Fecundacion, Embarazo y Parto
Fecundacion, Embarazo y Parto
Fecundacion, Embarazo y Parto
Durante el primer trimestre, el cuerpo pasa por muchos cambios. Los cambios
hormonales afectan prácticamente a todos los sistemas de órganos. Estos
cambios pueden manifestar síntomas incluso en las primeras semanas de
embarazo. El retraso menstrual es un signo evidente de embarazo. Otros
cambios pueden incluir:
Agotamiento
Senos sensibles e inflamados. Los pezones también se pueden volver
protuberantes.
Malestar estomacal; pueden presentarse vómitos (malestar matutino)
Deseo hacia o desagrado ante ciertos alimentos
Cambios de humor
Estreñimiento (dificultad para eliminar las heces)
Necesidad de orinar con mayor frecuencia
Dolor de cabeza
Acidez
Aumento o pérdida de peso
A medida que el cuerpo cambia, probablemente necesites hacer cambios en tu
rutina diaria; por ejemplo, acostarte más temprano o comer más
frecuentemente pero en pequeñas cantidades. Afortunadamente, la mayoría de
estos malestares desaparecerán con el tiempo. Y algunas mujeres no sienten
nada en absoluto. Si ya has estado embarazada anteriormente, quizás lo sientas
diferente esta vez. Todas las mujeres son diferentes; lo mismo pasa con los
embarazos.
De cuatro a cinco semanas:
El bebé se vuelve más activo. Tal vez puedas sentir cómo se mueve.
El bebé está cubierto con un vello fino y suave llamado lanugo y una capa
cerosa llamada vérnix. Esto protege la piel que se está desarrollando.
Ya se han formado las cejas, pestañas y las uñas de las manos y pies. El bebé
incluso puede rascarse.
El bebé puede oír y tragar.
En la mitad del recorrido, el bebé mide 6" de largo y pesa alrededor de 9 onzas.
A las 24 semanas:
La médula ósea comienza a producir glóbulos sanguíneos.
Se forman las papilas gustativas.
El bebé ya tiene huellas dactilares.
Comienza a crecer cabello real en la cabeza del bebé.
Los pulmones ya están formados pero todavía no funcionan.
Se desarrolla el reflejo de agarre o prensión y el de sobresalto o de Moro.
El bebé se duerme y se despierta periódicamente.
Si el bebé es niño, los testículos comienzan a desplazarse desde el abdomen
hacia el escroto. Si es niña, su útero y ovarios están en su lugar y ya se han
formado los óvulos que expulsarán los ovarios a lo largo de su vida.
El bebé acumula grasa y ha aumentado de peso considerablemente. Ahora, con
12" de largo, el bebé pesa alrededor de 1½ libras.
Tercer trimestre (de la semana 29 a la 40)
Estás en la recta final! Algunas de las molestias propias del segundo trimestre
continuarán. Además, muchas mujeres sienten dificultad para respirar y
necesitan ir al baño con mayor frecuencia. Esto se debe a que el bebé está
creciendo más y más y ejerce más presión sobre los órganos. No te preocupes,
el bebé está bien y estos problemas se aliviarán una vez que des a luz.
Entre los cambios corporales que notarás en el tercer trimestre se incluyen:
Falta de aire
Acidez
Inflamación en los tobillos, dedos y rostro. (Si notas alguna inflamación
repentina o extrema o si aumentas de peso rápidamente, comunícate con
el médico de inmediato. Esto puede ser un signo de preeclampsia.)
Hemorroides
Sensibilidad en los senos; pueden secretar una sustancia acuosa que es el
líquido precursor de la leche llamado calostro
Ombligo abultado
Dificultades para conciliar el sueño
El desplazamiento del bebé hacia la parte inferior de tu abdomen
Contracciones, que puede indicar un trabajo de parto real o una falsa
alarma
Cuanto más te aproximas a la fecha de parto, el cuello uterino se vuelve más
delgado y suave (a este proceso se lo conoce como borramiento). Este es un
proceso normal y natural que ayuda a que el canal de parto (vagina) se abra
durante el trabajo de parto. El médico controlará el progreso con un examen
vaginal a medida que se aproxima la fecha estipulada de parto. Anímate, ¡la
cuenta regresiva ha comenzado!
A las 32 semanas: