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**"El Impacto del Turismo en Machu Picchu: ¿Beneficio o Amenaza para las
Comunidades Locales y el Medio Ambiente?"**
La llegada de visitantes a Machu Pichu alcanzó la cifra de 955,741; una
contracción de 8% en comparación con el 2022 según el reporte de turismo publicado por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur). Nuestro país alberga una de las 7 maravillas del mundo moderno, esta es a su vez una de las más visitadas por los turistas extranjeros y por los mismos habitantes de localidades aledañas. Este alto índice de visitas favorece a los comerciantes de la zona que pueden vender sus artesanías e increíbles hazañas gastronómicas. Por otro lado, esto también afecta a las comunidades locales, puesto que el alto índice de visitas trae consigo graves problemas como la contaminación ambiental y otros de índole cultural. Ante este contexto, surge la siguiente pregunta controversia, ¿crees que el turismo en lugares como Machu Picchu está beneficiando adecuadamente a las comunidades locales, o crees que está contribuyendo a problemas medioambientales y culturales? Desde mi punto de vista si creo que el incremento de visitas en lugares como Machu Picchu y otros de la misma naturaleza contribuyen a problemas medioambientales y culturales. En los siguientes párrafos expondré argumentos sólidos para sustentar mi postura.
El Perú es percibido como un destino turístico histórico y cultural importante,
pero enfrenta desafíos significativos que requieren políticas gubernamentales para promover un turismo responsable y sostenible, protegiendo tanto el medio ambiente como el patrimonio cultural.
Diversos estudios coinciden en que el Perú es percibido como un destino
turístico histórico, arqueológico y cultural. Esto se debe a que es un país megadiverso que contiene una de las más imponentes maravillas del mundo moderno. Cuzco es uno de los lugares que más visitas anuales recibe, Monitor Company precisa que entre 70% y 75% de los turistas que llegan a Perú optan por viajar a la ciudad del Cuzco. No obstante, las condiciones actuales en las que se desenvuelve la actividad turística no son las mejores, recientes estudios revelaron el riego que corren los tractivos de la zona, tales como manifestaciones culturales, ruinas, entre otras. Esta situación debe de ser enfrentada por el gobierno mediante políticas de gobierno que promueva el turismo sin descuidar a las localidades aledañas, de esa manera poder llevar a cabo la actividad turística de manera responsable sin contribuir a los problemas medioambientales y culturales. Machu Picchu enfrenta riesgo por el exceso de turistas post-pandemia, violando normas internacionales; es esencial aplicar políticas públicas para proteger el medio ambiente y la cultura local. Machu Picchu está en riesgo por el deterioro que ocasiona la carga de visitas y es que, después de la pandemia, el aforo casi se duplicó de 3.044 a 5044 por día, lo cual viola las normas internacionales. Las visitas a este atractivo turístico a traído consigo problemas las comunidades locales, así como también a las comunidades campesinas, pues los turistas aprovechan la mínima oportunidad para conocer los lugares de la zona, muchas veces dejando rastros de contaminación, incluso recogiendo los recursos propios de la zona pertenecientes a las culturas de la localidad. Las normas internacionales velan por el cuidado de los atractivos turísticos, por ello que el hecho de recibir más de 4044 turistas por día es una clara violación a la norma internacional. Para evitar este problema se deben de aplicar políticas públicas que ayuden a mitigar el problema de contaminación medioambiental y la pérdida de las manifestaciones y expresiones culturales, pues el ambiente debe se ser preservado y no sobreexplotado como manifiesta la norma internacional. En conclusión, desde mi punto de vista y en base a todo lo ya mencionado en los párrafos anteriores si considero que el aumento en el índice de visitas en las zonas turísticas como Machu Picchu si contribuye a los problemas como la contaminación medioambiental y culturales. Los recientes estudios realizados el Ministerio de Cultura en el Machu Picchu reveló que las piedras incas de la ciudadela tienen un desgaste de más de 5 milímetros, en algunas zonas el desgaste se acumula en casi un milímetro por año debido a las condiciones climáticas y el tránsito de las personas. Y en una década, el daño ascendería a un centímetro. Es por ello que en afán de mitigar este problema, el gobierno de turno debe hacer énfasis en promover políticas de gobierno que impliquen el desarrollo responsable y sostenible del turismo sin incrementar los problemas medioambientales y culturales.