Como Utilizar La Maquina de Coser 1° Parte
Como Utilizar La Maquina de Coser 1° Parte
Como Utilizar La Maquina de Coser 1° Parte
coser
Costura inicial
Requerimientos……
¿Qué necesitas para hacer este curso?
Tu máquina de coser común, con costura recta y zig zag
Un costurero básico, con tijera, alfileres, hilos y retazos de telas
Módulo 1
La máquina de coser, Un poco de historia.
Partes de la máquina.
Enhebrado superior e inferior.
Cambio de aguja
Tipos de agujas de máquina
Limpieza de la máquina
Costurero básico
Módulo 2
Primeras puntadas y remate
Coser recto
Coser en curvas
Coser en esquinas
Puntada recta y largo de la puntada.
Puntada zigzag. Ancho y largo de la puntada.
Módulo 3
¿Cómo unir dos piezas dejando un margen de costura?
¿Cómo hacer una costura francesa?
¿Cómo coser esquinas para una funda?
¿Cómo hacer pespuntes?
Módulo 4
Cambio de prensatela
Prensatela para dobladillo
Prensatela para colocar botones
Prensatela ojal automático
Prensatela para volados
Prensatela para coser cinta al bies
Prensatela para coser cierre
Módulo 5
Tipos de telas
¿Qué es una cinta al bies y cómo hacerla?
¿Cómo colocar cinta al bies en la esquina?
¿Cómo colocar cinta al bies de manera redondeada?
Módulo 7
¿Cómo colocar elástico?
¿Cómo colocar una puntilla?
¿Cómo hacer un frunce con hilván?
¿Cómo hacer un ruedo?
¿Cómo coser telas elastizadas?
Un poquito de historia…
Para conocer el origen de las máquinas de coser antiguas tenemos que remontarnos a
los años previos a la Revolución Industrial.
La historia comienza allá por el año 1755 cuando un alemán llamado Charles
Fredrick Wiesenthal patentó un aparato mecánico que facilita la costura. Recordemos
que hasta ese momento todo se cosía a mano: pantalones, camisas, vestidos, ropa de
cama, cortinas, entre otros.
Dicha máquina consistía en una aguja con dos puntas y un ojal en el extremo. Sin
embargo, se considera la primera “máquina de coser” de la historia.
En el año 1830 el sastre Barthelemy Thimonnier inventó una máquina de coser
funcional. Sin embargo, años después, en la oficina francesa de patentes, se descubrió
que en 1790 Thomas Saint había patentado una máquina de coser antigua. Él fue el
primero en patentar dicho invento, sin embargo, cuando todo se supo todo el mundo
ya reconocía a Thimonnier como el inventor.
En 1834, Walter Hunt (inventor estadounidense) creó la primera máquina de puntada
cerrada. Sin embargo, no la patentó en el momento de su invención. Mientras tanto,
Elias Howe (otro inventor estadounidense) desarrolló una máquina con las mismas
características. Pero él sí la patentó.
Lo cierto es que, a lo largo de los años, si analizamos la historia de la evolución de la
costura y las máquinas de coser antiguas, veremos que muchos sastres e inventores
crearon diferentes modelos. Además, engrosaron la lista de inventores al incorporar
pequeñas mejoras en las máquinas ya existentes.
Ese es el caso de Isaac Merrit Singer. Este neoyorquino nació en 1811 en una familia
acomodada. Pero luego del divorcio de sus padres tuvo que abandonar la mansión
familiar para ganar su propio dinero.
En 1839 Singer gracias a una máquina para perforar roca, consiguió su primera
patente. Vendió la idea y decidió invertir el dinero ganado en su carrera de actor. De
hecho, creó una pequeña compañía teatral y se fue de gira por Estados Unidos.
Pero el dinero que ganó gracias a su primera patente, lo motivó a pensar en nuevos
inventos. Así llegó hasta un taller que fabricaba máquinas de coser y luego de algunos
días y con una inversión de 40 dólares, Singer patentó y desarrolló una máquina que
podía coser 900 puntadas por minuto. Una costurera avanzada, podía dar hasta 40
puntadas por minuto.
Las principales características de esta máquina de coser antigua eran una lanzadera
recta, un brazo en suspensión, un prensatelas que sujetaba la tela estirada y una
aguja con un ojo en el extremo más cercano a la tela. Además, la máquina se
accionaba mediante un pedal (toda una invención ya que hasta el momento se hacía a
mano mediante una manivela).
Bajo el nombre I. M. Singer & Co., Isaac Merrit Singer vendía sus máquinas de
coser. La facilidad con la que se adapta al uso doméstico y la practicidad para la
costura, fueron los cimientos del éxito de su empresa.
El 12 agosto de 1851, Isaac Merrit Singer obtuvo la patente para la primera máquina
de coser de la marca SINGER. Cuatro años más tarde una máquina de coser Singer
ganó el primer premio en la Feria Mundial de París.
Algunos años después llegó Edward Clark a la vida de Singer. Este inversor y socio le
propuso ser la primera empresa en establecer un sistema de “alquiler con
opción de compra”. Es decir que le propuso un sistema de compra a crédito en
cómodas cuotas.
Esta opción permitió que más personas pudieran acceder a una máquina de coser,
mejorando así su productividad y economía. Esto último era lo que se necesitaba para
elevar la posición social. Es decir que Singer logró una revolución en el
comportamiento del consumidor.
Los años pasaron y Singer decidió seguir invirtiendo en su compañía en inventos. Por
eso en 1889 se produjo la primera máquina de coser eléctrica. Esta máquina de coser
antigua contaba con un motor eléctrico Edison. Un año después Singer comenzó a
vender sus máquinas al 90 por ciento del mercado mundial de máquinas de coser.
¿Te imaginas un auto con el volante en el asiento trasero? ¿O los pedales en el tablero?
Bueno, pues todas las cosas que funcionan y podemos identificar en un auto
generalmente tienen una disposición muy similar entre un modelo y otro, aunque
existan ciertas variaciones según la marca.
Con las máquinas de coser es exactamente lo mismo; por eso en este apartado te
enseñaré (y explicaré) los elementos básicos que debemos identificar en una máquina
de coser sin importar el modelo, edad o estado de la máquina.
Para este recorrido elegí una máquina familiar mecánica/eléctrica con distintas
puntadas de la marca Brother, la cual considero tiene una anatomía muy similar con
otros modelos y marcas de máquinas de coser.
Las máquinas de coser rectas o de zig zag requieren de un hilo inferior que permita
realizar las lazadas de la puntada, este hilo inferior se coloca dentro de un espacio que
se conoce como cangrejo; el cangrejo es una pieza de la máquina que gira en relación
OSCILANTE
ROTATIVA
c- Tirar del hilo hacia abajo y pasarlo alrededor del alojamiento del tensor del hilo de
derecha a izquierda.
Para devanar la bobina, colóquela en el eje del devanador de bobina. Tire del hilo
del carrete, enróllelo en la bobina dándole varias vueltas, y empuje el freno del
devanador hacia la izquierda en dirección a la bobina. Ahora pise el pedal y el hilo
se enrollará en la canilla automáticamente. Coloque la bobina en el porta bobina e
insértelo en el cajón de la parte trasera de la mesa supletoria.
Es importante ajustar la tensión del hilo superior y del hilo inferior para que
la costura sea perfecta. Cuando la tensión de ambos hilos es la adecuada, el
enlace de uno y otro en cada puntada queda centrado entre las capas de tela.
● Si la tensión del hilo superior es excesiva, este quedará recto en la parte
de arriba de la costura y el enlace de los hilos, en la parte superior de la
tela.
● Si la tensión del hilo superior es insuficiente, el hilo inferior quedará
recto en la parte inferior de la tela. El enlace entre los dos hilos
aparecerá en la capa inferior de la tela.
Los prensatelas son las herramientas más importantes para cualquier persona
que se dedique a la confección. Cada uno de éstos tiene una función específica y,
el no utilizar el prensatelas adecuado, puede dificultar el proceso de confección
de cualquier prenda. En este módulo te voy a mostrar los prensatelas más
comunes que existen y cómo se utilizan.
La mayoría de las máquinas de coser vienen con un juego de prensatelas básico
que varía mucho según la marca y el modelo de la máquina. Antes de ponerte a
comprar un montón de prensatelas primero debes revisar dos cosas: primero,
que tu máquina de coser realice la función para la cual vas a comprar el
prensatelas; y segundo, si en verdad lo necesitas tanto como para comprarlo.
En la parte de atrás se ubica el botón y esto permite calcular el largo exacto del
ojal.
Un buen ojal debe ser un par de milímetros más largo que el botón.
Este prensatelas es uno de esos que tienes que probar para saber si te gusta o
no. Su función principal es permitir que la cuerina se “deslice más fácilmente”
cuando coses, pero en lo personal, prefiero el prensatelas de doble arrastre.
Este prensatelas vale la pena dependiendo del tipo de tela que estés usando y
de tu experiencia y habilidad para coser. Este que tengo acá es para dobladillo
de 6mm y es bueno, pero siento que no le he sacado mucho provecho todavía
porque en los últimos proyectos de confección que he realizado no he sentido la
necesidad de usarlo.
Este prensatelas lo puedes usar para la puntada de zig zag o para la puntada
recta. Siento que es un indispensable porque es un pie muy genérico. La
abertura que tiene en la mitad es la mejor guía para que el zig zag quede
derecho. El original que venía con mi máquina de coser se rompió hace un
tiempo porque no era completamente de metal (traía una parte en plástico), así
que tuve que comprar este pie genérico.
Este prensatelas es uno de mis favoritos porque puedes coser los botones en
muy poco tiempo, pero no es un indispensable, ya que siempre puedes coser los
botones a mano. Para poder utilizar este prensatelas debes desactivar el
movimiento de los dientes de arrastre de tu máquina de coser. Si no haces esto,
el prensatelas no va a funcionar porque el botón debe estar quieto para poder
coserlo.
Ahora, si eres como yo, es posible que no uses lo que yo llamo "puntadas
elegantes" con la frecuencia suficiente para recordar qué configuraciones
prefieres. Hace años creé un pequeño catálogo de puntadas de mis puntadas
favoritas. Guardo mi catálogo de puntadas debajo de mi prensatelas para saber
siempre dónde encontrarlo.
Antes de ponerte a dar puntadas, con tu máquina de coser, sobre tela lo ideal es
que practiques un poco las diferentes direcciones de puntadas. Para eso no hay
nada mejor que este recopilatorio de ejercicios para aprender a coser con
los que podrás practicar sobre papel.
Se basan en agarrar soltura con la máquina e intentar hacer costuras rectas -lo
más rectas posibles- y costuras con movimiento, como curvas o figuras.
Además, te ayudarán a agarrarle la mano al pedal de tu máquina de
coser, y a controlar las diferentes velocidades de puntada.
Los ejercicios están en formato A4, y lo único que tenes que hacer
es imprimirlos, darle al botón de encendido de tu máquina de coser e intentar
seguir con la puntada de la máquina las líneas de los dibujos, ¡muy fácil y muy
efectivo!
Te aconsejo que empieces con la plantilla de líneas rectas, luego continúes con
la de ángulo, posteriormente con la de espiral y curvas, y acabes con las
figuras.
Lo bueno de estos ejercicios son dos cosas:
1.La primera de ellas es que se hacen sin hilo, no es necesario enhebrar la
máquina de coser; los dibujos y contornos los puedes seguir únicamente con la
aguja que irá perforando el papel según vayas avanzando.
2. Y la segunda cosa buena es que, si te sale mal, puedes imprimirlas tantas
veces como quieras para seguir practicando, hasta que te hagas todo un
experto
Estos problemas son principalmente causados por la tensión del hilo, tanto
superior como inferior, y a veces por ambos. Al momento de coser ambos hilos
deben contar con una tensión adecuada al tipo de tela, aguja e hilo que se usa
para que la costura sea correcta y se vea bien hecha. Cuando por debajo de la
tela se ven hilos de arriba, el problema está en la tensión superior; cuando en la
parte de arriba se ve el hilo de abajo el problema es en la tensión inferior o del
carrete; y cuando al jalar las costuras estas se abren el problema está
normalmente en ambas tensiones.
El tensor superior es visible y es el que tiene números del 0 al 9 normalmente;
casi todas las máquinas ocupan tensión en 4 ó 3 en el hilo superior, la tensión
del hilo inferior depende del tipo de cangrejo de la máquina; si es horizontal se
Hay una cosa importantísima sobre el salto de puntadas, y es el tipo de tela que
se está cosiendo.
En esas situaciones hay varias causas y posibles soluciones, pero antes de eso
te explico brevemente algo sobre las máquinas de coser; según sus
características pueden coser materiales de todo tipo o sólo algunos materiales;
pero existen accesorios y herramientas que ayudan a la confección incluso con
la máquina más sencilla del universo; sabiendo esto vamos con las soluciones
simples.
La máquina puede dejar de avanzar porque tiene pelusa, basura o algo atorado
en el cangrejo o los dientes de arrastre, hay que limpiarla frecuentemente y
verificar que no haya alguno de estos elementos.
Dado que a simple vista todas las agujas de coser a máquina se parecen
mucho, he pensado que podría ser interesante empezar hablando un poco de
las partes de una aguja, algo que nos permitirá más adelante entender más
los conceptos que vayamos viendo. Así pues, las partes en que se divide una
aguja de coser a máquina son las siguientes:
Además de estas partes, las agujas de la máquina de coser tienen una serie de
ranuras que permiten que el hilo circule de manera correcta y que son
diferentes por la parte delantera y trasera de la misma. En la parte
delantera tenemos la ranura larga o canal largo, que va desde el declive
hasta el inicio del ojo y es la encargada de guiar el hilo superior:
Y en la parte posterior, la ranura corta o canal corto, que está situada en
el centro de la hoja y la hendidura o muesca que se encuentra a
continuación y que tienen como misión facilitar el entrelazado entre el hilo
superior y el inferior en el interior del canillero.
Ahora que ya hemos podido ver las diferentes partes de una aguja de coser
podemos pasar a analizar los diferentes tipos de agujas que existen en función
de las variaciones que se producen en ellos
Como puedes apreciar en las imágenes anteriores, cada tipo de punta perfora el
material a coser de una manera diferente
Agujas de coser a máquina de uso más frecuente
¡¡¡Llegados a este punto tal vez pienses que eso de elegir la aguja para la
máquina de coser sea algo complicadísimo… don’t worry!!!… ahora veremos
que todos estos tecnicismos está muy bien conocerlos, pero que a la hora de
ponernos a coser los fabricantes nos lo ponen mucho más fácil, ya que nos
suministran las agujas clasificadas por el uso al que están destinadas, sin que
Existen una serie de tipos de agujas de coser a máquina que nos permiten
realizar puntadas decorativas que no serían posibles con las agujas de
máquina que llevamos vistas hasta ahora.
● Agujas múltiples: Además de las agujas de coser sencillas que
utilizamos habitualmente existen otros tipos de agujas que están
compuestas por dos hojas (agujas dobles o gemelas) o tres (agujas
triples), lo que permite realizar costuras paralelas, tanto rectas como
decorativas, manteniendo una distancia constante entre ellas. Las más
frecuentes son las agujas dobles, que se pueden encontrar con distintas
separaciones entre las hojas:
Aguja triple
Estas agujas también se fabrican con los tipos de puntas más habituales.
● Agujas con doble ojo: Estas agujas no poseen un ojo sino dos, uno
encima del otro, de manera que podemos enhebrar la máquina de coser
con dos hilos diferentes para obtener efectos decorativos. A diferencia de
las anteriores, las agujas de doble ojo repiten el patrón del punto
utilizado de manera superpuesta y no paralela.
● Agujas con alas: Este tipo de agujas tienen un ensanchamiento a lo
largo de su hoja que permite realizar puntos con efecto de calados con la
máquina de coser al abrir de una manera más acusada las fibras de los
tejidos.
Esta pregunta no tiene una respuesta general. Hay varios factores a tener en
cuenta: las labores que coses y durante cuánto tiempo, y si bordas a altas
velocidades.
Es importante que lubriques tu máquina regularmente y no solo cuando la
máquina te lo pida. Si tu máquina mete bastante ruido, ¡es el momento de
hacerle mantenimiento! Puedes hacerlo al terminar un proyecto o antes de
empezar el siguiente o, si trabajas en un proyecto que se prolonga mucho
tiempo, también debes lubricarla durante el proyecto.
Los útiles existentes para facilitar la costura son infinitos, cuando empezamos
a coser nos podemos sentir perdidos en ese vasto y desconocido mundo. No hay
que agobiarse, de entrada, sólo será preciso tener lo más básico y, a medida que
vayamos aprendiendo técnicas, podremos ir ampliando el costurero en función
de las nuevas necesidades que nuestro aprendizaje nos vaya generando. Sin
embargo, hay una serie de elementos que conviene tener sí o sí… a ellos son a
los que les vamos a dar un repaso hoy.
Agujas
Las primeras agujas que vamos a necesitar serán las de coser a mano, pero en
cuanto nos empecemos a familiarizar con la máquina de coser, necesitaremos
también agujas de coser a máquina. Tanto en unas como en otras hay
diferentes tipos cuya elección dependerá sobre todo del tipo de tejido que
vayamos a coser.
Las agujas de coser a mano van numeradas del 2 al 12, siendo las del nº. 2 las
más gruesas y las del 12 las más finas, también pueden tener diferente
longitud. Para empezar, nos puede ir muy bien tener un paquete o tubo de
agujas surtidas, de diferentes números y tamaños, que se adaptaran a las
diferentes necesidades que podamos tener. El tamaño de las agujas depende del
tipo de costura que vayamos a realizar, así como del tejido con el que estemos
trabajando. Utilizaremos agujas más finas y cortas para la realización de los
Las agujas de coser, tanto a mano como a máquina, deben ser de buena calidad,
tener la punta bien afilada y no estar ni torcidas ni oxidadas. Si no se cumplen
estos requisitos, la costura se nos hará mucho más difícil e, incluso, podríamos
estropear el tejido.
Es muy importante que los hilos de coser sean de la mejor calidad para que no
se rompan durante el proceso de la costura y, sobre todo, para que la prenda
En un principio, podemos utilizar las mismas tijeras para cortar la tela y los
hilos. Una tijera de costura mediana de buena calidad puede efectuar
perfectamente ambas funciones, pero es imprescindible tener unas tijeras
diferentes para cortar otro tipo de material que no sea tela ni hilo si queremos
que nuestras tijeras nos den un resultado óptimo y no tengamos que estar
continuamente afilándolas porque se han estropeado y ya no cortan bien.
Aunque no se trata de un elemento imprescindible, para el corte de los hilos se
puede utilizar un cortahilos, un pequeño instrumento muy manejable y que
resulta mucho más económico que unas tijeras de bordar convencionales.
Existen de diferentes medidas y materiales, antes de decidirse por uno hay que
probárselo y comprobar que el dedo está cómodo en su interior, sin estar
apretado, pero tampoco tan suelto que el dedal se caiga. En cuanto al material,
depende del gusto de cada uno, los más resistentes son los metálicos, pero
algunas personas tienen el inconveniente de que, al no tener agujeros que
permitan el paso del aire, el dedo suda y con la humedad se produce una
oxidación que hace que se forme una marca oscura en el dedo si se utiliza con
continuidad, para evitarlo los hay de otros materiales, como el plástico y, más
recientemente, la silicona.
Alfileres
Se utilizan para mantener las capas de tela unidas y que no se muevan
mientras preparamos las costuras. Deben ser de un buen acero, con la punta
afilada y sin marcas de óxido, si alguno está oxidado o torcido es mejor tirarlo.
Existen diferentes tipos de alfileres, más o menos largos y gruesos, con la
cabeza pequeña, o bien en forma de bola o de flor, dependiendo del tipo de
función que queremos realizar. Para empezar a coser, bastará con unos alfileres
normales de buena calidad. Aconsejable que sean niquelados, si no los podes
conseguir, trata que sean finos.
El descosedor está formado por un extremo metálico que sirve para introducirlo
entre los hilos que vayamos a cortar y una parte cortante, situada en la curva
en forma de gancho y que, de esta manera, queda protegida para evitar cortes
indeseados.
Además de los materiales propios de costura enumerados hasta ahora,
deberemos tener otros que, si bien no son propios de este mundillo, sí que lo
complementan, como puede ser un lápiz de dibujo corriente, del número 2, una
goma de borrar, un sacapuntas y una regla larga (de unos 50 cm.) y una
escuadra o cartabón más bien grande que nos permita marcar ángulos rectos al
escuadrar las telas; así como, papel especial para patrones (que podemos
encontrar en las mercerías), materiales todos ellos necesarios a la hora de
dibujar los patrones que utilizaremos como base en la confección de prendas.
Este ha sido un repaso somero a los materiales indispensables para poder coser
fácilmente y con eficacia, de algunos de ellos existen muchos tipos y calidades,
más adelante podremos ver con más detalle esos tipos y el uso que se les puede
dar…
Es la más común de las costuras, sin embargo, más que un tipo de costura es
un tipo de puntada que se denomina pespunte o puntada recta; esta puntada
sirve para realizar prácticamente cualquier tipo de costura que pueden ser de
unión, acabados, colocación de habilitado, terminaciones especiales, refuerzos,
entre otras.
Las costuras de unión abiertas son las más comunes, se realizan con puntadas
rectas sobre un margen de costura estipulado por las necesidades del proyecto,
Este tipo de costuras son visibles en el exterior de la prenda, las más simples se
utilizan para sujetar o dar firmeza a algunos elementos del proyecto; al ser
visibles se convierten en detalles que requieren de mayor atención y precisión.
Las más comunes son: el pespunte de carga, las costuras de recubrimiento o
incluso el bordado.
Este tipo de costura se utiliza para unir y dar acabado en las orillas interiores
de un proyecto, su construcción requiere de dos costuras sobre el mismo punto
que se quiere confeccionar y con las cuales se arma una especie de bolsita que
oculta las orillas de la tela para evitar que se vean y se deshilachen.
1 - Enfrentar revés con revés de las dos telas.
Ojo en este paso! Vamos a coser por el lado derecho de la tela.
2 - Coser a un 1 cm del borde con puntada recta.
3 - Cortar el margen de costura dejándolo más estrecho.
4 - Abrir las telas con los derechos mirando hacia arriba.
5 - Unir derecho con derecho, envolviendo los márgenes de costura
6 - Coser a un pie de máquina del borde, teniendo cuidado de no coser encima
🧵🪡 🪡🧵✂️
de los márgenes de costura que están entre las dos capas de tela.
✂️ Costura francesa lista
Se utiliza principalmente en telas ligeras como gasas y organzas, brindando un
mejor acabado y calidad al proyecto; sin embargo, también se puede aplicar en
telas de peso medio cuando no se cuenta con puntadas de orillado o zigzag.
Son costuras de refuerzo que se aplican para dar resistencia o sujetar alguna
parte del proyecto que se realiza. Existen distintas formas de aplicarlos, pero
generalmente se realizan con puntadas rectas, pueden ser visibles en el
exterior y de ser así se pueden realizar sencillos, dobles, triples…
Generalmente se colocan al lado de una línea de unión de piezas, pero también
se pueden utilizar para brindar un concepto o novedad al proyecto.
Origen de la tela
El hilo del recuerdo nos transporta hasta nuestro origen.
Desde la primera inhalación, nuestra piel está en contacto con la tela, ya sea
una sábana o manta para abrigar a un bebé, los creativos diseños de la ropa
infantil hasta los estampados que llevamos cada temporada.
La necesidad de utilizar vestimenta primero se resolvió utilizando pieles de
animales, hojas y cortezas de árboles que más tarde se transformaron en
técnicas de hilatura y producción de tejidos.
Hace miles de años cuando todavía no se conocía la cerámica y los artesanos
antiguos sólo contaban con sus propias manos vieron la luz los primeros hilados
con fibras vegetales
Tuvieron grandes habilidades para atar, sujetar, anudar piezas y poder crear,
además, las primeras construcciones sólidas.
En las civilizaciones como la egipcia y en la antigüedad grecorromana, con una
simple tela se construía un vestido envolviendo el cuerpo a través de plegados y
drapeados como es el ejemplo del chitón y peplos griegos.
Varias culturas diseñaron motivos decorativos que se plasmaron a través
de técnicas como la pintura, el teñido, el estampado y el tejido.
Tejido plano
Es todo tejido constituido por el entrecruzamiento ordenado de dos conjuntos de
hilos, normalmente formando ángulo recto entre sí.
Tejido de punto
Es el constituido por bucles de hilo enlazado entre sí formando mallas.
Cuando empezamos a coser comenzamos nuestro primer contacto con las telas.
Pero antes de empezar a plantearnos cortar una prenda tenemos que conocer
algunas particularidades de las telas.
Vamos a estudiar las nociones más importantes:
En las telas tenemos que distinguir la urdimbre y la trama.
La anchura de la tela:
Las telas se presentan en diferentes anchos de compra. En la actualidad lo
más habitual es que vengan con un ancho de 1,20 cm a 1,50 cm. lo que se
denomina "doble ancho", pero también podremos encontrar, aunque ya sea
menos habitual, anchuras de 0'75 cm., lo denominado "ancho sencillo".
Pero cuando acudimos a telas para cortinas o tapicerías, podemos llegar a
encontrar anchos de 2,5 m.,3 m. o más para evitar cortes excesivos a la hora de
confeccionar cortinas o forrar muebles o paredes.
La anchura de la tela será la que determinará la cantidad de metros que
necesitaremos para confeccionar las prendas y determinará que lleve más o
menos cortes.
Orillo:
Llamamos orillo a los extremos o remate de los laterales de la tela hecho de
hilo más basto del mismo color o de otros colores.
Evita el deshilachado y protege la tela durante el proceso de tejido y los
posteriores tratamientos, apresto, teñido y lavado.
Lo más frecuente es que el orillo no se use y se corte y deseche al cortar la
prenda.
Se produce al dar la vuelta un hilo de trama al final de una línea durante la
fabricación del tejido.
Caída de la tela:
Es la propiedad que tiene algunas telas que muestran un cierto "peso"
adaptándose sobre el cuerpo de la persona sin formar pliegues o volúmenes. La
caída aporta un aspecto de fluidez a la prenda. A menor caída más rigidez.
Las telas con mucha caída permitirán prendas fluidas con formas caprichosas.
Las telas con poca caída harán prendas más rígidas con estructuras más
marcadas.
Para ver la caída de una tela en aconsejable ponerla al bies y dejarla caer
colgada de la mano. La rigidez mayor o menor de la tela definirá la capacidad
de "caer"
Se denomina cara de una tela aquella que vamos a llevar para que se vea.
Revés de la tela:
Denominamos revés de la tela aquella que quedará por el interior de la prenda.
Habitualmente suele ser fácil distinguirlas, en las estampadas el lado de la
cara es el que lleva el dibujo mientras que el revés es liso y sin estampación.
Las telas con pelo o relieve como la pana y el terciopelo también son fáciles de
distinguir.
Las telas que apenas tienen diferencia de una cara a otra, se pueden distinguir
por las pequeñas perforaciones que lleva en los orillos, como norma la parte que
tiene relieve de las perforaciones sería el revés y el liso la cara, pero no siempre
es así ya que esos agujeritos son hechos por una placa de agujas que sujetan las
telas durante el proceso de fabricación y no siempre corresponden con una u
otra cara. Estas telas pueden usarse por cualquiera de las dos caras. Pero es
conveniente marcar con jaboncillo aquella que vayamos a usar, para evitar
Cuando las telas llevan dibujo con un patrón de estampación, tenemos que
tener en cuenta que tienen que ser cortadas siempre con el dibujo en la misma
dirección.
El mismo tratamiento debe llevar telas con brillo como el satén ya que el giro
del tejido dará tonos diferentes.
También consideramos como estampado los cuadros, las líneas o los dibujos
geométricos.
LINO
Se destaca por ser un tejido de gran resistencia. Es uno de los tejidos más
antiguos del mundo, por lo que sigue dominando el mercado textil en la
actualidad. Este material absorbe y libera el agua rápidamente, por lo que es
ideal para usar en verano. Es de destacar que, al ser un tejido rígido, puede
deformarse con el tiempo si no se cuida correctamente.
CÁÑAMO
Es una fibra que se extrae de la cáscara del coco y cuenta con dos
variantes: fibra marrón y fibra blanca. La primera de ellas se usa para
fabricar sogas, colchones, cepillos, entre otros elementos, mientras que la
segunda, es propia de la industria textil para la confección de alfombras, o telas
para tapicería o manualidades.
ALGODÓN
MOHAIR
Es un tipo de tela que se obtiene a partir del pelo de las cabras de Angora, una
especie nativa de la región de Ankara, Turquía. Es muy usada en la
industria textil para la confección de chamarras y jersey debido a sus
propiedades suaves y brillosas. También se destina para hacer alfombras y
abrigos
ALPACA
Es uno de los tejidos más valorados y costosos del mundo debido a que
es más suave, ligero y aislante que la lana. Proviene de la cobertura de las
cabras originarias del macizo del Himalaya, por lo que desarrollan un pelaje
grueso y caliente. De esta tela se pueden obtener todo tipo de prendas como
sombreros, bufandas, entre otros.
ANGORA
La angora es un tipo de tela que se obtiene del pelaje de los conejos de Angora,
Turquía. Es un tejido de gran producción, por lo que se llega a obtener entre 2
mil 500 y 3 mil toneladas al año. Es ligera, muy suave al tacto y absorbe
bien el agua. Se suele usar para fabricar suéteres, bufandas, calcetines y ropa
térmica.
Aunque hoy en día hay una gran diversidad de tejidos textiles, existen ciertos
tipos de tela que dominan el mercado textil para la confección de un sinfín de
prendas o piezas. Cada tela cuenta con sus propias características y cualidades
especiales. Por ello, son usadas de diversas maneras en el mundo textil para
dar vida a todo tipo de creaciones, prendas o piezas. Son la base de la industria
textil.
ALGODÓN
Se trata del tejido más usado en todo el mundo. Es un material con gran
fuerza de absorción, lo que lo hace confortable para climas cálidos. Es una tela
muy versátil, ya que puede combinarse con otros materiales, además de ser
muy económica y suave al tacto. Del algodón podemos obtener camisetas,
pantalones, chamarras, entre muchas otras prendas.
LANA
SEDA
CUERO
El cuero es sin duda alguna uno de los productos más utilizados para la
fabricación de zapatos, billeteras, cinturones y prendas de vestir. Se obtiene
de una capa de tejido de ciertos animales que luego es tratada por un
proceso de curtido. Hoy en día, y ante el reclamo de asociaciones animalistas,
se ha optado por usar cuero sintético.
CIERRES INVISIBLES
Estos cierres son muy temidos por todos los que comienzan en la confección,
pero no hay porque tener miedo, porque como todo, siendo metódico y con un
par de truquitos conseguirás coserlas a la perfección.
Lo bueno de ellos es que solo hay un tipo, por lo que solo tendrás que elegir
su largo, que suelen ir entre los 18 y 60 cm, y su color.
Con respecto al largo todo depende del lugar de la prenda en el que vaya a
aplicarse, por ejemplo, los vestidos con cierre en la espalda deberán de llevar de
60 cms, en cambio si el vestido lo lleva lateral (desde la baja sisa) se suelen
usar de 35 cms.
Los elásticos son materiales generados por hilos entretejidos con goma o lycra.
Se comenzó a utilizar como complemento en la confección de prendas, desde
remeras hasta pantalones y buzos, desde principios de este siglo.
Junta los extremos del elástico y cóselos. Superpón los extremos del
elástico entre 0,6 cm (0,3 pulgadas) y 1 cm (0,5 pulgadas) aproximadamente.
●
Mide el ancho del elástico. El dobladillo deberá ser un poco más
ancho que el elástico, así que primero mide el ancho del elástico. Luego,
agrega 1,3 cm (0,5 pulgadas) a esta medida. Por ejemplo, si el elástico
mide 1,3 cm (0,5 pulgadas), entonces tendrás que agregar 1,3 cm (0,5
pulgadas) más para tener un total de 2,5 (1 pulgada).
4.
Asegura el otro extremo del elástico. Sujeta el otro extremo del elástico
mientras empujas y jalas el imperdible. No dejes que el extremo del elástico
atraviese completamente el dobladillo.
● Si tienes problemas para sujetar el otro extremo del elástico mientras lo
pasas, entonces deberás fijar este extremo a la parte exterior del
dobladillo con otro imperdible.
11.
Para este tipo de dobladillo utilizaremos una cinta de algodón bordada con un
trozo de tejido liso en su diseño.
Esta medida varía en función del trozo de tejido liso de la cinta que hayan
escogido.
Coser en el borde del tejido utilizando un color para el hilo superior y otro color
diferente para el hilo de la canilla.
Con esta opción, tendremos un dobladillo clasico visto desde fuera, pero con
mucha fantasía por el interior. Esta técnica es muy indicada en aquellos tejidos
en los que nos dé pereza sobrehilar el borde (por la razón que sea).
Con una puntada en zigzag estrecha y de longitud estándar, coser por la parte
más tupida al borde de la cinta.
Cuando trabajamos con encajes, debemos estudiar con detenimiento el diseño
del dibujo y localizar las zonas más apropiadas donde coser.
La última opción que vamos a ver en este tutorial de estilo noche en Venecia, es
un mix de las dos técnicas explicadas anteriormente.
Fruncir a máquina
¡Vamos allá!
Hacer pespuntes
Fruncir
Colocar un alfiler perpendicularmente en uno de los extremos de la zona que
vayamos a rizar.
Envolver en el alfiler los dos cabos de hilo de ese lado dibujando un “8”.
Una vez tenemos la tela con el rizo deseado, el siguiente paso es fijarlo a otra
pieza de tejido lisa. Esta parte podría equivaler a ponerle la cinturilla a una
falda fruncida.
Material:
● alfileres
● tijeras
● tiza de modista
● plancha
● martillo
● aguja del número 100 (jeans) para máquina
● hilo torzal
● cartón fino (tipo el que viene envolviendo las medias)
Tomar el bajo con alfileres
Para acortar el bajo es necesario ponerse el calzado que tenemos pensado llevar
la mayor parte del tiempo con ese pantalón. Es una de las partes más
complicadas y más si el jeans es nuevo, pero ¡hay que decidir!
Marcar el dobladillo
Marcar con tiza unas guías a 3 cm del largo deseado. Este margen es para el
dobladillo, que a continuación coseremos y que pulirá el bajo.
Planchar el dobladillo
Volver del revés el pantalón.
Marcar con la plancha la primera vuelta del dobladillo de 1 cm de ancho.
Hubo una época no tan lejana en la que una servidora lo cosía prácticamente
todo con la máquina overlock. Su uso indiscriminado comenzó con los tejidos
elásticos, pero terminó abarcando todos los proyectos. Huelga decir que los
resultados, en su mayoría, eran satisfactorios pero que la rotundidad del
manejo de este tipo de máquinas no es muy adecuada para determinadas
partes de una prenda, que necesitan un tratamiento más delicado y calmado.
● Materiales
● Puntadas específicas y tensiones
● Costura de un dobladillo estabilizado
¡Vamos allá!
Materiales
Hilo elástico
Claves de uso:
Además de ayudar a coser el punto y otros géneros elásticos mejor, las telas de
terciopelo, proyectos de patchwork y otros menesteres compuestos por varias
capas lo agradecerán.
Ahora que hemos visto las características que definen una aguja, vamos a ver
los tipos de aguja adecuados para coser punto y géneros elásticos en general:
Dobladillo
Preparar el dobladillo
Colocar en el revés del tejido una cinta de 1,5 cm de ancho de entretela
termoadhesiva de punto.
Fijar con la plancha en el borde.
Preparar la máquina
Y hasta aquí el post de hoy, que contiene mucha información que os puede
resultar muy útil para coser prendas elásticas con vuestra máquina de
siempre.
Empecé a utilizar esta técnica al ver las sisas de un vestido vintage que estaba
arreglando y, desde entonces, está en mi top ten de acabados.
Vamos a ver los pasos necesarios para colocar una cinta al bies ribeteada.
Preparar la cinta
Desdoblar la cinta.
Colocarla por el derecho de la labor con los cantos del tejido juntos.
Asegurar con alfileres.
Este es el aspecto del bies una vez hecho el primer pespunte. Cuando aplicamos
bies en una línea curva es normal que la cinta se levante en su extremo. Lo
importante es que el pespunte no tenga ningún pliegue y que su forma sea
continua.
Por el derecho de la labor, la tira al bies queda totalmente oculta, lo que nos da
un pulido invisible. ¡Bravo!
Este es el resultado final de una sisa pulida con una cinta al bies ribeteada,
visto por el derecho y por el revés.
Esta versión se utiliza más para líneas rectas como bajos de pantalones o
puños. En una línea curva, al quedar la cinta más ancha, al volver no se
adaptaría bien.
Desdoblar la cinta.
Coser con la máquina por la línea del primer doblez.