Módulo II BIO (1)
Módulo II BIO (1)
Módulo II BIO (1)
llama: “la enfermedad del turista”. Porque unos viajan y no la padecen y otros sí. La respuesta que
nos dan es que unos se adaptan y otros no. ¿Por qué?
Ejemplo de Enric Corbera: Recuerdo que hace años llevaba a la India a 50 personas. Les comuniqué
que no era obligatorio vacunarse de nada para ir a este país y que cada uno actuara según su
conciencia. Había una persona cuyo paradigma era protegerse de las enfermedades mediante
vacunas y su familia hizo la presión necesaria para que se vacunara de todo lo que hiciera falta
para que no se pusiera enferma.
Partimos mi mujer y un servidor con estas 50 personas, de las cuales solamente una se había
vacunado. Solamente decir que la única que se puso enferma fue la que se vacunó y estuvo la mayor
parte del viaje, perdiéndose de las actividades programadas, porque estaba en cama. Podemos
sacar varias conclusiones, cada uno que saque la que esté en concordancia con sus creencias.
Entonces ¿qué es el Inconsciente Biológico? No he respondido a esta pregunta directamente, pero
sí que lo he hecho indirectamente. Voy a seguir en esta línea, para que cada uno llegue a su propia
conclusión y sienta en su interior lo que es el IB y como lo debe entender. Hago esto para no crear
un bloqueo emocional con relación a una definición. Particularmente, al menos hoy, no creo en una
sola definición de lo que es el IB.
El artículo que refiero abajo dice: “Los elefantes ya no nacen con colmillos” y sigue, “cada vez
nacen más elefantes sin colmillos debido a la caza furtiva para apoderarse de sus colmillos. Los
elefantes machos con grandes colmillos tienen más posibilidades de ser matados. Del mismo modo
tienen más posibilidades de vivir aquellos que los tienen más pequeños o simplemente nos los
tienen. Por este motivo, cada vez que nacen elefantes sin colmillos no se debe a la evolución
natural, sino a la acción del hombre ”. El investigador sigue. “En África el 30% de estos animales no
llegan a desarrollar nunca los colmillos”.
Curiosonamente este investigador a esta acción no la llama natural, si no artificial. Será que el
hombre debe ser artificial y que la voluntad de éste, aunque podemos poner muchas dudas, no es
natural. Lo que sí está claro es que el hombre afecta al ambiente de estos animales de una forma u
otra y que éstos se adaptan. Todo ello gracias al Inconsciente Biológico, que en función de lo que
acontece, da soluciones biológicas con sentido. El sentido es adaptarse o morir.
Pero ¿Cómo se activa? ¿Qué o cual es el medio de comunicación para que los genes decidan mutar,
para dar una solución biológica de adaptación?.
Las Emociones
Son las responsables de la activación de nuestros genes, ellas son la señal que nuestro IB
interpreta. Solamente podemos experimentar dos emociones. Amor y Miedo, todas las demás
derivan de ellas. La emoción del amor tiene una frecuencia vibratoria más alta y rápida que la
emoción del miedo, que es más baja y más lenta. Las frecuencias vibracionales de nuestras
emociones afectan a nuestra biología y en función de la intensidad o duración llegan a producir
verdaderos cambios físicos. ¿Acaso hay alguien
que piense que los elefantes u otras criaturas no tienen o experimentan emociones?
He visto multitud de documentales, en los cuales se ve como los animales por muy bajos que estén
en la escala de la evolución experimentan algún tipo de emoción primaria. Recuerdo como un tipo de
lagarto del desierto, permaneció junto a su pareja, que había sido atropellada, hasta que se murió.
Existen 64 códigos posibles de aminoácidos en nuestra estructura de ADN. Por lógica, todos
deberíamos tener estos 64 códigos activados, pero en realidad solamente tenemos 20. De todas
estas posibilidades parece que solamente 20 están activados en este momento. Parece que hay un
interruptor que apaga y enciende donde estos códigos se sitúan y este interruptor son las
emociones.
Por lo tanto, como la emoción del miedo es de frecuencia baja y lenta, toca pocos códigos y el amor
todo lo contrario. Un individuo que vive con miedo tiene pocos códigos activados y no encuentra
soluciones, mientras que el individuo que vive en el amor, está más despierto y receptivo a
encontrar soluciones en su vida.
Veamos un esquema de todo lo dicho:
Las emociones son cuánticas, no conocen ni el tiempo, ni el espacio. Por ejemplo, hoy podemos
experimentar todas las emociones porque hemos tenido un gran desengaño, un gran disgusto y este
choque emocional produce una congelación neuronal que permanece de forma inalterable en
nuestro inconsciente, quedando muchas veces latente. Pasa a ser activada otra vez cuando el
acontecimiento se repite, aunque sea de una manera más suave. Cuando se activa, desencadena una
respuesta en el ADN y
éste da una respuesta de adaptación en forma de síntoma físico que nosotros llamamos
enfermedad.
La enfermedad surge cuando no somos conscientes de que empleamos ciertas emociones, porque
éstas no son políticamente correctas. Decimos entonces que entramos en incoherencia emocional,
porque lo que pensamos, decimos, sentimos y lo que hacemos no está en coherencia con lo que
realmente queremos hacer, sentir y pensar. Muchas veces nuestros sentimientos y pensamientos
son unos y nuestras acciones son otras y esto hace que la incoherencia se muestre en nuestros
cuerpos en forma de malestares físicos. No comprendemos o no queremos ser conscientes de que
a los únicos que nos engañamos somos a nosotros mismos.
Obviamente nuestras emociones están mediatizadas por nuestras creencias, tal como decía
anteriormente y que en la mayoría de las ocasiones nuestras actuaciones son en función de lo que
creemos que tenemos que hacer y esto es solamente miedo. El miedo a no ser aceptados, a no ser
amados, a perder el cariño de las personas, a no ser reconocidos y a un sinfín de varias
matizaciones de todo lo anterior.
Por eso el trabajo de la Biodescodificación es desentrañar estas emociones ocultas, reprimidas y
que se hallan en nuestro inconsciente. Estas luchan para manifestarse, para decirnos que nos
estamos mintiendo, que nos estamos engañando, que nuestras acciones pueden ser correctas
socialmente, pero que son corrosivas para nuestra salud.
Emociones y sentimientos como la culpabilidad, una de las más corrosivas, la que controla nuestras
vidas y que tan comúnmente se refleja en nuestra biología.
La Biodescodificación nos enseña a que debemos ser responsables de nuestros pensamientos, de
nuestros sentimientos y de nuestras emociones y por descontado de nuestros actos. Cuando nos
encontramos enfermos, debemos reflexionar y pensar en dónde no somos coherentes. Aquí reside
la clave de nuestra curación.
Por eso nuestro estudio está dirigido a buscar que situación hemos vivido de una forma conflictiva
que produce una sintomatología y qué emoción hay detrás de ella.
Obviamente es orientativo, pero sí que nos ayuda a situarnos en el contexto previo antes de
nuestro malestar físico y allí buscar en qué no fuimos impecables con nosotros mismos. Por lo
tanto, debemos ser muy conscientes y tener mucho cuidado de las emociones, pensamientos y
sentimientos que tenemos, así como de las acciones de las personas que nos rodean. La física
cuántica nos demuestra que lo que pensamos afecta a lo que nos rodea y por lo tanto a nuestras
vidas.
Debemos huir del simplismo de creer que detrás de un síntoma hay un conflicto y una emoción
determinada. Un conflicto determinado puede provocar diversos síntomas, todos ellos diferentes
en función del individuo que los viva. Es decir, no todos vivimos una situación de la misma manera,
esto depende de multitud de factores. La idiosincrasia del individuo determina esta vivencia y por
lo tanto el estado emocional consiguiente.
Por ejemplo:
Diversas personas experimentan la misma emoción, por ejemplo, rabia delante de un determinado
conflicto como puede ser la pérdida de poder adquisitivo.
Esta emoción es la emoción que todos podemos observar de forma objetiva, pero detrás de esta
rabia cada persona tiene una emoción diferente, la emoción oculta, la que no nos atrevemos a
expresar. Esta emoción es la que hace disparar diversas situaciones físicas en función de cómo
cada individuo lo viva.
Una persona puede ser digestiva y hace un síntoma en el estómago. Otra puede sentirse
desvalorizada y su síntoma físico puede ser un dolor osteo-articular.
Otra persona lo vive como una amenaza de pérdida de territorio y tiene un síntoma respiratorio.
Otra persona lo puede vivir con miedo y hace un problema de laringe y otra simplemente ve una
oportunidad donde los demás ven un contratiempo y simplemente cambia y tiene un ligero malestar
digestivo.
Es importante comprender que no hay un listado de emociones ocultas y un listado de emociones
que mostramos. Todas se pueden manifestar de una forma u otra. Lo importante es encontrarlas y
poder expresarlas a viva voz o por escrito. Es la forma de hacerla consciente y darnos cuenta de
qué es lo que reprimimos. Debemos permitirnos volver a sentir esta emoción, pero esta vez de
forma consciente. Por eso la llamamos resentir, que quiere decir volver a sentir.
Una vez somos conscientes de esta emoción oculta, una vez somos conscientes de la falta de
nuestra coherencia, podemos pasar a la siguiente fase que es sanarla. Para sanar nuestras
emociones, las que nos enferman, es necesario cambiar nuestra percepción. Para ello hay que
buscar el motivo oculto que me impedía actuar de esta manera determinada y comprender que hay
otras maneras. No hay una manera
buena, ni una manera mala. Hay una manera que nos enferma y hay una manera que nos cura. Por
eso la enfermedad nos viene a curar, es la que nos hace ser sinceros con nosotros mismos. En mi
vida hay multitud de personas que me han dicho que su enfermedad les ha cambiado la vida y que
desde entonces son otras personas, sobre todo son más sinceras con ellas mismas y por lo tanto
con los demás.
Como nos dice Gregg Braden en su libro La Matriz Divina: “el lenguaje de la conciencia parece ser
la experiencia universal de la emoción”. Además nos dice también que “podemos explotar su poder
creativo a través del lenguaje de nuestras emociones”.
Todo ello me hace pensar que la emoción con la que recubro mi recurso para poder cambiar la
emoción que me ha enfermado, debe estar exenta de todo juicio y de ego.
Cuando alguien comprende que la situación dolorosa que está viviendo es como consecuencia y
creación del mismo, lo único que le queda hacer es perdonarse y liberarse.
Gregg Braden nos demuestra en su libro, lo que desde la antigüedad ya se nos venía diciendo: “todo
está unido”, “la parte contiene el todo y el todo está en cada parte”. Tu divinidad está dentro de ti
y se expresa, aparentemente fuera de ti. Por lo tanto lo que ves fuera es el reflejo de lo que hay
dentro. Vemos la paja en ojo ajeno y no vemos la viga del nuestro. Los pecados que condenamos son
nuestros propios prejuicios y éstos están dentro de nosotros. Sana tu mente y tu cuerpo sanará.
Si no te gusta lo que ves afuera, cambia tu forma de pensar y tu universo cambiará. Podría seguir
nombrando frases parecidas, pero con estas creo que ya es suficiente. Todas ellas forman parte
de una sabiduría común, expresada a lo largo del tiempo.
Experimentamos el mundo gracias a las emociones, ahora nos toca aprender a experimentar el
mundo con las emociones que nosotros queramos y no con las emociones que hemos sido
programados por nuestros padres, por nuestros ancestros.
Es el momento de liberarnos de las ataduras que condicionan y siguen haciéndolo en nuestras vidas.
Debemos dejar de preguntarnos: “¿qué hecho yo para vivir esta situación?” Para pasar a: “¿cómo
he de cambiar mi vida para que esta se manifieste de otra manera?”. Es un acto de madurez, es un
acto de crecimiento, es el acto de despertar a la conciencia de que todas las cosas no nos suceden
por casualidad.
Con todo ello quiero decir, que una vez que hemos comprendido qué es lo que hay detrás de nuestra
enfermedad, la emoción reprimida, cuando ya comprendemos, entonces debemos pasar a la acción.
Debemos ser testimonio de nuestra nueva percepción, de nuestra nueva creencia, de nuestra nueva
forma de entender y ver la vida. No basta con saber hay que ser, hay que actuar, hay que vivirlo.
Entonces se abre la puerta de nuestra sanación.
Una cosa más y ésta es muy importante. Las emociones pueden llegar a ser muy sutiles, de una
sutilidad que nos hace estar muy alerta a todo lo que nos sucede en nuestra vida cotidiana. Cuando
más conscientes somos, más rápidamente actúa nuestro IB y con más precisión. El IB nos hace ser
sinceros con nosotros mismos, nos hace ser impecables, nos enseña a mostrarnos como realmente
somos y sentimos que somos. Ya no hay más tapujos, ya no hay más excusas, ya no hay más
justificaciones, por fin comprendemos que no debemos gustar a nadie, solamente a nosotros
mismos.
Ya no hacemos las cosas porque debemos o creemos que debemos, las hacemos porque las
sentimos. Si un día hacemos algo que no nos gusta, simplemente seamos plenamente conscientes de
lo que estamos haciendo y no pasa nada.
problema de otra persona sufriendo. Lo único que va a conseguir es ponerse enferma y agravar el
problema. Antes había uno, ahora ya hay dos. La empatía hay que saberla utilizar.
Muchas personas me preguntan: “¿cómo puedes soportar la enfermedad de las personas que te
vienen a ver y no ponerte enfermo?”. La respuesta es muy simple: si me pongo enfermo mis
pacientes van a ver enfermedad, ¿entonces cómo se van a curar? Debo ser el espejo en el cual
ellos vean reflejado la fuerza que ellos tienen en su interior para sanarse. Además yo no creo en la
enfermedad tal como ellos la ven. Es necesario mostrarles otro paradigma para que ellos puedan
vivirlo y liberarse.
La Biodescodificación, en este punto es muy ecléctica, podemos utilizar varias técnicas y siempre
será la intuición del terapeuta la que dirá cuales emplear.
Debe quedar claro que nuestro trabajo es de toma de conciencia. Cuando nuestro cliente
comprende la influencia que ejercen todos nuestros ancestros y como el inconsciente familiar
guarda memoria de todos los hechos importantes, nuestro cliente está en posición de desarrollar
un nivel de conciencia más elevado.
Tenemos claros los aspectos que debemos revisar de la historia del paciente y como tratarlos.
Pedimos a nuestro paciente que nos lleve su árbol genealógico. Como dice Alejandro Jodorowsky:
“Todo el mundo debería conocer su árbol genealógico. La familia es nuestro cofre del tesoro o
nuestra trampa mortal”. Por lo tanto lo primero que pedimos es el desarrollo del árbol genealógico,
al menos hasta la 3ª generación.
En él deben figurar nombres fechas completas de nacimiento y muerte. Si hay abortos, muertes
prematuras. Lo más importante son los “secretos”, los “no dichos”, hay que desenterrarlos, tales
como incestos, robos, herencias, abusos sexuales, matrimonios impuestos, relaciones
extramatrimoniales, etc.
Un segundo aspecto a tratar y personalmente, para mí, el más importante es el Proyecto Sentido.
Hay que entender el PS como la etapa que va desde unos meses antes de la concepción hasta los
3/7 años de edad. Es muy importante saber el estado emocional de mamá, como se sentía, cuáles
eran sus miedos, sus temores, sus “no dichos”. En este estadio de evolución familiar, el individuo
está sometido a dos fuerzas, la fuerza de la fidelidad familiar que actúa desde el pasado y la
fuerza creadora de la Consciencia Universal que es la que nos hace individuos únicos.
Normalmente cuando le pido a mis clientes que hablen con sus madres, la mayoría de las
respuestas son las mismas: “todo bien”, “fuiste deseado”, “con papá normal”, etc.
Hay un bloqueo para ocultar estas emociones y sentimientos que no queremos o no sabemos
expresar.
Voy a citar un ejemplo para dar mayor luz a lo que estoy exponiendo.
Ejemplo: es una Sra. de 40 años con un cáncer de cuello de útero. Es un conflicto que pertenece al
4º estadio (lo explicaré más adelante). El cáncer de cuello de útero es un conflicto de “frustración
sexual”, también conflicto de “no ser la elegida” y también conflicto de “relaciones consideradas
sucias”.
Cuando le digo esto mismo a mi clienta, ella contesta que sus relaciones siempre han sido así y que
antes del diagnóstico tenía una relación con malos tratos. Después de explicarme éstos y algún
asunto más, le dije: creo sinceramente que este conflicto lo tienes programado en el vientre de tu
madre,
¿Cuál es la historia de tu madre cuando estabas en su vientre?. Así termina la consulta.
En la siguiente consulta la Sra. ya ha hablado con su madre y como me esperaba, todo perfecto. Le
pedí que me explicará en qué situación vivía su madre cuando estaba embarazada de ella.
Lo vi enseguida, su madre se marchó de casa joven y se casó enseguida con su padre (20 años), se
queda embarazada de ella en el viaje de novios. Su madre le dice a su marido que debe estudiar
más y ella también lo hace. Le digo: “tú tienes un programa de tener a un macho que no está a tu
altura”. Fue como si
le diera una bofetada. Me contesta: todos los hombres que he conocido he sentido esto, no
estaban a mi altura. Mi madre nos ha exigido a mi hermano y a mí que estudiásemos, si yo no
sacaba un 10, es como si hubiera suspendido.
Todas mis parejas eran unos ignorantes con respecto a mí.
Le sigo diciendo, además viniste en muy mal momento, recién casada con 20 años, tú molestabas a
mamá. Su respuesta fue la misma que la anterior, lo resintió y me dijo esto yo siempre lo he
sabido, con mi madre siempre ha habido un odio-amor. Ahora lo veo claro, ahora sé lo que me
querías decir, ahora sé lo
que resiento: siempre he odiado a mi madre, no sabía porque, ahora lo sé y también sé lo que ella
pasó y como ha vivido la relación con mi padre. Para ella la relación era frustrante, su pareja no
estaba su nivel.
Terminado le dije: es como si llevaras un cartel en la frente que dijera: “busco pareja inferior a mí
y que me desvalorice”. Ahora, le dije, lo mejor que puedes hacer es volver hablar con tu madre y
permitirle que ella resienta todo esto que tú hoy has vivido. Si ella no quiere, no pasa nada, lo
importante es que tú hayas tomado conciencia.
El siguiente paso es hacer una hipnosis, una hipnosis Ericksoniana, no conductista, sí naturalista. En
ella se le pide al inconsciente que le muestre a nuestro cliente aquellos aspectos ocultos y las
relaciones que hay que romper y/o cambiar emocionalmente. Se le da un recurso en esta misma
hipnosis y dejamos que el inconsciente biológico actúe.
Otro paso importante es el estudio de la vida contemporánea de nuestro cliente. Allí vamos a
buscar el conflicto desencadenante (CD) y todos los conflictos programantes (CP). Estos últimos
son aquellos con los que la persona recibe el shock emocional, pero no produce síntoma físico.
Queda en el inconsciente como una alarma y cuando ésta se produce, entonces se desencadena la
enfermedad (CD).
Cuando la persona ha realizado todo este trabajo, que en algunas personas se puede hacer en una o
dos sesiones y en otras ni a la de tres, empieza la terapia de cambio de valores y creencias y que
éstas se pongan en acción. La persona debe ser testimonio de ella misma frente a su mundo y
frente al mundo. La persona entra en coherencia emocional y entonces y solamente entonces
podemos empezar a hablar de curación.
Cuando digo curación, lo digo con la plenitud de la palabra, curación integral, curación de plena
consciencia. La persona vive su vida, aparentemente es la misma, pero todos los acontecimientos
han cambiado, todo ya es diferente. Está en coherencia emocional. Nuestro cliente al hacer el
cambio emocional con respecto a los acontecimientos de su vida, sean estos conscientes o no, actúa
sobre su cuerpo y accede a la curación.
“La relación entre las emociones y el ADN trasciende los límites del tiempo y del espacio”. Gregg
Braden (La Matriz Divina)
“Toda enfermedad tiene su origen en la separación. Cuando se niega la separación la enfermedad
desaparece”.
En biodescodificación trabajamos con diferentes tipos de conflictos que están detrás de los
síntomas físicos que tratamos y es interesante comprenderlos para entender cómo funciona la
dinámica de las enfermedades, porque se nos repiten ciertas situaciones, como nos afectan
algunas vivencias…
Así en primer lugar nos encontramos con el conflicto programante, que como su nombre indica es
el conflicto que programa o graba cierta información en el inconsciente y es muy probable que no
provoque ningún síntoma.
Normalmente se vive en edades tempranas (a menudo durante el periodo del proyecto sentido) o
en la adolescencia, que son etapas donde el ser humano experimenta cambios muy importantes,
somos muy sensibles a emociones, experiencias y situaciones en nuestra vida… además nuestra
mente y la nuestra biología están muy receptivas y funcionan muy a la par.
El conflicto programante normalmente no produce la enfermedad, es sólo la huella, el impacto
emocional…, aunque hay situaciones tan importantes en la vida de una persona que un conflicto
puede ser a la vez programante y desencadenante.
El conflicto desencadenante es un conflicto que guarda relación con un programante,
probablemente tenga el mismo tono que el primero y cuando aparece, desencadena la enfermedad
como una reacción biológica de supervivencia. Es el que abre el programa creado por el conflicto
programante y lo pone en marcha.
Es muy importante empezar por el conflicto desencadenante, ya que es el que nos llevara al
conflicto programante, pero en realidad el conflicto importante que hay que resolver es el
programante y la vida nos pone en situaciones que nos lleven a revivir ese conflicto inicial para
poder finalmente resolverlo.
Por ejemplo una persona adulta tiene hemorroides por primera vez a los 28 años a raíz de una
situación en el trabajo en la que se siente excluido de sus compañeros y no encuentra su lugar en la
empresa. Esto sería claramente un desencadenante y cuando buscamos en su historia encontramos
una situación muy parecida con sus hermanos (es el pequeño de 5 hermanos a 6 años del siguiente)
y luego, en un cambio de colegio a los 14 vuelve a haber una situación muy parecida en la que se
siente excluido y sin lugar en el grupo. En este caso, el programante es la situación con sus
hermanos cuando el tenía 7 años.
El miedo
La principal causa de muerte en las personas que cursan uno o varios SBS (Programas Especiales
de la Naturaleza con Sentido Biológico), ya sean "cánceres" o "enfermedades" catalogadas por la
Medicina oficial como: "graves" o "crónico-degenerativas", es el profundo miedo que sienten a
partir de la "tríada mortal" consistente en:
1- Diagnóstico.
2- Pronóstico.
3- Tratamiento.
Esta situación les provoca un sentimiento de no tener salida y de profundo miedo a morir, que las
hace entrar en un estado de caquexia por híper metabolismo y que las lleva a consumirse y morir
en poco tiempo, generalmente en el tiempo pronosticado por la Medicina oficial.
La diferencia entre estar muerto de miedo e hipnotizado por los principios y protocolos oficiales y
estar deshipnotizado y despierto a la realidad de las Leyes Biológicas, puede ser la DIFERENCIA
entre la VIDA y la MUERTE.
El conocimiento en profundidad de las Leyes Biológicas no solo provee al individuo de una gran
tranquilidad y seguridad con respecto a los procesos biológicos que pueda estar viviendo, sino que
se convierte en un poderoso factor de prevención.
"El miedo es el único adversario verdadero de la vida, solo el miedo puede derrotar a la vida"
Yann Martel (Live of Pi)
El cambio de paradigma
Es importante tener en cuenta que nos encontramos en un momento de transición muy delicado:
oficialmente estos conocimientos aún no son considerados por las autoridades de salud. Por lo
tanto, si tenemos una sintomatología importante que requiera de apoyo clínico y hospitalario,
debemos saber que, por regla general, no seremos ayudados con base a estos conocimientos en los
centros de salud.
En este momento histórico, solo aquellos que están suficientemente informados pueden elegir de
manera responsable como afrontar los SBS que tengan en curso, tomando en sus propias manos su
existencia; y habiendo adquirido el conocimiento necesario, podrán también encontrar al médico
debidamente preparado que, como parte de su profesión, podrá apoyarlos con eficacia en
situaciones de urgencia y respetar su voluntad.
Gracias a la aplicación de los conocimientos de las Leyes Biológicas ahora tenemos un modelo de
referencia con precisión milimétrica, tanto en la indagación como en la verificación puntual de cada
síntoma, el hallazgo clínico o el cambio de comportamiento en relación con la experiencia personal
del individuo.
Las 5 Leyes Biológicas, descubiertas por el Dr. Hamer, son precisas; unívocas; verificables y
científicamente medibles, no pueden ser tergiversadas. Podrán ser mejor entendidas, pero
permanecen siendo tal cual han sido expuestas.
Estamos en la transición del viejo paradigma de la "enfermedad" causada por los microbios, el
sistema inmune débil o la ausencia de causa conocida al nuevo paradigma biológico-científico
basado en las Leyes Biológicas descubiertas por el Dr. Hamer.
Este programa especial se inicia a partir de un shock biológico que representa una amenaza real a
la supervivencia o es percibido de forma arcaica como una amenaza a la supervivencia y que es
válido para todos los seres vivos, que tiene las siguientes cuatro características:
- Inesperado: es algo que sorprende, que no se espera o se ve venir, no hay tiempo para
prepararse y no puede ser gestionado y coordinado a tiempo por nuestra mente analítica (psico -
lógica - mente).
Basándose en el estudio de decenas de miles de casos, el Dr. Hamer descubrió que la psique, el
cerebro y el órgano constituyen una unidad, con Programas Biológicos Especiales para asegurar la
supervivencia. El cerebro actúa como un mediador entre la psique y los órganos, como la estación
de control biológico desde la que estos antiguos programas de emergencia son dirigidos y
coordinados.
Que aparezcan los círculos concéntricos que evidencian los Focos de Hamer en los relés
cerebrales en la Fase Activa, no significa que en el cerebro anatómicamente existan estos círculos
concéntricos, sino que son la imagen que en la tomografía produce algún proceso que se está
llevando a cabo a nivel cerebral cuando hay un conflicto biológico y cuya naturaleza (que pudiera
ser bioeléctrica, electromagnética o electro fisiológica) se desconoce actualmente.
Esa imagen no significa que en el cerebro haya células formando círculos concéntricos. De la misma
manera que la imagen que usted ve en su televisor cuando observa un juego de fútbol no significa
que si abre el televisor y lo revisa por dentro encontrará un balón o una portería; pero la imagen
que observa del jugador corriendo y pateando la pelota no sólo es un "artefacto" creado
accidentalmente por el televisor, sino que depende existencialmente también de lo que el jugador
haga en el juego. Hay un hecho real y objetivo que sucede, y que puede ser "captado" y
"transmitido" a través de un aparato de televisión.
propósito biológico de cada SBS es variar la función del órgano relacionado con el conflicto, de
forma tal que el individuo esté en mejores condiciones de afrontarlo y sobrevivir.
También pueden verse en la TAC los Focos de Hamer en forma de diana (círculos concéntricos) en
la Fase Activa en algunos órganos compactos.
La 1ra Ley demuestra que existe un sistema biológico completo y perfecto, a tres niveles: psíquico,
cerebral y orgánico, desarrollado para garantizar la supervivencia de los individuos, las manadas y
las especies. El sistema siempre existió, y ha sido desarrollado y perfeccionado por la Naturaleza
durante millones de años de evolución. El Dr. Hamer tuvo la sagacidad y la genialidad de
descubrirlo y divulgarlo para el bien de toda la humanidad.
Lo que define qué Programa Especial de la Naturaleza se activará en el momento del DHS está
dado por la percepción de la persona, que puede estar influida por su experiencia de vida,
idiosincrasia, creencias, valores, religión, condicionamiento social y cultural, conocimiento,
expectativas, vulnerabilidades y muchos otros factores que contribuyen a la percepción subjetiva
y a la interpretación de la situación conflictiva. Sin embargo, las creencias por sí solas no son
capaces de activar un programa biológico extraordinario, porque los SBS no son "disfunciones",
sino que siempre tienen un sentido y una utilidad biológica: la supervivencia del individuo o la
manada.
Un evento puede generar más de un DHS y activar varios SBS, según nuestra percepción
individual, impactando a la vez varias zonas cerebrales y sus correspondientes órganos, dando
como resultado diferentes procesos biológicos extraordinarios independientes.
Con el transcurso del tiempo cada SBS tomará un curso determinado y autónomo, independiente
del resto de los programas especiales, presentando diversos síntomas según el tejido embrionario
y la fase en que se encuentre el SBS:
Un DHS con su correspondiente implicación orgánica puede producirse por una amenaza real o
simbólica. Por ejemplo, podemos activar la mucosa nasal con su correspondiente ulceración por algo
que huele mal, que apesta realmente; pero también porque algo que se dijo o que se hizo nos "huele
mal", "¡esto apesta!".
Si el conocimiento de que existe un SBS en curso es conflictivo para la persona, se generan nuevos
procesos biológicos especiales secundarios. Por ejemplo, la noticia de que se tiene un cáncer,
activará un nuevo programa especial con su correspondiente FH en la zona cerebral que controla
un órgano específico (lo que en la medicina oficial se denomina metástasis).
Los conflictos biológicos son muy diferentes de los conflictos psicológicos o de las situaciones de
estrés cotidianas. Los problemas psicológicos para los cuales tenemos tiempo de prepararnos (aún
si es sólo por unos segundos) no dejan marca en el cerebro y no causan variación orgánica. Pero, un
cierto problema psicológico puede predisponer a una persona a ser más susceptible a un tipo
particular de shock biológico.
En la Fase Activa, la relación entre la duración y la intensidad del conflicto da como resultado el
concepto de "Masa Conflictual". Mientras más
tiempo dure la Fase Activa o esta sea más intensa,
la masa de conflicto será mayor. Es similar a la
fórmula matemática del cálculo del área MC= D x I
Imaginemos el agua que se acumula en las represas, mientras más grande o larga sea la represa
(duración) más agua cabe; y mientras más alta o profunda sea la represa (intensidad) más agua
cabe (en la Fase Activa). Si de pronto abrimos la compuerta de la represa (Conflictolisis) sale toda
el agua de golpe (hacia la Fase PclA).
La Fase PclA será tan vagotónica (profunda) como simpaticotónica (intensa) haya sido la Fase
Activa.
La Fase Pcl será tan larga como larga haya sido la Fase Activa.
El DHS
Finalmente podemos explicar qué nos hace “enfermar”: la “enfermedad” está generada por algo
muy preciso, Hamer lo define como conflicto biológico. Ningún agente externo, ningún sistema
inmunitario débil, ningún “error” genético, sino algo que sucede de una manera muy precisa. No se
trata ni siquiera de estrés genérico, de un conflicto psicológico o de un trauma; el que se tiene en
consideración en la medicina psicosomática, que intenta desde hace años encontrar una correlación
entre los eventos psíquicos y orgánicos, sin llegar a conclusiones convincentes y verificables.
En efecto, estos tipos de investigaciones no se pueden tomar como decisivas, porque la
“enfermedad” no es el resultado de un estrés o de un “trauma” genérico, sino de un “shock agudo,
inesperado, dramático y vivido con un sentimiento de soledad”, que Hamer ha denominado DHS
(Síndrome de Dirk Hamer, en memoria de su hijo muerto).
Lo nuevo es que este DHS se refiere a un shock biológico inesperado, en el que a la persona (como
cualquier ser vivo), lo toma a “contrapié”. Sucede algo que activa en nuestro sistema una respuesta
automática, sin que haya tiempo para que pueda ser mediado por la mente analítica. Por eso
decimos que es biológico, porque “no hay tiempo” para interpretarlo por la mente (psico - lógica -
mente).
Por ejemplo, si la empresa donde trabajo no funciona bien, los clientes se van perdiendo hasta
llegar a la quiebra; será un hecho que me preocupará, quizás me enfade, pero no me hace
"enfermar" porque no es algo que suceda de manera inesperada. En cambio, si un día voy a trabajar
y sobre la mesa encuentro una carta de despido, en este caso viviré un shock biológico, inesperado,
que me toma sin estar preparado. Por lo tanto, el conflicto biológico tiene connotaciones muy
precisas:
1. Es inmediato e inesperado, esto quiere decir que no tiene el tiempo para ser mediado por la
mente, no es algo que veo llegar y tengo el tiempo de transformar, es algo que me sucede
inesperadamente.
3. La persona en ese momento se siente aislada, separada del mundo, lo vive con un sentimiento de
soledad: en esa fracción de segundo se siente sola ante su conflicto.
Este tipo de conflicto biológico, DHS, es algo que podemos vivir varias veces en un mismo día.
Llegados a este punto hay que eliminar la idea de que el conflicto biológico tenga que ser
dramático, porque es suficiente un pequeño shock para reaccionar instantáneamente a los tres
niveles (psíquico, cerebral y orgánico).
Ejemplo: imagina que entras a un baño público y al abrir la puerta te encuentras inesperadamente
con una persona que lo está usando. En este instante reaccionas de una manera inmediata con
susto, sorpresa. Estás viviendo una situación poco dramática; pero en esa fracción de segundo has
activado, instantáneamente, una serie de reacciones inmediatas, no mediadas por la mente; donde
has entrado en simpaticotonía, bloqueando la respiración, contrayendo los músculos, liberando
noradrenalina. Has tenido toda una serie de reacciones fisiológicas de “alarma” automáticas,
inmediatas.
Si el shock dura solo un instante, es poco probable que se presente alguna reacción en el cuerpo
llamada “enfermedad”.
Otro ejemplo: estoy en una cena e inesperadamente derramo mi copa sobre un amigo. Por un
momento me quedo congelado, sin aire. Nada grave, pero todo mi organismo ya ha respondido. El
DHS, el shock biológico, es sensato y útil.
Estos son ejemplos banales de pequeños incidentes cotidianos, para ayudar a comprender que el
DHS es algo común, que forma parte de la vida, que no es maligno. Representa una posibilidad que
la naturaleza ha predispuesto en nosotros para adaptarnos a las situaciones inesperadas, sean
pequeñas o grandes.
Un evento puede generar más de un DHS y activar varios SBS, según nuestra percepción
individual, impactando a la vez varias zonas cerebrales y sus correspondientes órganos, dando
como resultado diferentes procesos biológicos extraordinarios independientes.
Recordemos cuando vivíamos en campo abierto, donde la adaptación para conservar la vida y
proseguir la especie era más evidente. Estábamos continuamente en una posición de presa o
depredador, con la necesidad de adaptarnos para sobrevivir. El shock biológico activa al instante el
sistema neurovegetativo: simpaticotonía, vasoconstricción, aumento del ritmo cardíaco, manos y
pies fríos; mientras que no me tranquilice tendré dificultad para dormir y comer, manteniendo
pensamientos obsesivos, centrado en el problema. Esto es algo sensato en la naturaleza, porque en
el momento del peligro el animal debe instantáneamente estar alerta y preparado para
contraatacar o escapar. No hay tiempo de comer ni dormir y se ocupa continuamente del problema
hasta que encuentra una solución.
¿Qué le sucedería a un conejo si al ver llegar un zorro se pone a pensar?: “¡Oh, el zorro!... ¿cuál
será la mejor escapatoria?”. Sin embargo, el conejo instantáneamente comienza a correr y no se
detendrá hasta que esté seguro en su madriguera, aún sin saber si el zorro ha continuado la
persecución o se ha detenido. Es un comportamiento de supervivencia sensato, para la adaptación y
el mantenimiento de la especie; justamente de esto se ha ocupado la naturaleza, con intuición y
genialidad, durante millones de años.
El conflicto biológico es la llave del nuevo paradigma.
El concepto de conflicto biológico (no psicológico), producido por un shock inesperado (DHS), es
difícil de comprender para una cultura “psicologizada”, donde se considera que sólo la mente es la
que elabora las situaciones, las analiza y las organiza.
En nuestra sociedad moderna hemos perdido la atención a la experiencia sensorial directa,
mientras que el conflicto del que hablamos es justamente el director, es biológico, no mediado por
la mente. El ser humano, igual que un gato, un caballo, un recién nacido o un feto lo vive de la misma
manera. Por eso Hamer describe el contenido de los conflicto con simple “lenguaje animal”, “no
poder expulsar”, “no poder marcar el territorio”, “sentirse atacado”, “algo huele mal en el aire”,
etc.
Está claro que cuando hablamos del “ser humano”, el sentido animal se traduce con las experiencias
del ser humano de hoy, si para el animal “la falta del bocado esencial” significa efectivamente
morir de hambre, no conseguir alimentos, el ser humano puede sentir lo mismo si quiebra la
empresa, si es despedido del trabajo y se encuentra en la calle. Tanto el animal que no encuentra
alimento como el ser humano que ha perdido su trabajo, ambos reaccionan produciendo, en la Fase
Activa del SBS, adenocarcinomas en el hígado. Esto le permite metabolizar mejor el poco bocado
que entra.
Cuando conocemos el lenguaje biológico, esto se transforma en un ejercicio relativamente fácil,
observamos el DHS de manera inmediata: ha sucedido algo que la persona no esperaba, ha sido
tomada a contrapié y por ese motivo es más fácil recordar y distinguir los otros sucesos
relacionados con ese hecho agudo.
Es verdad que a menudo son situaciones
interpretadas psicológicamente, pero gracias al
conocimiento de las Cinco Leyes Biológicas y la
correlación entre las manifestaciones orgánicas y
el contenido del shock, ahora podemos hacer
preguntas precisas que permiten a la persona
recordar de manera exacta el instante del evento,
con sus connotaciones sensoriales y emotivas, con
los sentimientos profundos que ha vivido en ese
instante (sentido biológico).
El contenido del shock biológico es experimentado
por los animales en forma proporcional con su grado
de evolución. Es con los demás mamíferos que los
conflictos se asemejan más a los de los seres humanos. La diferencia principal entre animales y el
hombre reside en la complejidad del psiquismo humano. Es así como un conflicto de "no poder
conseguir la presa" significa para el animal un hecho concreto de no poder obtener el alimento. El
ser humano, en cambio, acomoda el conflicto a su propia realidad; para él la presa puede ser un
objeto, su casa, el auto, una herencia, una situación profesional, etc.
En el momento del DHS, cuando se vive una situación aguda y dramática que representa sólo un
instante, la supervivencia del individuo se siente amenazada, es un momento extremadamente
significativo desde el punto de vista biológico. El organismo se sensibiliza con esa experiencia y
desde ese momento en adelante los elementos más relevantes se asocian inconscientemente a esa
situación, captados por los cinco sentidos: los objetos, sonidos, olores, colores, sabores,
sensaciones, sustancias de los alimentos, gente involucrada, las condiciones del tiempo, etc,
presentes en aquel instante, permanecerán registrados y conectados con el mismo contenido
emotivo.El organismo se sensibiliza con esa experiencia y desde ese momento en adelante los
elementos más relevantes se asocian inconscientemente a esa situación
Desde ese momento, incluso uno de esos elementos es suficiente para activar el mismo programa
especial biológico sensato. Sobre el concepto de “raíles” se recogen todos los diagnósticos de
“alergias”, y muchas de las consideradas “enfermedades crónicas y autoinmunes”.
En el instante del DHS se activa uno o más programas especiales previstos por la naturaleza para
hacer frente momentáneamente a las “catástrofes” que estamos viviendo.
El DHS es, por lo tanto, el inicio del programa especial, biológico y sensato de la naturaleza (SBS)
que nos prepara con los mecanismos necesarios para contraatacar o escapar. En este mismo
instante se activan los programas especiales específicos para el tipo de conflicto que estamos
viviendo.
Ejemplo: una madre va al supermercado con su hijo, mientras está entretenida el hijo se aleja sin
que ella se dé cuenta. Cuando se da la vuelta ya no lo ve y “se asusta”. En ese mismo instante toda
la lista de la compras queda en segundo plano, su atención se centra instantáneamente en buscar a
su hijo, ¡nada es más importante que él! Lo que vive en ese momento es total. Ese instante
representa un shock biológico, un DHS.
Según como haya vivido ese instante, se activará el programa especial de aquel órgano
biológicamente preparado para compensar ese tipo de amenaza. Resumiendo: el programa que se
active dependerá exclusivamente de cómo lo viva esta persona. Por ejemplo, si siente que el niño le
ha sido “separado del seno” (quizás porque al entrar al supermercado había notado que alguien
miraba a su niño de manera sospechosa), entonces activa el programa de los conductos
galactóforos; en cambio, si se siente “desvalorizada” por no haber estado lo suficientemente
atenta, se activará otro programa especial relacionado con el esqueleto, con los huesos. Si tiene un
sentimiento de urgencia “que no hay tiempo que perder” para encontrarlo antes que un
depredador, entonces se activará el programa relacionado con la tiroides.
El contenido del conflicto biológico es una experiencia subjetiva. La muerte de un hijo, por
ejemplo, se puede vivir de diferentes maneras: como “pérdida” o “ruptura del contacto”. Un
despido imprevisible se puede vivir como una “injusticia”, o como una “pérdida de territorio”, como
“una falta de bocado esencial” o como “haber equivocado el camino”. Una traición se puede vivir
como una “agresión”, como “una mala jugada”, como una “porquería indigesta”, etc.
Por lo tanto, en base al contenido del conflicto habrá una o más respuestas inmediatas, adecuadas
a la situación de urgencia inesperada, y se activará el órgano cuya función biológica sea más
adecuada para hacer frente al problema específico.
Ejemplo: las vías urinarias tienen la función de conducir y expulsar la orina; desde el punto de vista
biológico sirven también para marcar el territorio. Si curso un conflicto biológico relacionado con
“no poder marcar el propio territorio” (por ejemplo: un compañero de trabajo se entromete en mis
labores), se activará un programa especial relacionado con el epitelio de las vías urinarias; si la
intensidad y la duración del conflicto son lo suficientemente importantes, cuando se solucione
tendré una cistitis o una uretritis.
En el 100% de los casos de tumor en testículo y ovario encontramos que el individuo está viviendo
un conflicto de pérdida de un miembro importante del grupo; igual que en el 100% de los casos de
cistitis encontramos que el individuo ha vivido y resuelto un conflicto biológico de no poder marcar
su territorio. Hay que tener en cuenta la percepción de la persona y no el evento. Por eso, no es la
pérdida de un hijo lo que determina necesariamente un problema en las gónadas, como tampoco un
colega invasivo determina un problema en las vías urinarias. Depende sólo de cómo lo viva la
persona y cómo ha recibido esa situación.
Desde este momento atravesó años de intensas investigaciones, desarrolló una larga y articulada
tabla de correlaciones entre psique, cerebro y órgano. ¿Cómo lo ha hecho? Ha sido simple y lógico
para él, como médico ha partido de la función que desarrolla el órgano: los ovarios y testículos son
órganos relacionados con la procreación y la Madre Naturaleza los ha programado para ese
funcionamiento y cuando alguien muere de manera inesperada en el grupo, el órgano aumenta su
función (más hormonas sexuales) y la cantidad de células (más óvulos maduros o espermatozoides)
para poder reemplazar lo antes posible al miembro perdido. Esto sucede igual para cualquier
animal, incluido el humano, que reacciona todavía en base a los mismos programas arcaicos y
biológicos de la naturaleza.
Con estos mismos criterios continuó la investigación durante años, verificando cada manifestación
orgánica y los conflictos vividos. ¡Para cada idéntica manifestación orgánica, se ha comprobado
siempre el mismo hecho y con la misma modalidad inesperada!
El cerebro
El cerebro controla todo nuestro cuerpo, dando los impulsos necesarios para el normal
funcionamiento. Todo tejido tiene un programa originario de funcionamiento normal, ordinario y un
programa especial, extraordinario, para los momentos de catástrofe. El cerebro ha evolucionado
durante millones de años para hacer frente a las transformaciones del ambiente y a las
necesidades de adaptación.
Cuando éramos gusanos de agua, por ejemplo, no era necesario disponer de una piel de protección
para los rayos ultravioletas o un esqueleto con músculos que nos permitiese movernos en el
ambiente terrestre. Por este motivo el cerebro tenía una dimensión reducida respecto a la actual,
porque las funciones eran reducidas.
El cerebro se ha modificado junto con el organismo, se ha ido “ampliando” para poder hacer frente
a las necesidades del ambiente.
Hamer, a partir de la embriología, (por lo tanto, del funcionamiento de los tejidos, los órganos y de
su inervación), ha podido reconstruir y verificar que, según el tipo de emoción (“sentido biológico”
o “contenido conflictivo”) percibido por la persona en el instante del DHS, se activará un órgano
específico “biológicamente adecuado” para hacer frente a aquel tipo de catástrofe.
De una manera coherente se ha podido verificar que cuando un conflicto biológico está activo en la
psique, también el relé cerebral está activo (área cerebral que controla exactamente un órgano
determinado) y se observa en una TAC cerebral un “diseño” en forma de anillos concéntricos. Se
ha podido verificar también que estas señales se modifican de forma en base al proceso que se
está desarrollando en el órgano.
Estos diferentes niveles: psíquico, cerebral y orgánico, actúan sincrónicamente (al mismo tiempo)
en las diversas fases que atraviesa el programa especial biológico y sensato (SBS) de la
naturaleza.
- Son análogos en los seres humanos y los animales. - Son exclusivos de los seres humanos.
Los Programas Especiales de la Naturaleza con Pleno Sentido Biológico (SBS) no son activados por
conflictos psicológicos, sino por conflictos biológicos. Si hay alguna psique que está en juego es lo
que podríamos llamar la psique de la evolución. El sujeto deja de pensar y la evolución piensa por él.
Acuden dos personas que aceptan las condiciones: Juan y Pedro y son contratados de forma
temporal. La empresa incluso les ofrece pagarles el curso en la escuela de inglés del pueblo y la
facilidad de que salgan todos los días más temprano del trabajo durante los tres meses que dure el
curso básico.
Cuando una persona se matricula en una escuela sabe que habrá un examen al final del curso. Es
posible que se preocupe por si el examen será difícil, si aprobará o no, pero tiene tiempo para
estudiar y prepararse para ese examen. La persona al matricularse sabía las condiciones. No hay
nada aquí de dramático, ni situaciones inesperadas. Puede que su preocupación la comparta con
otras personas. Eso es un conflicto psicológico, no biológico.
Juan, quien se siente muy bueno en el dominio del idioma, no se preocupa. Incluso, se alegra de
poder salir temprano del trabajo y en vez de ir a la escuela se va a su casa a descansar o
aprovecha para hacer otras cosas en ese tiempo que le queda libre.
Por el contrario, Pedro, aunque también es muy bueno en el idioma, asiste cada día a clase y aunque
le va muy bien en la escuela, siempre ha sido muy "preocupón" y se pasa esos tres meses
comentando con sus amigos y familiares que tiene temor de que el examen sea muy difícil o de que
le pregunten cosas que no sepa (conflicto psicológico). Estudia mucho y se prepara bien, pero con
la preocupación de que si no le fuera bien en el examen perdería ese trabajo que es muy bien
pagado.
Llega el día del examen y acuden los 30 alumnos de ese curso, incluidos Juan y Pedro. Al día
siguiente publican las listas de los resultados en la entrada de la escuela. Hay 29 aprobados y un
reprobado. Pedro respira aliviado al verse en la lista de aprobados, ocurrió lo esperado y deseado;
todo salió bien y comprobó que sus preocupaciones no tenían sentido, pues se preparó mucho y le
fue muy bien, su empleo está seguro.
Juan al pararse frente a las listas tiene un shock biológico (DHS), pues se encuentra con que es el
único reprobado. Para él es algo inesperado, agudo y muy dramático. Perderá su empleo y hablar
inglés es lo único que sabe (o cree que sabe) hacer bien. Quedarse sin trabajo y sin fuente de
entrada económica es una amenaza a su supervivencia. Piensa que se va a morir de hambre
(adenocarcinomas en el hígado) y se siente muy desvalorizado por no haber sido capaz de superar
un examen básico (huesos del cráneo atrofiando). Después de haberle dicho a todo el mundo que
tendría un examen muy simple y que no necesitaba asistir a la escuela ni estudiar para aprobarlo,
ahora no puede comentar con nadie que fue el único reprobado del pueblo. Juan tiene varios
conflictos biológicos.
En el caso de que Pedro hubiera reprobado, probablemente también tendría un conflicto biológico,
independiente del conflicto psicológico que ya tenía.
En 1978, tras la muerte de su hijo Dirk, que fue un hecho determinante, Hamer padece un cáncer
de testículo y su esposa, que también es médico, desarrolla un cáncer de mama izquierda. Esto
lleva a Hamer a cuestionar cómo es posible que dos personas sanas y relativamente jóvenes,
desarrollen un cáncer y lo relaciona con el hecho traumático de la muerte del hijo de ambos.
En esa época Hamer trabajaba como médico en una clínica ginecológica, por lo que estaba en
condiciones muy especiales para llevar a cabo una tarea de investigación sobre los programas de
seno y ovarios, con los que inició sus descubrimientos. Empezó a hacer algo que, aunque es muy
básico, no lo hacen los médicos en la actualidad: conversar con las personas para saber la opinión
sobre la causa de su "enfermedad". Les preguntó a los que tenían cáncer si han vivido alguna
historia o algún incidente altamente traumático en su vida, anterior a la aparición del cáncer. Para
su sorpresa, encuentra que absolutamente TODOS refieren una historia altamente dramática
previamente.
En una muestra de 100 casos de cada tipo de cáncer todos refieren el mismo tipo de hecho
traumático con los mismos matices, siempre hubo un denominador común. Lo que lo lleva a
comprender inicialmente la relación entre las vivencias de las personas (psique) y el órgano
implicado. Lo más importante es que no hay un promedio de incidencia elevado de un 95 o 98%, que
sería muy importante, sino que es del 100%. Es en este punto donde comprende que está tocando
leyes de la naturaleza, que son absolutas y se cumplen en el 100% de los casos, como la Ley de la
Fuerza de Gravedad.
En la Medicina oficial se trabaja con hipótesis, con axiomas no contrastados, con mucha
especulación. Esto hace que varias personas sometidas a un mismo tratamiento obtengan
diferentes resultados. La medicina es la única ciencia que ha trabajado (y sigue trabajando) sin
leyes, ignorando los descubrimientos del Dr. Hamer.
Hamer comprende la estrecha relación entre la psique y cada órgano y el error de la medicina
oficial de dividir el cuerpo humano en especialidades, perdiéndose así la visión de conjunto.
Hamer, ante la posibilidad de que el cerebro pueda dar alguna señal de lo que está pasando a nivel
psíquico y a nivel orgánico, se sienta un día ante un equipo de TAC y empieza a hacer scaners
cerebrales a quienes tienen una patología no neurológica, cosa que nunca se hace en medicina. Él
está cansado de ver unas imágenes en los TAC que la medicina nunca ha sabido explicar, son
círculos dispersos que se le atribuían a problemas de la máquina. Sorpresivamente, comprueba que
esos "artefactos" aparecían en el 100% de los casos en el mismo lugar cuando analizaba 100 casos
de personas con la misma patología. De esta manera descubre que esas imágenes circulares no son
"artefactos", sino la señal cerebral de lo que ocurre a nivel psíquico y orgánico.
Para descartar la teoría de los artefactos de la máquina fue a la empresa Siemens, que es en
Alemania la compañía más grande que produce todo tipo de aparatos de Radiología. Se pone de
acuerdo con el jefe de ingenieros de esta empresa y se crea un protocolo. Durante seis meses
acuerdan estudiar a personas con dos máquinas diferentes para ver si las imágenes son realmente
artefactos o están en la cabeza del individuo. El protocolo es muy sencillo y hoy puede hacerse en
cualquier servicio de Radiología. Si el artefacto lo está produciendo la máquina y lo produce en una
determinada dirección en relación a la cabeza, se gira la cabeza. Si la imagen se produce ahora en
el mismo lugar anterior se está frente a un artefacto. Si la imagen se mueve junto con la cabeza
es porque el objeto está en ella y no es producto de la máquina. Si se repite la experiencia con
otra máquina diferente y ocurre lo mismo, se confirma el resultado.
Lo que se había planeado como un protocolo para seis meses en dos meses quedó resuelto,
comprobándose así el descubrimiento de Hamer de que las imágenes eran la señal de las
afectaciones orgánicas. Quedando así definida la 1ra Ley Biológica.
Hamer continúa investigando a gran velocidad y descubre que la "enfermedad" es un proceso
bifásico. La imagen del cerebro puede ser de dos formas:
- En forma de diana, círculos con un punto en el medio.
- En forma de mancha, un círculo con una mancha negra, un edema cerebral.
Los que lo tienen en forma de diana tienen el conflicto activo, están viviendo la situación
conflictiva en ese momento. Si se pregunta sobre el contenido del conflicto, este da una respuesta
de este tipo: "sí, todavía estoy enojado con mi hermano" o "yo todavía estoy pendiente de la
herencia de mi tía". Esto ocurre en el 100 % de los casos.
Los que lo tienen en forma de mancha han tenido el conflicto pero lo han resuelto. Esto también
ocurre en el 100 % de los casos. De esta manera Hamer descubre la 2da Ley Biológica.
En esta fase de investigación Hamer encuentra algo que no concuerda. Muchas veces está el
conflicto solucionado; con su imagen cerebral en forma de mancha; a nivel psíquico, hablando con la
persona, esta relata que tuvo el conflicto pero que ya lo ha resuelto; y en ese momento empiezan a
aparecer los síntomas a nivel orgánico. A veces no existe relación entre el estado emocional, el
estado cerebral y los síntomas. En la Fase Activa no han dado señal, sin embargo en la Fase Pcl
empiezan a dar sintomatología.
Cuando Hamer llevaba observados alrededor de 10,000 casos, y después de haber trabajado de
forma puramente empírica, documentando sistemáticamente todos los casos, coleccionando los
escaneos cerebrales y los resultados histológicos; los reagrupó y comparó, comprobando que se
desprendía de ello un resultado impactante que hasta entonces se hubiese creído imposible: ¡que
existía un sistema!
Muchos desarrollaban durante la Fase Activa un tumor compacto, una proliferación celular. Otros,
en cambio, proliferaban durante la Fase Vagotónica, tras la Conflictolisis. Y difícilmente podía
tratarse de lo mismo. Existían dos clases de proliferación celular: un tipo de proliferación celular
en la Fase Simpaticotónica, de actividad conflictual; y otro tipo de proliferación celular en la Fase
Pcl de aquellos procesos biológicos que durante la Fase Activa habían tenido una reducción celular
(atrofia, úlceras). Estas "enfermedades" presentaban proliferación celular en la 2da Fase, con lo
que empezó a comparar incansablemente estos diversos fenómenos.
Hamer acabó por descubrir el sistema de funcionamiento. Constató que los tumores que se
formaban durante la Fase Activa por proliferación celular tenían siempre sus relés cercanos uno
de otro en el cerebro, concretamente en el Tronco Cerebral y en el Cerebelo. Estas dos partes del
cerebro constituyen en su conjunto lo que denominamos el Cerebro Antiguo o Paleoencéfalo.
Todos los otros supuestos tumores, que no son más que una forma de reparar exuberante; fueron
durante la Fase Activa: úlceras o atrofia, con relés cerebrales siempre localizados en el cerebro
Moderno o Neoencéfalo (Sustancia Blanca y Corteza Cerebral).
El descubrimiento de estas correlaciones sistemáticas marcó, en 1987, el nacimiento de la 3ra
Ley Biológica, que es la confirmación de la 2da Ley. Esta ley constituye la primera clasificación
sistemática de lo que la medicina oficial llama "enfermedades" de acuerdo a la Embriología.
En este contexto el término ontogenético significa que ni la localización del Foco de Hamer en el
cerebro, ni los tumores, atrofia o úlceras son casualidad. Por el contrario, todo está programado
de forma muy lógica por la historia de las transformaciones ocurridas en el individuo desde la
fecundación hasta su perfecta constitución, la ontogénesis.
Esto llevó a Hamer a investigar sobre Embriología. Esta ciencia es la parte de la medicina que
estudia la evolución del embrión, desde el momento de la fecundación hasta el momento del parto.
Se dice que la ontogenia es la recapitulación de la filogenia. Eso significa que la evolución de las
diferentes especies hasta llegar al hombre queda resumida durante la fase embrionaria e infantil.
En el desarrollo embrionario sabemos que existen tres hojas diferentes de las que derivan todos
los órganos:
Un gran descubrimiento del Dr. Hamer fue la división de la capa media en Mesodermo Antiguo
(controlado desde el Cerebelo) y Mesodermo Nuevo (controlado desde la Sustancia Blanca).
La 3ra Ley llevó a Hamer a descubrir la 4ta Ley Biológica, al darse cuenta de que las
"enfermedades", supuestamente "infecciosas", estaban siempre precedidas por una fase de
actividad conflictual, y es únicamente una vez que se ha resuelto el conflicto cuando los microbios
pueden entrar en acción, activados y dirigidos por nuestro cerebro.
Los hongos y las micobacterias, lejos de ser nuestros enemigos, son auxiliares en el sentido de que
destruyen los tumores una vez que, tras haber cumplido su misión, dejan de ser útiles. Son las
bacterias y los virus (si existen) los que ayudan reconstruyendo las atrofia y las ulceraciones que
surgieron en la Fase Activa de los SBS controlados desde el Neoencéfalo. Los microbios son, de
principio a fin, nuestros fieles ayudantes, nuestros trabajadores despreciados.
Hamer descubrió que la idea que se tenía del sistema inmunitario (un ejército luchando contra la
invasión de los microbios villanos) es absolutamente falsa. El sistema inmunitario no es más que un
espejismo, construido a base de hipótesis. En las consideradas "enfermedades infecciosas" se
había olvidado o pasado por alto su primera fase.
Finalmente, Hamer plantea la 5ta Ley Biológica, que se basa en la comprensión de que la llamada
"enfermedad" no es más que un proceso con sentido biológico que se comprende a través de la
evolución, un programa biológico especial que pone en marcha la naturaleza para garantizar la
supervivencia ante situaciones que amenazan la vida. Esta es realmente la Quintaesencia del
sistema biológico, la que le da pleno sentido.
Aunque la aplicación del conocimiento de las Leyes Biológicas está oficialmente prohibida en varios
países de Europa y no reconocida en el resto del mundo, ésta ha sido ya confirmada en decenas de
verificaciones públicas, documentada y firmada por médicos y profesores.
El Dr. Ryke Geerd Hamer desde el año 2005 fue propuesto para Premio Nobel de Medicina por el
director de la prestigiosa revista Discovery DSalud, el señor José Antonio Campoy, durante el 1er
Congreso Internacional de Medicinas Complementarias y Alternativas en Cáncer, celebrado en
Madrid. Siendo acogida esta propuesta con una gran ovación por parte de la inmensa mayoría de las
1,200 personas presentes.
"Finalmente tuve que preguntarme si nuestro entendimiento y concepto de "enfermedad"
habían sido completamente erróneos, debido a la ignorancia acerca del propósito biológico."
"...Y añadiría, atónito y dolido: "En los últimos años he sufrido amenazas de muerte, caza de
brujas, persecución por los medios de comunicación y prohibición de ejercer la medicina, así
como diversos intentos de atentado y amenazas de psiquiatrización forzada, "por distorsión
de la realidad", hasta llegar a ser encarcelado todo un año simplemente por informar
gratuitamente a tres personas sobre las Leyes Biológicas. ¿Le parece a alguien esto normal?"
...
Ryke Geerd Hamer
Las Leyes Biológicas no son una "medicina alternativa", ni una "medicina integrativa", ni una
"medicina complementaria"; ofrecen un sistema científico completo y bien fundamentado que
explican la causa, el desarrollo y sobre todo la restitución natural de las llamadas "enfermedades".
"Mis enemigos buscan mutilar y destruir mi descubrimiento sobre las 5 Leyes Biológicas de la
naturaleza, sin embargo, este es un sistema biológico cósmico inabarcable. Hasta hoy han
pasado más de tres décadas de supresión, de asesinato en masa a nivel mundial de miles de
millones de personas, de una campaña de terror sin cesar en contra de las 5 Leyes Biológicas
y de mi persona.
Poseemos el mejor regalo que Dios nos podría haber dado, ya que ahora con la ayuda de las
5 Leyes Biológicas de la naturaleza podemos comprender a nuestro organismo y ya no
tenemos que sentir temor hacia el "cáncer" o las "enfermedades". No obstante, este regalo
se oculta. Un crimen como este nunca se ha visto antes en la historia de nuestro planeta.
Por lo general, cuando sucede un asesinato, el tribunal del Estado realiza un proceso contra
el asesino. Sin embargo, aquí el Estado mismo es el perpetrador y hace de todo para que
esto no salga a la luz. En las universidades es lo mismo: cada freno, cada lámpara de un
coche o bicicleta debe probarse antes. Sin embargo, una medicina con un índice de
sobrevivencia del 98% no puede ser probada oficialmente. Por el contrario: los profesores
universitarios hacen de todo para no verificar algo que se podría probar en unas pocas horas.
Las 30 verificaciones públicas fueron silenciadas por los medios y la prensa. Estemos todos
juntos y tratemos de ponerle un fin a este crimen."
Dr. Ryke Geerd Hamer.
Los últimos años el Dr. Hamer los pasó exiliado en Noruega, donde continuó investigando y
logrando nuevos descubrimientos sobre los procesos biológicos, hasta su fallecimiento el 2 de
Julio de 2017.
Normotonía:
Es el estado de nuestro ritmo normal del día y la noche. La "simpaticotonía", en la fase diurna de
actividad, se alterna con la "vagotonía", en la fase nocturna, cuando normalmente descansamos.
Los términos se refieren a nuestro Sistema Nervioso Autónomo (SNA), también llamado:
"vegetativo, "neurovegetativo o "involuntario"; el cual regula y coordina las funciones vegetativas
que son involuntarias, inconscientes y automáticas, como el ritmo cardiaco o la digestión.
El Sistema Nervioso autónomo se divide en dos y sus funciones son antagónicas, logrando un
balance funcional (equilibrio neurovegetativo) que tiende a mantener la homeostasis corporal:
Simpático:
Inervado desde una rama del tronco simpático (ortosimpático). Se encarga de activar la mayor
parte de los órganos para que trabajen de forma más intensa, excepto los relacionados con la
digestión. Activa al organismo para situaciones de emergencia, como respuestas de lucha y huída:
- Aumenta la frecuencia cardiaca y la presión sanguínea por vasoconstricción arterial.
- Acelera el ritmo respiratorio y dilata las vías respiratorias relajando la musculatura bronquial.
- Eleva la concentración de glucosa en la sangre.
- Inhibe la salivación.
- Incrementa el gasto energético.
- Aumenta la secreción de las glándulas sudoríparas.
- Dilata la pupila.
- Estimula la liberación de adrenalina y noradrenalina.
- Relaja la vejiga.
- Contrae el recto.
- Inhibe los sistemas que no participan en las situaciones de estrés, como el aparato digestivo,
disminuyendo el peristaltismo intestinal.
Parasimpático (vagotónico):
Inervado desde el nervio vago (parasimpático). Relaja la actividad de la mayoría de los órganos,
excepto los relacionados con la digestión, regulando las actividades que tienden a conservar
energía en los periodos de descanso o recuperación con reparación de tejidos:
- Disminuye la frecuencia cardiaca y la presión sanguínea por vasodilatación arterial.
- Relaja el ritmo respiratorio y contrae las vías respiratorias al contraer la musculatura bronquial.
- Disminuye la concentración de glucosa en la sangre.
- Estimula la salivación.
- Evita un excesivo gasto energético.
- Disminuye la secreción de las glándulas sudoríparas y lagrimales.
- Contrae la pupila.
- Reduce la liberación de adrenalina y noradrenalina.
- Contrae la vejiga.
- Relaja el recto.
- Estimula las funciones digestivas y aumenta el peristaltismo intestinal.
Cuando estamos en Normotonía , tranquilos, nuestra vida está controlada armoniosamente por un
ritmo oscilante entre el día y la noche. Esta regulación interna, dirigida por nuestro sistema
nervioso autónomo, nos permite estar despiertos durante el día y dormir en la noche.
La normotonía es un estado ideal de paz y tranquilidad, que en la realidad de nuestra vida cotidiana
se presenta raramente. Consideramos que estamos en un estado normotónico cuando no vivimos
particulares situaciones conflictivas que llevan a la activación de los SBS.
Podemos observar fácilmente este estado de Normotonía en la naturaleza: nuestro gato que goza
tranquilamente la mayor parte del tiempo. Para nosotros los humanos, que siempre estamos
preocupados por el futuro e impulsados por los temores del pasado, es mucho más raro.
Confrontados diariamente con una existencia alejada de nuestros códigos biológicos naturales, en
la que nos vemos obligados a luchar cotidianamente por la supervivencia, teniendo que someternos
a un millar de normas y a las injusticias sociales, restricciones, limitaciones culturales y religiosas,
para nosotros es mucho más difícil de mantener y renovar este estado normotónico.
Es muy importante comprender que este ritmo alternante es parte de la vida y es absolutamente
indispensable, no podríamos vivir siempre estando solo despiertos, activos o solo cansados y
dormidos. Sensatamente necesitamos las dos fases: la Fase Activa que permite procurar los
alimentos, defender el territorio, procrear, etc; mientras que la Fase Vagotónica servirá como un
momento para el descanso, de restauración de todos los niveles que se han puesto a prueba
durante la Fase Activa.
En el ritmo normotónico vemos que la curva de tensión neurovegetativa aumenta a partir de las 2 a
3 de la madrugada de forma concomitante con el aumento de la producción de la corteza
suprarrenal, del cortisol (que es el origen de la cortisona y otras hormonas como el estrógeno y la
testosterona.
Alrededor de las 18 a 19 horas entramos en una fase de relajación más evidente (Vagotonía) hasta
llegar a la máxima relajación a eso de las 23 a 24 horas.
Esta representación gráfica es un diagrama que muestra cómo se realiza la curva de la tensión
neurovegetativa cuando estamos en Normotónía (referido a la hora sideral).
Esta curva nos acompaña durante toda la vida, siguiendo el ritmo del Sol y sostiene todos los
procesos fisiológicos necesarios para nuestra supervivencia.
Un evento conflictual inesperado o DHS interrumpe inmediatamente el ritmo normal del día y la
noche, e inicia la Fase Activa del conflicto (FA). El choque dispara el inicio de un Programa
Biológico Especial y Significativo (SBS), que permite al organismo (a tres niveles simultáneos y
sincrónicos: psique, cerebro y órgano) incrementar el funcionamiento normal diario y enfocarse de
lleno en contender con la situación imprevista.
A partir del DHS, y durante toda la Fase Activa, la reacción biológica inmediata que nos permite
estar listos para dar una respuesta de ataque o de fuga es la activación de nuestro Sistema
Nervioso Autónomo o Sistema Neurovegetativo, dirigido por el Tronco Simpático del cerebro. Se
activa inmediatamente, aumentando la inervación simpaticotónica y permitiendo así los cambios de
todas las funciones fisiológicas que pondrán al individuo en posición de luchar o eventualmente
escapar inmediatamente de una situación de peligro, utilizando una respuesta biológica adecuada
(fisiología especial): una reacción perfectamente sensata para la supervivencia.
Esto produce la desagradable situación en la que, incluso si vamos a la cama temprano, tendremos
grandes dificultades para conciliar el sueño. Luego, cuando finalmente nos las arreglamos para
dormir, a partir de las 2 de la madrugada tendremos un sueño extremadamente ligero. También
podemos despertar sin volver a dormirnos. Solo en la mañana, cuando el cielo comienza a aclarar,
entonces nos quedamos dormidos, exhaustos.
Nivel orgánico:
La manifestación en el órgano está determinada por la naturaleza del conflicto y por el área del
cerebro involucrada (relé).
Los órganos dirigidos por el Cerebro Antiguo o Paleoencéfalo (Tronco Cerebral y Cerebelo)
aumentan la función y presentan multiplicación celular en forma de tumores de tipo
Adenocarcinomas.
Los órganos controlados por el Cerebro Nuevo o Neoencéfalo (Sustancia Blanca y Corteza
Cerebral) disminuyen la función y presentan reducción celular en forma de atrofia o ulceración.
A medida que la Fase Activa avanza o se agudiza, también lo hacen los síntomas que pudiera haber
en los órganos implicados si estos producen síntomas; y cuando la actividad del conflicto
disminuye, también se reducen los síntomas.
Hay 4 formas de iniciar la Fase Activa de un Programa Especial de la Naturaleza con Sentido
Biológico (SBS).
Conflictolisis (CL):
Para que se produzca este cambio de percepción no basta el pensamiento, no basta con
reflexionar, comprender, tener la fuerza de voluntad para resolver los conflictos o estar
"consciente" (lenguaje psicológico, intelectual). Para que se produzca la Conflictolisis, y a nivel
puramente biológico, la sensación real de que "todo está de nuevo en su lugar", será necesario que
ocurran (o que la persona haga) acciones concretas, que le permitan desde su sentir más profundo
darse cuenta cuando ese cambio realmente se haya producido.
Como la activación de los SBS se produce en el momento del DHS, con características específicas
(inesperado y shockeante), también la solución de la situación emotivamente conflictual viene con
una característica inmediata (no mediada por la mente), por lo que es también inesperada. Puede
suceder en los momentos particulares en que estoy ligeramente "en trance", pensativo, a veces
como "viajando con el pensamiento"; por ejemplo, mientras voy conduciendo el auto, paseando al
perro, escuchando música o lavando los platos, etc.
De repente llega una sensación de alivio, interna, inesperada: "ahora todo está bien", "lo peor ya ha
pasado", "todo ya está de nuevo en su lugar", "de repente me siento profundamente relajado", etc.
Esta sensación interna de alivio no es voluntaria, la experimentamos en relación a nuestro modo de
percepción directa, única y personal, que nos hace sentir a un nivel profundo que la situación
emotiva que dio origen al DHS se ha disuelto.
No podemos resolver con la fuerza de voluntad la emoción percibida durante el DHS, porque esta
emoción la sentimos de manera biológica, directa, inmediata, no razonada. Solo podemos crear las
condiciones para que esto suceda.
La solución biológica (CL) no tiene nada que ver con los intentos de disolver voluntariamente la
emoción utilizando "pensamientos positivos", tratando de perdonar, queriendo aceptar la situación
o "dándome una explicación", las llamadas soluciones intentadas. La solución biológica es una
solución visceral de ese contenido emotivo en particular que ocurre con sentido cuando nuestra
percepción inconsciente directa es satisfecha, cuando con simplicidad animal podemos tener la
sensación concreta de que el peligro o la incomodidad experimentada durante el DHS han sido
eliminados o al menos neutralizados momentáneamente.
En los órganos con tejido controlado desde el Cerebro Antiguo o Paleoencéfalo (Endodermo y
Mesodermo Antiguo) la aparición de los síntomas puede ser inmediata por la caída de la función
drástica (Endodermo) o inmediata (Mesodermo Antiguo).
En los órganos con tejido controlado desde el Cerebro Nuevo o Neoencéfalo (Mesodermo Nuevo y
Ectodermo) la aparición de los síntomas tiene un rango de tiempo determinado a partir de la
Conflictolisis:
Mesodermo Nuevo: entre 2 y 8 horas para manifestarse los síntomas al máximo.
Ectodermo: desde pocos minutos hasta 2 horas para aparecer los síntomas.
Conociendo el momento del inicio de los síntomas, se puede precisar el momento exacto de la
Conflictolisis (CL) teniendo en cuenta que hecho favorable o positivo ocurrió en el rango de tiempo
de cada capa embrionaria y sabiendo el sentir emotivo de la activación biológica (conflicto)
relacionado con el órgano implicado.
También se podría ubicar el momento en que sucedió el DHS que dio inicio a la Fase Activa.
Sabiendo la duración de la Fase Activa se puede predecir cuánto tiempo durará la PclA, cuándo
ocurrirá la Epicrisis y su duración y cuánto tiempo se tardará hasta entrar en Normotonía.
1. Tomar una actitud proactiva y hacer algo concreto para resolver la situación conflictiva de
manera práctica y real.
2. Que nos llegue una solución de forma externa, algo que sucede ajeno a nosotros o un cambio de
actitud de otras personas que pone fin a la situación conflictiva.
3. Un cambio de percepción que nos haga ver la situación conflictiva de otra manera y llegue la
solución.
4. Que el conflicto se haga obsoleto; que pierda vigencia; que la persona se relaje y olvide lo que
ha estado viendo conflictivamente o que otras situaciones más importantes hagan olvidarlo o
llevarlo a un plano de poca importancia.
El animal que vive en estado salvaje normalmente tiene tres reacciones posibles frente a
situaciones conflictivas: el ataque, la huida o hacerse el muerto. Esto implica que los shocks
biológicos se resuelven regularmente en poco tiempo.
Por ejemplo: una ardilla macho ve a otra ardilla macho que entra en su territorio, reacciona
emitiendo sonidos de amenaza (silbido bronquial). Si considera que su adversario es débil lo
atacará mordiéndolo para provocarle la retirada o la muerte. Esto resuelve rápidamente el
problema. Si, por el contrario, ve que el otro es más fuerte, se verá obligado a huir dejándole el
territorio. Esta reacción lo llevará a buscarse un nuevo territorio y cuando lo haya encontrado
resolverá realmente su situación conflictiva. Ambas reacciones conducen a una solución biológica
en un tiempo corto y el SBS se completará a su debido tiempo, provocando una Fase PclA
acompañada de sintomatología muy reducida.
Los humanos, sin embargo, así como los animales que viven en cautiverio, tenemos la posibilidad de
usar una tercera opción: la de "domesticarnos", sometiéndonos por elección razonada (usando la
fuerza de voluntad) a situaciones biológicamente imposibles. Nos adaptamos a las costumbres o
dogmas sociales y religiosos, convencidos de conceptos filosóficos como: "justicia", "equidad",
"honor", "orgullo", "compasión", "sentido de culpa", etc.
Los humanos y los animales en cautiverio a menudo optan por quedarse quietos, en vez de luchar o
huir, manteniendo la situación conflictiva activa, pero habiéndonos habituado, la situación pesa un
poco menos:
La 2da Fase del SBS, la Fase PostConflictolisis o Pcl, como su nombre lo indica, es la fase que sigue
a la solución del conflicto biológico (CL). Es la 2da Fase en la cual se intentará restituir el
organismo a los tres niveles (psique - cerebro - órgano) al estado en que se encontraba antes de
iniciarse el Programa Especial con Sentido Biológico (SBS), que fue utilizado para garantizar la
supervivencia ante una amenaza real o percibida así de forma arcaica.
Esta 2da Fase es similar a la Fase Activa, tanto en intensidad como en duración, si el SBS sigue su
desarrollo biológico natural, sin la intervención del hombre. La intervención del ser humano, con
determinadas terapias o técnicas puede acortar la 2da Fase o reducir su sintomatología o producir
el efecto contrario.
A partir de la solución biológica (CL), en la que sentimos el alivio psíquico de toda la tensión
acumulada en la Fase Activa, nos sentimos más tranquilos, pero normalmente con un profundo
cansancio y en este punto es donde se presentarán los síntomas más evidentes y dolorosos.
En la 2da Fase del SBS la naturaleza nos proporciona las condiciones para movernos menos
físicamente (fatiga y dolor) a fin de optimizar nuestros recursos, mientras nuestro organismo está
reparando o caseificando los tejidos involucrados.
En esta fase uno de los síntomas generales más evidentes es el profundo cansancio, acompañado
de la sensación de alivio. Esta fuerte caída de tensión se debe a nuestro Sistema Nervioso
Autónomo.
A diferencia de la Fase Activa, en la que teníamos que estar siempre alertas para resolver nuestra
situación conflictual, por lo que tuvimos dificultades para relajarnos y no pudimos dormir bien;
ahora, por el contrario, después de la CL, la curva neurovegetativa se reduce constantemente por
debajo de la línea (Vagotónia permanente) y nos sentimos tan cansados, que si no fuera por los
síntomas dolorosos e incómodos, debido a los procesos edematosos, dormiríamos todo el día. Esto
también tiene sentido, ya que el propósito es darle tiempo al cuerpo de restituirse.
Esta representación gráfica es un diagrama que muestra cómo se desarrolla la curva de tensión
neurovegetativa cuando estamos en fuerte Vagotonía (línea roja):
En la Fase PclA, cuando estoy fuertemente en Vagotonía, voy a tener dificultades incluso para
levantarme en la mañana. Estaré un poco más activo desde las 11 hasta las 14 horas, para luego
entrar gradualmente en la fuerte Vagotonía. Así que alrededor de las 19 a 20 horas terminaré
haciendo un micro sueño, pero será más difícil dormirme verdaderamente después de las 18 horas,
siendo la Vagotonía siempre más fuerte, todo me dolerá más, la fiebre será ahora más alta y las
náuseas más fuertes.
Solo después de las 2 de la madrugada, cuando se reanude la producción de cortisol, podré
encontrar un sueño reparador. Por esto, el mejor momento para dormir será de las 2 a las 11 am,
que es cuando el cortisol reducirá un poco los efectos de la Vagotonía.
- Vagotonía constante.
- Ritmo de noche continuo.
- Recuperación del sueño, sobre todo de día y después de las 3:00 am.
- Fatiga, debilidad, decaimiento.
- Buen apetito.
- Aumento de peso (por retención hídrica).
- Vasos sanguíneos dilatados, manos y pies tibios.
- Aumento de la temperatura corporal, posiblemente fiebre.
- Acción de microbios simbióticos en el proceso de reparación.
- Disminución de la presión arterial.
- Ritmo cardiaco normal.
- Dolor, inflamación, hinchazón, distención, calor, rubor.
Nivel psíquico:
La solución del conflicto (CL) viene acompañada con la sensación de un gran alivio, la persona se
siente en paz, liberada de una carga. Desaparecen los pensamientos obsesivos o recurrentes
característicos de la Fase Activa.
Nivel cerebral:
Presencia de edema en el cerebro (FH edematoso).
Paralelamente a los niveles psíquico y orgánico, el área cerebral que recibió el choque del conflicto
biológico también comienza a repararse.
Como en el caso de cualquier herida que es reparada, líquidos del suero sanguíneo y agua son
atraídos, creando un edema para proteger al tejido cerebral durante el proceso de reparación. En
un escáner cerebral (TAC) podemos observar los cambios: los anillos en forma de diana comienzan
a sumergirse en el edema y ahora se muestran en los escáner borrosos, sin contornos y oscuros.
El tamaño del edema siempre depende de la masa del conflicto que le precedió. Con túbulos
colectores renales (TCR) activos puede haber mayor edema cerebral por la retención de líquidos.
Nivel orgánico:
De forma paralela al edema en el cerebro, encontramos un edema (líquido) en el órgano
correspondiente, para proporcionar nutrición y espacio a las células que están reparando y
creciendo. Con túbulos colectores renales (TCR) activos puede haber mayor edema orgánico por la
retención de líquidos.
En los órganos controlados por el Cerebro Antiguo o Paleoencéfalo (Endodermo y Mesodermo
Antiguo) hay caída drástica de la función y degradación tumoral (caseificación) por hongos y
micobacterias especializadas.
En los órganos controlados por el Cerebro Nuevo o Neoencéfalo (Mesodermo Nuevo y Ectodermo)
hay caída inicial y posterior reactivación de la función, multiplicación celular, restitución y
reparación del tejido perdido en la Fase Activa con la colaboración de bacterias simbióticas si
están presentes.
La Epicrisis o Crisis Epileptoide (crisis epiléptica con el SBS de motricidad) está relacionada con
las características de la Fase Activa y la existencia del programa activo de los túbulos colectores
renales (TCR). Mientras más simpaticotónica haya sido la Fase Activa y más vagotónica la Fase
PclA, más alto será el punto máximo de la Epicrisis.
Es iniciada en el punto más bajo de la Fase PclA y ocurre simultáneamente en los tres niveles. El
cerebro acciona un pico simpaticotónico que pone al individuo a revivir de forma instantánea lo que
haya ocurrido en la Fase Activa, habiendo también una exasperación de la emoción sentida en la
Fase Activa a nivel psíquico.
La Epicrisis es revivir la Fase Activa de forma aún más aguda, pero por corto tiempo. Se revive el
conflicto biológico a manera de "flash back", como si fuera una fotografía instantánea. En caso de
que la persona se encuentre dormida, en ese momento estas impresiones le pueden venir como
sueños o pesadillas.
Cuando llega el momento de la Epicrisis, relacionada a los tiempos de la Fase Activa y la Fase PclA,
ocurre una contracción en el relé cerebral que da inicio a la expulsión del edema cerebral y
orgánico que fueron acumulados durante la primera parte de la Fase Pcl o Fase PclA.
Cada SBS tiene un tipo específico de Epicrisis. La mayoría pasan desapercibidas. Algunos de los
eventos que ocurren durante la Epicrisis son:
Si ocurre la Epicrisis, pero no es suficiente para comprimir el Foco de Hamer, habrá un segundo
intento o los necesarios hasta que se cumpla el objetivo de expulsar el edema acumulado en el
cerebro y en el órgano. La dificultad en la expulsión del edema puede tener como causa que esté
activo el SBS de los túbulos colectores renales (TCR) y haya una fuerte retención de líquidos en el
organismo. Esta situación puede ser peligrosa, fue catalogada por el Dr. Hamer como: "el
síndrome".
Tras la Epicrisis, en la Fase PclB, el organismo entero (psique, cerebro, órgano) recupera fuerzas
gradualmente y se encamina de lleno a la normalización, siempre y cuando no se presente una
recaída del conflicto; lo que significa que una vez superada la Epicrisis ya no volverá a producirse
nada que pueda asustar o que sea grave si no hay recidivas.
En los órganos con tejido del Cerebro Antiguo o Paleoencéfalo (Endodermo y Mesodermo Antiguo)
la duración de la Epicrisis es directamente proporcional a la duración de la Fase PclA:
Endodermo:
Duración de la Epicrisis: máximo de 4 horas.
Mesodermo Antiguo:
Duración de la Epicrisis: máximo de 45 minutos (equivalencia aproximada de minutos en la Epicrisis
con días en la Fase Activa).
En los órganos con tejido del Cerebro Nuevo o Neoencéfalo (Mesodermo Nuevo y Ectodermo) la
duración de la Epicrisis es independiente de la duración de la Fase Activa o la Fase PclA:
Mesodermo Nuevo:
Duración de la Epicrisis: hasta un minuto o más si es mantenida en suspenso.
Ectodermo:
Duración de la Epicrisis: hasta 30 segundos o más si es mantenida en suspenso.
Si la Fase Activa duró hasta seis semanas, la Epicrisis ocurrirá a mitad de la Fase Pcl. Siendo de
igual duración la PclA y la PclB.
Si la Fase Activa duró más de seis semanas, la Epicrisis ocurrirá transcurridas 3 semanas después
de la solución del conflicto o Conflictolisis (CL). La PclA durará como máximo 3 semanas si no hay
recidivas.
Nivel cerebral:
Lenta disolución del edema del FH en el cerebro. Eliminación de líquido y acumulación de tejido
glial en el cerebro.
Después de que el edema cerebral ha sido expulsado se inicia la segunda parte de la Fase Pcl.
Ahora la neuroglía (glioma o glioblastoma, brotes de células de glía), tejido que siempre está
presente en el cerebro, se instala en el lugar del FH para rellenar el espacio antes ocupado por el
edema cerebral. La masa de acumulación de las células de la neuroglía depende del tamaño del
edema precedente y está determinada por la intensidad y duración de la Fase Activa (Masa
Conflictual). Este almacenamiento de neuroglía se llama comúnmente en la Medicina oficial: tumor
cerebral.
Nivel psíquico:
Se detiene el pensamiento compulsivo de la Epicrisis, hay un sentimiento de alivio y bienestar.
Nivel vegetativo:
Nivel orgánico:
En los órganos controlados por el Cerebro Antiguo o Palencéfalo continúa la caseificación del
tumor por hongos y micobacterias especializados, con calcificaciones y formación de cavernas o
encapsulamiento de tumores si no se dispone de los microbios necesarios.
En los órganos controlados por el Cerebro Nuevo o Neoncéfalo habrá formación de cicatriz
restitutiva de la atrofia o ulceración previa. La pérdida de células que ocurrieron durante la Fase
Activa son rellenadas, restituidas y reconstruidas con la ayuda de bacterias especializadas. En el
caso del Ectodermo también pueden actuar virus especializados si existen.
Consideraciones generales
La duración y severidad de la Fase Pcl está determinada por la intensidad y duración de la Fase
Activa precedente y las complicaciones por recidivas que continuamente interrumpen la Fase Pcl,
prolongando la duración del SBS.
Al completarse la Fase Pcl, la Normotonía y el ritmo normal del día y la noche se restablecen en los
tres niveles.
En general, la Fase Pcl es considerablemente más peligrosa que la Fase Activa. Debido a que esta
2da Fase frecuentemente está acompañada de aumento de volumen, fiebre y dolor. La mayoría de
estas "enfermedades" se detectan cuando ya se está en la 2da Fase Pcl.
Si una persona está en actividad de conflicto aguda por un período largo de tiempo puede ser
fatal. Sin embargo, una persona que está en Fase Activa de un SBS de órganos controlados desde
el Paleoencéfalo no muere de "cáncer" porque los tumores que crecen durante la primera fase
(pulmones, hígado, páncreas, glándula mamaria, etc) en realidad mejoran la función del órgano
durante ese período y son asintomáticos.
Las personas que no sobreviven la Fase Activa a menudo mueren como resultado de la pérdida de
energía, falta de sueño, y sobre todo por miedo al sentir que no tienen salida de su "enfermedad".
Con un pronóstico negativo y tratamientos tóxicos o invasivos, sumados a un agotamiento
metabólico, emocional, mental y físico, muchas personas no tienen ninguna posibilidad de
sobrevivir.
Si no somos capaces de resolver el conflicto o si no se puede alcanzar una solución viable, tenemos
la oportunidad de degradar conscientemente la Masa Conflictual, ya sea de manera intelectual,
psicológica o espiritual. Degradando el conflicto disminuimos su intensidad y los síntomas, tanto a
nivel cerebral como orgánico. La mejor forma de reducir la Masa Conflictual es hablando lo más
posible del tema con la mayor cantidad de personas que podamos.
Debemos tener presente que degradar un conflicto sólo puede representar una segunda mejor
alternativa, porque la mejor opción es lograr resolver la situación conflictiva por completo.
Revisando sólo una de las dos fases, los síntomas que pertenecen son vistos como una
"enfermedad" en sí misma. Por ejemplo: la osteoporosis o la angina de pecho, que sólo ocurren
durante la Fase Activa, o la artritis, el linfoma y el cáncer cérvico-uterino que sólo ocurren en la
Fase Pcl.
Esta falta es particularmente trágica cuando alguien que cursa la Fase PclA es diagnosticado de un
"cáncer maligno", aunque de hecho éste sea un proceso de reparación de una previa pérdida celular
que naturalmente se degrada durante la segunda subfase PclB.
Si la medicina oficial tomara en cuenta al cerebro como el lugar desde donde se origina y se
controla todo, reconocería que las dos fases son un solo proceso, verificable por un escáner
cerebral (TAC) en donde el Foco de Hamer se encontraría en el mismo lugar en ambas etapas,
indicando si la persona está todavía en conflicto activo (anillos concéntricos en diana) o se
encuentra ya restituyendo el organismo (edema).
Lo que se ha estudiado hasta ahora como "enfermedades frías" no es más que la 1ra Fase de
Simpaticotonía del SBS, y lo que se tenía por "enfermedades calientes" es la 2da Fase de
Vagotonía del SBS. Por este desconocimiento no se podía comprender el proceso ni tratar a la
persona de manera realmente científica.
La medicina oficial tiene identificadas más de 1,000 "enfermedades", con sus síntomas y sus
terapias. Aproximadamente 500 de ellas son "enfermedades frías" (tumores, angina de pecho,
depresión, trastornos mentales, etc.) y alrededor de 500 son "enfermedades calientes"
("infecciones", leucemia, osteosarcoma, enfermedad de Hodgkin, etc).
Como promedio, del 90 al 95% de los shocks biológicos se solucionan, solo en un 5% a 10% de los
casos no hay solución posible o viable.
El cerebro inerva todo nuestro cuerpo, dando los impulsos necesarios para el normal
funcionamiento. Todo tejido tiene un programa originario de funcionamiento normal, ordinario y un
programa especial, extraordinario, para los momentos de catástrofe. El cerebro se ha organizado
durante millones de años para hacer frente a las transformaciones del ambiente y a las
necesidades de adaptación.
Cuando éramos gusanos de agua, por ejemplo, no era necesario disponer de una piel de protección
para los rayos ultravioletas o un esqueleto con músculos que nos permitiese movernos en el
ambiente terrestre. Por este motivo el cerebro tenía una dimensión reducida respecto a la actual,
porque las funciones eran reducidas.
Al ampliarse las condiciones, el cerebro se ha ido modificando junto con el organismo, se ha ido
“ampliando” para poder hacer frente a las necesidades del ambiente.
Hamer, a partir de la embriología, (por lo tanto, del funcionamiento de los tejidos, los órganos y de
su inervación), ha podido reconstruir y verificar que, según el tipo de percepción biológica (sentido
biológico o contenido conflictivo) percibido por la persona en el instante del DHS, se activará un
órgano específico “biológicamente adecuado” para hacer frente a aquel tipo de amenaza a la
supervivencia.
Durante millones de años, en función de las necesidades del entorno en que se vive y a los
estímulos que hubo que enfrentar, la Naturaleza incorporó los tejidos y órganos necesarios para la
supervivencia y continuación de las especies. Con cada tejido orgánico se incluye el programa de
funcionamiento normal fisiológico, ordinario, y el programa de funcionamiento especial o
extraordinario (SBS) para en caso de una amenaza a la supervivencia. Gracias a estos programas
especiales ante una situación peligrosa el individuo puede reaccionar atacando, huyendo o
"haciéndose el muerto".
Durante las primeras ocho semanas de gestación se observa una recapitulación de la filogénesis.
La ontogénesis o desarrollo del embrión consiste en la secuencia ordenada de los fenómenos de
crecimiento, diferenciación y organogénesis que conducen a la formación de un individuo adulto.
La ontogénesis se pone a menudo en relación con la filogénesis, la evolución de las especies, de las
que el organismo individual resume, recapitula y refleja la filogénesis. El ser vivo es en sí mismo el
resumen histórico de toda su especie.
En los animales superiores la ontogénesis reproduce la filogénesis, sobre todo en el período
prenatal, perinatal y en las etapas del crecimiento, como ocurre en algunos aspectos del desarrollo
del ser humano.
Cada tejido único que se ha desarrollado en nuestro organismo se comporta de una manera precisa
y siempre del mismo modo, donde quiera que se encuentre en nuestro cuerpo, ya sea en la Fase
Activa o en la 2da Fase Pcl. Esto depende de cuál hoja embrionaria esté implicada y de qué tejido
original se haya originado este tejido en específico.
Cada relé cerebral controla un tejido u órgano en particular. A nivel orgánico hay dos posibles
respuestas completamente diferentes dependiendo del área cerebral que se haya activado:
Por la Embriología sabemos que durante el desarrollo embrionario el feto que está creciendo pasa
a una velocidad muy acelerada por todas las etapas de la evolución, desde un organismo unicelular
hasta un ser humano completo (el desarrollo ontogenético reproduce el desarrollo filogenético).
Se sabe que dentro de los primeros 17 días del período embrionario se desarrollan tres capas
embrionarias (germinales) a partir de las cuales se originan todos los órganos y tejidos del cuerpo:
La diferenciación celular es necesaria para permitir una fisiología adecuada de cada órgano o
tejido orgánico, ya sea en Normotonía (fisiología normal u ordinaria) o durante el SBS (fisiología
especial o extraordinaria). De acuerdo a sus diferentes funciones, los diversos tejidos pueden
Cada célula, cada órgano del cuerpo está ligado a una de estas capas embrionarias. Es esencial
conocer exactamente que capa embrionaria original produce que tipos específicos de tejidos y
órganos paras saber cómo se comporta, tanto en fisiología ordinaria (Normotonía) como en
fisiología extraordinaria (SBS):
Es muy importante saber desde qué área del cerebro está dirigido (inervado) cada órgano y tejido
porque nos permite saber cómo funciona ese tejido durante cada fase del SBS:
La forma de anillo arcaico de nuestros ancestros evolutivos se rompió justo por debajo de la
faringe. La cavidad faríngea primitiva se ha convertido en las actuales boca y cavidad oro faríngea
y ano (cavidad oro faríngea anal).
Esta ruptura ocurrió en un punto en el tiempo en el que nuestro epitelio pavimentoso ya había
emigrado 12 cm a través de la faringe hacia la sección de salida (recto) del tracto gastrointestinal
para la expulsión del bocado. Esta es la razón por la que hoy en día nos encontramos mucosa
epitelial escamosa hasta 12 cm por arriba del nivel del recto. Este epitelio pavimentoso está
inervado por la Corteza Cerebral y el relé de la mucosa del recto se encuentra precisamente al
lado de los relés de las derivaciones de los arcos branquiales de la antigua faringe, porque en el
embrión estaban cercanos.
En el cerebro los centros de control de la mucosa epitelial escamosa del recto, la vagina, el cuello
uterino, la vejiga urinaria, el uréter y la mucosa de la pelvis renal (el llamado epitelio transicional),
se encuentran dispuestos de manera ordenada junto a los sitios cerebrales de los derivados de los
arcos faríngeos de la anterior faringe primitiva.
La cavidad bucofaríngea actual se inerva de los pares nerviosos craneales del Tronco Cerebral. Los
nervios de la derecha inervaban la entrada del alimento y los de la izquierda la expulsión (del
antiguo excremento que salía y que ahora sólo sale por el ano). Por esta inervación, de expulsión
del excremento, podemos ver todavía hoy el reflejo del vómito.
Relación cerebro -
órgano - capa
embrionaria
La mayoría de nuestros órganos,
particularmente el colon, son
derivados a partir de una de las tres
capas embrionarias. Otros como el
corazón, el hígado, el páncreas o la
vejiga, están formados de diferentes
tejidos que son derivados de
diferentes capas embrionarias. Estos
tejidos, los cuales emergieron en el
tiempo por razones funcionales y
adaptativas, son considerados como un
solo órgano, aún cuando a menudo
tienen sus centros de control en áreas muy diferentes y distantes del cerebro. Por otro lado,
existen órganos que aunque se encuentran distantes y separados en el cuerpo, como el recto, la
laringe y las venas coronarias, están controlados por áreas cerebrales que se encuentran muy
cerca entre sí.
Todos los tejidos que derivan de la misma capa embrionaria son controlados desde la misma parte
del cerebro:
Después de que nuestros ancestros evolutivos dejaron el ambiente acuático y pasaron a la tierra,
se necesitó de una capa de tejido grueso para proteger nuestra integridad de los agentes
externos, como la radiación solar excesiva y el roce con el suelo. La primera piel (dermis o piel
profunda) fue también diseñada para proporcionar protección contra ataques.
Los órganos y tejidos que se derivan del Mesodermo Antiguo son la piel del corium o dermis (piel
profunda); glándulas mamarias, sebáceas, sudoríparas y de Meibomio; la pleura (membrana en el
tórax); el peritoneo y el epiplón (membranas en la cavidad abdominal y órganos abdominales); el
pericardio (membrana alrededor del corazón); las meninges y las fascias que recubren los músculos
y órganos.
Todos los órganos y tejidos que se originan a partir del Mesodermo Antiguo están formados por
células "adeno", por lo que los tumores de estos órganos con llamados también "adenocarcinomas" o
"mesoteliomas". En el Cerebelo son aplicables las Reglas de Lateralidad y hay contralateralidad
cerebro - órgano.
Los shocks biológicos del Cerebelo se relacionan con la preocupación por la integridad, tanto en un
sentido real como figurado. Un "ataque contra la piel" (corium de la piel o dermis) puede ser
disparado por un ataque físico, un ataque verbal o un ataque contra nuestra integridad. El corium o
dermis también responde al conflicto biológico de "sentirse manchado" por entrar en contacto con
algo sucio, repelente o desagradable.
Un "ataque contra el abdomen" figurado puede ser ocasionado por un diagnóstico imprevisto de un
tumor en el área abdominal que llevará a una cirugía. La preocupación por la integridad del pecho
(pleura) puede ser ocasionado por una amputación de seno o una crisis asmática severa. Un "ataque
contra el corazón" figurado, con el anuncio inesperado de una operación del corazón o por la
preocupación por un ataque cardíaco.
Todos los órganos y tejidos que derivan del Mesodermo del Cerebro Antiguo y están controlados
por el Cerebelo muestran multiplicación celular en forma de tumor (adenocarcinoma) durante la
Fase Activa del SBS. De esta forma, el melanoma (corium de la piel), los tumores de las glándulas
mamarias o los tumores del peritoneo, pleura y pericardio (los llamados mesotelioma); todos se
originan de shocks biológicos que impactan el área cerebral correspondiente al Cerebelo.
Con la solución del conflicto, el tumor detiene su crecimiento. Durante la Fase Post Conflictolisis
las células adicionales son degradadas por microbios especializados (hongos y micobacterias). Si
los microbios relacionados con el tejido no se encuentran disponibles, posiblemente por un uso
excesivo de antibióticos, el tumor permanece en su lugar y se encapsula sin más aumento celular.
Todos los tumores controlados por el Cerebelo crean en la Fase Pcl aumento de volumen (edema),
exceso de fluido (pus), sudores nocturnos en PclA y nocturnos y diurnos en PclB, fiebre de hasta
38.4 grados. Con túbulos colectores renales activos provocan derrame de líquido pleural,
peritoneal o pericárdico.
Este tejido surge por la necesidad de desarrollar un sistema esquelético con articulaciones y
músculos para poder movernos y ser competitivos en tierra firme. Ampliamos nuestros vasos
sanguíneos para optimizar el aporte de nutrientes a los músculos y poder movermos más
rápidamente y estructuramos nuestro tejido conectivo para aumentar la resistencia a las
variaciones climáticas.
Todos los órganos y tejidos que se derivan del Mesodermo Nuevo son controlados por la Sustancia
Blanca, que es la parte interior del cerebro o Médula Cerebral, debajo de la Corteza Cerebral.
Aquí son aplicables las Reglas de la Lateralidad y hay contralateralidad en casi todos los órganos
con respecto a su centro de control en el cerebro (relé).
Los conflictos biológicos predominantes ligados a estos tejidos son de competencia por la
supervivencia. Conflictos de desvalorización, sentirse no apto, no adecuado, no competitivo, no ser
capaz.
Que el conflicto de desvalorización involucre a los huesos, a la médula ósea, las articulaciones, al
cartílago, a los músculos, a los tendones, a los ligamentos, al tejido conectivo, al tejido graso, a los
vasos sanguíneos o al sistema linfático, está determinado por la intensidad del conflicto, el tipo de
conflicto o su localización:
- Un conflicto de desvalorización fuerte o severo afecta los huesos, la médula ósea, las
articulaciones y los cartílagos.
- Un conflicto de desvalorización leve o de baja intensidad afecta tendones, tejido conectivo,
tejido graso, ligamentos y sistema linfático.
- Si la desvalorización está relacionada con la motricidad afecta los músculos, ya sea leve o fuerte.
- Los vasos sanguíneos se afectan con una desvalorización local.
Una pérdida repentina del valor propio puede ser iniciada por una observación injusta, por ser
degradado, por fallar en el trabajo, en los deportes o en la escuela o cuando nos sentimos sin
apoyo. La transición hacia el retiro, el envejecimiento o la enfermedad (no sirvo) provee
situaciones infinitas que pueden disparar una pérdida de la propia confianza.
La localización exacta de los síntomas (artritis, atrofia muscular, tendinitis) se determina por el
tipo específico (naturaleza) del conflicto de desvalorización. Por ejemplo, un "conflicto de
destreza", frecuentemente experimentado con falla para desempeñar una tarea manual, tal como
teclear o realizar un trabajo manual de precisión, afecta la mano y los dedos; un "conflicto de
desvalorización intelectual" (suspender un examen, perder un juego, ser criticado por alguien)
afecta la zona superior del cuello y la cabeza (cráneo o las cervicales C1 a C4).
Los ovarios y testículos son ligados biológicamente a un "conflicto de pérdida profunda con
desvalorización" como la pérdida inesperada de un ser amado, incluyendo a una mascota, ya sea por
muerte o porque se aleje del grupo. Incluso, un miedo a tal tipo de pérdida puede disparar el inicio
del SBS.
El tejido del riñón (parénquima renal) responde a un "conflicto de agua o de líquido". Por ejemplo:
una experiencia de casi ahogarse, estrés inesperado donde el agua o algún líquido está involucrado.
Los músculos del corazón (miocardio) están ligados a: "no ser apto para sostener algo mayor, estar
siendo superado, sobrepasado, rebasado, desbordado, no poder con una situación relacionada con
alguien". "no lo lograré, no puedo hacerlo". Inicialmente relacionado con madre y padre y a lo largo
de la vida con todo lo que se parezca, alguien más grande que yo que no puedo sostenerlo.
El músculo estriado del cuello del útero responde a "desvalorización por no poder retener el feto y
no poder llevar a buen fin el embarazo". También por no poder retener el pene hasta poder
conseguir la fecundación.
La corteza de las glándulas suprarrenales responde a: "sentirse no apto por no haber tomado el
buen camino, sensación de haber equivocado el camino. Estar perdido por haber tomado el camino
equivocado". Provoca la sensación de querer que lo dejen en paz, solo, alejado del mundo, sentirse
encallado, detenido.
Todos los órganos y tejidos que se originan en el Mesodermo del Cerebro Nuevo, y que son
controlados desde la Sustancia Blanca, durante la Fase Activa disminuyen su función y producen
pérdida de tejido (degradación celular) en forma de atrofia. Ejemplo de esto son: osteoporosis;
atrofia muscular; atrofia del bazo, ovarios, testículos o tejido del riñón; causados por sus
correspondientes conflictos biológicos.
Con la solución del conflicto (CL) el proceso de degradación se detiene. Durante la Fase Pcl el
tejido perdido es reparado a través de la proliferación celular, idealmente con la ayuda de
bacterias simbióticas con el tejido. Si los microbios necesarios no están disponibles, la reparación
ocurre de todas maneras, pero no en un grado biológicamente óptimo. El proceso natural de
reparación es acompañado típicamente de aumento de volumen (edema), inflamaciones, fiebre
irregular de hasta 39.5 grados, dolor y calor irradiante.
El propósito biológico de todos los SBS controlados desde la Sustancia Blanca lo encontramos al
final del SBS. Después de completar la Fase de Reparación, los tejidos (huesos, músculos, etc..) y
órganos (ovarios, testículos, etc..)) son mucho más fuertes que antes, y por lo tanto, están mejor
preparados en caso de sufrir un nuevo DHS de la misma naturaleza.
Con el tiempo la piel profunda (dermis) resultó ser insuficiente para las nuevas funciones
sensoriales en la manada, por lo tanto se desarrolló una segunda piel (epidermis, de epitelio
escamoso o pavimentoso) que cubriera por completo a la piel del corium. Ésta segunda capa
epitelial migró al interior de la boca, el recto y demás cavidades corporales y recubrió a ciertos
órganos, así como a los conductos de los órganos. Se requirió afinar nuestros sentidos y nuestras
mucosas para poder orientarnos, comunicar y convivir con nuestro grupo y dar continuidad a la
especie.
La Corteza Cerebral de los dos hemisferios cerebrales es la parte más reciente de nuestro
cerebro, la capa germinal más joven, y también es la más diferenciada. Se programa en ella todo el
proceso social más complejo, aquello que ocurre dentro de un grupo, una manada o una familia.
Todos los órganos y tejidos que se origina a partir del Ectodermo están formados por células
epiteliales escamosas o planas, pavimentosas. Es por eso que los cánceres de estos órganos son
llamados: "carcinomas epiteliales escamosos".
Todos los órganos y tejidos del Ectodermo son controlados desde la Corteza Cerebral (la parte
más moderna del cerebro). Esta a su vez se divide en:
Con el desarrollo evolutivo avanzado, los temas de conflicto también evolucionaron. En la Corteza
Cerebral estos hacen referencia a temas sociales:
5- Corteza Visual (lóbulo occipital). Se relaciona con "peligros que amenazan desde
atrás", "miedo en la nuca" en relación a circunstancias, depredador escondido, peligroso (ser
acechado). Ligados a la retina y al cuerpo vítreo en los ojos. En las retinas el miedo en la nuca es
en relación a alguien conocido. En el cuerpo vítreo el miedo en la nuca es en relación a un peligro
impersonal: monstruos, asesinos, ladrones, fantasmas, el fisco.
Todos los órganos y tejidos que derivan del Ectodermo, controlados desde la Corteza Cerebral,
generan pérdida de tejido en forma de ulceración durante la Fase Activa del SBS. Con la solución
del conflicto (Cl) el proceso de ulceración se detiene inmediatamente. Durante la Fase de
Reparación (Pcl) la pérdida de tejido, que sirvió a un propósito biológico durante la Fase Activa, es
rellenada y reparada a través de proliferación celular con la ayuda de microbios especializados.
Las bacterias, si están disponibles, ayudan en la reconstrucción y la formación de tejido
cicatricial, dando como resultado síntomas de una "infección bacteriana", como puede ser la
"infección" de la vejiga.
Algunos órganos controlados por la Corteza Cerebral (la motricidad de los músculos estriados, el
periostio que cubre los huesos, las terminales nerviosas, los filamentos olfativos, el oído interno,
las retinas y cuerpos vítreos en los ojos y las células Alfa y Beta de los islotes del páncreas), en la
Fase Activa del SBS no presentan ulceración, sino solo una pérdida funcional, referidas por el Dr.
Hamer como "enfermedades equivalentes al cáncer". Estas pueden ser: hipoglucemia, diabetes,
deficiencias visuales, olfativas y auditivas, parálisis sensoriales o motoras como la esclerosis
múltiple. Aún después de años de conflicto, estas células parecen ser funcionalmente restaurables
una vez que existe solución (Cl). Durante la Fase Pcl el órgano recupera la función, siempre que la
Segunda Fase no sea interrumpida por recaídas (recidivas). Aquí la Lateralidad es relevante.
En el lóbulo temporal (Corteza Territorial) debe tomarse en cuenta la dominancia corporal (diestro
o zurdo), el género (masculino o femenino) y el estado hormonal sexual, específicamente la relación
entre el estrógeno y la testosterona. El estado hormonal determina si el shock biológico es
experimentado de una forma masculina o femenina, lo que determina si el Foco de Hamer
impactará en el lóbulo temporal del hemisferio derecho o del izquierdo.
El lóbulo temporal derecho es el "lado de la testosterona o lado masculino", mientras que el lado
izquierdo es el "lado del estrógeno o lado femenino". Si el estado hormonal cambia, como lo hace
después de la menopausia o si el nivel de estrógeno o de testosterona es suprimido a través de
medicamentos (anticonceptivos, fármacos que disminuyan el estrógeno y la testosterona o la
quimioterapia), la identidad biológica también cambia. Por lo tanto, después de la menopausia una
mujer puede sufrir "conflictos masculinos", que se registran en el hemisferio derecho o "lado
masculino" del cerebro, dando como resultado síntomas distintos a los que se presentan antes de
la menopausia.
Paleoencéfalo y Neoencéfalo
El Dr. Hamer descubrió que los tejidos que derivan de cada una de las hojas embrionarias
muestran una respuesta muy distinta en el SBS durante la Fase Activa y la Fase Pcl. La
multiplicación celular (mitosis) puede ocurrir en la Fase Activa o en la Fase Pcl, en dependencia de
qué sitio cerebral y consecuentemente qué órgano o tejido sea el implicado. Se puede hacer la
división en dos grandes grupos:
Hoja
Zona Shocks biológicos Fase Activa Fase Pcl
embrionaria
Aumento de
Básicos de Caída drástica y posterior
funciones
supervivencia normalización de las
Endodermo Multiplicación
Respiración funciones
Tronco Cerebro Antiguo celular
Alimentación Reducción celular,
Cerebral Paleoencéfalo Formación de
Reproducción caseificación de tumores,
Capa ZONA tumores
Necesidad e cavernas
embrionaria AMARILLA adenocarcinomas
imposibilidad de Encapsulamiento como
interna Multiplicación de
obtener o fibroadenoma
hongos y
expulsar bocados o quiste tras recidivas
micobacterias
Sociales y
procreación:
Territoriales,
Caída inicial y posterior
motores,
Reducción recuperación de las
frustración
progresiva funciones
Ectodermo sexual, identidad,
de la función Multiplicación celular,
Corteza rupturas del
Cerebro Moderno Reducción celular inflamación
Cerebral contacto,
Neoencéfalo en Úlceras rellenadas y
Capa orales, mal olor,
ZONA ROJA forma de reparadas
embrionaria auditivos,
ulceración Carcinomas epiteliales
externa visuales,
Hipersensibilidad escamosos
repulsión,
o hiposensibilidad Hipersensibilidad o
oposición,
hiposensibilidad
resistencia,
miedos frontales
y en la nuca
Ectodermo
Endodermo Mesodermo Antiguo Mesodermo Nuevo Corteza Cerebral
Tronco Cerebral Cerebelo Sustancia Blanca ZONA ROJA
ZONA AMARILLA ZONA NARANJA ZONA NARANJA Cerebro Nuevo
Cerebro Antiguo Cerebro Antiguo Cerebro Nuevo (Neoencéfalo)
(Paleoencéfalo) (Paleoencéfalo) (Neoencéfalo) (Carcinomas
(Adeno carcinomas) (Adeno carcinomas) (Sarcomas) epiteliales
escamosos)
conducto excretor
- Párpado (ojo)
- Pelo
- Pelvis renal
- Periostio
- Píloro
- Recto,
recubrimiento
últimos 12 cm
- Retinas
- Senos
paranasales
- Sistema Nervioso
Central
- Sistema Nervioso
Periférico
- Tálamo
- Trigémino, nervio
craneal
- Uréteres
- Uretra, mucosa
- Vagina, mucosa
- Vejiga, mucosa
- Venas coronarias,
íntima
- Vesícula biliar,
recubrimiento
- Vesículas
seminales
Esta ley explica el rol benéfico de los diferentes grupos de microbios al interactuar con las cuatro
capas embrionarias que forman nuestros tejidos y órganos (Endodermo, Mesodermo Antiguo,
Mesodermo Nuevo y Ectodermo) con las cuales son simbiontes durante la Fase Pcl de cualquier
SBS o Programa Especial de la Naturaleza con sentido Biológico; mostrando que los microbios no
son la causa de las "enfermedades", sino más bien son nuestros simbiontes, específicos para cada
tejido, y actúan de forma coordinada con el cerebro para que los procesos de caseificación,
reparación y cicatrización se llevan a cabo de forma óptima.
Durante los primeros 2,500 millones de años en la evolución, los microbios eran los únicos
organismos que habitaban la Tierra. Eventualmente, los microbios habitaron gradualmente al
organismo humano en desarrollo. La función biológica de los microbios es la de mantener los
órganos y tejidos en un estado saludable. Durante todas las épocas, microbios como bacterias y
hongos han sido aliados leales, indispensables para nuestra supervivencia.
En Normotonía (antes de un SBS) los microbios están latentes. En la Fase de Conflicto Activo,
desde el momento del DHS, los microbios que residen en los órganos controlados desde el
Paleoencéfalo se multiplican sin actuar a la par del crecimiento tumoral (Endodermo y Mesodermo
Antiguo). En el momento que el shock biológico se resuelve (Cl), los microbios que residen en el
órgano implicado reciben un impulso del cerebro para asistir al proceso de destrucción
(caseificación) del tumor.
Sin embargo, si por ejemplo, un europeo resuelve un conflicto (CL) en los trópicos y está en
contacto con microbios locales, el órgano implicado en el SBS utilizará las bacterias, micobacterias
u hongos disponibles durante la Fase Pcl. Como el cuerpo no está acostumbrado a estos ayudantes
exóticos, ya que nunca se ha relacionado con ellos, pueden ocurrir reacciones excesivas o
exacerbaciones debido a que el organismo no puede manejarlos y el proceso de reparación puede
ser bastante severo o peligroso para la vida. Algo que es completamente normal para un habitante
de esa zona, porque ha vivido ahí su infancia y se ha adaptado. Definitivamente, no es algo normal
para nosotros como visitantes. Este es el camino que sigue en la actualidad nuestra civilización. En
la naturaleza esto es algo que prácticamente no sucede con los animales ni con los pueblos
primitivos.
La medicina oficial ha constatado que mucha gente con ciertos microbios en el organismo nunca
desarrollan la enfermedad; y explica esto apelando a "otros factores", tales como el estado del
sistema inmune. Con las Leyes Biológicas se descubre que la acción de los microbios se inicia
cuando el shock biológico se resuelve o cuando el organismo tiene que reparar una lesión. Esto es,
en ambos casos, cuando el organismo está en Fase Pcl. Los factores que menciona la medicina
oficial no son desencadenantes de la "infección", sino modulares o modificadores de ella.
Las Leyes Biológicas superan la idea de microbios "patógenos" o "apatógenos", ya que tal división
no existe en la Naturaleza, al menos en el sentido en que los entiende la medicina oficial. Lo que
existen son microbios que actúan en simbiosis con el organismo, y que dependiendo del estado de
este último, exige una u otra actividad microbiana.
Los microbios son parte integral de nuestro "habitat" normal e indispensables para nuestra
supervivencia, lejos de ser microorganismos villanos que nos tratan de "infectar" y "enfermar".
Cada cuerpo humano es una inmensa cooperativa de pequeños animalitos que viven en simbiosis con
el organismo en el que están presentes, contribuyendo a su propia supervivencia.
y coordinadas:
Las micobacterias y los hongos actúan exclusivamente en tejidos que se originan a partir del
Endodermo y el Mesodermo Antiguo, mientras que las bacterias (que no son micobacterias)
participan solamente en la reparación de tejidos que derivan del Mesodermo Nuevo y el
Ectodermo.
En vista de la Cuarta Ley Biológica, los microbios no pueden ser más considerados la causa de las
"enfermedades infecciosas".
Con el entendimiento que los microbios no causan enfermedades, sino que juegan un rol beneficioso
en la Fase Pcl, el concepto de un sistema inmunológico, visto como un sistema de defensa contra
los "microbios patógenos" se torna sin sentido.
La forma en que los microbios ayudan al proceso de reparación está en completa concordancia con
la lógica de la evolución.
Estos microbios proliferan a partir del DHS y durante toda la Fase Activa, a la par del
crecimiento tumoral, para asegurar que exista la cantidad de microbios necesarios para que
durante la 2da Fase del SBS se puedan destruir mediante la caseificación las células excedentes
que proliferarpon durante la 1ra Fase del SBs y que ya no se necesitan al resolverse el shock
biológico que se percibió como una amenaza a la supervivencia.
Durante la Fase Pcl, hongos como cándida albicans o pneumocystis carinii; mico bacterias como el
bacilo tuberculoso (Tbc), mycobacterium avium o mycobacterium leprae descomponen las células
extra que ya no se necesitan y que cumplieron un propósito biológico durante la Fase Activa.
Como "micro-cirujanos" naturales, los hongos y las micobacterias remueven tumores de: colon,
pulmón, riñones, hígado, próstata, glandulares de mama, mesoteliomas o melanomas que ya no se
necesitan más.
Lo que hace a las micobacterias tan extraordinarias es que comienzan a multiplicarse de forma
inmediata al momento del DHS. Se multiplican a una velocidad paralela a la del tumor que crece,
de manera que en el momento en que se resuelve el conflicto, la cantidad exacta de bacterias
tuberculosas estará disponible para descomponer y reducir el tumor.
Durante la Fase PclA (edematosa) las células extra que se formaron en Fase Activa son
degradadas y convertidas en pus (secresión verdosa - amarillenta con mal olor) y serán eliminadas
del organismo a partir de la Epicrisis y durante la Fase PclB. Estos restos del proceso de
caseificación son eliminados a través de la deposición (SBS de colon), la orina (SBS de riñón, SBS
Si los microbios que son necesarios han sido erradicados, por ejemplo, a través del uso excesivo de
antibióticos o quimioterapia, el tumor se encapsula (fibroadenoma) y permanece en el lugar sin
posterior división celular.
Durante la Fase Pcl estas bacterias proliferan y ayudan a rellenar y reponer la pérdida de tejido
que tuvo lugar durante la Fase Activa. Bacterias como estafilococos, neumococos y estreptococos
ayudan a la reconstrucción de los tejidos mesodérmicos nuevos como huesos, ganglios, músculos y
de órganos atrofiados en Fase Activa como parénquima renal, bazo, ovarios y testículos. También
participan en la formación de tejido cicatrizante, ya que el tejido conectivo está controlado desde
la Sustancia Blanca. Si estas bacterias estuvieran ausentes, la reparación se lleva a cabo de todas
formas, pero no de una manera biológicamente óptima. Este proceso de reparación microbiano y
natural es erróneamente llamado "infección".
Virus
En lo que a "virus" se refiere, se prefiere hablar de "virus hipotéticos", ya que la existencia de los
virus ha sido puesta en tela de juicio por diversos científicos reconocidos. La falta de pruebas
científicas frente a la afirmación que virus específicos causan "infecciones" específicas está
acorde con los descubrimientos del Dr. Hamer.
En realidad, lo que llamábamos “estado o condición de virus” no era más que la multiplicación de
partículas de albúmina gracias a la aparición de un tipo de función catalizadora. Se suponía que la
medida del virus (erróneamente considerados “seres vivientes”) estaba entre 1/1,000 y 1/10,000
respecto a las bacterias. No obstante, su hipotética existencia ha sido muy discutida. Realmente
Aún si los virus en realidad existiesen, sería en línea con la lógica de la evolución, y participarían
en la reconstrucción de los tejidos ectodérmicos. Basándose en el rol beneficioso de los microbios,
los virus no serían la causa de "enfermedades", sino que jugarían un rol vital en el proceso de
reparación de los tejidos controlados por la Corteza Cerebral.
La simbiosis
Desde el origen de los tiempos hemos podido evolucionar gracias a la simbiosis de las especies,
basta con mirar al siguiente diagrama sobre la filogénesis:
Para pasar de la etapa de organismos unicelulares a pluricelulares tuvimos que incorporar las
bacterias que transformarían la energía que necesitábamos para convertirnos en multicelulares:
las mitocondrias.
Gracias a que las mitocondrias son capaces de transformar la glucosa en energía, produciendo
paquetes de alta energía ATP (trifosfato de adenosina) con una sola molécula de glucosa, es que
nos convertimos en organismos complejos. La célula sin mitocrondrias produciría tan solo 1 - 2 ATP
por molécula de glucosa.
Desde aquel momento, gracias a la simbiosis con los microorganismos, hemos tenido el "turbo"
energético necesario e indispensable para poder convertirnos en microorganismos multicelulares.
La simbiosis la veremos con todos los microorganismos presentes en nuestro cuerpo y con los que
hemos entrado en "colaboración" durante toda nuestra historia evolutiva. Investigaciones
recientes han podido comprobar que somos un zoológico ambulante, en nuestro cuerpo hay más
microorganismos que células.
El Sistema Inmunológico
No existe el sistema inmunológico en el sentido que creíamos hasta ahora. Existen reacciones en
suero y discrasias sanguíneas, cambios en la hematopoyesis, anticuerpos, enzimas etc. Cada
elemento con sus propias funciones peculiares en el organismo. Existe un sistema de regulación
interna al que no se le puede llamar "sistema inmunológico".
Los microbios no son un ejército de enemigos, sino más bien de colaboradores que son vigilados y
controlados sistemáticamente por el cerebro, como simbiontes. Por lo que no existe aquel ejército
de “células asesinas”, “células carnívoras”, células de linfocitos T, etc., respaldados por un
escuadrón de reacciones de suero.
Hasta el descubrimiento de las 5 Leyes Biológicas habíamos visto a los microbios como si fueran
los causantes de las llamadas “enfermedades infecciosas”. Se había pasado por alto la primera
fase conflictiva (FA) de estas supuestas “enfermedades infecciosas”. Solo una vez que el conflicto
está resuelto (CL) es que estos microbios tienen permiso para actuar. Ellos no son nuestros
enemigos, sino que nos auxilian y trabajan bajo nuestro mandato, bajo las órdenes de nuestro
cerebro. Si no existen los “microbios especiales”, a pesar de eso se ejecuta la Fase Pcl, aunque no
es biológicamente óptima.
Un ejemplo son los conductos hepáticos, los cuales están revestidos de epitelio laminar y se
vuelven ulcerosos ante un conflicto de territorio quitado injustamente, para que mejore el drenaje
biliar a través de un diámetro interior más amplio. Estos conductos se cierran al hincharse en la
Fase Pcl. Como consecuencia, la bilis se acumula y ya no puede fluir. Cuando varios conductos
hepáticos son afectados al mismo tiempo, el paciente toma una coloración amarilla (ictericia) por la
acumulación de bilirrubina, la orina se vuelve de color marrón y las heces de color claro por la falta
de pigmento biliar. No obstante, los virus no causan la hepatitis, como habíamos creído hasta
ahora, sino que se trata de nuestro organismo optimizando el proceso de reparación.
Nuestro cerebro siempre determina la clase de microbios, el tipo de trabajo y el momento en que
les ordena ayudar, así como también determina el lugar donde se les deja trabajar. De igual
manera, cuando nuestro cerebro se los ordena, los supuestos microbios "patógenos" se convierten
en microbios buenos y "apatógenos", retirándose a alguna parte de nuestro organismo donde no
molesten y donde puedan ser reactivados en cualquier momento cuando se les necesite.
¿Qué queda entonces del llamado “Sistema Inmunológico”? Sólo los hechos, no el presunto sistema.
El término "Sistema Inmunológico" es mal usado en todas las “enfermedades infecciosas” sin
excepción, en cáncer, leucemia, SIDA, etc. Nuestro “Sistema Inmunológico”, al que habíamos
imaginado como una especie de armada de nuestro cuerpo que destruía en masa a las “malignas”
células del cáncer y a los “malignos” microbios, no existe en este sentido. Esto corresponde a la
antigua ignorancia de lo que son las “enfermedades” y a la incapacidad de evaluar y clasificar
correctamente la diversidad de factores y síntomas en el campo serológico y hematológico.
Habíamos asumido que a lo que llamamos “enfermedades” eran errores de la Madre Naturaleza y
que probablemente nuestro “Sistema Inmunológico” (el ejército defensivo de nuestro organismo)
se había debilitado. Sin embargo, la Madre Naturaleza no comete errores. Estas aparentes
equivocaciones son deliberadas y tienen un sentido, ya que siempre está a favor del bienestar de
todo el organismo.
Es posible que lo que se conoce como el Sistema Inmunológico cumpla una función moduladora o
reguladora de la actividad de los microbios, haciendo que éstos cumplan su función durante la Fase
Pcl en una forma armónica, aunque no siempre perfecta, con el organismo.
Si se diseminan microbios en un lugar donde haya miles de personas, algunas de ellas (no todas)
"enfermarán de una infección" cuando entren en la Fase Pcl de algún conflicto que permita la
acción de ese microbio.
Por simple estadística, de mil personas que estén reunidas, unos están sin conflicto, otros con un
conflicto activo, y otros con un conflicto resuelto (en Fase Pcl). Únicamente, los que estén o
entren en una Fase Pcl presentarán la acción del microbio correspondiente.
La 2da Fase (Pcl) simplemente significa que el organismo está en proceso biológico de
restauración. Es posible, dependiendo del tipo de microbio y si éste es endémico o no (y por tanto,
si el organismo está familiarizado con él o no), que se acabe muriendo durante la Fase Pcl. Si el
microbio no es endémico (muchos microbios usados en armas biológicas no lo son o han sido
manipulados genéticamente), el organismo no podrá modularlo correctamente en la Fase Pcl y la
persona podrá morir
Aumento de
funciones
Caída inmediata y
Multiplicación
posterior
Mesodermo Antiguo celular
Cerebro Antiguo normalización de Hongos
Cerebelo Multiplicación de
Paleoencéfalo las funciones Micobacterias
Capa hongos y
ZONA Caseificar y Tuberculosis
embrionaria micobacterias
NARANJA destruir tumores (Tbc)
intermedia Formación de
Encapsulamiento
tumores
(fibroadenomas)
Adenocarcinomas
Mesoteliomas
Caída inicial y
Reducción posterior
progresiva recuperación de la
Cerebro función
Mesodermo Nuevo de la función
Moderno Multiplicación Bacterias
Sustancia Blanca (asintomática)
Neoencéfalo celular (sarcomas) Estafilococo
Capa embrionaria Reducción celular
ZONA Multiplicación de Estreptococo
intermedia en forma de
NARANJA bacterias
atrofia
Agujeros, atrofia atrofia reparadas
Inflamación y
formación de
quistes
Caída inicial y
posterior
recuperación de la
Reducción función
Ectodermo Cerebro progresiva Multiplicación Bacterias
Corteza Cerebral Moderno de la función celular Estafilococo
Capa embrionaria Neoencéfalo Reducción celular (carcinomas) Estreptococo
externa ZONA ROJA en forma de Úlceras rellenadas Virus (si
existen)
ulceración y curadas
Inflamación y
obstrucción de
conductos
La 5ta Ley Biológica o "Quintaesencia" establece que cada llamada "enfermedad" debe ser
entendida como un Programa Especial de la Naturaleza con Pleno Sentido Biológico (SBS) creado y
desarrollado durante la evolución de la vida (filogénesis) para ayudar a la supervivencia del
individuo, de su grupo o de la especie, ante un shock biológico inesperado (urgencia o emergencia
biológica), donde alguna necesidad biológica quede súbitamente insatisfecha. Estos programas
extraordinarios vienen incorporados en la compleja información genética de los seres vivos.
Tomando en cuenta nuestro conocimiento de la evolución del hombre, el Dr. Hamer descubrió que
en el curso de varios millones de años de evolución cada área cerebral fue programada con ciertas
respuestas biológicas (programas de emergencia) a conflictos que pudiesen poner en riesgo la
supervivencia del grupo o de las especies.
Debido a que cada ser humano nace con estos antiguos programas, ahora nos referimos a ellos
como: "Programas Especiales de la Naturaleza con Pleno Sentido Biológico", en clara oposición al
término "enfermedad", el cual implica desorden o mal funcionamiento del organismo y se entiende
como un error de la naturaleza. Son, por lo tanto, programas absolutamente necesarios, sensatos y
útiles. De hecho, no hay nada de "maligno" o "benigno" en todo esto, únicamente procesos útiles.
Los SBS se activan para superar un obstáculo biológico. Ese obstáculo es la confrontación entre
una necesidad y su satisfacción. Cuando sucesos agudos, más o menos dramáticos, que no pueden
ser verbalizados fácilmente y que sorprenden al ser vivo, imposibilitan la satisfacción de esa
necesidad, surge un conflicto en el plano biológico.
Ya no existen enfermedades en el sentido en el que se entendía antes, ya que todos los síntomas
que se pueden constatar se explican fácilmente y se pueden controlar sin dificultad en la mayoría
de los casos.
Dr. Hamer: "Todas las llamadas enfermedades tienen un significado biológico especial. Mientras
tendíamos a considerar a la Madre Naturaleza como falible y teníamos la audacia de creer que ella
comete errores constantemente y produce descomposturas (crecimientos cancerosos malignos, sin
sentido, degenerativos, etc.) podemos ahora ver, mientras las vendas caen de nuestros ojos, que
solo eran nuestra ignorancia y orgullo la única estupidez en nuestro cosmos.
Cegados, trajimos frente a nosotros esta medicina sin sentido, falta de alma y brutal. Llenos de
asombro, podemos ahora entender por primera vez que la Naturaleza tiene un orden (eso ya lo
sabíamos), y que cada cosa que ocurre en la Naturaleza tiene un propósito en el marco del todo, y
que los eventos que llamábamos enfermedades no son alteraciones sin sentido que tienen que ser
reparadas por aprendices de hechicero. Podemos ver que nada carece de significado, nada es
maligno ni está enfermo.
Hemos llegado incluso a considerar a nuestros compañeros animales como objetos, y mucho más a
las plantas. Hemos alcanzado el punto máximo de la estupidez con nuestra denominada civilización,
cuya culminación puede conducir a un gobierno "global" que controle totalmente el modo de pensar.
Las Leyes Biológicas harán que se reencuentre el camino que conduce a nuestras capacidades
intuitivas individuales, a la armonía natural-biológica perdida entre todos los seres vivientes. Por
mucha crueldad que exista en la naturaleza, ni las plantas, ni los animales, ni el hombre han estado
tan ciegos como lo hemos estado en los últimos 2,000 años."
Una gran familia de 25 a 30 integrantes en una enorme casa familiar de una hectárea con jardín y
un invernadero, además de una o dos pequeñas salas de cocina. Varias hermanas tienen de entre
cinco a seis hijos, a los que intercambian en dar de mamar para que los bebés no sólo formen un
vínculo biológico con la madre, sino también con las tías.
Los abuelos están felices de no ser desechados con el tiempo, se ocupan en la cocina y el jardín y
puede disfrutar de veladas con sus nietos. La familia no tiene preocupaciones y esto se ve en cada
aspecto: en el jardín tienen suficiente para comer, con el invernadero incluso en el inverno, la
casa/familia tiene su propio jardín de niños y su propia escuela. La familia permanece unida.
El costo es del 2 al 5% del que correspondería si vivieran solos y los miembros de mayor edad
vivieran en asilos. No existen problemas por un puesto de trabajo y lo más importante es que
siempre hay comida. Siempre se está acompañado, nadie se queda solo. La casa y el jardín van
juntos, así nadie tiene miedo de pasar hambre y nadie se siente abandonado. Se suprime toda la
propaganda de la televisión y el periódico, que son sensacionalistas. Es muy importante no vender
la casa familiar o el jardín".
Casi no hay personas que tengan una “orientación biológica” adecuada, ya que la propaganda es tan
poderosa e intensa que la mayoría están idiotizados y despistados. Los humanos nos centramos
mucho en las restricciones político-sociales, del nido o de la escuela, del lugar de trabajo, del
seguro social, los impuestos, etc. Estamos tan ocupados en estos quehaceres todo el día que no
queda tiempo para percatarnos de estas cosas o incluso reflexionar al respecto. En cuanto a
nuestros cuerpos, nos hemos olvidado de oírlo instintivamente.
En este tipo de civilización no biológica apareció el Dr. Hamer con sus 5 Leyes Biológicas. Esto
desorienta a muchas personas, ya que sale de todos sus esquemas y zonas de comodidad . La
generación de hoy no está lista para vivir bajo las reglas biológicas.
Todas estas reflexiones deberían aclararnos que las reglas del cerebro y el órgano siguen su
curso, así tengamos una conducta biológica o no biológica, incluso si ya no tiene un sentido
biológico. Sin embargo, no es que la naturaleza cometa un error, sino de que nosotros cometemos
errores contra la naturaleza, con los cuales buscamos destruirnos a nosotros mismos y llamar a eso
avance.
Para describir este proceso sería más correcto hablar de proliferación celular y de tejido añadido,
en lugar de afirmar la existencia de células "malignas".
quimioterapia, pues en ambos casos las células aparecen abultadas y sus núcleos celulares
aumentados. Pero, como hemos visto, esto solo indica un crecimiento celular normal.
También el tejido óseo de una fractura en vías de reparación es indistinguible del tejido óseo
"canceroso" de una osteólisis en recalcificación. Esto no tiene nada de canceroso, se trata
simplemente de la Fase de Reparación de un conflicto de desvalorización que permite la
recuperación del tejido óseo perdido en la Fase de Conflicto Activo.
Para entender mejor esto último supongamos el caso de una mujer que camina por la acera llevando
a su hijo de la mano. De repente el niño se suelta y corre hacia la calle donde es alcanzado por un
automóvil. En el momento en que la madre ve a su hijo herido sufre, en términos biológicos, un
conflicto de preocupación madre-hijo y en una fracción de segundo se activa el programa biológico
especial (SBS) para esta situación en particular.
Un DHS de preocupación madre-hijo siempre impacta en el área del Cerebelo que controla la
función de las glándulas mamarias, debido a que una cría lastimada se recupera más rápido cuando
recibe más leche. Así se estimula inmediatamente la producción de leche extra, incrementando el
número de células de las glándulas mamarias.
Aún si la madre no está amamantando, el evento acciona esta respuesta como ha ocurrido durante
millones de años. Este acontecimiento corresponde exactamente al significado biológico de lo que
está pasando.
Mientras la mujer se encuentre en la Fase Activa (porque el niño accidentado está aún en el
hospital) las células mamarias continuarán dividiéndose, hasta producir lo que comúnmente se llama
un "tumor maligno de glándula mamaria". Si la mujer es diestra el tumor estará en su seno
izquierdo y el Foco de Hamer en el hemisferio derecho del Cerebelo; si es zurda en su seno
derecho y el Foco de Hamer en el hemisferio izquierdo del Cerebelo.
Tan pronto como el conflicto es resuelto (el niño sale del hospital) el tumor deja de crecer
inmediatamente. Debido a que el niño se encuentra fuera de peligro ya no hay necesidad de
producir células extra en las glándulas mamarias.
Durante la Fase Pcl las ahora células superfluas son degradadas con la ayuda de hongos o
micobacterias, las cuales están especializadas para realizar esta tarea. Si la 2da Fase no es
interrumpida, por una recaída o un raíl, el tumor será completamente removido cuando el proceso
de caseificación se haya completado.
Un hombre invierte su dinero en un negocio muy prometedor. Al poco tiempo se da cuenta de que lo
engañaron y pierde todo lo invertido. Dependiendo de su estructura psicológica, el intestino puede
desencadenar una multiplicación celular que dé lugar a un tumor de crecimiento plano con calidad
absorbente. A esto se le denomina "espesamiento de la pared intestinal" y permite absorber más
alimento. En este caso el dinero es sentido figurado, representa alimento y el organismo
acondiciona el intestino para que pueda recuperar el dinero perdido. Este es el significado
biológico del evento.
También para este mismo caso, dependiendo siempre de su estructura psicológica, el sujeto puede
interpretar el acontecimiento como un bocado indigesto, que genera un tumor secretor con
crecimiento de tipo en coliflor, que incrementa la producción de jugos digestivos. En este caso el
significado biológico implica digerir mejor y hacer avanzar el pedazo de alimento (dinero perdido)
que está bloqueando y obstruyendo el intestino.
Otro caso es el de una persona que en su trabajo es acusada injustamente de robar dinero a la
empresa. Aquí el tumor secretor en el sigma se puede interpretar (este es el significado biológico)
como una "mala jugada por detrás" por la falsa acusación. Lo que se desea es deshacerse lo más
rápido posible de la acusación o dicho en sentido figurado: disolver el pedazo de mierda para
evacuarlo.
Veamos ahora cuales son los significados biológicos de los SBS del testículo. De todos los
diagnósticos de cáncer testicular solo un pequeño porcentaje (entre 10 y 20 %) indica un
verdadero tumor testicular, un teratoma testicular con una proliferación de las células germinales
primordiales (Endodermo) en la Fase Activa. En la Fase Pcl el teratoma es caseificado mediante la
micobacteria de la tuberculosis.
El significado biológico solo se entiende si se tiene en cuenta nuestra historia evolutiva desde el
estado más arcaico de nuestro desarrollo. Al inicio de la vida, cuando nuestros ancestros tenían la
forma de un anillo intestinal, se reproducían mediante la formación de un nuevo organismo a partir
de una única célula germinal. Después de varios millones de años se desarrolló la reproducción
sexual. Sin embargo, los organismos aún conservan rasgos del viejo modo de reproducirse y en
ocasiones al sufrir un conflicto de pérdida el individuo trata de solucionarlo de acuerdo con la
forma arcaica.
Las causas más comunes que generan un conflicto de pérdida con desvalorización son la muerte de
un hijo o de la esposa; el traslado de una persona muy querida a otra ciudad, la muerte o
desaparición de una mascota, etc.
El aumento de testosterona incrementa la potencia sexual de manera que la pérdida pueda ser
rápidamente reemplazada. Ninguno de estos síntomas puede ser considerado como "cáncer", pues
la proliferación celular sirve para la reconstrucción del órgano en la Fase Pcl, de la atrofia que se
produjo en la Fase Activa.
Las metástasis
De acuerdo con la teoría de la Medicina oficial de las metástasis, las células cancerígenas de un
tumor primario viajan a través del torrente sanguíneo o del sistema linfático a otras partes del
cuerpo donde producen un crecimiento canceroso en el nuevo sitio. Teóricamente, esta suposición
implicaría un riesgo potencial de contraer cáncer a través de una transfusión sanguínea y toda la
sangre donada debería ser verificada minuciosamente, cosa que no se hace porque se sabe que no
es así.
Las células que se multiplican en el colon y pertenecen al Endodermo (dirigido desde el Tronco
Cerebral) no pueden, bajo ninguna circunstancia, transformarse en células óseas con tejido del
Mesodermo Nuevo (dirigido desde la Sustancia Blanca).
En otras palabras: un tumor en el colon no puede esparcirse a los huesos. Sin embargo, alguien
diagnosticado con "cáncer" que de repente se siente desvalorizado ("no valgo nada", "no sirvo para
nada") puede tener un conflicto de desvalorización con descalcificación ósea, del que resulta al
llegar a la Conflictolisis en una proliferación en el hueso, llamada cancerígena (osteosarcoma). Si la
desvalorización es menos severa los nódulos linfáticos serán probablemente los implicados.
Igualmente, una mujer que experimenta un choque por diagnóstico de cáncer de mama y se
preocupa por los "malo" que hay en su seno puede desarrollar un melanoma o sufre una
desvalorización y después de una amputación de seno a menudo desarrolla una osteolisis en las
costillas.
A partir de lo anterior es posible entender por qué las mujeres con cáncer de mama sufren
frecuentemente este tipo de "metástasis".
Los "tumores secundarios" más frecuentes son los de pulmón, hígado o huesos, por que las
personas tienden a temer por su vida o porque no tendrán el sustento necesario para vivir si dejan
de trabajar por los estragos del proceso o porque si mueren dejan a personas dependientes
desamparadas que pueden morir de hambre. A menudo también se sienten desvalorizados sin
entender por qué les tocó a ellos la "maldición" del cáncer.
Si la teoría de las metástasis fuera cierta y de veras las células estuvieran viajando por la sangre
sin rumbo fijo hasta que por alguna razón se quedan en un órgano y allí se multiplican, los
"cánceres" más frecuentes serían del corazón o de las arterias y venas, los cuales son
inexistentes.
Si existiese este contagio interno corporal, toda transfusión de sangre debería ser prohibida,
dado el peligro de infección con cáncer. Hasta el día de hoy, no existe una "prueba de sangre para
detectar cáncer", y no existe información con respecto a la inyección de marcadores tumorales a
donadores potenciales de sangre para determinar la presencia de cáncer. Esto en sí demuestra que
la misma medicina oficial no considera la hipótesis de "metástasis" (para ella un hecho) en forma
seria. De hecho, cada transfusión la contradice, así como también se contradice a sí misma, ¡en
última instancia, negando su propia hipótesis! Un médico lo justificaría diciendo correctamente que
el contagio con cáncer de un cuerpo a otro jamás ha sido observado.
Es tanto como decir que un canadiense rubio de ojos azules que está loco se echa a nadar al mar
pero como nadie lo ha visto no sabemos a qué mar se ha tirado. Y en su andar, cuando está nadando
sufre una metamorfosis, según parece además de loco es super inteligente porque se da cuenta
que va a China, y cuando llega a China ya se ha convertido en chino.
Miren hasta ahí podría creerlo. Pero lo que no puedo admitir es que un oncólogo entre mil millones
de chinos pueda afirmar que uno determinado es el canadiense."
Metástasis en animales
Es bien sabido en el mundo de los animales que éstos muy raramente presentan un cáncer
secundario (metástasis). Sólo en una etapa de intenso deterioro corporal se puede producir en el
animal un conflicto de desvalorización, por ejemplo, cuando ya no corre como antes o ya no puede
luchar porque se siente débil.
Si se toma una imagen de los pulmones en 100 perras hembras en Fase Activa de ubre y también
se hace lo mismo con 100 mujeres en Fase Activa de glándula mamaria, se encuentra que en ambos
grupos no se observan nódulos pulmonares.
Sin embargo, dos meses después descubrimos que en el caso de las mujeres muchas presentan
tumores en los alvéolos pulmonares a causa de la brutalidad en la que se les comunicó el
diagnóstico. Por el contrario, en las perras no hay ningún caso como este ya que, por suerte, no
pueden entender el diagnóstico y por lo tanto no sienten pánico, no desarrollan un segundo SBS.
La herencia y el cáncer
El tema de la herencia y el cáncer genera una gran controversia y confusión. La Medicina Oficial
asegura que el cáncer es hereditario, ya que ha observado la incidencia de un determinado cáncer
en algunas familias durante varias generaciones. Por otra parte, muchos practicantes y estudiosos
del nuevo paradigma aseguran que el cáncer no se hereda. ¿Quién tiene la razón?
Heredamos de nuestros ancestros la forma, tamaño y color de nuestros órganos. El que alguien
tenga las orejas, la nariz, los pies o las manos más o menos grandes o de una forma en particular es
algo que se hereda, también el color de los ojos, de la piel o del pelo.
Junto con esta información orgánica también heredamos un programa de funcionamiento normal u
ordinario para cada órgano (fisiología ordinaria). Por ejemplo: los pulmones no existen por gusto,
tienen la importante función de captar oxígeno y eliminar el dióxido de carbono; y al igual que
tienen un tamaño y forma determinada, también
heredamos la habilidad para cumplir esa función.
Pero, además del programa de funcionamiento normal y
ordinario de cada órgano, también heredamos un
Programa de Funcionamiento Especial o extraordinario
(SBS) que manifestará una fisiología extraordinaria para
cada órgano, que se activa solo ante situaciones de crisis
o catástrofe, de amenaza a la supervivencia.
Estos programas extraordinarios vienen incorporados en
la compleja información genética de los seres vivos.
Estos programas especiales, en dependencia del origen
embrionario del tejido orgánico, pueden producir aumento de la función y multiplicación celular
(tumor) o reducción de la función y reducción celular (atrofia, úlceras) si se activan ante una
situación de emergencia biológica. Y todos tenemos estas parejas de programas por cada órgano,
uno que se utiliza normalmente y otro que solo se utiliza en situaciones extraordinarias cuando es
imprescindible para la supervivencia.
Por lo tanto, todos heredamos la posibilidad de desarrollar un "cáncer", si se dan las
circunstancias adecuadas (DHS). Nuestra percepción sobre el medio ambiente es determinante. Lo
que no sabe explicar la Medicina Oficial es por qué en unos individuos se activa el cáncer y en
otros no o en qué momento.
En una familia puede ser recurrente la aparición del cáncer de pulmón si, por ejemplo, durante
generaciones sus integrantes han vivido en la misma casa que está situada en una zona peligrosa
por el nivel de delincuencia o de violencia, donde en cualquier momento pueden ser atacados para
robarles y matarlos o impactados en una balacera en medio de una pelea entre pandillas. Ellos, al
igual que el resto de los habitantes de este planeta, tienen el programa especial de alvéolos
pulmonares listo para ser activado por miedo a morir.
Pero, si un miembro de esta familia tiene la posibilidad de irse a vivir a una zona tranquila y sin
peligro para la vida, no tiene ninguna razón para activar este SBS y no tiene por qué continuar el
patrón que ha estado presente por generaciones. En esta familia aparentemente se ha heredado el
cáncer de pulmón y, de hecho, sí lo han heredado, pero no el cáncer como tal, sino el SBS para
situaciones especiales, la posibilidad de activarlo si fuese necesario.
Otro ejemplo es una familia en la que por varias generaciones las mujeres (que todas han sido
diestras) han padecido cáncer (glandular) del seno derecho, porque han repetido el patrón familiar
de escoger una pareja que se embriaga y las golpea. Aparentemente el cáncer del seno femenino
en esta familia se ha heredado, y sí, se ha heredado el SBS y se ha repetido el patrón de
"preocupación por la integridad del hogar" por peleas con la pareja. Pero si una descendiente
rompe con la tradición y se busca un hombre bueno que la quiera y la trate bien y que le de
estabilidad al hogar, se rompe la cadena (mal interpretada como "hereditaria") de la aparición del
cáncer de seno derecho. Ella tendrá el programa listo para ser usado, pero nunca lo activará si no
se dan las condiciones precisas.
Hay órganos que son exclusivos de las mujeres, como la vagina, el útero, las trompas de Falopio, los
ovarios, las glándulas de Bartholin y de Skene, las glándulas mamarias y los conductos
galactóforos. Ellas heredan de sus ancestros la forma, color y tamaño de esos órganos, así como el
programa normal de funcionamiento y el programa especial (SBS) para situaciones de peligro.
Los hombres también tienen órganos exclusivos, como la próstata, las vesículas seminales, los
testículos y el pene y también heredan de sus ascendientes la forma, color y tamaño de esos
órganos, así como sus programas normales de funcionamiento y sus programas especiales que serán
activados en situaciones de crisis.
Los hombres también tienen glándulas mamarias y conductos galactóforos, pero normalmente
están atrofiados, heredan su forma y tamaño de manera diferente a las mujeres y habitualmente
no heredan sus programas normales de funcionamiento ni sus programas especiales.
El cáncer o la posibilidad de desarrollar un cáncer se hereda, pero no selectivamente por familias
o individuos "que están malditos", sino que todos poseemos los programas especiales para cada
órgano (o zona del cuerpo en caso del Mesodermo Nuevo), pero solo los activaremos cuando se den
las circunstancias de emergencia biológica, ante una amenaza a la vida o una necesidad vital
insatisfecha.
- El lado izquierdo del cerebro controla de forma cruzada al órgano o zona del cuerpo que se
encuentra en la hemiparte derecha del cuerpo.
- El lado derecho del cerebro controla de forma cruzada al órgano o zona del cuerpo que se
encuentra en la hemiparte izquierda del cuerpo.
- En los diestros y diestras la dominancia está regulada por el hemisferio cerebral izquierdo.
- En los zurdos y zurdas la dominancia está regulada por el hemisferio cerebral derecho.
La dominancia corporal no depende del sexo ni de los niveles de hormonas vinculados al sexo, ni
tampoco de sus modificaciones fisiológicas, instrumentales o terapéuticas.
- La parte dominante de nuestro cuerpo (diestro o zurdo) está relacionada con aquellos individuos
que percibimos a nuestro nivel. Cuando tenemos un shock biológico con un individuo percibido a
nuestro nivel la hemiparte de nuestro cuerpo que estará implicada será la dominante.
- La parte no dominante de nuestro cuerpo (diestro o zurdo) está relacionada con aquellos que
percibimos más arriba o más abajo de nosotros. Cuando tenemos un shock biológico con un
individuo percibido más arriba o más abajo de nosotros la hemiparte de nuestro cuerpo que estará
implicada es la no dominante.
- Cuando ocurre un shock biológico (DHS) donde está implicado un individuo percibido a nuestro
nivel, el Foco de Hamer (FH) estará localizado en un relé del hemisferio dominante de nuestro
cerebro, situado en la hemiparte no dominante de nuestro cuerpo. Por la Contralateralidad
cerebro - órgano, la hemiparte de nuestro cuerpo que estará implicada es la dominante (diestra o
zurda).
- Cuando ocurre un shock biológico (DHS) donde está implicado un individuo percibido más arriba o
más abajo de nosotros, el Foco de Hamer (FH) estará localizado en un relé del hemisferio no
dominante de nuestro cerebro, situado en la parte dominante de nuestro cuerpo. Por la
Contralateralidad cerebro - órgano, la hemiparte de nuestro cuerpo que estará implicada es la no
dominante (diestra o zurda).
Nuestra Lateralidad Biológica (si somos diestros o zurdos) determina en cuál de los dos
hemisferios cerebrales impactará el Foco de Hamer al ocurrir el DHS, en relación a cómo
percibimos al individuo implicado (a nuestro nivel o por encima o debajo de nosotros); y por la
contralateralidad cerebro - órgano, el lado contrario del cuerpo será el afectado. Con excepción
en los casos en que el control cerebral sea homolateral con respecto al órgano. Esto aplica para
todos los tejidos embrionarios, excepto el Endodermo controlado desde el Tronco Cerebral.
Cuando tenemos un shock biológico con alguien percibido a nuestro nivel o igual, que puede ser un
rival de mayor fuerza o capacidad física, necesitamos usar nuestra parte corporal más hábil para
defendernos o atacar, que es controlada por nuestro hemisferio cerebral dominante.
Cuando tenemos un shock biológico con alguien percibido por encima de nosotros, con mayor rango
en la manada o grupo, no debemos oponernos, sino someternos, por lo que reaccionaremos con
nuestro hemisferio cerebral no dominante para no ocasionar daño a este individuo de mayor
importancia: la madre, el líder de la manada.
Cuando tenemos un shock biológico con alguien percibido por debajo de nosotros, que depende de
nosotros, no necesitamos ni debemos actuar de forma que ponga en riesgo su vida, por lo que
reaccionaremos con nuestro hemisferio cerebral no dominante para no ocasionar daño a este
individuo dependiente de nosotros o de inferior capacidad o fuerza: hijos pequeños, ancianos.
El diseño de nuestro cuerpo ha sido “moldeado” por una necesidad vital y constante de ser lo más
eficaces posible para sobrevivir. Pensemos en un caso de huida, en donde estamos sentados
tranquilamente a los pies de un árbol y de repente percibimos que por nuestra derecha aparece
una serpiente dispuesta a atacar nuestro brazo derecho.
Esa percepción de la serpiente por el lado derecho queda “procesada” por la Corteza Cerebral del
hemisferio izquierdo. Para evitar el picotazo de la forma más eficaz, necesitamos retirar el brazo
derecho lo más rápidamente posible. Si no existiera esta decusación de las vías motoras, de los
“cables” que portan la información de “¡muévete!”, la Corteza Visual izquierda debería enviar la
información a la Corteza Motora del hemisferio derecho para iniciar la respuesta motora de
retirar el brazo derecho.
Pero, lo que ocurre es que la Corteza Visual izquierda envía la información a la Corteza Motora de
su mismo hemisferio (izquierda) y esta inicia la respuesta de retirada del brazo del lado opuesto
(derecho) gracias a ese cruce de vías; siendo este camino significativamente más rápido,
sobretodo si se trata de evitar ser envenenado y sobrevivir.
Percepción
La percepción que tengamos sobre los otros miembros del grupo puede ser muy variable, más allá
de lo "normal" o habitual, dada la interrelación con los otros miembros de la manada,
habitualmente:
- Individuos percibidos normalmente a nuestro nivel: pareja, padre, hermanos, colegas, socios,
amigos, compañeros de trabajo, vecinos, rivales, etc.
- Individuos percibidos normalmente más arriba o más abajo de nosotros: madre, abuela, hijos
pequeños, mascotas, personas que dependen de nosotros, el gran maestro o líder espiritual o
académico (el gurú), etc.
Lateralidad Biológica
La Lateralidad Biológica se decide en el momento de la primera división después de la concepción.
Aproximadamente el 90% de la población humana es diestra, contra un 10% de personas zurdas.
La Lateralidad Biológica puede ser fácilmente establecida con el test del aplauso. La mano que se
coloca arriba o que golpea a la otra mano, en la mayoría de los casos, es la mano principal y nos
señala si la persona es diestra o zurda.
Diestros Zurdos
Otra forma de saber la Lateralidad Biológica es cargando a un niño pequeño en brazos hacia un
lado de nuestro cuerpo, la mano que queda libre es la que domina y la usamos para darle de comer y
atenderlo, protegerlo o para realizar otras actividades durante el tiempo en que lo sostenemos.
Por ejemplo, una persona diestra colocará al bebé del lado izquierdo para tener la derecha libre y
disponible.
1- Pedirle que destape una botella con tapa fuertemente apretada (usará la mano dominante para
quitar la tapa).
2- Pedirle que simule golpear con el puño a una persona en el rostro o dar una cachetada (lo hará
con la mano dominante).
3- Pedirle que se acueste y se ponga de pie (pondrá en el suelo primero la pierna del lado
dominante).
4- A una persona parada, pedirle que salga caminando (saldrá con el pie dominante).
5- Cuando la persona está distraída, darle un empujón leve (dará un paso con el miembro pélvico
dominante para no caerse).
6- Pedirle a la persona que gire sobre su propio cuerpo (lo hará hacia su lado dominante).
7- Pedirle a una persona que lance un objeto a distancia con el objetivo de dar en el blanco (lo hará
con su brazo dominante).
8- Brindarle a la persona un plato de comida y un tenedor (tomará el tenedor con la mano
dominante).
9- Ofrecerle a la persona un lápiz y un sacapuntas y pedirle que le saque punta al lápiz (tomará el
lápiz con la mano dominante).
10- Pedirle a la persona que reparta las cartas (se sostiene el mazo con la mano dominada y se
reparten las cartas con la mano dominante).
11- Preguntarle a la persona con qué mano se masturba (con la mano que lo haga será la dominante).
12- Preguntarle a la persona con qué mano escribe (escribirá con la mano dominante, excepto los
zurdos que fueron obligados de pequeños a aprender a escribir con la derecha. Normalmente las
acciones de fuerza y protección (escudo) las hacemos con la mano no dominante y las acciones que
llevan precisión y destreza con la mano dominante.
Si la persona se siente impedida o interrumpida del movimiento por individuos percibidos como
"iguales" (padre u otros iguales) se reduce su motricidad del lado dominante y puede aparentar que
su lado dominante (Lateralidad) es el contrario.
Para los shocks biológicos relacionados con el Tronco Cerebral (Endodermo) no aplican las Reglas
de la Lateralidad. No importa con respecto a quién se produzcan los shocks biológicos,
relacionados generalmente con la necesidad e imposibilidad de atrapar bocados. Y la relación entre
las hemipartes del Tronco Cerebral y los órganos endodérmicos de nuestro cuerpo es casi siempre
homolateral.
Los órganos endodérmicos que son dobles (uno a cada lado del cuerpo) son controlados
homolateralmente, desde la hemiparte del Tronco Cerebral que se corresponde con el lado del
cuerpo. Lo mismo ocurre con los órganos que tienen dos hemipartes como: la submucosa de la boca,
lengua y faringe; hipófisis; tiroides; submucosa de la vejiga; submucosa nasal, endometrio y
próstata.
Los órganos endodérmicos que no son dobles (existe uno solo) son controlados desde la hemiparte
del Tronco Cerebral según si su función está relacionada con atrapar o con expulsar bocados,
independientemente del lado del cuerpo en que se encuentren físicamente.
Se controlan desde la hemiparte derecha los órganos que intervienen en la absorción de bocado de
comida: tercio inferior del esófago, gran curvatura del estómago, duodeno, yeyuno, íleon, hígado y
páncreas.
Se controlan desde la hemiparte izquierda los órganos que intervienen en la expulsión de bocado
de comida: ciego, apéndice, colon ascendente, colon transverso, colon descendente, sigma y recto.
Las excepciones en cuanto a la relación cerebro - órgano, donde no hay Homolateralidad, sino
Contralateralidad, son:
- Órganos con función relacionada con absorber bocados de comida, pero están del lado izquierdo
del cuerpo: gran curvatura del estómago y páncreas. En el caso de: duodeno, yeyuno e íleon
también tienen parte del órgano del lado izquierdo del cuerpo.
- Órganos con función relacionada con expulsar bocados de comida y están del lado derecho del
cuerpo: ciego, apéndice, colon ascendente, parte derecha del colon transverso.
La Homolateralidad sigue en el Mesencéfalo, parte más alta del Tronco Cerebral que se estudia
aparte y que inerva las musculaturas lisas. Incluso, un poco por encima en el relé (doble o par) del
parénquima renal (glomérulos renales) que corresponde a la Sustancia Blanca. El Mesencéfalo es el
intermedio entre Tronco Cerebral y la Sustancia Blanca y justo encima está el relé doble de
parénquima renal, que aunque es Mesodermo Nuevo es homolateral y sin embargo tiene ya
comportamiento mesodérmico nuevo. Excepción al igual que el miocardio, porque resto del
Mesodermo Nuevo es contralateral.
A partir del Cerebelo hacia arriba las Reglas de la Lateralidad son aplicables. En los órganos
controlados desde el Cerebelo y el Cerebro Nuevo (Sustancia Blanca y Corteza Cerebral) hay
generalmente una correlación cruzada con el órgano, hay Contralateralidad. Cada hemisferio del
cerebro dirige el lado opuesto del cuerpo.
Ejemplo
Si una mujer diestra sufre un conflicto de preocupación por el estado de salud de su hijo, ella
puede desarrollar un cáncer glandular de mama en su seno izquierdo. Debido a que existe una
correlación cruzada desde el cerebro hacia el órgano, en un escáner cerebral
el FH correspondiente se encontrará en el hemisferio derecho del Cerebelo, donde se controla al
tejido glandular de la mama izquierda.
Si la mujer fuese zurda, el conflicto de preocupación sobre su hijo se manifestaría como cáncer en
la mama derecha, mostrando el impacto en una tomografía cerebral en el hemisferio izquierdo en
el Cerebelo.
Otras excepciones
Normalmente existe un cruzamiento entre los hemisferios del cerebro y los lados del cuerpo, la
mayor parte del cuerpo es Contralateral y se aplican las Reglas de la Lateralidad. La parte derecha
del cuerpo es controlada desde el hemisferio izquierdo del cerebro y la parte izquierda del cuerpo
es controlada desde el hemisferio derecho del cerebro. Pero existen excepciones:
Mesodermo Nuevo
- Miocardio (por rotación en la etapa embrionaria): aplican las Reglas de la Lateralidad a la inversa
por no haber Contralateralidad cerebro - órgano.
- Parénquima renal: no hay Contralateralidad cerebro - órgano (Homolateral) ni aplican las Reglas
de la Lateralidad.
- Bazo: hay Contralateralidad cerebro - órgano, pero no aplican las Reglas de la Lateralidad.
- Venas y arterias: no aplican las Reglas de la Lateralidad, la activación es por conflicto local.
Ectodermo
Las excepciones que siempre se mencionan en el Ectodermo son las retinas y cuerpos vítreos en los
ojos. En ambos casos no hay Contralateralidad:
-Las dos hemipartes izquierdas de cada ojo (de cada retina y cuerpo vítreo) que miran a la derecha
(captan luz e imágenes del lado derecho) se conectan a través del quiasma óptico con el relé en la
parte occipital de la corteza visual izquierda.
- Las dos hemipartes derechas de cada ojo (de cada retina y cuerpo vítreo) que miran a la
izquierda (captan luz e imágenes del lado izquierdo) se conectan a través del quiasma óptico con el
relé en la parte occipital de la corteza visual derecha.
En el caso de las retinas si aplican las Reglas de la Lateralidad, en dependencia de quien viene el
miedo en la nuca se impactará el FH en un hemisferio de la Corteza Visual o en el opuesto. Pero,
por la Homolateralidad cerebro - órgano a través del quiasma óptico, las Reglas de la Lateralidad
son a la inversa del resto del cuerpo.
En el caso de los cuerpos vítreos, que el miedo en la nuca es impersonal, no de individuo definido
(bestia, fiera, monstruo, fantasma, ladrón, asaltante, bandido, asesino, represor) parecen no
aplicar las Reglas de la Lateralidad.
Lo interesante es que hay varios órganos ectodérmicos en los que tampoco aplican las Reglas de la
Lateralidad ni hay Contralateralidad:
Todos los órganos anteriores se controlan desde la Corteza Territorial, para esta sección de la
Corteza Cerebral no aplican lad Regla de la Lateralidad (no importa de quien venga el shock
biológico).
La mayoría de ellos son un solo órgano que ni siquiera tiene hemipartes a ambos lados de cuerpo:
- Venas coronarias.
- Arco aórtico.
- Arterias coronarias.
- Recubrimiento ectodérmico de la curvatura menor del estómago.
- Recubrimiento ectodérmico del píloro.
- Recubrimiento ectodérmico de parte del duodeno.
- Conductos biliares.
- Vesícula biliar.
- Conductos pancreáticos.
Otros órganos, aunque presentan hemipartes a ambos lados del cuerpo no aplica la
Contralateralidad ni las Reglas de la Lateralidad (como sí ocurre con otros órganos ectodérmicos
como: mucosa de la uretra, mucosa de la vejiga, mucosa nasal, mucosa bucal, epidermis) ellos son:
Otros órganos incluso son dobles (existen a ambos lados de cuerpo), pero tampoco hay
Contralateralidad cerebro - órgano ni aplican las Reglas de la Lateralidad:
Para todos los órganos anteriores no importa con respecto a quien sea el shock biológico, lo que
define que se impacte el Foco de Hamer en ellos es si la percepción de la persona es masculina o
femenina.
Los relés situados en la Corteza Territorial derecha (lóbulo temporal derecho) responden a la
percepción masculina (lado masculino del cerebro) y los impactos en ellos provocan una reducción
del nivel de testosterona y un estado depresivo.
Los relés situados en la Corteza Territorial izquierda (lóbulo temporal izquierdo) responden a la
percepción femenina (lado femenino del cerebro) y los impactos en ellos provocan una reducción
del nivel de estrógeno y un estado maníaco.
Hay otra sección de la Corteza Cerebral en que también lo que define el impacto del Foco de
Hamer de un lado u otro del cerebro es la percepción de la persona. Esto sucede en la Corteza
Pre-Motora (Frontal), aquí también el lado derecho se corresponde con percepción masculina y el
lado izquierdo con percepción femenina. Para estos órganos tampoco aplica la Contralateralidad
cerebro - órgano ni las Reglas de la Lateralidad:
En esta sección de la Corteza se controla un órgano muy curioso que (según ha publicado el Dr.
Hamer) se controla desde el lado derecho del cerebro, correspondiente a la percepción masculina.
Pero en este caso sí existe el órgano en ambos lados del cuerpo y aplican las Regla de la
Lateralidad, en dependencia de con respecto a quien se produce el shock biológico: "algo que me
viene para arriba, de frente, y que es inevitable":
Parece ser que solo para este órgano ectodérmico aplican las Reglas de la Lateralidad, pero no hay
Contralateralidad cerebro - órgano. A no ser que realmente se controle de forma cruzada: arcos
branquiales del lado derecho de la faringe desde el lado izquierdo de la Corteza Pre-Motora y
arcos braquiales del lado izquierdo de la faringe desde el lado derecho de la Corteza Pre-Motora
(como plantean algunos estudiosos de las Leyes Biológicas, contrario a lo publicado por el Dr.
Hamer).
Hay otro grupo de órganos ectodérmicos en los que no aplican las Reglas de la Lateralidad pero sí
hay Contralateralidad cerebro - órgano, situados en la Corteza Territorial, influidos por la
percepción de la persona. Si la percepción es masculina (no poder delimitar, marcar el territorio) o
si la percepción es femenina (no poder reconocer los límites del propio territorio), ellos son:
Cuando experimentamos un choque de conflicto (DHS), cuando se vive una situación inesperada,
aguda, dramática y vivida en soledad, representa sólo un instante, pero en ese momento la
supervivencia del individuo se siente amenazada y nuestra mente se encuentra en una situación de
conciencia aguda.
Muy alerta, el organismo se sensibiliza con esa experiencia y toma una especie de fotografía
sensorial del ambiente, nuestro subconsciente capta de manera subjetiva a través de los cinco
sentidos componentes ambientales importantes presentes en el momento del DHS, tales como:
plantas.
- Las condiciones del tiempo (frío, calor, corriente de aire, lluvia).
- Procesos biológicos importantes como la menstruación.
Estas impresiones permanecen almacenadas y conectadas con el mismo contenido emotivo. Los
raíles son las circunstancias con las que se asocia el shock biológico en el momento del DHS.
Desde ese momento, esos elementos son suficientes para activar el recuerdo de esa vivencia, el
mismo Programa Especial Biológico Sensato (SBS). El Dr. Hamer llamó a estas improntas que
permanecen tras la ocurrencia del DHS: "raíles", "pistas", "tracks" en inglés.
El raíl es un mecanismo ancestral que funciona como una señal de alarma o advertencia para evitar
experimentar el mismo "peligro" (DHS) una segunda vez. En la naturaleza estas señales de alarma
son vitales para sobrevivir. Por ejemplo: "aléjate de ese estimulo, la última vez que lo tuviste cerca
sufriste un conflicto, no te acerques a él otra vez". Si un animal sufre un DHS donde el raíl es el
rugido de un león, cada vez que vuelva a escuchar, así sea a mucha distancia, se pondrá alerta y
posiblemente escapará inmediatamente sin esperar que el león se acerque, lo que favorece su
supervivencia. En este sentido los raíles son un mecanismo arcaico y ancestral de supervivencia.
Los raíles deben de tomarse en cuenta cuando nos enfrentamos a condiciones recurrentes en las
que no se puede establecer la relación entre el shock biológico y el síntoma, cuando no se trata de
una recaída (recidiva) por recordar o revivir situaciones previas, tales como: migrañas, crisis
epilépticas, resfriados recurrentes, ataques de asma, irritaciones de la piel, etc. También juegan
un papel muy importante en las llamadas "enfermedades crónicas" o las consideradas
“enfermedades autoinmunes”.
En la terapia basada en las Leyes Biológicas encontrar los raíles que pidieron haber surgido en el
momento del DHS es una medida significativa para lograr completar el SBS.
Ejemplo de alergia
Un profesor que ha investigado en el tema de las alergias llegó a pronunciar la siguiente fórmula,
sencilla y precisa: "si en el momento de sufrir un DHS, un conflicto biológico, pasa por delante
tuyo una vaca, desarrollarás alergia a las vacas. Si en cambio, en ese preciso momento mordías una
manzana, desarrollarás una alergia a las manzanas". Tanto el animal como el ser humano
"consideran" sin tener conciencia de ello, en el preciso instante del DHS, las circunstancias que
acompañan al DHS. Estas circunstancias generan posteriormente las denominadas alergias.
Un ejemplo: antes, la alergia al polen era la más frecuente. Hoy ha dejado de serlo. El motivo era
muy sencillo: el primer amor de una pareja de jóvenes tenía lugar con frecuencia en un pajar o en
el campo, pues ese era el lecho más sencillo y en el cual podían pasar desapercibidos.
En los casos en los cuales ese primer contacto íntimo se veía perturbado de forma inesperada o se
desarrollaba sin armonía, se sufría con frecuencia un DHS. Aquel que de los dos experimenta un
DHS, que tiene un conflicto biológico, más tarde cada vez que percibe el olor a paja, cada vez que
capta los alérgenos, el organismo "recuerda" involuntariamente y sin tener conciencia de ello,
aquella catástrofe en el pajar. En la Fase Post-conflictolisis (Pcl), aparece entonces una
tumefacción de la mucosa nasal y de los senos paranasales llamada rinitis atópica.