nosotras tres, tú eres quien la conoce mejor, ¿verdad?"
"Sí, supongo que sí, pero..." Elvia-san sonaba vacilante. Eso fue
comprensible. Habían estado luchando, real y verdaderamente en
combate, hace solo unos momentos. ¿Cómo sabrías si confiar en alguien
así?
Seguimos corriendo en silencio.
Resoplando y resoplando, miré hacia atrás, pero no parecía que alguien
viniera detrás de nosotros desde la dirección de la ciudad. Finalmente
llegamos a la sombra de una gran roca que se encuentra en el desierto a
las afueras de la ciudad, y finalmente pudimos parar y recuperar el aliento.
“Sobre la hermana mayor Ama,” dijo Elvia-san de repente. "No creo que
esté mintiendo. Si ella solo iba a mentir, ¿por qué decirnos algo? ¿O por
qué no esperar hasta que nos hayamos ido a decirle a esa chica qué
hacer?”
"Buenos puntos. Estoy de acuerdo,” dijo Minori-sama, una sonrisa
dividiendo su rostro. Luego le dio unas palmaditas en la espalda a Elvia-
san como para consolarla.

Capítulo IV: El Gran Rescate De Shinichi
Pensé que ahora tenía una idea de cómo los prisioneros condenados
deben sentirse esperando a ser ejecutados.
Tenía la boca tan seca que apenas podía tragar. Estuve despierto toda la
noche, pero no tenía nada que hacer (ni siquiera tenía utensilios de
escritura para dejar un testamento), así que simplemente tiré y eche en mi
cama, mirando inquietamente mi reloj.
"Hora de irse."
Los soldados aparecieron y me sacaron de mi celda. Amatena no era una
de ellas. Parecía que finalmente había decidido lavarse las manos.
Me condujeron por el pasillo de piedra, luego salieron del edificio. Desde el
exterior, la instalación de investigación parecía una sola estructura enorme,
pero en realidad (aparentemente), la valla que rodeaba toda el área
ocultaba varios edificios más. Había estado en "Almacenamiento", el
edificio donde guardaban sujetos para experimentos, y ahora me estaban
guiando a "Procedimientos". El hecho de que pude ver el cielo una vez más
antes de que hicieran su trabajo se sintió como una pequeña bendición.
Por otra parte, si iba a intentar algo, esta era literalmente mi última
oportunidad.
Había cinco soldados transportándome: tres delante de mí, dos detrás.
Todos llevaban espadas. ¿Por qué no hay lanzas o hachas? Tal vez
porque asumieron que tendrían que luchar dentro de la prisión. Realmente
no hizo la diferencia; para un laico de combate completo como yo, el
enemigo podría estar armado con espadas, lanzas o dagas. Todavía me
iban a apuñalar.
Así que ir cara a cara con ellos estaba fuera. Pensé en sí podría usar en
ellos el Tifu Murottsu. Si de alguna manera pudiera colocar a los dos detrás
de mí frente a mí, y luego golpearlos a todos a la vez, podría derribarlos.
Por supuesto, siempre existía el peligro de que me notaran cantando, pero
si tuviera cuidado de hacerlo suavemente y con movimientos mínimos de
los labios, podría lograrlo.
"Tú", dijo uno de los soldados detrás de mí, dándome un golpe en la parte
posterior de la cabeza. "Mantén el paso."

"S-Sí, lo siento".
Mierda. ¿Por qué me disculpé reflexivamente? Estúpido yo.
¡No! ¡Ese no es el punto!
Esto fue muy, muy malo. Si cantaba un hechizo mágico, había una clara
posibilidad de que me cortaran en el acto.
Una profunda desesperación comenzó a pesar sobre mí.
"Ahh...”
De repente descubrí que no podía dejar de imaginarme momentos del
pasado, recuerdos que pasaron por mi mente. ¿Era esto lo que querían
decir cuando decían que tu vida pasa ante tus ojos?
Pensé en mi vida en Japón, con mis padres y mi hermana. Recordé que mi
vieja amiga me había rechazado brutalmente cuando le confesé mis
sentimientos. Recordé encerrarme en mi habitación y no hacer nada más
que jugar juegos en línea, ver anime, participar en varios tableros de
mensajes principales, (etc., etc., etc.).
Recordé haber sido engañado cuando traté de solicitar un trabajo en
Akihabara.
Y entonces...
Recordé el primer día que vine a Eldant. Conociendo a Myusel y Minori-
san. Cuánto ver a Brooke me sorprendió. La forma en que Petralka me
engañó cuando nos conocimos. El día que Elvia vino a nuestra casa.
Recordé haber creado la escuela, ser capturado por terroristas, conocer a
Myusel y Petralka cada vez mejor, ser atacado por las Fuerzas Especiales
de JSDF, el torneo de fútbol, la producción de películas...
Sí. Todo había sido muy divertido. Sentí que mi vida realmente había
florecido después de venir a este mundo. Y siempre fue gracias a Myusel
y los demás, gracias a la gente de este mundo.
"Myusel...”
Me habían aceptado. Un inútil otaku de un guardia de seguridad del hogar
había acudido a ellos y se habían preocupado por mí.
Realmente desearía haber podido ver a todos por última vez.

Y luego estaban todos los animes y manga que aún no habían terminado
sus historias... Sabes, recordé haber visto un artículo en una revista sobre
la segunda temporada de Rental ☆ Madoka. Me preguntaba qué decidieron
hacer sobre los actores de voz para los nuevos personajes. Además, se
suponía que el juego de computadora Step on my Corpse 2 estaba en
producción. ¿Saldría alguna vez? Y tenía ese kit modelo Kamen Rapper
Weathered que nunca había construido...
Y así sucesivamente.
Parecía que era y seguiría siendo un otaku de causa perdida hasta el final.
Pero en ese momento, uno de los soldados notó algo. No sé quién lo vio
primero, pero uno de ellos dijo: "H-Hey, ¿qué es eso?"
Todos levantaron la vista. Casi inconscientemente, también estiré el cuello.
Y luego, casi ahogado por lo que vi en lo alto.
El sol estaba tan brillante que me dolía mirar al cielo, pero aun así, podía
decir de inmediato lo que estaba viendo.
Justo en el medio del interminable campo azul había una sombra flotando.
Una sombra que se acercaba cada segundo...
"¡Dragón!", Gritaron los soldados, el pánico arrastrándose en sus voces.
Tenían razón: definitivamente era un dragón. Y ninguno de los pequeños
wyverns domesticados que usaron los Eldant Dragon Knights. Esto era
varias veces, varias docenas de veces, más grande, un monstruo tan
violento y peligroso que cada país estaba perpetuamente alerta por ellos.
Un verdadero dragón
Los dragones, que se dice que son parte sprite, eran los depredadores del
ápice absoluto de este mundo, ¡y este estaba viniendo hacia mí!
"Correr-"
"No, consigue el dragón títere"
"¡Llama a un mago!"
El terror del dragón había sembrado una confusión evidente entre los
soldados. ¡Esta fue mi oportunidad de escapar! O lo habría sido, excepto
que no había una razón particular por la que un dragón distinguiera entre
mí y los soldados, lo que significa que probablemente todavía estaba hecho
para todos los demás...

"¡Shinichi-samaaaa!"
"... ¿Uh...?"
No me importa decir que estaba bastante sorprendido en ese momento.
Tal vez, pensé, la depresión se había vuelto tan aguda que comenzaba a
tener alucinaciones auditivas. Porque estaba seguro de que acababa de
escuchar una voz que no podía escuchar, la voz de una niña cuya cara
sonriente podía imaginar en mi mente incluso en ese momento.
"¡Shinichi-sama!"
"No puede ser...”
Miré de nuevo al dragón, que en realidad parecía estar disminuyendo a
medida que se acercaba inexorablemente.
Vi una cara asomándose por detrás. Una cara que conocía.
"¡Shinichi-sama!"
No estaba vestida con su familiar uniforme de mucama, pero no importaba.
La persona que montaba en la espalda de ese dragón, extendiendo sus
brazos hacia mí y llamando mi nombre desesperadamente, estaba...
"¡¿Myusel?!"
"¡He venido a salvarte, Maestro!"
Al mirarla enmarcada contra el sol y el cielo azul, sentí una oleada de
felicidad, asombro y una serie de otras emociones que ni siquiera podía
expresar con palabras, tantos sentimientos a la vez que pensé que podría
estallar en lágrimas.
Con sprites de viento apoyando sus alas, nuestro Faldra aterrizó en el patio
de la instalación (fue un poco apretujado). Liberados, los sprites salieron
volando en todas direcciones, casi como si un Tifu Murottsu a gran escala
hubiera sido liberado. No fue suficiente derribar a los soldados de
Bahairamanian cercanos, pero ciertamente funcionó para confundirlos.

Luego estaba Minori-sama, que saltó de la espalda de Faldra gritando y

con algo llamado "em-nyne" en cada mano.
"¡Yaaaaaaaahhhhhh!"
Hubo una serie de grietas en los oídos, y nubes de polvo volaron desde el
suelo delante de nosotros. Tenía que asumir que los soldados enemigos
no sabían cuán poderosos eran los em-nynes, pero el ruido combinado con
los pequeños agujeros que aparecían en la tierra debió haberlos alertado
de que se trataba de un arma a la par de la magia ofensiva como Terab
Redonas, El hechizo del rayo. Rápidamente se lanzaron a la cubierta de
un edificio cercano.
“¡Myusel!” Llamó Minori-sama.
"¡Correcto!"
Tal como lo habíamos planeado, Minori-sama había llamado la atención de
los soldados de Bahairaman; ahora salté del Faldra, llevando el arma que
me había prestado Minori-sama.
Mi objetivo, por supuesto, era Shinichi-sama.
Estaba arrodillado en el suelo, probablemente lo habían atrapado en el
torbellino al igual que los soldados. Fui corriendo hacia él.
"¡Shinichi-sama!"
No respondió de inmediato, sino que solo me miró distante. Probablemente
estaba demasiado sorprendido para las palabras. Finalmente, pareció
volver a sí mismo; parpadeó varias veces y luego gritó: "¡Myusel! ¡Detrás
de ti!"
Me di la vuelta y vi a un soldado de Bahairamanian, su espada bajando
hacia mí. Instintivamente levanté el arma que Minori-sama me había dado.
¡Sonido metálico! Bloqueó la espada que venía hacia mí. Pero...
"Ergh...”
"¡Tú-!"
El soldado estaba forzando su espada hacia mí. Simplemente no tenía la
fuerza física para resistir a un soldado entrenado. Me encontré forzado a
una rodilla...

Entonces, de repente, la presión de arriba desapareció. De hecho, el

soldado dio vueltas en el aire, luego golpeó el suelo lo suficientemente
fuerte como para dejarlo inconsciente. Lo miré con asombro.
"¡Shinichi-sama!"
Elvia-san, sin embargo, pasó corriendo a mi lado. Ella debe haber
derribado al soldado desde atrás.
"¡¿Estás bien?!" Apenas disminuyó la velocidad, pero se estrelló contra
Shinichi-sama mientras lo abrazaba.
"¿Gurgh?"
"¡Shinichi-sama!" Me apresuré hacia él también. "¡¿Estás herido?! ¡¿Estás
bien?!"
Era realmente Shinichi-sama parado frente a mí. Me alegró verlo por
primera vez en mucho tiempo. Me alegré trascendentemente de que
estuviera a salvo. Sentía que si no tenía cuidado, podría romper el llanto
en ese mismo momento.
"No estoy... herido, pero..." Shinichi-sama gimió. "Creo que podría...
ahogarme hasta la muerte...”
"¡Elvia-san!"
"¡Oh! ¡L-Lo siento! ”Ella rápidamente lo dejó ir. Estaba tan feliz como yo al
reunirme con él, y atrapada en el momento, había olvidado su propia
fuerza.
“¿Pero por qué demonios están todos ustedes aquí?” Preguntó Shinichi-
sama.
“¡Para rescatarte, por supuesto!” Dijo Elvia-san. "¡La hermana mayor Ama
nos dijo dónde estarías!"
"‘¿Hermana mayor Ama ’?"
"Se refiere a Amatena-san", aclaré.
"¿Amatena te lo dijo?", Preguntó. "Y ese dragón-"
"Oh, Loek-sama y Romilda-sama-"
Elvia-san se levantó de un salto. “¡Detalles más tarde! ¡Corre ahora!
Tenemos que... ¡¿eh?!" Ella no había terminado su oración antes de que
algo la golpeara de lado.

"¡Elvia!"
"¡¿Elvia-san?!"
Vimos en estado de shock como Elvia-san rebotó una vez en el suelo y
rodó varias veces más. Lo que sea que la haya golpeado debe haber sido
muy poderoso.
Tenía que ser algún tipo de...
“¡Magia!” Gritó Shinichi-sama.
Sí: pudimos ver a varios de los soldados de Bahairamanian asomándose
desde las sombras del edificio cercano. Los dos más cercanos a nosotros
tenían una mano levantada. Supuse que habían usado algo como Tifu
Murottsu en Elvia-san. Sus uniformes se veían sutilmente diferentes a los
de los otros soldados; probablemente eran fuerzas especiales entrenadas
en el uso de la magia, o tal vez eran un par de magos que realizaban
investigaciones en esta instalación.
"Elvia, ¿estás bien?"
"¡Yo... estoy bien!" Elvia-san se levantó de un salto. "¡No es nada si no es
duro!" Ella corrió hacia nosotros.
Los magos, sin embargo, parecían estar cantando otro hechizo. No es el
mismo, pero algo probablemente mucho más poderoso. Vi sprites de fuego
que se acumulaban en la palma extendida del hombre más cercano a
nosotros, formando un rayo brillante.
No podía imaginarme incluso a Elvia-san enfrentando un golpe directo de
algo así. Para el caso, había una buena posibilidad de que Shinichi-sama
y yo también estuviéramos atrapados en la explosión. Y entonces...
"¿Huh? ¡Hey, Myusel!”
"¡Elvia-san, cuida a Shinichi-sama!"
"¡Entendido!"
Vi a Elvia-san agarrar a Shinichi-sama en sus brazos, mientras daba un
paso adelante para cubrirlos. Elvia-san podría llevar a Shinichi-sama, pero
en cuanto a mí, yo llevaba el arma que Minori-sama me había prestado.
En un abrir y cerrar de ojos, el globo de sprites de fuego se había vuelto
tan brillante que era difícil de ver. No había duda de que el mago pretendía
quemarnos a todos vivos.

Fue aterrador. Pero todo lo que podía hacer era confiar.

El mago lanzó el rayo de luz. No lo esquivé, sino que corrí precipitadamente
hacia él.
¡Su Majestad!
La imagen de Petralka un Eldant III pasó por mi mente. Con mi boca,
estaba entonando un hechizo...
¡BOOM!
A cada lado de mí, hubo un ruido ensordecedor.

Pero en cuanto a mí mismo
"¡¿Qué?!"
"¿Un escudo mágico?"
"No, eso fue...”
Los soldados de Bahairamanian estaban completamente confundidos.
Llevaba el vestido de batalla que Su Majestad me había entregado. El tinte
estaba hecho de un mineral raro que conducía magia fácilmente; la capa
estaba tejida con hilos de metal que incorporaban el mismo mineral, y todo
estaba hecho con hechizos de amplificación mágica que los magos
especialistas habían dedicado mucho tiempo y esfuerzo a desarrollar.
Esta fue la magia que hizo que la magia fuera mucho más poderosa.
Su Majestad llevaba largas inscripciones antimagia en su honrado cuerpo.
Tales encantos de resistencia repelerían los ataques mágicos hasta cierto
punto, pero tenían sus límites. Un hechizo que excediera la capacidad de
los hechizos para defenderla los superaría, al igual que un arma ordinaria
podría atravesar un escudo si fuera lo suficientemente fuerte.
Y en el campo de batalla, tales magias poderosas no eran infrecuentes.
Por eso Su Majestad tenía esta "magia amplificadora de magia" en su
vestido de batalla. Cuando se combina con los hechizos de resistencia en
su cuerpo, la capa puede resistir incluso los ataques de un arma de asedio
mágico, y mucho menos una tropa de soldados individuales.

Obviamente no tenía tales hechizos de resistencia, así que en lugar de eso

canté mi Tifu Murottsu habitual. Sin embargo, la capa la aumentó a
docenas de veces su poder habitual, lo suficientemente fuerte como para
que cuando mi hechizo chocara con el haz de luz, causó una explosión e
incluso desvió el ataque hacia un lado.
"¡Solo detenla ya!" Los soldados parecían haberse dado cuenta de que la
magia no me detendría, por lo que desenvainaron sus espadas.
"Señores", grité, "si no quieren morir, entonces ¡apártense!"
Para ilustrar mi punto, hice uso del arma que Minori-sama me había
prestado.
El "Mini-mee Em Too For Nyne Squad Auto-matic Weapon".
El tubo de acero casi saltó de mis manos, cilindros metálicos dorados
salieron volando junto con una serie de rugidos. Los cilindros se estrellaron
contra el suelo alrededor de los pies de los soldados de Bahairaman,
dejando huellas en la tierra y levantando rocas calientes y afiladas.
Los soldados casi tropezaron cuando se detuvieron.
El poder de esta arma japonesa era asombroso. Era tremendamente
pesado, tanto que había sido un desafío para mí incluso llevarlo conmigo,
pero ahora vi lo valioso que había sido ese esfuerzo. Por mi cuenta, había
detenido a un grupo de una docena de soldados de Bahairaman.
"¡Duele ser golpeado con esto!" Grité. "¡Duele mucho! ¡Morirás!"
Agarrando el Mini-mee, que todavía escupía fuego, corrí hacia adelante.
Los soldados tuvieron la amabilidad de preocuparse por esto.
"¡Ay!"
"¡Quedarse atrás!"
"¡Eeyyargh!"
Las pequeñas escamas de fuego habían golpeado a algunos de los
soldados en la pierna. Gritaron y se doblaron, pero los ignoré y continué mi
avance.


Descubrí que Elvia-san, que todavía llevaba a Shinichi-sama, había corrido

a mi lado.
"¡Ahora es nuestra oportunidad!", Grité.
"¡Entendido!"
Usamos el Mini-mee para mantener a raya a los soldados, dirigiéndonos
hacia donde el Faldra se defendía con grandes barridos de cola y alas.
“¡Sensei!” Loek-sama y Romilda-sama sonreían desde la parte posterior
del monstruo. "¿Estás bien, Sensei?"
“¿Loek?” Dijo Shinichi-sama. ¿Romilda? ¿Tú también estás aquí? Espera,
este no puede ser el dragón que usamos para...”
"¡UH Huh!"
“¡Hicimos un poco de trabajo al respecto, así que ahora se mueve con
magia!” Loek-sama y Romilda-sama parecían muy satisfechos de sí
mismos.
Luego dijeron: "¡Es tan loco que podría funcionar!"
"¡¿Qué sois, los científicos en algún acorazado espacial?!" exigió Shinichi-
sama. Pero parecía realmente conmovido mientras murmuraba: "Supongo
que te he contagiado".
“¡Basta de charlar, todos suban!” Minori-sama gritó, corriendo hacia
nosotros. "¡De prisa! ¡No podemos esperar hasta que lleguen los
refuerzos!"
Nos subimos a la espalda de Faldra.
En ese momento, llegó un rugido diferente a todo lo que había escuchado.
Miramos hacia atrás y vimos un espeso humo negro que se elevaba desde
el techo del edificio más grande de la zona, el que se encontraba al borde
del local.
"¡¿Q-Qué?!" exclamó Elvia-san. "¡¿Qué es eso?!"
"Eso es..." La cara de Shinichi-sama estaba tensa, como si ya supiera algo
sobre ese edificio. “... ¡un dragón!"
Algo limpió el techo del edificio. Entonces lo vimos. Era, de hecho, un
dragón.

Era enorme, docenas de veces más grande que cualquier wyvern, dos o
tres veces más grande que nuestro Faldra. Ascendió en el aire con aletas
perezosas de sus alas. Y en su frente estaba...
"¡Dragón títere!"
Minori-sama tenía razón: uno de los "picos" utilizados para hacer títeres
fue golpeado en la cabeza.
Esta cosa era un arma. El arma de Bahairam.
¿Cómo pudimos haber sido tan ajenos? Si se trataba de una instalación de
investigación dedicada a la magia y la tecnología de los títeres, entonces,
por supuesto, podría haber un dragón títere aquí. Aunque concedido, dado
que entendemos que el dragón títere todavía era un trabajo en progreso,
no había ninguna razón por la que debiéramos haber esperado
enfrentarnos de repente a uno en combate.
¡GRRRRRRRRAAAAAAAHHHHHHHH!
El monstruo abrió las fauces y dejó escapar un rugido resonante. Sus ojos
nublados buscaron de un lado a otro, y luego, un segundo después, volaba
hacia nosotros.
"¡Hacia el cielo! ¡De prisa!"
"¡En eso estamos!"
A instancias de Minori-sama, Loek-sama, Romilda-sama y yo comenzamos
a usar nuestra magia para hacer volar a Faldra. Los sprites de viento se
arremolinaban bajo sus alas extendidas, levantando su enorme cuerpo en
el aire.
Pero entonces Elvia-san gritó: "¡Cuidado!"
El dragón títere abrió las fauces, con sprites de fuego reuniéndose en su
boca. Se parecía mucho al hechizo que el mago había usado antes, solo
que mucho, mucho más grande.
"¡Aliento de fuego...!"

"¡Esquívalo! ¡Circula a la derecha! ”Minori-sama gritó. El Faldra giró a la

derecha. Estaba agarrando desesperadamente los asideros de su espalda
cuando...
¡BLAM!
El aliento de fuego del dragón voló por el aire, abrasando el costado de

Faldra. El ataque voló más allá de nosotros, aterrizando en un campo con
una tremenda explosión y un destello. La explosión fue tan poderosa que
pudimos sentir la onda de choque incluso a esta distancia. Si nos hubiera
golpeado de frente, probablemente ni siquiera habríamos dejado
cadáveres para que se recuperen.
Las cosas solo estaban marginalmente mejor ahora: Faldra había
esquivado el ataque, no escapó ileso. El golpe de soplo del aliento de fuego
había hecho que parches de la piel de cuero del mech estallaran en llamas.
“¡Eso está caliente!” Gritó Elvia-san.
"¡Hay fuego allí! ¡Y ahí! ¡Y allí! ”Shinichi-sama balbuceó, señalando un
lugar y otro. A este ritmo, las llamas pronto nos consumirían también. Con
el Faldra mismo literalmente en humo, una fuga en el aire parecía cada vez
menos probable.
Pero entonces Loek-sama le gritó de repente a Romilda-sama: "¡Romilda,
destruye la cubierta exterior!"
“¡Correcto!” Romilda-sama gritó, y de repente la “piel” se cayó del Faldra
como si se estuviera quitando un conjunto de ropa.
"¡Whoa!" Shinichi-sama exclamó. Ciertamente fue una vista sorprendente.
Sin el cuero, el Faldra se veía completamente diferente. Parecía menos
como un dragón y más como una armadura con forma de dragón. El Faldra
estaba formado por capas superpuestas de metal, que se raspaban unas
sobre otras para producir el sonido único de la criatura. Se veía muy duro
y me recordó el esqueleto de un dragón.
Además, una luz verde brillaba entre los platos. Probablemente había una
gema mágica o algo enterrado en el interior de Faldra para permitir que se
moviera. En términos generales, podría ser algo similar al mineral utilizado

en mi vestido de batalla. El resplandor marcaba indeleblemente a los

Faldra como algo más que un ser vivo.
Con el Faldra revelado de esta manera, hubo muchos gritos:
"¡Whoa! ¡Whoa Whoa! ¡Eso es asombroso!”
"¿No es así? ¿No es genial? "
"¡Estamos muy contentos de que nos entiendas, Sensei!"
Específicamente, gritando entre Shinichi-sama, Loek-sama y Romilda-
sama.
"¡Ojalá pudieras haber configurado esto a tiempo para nuestra película!"
"¡Para eso están las secuelas, Sensei!"
"¿Podemos guardar la charla de taquilla para después de llegar a casa con
vida?" Minori-sama bramó.
"¡Aquí viene!"
"¡Ay!"
Habiéndonos extrañado con su aliento de fuego, el dragón títere ahora se
disparaba por el aire en nuestra dirección, como para lanzar un golpe de
cuerpo. Loek-sama y yo dirigimos el viento que estábamos controlando
para que el Faldra se tambaleara hacia arriba y lo evitara. Las garras del
dragón títere rozaron las alas de Faldra, chispeando y chillando mientras
se arrastraban. Pero entonces la criatura nos pasó.
"¡Oh mierda! ¡Abajo! ¡Estamos bajando! "
“¡Mantén la calma, Sensei!” Loek-sama instruyó. Sin embargo...
"¡Erk!"
"¡Eek!"
Loek-sama y Romilda-sama gritaron casi simultáneamente. Con un tirón,
dejamos de movernos. Cuando miramos hacia atrás, vimos que el dragón
títere tenía la larga cola de Faldra en su boca. Debe haberse agarrado
como pasó por nosotros.
El dragón títere se retorció en el aire, arrastrando a la Faldra.
"¡Gaaahhhh!" Todos soltamos un grito. Nuestro monte voló hacia la tierra
como un martillo...

"¡¿Crees que puedes salirte con la tuya?!" Loek-sama y Romilda-sama

lloraron al unísono. Una tremenda ráfaga de viento atrapó al Faldra, pero
ni siquiera eso fue suficiente para detener su impulso; sus patas delanteras
se clavaron en el suelo.
Estaba acostumbrado a ver a Loek-sama y Romilda-sama pelear todo el
tiempo, pero de alguna manera estaban en perfecta armonía en este
momento.
“¡Déjanos ir!” Gritó Minori-sama. Le había devuelto el Mini-mee y ahora lo
usaba para escupir pequeños fragmentos de fuego. Impactaron contra la
cara del dragón títere y la punta en su cabeza, y retrocedió con un chillido
desgarrador. Afortunadamente, eso significaba dejar ir a Faldra.
"Yo... pensé que estábamos acabados", dijo Elvia-san, pálida. Ella era la
única de nosotros que no estaba atada a la espalda de Faldra, por lo que
había un peligro real de que la arrojaran.
"Parece que escapar no va a ser tan fácil", dijo Minori-sama.
Claramente. Ese dragón títere probablemente podría derribarnos si
intentáramos volar al cielo, sobre todo porque nuestro dragón fue pesado
con seis personas separadas. Incluso si los dos monstruos tuvieran
básicamente la misma velocidad aérea, la nuestra estaría en desventaja.
Si no pudiéramos correr, eso significaría que tendríamos que luchar. Pero
nuestro oponente era impermeable a la magia, lo que nos dejaba
efectivamente impotentes, o eso pensaba.
“¡Minori-sensei!” Dijo Loek-sama. ¡Déjanos esto a nosotros!”
"¿Huh?"
Minori-sama estaba más que desconcertado por esta solicitud. Pero
incluso mientras estaba sentada parpadeando, Loek-sama y Romilda-
sama asintieron el uno al otro y luego gritaron juntas:
"¡Transformación suprema!"
"¡Transformación suprema!", Gritaron Loek y Romilda, sus voces casi en

armonía. "¡VE! ¡Faldra, modo de pie!”

"¡¿Qué?!" Me encontré gritando.

¿Transformación? ¿Cómo un, cambio? Como en variable, modular,
multiforme:
Y cuando dices transformación, eso solo puede significar...
"¡¿Q-Qué?! ¡¿Qué está pasando?! Minori-san parecía tan sorprendida
como yo; aparentemente esta habilidad también era nueva para ella. Más
concretamente, ¿era esto posible incluso con magia, sin importar lo fuerte
que eras? ¡Así se hace, Loek y Romilda!
El resplandor verde que venía del interior de la cosa de dragón, el Faldra,
como lo llamaban, comenzó a fortalecerse. En un abrir y cerrar de ojos nos
había abarcado y continuó expandiéndose, formando algo. Las placas de
armadura se separaron y comenzaron a deslizarse, algunas de ellas
girando hacia atrás o girando en su lugar. El dragón desapareció, y en la
luz verde de esa magia, los Faldra tomaron una nueva forma.
Con nosotros aún a bordo.
"¡¿Qué?!"
¡Esta fue una transformación loca! ¿No sería esto bastante difícil de hacer
con el juguete? Pero, de nuevo, ¿tal vez la tecnología prodigiosa de Trans-
toy de Ban ** i pueda manejarlo?
"¡Espera...!"
Por alguna razón, estaba en el asiento del conductor.
¿De qué estaba hablando? ¿Qué me habían hecho? Sentí que me estaba
volviendo loco... Seguro que no era nada tan simple como la hipnosis o la
alta velocidad; es... (bla, bla, bla).
En serio, esto sucedió tan repentinamente que pensé que iba a entrar en
un monólogo de Sta * d-user-esque, completo con un elaborado arte ASCII.
"¿Qué en el demonios...?"
Sin embargo, incluso cuando pregunté, tuve una cierta idea. Acabábamos
de pasar de volar en la parte de atrás de esta cosa a montar en medio de
ella.
Es cierto que hacer que el piloto se sentara al aire libre gritaba "Aquí está
mi punto débil", por lo que una transformación solo tenía sentido. Además,
debido a que todo lo que había estado escondido dentro del dragón ahora

estaba en el exterior como armadura, el Faldra era considerablemente más

grande de lo que había sido mientras volaba. Por eso todos pudimos
encajar cómodamente dentro.
De acuerdo, con seis personas, cómodamente podría haber sido una
exageración. Una piedra verde brillante estaba colocada directamente
sobre mi cabeza donde me sentaba en el asiento del piloto, y era un poco
claustrofóbico.
"¡Woo-hoo!"
"¡Funcionó!"
Loek y Romilda estaban encantados. En cuanto a Myusel, Elvia y Minori-
san, parecían aliviados.
Lo cual era razonable, supongo.
Por cierto, justo frente a nosotros había algo así como una pantalla, una
media esfera tal vez también posible gracias a la magia, en la que se
mostraba la vista exterior. Había algunas pequeñas cosas parecidas a
cristales cerca de mis manos, en lo que parecía ser la figura del "modo de
pie" de Faldra.
Supongo que se podría decir que se veía bastante bien. Era una figura
humanoide cubierta con una armadura oscura de color acero. Debe haber
habido más de una piedra mágica, porque además de la gran piedra
principal en el cofre, un brillo verde provenía de los hombros y las caderas
también.
Aunque se refirieron a esto como el "modo de pie", el Faldra no se mantuvo
exactamente como lo haría un humano normal. En cambio, sus patas
llegaron a puntas puntiagudas que parecían cavar en la tierra. Pero eso
también le dio una impresión de ligereza, como una cuchilla preparada.
Guau. ¡Cool...!
Gun **m y la tradición de los "robots realistas" que inspiró estaban muy
bien, pero definitivamente podría conseguir más para el tipo de robot
combinado de poder de amistad que ahora todos pilotaban juntos.
¡Definitivamente tendría que asegurarme de que todos hicieran una pose
cuando hiciéramos nuestro movimiento especial!
Estaba disfrutando de la emoción de todo esto cuando Minori-san gritó: “¡El
dragón! ¡¿Dónde está el dragón títere?! "

Ups Olvidé.
Parecía que Loek y los demás también, porque había un montón de
"¿Huh?" Y "Oh" y "Hmm...”
Movimos la pantalla frente a nosotros, buscándolo.
Entonces Minori-san volvió a gritar: "¡A la derecha!"
Romilda levantó el brazo derecho de Faldra, que también movió su visión
hacia ese lado. Y allí estaba el dragón títere, justo en el medio de la carga
hacia nosotros.
"¡¿Hwah?!"
Hubo un sonido metálico cuando nos golpeó. La conmoción provocó el
caos en la cabina. Elvia y Myusel cayeron encima de mí, y
escandalosamente, allí estaba con las tetas suaves de alguien y el trasero
suave de otra persona justo en mi cara, en mi cara, en ahhhh.
“¡Aquí viene otra vez!” Dijo Minori-san, apoyándose contra las paredes y el
piso de la cabina. Cada uno de nosotros se tensó contra el inevitable
impacto, pero luego...
"¡Yah!" Romilda exclamó, y el dragón títere se deslizó debajo de nosotros.
No, ella había provocado que el Faldra saltara y lo evitara.
"¿Podemos aclarar quién controla esto y cómo?"
Las imágenes del escuadrón-robot generalmente involucraban a todos
haciendo poses mientras peleaban. (No es que haya alguna razón que
debería haber hecho un movimiento de arma de lucha humanoide).
"Básicamente funciona como una muñeca de arcilla", dijo Romilda.
¿Muñeca de arcilla? ¿Era eso, sabes? ¿Las cosas exoesqueleto que los
enanos habían conjurado durante el torneo de fútbol? Eso tenía sentido:
los enanos eran maestros en trabajar con la tierra, o más generalmente
con objetos inanimados, por lo que era lógico que el Faldra con toda su
armadura operara con un principio similar.
Aunque si quisieras saber cuál es exactamente ese principio, no podría
comenzar a decírtelo.
"¡Así que se mueve dónde se lo digo!", Concluyó Romilda.
"¡Y vuela donde se lo digo!", Intervino Loek.

"¿Cómo es relevante volar en este momento?"

"¿Qué quieres decir? La Faldra solo puede pararse sobre dos patas como
esta porque está apoyada por sprites de viento... "
Ah, a pesar de que el Faldra caminaba sobre dos piernas, era la magia del
viento la que lo sostenía cada vez que parecía que podría caerse. Por eso
podría responder con una asombrosa ligereza a las intenciones de
Romilda.
"¡Todos agárrense fuerte!" Romilda gritó, y luego el Faldra corrió hacia
adelante. Por supuesto, como lo había explicado Loek, estaba respaldado
por la magia del viento a medida que avanzaba, por lo que parecía que
estaba flotando como corriendo.
“¡Lanza un puñetazo, Romilda!”
"¡Bien!"
Loek y Romilda pilotearon el Faldra en perfecta armonía, sin dejar rastro
de su acritud habitual. El puño de Faldra brilló por un verde mágico por un
instante, luego voló hacia el dragón títere. Uno pensaría que esas
articulaciones serían realmente frágiles, pero tal vez ese fue un hechizo
defensivo que había visto, porque se estrellaron contra la cara del
drapeado títere con un ruido audible pero sin signos de rotura.

¡¡Roooooaaaarrrr!!
El dragón títere se levantó ligeramente y grito, ya sea por el dolor o la ira,

no estaba seguro.
“¡Lanza una patada, Romilda!”
"¡Correcto!"
Mientras Romilda gritaba con entusiasmo, el Faldra giró su pierna en forma
de cuchilla, lanzando una patada en diagonal a la cabeza del dragón títere.
Como esperaba ahora, había una gema mágica en la cadera de Faldra, o
algo así como en su espinilla, que brillaba verde, enganchando todo el
cuerpo en esa magia defensiva.
¡Este boom! fue incluso más fuerte que el golpe. Varias de las escamas del
dragón se hicieron añicos, y pudimos ver sprites sobresaltados que emitían
chispas y rayos a su alrededor.
¡Increíble! ¡Este Faldra era tan fuerte!
¿O fue Romilda quien fue tan poderosa? Hmm
Por el momento, sin embargo, era una pregunta académica.
¡¡Rooooaaarrrrrrrr!!
Esta vez, el dragón títere era aún más ruidoso. Dio media vuelta, luego
arremetió con su larga cola como si fuera un látigo.
“¡Defensa anti-impacto!” Gritó Minori-san.
"¡Lo tengo!" Respondió Myusel.
Casi simultáneamente, un torbellino envolvió el brazo izquierdo de Faldra.
Era una capa de aire presurizado creada instantáneamente que actuaba
como un escudo, desviando la cola del dragón y neutralizando su poder.
Luego, el dragón intentó morder a Faldra y luego arañarlo con sus garras,
pero desviamos o esquivamos cada ataque.
Sin embargo, al mismo tiempo, a pesar de lo ruidosos e impresionantes
que fueron, varios de los ataques de Faldra no parecieron haber frenado al

dragón títere. ¿Fue solo porque nuestro oponente era reptiliano y no sentía
mucho dolor? ¿Fue realmente tan difícil? ¿O ser un títere significaba que
no sentía dolor ni fatiga?
Pero eso sugirió...
"¡Apunta a la espiga!" Grité.
Ese era obviamente su punto débil. De hecho, deseé que los magos de
Bahairam hubieran pensado un poco más, ¿sabes? Si hubieran logrado
convertirme en una marioneta, habría seguido tropezando con todo, y
luego eventualmente... (Temblar).
"¡Lo tengo!", Dijo Romilda, una patada de Faldra golpeando la frente del
dragón títere. Golpeó el pico cuadrado.
¡Roooooooaaaaaaaaaarrrrrrrrrr!
El dragón sacudió la cabeza violentamente y retrocedió.

¡Increíble! ¡Estaba funcionando!
"¡Esta es nuestra oportunidad!", Dijo Loek. “¡Termínalo! Usa el movimiento
especial: ¡Mano de taladro!”
"¡Entendido!"
La mano de Faldra se echó hacia atrás, sus dedos se unieron para formar
un punto, que comenzó a girar muy parecido a una broca.
Sí. Estos niños saben cómo se hace.
¡Un taladro! ¡Y una mano de lanza, por cierto!
¡Ahora que es un movimiento especial!
¡Han hecho muy feliz a su sensei, niños! ¡Has aprendido sus lecciones muy
bien!
Pero mientras estaba ocupado moviéndome por lo mucho que Loek y
Romilda habían crecido como otakus...
"¿H-Huh...?"
... Romilda no sonaba muy triunfante.

La mano derecha del Faldra de repente se desaceleró y luego dejó de girar

por completo. De hecho, los movimientos del mech parecen estar cada vez
más lentos.
Tan pronto como se me ocurrió la idea, la cola del dragón títere nos golpeó.
¡¡Boooooonggg!!
"¡Eeeek!" Las chicas dieron un grito colectivo cuando nos golpearon.

Incluso el muro de viento que se suponía que debía defender contra
ataques como ese no parecía funcionar. ¿Qué demonios estaba pasando?
"No es... moverse como se supone que debe...”
"¿Eh...?" Loek y Romilda intercambiaron miradas oscuras.
Y luego puse las piezas juntas.
Las gemas mágicas en el pecho, las piernas y los hombros de Faldra. El
patrón venoso que recorría su armadura. El resplandor verde que lo cubría
todo obviamente se estaba debilitando, parpadeando como una lámpara
fluorescente al final de su vida.
"Pero, ¿por qué?" Loek gritó.
El Faldra se estaba quedando sin gasolina, pero... Espera. ¿Gas?
"¡El drenaje de energía del dragón!", Exclamé.
Los dragones, especialmente las enormes criaturas propiamente
conocidas como True Drakes, eran inmunes a la magia. Debido a que
usaban sprites para sostener sus enormes cuerpos, respirar fuego e
incluso volar, tenían órganos corporales que les permitían metabolizar la
magia y el poder de los sprites. Entonces, cuando un poder mágico
inestable como el de un humano se acercaba a un dragón, simplemente
era absorbido.
Nos habíamos olvidado por completo de eso cuando nos comprometimos
con el dragón títere.
Cuando la magia simplemente estaba latente dentro de la gema, eso era
una cosa, pero debido a que constantemente estábamos usando el poder
mágico para controlar el Faldra, ese poder siempre se extendía sobre la

superficie del vehículo. Necesitábamos aún más magia para patear o

golpear, o para detener el ataque de un oponente. Luchar contra el dragón
en ese estado era tan bueno como rogarle que absorbiera nuestra
energía...
La premisa era sólida: no podías luchar contra un dragón con magia, por
lo que tendrías que hacerlo mano a mano. Impulsar a tu luchador mano a
mano con magia derrotó el punto.
"¡Ahhh, Romilda, idiota!"
"¡Eres el idiota, Loek!"
Gosh. Y se habían llevado muy bien.
Y francamente, probablemente eran ambos idiotas.
"¡Eeek!"
"¡Ahhhh!"
Más golpes asaltaron al Faldra.
Mierda. Nunca aguantaremos esto.
Pero sin siquiera el poder de mover un brazo, y mucho menos una pierna,
huir no parecía muy probable...
"¡E-Eso es todo!" Romilda exclamó de repente. "¡Podemos usar la fuente
de alimentación de emergencia!"
"¿Huh? ¿Tenemos uno de esos? ”, Pregunté.
"¡Sí!" Asintió, luego le dio a la gema mágica sobre nuestras cabezas un
golpe muy sólido.
"¡Yipes!"
El cristal ya casi se había oscurecido; ahora se rompió en el medio, y vi
que algo emergía desde adentro. Espera, ¿entonces esa cosa no era
sólida?
Lo que salió fue...
"¿Una llanta?"
Parecía algo con lo que un hámster correría, pero unas diez veces más
grande. Sobre el tamaño humano, en realidad.

"Esta cosa fue construida originalmente como una marioneta,

¿recuerdas?", Dijo Romilda. "Tiene algunos engranajes para ayudarlo a
hacer cosas que las cuerdas por sí solas no podrían manejar".
"¡¿No fue eso cuando estaba volando?!"
“¡El mecanismo sigue ahí! Nuestro rango de movimiento será limitado, pero
si giramos esta rueda, al menos deberíamos poder caminar, ¡y no usará
magia! "
“¿E-Eso realmente funcionará?” ¿Faldra realmente se movería si giramos
esta rueda? ¿Quiero decir en esta configuración blindada, y con seis
pasajeros?
Hable sobre sus condiciones de trabajo hostiles...
Y todo esto para no decir nada del hecho de que la rueda solo parecía lo
suficientemente grande para una persona...
"¡Elvia!", Dije de repente, volviéndome hacia la chica lobo y agarrándola
por los hombros.
“¿S-Sí?” Dijo ella, sorprendida.
"¡Necesitamos tu fuerza!"
"¿Q-Quién, yo? ¿Mía?"
"¡Solo tú puedes hacer esto!"
"¿Solo yo puedo—?" Sus ojos se agrandaron.
Entiendo que obligar a una mujer joven a realizar este tipo de trabajo físico
es una propuesta cuestionable, pero todas nuestras vidas estuvieron en
juego aquí; este no era el momento de quedar atrapado en nociones de
caballería. Elvia, como hombre lobo, era de lejos el más fuerte de todos.
"¡Te necesitamos!"
"Pero yo..."
Hey, ¿por qué tus mejillas se ponen tan rojas?
¡No! ¡No es el momento de preguntarse sobre eso!
“¡Corre, Elvia! ¡Corre por nuestro futuro!
"Uh... ¿de acuerdo? ¡Lo que tú digas!” Ella asintió y saltó al volante.

Entonces ella comenzó a correr.

"¡Whoaaaa!"
¡Fzzzzzz! La rueda giró con un sonido muy familiar, el Faldra crujió a tiempo
junto con él. Mientras tanto, Romilda se había apoderado de una colección
de clavijas expuestas, con una sonrisa en su rostro. Aparentemente, esas
clavijas eran lo que le permitiría controlar el Faldra a mano.
"¡Está funcionando!" Aunque con mucha menos fluidez que antes, el Faldra
había comenzado a moverse. "¡Podemos hacer esto, Sensei!"
"¡Excelente! C-Comencemos por alejarnos un poco”.
"Suena bien", dijo Romilda, asintiendo. Nuestro viaje comenzó,
tambaleante pero inequívocamente, para poner algo de espacio entre sí
mismo y el dragón títere.
Nuestro enemigo mantenía la estación en el aire. Tal vez pensó que podría
usar su aliento de fuego otra vez.
"¡Hrrraaaaaahhhhh!" Elvia gritó mientras corría y corría y corría. Ella ya
estaba cubierta de sudor, su respiración se convirtió en jadeos desiguales,
pero de alguna manera siguió avanzando cada vez más rápido. Nunca
había visto a nadie trabajar tan duro. Fue increíble. Gracias a ella, la Faldra
pudo caminar sin caerse.
Pero aun así...
"¡Esto es malo...!"
Todavía no pudimos saltar ni volar. Esas acciones fueron obviamente
habilitadas por la magia. Peor aún, nuestras gemas parecían estar todavía
recuperándose; el resplandor verde no había regresado con toda su fuerza.
Y no había forma de que pudiéramos mover todo Faldra usando solo
nuestra magia personal...
En este estado, no estaríamos esquivando ningún aliento de fuego.
Me pareció ver la desesperación asomándose por el horizonte del pánico.
¿Hay algo que podamos hacer? ¡Cualquier cosa! ¡Nada en absoluto!
Myusel, Minori-san, Elvia, Loek y Romilda, ¡todos habían venido
específicamente a rescatarme! Y ahora iban a ser asesinados...

De repente, por el rabillo del ojo, vi a Minori-san mirar resueltamente.

¿Quería enfrentarse al dragón en combate con las manos desnudas como
lo había hecho antes?
¡No, Minori-san! ¡Simplemente no es posible!
"Parece que no hay otra opción. ¡Romilda, abre la cabina!”
"¿Qué? Pero Minori-sensei, eso es... "
"¡Ábrelo! ¡Es una orden!"
"¡S-Sí, señora!"
Romilda volteó algo, y la armadura que había estado protegiendo la cabina
se abrió de repente, conectándonos directamente con el mundo exterior.
Ahora podía ver el globo brillante formándose en las mandíbulas del dragón
con mis propios ojos. ¡Mierda! Todos estamos-
“¡Todos, bajen!” Minori-san gritó, luego agarró algo en la cabina y saltó del
Faldra.
"¡Hey, Minori-san?!"
"¡Sensei!"
Romilda ordenó rápidamente a Faldra que bajara la mano hacia Minori-
san. Ella saltó sobre su palma abierta, luego la escuché gritar:
"¡Movimiento de finalización tan loco-solo-podría-trabajar!" Ella sonaba tan

fuerte. Tan orgullosa. "Panzerfaust Drei!"
¡Espera un momento...!
Antes de que pudiera sacar un comentario inteligente de mi boca, Minori-
san había apoyado el objeto contra su hombro (era un arma sin retroceso
impulsada por cohete) y disparó.
Los gases de escape salieron volando por la espalda.
"¡Waaahothothot!"
Obviamente no vinieron directamente hacia nosotros, pero la gota de humo
y llamas del disparo se acumuló contra la armadura de la cabina, elevando
la temperatura de forma inmediata y dramática.

En cuanto a la cáscara antitanque personal de 110 milímetros, salió

volando, arrastrando humo blanco.
Se dirigía directamente hacia el dragón, que probablemente ni siquiera
podía ver el cohete en el resplandor del globo mágico en su propia boca.
El proyectil marcó un golpe directo.
El sonido de la explosión resultante llenó el área. La mitad del dragón títere
estaba oscurecido por una nube de humo blanco.
Tomamos una respiración colectiva: cuando el humo se disipó, vimos que
la cabeza del dragón había sido volada.
"Vaya...”
Incluso desde esta distancia, no fue una vista agradable. ¡Pero al mismo
tiempo, significaba que el dragón había sido neutralizado...!
"M-Minori-san...”
"¡Je, je!" Minori-san se rio entre dientes mientras volvía a subir a la cabina.
“Loco como un zorro. Me alegro de haber traído a este cachorro”.
"¡Esa cosa no es exactamente una necesidad de viaje! ¡¿También eres un
científico de nutzoides que usa bata de laboratorio?! "¡Hay una línea que
dibujar cuando empacas para un viaje!”¿Y a qué te refieres con" cachorro
"?" ¡Al menos podrías llamarlo un arma antitanque personal de 110
milímetros o un LAM o algo así!”
"Pero, ¿no te imaginas que está siendo glosado Movimiento Final en un
manga?"
Bueno, sí, podría, pero...
"De todos modos, gracias a Dios, solo tomó una oportunidad". Entonces,
agregó Minori-san, solo traje una conmigo.
De hecho, a excepción de la vista y el agarre, un Panzerfaust 3 es
completamente desechable.
"Espera un segundo", le dije. "Si tuviste algo así, ¿por qué no lo usaste en
primer lugar?"
"Es sorprendentemente difícil simplemente usarlo", dijo. "Debes tener
cuidado con lo que hay detrás de ti".
"¡No lo estabas!"

"Además, si estás demasiado cerca, te lastimas, pero si no estás lo

suficientemente cerca, no golpearás nada". Normalmente al menos puedes
apoyarte contra el suelo cuando lo estás usando. Minori-san se encogió de
hombros.
Por lo menos, tenía razón en que normalmente no disparaba uno desde lo
alto de un robot gigante.
"Sin mencionar que quería evitar que Bahairam aprendiera sobre esa
tecnología si pudiera".
"Ah...”
Ahora que lo mencionó, eso tenía sentido. No sabíamos cuánto sabía
realmente el Reino de Bahairam sobre Japón, pero en base a lo que
Amatena había dicho, al menos sabíamos que existía la posibilidad de
conquistarlo si tenían la oportunidad.
Eso significaba que este reino era un enemigo potencial. Cuanto menos
supieran sobre nuestras armas y tecnología, incluso si las nuestras fueran
muy superiores, mejor. Las armas personales como el Tipo 89, el Minimi o
el M9 eran una cosa, pero las municiones antitanque definitivamente serían
un secreto militar frente a un país como Bahairam.
"Y luego está el hecho de que, a diferencia de una pistola o armas
pequeñas", dijo Minori-san, sus ojos cada vez más distantes, "cuando usas
una de esas cosas, el papeleo es un gran dolor de cabeza".
"No me digas que esa es la verdadera razón por la que querías evitarlo".
"...............................Bueno. No te lo diré”.
Ella deliberadamente no me estaba mirando.
"¿Puedes mirarme a los ojos y decir eso, PFC Koganuma Minori?"
"¡El punto es, Shinichi-kun, tenemos que salir de aquí!"
Qué cambio de tema tan audaz.
Miré alrededor. Tal vez fue porque el dragón títere estaba muerto, o tal vez
nuestra regeneración mágica finalmente nos alcanzó, pero en cualquier
caso, el cristal de Faldra estaba brillando con toda su fuerza.
"¡Después de ese tipo de ruido, los refuerzos de Bahairamanian
seguramente estarán en camino!", Dijo Minori-san.

"¡Correcto!" Loek y Romilda asintieron, y luego la armadura de Faldra

comenzó a cambiar nuevamente, regresándonos al modo de vuelo que nos
llevaría al cielo y fuera de su alcance.
Seguimos volando, directamente de la ciudad oriental de Borfoi.
El único inconveniente fue que el Faldra sonaba un poco chirriante, tal vez
debido a que acababa de combatir cuerpo a cuerpo con un dragón, y no
estábamos seguros de que fuera apto para un vuelo de larga distancia.
Así que solo estábamos buscando un lugar para asentarnos y hacer
algunas reparaciones simples en el mech cuando...
"¿Eh...?"
Miré a través de un páramo de arena y rocas, hacia las montañas que
formaban la frontera con Eldant. Justo en el medio había dos figuras.
¿Eran esos...?
"Lo siento, Minori-san, pero ¿me prestas tus binoculares?"
"Claro, toma". Me entregó un par de binoculares plegables. Los levanté y
puse el aumento.
"Hey..."
Era justo lo que casi esperaba. De hecho, era exactamente lo que
esperaba: Amatena y Clara. Y por alguna razón, Amatena no llevaba su
uniforme militar habitual, sino un atuendo tradicional muy parecido al de
Clara. Muy parecido al de Elvia, para el caso. Mostraba mucha piel (o piel),
y sí, tengo que admitir que definitivamente me excitó... Pero incluso
ignorando la parte de mi mente que estaba en la cuneta, personalmente
pensé que el atuendo se veía realmente bien.
"¡Detente aquí!", Grité. "Er, quiero decir, ¡baja!"
Hubo un colectivo "¿Qué?"
“¿Ves a esas personas allí? Quiero que desciendas allí por un momento.”
"Espere. ¿No es eso...?”
Podría haber adivinado que Elvia tendría buenos ojos. Ella no parecía
segura de esto.
"¡Shinichi-sama, eso es...!"

"Está bien, confía en mí", dije, mi tono admitía poca discusión.

No había señales de otros soldados de Bahairaman en el área inmediata,
y ni Amatena ni Clara estaban vestidas para la batalla. Finalmente, ante un
asentimiento de Minori-san, Loek y Romilda llevaron a los Faldra a tierra
junto a las dos bestias.
Inmediatamente salté del falso dragón. Minori-san, siempre mi
guardaespaldas, estaba justo detrás de mí con su M9 lista, pero todos los
demás se quedaron en el Faldra. Incluso Elvia no hizo ningún movimiento
para desmontar. De hecho, se posó mirando a Amatena y Clara como un
animal cauteloso.
"Tenía la sensación de que podría llegar a esto", dijo Amatena con un
suspiro cuando Minori-san y yo nos acercamos. No parecía que la noticia
hubiera llegado aún al ejército de mi fuga. Bueno, habíamos volado
directamente aquí después de salir del centro de investigación. En todo
caso, sugirió que Amatena sabía que esto podría suceder.
"Gracias", dije con seriedad.
Fue gracias a Amatena que Minori-san y los demás sabían dónde estaba.
Su posición en el ejército me había impedido ayudarme personalmente a
escapar, pero sin la indirecta que le dio a Minori-san, probablemente
todavía estaría en camino para que me dispararan.
"Escuché que todo esto es gracias a ti", dije.
"¿Yo? No hice nada ", dijo sin expresión. "Si algo de lo que hice resultó en
beneficio de ti, no lo hice con ese propósito".
"Claro, lo sé", le dije, sonriendo ante esta muestra de tsundere-ishness.
"Creía que alguien como tú era absolutamente necesario para el futuro de
este país".
No tenía nada que decir a eso. En su búsqueda del poder, el Reino de
Bahairam estaba comenzando a tratar a las personas como consumibles
producidos en masa (incluso si este mundo, que aún no había
experimentado una revolución industrial, probablemente no tenía ese
concepto). Una cultura tradicional rica había sido desechada al por mayor,
reemplazada por intentos de controlar a la población y una fijación filosófica
en un ejército fuerte.
Y tal vez, solo tal vez, eso no estaba bien con Amatena.

O tal vez los otros ciudadanos de este país, tampoco. Tal vez eso fue
exactamente por qué el rey y sus asesores pensaron que era tan
importante reforzar la lealtad de la gente. Probablemente podrían sentir la
propagación del descontento.
"Elvia es... diferente ahora", dijo Amatena de repente.
"¿Huh?" La voz vino de la parte posterior de Faldra, de Elvia.
Tal vez ella no se había dado cuenta ella misma. Honestamente, no había
conocido a Elvia lo suficiente como para estar seguro de cualquier manera.
Algo tiró de los labios de Amatena; ella miró peligrosamente cerca de una
sonrisa. Una sonrisa irónica, tal vez.
“Ella nunca se habría enfrentado a mí así antes. Ella habría huido
silenciosamente. Supongo que es conocerte lo que ha provocado este
cambio en ella”.
Apenas estaba en condiciones de ser todo, "Oh, sí, obviamente. Deberías
estar agradecida”. Ni siquiera había pensado en mí misma como si tuviera
suficiente influencia con Elvia como para hacerla actuar de manera
diferente. Literalmente, todo lo que hice fue que ella se quedara en la
mansión haciendo dibujos.
“A pesar de todos los golpes y los gritos que le dimos, no pudimos cambiar
a Elvia. No nosotras sus hermanas, no sus padres. Quizás solo muestre
que tales cosas carecen del poder para cambiar a las personas”.
No dije nada.
“Más razón por la cual los revolucionarios como tú son cruciales para este
país. Así que simplemente... Hubiera odiado verte usado como nada más
que un sujeto de prueba para la tecnología de títeres. Eso es todo al
respecto. Y con tu fuga, mis esfuerzos se han reducido.”
"Revolucionario, ¿eh...?"
Amatena realmente estaba preocupada por el futuro de su país. Pero dada
su particular posición y talento, no había nada que pudiera hacer al
respecto sola.
Entonces, en lugar de eso, buscó a alguien como yo para secuestrar con
el pretexto de fortalecer el control sobre la población, con la esperanza de
que yo pudiera aportar hasta el más mínimo pensamiento nuevo al país...
¿O era solo mi imaginación hiperactiva?

"Amatena", le dije.
"Si. ¿Qué?"
"Si en lugar de ordenarme que creara algo que hiciera que la gente fuera
más leal al rey, me hubieras pedido que pensara en algo que todos
pudieran disfrutar juntos ... con mucho gusto habría ayudado".
Esta vez fue su turno de guardar silencio, pero ella negó con la cabeza.
¿Quiso decir que no habría hecho eso? ¿O de qué valía la pena hablar?
¿O tal vez algo más? Simplemente no lo sabía.
Entonces Amatena dijo: “Deberías irte ahora. Si te quedas aquí por mucho
tiempo, el escuadrón de persecución te alcanzará”.
Eso no sería mejor para ella de lo que sería para nosotros. Después de
todo, Amatena había informado deliberadamente a Myusel y a los demás
dónde estaba y cuándo estaría allí, y al mismo tiempo no había informado
al centro de investigación que mis rescatistas sabían ... Y ahora allí estaba
ella, prácticamente viéndonos apagada. El gobierno ciertamente
consideraría que ella está prestando ayuda y consuelo al enemigo.
Incluso si lo que realmente estaba haciendo era tratar de ayudar a
Bahairam.
"Tienes razón. Nosotros estamos en nuestro camino. Pero... de verdad,
gracias.”
Amatena permaneció callada, pero se encogió de hombros.
"Y... Clara".
"¿Sí...?" Preguntó ella sorprendida. Tal vez ella había esperado que la
ignorara en este punto. Pero en cambio dije...
"¿Quieres venir con nosotros?"
"¿Qué...?" Esta vez Amatena parecía tan sorprendida como Clara. "¿Por
qué? ¿Por qué yo?"
"No hay una razón especial", dije evasivamente. Después de todo,
Amatena estaba parada allí mismo.
No sabía qué tan seria había sido, pero Amatena había amenazado una
vez con matar a Clara si no hacía lo que decía. Parecía claro que a pesar
de la forma en que esta sociedad anunciaba la igualdad de todos sus

ciudadanos, había un sistema de estatus bastante claro, y Clara

probablemente no estaba muy arriba en la escala.
Amatena tenía suficiente estación en este país para poder cuidar de sí
misma, pero pensé que tal vez sería mejor para Clara si ella viniera con
nosotros.
La niña guardó silencio por un momento, pensando en ello. Luego dijo:
"Muchas gracias" y me dio la primera sonrisa que había visto de ella.
¡Whoa! ¡Alerta de ternura!
"Pero no voy a ir", dijo. "Me voy a quedar con mi hermana".
"¿Eso es así?" Pensé que ella podría decir eso, así que no me sorprendió
mucho.
Asentí con la cabeza a Clara y luego a Amatena. "Entonces nos vemos.
Las dos cuídense.”
Me di la vuelta y estaba a punto de alejarme.
"Shinichi-sama".
Sentí un tirón en mi brazo.
Era Clara.
Ella era sorprendentemente fuerte.
"Uh... ¿Qué-?"
Me había volteado a medias hacia ella cuando...
Smooch.
Sentí algo cálido y suave en mi mejilla.

"! # $% & ~ ッ?!"
Mi materia gris se iluminó con absoluto asombro.
Un segundo después, ella se estaba deslizando lejos de mí.


"¡¿C-Clara?!"
¿Era esto, podría ser, eh, ya sabes, esa cosa? Eso, eh, el—!!
"Una vez me dijiste que esto es lo que le haces a alguien que te importa,
¿verdad?"
"Er, quiero decir, sí, pero...”
"Aunque todavía eres el segundo detrás mi hermana mayor".
Se suponía que la misión de Clara para atraparme se había terminado.
Entonces, ¿eso significaba que ella estaba haciendo esto libremente...?
¿Podría ser el segundo de Amatena, pero eso no significa que yo era el
número uno en su lista de chicos?
¡¡Whoaaaaaaaa!!
¡¿FUE REALMENTE LA PRIMERA CONFESIÓN DE AMOR DE UNA
CHICA PARA MÍ?!
Mi monólogo interno se estaba volviendo loco, pero Amatena parecía no
sentirse impresionada.
“Deberías ponerte en marcha, y pronto. Todos te están esperando”.
"S-Sí, claro".
Todavía sintiéndome conmocionado y agitado, obedientemente regresé a
Faldra. Trotando a mi lado, Minori-san me miró con los ojos entrecerrados
detrás de las gafas.
"Dios, Shinichi-kun. Arriesgamos nuestras vidas para rescatarte, ¿y resulta
que ya tienes una esposa pequeña aquí? "
"¿Huh? No, no lo estamos-"
“¡Y tan joven!”
"Te lo dije, ella no es-"
“¡¿Qué pensará Su Majestad?!” Minori-san estaba prácticamente riéndose
cuando saltamos a bordo del Faldra.
"¡No! No puedes... "

"Shinichi-sama..." Ahora Myusel me estaba mirando con los ojos llenos de

lágrimas. "Es... es posible que hayamos..." Ella apenas podía obligarse a
mirarme. "¿Hemos hecho algo incorrecto al rescatarte?"
"¡No te lo tomes tan en serio, Myusel!", Dije, comenzando a sonar un poco
desesperado. "Sabes que estaba a punto de recibir un pico en mi cerebro,
¿no?"
"¡Hora de despegar!"
Afortunadamente, Loek nos interrumpió con un cambio de tema. Myusel,
que todavía no parecía muy seguro, comenzó a cantar un hechizo que
hacía que el viento viera bajo las alas de Faldra y comenzó a levantarnos
en el aire.
"¡Hermana mayor Ama!", Gritó Elvia desde la espalda del mech.
Amatena nos miró de reojo. A pesar de llamar impulsivamente a su
hermana, Elvia no parecía saber cómo hacer un seguimiento. "Um... Uh...",
dijo, mirando a su hermana con una expresión de dolor.
En cambio, fue Amatena quien habló. "Muestra tu cara por aquí a veces",
dijo. “La hermana mayor Jiji querrá verte. Y padre y madre también.”
"Uh..." Elvia pareció sorprendida por un momento, pero luego dijo: "¡Lo
haré!" Y saludó a su hermana, con una gran sonrisa en su rostro y su cola
moviéndose salvajemente.
Finalmente, el Faldra consiguió algo de altitud, dio un gran giro y aceleró.
Amatena y Clara se hicieron cada vez más pequeñas en la distancia, pero
Elvia seguía estirando el cuello aún más, siempre mirando en su dirección.
"Correcto", dijo Minori-san con un suspiro. "Ahora finalmente podemos ir a
casa en Eldant".
"Sí", estuve de acuerdo. Fue divertido: me habían arrastrado aquí
básicamente contra mi voluntad, pero ahora realmente no sentía nostalgia
por Japón. Era el Eldant al que estaba ansioso por volver, a pesar de que
solo había estado fuera durante unas dos semanas.
¿Por qué? Tenía que ser por todas las personas que estaban allí.
Gente como Myusel. Minori-san. Petralka. Elvia. Brooke. Cerise. Todos en
la escuela...
Para mí, realmente fue "ir a casa".

Señalé el cielo azul y grité: "Destino: Eldant. ¡Máxima velocidad adelante!"

"¡Correcto!" Loek y Romilda asintieron al unísono, y el Faldra aceleró aún
más.
Y con la repentina ráfaga de aire sobre su espalda....................................
Casi me caigo.

Epilogo: Invasión Cultural Redux
En realidad, llegar a casa presentaba sus propios desafíos.

Comenzaron en la mansión que servía como cuartel general de Amutech.
Brooke y Cerise me encontraron en la puerta.
"Es bueno verte de nuevo, Maestro".
Los dos hombres lagarto se veían exactamente igual que siempre, lo que
inmediatamente me dio una sensación reconfortante de ahh, estoy de
vuelta.........
"Uh... ¿Brooke?"
"Sí señor."
"¿Qué pasa con esa espada?", Pregunté, mirando la hoja en su mano
izquierda. Todavía estaba en su funda, pero por la mano de obra,
obviamente era un arma real. El tipo de elemento no distinguido que un
soldado podría emitir para llevar a la batalla.
Sí, sabía que Brooke había sido un héroe famoso, pero cuando lo pensé,
me di cuenta de que nunca lo había visto con un arma.
"Aherm".
Le dio la espada a Cerise, luego se arrodilló frente a mí, como un criminal
condenado en espera de juicio.
"Fue mi propia falta de atención lo que permitió a esos villanos acercarse
lo suficiente a esta mansión para capturarlo, señor".
"... ¿Eh?"
"Tendrías derecho a tener mi cabeza, Maestro. Pero ahora tengo una
esposa y ya no soy dueño de mi propia vida. Te ruego que muestres
misericordia y tomes solo un brazo o una pierna, o tal vez...”
"¡No necesito tomar nada!", Grité. ¿Qué era él, un miembro del yakuza?
¡Diablos, incluso ellos generalmente se conforman con solo un dedo! De
todos modos, cortar los apéndices de Brooke no me haría feliz. ¡No haría
nada por mí!
"¡Solo olvídalo!", Insistí.
"¿Quieres decir que serás misericordioso conmigo?"

"¡Si! ¡Misericordioso! ¡Magnánimo, indulgente, lo que quieras! Cerise, ¡no

levantes esa espada así! ¡Me estás asustando! ”Mientras hablaba (?) Con
Brooke, Cerise levantó la espada sobre su cabeza como si estuviera a
punto de ayudar a Brooke a cometer un suicidio ritual.
"Brooke, ¡ni siquiera eres oficialmente mi guardaespaldas!"
"Eso es cierto", dijo el hombre lagarto, mirando hacia arriba. "¿Quieres
decir que tienes la intención de cortar el brazo de Minori-sama?"
"¡No, no la tengo!", Grité, sosteniendo mi cabeza. La comunicación
intercultural puede ser realmente difícil a veces...
Mientras esta conmoción ocurría frente a la casa, un contingente de
caballeros y un carruaje del Castillo de Eldant llegaron por nosotros. Tal
vez Loek y Romilda, que se habían ido antes, les habían dicho que
habíamos vuelto. En cualquier caso, nos vimos obligados a hacer una
aparición inmediata en el castillo.
"¡Shinichi!" Una voz familiar me saludó en el momento en que entré en la
sala de audiencias.
Fue Petralka. La emperatriz loli (que miraba) estaba, como siempre,
sentada en un enorme trono que empequeñecía su pequeño cuerpo.
"Eres tú, ¿no?! ¡¿No estás herido?! "
"Su Majestad..."
Casi había saltado cuando entré, pero lentamente volvió a sentarse a
instancias de Garius, su caballero y confidente de confianza. Ella es tan
linda. Y me hizo feliz darme cuenta de que ella también estaba preocupada
por mí.
Pero definitivamente no soy el amante de la emperatriz, ¿de acuerdo?
Decidí guardar el pensamiento para mí mismo.


Petralka tosió una vez, luego se movió para enfrentarme a mí y a Minori-

san nuevamente.
"Te damos la bienvenida de vuelta, Shinichi", dijo.
"Sí, señora."
"Y Minori, has hecho bien en traerlo a casa".
“Fue un placer, Su Majestad. Pero no fui la única ", dijo Minori-san con una
sonrisa suave. “Myusel, Elvia, y Loek y Romilda fueron cruciales. Esos dos
últimos en particular: sé que es posible que desee reprenderlos, pero
recuerde que ambos son jóvenes y sean misericordiosos”.
"Entendemos", dijo Petralka, sonriendo secamente. Ella asintió con la
cabeza a sus asesores, quienes estaban en fila alrededor de la sala de
audiencia. Pude distinguir un elfo y un enano entre ellos, probablemente
los padres de Loek y Romilda.
"Aunque actuaron por su propia cuenta, como resultado de su aventura,
uno de los centros de investigación de dragones títeres de Bahairam ha
sido destruido efectivamente. Son héroes, aunque deben serlo en secreto”.
Los consejeros enanos y elfos asintieron apreciativamente ante esto.
"Shinichi. Todos estaban preocupados por ti”.
"Me alegra saber eso, de verdad", dije. Mi tiempo como guardia de
seguridad privada me había dado una apreciación de lo especial que era
tener a alguien que ni siquiera era un pariente de sangre preocupado por
ti.
"¡Creemos que una fiesta para celebrar su regreso seguro está en orden!",
Dijo Petralka. Ella estaba de muy buen humor.
"Oh, no, no tienes que... Quiero decir, lo siento, pero realmente me gustaría
descansar un poco. Para ser honesto, estoy agotado”.
"Hmm. Y bueno, podrías serlo. Muy bien, pospondremos la fiesta para otro
momento.”
Así que aparentemente no había forma de salir de la fiesta en sí. No es que
realmente me importara...
“Si, en cambio, hay alguna muestra de agradecimiento que deseas, solo
tienes que decirlo. Comida o bebida o cualquier cosa.”

"Gracias", dije, pero me sentí como una amabilidad social.

Después de un momento, se me ocurrió algo. "¿Dime, Petralka?"
"¿Qué es?"
"Hay una cosa que me gustaría pedir".
"¿Hm?"
Se inclinó hacia delante, con los ojos brillantes; Garius y el primer ministro
Zahar, que también estaba de pie junto al trono, intercambiaron una
mirada. Sabían por experiencia que debo estar planeando algo.
"Bueno, no tanto pedir... Considéralo una sugerencia".
Las palabras de Amatena volvieron a mí:
"Creía que alguien como tú era absolutamente necesario para el futuro de

este país".
“A pesar de todos los golpes y los gritos que le dimos, no pudimos cambiar
a Elvia. No nosotras sus hermanas, no sus padres. Quizás solo muestre
que tales cosas carecen del poder para cambiar a las personas”.
Amatena había querido cambiar Bahairam. No por revolución o rebelión

abierta ni nada violento como eso. A su manera, temía por el futuro de su
nación. No tanto por la imposición de la visión del mundo, el recorte de
lujos o incluso el gobierno totalitario: vio a Bahairam dirigirse por un camino
colectivista que no le gustaba.
¿Y qué hay de mí? ¿Había algo que pudiera hacer? ¿Algún pequeño acto
de resistencia que pueda contribuir a una cultura y visión del mundo en
peligro de quedar cerrado?
"Recomiendo una invasión cultural de Bahairam".
Eso envió un verdadero shock a través de la sala de audiencias.

Había pasado un mes desde que Shinichi había regresado al Imperio

Eldant.
Había terminado el trabajo y estaba llegando a casa cuando vi algo
extremadamente inusual: un paquete dirigido a mí. Y uno no enviado a
través de canales, por cierto.
Lo más probable es que se haya pasado de mano en mano. La caja de
madera estaba sucia y el remitente no había incluido su nombre.
Francamente, me impresionó que me hubiera llegado en absoluto. Escrito
en la parte superior estaba "Una maldición sobre quien rompa este sello
sin permiso", pero esto fue principalmente una presunción. Muy pocas
personas realmente se molestaron en maldecir su correo. Aunque no
faltaron los bajos ingresos que podrían intentar abrir cartas y paquetes de
otras personas.
Abrí la caja y miré adentro. Parecía estar lleno de libros, un montón de
ellos. Doblada cuidadosamente en la parte superior había una sola hoja de
papel.
Abrí el papel y pasé un momento mirando los personajes inscritos en él.
El timbre de la puerta me sacó de mi ensueño.
"¿Quién está ahí?"
La voz familiar de mi subordinado respondió: "Es Clara, hermana mayor".
Me puse de pie y fui a la entrada y la invité a entrar. Su respeto por mí
como mi subordinado, por supuesto, fue dictado por nuestras posiciones
profesionales, pero Clara también tuvo el suficiente respeto personal por
mí y que a menudo venía después del trabajo, donde íbamos compartir
comidas o pasar el tiempo en conversaciones triviales.
Clara me miró. Luego, de repente preguntó: "¿Está pasando algo?"
"¿Qué quieres decir?"
"Nada. Simplemente... de alguna manera...”
Tal vacilación era inusual para Clara.
"¿De alguna manera qué?" La insté. Estaba realmente curiosa.
"De alguna manera pareces... feliz".

"¿Feliz? Feliz... Hmm.” Sacudí la cabeza lentamente, pero luego pensé en

el papel que sostenía. Se lo tendí a ella. "Quizás sea por esto".
"¿Una carta, hermana?"
"No oficial", dije
"¿Puedo?"
Asentí. "Sé mi invitada."
No estaba bien que Clara viera esta carta. Me sentí casi obligada a
mostrárselo. Después de todo, ella había sido bastante aficionada a ese
hombre.
Clara parecía sorprendida. "Esto es-"
"Si. De Shinichi.”
Más específicamente, alguien había traducido lo que Shinichi había escrito
a nuestro idioma. Elvia no sabía leer ni escribir, por lo que debe haber
tenido algún erudito de Eldant que lo hiciera.
"El contenido de esta caja también proviene de él".
Clara miró dentro, desconcertada.
"Esta es la" cultura otaku "que ha enamorado tanto a la emperatriz Eldant.
Parece que lo llaman manga.
Saqué uno de los libros y se lo mostré a Clara. Lo hojeé; Parecía
representar algún tipo de historia a través de imágenes, presentadas en
gran densidad y en un número absurdo de páginas. Solo pensar en cuánto
tiempo y esfuerzo debe haber invertido en la creación de este único
volumen fue suficiente para hacerme sentir desmayado.
"Huh..." Clara respiró, mirando el manga. No estaba seguro de qué
significaba el sonido. Quizás ella estaba desconcertada por eso. No podría
culparla.
"¿Pero por qué te enviaría algo así, hermana mayor?", Preguntó ella,
sacudiendo la cabeza.
Una excelente pregunta. "Si lees la carta, creo que quedará claro", le dije,
quitándole el papel. "Afirma que estas son muestras de productos que se
ofrecerán en el mercado negro".
"¿M-Mercado negro?"

"En esencia, quiere contrabandearlos".

Clara miró el llamado "manga", sin impresionarse. Tal vez ella sintió que
no podíamos confiar en los motivos de Shinichi. Pero...
"Si en lugar de ordenarme que creara algo que hiciera que la gente fuera
más leal al Rey, me hubieras pedido que pensara en algo que todos
pudieran disfrutar juntos ... con gusto te habría ayudado".
Las palabras de despedida de Shinichi volvieron a mí. En el fondo, era un

payaso audaz y excéntrico. Por eso dudaba que hubiera algún motivo
oculto en esta oferta ilegal. En todo caso, sospeché que él solo creía que
estos libros traerían a todos la mayor alegría.
Y eso fue lo suficientemente bueno.
Fue bueno, periodo.
Audacia y excentricidad: estas eran cosas que, en nuestra prisa por
fortalecer el país, habíamos olvidado, o quizás descartado
deliberadamente. Eran las hojas y ramas que habíamos cortado en nuestro
ferviente intento de fortalecer el tronco del gran árbol llamado el futuro.
Pero las hojas y las ramas fueron las que finalmente dieron flores y luego
semillas. Semillas que se convertirían en los grandes árboles del mañana.
Y así, lentamente, gradualmente, sin fuerza ni intensidad, traerían cambios.
Como árboles jóvenes que brotan repentinamente a lo largo del camino.
"¿Qué vas a hacer, hermana?"
"Una buena pregunta..." Me aparté de Clara. La verdad era que ya me
había decidido. "¿Qué quieres hacer?"
"¿Yo? Te seguiré, hermana ", dijo Clara sin dudarlo un momento. Era como
si supiera por completo lo que había en mi corazón. No pude reprimir una
sonrisa.
"Él es más astuto de lo que lo pensé", dije, pasando las páginas de uno de
los manga distraídamente. “Hablar de contrabando con el país que lo
secuestró. Y hacer de Elvia su punto de contacto, nada menos.”

Su carta decía que periódicamente enviaría a Elvia de regreso a Bahairam

como su mensajero para el mercado negro. Exteriormente, Elvia regresaría
para entregar los materiales que había recogido durante su espionaje. Es
cierto que algunos de estos mangas ya habían llegado a Bahairam a través
de comerciantes del Imperio Eldant, pero obtenerlos directamente de la
fuente de esta manera los haría más baratos, más numerosos y más
accesibles para la gente común.
"Podemos desear que nuestra nación nunca se haya involucrado con un
hombre como él", reflexioné. Si no tuviéramos cuidado, nuestro país podría
verse arrasado, tal vez incluso el mismo Shinichi no lo entendiera
completamente.
No dije nada más, pero cuando comencé a revisar este libro llamado
manga una vez más, incluso finalmente pude ver que la sonrisa en mi rostro
era feliz.
（つづく）
Continuará...

Palabras Del Autor
Hola, novelista ligero Sakaki aquí. Humildemente les traigo el Volumen 5

de Outbreak Company: The Power of Moe.
Manejé esta historia un poco diferente que en el pasado. Bueno, no tan
diferente; Principalmente quiero decir que había múltiples perspectivas.
Decidí tratar a Myusel, que (parece) bastante popular entre los lectores,
como casi un segundo protagonista. Mientras trabajaba con su perspectiva,
me sorprendió encontrarme, bueno, sorprendido por el personaje que
estaba descubriendo.
Quiero decir, por un lado, parece del tipo que podría ser muy violenta
cuando está acorralada. Reviví mentalmente la posibilidad de convertirla
en una yandere.
De hecho, la razón por la que Myusel no usa un 9 mm o un Tipo 89, sino
un Arma automática de escuadrón, comenzó con una solicitud de mi
ilustrador, Yuugen-shi. Lo pensé y pensé que Myusel hizo una temporada
en el ejército, y el trabajo de mucama implica bastante trabajo físico (llevar
mucha ropa, por ejemplo. Además, se supone que usar una tabla de lavar
es bastante agotador), así que Decidí, claro, ¿por qué no?
Sin embargo, dejando de lado las explicaciones complicadas, creo que
todos podemos estar de acuerdo en que una hermosa mitad elfa con un
atuendo de fantasía que lleva un arma enorme es una gran imagen.
Para el registro, el Minimi que Myusel usa (y obtiene a través de Minori),
junto con el equipo de la guarnición Eldant, en mi opinión, se considera que
se obtiene del mismo lugar donde las fuerzas especiales obtienen este tipo
de cosas. Es decir, estas armas no existen oficialmente (en los manifiestos
de JSDF, por ejemplo). Entonces, el Minimi, las armas de fuego, etc.,
técnicamente no son los utilizados por la Fuerza de Autodefensa. Solo un
pequeño detalle obsesivo, no es que haga ninguna diferencia (sonrisa).
Por lo que entonces. Siguiendo la regla de las amenazas cada vez más
intensas, esperaría que el próximo volumen presente un personaje que
amenace la existencia de Shinichi, pero ¿cómo podría suceder eso?
Me encantaría verte de nuevo para el próximo volumen.
Ichiro Sakaki
31 Octubre 2012

Modelo DragónModelo Dragón
Criterios De Diseño
Las partes principales se
mueven a áreas visibles
cuando se transforman en
su forma humanoide, por
lo que debería ser
bastante obvio que se
trata de un robot
transformador.
Ubicación De Las
Piedras Mágicas
Hay seis piedras: en la
cabeza, el cuerpo, los
hombros y cada pierna.

Modo De Pie Modo De Pie

Criterios De Diseño
Esta máquina funciona sobre la
base de seis piedras mágicas
(piedras eléctricas que llevan una
carga) de diferentes tamaños. Se
coloca un marco sobre estas
piedras. El marco y las piedras no
tienen puntos físicos de
contacto, por lo que cuando
se transforma de humanoide
a forma de dragón o
viceversa, el marco
simplemente se desplaza
alrededor de las piedras. Es
una forma de transformación
muy poco cordial.
La luz que se puede ver

corriendo alrededor del
cuerpo se desborda de
las piedras internas.
(¿Sería demasiado obvio
por la noche?)

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Derechos De Autor
Outbreak Company: Volumen 5 por Ichiro Sakaki

Traducido por Kevin Steinbach
Editado por Sasha McGlynn
Este libro es un trabajo de ficción. Los nombres, personajes, lugares e
incidentes son producto de la imaginación del autor o se usan de manera
ficticia. Cualquier parecido con eventos reales, locales o personas, vivas o
muertas, es una coincidencia.
Copyright © 2012 Ichiro Sakaki
Ilustraciones de Yuugen.
Todos los derechos reservados.
Publicado por primera vez en Japón en 2012 por Kodansha Ltd., Tokio.
Derechos de publicación para esta edición en inglés organizados a través
de Kodansha Ltd., Tokio.
Todos los derechos reservados. De conformidad con la Ley de Derechos
de Autor de los Estados Unidos de 1976, el escaneo, la carga y el
intercambio electrónico de cualquier parte de este libro sin el permiso del
editor es piratería ilegal y robo de la propiedad intelectual del autor.
J-Novel Club LLC
j-novel.club
El editor no es responsable de los sitios web (o su contenido) que no
sean propiedad del editor.
Ebook edición 1.0: septiembre de 2018

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OUTBREAK COMPANY WORLD PROJECT

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 1

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 2

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 3

Capítulo I: Bueno, Saben Que: ¡Es Otro País! ............................................... 5

Capítulo II: El País Llamado Bahairam ......................................................... 65

Capítulo III: Elvia y Amatena ....................................................................... 108

Capítulo IV: El Gran Rescate De Shinichi ................................................... 162

Epilogo: Invasión Cultural Redux ............................................................... 200

Palabras Del Autor ....................................................................................... 209

Modelo Dragón ............................................................................................. 210

Modo De Pie .................................................................................................. 211

Acerca De J - Novel Club ............................................................................. 212

Derechos De Autor ....................................................................................... 213

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 4

Capítulo I: Bueno, Saben Que: ¡Es Otro País!

Mi vida normal terminó cuando abrí los ojos.

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 5

¿Entonces todo era realmente solo sueños, ilusiones, burbujas y sombras?

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 6

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 7

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 8

bestias. Ella tenía la naturaleza amigable y extrovertida que buscas en una

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 9

Antes de darme cuenta, me había dejado llevar por un panegírico que

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 10

Esto no me llevaba a ninguna parte. Decidí interrogar a la niña.

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 11

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 12

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 13

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 14

El Reino de Bahairam, si recordaba mi geografía, era un país vecino del

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 15

"P-P-P-P-Pero, ¿por qué harías eso?"

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 16

"¿Pero qué está pasando aquí...?" Ante esta situación desconcertante, la

Mi nombre es Kanou Shinichi

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 17

Pensarías que sería el descubrimiento del siglo, ¿no? El gobierno japonés,

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 18

Entonces fue que el gobierno japonés decidió hacer de la cultura otaku el

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 19

primer ministro Zahar, entre otros, y no podía soportar el idea de

Después de que 2P Elvia, quiero decir, Amatena, salió de la habitación, me

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 20

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 21

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 22

—Deslució la imagen de una criada medio elfa.

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 23

Hacen la comida, o lavan la ropa, o limpian la casa, ocasionalmente son

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 24

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 25

"Es... ¿Es esto lo que quisiste decir con 'servirme'?"

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 26

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 27

Y sí, Myusel especialmente me dio estas sonrisas tímidas que eran

Su Majestad Exaltada la Emperatriz, sentada en su trono, tenía una

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 28

Ver a Su Majestad reír alegremente es de verdadera elegancia. Pero de la

VOLUMEN 5 - LIGHT NOVEL 29