Contextualización Del Café
Contextualización Del Café
Contextualización Del Café
Siguiendo la historia relatada por los mismos autores, Dicum y Luttinger (1999), durante
la Edad Media, la popularidad del café junto con su expansión geográfica crecieron de la
mano del Imperio Otomano. Fue tal su importancia entre los Turcos que el grano llego a ser
considerado tan básico como el pan y el agua. De esta cultura se deriva la palabra café que
viene del árabe kaveh. A mediados del siglo XVI, se comienzan a popularizar los primeros
sitios especializados en servir esta bebida, y se les conoce como “escuelas de los cultos#
en todo el territorio que cubría desde Constantinopla, hasta el Cairo, pasando por Meca.
Es así como el ritual del café se institucionalizó y tomó una fuerte presencia en la
sociedad europea. Posteriormente, en el siglo XVIII, estos países se encargaron de difundir
el cultivo en sus dominios tropicales, extendiéndose desde África del Este y el Medio
oriente, hasta el Sureste Asiático y Latinoamérica. Al contar con un mercado asegurado en
el continente Europeo, el café representó un cultivo de ensueño por ser un grano altamente
valuado, fácil de transportar y con el potencial de convertirse en un hábito cotidiano entre
los consumidores.
El cultivo del café se extendió a San Antonio, Las Minas y los valles de Aragua a partir
de 1784, pasando luego a las provincias de Carabobo y Barcelona. En 1776 se observaron
cultivos en Cumaná y Río Caribe. En 1780 el cultivo se extendió al occidente, difundiéndose
en tierras andinas: en Mérida, donde a pesar de una temprana introducción, probablemente
antes de 1777, comenzaron a fundarse plantaciones después de la Guerra de
Independencia; en Táchira, gracias a la iniciativa de Gervasio Rubio, quien lo introdujo en
1794 a la hacienda La Yegüera, en las inmediaciones de la población que más tarde, en
1855, sería llamada Rubio; en Trujillo, probablemente introducido por Francisco de
Labastida en 1801, y siguiendo por los Andes tachirenses, el cafeto continuó su viaje hasta
Colombia, penetrando por Cúcuta y Salvador de las Palmas. Hacia 1809, según José
Domingo Rus, en su descripción geográfica de la provincia de Maracaibo, en Mérida
abundaba el café, en Táchira se daba mucho, y en Trujillo ya había algún café. Poco a poco
el café fue desplazando al cacao como el principal rubro de exportación de la economía
venezolana.
La crisis de 1825, que deprimió económicamente a la Gran Bretaña, redujo el precio del
quintal de café en Venezuela de 11 pesos en 1825 a 7,50 en 1827, cuando el peso del
quintal oscilaba entorno a los 9 pesos. Entonces, muchos productores prefirieron dejar
perder los frutos sobre los arbustos del café.
La crisis de 1857, que afecto a Inglaterra, Francia y los Estados Unidos, iniciada a raíz de
la disminución de los beneficios de la exportación de las minas de oro de California y de
Australia y de ciertas líneas de ferrocarril, por cierto crisis ocasionó en Venezuela la caída
de los precios del café‚ en un 20 por ciento, del azúcar en un 50 por ciento y de los cueros
en un 70 por ciento. El cierre casi total del mercado exterior para las exportaciones
venezolanas dejó como saldo una balanza comercial desfavorable y un aumento en la
deuda, tanto interna como externa.
La crisis de 1882, iniciada con la quiebra financiera de la Unión Genérale francesa,
difundiéndose sus efectos negativos a muchos otros bancos e industrias europeas, sacudió
a la bolsa de Nueva York entre 1882 y 1884, lo que llevó a la quiebra a 404 bancos. Sus
consecuencias fueron desastrosas para la economía venezolana: baja en los precios
internacionales del café‚ disminución del numerario circulante y, particularmente, de los
ingresos por derechos de importación que, según la Memoria de Hacienda 1884-85, "
constituye la primera base de existencia del Tesoro Público" La crisis de 1890, que estallo
en París con el escándalo de Panamá y del ring del cobre, llevó a la quiebra parcial a la
Casa Baring Brothers, removió al mercado financiero francés, inglés, italiano y
estadounidense. Y se extendió hasta 1896, cuando se presento una severa crisis mundial
de la sobreproducción de café‚ particularmente por la intensa competencia del
café‚ brasileño. En Venezuela, estas crisis provocaron una drástica reducción de los precios
de exportación del café‚, que duró hasta 1908. Además esos años fueron aciagos para el
país, ya que además, según R. J. Velázquez (1973), se produjeron dos revoluciones, un
ataque de viruela, una plaga de langostas y una larga sequía. La baja de los precios del
café‚ hizo perder el crédito internacional del país, y ocasionó la paralización de las aduanas
y una drástica reducción en las ventas que llevó a la quiebra a muchos comerciantes. A
finales de 1898, ante la gravedad de la crisis, el gobierno de Andrade sometió a la Cámara
de Comercio de Caracas tres soluciones para superarla: la emisión de papel moneda, la
acuñación de monedas de plata y el incremento de un 25% en las tarifas de aduana.
Prudentemente, la Cámara escogió la tercera medida.
Estas crisis cíclicas del capital continuarían a lo largo del siglo XX, deprimiendo la
economía de los países productores de alimentos y materias primas, como el caso
venezolano, en donde la crisis de sobreproducción de 1909 afecta nuevamente los precios
del café, hasta que la crisis de 1920-1921 termina por derrumbar los precios del cacao y
del café, en tanto que el volumen de las exportaciones se reducía en un 40%.
La aparición del petróleo fue un paliativo, pero la Gran Depresión, que se iniciaba en
1929, produjo efectos devastadores en todo el conjunto de la economía:
1932-1933. Se reduce un 16% el valor de las exportaciones.
El número de obreros empleados en la industria petrolera disminuye en un 33%
Las remuneraciones pagadas por este sector se redujeron en un 65%.
Cayó el gasto público en 40%.
Se reducen las importaciones hasta un 70%.
Las exportaciones sufrieron un bajón cercano al 21%.
Esta crisis general del capitalismo, conocida como la Gran Depresión, se extenderá
hasta 1933, aunque algunos sectores tendrán que esperar el estallido de la guerra en 1939
para su recuperación.
Venezuela estaba entre los grandes productores mundiales de café suave.Pero después
vino el descenso en caída libre: en 1929 descendió al quinto puesto y para 1933 al octavo.
El promedio anual de producción entre 1988 y 1993 fue de 75 mil toneladas, regadas
por todo el país. Las entidades con mayor peso se ubican en los Andes. La región oriental
que bordea al Turimiquire, el piedemonte andino-barinés y algunas zonas de Portuguesa y
Lara.
Distribución porcentual por estados
Estado Porcentaje de
producción
Táchira 20%
Mérida 13%
Trujillo 12%
Lara 9%
Portuguesa 9%
Monagas 7%
Sucre 4%
Barinas 3%