1

EL MINISTERIO APOSTOLICO

1. EL MINISTERIO APOSTOLICO EN LA IGLESIA

Los escritos del canon bíblico registran eventos que llegan aproximadamente hasta
el año 100 d. C. Más o menos de esa época data “La Didajé” o “Doctrina de los
doce Apóstoles”, con orientaciones sobre el ministerio de los Apóstoles y los
Profetas.

Durante siglos, la iglesia no ha hablado de Ministerios Apostólicos activos, en

desarrollo. De los dones y manifestaciones del Espíritu, durante un tiempo se habló
como cosas en escasez o del pasado. Hay autores contemporáneos que hablan
inclusive de una era post-apostólica, como dando a entender que cuando murieron
los apóstoles con nombre registrado en la Biblia, el Ministerio terminó su vigencia,
siendo imposible su reproducción, dadas las condiciones tan especiales, según se
pensaba, para calificar en dicho Ministerio (Hch. 2: 21-22).

Tradicionalmente se ha considerado como apóstoles, solamente los 12 del Cordero,

llamados directamente por Jesús en su Ministerio. Luego se incluyó a Matías y
finalmente Pablo, de cuyo apostolado algunos ya en ese tiempo dudaban (1 Cor. 9:
1,2).

La corriente actual apunta hacia un proceso de levantamiento de los cinco

Ministerios, en donde el último que está siendo restaurado es el Apostólico. Sin
embargo, cabe pensar en algo diferente: siendo llamado como el primero (1 Cor.
12: 28), puede estarse sentando la base del levantamiento de los cuatro ministerios
restantes (Ef. 2: 20). Ya había nombrados apóstoles (Luc.6:13) y todavía no había
iglesia. No se pueden levantar paredes y techo sin antes poner los cimientos.

2. LOS NOMBRAMIENTOS APOSTOLICOS

El término griego apostolos, que significa “enviado o mensajero” aparece mas de

80 veces en el NT, principalmente en los escritos de Lucas y Pablo. Deriva de un
verbo muy común, apostello, que significa enviar con un propósito determinado, un
cargo u oficio (Hch.1: 20,25) a diferencia del neutro pempo (a excepción de los
escritos de Juan, donde son sinónimos).

En la Biblia encontramos que hay como una línea de desarrollo del Ministerio
Apostólico, donde aparecen varios nombramientos en ese cargo:

a) Jesús: Nombrado por el Padre (Heb.3:1).

b) Los doce, nombrados directamente por Jesús en su Ministerio: las doce saetas
de Jesús. Escogidos entre sus discípulos les llamó apóstoles (Luc.6:13). Así,
Jesús (como Apóstol padre) discipuló a 12. Luego de Pentecostés, guiados por
el Espíritu Santo proyectan la obra en Jerusalem, Judea, Samaria y los confines.
Son 12 cimientos sobre los que se asienta la Nueva Jerusalem (Ap. 21:14).
 2

c) Matías (Hech. 1:24-26): designado por Dios en oración para completar el

número de los doce. Se echaron suertes y el nombramiento cayó sobre él.

d) Apóstoles de Jesucristo (Ef. 1: 1; 4:8-11), contados por primera vez juntamente

con los otro cuatro Ministerios, en el ministerio quíntuple, son ministros del
nuevo pacto, por el Espíritu: (2 Cor. 3:6). Pablo y Bernabé se encuentran en
esta generación Apostólica que llega hasta nuestros días (Hech. 13:2).

3. PERSONAJES CON EL NOMBRE DE APOSTOL

En la Biblia quedaron registrados con el título de Apóstol varios personajes:

a) Jesús, el Apóstol de nuestra fe (Heb.3:1).

b) Los doce: fueron tomados de un grupo mayor, para estar con él y enviarlos a
predicar, sanar y sacar demonios (Mar. 3: 13-15). La única vez cuando Marcos
los llama apóstoles es cuando regresan con éxito de su misión (Mar. 6: 30; Mt.
10: 2ss). Una misión preparatoria para lo que venía mas adelante, fue como un
acontecimiento profético. Lucas les llama apóstoles (Luc. 9:10; 17:5; 22:14; 24:
10). Jesús mismo les dio el título (Luc. 6: 13). Los doce es un nombre dado a
éste grupo apostólico en el evangelio y Pablo así les llama en 1 Cor. 15:5.
Aparecen también los doce en Apocalipsis 21:14.

c) Los enviados a las iglesias: Tito y varios hermanos (2 Cor. 8:23); Epafrodito (Fil.
2:25).

d) Jacobo: el hermano del Señor, aparece como Apóstol (Gal. 1:19; 2:9).

e) Bernabé: se le llama Apóstol (Hech. 14: 14) y Pablo lo incluye también como
Apóstol en una discusión (1 Cor. 9: 6).

f) Andrónico y Junias, parientes y compañeros de prisión de Pablo, éste los

reconoce como destacados entre los Apóstoles en (Rom. 16: 7).

4. EL INICIO Y EL FINAL DEL MINISTERIO APOSTOLICO

Existe divergencias acerca del inicio de los cinco ministerios actuales. La verdad la
dejó establecida el Espíritu Santo, en el capítulo 4 de la carta a los Efesios,
indicando como punto de partida el momento cuando Cristo asciende a lo alto,
después de morir, resucitar y ser resucitado (Jn.10:17,18; Hech.4:10; 13:33;
Sal.139:13,15). El Hijo de Dios derrama los cinco dones ministeriales sobre los
hombres: Apóstoles, otros profetas, evangelistas, pastores y maestros (Ef. 4: 8-11).

Respecto a su vigencia, la fecha final de la actividad de los cinco ministerios la

marca el Espíritu Santo hasta que se cumplan cuatro metas (Ef.4:13):

 Todos lleguemos a la unidad de la fe

 Y del conocimiento pleno del Hijo de Dios,
 A la condición de un hombre maduro,
 3

 A la medida de la estatura de la plenitud de Cristo,

Cuando las cuatro metas se cumplan tendremos razones para decir que los
ministerios ya no tienen razón de ser. Eso será cuando venga lo perfecto y lo
incompleto se acabe, cuando ya no veamos veladamente sino cara a cara, y nuestro
conocimiento sea pleno; entonces efectivamente los dones se acabarán,
únicamente habrá lugar para el amor (1 Cor. 13: 8,10,12,13).

La Palabra de Dios establece la necesidad que haya reproducción ministerial, que

los ministros tengan hijos espirituales que continúen con la obra de Dios. Pablo
indicaba que tenía verdaderos hijos – espirituales - (1 Tm. 1: 2; Tit. 1:4; Flm. 10) y
cuando instruye a Timoteo para encargar sus enseñanzas a hombres fieles e
idóneos (2 Tm.2:2), siervos que trabajaban “como él” (1 Cor. 16:10), está indicando
la necesidad de buscar y encausar a otros “pablos” para continuar con la obra de
Dios.

5. LA RESTAURACION DEL MINISTERIO APOSTOLICO

La iglesia es el Pueblo de Dios, la Casa de Dios, iglesia del Dios vivo, columna y
sostén de la verdad (1 Tm. 3: 15), el Israel espiritual. Como el Israel literal se
encontraba en Egipto, ahora es peregrina en éste mundo y espera tener su Éxodo,
su traslado definitivo de éste mundo hacia las moradas celestiales. Ese Éxodo para
el Israel literal se inició con un personaje: Moisés (Fig. del Ministerio Apostólico).
Notemos el proceso:

5.1 MOISES EN EGIPTO, MINISTERIO APOSTOLICO OCULTO

Interviene por sus hermanos, mata un egipcio y lo esconde en la arena, faraón se

entera y trata de matarlo. Moisés debe huir a la tierra de Madián (Ex. 2: 11-15).
Puede pensarse entonces en el Ministerio Apostólico inicial, la iglesia de los
primeros tiempos, que logra matar al egipcio pero luego la persecución lo obliga a
refugiarse escondido en la tierra de Madián.

Así, Moisés (Fig. del Ministerio Apostólico) ha permanecido oculto en la iglesia por
varios cientos de años, ministrando en la figura pastoral (Ex.3:1).

5.2 MOISES REGRESA, MINISTERIO APOSTOLICO EN

RESTAURACION

Pastoreando las ovejas, Moisés tiene un encuentro con Dios en el Horeb, Él le habla
desde la llama que arde en la zarza sin consumirla, tiene un encuentro personal con
Dios, es avivado y de pastor es cambiado en “enviado” – Apóstol - (Ex. 3:10; 4: 28),
recibe instrucciones precisas de Dios y poder, para sacar a su pueblo de Egipto.
Dios estaba preparando el Éxodo.

El que mató al egipcio y se ocultó como pastor, regresó, pero maduro y preparado
para el enfrentamiento final con faraón. La entrada en escena nuevamente del
Ministerio Apostólico en la iglesia, puede ser vista como una señal de que el tiempo
del levantamiento final del pueblo de Dios se acerca.
 4

5.3 LAS ALAS DEL AGUILA, SE COMPLETA EL FUNDAMENTO

Como Moisés no quería dar el mensaje, Dios decide levantar un ayudante, Aarón el
hermano de Moisés, como su boca, para que hablara por medio de él - Fig. del
Ministerio Profético –. Aarón recibe la orden de salir al encuentro de su hermano en
el monte de Dios, sería el Profeta de Moisés (Ex. 4: 13-16; 7: 1).

El Ministerio Apostólico y el Profético son los dos fundamentos sobre los que se
edifica la iglesia, siendo Cristo mismo la piedra angular (Ef.2:20). Una vez
levantado el Ministerio Apostólico, puesto en primer lugar (1 Cor. 12:28), debe
restaurar al Ministerio Profético para completar el fundamento de la edificación.

Juntos Moisés y Aarón – cimiento santo -, se enfrentaron a faraón – el diablo - (Ex.

5: 1) y sus servidores, Janes y Jambres, figura del falso cimiento, acción que se
repetirá según ha sido anunciado para los tiempos difíciles de los últimos días; pero
como sucedió entonces, no progresarán (2 Tm. 3: 1-9).

Las águilas necesitan dos alas para volar (Fig. del Ministerio Apostólico y el
Profético). Dios sacó a Israel de Egipto sobre alas de águila (Ex. 19: 4- 6), mismas
que Dios utilizará para traer la iglesia a sí mismo y hacer de ella su especial tesoro
entre los pueblos, linaje escogido, real sacerdocio y nación santa (1 P. 2: 5-9).

5.4 EL PUEBLO DE DIOS SE UNE

Antes Moisés no había logrado unir ni a dos hermanos (Ex. 2: 13-14), ahora logra
la unidad de Israel y salen de Egipto 600,000 hombres de a pie sin contar niños, con
una multitud mixta que no eran israelitas (Ex. 4: 22, 23; 12: 37).

Hasta ahora no se ha logrado la unidad en el pueblo de Dios. Sin embargo,

notemos aquí, que una de las metas ministeriales es llevar al Cuerpo de Cristo a la
unidad de la fe (Ef. 4:11) y cuando haya unidad el mundo creerá en Cristo y en el
amor de Dios (Jn. 17: 21-23). Así la restauración del Ministerio Apostólico y el
Profético apuntan hacia el logro de la unidad de la iglesia.

5.5 LLEGA UNA NUEVA DIMENSION EN LA VIDA DE LA IGLESIA

Moisés (Ministerio Apostólico) tenía en su mano el instrumento que abriría el mar

Rojo para dar paso al pueblo de Dios trayendo victoria sobre faraón y lo mas selecto
de sus huestes (Ex. 14: 16, 21-31). Esto representa una nueva dimensión en la
vida de la iglesia, que trae victoria sobre sus enemigos y cuya puerta de entrada y
paso Dios habilitará mediante el Ministerio Apostólico restaurado,

5.6 LOS PLANOS DE LA EDIFICACION Y TODOS SUS SERVICIOS

Dios ordenó a Moisés (Fig. del Ministerio Apostólico) la edificación de un santuario

para Él, para que habite entre su pueblo, conforme a todo lo que le mostraría, el
diseño del santuario y el diseño de todo su mobiliario y se lo muestra en el monte
(Ex. 25: 8,9,40).
 5

La iglesia es la casa de Dios (1 Tm. 3: 15) y el Ministerio Apostólico recibe de Dios

la revelación de los planos de la edificación del Cuerpo de Cristo.
De allí que Pablo se identifica como perito arquitecto, conforme a la gracia que le
fue otorgada y pone el fundamento para que otro edifique sobre él (1 Cor. 3: 10).
Así, según lo expuesto hasta ahora, es de esperar que la restauración del Ministerio
Apostólico traerá planos de edificación para la iglesia de los tiempos finales (2 Tm.
3: 1-9).

5.7 LA DOCTRINA

Moisés recibió también los Diez mandamientos (Ex. 20: 1-17), estableció leyes
diversas (Ex. Capítulos 21 y 22) y las tablas de la ley, dos veces (Ex. 31: 18; 34:
1). Incluso permitió el libreto de repudio que al principio no era así (Mat. 19: 7,8).

Figura de la doctrina que el Ministerio Apostólico recibe para sentar verdades

presentes, para el orden espiritual y material de la iglesia. Es de esperar que en la
restauración del Ministerio Apostólico, Dios de a conocer la doctrina y el orden para
su pueblo en los tiempos finales.

5.8 LA PLENITUD MINISTERIAL

Moisés recibió también la orden de consagrar sacerdotes, orfebres y hombres

hábiles para edificar su obra (Ex. 29:1; 31: 2-6; 35: 10-11). Se representa aquí la
restauración de los Ministerios restantes, Pastores, Evangelistas y Maestros sin los
cuales, el Santuario – la iglesia del Dios vivo – no se puede edificar.

Cabe pensar entonces, que la plenitud de los cinco ministerios, depende de la

restauración del orden establecido por Dios (1 Cor. 12:28; Ef. 2:20; 4:11), que haya
primero Ministerio Apostólico levantado, que se encuentre en el monte de Dios con
el Ministerio Profético y lo restaure, para luego conjuntamente levantar a los demás.

Antes de Pentecostés, Dios primero restaura el número de los doce (Hch. 2: 21-26).
A Israel (Fig. de la iglesia) le dio las alas del águila - apóstol y profeta - (Ex. 19: 4-
6). A los que esperan en Jehová Dios les promete remontarlos en alas de águilas
(Is.40: 31). Y la iglesia como la primera en esperar en Cristo (Ef.1: 12), recibirá
también primero sus alas de águila.