13 Caso práctico - Procedimiento de recaudación

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LA EXTINCIÓN DE LA DEUDA TRIBUTARIA

CASO PRÁCTICO

Plazo en periodo voluntario para el pago de la deuda tributaria.

Dos particulares se ponen de acuerdo sobre el precio para la compraventa de un inmueble sito en
Madrid capital. El día 5 de junio de 2019 firman un contrato de arras por el que la parte compradora
entrega el 5 % del importe acordado; y el 15 de julio elevan a escritura pública dicho contrato de
compraventa.

Se pide:

1. Determine los distintos tributos (estatales, autonómicos y locales) devengados con


ocasión de dicha transmisión y el plazo reglamentario de liquidación.

2. ¿Cuáles serían las consecuencias tributarias derivadas de un impago? Razone la


respuesta.

Solución

1. Ha de distinguirse entre la parte vendedora y la parte compradora.

• Parte vendedora. Por un lado, habrá de cuantificar la ganancia o pérdida de patrimonio gravada
en el IRPF (arts. 33 y ss. LIRPF) y autoliquidar el correspondiente impuesto en el periodo
voluntario de pago que será en mayo-junio de 2020.

Por otro lado, dicho administrado tendrá también que autoliquidar el IIVTNU (conocido
informalmente como plusvalía municipal). De acuerdo con el artículo 24.1 de la Ordenanza
reguladora del Ayuntamiento de Madrid del IIVTNU, el plazo máximo para la presentación de la
autoliquidación será «de 30 días hábiles siguientes a aquel en que haya tenido lugar el hecho
imponible» (dies a qua). Ahora bien, el plazo de prescripción (dies ad quem) será de cuatro años
desde la finalización de esa fecha, entendida como plazo máximo del pago voluntario.

• Parte compradora. El adquirente del inmueble tendrá que autoliquidar el TPO. El plazo de
autoliquidación será de 30 días hábiles a contar desde el momento en que se cause el acto o
contrato (art. 102.1 Reglamento del ITPAJD).

2. La finalización del periodo voluntario de pago en cada uno de los tributos


devengados dará lugar al devengo de los recargos del periodo ejecutivo (art. 28 LGT),
cuyo tipo dependerá del momento en que autoliquide la deuda (10% en el plazo fijado en
la providencia de apremio, o 20 % si se exacciona transcurrido dicho plazo).

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Recaudación en periodo ejecutivo.

La sociedad gastronómica El socarrat, dedicada al servicio de restauración, tenía que haber


presentado la declaración anual de IVA (con una cuota a ingresar de 3. 000 €), cuyo plazo venció el 31 de
enero de 2018.

Se pide:

Con fecha de 15 de octubre del 2018 se plantea diversas opciones que somete a consideración.

1. ¿Qué consecuencias tributarias tendrá la presentación de la declaración anual de IVA si


decide hacerlo el 15 de octubre sin que le haya requerido todavía la Administración para
su pago? Razone la respuesta.

2. ¿Qué consecuencias tributarias tendría si tras decidir no hacer nada, la Administración


descubriera dicho impago requiriéndole su cumplimiento con fecha de 10 de febrero de
2019? Razone la respuesta.

3. ¿Tendría alguna consecuencia tributaria que tras dejar pasar el tiempo decidiera pagar
espontáneamente la deuda el 20 de febrero de 2022? Razone la respuesta.

Solución

1. Nos encontraríamos ante una situación de declaración espontánea sin


requerimiento previo administrativo regulado en el artículo 27 de la LGT, por cuanto el
contribuyente presenta dicha declaración antes de que la Administración tributaria le
requiera. Como consecuencia de ello, si el administrado tuviera que ingresar algún
importe, dicha cantidad se vería incrementada en los términos del artículo 27.2 de la LGT:
al haber transcurrido más de seis meses, tendrá un recargo del 15 % (en cualquier caso
sin intereses de demora ni sanciones tributarias).

2. Si el día 10 de febrero de 2019 la Administración le requiriera (ya no estaríamos en


la situación anterior contemplada en el art. 27 LGT) por lo que se le exigiría en dicha
notificación extemporánea la providencia de apremio «invitándole» a pagar dicho importe
antes del día 20 de febrero en los términos que establece el artículo 62.5 de la LGT:

• Si cumpliera con dicha petición, se le exigiría adicionalmente un recargo de apremio reducido


del 10 % sin intereses de demora.

• En caso de que no atendiera a dicha petición y transcurriera la fecha del 20 de febrero sin la
correspondiente declaración, se le exigiría ya un recargo de apremio ordinario del 20 % con
intereses de demora.

Además, en caso de que concurriera negligencia por parte del administrado por no
presentar dicha declaración sin ninguna causa que justificase dicho incumplimiento, se le
exigirían sanciones por el incumplimiento de la normativa tributaria (arts. 191 o 192 LGT).

3. Si el día 20 de febrero de 2022 decidiera espontáneamente presentar la


declaración e ingresar en su caso los importes debidos, nos encontraríamos ante una
situación de prescripción al haber transcurrido más de cuatro años ( dies a quo : a partir

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del 1 de febrero de 2018 hasta, dies ad quem , el 1 de febrero de 2022, que es el momento
en que prescribirían las obligaciones tributarias derivadas de esta situación), lo que
llevaría a prescribir el derecho de la Administración a exigir dicha declaración y a no
poder exigir, en su caso, sanciones.

En el caso de que se ingresara en dicho momento (20 de febrero de 2022) algún


importe, al estar dicha obligación prescrita, nacería el derecho del administrado a exigir la
devolución de ingresos indebidos, pues no existe en el ámbito tributario (a diferencia del
derecho civil) la prescripción ganada. Así las cosas, el artículo 69.2 de la LGT señala que
«la prescripción ganada extingue la deuda tributaria».

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