Investigación de La Cosa Juzgada-Clave 2

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 11

Universidad San Carlos de Guatemala

Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales


Curso: Derecho Procesal Civil I
Séptimo semestre
Jornada Matutina

MATERIAL DE APOYO DERECHO PROCESAL CIVIL I. INVESTIGACIÓN DE LA COSA


JUZGADA

Ana María Ximena Murillo Figueroa


Carné: 202100321
Clave: 2

Guatemala, 13 de mayo de 2024

1
INTRODUCCIÓN

A continuación, se presenta una investigación en la cual su tema principal es la cosa


juzgada. La cosa juzgada es el fin o garantía de la jurisdicción; a través de la excepción
previa se pretende evitar la revisión del fallo y por ende su revocabilidad. Así pues,
notoria la complejidad de dicho proceso y es necesaria la investigación y el análisis
profundo del tema para obtener una comprensión íntegra.
En este documento se establece todo lo relacionado a la cosa juzgada, incluyendo en
ello, el fundamento de la cosa juzgada, en el cual se presenta el antecedente romano
y el famoso texto res iudicata pro veritate habetur, en virtud del cual debía tenerse por
verdadero lo que el Juez había resuelto en la sentencia. También contiene el origen de
la institución de la cosa juzgada, la manera en la que un problema puede convertirse
en un avance en la sociedad.
Además, se encuentra establecida su naturaleza jurídica, los requisitos de la cosa
juzgada material, las diferencias entre la cosa juzgada material y la cosa juzgada formal
y por último la relación existente entre la cosa juzgada y su relación con la sentencia.
El presente trabajo de investigación se realizó con el objeto de esclarecer el proceso
de la cosa juzgada, además de establecer que conociendo la cosa juzgada parte por
parte se obtiene una comprensión completa.

2
Contenido
INTRODUCCIÓN ................................................................................................................ 2
FUNDAMENTO DE LA COSA JUZGADA ............................................................................... 4
ORIGEN DE LA INSTITUCIÓN COSA JUZGADA.................................................................... 4
DEFINICIÓN....................................................................................................................... 5
NATURALEZA JURÍDICA DE LA COSA JUZGADA ................................................................. 5
REQUISITOS DE LA COSA JUZGADA MATERIAL .................................................................. 8
DIFERENCIAS ENTRE COSA JUZGADA MATERIAL Y COSA JUZGADA FORMAL .................... 8
COSA JUZGADA Y SU RELACIÓN CON LA SENTENCIA ....................................................... 9
CONCLUSIONES.............................................................................................................. 10
Bibliografía ...................................................................................................................... 11

3
FUNDAMENTO DE LA COSA JUZGADA
Chiovenda señala que para los romanos la justificación de la autoridad de la cosa
juzgada se encontraba en razones prácticas de utilidad social. Las pretensiones del
actor en juicio (res in iudicium deducía), mediante el fallo judicial que las acogía o
rechazaba se convertían en cosa juzgada (reís iudicata), de manera que lo juzgado,
salvo excepciones legales expresas, se transformaba en inatacable.
Alsiná refiere también este antecedente romano y el famoso texto res iudicata pro
veritate habetur, en virtud del cual debía tenerse por verdadero lo que el Juez había
resuelto en la sentencia. Indica que fue en la Edad Media bajo la influencia del antiguo
proceso germano que se consideró a la cosa juzgada como una presunción de verdad,
lo cual es explicable porque los germanos consideraban el resultado del proceso como
motivado por inspiración divina, y además, mantenían el proceso como un medio de
pacificación social. Alsina sostiene que éste es el verdadero antecedente del artículo
1350 del Código Civil francés, que le da carácter de presunción et de ture a la cosa
juzgada, y de la cual derivaron disposiciones similares que fueron incorporadas en el
sistema jurídico italiano y español.

ORIGEN DE LA INSTITUCIÓN COSA JUZGADA


La cosa juzgada es una de las más antiguas garantías desde el origen del ius puniendi,
esta se percibe como elemental para cualquier ordenamiento jurídico dentro de un
Estado democrático de Derecho.
Históricamente hubo un momento en que, al legislador, se le presentó un conflicto
entre los valores seguridad jurídica y justicia. Era posible que, por defectos probatorios,
por errores de los abogados, por errores de los jueces o por impericia o por descuido,
la sentencia obtenida no hubiere juzgado los hechos reales y por tanto no hubiese
aplicado el derecho pertinente y por ende fuese injusta.
Lo lógico era permitir la reapertura del debate cuando se quisieran evidenciar estas
fallas, a fin de alcanzar decisiones justas. Sin embargo, ello implicaba dejar abierta la
discusión, generando inseguridad jurídica e ineficacia y falta de seriedad de la
administración de justicia ya que podía servir para que, la parte afectada por la
decisión planteara la controversia reiteradamente con el propósito de lograr, en algún
momento, un fallo más favorable a sus intereses o de presionar al vencedor para forzar
un arreglo, a cambio de no seguir indefinidamente disputando el derecho. De esta
manera, el sistema de administración de justicia no terminaría otorgando tutela a los
justiciables, lo cual, de por sí, también se constituía en una injusticia.
Ante esta situación, el legislador tenía las siguientes alternativas: Una: En aras de la
justicia, mantener indefinidamente abierto el debate judicial con desmedro de la
seguridad jurídica, la estabilidad social, la seriedad y eficacia de la función

4
jurisdiccional. Otra: en aras de la seguridad jurídica y en desmedro de la justicia del
caso concreto, ponerle fin al debate judicial, sepultando definitivamente el error,
logrando mayor eficacia y seriedad de la función jurisdiccional.

DEFINICIÓN
Debido al nivel de complejidad que representa la cosa juzgada, no es posible
encasillarla en una sola definición, considero que observándola desde distintos
puntos de vista se llega a un entendimiento y un análisis más completo. Es por esta
razón que a continuación se presentan una serie de definiciones acerca de la cosa
juzgada.
Es una institución destinada a proteger las resoluciones judiciales, es decir, conflictos
en los que ha intervenido el órgano jurisdiccional, resolviéndolo por la aplicación de la
norma a un caso concreto.

Mario Estuardo Gordillo Galindo define a la cosa juzgada como “el fin o garantía de la
jurisdicción y como tal a través de la excepción previa se pretende evitar la revisión del
fallo y por ende su revocabilidad. La cosa juzgada es la autoridad y la fuerza que la ley
atribuye a la sentencia ejecutoriada que puede traducirse en la necesidad jurídica de
que el fallo sea irrevocable e inmutable ya sea en el mismo juicio en que dictó o en otro
distinto. Esta excepción procede si en un juicio posterior se demanda una prestación
que este en pugna con lo resuelto, en una sentencia firme y ejecutoriada.”
Mario Aguirre Godoy lo define como una “institución típicamente procesal y tiene que
ser analizada por el Juez con base en la confrontación de los documentos que se le
presenten, para determinar si concurren o no los elementos clásicos que identifican
las acciones ejercitadas.”
Couture define la cosa juzgada como “la autoridad y eficacia de una sentencia judicial
cuando no existe contra ella medios de impugnación que permitan modificarla.”
Para Juan Montero Aroca y Mauro Chacón la cosa juzgada “es la llamada material,
aquella que se define cómo fuerza que el ordenamiento jurídico concede al resultado
de un proceso, es decir, a la sentencia que se dicta al final del mismo, fuerza que se
resuelve en la irrevocabilidad de la decisión judicial y que impide que la pretensión
pueda volver a ejercitarse en un segundo proceso.”

NATURALEZA JURÍDICA DE LA COSA JUZGADA


Couture hace el siguiente planteamiento: “Para hallar la naturaleza misma de la cosa
juzgada, lo que es necesario analizar es otra cosa. Debe explicarse si la cosa juzgada
es el mismo derecho sustancial que existía antes del proceso, transformado en

5
indiscutible y en ejecutable coercitivamente o si, por el contrario, la cosa juzgada es
otro derecho, independiente del anterior, nacido en función del proceso y de la
sentencia” .Este planteamiento es el mismo que ha dado origen a una situación similar
cuando se discute si la sentencia del Juez crea derecho o simplemente lo declara,
discusión que ha dividido a la doctrina, pronunciándose unos por la función
declarativa de la sentencia y otros por su carácter de lex specialis.

Prieto Castro criticando la teoría material o substancial de la cosa juzgada dice:


“Saltan a primera vista los inconvenientes de esta concepción. Sobre todo, es
inaplicable a las sentencias de absolución de la instancia. Además, según ella, todas
las sentencias serían constitutivas, y no habría limitaciones subjetivas dé la cosa
juzgada” Y luego se refiere a la otra teoría y argumenta: “ En cambio, por el segundo
punto de vista (de la necesidad o conveniencia) vendríamos a la teoría procesal de la
cosa juzgada, con arreglo a la cual la cosa juzgada es una vinculación de todos los
órganos jurisdiccionales civiles a quienes después pudiera llevarse el mismo negocio
y de los particulares, que deberían respetar tal sentencia como la única situación
reconocida por el Estado entre las partes, con respecto a sus derechos privados, y
vinculación asimismo de las partes del proceso, que han de aceptar el beneficio (para
el vencedor) y el perjuicio (para el vencido) que de la cosa juzgada se deriva.
Mauro Chacón Corado, cita las siguientes teorías:
• Teoría de la Presunción de verdad. Esta concepción es la tradicional en el
Derecho Civil, en el que se ha sostenido con reiteración que la cosa juzgada es
una presunción legal de verdad. Esta presunción iuris et de iure es un residuo
histórico de carácter netamente medieval, que no podemos admitir.
Como afirma el propio autor esta teoría, propia de la Edad Media, es ahora
obsoleta puesto que no se puede concebir que una sentencia adquiera el
carácter de cosa juzgada como un acto o declaración de santidad, como
anteriormente se le atribuía; así también es inobjetable que las sentencias son
declaraciones de voluntad de un órgano del Estado, y no declaraciones de
verdad que únicamente vinculan a las partes, como antes se concebía.
• Teoría material. Desechada la concepción anterior, los civilistas del siglo XIX,
principalmente la pandectística alemana, estimaron que la cosa juzgada
justifica su fuerza vinculante porque la sentencia establece en cada caso cual
es el derecho entre las partes: el juez del proceso posterior queda vinculado a
la cosa juzgada porque las relaciones jurídicas son como las sentencias las
declaran.
La crítica a esta teoría radica en que no es posible que cada sentencia genere
efectos vinculantes únicamente para las partes en contienda, dándole a ese
acto judicial la categoría de un contrato privado entre las partes, el cual tiene
efectos únicamente entre ellas y no erga omnes.

6
• Teoría procesal: La cosa juzgada es un vínculo de naturaleza jurídico-pública
que obliga a los jueces a no juzgar de nuevo lo ya decidido. La seguridad jurídica
exige que los litigios tengan un final.

CLASIFICACIÓN DE LA COSA JUZGADA


- Cosa juzgada formal: La cosa juzgada formal, o externa como también se la
llama, se refiere a la firmeza de la resolución. Por ello dice Guasp: “Cosa
juzgada formal y cosa juzgada material son, en consecuencia, las dos especies
básicas del instituto general de la cosa juzgada': según la terminología del
derecho positivo español, acaso preferible, firmeza y autoridad de la cosa
juzgada, respectivamente”.
- En nuestro sistema, son sentencias firmes, las que el artículo 171 de la LOJ
califica de ejecutoriadas. Dichas sentencias producen cosa juzgada formal, es
decir son Conforme la disposición citada son sentencias ejecutoriadas: Las
sentencias consentidas expresamente por las partes; Las sentencias contra las
cuales, no se interponga- recurso en el término señalado por la ley; Las
sentencias de las que se ha interpuesto recurso, pero ha sido declarado
improcedente o abandonado; Las de Segunda Instancia en asuntos que no
admitan el recurso extraordinario de casación; Las de Segunda Instancia,
cuando el recurso de casación fuere desestimado o declarado improcedente;
Las de casación; Las demás que se declaren irrevocables por mandato de la ley
y las que no admiten más recurso que el de responsabilidad; y "Las de los
jueces árbitros, cuando en la escritura de compromiso se hayan renunciado los
recursos y no se hubiere interpuesto el de casación.

Cosa juzgada material: De acuerdo con las enseñanzas de Guasp, un fallo


puede ser atacado directamente a través de los medios impugnativos
correspondientes. Cuando llega el momento en que se produce la
inatacabilidad directa del fallo nos encontramos frente a la cosa juzgada formal.
Pero un fallo también puede ser objeto de un ataque mediato o indirecto, lo cual
resultaría si en un juicio futuro y distinto se pretendiera discutir lo ya resuelto.
Esto no es posible en virtud de la cosa juzgada material, la cual puede
concebirse entonces como “la inatacabilidad indirecta o inmediata de un
resultado procesal, el cierre de toda posibilidad de que se emita, por la vía de
apertura de un nuevo proceso, ninguna decisión que se oponga o contradiga a
la que goza de esta clase de autoridad”.

7
REQUISITOS DE LA COSA JUZGADA MATERIAL
Bajo este acápite trata Guasp lo que puede denominarse presupuestos de la cosa
juzgada material.34 En primer lugar debe pensarse que los procesos susceptibles de
terminar con sentencia que produzca cosa juzgada material son aquellos que no estén
excluidos legalmente de esos efectos. Tal acontece con los juicios sumarios.
En el artículo LOJ con base en la cual no se da la excepción de cosa juzgada en aquellos
procesos con respecto a los cuales hubiere lugar a entablar un nuevo juicio ordinario.
Caso típico es el de los juicios ejecutivos. En segundo lugar, se requiere que haya un
conocimiento sobre el fondo del asunto discutido, ya que, si el Tribunal solamente
hubiera establecido la falta de presupuestos procesales, sin resolver la cuestión
discutida, no puede hablarse de cosa juzgada material.
Dice Guasp a este respecto: “La imposibilidad ulterior de controvertir la resolución que
juzgue acerca de tal requisito, se explica por la fuerza de la preclusión y no por la de la
cosa juzgada.

DIFERENCIAS ENTRE COSA JUZGADA MATERIAL Y COSA JUZGADA


FORMAL
Tal y como lo establece Mario Gordillo, Es importante clarificar las diferencias entre
cosa juzgada formal y cosa juzgada material. Efectivamente, hay cosa juzgada formal
cuando la sentencia tiene fuerza y autoridad en el juicio en que se dictó,
pero no en otro.
Es decir; no puede ser revisada o revocada en el mismo juicio, pero puede serlo en otro,
típico ejemplo es la sentencia dictada en juicio ejecutivo que puede ser revisada en
juicio ordinario posterior (Art. 335 del CPCYM) o la sentencia dictada en un interdicto
que pudiera ser en cierta medida revisada a través de un juicio ordinario posterior
(arto.250 del CPCYM)
La Cosa Juzgada material es contraria a la anterior y su eficacia y fuerza trasciende a
cualquier otro proceso, en la mayoría de los procesos de conocimiento, el fallo
definitivo pasa en autoridad de cosa juzgada (material), siempre y cuando se den los
supuestos que establece el artículo 153 de la Ley del Organismo Judicial, es decir:
• La sentencia es consentida expresamente por las partes.
• Contra la sentencia no se interponga recurso en el plazo señalado por la ley o
habiéndose interpuesto ha sido declarado improcedente o cuando se produzca la
caducidad o abandono.
• La sentencia de segunda instancia en la que no proceda recurso de casación o
procediendo el mismo ha sido desestimado o declarado improcedente.
• Las sentencias de casación no pendientes de aclaración o ampliación.
• Las sentencias que se declaren irrevocables por mandato de ley y las que no admiten
más recurso que el de responsabilidad.
• Los laudos arbitrales no pendientes de recurso de revisión
8
La excepción previa de cosa juzgada procede, en consecuencia, cuando la sentencia
es ejecutoriada, es decir, encuadra en los supuestos del artículo 153 de la Ley del
Organismo Judicial y hay identidad de personas, cosas, pretensiones y causa
o razón de pedir.

COSA JUZGADA Y SU RELACIÓN CON LA SENTENCIA


El efecto fundamental de la sentencia es el de producir cosa juzgada, en relación con
la situación debatida en el proceso. Si la sentencia ya no es impugnable en virtud de
algún otro recurso, se habla de la llamada cosa juzgada formal. Si la sentencia, además
de ser inimpugnable por vía de recurso, adquiere a la vez el carácter de inmutable,
puesto que su contenido no puede ser modificado en otra discusión judicial, produce
la llamada cosa juzgada material.
Ahora bien, actualmente la doctrina procesal se inclina por estudiar la institución de la
cosa juzgada dentro de los efectos que son propios no de la sentencia aisladamente
considerada, sino del proceso mismo.

9
CONCLUSIONES
1. Luego de haber realizado la investigación de la cosa juzgada, me queda claro en
la legislación guatemalteca al hacer uso de esta institución se llena a los fallos
judiciales de firmeza, de inimpugnabilidad e inmutabilidad tanto en el mismo
proceso en que se dictaron (cosa juzgada formal) como en un proceso posterior
(cosa juzgada material.
2. Conforme a lo establecido en la investigación que para la existencia de la cosa
juzgada debe concurrir el requisito de la identidad de las cosas e identidad de
las acciones.
3. A partir de lo expuesto anteriormente, se concluye que la existencia de la cosa
juzgada es la necesidad de mantener un orden jurídico y social, así como
garantizar la certeza y seguridad jurídica para todos los ciudadanos.
4. La cosa juzgada se clasifica en; 1. Cosa juzgada material, la cual no admite
recursos y; 2. Cosa juzgada formal, la cual puede ser impugnada.
5. La cosa formal se encuentra plasmada en el ordenamiento jurídico de
Guatemala, específicamente en el artículo 335 del Código Procesal Civil y
Mercantil.

10
Bibliografía
Aroca, J. M., & Chacón Corado, M. (2002). Manual de Derecho Procesal Civil Guatemalteco.
Guatemala: Maya Terra editores.

Brañas, A. (2020). Manual de Derecho Civil. Guatemala: Editorial Fénix.

Couture, E. (2002). Fundamentos del derecho procesal civil. México: Depalma.

Galindo, M. E. (2009). El Derecho Procesal Civil Guatemalteco. Guatemala: Editorial Fémix.

Godoy, M. A. (2007). Derecho Procesal Civil. Guatemala: Centro Editorial VILE.

11

También podría gustarte