Cap 2 Del Libro Espiritualidad Emocionalmente Sana
Cap 2 Del Libro Espiritualidad Emocionalmente Sana
Cap 2 Del Libro Espiritualidad Emocionalmente Sana
Quito
MATERIA: salud integral
PROFESOR: PASTOR adrián
hidalgo
SEMESTRE: MARZO-AGOSTO
2015
INTRODUCCIÓN
Existen cristianos que llevan años décadas en el cristianismo. Sin embargo, hay hermanos en la fe que siguen haciendo las mismas
cosas una y otra vez, como también hay cristianos que son seres tan malos que su comportamiento y conducta es peor que los
incrédulos. Y esto sucede porque usamos indebidamente las verdades bíblicas que no solo dañan nuestras relaciones más
cercanas, sino que obstruyen el trabajo de DIOS y todo esto causa estragos en nuestra vida personal y en la iglesia.
El autor del libro espiritualidad emocionalmente sana en el capítulo 2 expone diez principales síntomas de la espiritualidad
emocionalmente enferma los cuales se desarrolla a continuación.
1. USAR A DIOS PARA HUIR DE DIOS
Esto significa que en muchas ocasiones utilizamos muchas horas en actividades cristianas para huir del sufrimiento y nos
refugiamos en: la lectura de libros cristianos; asistimos a seminarios; leemos más la Biblia y oramos más tiempo tratando de tapar
áreas en nuestras vidas que requieren ayuda de Dios.
No podemos ignorar estos sentimientos, por el hecho de ser seres humanos, ya que si no expresáramos nuestras emociones,
seguimos siendo incapaces de amar a DIOS, a los demás, y a nosotros mismos, ya que nuestros sentimientos son un
componente de lo que significa estar hechos a la imagen de DIOS, sacarlos de nuestra espiritualidad es cortar una parte de
nuestra humanidad.
Tenemos que renunciar a todo lo malo y pecaminoso como es: una actitud defensiva; la indiferencia hacia los otros; la
arrogancia; la obstinación; la hipocresía; la crítica; la falla de vulnerabilidad; la mentira, hablar siempre con la verdad; no dar
falso testimonio; no matar; no robar. Si renunciamos a todo lo que nos perjudica emocionalmente, psicológicamente, solo asi
llevaremos vidas fructíferas y grandiosas. DIOS, no nos ordenó que renunciemos a los deseos y placeres sanos como la vida; la
amistad; alegría; la música; La belleza; la recreación; la risa; la naturaleza, etc. DIOS quiere que disfrutemos de todo lo bueno.
Debemos entender que lo que nuestra vida fue en el pasado dejará de influenciarnos de diferentes maneras, en verdad si es
necesario que volvamos al pasado para librarnos de las conductas enfermas y destructivas que nos impiden amarnos a nosotros
mismos y a los otros, como es el verdadero propósito de DIOS. Por ejemplo si observamos los patrones de vida que llevaban
nuestras familias de origen como manejaban la ira, el enojo, el éxito, la vergüenza, el placer. El sufrimiento, la sexualidad, la
relación con los amigos, etc. Todo esto tiene una gran influencia en nuestra vida actual, porque nos hemos desarrollado en ese
ambiente años de años.
Nuestro estilo de vida, nuestra forma de pensar y actuar, nuestras palabras y nuestro proceder en la vida cotidiana, debe ser
diferente a los incrédulos, sino de que evangelio transformador estamos hablando, donde muchos cristianos nos comportamos
y actuamos de igual forma que los incrédulos muchas veces somos peor que ellos,; llevamos vidas dobles, sentenciamos a
muerte a otras personas, gritamos en nuestros hogares, en el transcurso del día no tenemos en cuenta la presencia de DIOS en
nuestro trabajo, en el hogar con nuestros hijos y esposa. Como creyentes en Cristo Jesús, debemos vivir vidas diferentes, que
marquen la diferencia a la vida que llevan los incrédulos.
Debemos hacer para DIOS, las cosas a fin de que nuestra labor para el solo puede fluir de una vida con el, es el único camino
para tener un corazón limpio y en comunión con DIOS; En el mundo la gente se esta muriendo sin Cristo, y es nuestra
responsabilidad en compartir a Cristo, en todo momento, con las personas a mi alrededor, o ellas irán al infierno.
Tenemos que saber enfrentar los conflictos de una manera frontal y sincera, como nos enseñó Jesús que los cristianos sanos no
evaden el conflicto como lo hizo Él cuando enfrento a los líderes religiosos, las multitudes, sus discípulos, su familiaEs un
porcentaje mínimo donde podemos ver a familias donde los conflictos se resuelven de una manera madura y sana. Sin embargo,
en la mayoría enterramos, escondemos, evadimos nuestras tensiones y conflictos y seguimos adelante sin darle ninguna
solución al problema y conflicto, y todo esto acarrea la mentira a los demás y le va afectando a uno mismo en lo emocional,
psicológico, físico, espiritual etc. Tratemos con la ayuda de DIOS, a no anidar estos conflictos en nuestro corazón, a fin de no
sentirnos: culpables, mentirosos, criticones, hacer promesas que no cumpliremos, retirar el saludo a otras personas, atacar a
otras personas, volverse sarcástico, apartarse, aislarse, anidar ira, etc.
No debemos disimular nuestras debilidades, no tenemos que olvidarnos que somos seres de carne imperfectos, limitados,
vulnerables y pecadores, la Biblia no oculta ni esconde sobre los defectos de muchos héroes de la Biblia así como:
David, cometió adulterio con Betsabé y asesinó a su marido;
Pablo, pidió a DIOS que le quitara el aguijón en la carne;
Moisés, tenía mal genio, era un asesino;
Oseas, su esposa era una prostituta
En tal virtud, todos absolutamente todos, sin excepción tenemos nuestros grandes defectos, temores, angustias, desesperación.
etc. A pesar de tener dones y fortaleza, es débil, vulnerable y depende de DIOS y de otros.
Debemos tener nuestro límite en la vida, no por el hecho de ser cristianos nos vamos a volver salvadores de todo el mundo, ni
Jesucristo siendo DIOS mismo curo, resucitó, alimento a todos los mendigos, hambrientos, en tal virtud no debemos sentirnos
obligados a hacerlo. En primer lugar debemos ocuparnos de nosotros como es debido, a fin de poder darle a otros. Pocos
cristianos establecen conexión entre el amor propio y el amor hacia los demás. Por desdicha, muchos piensan que ocuparse de
ellos mismos es pecado, esto es tomado de nuestra cultura egocéntrica que a la final nos causara desilusión en nuestras vidas.
Nos convertimos en jueces implacables de las personas, juzgamos lo mínimo, vivimos juzgando a todo el mundo, criticando al
pobre al rico, al gordo al flaco a los artistas, profesionales, a los católicos, pentecostales, episcopales; en fin a todos juzgamos.
Tengamos presente en nuestra ser lo que dijo Jesús: No juzguen a los demás no se conviertan en jueces de los demás, y así Dios
no los juzgará a ustedes. Si son muy duros para juzgar a otras personas, Dios será igualmente duro con ustedes. Él los tratará
como ustedes traten a los demás. ¿Por qué te fijas en lo malo que hacen otros, y no te das cuenta de las muchas cosas malas
que haces tú? Es como si te fijaras que en el ojo del otro hay una basurita, y no te dieras cuenta de que en tu ojo hay una rama.
¿Cómo te atreves a decirle a otro: “Déjame sacarte la basurita que tienes en el ojo”, si en tu ojo tienes una rama? ¡Hipócrita!
Primero saca la rama que tienes en tu ojo, y así podrás ver bien para sacar la basurita que está en el ojo del otro. (Mat.7:1-5) TLA
CONCLUSION
La realidad de nuestra época mezclada con el diario vivir personal nos lleva a tomar decisiones que no siempre serán las correctas
pero si somos responsables al administrar nuestra vida concluiremos en la palabra de Dios mencionada en 1 corintios 6:19-20