Corte Superior de Justicia de La Selva Central: SENTENCIA #44 - 2022
Corte Superior de Justicia de La Selva Central: SENTENCIA #44 - 2022
Corte Superior de Justicia de La Selva Central: SENTENCIA #44 - 2022
SENTENCIA N° 44 – 2022
I. PARTE EXPOSITIVA
I.1.VISTOS:
Mediante escrito de folios uno y siguientes, don TEOFILO FIGUEROA
VASQUEZ interpone demanda contra AYDEE CLELIA HURTADO
SANTIAGO y el representante DEL MINISTERIO PÚBLICO, sobre Divorcio
por la causal DE SEPARACIÓN DE HECHO POR MAS DE DOS AÑOS;
de
cómo PRETENSIÓN SUBORDINADA por la causal de VIOLENCIA
PSICOLÓGICA; y siendo el estado procesal el de emitirse la sentencia
correspondiente.
I.2. MATERIA:
Pretensión Principal:
- La sentencia a emitir corresponde a una de divorcio por la causal de
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Separación de hecho por más de dos años.
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Pretensión subordinada:
- Divorcio por la causal de Violencia psicológica
1. Que, contrajo matrimonio civil el día cuatro de marzo del dos mil dos, ante la
Municipalidad Distrital de San Ramón, Provincia de Chanchamayo, Región
Junín.
3. Que, el dieciocho de mayo del dos mil siete, pone de conocimiento que la
demandada hizo abandono injustificado del hogar, llevándose sus pertenencias
personales, y sus ahorros por el monto de S/800.00 soles, dejándolo en el
abandono y a dos menores hijas de las demandadas de sus compromisos
anteriores, de quien él se hizo cargo, brindándole alimentación, vivienda,
vestido y educación.
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familiares y vecinos, quienes le señalaban que su esposa le abandono,
sumiendo en una melancolía, toda vez que, su esposa con quien tuvo la
expectativa de tener una compañera hasta los últimos días se desvaneció.
7. Que, dada a su edad avanzada se encuentra enfermo del pulmón, por el que se
está sometiendo un tratamiento médico muy costoso.
8. Que, las obligaciones conyugales no están siendo reciprocas y por ende pide la
disolución del vínculo matrimonial y exoneración de la prestación de
alimentos entre conyugues.
9. Respecto a los bienes muebles e inmuebles, no existe adquisición de estos
dentro de su relación conyugal.
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declarado rebelde procesal, conforme se aprecia de la resolución cinco, que corre a
folios sesenta y cinco y siguientes.
- Con fecha tres de noviembre del dos mil veintiuno, se realizo la audiencia
de pruebas.
I.7.PUNTOS CONTROVERTIDOS:
Mediante resolución número veintiséis, de folios 235 - 238, se señala los
siguientes puntos controvertidos:
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e. Determinar si corresponde o no fijas el quantum indemnizatorio a favor
del cónyuge perjudicado, por los posibles daños y perjuicios, incluido el
daño moral y personal.
PRETENSIÓN SUBORDINADA:
II. CONSIDERANDO:
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Para Alex Plácido Vilcachagua1“… la separación personal o el divorcio sólo pueden ser
decretados judicialmente ante la alegación y la prueba de hechos culpables de uno o de
ambos cónyuges hecho efectiva en un proceso contencioso, y debe circunscribirse a las
causas taxativamente enumeradas por ley como adulterio, abandono, injuria grave, etc. Si los
hechos no fueron probados, el juez debe desestimar la demanda, aun cuando existiera la
evidencia de que la unión matrimonial está desintegrada. En síntesis, la sentencia exige la
prueba de la culpa de uno o ambos cónyuges y, por ello, el divorcio implica una sanción contra
el culpable que se proyecta en los efectos como son la pérdida o la restricción del derecho
alimentario, pérdida de la vocación hereditaria, etc. …La otra tendencia se manifiesta en la
posibilidad de decretar la separación personal o el divorcio aún sin alegar hechos
imputables a uno de los cónyuges, o a los dos, no obstante, el vínculo matrimonial está
desquiciado y la vida en común resulta imposible o intolerable. Desde esta perspectiva no
se requiere la tipificación de conductas culpables, la separación o el divorcio importan,
esencialmente, un remedio, una solución al conflicto matrimonial (y no una sanción)
tendente a evitar mayores perjuicios para los cónyuges y los hijos…”
1
Plá cido Vilcachagua, Alex. “Las Causales de Divorcio y Separació n de cuerpos en la Jurisprudencia Civil”, Editorial Gaceta
Jurídica - Diá logo con la Jurisprudencia, Primera Edició n, Octubre 2,008; Lima, Perú . Pá gina 14.
2
El matrimonio se contrae "a fin de hacer vida en comú n". Así, para Enneccerus, el matrimonio es "la unió n de un hombre y
una mujer reconocida por la ley, investida de ciertas consideraciones jurídicas y dirigida al establecimiento de una plena
comunidad de vida" La presencia del objetivo del matrimonio de hacer vida en comú n es manifiesta.
La finalidad de hacer vida en comú n inherente al matrimonio tiene su raíz en la corriente institucionalista que trata de explicar
su naturaleza jurídica. En efecto, el objetivo de hacer vida en comú n se orienta al deber de cooperació n y asistencia de los
có nyuges, así como a la conformació n de una familia. La finalidad del matrimonio, entonces, es no solo gozar de la vida
conyugal, sino formar una alianza para soportar mejor los contratiempos de la vida. Esta característica se encuentra
estrechamente vinculada con la procreació n.
Asimismo, es preciso señ alar que se trata de una finalidad preeminente, esto es, que nuestro ordenamiento jurídico no reconoce
la posibilidad de contraer matrimonio con objetivos distintos. Cualquier propó sito de la unió n conyugal (procreació n,
economía, afecció n, cultura, aspectos sociales, etc.) queda necesariamente subsumido dentro de la finalidad de hacer vida en
comú n.
Pero tambié n, el matrimonio se entiende como unió n voluntariamente concertada. Este aspecto del matrimonio encuentra
su justificació n en la corriente contractualista que también constituye parte importante en la configuració n de la naturaleza
jurídica del matrimonio en nuestro ordenamiento.
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II.1.2 Sobre la Separación de Hecho como causal de divorcio:
El divorcio por la causal de separación de hecho, estipulado en el inciso 12 del artículo
333° del Código Civil, tiene por finalidad solucionar un conflicto real sin la necesidad
de establecer la culpa de uno de los cónyuges para que se declare el divorcio, por ende,
lo que busca es regularizar una situación de hecho existente, por ello, es considerado en
la doctrina como el “Divorcio Remedio”.
El matrimonio, entonces, es un acto eminentemente consensual, en la medida en que requiere la concurrencia de voluntades
de los futuros esposos. Dicho consentimiento debe recaer sobre un proyecto de vida en común y se presta mediante el
cumplimiento de las formalidades. Se trata ademá s de un consentimiento que es acogido y correspondido por el otro
contrayente. Cabe mencionar que el aspecto consensual del matrimonio debe ser entendido de manera conjunta con el
cará cter legal que le es inherente. En efecto, dentro de los requisitos de ley, se establece que el matrimonio es un acto
eminentemente formal.
En suma, se trata de un acto que si bien es consensual en su conformació n, no puede soslayar los elementos formales para
su validez poniéndose de manifiesto la dualidad de contrato e institució n propios de la naturaleza del matrimonio.
El principio de la igualdad de có nyuges tiene su base en la naturaleza de la alianza entre iguales que constituye el matrimonio,
en la que no caben subordinaciones por razó n de sexo. En efecto, el matrimonio no es una carrera por el poder, sino un
esfuerzo común por amar y servir al cónyuge y a los hijos.
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Fundamento 36 – Elemento material: está configurado el hecho mismo de la separació n corporal de los có nyuges (corpus
separationis), es decir, por el cese de la cohabitació n física, de la vida en comú n. Sin embargo, puede ocurrir que por
diversas razones –bá sicamente econó micas– los có nyuges se ven obligados a habitar mismo inmuebles no obstante su
renuencia a concretar su vida en comú n (ocupan habitaciones distintas, manejan horarios distintos, y su ú nico nexo de
comunicació n suelen ser los hijos). En este caso, la separació n de hecho no puede ser interpretada como “no habitar bajo un
mismo techo”, sino como abdicació n total y absoluta de los deberes matrimoniales.
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Fundamento 37 – Elemento Psicoló gico: se presente este elemento cuando no existe voluntad alguna en los có nyuges –sea
de ambos o de uno de ellos– para reanudar la comunidad de vida (animus separationis). Por tanto, no puede alegarse la
separació n de hecho como causal de divorcio cuando ésta se produzca, por ejemplo, por cuestiones laborales, o por una
situació n impuesta que jurídicamente o tá cticamente sea imposibles eludir, como el caso de la detenció n judicial; o en el
supuesto en que el có nyuge viaja al extranjero para ser intervenido quirú rgicamente o por razones de estudio. Sin embargo,
cesada cualquiera de estas circunstancias justificadas, el consorte está obligado de retornar físicamente al hogar conyugal, y
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en el supuesto de no hacerlo, se configura la causal de separació n de hecho.
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Siendo así, respecto a ellos, se puede resumir: En cuanto al elemento material este se
presenta cuando se evidencia el resquebrajamiento permanente y definitivo de la
convivencia, lo que sucede no solo con el alejamiento físico de uno de los cónyuges del
hogar conyugal sino también puede configurarse cuando ambos esposos viven en el
mismo inmueble, pero incumpliendo con el deber de cohabitación o vida en común. En
cuanto al elemento subjetivo, este viene a ser la falta de intención para re - normalizar la
vida conyugal, poniendo fin a la vida en común por más que algún deber se cumpla lo
que supone que esta separación debe haberse producido por razones que no constituyan
verdaderos casos de estado de necesidad o fuerza mayor; por lo tanto, no puede
alegarse la separación de hecho como causal de divorcio cuando ésta
se produzca, por ejemplo, por cuestiones laborales, o por una situación impuesta
que jurídicamente o fácticamente sea imposibles eludir, como el caso de la detención
judicial; o en el supuesto en que el cónyuge viaja al extranjero para ser intervenido
quirúrgicamente o por razones de estudio. En cuanto al elemento temporal se presenta
con la exigencia del transcurso ininterrumpido de dos años, si los cónyuges no tuviesen
hijos menores de edad y de cuatro a los que los tuvieran.
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Fundamento 38 – Elemento Temporal: Esta configurado por la acreditació n de un periodo mínimo de separació n entre los
có nyuges: dos añ os si no existen hijos menores de edad, y cuatro añ os si los hubiere. La norma no señ ala que pueda
sumarse plazos independientes en caso que se configure solució n de continuidad en el transcurso del tiempo, pero tratándose
de un estado en el que se quiebra la cohabitació n de forma permanente y definitiva, es ló gico que se entienda que se trata de un
plazo corrido y sin solució n de continuidad computable a la fecha de interposició n de la demanda.
Cabe invocar que en la invocació n de esta causal no opera plazo de caducidad alguno, de conformidad con lo dispuesto en
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el artículo 339 del Có digo Civil, encontrá ndose la acció n expedita mientras subsisten los hechos que la motivaron.
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II.2. – ANÁLISIS DE LA CUESTIÓN EN DISCUSIÓN:
1.1. – De conformidad al artículo 345 – A del CC: “Para invocar el supuesto del inciso 12
del Artículo 333 el demandante deberá acreditar que se encuentra al día en el pago de sus
obligaciones alimentarias u otras que hayan sido pactadas por los cónyuges de mutuo acuerdo.
(…)”; siendo que nuestra jurisprudencia a determinado que: “De analizarse lo dispuesto en
el artículo 345-A glosado [del C.C], del cual se desprende como requisito de procedibilidad para interponer
la presente acción [sobre divorcio por causal de separación de hecho], el que la parte demandante acredite
encontrarse al día en el pago de sus obligaciones alimentarias u otras que hayan sido pactadas de
común acuerdo, a favor del cónyuge demandando; […] cuando la norma alude a que el demandante se
encuentre ‘al día’ en el pago por el concepto indicado, se desprende que previamente haya existido una
sentencia o mandato judicial que le conmine al pago periódico de determinada suma por concepto de
alimentos o, que el actor haya acordado con su contraparte la forma (que incluye la periodicidad del
pago) y el monto por el referido concepto; de manera tal que si la parte actora al momento de
interponer su demanda no logra acreditar venir acudiendo con el pago en la fecha pre establecida (sea
vía judicial o mediante acuerdo) por concepto de alimentos a favor del cónyuge demandando y
perjudicado (sea mujer u hombre), acarrearía sin lugar a dudas la improcedencia de su demanda
(…)”6.
1.3.– Es preciso, señalar, que si bien es cierto, el artículo 345 – A del CC, primer
parte, señala, que para invocar el supuesto del inciso 12 del artículo 333 el demandante
deberá acreditar que se encuentra al día en el pago de sus obligaciones alimentarias u
otras que hayan sido pactadas por los cónyuges de mutuo acuerdo; en el presente caso,
revisado los actuados, se advierte, no se ha verificado la existencia de decisión judicial o
acuerdo mutuo que haya fijado los alimentos entre las partes, aunado a ello, la
demandada – cónyuge no ha alegado que el actor tenga alguna deuda alimenticia
pendiente de pago; por tanto, se concluye que el demandante se encuentra habilitado
para ejercer la pretensión de Divorcio bajo el supuesto de Separación de Hecho.
6
Casació n Nro. 630-2007/Loreto, Publicado en el Diario Oficial El Peruano el 02-12-2008, pá gs. 23497-23498 (Hinostroza
13
Mínguez, Alberto. Procesos Judiciales derivados del derecho de Familia. Ed. Grijley. 2012. Lima-Perú . p. 367)
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SEGUNDO. - Respecto al punto controvertido: DETERMINAR LA EXISTENCIA
DE UN MATRIMONIO CIVIL VALIDO ENTRE LAS PARTES
PROCESALES.
2.1.– Al caso de autos, el vínculo matrimonial civil válido entre las partes procesales,
se acredita con el acta de matrimonio civil obrante a folios 3, del cual se verifica que
TEOFILO FIGUEROA VASQUEZ y don AYDEE CLELIA HURTADO
SANTIAGO DE FIGUEROA han contraído Matrimonio Civil con fecha cuatro de
marzo del dos mil dos, por ante la Municipalidad Distrital de San Ramón, Provincia de
Chanchamayo -Región de Junín. Consecuentemente no habiendo sido materia de
impugnación el matrimonio efectuado por los justiciables, se tiene existe un matrimonio
civil válido entre las partes.
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conocimiento del demandante, quien al retorno de la demandada, permitía el
ingreso de ésta al domicilio conyugal, de allí,
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que las salidas que venía haciendo los hacía desde su domicilio conyugal,
conforme se puede verificar de manera clara, con la constancia judicial de
abandono de hogar de fecha dieciocho de mayo del dos mil siete y que obra a
folios 5, donde el mismo demandante señala: “(…) Lastimosamente mi esposa el
día de hoy ha hecho ABANDONO DE HOGAR, eso de las 09. 00 de la mañana
se retiró de la casa llevándose sus pertenencias personales, además de llevarse S/.
800. 00 Nuevos Soles fruto de nuestros ahorros. (…)”; es decir, nótese que en años
anteriores a esta salida, la demandada ya había varias salidas del país, conforme
antes se ha desarrollado, empero, retornaba al domicilio conyugal, entendemos
dado a la tolerancia, permisividad y/o acuerdo con el demandante; así mismo, a
folios 4 y 6 obran las constancias policiales en las que el propio demandante
señala, que su esposa con fecha veinte de mayo del dos mil dieciséis
salió de su domicilio llevándose consigo sus prendas personales; al igual que
anteriormente, la demandada ya había tenido salidas del país, empero, retornaba
domicilio conyugal; permitiendo ello colegir, que las salidas que ella venía
teniendo las hacía con conocimiento, tolerancia y/o acuerdo con el demandante;
empero, cada vez que lo hacía retornaba al país y a su domicilio conyugal, además
entre una salida y otra del país y retorno a su domicilio conyugal, no pasaban los
dos años, que exige la norma para la configuración de la causal de separación de
hecho, no olvidemos, que los dos años deben ser en forma ininterrumpida y no
discontinua. Por lo que, respecto a las salidas del país con fecha anterior al
veintisiete de mayo del dos mil seis, no procede la causal de divorcio por
separación de hecho invocado.
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574 Santiago – Santiago – Chile,
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conforme a las instrumentales de folios 8 y 253; por ende, es claro que la
intención de la demandada con su última salida del país, era ya no retornar a su
domicilio conyugal, razón por la cual, hasta la fecha no ha regresado al mismo, ni
menos ha variado su domicilio ante el RENIEC, denotando su permanencia por
más de cinco años en el mismo; por ende, estos documentos corroboran que las
partes conyugales no realizan vida en común con la demandada desde el veinte de
mayo del dos mil dieciséis; además, conforme se verifica de la copia de
DNI, a folios dos, el demandante, domicilia en Av. José A. Quiñones S/N INT-LT
-1-URB. J. Arias Dávila – San Ramón, mientras la demandada en García Reyes
N° 574- Santiago – República de Chile, expedido el primero de junio del dos mil
nueve, conforme al Certificado de Inscripción a folios 8, de ello se denota que las
partes procesales, viven en domicilios diferentes, no cohabitando ni realizando
vida en común.
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3.4.5.- Por lo tanto, se ha acreditado que ambas partes se encuentran separados y
no mantienen relación de convivencia marital desde la fecha indicada, realizando
sus vidas de forma independiente, esto es más de dos años, con lo cual se ha
acreditado el elemento temporal de la separación de hecho.
4.2. – Por otro lado, se debe tener presente que conforme al artículo 310 del CC,
son bienes sociales todos los no comprendidos en el artículo 302 del CC, así como
conforme al artículo 311 el mismo marco normativo, todos los bienes se presumen
sociales, salvo prueba en contrario.
4.3. – Así también, el actor ha manifestado que durante su relación conyugal no han
adquirido bienes inmuebles ni muebles, versión que no ha sido contradicha por la
emplazada; además, en autos no obra ningún medio probatorio que acredite la existencia
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de algún bien social, siendo ello así, sin objeto de pronunciamiento este extremo.
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QUINTO. - Respecto al punto controvertido: DETERMINAR SI
CORRESPONDE O NO FIJAR EL QUANTUM INDEMNIZATORIO A
FAVOR DEL CÓNYUGE PERJUDICADO, POR LOS POSIBLES DAÑOS
Y PERJUICIOS, INCLUIDOS EL DAÑO MORAL Y PERSONAL.
5.1. – Al respecto, se debe tenerse en cuenta, que todo decaimiento del vínculo
matrimonial implica perjuicio para ambos cónyuges, pues no lograron consolidar una
familia estable; sin embargo, en los procesos de divorcio por separación de hecho, los
juzgadores deben pronunciarse necesariamente, aun cuando no se haya solicitado, sobre
la existencia o no de un cónyuge que resulte más perjudicado de acuerdo a su
apreciación de los medios probatorios en los casos concretos, al que, de existir, se le
fijará una indemnización a cargo de la parte menos afectada, salvo que existan bienes
que estime puedan adjudicarse de modo que compense su mayor perjuicio.
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Al respecto es menester reproducir la parte pertinente (y resaltar los aspectos aplicables al presente caso concreto), del
Tercer Pleno Casatorio Civil publicado el 13 de mayo del dos mil once que contiene jurisprudencia vinculante: “…2. En los
procesos sobre divorcio -y de separació n de cuerpos- por la causal de separació n de hecho, el Juez tiene el deber de velar por
la estabilidad econó mica del có nyuge que resulte má s perjudicado por la separació n de hecho así como la de sus hijos, de
conformidad con lo dispuesto por el artículo 345-A del Có digo Civil. En consecuencia, a pedido de parte o de oficio señ alará
una indemnizació n por dañ os, el que incluye el dañ o a la persona, u ordenará la adjudicació n preferente de bienes de la
sociedad conyugal, independientemente de la pensió n de alimentos que pudiera corresponderle. El dañ o moral es
indemnizable y se halla comprendido en el dañ o a la persona. 3. Respecto a la indemnizació n por dañ os o la adjudicació n
preferente de bienes de la sociedad conyugal: 3.1. A pedido de parte, podrá formularse tal pretensió n en los actos
postulatorios, ya sea en la demanda como pretensió n accesoria o en la reconvenció n, segú n sea el caso, salvo renuncia
expresa del interesado. El pedido tambié n es procedente despué s de los actos postulatorios. 3.2. De oficio, el Juez de
primera instancia se pronunciará sobre estos puntos, siempre que la parte interesada haya alegado o expresado de alguna
forma hechos concretos referidos a los perjuicios resultantes de la separació n de hecho o del divorcio en sí. Aquellos hechos
pueden ser alegados o expresados incluso despué s de los actos postulatorios. En estas hipó tesis, el Juez concederá a la otra
parte la oportunidad razonable de pronunciarse sobre aquellos hechos y de ofrecer la prueba pertinente. Si ya se llevó a cabo
la audiencia de pruebas, los medios probatorios que se ofrezcan será n de actuació n inmediata. 3.3. En el estado
correspondiente del proceso, y de ser el caso, el Juez debe fijar como parte de los puntos controvertidos los extremos ya
mencionados. 3.4. En todo caso el Juez se pronunciará sobre la existencia de la condició n de có nyuge má s perjudicado de
una de las partes segú n se haya formulado -y probado- la pretensió n o la alegació n respectiva, o sobre la inexistencia de
aquella condició n, si no existiera elementos de convicció n necesarios para ello. 3.5. En el trámite señ alado, se garantizará el
derecho a la tutela jurisdiccional efectiva y el debido proceso, particularmente el derecho de defensa de las partes, el
principio de contradicció n y el derecho a la instancia plural. 4. Para una decisió n de oficio o a instancia de parte sobre la
indemnizació n o adjudicació n de bienes, del proceso debe verificarse y establecerse las pruebas, presunciones e indicios
que acrediten la condició n de có nyuge má s perjudicado a consecuencia de la separació n de hecho o del divorcio en sí. El
Juez apreciará , en el caso concreto, si se ha establecido algunas de las siguientes circunstancias: a) el grado de afectació n
emocional o psicoló gica; b) la tenencia y custodia de hecho de sus hijos menores de edad y la dedicació n al hogar; c) si dicho
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có nyuge tuvo que demandar alimentos para él y sus hijos menores de edad, ante el incumplimiento del có nyuge obligado; d)
si ha quedado en una manifiesta situació n econó mica desventajosa y perjudicial con relació n al otro có nyuge y a la
situació n que tenía durante el
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sentido, se tiene que la principal función o finalidad de la indemnización contemplada
en esta causal es de resarcir el daño que pudiera haber causado un cónyuge a otro por la
separación y a fin de poder cuantificarlo debe ser debidamente acreditado con
medios probatorios que causen convicción en el Juzgador, por lo menos, sobre la
existencia y el grado de lesividad del daño en la víctima.
matrimonio, entre otras circunstancia relevantes. 5. El Juez Superior integrará la resolució n impugnada de primera
instancia cuando se haya omitido pronunciamiento expreso sobre la existencia o inexistencia del có nyuge má s perjudicado,
siempre que la fundamentació n respectiva aparezca de alguna forma en la parte considerativa de la sentencia apelada, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 370° del Có digo Procesal Civil. 6. La indemnizació n o la adjudicació n de bienes
tiene la naturaleza de una obligació n legal, cuya finalidad es corregir un evidente desequilibrio econó mico e indemnizar el
dañ o a la persona, resultante de la separació n de hecho o del divorcio en sí; su fundamento no es la responsabilidad civil
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contractual o extracontractual sino la equidad y la solidaridad familiar.
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avanzada se encuentra enfermo del pulmón, por el que se está sometiendo a un
tratamiento médico muy costoso; además, de que asumió los alimentos de las hijas de la
demandada habida con otros compromisos.
5.6.- Para la determinación del cónyuge más perjudicado se debe tener en cuenta, al
cónyuge: a) Que no ha dado motivos para la separación de hecho; al caso de autos, si
bien como se dijo, la demandada se retiró del domicilio conyugal en forma definitiva el
veinte de mayo del dos mil dieciséis, empero, ya venía desde el dos de mayo del
dos mil dos saliendo del mismo y viajando al extranjero y en cada oportunidad, como se
dijo antes, retornaba al domicilio, entendemos por acuerdo, permisibilidad o tolerancia
del demandante, por lo que, sus constantes viajes no son prueba alguna de que la misma
sea la culpable de la separación. Es más, en autos, no existe prueba de que la demandada
sea quien ha dado motivos de la separación, ya que su solo viaje no son prueba de ello,
debido a que era normal en su vivencia realizar los mismos y que el demandante los
consintió y toleró, dado incluso, al cambio de domicilio real realizado por la demandada
ante el RENIEC; lo cual, entendemos era de conocimiento del demandante. Respecto
que a consecuencia de esa separación ha quedado en una manifiesta situación de
menoscabo y desventaja material con respecto al otro cónyuge y a la situación que tenía
durante la vigencia del matrimonio. - Al caso de autos, no obra prueba alguna que
acredite que el demandante haya quedado en una desventaja patrimonial dado a la
separación de hecho, al contrario, como lo dice en el Protocolo de Pericia Psicológica
Nro.002006-2016-PSC de folios 42 – 44, es una persona jubilada, es decir, que a la
fecha percibe una pensión de jubilación. Además, las partes conyugales no han adquirido
bienes. Finalmente, respecto al cónyuge que ha sufrido daño a su persona, incluso el
daño moral; se debe tener presente que conforme al Protocolo de Pericia Psicológica
Nro.002006-2016-PSC de folios 42 – 44, se concluye que el demandante presenta
reacción ansiosa situacional compatible a un conflicto con su pareja y tiene rasgos de
personalidad dependientes, compulsivos e inestables; siendo que efectivamente, en el
relato de hechos, el demandante refiere que la demandada ha venido viajando al
extranjero a la fuerza, o en sus palabras a lo “macho”, y en la tercera vez, cuando no
quería que viajara, ella lo ha correteado con un cuchillo y que le dijo que sea
aprovechado de él para zafar a sus hijos y que no hay persona que lo atienda dado a su
edad; de dicho informe se denota con facilidad que el demandante ha sufrido un daño
moral dado a la separación de las partes, con motivo del viaje al extranjero de la
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demandada sin retorno, de allí que tiene reacción ansiosa situacional compatible con el
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conflicto por su pareja, generada no sólo por la separación sino por la reacción de ésta
en las veces que el demandante se oponía a sus viajes, corroborado incluso con el acta
de conocimiento de fecha catorce de setiembre del dos ml quince, donde el hermano del
demandante, don AGRIPINO FIGUEROA VASQUEZ puso en conocimiento del
Gobernador de San Ramón, que la demandada ante el reclamo del demandante de sus
constantes viajes, ella se enfureció y agarró un cuchillo y quiso agredirle al demandante,
por lo que, corresponde estimar en parte la solicitud de indemnización por cónyuge
perjudicado, tanto más, si conforme se verifica de la copia del DNI del demandante, a la
fecha de la separación definitiva, contaba con 71 años de edad, es decir, era una persona
adulta mayor en situación de vulnerabilidad; y, como bien lo dice, en el protocolo antes
citado la intención de casarse con la demandada, era tener con quien vivir juntos, lo que
fue truncado dado al viaje sin retorno de la demandada. Finalmente, respecto a que la
demandada se ha aprovechado del demandante para mantener a sus hijas y que las hague
estudiar, en autos, no obra prueba alguna de ello, tanto más, si cuando se produjo la
separación definitiva de las partes, esto es: veinte de mayo del dos mil dieciséis,
las hijas de la demandada, conforme a las actas de nacimiento de folios 9 y 10, ya eran
mayores de edad.
5.7.– Por ende, dado a la conclusión antes arribada, se estima como monto de
indemnización en la suma de cuatro mil soles (S/. 4000. 00) que deberán ser pagados por
la demandada – cónyuge a favor del demandante, en ejecución de sentencia.
SEXTO.- Conforme señala los artículos 24°8 y 353°9 del Código Civil, el divorcio no
solo disuelve el vínculo matrimonial, sino que pone fin a la sociedad de gananciales que
existía entre las partes, y se pierde los derechos hereditarios respecto uno del otro
cónyuge y también tiene como efecto la prohibición de la demandante a llevar el
apellido del demandado.
La mujer tiene derecho a llevar el apellido del marido agregado al suyo y a conservarlo mientras no contraiga nuevo matrimonio. Cesa tal
derecho en caso de divorcio o nulidad de matrimonio.
D Artículo 353.- Pérdida de derechos hereditarios entre cónyuges divorciados. Los cónyuges divorciados no tienen derecho a heredar entre sí.
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7.1.- Al caso de autos, al haberse estimado la pretensión principal, el divorcio por la
causal de Separación de hecho por más de dos años, carece de objeto emitir
pronunciamiento sobre esta pretensión.
III. DECISIÓN:
Por los considerandos expuestos al amparo del artículo 12° de la Ley Orgánica
del Poder Judicial, con las facultades conferidas por nuestra Constitución Política del
Perú y Administrando Justicia a nombre de la Nación:
SE RESUELVE:
PRIMERO.- DECLARAR FUNDADA EN PARTE la demanda instada por
TEOFILO FIGUEROA VASQUEZ contra AYDEE CLELIA
HURTADO SANTIAGO DE FIGUEROA y el Representante del
Ministerio Público, pretendiendo específicamente el DIVORCIO POR
LA CAUSAL DE SEPARACIÓN DE HECHO POR UN
PERIODO ININTERRUMPIDO DE DOS AÑOS, en calidad de
pretensión principal; en consecuencia: DECLARO DISUELTO el
matrimonio civil celebrado por los justiciables con fecha cuatro de marzo
del dos mil dos, ante el Registro Civil de la Municipalidad Distrital de
San Ramón de la Provincia de Chanchamayo, Región Junín.
30
ORDENO que la demandada AYDEE CLELIA HURTADO
SANTIAGO cumpla con pagar la suma de cuatro mil soles (S/. 4000.
00) por concepto de indemnización por daño moral a favor de
TEOFILO FIGUEROA VASQUEZ, dentro del plazo de tres días, de
alcanzar firmeza la presente, bajo apercibimiento de dar inicio a la
ejecución forzada, en caso de incumplimiento.
CUARTO. – DECLARO que las partes procesales no podrán heredar entre sí. Así
como declaro el CESE del derecho de la demandada AYDEE CLELIA
HURTADO SANTIAGO DE FIGUEROA de llevar el apellido del
demandante.
SEXTO. – Sin costas ni costos procesales por haber motivos suficientes y razonables
para litigar.
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