LIBRO PALMONConflictosdelCorazon

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 211

BR I N D A ND O L A R E S P UE S TA A L OS G R A N DE S

PR O BLE M AS DE L A V I DA

Cary Palmón
Publicado por
Naciones Unidas en Cristo, Inc.
Tulsa, Oklahoma

© 2016 por Naciones Unidas en Cristo, Inc.


Reservados todos los derechos.

A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas se tomaron de


la Versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América
Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con
permiso.

Reina-Valera 1960® es una marca registrada de la American Bible


Society, y puede ser usada solamente bajo licencia.

Las historias que aparecen en este libro son de la vida real. Se


tomaron de los cientos de correos electrónicos que llegan al buzón
de ayuda espiritual de Minuto Final TV y Conflictos del Corazón
Radio. Se cambiaron los nombres y las situaciones específicas, a fin
de proteger la identidad del remitente.

ISBN 13: 978-1533342133


ISBN 10: 153334213X
Comentarios

C reo que no existe en la tierra persona alguna


que no haya pasado por un fuerte dolor ni un
pesar en su corazón. La complejidad del ser
humano es tan grande que es difícil evitar que al
relacionarnos con otros no existan diferencias y, en
muchos casos, fuertes conflictos. La vida está llena
de experiencias de las que podemos aprender si
somos capaces de vernos reflejadas en ellas y tomar
las decisiones adecuadas para resolver determinada
situación. Cary es una mujer que ha dedicado gran
parte de su vida en ayudar a otros para que superen
sus problemas, basando sus consejos y enseñanzas en
la Palabra de Dios. Por tal motivo, sé que este libro
que ahora estás a punto de leer, Co nflicto s del

i
Co razó n, será un manual de aprendizaje y una guía
spiritual para tu vida y la vida de los que Dios ponga
en tus manos”.

Rvdo. Alberto M. Delgado


Apó sto l de la Iglesia Alpha & Omega, Miami, FL
Do cto r en teo lo gía y maestría en artes en la
especialidad de Co nsejería Cristiana

***

Cary Palmón es una mujer impresionante, una


mujer que ha sabido como superar los obstáculos de
su vida encontrando en Jesucristo la respuesta a una
vida que para muchos hubiera sido la excusa para el
dolor, el resentimiento, la amargura, la tristeza y una
existencia sin propósito. Cary recibió al Señor
Jesucristo como su Salvador y se apropió de cada una
de las maravillosas promesas que Él nos da. Decidió
cumplir el destino que su Padre, que la ama mucho
más de lo que ella se imagina. Tenía planeado desde
antes de la fundación del mundo. Su experiencia,
amplios estudios y sobre todo su dedicación y amor
por los que sufren, la han convertido en una exitosa
consejera cristiana del mundo de habla de hispana de
estos días. Sus programas de radio y televisión son
vistos en todo el continente y más allá;
convirtiéndose en una fuente de agua fresca que trae
refrigerio al alma sedienta en los desiertos de la vida
moderna. Este libro no es la excepción, cada una de
las historias que lo componen trae temas que se
viven a diario en nuestras naciones: la violación, el
incesto, el maltrato, el abandono, el adulterio, la
traición y muchos otros son el pan de todos los días
de miles y miles de personas. Cary nos demuestra
que la solución para todos y cada uno de ellos es
Jesucristo y que Su obra redentora es la única que
puede traer una transformación verdadera. Es muy
duro adentrarnos en tanto dolor; pero le aseguro que
aquí usted no solo oirá de la realidad actual, sino que
podrá disfrutar de las maravillosas promesas que
Dios tiene para cada situación y verá como vidas son
totalmente transformadas para poder cumplir el
propósito de Dios; como fue hecho en la vida de
Cary. La palabra de Dios dice que Él tiene planes de
bien y no de mal para darnos un futuro lleno de
esperanza y ese futuro está esperando a cada persona
que decida decirle sí a Jesús”.
Lic. Juanita Cercone de González
TBN Enlace
Abo gada y no taria
Co sta Rica / Dallas, Texas

***

Tuve el honor de conocer a Cary Palmón durante


una actividad donde prediqué junto a ella en Costa
Rica en el año 2010. Su sencillez, madurez y
sabiduría son de una persona de gran estatura
espiritual y solidez en Cristo. Al contar su
testimonio, de inmediato ministra el corazón del
oyente. Esto es possible cuando su audiencia escucha
todo lo que pasó debido al asesinato de su padre, de
la partida de su país y de tener que irse a vivir al
extranjero. Todo esto le dio la pauta para que Dios la
preparara a fin de que pudiera ministrar a millones
de personas a través de su programa televisivo,
“Minuto Final”, y su programa de radio, “Conflictos
del Corazón”. Ahora, al ser autora de su libro que
lleva el título de su programa radial, Co nflicto s del
Co razó n, Cary contesta las cartas de muchas
personas en gran necesidad espiritual, ayudándolas a
encontrar la solución de sus problemas y conflictos
internos y llevándolas a una relación personal con
Dios al hallar la salvación de sus almas en Cristo
Jesús y la respuesta a sus inquietudes en las Sagradas
Escrituras. Sin duda, el Espíritu y las Escrituras
inspiraron a esta gran mujer de Dios, Cary Palmón,
porque a ella misma la consolaron en su angustia y
en su dolor. Su experiencia marcada, triste y
profunda y la consolación que encontró en el Señor
la capacitó y le proporcionó los dones del Espíritu.
Por eso ahora puede ayudar a consolar a los que
están experimentando una situación semejante en
sus vidas”.

Rvdo. Josué Yrion


Escrito r y evangelista internacio nal
Fundado r y presidente de “Jo sué Yrio n
Evangelismo y Misio nes Mundiales, Inc.”
Índice

Dedicatoria ............................................................................1
Prólogo ...................................................................................3
Introducción .........................................................................7
Carmen: Solo una bestia sería capaz.......................... 11
Susana: No todo lo que brilla es oro .......................... 25
Andrés: Mi lazarillo de luz ............................................ 43
María Soledad: De tal palo, tal astilla ........................ 59
Abelardo: Polos opuestos .............................................. 73
Bernardo: No la puedo olvidar .................................... 87
Raúl: Mi único hijo... mi consentido ........................103
Romina: Fue por lana y salió trasquilada ...............117
Analía: Una mujer de medio tiempo ........................131
Carlos: Atrapado sin salida .........................................147
Graciela: El golpe nuestro de cada día ....................163
Sergio: ¡Ya es muy tarde!..............................................179
Los factores de éxito y de fracaso .............................191
Acerca de la Autora .......................................................197

i
Dedicatoria

D ios en su gran sabiduría antes que nos


lanzáramos a la gran comisión, nos prepara,
equipa y provee de los recursos necesarios.
Muchos de esos recursos no son necesariamente
monetarios sino que en la mayoría de las veces tiene
que ver con personas como fue el caso de Minuto
Final y Conflictos del Corazón.

Cuando Dios puso en mi corazón estos proyectos


para llegar a todo aquel que sufre por medio de la
radio, televisión, Internet y otros medios, no sabía
cómo hacerlo. Inicialmente pensé que quizá un
camarógrafo solucionaría este dilema, sin saber que
el tema sería mucho más complejo de lo imaginado.

1
2 • CARY PALMÓN

Así que en mi oración le pedí a Dios que me


mostrará las herramientas que Él tenía preparado.
Sentí que debía contactar con personas allegadas al
medio y busque en mi red de contactos una persona
que me recomendó a Rubén Bonilla del Perú sin
saber que el guardaba en su corazón las mismas
expectativas y sueños que Dios me había
encomendado.

El resto es historia. Desde ese día, ambos supimos


que Dios nos había unido para esta labor. Rubén no
solo ha sido el productor de Minuto Final y ahora de
Conflictos del Corazón, sino también mi amigo y
consejero en todos estos asuntos. Su amada esposa
Betty se ha convertido en una hija para mí, al igual
que sus hijos, Anita, Cristian y Andrés, los cuales han
trabajado a la par con Rubén para llevar el mensaje
del amor de Cristo a todo aquel que no lo ha
escuchado.

Así que con mucho cariño dedico esta obra a


Rubén Bonilla y a su familia, agradeciéndoles desde
el fondo de mi corazón por su dedicación a esta labor
y por su amistad personal hacia mí y mi familia.
Prólogo

C uántos de nosotros, como psicólogos, hemos


escuchado en nuestro consultorio el lamento
de corazones doloridos a causa de
violaciones, sexo, drogas, brujerías, prostitución,
adulterio, depresión, aborto, alcoholismo, suicidio o
violencia familiar. Estos sufrimientos se tratan en
este interesantísimo libro que Cary Palmón deja en
nuestras manos.

Para entender y ayudar a través de la consejería


personal a las personas que padecen de torturas
psicológicas, se exige una gran dote de empatía, “un
ponerse en el zapato del otro”. Cary logra ese estado.
Con tal fin, usa sus propias confesiones o situaciones
similares. Los casos verídicos mencionados hacen

3
4 • CARY PALMÓN

que la lectura de este libro se sitúe en un nivel de


coloquio y nos da luz para ver el hecho doloroso.

Los que le escriben esperan su comprensión y


quieren escuchar la “voz amiga” que les entienda y
les ayude. Cary sera esa voz que siempre dará un
consejo, no humano, sino extraído de la Palabra de
Dios. La Biblia dice que “en la multitud de consejeros
hay seguridad” (Proverbios 11:14). Los que se
comunican con la autora hacen bien, pues
encuentran una palabra de esperanza y pueden ver
una luz al final del túnel. Otra gran bendición del
libro son los textos bíblicos que son la verdad de
Dios y que dan un entendimiento ante el problema,
así como la salida del mismo.

El ser humano es un ser biopsicosocial y


espiritual. Todos los problemas deben verse en estas
cuatro dimensiones. Los psiquiatras y médicos ven
el lado somático, los psicólogos el lado cognitive y
afectivo, el terapeuta familiar la parte social y el
teólogo la parte espiritual. Este libro cumple un
papel decisivo al tartar el tema desde la visión
espiritual, que es la parte más importante del hombre
y que, a su vez, da la principal solución a su
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 5

problema. Cary lleva de la mano a su audiencia por


los caminos del encuentro personal con Cristo y la
somete a la terapia de Dios, que pasa por el perdón,
la oración, la fe y el milagro de ver cómo Dios
transforma vidas. Cuando los seres humanos
miramos “a cara descubierta como en un espejo la
gloria del Señor, somos transformados de gloria en
gloria” (2 Corintios 3:18).

Leer este libro es ingresar a las profundidades del


ser humano con todas sus flaquezas y frustraciones,
es entender lo que se está viviendo, es ver una luz al
final del camino y es tener la respuesta de los cielos.
Les animo a leerlo y a extraer los más hermosos
consejos y dárselos a los demás.

Dr. Jesús Hurtado Zamudio


Psicó lo go clínico
Co ngresista de la República del Perú
Introducción

¡E l recuerdo me es muy claro! Las imágenes de


mi vida pasan por mi mente como una
película que me muestran escenas desde mi
infancia, con papá y mamá, hasta las escenas
sangrientas y dolorosas del asesinato de mi padre
por culpa de aquel en quien él confiaba.

Puedo ver también, como una película, mi arribo


por primera vez a los Estados Unidos con apenas
dieciséis años de edad, sin saber qué haría con mi
vida ni con las heridas supurantes de mi corazón. Ni
me imaginaba siquiera lo que tenía preparado Dios
para mí, pues desde el momento que Jesucristo vino
a mi vida, Él la cambió por completo.

7
8 • CARY PALMÓN

Durante todos estos años que han pasado, Él ha


estado conmigo en todo momento y en toda
dificultad. Dios cambió mis lágrimas por alegrías,
pudiendo ahora decirles a otros que Él desea hacer
lo mismo que hizo conmigo: cambiar un corazón
quebrantado por uno nuevo. Él compone hogares,
sana cuerpos, restaura a los heridos de manera
emocional y bendice a todo aquel que viene en su
busca.

Sin embargo, lo que nunca me imaginé es que


Dios me daría, entre otras cosas, el honor de tener
una plataforma en la televisión y la radio para
decirles a todos los que andan sufriendo que hay una
esperanza de vida y que Cristo quiere darnos un
nuevo corazón.

A través del programa de televisión “Minuto


Final” y del programa radial “Conflictos del
Corazón”, he podido llegar a miles de personas al
brindarles palabras de esperanza. Y eso es lo mismo
que quiero hacer con este libro: darte esperanza en
Jesucristo para que Él te dé una nueva oportunidad
de vivir una vida victoriosa.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 9

Las historias que leerás, y que tienes en tus manos,


son el resumen de algunas de las cartas que nos
enviara nuestra audiencia. También encontrarás las
respuestas que les ha permitido cambiar las lágrimas
por alegrías.

Como te dije antes, Dios responde las oraciones y,


con tu permiso, haré en este momento una oración
por ti para que el mismo Dios que salva, sana y
restaura haga una gran obra en tu vida y en la de tus
seres queridos.

Cary Palmon
CAPÍTULO 1

Carmen
Solo una bestia sería
capaz

¡T odavía me conmuevo cuando lo recuerdo! ¡La


imagen es cruda cada vez que viene a mi
mente! Así que, pienso: ¡Cuánta maldad
puede haber en el ho mbre!

Esta fue la forma de cómo me enteré...

El despertador sonó a las seis y media de la


mañana, como es usual cada día. Ese día en
particular, a pesar de ser época de invierno, estaba
mucho más oscuro y frío que los otros días
anteriores. La temperatura había descendido mucho
durante esa madrugada. Miré por la ventana y
11
12 • CARY PALMÓN

observé que la nieve lo había cubierto todo. Así que,


como cada mañana, iba a mi cita matutina con mi
Señor. Entonces, de pronto y antes de mi oración
acostumbrada, tuve una sensación extraña,
diferente, como que alguien me hubiese estado
esperando toda la noche.

Miré a todos lados, tratando de encontrar una


explicación a esta experiencia. Luego, como no
encontré nada inusual, resolví que debía ser solo mi
imaginación. Sin embargo, como esa sensación se
hiciera cada vez más fuerte, me dirigí a encender la
computadora, algo que no hago por lo regular a esas
horas. Entonces, fui directamente a mi buzón de
correos y comencé a ver todos los que me habían
llegado. Mientras los observaba, tuve la convicción
de que al otro lado de aquella fría máquina había un
corazón que se estaba desgarrando de dolor y que
necesitaba una respuesta urgente a su clamor...

En efecto, di un clic... ¡y allí estaba Carmen


mostrando su dolor y el asco que sentía por ella
misma!
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 13

Entonces, apresuré mi cita con Dios. Le dije así:


“Padre, so lo tú sabes lo que o curre en el mundo ... Así
que, po r favo r, ¡úsame en este mo mento !”.

Preparada como madre para escuchar las


ilusiones y las desventuras de los hijos, acudí a la
lectura de su mensaje y no puede evitar que una
lágrima se me deslizara por la mejilla.

Carmencita fue muy expresiva y acuciosa al


narrar con detalles los hechos que dieron origen a su
desgracia. Me impactó en gran manera lo que dijo
acerca del quiebre total de su vida, lo que ella llamó...
“El regalo de sus quince años”.

¡No! No era un regalo clásico de una quinceañera,


sino un regalo de sangre y dolor. Y aunque en su
correo electrónico manifestaba un cariño particular
hacia mi persona, como si nos conociéramos desde
hace algún tiempo, también sentía el reclamo de
dónde había estado en sus momentos más difíciles...

En fin, aquí transcribo lo que dijo:

Querida Cary:
14 • CARY PALMÓN

So y Carmen y nací en un pueblecito de la co sta


no rte del Perú. So y huérfana de padre, pues él
murió cuando yo tenía diez año s. Ento nces, junto
co n mi madre, fuimo s a vivir co n mi abuela y un
tío .

Desde que llegamo s a esa casa, recuerdo que vivía


muy triste, extrañando a mi papá, pues él era muy
bueno ... muy cariño so co nmigo . No entendía po r
qué el destino , la vida, o lo que sea, tuvo que
llevárselo y dejarme so la. No entendía... o quizá sí,
po rque mi so ledad se acrecentaba más cuando en
el co legio veía a o tras niñas co n sus padres y yo no
lo tenía. ¡Lo extrañaba mucho ! Ento nces, supo ngo
que tratando de enco ntrar un “nuevo papá”, le
entregué a mi tío to do mi amo r y mi atenció n sin
saber que esto sería el inicio de mi desgracia...

Cary, ¡usted es mujer y co n seguridad sabe que la


ilusió n de to da niña es cumplir sus quince año s!
Sin embargo , co nvertirme en una quinceañera fue
para mí el inicio de mi pesadilla...

En esa épo ca, so ñaba y esperaba a mi “príncipe


azul”. Pensaba que vendría cuando cumpliera mis
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 15

quince año s y, así, en medio de ese sueño ... llegó la


no che fatal. No hubo fiesta. ¡Nadie se dio cuenta
de mi expectativa! ¡Ni siquiera mi madre! Y
mientras llo raba so la en la co cina esa no che,
escuché la vo z de mi tío que me llamaba. Po r un
mo mento pensé que quizá me tendrían una
so rpresa... Pero no fue así. Me llamaba para que
fuera a su habitació n. Y fui... entré... y allí, sin más
ni más, me dijo lo que nunca esperé me dijera.
Aquel a quien había llamado papá estaba un po co
bo rracho , casi co mo to do s lo s días. Me dijo sin
una so la pizca de duda que me aco stara co n él.
Que antes que viniera algún ho mbre a mi vida, ¡él
debía ser el primero !

Aso mbrada po r lo que escuchaba, tan so lo atiné a


suplicarle, a ro garle, que no lo hiciera... llo ré...
clamé... pero nada valió . El ho mbre en el cual yo
había depo sitado tanto amo r, po rque lo quería
co mo mi padre, estaba siendo co mo una bestia...
desgarrándo me... destruyéndo me no so lo po r
fuera, sino po r dentro y para siempre.

Cary, ¡fue terrible, cruel y do lo ro so ! So lo cuando


se quedó do rmido , pude escabullirme co mo me
16 • CARY PALMÓN

fue po sible y, esco ndida en un rincó n de la casa,


esperé a que llegara mi madre. Cuando la escuché
entrar, co rrí hacia su regazo bañada en lágrimas a
co ntárselo to do . Sin embargo , ella... ¡ella no me
creyó ! Al co ntrario , me acusó de mentiro sa y de
ser yo la que de seguro había pro vo cado a su
hermano . ¡Me pegó !

Fue “sangre y más sangre” mi regalo de


cumpleaño s. Y supo ngo que ya se puede imaginar
el resto de mi histo ria. ¡A tan tierna edad me
co nvertí a la fuerza en la amante co tidiana del tío !
Mis sueño s, mi “príncipe azul”... ¡to do se esfumó !
En vez de esto , vivía, o mejo r dicho , mo ría cada
día aterrada de tener ese “co ntacto ”. ¡Le tenía
asco ! ¡Le tenía o dio po r haberme ro bado no so lo
mi ino cencia, sino mi vida entera, mi futuro !

En cuanto pude, me fui de la casa. Co nseguí un


empleo mal pagado y, co mo es previsible, me
enamo ré de un chico que juró amarme a pesar de
mi pasado . ¡Y no s fuimo s a vivir junto s! To do era
“co lo r de ro sa” hasta que co menzamo s a tener
hijo s. Ahí fue do nde se le apagaro n to do s sus
sentimiento s hacia mí y hacia lo s do s hijo s que
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 17

teníamo s. A co ntinuació n, se fue de la casa en po s


de o tras mujeres y de lo s trago s. Co mencé a
desesperarme. No sabía có mo afro ntar so la to do s
lo s gasto s del ho gar, pues no enco ntraba trabajo
en nada. Ento nces, tuve que regresar a la casa de
mi abuela, do nde no so lo las puertas del ho gar
estaban abiertas, sino también las puertas de la
habitació n de mi tío .

Una vez más, y en co ntra de mi vo luntad, me


co nvertí en su amante. El o dio que tenía hacia él
había crecido , pero aho ra me encuentro atrapada
en esta situació n do nde co nsiento en ser su
amante para so stener a mi familia. En realidad, no
so lo lo o dio co n to do mi co razó n, sino que me
o dio a mí misma po r mi co mpo rtamiento ... ¡De
día y de no che! Este o dio me co nsume y no me
deja ni pensar. A veces, no quiero salir de la cama,
ni participar en la vida... ¡No sé qué hacer, Cary!
¡Quiero acabarlo to do ! En o casio nes, me vienen
pensamiento s tan ho rribles co mo matar a mis
hijo s y, luego , matarme yo ... ¿Qué hago ?

Cuando terminé de leer esta carta, solo pensaba


en la niña que había perdido su hogar y a su padre, y
18 • CARY PALMÓN

en cómo la vida le había llevado a tal extremo de


desesperación. Entonces, le respondí lo siguiente:

Querida Carmencita:

Se me estrujó el co razó n cuando leí el do lo r


reflejado en tu carta. ¡Lo siento ! Lo siento mucho ,
pero sé que eso no es suficiente.

Tu histo ria me recuerda que hay o tras perso nas


en este mundo sufriendo tu misma situació n a
mano s de sus pro pio s familiares y seres querido s.
¡Igual que tú se sienten defraudadas po r co mpleto
de esa perso na que tanto apreciaban! ¡Se sienten
llenas de asco y ya no existe auto estima ni amo r
pro pio !

En tu caso , ese tío a quien llamabas papá, a quien


co n ino cencia le habías entregado tu amo r de
niña, aquel tío , se co nvirtió en el arma de
destrucció n de tu vida. To do esto , sin siquiera
permitirte tener la po sibilidad de escapar, ni de
que te co nso laran. Así que te sientes co mo un vaso
de cristal ro to y sin co mpo stura. Lo más triste del
caso es que hasta aho ra el o dio y el renco r invaden
tu vida.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 19

Permíteme decirte que te entiendo a la perfecció n.


Que así co mo tú, en un mo mento de mi vida, yo
estaba llena de o dio y renco r, pero que en medio
de to do esto enco ntré la luz al final del túnel. Una
salida que me permito co mentarte. Esa salida se
llama perdó n. Po r lo tanto , perdó nate a ti misma
y a tu agreso r. Sé que no es fácil entenderlo y que
es aun más difícil aplicarlo . Sin embargo , ¡yo sé lo
que es perdo nar a alguien que no merece que lo
perdo nen! Co no zco muy bien esta experiencia,
po rque a mi padre lo asesinaro n de manera brutal
cuando él so lo tenía treinta y siete año s de edad y
yo meno s de dieciséis año s.

El o dio hacia el culpable de su muerte llenaba mi


co razó n año tras año hasta que, un día, Dio s me
ayudó a perdo nar a esa perso na culpable de su
muerte, dándo me cuenta de que yo también
necesitaba que me perdo naran po r mi falta de
amo r hacia Dio s y hacia o tro s.

En ese mo mento , le entregué mi co razó n lleno de


renco r y o dio para que Él me ayudara a perdo nar
y a bo rrar aquel do lo r. El perdó n es la llave que
sana nuestro s co razo nes. El perdó n no s restaura y
20 • CARY PALMÓN

abre puertas en nuestras vidas para tener un


nuevo co mienzo . Cuando uno perdo na, el po der
de Dio s co mienza a o brar de fo rma maravillo sa en
nuestras vidas y hasta cambia situacio nes. El
perdó n no es una sensació n, sino que es una
decisió n.

Carmen, necesitas saber que estás hecha a imagen


y semejanza de Dio s. Eres digna de que te amen,
te valo ren y te aprecien. Que te amen tal co mo
eres. Necesitas perdo nar al agreso r y pedirle a
Dio s que te saque de las circunstancias en las que
te encuentras.

Es ho ra de que salgas de la o scuridad y de la


vergüenza que has sufrido . No tuviste la
respo nsabilidad po r nada de lo que te hiciero n.
Dio s sabe que eras una niña ino cente. Esto y
segura que Dio s te dará un buen empleo , te
ayudará a criar a tus hijo s en una atmó sfera limpia
y decente, y te permitirá tener sueño s en tu vida,
lo s cuales se co nvertirán en realidad. ¿Có mo es
que lo sé?
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 21

Po rque yo misma so y testigo de las muchas


maravillas que ha hecho Dio s en mi vida y, no so lo
en la mía, sino en la vida de mucho s o tro s más que
han sufrido tanto co mo tú. Tengo la seguridad de
que así lo hará co ntigo también.
22 • CARY PALMÓN

Dios dice...
Muchos de los niños que son víctimas de abuso
sexual consideran que son partícipes de un secreto
mórbido y no enfrentan al abusador. Así que, por lo
general, no lo delatan por muchas razones. Ellos se
encuentran presos en una cárcel sin paredes.

Ningún varón se llegue a parienta próxima


alguna, para descubrir su desnudez. Yo Jehová.
Levítico 18:6

Las víctimas de abuso sexual experimentan daños


en los aspectos emocional, sexual y social. Estas
víctimas llevan en su corazón vergüenza, baja
autoestima y un patrón funesto para sus relaciones
sociales en su futuro. En su interior, desean que la
justicia se haga en contra del asaltante. En muchos
casos, hasta pueden obtener ayuda del gobierno
local, pero en otros casos la ayuda llega demasiado
tarde. El saber que Dios es justo, les da el
conocimiento de que Él, tarde o temprano, se
encargará de llevar a cabo la justicia que se merecen.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 23

Jehová es tardo para la ira y grande en poder, y


no tendrá por inocente al culpable. Nahum 1:3

Las promesas hechas por Jesucristo en cuanto a la


restauración de un individuo son eficaces y válidas
para todo el que ha perdido tanto debido al abuso
sexual. La víctima tiene que entregarse por completo
a Cristo permitiéndole que haga la restauración que
solo Él puede hacer en el corazón de la persona.

El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto


me ha ungido para dar buenas nuevas a los
pobres; me ha enviado a sanar a los
quebrantados de corazón; a pregonar libertad a
los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en
libertad a los oprimidos. Lucas 4:18
CAPÍTULO 2

Susana
No todo lo que brilla es
oro

¡A buela, abuela!”, dijo la niña, “¿nos dejas jugar


con todas tus joyas? ¡Deben costar millones
de dólares!”, gritó entusiasmada y a voz en
cuello. Yo sonreí... Me hizo mucha gracia ver su
carita expectante esperando mi respuesta.

La autora intelectual del saqueo a mi joyero era


una de mis nietas, Amaya, de solo cinco años de edad.
Lo que ambicionaba era que la dejara jugar con mis
collares y otras joyas que tenía guardadas en la
delicada caja china que me dejó la abuela. Ella, junto
con Audrey y Eva, mis otras dos nietas, fantaseaban

25
26 • CARY PALMÓN

sobre cómo se les vería luciendo aquellas “joyas” tan


valiosas. Sus cabecitas imaginaban que eran oro,
brillantes, perlas y zafiros, pero solo eran bisutería
en realidad. Y sus pícaros ojitos solo esperaban a que
asintiera a sus súplicas...

Me hice de rogar por un rato, pero como toda


abuela consentidora, al final saqué la caja china del
estante prohibido y les permití hurgar en la linda
cajita que, además, era musical. Así, al compás de las
bellas notas que emanaban, las niñas comenzaron la
faena. No podían ni imaginar el gozo que yo sentía
al verlas ponerse las joyas una a una. Actuaban como
las actrices en el estreno de una película: vestidas con
“joyas de gran valor”.

Mientras dejaba a las niñas jugar, me encaminé al


escritorio, como cada tarde, para leer los correos
electrónicos que esperaban respuesta.

Por lo general, los adultos sabemos que no todo lo


que brilla es oro, aunque la diferencia entre la
realidad y la ficción muchas veces se hace
imperceptible. Solo al madurar en la vida podemos
reconocer la diferencia entre lo real y lo ficticio. En
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 27

fin, estaba frente a la computadora y allí estaba


Susana. Su historia encajaba a la perfección con la
escena que acababa de dejar en el dormitorio.

Recorriendo las líneas de su carta, podía


imaginarme y hasta sentir el dolor de su corazón por
la rabia y la angustia que marcaron su vida al
enterarse que “aquel” a quien ella consider “su
príncipe azul” no era el que había soñado toda la
vida.

Tomé un respiro antes de responder el correo


para orar y, rogándole a mi Señor, le dije: “¡Ayúdame,
Padre, a ponerme en su lugar!”.

Aquí tienes lo que me narró Susana...

Señora Cary:

Me he permitido escribir esta carta po rque el


do lo r y la desesperació n van a hacer que co meta
una lo cura. ¡Esto y al bo rde de perder mi cabeza!

Ro lando era un ho mbre de nego cio s, apuesto e


inteligente. Era to do lo que pudiera desear una
mujer. Me enamo ré perdidamente de él y me casé
28 • CARY PALMÓN

sin pensar en aquel refrán que dice que “No to do


lo que brilla es o ro ”.

Y aunque mis primero s meses de casada fuero n


maravillo so s, dentro de mí sabía que algo no
encajaba. Un sentimiento de inco mo didad me
asaltaba co n frecuencia...

¡Había algo que me llamaba la atenció n! A


Ro lando no le gustaba to mar lico r ni frecuentar
reunio nes. Siempre tenía mucho trabajo . A mí,
po r el co ntrario , me encantaba el baile, la alegría
y las reunio nes co n mis amigas. No todo puede ser
perfecto, pensaba, no soy la protagonista de una
película romántica. Si íbamo s a alguna reunió n,
so lo era po r cumplir y no s retirábamo s temprano
po rque al día siguiente él tenía que madrugar, lo
que en efecto era cierto . Sin embargo , mi deseo de
bailar y de divertirme se quedaba frustrado ,
insatisfecho .

Para el cumpleaño s de mi mejo r amiga, insistí


mucho antes de salir para la fiesta. Ento nces, le
ro gue que no s quedáramo s a bailar: “Mañana es
do mingo ”, le dije, “no tendrás que madrugar. Ho y
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 29

quiero divertirme... dame ese gustito ”. Ro lando


accedió , aunque no de muy buena gana.

En la fiesta, to do iba muy no rmal. Reíamo s y


co nversábamo s al co mpás de una suave música...
hasta que empezó la verdadera diversió n. De
pro nto , ¡vi a mi espo so co mo si fuera o tra
perso na! Bebía y animaba a to do s... ¡hasta llegar a
ser el “alma de la fiesta”!

En ese mo mento , me empecé a sentir incó mo da,


ya que nunca lo había visto de esa manera. Llegó
al extremo de bro mear co n mis amigo s cuando
empezó a so nar la canció n “A quién le impo rta”.
¡Fue ento nces que le pedí mo deració n!

Mis amigo s se reían y cuchicheaban entre sí


po rque había to mado de la mano al hermano de
Claudia co n quien bailaba saltando y dando uno s
“gritito s” extraño s. Mi amiga, al ver mi
nervio sismo , trató de ayudarme haciéndo me una
bro ma. Aun así, yo sabía que su familia era muy
co nservado ra y no aco stumbraban a hacer
bro mas de esa situació n.
30 • CARY PALMÓN

Ento nces, me acerqué y le pedí que dejara de


to mar y que descansara un rato . ¡Se eno jó mucho !
Me dijo : “Me hiciste salir a divertirno s y, aho ra,
¿quieres regresar?”. Así que po r más que le ro gué
que no hiciera esa clase de espectáculo s, no me
hizo caso . ¡Hasta me pro puso que pidiera un taxi
para que yo me retirara de la fiesta y me fuera a
descansar!

Aquel día, gracias a Dio s, po r fin terminó , pero fue


allí do nde co mencé a entender mi desgracia...

A partir de esa experiencia supe que cada vez que


to maba un trago , “ese ho mbre”, ¡mi marido !, se
transfo rmaba en una perso na diferente. Perdía el
co ntro l y le encantaba juguetear a ser gay. Él es
mayo r, no es un ado lescente para hacer eso s
papelo nes. Mi madre ya me lo había advertido ,
pero a mí me mo lestaban sus co mentario s y
siempre le respo ndía airada, defendiéndo lo .

Al final, tuve que recurrir a ella para co ntarle mis


temo res. Me escuchó co n atenció n y me preguntó
si había no tado algo extraño cuando estábamo s en
la intimidad. Yo no quería hablar de ese tema,
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 31

aunque le dije que sí, pero que eran co sas sin


impo rtancia... “¿Qué co sas?”, preguntó mi madre.
“Bueno ... siempre necesita un trago ”, le respo ndí.
Ella se rió tratando de tranquilizarme y me co ntó
que papá también to maba a veces. “¿Algo más?”,
me preguntó al verme tan angustiada. Ento nces
tuve que co ntarle algo que no cabía en mi mente
y que excedía el juego ro mántico . Co n gran
esfuerzo tuve que admitir que mi espo so hasta se
había puesto mi ro pa interio r. Mi madre se
extrañó y sus co mentario s hiciero n que me
arrepintiera de haberle co ntado so bre mi
intimidad. Ento nces, de pro nto , lo que me dijo me
dejó paralizada: “Lo han visto salir co n el
hermano de tu amiga Mariso l. Desde aquella
fiesta, salen cada día a to mar café junto s”.

Yo traté de excusarlo , co mo siempre, aduciendo


que eso no pro baba nada. Hasta que mi madre no
pudo más y me co ntó que mi marido era la
co midilla de nuestro s allegado s que lo
co nsideraban “rarito ”. Yo ya no quise escucharla
más e indignada to mé mis co sas para vo lver a mi
casa.
32 • CARY PALMÓN

Sin embargo en la intimidad de mi habitació n me


preguntaba: ¿Có mo pude ser tan ciega? Me lo
había dicho mi madre... mis amigas... ¡y yo nunca
las quise escuchar!

Cary, yo so y jo ven y agraciada, y que Ro lando no


me buscara en la intimidad era algo que no
entendía. Lo justificaba relacio nándo lo co n lo
duro de su trabajo , hasta que hace tres meses tuve
que salir fuera de la ciudad a cuidar a mi mamá,
pues se había enfermado . Al regresar antes de
tiempo y abrir la puerta, sentí vo ces y risas
extrañas. Avancé hacia el do rmito rio y enco ntré a
mi espo so co n el hermano de Mariso l en una
escena que yo no so po rté y caí desmayada.
Cuando po r fin al cabo de un tiempo , reaccio né y
vi a mi espo so llo rando al pie de nuestra cama.

“Nunca esperé esto de ti”, le dije bañada en


lágrimas. Ento nces me co nfesó algo co n lo que
luchaba po r año s: él se resistía a admitir que era
ho mo sexual, que to do empezó de niño cuando su
tío lo había vio lado . Po r eso no to maba, po rque
sabía que al desinhibirse ya no po dría disimular.
Me dijo que me amaba, que esperaba que ese amo r
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 33

lo ayudara a dejar su “do ble vida”, pero que, a la


larga, no pudo resistir su debilidad. Me dijo que
no me sintiera culpable po rque la falla era suya y
que, po r temo r, no me lo había co nfesado antes.

En lo único que yo pensaba era en lo que me diría


mi madre diría... ¡Que me lo había advertido !

Me ro gó que lo perdo nara y le diera o tra


o po rtunidad, pero me negué de manera ro tunda y
le pedí que se fuera y no me buscara nunca más,
que se llevara sus co sas... Le grité que me haría la
cuenta que había muerto , po rque no po día
perdo narle que me fuera infiel co n o tro ho mbre.

Cary, me encuentro en un estado de depresió n tan


pro funda que no sé qué hacer. Las mujeres
luchamo s po r nuestra pareja cuando la rival es
o tra mujer. Sin embargo , es inso po rtable pensar
que lo hizo co n o tro ho mbre. Desde ese día no lo
he vuelto a ver ni tampo co quiero hacerlo . La
rabia, la impo tencia y la desesperació n me están
embargando , y siento que no puedo luchar. A
pesar de lo s co nsejo s de mi madre de salir a
co no cer o tras perso nas, no puedo . Tengo miedo ...
34 • CARY PALMÓN

aho ra creo que uno jamás sabe... no lo graré


co nfiar nunca más. ¡Ayúdeme, Cary, no puedo
más co n esta desesperació n! Tengo la idea que la
muerte es lo único que puede liberarme. Y lo triste
es que to davía lo amo .

Conmovida por su relato le respondí de esta


manera:
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 35

Mi querida Susana:

Miles de mujeres casadas sufren po r la infidelidad


de sus có nyuges. El adulterio es un cáncer que
destruye lo s ho gares. La so ciedad actual minimiza
esta plaga po rque se presenta co mo algo no rmal,
co mo parte de la vida. Eso es erró neo po r
co mpleto . El adulterio no so lo es la infidelidad del
espo so co n o tra mujer, sino también co n alguien
del mismo sexo , co mo en tu caso . Mirar
po rno grafía, o hasta una relació n plató nica,
también co nstituye adulterio .

Las raíces del pro blema de identidad muchas


veces radican en la infancia a co nsecuencia de la
ausencia paterna o debido a las madres
do minantes. El abuso de padres o de familiares
pro vo ca co nfusió n en el mo delo masculino ,
causando pro blemas de identidad en el ho mbre.
Mucho s piensan que casándo se to do se arreglará,
pero no necesariamente sucede así. Po r o tro lado ,
la bebida ado rmece la co nciencia, permitiendo
que la debilidad salga a flo te. De mo do que la
perso na que desea evitar que eso suceda se
abstiene de ella.
36 • CARY PALMÓN

En la actualidad, la so ciedad va en co ntra de las


leyes mo rales y exige una libertad destructiva. De
esa manera pasa po r alto las leyes espirituales. La
ho mo sexualidad expo ne al individuo a mucho s
do lo res incluyendo el SIDA. También la
co nciencia acusa, po rque en el fo ndo se sabe que
el adulterio y la ho mo sexualidad no so n la
vo luntad de Dio s. Po r último , estas perso nas se
sienten estigmatizadas, devaluadas y sin espacio
po rque la misma so ciedad permisiva termina
co ndenándo las.

Dio s diseñó el matrimo nio para que hubiera


amo r, pro tecció n. Su intenció n fue que en el
ho gar lo s hijo s recibieran una crianza co n
equilibrio emo cio nal y que se prepararan para
una vida pro ductiva y sana. Po r lo tanto , el
divo rcio no está en lo s planes de Dio s, debido a
sus efecto s destructivo s para to do s en la familia...

El adulterio es un pecado . Sin embargo , este acto


de traició n puede repararse y superarse a través
de do s co ndicio nes básicas: el arrepentimiento
genuine del adúltero , demo strándo le a su pareja
que ya no co ntinúa haciéndo lo , y el perdó n to tal y
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 37

sincero de la víctima. Y cuando no s referimo s al


perdó n, no po demo s o lvidarno s de que el culpable
también debe perdo narse a sí mismo .

Perdo nar es o lvidar po r co mpleto to do lo


sucedido . Si se perdo na, pero no se o lvida, la
o fensa sigue presente y el do lo r latente. Es
necesario hacerlo co n miserico rdia, sin to car de
nuevo el asunto y sin permitirle a la mente que
sigan co n co njeturas y celo s. Esto requiere
disciplina, pero vale la pena.

Dio s ama al pecado r y desea ayudarlo en un


pro ceso de restauració n que necesitamo s to do s.

Mi co nsejo es que co ntinúes siendo amo ro sa y


co mprensiva. Que sigas ayudando a tu espo so
po rque necesitará, además, ayuda pro fesio nal
para sanar las heridas del pasado . Ora po r él, pues
también merece que le rescaten. Creo que serás
una mujer más que testifique que, do nde no había
esperanzas, hubo un milagro de restauració n.

Es un pro blema co mplejo , pero hay esperanza y


so lució n para tu matrimo nio . Co n Dio s to do es
po sible.
38 • CARY PALMÓN
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 39

Dios dice...
Existen muchas razones por las cuales una
persona tiene conflictos de identidad. Sin embargo,
una parte importante de ellas es que se originan
debido a trágicas circunstancias durante la niñez,
tales como crecer sin un padre e incluso ser víctima
de violación en la niñez, etc. Aun así, esto no les da
derecho a cambiar lo que dice Dios. Él nos ha dado
las instrucciones específicas que gobiernan nuestras
conductas, por eso no podemos llamar a lo que es
malo bueno, ni a lo bueno malo (lee Isaías 5:20).

Por esto Dios los entregó a pasiones


vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron
el uso natural por el que es contra naturaleza, y
de igual modo también los hombres, dejando el
uso natural de la mujer, se encendieron en su
lascivia unos con otros, cometiendo hechos
vergonzosos hombres con hombres, y
recibiendo en sí mismos la retribución debida a
su extravío. Y como ellos no aprobaron tener en
cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente
40 • CARY PALMÓN

reprobada, para hacer cosas que no convienen.


Romanos 1:26-28

Todos pasamos por tentaciones para que


hagamos lo indebido. Sin embargo, Dios nos da la
fortaleza para resistir la tentación. A fin de llevar a
cabo un proceso de restauración con éxito, la
persona debe incorporar a su vida estrategias que le
ayuden en el momento de la tentación, tales como
pedirles ayuda en dichas situaciones a un pastor o
consejero, así como implementar cambios en cuanto
a las amistades del pasado o lugares que frecuentaba
que pueden hacer que caiga de Nuevo en la misma
conducta.

Cada uno es tentado, cuando de su propia


concupiscencia es atraído y seducido. Santiago
1:14

La persona que está batallando con esta situación


en su vida necesita comprender que Jesucristo desea
liberarlo de esta opresión, y que no solo lo desea, sino
tiene el poder para que pueda vivir en libertad por el
resto de su vida.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 41

Para esto apareció el Hijo de Dios, para


deshacer las obras del diablo. 1 Juan 3:8
CAPÍTULO 3

Andrés
Mi lazarillo de luz

E ran cerca de las tres de la tarde y estaba


enfrascada por completo en la redacción de
uno de los capítulos de mi próximo libro
cuando sonó el teléfono... Me enojé conmigo misma
por haber dejado el teléfono conectado mientras
escribía.

Aun así, respondí la llamada.

Había tomado la firme decisión de desconectar el


teléfono para no perder el hilo de mis
pensamientos... pero a veces olvidaba hacerlo, por
alguna razón u otra. Al responder, escuché la voz

43
44 • CARY PALMÓN

angustiada de Rosario, una amiga muy querida. En


cuanto la escuché, supe que algo malo le sucedía.

La voz de Rosario se sentía muy angustiada. Entre


sollozos me contó que Priscila, su sobrina de tan solo
quince años, había sufrido un accidente cerebro-
vascular. Le dijeron que una vena se había lesionado
y la estaban trasladando en ese momento al hospital
en helicóptero para ver si podían salvarle la vida a
través de una operación. Sus padres estaban
desesperados...

Miré de nuevo el teléfono y le di gracias a Dios


por no haberlo desconectado, pues pude ayudar, en
lo que estuvo a mi alcance, a mi amiga Rosario.
Mientras caminábamos por el pasillo del hospital,
recordé con algo de tristeza la historia de Andrés,
quien también sufrió un accidente siendo muy joven,
al igual que la sobrina de Rosario.

Andrés era un muchacho que tenía toda la vida


por delante, como muchos otros de su edad, pero un
inesperado evento cambió su vida de repente. Era un
buen muchacho, comprometido con su trabajo y con
sus responsabilidades de la vida diaria. Lleno de
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 45

sueños y esperanzas, pues sabía que le esperaba un


futuro prometedor. De manera inesperada, Andrés
quedó prisionero de los trágicos acontecimientos
que marcaron su vida... El correo electrónico de
Andrés decía así:
46 • CARY PALMÓN

Apreciada Cary:

Espero que pueda ayudarme, pues la situació n en


que me encuentro es muy delicada. Déjeme
co ntarle desde el principio .

Mi familia es muy pequeña. So lo so mo s mi madre


y yo . Ella ha sido el empuje de mi vida para salir
adelante. Desde niño , me enseñó a estudiar, a
trabajar y a ser aho rrativo . Así que siendo muy
jo ven co mencé a trabajar en una fábrica que le
llamaban “La Fundició n”, pues fundían diverso s
metales para distinto s uso s. Lejo s de lamentarme
po r trabajar en semejante lugar, me entusiasmaba
pensar en ser el so stén de mi madre; más aun,
cuando mi trabajo no me impedía jugar al fútbo l
co n mis amigo s del barrio . Incluso , co mencé a ir a
la universidad y hacer la vida no rmal co mo
cualquier muchacho de mi edad.

Recuerdo co n claridad el día que recibí mi primer


sueldo : emo cio nado , co rrí a casa pensando en
celebrarlo co n mi mamá y llevarla a co mprarse un
vestido nuevo y cenar junto s en algún lindo lugar.
Estaba feliz de pensar que en adelante sería yo el
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 47

que pro veería para lo s gasto s del ho gar. ¡Mi


madre no lo permitió ! Po r el co ntrario , decidió
que ese dinero se destinaría “al aho rro para mi
futuro ”.

En lo s cinco año s siguientes, me co nvertí en un


experto en lo que hacía y me gané el respeto de
mis jefes y co mpañero s. Co mo mi trabajo en la
fundició n incluía manipular ácido s peligro so s,
usaba guantes y lentes pro tecto res. Lo lamentable
es que, en mi inmadurez, me resistía a usarlo s
po rque me hacían más lento y disminuía mi
pro ducció n. Me sentía muy seguro trabajando
co n eso s pro ducto s. No les temía.

Sin embargo , y co mo era de esperarse, llegó el día


fatal de mi vida: Uno de lo s frasco s que co ntenían
lo s químico s para la fundició n resbaló , y estando
a punto de to car el suelo , po r puro impulso me
abalancé so bre el mismo , salvando el frasco para
que no se ro mpiera. El ácido , en cambio , saltó a mi
ro stro y lo que fue peo r... ¡cayó en mis o jo s!

Me atendiero n de inmediato , pero po r lo que


po dia percibir, era evidente que tenía quemaduras
48 • CARY PALMÓN

en to do el ro stro . Ento nces, al tratar de abrir lo s


o jo s, sentí un do lo r tan penetrante que estuve a
punto de quedarme inco nsciente. Cuando le
avisaro n a mi madre lo sucedido , llegó a la sala de
emergencia y sé que se puso a llo rar sin co nsuelo .

Pasado s uno s días, lo s médico s en el ho spital me


hiciero n mucho s exámenes y tratamiento s; hasta
que, al final, un médico se acercó a mi habitació n
y de manera so lemne no s info rmó que el ácido
había co mpro metido el nervio ó ptico , la retina y
el glo bo o cular, incluyendo las ó rbitas de mis o jo s
que quedaro n dañadas. Había quedado ciego ...

Recuerdo el llanto de mi madre al saber que había


quedado ciego y que no era algo pasajero . En mi
mente co mencé a pensar en mis ilusio nes y mis
planes de vida. Mi futuro estaba arruinado y
estaba co ndenado a vivir en la o scuridad po r el
resto de mi vida. Llo ré co mo un niño pequeño . Mi
madre trataba de co nso larme, pero en la sala se
po día escuchar también su llanto .

Tenía veintidó s año s de edad cuando me o currió


este accidente. Aho ra, que ya han pasado alguno s
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 49

año s, puedo decir que la recuperació n ha sido


lenta, do lo ro sa y ago biante co n las huellas de las
cicatrices que me recuerdan que la vida puede
cambiar de un mo mento a o tro .

En mi caso , po r fo rtuna, co ntábamo s co n el


aho rro que mi madre me aco nsejó tener y
lo gramo s abrir una tienda para trabajar en ella y
vivir de eso s ingreso s. Sin embargo , en mi afán de
“ser no rmal”, me co mpré una co mputado ra que
respo nde a mi vo z, aunque también he aprendido
Braille, lo que hace que pueda co nectarme co n el
“mundo real”.

Además, me atreví a to mar un curso de liderazgo ,


pues quería liderar mi vida e influir en o tro s. Así
que aho ra escribo artículo s publicables co n la
ayuda de Ro xanita, una jo ven a la que llamo “mi
secretaria”. Ella viene to das las tardes a acelerar la
pro ductividad: yo dictándo le y ella escribiendo
mis pensamiento s.

Seño ra Cary, aunque usted no lo crea, en este


tiempo las tardes se han co nvertido en lo s
mo mento s más maravillo so de mi vida. Las espero
50 • CARY PALMÓN

co n mucha ansiedad, pues me siento muy atraído


po r Ro xanita... ¡es co mo mi ángel de la guarda!

Hace uno s días, decidí co nfesarle mis


sentimiento s y ella lo s co rrespo ndió . Me dice que
sigo siendo muy guapo y buen ho mbre. Hasta dice
que cualquier mujer po dría enamo rarse de mí. Sin
embargo , yo les tengo temo r a mis sentimiento s,
pues en mi mente me persiguen alguno s
interro gantes co n lo s que me gustaría que usted
me pudiera ayudar.

Me pregunto si una mujer puede enamo rarse en


realidad de un ciego . ¿O so lo será co mpasió n?
Pienso que algún día, si no s casáramo s, ella po dría
llegar a sentir que es mi lazarillo y no mi espo sa.
Aunque esto y enamo rado , se me hace impo sible
pensar en que ella pueda unir su vida a la mía, pues
me parece que no la puedo apo yar, sino que, po r
el co ntrario , mi apo yo es ella.

Esto y angustiado po r este dilema que afro nto .


¿Qué me aco nseja, Cary?

Como siempre, le pedí a Dios que me iluminara y


me diera las palabras adecuadas para responderle a
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 51

Andrés. Y esto fue lo que el Señor puso en mi


corazón que le dijera:

Apreciado Andrés:

De alguna fo rma tu histo ria me recuerda a la mía.


Yo también tuve que empezar a trabajar desde
muy jo ven, a partir de la súbita muerte de mi
padre. En ese ento nces, so lo tenía quince año s de
edad. Eso nunca estuvo en nuestro s planes, pues
mi madre se quedó desco nso lada debido a su
muerte, así que yo decidí salir a trabajar para
pro veer el sustento familiar, y no so lo a mi madre,
sino también a mi hermanita meno r.

¡No fue fácil! Además de trabajar, tuve que


terminar de estudiar en el co legio y lo s días se me
hacían interminables. Recuerdo muy bien el
cansancio que sentía, pero también recuerdo el
go zo que experimentaba al llegar a mi casa
trayendo el dinero para lo s gasto s de la casa y ser
el sustento de mi madre y de mi hermanita.
¡Precisamente co mo tú! A pesar que eso s no eran
lo s planes de Dio s para mi vida, le do y gracias a Él
52 • CARY PALMÓN

po r haberme dado la fo rtaleza a fin de po der


trabajar de manera ho nrada y ayudar a mi familia.

Sé que mucho s o tro s jó venes han enfrentado


situacio nes similares y después han sentido la
alegría de haber tenido el valo r para sacar
adelante a sus familias. En eso s año s de trabajo se
aprenden muchas co sas que no s sirven en la vida,
además de tener la satisfacció n de haber sido de
bendició n a nuestras familias. ¡Te felicito po r salir
adelante! Y po r el pro blema de tus temo res,
permíteme co ntarte una histo ria que espero te
sirva de inspiració n para perder tus miedo s y
seguir adelante co n tu vida.

Se trata de un ho mbre famo so , llamado Jim. Era


un muchacho trabajado r y estudio so , co n un
future pro metedo r y brillante. Sin embargo , casi
al finalizar sus estudio s, se le presentaro n serio s
do lo res de cabeza y pro blemas en la visió n.
Después de mucho s estudio s y análisis escuchó las
mismas palabras que escuchaste tú: quedaría
ciego sin remedio . Su do lencia o bedecía a un
pro blema genético que en po co s meses le dejó en
la o scuridad to tal.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 53

Jim quedó devastado . To do s sus sueño s quedaro n


truncado s: no habría graduació n, ni no via, ni
hijo s. So lo aquella terrible y permanente
o scuridad. Se encerró en su casa y se negó a salir
de ella po r mucho tiempo . Le co stó mucho
aco stumbrarse a la ceguera. Una tarde quiso ver
su pro grama favo rito de televisió n. Negándo se a
sentirse frustrado , le pidió a su majo r amiga que
le narrara las escenas que iban sucediendo . Ella
asistía a su casa co n regularidad y repetían el
ritual: ella le narraba las escenas y él se las
imaginaba.

Haciendo esto tuvo una idea fabulo sa: Si él po dia


hacerlo , o tro s ciego s también po drían “ver” co n
lo s o jo s de la imaginació n.

Ento nces Jim decidió capacitarse y dedicarse al


ro daje de películas para ciego s. La técnica es la
misma: cuando la película co rre, hay un narrado r
que va describiendo las escenas. En la actualidad,
Jim es pro pietario de una serie de pro gramas de
televisio n para ciego s en lo s Estado s Unido s, en el
cual se Narran to do s lo s pro gramas y miles de
ho mbres y mujeres co n ceguera pueden disfrutar
54 • CARY PALMÓN

una vez más sus pro gramas favo rito s a través de


la narració n y la imaginació n. Ha sido una
bendició n para to do s ello s. La amiga que de
manera so lícita iba a narrarle las películas, es ho y
su espo sa y co mpañera. Su matrimo nio es no rmal
y feliz.

Siendo ya empresario de la televisió n, algo muy


tierno sucedió en un mo mento de su vida. Eso fue
cuando el médico le dijo que tal vez un trasplante
le pudiera ayudar a devo lverle la visió n, pues
había un do nante. Agradecido , Jim le pidió al
médico que le revelara la identidad de la perso na
fallecida que tuvo la no bleza de do nar sus o jo s. El
médico , co nmo vido , le respo ndió que la perso na
estaba viva y que se trataba de su pro pia abuela...
El amo r de esta mujer hizo que ella decidiera darle
lo mejo r que tenía a su nieto , Jim.

Quiero que sepas, Andrés, que Dio s te ama, y que


el amo r que Él siente po r ti hizo que diera lo mejo r
que tenía: Jesucristo , su Hijo único , a fin de que tú
recibieras perdó n, restauració n y una nueva vida
po r medio de Él. Ho y puedes aceptar el amo r de
Dio s o rechazarlo . El amo r de Dio s echará fuera
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 55

to do temo r... Al aceptarlo , recibirás el mejo r


regalo que puedas tener en la vida.

Te deseo que go ces de tu nueva vida en Dio s y


aceptes este regalo de Él.
56 • CARY PALMÓN

Dios dice...
La Palabra de Dios nos indica que la voluntad de
Jesucristo era la de sanar a todo el que necesitaba
recuperar su salud. Unos recibieron su sanidad al
instante y, en otros casos como los leprosos, se
fueron sanando a medida que iban caminando. Una
y otra vez, las Escrituras mencionan que todo el que
vino a Jesucristo recibió su sanidad cuando la
solicitó.

Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos


endemoniados; y con la palabra echó fuera a los
demonios, y sanó a todos los enfermos; para
que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías,
cuando dijo: El mismo tomó nuestras
enfermedades, y llevó nuestras dolencias.
Mateo 8:16-17

La Palabra de Dios nos indica que debemos


clamar a Dios por nuestra sanidad.

Jehová Dios mío, a ti clamé, y me sanaste. Salmo


30:2
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 57

La compasión de Dios se extiende para todo el que


sufre de cualquier enfermedad. Una y otra vez se lee
en la Biblia de que Él desea sanarnos y rescatarnos
de este sufrimiento. Nuestra parte consiste en orar
por los enfermos y no dudar de que la voluntad de
Dios es que la persona no sufra y que reciba su
sanidad.

¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a


los ancianos de la iglesia, y oren por él,
ungiéndole con aceite en el nombre del Señor.
Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor
lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le
serán perdonados. Santiago 5:14-15
CAPÍTULO 4

María Soledad
De tal palo, tal astilla

M e encanta cocinar y, por supuesto, a mi


familia le encanta comer. Somos... ¡el
equipo ideal! Un día de estos me animaré
a publicar un libro de recetas.

En una tarde en particular, tenía planeado


enseñarle cómo hacer un flan a mi nuera. Ella es
estadounidense y, en su país, el flan es muy popular,
aunque no todos conocen la verdadera receta. Por
eso, el “secreto del flan” es muy codiciado entre ellos.

Llegado el momento, no vino sola, sino que la


acompañaba Cherish, ni nietecita adolescente. Ella
también quería aprender “los secretos de su abuela”.

59
60 • CARY PALMÓN

Así que al poco tiempo, las tres convertimos la cocina


en una sala de fiesta. ¡Qué divertido fue tener una
reunión 3G (de tres generaciones)! No puedo
expresar la alegría que sentí al darme cuenta que las
dos estaban ansiosas por aprender a preparar ese
delicioso postre.

Nos pasamos la tarde horneando el flan mientras


que, a la vez, se deleitaban escuchando mis historias.
Entre animadas conversaciones, pasaron las horas y
así, en poco tiempo, terminamos tres grandes
porciones de postre.

Al final de la tarde, madre e hija se llevaron


consigo los deliciosos manjares y, mientras subían al
auto, mi hijo me decía por teléfono que las esperaba,
listo para saborear su postre preferido. Estaba muy
contento del hecho, pues sabía que a partir de ese
momento disfrutaría de esa exquisitez sin tener que
venir a mi casa...

Cuando mi nuera y mi nieta se marcharon, me


quedé pensando en cómo una madre tiene mucho
que enseñarles a sus hijos. No en vano nuestros hijos
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 61

viven a nuestro lado sus primeros años aprendiendo


lecciones para la vida.

Sin embargo, este hecho me trajo un profundo


recuerdo sobre María Soledad y en cómo esta chica
tuvo que atravesar una gran crisis debido a la
desgraciada influencia de su madre. A decir verdad,
me estremece el solo hecho de recordarlo, pero más
aun cada vez que vuelvo a leer su carta. Me resultaba
difícil pensar en que no todas las madres tienen
buenos planes para sus hijos.

Esta es su narración...

Apreciada señora Cary:

No sé có mo co menzar esta carta po rque me


siento muy avergo nzada de lo que le vo y a co ntar.
Me animé a escribirle pues usted me inspira
co nfianza y esto y segura de que puede ayudarme.

Mi pro blema co menzó cuando era muy jo ven.


So y huérfana de padre, pues él murió cuando yo
era muy pequeña. ¡Tenía cirro sis hepática debido
a su adicció n a la bebida!
62 • CARY PALMÓN

Aunque me crió co n mo destia, la po breza no pudo


arrebatarme la devo ció n que le pro fesaba a mi
madre. Yo la quería mucho y era lo único que
tenía. Es más, creo que la quería tanto que no
imaginaba mi vida sin su presencia. Sin embargo ,
mis sueño s y to do mi mundo de niña quinceañera
se derrumbaro n cuando mi madre me dijo algo
que mis o ído s se negaban a escuchar.

Sus crueles palabras co menzaro n a salir de su


bo ca co mo sale la inmundicia de la clo aca... Cary,
¡me duele aún! No dejo de pensar a cada mo mento
en esas frases que desgarraro n mi co razó n y
cambiaro n mi vida para siempre.

Aquel día sin ningún reparo me dijo : “Hijita... ¡Ya


dejaste de ser quinceañera! Acabas de cumplir
dieciséis año s y ha llegado el tiempo que “ese
teso rito ” que tienes no s pro po rcio ne el dinero que
necesitamo s. ¡Gracias a esa “co sita” po drás ir a la
universidad y vestirte co mo es debido !”.

No sabía de qué estaba hablando ... Era mi madre,


la más santa que yo creía. Ento nces, dejando de
lado ese aspecto sublime que tenía, me explicó co n
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 63

lujo de detalles lo que quería que yo hiciera. Po r


supuesto , ese “algo ” ro mpió mi co razó n. Me dijo
que el “teso rito ” al que se refería era mi virginidad
y que había un tal Sr. Pineda listo para pagarno s
buen dinero co n tal que yo accediera a estar co n
él.

¡Me enco ntraba en estado de cho que!


¡Co nfundida po r co mpleto ! ¡No lo po día creer! En
ese mo mento , lo que anhelaba era “reservarme”
para un muchacho que estuviera enamo rado de
mí y que fuera el que quisiera casarse co nmigo ...
El sueño ideal de mi vida...

Traté de co nvencer a mi mamá que no iba a hacer


tal co sa, po rque algo en mi interio r me decía que
acceder a lo s requerimiento s del tal Sr. Pineda no
era apro piado . Mi mamá, en cambio , insistió en
que aceptara. Es más, me dijo que de esa manera
po dríamo s tener el dinero no so lo para ro pa, sino
para o tras co sas de las que carecíamo s. Y acepté...
Nunca o lvidaré la no che de ese ho rrible suceso .
¡Fue el peo r mo mento de mi vida! Mi cuerpo me
quedó do lo rido , pero mi alma quedó
ensangrentada y llo rando ... Clamando que to do
64 • CARY PALMÓN

fuera tan so lo un feo sueño ... una pesadilla, pero


no fue así.

Lo s siguientes días fuero n peo res. Co ntinué


haciéndo lo una y o tra vez, y co mencé a descuidar
mi arreglo perso nal. Mi madre me pedía que me
bañara, no teniendo en cuenta que aunque me
bañara mil veces, yo seguía sintiéndo me sucia.
Además, la idea de tener ro pa nueva no me
causaba alegría, ni mo tivació n alguna. Pero en fin,
mi vida co ntinuó así, día tras día...

Después del Sr. Pineda viniero n o tro s y o tro s. En


un abrir y cerrar de o jo s me había co nvertido en
una pro stituta de pro fesió n. To do po r aceptar lo s
co nsejo s de mi madre... ¡Lo s co nsejo s de la mujer
que me dio la vida! Sin embargo , la necesidad
eco nó mica co menzó a taladrar mi mente y, de
pro nto , ya no po día vivir co n po co dinero ni co n
carencias. Al final, ¡la ambició n terminó po r
co nvencerme!

Pasó el tiempo y co no cí a un ho mbre maravillo so .


Él era casado , pero a mí eso no me impo rtaba. Era
tierno , guapo , amable. Me trataba co mo una
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 65

mujer decente. Yo estaba lo ca po r él, pero nadie lo


sabía. Pasaro n lo s meses hasta que un día
desapareció de mi vida y nunca más lo vo lví a ver.
No o bstante, ese ho mbre me dejó “un regalo ”. Me
enteré que estaba embarazada de él, y co mo
to davía me sentía muy enamo rada, acepté “este
regalo ” co n gran alegría.

Mi madre me regañó y se burló , diciéndo me:


“¡Mira la ro mántica!”. Sin embargo , aceptó
ayudarme co n la niña, pero co n la co ndició n de
que no tuviera más hijo s. Ambas cumplimo s
nuestras pro mesas.

Mi madre me ayudó a criar a mi niña mientras yo


co ntinuaba en mi “pro fesió n”. Luego , cuando mi
hija creció , tuve que mentirle so bre mi trabajo
pues me daba mucha vergüenza que se enterara de
lo que hacía. Le dije que era enfermera. Ella no
debía nunca enterarse del verdadero o ficio al que
me dedicaba.

Al cumplir lo s quince año s, ¡mi hija ya era una


mujer muy hermo sa!
66 • CARY PALMÓN

Ento nces un día, de repente, mi hija se me


enfrentó y me preguntó si yo era una pro stituta.
El cielo me cayó encima y quise desaparecer del
mundo al escuchar esas palabras saliendo de su
bo ca. Co n intenso do lo r le pregunté: “¿Quién te
dijo semejante co sa?”. Ella respo ndió que fue su
abuela, que ella le había co ntado lo que yo hacía
para que no no s faltara nada. Y lo que es peo r, mi
madre además le había dicho que ya yo estaba
vieja y que era tiempo de que ella, mi hija, me
ayudara a traer el dinero a la casa de la misma
manera en que lo hacía yo .

No so po rté que mi hija supiera esa verdad, ni lo


que mi madre le había insinuado que hiciera ella
también. Co mencé a gritar y a llo rar. Mi madre
salió de su habitació n para saber lo que sucedía.
Tuvimo s una pelea terrible y le dije que no iba a
arruinar la vida de mi hija co mo lo hizo co nmigo ,
po rque esa niña se merecía algo mejo r. Así que le
pedí a mamá que se fuera de mi casa po rque no iba
a permitir que también destruyera la vida de mi
hija.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 67

Ento nces, para mi so rpresa, mi hija se puso a favo r


de mi madre y me gritó : “¡Si mi abuela se va, yo
también me vo y!”. No se puede imaginar el do lo r
que sentí al ver que mi hija estaba en mi co ntra y
co nvencida de las ideas de mi madre.

Después de esa pelea, he resuelto cambiar mi


estilo de vida. Mi madre y mi hija están co nmigo
en la casa y yo necesito pro veer para nuestro s
gasto s, pero no sé qué hacer ni có mo hacerlo ...
Gracias po r su tiempo , espero su respuesta.

Después de leer la carta de María Soledad me


sentí apenada y a la vez indignada de que hubiera
madres capaces de llevar a sus hijas por un camino
así. Como cada vez que respondo estos interrogantes
de la vida, le pedí a Dios su dirección para
responderle a María Soledad y esto fue lo que le
dije...

Estimada María Soledad:

Ante to do , debo felicitarte po r to mar la decisió n


de salir de ese estilo de vida y de vivir
decentemente. ¡No te desanimes en tu intento !
Estás to mando una Buena decisió n y, so bre to do ,
68 • CARY PALMÓN

ho nro sa. Así demuestras tu deseo de cambiar el


curso de tu vida.

Co n respecto a tu hija, o pino que la mala


influencia de tu madre y su apego hacia ella la
po nen en peligro de seguir po r el mismo camino
al que te llevó tu madre. Necesitas la ayuda de
Dio s para cambiar el rumbo de tu vida y, so bre
to do , el de la vida de tu hija antes que sea
demasiado tarde.

Lo primero es tener fe en Dio s, lo segundo es


po ner en acció n esa fe... déjame explicarte: Tanto
tu hija co mo tú necesitan bueno s mento res en sus
vidas que les enseñen y les ayuden a vivir una vida
ho nrada; una vida co n lo s valo res mo rales que
so lo Dio s puede enseñarles a través de su Palabra.

Po r lo tanto , te sugiero que busques una Buena


iglesia cristiana en la cual les enseñen la Palabra
de Dio s y en la que tu hija pueda reunirse co n
jó venes decentes que la animen a vivir una vida
diferente.

Allí, en la iglesia, tu hija tendrá la o po rtunidad de


ver la diferencia entre lo que co no ce y el
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 69

co mpo rtamiento de un hijo de Dio s. El mismo


grupo la puede ayudar a cambiar sus patro nes de
co nducta.

Tengo que aclararte que lo único que cambia en


realidad a una perso na es un verdadero encuentro
co n Jesucristo co mo Salvado r de nuestras vidas.
Cuando esto o curre, co mienza la transfo rmació n
dentro de nuestro co razó n, y nuestra co nciencia
empieza a funcio nar co mo es debido ,
indicándo no s el camino a seguir.

Po r lo que puedo deducir de tu carta, tú aún no


has tenido ese encuentro co n Cristo , pero debes
empezar po r allí. Ento nces, desaparecerá ese
sentimiento de suciedad, de estar manchada.
To do s no s hemo s sentido así, hasta el día en que
Cristo no s limpió co n su sangre divina.

Espero recibir no ticias tuyas y de tu hija en las que


me cuentes que Jesús ya es el Seño r de tu vida y
que ambas han empezado su pro ceso de
transfo rmació n para vivir una vida libre, ho nrada
y feliz.
70 • CARY PALMÓN

Dios dice...
Aunque vivimos en tiempos donde existe una
gran carencia de santidad en el aspecto sexual por
parte de la gente, esto no quiere decir que tenemos el
permiso de Dios para practicar la fornicación y la
prostitución.

¿No sabéis que los injustos no heredarán el


reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni
los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados,
ni los que se echan con varones, ni los ladrones,
ni los avaros, ni los borrachos, ni los
maldicientes, ni los estafadores, heredarán el
reino de Dios. 1 Corintios 6:9-10

La persona que ha estado acostumbrada a ganarse


la vida en esta forma, tiene temores en cuanto a su
habilidad de poder ganarse la vida de forma honrada.
Jesucristo nos enseña que Él se encargará de suplir
nuestras necesidades (lee Mateo 6:25-34).

Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene


de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te
ayudo. Isaías 41:13
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 71

A pesar de todo lo que haya sucedido en sus vidas,


Dios nos dice que cuando una persona se arrepiente
y viene a Cristo, todo su pasado dejó de existir y
ahora es una nueva criatura. Los que vienen de un
pasado tortuoso deben concentrarse y meditar en
que son una nueva criatura en Cristo.

De modo que si alguno está en Cristo, nueva


criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí
todas son hechas nuevas. 2 Corintios 5:17
CAPÍTULO 5

Abelardo
Polos opuestos

E staba en el set de televisión, lista y esperando


la cuenta regresiva para comenzar a grabar
uno de los diversos programas de “Minuto
Final”.

Como siempre, en el estudio había un alto nivel


de tensión, pero también de concentración de todos
los involucrados. Este es un trabajo que requiere
cuidar muchos detalles y cada uno de ellos no solo
tiene que estar perfecto, sino también trabajado de
manera artística. Debe haber una buena
coordinación entre los aspectos como la
iluminación, el sonido, las cámaras, etc.

73
74 • CARY PALMÓN

Mientras esto ocurría, yo estaba sentada en mi


lugar frente a las cámaras, esperando con paciencia
mi participación. Entonces, de pronto, se
encendieron los reflectores, y debido a la luz tan
intensa, tuve que cerrar los ojos con rapidez. Más allá
de mi reacción física al hecho de la luz, algo me
impresionó de este suceso. Me di cuenta cómo la
iluminación disipaba todas las sombras logrando que
todas las partes que eran oscuras estuvieran
resplandeciendo por la luz.

Mientras meditaba en ese contraste entre la luz y


la oscuridad, a lo lejos escuché la voz del director que
trataba de captar mi atención dándome indicaciones.
Se trataba de la clásica voz de advertencia del
coordinador de piso que comenzaba con la rutina de
producción diciendo a viva voz: “¿Atenta, Cary?”. A
lo que asentí con la cabeza, para que diera inicio al
rodaje.

“Cinco, cuatro, tres, dos, uno... cero... ¡Acción!”

Lo curioso fue que, el tema que comencé a grabar,


se refería a la oscuridad del alma de Abelardo. Una
oscuridad que no solo fue capaz de engendrar los
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 75

peores sentimientos de su corazón, sino también de


llevarlo a resolver sus propios asuntos de la peor
forma: con la mismísima muerte...

Recibí su carta entre las muchas cartas de cada día.


La de Abelardo, en cambio, fue la que me impactó en
gran medida. Estoy segura que cuando la leas te
quedarás impresionado también. Su triste e
impresionante carta comenzaba así:

Estimada Cary:

Permítame presentarme... So y Abelardo , pero no


le vo y a dar mi apellido , pues prefiero
mantenerme en el ano nimato .

Vivo en una pro vincia muy alejada de la capital en


mi país. Allí le damo s mucha impo rtancia a lo s
terreno s que po seemo s, debido a que para
no so tro s eso es vida. De allí co memo s y allí
vivimo s, pues co mo campesino s sabemo s que
mientras más tierra po seamo s, o btendremo s más
ingreso s. Lo lamentable es que existen también las
disputas de terreno s en las que, incluso para evitar
perderlo s, se puede llegar hasta a matar. Es triste,
pero este es el co ntexto de mi situació n.
76 • CARY PALMÓN

Resulta que tengo uno s primo s que se apro piaro n


del terreno que tenía nuestra familia,
apro vechándo se de cierto s viajes que mi hermano
y yo tuvimo s que realizar.

Déjeme explicarle que mi hermano Grego rio y yo


no s enteramo s de que lo s primo s habían “pagado
po r lo bajo ” y registraro n la tierra a no mbre de
ello s. ¡No s habían ro bado nuestra pro piedad!
Sabíamo s que ello s eran seis y no so tro s so lo
éramo s do s, y que esto s ladro nes eran capaces de
matarno s co n tal de quedarse co n la tierra.

La có lera no s invadió hasta el punto de perder el


buen juicio . Grego rio y yo decidimo s pelear en su
co ntra, pero no utilizando la ley, sino que para
enfrentarlo s recurrimo s a la brujería. Visitamo s al
brujo más po dero so de la zo na do nde vivimo s y le
explicamo s la situació n y có mo queríamo s
so lucio narla.

El brujo no s advirtió que estábamo s entrando “en


un terreno inimaginable”, co n fuerzas o scuras que
no so lo po drían afectarno s a no so tro s, sino
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 77

también a o tro s. Sin embargo , a pesar de sus


advertencias, Grego rio y yo decidimo s pro seguir.

El brujo no s preguntó qué era lo que deseábamo s.


Ento nces nuestra respuesta fue: “¡Muerte para
to do s ello s!”. Aun así, deseábamo s que la muerte
fuera de una fo rma en la que no no s
respo nsabilizaran. El brujo dijo que él sembraría
una semilla de o dio entre ello s hasta el punto de
co nfundirse, o diarse y matarse. Luego , no s
advirtió que este hechizo también po dría
afectarno s y, que en ese caso , ya no po dría
ayudarno s.

Estábamo s tan lleno s de o dio po r lo s primo s que


no pensamo s en lo que decía el brujo : “Que
nuestra sangre también se mancharía”.

El brujo cumplió su trato y le pagamo s muy bien


po r ese trabajito... Y así fue que po co después
co menzó una o la de vio lencia entre lo s primo s.
To do s se acusaban, empezaro n a pelearse entre
hermano s y entre las espo sas de ello s. Ento nces,
no pasó mucho tiempo para que empezaran a
mo rir. Eso desencadenó más o dio que, para
78 • CARY PALMÓN

nuestra desgracia, trascendió a to da la familia,


pues hasta llegaro n al extremo de mandar a matar
a mi hermana y a mis so brino s. Luego , do s de lo s
primo s que quedaban vivo s atacaro n a Grego rio a
puñaladas y lo dejaro n mo ribundo .

Cuando fui al ho spital para ver a Grego rio , me


co ntó que mataro n a su mujer y sus hijo s.
También me dijo có mo el demo nio se había
apo derado de to do s ello s. Mi hermano murió esa
no che.

Enfurecido po r co mpleto , al salir del ho spital


co mpré un revó lver y fui a buscarlo s para
matarlo s, pero lo s muy co bardes, a pesar de
embo scarme y dispararme, no me hiriero n.
Saliero n co rriendo y se perdiero n entre la maleza,
diciendo en vo z alta que me matarían.

Al día siguiente, fui en busca del brujo y le pedí


que detuviera esta pesadilla. Él me dijo que ya era
muy tarde, que no se po día parar, que el o dio
reclamaba sangre, y la sangre reclamaba muerte.
Po r lo tanto , el embrujo no cesaría hasta que yo
muriera.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 79

Jugué co n fuego y salí quemado . En la actualidad,


vivo aterro rizado . La tierra se ha quedado so la,
nadie la habita. Mucho s le dicen “La tierra
maldita”, y tienen razó n. Yo no tengo descanso , no
puedo ni do rmir, no sé qué hacer... ¡He perdido
tanto !

Lo peo r del caso es que no sé si Dio s po drá


perdo narme po r to do lo que he desencadenado .
No sé si Él pueda ayudarme a salir de este
infierno .

Esta fue mi respuesta para Abelardo...

Mi apreciado Abelardo:

Cuánto siento saber la situació n en la que te


encuentras! A pesar de to do , ¡Dio s tiene un plan
maravillo so para tu vida en este mo mento y entre
sus planes está tu liberació n to tal!

La brujería, la curandería, las adivinacio nes, lo s


encantamiento s y lo s hechizo s so n algunas de las
armas que utiliza el diablo para destruirno s. No
o bstante, desde el principio Dio s no s dio
instruccio nes específicas en su Palabra acerca de
que semejantes prácticas eran pro hibidas po r
80 • CARY PALMÓN

co mpleto . Es más, las instruccio nes terminaban


co n una maldició n po r realizar esto s acto s
o scuro s.

Aun así, la brujería ha to mado cada vez más auge


en lo s último s año s po rque el ho mbre siente que
hay un vacío en su ser. Es un vacío que so lo Dio s
puede llenar, pero que el ho mbre, en su
igno rancia, busca esta clase de co nexió n
espiritual. Ento nces, en vez de co nectarse co n
Dio s, co n quien se co necta es co n el diablo y su
mundo espiritual. El resultado es terrible, po rque
una vez que co mienza a invo lucrarse en el
o cultismo , queda atrapado y se decreta una
maldició n no so lo para él, sino también para su
ento rno , co mo te ha sucedido a ti.

La gente pasa po r alto que la brujería trae malo s


resultado s, pues su acció n es maligna y ata a las
perso nas a co sas terribles. Po r eso es que
desprenderse de ellas no es fácil. La única fo rma
de lo grar una liberació n co mpleta empieza po r
dentro .
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 81

Déjame explicártelo co n o tras palabras: Dio s


envo i a su Hijo único , Jesús, para reco nciliarno s
co n Él. Po r lo tanto , ¡Jesucristo vino a esta tierra
co n el pro pó sito de pagar po r nuestro s pecado s y
liberar a to do s lo s cautivo s! Para recibir esta
liberació n tenemo s que reco no cer, en primer
lugar, que so mo s pecado res. Luego , po r fe, aceptar
su sacrificio en la cruz y co n esto recibir su
perdó n y la salvació n de nuestras almas. Sucede
que cuando reco no cemo s nuestra gran necesidad
de perdó n y de ayuda po r parte de Cristo ,
ento nces Él no s da un nuevo co razó n lleno de fe
en Él y en su po der. Co mo resultado , pasamo s del
reino de las tinieblas al Reino de Dio s do nde Él
no s cuida, no s pro tege y no s ama.

No sé si ya has dado este primer paso de


entregarle a Cristo tu co razó n tal co mo te
encuentras en este mo mento , co n to do lo bueno y
lo malo que hayas hecho . Este debe ser tu primer
paso : Tienes que decider de to do co razó n hacer
una o ració n, pedirle perdó n a Dio s y entregarle tu
vida, si es que aún no lo has hecho .
82 • CARY PALMÓN

Una vez que Cristo mo ra en ti, tienes el derecho


espiritual a la pro tecció n de Dio s, y recuerda que
ninguna brujería puede venir co ntra ti.

Debido a tu participació n en la brujería, has


co metido un pecado y necesitas pedirle perdó n a
Dio s. Así que, en vo z alta, declara que aho ra
mismo ro mpes to da atadura o puerta abierta que
tienes debido a ese co mpo rtamiento . También
declara que a partir de este mo mento le niegas al
diablo to do acceso a tu vida y a la vida de tus hijo s.
Esto es muy impo rtante para o btener la verdadera
liberación. Luego , recibe las pro mesas de Dio s en
cuanto a la pro tecció n de esas o scuras prácticas.

Espero que decidas seguir mis co nsejo s y aceptes


el regalo de Dio s a fin de que te liberes de to do el
mal que te está aco nteciendo .
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 83

Dios dice...
Para ser más explícito y hablando en términos
actuales he hecho la siguiente relación que muestra
lo que Dios dice con respect a todas las prácticas
oscurantistas:
• Los adivinos: Dicen predecir la fortuna, el
amor, el futuro, etc. Incluye a los espiritistas,
la ouija y todo tipo de cartas.
• Los agoreros: Los que leen o escuchan el
horóscopo y la astrología.
• Los sortílegos: Los que adivinan o
pronostican algo por medio de suertes
supersticiosas o magias.
• Los hechiceros: Los que hacen tratos con los
espíritus inmundos.
• Los encantadores: Los que practican el
hipnotismo.
• Los clarividentes: Los que adivinan hechos
futuros u ocurridos en otros lugares, y que
practican la telepatía y el control mental.
• Los que consultan los muertos: Estos cultivan
la necromancia mediante la adivinación por
evocación de los muertos.
84 • CARY PALMÓN

• Los médiums: Personas que se comunican


con los espíritus.

No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo


o a su hija por el fuego, ni quien practique
adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni
hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago,
ni quien consulte a los muertos. Porque es
abominación para con Jehová cualquiera que
hace estas cosas, y por estas abominaciones
Jehová tu Dios echa estas naciones de delante
de ti. Deuteronomio 18:10-12

Dios insta a la persona a que tenga un


arrepentimiento total y que se aleje para siempre de
este tipo de relación y de vida. No solo perdona al
individuo, sino que lo acepta como su hijo.

Por lo cual, salid de en medio de ellos, y


apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo
inmundo; y yo os recibiré, y seré para vosotros
por Padre, y vosotros me series hijos e hijas,
dice el Señor Todopoderoso. 2 Corintios 6:17-
18
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 85

Es importante que la persona involucrada en


cualquier tipo de magia destruya todos los artefactos
que la conectaban con este pasado.

Y muchos de los que habían creído venían,


confesando y dando cuenta de sus hechos.
Asimismo muchos de los que habían practicado
la magia trajeron los libros y los quemaron
delante de todos; y hecha la cuenta de su precio,
hallaron que era cincuenta mil piezas de plata.
Hechos 19:18-19
CAPÍTULO 6

Bernardo
No la puedo olvidar

I ba con mucha prisa, pues se me hacía tarde para


llegar a la hora establecida por la autoridad
carcelaria de la prisión de hombres que visitaba
con frecuencia.
Llevaba varios años trabajando en ese lugar como
voluntaria. Allí pude conocer a muchas personas que
jamás pensaron terminar cometiendo algún delito y
que por sus hechos consumados tendrían que pagar
con la privación de su libertad largos años de
condena. Sin embargo, allí también pude ser testigo
de impactantes cambios en la vida de muchos de
ellos.

87
88 • CARY PALMÓN

La prisión es un lugar terrible e inhóspito. Todo


es sombrío: los pisos, las paredes, las rejas. Es una
atmósfera tan dura que el solo contacto con sus
ambientes produce dolor. Esa sensación y la carencia
total de paz fue una de las cosas más impresionantes
que vi cuando entré por primera vez a uno de estos
centros penitenciarios.

Un día, realizando una de mis acostumbradas


visitas, recordé la historia de Bernardo que estuvo a
punto de formar parte de este grupo de
desafortunados y tuvo la oportunidad de librarse a
tiempo.

En su correo electrónico, me contó lo sucedido de


esta manera...

Señora Cary:

So y un o yente de sus pro gramas. Me gustan


mucho y po r eso sé que usted me puede ayudar.
Esto y en un terrible dilema y lo triste es que esto y
luchando co ntra mí mismo .

So y estudiante de pro gramació n en la


Universidad. Me gusta también el depo rte y juego
fútbo l co n un grupo de amigo s to do s lo s fines de
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 89

semana. Co mo depo rtista, frecuento el gimnasio


y esto me permite lucir muy atlético y hace que se
muy amisto so . So lo tengo veintitrés año s.

El asunto es que hace alrededo r de un año y


medio , do ña Ro sita y su espo so se mudaro n a mi
barrio . Ella es una seño ra jo ven y, a la verdad, muy
guapa. Mis pro blemas empezaro n cuando la
co no cí en perso na.

Ella y mi madre se hiciero n amigas y, una tarde,


do ña Ro sita le llevó una delicio sa to rta a la casa. A
lo s po co s días, mi mamá me pidió que le
devo lviera el recipiente de la to rta. Así que fui a
llevárselo y, al mirarla co n más detenimiento ,
pude apreciar que era mucho más jo ven de lo que
pensaba. Tal vez so lo un par de año s mayo r que
yo .

Al entregarle la bandeja, ella me pidió que pasara


a su casa y me co mentó que se le había “quemado ”
una bo mbilla y no sabía có mo cambiarla. De
inmediato , me o frecí para ayudarla. Sin embargo ,
ella me co nvenció de que era mejo r que regresara
en la no che. Así que le pregunté si su espo so no
90 • CARY PALMÓN

estaría esa no che y ella me co ntó que él es


camio nero y que no regresaría en vario s días.

Sé que parece demasiado ino cente, pero esa no che


regresé para cambiar la dicho sa bo mbilla. Al
llegar, me abrió la puerta muy perfumada y
vestida co n un impactante atuendo de cama. Creo
que no es necesario co ntarle en detalle lo que
sucedió después. A diferencia de ella, yo era un
jo ven inexperto . De mo do que, a partir de ese día,
una tremenda pasió n se desencadenó en mí.

Semana tras semana esperaba co n ansias a que


saliera el espo so , a fin de co rrer a sus brazo s.
Pensaba en ella de día y de no che... y po co a po co
Ro sita fue haciendo de mí lo que quería. En el
fo ndo , yo sabía que estaba actuando mal. Aun así
seguía haciéndo lo .

Cuando el espo so se ausentaba, la visitaba a diario


y a esco ndidas. Ento nces, un día, no té algo raro ;
algo que me alarmó . Eran unas marcas de go lpes
en diferentes partes de su cuerpo . Al preguntarle
la razó n, me co ntó que su espo so era una perso na
iracunda y que la maltrataba muy a menudo .
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 91

También me co ntó la razó n que la llevó a casarse


co n él.

Ro sita me dijo que pro venía de un ho gar humilde


y co n muchas carencias, y que este ho mbre, su
espo so , pasaba po r su casa llevándo le regalo s
hasta que un día la invitó a pasear en su camió n.
Ella accedió y, al final, no so lo la llevó de paseo ,
sino que la raptó y la trajo hasta la capital. Como
resultado , se resignó a ser su mujer y así fue que
se casaro n.

Co n lágrimas en lo s o jo s me dijo que no amaba a


ese o gro y que, al co no cerme, había descubierto lo
que era el amo r y que ya no so po rtaba más estar
co n él. Me co ntó , además, que su espo so se
embo rrachaba, se po nía vio lento y peleaba co n
ella. Incluso , la había amenazado co n matarla si lo
dejaba; y no so lo a ella, sino también a la perso na
co n la que lo traicio nara. Mientras hablaba, sus
so llo zo s eran cada vez más inco ntro lables. Co mo
yo no sabía qué hacer, me sentí desesperado e
impo tente.
92 • CARY PALMÓN

Sin embargo , po co a po co se fue calmando , y entre


suspiro s y lágrimas, terminó po r decirme que
teníamo s que pensar en un plan para “acabar co n
to do esto ”, pues él jamás no s dejaría ser felices.
Me di cuenta de lo que me quería decir, pues
aunque no me lo decía abiertamente, me
insinuaba que el camino que no s quedaba era
eliminar al marido .

A pesar de mi co nstitució n atlética, al lado de ese


ho mbre yo parecía un debilucho . ¡Así que no sabía
qué hacer! La verdad era que me había vuelto un
muñeco en lo s brazo s de Ro sita... y po r eso
empecé a temer co nvertirme en un asesino .

Una no che, a la ho ra de co mida, mi padre me


preguntó si yo sabía cuál de lo s chico s del barrio
estaba viendo a do ña Ro sita. El bo cado se me
atragantó y apenas pude co ntestarle que no tenía
idea. Luego , le pedí que me dijera la razó n de su
pregunta.

Mi padre me co mentó que estando en el bar, se


había enco ntrado co n el espo so de Ro sita, quien
estaba muy to mado co mo siempre, y le dijo a mi
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 93

papá que se había enterado que un chico del


barrio entraba a su casa cuando él estaba de viaje.
Entre o tras co sas, mi padre de manera muy sutil y
sabia me explicó que aunque él sabía que ese
matrimo nio no iba bien, también era cierto que
algunas mujeres usan a lo s jó venes inexperto s
para que hagan lo que ellas no se atreverían a
hacer. Además, me pidió que si co no cía al
muchacho en cuestió n, le advirtiera que el marido
era muy vio lento , y que si enco ntraba algo
extraño , no dudaría en matarlo .

Las sabias palabras de mi padre no dejaro n de


reso nar en mis o ído s: “Usan a lo s jó venes
inexperto s para que hagan lo que ellas no se
atreverían a hacer”. Ro sita me había insinuado
co n bastante claridad que lo único que quedaba
era eliminar a su espo so .

En ese mo mento , me di cuenta que me había


metido en un tremendo lío ...

Aunque ya he dejado de frecuentarla, Ro sita me


sigue buscando . Yo huyo de ella. Sé que el espo so
está vigilante. He tratado de salir co n o tras chicas,
94 • CARY PALMÓN

pero no la puedo o lvidar. Sigo pensando en ella.


Sin embargo , también sé que si la vuelvo a ver, ese
sentimiento deso rdenado puede llevarme a
co meter un terrible erro r... Seño ra Cary, ¿qué
debo hacer?

Mi respuesta para Bernardo no demoró... he aquí


lo que le dije:

Apreciado Bernardo:

Tu histo ria me recuerda mucho a la de Sansó n y


Dalila. Sansó n era el ho mbre más fuerte que
existió en su épo ca, pero su gran debilidad fue
Dalila. Ella era ambicio sa y fo rmaba parte del
pueblo enemigo . En verdad, no lo amaba y lo
vendió a sus enemigo s, quienes lo embo scaro n, lo
ataro n, le sacaro n lo s o jo s y lo co nvirtiero n en una
bestia de trabajo . Incluso , un día lo sacaro n para
exhibirlo co mo tro feo y divertirse. Lo s enemigo s
de Sansó n estaban eufó rico s po r su lo gro . No
o bstante, co n una fuerza so brenatural, Sansó n
empujó las co lumnas do nde descansaba la casa
do nde estaban to do s reunido s y destruyó el lugar,
matando a sus enemigo s, pero perdiendo su vida
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 95

al mismo tiempo . Sansó n era jo ven y murió a


causa de su debilidad po r Dalila.

En cuanto a Ro sita, lo lamentable es que se trata


de una mala perso na que no tiene reparo s en
pedirte que elimines a su espo so . ¡No te ama! So lo
te quiere utilizar. ¿Có mo puedes sentir amo r
hacia ella? Lo que te o curre es que el enemigo te
está tentando para que caigas en su trampa y así
destruir tu vida. ¡Ten cuidado , co rre, huye!

Creo que Dio s, en su infinita miserico rdia, puso a


tu padre en medio de esta situació n para salvar tu
vida. ¡Nadie sabe lo que hubiera o currido si este
ho mbre lo s encuentra junto s en su casa!

Es muy interesante saber que la Biblia no s enseña


que cuando no s tientan en el aspecto sexual, la
instrucció n que se no s da es la de huir, no es
hacerno s lo s valientes enfrentándo no s a la
situació n... ¡No ! La Biblia es muy clara al decirno s
que debemo s de huir. Esto no es un acto de
co bardía. En cambio , se require de mucho valo r
para darle las espaldas a la tentació n y caminar en
sentido co ntrario .
96 • CARY PALMÓN

To do s tenemo s un enemigo : el diablo . Su


pro pó sito es matar, hurtar y destruir. Para eso usa
la tentació n del mismo mo do que no so tro s
usamo s una carnada para pescar...

¡El diablo hasta intentó tentar a Jesucristo ! Y si


trató de tentarlo a Él, es de esperarse que trate de
tentarte a ti también. Ento nces, ¿qué es lo que
debemo s hacer cuando llega la tentació n?

A través del ejemplo de Jesucristo , la Biblia no s


enseña muy bien lo que debemo s hacer. Él
enfrentó las tentacio nes usando la Palabra de
Dio s. Al enfrentar una tentació n, lo primero que
debes hacer es averiguar co n exactitud lo que Dio s
dice acerca de la misma y aplicar su Palabra a tus
circunstancias.

Te daré un ejemplo . Si la tentació n es de ro bar, tú


declaras: “¡No ro baré!”. No so lo debes hacer la
declaració n en fo rma verbal, sino que también
debes to mar la decisió n en tu fuero interno de que
no ro barás y, a partir de ese mo mento , te atendrás
a dicha decisió n.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 97

Decláralo co n firmeza para que el diablo sepa que


tú co no ces lo que está mal y que no vas a vio lar la
Palabra de Dio s. Al igual que el diablo huyó de
Jesús, de la misma manera huirá de ti. Al final,
cesará la tentació n.

El enemigo no quiere que sepas que to da acció n,


ya sea buena o mala, traerá una co nsecuencia. Po r
ejemplo , después que la perso na alco hó lica se pase
to da una vida bebiendo , co menzará a tener serio s
pro blemas de salud. Esto puede llegar al extreme
de terminar co n una enfermedad mo rtal co mo
co nsecuencia de actuar en co ntra de lo que
establece la Palabra de Dio s co n relació n a cuidar
nuestro s cuerpo s y a no participar en nada que lo s
destruya. Tienes que saber que el pro pó sito de la
tentació n es hacerte caer co n el fin de destruir tu
vida.

La Palabra de Dio s tiene gran po der. Po r lo tanto ,


si decides so meterte a ella y aplicarla en tu vida
perso nal, triunfarás so bre la tentació n. Cuando
Jesucristo fue tentado , no trató de dialo gar co n el
enemigo , sino que le dijo co n exactitud que no
98 • CARY PALMÓN

tenía lugar en su vida. Ento nces, utilizó la Palabra


de Dio s a fin de de terminar co n la tentació n.

No te sientas mal. Te están tentando y to do s


pasamo s po r situacio nes semejantes. Así que
ejercita la sabiduría y utiliza la Palabra de Dio s
para escapar del lazo destructo r. Dio s está de tu
lado para ayudarte.

Haz lo mismo que Jesús y utiliza la Palabra de


Dio s para derro tar esta tentació n declarando lo
que Dio s dice: “¡No co meteré adulterio !”.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 99

Dios dice...
El adulterio es el acto sexual de una persona
casada con otra, ya sea que esta sea casada también o
no. Sin embargo, Jesucristo nos enseña en Mateo
5:27-30 que con solo mirar a una mujer para
codiciarla, ya se considera adulterio en el corazón.

No cometerás adulterio. Éxodo 20:14

David fue tentado cuando vio a Betsabé


bañándose y se despertó en él la lascivia. Entonces,
en vez de huir de la tentación, se entregó a ella y
cometió adulterio.

Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó


David de su lecho y se paseaba sobre el terrado
de la casa real; y vio desde el terrado a una
mujer que se estaba bañando, la cual era muy
hermosa. Envió David a preguntar por aquella
mujer, y le dijeron: Aquella es Betsabé hija de
Eliam, mujer de Urías heteo. 2 Samuel 11:2-3

La mejor forma de superar este tipo de tentación


es huyendo de la persona y separándose físicamente
100 • CARY PALMÓN

de su derredor y de cualquier tipo de contacto con la


misma.

Huye también de las pasiones juveniles, y sigue


la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de
corazón limpio invocan al Señor. 2 Timoteo
2:22

El rey David cometió adulterio y Dios lo perdonó.


Él describe el alivio y el gozo que recibió cuando
confesó su pecado y recibió el perdón de Dios. De
esta misma manera, Dios perdonará a todo el que se
arrepienta de su maldad. (Lee el Salmo 51:1-17).

Bienaventurado aquel cuya transgression ha


sido perdonada, y cubierto su pecado.
Bienaventurado el hombre a quien Jehová no
culpa de iniquidad, y en cuyo espíritu no hay
engaño. Salmo 32:1-2

La Biblia narra el caso de una mujer que fue


sorprendida en el pleno acto del adulterio. Según la
ley de Moisés, a esta la debían apedrear. A pesar de
eso, Jesucristo le demostró su perdón y que no hay
condenación para los que están arrepentidos de
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 101

verdad, no sin antes exhortarla a que no volviera a


cometer tal acción.

Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino


a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que
te acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ella dijo:
Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo
te condeno; vete, y no peques más. Juan 8:10-11
CAPÍTULO 7

Raúl
Mi único hijo... mi
consentido

E ra fin de semana, y sobre mi escritorio estaba


la montaña de papeles que se había
acumulado por largo tiempo y necesitaba que
la archivara como era debido. Así que, con ánimos
encontrados, entre querer hacerlo o posponerlo,
opté por lo primero.

En cuanto levanté unas cuantas hojas, descubrí la


foto de mi padre que, por alguna razón, la había
dejado allí. La elevé frente a mí y casi de inmediato
me invadió una profunda nostalgia. De pronto,
muchos pensamientos vinieron a mi mente, en

103
104 • CARY PALMÓN

especial las palabras que solía decirme cuando


apenas yo tenía cinco o seis años de edad. Él me
decía: “Esta es mi hija, Cary, en la cual tengo puestas
todas mis esperanzas”. Recordé que cuando me decía
esto, yo sonreía ilusionada aceptando sud eclaración
y, en la inocencia de mi niñez, estaba segura de que
sería tal como lo decía.

A medida que iba creciendo y le escuchaba


decirme las mismas palabras, ya no sonreía igual
porque pensaba: ¿Cuáles serán estas esperanzas?
¿Las po dré llevar a cabo ?

Lo lamentable fue que mi padre murió cuando yo


solo tenía quince años de edad y me quedé con el
gran interrogante de saber cuáles eran esas
esperanzas que tenía puestas en mí.

A pesar de que han pasado tantos años desde su


muerte, siempre lo recuerdo y entre esos recuerdos,
tengo un lugar especial en mi corazón para aquella
declaración que siempre solía expresar.

Guardé la foto donde debía y comencé a revisar


las últimas cartas del día. Así que, a pesar de que era
fin de semana, empecé a trabajar en las respuestas a
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 105

los correos electrónicos que me llegan, dado que el


dolor de las personas no tiene horario de oficina. Por
el contrario, se presenta cada vez que puede. La
trágica historia de Raúl me rasgó el corazón por el
dolor que transmitían sus palabras. Un dolor que,
como él decía, le hacía sentir que estaba viviendo en
el mismo purgatorio de Dante.

Su carta era clara y contundente. Decía:

Mi apreciada señora Cary:

Espero que cuando reciba mi carta se encuentre


go zando de buena salud y en co mpañía de su
familia.

Permítame distraerla un po co de sus valio sas


o cupacio nes para co ntarle mi situació n,
esperando que tal vez me pueda ayudar, no so lo a
mí, sino también a mi espo sa.

Tengo veintitrés año s de casado y mi único hijo ,


Daniel, tenía diecinueve año s cuando empezó
nuestro to rmento . A Daniel, co mo hijo único , lo
co nsentíamo s en to do . Y no so lo lo co nsentíamo s,
sino que mi espo sa y yo no s disputábamo s su
atenció n. No s esfo rzamo s para que estudiara en
106 • CARY PALMÓN

lo s mejo res co legio s. Luego , cuando estuvo listo


para entrar en la universidad, mi espo sa me dijo
que Daniel le había pedido to mar un año de
descanso antes de co menzar lo s estudio s
superio res.

¡Me o puse de manera ro tunda a esa decisió n y


pro testé! Así que le dije que debía estudiar po rque
no deseaba que estuviera un año sin hacer nada.
Sin embargo , mi pro testa fue en vano , pues mi
espo sa y él ya se habían puesto de acuerdo en que
permaneciera un año sin estudiar.

Durante ese tiempo , co mencé a o bservar que mi


hijo co nsentido andaba co n o tro s muchacho s
hasta muy tarde en las no ches. So spechaba que se
iban de parranda. Mi espo sa me insistía que eran
so lo ideas mías po rque Daniel era buen chico y
que yo era demasiado estricto . Mis últimas
palabras so bre este asunto se las dirigí a mi espo sa.
Le dije: “Si el chico se desvía del buen camino , la
respo nsabilidad será tuya”.

Co mo le decía, de una manera inexplicable o


quizá po r intuició n de padre, supe que había un
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 107

pro blema co n Daniel, que le habíamo s dado


mucha libertad. Co n el paso del tiempo , ya había
perdido to da auto ridad en el ho gar, pues él hacía
lo que quería y regresaba a la ho ra que se le
anto jaba. Lo que más pena me daba era que su
madre lo apo yaba en to do . Incluso , le daba dinero
para que se divirtiera. En resumen, un desastre
to tal.

Una tarde recibí una llamada del ho spital. Me


info rmaro n que a mi hijo lo habían ingresado y
que necesitaban mi presencia co n urgencia. Maya,
mi espo sa, y yo fuimo s deprisa para saber lo que
había sucedido y lo s médico s no s explicaro n que
nuestro hijo estaba grave debido a una so bredo sis
de dro gas. No s explicaro n que, po r sus sínto mas,
el muchacho ya venía dro gándo se desde hacía
mucho tiempo , y que si se salvaba de esta
situació n po dría quedar en estado vegetativo . Se
me cayó el mundo . No sabía qué hacer... so lo
cuidarlo .

Y así co menzamo s nuestra vigilia en el ho spital.


No no s separábamo s de su lado . Yo quería llevarlo
a o tro ho spital, tal vez hasta fuera del país, a fin de
108 • CARY PALMÓN

que lo trataran lo s mejo res médico s. No o bstante,


lo s medico s que lo estaban atendiendo insistían
en que no se le po día trasladar po rque su cerebro
estaba muy dañado y que, de hacerlo , existía la
po sibilidad que tuviera un paro respirato rio y
falleciera.

Pasaro n lo s días y las no ches. Mi espo sa y yo


seguíamo s en vela, cuidándo lo , atento s a su
respiració n, pero lo triste es que una de esas
no ches nuestro hijo falleció . Pienso que tal vez
fuera lo mejo r po rque, co mo ya le expliqué, lo s
médico s o pinaban que si so brevivía quedaría en
estado vegetativo .

Después del entierro , empezó el martirio . Ni


Maya ni yo po díamo s mirarno s a la cara. Las
no ches eran largas, no teníamo s deseo s de hablar,
ni siquiera de pelear... estábamo s destruido s.

Al cabo de un tiempo , Maya me co nfesó que se


sentía muy culpable de la muerte de nuestro hijo
po rque desde pequeño sentía celo s po r mí debido
a mi relació n co n él. Daniel y yo pasábamo s
bueno s tiempo s estudiando o jugando a la pelo ta,
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 109

y ella sentía que no tenía cabida entre no so tro s.


En su ego ísmo , y “para atraerlo ” a ella, quiso
co mplacerlo en to do y así ganarse su amo r y su
atenció n.

Maya me dijo que sentía tanto cargo de


co nciencia que necesitaba irse de la casa. Me dijo
que se debía al do lo r de haber perdido a nuestro
hijo y al sentimiento de culpa que llevaba. Traté
de disuadirla de ese empeño , pero no hubo
fo rma... se fue.

Aho ra me he quedado so lo , sin mi hijo y sin mi


espo sa. Maya se encuentra en un terrible estado
depresivo y yo vo y po r el mismo camino . No sé
qué hacer, po r eso le escribo esta carta, a fin de que
me ilumine y me ayude a rescatar lo único que me
queda en el mundo : Mi espo sa. Incluso , temo po r
su vida.

Gracias po r su atenció n, esperaré co n ansias su


respuesta.

Una vez más le pedí a Dios sabiduría y compasión


para responderle, pensando en el dolor de su alma al
perder su hijo único. Esta fue mi respuesta:
110 • CARY PALMÓN

Querido Raúl:

¡Cuánto lamento la pérdida de tu hijo ! ¡Estaré


pidiéndo le a Dio s que les dé a ti y tu espo sa el
Co nsuelo que so lo Él puede o frecer!

En cuanto a lo que me cuentas so bre tu espo sa,


Maya, es co mprensible que se sienta destruida po r
co mpleto debido a lo s sentimiento s de
culpabilidad que la ago bian. Sin embargo , lo s
mo mento s de do lo r que estás atravesando so n una
buena o po rtunidad para acercarte a Dio s y pedirle
su perdó n. Él no s perdo na po r to do s nuestro s
erro res, sin impo rtar lo grandes o lo pequeño s que
sean.

Po r lo que dices, puedo apreciar que tú también te


sientes culpable po r la muerte de tu hijo . De mo do
que,al igual que tu espo sa, también necesitas
perdo narte po r lo sucedido . Si no te perdo nas, vas
a co menzar a desarro llar un o dio co ntra ti mismo
que sería suficiente para destruirte y encadenarte
en un abismo de amargura. ¡Dio s quiere cambiar
tu vida y la de tu espo sa si tú se lo permites!
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 111

Permíteme co ntarte algo perso nal que o scureció


mi vida po r largo s año s. Un do lo r indescriptible
que me aco mpañaba a cualquier parte que iba.
Algo que Dio s, en so lo un segundo , lo transfo rmó
cuando entendí có mo hacerlo .

Lo que sucedió fue algo indescriptible. Un evento


que parecía sacado de una saga de terro r. El hecho
fue que una perso na, amiga de la familia, de una
fo rma sangrienta, desleal e inexplicable, fue
respo nsible del asesinato de mi padre. Así que yo ...
no lo po dia perdo nar. ¡Este hecho me esclavizó !

Desde aquel lamentable incidente, lo s año s


transcurrían sin que pudiera bo rrar de mi mente
y de mi co razó n lo s terribles recuerdo s que me
aprisio naban. Al co ntrario , me aco stumbré a vivir
co n un o dio y un do lo r que hiciero n de m i vida un
desastre. Las co sas llegaro n a tal extremo que mi
matrimo nio terminó en el divo rcio que me dejó
co n una nueva do sis de do lo r al tener que criar
so la po r co mpleto a mis hijo s pequeño s.

Sin embargo , un día co no cí a una seño ra que me


invitó a una reunió n. Allí en esa reunió n enco ntré
112 • CARY PALMÓN

algo que hizo que cambiara mi vida. En este lugar,


sentí po r primera vez la presencia de Dio s que
hablaba a mi co razó n diciéndo me que yo no lo
amaba. Sabía que era cierto , pero nunca le había
prestado impo rtancia a esto hasta ese mo mento
en que de pro nto mis o jo s se enfo caro n en las
páginas abiertas de una Biblia do nde pude leer
unas palabras que impactaro n mi co razó n. Aquel
texto decía: “Acéptame co mo tu Salvado r y Rey, y
tú y tu casa serán salvo s”. Ese día decidí entregarle
mi co razó n a Jesucristo y supe que mi vida sería
diferente po rque Él me amaba, me perdo naba y
me pro tegería.

Según pasaban lo s días, había una parte de mi


co razó n que to davía me do lía. Era la parte do nde
se albergaba ese terrible o dio co ntra el ho mbre
causante de la muerte de mi padre, la única parte
de mi ser que no le había entregado a Dio s. El
do lo r era muy grande, pero mayo r aun es Dio s
que me ayudó a perdo nar a ese ho mbre y a to do s
lo s que me habían herido . Fue en cuestió n de un
segundo que to do el do lo r pasó a la histo ria.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 113

El tiempo ha transcurrido y aho ra veo a muchas


perso nas que sienten que ya no pueden más, co mo
es tu caso . Así que déjame decirte lo siguiente:
Jesucristo hizo un cambio en mi vida y lo quiere
hacer también en la tuya. Entrégale tu co razó n y
to do tu do lo r a su vo luntad. Deja que Él te
perdo ne y te libere. Él está de tu lado para salvarte
y rescatarte, pero no puede hacerlo si tú no lo
co nsientes.

Mi o ració n es que Dio s te ayude a perdo narte y a


restaurar tu vida co n Él. Aunque te parezca
increíble, en esto s mo mento s Dio s va a
so co rrerlo s a ti y a tu espo sa para que puedan
recibir el co nsuelo y la restauració n que so lo Él
puede o frecer. Espera que Dio s haga un milagro
en tu vida... ¡y recíbelo co n fe.
114 • CARY PALMÓN

Dios dice...
El perdón es la clave esencial para vivir una vida
victoriosa. No solo debemos perdonar a los que nos
han herido, sino también necesitamos perdonarnos
a nosotros mismos de todos los errors que hemos
cometido en nuestra vida.

Antes sed benignos unos con otros,


misericordiosos, perdonándoos unos a otros,
como Dios también os perdonó a vosotros en
Cristo. Efesios 4:32

Para todos los que han perdido un ser querido,


tenemos la gran esperanza de reunirnos con ellos en
un futuro.

Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis


acerca de los que duermen, para que no os
entristezcáis como los otros que no tienen
esperanza. Porque si creemos que Jesús murió
y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a
los que durmieron en él. 1 Tesalonicenses 4:13-
14
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 115

Solo el Espíritu Santo puede consolar nuestros


corazones de sufrimientos tales como la pérdida de
un ser querido. Este es uno de los nombres que
describe su función: el Consolador. Y si aceptamos
su ayuda, Él nos restaurará.

Él sana a los quebrantados de corazón, y venda


sus heridas. Salmo 147:3
CAPÍTULO 8

Romina
Fue por lana y salió
trasquilada

S e trata de una de las noches más largas que


recuerdo. Mi hija, Patricia, y yo íbamos
conduciendo toda la noche para llegar por fin
al hospital donde Liza, mi hija mayor, estaba en plena
labor de parto para traer al mundo a su segundo hijo.

Patricia y yo estábamos extenuadas, pues la fuerte


tormenta de nieve de mediados de febrero que había
batido todos los récords de intensidad de los últimos
cinco años nos tenía preocupadas.

Conducir en esas circunstancias hizo que mi


adrenalina se mantuviera al tope, pues requería de
117
118 • CARY PALMÓN

una extrema y aguda concentración para conducir el


vehículo sin percances. A pesar de lo difícil del clima,
nos animábamos la una a la otra con la ilusión de ver
a este bebé que ya imaginábamos y amábamos
intensamente aun antes de nacer.

Traté de entretener a Patricia con el propósito de


minimizer el efecto de la tensión y pensé que sería
bueno aprovechar el trayecto para contarle mis
vivencias acerca de su nacimiento. Le conté de la
felicidad tan enorme que es ser madre. Le hablé de la
alegría que es tener una nueva vida en los brazos y el
amor espontáneo y grande que nace por una
criaturita tan especial que es un regalo de Dios.

El entretenimiento dio resultados y, sin darnos


cuenta, habíamos llegado al hospital. Aunque
tuvimos que esperar por horas el alumbramiento,
horas que se nos hicieron interminables, de pronto
pudimos escuchar el llanto del bebé anunciando su
llegada al mundo. Después de un poco más de tiempo
de espera, el médico nos dijo que podíamos pasar a
ver a Liza y su bebé.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 119

La emoción de ver a mi nuevo nieto fue


indescriptible. Saber que mi propia vida se extendía
en esa vida. Entonces, en ese instante, una imagen
vino a mi mente. No pude detenerla. Se trataba de
Romina, una televidente de mi programa “Minuto
Final” que, en su carta, me contaba que también fue
a ser madre. Sin embargo, lo lamentable fue que
hubo las alegrías que vivíamos nosotras, sino que,
por el contrario, el desenlace de su embarazo se
convirtió en una trágica circunstancia de su vida.
Romina me escribió como sigue:

Sra. Cary:

So y una más de sus tantas admirado ras, pues


nunca me pierdo sus pro gramas. Mi no mbre es
Ro mina y tengo veinticuatro año s.

Mi infancia y parte de mi juventud las viví en un


barrio muy po bre. Siempre estuve deseando tener
las co sas que to da niña, y después una
ado lescente, anhela po seer. En cambio , eso fue
algo que nunca pudo suceder, pues yo carecía de
to do y parecía no po der nunca escapar de ese
círculo de po breza.
120 • CARY PALMÓN

Cierto día, me enco ntré co n María, una de mis


mejo res amigas del barrio . Para mi so rpresa, ella
estaba vestida de manera elegante, co n zapato s y
cartera muy a la mo da. Su co rte de cabello y el
cuidado de sus mano s hacían no tar que
frecuentaba algún saló n de belleza para verse
regia. En fin, su transfo rmació n era to tal. Bro meé
co n ella preguntándo le si se había sacado la
lo tería. Ante esta insinuació n, ella me respo ndió
que no y me invitó a cenar. Pasamo s juntas un
lindo rato riéndo no s de cada recuerdo y muy
co ntentas de vo lver a verno s.

Durante la cena, María me habló de Elvira, una


amiga en co mún co n la que crecimo s juntas en el
barrio y que era tan po bre co mo no so tras. Me
co ntó que ella había co no cido a un famo so
jugado r de fútbo l y que, po r amo r, él le había
regalado una hermo sa casa en un barrio de clase
alta. Además, me dijo que po r medio de ella,
también había co no cido a un co mpañero de su
equipo que se había prendado de ella y que aho ra
la tenía co mo una princesa. Incluso , le co mpraba
to do y la co nsentía mucho .
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 121

En medio de la larga co nversació n, y al no tar que


yo no po día salir de la situació n de po breza en la
que vivía, María me co nvenció para presentarme
a un futbo lista. Se trataba de un amigo de ello s que
siempre asistía so lo a sus reunio nes po rque no
tenía pareja (o quizá po rque no era apuesto para
nada). Me pro metió o rganizar una salida co n él
para presentármelo . También me pro metió que
ella misma se iba a encargar de mi arreglo
perso nal para ese día y que iba a lucir
impresio nante para que este muchacho se fijara
en mí. Ento nces, me dijo que tenía que ser muy
co queta co n él para atraerlo y que ese ho mbre
po día ser mi futuro .

Sin embargo , allí no acababan sus planes. María


llegó más lejo s y pensó en to da una estrategia para
enamo rarlo y co nvertirme en su pareja. De esa
manera, saldría embarazada y lo co mpro metería
de tal fo rma que, si no salían bien las co sas co n él
y yo tampo co co nseguía enamo rarme, po dría
separarme y quedar asegurada co n una muy
buena cantidad de dinero para mí y para el bebé.
122 • CARY PALMÓN

Me reí de las lo curas de mi amiga imaginando esa


po sibilidad. María, en cambio , estaba decidida de
verdad e hicimo s to do lo planeado para que yo lo
co no ciera. Cuando me lo presentaro n, co mprendí
po r qué estaba so ltero , puesto que a nadie le
resultaría fácil enamo rarse de una perso na co mo
esa. El ho mbre no era agraciado para nada. Po r el
co ntrario , hasta me pareció desagradable. Aun así,
tenía dinero y eso era lo único que me impo rtaba:
Imitar a mis amigas y tener la o po rtunidad de salir
para siempre de la po breza.

Siguiendo las instruccio nes de María, y a pesar


que no fue tan fácil, al final co nquisté a Genaro
que terminó pidiéndo me que me fuera a vivir co n
él. Al po co tiempo , quedé embarazada.

El día que se lo dije fue terrible, pues al final se


manifestó el hecho de que no lo co no cía en
realidad. En cuanto se lo dije, se mo lestó mucho y
me insultó de manera espanto sa. María y yo no
habíamo s pensado en la reacció n tan brutal que él
tendría ni el mo do en que me pidió que abo rtara.
Aparte de insultarme y reírse de mí a carcajadas
cuando le sugerí que no s casáramo s, me dijo que
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 123

de ninguna manera se casaría po rque se lo


impedía el co ntrato co n el club euro peo co n el que
había firmado . Así que de la manera más brutal
me preguntó cuánto quería po r hacerme un
abo rto . Me trató peo r que a una pro stituta.

Fue humillante que me trataran co mo a una


cualquiera. Sin embargo , en lo único que yo
pensaba era en mis sueño s de una vida mejo r. Po r
lo tanto , le pedí una impo rtante suma de dó lares
para asegurar mi futuro . A lo s po co s días, busqué
una clínica do nde hacían este tipo de
pro cedimiento s y abo rté, tal y co mo habíamo s
quedado . Una semana más tarde fui a buscarlo
para ver có mo co ncretábamo s nuestro trato , pero
el ho mbre se había esfumado . Se había ido de viaje
y no recibí de él ni un centavo . ¡Fui po r lana y salí
trasquilada!

Me enco ntraba en estado de cho que cuando


sucedió to do esto . No po día pensar en nada, sino
en la rabia y la frustració n que sentía po r sentirme
burlada. No o bstante, cuando reaccio né po r fin,
tuve que afro ntar el hecho de que además de to do
124 • CARY PALMÓN

lo que me dijo Genaro , en realidad era una asesina


que mató a su pro pio hijo po r dinero .

Me sentí asqueada de mí misma. Me había


po rtado co mo una pro stituta y, encima de eso , no
so lo era una asesina ante la so ciedad, sino que
también lo era delante de Dio s. En ese mo mento ,
llo ré de rabia al reco rdar lo s planes que hice co n
mi amiga, pensando que éramo s muy inteligentes,
cuando en realidad to do terminó peo r que en una
mala teleno vela. Para co lmo de males,
subestimamo s a Genaro , que no era ningún to nto ,
y no tenía escrúpulo s para deshacerse de lo que le
impidiera cumplir sus sueño s.

Seño ra Cary, aho ra tengo un gran remo rdimiento


que no me deja vivir tranquila, me siento sucia y
miserable. Tengo secuelas en mi salud emo cio nal
y también en mi salud física po r el abo rto . Ni
siquiera sé si po dré llegar a ser madre alguna vez
po r las co nsecuencias. Creo que mi vida se ha
truncado más de lo que ya estaba y no me puedo
perdo nar po r lo que hice. Aunque pienso que no
tengo el perdó n de Dio s, le pido po r favo r que me
ayude.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 125

Entristecida por semejante historia, le respondí


así:

Querida Romina:

Me ha co nmo vido el do lo r que se aprecia en tu


carta. La ambició n po r salir de la po breza te llevó
a extremo s impensables y terminaste, según tus
pro pias palabras, co mo asesina de tu pro pio hijo .

Aho ra, luchas co n sentimiento s tan terribles


co mo la culpabilidad, el arrepentimiento y,
además, el do lo r de saber que ese ho mbre te
utilizó también.

Lo triste es que, el pro blema del abo rto , trae


implicacio nes que casi siempre permanecen
durante to da la vida. He co no cido mujeres que
aún pasado s cuarenta año s de haber abo rtado , no
se han po dido perdo nar po r lo que hiciero n.
Después de haber co metido un crimen, la vo z de
la co nciencia no cesa de acusar. En mucho s caso s,
al abo rto les siguen la depresió n y la apatía po r la
vida. Después de to do s esto s sínto mas que hacen
su vida desdichada, las mujeres empiezan a
to rnarse irritables y terminan presentando
126 • CARY PALMÓN

trasto rno s de perso nalidad. To do esto sin


mencio nar lo s daño s físico s que este lamentable
acto también o casio na muchas veces.

El abo rto parece ser la so lució n de un pro blema,


pero la verdad es que después de co nsumada esta
acció n, aparecen mucho s pro blemas más que so n
aun peo res. Abo rtar, po r cualquiera que sea el
mo tivo , es co rtar una vida que ya se encuentra en
pro ceso , po rque la vida humana no empieza en el
mo mento del parto , sino en el de la co ncepció n.

Es lamentable que haya perso nas y Co rrientes


ideo ló gicas que no co nsideren al feto co mo un ser
que ya tiene vida. Sin embargo , la Biblia no s
enseña que desde que so mo s engendrado s en el
vientre de nuestra madre, ya Dio s no s co no ce y Él
tiene planes para no so tro s.

La vida humana es de gran valo r delante de Dio s.


Lo que hiciste está mal. No es necesario seguir
repitiéndo lo po rque ya lo sabes. Tu co razó n te
co ndena y no puedes liberarte de ese terrible
do lo r. Sé que al igual que tú hay muchas mujeres
que se encuentran en tu misma situació n. Se
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 127

realizaro n un abo rto y aho ra sufren po r ese ser al


que nunca po drán escuchar decirles “mamá”, y al
que nunca po drán co no cer. De mo do que se pasan
año s de su vida imaginando có mo sería si viviera,
o si habría sido niño o niña. Lo peo r de to do es
cuando el abo rto trae co mo co nsecuencia daño s
irreversibles para la mujer que ya sabe que no
po drá tener más hijo s siquiera.

La buena no ticia es que Dio s sí desea perdo narte


po r esa acció n. Este es el mo mento . El pecado te
ha separado de Dio s, pero en este mismo instante
puedes implo rarle su perdó n y pedirle o tra
o po rtunidad. Él te ama y su deseo es perdo narte y
ayudarte.

Esta es la verdadera razó n po r la que Él envió a su


Hijo , a fin de pagar po r tus pecado s y que recibas
el perdó n po r co mpleto . Acepta este regalo
gratuito que te o frece Dio s. No esperes a ser una
perso na perfecta para acercarte a Él, pues ese día
jamás llegará. Lo único que necesitas es decirle de
co razó n: “Seño r, creo que enviaste a tu Hijo Jesús
a mo rir po r mí. Yo recibo el perdó n po r mis
128 • CARY PALMÓN

pecado s. Entra aho ra en mi co razó n y dame o tra


o po rtunidad... ¡Ayúdame!”.

Si haces esta o ració n, te aseguro que Dio s te


perdo na. Él dice en su Palabra que to do el que le
pida perdó n será perdo nado . Además, tendrás la
esperanza de algún día ver a tu bebé en el cielo .
También tienes que practicar tu fe en Dio s, saber
que Él ya te ha perdo nado y extenderte a ti misma
ese perdó n. En el mo mento que te arrepientes de
tus pecado s y aceptas a Jesucristo co mo tu
Salvado r, Dio s bo rra ese pecado de tu vida. Aho ra
bien, después te to ca a ti bo rrarlo de tu co razó n y
de tu mente de una vez y para siempre.

Estarás en mis o racio nes para que recibas el


perdó n que so lo Dio s puede o frecer a través de
ese acto de fe en Él. Co mo resultado , tu co razó n
se llenará de la paz que Él desea que tengas ho y.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 129

Dios dice...
Cuando Dios nos entregó los Diez
Mandamientos, nos dijo: “No matarás”. Sin
embargo, en el momento que se practica el aborto,
este constituye el asesinato contra la criatura que
aún no ha nacido.

No matarás. Éxodo 20:13

Una y otra vez Dios revela que el feto es una


persona, la cual Él conoce y para la que tiene un
propósito y un plan. (Lee Deuteronomio 30:13, 16).

Antes que te formase en el vientre te conocí, y


antes que nacieses te santifiqué, te di por
profeta a las naciones Jeremías 1:5

Dios desea perdonar a toda persona que viene a Él


con un corazón arrepentido por sus actos.

El que encubre sus pecados no prosperará; mas


el que los confiesa y se aparta alcanzará
misericordia. Proverbios 28:13
CAPÍTULO 9

Analía
Una mujer de medio
tiempo

E ran como las ocho de la noche, y después de


un día agotador, parecía que por fin iba poder
tener un tiempo para descansar. Luego,
mientras me servía abundante hielo para acompañar
mi refresco de frutas preferido, me senté a ver la
televisión, con la expectativa de poder disfrutar de
algún programa entretenido del horario estelar. Así
que, poniéndome muy cómoda, tome el control
remoto y comencé la búsqueda de alguna comedia,
una película interesante o algo propio para la familia.

131
132 • CARY PALMÓN

Pasados unos minutos, terminé apagando el


televisor, pues no pude encontrar nada que pudiera
satisfacer mis intereses. En cambio, lo que me llamó
la atención fue la cantidad de anuncios publicitarios
que “bombardearon” mis ojos con intenciones de
venderme algún producto o servicio para que uno se
“sintiera mejor”.

No puedo dejar de pensar en lo bien hechos que


están esos anuncios, pues uno casi termina
convencido de que “necesita” un auto nuevo o tal o
más cual zapato, chaqueta, etc. Ni hablar de los
perfumes y los desodorantes que prácticamente
“garantizan “una relación sexual a “primera vista” a
quien los utilice, ya sea hombre o mujer. Me di
cuenta en ese momento del ataque permanente
contra nuestros sentidos, tratando de que estos
encuentren su complacencia a cualquier precio.

En fin, mientras me alejaba del televisor rumbo a


mi escritorio, vino como un rayo a mi mente la
historia de Analía, una pobre muchacha que,
creyéndolo todo, terminó como una esposa de medio
tiempo.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 133

Sentada ya frente a mi computadora, busqué su


correo electrónico, pues ya sabía lo que le tenía que
contestar a su carta en la que me narraba sobre su
vida que, según ella, no tenía esperanza, sino una
profunda vergüenza debido al secreto que
guardaba...

Al releerla, encontré que sus palabras estaban


llenas de dolor y de desasosiego. Además, reflejaban
a una mujer con una autoestima muy baja y sin
esperanzas de cambio, dejando entrever que era una
persona que no podía soportarse más a sí misma.
Esta es su historia que tanto me conmovió:

Querida Cary:

Me he permitido escribirle estas líneas para


co ntarle mi caso , que pienso que es mucho más
co mún de lo que uno puede imaginar en esto s
días.

Crecí en una familia de clase humilde, en la cual


se pensaba que el valo r más impo rtante que puede
tener una perso na era el dinero . Esa era la fo rma
en que me crió mi madre: Crecer y buscar un
ho mbre co n po sibilidades eco nó micas suficientes
134 • CARY PALMÓN

para mantenerme y tener una buena po sició n


eco nó mica, de mo do que pudiera cumplir co n
to do s mis sueño s. Mi madre me enseñó co mo
atrapar y casarme co n un “Príncipe Azul” y no
hacer nada más para co nseguir las co sas po r mis
pro pio s mérito s y mi trabajo .

Debido a que me educaro n co n esta filo so fía de


vida, casi nunca les hacía caso a lo s chico s
co munes que se me acercaban. Po r el co ntrario ,
me burlaba de ello s si no cumplían co n lo s
requisito s que yo exigía para pensar siquiera en
darles cabida en mi vida.

Al terminar mis estudio s, co nseguí empleo en un


centro co mercial impo rtante, do nde co no cí a
Dio nisio , un alto ejecutivo que po r su fo rma de
vestir, las jo yas que llevaba y el auto mó vil que
co nducía, parecía tener mucho dinero . Lo
co no cían po r ser el dueño de la co mpañía en la
que trabajaba y, a la verdad, tenía to do el aspecto
de un triunfado r. Sumado a to do esto , era muy
buena perso na y bastante guapo .
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 135

Al cabo de un tiempo , él co menzó a enamo rarme


y a hacerme invitacio nes. Era bastante mayo r que
yo , pero me explicó que había permanecido
so ltero a la espera de la mujer de sus sueño s para
po der cumplirle to das sus ilusio nes y capricho s a
través del dinero que él había lo grado co n su
nego cio .

No se puede imaginar la ilusió n que sentí. ¡Era el


ho mbre que había so ñado ! Co menzamo s a salir y,
po r supuesto , empezaro n lo s co rtejo s y lo s regalo s
caro s. Siempre se trataba de perfumes de marca o
vestido s y acceso rio s igualmente de diseñado res
famo so s.

Al cabo de uno s meses, me pro puso irme a vivir


co n él, pro metiéndo me que no s casaríamo s en
cuanto estuviésemo s seguro s de que éramo s el
uno para el o tro .

Acepté su pro puesta y me mudé a su apartamento .


To do era co lo r de ro sa, pues él demo straba estar
pro fundamente enamo rado de mí. También el
apartamento era de primera y co n diseño s muy
elegantes. Para mí era co mo haberme sacado el
136 • CARY PALMÓN

premio mayo r de una lo tería y esperaba co n


ansias que me pidiera en matrimo nio .

Empezamo s nuestra vida junto s, pero me sentía


un po co frustrada po rque Dio nisio viajaba mucho
debido a su trabajo . A decir verdad, esto no me
extrañaba, pues co ncluí que to do ejecutivo viaja
co n regularidad. Para que no me aburriera ni
perdiera el tiempo en su ausencia, me pro puso
que empezara a estudiar una carrera y que él
pagaría to do s mis gasto s. ¡Me pareció una
excelente idea! Dio nisio viajaba de viernes a lunes,
y aunque en el fo ndo ese asunto de que viajara
so lo lo s fines de semana me parecía un po co
extraño , traté de restarle impo rtancia, ya que él
siempre explicaba que era algo circunstancial y
pro metía que en el futuro no tendría que viajar
tanto . To do iba a las mil maravillas, hasta el día en
que mi madre llegó a visitarme.

Al po co rato de estar co nversando , mi madre no


pudo aguantarse más y empezó a hablarme acerca
de la verdadera razó n de su visita. El asunto era
que una amiga suya le había co ntado que Dio nisio
era casado y que la verdadera dueña de la empresa
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 137

era su espo sa, quien estuvo de viaje durante un


año , pero que había regresado po r fin.

En ese preciso mo mento , to do mi mundo se vino


abajo . ¡No po día creer que él me hubiera
engañado tanto ! Sin embargo , también tuve que
aceptar que esa tenía que ser la verdadera razó n
de sus viajes de fin de semana. Se pasaba tres días
co nmigo y cuatro co n su espo sa. Po r fin mis o jo s
se habían abierto .

No me pude resistir y esa misma no che quise


enfrentarlo . Mis ilusio nes se habían hecho añico s.
En realidad, estaba indignada y desesperada.

Hice un plan para que tuviera que co nfesar la


verdad. Ento nces, cuando llegó a nuestro
apartamento , le dije que quería hacer una cena
para invitar a nuestro s co mpañero s de o ficina a
nuestra casita. Él reaccio nó co n so rpresa y se negó
de manera ro tunda diciéndo me que no tenía po r
co stumbre so cializar co n lo s co mpañero s de
trabajo . Apro veché esa respuesta y, de inmediato ,
le dije que ya sabía cuál era el verdadero mo tivo
de su negativa. Le co nté que ya sabía que era
138 • CARY PALMÓN

casado y que la verdadera dueña de la empresa en


la que trabajaba era su espo sa. Po r mi ro stro
ro daban lágrimas de rabia e impo tencia al saber
que me había engañado .

Cuando escuché su respuesta, quedé más


aso mbrada aun. A pesar de to do , me dijo que no
estaba enamo rado de su espo sa y que, en efecto ,
era la verdadera dueña de la empresa. Además, me
dijo que casarse co n ella lo había ayudado a
ascender en lo so cial y a disfrutar del po der
eco nó mico del que go zaba.

Entre so llo zo s me co nfesó que sentía que yo no lo


amaba de la misma manera en que él me amaba a
mí y me ro gó que no lo dejara. Incluso , me pidió
que aceptara co mpartirlo co n su espo sa, pues so lo
sería po r un tiempo en el que yo po dría terminar
mi carrera. Luego , dejaría a su espo sa, pues no
quería perderme debido a que yo era muy
impo rtante en su vida.

Seño ra Cary, Dio nisio me co nvenció . Así que


desde ese mo mento acepté ser su espo sa a medio
tiempo . Vivo co n muchas co mo didades y, aparte
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 139

de eso , sigo co n mis estudio s. Cuando él llega,


hago el papel de la espo sa perfecta, pero en el
fo ndo so y co nsciente de que, en realidad, me he
co nvertido en “la o tra”. Detesto esta situació n,
aunque reco no zco que la ambició n fue lo que me
ha llevado a aceptar sus requerimiento s. En el
fo ndo , sé que to do mi futuro y mis sueño s
quedaro n trunco s, pues nunca po dré tener hijo s
ni una familia no rmal. Esto y co ndenada a ser “la
o tra” para siempre. También sé que nunca llegará
el día de su po ssible separació n.

Ayúdeme, po r favo r... ¿Qué debo hacer?

Al terminar de leer su relato solo deseaba que


Dios me diera las palabras adecuadas que podrían
cambiar el destino de Analía. Embargada por la
tristeza de la situación le respondí como sigue:

Querida Analía:

Dices que eres espo sa a medio tiempo , pero no te


engañes: ¡Eres la amante, la o tra! Permíteme
hablarte co mo una madre y describirte lo que tal
vez te espere en el futuro . Jamás te respetarán
co mo la espo sa y es que ni siquiera lo gres tener
140 • CARY PALMÓN

hijo s po r el temo r de expo nerlo s a tu mismo


sufrimiento y amargura.

Lo s año s pasarán y esta se co nvertirá en una


relació n de esclavitud. El pecado siempre
esclaviza. No sabes cuántas mujeres me cuentan
histo rias parecidas a la tuya, y lo peo r es que
después de año s viviendo co mo la o tra, las han
desechado co mo una co sa que ya no es útil.

Muchas mujeres co meten el erro r al esco ger un


co mpañero para sus vidas. Su veneració n po r el
dinero y la seguridad material llega a tal punto ,
que se co nvierten en idó latras po stradas ante ese
ído lo . De mo do que arriesgan to da su vida po r un
ho mbre adinerado . Sin darte cuenta, tu amo r po r
el dinero está po r encima de to do s lo s demás
valo res en tu vida.

El deseo de tener co mo didades no es malo , sino


que lo malo es permitir que esa co dicia no s
esclavice. La co dicia es la receta ideal para un
terrible y permanente co nflicto co n tu co nciencia.

Supo ngo que el deseo de co nseguir un ho mbre


adinerado tal vez se deba a la inseguridad y a la
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 141

falta de auto estima. Muchas mujeres crecen


pensando que no tienen valo r y se sienten
inferio res e insuficientes para merecer amo r. Así
que sus pro pio s temo res y deficiencias les
impiden abrirle su co razó n a alguien que las
quiera tal co mo so n y que acepten sus virtudes y
sus defecto s. Es más, se esco nden tras una
máscara para no mo strar su verdadera
perso nalidad.

Las instruccio nes a fin de hallar a la perso na ideal


para el matrimo nio se encuentran escritas en la
Biblia, que es el manual que Dio s no s dejó para
regir nuestras vidas. Dio s no s indica co n claridad
que no debemo s buscar a perso nas que no tengan
nuestra misma fe y que no estén co mpro metido s
co n Cristo . Este es el requisito primo rdial en la
búsqueda de un espo so .

Po r erro r, no so tro s no s fijamo s en el aspect


eco nó mico y en la atracció n sexual. No o bstante,
el verdadero secreto del éxito para que un
matrimo nio dure, so bre to do en esto s tiempo s, es
que ambo s sean hijo s de Dio s. Tener una relació n
perso nal co n Cristo es el arma más eficaz que hay
142 • CARY PALMÓN

para superar lo s pro blemas de la vida y tener un


matrimo nio victo rio so .

El camino que has esco gido es inapro piado po r


co mpleto . Sin embargo , no eres la primera ni
serás la última perso na que haya to mado una mala
decisió n. Dio s es un Dio s de o po rtunidades, y si
esco giste un camino que no traerá bendicio nes, Él
te o frece una nueva o po rtunidad para cambiar tu
destino .

Para hacerlo y recibir to das las bendicio nes de


Dio s, tienes que empezar po r creer en Jesucristo ,
el Hijo de Dio s que murió po r tus pecado s. Pídele
perdó n po r ello s y acéptalo co mo tu Salvado r.
Ruégale que entre a tu co razó n y cambie tu ser. Él
te está esperando , listo para o frecerte una nueva
vida. Atrévete a creer en Él y no quedarás
defraudada.

Jesús te dice al co razó n que dejes la esclavitud y


recibas la libertad que le ha co stado tan caro
co nseguir para no so tro s: su sacrificio en la cruz.
No desperdicies esta o po rtunidad.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 143

Haberme escrito esta carta refleja que deseas


cambiar, pero no sabes có mo . Tienes que empezar
po r terminar tu relació n, buscar un empleo para
mantenerte y ser libre. Busca una iglesia do nde se
enseñe la Palabra de Dio s y puedas co no cer a
perso nas que crean lo mismo que tú. Co nsigue
una Biblia y léela to do s lo s días, para que aprendas
más de Dio s y co mprendas cuánto te ama. Así
desarro llarás una relació n co n Él, no repitiendo
palabras, sino hablándo le co mo si hablaras co n tu
padre. Dio s te abrirá puertas para ese trabajo , a fin
de que dejes el pecado y recibas la libertad.
Prepárate para una nueva vida que incluirá tener
tu pro pia familia y un lindo futuro .
144 • CARY PALMÓN

Dios dice...
Muchos padecen de temor en cuanto a su
provisión diaria o a sus mejoras económicas. La
carencia de confianza en Dios es una de las mayores
fuerzas que existen en el corazón de las personas
ambiciosas, la cual las lleva a cometer actos
pecaminosos.

Confía en Jehová, y haz el bien; y habitarás en


la tierra, y te apacentarás de la verdad. Salmo
37:3-4

A fin de lograrlo, el primer paso es reconocer el


amor que Dios tiene hacia nosotros y que, como
buen Padre, Él desea velar por sus hijos y asegurarse
de que tengan lo que necesitan, ya bien sea en el
aspecto espiritual como en el físico. Muchos tienen
carencias porque desconocen la voluntad de Dios
con respecto a este asunto. Sin embargo, a través de
las Escrituras, Dios se revela como un Padre que ama
a sus hijos y desea lo mejor para ellos.

Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque


él tiene cuidado de vosotros. 1 Pedro 5:7
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 145

El convertirse en una amante trae serios


problemas. Si la persona entra en esta relación ilícita,
su vida estará llena de sinsabores, mentiras,
vergüenzas, y nunca podrá alzar su rostro con
dignidad. Dios tiene un mejor plan para toda mujer
que se encuentra en este dilema.

Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado


que el hombre cometa, está fuera del cuerpo;
mas el que fornica, contra su propio cuerpo
peca. 1 Corintios 6:18

La forma de escapar de este círculo vicioso del


pecado es a través del arrepentimiento, pero no solo
de palabras, sino de corazón. Dios mira el corazón de
la persona y sabe cuándo se encuentra arrepentida de
verdad por su acción. Él perdonará al transgresor y
le dará la fortaleza necesaria para huir de su pecado.

Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y


justo para perdonar nuestros pecados, y
limpiarnos de toda maldad. 1 Juan 1:9
CAPÍTULO 10

Carlos
Atrapado sin salida

E stuvimos manejando alrededor de cinco


horas rumbo a los lagos de Missouri. ¡Por fin
habíamos llegado! A decir verdad, levantarse
de madrugada para “ir a pescar” no es algo que
anhelo hacer. Sin embargo, lo disfruto mucho
porque a mi familia sí le gusta esta actividad y, cada
vez más, lo pasamos de lo mejor.

Nos íbamos por algunos días a vacacionar, y este


primer día, por precaución, nos llevamos
sándwiches, frutas, bebidas y algunos postres extras.
De modo que todos ansiábamos poder disfrutar
algún delicioso pescado recién capturado.

147
148 • CARY PALMÓN

Mi hijo, como buen entendido en la materia, al


cabo de un buen rato de haberse ido en la lancha,
volvió con una de sus mejores sonrisas “cual héroe
que regresa a la comarca después de una conquista”,
pues había consiguió un pez enorme. Ese día lo
preparamos en la brasa, estaba delicioso, ¡tuvimos un
gran banquete!

Mientras disfrutábamos del producto de su


esfuerzo, la curiosidad sobre su éxito me invadió. Así
que le pregunté el secreto que tenía para ser tan buen
pescador. De inmediato, él me contó que se debe al
tipo de carnada que utiliza. Según me explicó, cada
pez tiene su carnada favorita y lo importante es saber
cuál es la carnada específica que se debe utilizar. Me
dijo también que es muy importante el momento
cuando el pez pica la carnada, pues es allí que el
pescador debe saber hacer la presión necesaria en la
caña para que se la trague por complete y de ese
modo no se pueda escapar mientras se saca del agua.

En ese momento, sentí como un escalofrío. La


sangre se me heló. De pronto, pude entender cómo a
Carlos lo había atrapado y devorado su captor. En
ese momento entendí de qué forma un hombre de
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 149

buena posición, al que todo le iba bien en la vida,


pudo tragarse una carnada y ser “pescado”, como él
dice, de una manera tan tonta...

Para Carlos, morder ese anzuelo ha sido tan


indescriptible que ahora está luchando por su propia
vida, pues esta situación lo está devorando.

Esta es su carta electrónica...

Estimada Señora Cary:

Le escribo po rque esto y asqueado de vivir una


existencia tan baja y asquero sa. Quisiera culpar a
alguien po r el infierno en el que vivo , pero en el
fo ndo sé que so lo yo tengo la culpa de mis pro pias
accio nes. Po r lo tanto , no tengo excusas y debo
asumir la respo nsabilidad po r lo que me sucede.

Para que tenga una idea general, le co ntaré que


tengo cuarenta año s de edad y esto y casado hace
más de quince año s co n Sarita, aunque lo
lamentable es que nunca pudimo s tener hijo s.

To do co menzó hace uno s do s año s cuando


celebrábamo s su cumpleaño s. Fuimo s a su
restaurant favo rito , y en el transcurso de la cena,
150 • CARY PALMÓN

le co muniqué que le tenía “un regalito ”. Ella se


mo stró muy ansio sa po r saber de qué se trataba,
pero yo se lo entregué cuando llegamo s a nuestra
casa, sin saber que ese “regalito ” sería el deto nante
de nuestra desgracia.

Días antes de la celebració n, yo andaba buscando


qué regalarle. Deseaba darle algo que la sacara de
la rutina. Debido a la sugerencia de uno s amigo s,
se me o currió co mprarle una película para adulto s
XXX. Cuando llegamo s, le dije que “mi regalito ”
co nsistía en una bo tella de vino y la famo sa
película para amenizar nuestra intimidad.
Supo niendo de lo que se trataba, Sarita se negó
indignada y me dijo que no iba a participar de mis
lo curas, pues le parecía algo muy vulgar. Sin
embargo , yo insistí tanto que lo gré co nvencerla al
final.

A partir de ese mo mento se desató un cao s en


nuestras vidas. Lo que empezó co mo una
diversio n diferente, se transfo rmó en el infierno
en que vivimo s. Mi espo sa empezó a pedirme que
siguiera co mprando más vídeo s de eso s. Se
o bsesio nó muchísimo co n la experiencia y me
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 151

pedía nuevas emo cio nes, cada vez co n más


frecuencia.

De pro nto me di cuenta que había despertado a un


mo nstruo . Inclusive, llegó a pedirme que invitara
a o tra pareja para ampliar la aparente diversió n.
Sin embargo , ya estaba harto y so lo ento nces
reaccio né o po niéndo me a hacerlo , pues era caer
demasiado bajo .

Después de esa experiencia, su deseo de ampliar


su placer la llevó a co nsumir dro gas. Al inicio
parecía que to do estaba bajo co ntro l, pero después
llegó un mo mento en que mi espo sa vivía so lo
para el sexo y las dro gas.

Yo empecé a sentirme muy perturbado y culpable


de la situació n. Así que le dije que ya era
suficiente, que no po díamo s seguir co metiendo
tanto s abuso s y que so lo quería que le pusiéramo s
un final a nuestro s exceso s para po der buscar
descanso y restauració n.

No o bstante, mi espo sa se negó . Siguió


co nsumiendo dro gas y llevando una vida
libertina. Las co sas llegaro n a tal extremo , que
152 • CARY PALMÓN

cuando yo me iba para el trabajo , traía a lo s


muchacho s del barrio a nuestra casa, la cual
co nvirtió en un antro de perdició n. No sé có mo se
las arreglaba para manipularme y hacerme creer
to das sus mentiras. Mentía de la fo rma más
descarada y yo le creía to do lo que me decía.

Al cabo de un tiempo , llegó el mo mento en que


reaccio né y la afro nté. Ella negó de manera
ro tunda to das sus bajezas y me dijo que so lo eran
chismes. Se eno jó co nmigo e hizo to do un teatro
acusándo me de juzgarla sin mo tivo . Fue ento nces
cuando me di cuenta que yo había pro piciado que
mi buen no mbre quedara denigrado hasta
co nvertirme en el hazmerreír del barrio .

Po r to do esto , le pro puse buscar ayuda


pro fessio nal en algún lugar de rehabilitació n
do nde no s ayudaran. Sin embargo , se negó . Dijo
que to do estaba bien, que to do estaba co ntro lado
y que no pasaba nada.

Al verla caer tan bajo , algo terrible sucedió dentro


de mí. Ya no quería ni verla. La había amado
mucho , pero aho ra so lo po día pensar en to do s lo s
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 153

ho mbres co n lo s que había estado y no po día


perdo nar ni o lvidar ese hecho .

Sarita llo raba, pro metiéndo me cambiar, y yo hice


lo po sible para quedarme a su lado . En primer
lugar, debido al amo r que tuvimo s, aunque
también po r el sentido de culpabilidad de que
fuera yo mismo el que la co ndujera po r ese
camino . A pesar de to do , debo admitir que dudaba
de que sus lágrimas fueran reales.

Al final, decidí darle un tiempo . Ya sabía que no


po día dejar de dro garse co n mucha facilidad y la
tenía vigilada. Ento nces, uno s días después
sucedió lo que tanto me temía que pasara. Salí
para el trabajo co mo siempre, pero permanecí
cerca de la casa o bservándo la. Al po co rato , ella le
abrió la puerta a un par de jo vencito s del barrio ,
mo strándo se muy animada. Esperé un rato que
me pareció interminable supo niendo lo que
estaba sucediendo en mi casa. Abrí co n vio lencia
la puerta y me enco ntré co n el cuadro que usted
ya se puede imaginar. En ese mo mento , ¡me fui del
ho gar!
154 • CARY PALMÓN

Co mo ve, perdí a mi espo sa, la mujer de la cual me


enamo ré y quien fue mi co mpañera durante
quince año s. Ya no existe. Sin embargo , yo
también he perdido hasta las ganas de vivir. Casi
no salgo , ni hablo co n nadie, pues tengo temo r que
mis amigo s ya sepan lo que estuvo sucediendo .

Me dicen que mi espo sa está arrepentida de sus


acto s y yo velo po r sus gasto s. No la culpo a ella,
sino que me culpo a mí mismo po r haber
permitido que llegara a eso s extremo s y no haber
puesto un alto cuando to do empezó a salirse de
co ntro l. Mi espo sa necesita ayuda y no sé qué
hacer.

Esto fue lo que Dios puso en mi corazón como


respuesta:

Mi querido Carlos:

Lamento mucho saber lo que ha sucedido co n tu


vida, y có mo algo que co menzó co mo una
actividad emo cio nante entre ustedes, terminó
destruyendo tu vida y la de tu espo sa.

¿Sabes? Esa es la fo rma en que se desarro lla el


pecado . Parece ser algo pequeño y sin
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 155

impo rtancia. Luego , cuando reaccio nas, te


encuentras atrapado en lo s vicio s más viles.

Aho ra, permíteme explicarte lo que mucho s no


saben acerca de las adiccio nes sexuales.

Esta clase de adicció n co mienza po r la curio sidad


de o bservar asunto s sexuales, co mo fo to grafías o
películas que estimulan la libido co nvirtiéndo se
en una tentació n al parecer ino fensiva al inicio .
En cambio , se va co nvirtiendo cada vez más en
una situació n inco ntro lable.

Después que la perso na se siente atraída a este


primer paso , esta actividad co ntinúa hasta que se
co nvierte en una adicció n. Además, eso es lo que
hace que el adicto vuelva a caer una y o tra vez.

A medida que pro gresa la adicció n, la perso na se


invo lucra en la masturbació n co mpulsiva y
aumenta su deseo sexual. Co n esto , aumenta
también la necesidad de que sea más impactante y
frecuente.

Lo lamentable es que, una vez que la perso na llega


a este punto , se desensibilizan sus valo res mo rales
y es capaz de echar abajo to da barrera emo cio nal
156 • CARY PALMÓN

y física co n tal de satisfacer su adicció n. Incluso ,


co mienza a buscar o tras parejas sexuales,
acentuando así su degradació n sexual.

Esto es, querido amigo , lo que le ha sucedido a tu


espo sa, co mo quizá le haya o currido a mucho s
o tro s que se encuentran atrapado s en su
co mpo rtamiento y deseando una salida a su
esclavitud.

Co mo he explicado muchas veces, el primer paso


para la restauració n es el reco no cimiento de que
se necesita ayuda. Sin embargo , esta ayuda tiene
que venir de afuera, po rque en su ser mismo , la
perso na es incapaz de so lucio nar el pro blema en
el que se encuentra.

Entre lo s paso s necesario s para el rescate de tu


espo sa se encuentra un plan que co ntará co n
nuevas fuerzas y no co n las suyas. Una fuerza que
so lo Dio s po drá darle y que es el po der divino
para vencer el pecado . ¿Có mo ? En primer lugar,
debe entender que tiene un co razó n po drido ,
lleno de pecado s, y que Dio s quiere cambiar ese
co razó n po r uno nuevo , limpio , repleto de amo r y
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 157

de deseo s de hacer lo bueno . A co ntinuació n, debe


entregarle su vida co n to do s sus pecado s a Cristo
y Él o brará.

Una vez que Cristo mo re en el co razó n de tu


espo sa, hay unas ciertas etapas para dejar que este
Nuevo co razó n go bierne su vida. El primero debe
ser adquirir una Biblia y aprender quién es Dio s.
Luego , aprender a tener una vida de o ració n y
asistir a una iglesia do nde se predique la Palabra
de Dio s.

To do esto la ayudará a desarro llarse de manera


espiritual, así co mo o tro s asunto s en el aspecto
físico , tales co mo dejar de ver películas
indecentes, alejarse del grupo de perso nas co n el
que co mpartía ese tipo de vida, pro gramar su
co mputado ra de mo do que le impida recibir
pro vo cacio nes sexuales. Junto co n to do esto , debe
realizar estas accio nes en fo rma decidida de mo do
que cuando le llegue una de estas tentacio nes, las
puedas superar.

No po demo s o lvidar también que existen


co nsejero s pro fesio nales preparado s para ayudar
158 • CARY PALMÓN

a las perso nas co n esto s pro blemas en el pro ceso


de co nquistar su libertad. Po r lo que te sugiero
que co nsultes a uno de ello s, ya que tú mismo
dices que sientes que to da esta situació n está fuera
de co ntro l.

Sin embargo , no so lo ella necesita la ayuda de


Dio s, sino tú también. ¡Pídele a Jesucristo que
entre en tu co razó n co mo tu Seño r y Salvado r!
¡Dedícale tu vida al Seño r y deja que Cristo tenga
el co ntro l abso luto de ella!
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 159

Dios dice...
La persona que se encuentra esclavizada a
cualquier tipo de adicción lleva este mal dentro de su
ser y está sujeta por complete a los deseos de su
cuerpo. Muchos de ellos sufren porque no quieren
entregarse a esta esclavitud, pero se ven impotentes
en su contra.

Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta


ley: que el mal está en mí. Porque según el
hombre interior, me deleito en la ley de Dios;
pero veo otra ley en mis miembros, que se
rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva
cautivo a la ley del pecado que está en mis
miembros. Romanos 7:21-23

Para obtener la victoria de cualquier tipo de


adicción, debe de considerarse la ayuda que Dios le
quiere otorgar a todo el que está sufriendo esta clase
de esclavitud. Por lo tanto, debe incorporar a su
rutina diaria una vida de oración y de relación con
Dios. También debe considerar pedirle la ayuda de
un consejero espiritual que lo oriente a través de esta
160 • CARY PALMÓN

trayectoria que puede tomar cierto tiempo hasta que


se complete el cambio en la persona.

Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi


poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto,
de buena gana me gloriaré más bien en mis
debilidades, para que repose sobre mí el poder
de Cristo. 2 Corintios 12:9

Dios está dispuesto a rescatar a toda persona que


le pida ayuda. No existe ningún pecado que Él no
pueda perdonar. Aunque nuestras acciones nos
separan de Dios, tenemos que darnos cuenta que el
pecado es lo que nos separa de Él en realidad.

Entonces clamaron a Jehová en su angustia, y


los libró de sus aflicciones. Salmos 107:6

El perdón de nuestros pecados y la restauración


de nuestra relación con Dios es el regalo que
Jesucristo compró con su muerte en la cruz del
Calvario.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 161

Porque la paga del pecado es muerte, mas la


dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús
Señor nuestro. Romanos 6:23
CAPÍTULO 11

Graciela
El golpe nuestro de cada
día

P arecía ser un vuelo tranquilo. Sin embargo,


cuando las luces de advertencia para ponernos
los cinturones de seguridad se iluminaron y la
tripulación nos advertía que estábamos atravesando
una zona de turbulencia, nuestras expectativas de
disfrutar de un vuelo tranquilo se esfumaron...

Esa noche de septiembre, un grupo de personas y


yo viajábamos rumbo a Suramérica para dar una
serie de conferencias a otro grupo de mujeres en
Bogotá. Entonces, como eran más de cinco horas de
vuelo, consideré que sería un tiempo provechoso si

163
164 • CARY PALMÓN

podía usarlo para leer y responder algunos correos


electrónicos que llegan al buzón de “ayuda
espiritual” de los programas de “Minuto Final” y
“Conflictos del Corazón”. De pronto, me percaté que
el avión, al entrar en la zona de turbulencia,
comenzaba a conmocionar a todos los viajeros.

Parecía que nos sacudía una enorme y malévola


mano que amenazaba con poner en riesgo la vida de
todos nosotros. En el lugar se respiraba la adrenalina
producida por el temor que reinaba en el ambiente.
No puedo negar que también yo sentía un vacío en
el estómago que me hizo apretar los ojos con fuerza
para no contagiarme con los semblantes
aterrorizados que me rodeaban.

Sin embargo, una vez que pasó la estrepitosa y


amenazante turbulencia pude respirar hondo para
después incorporarme y observar cómo las
dedicadas azafatas se esforzaban en tranquilizar a
algunos de los pasajeros que parecían haber tenido
ataques de pánico y otros problemas de los nervios.
Deduje entonces que, para muchos, el placentero
vuelo inicial se había convertido en una terrible
experiencia.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 165

Fue justo en ese momento cuando se me aclaró la


mente y entendí por fin cómo la turbulencia de la
vida había afectado y transformado la vida de
Graciela. De ser una persona vivaz y tranquila, se
convirtió en una persona temerosa y herida. Al igual
que los pasajeros del avión, Graciela requería de una
voz amiga que la ayudara a recuperarse de la atroz
experiencia que le había tocado vivir.

Esto fue lo que Graciela detalló:

Mi querida Cary:

Decidí escribirle y co ntarle mi histo ria, po rque


esto y muy co nfundida y no sé qué hacer. Llevo
casada cuatro año s co n Juan Jo sé y tengo que decir
que felizmente to davía no hemo s tenido niño s.

El primer año de nuestro matrimo nio fue


maravillo so . Sin embargo , lo s atro ces pro blemas
que enfrento aho ra co menzaro n cuando Juan Jo sé
perdió el trabajo que a él tanto le gustaba. Era un
excelente trabajado r, pero fue lamentable que lo
invo lucraran en un desfalco y lo despidieran a
pesar de que él pudo co mpro bar que su
participació n fue so lo incidental.
166 • CARY PALMÓN

Mi espo so se desanimó mucho ante una acció n


tan vergo nzo sa e injusta. Ento nces, se le metió a
la cabeza que no enco ntraría o tro empleo similar
y debido a la necesidad que pasábamo s empecé a
trabajar yo .

Hasta allí no había mayo r pro blema. En to do caso ,


estaba co ntro lado . En cambio , las co sas
empeo raro n cuando Juan Jo sé, mi espo so ,
co menzó a beber y po co a po co se fue hundiendo
en el alco ho l. Su desaliento llegó a co nvertirse en
una fuerte depresió n de la que trataba de escapar
bebiendo hasta perder el sentido .

Lo s efecto s del alco ho lismo y la depresió n no


tardaro n en manifestarse. Empezó a actuar co mo
una perso na vio lenta y amargada. Lo peo r es que
se la desquitaba co nmigo maltratándo me de
palabras. Su co nducta empeo ró hasta el punto de
go lpearme sin mo tivo . En una de esas o casio nes,
la go lpiza fue tal, que acudí a denunciarlo a las
auto ridades. Sin embargo , no me hiciero n caso y
le restaro n impo rtancia al hecho co n el
argumento que “eran asunto s familiares en lo s
que no intervenía la po licía”. En ese estado ,
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 167

pro nto pasaro n tres año s hasta que to do se salió


de co ntro l y me enco ntré en medio de un terrible
cao s.

Un día, mi mejo r amiga, Patty, viendo que el


alco ho lismo de mi espo so era inco ntro lable y que
ya no teníamo s dinero ni para el sustento , pues yo
también había perdido el trabajo , amablemente
me trajo un rico po taje que ella misma preparó .
En realidad, mi amiga no to leraba a Juan Jo sé
debido a su vio lenta co nducta. Así que,
dejándo me la co mida, se fue a hacer uno s recado s,
pro metiéndo me vo lver al rato para co nversar.

Casi inmediatamente después, llegó mi espo so y


me enco ntró almo rzando . Lejo s de alegrarse, en
un ataque de ira me arrancó el plato de las mano s
y me preguntó de dó nde lo había sacado . Estaba
bo rracho . Cuando le dije la pro cedencia de lo s
alimento s que co mía, se atrevió a insinuar que mi
amiga, Patty, y yo éramo s lesbianas y que
teníamo s una relació n. Po r lo tanto , me exigió que
le pidiera dinero para su bebida. Yo estaba
indignada y discutimo s de manera vio lenta. En
medio de la pelea, y al escuchar que lo desmentía,
168 • CARY PALMÓN

me dio tal go lpiza que terminé perdiendo el


sentido y desperté en la sala de urgencias del
ho spital.

¿Qué había pasado ? Bueno , gracias a Dio s, Patty


vo lvió y, al enco ntrarme desmayada y bañada en
sangre, llamó a lo s paramédico s y a la po licía y
ello s me tendiero n.

Mi marido lo negó to do y dijo que fue un


accidente. Sin embargo , era evidente para to do s
que fue una go lpiza tan fero z que hizo que pasara
tres meses en el ho spital.

Tenía muchas fracturas y algunas de ellas eran


muy serias. ¡Esto y viva de milagro ! Co mo
co nsecuencia, he quedado desfigurada y necesito
o tra o peració n estética para arreglar mi ro stro . Es
lamentable que tuviera que pasar esto para que las
auto ridades acabaran aceptando mi denuncia
co ntra Juan Jo sé po r maltrato s físico s y
psico ló gico s. No o bstante, en cuanto la mama de
mi marido se enteró del pro blema, me pidió que
no acusara a mi marido pues en el fo ndo , decía, “es
un buen ho mbre atrapado en el alco ho l”.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 169

Sus súplicas me co nmo viero n tanto que no he


co ntinuado co n la acció n penal.

Juan Jo sé me llama a menudo y me dice que está


arrepentido . Es más, quiere que vuelva co n él
pro metiéndo me que no vo lverá a beber y que me
ama. Le he pedido el divo rcio , pero él alega que
sería un pecado po rque la iglesia no acepta el
divo rcio .

Me siento muy co nfundida, no sé qué hacer. Creo


que Juan Jo sé so lo quiere co nvencerme para llegar
a un arreglo y po der archivar el caso . Yo lo amo
to davía, pero no so po rtaría o tra go lpiza. Aunque
le tengo miedo , o tro temo r me ago bia y es el de
co meter un terrible pecado al divo rciarme.
Además, po r mo mento s, una parte de mí quiere
creerle y darle o tra o po rtunidad.

¿Qué me aco nseja usted? Espero co n ansias su


respuesta.

La historia de Graciela nos muestra una vida


turbulenta como el mal rato que yo acababa de pasar
en el avión. Después de pedirle sabiduría a Dios, le
respondí de esta manera:
170 • CARY PALMÓN

Querida Graciela:

¡Qué pena me da el saber acerca de tu triste


circunstancia! Tu carta me ha dejado muy
co nmo vida po rque el abuso físico implica
también heridas emo cio nales. El pro blema de la
vio lencia familiar es lamentable y más frecuente
de lo que to do s pensamo s y deseáramo s. En
mucho s o tro s países, a tu espo so ya lo hubieran
encarcelado po r go lpearte y dejarte en el estado
que me cuentas.

Sin embargo , analicemo s lo sucedido y hablemo s


de lo que, po r desgracia, te espera en la vida si
regresas co n él. Dice un dicho po pular que “un
abusado r sera siempre un abusado r”. En la
mayo ría de esto s caso s, lo s ataques se vuelven
cada vez más frecuentes de mo do que siempre
estarás expuesta a un mal go lpe que te po dría
matar.

Gran parte de lo s abusado res se lamentan, dicen


arrepentirse y pro meten que no repetirán esa
co nducta. Sin embargo , es impo sible co rregirla
po r vo luntad pro pia. Lo más pro bable es que eso
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 171

se deba a co nflicto s interno s de su perso nalidad,


añadiéndo se el hecho que él no ha sufrido to davía
ninguna co nsecuencia po r su co nducta. Así que lo
más seguro es que la vuelva a repetir. Po r lo tanto ,
si vuelves a su lado antes de que tenga una
restauració n, deberás vivir sabiendo que estás
expuesta a un gran peligro .

El vicio del alco ho l co nduce a que lo s valo res


mo rales se disto rsio nen y a que las perso nas se
co mpo rten de mo do distinto al no rmal. Además,
co n el tiempo , llegan a perder sus valo res hasta
co meter en mucho s caso s acto s ilícito s de lo s que
después se sienten avergo nzado s y estupefacto s al
ver có mo han llegado tan bajo . Esta clase de
individuo s sufre un cambio en su perso nalidad
que se co nvierte en permanente y actúan co mo
perso nas distintas po r co mpleto s a las que so lían
ser. Mucho s sufren po rque saben que están
atrapado s y pierden la esperanza de ser ello s
mismo s una vez más, aparte de darse cuenta que
hacen sufrir a sus seres más querido s. Aun así, no
pueden despegarse del trago y siguen bebiendo
172 • CARY PALMÓN

para evadir la realidad y pasar po r alto el ser en el


que se han transfo rmado .

La mayo ría de lo s alco hó lico s niegan serlo y no


aceptan que so n víctimas de este vicio . Se engañan
pensando que po drán co ntro larse y dejar de beber
cuando quieran hacerlo . Sin embargo , esto no es
verdad.

Tu espo so tiene que reco no cer que es un


alco hó lico y que necesita ayuda. Mientras no lo
haga y no acepte su co ndició n, no po drá reso lver
nada en lo abso luto . Tendría primero que
enfrentar su realidad para después po der o btener
su libertad. El pro ceso de su restauració n to mará
tiempo hasta que se puedan ver sus fruto s y
co mpro bar que se ha liberado del vicio . So lo
ento nces po drías pensar en una nueva vida co n él.

El efecto dañino del alco ho l no so lo afecta la


perso nalidad, sino que causa daño s irreversibles
en la salud física del alco hó lico . De mo do que es
muy co mún que co ntraigan cirro sis hepática y
o tras enfermedades que se agudizan, co mo la
diabetes. Su final puede ser terrible.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 173

En realidad, este pro blema no es de un estrato


so cial determinado , sino que afecta en cualquier
esfera de la so ciedad do nde vivimo s y cualquier
familiar nuestro puede llegar a ser víctima de esta
terrible adicció n. La buena no ticia es que Dio s
está atento para ayudarlo s a ustedes y a cualquiera
que se lo pida. A pesar de esta tragedia, siempre
existe una esperanza y es saber que Dio s desea
ayudar a to das las perso nas que se encuentran en
esta situació n.

Sin embargo , es impo rtante que la perso na


reco no zca su adicció n y su necesidad de Dio s para
que Él lo s ayude, pues su vo luntad no es que ello s
ni sus familias vivan en este infierno .

Mucho s se sienten co ndenado s po r su


co mpo rtamiento y se niegan a presentarse ante
Dio s co n su pro blema po rque piensan que no se
lo merecen. En cambio , la realidad es que Dio s es
el primero en desear ayudarlo s po rque
co mprende la debilidad del ser humano y está
listo para perdo narlo s.
174 • CARY PALMÓN

Aceptar nuestro s pecado s y pedirle ayuda a Dio s


es el co mienzo de to da restauració n. Se trata de
un pro ceso en el que el adicto a cualquier
sustancia debe to mar co nciencia que tundra que
so meterse to da la vida a un tratamiento para
evitar las recaídas. También debe alejarse de lo s
amigo s y las influencias dañinas del pasado .

Respecto a lo que llamas pecado de divo rciarte,


pienso que él te está manipulando , pues te diré
que en ninguna parte de la Palabra de Dio s vemo s
que Él apruebe el abuso co mo lo hace él. Tu ser
querido necesita ayuda, pero tú también la
necesitas. Dices que aún lo amas, pero a veces ya
no es amo r lo que une a perso nas co mo tú a sus
parejas. Lo que sucede en realidad es que, debido
a la manipulació n a la que están so metidas, al final
se resignan a ese estilo de vida. Creo que tú
también necesitas valo rarte y reco no cer que no
naciste para ser víctima y que tienes gran valo r
co mo mujer.

Estarás en mis o racio nes po rque sé que Dio s


quiere ayudarte y darte la fo rtaleza espiritual para
dar lo s paso s necesario s hacia tu pro pia
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 175

restauració n. Dio s te ama más de lo que te


imaginas. Él envió a Jesucristo a mo rir po r tus
pecado s demo strando su gran amo r hacia ti y,
entre o tras co sas, Él pagó ese alto precio para que
seas libre. Po r lo tanto , no es su vo luntad que sigas
atada a una situació n tan difícil y peligro sa. Busca
tú también a Jesucristo y entrégale tu vida para
que Él o bre una restauració n en tu alma y tu ser
que están tan afectado s po r lo que has vivido .
Ento nces, después de pasar ese pro ceso , po drás
to mar una decisió n madura y respo nsable
respecto a tu futuro y el de tu espo so .
176 • CARY PALMÓN

Dios dice...
La Palabra de Dios nos enseña que el amor del
esposo hacia la esposa debe ser tan completo que
debe estar dispuesto a sacrificarlo todo por ella.
Cuando a una mujer la aman de esta manera, sabe
que su esposo desea lo mejor para ella.

Maridos, amad a vuestras mujeres, así como


Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo
por ella. Efesios 5:25

Tal como dice la Palabra de Dios, nadie golpea ni


aborrece a su propia carne. El esposo no debe
maltratar a su esposa de manera física ni verbal. No
se puede maltratar su propia carne.

Así también los maridos deben amar a sus


mujeres como a sus mismos cuerpos. El que
ama a su mujer, a sí mismo se ama. Porque
nadie aborreció jamás a su propia carne, sino
que la sustenta y la cuida, como también Cristo
a la iglesia. Efesios 5:28-29

Existen circunstancias en que el esposo le exige a


la esposa que haga algo que no es apropiado. Así que
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 177

la lleva a desobedecer a Dios. Sin embargo, la Palabra


de Dios nos enseña con claridad que debemos
obedecer a Dios antes que a los hombres.

Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron:


Es necesario obedecer a Dios antes que a los
hombres. Hechos 5:29

Dios declara que el hombre debe amar y proteger


a la esposa. No obstante, si ella o sus hijos sufren
maltrato físico por parte del hombre, deben ser
conscientes que el que está quebrantando la ley de
Dios es el abusador y no la víctima. Dios está
dispuesto a ayudar y rescatar a las mujeres y los hijos
que se encuentran en esta situación. No es su
voluntad de que permanezcan en medio de esta
violencia.

Los que amáis a Jehová, aborreced el mal; él


guarda las almas de sus santos; de mano de los
impíos los libra. Salmo 97:10
CAPÍTULO 12

Sergio
¡Ya es muy tarde!

F ue un fin de semana maravilloso! Mi familia y


yo habíamos decidido pasar juntos el fin de
semana, tal y como lo hacíamos años atrás
cuando mis hijos eran pequeños aún. ¡Esos días
fueron maravillosos! Pude comprobar que me hacía
muy feliz cada ocurrencia de mis nietas. Incluso, me
alegraban las travesuras que antes me hubieran
exasperado. Sin embargo, inexorablemente, llegó el
momento de la despedida. Cada quien se marchó a
sus respectivas casas para continuar con sus vidas,
trabajos, estudios, etc. Al final, mi esposo, Larry, y yo
nos quedamos solos y listos para ordenar el caos
provocado por la reunión.

179
180 • CARY PALMÓN

Cuando me disponía para hacerlo, de pronto sentí


un agotamiento que nunca antes había
experimentado al notar que aún me faltaba por
guardar una infinidad de juguetes que se
encontraban regados por toda la casa y solo me
quedaba continuar. Entonces, mientras lo hacía,
sentí aun más que me flaqueaban las energías. ¡Me
sentía exhausta! Atrás habían quedado la amena
charla familiar, el chocolate caliente disfrutado en la
sala, pues delante de mí solo había un panorama de
platos sucios y la cocina llena de trastes. En ese
momento acepté que el paso del tiempo es
inclemente, pues mis fuerzas físicas ya no me
acompañaban igual que en otros tiempos.

Por fortuna, reaccioné justo a tiempo y no caí en


el desánimo, pues me di cuenta que todos tenemos
que cuidar de nuestros pensamientos, no dejando
que nada altere el gozo de nuestras vidas. Este
momento fugaz de desaliento me hizo pensar en
cómo muchas personas que se sienten agobiadas por
los problemas de la vida terminan sin ánimo y
sumidas en la más profunda depresión, cansadas y
sin aliento. Ese fue el caso de Sergio, un hombre al
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 181

que el agotamiento de la vida parecía haberle


Ganado la partida y se encontraba a punto de
cometer una locura.

La carta de Sergio decía así:

Señora Cary:

Permítame co ntarle mi histo ria. So y Sergio , y


aunque vivía una vida maravillo sa co n mi espo sa
a la que amaba mucho , ella se marchó de la casa
po r pro blemas que se presentaro n en la vida.
To do co menzó hace uno s año s atrás, cuando la
empresa para la cual trabajaba tuvo pro blemas
financiero s y cerró po r inso lvencia.

Cuando me retiré, tenía alguno s aho rro s y


co mmence un nego cio de co mida, dando
servicio s de banquetes a reunio nes so ciales y
fiestas, entre o tras actividades similares. En
cambio , las co sas no me saliero n bien. No fue po r
falta de clientes, sino po r co nfiar en perso nas
desho nestas que en po co tiempo me hiciero n
perder to do mi capital. Co mo co nsecuencia, mi
hijo ha tenido que abando nar lo s estudio s y yo
tengo que dejar el apartamento do nde vivo po r
182 • CARY PALMÓN

falta de pago de las varias mensualidades que


debo . El dueño está a punto de llevarme a juicio .
Prácticamente me está desalo jando y no tengo a
dó nde mudarme.

Alguno s amigo s me han hecho préstamo s, pero


eso ha empeo rado las co sas, pues aho ra les esto y
debiendo a ello s también. Siento que to das las
puertas se me han cerrado en to do lugar. Me
siento muy avergo nzado co n to do s, co n mi
familia en especial. Creo que he perdido to do el
respeto de mi familia po r no po der cumplir co n
mis o bligacio nes de espo so y padre. Me siento
culpable de que la vida de mi familia navegue
co mo un barco a la deriva, sin rumbo y sin
ho rizo nte.

He tratado po r meses de vender la herencia que


recibí de mi padre, un terreno en una zo na rural,
pero ni eso he po dido co nseguir. Así que me
siento muy frustrado y abando nado . Hasta perdí
las tres co sas que me infundían aliento . Mi
trabajo , lo po co que heredé de mis padres y mi
familia. Siento que aho ra so lo so y una carga para
la so ciedad. He perdido to da esperanza, y aunque
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 183

me co nsider cristiano , he perdido la fe al ver que


Dio s no respo nde a mi clamo r. Le he pedido
direcció n, pero no veo una respuesta. Su paz y su
ayuda se han esfumado . ¡Esto y muy co nfundido
po r tanto s pro blemas!

A decir verdad, me siento muy mo lesto y no tiene


ningún sentido vivir así. No so po rto más. No
quiero seguir viviendo en esta angustia. Aunque
sé que suicidarse no es agradable ante lo s o jo s de
Dio s, siento que esa es la única salida para acabar
co n esta vida miserable. Me he quedado sin
amigo s, sin trabajo , sin mujer, sin hijo , sin casa y
sin ningún bien material que me sirva para salir
de este infierno .

No entiendo po r qué me pasa esto . Despierto cada


día pensando en una salida y no puedo enco ntrar
una respuesta. Esto y ato rmentado , así que la vida
no tiene sentido que la viva de esta manera. ¡No
resisto más! To do se destruyó para mí y tengo la
manera de evitarlo . Me siento abso lutamente
so lo . No encuentro Co nsuelo a esta
desesperació n.
184 • CARY PALMÓN

Eso es to do , seño ra Cary, agradeciéndo le desde ya


sus co nsejo s que, a pesar de que serán bueno s,
esto y seguro que no po drán hacer mucho .

Me despido de usted... y que Dio s la bendiga, pues


para mí ya es demasiado tarde en realidad.

La carta de Sergio fue una de las pocas que me


dejó perturbada en verdad, pues sabía que Dios
deseaba ayudarlo. Sin embargo, ¿cómo? Después de
orar y esperar la manifestación de Dios en la vida de
Sergio, le respondí así:

Estimado Sergio:

To do s pasamo s po r tiempo s difíciles. La Biblia


dice: “Po rque siete veces cae el justo , y vuelve a
levantarse” (Pro verbio s 24:16). A pesar de lo que
me dices, el hecho de haberme escrito es una
demo stració n que tienes to davía la esperanza que
Dio s te rescatará. Él dice en su Palabra que no no s
abando nará ni nunca no s dejará. Yo tengo la fe
suficiente para creer que la o ració n eficaz del
justo puede mucho y que esta carta llegará a
tiempo para evitar que co metas una lo cura.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 185

Po r lo que me dices, presumo que eres una


perso na co n estudio s y co no cimiento de lo s
nego cio s. Tienes que po nerte en las mano s de
Dio s y actuar en fe para saldar tus deudas.
Co nversa co n tus acreedo res y co nfía en que Dio s
te dará la pro visió n para cumplir co n lo s pago s en
cuo ta.

El suicidio no es una salida y me aco ngo ja pensar


en lo que sufriría tu hijo si en verdad decidieras
co meter esa lo cura. Recuerda que no eres dueño
de tu vida. Si eres creyente, sabes que tu vida le
pertenece a Cristo .

No sé si tus padres viven, pero imagina lo que les


afectaría una decisió n de esa magnitud. Si co mo
dices eres cristiano , esto y segura que tus
principio s terminarán venciendo esto s malo s
pensamiento s que te ato rmentan.

Tengo la certeza que Dio s está listo para ayudarte.


No estás so lo co mo imaginas. La batalla para
recuperar el ánimo , la esperanza y una situació n
digna en la vida no la estás librando so lo . Cristo
está co ntigo y nuestro equipo de o ració n te
186 • CARY PALMÓN

seguirá apo yando . Hemo s visto verdadero s


milagro s co n el po der de la o ració n. Esto y segura
que pro nto recibiremo s no ticias tuyas para
co ntarno s las maravillas que Dio s tiene para tu
vida.

Acerca de tu hijo , sé po r experiencia el gran do lo r


po r el que pasaría el muchacho , pues yo crecí co n
mucha amargura debido a que mi padre murió
durante mi ado lescencia. Siempre pensaba que mi
vida sería distinta si estuviera él. Así que, po r su
ausencia, to mé muy malas decisio nes que
tuviero n do lo ro sas co nsecuencias en mi vida.
Pienso que no desearías que tu hijo pase po r una
situació n semejante.

Imagina que debido a esa experiencia tu hijo se


llene de amargura y decida to mar la misma
decisio n que estás pensando to mar tú. Él tendrá
en el futuro también que luchar co ntra la
depresió n, co ntra lo s pensamiento s de suicidio y
co ntra el temo r a fracasar en la vida.

Esto y segura que Dio s tiene algo preparado para


ti. A pesar de lo que sientes, ten la plena seguridad
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 187

que Dio s está listo para ayudarte y rescatarte de


esta crisis. Estamo s en o ració n po r ti para que
Dio s sea el que te ministre y te dé el aliento y la fe
necesaria a fin de que puedas enco ntrar la salida.
Esto y segura que, po r el mo mento , tus
pensamiento s no te dejan ver co n claridad las
puertas que Dio s está abriendo delante de ti, pero
vive co nvencido de que sí las hay.

Po r o tro lado , quiero co mentarte de algunas


razo nes po r las que debes rechazar las ideas
suicidas:

• Estás negando la habilidad y el po der de


Dio s para rescatarte de tu situació n.

• El suicidio va en co ntra del mandamiento


de no matar.

• Estás to mando la decisió n de rebelarte


co ntra la so beranía de Dio s so bre tu vida.

• Esa decisió n afectará de manera grave la


salud emo cio nal de tus seres querido s.

• Si dices que ya no resistes, estás


declarando que eres tú el que está
188 • CARY PALMÓN

tratando de reso lver las co sas en tus


fuerzas y no en el po der de Dio s.

En realidad, yo tengo o tra perspectiva so bre lo


que estás viviendo . Tú te ves sin Dio s y sin
esperanza y yo , en cambio , veo a Dio s dispuesto a
darte un future diferente. Dio s envió a su Hijo a
mo rir po r no so tro s para darno s la vida eterna y
devo lverno s una relació n perso nal co n Él, una
relació n de Padre a hijo . Un padre jamás le da las
espaldas a su hijo , ni tampo co lo presio na hasta
llevarlo a la destrucció n. Po r el co ntrario , siempre
está dispuesto para rescatarlo .

Reco nsidera to das esas ideas que tienes en mente


y recuerda el gran amo r que Dio s tiene po r ti.
Piensa en su pro mesa que nunca te dejará y nunca
te abando nará. Él te so stiene co n su diestra
po dero sa...
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 189

Dios dice...
Existen muchas razones por las que la persona
piensa que el suicidio es su única alternativa. En la
mayoría de los casos, la persona se encuentra sumida
en una depresión muy fuerte y necesita ayuda, ya
bien sea de la ciencia médica o de la consejería
pastoral. Lo más importante es reconocer que la
persona necesita este tipo de intervención. Por lo
que es necesario brindarle ayuda a fin de que la
obtenga, puesto que el hombre, o la mujer, que está
en medio de esta crisis no va a poder buscar la ayuda
que necesita para superar esta situación.

No os ha sobrevenido ninguna tentación que no


sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará
ser tentados más de lo que podéis resistir, sino
que dará también juntamente con la tentación
la salida, para que podáis soportar. 1 Corintios
10:13

Cuando la persona está bajo un nivel de angustia


que le lleva a considerar el suicidio, necesita que
alguien le escuche, que esté a su lado, que acepte sus
emociones y que no le condene. Es muy importante
190 • CARY PALMÓN

demostrar el amor de Dios y recalcarle que Él salva


al quebrantado de corazón.

Cercano está Jehová a los quebrantados de


corazón; y salva a los contritos de espíritu.
Salmo 34:18

La falta de esperanza, el miedo al futuro y las


circunstancias que rodean a la persona que está
sufriendo esta crisis contribuyen a su agonía. Sin
embargo, Dios dice que Él tiene Buenos planes para
esta persona y que estos son de bendición.

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca


de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz,
y no de mal, para daros el fin que esperáis.
Jeremías 29:11
EPÍLOGO

Los factores de éxito y


de fracaso

Y colorín, colorado... este cuento se ha


acabado”, reza el clásico final de muchas
historias que aún guardo en los recuerdos de
cuando era una niña cándida.

En esas clásicas historias, una varita mágica y el


favor de un hada madrina lo resolvían todo. Por
último, el autor sentenciaba: “Y fueron felices para
siempre”. Sin embargo, la cruda realidad de la vida
demuestra sin cesar que no hay acto mágico alguno
que resuelva los problemas del ser humano ni que
transforme siquiera sus lágrimas en alegrías.

191
192 • CARY PALMÓN

No obstante, así como hay factores constantes


que reproducen el fracaso en la vida, también existen
los de triunfo. Y este contraste es el que presentamos
en este libro, el cual, estoy segura, será de gran valor
para todos los que vienen enfrentando momentos
difíciles.

Aunque siempre supe de las incidencias de cada


uno de los referidos factores, solo podía
conceptualizarlo mejor a medida que leía los cientos
de cartas de dolor que personas, como tú, enviaron
al buzón de Minuto Final*. Miles de esas historias
desesperadas reflejaban de manera vívida lo que
llamo “el factor común del fracaso”. En cambio, con
los años de vida que Dios me ha dado, he podido
comprobar “el factor del éxito” que está presente en
cada una de las historias de los individuos que
lograron superar sus penas y sus derrotas.

¿Cuál es ese factor del fracaso en la vida del ser


humano? La respuesta solo puede ser una: La
instintiva y permanente búsqueda de un amor
inaccesible que lo convierte de forma progresiva
en un mendigo de ese sentimiento.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 193

Entonces, surge una lógica interrogante: ¿Cuál es


ese facto r del fracaso en la vida del ser humano ? La
respuesta so lo puede ser una: La instintiva y
permanente búsqueda de un amo r inaccessible que
lo co nvierte de fo rma pro gresiva en un mendigo de
ese sentimiento . Como resultado, el saldo se torna
infructuoso y lleno de dolor cuando esa misma
persona, que puso esperanzas en alguien o en algo,
ve que fueron en vano, convirtiéndose todo en
resentimiento y odio... Y el vacío continúa,
agrandándose cada vez más.

Por consiguiente, los seres humanos deambulan


por la vida llorando y sufriendo sin saber y sin
entender que hay una forma de encarar y triunfar
sobre este problema que se reproduce de generación
en generación cual cadena de maldición.

Lo primero que debemos hacer es tomar


conciencia y reconocer que nos diseñaron para una
vida mejor, sin soledades ni vacíos, sin sequías de
sueños ni de ilusiones marchitas, sino viendo cómo
nuestros anhelos más sublimes se realizan día adía,
siendo sus protagonistas.
194 • CARY PALMÓN

¿Y cómo llegar a ser el actor principal de ese éxito?


Solo existe una respuesta radical: y es recibiendo por
gracia la misericordia y el perdón de Jesucristo, el
Hijo de Dios, quien por puro amor realiza ese
cambio de corazón, de uno fracasado a uno exitoso.

Somos seres devastados por el pecado e


incomunicados con Dios. Solo Jesucristo es el que
puede pagar por nuestras culpas y restaurar nuestra
relación con Dios haciéndonos sus hijos.

Preséntale a Dios tu corazón con todas tus


heridas, con todos tus pecados y Él se encargará
del resto.

Si tú le entregas tu vida a Jesucristo, Él se hará


cargo de tus sueños, de tus ilusiones, de tus recursos,
de tus relaciones, de tu futuro. Él borrará tu pasado
y todas tus historias de dolor. Así que preséntale tu
corazón con todas tus heridas, con todos tus pecados
y Él se encargará del resto. Él te dará un nuevo
corazón lleno de su amor, haciéndote capaz de
reproducir ese mismo amor en otros... ¡sin
condiciones! Él te acompañará todos los días de tu
vida, te aconsejará, te cuidará y te bendecirá.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 195

Por lo tanto, debo concluir de manera categórica


que Jesucristo es el factor del éxito en la vida de
millones de personas que podemos vivir esta
transformación y que damos fe de ello.

¡Atrévete a creerle a Dios y Él hará un milagro en


tu vida!

¡Dios te bendiga y use!


Acerca de la Autora

N ació en La Habana, Cuba. En 1961, llega


junto a su familia a los Estados Unidos y, a
los dos años, se establecen en Tulsa,
Oklahoma.
No obstante, el año de 1973 fue el más importante
para su vida, pues recibe a Cristo como su Salvador
personal en un encuentro sobrenatural. Más
adelante, en 1979, da inicio a su trabajo ministerial
como pastora.

A inicios de los años ochenta, Cary observó la


necesidad de ayuda social y humanitaria a los latinos
ubicados en su localidad. Al escuchar este clamor,
gestó la creación de una organización sin fines de
lucro, “Naciones Unidas en Cristo”, como iglesia y

197
198 • CARY PALMÓN

fuente de ayuda humanitaria. Le tomó años expandir


esta labor, pero se hizo realidad al crearse toda una
red de servicios.

En el año de 1987, comenzó su trabajo como


evangelista para los países latinoamericanos y
alcanzó a su país natal a través de la radio de onda
corta, predicando un mensaje de perdón y esperanza
por medio de Jesucristo. Su programa radial “Un
camino de fe”, que se inició en el año 2000, amplió
sus horizontes.

Al recorrer América Latina, Cary observa de igual


modo los muchos problemas de su gente y decide
ahora utilizar la televisión, a fin de llegar con ese
aliento inicial al menospreciado, al alcohólico, al
indefenso, al adicto y, en fin, a todo aquel que sufre.
Con tal objetivo, da inicio a su programa de
television “Minuto Final”, el cual se transmite por
todas las naciones hispanohablantes, alcanzado a
miles de personas con el mensaje de salvación y
trayendo aliento a los quebrantados de corazón.

En la actualidad, se transmite también su


programa radial “Conflictos del Corazón”, que va
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 199

dirigido a todo el mundo hispano. Por lo tanto,


podemos decir que la obra de Cary Palmón se ha
expandido por las naciones, no solo por sus
programas de radio y televisión, sino como la autora
de varios libros, incluyendo Del Fracaso al Triunfo ,
Evidencia y Veredicto , Principio s para una Vida
Victo rio sa, Seeds o f Destiny y o tro s más.

Si deseas comunicarte con la autora, puedes


escribirle a:

Cary Palmó n
P.O. Bo x 54723
Tulsa, OK 74155

Para más información acerca de Cary Palmón y su


ministerio, puedes visitar la siguiente página Web:

w w w .carypalmo n.o rg

También podría gustarte