Anorexia
Anorexia
Anorexia
Anorexia y Bulimia
Los pacientes con emaciación que también presentan atracones y purgas son
habitualmente clasificados como anoréxicos, subgrupo bulímicos (Hus, 1986).
Por lo menos 40-50% de todos los pacientes anoréxicos también tienen bulimia
(Garfinkel y col. 1980; Hall y col. 1984; Hsu y col. 1979, citado en Gabbard,
2009).
Freud (1899), Osler (1912) y Riddle (1914) ligaron los síntomas bulímicos de
ansias de comer y el vómito con la histeria. En “Inhibición, Síntoma y Angustia”
(1925) Freud se refiere a las inhibiciones de la alimentación “La perturbación
más frecuente de la función nutricia es el displacer frente al alimento por quite
de la libido. Tampoco es raro un incremento del placer de comer; se ha
investigado poco una compulsión a comer que tuviera por motivo la angustia de
morirse de hambre. Como defensa histérica al acto de comer conocemos el
síntoma del vomito”.
Los sentimientos de exclusión, los celos edípicos y la rivalidad con una madre
fálica, tienen gran importancia. La delgadez y la amenorrea indican el
sometimiento a la madre y el castigo por rivalizar edípicamente con ella. El
síntoma histérico reclama, a través de su actuación, ser atendida (llama la
atención) y obtiene lo que se conoce como beneficio secundario del síntoma, lo
que explica su deseo de prolongar la situación todo lo que sea posible (refugio
en la enfermedad).
Boris (1998, citado en Urzúa) plantea que debido a esto las anoréxicas se
vuelven omnipotentes para sobrevivir; evitar la necesidad es la clave de la
existencia. En la fantasía evitar la necesidad significa ser completamente
autosuficiente e independiente. Previene de los sentimientos que aparecen
frente a la separación. Si no hay deseo, la necesidad inconsciente de la madre
no existe. Inconscientemente para muchas anoréxicas la comida sigue siendo
concretamente igualable a la madre. Si el deseo se reconoce entonces la única
posibilidad es ser esclava de la madre y de la comida. A través de la inanición
la necesidad nuca será reconocida. En el mundo interno hay una madre que
esclaviza, que no quiere ser separada de su niña y que es incapaz de tolerar
que ella ya no es tan necesaria para su hija. Al no comer la fantasía
inconsciente de completa unión con la madre puede ser simbolizada. Al comer
la joven toma consciencia de la separación.
Por su parte Palazzoli (2009, citado en Gabbard) sostiene que el cuerpo suele
ser percibido como si fuera habitado por una madre mala introyectada, y la
inanición puede ser un intento para detener el crecimiento de este objeto
interno intrusivo y hostil.
Estas pacientes suelen ser pacientes graves que además del tratamiento
medico clínico para restablecer su salud física y de un tratamiento
psicoanalítico individual, requieren también del tratamiento de su grupo familiar
e incluso de internamiento. Es absolutamente típico la falta de conciencia de
enfermedad.
Referencias bibliográficas:
- Baravalle, G. Anorexia: teoría y clínica psicoanalítica. España: Paidós,
1998.
- Estrada-Inda, Lauro. Algunas observaciones sobre la "Anorexia
Nervosa" Lauro Estrada-Inda. Cuadernos de Psicoanalisis. Vol.11,
No.3-4. México: Asoc. Psicoanalítica Mexicana, A.C., 1978. -- P. 71-97.
- Psiquiatria psicodinamica en la práctica clínica, Gabbard, 3° Edición,
Editorial panamericana: 2009
- Tinahones Madueño, Francisco José. ANOREXIA Y BULIMIA. Una
experiencia clínica, Editorial: Ediciones Díaz de Santos , Publicado:
2004.
- Urman, Federico R. Una contribución para el diagnostico diferencial
entre anorexias neuróticas (conversivas) y psicosomáticas (normadas).
Buenos Aires: Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires., 1990. Vol.12,
No.2-3,p.439-456.
- Urzúa, Elena. Algunas Reflexiones en Torno a la Comprensión
Psicoanalítica de la Anorexia y la Bulimia. Santiago Chile: Asociación
Mtra. Gabriela Mustri Psicopatologia III Vivian Finkelstein Mizrahi