La Teoria General Del Delito
La Teoria General Del Delito
La Teoria General Del Delito
202140566
Sección “A”
INTRODUCCIÓN
La teoría general del delito estudia las características comunes que debe tener
cualquier conducta (acción u omisión) para ser considerada delito. La teoría del
delito es la encargada de proveer de instrumentos o herramientas al derecho
penal objetivo, para que éste pueda definir las figuras delictivas e incorporarlas a
la legislación. Con esto se contribuye a aplicar justicia penal lo más apegado al
principio de legalidad posible. Es decir, la justa aplicación de los tipos penales es
un aspecto de competencia plena de la teoría del delito. Es un procedimiento por
medio del cual se analizan las características comunes, o bien aquellas que
diferencian a todos los delitos en general para establecer su existencia y
determinar la imposición de una sanción, si así corresponde. Se denomina teoría
del delito “a la parte de la ciencia del derecho penal que se ocupa de explicar
¿Qué es el delito en general?, es decir, ¿Cuáles son las características que debe
tener cualquier delito?”.
La teoría del delito, expresa una serie de elementos que se presentan de forma
común a todo delito, lo que permite una apreciación más general de todos los
delitos, además de fijar una postura jurídica dentro del ordenamiento jurídico-
penal. Cada legislación penal en el mundo se ve influenciada directamente por la
doctrina penal que la informa, es decir, que, según la dogmática asumida por cada
legislador, así se manifestará el conjunto de delitos en la parte especial del Código
penal, sustentada por las normas de la parte general.
Es de suma importancia utilizar la teoría del delito, pues dicha teoría proporciona
un sistema de análisis para ordenar e interpretar las normas penales sustantivas
para determinar si la conducta desplegada por el sujeto activo es o no constitutiva
de delito. Y la responsabilidad penal es cuestión de carácter procesal que se
determinará en la resolución del justiciable. Toda acción para constituir un delito
debe ser una conducta típica, antijurídica y culpable. Es por ello que el análisis de
lo que presuntamente constituye un ilícito se debe de hacer la revisión de esos
tres estadios de manera seria y cuidadosa. Ya que el delito es un fenómeno social
que se estudia a través de una ciencia.
La teoría del delito tiene como objeto analizar y estudiar los presupuestos jurídicos
de la punibilidad de un comportamiento humano ya sea a través de una acción o
de una omisión, del cual se deriva la posibilidad de aplicar una consecuencia
jurídico penal. La teoría del delito constituye un instrumento de análisis científico
de la conducta humana, utilizado por juristas, ya sea en la función de jueces,
fiscales, defensores o bien como estudiosos del derecho para determinar la
existencia del delito. Antes de dictar sentencia, durante la deliberación, el tribunal
deberá establecer si existe o no delito en el caso que juzga. La teoría del delito,
constituye “un método de análisis de distintos niveles, cada uno de estos
presupone el anterior y todos tienen la finalidad de ir descartando las causas que
impedirán la aplicación de una pena y comprobando (positivamente) si se dan las
que condicionan esa aplicación.
La teoría del delito, sirve como método de análisis del derecho penal, que
concluye con la identificación de un hecho y su autor y la determinación de los
casos en que el autor responde por su hecho. Desde un punto de vista
pragmático, se puede situar a la teoría del delito como un laboratorio del crimen,
del que se espera una respuesta científica de si el hecho que llama la atención de
la sociedad porque del mismo se desprende un resultado despreciable, es o no un
delito.
Uno de los objetivos para los que debería servir la teoría del delito y sus
componentes, es para la resolución de casos prácticos y, mejor aún, para la
resolución más o menos uniforme de casos similares. Si eso se cumple o no, si la
teoría del delito sirve para ello en la realidad práctica de los sistemas penales, es
otro tema, que dependerá siempre de las múltiples variables a las que haré
referencia más adelante.
EL DELITO
El delito es una conducta contraria a la ley y que esta la tiene regulada como tal.
Dicha conducta puede consistir en hacer o dejar de hacer. Sin embargo, no se
trata simplemente de lo que prohíbe, (puesto que también hay cosas que prohíbe
la ley que no son precisamente delitos), además de que en un ilícito hay aspectos
que forman un todo granítico y que constituyen los elementos del delito, más para
llegar a concebirlo como una unidad portadora de varios elementos, el delito pasó
por diversidad de concepciones, que van desde ideas morales hasta
psicofisiológicas.
Considera que el delito es una idea de relación entre el hecho del hombre y la ley.
Definiéndolo así; es la infracción de la ley del Estado promulgada para proteger la
seguridad de los ciudadanos, resultantes de un acto externo del hombre, positivo o
negativo, moralmente imputable y políticamente dañoso. Por lo que lo consideran
un ente jurídico, respecto al delincuente, indican que la imputabilidad moral y su
libre albedrío son la base de su responsabilidad penal; la pena es un mal
necesario para la realización de la tutela jurídica, además indicaron que el derecho
penal era una ciencia eminentemente jurídica, para su estudio debía utilizar el
método lógico abstracto, racionalista o especulativo.
Escuela Positiva:
De conformidad con el autor Guillermo Sauer, durante la Edad Antigua, " el delito
era concebido ante todo como ataque al Estado; en los griegos se destacó
además la contradicción con la Justicia, en los romanos más la lesión del Bien
Común (más tarde el bien del Estado). Posteriormente, respecto a la concepción
del delito durante la Edad Media, según Sauer, el mismo conllevaba un gran
contenido eclesiástico, considerándolo en primer lugar como pecado y como una
lesión a estas normas de tipo religioso.
Los elementos en la Teoría del delito, permiten una descripción del problema
complejo que se enfrenta, cuando se trata de estudiar al delito, visto, por tanto, no
como un todo englobado, sino como un todo integrado en varias partes,
susceptibles cada una de ser reformadas.
Entre los elementos positivos del delito según la clasificación tradicional tenemos:
Acción, tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad.
Y según la clasificación antigua
LA ACCIÓN
Consiste en una manifestación de la conducta humana consciente o inconsciente
que causa una modificación en el mundo exterior y que está prevista en la ley.
Doctrinariamente es llamada como “acto”, “hecho penal”, “conducta”,
“acontecimiento”, se define como manifestación de voluntad que mediante acción
produce un cambio en el mundo exterior, o que por no hacer lo que se espera deja
sin cambio ese mundo externo. Constituye la conducta humana considera como
base, núcleo central y sustrato material del delito, consistente en un movimiento
de su organismo destinado a producir cierto cambio en el exterior del mundo. La
exigencia de la voluntariedad de la conducta humana es un presupuesto esencial
del juicio jurídico penal. Analizando lo anterior, en el derecho penal se debe
entender la acción en un doble sentido, como acción (hacer) y como comisión (no
hacer). El derecho valora conductas humanas, pero no las crea, no es una
invención del legislador, ya que éste la toma de la realidad, al ver que afectan el
orden social y luego las regula y califica como delito. La acción o conducta es el
primer elemento del delito y durante muchos años fue el centro de una viva
polémica en la doctrina en torno a su concepto, la división entre causalista y
finalista hizo cobrar la importancia capital, pero actualmente se ha limitado a
estudiar las causas en las que desaparece el delito por no existir acción. La acción
humana como reacción punitiva tiene como referente inicial una conducta o
comportamiento humano. La acción está descrita en el tipo legal, objeto del ilícito
penal y base para la declaración de responsabilidad del agente o autos, razón por
la cual se dice que el derecho penal, está constituido por actos.
- Omisión: dejar de hacer algo que se debía hacer, y se subdivide en: a) Propia:
dejar de hacer algo que le corresponde a toda la sociedad, sin individualizar a
nadie; b) Impropia: dejar de hacer algo que le corresponder a persona
individualizada. La persona que recibe el daño en este caso se le llama garante.
El Artículo 10 del Código Penal que indica: “los hechos previstos en las figuras
delictivas serán atribuidos al imputado cuando fueren consecuencia de una acción
u omisión normalmente idónea para producirlos”.
En el Código Penal encontramos dos ejemplos de omisión propia, en el artículo
156 que establece: “Omisión de Auxilio: Quien encontrando perdido o
desamparado a un menor de diez años; a una persona herida, inválida o
amenazada de inminente peligro, omitiere prestarle el auxilio necesario, según las
circunstancias, cuando pudiere hacerlo sin riesgo personal, será sancionado con
multa de veinticinco a doscientos quetzales” y el artículo 469 establece:
“Denegación de Justicia: El Juez, el representante del Ministerio Público o el
funcionario, autoridad o agente, de ésta que, faltando a la obligación de su cargo,
dejará maliciosamente de promover la persecución y procedimiento de los
delincuentes, será sancionado con multa de cien a dos mil quetzales e
inhabilitación especial de uno a dos años”.
LA TIPICIDAD
LA ANTIJURICIDAD O ANTIJURIDICIDAD
Consiste en realizar una acción que infringe la norma del Estado que contiene un
mandato o una prohibición de orden jurídico. Se establece que es una acción
contraria al derecho, y que es toda manifestación, actitud o hecho que contradiga
los principios básicos del derecho. “La corriente doctrinaria italiana representada
por Antoliesei, Rocco, Guameri, Guiseppe Megfiore y Carnelutti; citados por
Palacios Motta en su libro Apuntes de derecho penal, sostiene la tesis de que la
antijuridicidad, es la esencia misma del delito; así aseguran que la antijuridicidad o
sea lo contrario al derecho no es más que la expresión o más bien la razón de la
juridicidad, que la antijuricidad es el carácter que circula por todo el delito, es la
actividad que viola la norma penal y en tal relación pura y simple se agota el
delito”. Es elemento esencial del delito cuya fórmula es el valor que se concede al
fin perseguido por la acción criminal en contradicción con aquel otro garantizado
por el derecho. Guillermo Cabanellas, en el Diccionario de derecho usual, tomo
uno, indica: “La posición de los códigos penales consiste en suponer en el agente
la antijuridicidad, si su proceder coincide con la figura descrita; y luego se declara
la exención de responsabilidad, la conducta jurídica, la inexistencia de la violación
del orden legal establecido, la legitimidad de lo hecho u omitido, por concurrir la
legítima defensa, el estado de necesidad, el ejercicio de un derecho o el
cumplimiento de un deber”.
LA CULPABILIDAD
Elementos de la culpabilidad
LA IMPUTABILIDAD
No son imputables:
1. El menor de edad;
Son aquellas condiciones que deben seguirse, para imponer una pena en algún
delito en particular. Es una de las cuestiones, por no decir categorías, más
controvertidas de la teoría del delito, en tanto su naturaleza, su sistemática o sus
consecuencias. Las condiciones objetivas de punibilidad, "son hechos externos
desvinculados de la acción típica, pero necesarios para que pueda aplicarse la
pena. La indagación de la condicionalidad objetiva puede llevar a comprobar, por
vía negativa, la falta de realización de ciertas condiciones de punibilidad, o sea, la
ausencia de condicionalidad efectiva." El origen histórico de las condiciones de
punibilidad se encuentra, según Alimena, en el principio de estricta legalidad que
exige no sólo la simple conformidad del hecho con el tipo penal sino la efectiva
lesión de los intereses tutelados. "La condición objetiva de punibilidad representa,
en un plano objetivo, un límite del ámbito de lo punible de una conducta perfecta
ya desde la tipicidad y el injusto como conducta de riesgo." De lo antes
mencionado se puede decir que si la punibilidad de un hecho es sometida a una
condición, el hecho no constituye delito antes de verificarse aquella. Para el caso
peruano, uno de los delitos aduaneros, como es el contrabando, no será
considerado como tal, aun cuando se tenga demostrado que el hecho de ingresar
del extranjero o extraer del territorio nacional mercancías constituye una conducta
típica, antijurídica y culpable, si el monto de aquéllas no es superior a las cinco
unidades impositivas tributarias.
Las condiciones, pues, "son aquellas que, siendo irrelevantes para el principio de
culpabilidad, están verdaderamente fundamentando el contenido del desvalor ético
social del hecho."
En el Artículo 245, el 348 y 358 C del Código Penal se regulan las formas en las
que estas condiciones se dan es decir las condiciones objetivas de punibilidad.
LA PUNIBILIDAD
- Atipicidad;
- Causas de justificación;
- Causas de inculpabilidad;
AUSENCIA DE ACCIÓN
Elemento negativo del delito. Ocurre cuando falta una manifestación exterior
consiente de realizar la acción, es decir si se realiza, pero únicamente en cuanto a
la manifestación física no psicológica, existiendo ausencia de voluntad que lo haya
dirigido. Fuerza irresistible, situación en la que el sujeto no tiene la posibilidad de
actuar de otra forma, es de gran importancia al Derecho penal, porque excluye la
acción del individuo, ya que quita toda voluntariedad a su conducta. - Movimientos
Reflejos, no constituyen acción ya que dichos condicionamientos de reflejos no
son controlados ni producidos por la voluntad de la persona. - Estados de
inconsciencia, excluyen la acción por cuanto no interviene la voluntad del sujeto y
ello ocurre tanto en los casos ejecutados durante el sueño, embriaguez letárgica,
paralización del cuerpo.
La fuerza física irresistible viene regulada por el artículo 25.2 del Código Penal, al
señalar que “habrá fuerza exterior cuando se ejecute el hecho violentado por
fuerza material exterior irresistible, directamente empleada sobre él”.
Erróneamente, el Código la sitúa como causa de inculpabilidad, cuando en
realidad es una causa de exclusión de la acción. El Código no prevé el movimiento
reflejo en forma expresa, por lo que a veces podrá resultar difícil la aplicación de
esta causa de exclusión de la acción. No obstante, esto no tiene graves
consecuencias prácticas por dos motivos. En primer lugar, estos supuestos son
casi de laboratorio y de escasa aplicación práctica. En segundo lugar, aunque
existiese acción, desaparecería la tipicidad por no haber dolo ni culpa, como se
verá en siguientes capítulos. Por ejemplo, Mariano sufre un ataque de epilepsia
frente a un jarrón chino de alto valor, rompiéndolo. En este caso, se excluirá la
tipicidad por no querer Mariano producir el resultado (no hay dolo) o por no existir
un comportamiento imprudente del autor (no hay culpa). El estado de
inconsciencia podría encuadrarse como un caso de trastorno mental transitorio del
artículo 23.2 del Código Penal. Sin embargo, esta solución no es muy satisfactoria,
por
LA ATIPICIDAD
Las causas de justificación Elemento negativo del delito, son situaciones que
suponen normas permisivas que autorizan, bajo ciertos requisitos, la realización
de actos generalmente prohibidos en ley. La comprobación del carácter
antijurídico de la conducta tiene un carácter negativo, de manera que, una vez
identificada la conducta típica, habrá de analizarse su eventual inclusión dentro de
las causas de justificación, excluyendo el delito si concurre una de ellas. Nacen a
la vida cuando ocurre acción y esta se encuentra regulada en ley penal, pero la
misma no es delito atendiendo a las circunstancias en las que esa acción se
produjo, de esta forma:
CONCLUSIÓN
Desde el punto de vista de su utilidad, podría decirse que la teoría del delito
constituye una “herramienta” de la que se sirve el penalista para resolver, a partir
de ese sistema, los problemas específicos que plantea la aplicación de los
concretos delitos. Todos los elementos (acción, tipicidad, antijuridicidad,
culpabilidad, etc.) constituyen los “ladrillos” a partir de los cuales se construye el
sistema de la teoría del delito, que debe ser coherente para cumplir
adecuadamente su función principal en la práctica jurídica: resolver problemas
específicos de aplicación. Por ello, la teoría del delito debe edificarse a partir de
los cimientos que proporcionan las propias normas penales, pues de nada serviría
el sistema si fuera contradictorio con lo que disponen los textos legales vigentes;
por las mismas razones, no deben existir contradicciones internas al propio
sistema, pues éstas podrían debilitar o incluso derrumbar todo el edificio
sistemático.
Es una parte de la ciencia del derecho penal que se encarga de analizar cuales
son los elementos o características que deben de concurrir en una conducta para
que esta sea considera como delito, o en su caso cuales son los elementos para
que esta conducta se le niegue la calidad de delito. La teoría del delito
determina cuando una conducta es verdaderamente delictiva. De ahí surge la
enorme importancia de que los operadores del sistema de justicia penal, abogados
deben tener conciencia sobre la necesidad de consolidar los conocimientos como
son: la definición del delito, sus presupuestos, su aspecto positivo (conducta o
hecho, tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad y punibilidad) y aspecto negativo
(ausencia de conducta, atipicidad, causas de justificación, inculpabilidad y excusas
absolutorias), su clasificación, tentativa, la autoría y participación. Indudablemente
la teoría del delito dentro del derecho penal representa uno de los instrumentos
más importantes para establecer la responsabilidad penal de un individuo
procesado, indiciado por la supuesta comisión de un hecho delictivo. Y es
necesario y de gran importancia analizar y establecer si se ha dado la afectación a
un bien jurídico protegido y considerado fundamental.
REFERENCIAS
del-delito-concepto-elementos-y-consideraciones/
https://lopezvaldezabogados.com/opiniones-sobre-derecho-penal-del-
maestro-marco-antonio-lopez-valdez/teoria-general-del-delito.html
Palles, L. J. (2013). Teoría del Delito. Guatemala: 2da Edición.