La Criatura

En un escenario envuelto en oscuridad, un joven llamado Reo se ve acosado

por figuras misteriosas que emergen de la oscuridad.

- Que raro, no recuerdo nada - dijo inclinando la cabeza hacia un lado

Estaba acostado observando cada objeto que se movía al rededor suyo. Al

mirar hacia una esquina sin fin, su pulso se empezó a acelerar al ver a una
criatura, una criatura que se le hizo familiar, una misma criatura que lo
torturaba.

- ¿Te he visto en algún lugar? - dijo confundido

Reo no recordaba dónde la había visto, simplemente hecho a correr

mientras intentaba escapar.

- Aléjate, aléjate, ¡ALÉJATE!

Empezó a recordar que esta criatura lo obligaba a estar con ella.

- Por favor, déjame ir, no te necesito ¡no necesito a alguien como tú!

La criatura sencillamente no dijo nada, corría tras él, no paraba de hacerlo,

habían momentos donde Reo tropezaba y aquel ser hacía que Reo vuelva a
depender de él ¿depender de qué? ni él sabía, solo suplicaba que lo liberen
de su tormento.

- ¿NO RECUERDAS? - dijo la criatura

- ¡¿No recuerdo que?! - Reo no paraba de correr

La criatura se acercaba más y más

- Tu decías que te divertías mucho conmigo

- ¡Y es verdad!

Reo disminuyo su paso

- Pero ¡yo ya no quiero que estés aquí!

- ¿Por qué no?

- No te aguanto y no pienso aguantarte más

Al momento de decir eso la criatura dejó de perseguirlo

- ¿eh?

De esta misma, empezaron a brotar sombras que agarraron a Reo de los

brazos y pies

- ¡Te he dicho que me dejes! ¡¡¡SUELTENME!!! - Reo forcejeaba para quitarse

las garras de la bestia de encima

- ¿Reo?

Miro a todos lados, aquella voz se le hacía familiar, volteaba sin encontrar
respuesta

- ¡Reo! - volvió a decir aquella voz

- No quiero seguir acá, por favor, sáquenme - dijo el muy asustado

La criatura lanzó una carcajada ignorando lo que decía, más bien, empezó a
correr nuevamente hacia él
Reo intentaba correr cada vez más, pero el cansancio lo consumía, no
recordaba nada, simplemente nada, y eso lo asustaba más

- No quiero... - dijo entrecortado - no quiero y no creo que pueda seguir así

Cuando la criatura estaba acercándose hacía el, chocó con una especie de
pared. Al estar todo oscuro no veía nada

La criatura se acercaba cada vez más y más...

- Aléjate, ¡Aléjate!

Sintió un escalofrío profundo y temor a quedarse ahí para siempre.

Empezó alocadamente a buscar un lugar donde pueda escapar.

- ¡¡¡POR FAVOR, debe haber un lugar donde yo-

A lo lejos, vio a una persona, una persona muy especial para él:
Nagi

- Nagi, ¿qué haces a-?

En ese momento recordó lo que había pasado.

Nagi era el mejor amigo de Reo, desde muy pequeños fueron inseparables.

Cuando fueron creciendo, Reo empezó a interesarse en los video juegos al

igual que Nagi. Solo que Reo, dejo de lado a las demás personas

Nagi siempre intentaba hacerlo capacitar, habían días en donde Reo no

comía por no querer perder una partida.

Hubo un momento en donde Reo, dejó de hablar con las personas, no le

interesaba nada, ni su propio bienestar.
Es donde en un rato repentino, todo se volvió borroso y oscuro, y es donde
encontró a la criatura

Aquella criatura lo acompaña siempre, estaba junto a él, y según, era su

amigo.

Pero poco a poco, la criatura empezó a demostrar cierta obsesión con él, no
lo dejaba ir de su lado.

Entonces, inconscientemente, de momento a otro, Reo se fue corriendo y

terminó apareciendo en aquel lugar.

- Ey, Reo, Despierta - dijo Nagi

- ¡Nagi! - Reo suspiro

Fue corriendo hacía él, recordando todo lo que le había pasado, y

esperanzado en salir de ese lugar

- ¿Te vas a ir? ¿Me vas a dejar?

Reo volteó y vio que de la criatura empezaron a brotar lágrimas

- Discúlpame, no... - Reo empezó a sentir remordimiento - me tengo que ir

- Reo, yo, yo te acompañe- siguió diciendo la criatura

Reo no sabía si irse o dejar a la criatura, pues a ciencia cierta, por el fondo
sentía ganas de quedarse por los momentos que paso con ella.

- No quiero quedarme ni tampoco irme

- Reo... - dijo Nagi con voz de aburrido

Reo siguió caminando hacia Nagi, y hecho a correr

- No, no, no, no, no, no, no, no, no - balbuceaba la criatura

Al momento de llegar hacia Nagi, Reo miró con tristeza a la criatura

Sin embargo, la figura lo atrapa con firmeza y lo arrastra.

¡Déjame! - grita el joven - Que me sueltes

- No, te quedas conmigo, te quedas conmigo, conmigo - dijo entre lágrimas

la criatura

- No quiero, no, si quiero, pero, no debo

Nagi desaparece y Reo se queda envuelto nuevamente en ese lugar

- ¡¡¡SUELTAME!!! NO QUIERO SEGUIR AQUÍ, VETE, ALEJA-

Desesperado patalea mientras lucha por liberarse de la garra de aquella

criatura.

- Déjame ir, ¡Déjame ir a cualquier lugar junto a mi familia!

- NO, NO, no, no

Sus súplicas caen en el vacío mientras es arrastrado hacia un destino

incierto.

- Lo siento Nagi, soy inútil

Todo se sumerge en un silencio ominoso.

Cuando la conciencia vuelve a él, Reo se encuentra en un entorno sereno y

cuidado, lejos de la oscuridad que lo consumía. Una voz amable rompe el
silencio

- Bienvenido de vuelta, ¿cómo te sientes hoy?

Confundido y aturdido Reo se levanta de una cama

- ¿Dónde estoy? ¿Qué ha pasado?

- Discúlpame, ahorita regreso - dijo la señorita muy amable

Lentamente, la realidad se abre paso en su mente mientras recuerda el

abismo en el que se encontraba.

- ¿Reo? ¡Reo! aquí estabas

- ¡Nagi! - respondió con una sonrisa

- Despertaste, tu mamá estaba preocupada. - dijo Nagi saltando

- ¿Despertar?

- Si, te desmayaste mientras jugabas en tu PC

- ¿A si tan tranquilo lo dices? - dijo asustado Reo

Nagi lanzó una risita y abrazo a su amigo que aún seguía en la cama de
rehabilitación.

- Oye, no vuelvas a hacer eso

- ¿Hacer qué? - dijo confuso Reo

- Por ejemplo, dejar de comer por varios días, dejar de tomar agua, dejar de
hacer deporte...

Nagi continuo con una lista muy larga de cosas que Reo había dejado de
hacer

- Ya, ya va - respondió con los ojos en blanco

Comenzaron a conversar sobre lo que había pasado en todo este tiempo,

Reo se quedaba sorprendido al darse cuenta de que habían pasado un
montos de situaciones

- ¿Sabes? Pasamos el campeonato de fútbol, le ganamos al equipo X y W

- ¿De veras? - dijo Reo más calmado - Hubiera querido ir a verte

Sonrió

- Pues todos te extrañamos

Hubo un momento de silencio

- Perdón

- ¿Perdón por qué?

- Por todo, por ser tan tonto, por nunca haberte ayudado, por haber
prestado más atención a otras cosas

Nagi volvió a sonreír y le dio una pequeña palmada en la cabeza a su amigo

- Perdone joven, la psicóloga ya llego - aviso un doctor

Nagi asintió con la cabeza y se despidió de Reo

Después de eso, empezó a llevar terapias psicológicas que lo ayudaron a

salir de las adicciones a los video juegos

Pasaron meses

- Nagi, Suéltame

- No quiero - dijo Nagi agarrándole del pie

Reo abrazaba su almohada con fuerza

- Nagi, ya llego tu mamá - menciono con una sonrisa la madre de Reo

Nagi miro de reojo a Reo y frunció el ceño en señal de decepción

- Adiós Genio

- Adiós camaleón

Silencio absoluto

El chico giro su cabeza exhausto, había estado jugando pelea con Nagi

- Reo, ven, ayuda a cortar el césped del patio

- Esta bien má - suspiro - Que pereza

Se levantó y se quedó mirando un rato su consola de Nintendo

Se quedo así un buen rato

- ¡Reo!

- ¡Ahí voy!

Se levantó de un salto hacia la puerta y coloco su almohada a un costado de

la cama.

Miro hacia la ventana y sonrío cálidamente

Reo miro a todos lados recordando a aquella criatura, que en algún

momento estuvo junto a él

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Maffer Grozo :)