Clase1 ProteccinyLimpiezaEnergtica
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El DoQmentalista
Manifiesto de la Orden
Este material ha sido creado por El DoQmentalista con la finalidad de instruir, informar
y guiar a quienes buscan el camino de la brujería, la magia y la espiritualidad. Aquí se
exponen saberes ancestrales, prácticas y principios, siempre con el propósito de
inspirar virtudes humanas y valores elevados, orientando cada acto hacia la evolución
espiritual de cada individuo y el perfeccionamiento del mundo.
Este material es un apoyo para prácticas de bondad, crecimiento y servicio; bajo ningún
motivo ni circunstancia debe ser utilizado para causar daño, sembrar mal o manipular
fuerzas con intenciones oscuras. Quien intente desviarse de esta senda enfrentará el
siguiente conjuro:
A toda persona que use este conocimiento para causar daño, te advierto: que Dios, el
guardián de todo lo justo, reprenda tus actos, y que todos los caminos hacia el mal se
cierren ante ti. Que enfrentes, en plena consciencia, cada consecuencia de tus acciones,
y que el peso de tu intención incorrecta sirva para acercarte a la verdad y la corrección.
Si algún día traiciono este juramento, que Dios me llame a rendir cuentas, y que mi
castigo sea proporcional al daño que cause. Juro, desde ahora y para siempre, usar mis
dones y mi energía para trabajar desde las sombras y servir a la luz.
Introducción a la Protección y Limpieza
Energética: Una Guía Completa
Vivimos en un mundo donde la energía es una constante, aunque muchas veces no la
percibamos de forma consciente. Cada interacción, cada espacio y cada situación tiene
su propia vibración, y como seres humanos, somos sensibles a esas energías.
Absorbemos, intercambiamos y, en ocasiones, cargamos con energías que no nos
pertenecen y que pueden afectar nuestro bienestar emocional, mental y espiritual. Por
eso, las prácticas de protección y limpieza energética son fundamentales para
mantenernos en equilibrio, preservar nuestra paz interna y crear espacios de refugio y
armonía en nuestra vida diaria.
La guía también aborda las prácticas diarias y semanales que ayudan a mantener una
protección constante, los pasos para reforzar nuestra protección en momentos de
vulnerabilidad, y los métodos para ajustar nuestras prácticas según nuestras
necesidades. Cada uno de estos temas está pensado para darte una comprensión
profunda de las herramientas y técnicas que tienes a tu disposición y para ayudarte a
construir una rutina de protección energética que se ajuste a tu vida y te brinde una
base de seguridad y equilibrio.
Una forma sencilla de diferenciar entre ambas es observar cómo nos sentimos en un
espacio o alrededor de una persona. Si te sientes elevado, con calma y claridad, es
probable que estés rodeado de energía positiva. Si, en cambio, experimentas tensión,
incomodidad o te sientes "drenado", es posible que haya energías negativas presentes.
Es importante recordar que "negativo" y "positivo" no son términos absolutos, sino más
bien indicadores de cómo una energía nos afecta. Algo que puede ser negativo para una
persona puede no serlo para otra; cada uno tiene su propio "filtro energético" basado en
su historia, su sensibilidad y su propio estado emocional.
Cuando hablamos de protección o limpieza, establecer una intención firme es como dar
una orden clara al universo o a nuestra propia mente subconsciente. La intención es lo
que activa la energía y la canaliza hacia un propósito específico, ya sea protegernos,
limpiar una carga o armonizar un espacio. Por ejemplo, si hacemos una limpieza
energética con salvia, la efectividad de esa limpieza dependerá en gran medida de que
tengamos la intención de eliminar energías indeseadas. Esa intención es lo que abre el
camino para que la salvia cumpla su función y no sea simplemente un aroma en el
ambiente.
La intención es tan poderosa porque conecta nuestra mente consciente con nuestras
energías internas, y esta combinación es lo que da vida a cualquier acto espiritual.
Además, la intención ayuda a que nuestro "escudo" de protección o limpieza sea más
fuerte y más personal, adaptado a nuestras necesidades específicas en el momento. La
energía sigue a la intención, por eso se dice que el pensamiento y el enfoque son lo que
realmente canalizan el poder de los rituales.
1. Ruda
La ruda es una de las plantas más poderosas en cuanto a protección. En muchas
tradiciones se usa para alejar el mal y proteger contra energías negativas.
Puedes plantar ruda cerca de la entrada de tu casa, o llevar un poco de la planta seca en
una bolsita de tela para protección personal.
2. Romero
Además de ser una hierba de purificación, el romero es una excelente planta protectora.
Puedes usarla en baños, sahumerios o incluso como infusión para limpiar la casa.
Colocar romero en un pequeño saquito de tela y llevarlo contigo es un amuleto
protector sencillo y efectivo.
3. Salvia Blanca
La salvia blanca se usa en rituales de limpieza y protección, especialmente en el
chamanismo y la cultura nativa americana. El humo de salvia limpia y aleja energías no
deseadas.
Puedes usarla para sahumar tu casa o tu campo energético, pasando el humo alrededor
de ti o de tus espacios.
4. Albahaca
La albahaca es conocida por su capacidad para atraer vibraciones positivas y alejar las
negativas. Puedes tener una planta de albahaca en casa o utilizar hojas secas para hacer
una infusión de limpieza.
Un ramito de albahaca en la entrada de tu casa ayuda a mantener el ambiente puro y
protegido.
5. Lavanda
La lavanda calma y protege al mismo tiempo, creando un ambiente de paz y serenidad.
Puedes usarla en saquitos, aceites esenciales o simplemente tener una planta en casa.
Quemar lavanda seca en un sahumerio o difundir su aroma en la casa con un aceite
esencial también ayuda a mantener la armonía y protección.
1. Salvia Blanca
La salvia blanca es una de las plantas más usadas para la limpieza energética,
especialmente en culturas nativas americanas, donde es considerada sagrada. Su humo
tiene la capacidad de limpiar energías densas o estancadas y es ideal para liberar
cualquier carga negativa acumulada.
Se puede usar para sahumar tanto a personas como espacios y es especialmente
poderosa en rituales de renovación o inicio.
2. Romero
El romero es conocido por su capacidad de purificación y protección. Además de limpiar
la energía, eleva las vibraciones de un espacio o persona, trayendo claridad y frescura.
Es comúnmente utilizado en baños de limpieza, sahumerios y como parte de infusiones
para limpiar superficies en el hogar. El aroma fresco del romero también ayuda a
mejorar el estado de ánimo y renovar el ambiente.
3. Ruda
La ruda es poderosa para repeler energías negativas y malas vibraciones. En muchas
tradiciones es considerada una “hierba de protección” y se utiliza para limpiar personas
y espacios de cualquier influencia negativa persistente.
Se puede usar en forma de ramilletes secos o en infusión para esparcir su esencia en el
hogar. Es especialmente útil para proteger la entrada de la casa y es común verla
plantada cerca de puertas o ventanas.
4. Lavanda
La lavanda tiene propiedades calmantes y equilibrantes, por lo que es ideal para limpiar
energías perturbadoras y armonizar el ambiente. Su aroma es relajante y se dice que
atrae energías de paz y amor.
Puede ser usada en sahumerios, infusiones o como aceite esencial. Es excelente para
limpiar espacios antes de meditar o dormir, ya que promueve una atmósfera de
serenidad.
5. Palo Santo
El palo santo es un tipo de madera sagrada, originaria de Sudamérica, utilizada
tradicionalmente para limpiar y elevar la energía de personas y lugares. Su humo tiene
un aroma dulce y penetrante que ahuyenta lo negativo y purifica el ambiente.
Es ideal para cerrar ceremonias, limpiezas profundas y renovación espiritual. A menudo
se usa para equilibrar y alinear las energías en un espacio.
1. Sahumerio
Uno de los métodos más comunes es el sahumerio o “smudging”, donde se quema la
hierba seca (como salvia, romero, palo santo) y se pasa el humo alrededor de la persona
o el espacio que se desea limpiar. Se recomienda abrir las ventanas para que las energías
densas tengan una “salida” y visualizarlas saliendo del lugar.
Para sahumar a una persona, haz que se mantenga de pie y pasa el humo de los pies a la
cabeza, enfocándote en zonas como el pecho y la espalda, que suelen absorber mucha
energía. Este método es ideal para una limpieza profunda y efectiva.
2. Baños de Limpieza
Las hierbas como el romero, la ruda y la lavanda pueden usarse en baños de limpieza
personal. Para ello, se preparan en infusión (se hierven las hierbas en agua y se dejan
reposar), luego se agrega esta infusión al agua de la bañera o se vierte sobre el cuerpo
después de una ducha.
Mientras te bañas, establece la intención de liberarte de toda energía negativa o
estancada. Los baños de hierbas ayudan a renovar y proteger el campo energético
personal y pueden hacerse una vez por semana o en momentos de mucho estrés.
3. Infusiones para Limpieza de Superficies
Otra forma efectiva es hacer una infusión de las hierbas (como ruda y romero) y usar el
agua para limpiar superficies del hogar. Este método es ideal para purificar áreas
específicas, como puertas, ventanas, y muebles, especialmente después de una
discusión o un evento emocional fuerte en casa.
Basta con preparar una infusión concentrada, dejarla enfriar y luego pasarla por las
superficies con un paño limpio. Este método ayuda a mantener la energía del hogar
fresca y limpia.
4. Aceites Esenciales en Difusores
Los aceites esenciales de plantas como la lavanda, el romero o el eucalipto pueden
usarse en un difusor para limpiar y proteger un espacio. Este método es ideal para
mantener una atmósfera purificada y armoniosa de forma continua, sin necesidad de
quemar hierbas.
Agrega unas gotas en el difusor y permite que el aroma purifique y eleve la energía del
ambiente. Esto es ideal para oficinas, habitaciones, o cualquier espacio cerrado.
5. Ramos o Ramilletes en la Casa
Colocar ramos de hierbas protectoras, como romero o ruda, en puntos estratégicos del
hogar (como la entrada, ventanas, o la sala) ayuda a mantener la energía limpia y
protegida. Los ramilletes actúan como “amuletos naturales” que absorben o repelen
energías negativas.
1. Sahumerio de Espacios
Usa salvia, palo santo o copal para sahumar cada habitación, prestando especial
atención a las esquinas, puertas y ventanas. El humo ayuda a remover la energía
estancada y permite que el espacio “respire”.
Abre las ventanas mientras sahumas para que la energía densa tenga una vía de salida.
Este método es especialmente útil después de recibir visitas, o si has tenido una
discusión o evento negativo en casa.
2. Limpiar el Piso con Agua y Hierbas
Prepara una infusión con hierbas como ruda y romero, y usa esta agua para limpiar el
suelo de la casa. Al pasar el paño, establece la intención de liberar el hogar de toda carga
negativa.
Este método es ideal para una limpieza profunda y renovadora, y se recomienda hacerlo
al menos una vez al mes.
3. Colocación de Cristales Protectores
Los cristales como la amatista, el cuarzo transparente y la turmalina negra absorben y
transforman la energía negativa. Coloca estos cristales en lugares clave, como la
entrada, el salón o el dormitorio, para mantener el espacio protegido.
Asegúrate de limpiar los cristales periódicamente, pasándolos bajo agua corriente o
dejándolos al sol, para que no se saturen de energía.
4. Difusores con Aceites Esenciales
Usa aceites esenciales de hierbas protectoras como lavanda, romero y eucalipto en un
difusor. Esto ayuda a mantener una vibración alta y a crear una atmósfera de paz y
claridad.
Este método es ideal para oficinas o espacios cerrados, donde no es posible hacer un
sahumerio con humo.
5. Sal en las Esquinas
Coloca un poco de sal gruesa en las esquinas de cada habitación, especialmente en las
zonas más cargadas. La sal absorbe la energía densa y ayuda a mantener el ambiente
limpio.
Después de un par de días, retira la sal y tírala fuera de la casa. Este método es sencillo y
efectivo, y se recomienda en momentos de mucho movimiento energético en el hogar.
13. ¿Cómo se limpian energéticamente los
objetos, como amuletos y talismanes?
Los objetos como amuletos y talismanes, al ser herramientas de protección, suelen
absorber energías tanto del entorno como de las personas que los portan. Es por esto
que es importante limpiarlos regularmente para que mantengan su efectividad y sigan
cumpliendo su función protectora sin cargar energías acumuladas. Aquí te comparto
algunos métodos comunes para su limpieza energética:
1. Baño de Sal
La sal es un purificador natural, capaz de absorber y neutralizar energías negativas. Para
limpiar amuletos y talismanes, puedes colocarlos en un recipiente con sal gruesa o sal
marina, asegurándote de que estén cubiertos completamente.
Déjalos reposar en la sal durante varias horas, preferiblemente durante la noche, y luego
retíralos. Es importante desechar la sal, ya que ha absorbido las energías negativas del
objeto. Este método es ideal para metales y piedras resistentes, aunque no se
recomienda para materiales que puedan dañarse con la sal, como ciertos cristales
delicados.
2. Sahumerio
Sahumar con hierbas como salvia, romero o palo santo es otra forma efectiva de limpiar
energéticamente los amuletos. Pasa el humo alrededor del objeto, visualizando cómo se
disuelven las energías acumuladas.
El sahumerio es adecuado para todo tipo de amuletos y talismanes, ya que no los daña
físicamente. Además, es rápido y efectivo, ideal para limpiezas regulares o cuando el
objeto ha sido expuesto a una situación energética intensa.
3. Baño de Luz de Luna o Sol
La luz de la luna, especialmente la luna llena, es conocida por su capacidad para limpiar
y cargar objetos energéticamente. Coloca el amuleto o talismán en un lugar donde
reciba la luz de la luna durante la noche.
Algunos objetos también responden bien a la luz del sol, que tiene una energía de
purificación intensa. Sin embargo, ten cuidado con los materiales sensibles a la luz solar,
como ciertos cristales (por ejemplo, la amatista, que puede decolorarse). Este método es
ideal para amuletos que deseas cargar con energía de renovación.
4. Agua con Sal y Agua de Manantial
Si el amuleto o talismán es resistente al agua, puedes sumergirlo en agua con sal o agua
de manantial para limpiarlo. La sal purifica, y el agua natural aporta la energía de la
tierra y la naturaleza.
Este método es especialmente efectivo para metales y piedras, pero evita usarlo con
materiales que puedan corroerse o dañarse con el agua.
5. Visualización y Meditación
La limpieza energética también puede realizarse a través de la visualización. Sostén el
amuleto en tus manos, cierra los ojos, y visualiza una luz blanca brillante envolviendo el
objeto, disolviendo cualquier energía densa o negativa.
Este método es ideal si no tienes acceso a herramientas físicas y quieres purificar el
objeto en el momento. La clave aquí es la intención y concentración que pongas en el
proceso.
1. Turmalina Negra
La turmalina negra es uno de los cristales más potentes para la protección energética.
Absorbe y repele las energías negativas, creando una barrera que evita que estas
energías nos afecten.
Este cristal es excelente para personas que trabajan en ambientes con mucha tensión o
para quienes son muy sensibles a las emociones de los demás.
2. Ónix Negro
El ónix es conocido por su capacidad de absorber y neutralizar energías negativas.
También ayuda a estabilizar y enraizar nuestra energía, lo cual es importante para
mantenernos firmes en momentos de estrés o confusión.
Es ideal para llevar en situaciones donde nos sentimos vulnerables o expuestos.
3. O jo de Tigre
El ojo de tigre combina propiedades de protección y claridad mental. Protege contra
malas intenciones y envidias, y además promueve la confianza y la toma de decisiones.
Es ideal para llevar en situaciones sociales o laborales, ya que ayuda a mantener una
actitud firme y centrada.
4. Amatista
Aunque la amatista es más conocida por sus propiedades de calma y espiritualidad,
también actúa como un protector energético, especialmente en el ámbito emocional y
psíquico.
Es ideal para proteger el hogar, la habitación o espacios de descanso, ya que ayuda a
crear una atmósfera de paz y seguridad.
5. Cuarzo Ahumado
El cuarzo ahumado es conocido por su capacidad de transmutar energía negativa y
liberarla en la tierra. Ayuda a disipar miedos y tensiones, y protege contra influencias
externas negativas.
Es ideal para quienes buscan protegerse de la negatividad del entorno sin absorberla.
1. Establecer la Intención
Antes de iniciar cualquier ritual, la intención es fundamental. Define claramente lo que
deseas lograr con el ritual. Por ejemplo, "Quiero proteger mi energía y alejar influencias
negativas" o "Quiero que este espacio sea un refugio de paz y armonía".
La intención es lo que da vida al ritual, y cuanto más clara y precisa sea, más efectivo
será.
2. Elegir el Momento y el Lugar
Elige un momento en el que puedas realizar el ritual sin interrupciones, preferiblemente
en un ambiente tranquilo. Algunos prefieren hacer rituales de protección durante la
luna llena para aprovechar su energía de purificación, mientras que otros prefieren la
luna nueva para establecer nuevos comienzos.
El lugar también es importante. Si es un ritual personal, busca un espacio donde te
sientas seguro y cómodo. Si es un ritual para proteger un espacio, realiza el ritual en ese
lugar específico.
3. Preparar los Elementos y Herramientas
Asegúrate de tener todos los elementos necesarios a mano: velas, cristales, hierbas,
amuletos, y cualquier otro objeto simbólico que desees usar (como una medalla de
protección o un talismán).
También puede incluir elementos de cada uno de los cuatro elementos: una vela para el
fuego, un incienso o hierbas para el aire, agua en un recipiente para el agua, y sal o
tierra para la tierra.
4. Purificación del Espacio y de Uno Mismo
Antes de iniciar el ritual, realiza una limpieza energética del espacio. Puedes hacerlo
sahumando el lugar con salvia, palo santo o romero para eliminar energías negativas.
También es importante que te purifiques a ti mismo. Esto puede hacerse con una breve
meditación, lavándote las manos con agua y sal, o sahumando tu propio cuerpo para
empezar el ritual en un estado de limpieza.
5. Crear el Círculo de Protección
Crear un círculo de protección simboliza la separación entre el mundo exterior y el
espacio sagrado donde realizarás el ritual. Visualiza una barrera de luz o marca un
círculo con sal en el suelo a tu alrededor.
Este paso ayuda a enfocarte y a crear un espacio energético seguro donde tu intención
de protección pueda manifestarse sin interferencias.
6. Realizar el Ritual Principal
Aquí es donde ejecutas los actos simbólicos o los pasos que has planificado. Puede ser
encender una vela, colocar cristales en puntos estratégicos, o recitar una oración o
mantra de protección. Este es el corazón del ritual, donde canalizas tu intención a
través de las acciones.
Haz cada paso con plena conciencia y convicción, visualizando cómo tu intención de
protección se vuelve realidad.
7. Cierre y Agradecimiento
Al finalizar, cierra el ritual dando las gracias a cualquier entidad, guía o símbolo que
hayas invocado. Si abriste un círculo de protección, visualiza cómo ese círculo se
disuelve o retira cualquier sal o símbolo que hayas utilizado para marcarlo.
Es importante cerrar el ritual para evitar que la energía quede "abierta" o sin dirección.
1. Velas
Las velas son esenciales en muchos rituales porque representan la luz y el fuego
purificador. En rituales de protección, se suelen usar velas blancas (para purificación) o
negras (para absorción de negatividad).
Al encender una vela, puedes establecer la intención de que la llama ilumine y proteja el
espacio o a la persona.
2. Cristales de Protección
Cristales como la turmalina negra, el cuarzo ahumado y el ojo de tigre son ideales para
la protección. Puedes colocarlos alrededor del lugar del ritual o llevarlos contigo.
Estos cristales actúan como barreras energéticas que protegen contra influencias
negativas.
3. Hierbas de Protección
Hierbas como la salvia, el romero y el palo santo son comúnmente usadas para limpiar y
proteger. Puedes usarlas en sahumerios para purificar el espacio o incluso colocarlas en
pequeños saquitos de protección.
Estas hierbas pueden quemarse para generar humo protector o colocarse en el altar
como símbolo de purificación.
4. Sal
La sal es un elemento de protección tradicional. Puedes usarla para marcar un círculo
alrededor de ti o colocar un poco en las esquinas del espacio donde realizas el ritual.
También puedes usarla en baños de limpieza antes del ritual para purificar tu propia
energía.
5. Agua con Sal o Agua de Manantial
El agua es purificadora y aporta equilibrio emocional. Puedes preparar un recipiente con
agua con sal o agua de manantial y usarla para purificar tus manos antes del ritual.
También puedes rociar un poco de esta agua en el espacio para eliminar cualquier
energía estancada.
6. Amuletos o Talismán de Protección
Un objeto personal o un amuleto específico puede ayudarte a anclar la intención de
protección. Puede ser una medalla de San Benito, un ojo turco, o cualquier símbolo que
sientas que tiene poder protector.
Puedes cargar el amuleto durante el ritual y luego llevarlo contigo para prolongar la
protección.
1. Agradecimiento y Despedida
Si has invocado a guías, ángeles, o cualquier energía espiritual, es importante
agradecerles por su ayuda y despedirlos respetuosamente. Puedes hacer una pequeña
oración o simplemente expresar tu gratitud en voz alta.
Por ejemplo: "Doy gracias a todas las fuerzas protectoras y guías que me acompañaron
en este ritual. Que se retiren en paz, sabiendo que su energía y protección han sido
recibidas con gratitud."
2. Apaga las Velas y Limpia el Espacio
Si usaste velas, apágalas con un apagavelas o pellizcando la llama (evita soplarlas, ya que
algunas tradiciones consideran que eso rompe la energía del ritual).
Si usaste otros elementos como cristales o hierbas, guárdalos en un lugar especial. Si
tienes algún símbolo o marca física en el suelo (como un círculo de sal), deshazlo
cuidadosamente, agradeciendo al espacio.
3. Visualización del Cierre Energético
Visualiza el espacio que ocupaste volviendo a su estado natural, como si una luz suave lo
cubriera y lo dejara en paz. Imagina que el círculo de protección que creaste (si hiciste
uno) se disuelve y se integra armoniosamente al entorno.
Este paso es fundamental, ya que asegura que no quede energía “abierta” o dispersa
después del ritual.
4. Lavado de Manos o Baño de Purificación
Después de realizar un ritual, es útil lavar tus manos o incluso darte un baño si fue un
ritual muy intenso. Esto te ayuda a descargar cualquier energía residual que haya
quedado en tu campo energético.
Puedes hacer una pequeña afirmación mientras te lavas las manos, como: “Limpio toda
energía residual, quedando en paz y equilibrio.”
5. Cerrar con Afirmaciones de Protección
Una vez que todo está en orden, cierra el ritual con una afirmación que refuerce el
propósito, como: “Este ritual está completo. Estoy en paz, protegido/a y en armonía”.
Esto ayuda a sellar la intención de protección en tu energía y en el espacio.