Sermones Unidad 1 Expositivos EBPLV Primavera 2021

o
SERMONES EXPOSITIVOS
CONECTADOS A LAS LECCIONES
Unidad 1:
Fundamentos
del cristianismo
Unidad 2:
Cómo hablar
de Jesús
ADULTOS
Serie de sermones: Fundamentos del cristianismo
Para usar con: La naturaleza de Dios
Posible título del sermón: Tres personas, un Dios
Texto: Juan 14:8-26
Conexión con el tema de la unidad: Para complementar el estudio en grupos

pequeños “Fundamentos del cristianismo”, este sermón explora la naturaleza de Dios.
Cuando comparamos las religiones del mundo, hay una amplia variedad de
pensamientos sobre un ser divino o supremo. El Dios de la Biblia es único entre todos
los demás dioses. Las Escrituras explican claramente que Dios se ha revelado a
nosotros como Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Introducción: hoy en día, nuestros automóviles, computadoras, teléfonos inteligentes

e incluso nuestros televisores inteligentes OLED o QLE cuentan con tecnología que la
mayoría de nosotros ni siquiera podemos comenzar a comprender. Simplemente
sabemos que funcionan y trabajan para nosotros. Puede que no comprendamos
completamente cómo funcionan todas estas cosas, pero eso no nos impide aceptar la
realidad de cómo funcionan.
De manera similar, los cristianos han luchado por comprender la doctrina de la Trinidad
durante miles de años. Pero, así como usamos la tecnología actual sin comprenderla
completamente, podemos abrazar y confiar en la verdad de que Dios es uno en
esencia, pero existe en tres Personas distintas. Pero, no equiparemos abrazar la
verdad sobre Dios con simplemente presionar un botón en el control remoto de un
televisor.
La naturaleza de Dios va más allá de la capacidad humana de comprender, aunque

podemos captar algunos aspectos de quién es Dios y cómo se revela a nosotros. Ha
habido intentos de demostrar la naturaleza trina de Dios, como usar un huevo o tres
representaciones de moléculas de agua, pero todas estas analogías no llegan a la
gloriosa realidad de la naturaleza de Dios.
La palabra Trinidad no se encuentra en las Escrituras. Sin embargo, varios pasajes de

las Escrituras hacen referencia a la unidad de Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu
Santo. Hay unidad en las tres Personas de la Trinidad. En Juan 14,
1. Conocer a Jesús, el Hijo de Dios, es conocer al Padre (vv. 8-15)

Los discípulos conocían a Jesús, pero querían conocer a Dios Padre. Jesús los
animó a comprender que al conocerlo a Él también conocían al Padre ya que el
Hijo vino del Padre. La raíz de la petición del discípulo parece provenir del deseo
de agradar a Dios Padre. Ese es un noble deseo para todo el pueblo de Dios.
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Las cosas que aprendemos acerca de Jesús y las cosas que lo vemos hacer en
los evangelios reflejan la naturaleza misma de Dios. Al creer en Jesús y
obedecer sus enseñanzas, agradamos al Padre. Jesús es el reflejo y la
representación exacta del Padre (Colosenses 1:15).
2. Cuando Jesús, el Hijo de Dios, está en tu vida, el Espíritu Santo está en tu

vida (vv. 16-21)
Jesús prometió a sus discípulos, y a nosotros, que no los abandonaría ni los
dejaría huérfanos. Esta conversación tuvo lugar durante la Última Cena y
después de que Jesús hubo lavado los pies de los discípulos. Había aprensión
sobre lo que iba a suceder ya que Jesús había sido muy claro acerca de que su
muerte se acercaba. Ciertamente, los discípulos temían estar completamente
solos en un mundo que debían haber sabido les sería hostil.
El Espíritu Santo es nuestro Consejero y nunca nos dejará. Si bien los discípulos
disfrutaron de la presencia física de Jesucristo, el Espíritu Santo de Dios con
nosotros nos permite compartir el mismo entendimiento de la naturaleza de Dios
y la conexión con Él. Si bien el mundo no puede entender lo que significa tener
la presencia del Espíritu Santo, los creyentes en Cristo sí pueden.
3. Dios el Padre envía al Espíritu Santo para continuar la obra de Jesús, el Hijo
de Dios (vv. 22-26).
El versículo 26 identifica a las tres Personas de la Trinidad y explica que el
Padre enviará el Espíritu Santo a todos los que expresen fe en Jesús. El papel
del Espíritu Santo es ser nuestro consejero, nuestro maestro, nuestro guía y
continuar la obra de Jesús. El versículo 26 dice que el Espíritu Santo nos
recordará todo lo que enseñó Jesús.
El papel del Espíritu Santo en la vida de los creyentes hoy es el mismo que para
los discípulos. El Espíritu Santo nos ayuda a comprender las cosas de Dios, las
cosas que leemos en las Escrituras y las verdades bíblicas que escuchamos en
los mensajes.
Conclusión: Si bien algunas personas tratan de hacer una explicación de la naturaleza

trina de Dios en un complicado ejercicio académico, la verdad de este pasaje es que
Dios desea una relación personal con nosotros, Su creación. Así como los discípulos
disfrutaron de una relación personal con Jesús, Dios ha provisto una manera para que
todos lo conozcamos a Él, el Padre, personalmente a través de una relación salvadora
a través de la fe en Jesús y experimentar el prometido Espíritu Santo que mora en
nosotros.
Biografía del autor: Rick Prall es un especialista principal en planes de estudios con
Ramsey Solutions y es un ministro ordenado. Ha servido en iglesias en California,
Oklahoma, Texas y Tennessee y ha escrito material de estudios bíblicos durante más
de 30 años. Rick ha estado casado con Helene por 37 años y tienen dos hijos adultos
casados y dos maravillosas nietas. Rick y Helene sienten pasión por las misiones
internacionales y han servido juntos en muchos países; son miembros de la Iglesia
Bautista de Gladeville.
Para usar con: El propósito de la humanidad
Posible título del sermón: ¿Cuál es mi propósito?
Texto: Génesis 1:1-5, 26-31

pequeños “Fundamentos del cristianismo”, este sermón utiliza el pasaje de las
Escrituras de la sesión para examinar el propósito de la humanidad. Si bien estamos
tentados a pensar que la vida se trata de nosotros, en realidad, fuimos creados para
servir y honrar a nuestro Creador.
Introducción: la cultura nos hace creer que todo se trata de "mí". El mercadeo de
productos, las canciones, las películas y los programas parecen reflejar la idea de que
el individuo es el centro del universo. Además, nos ocupamos de una multitud de
responsabilidades personales, incluida la familia, el trabajo, la comunidad y la iglesia.
Toda responsabilidad incluye expectativas, expresas o implícitas, sobre cómo debemos
cumplir con esas responsabilidades.
Cuando Dios creó al primer hombre y la primera mujer, les dio responsabilidades
específicas en la vida y las cosas que debían hacer. Sin embargo, la responsabilidad
más importante y primordial que Dios le dio a los humanos fue ser sus representantes
sobre toda la creación. El propósito básico de la humanidad es servir a Dios y honrarlo.
1. Dios creó todo. (v. 1-5)

La mayoría de la gente está familiarizada con la historia de la creación. Dios hizo
que todo existiera de la nada; ex nihilo en latín significa que nada existía antes
de que Dios lo hiciera existir. Cuando los humanos creamos algo, necesitamos
usar algo para poder crear algo más; Dios no.
El nombre de Dios en el versículo 1, en hebreo, es Elohim. Este es uno de los

nombres más comunes de Dios que se usan en las Escrituras. Transmite fuerza
y poder, en referencia a la omnipotencia de Dios. Elohim a menudo se abrevia a
El para formar nombres compuestos para Dios, como El Shaddai, que significa
Dios (El) Todopoderoso.
En los seis días de la creación, Dios creó los planetas, las estrellas, el sol y la
luna, y nuestra tierra. Él creó todas las masas de agua y tierra, los animales, las
plantas, los insectos, los pájaros, los peces y la gente, todo. Y todo lo que Dios
creó lo declaró bueno. Dios estaba complacido con todo lo que creó.
2. Dios creó al hombre y la mujer. (v.26-27)

El versículo 26 hace referencia a las tres Personas del Dios trino en "Hagamos
al hombre". Dios creó al hombre y a la mujer a su imagen. Eso significa que las
personas son creadas con cualidades y características inherentes que reflejan a
Dios, incluyendo el amor, la compasión, la misericordia, la bondad, la gentileza,
etc. Sin embargo, no todas las características de la naturaleza de Dios se
reflejan en las personas. Por ejemplo, las personas no son omniscientes (lo
saben todo), omnipotentes (todopoderosas) u omnipresentes (presentes en
todas partes al mismo tiempo), ni son sin pecado ni eternas.
Dios creó hombres y mujeres distintos entre sí, aunque cada uno fue creado a
imagen de Dios. El propósito de Dios al crear al hombre y la mujer fue asegurar
que la reproducción pudiera tener lugar. Un aspecto de ser creado a la imagen
de Dios incluye la idea de tener una relación con Él. Honramos a Dios cuando
mostramos Su imagen al mundo.
3. Dios comisionó a las personas a cuidar de Su creación. (v. 28-31)

Dios le dio al hombre y a la mujer la responsabilidad de cuidar de Su creación,
de toda ella. Toda la vida vegetal, toda la vida animal y toda la vida de las
personas. Cumplimos nuestro propósito cuando servimos a Dios cuidando de Su
creación y reflejando Su cuidado por ella. También debemos disfrutar de Su
creación.
Cuando Dios miró todo lo que había creado y todo lo que puso en marcha, lo
declaró muy bueno. Ese fue el final del sexto día.
Conclusión: Desde el relato de la creación de Génesis 1, a cada persona se le han

dado las mismas responsabilidades y función, ya sea que lo reconozcan o no. Dios nos
creó para servirle y honrarle en la forma en que asumimos la responsabilidad de estar
a cargo de Su creación. Tu propósito, hoy, es el mismo propósito que tuvieron el primer
hombre y la primera mujer: adorar, servir y honrar al Dios que te creó.
Para usar con: La naturaleza del pecado
Posible título del sermón: El problema del pecado
Texto: Isaías 59:1-13

Escrituras de la sesión para discutir la naturaleza del pecado, un problema que todas
las personas comparten. Todos somos pecadores y por nuestra cuenta, no podemos
hacer nada con respecto a nuestra condición pecaminosa.
Introducción: Cuando se les realizó una encuesta, el 83% de las personas cree que
las personas son fundamentalmente buenas, que ellas, como individuos, son buenas.
Sin embargo, en otra encuesta, cuando se les preguntó cómo calificarían los valores
morales generales del país, el 38% dijo "solo regular" y el 40% dijo "pobre". Entonces,
hay un poco de desconexión.
Si bien podemos creer que somos buenos en nosotros mismos y por nosotros mismos,
la realidad es que cuando se nos deja a nuestros propios deseos y pensamientos,
estamos muy lejos de ser buenos. A veces, lo suavizamos y decimos que somos
"bastante buenos". Pero eso suele decirse cuando nos comparamos con los demás.
"Puede que no sea excelente, pero definitivamente lo estoy haciendo mejor que ..."
Pero aquí está el problema, la Biblia no permite ese tipo de pensamiento. Dios mismo
es el estándar por el cual se debe juzgar nuestro comportamiento. Y nos quedamos
dolorosamente cortos en la medida de la santidad y perfección de Dios. Eso nos deja
con un problema de pecado del que no podemos hacer nada por nuestra cuenta.
1. Nuestro pecado nos separa de Dios (v. 1-5)

La condición humana, aparte de Dios, es patética. Estos versículos señalan la
inmensidad de nuestras acciones pecaminosas. Solo una mirada a los titulares
diarios revela la verdad de estos versículos. Asesinato, robo, mentira, traición,
asalto, violación... y la lista continúa todos los días. Somos gente pecadora,
atrapada con una naturaleza pecaminosa. Pero eso no es lo que Dios tenía en
mente cuando creó la humanidad. Él nos creó para caminar sin mancha ante Él,
pero la humanidad, voluntariamente, cedió a sus deseos pecaminosos.
El versículo 2 establece muy claramente el resultado de nuestra condición

pecaminosa: estamos separados de Dios. Es como si hubiera un gran abismo
entre donde estamos parados y donde está Dios. Absolutamente, a
consecuencia de nuestro pecado, no hay manera alguna de estar en la
presencia de Dios. Dios es santo y no puede permitir que el pecado entre en Su
presencia.
2. Nuestro pecado no puede ser encubierto (v. 6-8)
Cuando reconocemos nuestra condición pecaminosa y nos damos cuenta de
que Dios no puede permitir que el pecado entre en Su presencia, tratamos de
racionalizar nuestras acciones. Tratamos de encubrir nuestro pecado, enterrar
nuestro pecado, haciendo un montón de buenas obras. Nuestro pensamiento es
que, si hacemos suficientes buenas obras, ofrecemos suficientes horas de
voluntariado en una organización sin fines de lucro o donamos suficiente dinero
a organizaciones benéficas, entonces todo lo bueno que hacemos superará todo
lo malo.
El problema es que Dios no ve las cosas de esa manera. Debido a nuestra

condición pecaminosa, cualquier obra que hagamos es, por naturaleza, obra
pecaminosa. Y Dios puede ver nuestros intentos de encubrir nuestro pecado por
lo que son. Él ve y sabe que nuestros corazones todavía son pecadores y están
inclinados hacia la actividad pecaminosa.
3. Nuestro pecado necesita un Salvador (v. 9-13)

Cuando leemos estos versículos, nos quedamos con un sentimiento de
completa desesperanza. Estos versículos describen la desesperación que
proviene de darnos cuenta de nuestro pecado. Esa comprensión nos lleva a
gemir en voz alta y a lamentarnos por nuestra condición pecaminosa.
Los versículos 12 y 13 identifican cómo nuestro pecado se ha multiplicado ante

Dios. Él lo ve. Lo sabemos. Sin la intervención de Dios, estamos completamente
separados de Dios y sin esperanza en nuestra incapacidad de resolver el
problema del pecado por nuestra cuenta.
Conclusión: La conclusión es la siguiente: somos pecadores y, por nuestra cuenta, no

podemos hacer nada al respecto. Suena como una mala noticia, y lo es. Pero mire
hacia atrás en el versículo 1. El Señor no es tan débil como para no poder salvarnos; Él
no es tan sordo como para no poder escuchar nuestro grito de arrepentimiento. La
buena noticia es que Dios siempre está listo para dar la bienvenida y perdonar al
pecador que desea sinceramente cambiar su camino. La redención es posible, pero no
hay nada que podamos hacer para ganarla por nuestra cuenta.
[Fuentes para la introducción: https://www.inc.com/wanda-thibodeaux/5-statistics-that-

will-restore-your-faith-in-humanity-and-office.html
https://news.gallup.com/poll/1681/moral-issues.aspx]
Para usar con: La muerte de Jesús
Posible título del sermón: El gran perdonador
Texto: Juan 19:8-24, 28-30

Escrituras de la sesión para reconocer que el perdón de los pecados solo es posible
cuando alguien pone su fe en Jesucristo, quien murió por nuestro pecado.
Introducción: Amor. Esa es una palabra que se usa mucho y se usa para muchas
cosas que no son realmente amor. "Amo mi carro." "Me encanta el helado." "Me
encanta <inserte mi equipo de fútbol favorito>". "Amo mi trabajo." Y, "Amo a mi
cónyuge". De todos esos, solo el último está realmente relacionado con el amor, todos
los demás son solo medidas de gustos extremos.
Si bien es cierto que el mensaje del pecado y la separación de Dios se vio en el pasaje
de Isaías 59, aun así, hay buenas noticias. Dios nos ama, te ama a ti. A pesar de que
la humanidad ha pecado y se ha rebelado contra Dios, Él todavía nos ama. Nos amó
tanto que hizo lo que nunca podríamos hacer por nosotros mismos. Envió a Su único
Hijo, Jesucristo, para que llevara el castigo que merecíamos por nuestro pecado. La
obra de Jesús proporciona una manera para que todos nosotros, incluyéndote a ti ,
seamos perdonados y experimentemos la salvación.
1. La muerte de Jesús estuvo bajo el control de Dios. (v. 8-16a)

Si bien fue Pilato quien tuvo a Jesús bajo custodia, no se equivoquen, era Dios
quien estaba en control. Nada de esto sorprendió a Dios. Para que se pagara la
pena por el pecado, Jesús tuvo que ser arrestado y juzgado. Todo esto estaba
en el plan de Dios. El versículo 11 refleja la comprensión de Jesús de que lo que
le estaba sucediendo no se debía a la autoridad de Pilato, sino a la autoridad de
Dios.
Desde nuestro punto de vista en la historia, comprendemos las ramificaciones

espirituales del arresto y crucifixión de Jesús. Sin embargo, podemos luchar con
darnos cuenta de que Dios tenía el control de los eventos que llevaron a la
muerte de Jesús. Gálatas 4:4-5 nos recuerda que Dios, en Su propio tiempo,
provocó estos eventos que conducirían a la redención de la humanidad.
2. La muerte de Jesús fue por nosotros. (v. 16b-24)

Jesús soportó la muerte terrible por crucifixión para pagar el castigo de nuestro
pecado. Jesús estaba completamente libre de pecado y no merecía morir. Pero
Su muerte fue predicha en las Escrituras. Los eventos que tuvieron lugar fueron
todos cumplimiento de las profecías del Antiguo Testamento sobre el Salvador
venidero, el Mesías.
La crucifixión fue la muerte más cruel que los romanos pudieron idear.
Reservaban la crucifixión para los crímenes más graves. Los romanos no
inventaron la crucifixión. Originalmente fue utilizada por los asirios y babilonios.
Los romanos, sin embargo, refinaron el castigo. Su objetivo era infligir tanto
dolor y pérdida de sangre como fuera posible antes de la crucifixión, pero solo
hasta las puertas de la muerte. Luego dejaban a la víctima colgada de la cruz
con un dolor terrible hasta que ya no podía respirar. Ten la seguridad de este
hecho: Jesús soportó el dolor de la cruz por ti y por mí.
3. La muerte de Jesús completó la obra de salvación. (v. 28-30)

Jesús soportó el dolor de la cruz y la agonía de la crucifixión hasta que se
cumplió toda la Escritura relacionada con el plan de Dios para la salvación. El
versículo 28 deja en claro que Jesús todavía entendía todo lo que estaba
sucediendo. Sabía que la Escritura se cumplía.
Cuando Jesús dijo: "Consumado es", quiso decir que la obra necesaria para la
salvación, el plan redentor de Dios, se completó. Él había hecho todo lo que
tenía que hacer para brindarnos el regalo de la salvación a ti y a mí. Estar
completo significa que no había nada más que agregar a lo que Él había hecho.
Sin embargo, todavía tratamos de ganarnos la salvación por nuestras obras, ¿no
es así? ¿Qué podríamos hacer que sea más grande que lo que Jesús ya ha
hecho por nosotros? La pena del pecado es la muerte. O puedes pagar la pena
del pecado o puedes aceptar el precio que Jesús pagó por ti con Su muerte.
Conclusión: La crucifixión de Jesús, aunque llevada a cabo por soldados romanos

bajo la autoridad de Pilato, fue el plan de Dios. Dios estaba en control de todos los
eventos de la muerte de Jesús. La muerte de Jesús fue para toda la humanidad,
aunque fue hace más de 2000 años. Y la muerte de Jesús completó, en su
totalidad, la obra de salvación. No hay nada que debas hacer, o puedas hacer, para
ganar su salvación. Jesús pagó el precio por ti. El perdón de tus pecados es posible
porque Jesús murió por tus pecados.
Para usar con: La resurrección de Jesús
Posible título del sermón: Resucitado a una nueva vida
Escritura: Juan 20:3-29

pequeños “Fundamentos del cristianismo”, este sermón explora los versículos de Juan
20 para resaltar la importancia de la resurrección de Jesucristo. Debido a que Jesús
resucitó de entre los muertos, nosotros también podemos resucitar a una nueva vida.
Introducción: Existe una gran diferencia emocional cuando asistes, o diriges, un

funeral de una persona que era creyente en Jesucristo y una que no lo era. Con el
funeral del creyente, hay dolor, pero también hay un espíritu de paz en la habitación
porque sabemos que el amado está en el cielo con Jesús. Con la persona que no es
creyente, un funeral a menudo va acompañado de un nivel de dolor más profundo y
doloroso y hay muchas preguntas sobre por qué y la sala se llena de una
desesperación vacía. ¿Por qué la diferencia entre los dos funerales? Porque el
creyente experimentó la realidad de que la vida nueva es posible cuando confiamos en
Cristo resucitado.
1. Nueva vida es posible: la tumba vacía es una prueba (v. 3-10)

Cuando Pedro y Juan llegaron a la tumba donde Jesús había sido enterrado, se
sorprendieron al encontrar la tumba vacía. Cuando llegaron, encontraron las
telas de lino para el entierro cuidadosamente dobladas y colocadas donde había
estado el cuerpo de Jesús. La tela de entierro reportada, conocida como la
Sábana Santa de Turín, es una tela de lino para envolver de 14 pies de largo. La
tela tiene la imagen de un hombre que parece haber sido crucificado. Una tela
como esta habría envuelto completamente el cuerpo de Jesús después de que
Su cuerpo hubiera sido preparado para el entierro después de la crucifixión.
Dios el Padre resucitó a Jesús, Su Hijo, de entre los muertos. La muerte de

Jesús en la cruz fue el sacrificio aceptable a Dios Padre por los pecados de la
humanidad. La tumba vacía es prueba de que la nueva vida en Jesús está
disponible para todos.
[fuentes: https://www.shroud.com/ y https://www.history.com/news/shroud-turin-

facts]
2. Nueva vida es posible: Jesús resucitado es la prueba (v. 11-23)

Después de Su resurrección, Jesús se apareció por primera vez a María
Magdalena en el Huerto de Getsemaní. Abrumada del dolor por la muerte de su
amigo, quien ella creía que era el Mesías, se paró ante la tumba angustiada y
lloró abiertamente. Cuando Jesús pronunció su nombre, supo que el hombre era
Jesús. ¡Ha resucitado! ¡Él está vivo! María conocía tan bien a Jesús que no se
dejó engañar. Inmediatamente fue y le dijo al resto de los discípulos que Jesús
estaba vivo.
De regreso al aposento alto, después de haber oído a María, se reunieron los

discípulos. Estaban detrás de puertas cerradas porque temían un complot de los
romanos para engañar a la gente y mentir sobre la resurrección de Jesús. A
través de puertas cerradas, Jesús apareció en medio de ellos. Comió con ellos y
habló con ellos. Todos sabían que era Jesús que había vuelto a la vida.
Nuevamente, habían pasado tanto tiempo con Jesús durante un período de tres
años que no se equivocaron. El Jesús resucitado es una prueba de que la nueva
vida está disponible para todos.
3. Nueva vida es posible: los creyentes son una prueba viviente (v. 24-29)
Tomás, por alguna razón, no estaba allí la noche en que Jesús se apareció a los
discípulos. Durante toda la semana, Tomás ciertamente escuchó la historia de
cómo Jesús se había aparecido a los otros diez discípulos. Había visto cómo su
semblante había cambiado de la derrota y la desesperación por la muerte de
Jesús a estar alegre y exuberante después de verlo resucitar. Tomás
ciertamente se sintió excluido.
Cuando Jesús se apareció a Tomás, Jesús le mostró las heridas y le ofreció a

Tomás que las tocara. Fue entonces cuando Tomás comprendió la realidad de
lo que experimentó: Jesús estaba vivo. Tomás creyó y fue bendecido con nueva
vida en Jesús. Pero Jesús le dijo a Tomás que aquellos que creyeran en Él sin
verlo —todas las personas de hoy— serían bendecidas con esa misma nueva
vida. Cuando ponemos nuestra fe en el Cristo viviente, somos bendecidos con el
perdón de nuestros pecados y recibimos el regalo de la vida abundante y eterna.
Conclusión: En Juan 11:25-26, Jesús les dijo estas palabras a los discípulos: “Yo soy
la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá. Todo el que vive y
cree en mí no morirá jamás”. Estos versos son algunos de los más utilizados en los
funerales. Las palabras están destinadas a brindar consuelo y esperanza a la familia en
duelo. Pero la verdad de estos versículos es poderosa y hablan de la realidad del
Señor viviente de la vida. La resurrección de Jesús es un hecho y todos los que ponen
su fe en Él tienen la promesa de la vida eterna.
La realidad de estos versículos también puede ser una realidad en tu vida. En Juan
20:29, Jesús dijo que todo el que cree en Él es bienaventurado. Somos bendecidos con
una nueva vida. Esa nueva vida incluye el perdón de los pecados y la promesa de la
vida eterna en el cielo con Jesús cuando muramos. Tu funeral no tiene que estar lleno
de agonía y desesperación; tu funeral puede ser de paz y esperanza debido a lo que
Jesús ha hecho por ti. Esa nueva vida es posible cuando pones tu confianza en Cristo
resucitado. ¿Harás eso hoy?
Para ser usado con: La Obra del Espíritu Santo
Posible título del sermón: Centrado en Jesús
Texto: Juan 15:26-27; 16:7-15

pequeños “Fundamentos del cristianismo”, use este sermón para reforzar el pasaje de
las Escrituras de la sesión para explicar la obra del Espíritu Santo en la vida de un
creyente. Este sermón también reconocerá que el Espíritu Santo magnifica la obra de
Jesús.
Introducción: Una búsqueda rápida en Amazon de libros de bricolaje (hágalo-usted-

mismo) arroja más de 20,000 opciones, incluidos títulos como "100 proyectos fáciles de
fin de semana que cualquiera puede hacer", "Muebles de jardín y patio", "Cultivar su
propio jardín de té" y "El libro de fabricación de jabón natural para principiantes".
Básicamente, cualquier cosa que desee aprender a hacer, hay un libro o un video en
línea que lo ayudará a hacerlo. Eso es genial.
Si bien el bricolaje es muy popular, no hay guías de bricolaje para seguir a Jesús.
Bueno, técnicamente la hay, se llama La Biblia. Pero el punto básico del bricolaje es
"dame 5 o 7 pasos simples y haré algo yo mismo". La vida cristiana, por otro lado,
requiere un compromiso continuo de seguir a Cristo. La buena noticia es que Dios
proporciona su Espíritu Santo para ayudarnos a guiarnos.
1. El Espíritu Santo nos da poder. (15:26-27)

Se ha dicho que Dios nunca te pedirá que hagas algo para lo que no te ha
capacitado y equipado. Lo hace mediante la obra del Espíritu Santo. Darle poder
a alguien puede significar otorgarle la autoridad o el poder para hacer algo.
También puede significar hacer que alguien sea más fuerte y seguro en la tarea
a la que está llamado.
Una forma específica en que el Espíritu Santo da poder a cada creyente es en el

área de ser un testigo de Jesús. El Espíritu Santo nos da poder para proclamar a
Jesús a los demás. En Hechos 1:8, Jesús dijo: "Pero recibirán poder cuando el
Espíritu Santo haya venido sobre ustedes, y me serán mis testigos en Jerusalén,
en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra".
2. El Espíritu Santo nos convence. (16:7-11)

Además de darnos poder, el Espíritu Santo convence a cada creyente de
pecado. Si bien podemos racionalizar las cosas y decir que, naturalmente, nos
sentimos mal cuando hacemos algo mal, ese no es el caso. Basta con ver la
desobediencia voluntaria de un niño pequeño. Rara vez se sentirán mal hasta
que sean reprendidos.
El Espíritu Santo nos convence de nuestro pecado. Esto significa que Él nos
hace conscientes de nuestros pensamientos y acciones pecaminosas. Los
sentimientos de remordimiento, culpa y vergüenza a menudo acompañan esta
convicción. ¿Cuál es el punto de esto? El punto es regresarnos a una relación
correcta con Dios. Cuando sentimos vergüenza y culpa, somos inducidos a
confesar nuestro pecado y pedirle perdón a Dios. Es como si el Espíritu Santo
encendiera una luz para revelar la oscuridad de nuestros pensamientos y
acciones pecaminosas.
3. El Espíritu Santo glorifica a Jesús. (16:12-15)

El Espíritu Santo se llama Espíritu de verdad. ¿Por qué? La naturaleza de Dios
es que no miente; Él siempre dice la verdad. Dado que el Espíritu Santo refleja
la naturaleza de Dios, Él también siempre dirá la verdad. Entonces, cuando el
Espíritu Santo nos da poder, nos da poder a través de la verdad de la Palabra
de Dios y la verdad de lo que Dios piensa de nosotros. Cuando el Espíritu Santo
nos convence de pecado, Él revela la verdad de nuestra condición pecaminosa
para que podamos encontrar una relación restaurada con Dios.
El Espíritu de verdad también glorifica a Jesús al revelar en la vida de un

creyente la verdad de todo lo que Jesús enseñó. La verdad misma se encuentra
en todas las enseñanzas de Jesús y el Espíritu Santo recuerda y enseña a los
creyentes esas cosas. El Espíritu Santo magnifica o amplía nuestra perspectiva
de Jesús.
También es interesante ver que se hace referencia a las tres personas de la

Trinidad en estos cuatro versículos. Jesús está hablando en estos versículos,
habla sobre la venida del Espíritu Santo y enseñando las cosas que Jesús
enseñó, y hace referencia a que todo lo que Dios el Padre tiene es suyo.
Conclusión: la mayoría de las personas enfrentan la vida confiando en su propia

inteligencia, habilidades y recursos para navegar su vida diaria. Pero Dios nunca tuvo
la intención de que viviéramos de esta manera. Debemos vivir nuestras vidas en una
relación diaria con Él, y Él nos ha dado el Espíritu Santo que mora en nosotros para
ayudarnos a vivir como Él quiere. El Espíritu Santo magnifica la obra de Jesús en y a
través de un creyente.
Para usar con: El regreso de Jesús
Posible título del sermón: El regreso del rey
Escritura: Mateo 24:3-14, 29-44

pequeños “Fundamentos del cristianismo”, este sermón apoya el pasaje de las
Escrituras de la sesión para explorar el regreso de Jesús y cómo Él establecerá Su
reino eterno.
Introducción: ¿No te encanta el final feliz en una película? Ves que el actor principal y
la actriz se encuentran, se enamoran y luego experimentan algún problema dramático
que deben superar o un enemigo que deben conquistar. Probablemente tengas tu
película favorita como ejemplo de esto. Déjame escuchar algunos de tus favoritos.
Nos encantan los finales felices y nos encanta ver a los personajes principales triunfar.
Para los creyentes en Jesús, la Biblia describe claramente este tipo de final feliz para
aquellos que siguen a Jesús. Los personajes principales salen ganando, se supera el
problema del mal y se derrota al enemigo. Esto es lo que sucederá cuando Jesús
regrese.
Jesús regresará algún día, pero durante tantos años, los cristianos han debatido
detalles específicos del regreso de Cristo. Hay todo tipo de visiones milenarias sobre
cuándo y cómo Cristo regresará. Pero veamos lo que Jesús dijo que sería verdad.
1. Veremos señales. (v. 3-14)

En el versículo 3, los discípulos le pidieron a Jesús que les explicara cuál sería
una señal de su regreso. Jesús pasó bastante tiempo hablando de las señales
que precederían a su regreso. Incluyeron lo siguiente:
Los engañadores y los falsos maestros desviarán a la gente con enseñanzas

completamente contrarias al evangelio o mensajes que son muy parecidos, pero
no son el evangelio. También habrá guerras y conflictos entre las naciones.
Seguimos viendo más y más conflictos internacionales a medida que se acerca
el momento del regreso de Cristo.
Habrá terremotos y otros desastres naturales cuando el Señor muestre Su

soberanía y poder sobre las fuerzas de la naturaleza. El versículo 12 describe el
aumento de la iniquidad que, a su vez, hace que las personas dejen de
demostrarse amor entre sí. En este último año, hemos visto mucho de esto.
2. Veremos a Jesús. (v.29-31)
Además de los increíbles signos astronómicos, incluido el oscurecimiento de la
luna y el sol, Jesús identificó el signo del Hijo del Hombre. El regreso visible de
Jesús sería visto por todos, según el versículo 30. Todas las personas en la
tierra verán el regreso de Jesús. ¿Cómo es eso posible? Honestamente, es
difícil de decir, pero Dios puede hacerlo. Con el auge de las redes sociales, los
eventos importantes se desarrollan en nuestros teléfonos en tiempo real en otras
ubicaciones del país y del mundo. Aun así, no todos vieron estos eventos.
Venga como venga, Jesús vendrá con poder y gloria. No habrá duda de quién
es Él. Jesús regresará visiblemente a la tierra.
3. Necesitamos estar preparados. (v. 32-44)

En el versículo 32, Jesús contó una breve parábola relacionada a observar las
señales y estar preparado. Así como sabes que ha llegado el verano mirando los
árboles, puedes buscar las señales del regreso de Jesús y no sorprenderte
cuando suceda.
A partir del versículo 36, Jesús dio una serie de escenarios, todos con la misma
enseñanza: debemos estar preparados para el regreso de Jesús. En el primer
escenario, en lugar de estar preparados para el diluvio, todos (excepto la familia
de Noé) estaban haciendo lo suyo y fueron sorprendidos y arrastrados por el
diluvio. Jesús dijo que así será cuando Él venga. Aunque habrá advertencia,
muchos ignorarán las señales.
En los versículos 40-41, la imagen es la de dos hombres trabajando en el campo

o dos mujeres moliendo en el molino. Las personas que no conocen a Jesús
como Salvador y Señor se sorprenderán cuando los seguidores de Cristo de
repente sean llevados para estar con Él. Los que quedan son los que no
estaban preparados.
La ilustración final es para aclarar el punto de que si supiéramos que algo va a

suceder, como que alguien entre a nuestra casa a robar, nos aseguraríamos de
estar preparados y listos. Pero no sabemos el día exacto en que Jesús
regresará. Pero el punto es estar listo en cualquier momento.
Conclusión: Si bien los cristianos pueden debatir los detalles relacionados con el
regreso de Cristo, podemos tener una gran esperanza en la promesa del regreso de
Jesús. Estar preparados, para aquellos de nosotros que seguimos a Jesús, significa
que debemos permanecer fieles a Dios, todos los días. ¿Por qué? Porque Jesús
regresará para establecer Su reino eterno.

Sermones Unidad 1 Expositivos EBPLV Primavera 2021

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Conexión con el tema de la unidad: Para complementar el estudio en grupos

Introducción: hoy en día, nuestros automóviles, computadoras, teléfonos inteligentes

La naturaleza de Dios va más allá de la capacidad humana de comprender, aunque

La palabra Trinidad no se encuentra en las Escrituras. Sin embargo, varios pasajes de

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2. Cuando Jesús, el Hijo de Dios, está en tu vida, el Espíritu Santo está en tu

Conclusión: Si bien algunas personas tratan de hacer una explicación de la naturaleza

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3. Dios comisionó a las personas a cuidar de Su creación. (v. 28-31)

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El problema es que Dios no ve las cosas de esa manera. Debido a nuestra

3. Nuestro pecado necesita un Salvador (v. 9-13)

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Conclusión: La conclusión es la siguiente: somos pecadores y, por nuestra cuenta, no

[Fuentes para la introducción: https://www.inc.com/wanda-thibodeaux/5-statistics-that-

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Desde nuestro punto de vista en la historia, comprendemos las ramificaciones

2. La muerte de Jesús fue por nosotros. (v. 16b-24)

3. La muerte de Jesús completó la obra de salvación. (v. 28-30)

Conclusión: La crucifixión de Jesús, aunque llevada a cabo por soldados romanos

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[fuentes: https://www.shroud.com/ y https://www.history.com/news/shroud-turin-

2. Nueva vida es posible: Jesús resucitado es la prueba (v. 11-23)

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Cuando Jesús se apareció a Tomás, Jesús le mostró las heridas y le ofreció a

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3. El Espíritu Santo glorifica a Jesús. (16:12-15)

El Espíritu de verdad también glorifica a Jesús al revelar en la vida de un

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Conclusión: la mayoría de las personas enfrentan la vida confiando en su propia

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Habrá terremotos y otros desastres naturales cuando el Señor muestre Su

3. Necesitamos estar preparados. (v. 32-44)

En los versículos 40-41, la imagen es la de dos hombres trabajando en el campo

La ilustración final es para aclarar el punto de que si supiéramos que algo va a

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