DIENCÉFALO
DIENCÉFALO
DIENCÉFALO
● Epitálamo
● Tálamo
● Subtálamo
● Metatálamo
● Hipotálamo
En este artículo, revisaremos la anatomía y función de las diferentes partes del diencéfalo,
así como algunas correlaciones clínicas de importancia sobre esta región del encéfalo.
Epitálamo
El epitálamo se encuentra en relación de proximidad con la porción posterior del techo del
tercer ventrículo y la pequeña porción adyacente de su pared lateral. Está constituida por
las siguientes porciones:
La estría medular del tálamo se encuentra íntimamente relacionada con la tenia del tálamo
como un haz de fibras a lo largo de la unión de las caras medial y superior del tálamo.
Empieza cerca al polo anterior del tálamo y toma una dirección posterior hacia el trígono de
la habénula. Desde la estría medular del tálamo, algunas fibras cruzan a nivel de la lámina
superior o anterior del tallo pineal para poder llegar a los núcleos habenulares en el lado
contrario.
Estas fibras constituyen la comisura habenular, algunas de las cuales conectan también al
cuerpo amigdalino y a la formación hipocampal de los hemisferios cerebrales derecho e
izquierdo. La comisura posterior se encuentra en la lámina inferior del tallo de la glándula
pineal. Relacionados con esta comisura, podemos encontrar a varios núcleos pequeños,
tales como los núcleos intersticial y dorsal de la comisura posterior, el núcleo de
Darkschewitsch y el núcleo intersticial de Cajal (ambos núcleos se comunican con los
núcleos vestibulares a través del fascículo longitudinal medial).
La glándula pineal también secreta una serie de hormonas polipeptídicas que en conjunto
con la melatonina, tienen una influencia importante en la regulación de varios órganos del
sistema endocrino, tales como la hipófisis, las glándulas tiroides, paratiroides,
suprarrenales y las gónadas. Las hormonas de la glándula pineal llegan a la hipófisis a
través del torrente sanguíneo y del líquido cefalorraquídeo (LCR). A medida que el cuerpo
envejece, las glándulas pineales se van calcificando y forman los conocidos cuerpos
arenáceos o la arena cerebral.
Tálamo
El tálamo es la porción más grande de sustancia gris del diencéfalo que está relacionada
lateralmente con el tercer ventrículo. Las mitades simétricas de esta estructura de la línea
media se pueden encontrar entre las cortezas cerebrales y el mesencéfalo. Tiene un polo
anterior y otro polo posterior, así como una cara superior, inferior, medial y lateral. Su
porción superior se encuentra cubierta por una capa fina de sustancia blanca conocida
como la capa zonal, mientras que su cara lateral se encuentra cubierta por una capa similar
conocida como lámina medular externa.
Núcleos
Debemos tener en cuenta que la ubicación exacta del núcleo reticular del tálamo es tema de
debate. Por el momento, se describe como la porción del tálamo ventral que conforma una
cápsula alrededor del tálamo lateralmente. Sin embargo, algunos estudios recientes
cuestionan esta declaración y lo definen como una porción del tálamo dorsal.
Subtálamo
Características y componentes
El subtálamo continúa con los extremos superiores del núcleo rojo y la sustancia negra del
segmento del mesencéfalo inferiormente. En la porción lateral, llega a la porción más baja
de la cápsula interna.
Conexiones
Las fibras que emergen del tálamo dorsal (del tálamo propiamente dicho) pasan a través del
tálamo ventral a través del núcleo reticular. Estas fibras dan al núcleo una apariencia
reticular (forma de maya o red), dando origen a su nombre. El núcleo reticular está
conformado por una capa fina de neuronas que recubre la cara lateral del tálamo dorsal y
también está relacionado con la cápsula interna. Cabe mencionar que la porción inferior es
parcialmente contínua con la zona incierta. Las principales fibras eferentes del núcleo
reticular pasan al tálamo dorsal. Sin embargo, llegan aferencias desde el núcleo cuneiforme
(en la formación reticular del mesencéfalo).
Metatálamo
El metatálamo está conformado por dos eminencias con forma ovalada (los cuerpos
geniculados) en la cara caudal del diencéfalo, justo por debajo del extremo caudal del
tálamo dorsal. Los cuerpos geniculados lateral y medial funcionan como estaciones de
relevo talámicas primarias para el sistema auditivo y óptico, respectivamente.
Hipotálamo
Relaciones
Tal como su nombre lo sugiere, el hipotálamo es la porción del diencéfalo que se encuentra
debajo del tálamo. De la misma manera que el tálamo, este se encuentra constituido por
varias subdivisiones y núcleos, como la zona periventricular, la zona medial y la zona lateral.
En la porción medial, este conforma la pared del tercer ventrículo por debajo del nivel donde
se encuentra el surco hipotalámico. En la porción posterior, el hipotálamo se une con el
tálamo ventral y, mediante éste, también con el tegmento del mesencéfalo.
Hacia anterior, el hipotálamo se extiende hasta la lámina terminal y se fusiona con diversas
estructuras olfativas en la región de la sustancia perforada anterior. Hacia inferior, se
relaciona con las estructuras propias del suelo del tercer ventrículo. Estas estructuras son el
túber cinereum, el infundíbulo, y los tubérculos mamilares, los cuales son considerados
parte del hipotálamo. A través del infundíbulo, el hipotálamo se conecta con la hipófisis.
Núcleos y áreas
De medial a lateral, el hipotálamo se divide en tres zonas: una zona periventricular, una
medial y otra lateral. De anterior a posterior, existen tres regiones del hipotálamo: una
anterior, otra media y una posterior.
Al observar al hipotálamo desde un punto de vista funcional, este juega un papel de suma
importancia en cuanto al control de diversos comportamientos cognitivos, principalmente
debido a sus conexiones con las áreas anatómicas que son responsables de dichas
actividades. Sin embargo, cabe destacar que las principales funciones del hipotálamo son la
regulación del comportamiento al comer y beber, la regulación de la actividad sexual y la
reproducción, así como el control de la actividad autónoma.
Algunas de las otras funciones del hipotálamo son la regulación del comportamiento
emocional, el control de diversas actividades endocrinas, la respuesta al estrés, la
regulación de la temperatura y el control de los ritmos circadianos.
CORRECCIONES CLÍNICAS
Debemos tener en cuenta que una lesión (vascular o neoplásica) de cualquier porción del
diencéfalo puede provocar un déficit en la función asociada a dicha porción. Por ejemplo,
una lesión en el núcleo supraóptico del hipotálamo puede afectar la producción y liberación
de vasopresina.
El síndrome diencefálico (de Russell) es una condición rara la cual se caracteriza por:
Las lesiones neoplásicas de la región óptica e hipotalámica son la causa principal de este
trastorno. Este síndrome es una de las principales causas de un posible retraso en el
desarrollo de los pacientes pediátricos. Afortunadamente, rara vez impide que los objetivos
de desarrollo según la edad se lleven a cabo.
Síndrome de panhipopituitarismo
La deficiencia general y total de las hormonas de la hipófisis se clasifica clínicamente como
el síndrome de panhipopituitarismo. Este puede ser el resultado de una deficiencia local de
la glándula o de una irregularidad presente en el hipotálamo. Las lesiones con etiología
iatrogénica en la hipófisis (radioterapia), la necrosis hipofisaria posparto y las lesiones
cerebrales traumáticas también pueden provocar hipopituitarismo.
Este síndrome se presenta en los pacientes según la(s) hormona(s) que este(n) en déficit.
Por ejemplo, una deficiencia de la hormona del crecimiento desencadenará un retraso en el
crecimiento en los niños, mientras que los niveles bajos de la hormona estimulante de
tiroides (TSH) provocarían hipotiroidismo.